Un informe del Tribunal de Cuentas ha puesto en la picota a la Dirección General del INSS.

La Administración electrónica no es el remedio

mágico que todo lo puede.

Desvelamos algunas debilidades del sistema.

La opinión autorizada Comentario editorial Chispas de humor Opinión Resumen de prensa Cartas al Director La Seg. Social en cifras

LA REVISTA DE INFORMACIÓN, PARTICIPACIÓN Y OPINIÓN DE LA SEGURIDAD SOCIAL

REVISTA TRIMESTRAL - INFORMACIÓN - ACTUALIDAD - NOTICIAS - ENTRETENIMIENTO

Nº 1 Año 2016

La revista de UGT de la Seguridad Social

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es la revista de información gene-ral sobre la Seguridad Social de la Sección

sindical de UGT. Está acogida a la licencia Creative Commons CC BY-NC-SA 4.0 La revista es plural y respeta en todo momento la libertad de expresión de sus colaboradores, cuya opinión no tiene que coincidir necesaria-mente con la de la revista. Esta publicación es gratuita, sin ánimo de lucro y se distribuye en todo el ámbito de la Seguridad Social. Edita: UGT Seguridad Social

Equipo editorial: Director: Julio Martínez Juan, julio.martinez1@seg-social.es;

Redactor jefe y coordinador: Martín Lanzas, martin.lanzas@seg-social.es;

Diseño Gráfico: Anselmo García Bornay

Corrector y evaluador: Rafael Tormo Bartual

Información sindical: Mª José Acevedo Vázquez

, número 1 - edición impresa Madrid (España) diciembre de 2016

Depósito Legal: M - 34186 - 2016 ISSN: 2530-2620

Números atrasados en: http://www.fspugt.es/sectores/age/segsocial

UGT Seguridad SocialUGT Seguridad Social Atentos a tus sugerencias UGT.SECCION.INSS@segUGT.SECCION.INSS@segUGT.SECCION.INSS@seg---social.essocial.essocial.es

SUMARIO

Artículos y reportajes 4 Leyes y trampas Las comisiones de servicio en la picota. Una delgada línea separa la frontera entre la legalidad y la arbitrariedad . Y esa frontera la marca, en la Seguridad Social, las comisio-nes de servicio. En este artículo ponemos de manifiesto las perversiones y abusos que se produce cuando las comisio-nes de servicio son la puerta de entrada en la adjudicación de una plaza definitiva en el siguiente concurso

6 Administración electrónica No es oro todo lo que reluce. En este reportaje explicamos las luces y sombras de las gestiones telemáticas. Relata-mos como ciertas prácticas de gestorías y empresas bor-dean la legalidad y empañan seriamente el uso de los cer-tificados de usuario que nos permiten el acceso a las ofici-nas virtuales.

10 Los muertos de Dirección General El Tribunal de Cuentas detectó que casi 30.000 personas que figuraban como fallecidos seguían cobrando una pen-sión en 2014. La noticia causó un gran revuelo en la pren-sa nacional. Criticamos y analizamos la actitud de la Direc-ción General de INSS y su falta de dirección en este asun-to.

17 La opinión autorizada Octavio Granado, anterior Secretario de Estado de la Se-guridad Social, opina sobre el pasado, el presente y el futu-ro de las pensiones en España

Secciones Fijas 3 Editorial Comentarios breves y línea editorial

11 El contador Te contamos si somos más o menos en la Seguridad Social

12 Opinión Nuestros comentaristas habituales opinan

14 La Seguridad Social es noticia Resumen de prensa.

16 La Seguridad Social en cifras

18 ¿Sabías qué…? Curiosidades y anécdotas de la Seguridad Social.

18 Cartas al Director

19 Pasatiempos Chispas de humor, crucigrama y tira cómica.

20 Contraportada Avances del próximo número, noticias de última hora y otros anuncios.

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Nace una nueva revista de informa-ción en la Seguridad Social Nace , la nueva revista de información laboral y general de la Seguridad Social. Los objetivos de esta revista son ambiciosos, aunque los medios sean modestos. Pretendemos informar y entretener con temas de la Seguridad Social y cualquier otro asunto de interés general. Hasta ahora no había ningún medio que canalizase las inquietudes que tenemos los trabajadores y + Clari-dad viene a cubrir ese hueco. Aunque esta publicación ve la luz gracias al trabajo y al esfuerzo de la Sección Sindical de UGT en la Seguridad Social, pretendemos informar de forma rigurosa e independiente. Evidente-mente nuestra prioridad es la defensa de los trabajado-res frente a la Administración. Esta revista está abierta a la participación y colabora-ción de todos, siempre con respeto hacia las personas

y sus opiniones, sin me-noscabo de la crítica mor-daz y la denuncia de las actitudes y acciones que perjudiquen los intereses del colectivo de la Seguri-

dad Social, como ha sido siempre la divisa de la Sec-ción Sindical de la UGT en la Seguridad Social. Animamos a todas las personas a que participen con sus comentarios, colaboraciones, críticas y, porqué no, denuncias cuando las actitudes de la Administración se puedan alejar, presuntamente, de un comportamiento ajustado a derecho, tal y como en muchas ocasiones hemos podido comprobar y que seguramente veremos reflejado en estas mismas páginas. Esta humilde publicación también puede ser un me-dio para corregir y poner al descubierto todas esas bar-baridades que en ocasiones se han cometido con total impunidad. A parte de su carácter combativo esta revista tam-bién pretende amenizar y por ello contendrá Secciones especificas que aportarán cultura, nos harán sonreír y nos entretendrán. Esperamos que disfrutéis de la lectura y por supues-to son bienvenidas todas las críticas y comentarios que tengáis a bien hacernos. Hasta el próximo número.

Editorial

+Claridad es la nueva revista de información laboral y general de la Seguridad Social

A vista de pájaro

¿Reformas? Sí gracias, pero que be-neficien a todo el mundo.

Baja el Director Provincial del INSS en Alicante, que reforma su despacho y de paso aprovecha la ocasión para “reformar” (léase reducir) el espacio de la Unidad Básica de Sa-lud.

Por fin en junio cobramos las ayu-das de nuestra acción Social

Después de algún pequeño problema por parte de la Gerencia de Informática en la notificación de las resoluciones, por fin en la nómina del mes de agosto recibimos las ayu-das.

Hemos cobrado la misma miseria de Acción Social que año pasado.

Baja el Gobierno, que no nos devuelve nuestras ayudas completas de Acción Social y continuamos con el miserable coeficiente reduc-tor. Exigimos la vuelta a nuestra circular íntegra sin ningún recorte.

La TGSS cerró el centro de forma-ción de Palazuelo, al parecer, por un problema “burocrático”.

Tanto dinero del contribuyente gastado en un Centro de Formación merecen una mejor ges-tión y, cuanto al menos una explicación pública de las causas que provocaron este cierre

Arriba y abajo

Al parecer hay un alto porcentaje de perso-nal externo trabajando en el Gerencia de Informática en Madrid.

Cada vez que desde UGT hemos solicitado que se hagan públicas las relaciones de los preceptores/as de las mejoras de la productivi-dad, se ha denegado invocando la Ley de Pro-tección de Datos.

Pues bien, esta gran delicadeza a la hora de aplicar la Ley de Protección de Datos en cuanto a la transparencia de nuestras retribuciones profesionales no se aplica igual hacia quienes tienen en sus manos el desarrollo y acceso a las aplicaciones, que manejan datos sensibles. Exigimos que todos los trabajadores/as del GISS sean empleados públicos.

Se dice, se comenta...

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Comisiones de servicio Elección o selección, esa es la cuestión

Una delgada línea separa la frontera entre la legalidad y la arbitrariedad . Y esa frontera la marca, en la Seguridad Social las comisiones de servicio

Elección

Selección

Que el conocimiento de la ley exime de su cumplimiento es evidente en nuestro entorno, o como dice el refrán: “hecha la ley, hecha la trampa”.

No hay que buscar mucho a los tramposos si de comisiones se trata, están cerca.

Un puesto vacante, o incluso un puesto ocupado por un traba-jador que esté a su vez en comi-sión, (comisión concatenada), un poco de capacidad discrecional, otro poco de arbitrio personal, una pizca de abuso de derecho, todo justificado con los sagrados objetivos, y ya tenemos el guiso, “comisión de servicio”.

Basta asomarse a nuestra ca-duca Relación de Puestos para apreciar la “ordinariez” de lo ex-traordinario.

Que la urgente e inaplazable necesidad sea la causa de la enorme cantidad de puestos que tenemos cubiertos por ese siste-ma, no hay quien se lo crea. Pe-ro… ¿si no se cumple la ley?,… ¿Cuál es la trampa?

En materia de comisiones de servicio, la trampa es la norma, ya que al no reglar las competen-cias de la autoridad que tiene la potestad de concederlas en lo que concierne a la apreciación de las condiciones que para ello se precisa, deja esta determinan-te labor en manos de su “discrecionalidad”. Una facultad que, si bien en teoría no puede dejar de estar sometida al servi-cio público, en la práctica y sin control, lo está únicamente a la especial manera que tenga el gestor de turno de entender tan nobles requisitos, es decir, a su arbitrio personal.

Tan personal que en ocasio-nes, cuando cambia la persona que decide, cambia la comi-sión.

La falta de impugnación de estos actos administrativos y la tolerancia judicial cierran el ci-clo... Barra libre para el vicio de dar comisiones de servicio.

En este contexto de tolerancia y falsa justificación, la comisión acaba no sirviendo para lo que se concibió y termina siendo un instrumento al servicio de otros fines ajenos a la pretensión de la norma, tales como: Ocupar un puesto para que no sea amorti-zado, corregir defectos de la RPT, incrementar las retribucio-nes de un trabajador/a sin que

cambien sus funciones, traslados encubiertos, paliar situaciones graves de tipo personal, motiva-ciones, reconocimientos, recom-pensas, agradecimientos, favo-res, parches, enchufes… y entre

En materia de comisiones de servicio, la trampa es la norma

En este contexto de tole-rancia y falsa justificación, la comisión acaba no sir-viendo para lo que se conci-bió

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Estatuto básico del Empleado Público: Curio-samente la Ley más importante de la Función Publi-ca no hace ni la más mínima referencia al tema de las comisiones de servicio.

Real Decreto 364/1995, Reglamento General de Ingreso del Personal al servicio de la Admi-nistración General del Estado: En este reglamen-to es donde encontramos toda la regulación de las comisiones de servicio en el ámbito de la Seguridad Social, concreta-mente en los siguientes artícu-los:

Artículo 36. Formas de provisión:

1. Los puestos de trabajo adscritos a funcionarios se proveerán de acuerdo con los procedimientos de concurso, que es el sistema normal de provisión, o de libre designación...

3. Temporalmente podrán ser cubiertos median-te comisión de servicios y adscripción provisional, en los supuestos previstos en este Reglamento.

Artículo 64. Comisiones de servicios.

1. Cuando un puesto de trabajo quede vacante podrá ser cubierto, en caso de urgente e inaplaza-ble necesidad, en comisión de servicios de carácter voluntario, con un funcionario que reúna los requisi-tos establecidos para su desempeño en la relación de puestos de trabajo.

3. Las citadas comisiones de servicios tendrán una duración máxima de un

año prorrogable por otro en caso de no haberse cubierto el pues-

to con caracter definitivo...

Fuente: BOE Código de la Función Pública. Edición actualizada a 19 de enero de 2016. La última versión de este código en PDF y ePUB está disponible para su descarga gratuita en:

www.boe.es/legislacion/codigos/

¿Qué dice la ley?

otros, el “gracioso” otorgamiento de un puesto en provisión defini-tiva a través de otra trampa legal connivente que es la mascarada del concurso de méritos específi-cos.

Para rematar, las Direcciones Generales, de las que en algu-nos asuntos es difícil detectar su existencia, miran para otro lado cuando algunos pocos directores provinciales de mayor sensatez publican los puestos vacantes en su ámbito, ofertando a todos los trabajadores y trabajadoras, sin excepción, la posibilidad de ocu-parlos en comisión de servicio a través de un baremo acordado con los sindicatos. Baremo y se-lección que no surtirá efecto al-guno en los concursos por la fal-ta de reconocimiento del sistema en los ámbitos superiores.

Frente a la masificación de la “trampas” y sus consecuencias, los sindicatos claman ante unos gestores de personal que, haciendo oídos sordos, se atrin-cheran en los abusos de sus de-rechos. Las comisiones se si-guen dando a dedo, se prolon-gan más alla de los límites lega-les establecidos y no se ofertan en los concursos como se debi-era, sino cuando conviene al in-genioso proceso concursal que

infaliblemente va a seleccionar a los elegidos.

De una parte, la legalidad de la trampa hace difícil que sea la justicia la que venga a poner fin a estos abusos. De otra, la Admi-nistración que es feliz poniendo a quien quiere donde quiere, se justifica argumentando que el concurso no es tan eficaz en la selección como su dedo, por lo que no tiene la menor intención de modificar el tinglado en tanto en cuanto pueda evitarlo.

Instituida como está la trampa, el camino para el traslado y la promoción, sea provisional o permanente, no es mayoritaria-mente la selección, sino la elección. Es decir, el dedo.

La salida masiva de trabajado-res por el envejecimiento de la plantilla y la falta de reposición está generando vacantes a un ritmo cada vez mayor. El exce-dente de esas vacantes aumenta las comisiones de servicio, y con

ellas el problema. La solución, cada vez más urgente a ese pro-blema, tiene poca probabilidad de producirse en tanto en cuanto los altos e iluminados gestores de personal se sigan consideran-do llamados a rectificar una ley, por deficiente que esta sea, con sus “trampas”. Un dilema fre-cuente por otra parte que no de-biera tener mejor solución, para no caer en la arbitrariedad, que instar la modificación de la nor-ma sin dejar de cumplirla.

Desde UGT no dejamos de denunciar esta situación en to-dos los ámbitos de la negocia-ción a la par que proponemos alternativas viables en el marco jurídico vigente reclamando el cumplimiento de la adicional séptima del RD 364/1995 que determina a la Administración a negociar los sistemas de provi-sión, si bien, es menester acla-rar que no estamos contra los compañeros y compañeras que hacen bien en ocupar puestos en comisión, ni contra la fórmula excepcional que representa la citada comisión, sino contra los abusos y la terquedad de quie-nes debieran cumplir la ley y ahorrarnos el favor de salvarnos de ella con sus “trampas”.

Diógenes

Las Direcciones Generales, de las que en algunos asun-tos es difícil detectar su existencia, miran para otro lado

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La administración electrónica no es el re-medio mágico que va a solucionar la escasez de personal en la Seguridad Social. Además, existen ciertas formas de mal uso que podrían perjudi-car seriamente a los ciu-dadanos

En los últimos tiempos, en la Administración del Estado en general y en la Seguridad So-cial en particular, se ha extendido la corriente que destaca las bondades de la administra-ción electrónica como un autoservicio en el que los ciudadanos, las empresas y las ges-torías van a encontrar la vía que permita superar la atención personalizada en las oficinas de nuestra Seguridad Social. Sin embargo algunas empresas y gestorías abusan de la confianza de los ciudadanos, les hacen solicitar los certificados digitales personales que luego gestionan a su antojo sin ningún control ni registro.

En el contexto actual en la Seguri-dad Social de pérdida de personal sin reposición, que asfixia atenaza y compromete el importante servicio público que llevamos a cabo, podría parecer que la senda de los autoser-vicios telemáticos será la solución mágica que permitirá seguir dando servicio sin importar las reducciones de personal.

Pero, ¿qué es la administración electrónica? ¿Cómo podemos acce-der a los servicios telemáticos?

Las oficinas virtuales permiten a los usuarios que se identifican, acce-der por sus propios medios telemáti-cos a una serie de servicios o trámi-tes administrativos y completarlos de forma total o parcial sin intervención ni asistencia directa por parte de funcionarios de la Seguridad Social.

Como podemos ver de la defini-ción anterior, el proceso clave y fun-damental es el sistema de identifica-ción del usuario físico o jurídico que quiere acceder a los servicios electrónicos.

Pero, ¿cómo garantizamos que la persona que está al otro lado del ordenador, que no exhibe su DNI, es quien dice ser? Hay dos sistemas fundamentales, el primero es me-diante un nombre de usuario y con-traseña. Este es el procedimiento que se emplea en el famoso sistema cl@ve. Los usuarios se registran y se les asigna una clave con la que pue-den acceder a todos los servicios telemáticos ofrecidos por la Adminis-tración del Estado. Otra forma de identificación consiste en la utiliza-ción de los certificados digitales que se instalan en el navegador y, me-diante el uso de una clave privada que está contenida en ellos, nos per-miten la identificación y firma.

La administración electrónica no es una herramienta mágica en que

nos sentamos delante del ordenador y casi con el pensamiento podemos hacer y completar todos los trámites que se nos proponen. Son necesa-rios una serie de requisitos técnicos y habilidades para poder acceder a la oficina electrónica. Además hay varios factores particulares propios de la Seguridad Social que dificultan sobremanera la implantación indiscri-minada de los servicios telemáticos.

El primer factor que complica no-tablemente la relación con las ofici-nas virtuales, en la Seguridad Social, son los ciudadanos que demandan el servicio público que ofrecemos. Hay que ser conscientes de que una gran parte de los usuarios que se dirigen a solicitar prestaciones, como por ejemplo una pensión, son personas que, por edad y cultura, generalmen-te tienen una escasa relación con internet o los medios electrónicos actuales.

Otro factor que dificulta el acceso a las oficinas virtuales es la disposi-ción de los medios técnicos. No to-

Las oficinas virtuales tienen limitaciones y no resultan accesibles a todo el mundo

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das las personas, y sobre todo las que son más vulnerables con facto-res de exclusión social, tienen acce-so a un ordenador. Se da el caso de que a muchos ciudadanos que se acercan a las oficinas de la Seguri-dad Social a por certificados de vida laboral para justificar su estado a fin de solicitar alimentos, los obligamos a que accedan a estos documentos por vía telemática, cuando quien no tiene para comer difícilmente va a tener para un ordenador o móvil y conexión a internet. Muchos de estas personas que necesitan asistencia recurren a locutorios para imprimir sus vidas laborales, con el coste que supone para una persona que no tiene ni para comer.

La propia dinámica del uso y de los medios necesarios para acceder a la administración electrónica hacen difícil, en la mayoría de las ocasio-nes, que los usuarios particulares puedan acceder fácilmente sin asis-tencia. Caso aparte son los usuarios profesionales o las personas jurídi-cas, que sí disponen de medios técnicos y capacidad para una rela-ción telemática plena con la Seguri-dad Social.

La mala costumbre que los actua-les gestores de la Seguridad Social han tomado de “invitar”, por no decir obligar, a los ciudadanos particulares

que vienen a por una vida laboral a que se la descarguen por vía telemá-tica está conduciendo a situaciones verdaderamente lamentables.

Indudablemente la vía telemática para las empresas en su relación con la TGSS ha supuesto un avance incontestable y un ahorro considera-ble de tiempo y dinero tanto para la

empresa como para la Administra-ción, pero también las oficinas virtua-les tienen zonas oscuras y lagunas.

Quizás el registro de apodera-mientos previsto en la nueva ley 39/2015 pueda contribuir a acotar las malas prácticas alrededor de los certificados de usuario.

Julio Martínez

La regulación legal se instituyo en la ley 11/2007, de acceso electrónico de los ciudadanos a los Servicios Públicos.

La Ley 11/2007 establece que reglamentariamen-te, las administraciones públicas podrán establecer la obligatoriedad de comunicarse con ellas utilizando sólo medios electrónicos, cuando los intere-sados se correspondan con personas jurídicas o colectivos de personas físi-cas que por razón de su capacidad económica o técnica, dedicación profesional u otros motivos acreditados tengan garantizado el acceso y disponibilidad de los medios tecnológicos precisos.

La ley 11/2007 ha quedado derogada, con efec-tos de 2 de octubre de 2016, por la disposición dero-gatoria única. 2.b) de la Ley 39/2015, de 1 de octu-bre. Ref. BOE-A-2015-10565. Sin embargo el párra-fo anterior ha sido transcrito literalmente y en su totalidad en el art. 14.3 de la Ley 39/2005 y por

tanto está plenamente en vigor.

Además tenemos que tener en cuenta que la dis-posición final 7 de la citada ley 39/2015 establece un plazo de dos años desde su entrada en vigor para

que produzcan efectos las previsiones relativas al registro electrónico de apo-deramientos, registro electrónico, pun-to de acceso general electrónico de la Administración y archivo único electró-nico, y por tanto, hasta ese momento, se mantendrán en vigor los artículos

de la ley 11/2007 que traten sobre las materias cita-das.

Por tanto, cualquier persona que, en el ejerci-cio de sus derechos, se dirija a una oficina de la Seguridad Social y que no esté incluida en los colectivos detallados anteriormente, no se le puede obligar, si no quiere, a relacionarse me-diante los medios electrónicos y tampoco puede ser discriminada con retrasos en la tramitación.

¿Se puede obligar a los ciudadanos a relacionarse con las administraciones utilizando en exclusiva los medios electrónicos?

Abusos de algunas gestorías y empresas No todo es de color de rosa en la administración electrónica. Exis-ten ciertas actuaciones por parte de algunas gestorías, que supone-mos de buena fe y en beneficio de sus clientes (generalmente autó-Duendes) y que incurren, a nuestro juicio, en la mala práctica que consiste en mandarlos a las oficinas de la Seguridad Social para soli-citar la acreditación para el certificado de usuario la FNMT con el código de registro que ha obtenido gestoría y que les permitirá des-cargarse el certificado en el propio ordenador de la gestoría y apode-rarse de él. Cuando se les pregunta a los usuarios te responden “no se, la gestoría me ha dicho que venga aquí con este número”.

Tener un certificado de usuario que permite hacer todo tipo de tramites de forma genérica y sin ningún registro ni control, creemos que no es una buena praxis, aún actuando de buena fe. Es una res-ponsabilidad muy grande ceder tu firma sin límite para que el gestor pueda hacer prácticamente lo que quiera frente a la Administración.

Caso a parte es la actuación de ciertas empresas que se sumer-gen en la ilegalidad o en la infracción administrativa. Hay algunos usuarios que nos informan de la práctica de tener trabajadores en régimen de autónomos y que prestan servicios en la empresa y a los que les han “sugerido” sacarse el certificado digital que, por supues-to, controla la empresa, dándoles de alta y baja por su cuenta en el régimen de autónomos y por tanto dándoles trabajo o no según les viene en gana. Creemos que la inspección de trabajo debería estar atenta y tener los medios necesarios para controlar este tipo de situa-ciones que provocan abuso e indefensión de los trabajadores.

Ciertas prácticas por parte de gestorías o empresas pueden ser abusivas

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L os certificados de usua-rio son fundamentales para acceder a la admi-

nistración electrónica, pero tienen una gran cantidad de riesgos que hay que conocer y controlar en todo momento.

En realidad el certificado digital no es más que una llave electrónica que nos permite acceder a los servicios tele-máticos, y tal como hacemos con nuestra llave de casa o del coche, tenemos que custodiar-la y no permitir que nadie más pueda acceder a ella, a menos que cuente con nuestro permi-so y total confianza.

Antes que nada, ¿Qué es el certificado digital? Es muy sencillo. No es más que un pequeño fichero que nos sumi-nistra una autoridad de certifi-cación (Fábrica de Moneda y Timbre, Ministerio del Interior con el DNIe, Camerfirma en la Comunidad de Madrid, Gene-ralitat de Catalunya, etc.). Este fichero puede estar instalado en un soporte físico, como el caso del chip del DNIe o bien lo podemos guardar en nuestro disco duro o una memoria USB. El fichero que hemos guar-dado en disco contiene la clave privada que utilizaremos en el proceso de identificación o firma y lo instalaremos en el navegador para usarlo en el proceso de identificación y/o firma en la oficina virtual. Para poder descargar el certificado de usuario hemos de dirigirnos a una autoridad de certificación, que es la pro-veedora del servicio que nos va a facilitar nuestro certificado digital. Existen muchas autori-dades de certificación, cada una de ellas con su propio

protocolo de descarga, que aunque en esencia son igua-les, establecen distintos cami-nos para la descarga. Nosotros nos vamos a centrar en el certi-ficado digital para personas físicas que emite la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FMNT), que es el que utiliza la Seguridad Social como Entidad de Registro. Las reglas de seguridad que vamos a enu-merar aquí son esencialmente iguales para todos los presta-dores de servicio. Para descargarnos el certi-ficado de la FNMT lo primero que tenemos que hacer es sol ic i tarlo en su web: www.cert.fnmt.es allí siguiendo el procedimiento, que bien conocen todos los que están en las Agencias de la TGSS o en los CAISS. Con el número de código de solicitud que facilitan al usuario en la web este se presenta en nuestras oficinas y mediante la persona-ción y presentación del DNI completamos el proceso de registro. Una vez finalizado el proce-dimiento anterior, siguiendo todos los pasos que se nos indican, la FNMT nos deja instalado el certificado. Una vez lo tenemos instalado en el navegador ya podemos usarlo, y en este caso solamente po-dremos usarlo en el ordenador en el que lo tenemos situado. La propia FNMT nos recomien-da hacer una copia de seguri-dad del certificado que nos permitirá guardarlo en un disco o memoria USB para poder recargarlo en el ordenador en caso de formateo o instalación de un nuevo sistema operativo o bien instalarlo en otro orde-nador para su uso, siempre siguiendo los consejos de seguridad que vamos a dar a continuación. Tendremos en cuenta que todo el procedimiento que rela-tamos a continuación vale para el navegador Explorer de Mi-crosoft, que es el de uso habi-tual en los ordenadores de la Seguridad Social.

Primeramente tenemos que ver donde está situado el certi-ficado en nuestro navegador, para ello iremos a las herra-mientas en la parte superior izquierda del navegador (el símbolo del engranaje), pulsa-mos y a continuación vamos al menú “opciones de Internet”

En el cuadro que nos sale a continuación, iremos a la pes-taña “contenido”:

Seguidamente pulsaremos en la Sección “certificados”:

E n e l c u a d r o d e “certificados” nos aparece el listado de todos los certificados digitales que tenemos instala-dos en el navegador. Podemos instalar más de un certificado digital, perteneciente a cada usuario o bien nuestros corres-

pondientes a distintas autorida-des de certificación (FNMT, Camerfirma, etc.). Aquí tene-mos las distintas opciones que nos permitirán gestionar nues-tros certificados digitales, como son “importar”, ”exportar” o “borrar”.

Consejo de seguridad El certificado digital lo guar-daremos siempre en un dispo-sitivo exterior, (memoria USB) que custodiaremos en un sitio seguro y lo instalaremos y utilizaremos en el navegador de nuestro ordenador el pre-ciso momento de su utiliza-ción, eliminándolo del nave-gador inmediatamente des-pués de su uso, utilizando para ello la opción “quitar” de la pantalla anterior.

Exportación del certifi-cado digital Durante el proceso de instalación del certificado digi-tal de la FNMT en nuestro ordenador tendremos en cuen-ta una serie de parámetros para permitir la exportación de la clave privada a una memoria USB, para poder guardar una copia del certificado y así po-derlo quitar del navegador una vez utilizado, según hemos explicado en el paso anterior y también para indicarle al nave-gador que pida una contraseña cada vez que se vaya a utilizar el certificado digital para acce-der a una oficina virtual o firmar un documento. Esto es suma-mente importante para evitar que en caso de descuido se nos olvide borrar el certificado del navegador, con lo que cual-quier persona que accediera al

Permiten identificarse telemáticamente y firmar o cifrar documentos electróni-cos, pero no están exentos de riesgos. Aprende a usarlos con total garantía

El certificado digital no es más que una llave electrónica y como tal debemos custodiarla

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ordenador podría hacer uso de él en la oficina virtual. Para ello, en el navegador Explorer de Microsoft, según el procedimiento visto anterior-m e n t e e n t r a m o s e n “herramientas”, acceder al menú Herramientas, “opciones de Internet.” Una vez allí, se-leccionaremos la pestaña "contenido". pulsaremos el botón de "certificados" y una vez en la ventana pulsaremos la pestaña "personal". Aquí se nos muestra una pantalla con la relación de Certificados personales instalados en nues-tro navegador. Seleccionamos el que queremos exportar y pulsamos el botón "exportar". A partir de este momento nos guiará un asistente de Win-dows. Exportación de certificados con la clave privada: Dejare-mos las opciones tal y como se nos muestran por defecto y pulsamos "siguiente" Llegamos a una pantalla donde se nos pide una contraseña y su validación para proteger el archivo que contiene el certifi-cado exportado. Las introduci-mos y pulsamos el botón "siguiente" En el siguiente cuadro de dialo-go indicaremos la ruta y el nombre del archivo que quere-mos que contenga el certifica-do exportado, pulsaremos el botón "siguiente" A continuación se nos muestra una ventana con las caracterís-ticas del certificado exportado, pulsaremos el botón "finalizar" y aparece un mensaje de aviso diciendo que la clave privada va a ser exportada, pulsamos "aceptar" y si la operación ha sido correcta se nos mostrará un cuadro informándonos de que el certificado ha sido ex-portado con éxito.

Importación del certifi-cado digital Una vez que tengamos nuestro certificado guardado en una memoria USB, que obviamente guardaremos en un lugar seguro, para importar el certificado e instalarlo en el navegador de internet Explo-rer, como medidas de seguri-dad imprescindibles, haremos los siguientes procedimientos: Como hemos estado viendo en “herramientas”, “opciones de I n t e r n e t ” , “ c o n t e n i d o ” , “certificados” y en la pestaña “personal” y nos saldrá una pantalla igual a la mostrada en la parte superior izquier-da, en ella pulsaremos la op-ción señalada “Importar” des-plegándose entonces una pan-talla que nos permitirá dirigir-nos hacia el disco donde tene-mos guardado el fichero del certificado digital y cargarlo. Apareciendo entonces el cua-dro de la parte superior dere-

cha. En este cuadro hay dos casillas muy importantes que hemos marcado en rojo con el 1 y 2. Una vez tengamos el certificado guardado en disco la casilla de opción 2 (“marcar la clave como ex-portable”) la desmarcaremos siempre, pues es la que va a impedir que la clave privada nos la puedan robar en un descuido exportándola a un fichero, es decir, teniendo co-pia de seguridad del certifica-do, la casilla 2, siempre en blanco. Caso contrario hare-mos con la casilla 1 (“habilitar protección segura de la clave privada”) la mar-caremos siempre, aparecien-do entonces los tres cuadros de la parte inferior en los que marcaremos el nivel de segu-ridad en “alto” y en el paso siguiente introduciremos una contraseña. Con lo que conse-guiremos que cada vez que nosotros o alguien intente utili-zar el certificado digital el nave-gador pida la contraseña.

Recomendaciones pa-ra la utilización segura del certificado digital 1. Hacer una copia de seguri-

dad del certificado digital y guardarla en lugar seguro.

2. Instalar el certificado cuando lo vayamos a utilizar y des-instalarlo una vez utilizado.

3. Habilitar la protección segura mediante contraseña del certificado digital.

4. Una vez tenemos la copia de seguridad, no habilitar nunca la posibilidad de exportar la clave privada.

5. Salvo caso de fuerza mayor, y en este caso utilizaremos las medidas de seguridad anteriores, no instalar ni utilizar el certificado digital en un ordenador público

Para saber más Manual práctico de supervivencia en la Administración

Electrónic@

Autor: Alberto López Tallón Para profundizar en los entresijos de la administración electrónica en todas sus facetas podemos remitirnos a este magnífico libro que además es de libre descarga por Inter-net, aunque, para los

amantes del papel, también se puede comprar su versión impresa. Todo lo relatado en presente artículo en relación a los cer-tificados de usuario está perfectamente explicado en este libro, que recomen-damos vivamente a quien quiera introdu-cirse en este mundo. El libro se puede descargar visitando el blog del autor en: www.microlopez.org

Y en el enlace: h t t p : / /www.mic ro lopez.org/man ua l -p rac t i co -d e -superv i venc ia -en- la -a d m i n i s t r a c i o n -electronica/

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H ubo revuelo cuando hace poco se discutió sobre cuántos eran los miles de

muertos que seguían cobrando pensión.

Treinta mil, veinte mil, diez mil… Los voceros de una y otra facción clamaron desde las atala-yas de sus instituciones acusán-dose y justificando sus contradic-torias declaraciones sobre este asunto.

El Tribunal de Cuentas, el Ins-tituto Nacional de Estadística, y el de la Seguridad Social, en un alarde de desorganización del Estado cruzaron sus llamativas cifras y sumaron otro escándalo a la larga lista de los que cada día obsequian los administrado-res a los administrados.

La noticia de que treinta mil muertos siguen cobrando pen-sión duró en la prensa lo que tar-dan en aparecer otras peores,

que es nada, pero bien vale la pena recordar algunos aspectos que salieron a la luz en los me-dios por esta causa y que nos afectan directamente:

El INSS reconoció públicamen-te que destinaba poco personal a la gestión de deudas, y que “la escasez de personal exige dar prioridad a las áreas relaciona-das con el reconocimiento y man-tenimiento de las prestaciones” lo que, sin dejar de ser una barbari-dad, es una indiscutible verdad frente a la que nadie hace nada.

Pero también el Tribunal de Cuentas, a lo largo de su rapa-polvo, reiteró en repetidas oca-siones que la Dirección General del INSS debe de homogeneizar, coordinar y supervisar las actua-ciones de las Direcciones Provin-ciales. Deber incumplido según el Alto Tribunal, e incumplimiento que por el momento no va a re-

percutir en la productividad de la DG, puesto que, como es sabido, la Dirección General no tiene ob-jetivos.

El incumplimiento de estas mismas funciones en materia de personal, que no ha denunciado el Tribunal de Cuentas ya que no es su función, pero si la UGT, provoca una diversidad de políti-cas de personal en las diferentes Direcciones Provinciales que a su vez son la causa de una des-igualdad injusta en cuanto a las condiciones de trabajo.

Los muertos pensionistas han venido a turbar el descanso del que, sobre las Direcciones Pro-vinciales, venía disfrutando la Dirección General. Desde UGT hacemos un llamamiento a que “despierte” en cuanto a sus obli-gaciones en materia del poco personal que vamos quedando.

Diógenes

Tribunal de Cuentas: 30.000 muertos cobran pensión

Referencias en la prensa: http://economia.elpais.com/economia/2016/07/21/actualidad/1469119560_541140.html http://www.expansion.com/economia/2016/07/21/5790d8bbe5fdea206f8b45b8.html http://www.larazon.es/economia/casi-30-000-muertos-siguen-cobrando-su-pension-BK13197431

Enlace al informe nº 1.156 completo del Tribunal de Cuentas (2,54 Mb): http://www.tcu.es/tribunal-de-cuentas/.content/EnlacesBuscador/I1156

Para saber más

Los datos Según su informe Nº 1.156, el Tribunal de Cuen-tas ha detectado que casi 30.000 personas, que figu-ran como fallecidos, seguían cobrando una pensión en 2014 por un importe total de 25 millones mensuales. La Seguridad Social no comparte las conclusiones y alega que hay un cruce dia-rio con el registro de defun-ciones y que, por lo tanto, el margen de error es mínimo.

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Podría parecer que los números que presentamos son los del próximo gordo de la Lotería. Pero no, son personas que desempe-ñan su trabajo en la Seguridad Social

H emos conseguido que unos Duendes invisibles recorran de cabo a rabo la Seguridad Social y vayan contando cada una de las personas que localicen trabajando en su puesto. Son tan eficaces que pueden contar incluso las personas que se encuentran

de vacaciones, de curso o de baja por enfermedad.

Estos Duendes, una vez cumplimentada su labor por todo lo largo y ancho, una vez que se hayan pasado por todas las Agencias y CAISS, Servicios Centrales y Direcciones Provin-ciales vendrán a susurrarnos al oído las cifras finales.

Y vamos a informar, en los números sucesivos de esta revista, de las variaciones que se produzcan con respecto al periodo anterior, que, quien sabe, algún día nos puedan produ-cir la inmensa alegría de que por fin aumentan de un periodo a otro.

De momento, de lo único cierto que podemos informar es que de abril del 2015 a agos-to de 2016 en la Seguridad Social hay 1.431 personas menos trabajando, que por lo que nos cuentan los Duendes, da lugar a que en muchos centros de trabajo exista una situación muy complicada. Nos han llegado a susurrar, nuestros amigos los Duendes, que han visto que en algunas Agencias y CAISS solamente hay una trabajadora/or prestando servicio.

No sabemos si al final tendremos que ofrecer nuestros amigos invisibles a los gestores de personal o, mejor aún, al Gobierno, para que se vayan enterando de lo que producen sus políticas. Pero, por si acaso lo que pretenden es cargarse la Seguridad Social, iremos ´denunciando y sacando a la luz las cifras.

También agradeceríamos, que entre todos, echemos una mano a nuestros buenos ami-gos los Duendes y, por si a caso se les escapa informar de una situación complicada ocasio-nada por la falta de personal en cualquier ámbito de nuestra Seguridad Social, si conocemos situaciones difíciles o casi insostenibles lo denunciemos para que sea publicado y conocido por todos (por su puesto guardando la confidencialidad. Los Duendes, por naturaleza, son muy discretos). Correo para informar: UGT.SECCION.INSS@seg-social.es.

Fuente: recuento usuarios registrados en Outlook

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“La economía recuperada”“La economía recuperada” Comento con mi vecino del

segundo que el ministro de Guin-dos se muestra aliviado. No habrá multa europea por incumplir el déficit. Los españoles tendremos que recortar por valor de 15.000 millones €; pero multa, lo que se dice multa, no habrá. Nuestro carnet de miembro europeo con-servará los quince puntos. Mi vecino sonríe mientras observa la experta labor de un par de opera-rios de su (ex) compañía distribui-dora que le desmontan el conta-dor por impago. La repercusión negativa de una posible sanción en los índices macroeconómicos y la consiguiente pérdida de con-fianza de los inversores en la eco-nomía española dejarán de quitar-le el sueño. Ahora lo conciliará mucho mejor, a lo quecontribuirá la ya de facto ausencia absoluta de luz en su hogar.

A la salida del supermercado me detengo a hablar con la men-diga de guardia. Ha tenido buena tarde, agita contenta el vasito en el que ha reunido seis euros. Además, sabe que de Guindos garantiza bajo su palabra —uno aprecia en lo que vale la palabra de quien era director de Lehman Brother’s en España y Portugal cuando la compañía se desmo-ronó— la integridad de la inver-sión social. Los sacrificios de los españoles no quedarán sin re-compensa, dice mi interlocutora mientras hace tintinear otros cin-cuenta céntimos en su vasito lle-gados de un cliente solidario. Sin duda serán los bancos —esas entidades sin ánimo de lucro— los que asuman con gusto los recor-tes. En tal modo resarcirán a la sociedad de su anterior rescate con dinero público mermado a minucias como la sanidad, la edu-cación, las prestaciones por des-empleo o la ayuda a dependien-tes. Vivimos en el mejor de los mundos posibles, expresa entu-siasmada —a esas alturas de la conversación ya lleva siete euros y treinta céntimos en su vasito de mendiga—, la economía avanza a ritmo imparable, no puede ser de otra manera gracias a estos gobernantes que tanto nos quie-ren y a quienes tanto queremos.

De camino a casa encuentro a dos indigentes que rebuscan en un contenedor. Amontonan en los transportines de sus bicicletas cajas vacías de ordenadores de

gama alta. ‘Nuevo indicador’, me digo con ojo experto, ‘de que el cash flow y capital circulante au-mentan la masa monetaria en el conjunto de las cifras macro refor-zadas por el incremento de los salarios’. Todo contribuye así a que una limpiadora o un camarero ganen más que el presidente del PP balear, según asegura éste en sus declaraciones del 27 de julio. A la postre, la limpiadora o el ca-marero trabajan sólo ocho horas —ningún patrón en España —¡por favor!— consentiría que un traba-jador echase más horas de las legales—, mientras que el buen hombre, en su calidad de diputado autonómico y miembro del PP, ejerce a jornada completa y sin horarios. A los 28.000 € anuales como alto cargo del partido añade 55.000 más en su condición de diputado. Magro salario, sin duda, el de este servidor público para tan loable sacrificio.

Llego a casa. Mis hijos vein-teañeros van a convertirse en emprendedores. Es decir, pronto emprenderán su salida como emi-grantes, si bien no han decidido el país de destino. Descartado el Reino Unido, que ha abandonado esa gran familia, solidaria y amis-tosa, que es la UE —tanto que incluso levanta campos de refu-giados y muros para que no se cuelen intrusos de rondón en nuestro hogar europeo—, y tam-bién Grecia, que sigue cara a la pared por díscola, quedan Fran-cia, Alemania, Irlanda… por otra parte sus estudios tienen buena salida: por tierra, mar o aire. Veo en televisión niños de un barrio de esos que atraen a los reporteros de Callejeros. Visten con desaseo, comen en el colegio porque todos sus familiares están en paro y resultan limitadas las posibilidades de la pensión del abuelo (con cónyuge a cargo, qué mano la de la abuela para los fogones, ha recuperado recetas de la posguerra, tortilla de patatas sin huevo y sin patatas, yum, yum). Gracias a nuestro compe-tente gobierno, a Bruselas, a Berlín, al FMI, a la Troika y otras ONG, esos niños encaran el futu-ro felices, —aunque Cáritas, siem-pre aguafiestas—, insista en que a ocho de cada diez niños de familias pobres les aguarda un futuro de pobreza.

La economía se recupera. Todo marcha bien. ¿De dónde, entonces, esta sensación de des-ánimo al acostarme? Sin saber por qué me descubro entonando una simpática melodía de la vieja Muchachada Nui:Hijo de puta, hay que decirlo más, hijo de puta más… ”.

Al pie del cañon

Rafa Tormo

“La sostenibilidad del sistema público de pensiones”“La sostenibilidad del sistema público de pensiones” Últimamente nos invade una corriente de

pensamiento ultraliberal cuyos postulados son asumidos como verdad absoluta. Nos bombar-dean con la sostenibilidad de las pensiones públicas. En casi todos los medios de comuni-cación se nos viene advirtiendo que las pen-siones públicas no son sostenibles. Esta postu-ra es interesada y busca crear una corriente de opinión favorable a la contratación de sistemas de pensiones alternativos que, casualmente, serán gestionados por esos mismos bancos y empresas privadas que han estado, y están, a punto de llevarnos al abismo con su mala ges-tión, como muestran los casos de Lehman Brot-hers y, últimamente, la mala situación de algu-nos bancos italianos o el Alemán Deutsche Bank.

Es una falacia decir que el sistema público de pensiones peligra a largo plazo. Todos sa-bemos, porque nos ha tocado vivirlo muy de cerca con amigos y familiares, que la actual situación de precariedad absoluta del mercado de trabajo hace que los que acceden ahora al mercado laboral, bien como nuevos cotizantes o de los que fueron expulsado y ahora retor-nan, lo hacen con unos salarios y condiciones laborales que distan mucho de ser dignos. Sa-larios de miseria; jornadas a tiempo parcial que cotizan un par de horas semanales, con una presunción rayana a la certeza de que el resto de jornada es en negro; empresas de trabajo temporal copando determinados sectores, por enumerar solo unas pocas maldades que han originado las sucesivas reformas laborales. Estas personas están abocadas a largo plazo a no tener derecho a pensión contributiva por no alcanzar el mínimo de cotización requerido o bien, si ha tenido suerte el cotizante, tener unas bases ridículas que hará que efectivamente la pensión resultante sea una miseria. Si conti-nuamos como hasta ahora, estos futuros pen-sionistas apenas van a suponer una carga para el sistema de la Seguridad Social.

Es falso que estas pensiones de hambre a las que están abocando a las generaciones presentes vayan a comprometer en el futuro la sostenibilidad del sistema de pensiones. Lo que sí es bien cierto es que se va a comprometer, y muy seriamente, la sostenibilidad de las perso-nas y la cohesión social de la que disfrutamos actualmente.

Sí que es necesaria una reforma del siste-ma de la Seguridad Social. Pero ésta pasa, sin duda, por unos salarios y condiciones laborales dignas, que serán los que conseguirán aumen-tar los ingresos de la Seguridad Social y nos dará la estabilidad que necesitamos. Si el Go-bierno actual del Partido Popular están vacian-do la hucha de las pensiones es porque han sido incapaces, con su reforma laboral, de con-seguir unas buenas cotizaciones sociales que tienen que pasar necesariamente por unos salarios en condiciones.

El salario digno nos conducirá a la sosteni-bilidad de las pensiones.

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La atalaya

Julio Martínez

Julio.martinez1@seg-social.es

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““La deformación de la formación”La deformación de la formación”

A la hora de evitar la deforma-ción de la formación es convenien-te considerar determinados aspec-tos que alertan sobre la falta de calidad de la misma:

Cuando el criterio económico prima sobre el formativo.

Cuando la formación está adap-tada a los objetivos de la Organi-zación y no en función de los objetivos formativos.

Cuando los agentes que partici-pan en las Comisiones de Forma-ción son ponentes o autoselec-cionados como asistentes a las acciones formativas.

Cuando los tiempos y las modali-dades de la formación se supedi-

tan a cualquier interés (Halcón Viajes, disponibilidad hotelera, etc.) menos a la duración pe-dagógicamente más aconsejable para la asimilación de los conte-nidos.

Cuando se imponen los materia-les para la impartición limitando la libertad del docente para ade-

cuarlos al contexto en el que va a actuar.

Cuando se fijan los criterios de selección en las diferentes Comi-

siones Provinciales sin una Direc-ción General que garantice el acceso equitativo a la formación. Es necesario detener esta defor-

mación de la formación, reorientán-dola hacia la necesaria profesionali-zación de la misma y la garantía de una calidad tanto en su gestión como en su impartición.

La formación que tiene por obje-to la actualización cualificada del conocimiento en el desempeño, presente o futuro de un puesto de trabajo, sea el que se ocupa o el que se pretende ocupar, ha de reali-zarse en el horario laboral, excluida de intereses particulares y/o econó-micos.

Queda todavía un largo camino para alcanzar una formación que responda a los cánones de calidad que defendemos, pero no por ello dejaremos de reivindicarlo.

Mª José Acevedo es la coordinadora estatal a nivel de Formación de la UGT– Seguridad Social

Contrastes

María José Acevedo

maria-jose.acevedo1@seg-social.es

““Heroes de la gestión”Heroes de la gestión”

En fecha tan reciente como el pasado noviembre, la Dirección Ge-neral del INSS ha tenido a bien otor-gar en su XIV edición los premios a “Las Prácticas de Mejora”.

Estos premios están dirigidos a las mejoras en las categorías de “Estrategia y Calidad”, “Procesos Clave u Operativos”, “Procesos de Apoyo y Soporte” y tienen una dota-ción económica que oscila entre los 3.500€ para el primero, 2.500€ para el segundo y 2.000€ para el tercer premio de cada una de ellas.

En la Resolución de la Dirección General por la que se resuelven los premios, se relacionan con nombres y apellidos los compañeros y compa-ñeras que han alcanzado esta distin-ción, así como el centro de destino desde el que han participado.

Aprovechamos esta ocasión para felicitarles, así como a tantos otros que sin haber obtenido este reconoci-miento, hacen también cada día posi-ble la calidad del servicio que presta-mos.

Pero no es de estos merecidos reconocimientos públicos de lo que

trata este artículo, sino de los no pu-blicados, de las retribuciones esotéri-cas, de los indultos, de los premios y los reconocimientos que permanecen ocultos.

Como es sabido, cada seis me-ses, un diez por ciento de la plantilla puede ver mejoradas las cuantías que percibe en concepto de producti-vidad hasta tres tramos respecto del

grado de cumplimiento de los objeti-vos alcanzados.

En algunos contados casos, esta distinción recae sistemáticamente, semestre tras semestre y desde hace años, en los mismos compañe-ros/as.

Por increíble que parezca, hay entre nosotros quienes invariable-mente acreditan de modo perenne, y

sin muestra de agotamiento, un es-pecial rendimiento, actividad extraor-dinaria e interés o iniciativa en el desempeño de su función.

Son los “Héroes de la Gestión”, los trabajadores/as en los que todos debiéramos buscar el ejemplo que nos permita seguir su senda, pero paradójicamente, la Dirección Gene-ral, aún a pesar de que “las cantida-des que perciba cada funcionario por concepto de productividad serán de conocimiento público de los demás funcionarios del Departamento u Or-ganismo, así como de los represen-tantes sindicales” y de que se lo hemos preguntado reiteradamente, prefiere mantener oculta la identidad de estos paradigmáticos compañe-ros.

Cabe pues preguntarse por qué se publican cuantías e identidades cuando se trata de premios y no cuando se trata de productividades. ¿Es más oscura la sombra de una cosa que de la otra?

Mientras ocultamente se recono-ce la merecida y perenne mejora de los “Héroes de la Gestión”, conviven con ellos algunos trabajadores/as, que incluso desconocen su existen-cia y que no han llegado a cobrarla en toda su vida laboral.

Sin duda, ha llegado la hora de pedir justicia para los “héroes desco-nocidos” y también y sobre todo, para todos los demás.

Martín Lanzas

martin.lanzas@seg-social.es

Palabras

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Imagen del nuevo edificio DP INSS-TGSS en Segovia

Actualidad, noticias y comentarios en los medios

Nuevo edificio para la dirección provin-cial conjunta del INSS y la TGSS en Se-govia

El Norte de Castilla nos informaba que el INSS y la TGSS realizarían el traslado desde la sede en la plaza Reina Doña Juana a la nueva, situada en el número 1 de la calle Pinar de Valsaín, en el barrio de la comunidad de Ciudad y Tierra.

El edificio, construido según el proyecto redacta-do por el arquitecto Tomás Liniers, estaba termina-do desde la pasada primavera y en abril la Junta de Gobierno local del Ayuntamiento concedió la licen-cia municipal de primer uso. Consta de cinco plan-tas (dos sótanos, planta baja y dos plantas) con una superficie total de 14.503 m2 útiles de obra construi-da, con capacidad para 140 funcionarios. El coste final ha sufrido un aumento de 2,5 millones de € hasta situarse en 16.144.522 €.

SEGOVIA - 22-09-2016 La Seguridad Social está en la UCI y el Gobierno ni se inmuta

En este interesante y muy recomendable artículo, el autor nos previene acerca de uno de los aspecto más escandalosos de la gestión de Mariano Rajoy como es el tema de las pensiones.

El pilar más importante y simbólico de todo el esta-do del bienestar ha entrado literalmente en la UCI con pronóstico gravísimo. El Gobierno se está comiendo la hucha de las pensiones con un déficit que no deja de crecer y que con toda seguridad se superará este año.

Año tras año los presupuestos de la Seguridad Social se realizan con cifras absolutamente irreales en el campo de los ingresos, como ha anunciado la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef). La Seguridad Social agoniza y sus presupues-tos son tan irreales que la política de Rajoy ni siquiera puede ser tachada de incompetente. Es imposible serlo tanto.

Necesariamente los objetivos deben ser otros. Las “reformas “ que se propondrán ya las sabemos: hachazo a las pensiones públicas y fomento de las privadas. Hace décadas que el poder financiero inten-ta acabar con el modelo público de reparto, en el que los trabajadores de hoy pagan las jubilaciones de hoy, y cambiarlo por uno de capitalización, en el que todo el mundo ahorra para su propia pensión futura con la ayuda de los bancos.

El ejemplo clave del modelo de capitalización que se pretende imponer es Chile, el gran modelo de capi-talización tantas veces aludido por los neoliberales, sin importarles demasiado que lo impusiera a la fuer-za Augusto Pinochet. Este sistema hace tiempo que amenaza derribo.

Artículo completo en la siguiente dirección:

http:/ /www.eldiario.es/alternativaseconomicas/gran-escandalo-pensiones_6_551954806.html

Edición digital - 22-09-2016

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Disturbios y destrozos en Chile durante el paro contra el sistema privado de pensio-nes

Chile, paradigma de la aplicación de las recetas ultra-liberales de la escuela de Chicago está sufriendo las consecuencias de la privatización de su sistema de pen-siones.

Las manifestaciones se produjeron al cumplirse 36 años desde que el gobierno militar de Augusto Pinochet (1973-1990) emitió un decreto que estableció un sistema de pensiones basado en la capitalización individual de un fondo de jubilaciones, administrado por empresas privadas denominadas Administradoras de Fondos de Pensio-nes (AFP).

En la actualidad, según un estudio de la Fundación Sol, el 90,75% de los jubilados chilenos reciben menos de 233 US$ al mes, casi la mitad del sueldo mínimo establecido en ese país, mientras que las aportaciones mensuales de los trabajadores activos se invierten en la capitalización de grandes empresas.

http://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-37878680

Edición digital - 04-11-2016

Edición digital - 01.11.2016

El mal negocio del plan de pensiones pri-vado: un 2,31% de rentabilidad anual

La rentabilidad de los planes de pensiones privados en España por los suelos.

Las crecientes dificultades de la Seguridad Social para cuadrar sus cuentas han hecho que las entidades financieras intensifiquen sus ofertas de planes privados de pensiones.

Sin embargo, los planes de pensiones no atraviesan hoy por momentos muy boyantes: según datos de la patronal del sector; Inverco, correspondientes a septiembre pasado, su rentabilidad media anual en la última década ha sido del 2,31%, menos de la mitad que si se amplía el periodo de cómputo a veinticinco años (4,78%).

Los peores resultados se los anotan sin duda los planes de pensiones del sistema individual que suelen pro-mover las entidades financieras para todo tipo de personas físicas: los que tienen invertido su patrimonio en renta variable, por ejemplo, se han revalorizado un 1,26% de media anual desde 2007 y los de renta fija a corto, un 1,25%.

A esta rentabilidad puramente financiera hay que restarle las comisiones de gestión, que ascienden por término medio al 0,8% y constituyen una importante fuente de ingresos para la banca; así como el efecto de la in-flación acumulada a lo largo de los últimos diez años, que ha sido del 12,1%.

Si la rentabilidad financiera es exigua, cuando no negativa, la fiscal va en retroceso: se han reducido las can-tidades máximas desgravables y el ahorro de impuestos es en realidad un diferimiento, pues el contribuyente tiene que pagarlos cuando rescata el plan.

http://www.publico.es/economia/planes-privados-pensiones-mal-negocio.html Autor: Vicente Clavero @Vicente-clavero

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La Seguridad social en cifras

Hay un mantra ultraliberal muy extendido actual-mente que indica que en nuestro País tenemos unas prestaciones sociales por encima de nues-tras posibilidades.

Pero las cifras no engañan y nuestro sistema de protección social, en algunos aspectos, está le-jos de los países avanzados de nuestro entorno

Tramos de cuantía  Total Perceptores 

Hasta 150,00 euros  89.725 

De 150,01 a 250,00  194.235 

De 250,01 a 300,00  50.859 

De 300,01 a 350,00  70.969 

De 350,01 a 400,00  123.738 

De 400,01 a 450,00  321.482 

De 450,01 a 500,00  124.293 

De 500,01 a 550,00  102.811 

De 550,01 a 600,00  250.273 

De 600,01 a 655,19  1.987.899 

De 655,20 a 700,00  315.239 

De 700,01 a 800,00  906.494 

De 800,01 a 900,00  496.545 

De 900,01 a 1.000,00  424.183 

De 1.000,01 a 1.100,00  400.992 

De 1.100,01 a 1.200,00  339.535 

De 1.200,01 a 1.300,00  318.673 

De 1.300,01 a 1.400,00  251.945 

De 1.400,01 a 1.500,00  241.635 

De 1.500,01 a 1.600,00  186.974 

De 1.600,01 a 1.700,00  164.092 

De 1.700,01 a 1.800,00  137.600 

De 1.800,01 a 1.900,00  125.068 

De 1.900,01 a 2.000,00  116.168 

De 2.000,01 a 2.100,00  108.578 

De 2.100,01 a 2.200,00  101.456 

De 2.200,01 a 2.300,00  87.540 

De 2.300,01 a 2.400,00  79.667 

De 2.400,01 a 2.567,26  154.336 

De 2.567,27 a 2.567,29  277.036 

Mas de 2.567,29  36.184 

TOTAL  8.586.224 

3.316.284 pensionistas:

El 38,6% de los

pensionistas cobran menos del SMI.

5.458.745 pensionistas: el 65,7% de los pensionistas Cobran menos de 1000 €

En las actuales circunstancias en las que estamos cues-tionando la sostenibilidad del sistema de pensiones, uno de los argumentos que se utilizan es que nuestras pensiones son muy elevadas y que este factor condiciona la perviven-cia del sistema de pensiones de la Seguridad Social.

Podría parecer que nuestras pensiones actuales son altas, pero del análisis de las cifras que presentamos, pode-mos concluir que el desequilibrio que presenta actualmente la Seguridad Social entre gastos e ingresos no proviene de un gasto desbocado, pues las pensiones actuales no son en absoluto generosas, y no se prevé que en futuro puedan mejorar, si no todo lo contrario.

La solución vendrá, entre otros factores, por la vía de un aumento de los ingresos de la Seguridad Social, que tendrán que pasar necesariamente por dos fuentes: Sacar las desgravaciones a las cotizaciones sociales de los presu-puestos de la Seguridad Social e incrementar sustancial-mente los salarios, lo que repercutirá en una mayor activi-dad económica y, evidentemente, en más cotizaciones.

Recopilación y formateo de datos: Luis Baneiga

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Las pensiones en 1982 eran muy bajas. Para remediarlo, Felipe González financió sanidad y servi-cios sociales con impuestos, de-jando las cuotas solo para pensio-nes. En 1995 se firmó el pacto de Toledo, que garantizaba que bonifi-caciones y pensiones no contributi-vas se pagarían con impuestos. Culminado el proceso, en 2000 se puso en marcha el Fondo de Reser-va, que llegó a 15.000 millones con Aznar. Rodríguez Zapatero impulsó la entrada de trabajadores agrarios y empleadas de hogar en el Régi-men General, mejoró en más de 200 euros cada pensión mínima, puso orden en la gestión de las mutuas trasladando parte de sus beneficios a la Seguridad Social, incorporó al sistema a becarios, a quienes cui-dan a dependientes e incluso a los nuevos empleados públicos, que dejaron de estar en Clases Pasivas.

El fortalecimiento de la Seguri-dad Social permitió que a pesar de cuatro fortísimos años de crisis, el sistema llegara a fina-les de 2011 con un Fondo de Reserva cre-ciendo todos los años, de 66.815 millones de euros y 4.850 millones de euros de las mutuas administrados por la Seguridad Social. El déficit de aquel año, el primero des-de Aznar, fue de 487,27 millones de euros.

Y en esto llegó Rajoy al Go-bierno, con una política opuesta a las de González, Aznar (¡!) y Zapate-ro. Para empezar, cargó a la Seguri-dad Social las bonificaciones al em-pleo (en 2015, más de 3.700 millo-nes de euros). Con su reforma labo-ral apostó por la devaluación compe-titiva de los salarios y la inaplicación de los convenios firmados. Sacó de la Seguridad Social a las cuidadoras familiares y a parte de los becarios, y limitó en tiempo, en cuantía y be-neficiarios las cuotas de desemplea-dos. Consecuencia: bajaron los in-gresos (las cotizaciones en 2015 ingresan 4.000 millones menos que en 2011) y aumentó el déficit. El déficit pasó a 16.707 millones de euros en 2015.

Y el PP sigue diciendo que los socialistas dejamos a la Seguridad

Social en la ruina. ¿Cómo se ha pagado todo el déficit generado por el PP de Rajoy desde 2012? Con lo que dejó el PSOE. En los últimos cuatro años el PP ha gastado más de 50.000 millones de euros de es-tos fondos, y en estos momentos los fondos de las mutuas prácticamente han desaparecido, mientras que el Fondo de Reserva se ha quedado en 32.485 millones de euros. Desde 2012, cada pensionista ha cobrado 6.000 euros de las reservas que dejó Zapatero, que a este ritmo no durarán dos años.

Pero todo este desastre tiene solución. Solo con que el Estado volviera a pagar las cotizaciones de los cuidadores y la Seguridad Social recuperara el dinero de las bonifica-ciones, la saca del Fondo de Reser-va se hubiera reducido a la mitad. Si la Seguridad Social se centra en las pensiones, moderniza la cuota por accidentes de trabajo y reduce otros gastos, puede volver a situarse no sin problemas, pero al menos como

en 2011. ¿Es mucho pedir?

Para no tener que incrementar arbitraria-mente las cuotas, el PSOE ha planteado que parte de la finan-ciación de las pensio-nes se haga con apor-

taciones del Estado. Para que los lectores tengan información, según las últimas cifras de Eurostat las aportaciones públicas en la parte oeste de la Unión Europea son una media del 13,2% del PIB, mientras que en España son del 10,7%. No hace falta llegar al 28,8% de Dina-marca, pero tal vez podríamos acer-carnos al 13,3% de Portugal.

Pero el PP dice que la solución es crear empleo. Desde luego, sin empleo no existiría la Seguridad Social. Pero los nuevos empleos, entre bonificaciones y sueldos ridí-culos, cotizan no 6.000 euros, como los antiguos, sino exactamente la mitad. Harían falta cinco nuevos empleos para pagar cada nueva jubilación. Y el PP tampoco deja que los sueldos suban. Si nos roban la cartera lo denunciamos a la Policía. ¿Qué haremos el 26 de junio con los que se han gastado nuestros 50.000 millones?

La opinión autorizada

Octavio Granado

Secretario de Estado de la Seguridad Social desde 2004 a 2011

«En los últimos cuatro años el PP ha gastado más de 50.000 millo-nes de euros del fon-do de reserva de la Seguridad Social»

Octavio José Granado Martínez (Burgos, 19 de abril de 1959). Está casado y tiene dos hijos. Es licen-ciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Va-lladolid, y profesor de en-señanza secundaria. Fue secretario de Estado de Seguridad Social y secre-tario federal del PSOE de Economía y Empleo de 2004 a 2011. Fue miembro del Senado de España desde 1983 a 2001 en representación de las Cortes de Castilla y León, ocupando la presi-dencia o la portavocía del Grupo Socialista en varias Comisiones Parlamenta-rias: Economía, Presu-puestos, Sanidad y Servi-cios Sociales, Especial sobre Drogas, etc. Es autor de diversas publi-caciones sobre la provisión de servicios públicos en el sistema sanitario, la finan-ciación de la sanidad, el fracaso escolar y la inser-ción laboral, la financiación de las comunidades autó-nomas y el sistema espa-ñol de seguridad social.

Pensiones: en dos años, sin dinero

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Nace este nuevo espacio que está abierto a la participa-ción y como un foro de expresión en libertad en la Seguridad Social.

La opinión y la libre expresión de las ideas es fundamen-tal en toda democracia y la Seguridad Social, como una parte más de la Sociedad en la que está incluida, no puede ser menos.

Si hay alguna cosa que quieres que se sepa, si te gustar-ía opinar sobre la actualidad, o simplemente contarnos tu visión del mundo, aquí puedes manifestar tu opinión con toda libertad, siempre con el respeto a los derechos de los demás. Y tener la seguridad de que puedes llegar a las 28.531 per-sonas que formamos parte de la Seguridad Social en estos momentos.

No hay ningún problema para que, si así lo estimas opor-tuno, puedas expresar tu opinión bajo seudónimo. Siempre hay algo que nos gustaría que se supiera, muchas veces callar no es la mejor manera de solucionar las cosas. Así que no tienes ninguna excusa, ánimo y a escribir.

Cartas al director Las cartas se enviaran por email, preferentemente desde el correo de la Seguridad Social, a la dirección: Julio.martinez1@seg-social.es

Las cartas que los lectores envíen a esta Sección deberán ser originales y rogamos que por cuestiones de espacio, no excedan de 20 líneas o 1400 espacios. Será imprescindible que los textos vengan con el nombre,

apellidos y DNI del autor, sin perjuicio de que se pueda pedir publicación bajo seudónimo. + CLARIDAD se reserva el derecho de publicarlas, así como de resumirlas o extractarlas si por su tamaño, fuese nece-sario. La intimidad queda garantizada, no se facilitará información a nadie sobre las cartas o sus autores.

¿Sientes alguna inquietud por la Seguridad Social o por cualquier tema de interés? ¿Te gustaría participar? No lo dudes, aquí tienes tu sitio.

El organismo percusor de la Seguridad Social actual, el Instituto Nacional de Previsión, fue creado por el Gobierno de Maura a raíz de la presión de las movilizaciones sindicales en el contexto de la incipiente in-dustrialización del país. Este mismo año se crearon los Con-sejos de Conciliación y Arbitra-je, el cuerpo de inspectores laborales o la ley de Huelgas en abril de 1909.

En 1928 se construyó en la ahora avenida Marqués de So-telo de Valencia un edificio para albergar la Caja de Previsión Social. Enseguida la gente em-pezó a conocerla como la

“Casa del Chavo” ya que en aquella época los trabajadores pagaban un “chavo” (10 céntimos de peseta) como cotización para los fondos de protección social.

Historia y evolución del INP: Seguro Obligatorio del Retiro Obrero (1919). Seguro Obligatorio de Materni-dad (1929). Ampliación de la Ley de Acci-dentes del Trabajo a los trabaja-dores agrícolas (1931). Ley de Accidentes de Trabajo en la Industria (1932). Seguro Obligatorio de Enfer-medad (1942), En 1963 la Ley de Bases de la Seguridad Social. El INP se extingue en 1978, en función de lo acordado en los Pactos de la Moncloa, dando paso a los más actuales INSS, la TGSS, el ISM, el Instituto Nacional de la Salud (INSALUD) y el Instituto Nacional de Servicios Sociales (INSERSO)

¿Sabías Que…? Curiosidades y anécdotas de la Seguridad Social

Imagen de época del edificio sede de la caja del INP en Valencia, actualmente sede de la TGSS

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Pasatiempos en la Seguridad Social

La Administración electrónica avanza. El mi-nistro Montoro tiene intención de establecer nue-vos requisitos para el acceso como funcionario a los Cuerpos de la AGE: 1º- Ser máquina, 2º- Te-ner una velocidad de proceso de al menos 1,8 Mhz y 3º- La capacidad de memoria de 2 Tb. Además se impondrán nuevas pruebas para valo-rar la total ausencia de empatía con el usuario.

Durante una visita a una Administración de la TGSS la Ministra tiene que ponerse a atender al público pues la única funcionara de servicio tuvo que ir al WC.

El usuario que atendió la Ministra presenta una reclamación y declara que: “No tenía ni idea y encima el Director General que la acompañaba tampoco se aclaraba mucho. Menos mal que la funcionaria regreso pronto del baño y pude com-pletar mi trámite”

El ministro Montoro encuentra la solución a la sostenibilidad de las pensiones inspirándose en los coeficientes reductores de nuestra Acción Social y establece un coeficiente reductor para todas las pensiones del 0,15 y declara que: “el 0,30 de la Acción Social de la Seguridad Social es demasiado generoso”.

La Gerencia de Informática acepta la oferta de actualización gratuita a la nueva versión “Windows KK”. La actualización comenzará in-mediatamente en todos los ordenadores de la Seguridad Social.

Nuevas medidas para potenciar la adminis-tración electrónica. A partir de ahora, en la Segu-ridad Social, solo se atenderá presencialmente a aquellos usuarios que demuestren que han adop-tado como mascota a un PC. Un portavoz del Ministerio ha declarado que con esta medida se pretende favorecer la convivencia de los usuarios con los medios electrónicos.

HORIZONTALES:,‐1: Tiempo geológico. Provincia con una hermosa bahía, ‐2: Al revés, lo que nos traen nuestros hijos o nietos del colegio. Mango de una cazuela,‐3: Signo zodiacal acuoso. Al revés, antigua matrícula ministerios,‐4: Terminación mayoría apellidos. Vocal. Ser, Presente de indicativo, segunda persona. Vocal,‐5: Consonante que está como una moto. Origen del vino. Consonante, de las últimas,‐6: Quieres. Elevado,‐7: Penetra por la nariz. Dos vocales consecutivas,‐8: Aquí se celebraron JJ OO 2016. Hora del ,‐9: Al revés, hermana de una comunidad religiosa. Con falta de ortografía, poco acogedoras, desagra‐dables.  VERTICALES:,‐ 1: A veces nos desesperamos haciendo esto. Símbolo de elemento químico tóxico,‐2: Los tubérculos son una clase. Persona musulmana en expresión coloquial,‐3: Enfermera/o. Femenino, que no se portan bien,‐4: Lo que están muchos políticos, ‐5: Agencia de espio‐naje española. Consonante, de las del final. Los hay muy caudalosos,‐6: Primera letra.  Producto del monte muy apreciado en la cocina. Sin la última letra, famosa droga alucinógena‐7: Se dice cuando él es genero‐so. Ella no tiene compañía. Última parte del ABC.‐8: Entidad Gestora de la Seguridad Social, con cierto olor a salitre. Coloquial, glándula mama‐ria‐9: Objeto para andar. Terminación de internet de la Seg‐Social. 

Jeroglífico

Famosa frase que decían los franquistas hace muchos años

Esta viñeta fue publicada en la revista satírica “la Codorniz”, lo que provocó su cierre, aunque otras fuentes indican que esto no es más que una leyenda urbana. En todo caso es muy inge-niosa y ahora desde la distancia podemos esbozar una sonrisa. Publicaremos la solución en el próximo número

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