Rosas Castillo Saúl Giovanni

La Estrategia del Océano Azul

En propia consideración “La Estrategia del Océano azul” podría traducirse al mercado y la competitividad que existe en él, por tanto estaría compuesto de dos tipos de océanos: El rojo y el azul.

En este sentido el océano rojo representan a toda aquella industria que existen en la actualidad. En otras palabras, es lo que todos conocemos. Por otro lado, el océano azul representa a todas las industrias que aún no existen. En el océano rojo, los fines de las industrias están definidas y aceptadas por nosotros pues ya conocemos la manera en que se desempeña. Las compañías tratan de superar a sus rivales a fin de llevarse una mayor ganancia en la demanda que existe. Sin embarga, al momento de querer realizar éstas prácticas, se pierde el sentido de rentabilidad y ganancia, de esta manera los productos que se ofertan bajan de calidad y “se tiñe de sangre el agua del océano rojo”. Por otro lado, los océanos azules se definen como espacios en el mercado que aún no se han aprovechado y por la creación de demanda y oportunidades para un crecimiento altamente rentable, la innovación y creatividad jugarían un papel muy importante para crear soluciones que han pasado desapercibidas, por tanto estaríamos hablando de crear un mercado libre de competencias basado en la innovación aplicada a los productos, es decir un valor agregado.