la noche de los asesinos
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Reseña sobre la obra de teatroTRANSCRIPT
LA NOCHE DE LOS ASESINOS
En este texto de José Triana, escrito en 1965 pertenece a lo denominado teatro
del absurdo.
En la obra, tres personajes juegan a matar a sus padres, parece que este juego se
ha repetido constantemente, pero el autor deja muy en claro que no se trata más
que de un juego.
Esta es la primera característica del absurdo que encontramos.
El juego como símbolo del deseo. El escenario planteado, un sótano también
simboliza el “encierro” en el que estos personajes se sienten inmersos.
Una de las cosas más relevantes en esta historia es que los personajes no son
niños, es decir su juego es una forma ritual de representar lo que para ellos se
quedó como un simple deseo.
Podemos pensar que los personajes son adultos que se encuentran estancados
en una etapa adolescente.
El teatro del absurdo tiene como interés lo humano de forma genérica, no habla en
lo particular de un solo personaje sino que usa a los personajes como símbolo de
la sociedad.
La noche de los asesinos, nos presenta la inconsciencia en la que tres personajes
están envueltos, la necesidad de victimizarse a través de volverse victimarios.
El deseo de seguir siendo niños y no asumir responsabilidades.
Es la forma de actuar de los personajes, y no su forma de pensar lo que convierte
la situación en absurda, semiinconsciente y semihumano como lo dice Martin
Esslin.
Se presenta una constante inconformidad que se convierte absurda cuando se
sostiene la conformidad dentro del argumento.
El juego sucede de noche pues de día todo continuará igual.
Así el teatro del absurdo se ha empeñado en hacer una crítica social que puede
llegar a cualquier esfera de cualquier sociedad.
Se trata de exponer al hombre en crisis con circunstancial esenciales y no
determinadas por su condición social o por su contexto histórico
El teatro del absurdo no trata de expresar verdades ni busca explicarlas,
simplemente trata de encontrar la condición humana y exponerla.
La noche de los asesinos presenta juegos que van de principio a fin con la misma
circunstancia aunque la obra completa no encuentre un avance pues el teatro del
absurdo no está buscando narrar historia sino presentar situaciones.
Lo que lleva al teatro del absurdo más allá del melodrama, cuya acción también
gira entorno a la situación, es a una consecuencia, ni se trata sobre una
cosmovisión específica.
La situación no determina a los personajes, la situación es un personaje.
Las imágenes por tanto, resultan mucho mas poderosas.