la formación de enfermeras en el peru

61
INTRODUCCION La historia de la Enfermería no se procesa en un espacio abstracto, ella se da de forma concreta en la sociedad, con sus determinantes económicos, políticos e ideológicos; Desde que en 1905 Miss Mand E. Carter y Miss Opper reprodujera en el Perú la formación de Enfermería modelo Nighingaliano en la Escuela Mixta de Enfermeros con la modalidad de internado, hoy Escuela Nacional Arzobispo Loayza donde recibía una formación básico para proporcionar los cuidados necesarios cuando éstos se encuentran con los enfermos. La Enfermería Peruana transcurre por un lento proceso de cambio en la formación, a nivel asistencial, en la investigación y la perspectiva administrativa, pero sin embargo la mayor complejidad de necesidades de los enfermos y los cuidados que precisan a las estancias hospitalarias, a las características estructurales, organizativas y funcionales, demanda de recursos humanos en los Servicios hace que haya la necesidad de clarificación del objeto – sujeto del conocimiento y gestionar los recursos hospitalarios de forma más eficiente.

Upload: mizagris

Post on 01-Dec-2015

49 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: La formación de enfermeras en el Peru

INTRODUCCION

La historia de la Enfermería no se procesa en un espacio abstracto, ella se da de

forma concreta en la sociedad, con sus determinantes económicos, políticos e

ideológicos; Desde que en 1905 Miss Mand E. Carter y Miss Opper reprodujera en

el Perú la formación de Enfermería modelo Nighingaliano en la Escuela Mixta de

Enfermeros con la modalidad de internado, hoy Escuela Nacional Arzobispo Loayza

donde recibía una formación básico para proporcionar los cuidados necesarios

cuando éstos se encuentran con los enfermos. La Enfermería Peruana transcurre

por un lento proceso de cambio en la formación, a nivel asistencial, en la

investigación y la perspectiva administrativa, pero sin embargo la mayor

complejidad de necesidades de los enfermos y los cuidados que precisan a las

estancias hospitalarias, a las características estructurales, organizativas y

funcionales, demanda de recursos humanos en los Servicios hace que haya la

necesidad de clarificación del objeto – sujeto del conocimiento y gestionar los

recursos hospitalarios de forma más eficiente.

Page 2: La formación de enfermeras en el Peru

LA ENFERMERÍA EN UN MUNDO DE TRANSFORMACIÓN

Las enfermeras monásticas Las mujeres de estos monasterios estaban

amparadas por la Iglesia, que proporcionaba libertad y seguridad para seguir

estudios intelectuales o intereses prácticos. Muchas mujeres famosas de la Alta

Edad Media estuvieron relacionadas con la vida monástica. Hildegarde, cuyos

conocimientos médicos y visión política fueron muy notables. Otras mujeres

asumieron la labor médica y de enfermería en los hospitales.

El cuidado de los enfermos era la tarea principal. Radegunda cuidó

personalmente a los pacientes en el hospital que había fundado. Era

particularmente sensible con los leprosos, que eran marginados sociales, y se la

vio besando sus cuerpos enfermos. No existen indicios de que hubiera médicos

relacionados con este hospital. Al parecer, los cuidados de enfermería eran la

base para la recuperación de la salud.

Santa Brígida se convirtió en una abadesa famosa en Irlanda, y era respetada

como erudita, educadora, consejera y experta en las artes de curación. También

se conocía por cuidar a los enfermos y haber curado leprosos. Se le dio el título

de “patrona de la curación”.

El islamismo Las enseñanzas de la mujer y de los niños, aunque tenían

licencia para la práctica de la medicina general. Los requisitos habituales de la

escuela de Salerno eran tres años de premedicina a nivel de escuela superior

para el estudio de la lógica, filosofía y literatura, cinco años de medicina y

cirugía y un año de práctica con un médico famoso. Hacia el año 1140 se dictó

una ley que prohibía la práctica de la medicina a quien no tuviera licencia. El

Régimen Sanitatis Salernitanum fue el trabajo más famoso de la escuela de

Salerno. Este poema latino, que contenía preceptos racionales sobre dietética e

higiene, ha sido objeto de numerosas versiones y más de 300 ediciones. 

Los hospitales medievales En la actualidad todavía perduran tres

hospitales medievales famosos que se construyeron fuera de los muros

monásticos: el Hôtel Dieu de Lyon, el Hôtel Dieu de París y el Hospital del Santo

Spirito de Roma. La información más completa sobre las cuestiones de

enfermería procede de los centros de Lyon y París.los primeros hospitales se

establecieron como xenodochiao casas de caridad y atendían a los necesitados

y desvalidos tanto como a los enfermos. 

Page 3: La formación de enfermeras en el Peru

El Hôtel Dieu de Lyon realizaba diversos trabajos caritativos aparte los propios

de la enfermería y estaba diseñado para recoger a peregrinos, huérfanos,

pobres, débiles y enfermos. Sus primeras enfermeras fueron mujeres laicas

reclutadas entre penitentes y viudas. Con el tiempo los hombres ayudaron en el

trabajo de enfermería. 

El Hôtel Dieu de París fue construido con una puerta abierta para todos los que

sufrían.comenzó como un pequeño hospital y creció hasta alcanzar proporciones

impresionantes. El Papa Inocencio IV organizó el grupo originario de mujeres

laicas que atendían a los enfermos como orden religiosa. 

Tanto los hermanos como las hermanas tenían asignadas actividades

específicas, entre las que figuraban el trabajo externo, la administración del

hospital, el cuidado de los enfermos y los servicios religiosos. Parte de la labor

de la enfermería la realizaban los hermanos en los pabellones generales,

mientras que en las salas de mujeres los cuidados de enfermería los impartían

exclusivamente las hermanas. Su función de enfermería incluía la admisión y el

alta del paciente, la responsabilidad sobre las cocinas y las lavanderías y el

entierro de los difuntos. Además, los ritos religiosos eran una parte esencial de

la rutina del hospital, con servicios tanto para los pacientes como para el

personal.

El Hospital del Santo Spirito de Roma probablemente fue el más grande de los

hospitales medievales. Fue construido con el propósito primordial de cuidar a los

enfermos. Se dice que en este hospital llegaron a prestar servicio más de 100

médicos y cirujanos. El Santo Spirito pronoto se convirtió en prototipo para el

desarrollo de otros hospitales medievales. 

Las órdenes militares de enfermería Las órdenes militares de enfermería

fueron una consecuencia de las Cruzadas a Tierra Santa. Si mencionan que se

construyeron y equiparon grandes hospitales y que los caballeros cuidaban de

los enfermos. Tan grande fue la influencia de estas órdenes en la enfermería

que Nutting y Dock dedicaron todo un capítulo de su Historia de la Enfermería al

origen y desarrollo de las mismas. Cuidar a los heridos y enfermos fue

importante para la organización y estructuración de los hospitales europeos y

para el modelo de servicio de enfermería que establecieron y normalizaron. La

acumulación de grandes riquezas y amplias extensiones de tierras provocó a la

larga su caída. Poco después de concluidas las Cruzadas, la devoción a la

Page 4: La formación de enfermeras en el Peru

llamada de la enfermería disminuyó, las obras de misericordia empezaron a

flaquear y la guerra contra los no creyentes se convirtió en el único objetivo.

Se formaron grandes ordenes, todas ellas designadas con el nombre de

Hospitalarios. Cuando no estaban en la batalla, ayudaban a cuidar a los

enfermos. Los hermanos sirvientes tenían como principal responsabilidad

atender a los viajeros cansados y cuidar a los enfermos. Tres de estas órdenes

de enfermería sobresalen como las más famosas e importantes de la historia:

los Caballeros Hospitalarios de San Juan de Jerusalén, los Caballeros Teutónicos

y los Caballeros de San Lázaro.

Los Caballeros Hospitalarios de San Juan de Jerusalén

Hacia el año 1050, un grupo de ricos comerciantes, fundó dos hospitales en

Jerusalén. Al principio estos hospitales atendieron a toda persona enferma, pero

durante la batalla de Antioquía por Jerusalén quedaron sobre saturados. Muchos

cruzados de noble cuna dejaron de lado sus armas para colaborar en el trabajo

de cuidar a los enfermos en el Hospital de San Juan. Al principio las mujeres se

encontraron en igualdad de condiciones frente a los hombres: todos cuidaban a

los enfermos, comían y asistían al culto juntos. La reparación fue total, y las

hermanas quedaron subordinadas a la orden masculina. La orden se enriqueció

enormemente debido a las donaciones de los benefactores agradecidos, lo que

permitió la construcción de nuevos hospitales, hostales y asilos. Se elaboraron

normas que fueron seguidas por los mejores hospitales urbanos de Europa

durante muchos siglos.

El curso de esta orden se distinguió por su labor en el campo de la enfermería

hasta la expulsión de los cristianos de Palestina. La enfermería se fue dejando

de lado, pues las hermanas de San Juan desaparecieron temporalmente. Con la

conquista de Rodas, el cuidado de los enfermos se convirtió en un objetivo

secundario. El significado de esta organización en la historia de la enfermería

fue enorme.

El más grande e importante de los numerosos hospitales de la orden fue el

fundado en 1575 en la ciudad portuaria de La Valetta, Malta. En sus primeros

tiempos este hospital fue un modelo para toda Europa. Cuando lo visitó John

Howard en 1786 estaba sumido en un estado de gran deterioro. El hospital, que

sigue siendo un magnífico monumento arquitectónico, acomodó originariamente

a algo menos de cien pacientes. Una estructura organizativa bien definida

Page 5: La formación de enfermeras en el Peru

proporcionaba jefes de departamento, enfermería, limosnas, distribución de

alimentos a los pobres, remiendo de ropas y cuidado de niños. Los casos agudos

y los pacientes con hemorragia, litotomía y demencia permanecían aislados.

Médicos remunerados ayudaban a los caballeros en las cuestiones de anatomía

y en el cuidado de las enfermedades.

Los caballeros Hospitalarios intervinieron en Europa durante los periodos de

guerra, conducían ambulancias y llevaban otros servicios médicos. “Pero sus

funciones originarias han sido adoptadas y ampliadas durante el último siglo por

la Cruz Roja”. La orden perdura en las Hermandades de San Juan y en los

cuerpos de ambulancias y primeros auxilios. Aún pueden admirarse los edificios

de los hospitales que fundaron los Caballeros de San Juan en Rodas y Malta.

La Cruz Maltesa, se convirtió en parte de la insignia de muchos grupos

dedicados al cuidado de los enfermos. Las ocho puntas de la cruz significan las

ocho virtudes que los caballeros debían ejemplificar en las tareas de caridad de

su vida cotidiana:

Goce espiritual.

Vivir sin malicia.

Arrepentirse de los pecados.

Humillarse ante los que te injurian.

Amar la justicia.

Ser misericordioso.

Ser sincero y puro de corazón.

Sufrir la persecución con abnegación. 

Los Caballeros Teutónicos Durante la Tercera Cruzada los peregrinos

alemanes instalaron un hospital provisional junto a las murallas de Acre. Los

Teutónicos siguieron las normas hospitalarias de los Caballeros de San Juan y la

estructura militar de los Templarios. Tomaban los tres votos habituales de

pobreza, castidad y obediencia, pero añadían un cuarto que los obligaba a

cuidar a los enfermos y defender la fe. 

En Alemania se fundó una orden de mujeres para realizar específicamente

Page 6: La formación de enfermeras en el Peru

tareas hospitalarias. Es posible que sus obligaciones de enfermería se

consideraran de poca categoría.

Los Caballeros Teutónicos adquirieron gran poder y muchos hospitales fueron

puestos en sus manos. 

Las órdenes seglares de enfermería Hicieron grandes contribuciones a

la enfermería y sirvieron a los enfermos, los pobres, los abandonados y los

huérfanos. También ejercieron la enfermería hospitalaria. El desarrollo de estas

órdenes marca un hito de suma importancia en la secularización de la

enfermería.

Otra orden fue la de los Antoninos (1095) sus miembros se dedicaron a los

afectos del “fuego de San Antonio”, que probablemente era la enfermedad del

ergotismo. Se erigieron hospitales para las víctimas de este proceso. 

Las Beguinas de Flandes constituyeron una de las órdenes seglares de

enfermería más prominentes. 

La organización era extremadamente simple. De dos a cuatro mujeres vivían

juntas en pequeñas casas construidas en un recinto cerrado y agrupadas

alrededor de una iglesia u hospital. Resulta difícil describir adecuadamente el

trabajo de estos beguinajes debido a su gran diversidad. 

Iniciaron un servicio domiciliario de enfermería y fijaron una cuota si la familia

era solvente. El trabajo hospitalario se convirtió en uno de sus intereses

primordiales, lo que dio lugar a la creación de sus propios hospitales, donde

ejercía la enfermería. También servían como enfermeras en los campos de

batalla. En la actualidad las Beguinas mantienen una existencia corporativa en

Bélgica. 

El crecimiento de los hospitales  La idea de los hospitales urbanos fue

acogida con apoyo y aprobación, y en algunos casos los hospitales pasaron de

forma amistosa del control eclesiástico al seglar. Aumentó rápidamente el

número de hospitales. Varios factores contribuyeron a la demanda de más

hospitales: los hospitales existentes se habían organizado como orfanatos,

hostales para viajeros y enfermos y casa de caridad; las enfermedades

contagiosas eran incontrolables. En general, los hospitales se edificaban para

cuidar a los enfermos pobres. 

Page 7: La formación de enfermeras en el Peru

Las prácticas de administración e higiene variaban de un hospital a otro; a veces

eran buenas y otras no. Los cuidados de enfermería se dispensaban las 24 horas

al día. Con el paso de los siglos, no siempre hubo una dotación suficiente de

enfermos. Se generalizó la práctica de emplear a individuos de poco carácter

para aumentar la dotación de personal de enfermería... Era el primer atisbo de

decadencia en la enfermería, decadencia que acabaría por producirse y que

persistía durante un largo y terrible periodo. 

El primer hospital británico fue el de York. También era una casa de caridad y

tenía un pabellón para leprosos. La enfermería de estos hospitales la ejercían

mujeres de noble cuna, que además practicaban la enfermería vecinal en los

hogares de los pobres. La organización de estos incluía ambos tipos de servicio

de enfermería.

Las epidemias y las placas Durante el siglo XIV, una enfermedad

catastrófica, la Muerte Negra, la peor fue la de 1348. Se cree que se originaba

con la picadura de un parásito infectado. Aunque en principio se trata de una

enfermedad de roedores, las ratas, puede ser transmitida al hombre por pulgas

alimentadas por roedores. El contacto directo con una persona infectada

también puede transmitir la enfermedad. Las ratas de barcos diseminaron la

enfermedad por la mayor parte de Europa. El nombre de Muerte Negra se

justificaba por que debajo de la piel aparecían unas hemorragias oscuras. El

brote de peste bubónica se considera como una de las crisis más devastadoras

que haya azotado jamás a la humanidad. Hizo cundir el pánico entre la gente. 

Por esa misma época se inició la enfermedad del sudor. Se cree que esta

virulenta enfermedad pudo ser la gripe. Gran número de personas moría al día o

a las pocas horas de haber experimentado los primeros síntomas. Su aparición

se acompañaba de escalofríos, fiebre, jaqueca, estupor, dolor precordial,

vómitos, fatiga y sudación profusa. Algunos de los cuidados aceleraban el fin del

paciente. Se cerraban puertas y ventanas, se encendía fuego y se le cubría con

pieles. A tal efecto se utilizaban diversas técnicas, como azotar el cuerpo con

ramas o dejar caer gotas de vinagre en los ojos. El paciente era “cocido hasta la

muerte”. 

LA ENFERMERÍA EN TRANSICIÓN

Page 8: La formación de enfermeras en el Peru

Los hospitales y los reformadores El resultado inmediato de la disolución

monástica fue que la gente se quedó sin hospitales y posadas de los que había

dependido durante muchos años. Siguió un periodo de rápido deterioro en el

cuidado de los enfermos y de los pobres. Se produjo un declive en la calidad del

servicio público, en particular para los enfermos. En esta época de insensibilidad

y brutalidad, ni los gobernantes ni los médicos se preocuparon lo más mínimo

por elevar la enfermería o mejorar las condiciones de los hospitales. 

La decadencia de los hospitales Las pugnas religiosas no tuvieron un

efecto directo sobre los hospitales en los países católicos, como España e Italia.

Sin embargo, en los protestantes se cerraron numerosas instituciones pequeñas

al suprimirse las órdenes de la enfermería. Un utilitarismo austero sustituyó a la

belleza que anteriormente había prevalecido en la construcción de los centros

para enfermos. 

Las condiciones insalubres predominantes en estos hospitales dieron lugar a

grandes brotes epidémicos. No era extraño que se echara a los enfermos en

camas ya ocupadas por otros pacientes; los muertos y los delirantes,

posiblemente juntos, al lado de los que todavía vivían y conservaban la razón.

Las camas estaban tan próximas entre sí que la limpieza se hacía casi

imposible. Debajo se podía encontrar todo tipo de inmundicias. El aseo de los

enfermos ni se intentaba; las sangrías y las purgas eran los tratamientos

habituales para cualquier dolencia. Las mujeres perdieron el control de la

enfermería. Éste fue uno de los periodos de la historia de la enfermería en que

la supremacía masculina fue más absoluta y generalizada. Las enfermeras

típicas eran la escoria de la sociedad, personas inmorales, alcoholizadas y

analfabetas. 

Se requería ayuda para salir de la situación en la que se encontraba la

enfermería, y el interés público por su progreso empezó a hacerse patente entre

diversos grupos. Esta preocupación de la sociedad dio como resultado el inicio

de una serie de cambios significativos que llevarían a la reforma estable de la

enfermería. 

El nacimiento de la enfermería moderna Las órdenes de las diaconisas

que habían existido en la época de Cristo fueron reavivadas por las iglesias

protestantes durante el s. XIX. El cuidado de los enfermos se convirtió en su

principal deber. Kaiserswerth se le atribuye la creación de la primera orden

moderna de diaconisas.

Page 9: La formación de enfermeras en el Peru

Este instituto dejó una huella indeleble en toda la enfermería. Influyó a Florence

Nightingale. El pastor Fliedner, en 1828 se casó con Friederike Münster. El

matrimonio centró su atención en el cuidado de los enfermos y abrió un

pequeño hospital con una escuela de formación de diaconisas. Su primera

diaconisa, Gertrude Reichardt, hija de un médico, ingresó en 1836. A finales del

primer año otras seis mujeres se le habían unido para recibir formación. Se las

enviaba a cumplir tareas de distrito, hospitales o privadas, o bien a lejanos

campos de misión. 

El movimiento del instituto se extendió rápidamente que se tuvieron que

adquirir otras dos casa anexas, e incluso tuvo que reconstruirse el propio

instituto, que resultaba demasiado pequeño para albergar a las diaconisas. El

programa de enfermería incluía una rotación por los servicios clínicos

hospitalarios, formación de enfermería domiciliaria, aprendizaje teórico y

práctico del cuidado de los enfermos, conocimientos de ética y doctrina religiosa

y un nivel suficiente de farmacia para superar los exámenes estatales para

farmacéuticos. Duraba tres años. El principio de que las enfermeras debían

cumplir exactamente las órdenes del médico y que éste era el único

responsable del resultado. 

La estructura de organización evolucionó, se dividieron en cuatro áreas:

enfermería, ayuda a los pobres, cuidado de los niños y trabajo de auxilio a las

mujeres presas y las “Magdalenas”. Friederike falleció en 1842. Fliedner se casó

con Caroline Bertheau (1811-1892), quien había ejercido durante 3 años como

superintendente del departamento de cirugía de mujeres del Hospital de

Hamburgo. Su experiencia de enfermería resultó muy valiosa para la

continuación del trabajo del instituto. 

La revolución Nightingale Biografía. Florence Nightingale nación en 1820,

en Hampshire, hija de una familia terrateniente adinerada. A los 23 años, dijo a

sus padres que quería convertirse en una enfermera y se encontró con una

sólida oposición de ellos, ya que la enfermería se asociaba con mujeres de clase

trabajadora.

En 1851 Florence recibió permiso para entrenarse como enfermera. Entonces,

con treinta y un años se fue a trabajar al hospital de Kaiserworth en Alemania.

Page 10: La formación de enfermeras en el Peru

En 1852 escribió pero nunca publicó: “Se supone que las mujeres no

deben tener una ocupación suficientemente importante para no ser

interrumpida... Ellas se han acostumbrado a considerar la ocupación intelectual

como un pasatiempo egoísta, y es su “deber” dejarlo para atender a cualquiera

más pequeño que ellas”. 

Dos años más tarde, fue nombrada directora residente del hospital para mujeres

inválidas en Harley Street, Londres. El año siguiente, Florence Nightingale fue

autorizada para llevar a 38 enfermeras a cuidar a los soldados británicos en la

guerra. Allí encontró que las condiciones del hospital militar Scutari eran

alarmantes. Los hombres eran mantenidos en cuartos sin sábanas ni comida

decente. En estas condiciones no era sorprendente que en los hospitales

militares, heridas de guerra era sólo la sexta razón de defunción. Enfermedades

como el tifus, cólera y disentería eran las tres causas principales por las cuales

la proporción de muertos era tan elevada.

Durante este tiempo, Florence Nightingale recolectó datos y sistematizó la

práctica del control de registros. Inventó un gráfico de área polar (lo veremos

más adelante), donde las estadísticas representadas son proporcionales al área

de una tajada en un gráfico circular. Esta información fue su herramienta para

promover la reforma. Sus cálculos sobre la tasa de mortalidad mostraron que

con una mejoría en los métodos de sanidad, las muertes descenderían. 

Florence Nightingale recibió muy poca ayuda de los militares, hasta que utilizó

sus contactos con el Times, para reportar la información. Entonces se le

encomendó la tarea de organizar las barracas del hospital después de la batalla

de Inkerman y al mejorar las condiciones de sanidad, logró reducir la proporción

de muerte de sus pacientes.

En 1856 Florence Nightingale regresó a Inglaterra como una heroína nacional, y

decidió empezar una campaña para mejorar la calidad de la enfermería en los

hospitales militares. Su evidencia en la Comisión de Sanidad de 1857 resultó en

la formación de una universidad médica militar.

Para dispersar sus opiniones sobre la reforma, publicó dos libros: Notas de

Hospital (1859) y Notas de Enfermería (1859). Con el apoyo de amigos

adinerados y The Times, Florence Nightingale pudo reunir £59,000 para mejorar

la calidad de la enfermería. En 1860 utilizó este dinero para fundar la Escuela y

Casa para Enfermeras Nightingale en el Hospital St. Thomas. También se

involucró en el entrenamiento de enfermeras que trabajaban en “casas de

Page 11: La formación de enfermeras en el Peru

trabajo”, como resultado de una ley en protección de los pobres, de 1834.

Nightingale tenía fuertes opiniones sobre los derechos de las mujeres. En su

libro Sugerencias para pensar para los buscadores de las verdades religiosas

(1859), argumentó fuertemente para que se eliminaran las restricciones que

prevenían a las mujeres de tener carreras.

Posteriormente en su vida, sufrió de mala salud, y en 1985 se volvió ciega.

Luego perdió otras facultades, lo cual significó que tuviera que percibir cuidados

a tiempo completo. A pesar de estar completamente inválida, vivió otros 15

años antes de su muerte en 1910.

El Diagrama de Área Polar. De acuerdo con la imagen que se muestra a

continuación y en función del texto que se localiza en la esquina inferior

izquierda, cada una de las áreas azules, rojas, y las secciones negras, están

medidas utilizando el centro como vértice común. Las secciones azules medidas

desde el centro del círculo representan, área por área, las muertes por

enfermedades Zymoticas, desde prevenibles hasta mitigables.

Las secciones rojas medidas desde el centro representan las muertes de

heridas. Las secciones negras medidas desde el centro representan las muertes

por otras causas.

La línea negra que cruza el triángulo rojo en Noviembre de 1854 marca el límite

de las muertes debidas a todas las otras causas durante ese mes. 

En octubre de 1854 y abril de 1855, el área negra coincidió con el rojo. En enero

y febrero de 1855, el azul coincidió con el negro.

Las áreas completas pueden comparase siguiendo las líneas limítrofes del azul,

el rojo y el negro.

El nacimiento de la Cruz Roja Otro estímulo para la reforma de la

enfermería culminó con la creación de la Cruz Roja internacional. Su fundador

fue J. Henri Dunant. Deprimido al comprobar la falta de servicios médicos reclutó

a gente de la localidad para que proporcionara la ayuda o cuidados de

enfermería que le fuera posible. A continuación hizo un llamamiento a varios

gobiernos europeos para crear un organismo internacional que brindara ayuda

voluntaria de enfermería en los campos de batalla. 

Page 12: La formación de enfermeras en el Peru

En 1862 publicó el famoso Recuerdos de Solferino, que contenía la idea

embrionaria para el nacimiento de la Cruz Roja. 

Todos los gobiernos acordaron honrar a las enfermeras de la Cruz Roja como no

combatientes y respetar sus hospitales y demás instalaciones. 

El escenario cambiante de la enfermería

El descubrimiento de nuevos fármacos, nuevas técnicas y tecnologías han

acrecentado las responsabilidades de las enfermeras y ha obligado a introducir

modificaciones radicales en los cuidados de enfermería. El cuidado del paciente

de hoy plantea retos diferentes a los que tuvo que afrontar Florence Nightingale,

puesto que a las enfermeras actuales se les exige efectuar tareas que antaño

realizaron los médicos. Antes de la década de los años treinta la mayor parte de

los cuidados de enfermería corrían a cargo de los estudiantes. Incluía una gran

variedad de tareas que nada tenían que ver con la profesión. A los estudiantes

se les dejaba poco tiempo para poder proporcionar un cuidado de enfermería

adecuado. 

Hacia los años cuarenta las enfermeras ya llevaban a cabo muchas más tareas y

procedimientos como resultado de la introducción de profundas innovaciones en

los cuidados de salud. Cada vez eran más las personas ingresadas en los

hospitales para someterse a nuevos tipos de pruebas, ya que estas instituciones

se habían convertidos en lugares seguros y eficaces. En Enfermería para el

futuro, se realizaban más de cien tipos de prácticas diferentes. 

A lo largo dl siglo XX hubo periodos de escasez dentro de la enfermería. Muchas

se negaron a participar en una estructura laboral que ofrecía pocas

recompensas, muchas horas, trabajo físico arduo y salarios muy bajos. 

A esta situación se sumaron otros acontecimientos significativos que llevaron al

desarrollo paulatino de un nuevo modelo de organización para los cuidados

hospitalarios. El éxito demostrado de las salas de reanimación en el frente

durante la II Guerra Mundial se tradujo en la creación de unidades especiales

para el cuidado de los pacientes. Se establecieron salas de posanestesia y

recuperación para prevenir las complicaciones del posoperatorio. De esta forma

fue posible establecer una progresión de la unidad de cuidados intensivos a la

Page 13: La formación de enfermeras en el Peru

intermedia, a la de autocuidados, a la de cuidados a largo plazo y la de cuidados

a domicilio. Este desarrollo de unidades de tipo específico obliga a contar con

algún tipo de enfermería especializada y alteraba la razón enfermera-paciente

en algunas áreas, lo cual contribuyó a acentuar todavía más la carencia de

profesionales. 

La calidad de los cuidados de enfermería y la satisfacción del paciente fueron

decreciendo, ya que cada vez eran menos las enfermeras profesionales tituladas

que atendían directamente a los enfermos. El trabajo estaba coordinado, pero el

cuidado de enfermería estaba fragmentado. Tuvo consecuencias graves debido

a los continuos avances dentro de los procedimientos diagnósticos y

terapéuticos y al desarrollo de tecnología cada vez más sofisticada. Los años

cincuenta y sesenta supusieron una época de revolución para los cuidados de

salud. 

La necesidad de un enfoque distinto de los cuidados de enfermería, uno que

proporcionara tanto calidad como atención integral al enfermo. En los años

setenta se acorta las distancias entre la enfermera profesional y el paciente. En

el Hospital de Nueva York su finalidad global es proporcionar cuidados de

enfermería continuos y de calidad con el fin de favorecer la curación, prevenir

las complicaciones, promover la salud y evitar las recaídas y las nuevas

enfermedades. Los cuidados de enfermería los imparten exclusivamente

enfermeras profesionales en un contexto que fomenta el traslado del paciente

del hospital general al hogar. La enfermera es el factor primordial en el cuidado

de los pacientes y coordina los esfuerzos combinados del enfermo, la familia y

los suyos propios para resolver los problemas que pudieran obstaculizar la

recuperación total. La medicina se consideran como un tratamiento secundario.

En esta estructura se da por supuesto que se necesitan menos cuidados

médicos y más cuidados y formación de enfermería. Se iniciaron hospitales de

cuidados agudos. Las enfermeras vieron frustrados sus esfuerzos por un

personal inadecuado, el énfasis puesto en la eficiencia y la falta de

consideración hacia las tendencias del paciente.

En los años setenta empezó a hacerse realidad la meta combinada del cuidado

de enfermería por parte de enfermeras profesionales y el cuidado integral del

paciente con la aparición de la enfermería primaria. La enfermera primaria es

responsable 24 horas al día, siete días por semana. Los cuidados de enfermería

primaria asumen la responsabilidad de toda la gama de funciones incluyendo la

educación, consultas, cuidados exhaustivos y continuos, planificación y

valoración de los cuidados, documentación del progreso, planificación del alta y

Page 14: La formación de enfermeras en el Peru

remisión a los servicios e instituciones secundarias. Las enfermeras pueden

actuar como abogadas del paciente, responder de su propia práctica y tomar

decisiones basándose en los datos disponibles.

La enfermería primaria ha ido ganando popularidad, su éxito depende de la

existencia de personal suficiente, del apoyo de la administración y de concurso

de enfermeras preparadas técnica y educativamente.

Algunas enfermeras primarias se dedican actualmente a la práctica privada o

comparten una consulta con un médico.

Aunque se han dado grandes pasos en la enfermería, los problemas siguen

vigentes. Las condiciones de trabajo y los entornos siguen siendo fuentes de

conflicto. Las enfermeras están expresando sus preocupaciones por la falta de

personal, los bajos salarios, las largas horas de servicio, las prácticas peligrosas,

la imposibilidad de utilizar los propios conocimientos, juicios y tomas de

decisiones y otras circunstancias que les impiden proporcionar unos cuidados de

enfermería de alta calidad.

De las enfermeras actuales se esperan que sean demasiadas cosas para tanta

gente y que funcionen en una gran variedad de contexto. Deben ser excelentes

cuidadoras, investigadoras capacitadas, eruditas y pensadoras basadas en el

razonamiento científico y lógico. Se ven envueltas en avances científicos y

técnicos y en nuevos papeles, que han ampliado sus oportunidades pero que al

mismo tiempo han multiplicado en alcance de sus responsabilidades.

Investigación y teoría de la enfermería

Las “escuelas de formación” estadounidenses no favorecían el desarrollo del

pensamiento crítico ni la resolución de problemas. No se daba a las mentes

inquietas una disciplina rígida y una obediencia incuestionable. En la escuelas

de enfermería, reducían el individualismo, la creatividad, el pensamiento crítico

y la confianza. Servían para colocar a las estudiantes y enfermeras graduadas

en un papel de sumisión, y así permanecieron durante muchos años.

La enfermería no era propicia para la investigación, como tampoco había

enfermeras preparadas para emprenderla. La necesidad de la investigación de

enfermería ya fue reconocida por las primeras dirigentes, que se

comprometieron con el método científico de recoger e interpretar datos para

generar nuevos conocimientos tendentes a mejorar los cuidados de enfermería. 

Page 15: La formación de enfermeras en el Peru

Una serie de acontecimientos acabaron por conducir al compromiso firme de

incorporar la investigación de enfermería a la estructura global de la profesión.

La Association of Collegiate Schools of Nursing (ACSN) patrocinó un foro especial

sobre investigación de enfermería en 1941. La Cámara de Delegados de la ANA

aprobó un programa de investigación en 1950. Este programa estaba diseñado

como un proyecto a largo plazo para estudiar:

Las funciones de la enfermería en distintos contextos y zonas geográficas.

La relación de las enfermeras con sus compañeros de trabajo y asociados.

El lanzamiento de la revista Nursing Research en 1952 fue un reflejo de la

promoción y la comunicación de la investigación en enfermería. En 1955 se creó

la American Nurses' Fundation como corporación miembro de la ANA. Esta

fundación proporciona becas de investigación a las enfermeras graduadas para

proyectos científicos y educativos; llevar a cabo estudios, revisiones e

investigaciones; proporcionar becas a las instituciones educativas públicas y

privadas sin fines lucrativos, y publicar trabajos científicos, educativos y

literarios.

Entre 1940 y 1956, el Departamento de Salud, Educación y Bienestar concedió

pequeñas becas a múltiples personas por diversos proyectos de investigación.

En 1956, en la División de Recursos de Enfermería de los Servicios de Salud

Pública de los Estados Unidos se formó un programa externo de becas para la

investigación de enfermería. Se concedieron premios en metálico a los

investigadores cualificados por sus proyectos. Fue la primera vez que ponían

becas con fondos federales para la investigación de enfermería. También en

otros dos ámbitos: a través de unas ayudas especiales de predoctorado creadas

por la División de Recursos de Enfermería, y a través de becas de formación de

enfermeras-investigadoras graduadas. En los años 70 se logró la integración de

la investigación de enfermería en todos los programas colegiados de formación.

El valor de la investigación de enfermería se irá haciendo cada vez más

importante conforme la enfermería siga avanzando hacía la condición de

profesión y de excelencia de ejecución. La investigación tendrá como resultado

el asentamiento de la calidad de los cuidados. Las formas más eficientes y

eficaces de la enfermería se pueden identificar a través de la investigación.

La necesidad de contar con teorías de la enfermería y poderlas desarrollar

Page 16: La formación de enfermeras en el Peru

fueron cuestiones destacadas en la década de los 70.

La enfermería comienza a ser reconocida como una ciencia legítima, aunque

sigue siendo necesario un impulso continuado para alcanzar esta meta. Los

esfuerzos unidos de las estudiantes y de las practicantes de la enfermería son

indispensables para poder identificar la base de conocimientos de la enfermería

y formular una teoría o teorías que sustancien la práctica profesional.

Los avances en la formación El desarrollo de los programas universitarios

de enfermería se inició con los estudios de diplomado. La falta de enfermeras

preparadas para puestos de docencia y administración era evidente. La Dra.

Louise Fitzpatrick (1983) describe las siguientes cuatro fases:

Orígenes: 1939-1952. Esta fase se relaciona con la dificultad de rastrear el

desarrollo de los programas de formación de las enfermeras. Sin embargo, se

estaban produciendo varios acontecimientos importantes. Los programas de

diplomado de diferentes tipos iban en aumento.

Etapa de transición: 1953-1964. Fue durante estos once años cuando la

licenciatura fue reconocida como el nivel avanzado de la formación de

enfermería. Se formularon unas pautas de organización, administración, plan de

estudios y examen y se creó un Subcomité de Formación de Graduación de

Enfermería (de la NLN). En los años 80 se está volviendo a producir una nueva

tendencia al ir ganando importancia la posición favorable a doble preparación. 

Regionalización. La planificación regional de la formación de diplomados se

inició en la década de los 50 con la creación de dos organizaciones: el Southern

Regional Educational Board (SREB) y la Western Interstate Commission on

Higher Education (WICHE). Ambas se dedicaron a conseguir una mejora de la

enfermería mediante programas de licenciatura más fuertes para preparar al

profesorado. 

Maduración de la licenciatura: 1964-1975. La licenciatura de enfermería maduró

y se convirtió en una acreditación importante para las enfermeras que

ostentaban puestos directivos en aquellos años. Interés por la investigación y

una expansión del número de programas de diplomados dentro de las

especialidades clínicas. El Acta de Formación de Enfermeras de 1964

proporcionó una asignación financiera amplia para la construcción, desarrollo

del profesorado, becas para las estudiantes y préstamos. 

Page 17: La formación de enfermeras en el Peru

El grado de licenciatura se ha asentado firmemente en la estructura de la

formación de enfermería. Es evidente la revaloración de la formación, ya que el

número de enfermeras que obtiene el grado de licenciatura está aumentando

rápidamente. 

Hubo otros factores que inhibieron el crecimiento rápido de la preparación de

doctorado para las enfermeras: la enfermería se percibía exclusivamente como

una disciplina práctica; existía temor a que las enfermeras fueran eruditas y

supusieran una amenaza para las jerarquías médicas; el crecimiento retardado

de los programas de licenciatura dio lugar a una promoción inadecuada de

candidatas al doctorado hasta los años 60; la naturaleza, orientación y dirección

del doctorado de enfermería no se habían definido claramente, y faltaba un

cuerpo de conocimientos científicos.

El primer Doctorado en Ciencias de la Enfermería dentro de la rama de

enfermería psiquiátrica se inició en la Boston University en 1960. La pedagogía

era la disciplina más popular.

Los argumentos de Grace (1978) sobre la evolución de ciertos tipos específicos

de programas de doctorado dentro de la enfermería. El primer tipo era el de la

especialidad funcional, que subraya la base de metodologías y conocimientos

necesarios para la enseñanza y la administración. El segundo tipo implicaba la

preparación dentro de disciplinas científicas básicas sobre las que se apoyan la

ciencia y el arte de la enfermería.

En la actualidad se ofrecen dos programas de doctorado en enfermería: el

Doctorado Médico, o doctorado académico, que hace hincapié en la

investigación de enfermería, y el Doctorado en Ciencias de la Enfermería, o

doctorado profesional, que se centra especialmente en la práctica de la

enfermería.

La era de la especialización  El concepto de especialidades de enfermería

era literalmente desconocido antes de la influencia de Florence Nightingale y el

surgimiento de la enfermería moderna. Se esperaba que cada enfermera se

ocupase del paciente sin tener en cuenta el tipo de enfermedad que justificaba

los cuidados. Los enfermos no fueron separados por enfermedades hasta las

primeras décadas del siglo XX. Puede que este cambio fuera el factor

desencadenante del movimiento del movimiento de la especialización, ya que

los pacientes eran colocados en áreas específicas de acuerdo con los

Page 18: La formación de enfermeras en el Peru

diagnósticos médicos. Sin embargo, hasta la II Guerra Mundial la de las

enfermeras trabajaba como personal de enfermería general en los hospitales,

como enfermeras de salud pública o como enfermeras de instituciones

privadas. 

Con el tiempo, la tendencia hacia las unidades de cuidados especializados fue

cobrando importancia, y con ella evolucionaron dos papeles de enfermería: El

papel extendido: se refiere a un médico extensor con una orientación de

practicante; el médico mantiene la autoridad y el poder de tomar decisiones. El

papel ampliado: es un ensanchamiento de la enfermería orientado a los

cuidados en el cual la enfermera colabora con el médico cuando está indicado.

Las primeras especialidades de enfermería surgieron a finales del s. XIX y

principios del XX: la enfermera partera y la enfermera anestesista. La formación

de las enfermeras parteras fue una respuesta directa a la necesidad de mejorar

los cuidados materno infantiles, a la práctica incontrolada de comadronas sin

preparación y a la falta de tocólogos en las zonas rurales más pobres. El papel

de enfermera anestesista surgió como parte de la creciente sofisticación de la

cirugía, cuando se reconoció que se necesitaban ayudantes preparados para

administrar los anestésicos. Ya no resultaba seguro ni satisfactorio tener a

estudiantes de medicina o ayudantes sin preparación administrando la

anestesia. En la actualidad siguen vigentes los mismos tipos de luchas por la

especialización de enfermería. 

Ya desde un principio otra enfermera especialista que merece mención: la

enfermera de empresa. Esta especialidad surgió como respuesta a los riesgos y

condiciones anormales de salud de las tiendas, fábricas y demás campos del

trabajo industrial. Ado Mayo Stewart fue la primera enfermera de esta

especialidad. El crecimiento de la enfermería de empresa fue lento hasta el

auge repentino de la industria de defensa durante la II Guerra Mundial. Entonces

se empezó a contratar rápidamente enfermeras para todo tipo de plantas de

fabricación, una práctica que, en la mayoría de los casos, se continuaría

después de la guerra. 

La década de los sesenta, fue testigo de otro período de notable crecimiento de

la especialización de la enfermería, que ha continuado hasta la actualidad. En

los hospitales se desarrollaron todo tipo de campos de especialidad (unidades

de cuidados coronarios, unidades de cuidados intensivos quirúrgicos y médicos,

unidades de quemaduras, unidades de diálisis, unidades de oncología), que

obligaron a un cambio en los papeles de le enfermería. Determinaron que la

enfermería empezase a experimentar con el papel de “especialista clínica” o

Page 19: La formación de enfermeras en el Peru

“enfermera clínica”. Este nuevo concepto permitió que las enfermeras utilizaran

su saber para la práctica de la enfermería avanzada. De nuevo, los esfuerzos de

la enfermería se vieron parcialmente coartados, ya que a menudo las

administraciones de los hospitales no estaban dispuestas a pagarpor dichos

servicios y asignaban tales responsabilidades a la supervisora o a la enfermera

de plantilla especializada. De estas forma se prohibía o impedía que la

especialista ejerciera un papel clínico. Todavía no se han podido vencer todos

los obstáculos interpuestos a esta función, aunque actualmente las especialistas

clínicas ya operabaan en diversos tipos de emplazamientos, incluyendo

hospitales, instalaciones ambulatorias, junto con médicos independientes o en

grupos y en consultas privadas o conjuntas con otras enfermeras especialistas

y/o médicos. En 1954 Hildegard E. Peplau desarrolló el primer programa con

nivel de graduación para la preparación de especialistas clínicas en la Rutgers

University; el área de especialidad del programa era la enfermería psiquiátrica. 

En este periodo también se introdujo la “enfermera práctica” como resultado de

una demostración específica subvencionada por la Fundación Commonwealth en

la University of Colorado en 1965. El Dr. Henry Silver, pediatra y la Dra. Loretta

Ford, enfermera de salud pública de dicha universidad, colaboran en la

empresa. Este proyecto de demostración dio lugar a la creación de un programa

de enfermería práctica en pediatría que capacitaba a las enfermeras para

impartir cuidados generales a los niños sanos en un contexto ambulatorio.

Además, a las enfermeras se les enseñaba a emitir juicio sobre las

enfermedades graves o crónicas de los niños y a ejercer como practicantes en

urgencias infantiles. Uno de los efectos de estas innovaciones fue el desarrollo

de numerosos nuevos títulos dentro de la enfermería, como enfermería clínica,

especialista en enfermería clínica y enfermera práctica. Todos ellos diferían en

su significado, en los requisitos de formación y en las funciones a desempeñar.

Es evidente que falta una estandarización de los títulos, como demuestra la lista

de más de 80 titulaciones de enfermería práctica confeccionada por Gripando.

Además en la actualidad existen unas 27 organizaciones que representan a

diversos tipos de práctica especializada de enfermería, y la lista sigue

aumentando. 

LA REALIDAD DE LA FORMACION DE LA ENFERMERA EN AMERICA LATINA

La creación de escuelas de enfermería en América Latina coincidió con el desarrollo

de la medicina a cargo de instituciones gubernamentales y la incorporación de la

atención médica, o sea el cuidado de los enfermos individuales, como su principal

quehacer.

Page 20: La formación de enfermeras en el Peru

La expansión del papel de la enfermería en el campo de la salud pública,

ocurrida posteriormente, ha estado estrechamente vinculada a las acciones de

control de las enfermedades transmisibles y del saneamiento ambiental. Así en

1945, no más del 5% de las escuelas de enfermería en América Latina incluían

en su currículo la experiencia en salud pública y el 75% de ellas no consideraba

la prevención y el control de las enfermedades transmisibles.

Fue gracias a la cooperación técnica prestada por organizaciones

internacionales —como la Organización Panamericana de Salud, la Fundación

Rockefeller y el Instituto de Asuntos Interamericanos—, que en 1959 el 85.7%

de dichas escuelas empezaron a incluir dentro de su currículo elementos básicos

de salud pública y el 88.3% de ellas, la prevención y el control de enfermedades

transmisibles.

Estos cambios importantes en la preparación de las alumnas de enfermería

coincidieron con el creciente desarrollo de la medicina preventiva en los países

latinoamericanos, aún cuando por algunos años los servicios preventivo

promocionales de salud funcionaron en centros apartados de los

establecimientos que brindaban servicios de recuperación de la salud.

Consciente de la importancia de la enfermería en el desarrollo de los

servicios de salud en América, la Oficina Sanitaria Panamericana en cuanto pudo

contar con personal de asesoras en enfermería, inicialmente comisionadas por

el Servicio de Salud Pública de los EE.UU., colaboró con los gobiernos miembros

en la solución de tres aspectos de la enseñanza: la enfermería básica, la

enfermería posbásica y la capacitación de los auxiliares de enfermería.

La Organización conjuntamente con las autoridades nacionales de salud

acordaron preparar dos tipos de personal de enfermería: la enfermera

graduada o titulada y la auxiliar de enfermería.

Así como, en la década de 1850, apareció la enfermera moderna; en la

década de 1950, fue aceptada la auxiliar de enfermería en América Latina.

Todos los países de la Región desde entonces han tenido programas

regulares de adiestramiento de auxiliares, financiados por diversas fuentes y en

muchos de ellos los centros o cursos han continuado aumentando, en particular

desde que se iniciaron los programas de extensión de la atención primaria de

salud.

En lo referente a la enseñanza de la enfermería básica, las actividades

de la Organización se orientaron a proporcionar asesoramiento y participar en la

Page 21: La formación de enfermeras en el Peru

organización y/o fortalecimiento de las escuelas básicas de enfermería en los

diferentes países.

La política seguida por la OPS se orientó a que en cada país de la Región

hubiera por lo menos una escuela.

Durante los años sesenta, esta meta se alcanzó en casi todos los países,

excepto en cinco de ellos: El Salvador, México, Perú y Venezuela, los cuales

ya habían establecido escuelas universitarias de enfermería.

En cuanto a la enseñanza posbásica de enfermería, el programa de

enfermería de la Organización se desarrolló rápidamente a partir de 1941, en

base a solicitudes de los gobiernos, estimulados por la II Guerra Mundial. Por

entonces, la propuesta era mejorar la situación de salud de las poblaciones que

vivían en regiones consideradas estratégicas en América Latina, porque

suministraban materiales como el caucho y la balata, así como alimentos

requeridos por los países aliados. En consecuencia, la OSP recibió diversas

demandas de ayuda para establecer programas de enfermería de salud

pública en los países. Gracias a fondos provenientes de la Oficina del

Coordinador de Asuntos Interamericanos, la OSP brindó su cooperación técnica

para crear en los países nuevas escuelas de enfermería, reorganizar las

existentes y desarrollar servicios de enfermería de salud pública en Brasil,

Colombia, Ecuador, Guatemala, Haití, Paraguay y Venezuela.

Hasta enero del 1945, el programa de enfermería de la OSP había contado

con el apoyo técnico y financiero de la Oficina del Coordinador de Asuntos

Interamericanos, pero en esa fecha el nuevo coordinador relevó a la OSP de la

administración de dicho programa, disponiendo la transferencia de la mayoría

del personal de ese programa al mencionado Instituto de Asuntos

Interamericanos. No obstante haber agotado sus fondos, la OSP continuó

apoyando el desarrollo de la enfermería, y gracias a donaciones del Servicio de

Salud Pública de los EE.UU. y del Commonwealth Fund, continuó respondiendo a

las solicitudes de cooperación técnica de los gobiernos. De 1945 a 1949

estuvieron asignadas sendas consultoras de enfermería en las Oficinas de la

OPS en Guatemala y en Perú.

En setiembre de 1947, la Oficina amplió su programa de enfermería de salud

pública en el continente, por medio de consultorías, correspondencia,

conferencias, publicaciones y becas. Al efecto, la consultora regional de

enfermería visitó todos los países para conocer a las autoridades en enfermería

y familiarizarse con las necesidades regionales en este campo. Los datos

obtenidos sirvieron de referencia para conocer la situación de la enfermería en

la Región.

Page 22: La formación de enfermeras en el Peru

La Oficina auspició dos congresos de enfermería, uno en San José de Costa

Rica, para enfermeras de Centro América y Mar de las Antillas ( setiembre de

1949), y el otro en Lima, en el mismo año, para enfermeras de América del Sur.

En ambos eventos se formularon importantes recomendaciones respecto a las

escuelas y al reclutamiento de postulantes interesados en seguir esa carrera. En

consecuencia, la OPS tomó las siguientes medidas:

Concedió becas a enfermeras de Ecuador, Costa Rica, Chile, Brasil y

Nicaragua para efectuar estudios de posgrado en los EE.UU. y en Chile.

Organizó y realizó, a mediados de 1950, un Seminario sobre

“Principios de Enseñanza y Vigilancia“, destinado a preparar instructoras de

escuelas de enfermería y administradoras de los servicios de enfermería en

salud pública. Este evento se realizó en Santiago de Chile con remarcable

éxito.

Se tradujeron al español y publicaron tres libros de texto,

previamente seleccionados durante el Congreso de Enfermería realizado en

Lima.

En noviembre de 1969, la OPS convocó en Washington, D.C., EE.UU. un

Comité Técnico Asesor en Enfermería, que recomendó a los gobiernos

establecer y desarrollar los tres niveles de personal de enfermería ya

mencionados. El primer nivel o superior requería comprender enfermeras de

nivel universitario capaces de proporcionar atención de enfermería de alta

calidad a individuos y comunidades; orientar al personal de enfermería con

menos conocimientos; y continuar su propia preparación para asumir

responsabilidades docentes y administrativas más amplias. La carga académica

necesaria para la preparación y adiestramiento a este nivel debía ser semejante

en todos los países, para facilitar el intercambio de personal, especialmente

para fines de educación superior.

Existía una creciente demanda de enfermeras preparadas en

escuelas universitarias, para hacerse cargo de planificar, supervisar y evaluar

programas, así como también para educar a un buen número de profesionales y

de subprofesionales. Su formación universitaria exigía una educación

equilibrada en cuanto a su contenido técnico y humanístico.

Como paso previo fue necesario uniformar los años de escolaridad exigidos

para el ingreso a las escuelas de enfermería básica, se debía exigir a los

postulantes haber completado la secundaria. A cada país le correspondía

definir el programa de enseñanza de enfermería integrado a la educación

secundaria, de acuerdo con su estructura de enfermería y con los cambios

efectuados en su sistema de prestación de servicios.

Page 23: La formación de enfermeras en el Peru

En octubre del 1972, el Plan Decenal de Salud para las Américas consideró la

urgencia de intensificar la capacitación del personal de enfermería, del cual un

tercio podría ser preparado a nivel universitario y el restante a nivel básico.

Surgieron cursos de especialización en enfermería materno infantil y médico

quirúrgico, en salud mental y psiquiatría.

La OPS/OMS creó el Programa Latinoamericano de Tecnología Educacional

en Enfermería, con sede en el Centro Latinoamericano de Tecnología

Educacional para la Salud (CLATES) en Río de Janeiro, Brasil. Su objetivo era

contribuir al incremento del personal de enfermería, formación de docentes,

desarrollo curricular y producción de materiales de instrucción.

En 1978 la OPS/OMS convocó un Grupo de Estudio en Ciencias de la Salud.

En cuanto al aspecto educacional, se inició la reformulación del currículo

orientado hacia la salud de la comunidad y la preparación de las enfermeras

para la atención primaria. En la preparación de la enfermera, se dio importancia

a la integración docente-asistencial, la educación informal, la

autoinstrucción, la enseñanza extramural, el servicio social para las

recién egresadas,

Con la cooperación de la OPS, el Perú reorganizó su sistema de salud,

incluyendo sus servicios de enfermería, asimismo se intensificó el

adiestramiento en servicio del personal de enfermería en las diversas

especialidades como la médico quirúrgica, la neumológica, la psiquiátrica y la

intensivista, dedicada al cuidado progresivo del paciente, que desde 1971,

fueron el inicio y el estímulo para alcanzar una atención de enfermería más

funcional en los servicios de salud.

En el año 1960, el Comité Asesor en Enfermería, convocado por la OPS/OMS

en Lima, había establecido que en uno de los niveles claves de personal es la

enfermera con preparación universitaria. Reconoció la creciente demanda de

enfermeras preparadas para asumir la responsabilidad de planificar, supervisar

y evaluar programas, así como la de educar a un buen número de enfermeras y

auxiliares. Convino en que resultaría muy difícil realizar la formación de personal

si se seguían utilizando los mismos requisitos básicos de educación y los

programas tradicionales de enseñanza. Recomendó que la formación de

enfermeras competentes fuera la responsabilidad de una universidad o

de un instituto de enseñanza superior que debía garantizar una educación

al mismo tiempo técnica y humanística.

En la actualidad, la enfermería es una profesión universitaria, en cuyos planes de

estudio tienen igual importancia la enseñanza del cuidado de los enfermos, la

prevención de las enfermedades y la promoción de la salud.

Page 24: La formación de enfermeras en el Peru

SEGÚN MARÍA CONSUELO CASTRILLÓN AGUDELO:

La formación inicial en enfermería

El proceso de formación de enfermería constituye un proceso de

socialización en conocimientos, principios, valores, conciencia sanitaria y

habilidades técnicas en un campo complejo en lo científico, lo técnico, lo

ético y lo político.

Los planes de estudio necesitan estar sintonizados permanentemente

con la realidad, y los contenidos, experiencias y ambientes de aprendizaje

transmitir, además de conocimientos, valores sobre el respeto por la

diferencia, la libertad, la autonomía, la convivencia, la tolerancia y la

solidaridad.

La educación en enfermería en América Latina ha avanzado en la

actualización de sus planes curriculares, y progresivamente se han

desmedicalizado los programas Se fortalecieron los contenidos de ciencias

básicas tanto biomédicas como sociales. Se diversificaron los escenarios

donde se realizan las experiencias prácticas; ha mejorado la dotación de los

laboratorios con equipos y materiales que facilitan el aprendizaje y la

implementación de bibliotecas que son verdadero soporte para la docencia y

la investigación.

Pero el panorama no es homogéneo debido que aun peristen

programas que se sustentan en el modelo biomédico y en el morbicentrismo,

donde se conservan pedagogías tradicionales. En muchos países proliferan

escuelas sin mayor regulación ni garantía de calidad.

La formación y experiencia docente e investigativa del profesorado

en las escuelas de enfermería de América Latina es variable. En número

importante los docentes no alcanzan formación de maestría y mucho menos

de doctorado.

La regulación de la educación inicial en enfermería es heterogénea en

los países, en cuanto a requisitos de admisión a los programas, duración,

contenidos de formación básica y profesional, orientaciones prácticas y

competencias profesionales.

CARACTERÍSTICAS DEL CONTEXTO QUE PONEN EN RIESGO LA SALUD

Y EXIGEN DE PERSONAL DE SALUD CAPACITADO

Múltiples amenazas para la vida del hombre: xenofobia,

contaminación ambiental, la depredación ecológica y el calentamiento

global, de ambientes carentes de afecto y de respeto por la vida propia y la

Page 25: La formación de enfermeras en el Peru

de los otros, donde florecen: el alcoholismo, el tabaquismo, la dependencia

de alucinógenos, el maltrato familiar, el acoso y la violencia sexuales.

La impotencia para dar respuestas sociales en salud a las demandas

y necesidades de la población, llevó a ensayar una propuesta mercantilista

de reforma a los sistemas de salud en el continente, asi colapsan los

sistemas de información en salud, emergen nuevas patologías, persiste el

temor de una pandemia de gripa incontrolable y se registran cifras

inaceptables en materia de morbimortalidad por causas evitables,

En dicho contexto ha cambiado la prevalencia mundial de las

enfermedades con significativo aumento de los padecimientos vinculados al

sufrimiento psíquico y al comportamiento. El proceso de envejecimiento de

la población continúa su tendencia, aumentando rápida y progresivamente

En la mayoría de los países, el acceso a los servicios de salud es un

cuello de botella con largas listas de espera para consulta y para

procedimientos diagnósticos y terapéuticos, por infraestructura deficiente,

falta de personal y de recursos materiales e instrumentales.

ARGUMENTOS QUE SUGIEREN LA NECESIDAD DE

TRANSFORMACIONES EN LA FORMACIÓN EN ENFERMERÍA

Las iniciativas que buscan superar situaciones críticas en los planos económico,

social y ambiental, exigen transformaciones en el terreno de la formación, la

planificación, la investigación y la práctica de la enfermería.

Los objetivos del desarrollo del milenio, líderes mundiales de 189

países, establecieron el año 2015 como la fecha límite para lograr erradicar

la pobreza extrema, promover la igualdad entre los géneros y la autonomía

de la mujer, reducir la mortalidad infantil, combatir el VIH/SIDA, el paludismo

y otras enfermedades, garantizar la sostenibilidad del medio ambiente y

fomentar una asociación mundial para el desarrollo.

Las metas regionales de recursos humanos para la salud 2007 – 2015

,. Estas metas son: a) definir políticas para preparar los profesionales y

técnicos b) ubicar a las personas adecuadas en los lugares adecuados; c)

promover para la conservación del personal sanitario y eviten carencias en

su dotación; d) fomentar la creación de ambientes de trabajo saludables, y

e) crear mecanismos de cooperación entre las instituciones educativas y de

servicios de salud .

La agenda de salud para las Américas 2008 -2017, insta a los

Gobiernos para la formulación de políticas públicas y la ejecución de

acciones en pro de la salud.

La propuesta de renovación de la atención primaria en salud en las

Américas, que exige la formación de profesionales participativos en la

Page 26: La formación de enfermeras en el Peru

construcción colectiva de propuestas que contribuyan a la salud de los niños,

jóvenes, ancianos, las mujeres y los hombres.

EL PANORAMA DE LA FUERZA DE TRABAJO DE ENFERMERÍA EN

AMÉRICA LATINA

La relación de 30% de enfermeras profesionales sobre 70% de

auxiliares se deberá invertir para los próximos años

La distribución desigual e inequitativa de personal de enfermería es

casi una constante; los profesionales se concentran en las áreas

económicamente más favorecidas, en las zonas urbanas.

Las áreas desfavorecidas: las zonas rurales, los servicios comunitarios

y se encuentra predominantemente a cargo de personal auxiliar o con

educación elemental

La distribución, la composición, perpetúan inequidades y acceso

limitado a los servicios.

EL PERFIL DE LOS POTENCIALES ASPIRANTES A EJERCER COMO

PROFESIONALES

Aquellos que ejercerán el oficio entre los años 2020 y 2030, nacieron entre

finales del siglo XX y comienzos del XXI, crecieron en la dinámica de las

nanotecnologías, y el ordenador, se da exigencias de especialización

profesional, el dominio de idiomas; y en los usos de la investigación. Por otra

parte, habrá más hombres ejerciendo la enfermería,

ALGUNAS PREMISAS ORIENTADORAS DE LAS TRANSFORMACIONES

EN LA EDUCACIÓN DE ENFERMERÍA

Asumir la formación en enfermería con la responsabilidad social de

ofrecer profesionales competentes en lo disciplinar y en lo científico técnico.

Sintonizar los proyectos educativos con la disciplina del cuidado

humano,

Rendir cuentas a la sociedad sobre oferta de cupos, retención, oferta

de egresados, producción intelectual

Reconocer que la razón de ser del cuidado de enfermería son los

pacientes, las familias y las comunidades.

ACCIONES PARA FORTALECER LA FORMACIÓN INICIAL DE

ENFERMERÍA EN AMÉRICA LATINA

Calidad de la educación en enfermería

Instalar como prácticas permanentes la autoevaluación, y la acreditación de

los programas académicos, fortalecer en las escuelas y facultades de

Page 27: La formación de enfermeras en el Peru

enfermería la docencia, la investigación y la extensión. Vigilar la coherencia

disciplinar, la pertinencia de los contenidos y las experiencias de

aprendizaje, establecer el perfil de los profesores encargados de la

formación en enfermería, apoyar la interdisciplinaridad, incluyendo las

ciencias sociales, comprometidos con el proyecto académico,

Regulación de la educación en enfermería

La rectoría del Estado participa en la regulación de los programas de

educación en enfermería y en la vigilancia de la calidad, la homologación de

títulos, acreditación y la movilidad a hacia la especialización y la formación

de postgrado.

Ofrecer incentivos que favorezcan el aumento de la demanda para estudiar

enfermería, disminuir la deserción y la mortalidad estudiantiles y reducir la

migración y la deserción del ejercicio profesional. Los gobiernos deben

apoyar en la dotación de bibliotecas, la tecnología para los laboratorios y la

educación a distancia, así como con becas de estudio para la formación y

capacitación de docentes

Formación de investigadores, fortalecimiento y pertinencia de

la investigación

Estimular el intercambio sistemático de los investigadores Divulgar el

conocimiento producido, demostrar los aportes de enfermería a la salud

pública

Orientaciones para el diseño curricular

Preservar la formación del ser (lo identitario), el saber (disciplinar e

interdisciplinar), el saber ser (profesional cuidador, investigador y

ciudadano), el saber hacer (instrumental) y el saber cómo (el desempeño del

oficio). Sintonizar los perfiles de formación y los planes de estudio con la

realidad sociosanitaria, así como los contenidos, experiencias y ambientes

de aprendizaje.

Flexibilizar el currículo y trabajar cuidadosamente la secuencia y coherencia

horizontal, vertical y transversal de los planes de estudio

Desarrollar en los estudiantes habilidades para el trabajo en Lograr en el

educando tanto el dominio de la disciplina y de las competencias propias de

la profesión como el conocimiento de idiomas extranjeros, el manejo de la

informática en salud y en enfermería, Implementar estrategias de educación

abierta y a distancia

Opciones pedagógicas

Utilizar modelos pedagógicas que consideren las condiciones de aprendizaje

de los alumnos y su perfil de formación.

Que integren la teoría y la práctica y que promuevan el pensamiento crítico

la formación ética y ciudadana y el trabajo inter y transdisciplinar,

Page 28: La formación de enfermeras en el Peru

LA FORMACION DE ENFERMERAS EN EL PERU

La formación de enfermeras en el Perú se inicia en Escuelas anexas a

hospitales, siendo la primera de ellas la Escuela de Enfermeras de la Clínica

Anglo Americana, creada en 1,907, que funcionó inicialmente en el Callao, y la

segunda la Escuela Nacional de Enfermeras Arzobispo Loayza, creada en

1,915 por la Sociedad de Beneficencia Pública de Lima.

Aproximadamente cincuenta años después de fundada la primera Escuela el

país contaba con 7 Escuelas de Enfermeras, todas ellas ubicadas en Lima y

dependientes de la Beneficencia Pública, Ministerio de Salud, Seguro Social,

Sanidad de las Fuerzas Armadas.

A partir de 1,947 las Escuelas son normadas por el Ministerio de Salud, a

través del Comité Permanente de Control de Escuelas de Enfermería.

En 1,957, se crea la Escuela de Enfermeras de la Universidad Nacional

de Huamanga, en Ayacucho, la primera institución universitaria de enfermería.

A mediados de la década de los sesenta, en 1,964, la Universidad Nacional

Mayor de San Marcos, el Ministerio de Salud y la OPS firman un convenio con el

propósito de crear y desarrollar un Programa Académico de enfermería en la

Universidad a fin de formar enfermeras que respondan a los nuevos programas

y demandas de salud. El convenio contemplaba el desarrollo de los cursos

complementarios para la formación de docentes. A este convenio se adhieren

las Universidades Nacionales Pedro Ruiz Gallo de Lambayeque, la

Universidad Nacional de Trujillo, la Universidad Nacional San Agustín de

Arequipa y la Universidad Católica de Santa María, también de Arequipa.

La carrera de enfermería en estas Universidades era de cinco años,

conducente al Grado y Título Universitarios, hasta el año 1,969 en que se

promulga una nueva Ley Orgánica de las Universidades Peruanas - Ley 17437-

que introduce las carreras cortas y largas. Producto de la aplicación de esta Ley,

Enfermería pasa a ser carrera corta con cuatro años de formación obteniendo

sólo el Título. En 1,972 la nueva Ley General de Educación - Ley 19326 -

establece que los estudios universitarios tienen una duración mínima de cinco

años y conducen a la Licenciatura, situación que para enfermería se regulariza

entre 1,972 y 1,973 con la aprobación del currículum de 10 ciclos de estudios.

Hasta el año 1,983 se siguen creando Escuelas de Enfermería de los dos

tipos, no universitarias y universitarias. Es en este año que el Colegio de

Enfermeros del Perú, considerando necesario unificar la formación profesional

de enfermería, convoca una asamblea nacional la que acuerda que todas las

enfermeras se formen en el nivel universitario. Las Escuelas que lo requerían se

Page 29: La formación de enfermeras en el Peru

vincularon académicamente con universidades y contaron con el apoyo del

Colegio, cuando fue necesario. Se logra así que todas las enfermeras que se

forman en el país, a partir de 1,985, cuenten con el Grado y Título universitarios.

Por esa época algunas universidades empiezan a ofrecer cursos

complementarios para enfermeras a fin de obtener el nivel universitario.

En 1,984 se promulga una nueva Ley Universitaria – Ley 23733 – aun

vigente, que introduce el sistema de Facultades y Departamentos Académicos.

En función a ella, los hasta entonces Programas Académicos deberían

convertirse en Facultades o Escuelas dependientes de las primeras. En este

proceso, Enfermería tuvo también que desarrollar esfuerzos por una

permanencia como Facultad, lográndose sólo en algunos casos.

A través de los años, algunas de las Escuelas no universitarias han ido

desapareciendo, otras han sido integradas a la Universidad, existiendo aún

cuatro en condición de afiliación académica. Al mismo tiempo se han ido

creando otras Facultades y Escuelas de Enfermería especialmente en nuevas

universidades. A Diciembre del año 2,000 existían un total de 45 instituciones

formadoras de enfermeras.

El cambio y mejoramiento curricular y la búsqueda de una mayor eficiencia

educativa han sido características de la formación de enfermeras en el país a

través de los años, influido en gran parte por la formación especial de sus

docentes tanto en el país como en el extranjero. En el país esta formación la

ofreció, inicialmente el Instituto de Post-Grado de Enfermería, luego la Escuela

Nacional de Salud Pública, posteriormente el Centro de Tecnología Educativa de

Enfermería que se convierte en Centro de Tecnología Educativa en Salud y a

partir de los 80s a través de los cursos de perfeccionamiento, especialmente

maestrías en enfermería y otros campos, doctorados, así como en las

especialidades. En la última década se aprecia que varias Facultades y Escuelas

de Enfermería han empezado a desarrollar el post-grado y la especialización en

enfermería.

Las exigencias derivadas del proceso de globalización, los nuevos perfiles

demográficos y epidemiológicos en el país, las demandas y necesidades sociales

por mejores condiciones de vida y salud de la población y el desarrollo científico-

tecnológico constituyen un desafío para enfermería y especialmente para las

instituciones responsables de la formación profesional. Procesos para planificar

la oferta nacional de pre y post grado de enfermería, para desarrollar la gestión

educativa, la autoevaluación y acreditación de los programas de formación, así

como para direccionar la investigación de enfermería en el país, requieren ser

potenciados.

Page 30: La formación de enfermeras en el Peru

A Diciembre del año 2,000 existían 45 Facultades/Escuelas de Enfermería en

el país, cuatro de ellas en condición de afiliación académica a una Universidad.

DESARROLLO DE LA ENFERMERÍA EN EL PERÚ

La primera escuela de enfermería que se estableció en el país, en 1907,

funcionó en la Casa de Salud de Bellavista, Callao. Era administrada por la

Sociedad de Institutos Médicos, y tuvo como directora a una enfermera inglesa.

Posteriormente, la escuela pasó a formar parte de la Clínica AngloAmericana. En

1908 al reorganizarse la asistencia médica en el Hospicio de Expósitos, a cargo

de la Beneficencia Pública de Lima, se estableció allí una escuela de enfermería

que sobrevivió poco tiempo.

En 1915 se creó la Escuela Mixta de Enfermeros, la que, en 1928, se

convirtió en la Escuela Nacional de Enfermeras Arzobispo Loayza, de la

Beneficencia Pública de Lima, a cargo de las hermanas de la Caridad de San

Vicente de Paul.

En 1939 se estableció la Escuela de Enfermeras del Hospital del Niño

del MINSA, a cargo inicialmente de la Orden de las Madres Carmelitas.

En 1942 se fundó en Bellavista, Callao, la Escuela de Enfermeras del

Hospital Daniel A. Carrión, a cargo de las hermanas de la Caridad. Desde

1938 hasta 1948, la Escuela del Hospital Arzobispo Loayza ofreció a sus

alumnas la especialidad de enfermeras visitadoras al término de sus estudios

generales de enfermería.

En 1947 ante la necesidad de uniformar y reforzar la calidad de los planes de

enseñanza de la enfermería y de controlar permanentemente el cumplimiento

de los mismos, el MINSA nombró una comisión encargada de elaborar la

norma respectiva. Esta Comisión estuvo constituida por representantes del

gobierno, las escuelas de enfermería civiles y militares, la sanidad naval, la

OPS/OMS, el SCISP y la Fundación Rockefeller.

El día 7 de enero del mismo año, el gobierno, por decreto supremo, aprobó

los estatutos de las escuelas de enfermería, en base al proyecto elaborado por

la mencionada Comisión.

En vista de la ampliación de las funciones que el personal de enfermería

debía cumplir en los hospitales y en los servicios preventivos asistenciales

periféricos y a la revisión de la currícula, las escuelas de enfermería

incorporaron en sus planes de enseñanza las asignaturas de psicología,

sociología, administración, salud pública y control de enfermedades

transmisibles.

Page 31: La formación de enfermeras en el Peru

En octubre de 1948, el Departamento de Selección y Capacitación de

Personal del MINSA, con la contribución financiera de la Fundación W.K .Kellogg,

organizó el primer Curso para Enfermeras Instructoras en el país, que fue

seguido por otros dos cursos en los años 1950 y 1951, respectivamente,

alcanzándose a capacitar un total de 50 enfermeras instructoras.

En 1951 el Comité Permanente para el Control de las Escuelas de Enfermería

estableció como requisito que todas las enfermeras tituladas que solicitaran

autorización para ejercer su profesión, debían aprobar un examen final, a cargo

del referido Comité.

En forma gradual se fueron implantando diversas normas para que las

escuelas siguieran procedimientos similares en la selección, preparación y

evaluación de sus alumnos.

El decreto supremo N.º 028-83-SA aprobó el reglamento general de las

escuelas de enfermería. El D.S. N.º 054-84-SA dictó normas reglamentarias

referentes a la carrera de enfermería que ampliaron los alcance del decreto

supremo relativo a las carreras de los profesionales de salud, en lo tocante al

factor “calidad de atención“ del personal de enfermería.

En vista del grado de desarrollo que la enfermería iba alcanzando en el país

y de la conveniencia de encauzar su conducción técnico administrativa a nivel

nacional, en el año 1951 se creó en el MINSA, la Sección de Enfermería y

Obstetricia.

En 1939 la Caja Nacional del Seguro Social Obrero organizó la Escuela de

Enfermeras del Hospital Obrero de Lima, para atender las necesidades del

personal de enfermería de su red de hospitales y policlínicos. La Beneficencia

del Callao abrió, en 1940, la Escuela de Enfermeras del Hospital Daniel A.

Carrión. La Sanidad de Policía estableció la Escuela Mixta de Sanidad de

Gobierno y Policía en 1940.

El D.S. del 13 de enero de 1942 dispuso que, a partir de ese año, las

escuelas de enfermería autorizadas debían adecuar sus respectivos al plan de

estudios que aprobara el MINSA, asesorado a su vez por la Facultad de Ciencias

Médicas de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.

Por D.S. del 27 de julio de 1942, se estableció en Iquitos la Escuela de

Enfermeras de la Selva, y por D.S. del 22 del abril de 1944 se creó la Escuela

Andina de Enfermeras, que funcionó en el Hospital de San Juan de Dios en

Puno.

Según el gobierno, era necesario contar en el país con una enfermera por

cada 10,000 habitantes, o sea que se necesitaban 7,000 enfermeras. En 1945

Page 32: La formación de enfermeras en el Peru

solamente estaban registrados en el país 750 enfermeros entre varones y

mujeres, y en servicio 620 enfermeros para atender las 1,423 camas con que

contaban entonces los 116 hospitales existentes en el país.

Al finalizar el año 1945, se formaba personal de enfermería en la Escuela

Nacional de Enfermería del Hospital Arzobispo Loayza, la Escuela de Enfermeras

Puericultoras del Hospital del Niño, las escuelas de las sanidades militar y

policial, la Escuela del Hospital Daniel A. Carrión del Callao, la Escuela de la

Clínica Anglo Americana, y la Escuela Mixta de Enfermeros del Hospital Larco

Herrera.

Hasta mediados de la década de los cuarenta la enfermería era considerada

en el país como una labor esencialmente técnica, cuyo entrenamiento estaba

orientado a poner en práctica determinados procedimientos, pero con

oportunidades muy limitadas de ejercitar su labor en forma independiente.

A mediados de 1953, la Sección de Enfermería y Obstetricia del MINSA

reportó la existencia de 1,707 enfermeros titulados y que, además, hasta el año

1946 la Escuela de Enfermeros del Hospital Militar de San Bartolome había

formado 285 enfermeros varones. Asimismo, reconoció que las prestaciones que

se daban a los pacientes en los hospitales de provincias eran en su mayoría

proporcionadas por personal auxiliar que carecía de entrenamiento. Solicitó

como recomendación que urgentemente se ofreciera la debida capacitación al

mencionado personal.

En el mismo año, 1955, el MINSA, con la colaboración de la OPS, realizó el

primer censo nacional de la enfermería, empadronándose un total de 1,274

enfermeras, las cuales, de acuerdo a su centro de trabajo, se distribuían de la

siguiente manera: Sociedad de Beneficencia Pública 313 enfermeras (24,5%),

Ministerio de Salud Pública (MINSA) 308 enfermeras (24,2%), organismos

gubernamentales 213 (16,7%), empresas privadas 196 (15,4%), Fuerzas

Armadas y Policiales 149 (11,7%), y servicios particulares 95 (7,5%).

En 1957 la Sección de Enfermería y Obstetricia del MINSA, en vista de la

importancia de la enfermería, fue elevada a la categoría de Departamento. Pasó

a estar integrada por las secciones de enfermería hospitalaria, enfermería de

Salud Pública y asesoría para los programas de preparación de auxiliares de

enfermería; en 1967, esta última pasó a ser la Unidad de Asesoría y Supervisión

de Enfermería.

En 1953 para facilitar el desarrollo académico, deontológico y gremial de la

enfermería como una profesión, se fundaron la Asociación Nacional de

Enfermeras (antes Asociación de Enfermeras Católicas) y la Liga Nacional de

Enfermeras del Perú (anteriormente el Consejo Nacional de Enfermeras).

Page 33: La formación de enfermeras en el Peru

En 1946 en virtud de un convenio, celebrado entre el gobierno y la

Fundación Rockefeller, se estableció en el departamento de Ica el primer

servicio departamental de salud, El servicio establecido en Ica empleó por

primera vez visitadoras de higiene, es decir personal auxiliar de enfermería, de

ambos sexos, nativos del lugar, que habían sido entrenados durante un año

antes de ser asignado a vivir y trabajar en determinadas comunidades. La

política del servicio era reclutar los visitadores de higiene de niveles

socioeconómicos y culturales similares a aquellos con los que trabajarían.

Casi simultáneamente se estableció en el Perú, el Servicio Cooperativo

Interamericano de Salud Pública (SCISP), mediante un acuerdo entre el gobierno

y el Instituto de Asuntos Interamericanos de los EUA (IIAA). El SCISP inicialmente

desarrolló programas de salud integral en los departamentos de Loreto y San

Martín, a través del Proyecto Amazónico. Más adelante abarcó Chimbote

(departamento de Ancash), Puquio (departamento de Ayacucho), Rimac

(departamento de Lima) y el departamento de La Libertad.

De los cursos de enfermería de salud pública que desarrolló el SCISP hasta

1961, egresaron 160 enfermeras para laborar en diversos servicios de salud,

tanto en hospitales como en centros de salud y servicios especializados. El

importante rol de la enfermería se puso en evidencia al fortalecerse los servicios

de enfermería en los establecimientos de salud.

Hasta antes de la década de los cincuenta la formación de las auxiliares de

enfermería en el país se había hecho en la modalidad de adiestramiento en

servicio. Recién en 1958 ese personal comenzó a ser preparado mediante

cursos regulares a cargo del MINSA, con una duración inicial de seis meses,

exigiéndose como requisito de admisión la primaria completa,

En 1955 en vista de la urgente necesidad de capacitar a las enfermeras en

administración de servicios de enfermería y en educación en enfermería, el

gobierno —con el asesoramiento de la OPS— creó el Instituto Nacional de

Enfermería. Se contó con los auspicios del MINSA, el Seguro Social del Empleado

y la Fundación Rockefeller. Los objetivos del Instituto fueron: (a) organizar y

poner en operación la Escuela de Enfermería del Seguro Social del Empleado;

(b) elaborar los cursos de perfeccionamiento para enfermeras tituladas; y (c)

preparar auxiliares de enfermería. Se admitieron 35 alumnas para el curso de

Educación en Enfermería y 17 para seguir el curso de Administración de

Servicios de Enfermería. Ambos cursos tuvieron una duración de seis meses.

Desafortunadamente, el Instituto solo funcionó hasta 1957 debido al retiro del

apoyo financiero del Seguro Social del Empleado y al poco interés de las

enfermeras en este tipo de cursos.

Page 34: La formación de enfermeras en el Peru

Fueron abiertas nuevas escuelas de enfermería, durante el período 1969-

1980, en las universidades nacionales Pedro Ruiz Gallo (1970), San Antonio

Abad (1972), Amazonía Peruana (1972), Daniel A. Carrión (1979), José

F. Sánchez Carrión (1980) y la de Ucayali (1980). Asimismo, la Escuela de

Salud Pública empezó la capacitación de enfermeras tituladas en las áreas de

educación en enfermería, con 44 egresadas en cursos de diez meses de

duración; administración de servicios integrados de enfermería, con 151

egresadas en cursos de ocho meses de duración; enfermería de salud pública,

con 350 egresadas en cursos de cinco meses de duración; y principios de

administración de servicios de enfermería, con 389 egresadas en cursos de uno

a dos meses de duración.

El Censo Nacional de Población de 1972 mostró una tasa de 3,44 enfermeros

por 10,000 habitantes. La proporción para Lima Metrópoli era de 8,54 por

10,000 habitantes mientras que Apurímac solo de una por 0,19 habitantes. En el

Censo Nacional de 1981, la proporción nacional fue de 5,94 enfermeros por

10,000 habitantes, siendo la correspondiente a Lima Metropolitana superior a

10,0. De donde se infirió que en todos los departamentos donde existían

programas académicos de enfermería, la disponibilidad de enfermeros se había

incrementado significativamente. Adicionalmente, el SESIGRA, que operaba

desde 1981, también había contribuido a este mejoramiento de la enfermería en

aquellos departamentos donde no existían los referidos programas académicos.

No obstante el asesoramiento técnico de la OPS a los programas académicos

de enfermería, se observó un incremento desordenado del número de dichos

programas, lo cual llevaba a un crecimiento acelerado de los egresados y

titulados. El resultado fue que estos últimos constituían casi la mitad de los

egresados. De modo que el número de egresados en el período 1975-1979 era

casi equivalente al número total de enfermeros empadronados en el censo de

1972.

El gobierno preocupado por otorgar a los egresados de los centros

formadores de recursos humanos en salud una experiencia que incrementara su

conocimiento de la realidad nacional en lo que se ha denominado “el Perú

profundo”, acogió, en 1978, la propuesta de creación de un servicio social

obligatorio de los egresados de las universidades, como parte de su formación

profesional, mediante un Programa Piloto Civil de Graduandos de las Ciencias de

la Salud (SECIGRA).

El decreto ley N.º 22315, del 17 de julio de 1978, creó el Colegio de

Enfermeros del Perú, como entidad autónoma de derecho publico interno,

representativo de la profesión de Enfermería. Su propósito principal es el ejercer

Page 35: La formación de enfermeras en el Peru

una vigilancia permanente de la ética y de ontología profesionales. En su primer

año de existencia se colegiaron 9,308 miembros.

Durante algún tiempo coexistieron en el país escuelas básicas de enfermería

y escuelas y/o facultades de enfermería de nivel universitario; en vista de esta

situación, el Colegio de Enfermeros del Perú acordó hacer las gestiones del caso

para que las autoridades correspondientes llevaran a cabo la unificación del

nivel de formación profesional del personal de enfermería.

En el bienio 1984-1985, se produjo la afiliación académica de las

escuelas de enfermería a las universidades.

El insistente reclamo de los servicios por personal de enfermería

(generalistas, especialistas en enfermería hospitalaria, comunitaria y familiar;

técnicas en enfermería y personal de auxiliares), contrasta con la tendencia de

las instituciones de educación superior y universitaria y las asociaciones

profesionales de estimular la especialización profesional, debido a que esta

tendencia permite mayor competitividad de los profesionales y estimula el

crecimiento tecnológico. En forma similar se retrasa la respuesta de las

instituciones públicas y privadas de educación superior y universitaria frente a

la salud con los niveles de calidad requeridos en las categorías de técnicas y de

auxiliares de enfermería.

A raíz de la decisión de los gobiernos americanos, en 1972, de programar la

extensión de la cobertura de servicios de salud a la población de sus países,

mediante la estrategia de la atención primaria de salud con participación activa

y sostenible de la comunidad y el empleo de la tecnología apropiada a cada

nivel de atención, el gobierno peruano inició en 1975 la formación de bachilleres

del área profesional de salud, un tipo de enfermería no universitaria.

Esta formación se hizo en siete ESEP’s experimentales del Estado localizadas

en Piura, Moquegua, Juliaca, Cuzco, Huancayo, Iquitos y en el distrito limeño de

Comas. El programa curricular tuvo una duración de seis semestres académicos

e incluía bloques integrales de aprendizaje para la formación polivalente que

comprendía los aspectos básicos de salud para capacitarlos en su cuidado, así

como bloques específicos más profundos en las áreas de enfermería básica y de

salud oral, que fueron las dos opciones elegidas.

La creación de estas ESEP’s así como de otras áreas educacionales, había

sido concebida por los gestores de la reforma educativa como una manera de

conciliar la educación básica y una formación profesional especializada, con la

finalidad de eliminar la discriminación existente contra las carreras cortas y

descongestionar las universidades, asegurando una preparación masiva de la

juventud en actividades laborales de índole más técnica y práctica.

Page 36: La formación de enfermeras en el Peru

Sin embargo, la creación de estas ESEP’s encontró un rechazo de las

organizaciones representativas de los profesionales universitarios de la salud,

en particular de la enfermería, cuyos miembros estaban promoviendo un mayor

nivel universitario de su profesión. Además, la inexistencia de una apropiada

coordinación intersectorial por falta de un efectivo liderazgo del sector por el

MINSA, aunado a una actitud poco convincente sobre la función de los

bachilleres de salud en la práctica, por parte de los funcionarios del referido

sector, contribuyó a que la orientación y, por tanto, las características básicas

de la formación de los mencionados bachilleres estuvieran exclusivamente bajo

la responsabilidad del Ministerio de Educación, sin la participación del MINSA ni

de los colegios profesionales de las ciencias de la salud. En consecuencia, se

produjeron discrepancias entre ambos sectores sobre el perfil ocupacional, la

programación del currículo, etc. De donde se derivó el impase para la utilización

de los servicios de salud del MINSA para la práctica de terreno de los

estudiantes, entre octubre de 1977 y mayo de 1978. Esta situación retardó el

egreso de la primera promoción de bachilleres, pues se notaban serias

deficiencias en su formación.

La ley general de educación de 1982 hizo que la mayoría de las ESEP’s se

reconvirtiera en institutos superiores tecnológicos. En 1982 el decreto ley N.º

19326, ley general de educación fue derogado, al promulgarse la ley N.º 23384,

con la cual desapareció legalmente el SECIGRA, que quedo desactivado.

La ley universitaria N.º 23733, promulgada en 1983, en su artículo 22

dispuso que solamente las universidades podían otorgar el título profesional, por

lo que las escuelas de enfermería que venían funcionando dependientes de

hospitales públicos y privados, se vieron obligadas a celebrar convenios con

universidades, para que sus alumnos pudieran egresar con el título académico

de licenciados en enfermería.

Pese a esta disposición legal, las escuelas fueron feneciendo

paulatinamente, pues las universidades crearon sus propias facultades y/o

escuelas.

Las escuelas dependientes del Estado fueron cerrando a causa de la política

del sector salud. La más antigua de éstas, la Escuela Nacional de Enfermeras del

Hospital Arzobispo Loayza pasó a formar parte de la Universidad Cayetano

Heredia; la Escuela del Hospital del Niño se integró a la Universidad Federico

Villarreal, y la del Hospital Daniel A. Carrión a la Universidad Nacional del Callao.

Las escuelas privadas de enfermería, como la de la Clínica Tessa, trabajan en

convenio con una universidad, que brinda no solo la instrucción académica, sino

también facilita la formación práctica en centros hospitalarios.

Page 37: La formación de enfermeras en el Peru

El 10 de diciembre de 1983, en anticipación de la nueva ley general de

educación se promulgó la ley N.º 23330, que creó el Servicio Rural y Urbano

Marginal de Salud (SERUMS), en reemplazo del SECIGRA SALUD. Dicha ley

estableció que el servicio social debía ser cumplido por los profesionales de la

salud una vez que se hubieran graduado y colegiado en sus respectivos colegios

profesionales, como un requisito indispensable para ocupar cargos en

instituciones públicas, ingresar a segunda especialización profesional y postular

a una beca u otra ayuda del Estado, sea para estudios de posgrado o

perfeccionamiento. La duración de este servicio social en zonas rurales o urbano

marginales era de un año, aunque en la práctica el MINSA, por falta de

presupuesto, solo los hacía servir seis meses, a diferencia del IPSS que los

retenía un año y les brindaba alojamiento. Por lo tanto, las enfermeras recién

tituladas servían en el SERUMS.

El nivel del egresado de los institutos superiores tecnológicos sirvió de

referencia del nivel ocupacional del llamado técnico de enfermería, al cual

pertenecían por disposiciones expresas del sector y, por única vez, las auxiliares

de enfermería que tenían determinado número de años de antigüedad en el

cargo.

Desafortunadamente, las autoridades rectoras de salud no delimitaron las

funciones de los técnicos de enfermería ni los pusieron bajo la autoridad de la

jefatura de los servicios de enfermería de los establecimientos de salud, con lo

cual se originaron problemas serios de falta de autoridad, tanto por cumplir las

técnicas en enfermería, en algunos casos, funciones propias de la enfermera

titulada, cuanto porque pretendían tener su propio departamento en los

establecimientos de salud, al menos en ESSALUD.

Esta situación se ha agudizado por el hecho que algunas universidades

ofrecen programas de formación de estos técnicos de enfermería. Desde 1982,

se han incrementado significativamente los centros formadores de este tipo de

personal, con una producción de egresados que excede la demanda de servicios

y sin ninguna intervención del sector salud, que oriente y controle el

cumplimiento de los requisitos mínimos de preparación para la autorización del

ejercicio ocupacional.

En 1964 el MINSA suscribió un convenio con la OPS/ OMS y la Universidad

Nacional Mayor de San Marcos, con el propósito de impulsar el desarrollo tanto

de la docencia en las escuelas de enfermería como de los servicios de

enfermería dentro de la red de salud, mediante programas complementarios y

de una moderna escuela de enfermería. Hasta 1979 se habían creado 16

facultades y escuelas de enfermería, entre 1980 y 1985, se crearon otras 10, de

Page 38: La formación de enfermeras en el Peru

las cuales 50% estaban ubicadas en el interior del país, siendo 5 de ellas de

carácter gubernamental.

En el período 1980-1985, se registraron 6,163 egresados y 2,279 titulados,

con promedios anuales de 1,027 y 497, respectivamente. Al finalizar el año

1985, existían 26 facultades y escuelas de enfermería. Se observó un aumento

en el número de estos centros formadores y una ampliación de la matrícula que

no obedecía a razones derivadas de un estudio técnico del mercado de trabajo

de los enfermeros. La creación de dichas facultades y escuelas de enfermería no

responde a una planificación y no se recoje información ni la opinión de

ASPEFEEN, del Colegio de Enfermeros del Perú o del MINSA.

En 1983 el Colegio de Enfermeros del Perú tenía registrados 12,723

enfermeros colegiados, de los cuales el 54% residía en Lima y Callao y un 10.4%

vivía en Arequipa. Dicho Colegio consideraba como problema principales el

incremento desmensurado y descontrolado del personal técnico y auxiliar de

enfermería con un perfil ocupacional definido sin participación del Colegio y de

MINSA.

La educación del personal de enfermería requiere ser revisada

constantemente, de acuerdo a los cambios no solo en la teoría y práctica de la

profesión sino en la propia dinámica de la sociedad peruana, para que dicho

personal posea una perspectiva más integral y realista de la población en la que

vive y trabaja. Esta nueva perspectiva demanda cambios en la estructura de los

programas de formación y actualización, la orientación del currículo hacia la

solución de problemas acordes con la realidad donde labora como miembro de

un equipo interdisciplinario y de una comunidad.

La experiencia de lo logrado con la incorporación de la enseñanza de salud

comunitaria en el plan de estudios del Programa Académico de Enfermería de la

Universidad Nacional Mayor de San Marcos servirá a modo de ejemplo de cómo

se han difundido en el ámbito universitario los conceptos antes mencionados. El

trabajo de enfermería en Villa El Salvador se inició en 1974. Más tarde, en 1977,

se suscribió el respectivo convenio con el objetivo de llevar a cabo un programa

de salud integral vinculado al plan de desarrollo socioeconómico de dicha

población, con énfasis en los aspectos de promoción y protección de la salud

comunitaria.

Al efecto, previamente todo el personal docente del Programa Académico de

Enfermería, preferentemente las profesoras de enfermería, se prepararon en

salud comunitaria y técnicas de cuidado de enfermería comunitaria. El plan

incluyó la realización de talleres, así como el repaso de los conceptos básicos de

Page 39: La formación de enfermeras en el Peru

las ciencias de la conducta aplicados a la realidad donde trabajarían. Igualmente

los docentes desarrollaron programas de salud comunitaria.

La integración conceptual facilitó la integración del contenido de las

experiencias de aprendizaje en una situación real, tomando como base los

cuatro niveles de enseñanza-aprendizaje establecidos en el Programa. De este

modo, las prácticas de salud comunitaria se llevaron a cabo a lo largo del

currículo.

Durante los primeros años de vigencia del convenio, se observó la carencia

de continuidad en la prestación de servicios de salud en la comunidad, a cargo

de las entidades responsables. Por ello, los esfuerzos del Programa se orientaron

a hallar una solución a dicho problema. Se vio la necesidad de trabajar en

comunidades mayores que contaran con servicios de salud ya en operación.

Asimismo, la comunidad debía tener una organización social adecuada y

pertenecer a la zona de influencia de la UNMSM. Fue así como se organizó el

proyecto de servicios de enfermería comunitaria en la ciudad autogestionaría

Villa El Salvador, que contó con la debida cooperación de la Región de Salud de

Lima Metropolitana del MINSA.

Las profesoras de enfermería del Programa prestan servicios durante los

períodos de vacaciones estudiantiles, y en los últimos tres años han estado

capacitando y haciendo el seguimiento de las promotoras de salud en cada

grupo residencial.

FORMACIÓN DEL COLEGIO DE ENFERMEROS

En el año 1974, la Sra. Nelly Aibar de Morales (Presidenta de la Federación de

Profesionales de Enfermería) propuso desarrollar un proyecto de Ley para solicitar a

las autoridades pertinentes la creación del Colegio de Enfermeras (os) del Perú.

Para tal efecto, se nombró la Comisión de Creación de la Orden que fue integrada

por la señoras y señoritas: Nelly Aibar de Morales, Elvira Rodríguez, Emilia

Arismendy, Manuela Urgiés, Nélida Chávez de Lock, Ela Díaz de Venturo y Martha

Vega, reconocidas con Resolución Ministerial Nº 00265 del 24 de Septiembre de

1975.

El trabajo se inicio a fines de 1974, cumpliendo con todas las exigencias solicitadas

por el Ministerio de Salud, hasta que el 17 de Octubre de 1978, el Gral. EP.

Francisco Morales Bermúdez, Presidente del Perú de ese entonces, junto al Consejo

de Ministros, firmaron el Decreto Ley Nº 22315 conteniendo 18 Artículos y 5

Page 40: La formación de enfermeras en el Peru

Disposiciones Transitorias, creándose así el Colegio de Enfermeras (os) del Perú,

entidad autónoma de derecho publico interno representativo de la profesión de

enfermería en todo el territorio de la República.

A nivel del Ministerio de Salud, el Gral. FAP Eduardo Rivas Plata Hurtado (Ministro de

Salud) nombra una comisión, según la Resolución Ministerial Nº 003-79-SA/DS que

se encargó de elaborar el Estatuto y Reglamento del Decreto Ley Nº 22315 del

Colegio de Enfermeras (os) del Perú, la cual sigue vigente en favor y bienestar de la

población peruana.

Desde entonces nuestro Colegio ha sido dirigido por 10 Consejos Directivos elegidos

democráticamente y una Comisión Transitoria; quienes han propiciado el desarrollo

y descentralización institucional, contando en la actualidad con 27 Consejos

Regionales.

LEY UNIVERSITARIA

LA Ley universitaria fue dada hace veinticinco años, durante el segundo gobierno

de Belaúnde, y que modificó la ley 17437 impuesta por el Gobierno Militar de

Velasco en 1969.

La ley 23733, con 17 capítulos y 103 artículos, provocó un violento cambio de

autoridades universitarias en todo el país el año 1984 y obligó a todas las

universidades a rehacer o adecuar sus estatutos a la nueva ley. Desaparecieron los

Programas Académicos y resurgieron las Facultades. Luego de efectuados los

cambios, hubo un cierto período de estabilidad en todo el sistema universitario,

hasta que en 1996, durante el segundo gobierno de Fujimori, se expidió el Decreto

Legislativo 882, denominado “Ley de Promoción de la Inversión en Educación”, el

cual abrió las puertas a la iniciativa privada para invertir y participar en el sector

educativo. Así se incluyó la posibilidad de crear universidades regidas por la

constitución y por el derecho común, es decir, no necesariamente sujetas a la ley

23733, y además con la posibilidad de generar utilidades en beneficio de la entidad

o de las personas promotoras. Dicho decreto también permitió la creación de filiales

de universidades por todo el territorio del país, tema que estaba explícitamente

prohibido en la ley 23733.

EL CURRÍCULO EN LA FORMACION DE LA ENFERMERA PERUANA

El currículo es el plan que organiza de manera sistemática todo aquello a lo

cual la institución le concede valor formativo, por lo cual no se refiere

únicamente al plan de estudios. Opera como traductor, articulador y proyector.

Page 41: La formación de enfermeras en el Peru

Es traductor cuando interpreta la cultura para seleccionar partes de ella y

configurar los contenidos de la enseñanza. Un programa traduce la cultura

cuando tiene en cuenta los requerimientos sociales y el saber que lo define

para convertirlos en acciones, contenidos, relaciones y maneras de hacer que

permitan a los estudiantes alcanzar sus competencias profesionales. Esta

traducción se hace a la luz del Proyecto Educativo Institucional.

Es articulador cuando conjuga y propicia el movimiento armónico de los

elementos que lo componen: agentes o actores, propósitos, contenidos,

métodos, mediaciones, evaluación y recursos.

Es proyector cuando muestra el horizonte de formación al cual tiende, posibilita

a sus participantes evidenciar de forma anticipada el mundo posible que se

intenta construir, qué se espera de ellos, que les espera y cómo es posible

lograr la conquista del horizonte deseado

El centro de la actividad y propósito fundamental de la Educación Superior peruana

consiste en la elevación de la calidad de la formación de los profesionales, premisa

que tiene como objetivo formar profesionales que den respuesta a las necesidades

presentes y perspectivas del desarrollo económico, social y del país. Como

elemento esencial de este objetivo está la definición de qué profesional se requiere

y cómo debe formarse.

Entre las tendencias que han venido caracterizando la Educación Superior peruana

se destaca, la necesidad de elaborar el modelo de cada profesional a partir,

fundamentalmente, de la determinación de los problemas que éste debe ser capaz

de resolver en su actividad profesional y la caracterización de los modos de actuar,

esenciales de cada uno de ellos. En este momento del perfeccionamiento curricular

de la Licenciatura en Enfermería, resulta esencial precisar con mucha claridad qué

tipo de profesional se requiere y cómo debe formarse; en tanto, el

perfeccionamiento exige la relación problema profesional- perfil del egresado. Si

esta relación no se considera, el perfeccionamiento curricular se empobrece y no es

fundamental. Toda la actividad docente de la Educación Superior se realiza con el

fin de lograr un egresado que cumpla determinadas funciones con ciertas

características; este futuro profesional debe ser capaz de enfrentarse a los

problemas existentes en su área de competencia y resolverlos exitosamente, y

demostrar con ello, independencia y creatividad. La literatura especializada

coincide al afirmar que en la formación de un profesional de nivel superior, debe

lograrse el dominio del método científico de su profesión, inherente a la actividad

laboral que realiza, para dar respuesta a los problemas profesionales que le son

Page 42: La formación de enfermeras en el Peru

inherentes; en el lenguaje de la Licenciatura en Enfermería, el dominio del Proceso

de Atención de Enfermería (PAE), como método, le permite resolver los problemas

básicos y generales que se le presentan a este profesional en sus esferas de

actuación.

"La agrupación sistémica de los problemas posibilita la determinación del objetivo

de la profesión, cuyo conjunto, delimita los posibles contenidos de la carrera. Los

objetivos de la misma, derivado del encargo social, están enmarcados por el objeto

definido del modo explicado...la necesidad profesional a través de los problemas,

establece el tipo de profesional integrado al contexto en que va a actuar, la vida",

en tanto "la visión por problemas es integradora, interdisciplinaria, se nutre del

contacto permanente con la realidad y genera compromiso a partir de la motivación

y la participación", la idónea estructuración de la vida con la ciencia enriquece y

fortalece la ciencia concreta de que se trata; significa que la pertinencia del claustro

de docentes encargado de la formación en Enfermería tiene que partir de la

consideración de los problemas profesionales como elemento esencial de las

estrategias didácticas que se consideren.

Cada tipo de profesión, tiene un objeto propio de acuerdo con la futura labor del

egresado; este objeto es un sistema que contiene una parte de la realidad objetiva

y que está determinada por el grupo de problemas que en él se manifiestan y que

requieren de la formación de un tipo de egresado para que inmerso en él, pueda

resolverlos; "el análisis reiterado del objeto y sus problemas es lo que permite

precisarlos". Al respecto V. Henderson y F Abdellah, en 1960, propusieron

"organizar los planes de estudio de enfermería considerando los problemas de

enfermería o las necesidades del paciente"; sin embargo, esta afirmación, también

planteada por otros autores, no ha trascendido por carecer de un cuerpo de

referentes teóricos y metodológicos que distingan la Carrera. Si el objeto del

egresado o de la profesión comprende tanto los modos de actuación para resolver

los problemas, método de la profesión y tareas, como el objeto de trabajo que es

aquel en donde se manifiestan esos problemas, resulta imprescindible precisarlos

por cuanto, estos dos aspectos están interrelacionados dialécticamente y se

condicionan mutuamente, en tanto sobre la base de con qué trabaja el egresado, se

precisa el tipo de actividad que desarrolla y viceversa; la contradicción entre el

modo de actuación y el objeto de trabajo se resuelve en el objeto de la profesión,

tercer elemento de la tríada, distingue cada profesión.

Page 43: La formación de enfermeras en el Peru

Para poder establecer el objeto de trabajo del egresado es necesario analizar la

práctica profesional actual y perspectiva, delimitando los problemas que se

presentan en el objeto de trabajo, los que son transformados y resueltos mediante

la actividad del profesional. En su vínculo con los escenarios de la práctica "los

problemas reales de los servicios constituyen la fuente fundamental del desarrollo

de la motivación profesional de profesores y estudiantes, de la creatividad, así

como de la esfera moral, en particular de la ética profesional"; por estas razones

asumen la condición de "categoría principal para organizar y evaluar el grado de

dominio por los estudiantes del contenido establecido en los programas de estudio";

en el diseño curricular, son los problemas los que determinan, en el orden didáctico,

los objetivos, y, a partir de éstos, el entretejimiento de los contenidos.

En consecuencia, el diseño curricular para la formación de los profesionales, con el

propósito de cumplir el encargo social, se produce con una lógica sustentada por

leyes que la rigen y constituyen su base fundamental; "estas leyes de naturaleza

dialéctica caracterizan esencialmente el diseño curricular. La primera determina la

subordinación del proceso de formación profesional al proceso profesional y

determina la estructura de carrera y la segunda, establece la relación entre la

profesión y las demás ciencias que le sirven de base y determina la estructura

interna de cada carrera".

El proceso profesional, se define como el que desarrolla el egresado, en su

actuación y comunicación social, para resolver los problemas, y apunta que se

desarrolla sobre la base de leyes. La primera de éstas vincula el proceso

profesional, considerado como un sistema, con el medio y se expresa mediante la

interrelación dialéctica entre objeto- problema-objetivo.

La segunda ley, a la que hace referencia el autor, expresa los nexos internos del

proceso y se formula mediante la relación objeto, contenido, método. El contenido

profesional es el objeto de trabajo, aquella parte de la realidad objetiva sobre la que

recaen las acciones del profesional y que es modificada mediante la aplicación de

su modo de actuación, o sea, el método particular de la profesión; en el caso que

nos ocupa es el Proceso de Atención de Enfermería (PAE). La materialización del

PAE es el Plan de cuidados, entonces el cuidado como lo plantea Leininger (1988),

citado por Vázquez (1998),"es la esencia de la enfermería y su dominio central y

característica unificante de la enfermería”; los procesos educativos deben girar

alrededor de los cuidados y de la identificación de los problemas profesionales que

conducen a la realización de esos cuidados. Esta idea, con antecedentes en los

escritos de F. Nightingale, está presente en la obra de Henderson, Abdellah, Hall,

Page 44: La formación de enfermeras en el Peru

Orem, Rogers, Orlando y otras muchas autoras de enfermería, quienes han

abordado el cuidado como la esencia de la enfermería en cuatro dimensiones

fundamentales: la persona (familia, comunidad), la salud, el ambiente y las

intervenciones de enfermería.

Estas dimensiones del cuidado ayudan a clarificar los problemas profesionales en el

campo de las competencias de enfermería, que necesita ser reconocido y

justificado, para que se convierta en la expresión de la profesión, y la esencia del

paradigma de enfermería para la educación y la práctica.

EL PLAN DE ESTUDIOS UNIVERSITARIOS EN LA FORMACIÓN DE LA

ENFERMERA PERUANA.

El Provecto Educativo o Plan curricular de acuerdo con su enfoque parte del estudio

y análisis de la situación socio profesional de la localidad, región, en el marco de un

contexto globalizado que le permite fijar las metas que se requiere alcanzar con

relación al tipo de profesional de enfermería que se intenta formar.

En el plan curricular se explicita la caracterización (perfil educativo) del egresado de

Enfermería sea en términos de objetivos, funciones o competencias. La descripción

del perfil responde al diagnostico socio profesional y a la misión del programa

institucional.

En el plan curricular esta explicita la estructura y organización de los contenidos, es

decir todo aquello que puede ser objeto de aprendizaje: conocimientos, actitudes,

habilidades. La secuencia y organización de los contenidos que pueden ser

disciplinas, áreas o módulos responden al perfil educativo, abarcan contenidos de

formación básica, social y profesional.

El plan de estudios de acuerdo a su enfoque educativo se concretiza en sumillas,

donde se describen en forma sintética y clara el contenido que se enseñara a

educando.

Las estrategias metodológicas que aplican en la enseñanza son adecuadas para

lograr el perfil educativo.

La evaluación de los estudiantes se basa en políticas y reglas claras, universales y

justas.

Las formas de evaluación son coherentes con los propósitos de formación,

estrategias metodológicas y las competencias esperadas. Se conoce y aplica la

evaluación, haciendo explicito los propósitos, criterios, estrategias y técnicas.

Page 45: La formación de enfermeras en el Peru

El programa de enfermería tiene explicito los mecanismos de gestión que permiten

liderar y ejecutar procesos de implementación, seguimiento y evaluación del

currículo, asimismo cuenta con un plan de monitoreo y supervisión del desarrollo

curricular coherente con el programa.

El plan de estudios de la Universidad Particular de Chiclayo consta de:

Cultura General y Humanística.

Básica Científica (Experiencia).

Básica tecnológica.

Técnica.

Practicas PRE-Profesionales

CONCLUSIONES

A lo largo de toda la historia los líderes de la enfermería se han referido a ella como

un arte y al mismo tiempo como una ciencia. Sin embargo, en este contexto el arte

es algo más que un concepto lineal y estático. Supone un tipo de percepción activa,

dinámica y en continuo desarrollo. Una calidad emocional guía de la transformación

del material en arte, pero refuerza el papel de la inteligencia o del pensamiento.

Así, el arte es una forma de interrogación cualitativa que extrae su sustancia de la

intuición estética. Isabel M. Stewart calificada a menudo la enfermera como un arte.

Hacía hincapié en que la enfermera, como “verdadera artista”, era esencial para el

progreso de la enfermería hacia algo más que un oficio altamente cualificado. Miss

Stewart comprendió que muchas personas veían el arte y la técnica como una

entidad única, pero siempre explicaba que un trabajo podía ser técnicamente

perfecto y, sin embargo, carecer de arte. La técnica, el alma, la mente y la

imaginación eran esenciales para la formación del verdadero artista. 

La herencia de la enfermaría es rica. Su historia es un relato de descubrimientos

Page 46: La formación de enfermeras en el Peru

que reflejan los nuevos avances realizados en cada generación. La historia de la

enfermería que se ha representado a través del arte muestra sus aspectos más

valiosos: cuidado y entrega. El cuidado es la esencia de la enfermería: cuidado por,

cuidado de, cuidado hacia... nadie podrá captar jamás totalmente el verdadero arte

o el espíritu de la enfermería

RECOMENDACIONES

Es de vital importancia durante la formación de pregrado de enfermería conocer el

origen de esta digna profesión así como el avance histórico y sus transformaciones

con el fin de posicionarnos ideológicamente en la tendencia actual de enseñanza de

esta profesión.