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lA 1M E SLA VIDA de Ricardo Jaimes Freyre

(1868-1933) se recorta con tanta ni­tidez en tres etapas sucesivas que

--de inmediato- la asociamos al recuer­do de las tres etapas que jalonan la vidade aquel gran americano que se llamóAndrés Bello. 1

Dentro de las tres etapas de J aimesFreyre, la primera es la que presenta máscambiante panorama, puesto que en ellaentran sus primeros años, sus comienzospolíticos y literarios, en su patria, unaentonces trunca carrera diplomática y losaños de Buenos Aires, que culminan conla aparición de Castalia bárbara (1899).Etapa que dura desde 1868 a 1901, añode su viaje a Tucumán.

La segunda y esencial et:;tpa en la vida, de Ricardo Jaimes Freyre es la que,

abarcando exactamente veinte años deplenitud en el hombre, resalta con estenombre propio: Tucumán. Es la época dela mayor parte de la obra de Ricardo Jai­mes Freyre y de su huella imborrableen el ambiente. Exactamente, se extiendedesde 1901 hasta 1921.

La tercera y última etapa, más breve,es menos una época dl'i producción escritaque de activa labor política y diplomática.Eso sí, con abundancia de cargos, nom­bres y lugares, hasta llegar, así, al añode su muerte (1933).

:r

Había nacido Ricardo Jaimes Freyre el12 de mayo de 1868, en el Consulado deBolivia en Tacna. Hijo de don Julio Lu­cas Jaimes, de Potosí, y de doña CarolinaFreyre, de Tacna.

Los primeros años de Ricardo pasaronen Lima, hacia donde lo vinculaba el pa­rentesco de su madre, en Lima aprendiólas primeras letras e hizo sus estudiossuperiores. Entre sus profesores, RicardoJaimes Freyre recuerda particularmenteal de filosofía, el presbítero Samamé, ya su profesor de literatura, el ecuatorianoAngel Polibio Chávez. 2

En Lima, también, los primeros versos.Allí se vio obligado a dejar los estudioscon motivo del viaje de su familia -otravez- a Tacna. Esto, en 1883. Poco tiem­po quedan, pero es suficiente para queasome en la ciudad natal el primer amordel poeta. 3

Después, La Paz, Sucre, nuevos versos,la iniciación en la vida periodística, labor,esta última, en la que mucho tiene quever el modelo de su padre.

En 1888 se casó en Sucre con FelicidadSoruco, nacida en La Paz, de familia co­chababina. Aunque no había completadoestudios universitarios, desempeñó una cá­tedra de profesor de filosofía en el Co­legio J unín, de Suere, y bien pronto unarevolución -una de las tantas revolu­ciones bolivianas (y americanas)- pusoa prueba aL joven Ricardo Jaimes Freyre.En la Revolución del 8 de septiembre de1888, encabezada por los "liberales" ydirigida contra el presidente -flamantepresidente- Aniceto Arce. Ricardo y supadre se mostraron fieles a Arce.

En 1889, Julio L. Jaimes fue designadoministro plenipotenciario ante el Imperiodel Brasil. Julio L. Jaimes llevaba comosecretario a su hijo Ricardo"pero la caídadel Imperio cortó a medias el viaje. Pa-

FREYREEN

TUCUMANPor Emilio CARRILLA

dre e hijo quedaron en Buenos Aires, yno mucho después Ricardo volvió a Bo­livia para colaborar con el presidente Bap­tista, de quien fue secretario privado. Lapresidencia de Baptista se extiende desde1892 a 1896, pero -fundadamente y afalta de otras noticias- debemos pensarque su colaboración corresponde a los pri­meros tiempos de la presidencia. Siemprerecordó el estritor con particular sirnpa­tía a Mariano Baptista, señal de granamistad, pero también de reconocimientoa los méritos· de éste. .¡

Después, de nuevo, Buenos Aires, ahorapara marcar importante avance en sus vin-

Buenos Aires- "1lUelve a sus a1lligos"

culaciones literarias v en su obra. En 1894fundó con Rubér( Daría la Revista deAmérica y ese año ingresa también· aldiario La Nación, en el cual ya trabajabasu padre y se había hecho popular através del seudónimo "Brocha Gorda".

Son esos años de estrecha amistad conRubén Daría, que dominaba entonces ala juventud literaria del Plata; años tam­bién de amistad con Leopoldo Lugones,cuando éste llega a Buenos Aires. Centroimportante de reunión fue El Ateneo deBuenos Aires. Esta activa vida literariay periodística se corta brevemente en1896, en que Ricardo Jaimes Freyre viajapara desempeñar la secretaría de la le­gación de Bolivia en Río de J aneiro (elministro plenipotenciario era José Parra­vicini). Pero el cargo dura poco tiempodebido a que Ricardo es exonerado. ¡¡ Devuelta a Buenos Aires, vuelve a sus ami­gos y a su obra. En 1899 apareció Cas­talia bárbara, libro que extenderá -yacomo libro- el prestigio literario, apoya~

do hasta allí en colaboraciones periodís­ticas y en el círculo de sus amigos.

UNIVERSIDAD bE MEXICO

1I

Tucunwn

El 19 de marzo de 1901 llegó RicardoTaimes Freyre a Tucumán. Aunque lascircunstancias sean un tanto pintorescas,parece ser que Jaimes Freyre se dirigíaa Rosario de la Frontera por sus famo­sas aguas termales. Una vez en Tucumán,de paso, don Alejandro Sancho Miñano,comerciante español aquí establecido yamigo de "Brocha Gorda", convenció aRicardo Jaimes Freyre de que se quedaraen Tucumán.

En fin, debemos contar ya con ciertainclinación previa; posiblemente tambiéncon ciertos ofrecimientos. Lo concreto esque Ricardo Jaimes Freyre se establecióen Tucumán con su familia y que bienpronto comenzó su actividad cultural. Serecuerda, así, su primera conferencia pro­nunciada sobre el poeta brasileño Juande la Cruz e Sousa, 6 en la Sociedad Sar­miento de la ciudad.

La base económica sobre la cual Ri­cardo Jaimes Freyre apoyó la subsistenciafue la cátedra. Cátedras de literatura vde filosofía en el Colegio Nacional, quemantuvo durante sus veinte años de Tu-

, cumán, a las que agregó, más tarde, otrasen la Escuela Normal, junto a algunoscursos libres de la Universidad.

Periódicamente, viajes a Buenos Aires,sobre todo en las épocas de vacaciones.Deduzco el dato de una de las sabrosascartas de Emilio Becher. 7

En seguida, encontró en T u c u m á namistades y admiraciones, particularmenteentre los jóvenes tucumanos. La explica­ción es sencilla: J aimes Freyre traía a laprovincia un nombre de brillo, y dentrode ese brillo entraban obras y aun amis­tades como la de Rubén Daría. Por esofueron también los jóvenes los que másse acercaron a aquel escritor que se es­tablecía entre ellos.

Bien pronto, aquel entusiasmo iba acuajar -como no podía ser menos- enuna revista. Fue la Revista de Letras yCiencias Sociales (1904-1907), dirigidapor Jaimes Freyre y que tenía por re­dactores a los otros dos fundadores : JuanB. Terán y Julio López Ma.ñán..Esta re­vista es un verdadero testull011l0 de lacultura regional de comienzos del sig~o.En realidad, el testimonio por excelenCIa,significativa, entre otras cosas, por losnombres tucumanos que allí figuran, y notanto por lo que en ese momento repre­sentaban como por lo que después serán.Hay reconocimientos destac~dos.del va~.orde la Revista de Letras y C1encws Sooa­les: me interesa citar, especialmente, elde Unamuno, 8 aunque posteriormente di­mensión y prestigio de la revista se hayanolvidado injustamente. Pero -claro es­tá- esto escapa a méritos y previsiones.

Durante los años de la Revüta merecerecordarse también, dentro de la labor deJaimes Freyre, su intervención. en Joscursos libres de la Sociedad SarmIento deTucumán, y su papel de mantenedor deJuegos Florales, dentro de la propia re­vista.

Los cursos libres de la Sociedad Sar­miento habían nacido como un deseo decultura superior, mientras llegaba la uni­versidad que se había solicitado, univer­sidad que ya se menciona como aspiraciónen el primer número de la Revista y quehabía tenido antes su primer embrión enuna efímera Facultad de Jurisprudenciaprovincial (1875-1881).

Tucumán- "St~ huella imborrable én el, I

UNIVER,SIDAD DE MEXICQ

La Sociedad Sarmiento, porS\l anti­güedad y prestigio; era la más in?icadapara' organizar dichos cursos. 9 Rl(;ardoJaimes Freyre intervino en los de 1906,con un Curso sobre la versificación cas­tellana" es decir, tema de su particularpredilección, tanto que esas clases, al am­pliarse posteriormente, dieron lu~a.r a. ~ulibro sobre las Leves de la verslfl,cac1011castellana.' •

En cuanto a los Juegos Florales. J aimesFreyre no hizo sino colocarse en una tra­dición entonces viva. Si la Revista no 1'(:'

veló -a través de los Juegos Florales­grandes poetas, la culpa no es de ella.Eso sí, a través de palabras adornadasde J aimes Freyre, presidente del juradoy mantenedor de los Juegos -en especial,su conferencia sobre .Juglares y trovado­res- se adivina el aparato y escenografíacon que se rodeaba el acto. 10

En Tucumári se afirmó rotundamenteen J aimes Freyre una inclinación hastaentonces poco pronunciada: me refiero asu interés por la historiografía.

Es cierto que en 1895 Jaimes Freyrchabía publicado en Bu~nos Air~s unaHistoria de la Edad Med~a y los TtemposM odernos, ~ero esta obrita -la verdad-­no agrega nada a los méritos de su autor.Es uno de los tantos manuales -acumu­lación de nombres y fechas- que no re­velan' ninguna personalidad, ningún ca­ráctér definido.

Por eso, es más de destacar el interésde J aimes Freyre hacia la historia ar­g-entina, especialmente hacia la histori3; de!Tucumán. Hay, entre 1909 y 1916, cmcoobras publicadas por Jaimes Freyre enel campo historiográfico. Y en esos años,una labor de búsqueda y compulsa en ar­chivos y bibliotecas que le permitieronarribar a resultados satisfactorios. Así, en1910, el gobernador de Tucum~n, E:nestoE. Padilla, le encomienda reahzar lt1ves­tigaciones y copias de documentos colo­niales vinculados al Tucumán, en los Ar­chivos de SevilIa y Simancas. Este primerviaje a Europa se vio acompañado por unseg-undo, en 1913. Como vemos, n~ fue. laimprovisación la. base de la obra.hlstono­gráfica de Ricardo Jaimes Freyre. Qtie.­dan -claros testimonios- sus libros y 10giIe a su tarea debe el hoy bien ordenado

An;hivo Histórico de Tucllmán. El Ar­chivo 'Histórico de Tucumán no podráolvidar nunca que, en 1913 y al pocotiempo de la creación de la Universidad,el entonces gobernador, Ernesto E. Pa­dilIa, nombró a Ricardo Jaimes Freyrcorganizador del Archivo, al mismo tiempoque declaraba a éste secciÓIl de la Uni­versidad de Tucul11án. JI

Desde hacía varios años -lo hemosvisto- maduraba entre los tucumanos-particularmente entre los jóvenes- laidea de una Universidad provincial. 1~

Quien más se singularizaba en la enlpresaera precisamente uno de los redactoresdestacados de la Revista de Letras y Cien­cias Sociales: Juan B. Terán.

Juan B. Terán había elaborado un pro­yecto en 1907; en 1912, se había reactua­lizado, y se llegó así a 1913, año en que,bajo el gobierno del doctor Ernesto E.PadilIa y el Ministerio de Instrucción PÚ­blica: de Ricardo Colambres, se promulgóla ley de creación.

El Consejo Superior de la Universidadestuvo constituido -a fin de año- porJuan B. Terán, Migue! LilIo, José IgnacioAráoz, GuiI1ermo Paterson, Alberto Rou­gés, Ricardo Jaimes Freyre, José B. Gon­zález, Inocencia Liberani, Miguel P. Díaz,Juan Heller, Estergidio de la Vega, JuanChavanne, Arturo H. Rosenfeld, Alejan­dro Uslenghi y José PadilIa. Como se­cret~rio, José Lucas penna.

Reunido e! Consejo Superíor, nombrórector a Juan B. Terán, y la Universi­dad de Tucumán se inauguró oficialrr¡enteel 25 de mayo de 1914.

Lo que importa destacar aquí, entreotras cosas, es el nombre de Ricardo Jai­mes: Freyre ,como uno de los fundadoresde la Universidad. Por otro lado, el he­cho de que el creador y rector, y la mayorpart~ del primer Consejo Directivo dela Universidad de Tucumán habían for­madoparte del núcleo que había sostenidogalIarda~ente la Rev.i!ta de Letras.y Cien­cias Socwles. Tamblen -es expbcable­núcleo vinculado a la Sociedad Sarmientode Tucuroán. ,

Entre: 19i4y 1916 hay dos pérdidasfamiliares que lo tocan mpyde ,cerca:e'113 de octubre de 1914 murió en BuenosAires su padre, tan vinculado al ambiente

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"stt alllistad con Rubén Daría"

periodístico y tan conocido a través delapodo "Brocha Gorda". Entre padre ehijo había, además del estrecho afectofamiliar, una' proximidad que venía defaenas comunes. Aún más, Ricardo habíacoruenzado tempranamente su aprendizajeai lado de su padre.

El 28 de mayo de 1916, a menos dedos años de la muerte de J uEo L. Jaimes,murió su madre, doña Carolina Freyre deJ aimes, que también había sentido inquie­tudes literarias.

y para completar el cuadro de pérdidaslamentables, el 6 de febrero de 1916 ha­bíamuerto en Nicaragua Rubén Daría,gran poeta de América y buen amigo deRicardo Jaimes Freyre. La época de ma­yor amistad y trato personal aparecía untanto alejada, puesto que se remontabaa veinte años atrás, pero J aimes Freyrehabía tenido oportunidad de ver a RubénDaríQ -ya un Rubén Daría de saluddeclinante y crecientes apremios econó­micos- en los dos viajes que realizó aEuropa por encargo del gobierno de laprovincia de Tucumán. En 1916 llegó aJainies Freyre la triste noticia. Viajó éstedesde Tucumán a Buenos Aires con mo­tivo de los homenajes rendidos al poetani<;aragüense. Su tributo visible es el co­Jiocido discurso que comienza:

·"Ni los que hoy tienen los cabellos blan­cos, ni los que esperan aún, como se esperael mediodía, la llegada de esa edad enque el Dante encontró a Virgilio, alcan­zarán a comprender 10 que significa elnonibre de Rubén Daría para los artistasque eran adolescentes, cinco lustros atrás.Porque resistieron a la ola que avanzabao porque llegaron cuando sus espumasemblanquecían ya toda~ las playas, nopueden formarse un concepto cabal dela suma de entusias!,\10s, de esperanzas, deensueños de arte y belleza que' despertóen los espíritus juveniles la aparición ra­diosa del maestro ..." 13

En la ciudad de Tucumán obtuvo lacarta de ciudadanía argentina en 1916; yantes, en 191 S, había sido elegido co~cejal.

Aparte de sus cátedras en el C~leglO !'Ja­cional y en la Escuela Normal, mtervlenepor esos años. -a partir de 19.17- enunos cursos libres de lengua y literaturaorganizados por la Universida~, cursosque, en él, no eran sino ~l reflejO d: uninterés que ya había temdo oportumdad

20 UNIVERSIDAD DE MEXICO

NOTAS

1 Desde el ya clásico estudio de MiguelAntonio Caro, es común concebir esas tresetapas en la vida de Bello: 1) Educación yestudios, Venezuela (1781-1810). 2) Misiones ytrabajos literarios, Londres (1810-1828). 3)Plenitud y magisterio, Chile (1829-1865).

poeta de obra relativamente breve, p~ro

intencionadamente breve. En Tucuman,su obra se amplía hacia la prosa y, den~rode ella, hacia sectores donde llegó a deJ~r

obra valiosa, medible en títulos y nu~

meros. Sin duda, Ghiraldo desconoce caSIpor completo la labor realizada por JaimesFreyre en Tucumán.

JI!

En 1921 comienza -como hemos di­cho- la tercera y última etapa en la vidade Jaimes Freyre. Etapa relativa.m~nte

breve, marcada sobre todo por la actIVIdadpolítica y diplomática, aunque muy poc.odejó dentro de un valor estrictamente }¡­terario.

Claro que al conocer de manera deta­llada la serie de cargos desempeñados porJaimes Freyre en su patria, o fuera deella pero vinculados a su. patria, compren­demos que la labor literaria era apenasposible en medio de aquel alud de tareasque se sucedían sin tregua. Diputado, ~'a­

rias veces ministro, delegado ante la LIgade las Naciones, embajador ante el Go­bierno de Chile, embajador ante los Es­tados Unidos,18 embajador en el Bra­sil ..., hasta candidato a la presidencia dela República de Bolivia. Y todo en menosde diez años.

Después, ya los años postreros, en laprovincia de Buenos Aires (Temperley,Banfie!d), sólo turbados por el llamadodel gobernador de Tucumán, Juan LuisNougués, que le ofrece la presidencia dele o n s e j o Provincial de Educación, en1932. Alcanzó a estar aquí pocos meses,renunció y volvió a Buenos Aires. Esemismo año la Academia Argentina deLetras, de reciente fundación, lo nombrómiembro correspondiente. 19

Finalmente, la muerte, en Buenos Aires,el 24 de abril de 1933. A fines de ese añose repatriaron sus restos, que se encuen­tran hoy -conjuntamente con los de supadre- en la basílica de Potosí.

2 Posteriormente, los evocará Ricardo Jai­mes Freyre en versos que no se han recogidoen sus libros poéticos.

Un anciano sacerdote de alma tímida,de serena faz, cordial como un abuelo . ..

(El pl1esbítero Samamé)Un poetammirigalesco y 1'0'/'llántico ...

(Angel Polibio Chávez)(Ver Raúl ]aimes Freyre, Anecdotario de Rl'­cardo]aimes Freyre, Potosí, 1953, pp. 22 Y 23).

3 "Era yo un adolescente, tenía apenasquince años. Dejé los estudios para volver conmi familia a la ciudad de Tacna ...

"Mis versos tuvieron ya un objeto y unafuente de poesía. Hasta ese momento, desde losensayos del aula no habían revelado rincón al­guno de mi reino interior. Y circulaban de manoen mano, entre mis compañeros de estudios,El poeta surgió cuando surgió la primera figurade mujer que se volvía a él ..." (Fragmentode prosa autobiográfica, en Raúl ]aimes Freyre

! Anecdotario, pp. 15 Y 16.) ,

4 "Los ojos pequeños v brillantes bajo lafrente pensativa, la cabeza gris, el busto incli­nado, el ademán sobrio y enérgico, una levesonrisa desflorando los labios, la voz que pa­recía brotar de una vag-a lejanía: así evoco misprimeros recuerdos del gran tribuno ..." (Ri­cardo Taimes Freyre. Mariano Baptista, en Re­vista de Letras y Ciencias Sociales, Tucumán,1907, VI, N° 31, p. 50)."interés hacía, la historia argentina"

"¿ Sabe Ud., por, cierto que estoy aquí eneste rincón del mundo, linda y prósperaciudad, donde )I~,;ci:ttaza de echar raíces,como unántiguo .fauno que se vegeta­liza? Debe- Ud:. saberlo, aun cuando sólofuera por la'ReviStade Letras y CienciasSociales, que puntualmente le envío ..."(Carta fechada en Tucumán, e! 6 dejunio de 1905.) 16 '

Alberto Ghiraldo, que publicó completala carta, sin duda para compensar lagunaspor falta de otras cartas, hace considera­ciones sobre J aimes Freyre, su escasalabor poética de esos años y el ambientemezquino:

Jaimes Freyre pasó en Tucumán unaépoca fundamental de su vida, époc~ fe­cunda en múltiples aspectos. Pero JalmesFreyre no estuvo aquí como un conde­nado, ni como persona que busca en unaalejada ciudad mediterránea lo que nopuede conseguir en ciudades de más im­portante nombre.

Jaime Freyre se encontró cómodo enTucumán y recibió muestras inequívocasde lo que se apreciaba su obra y aun de loque significaba su presencia como irra­diación, como ejemplo vivo. Tenemos, alrespecto, testimonios ajenos. Sin embargo,pesan más --otra vez- las propias pa­labras del poeta, que extraigo de unacarta dirigida a Rubén Daría:

J aneiro al final de su carrera diplomá­tica.",ló

"Jaimes Freyre, estrechado por la vida,debatiéndose en medios mezquinos aunpara e! cultivo y desarrollo de! arte lite­rario, su verdadero ideal, abandonó lalira, que sólo de tarde en tarde dio, y muyespaciadas, muestras de su don privi­legiado ..." 17

Un conocimiento elemental de la viday obra de Jaimes Freyre nos muestra quesi Jaimes Freyre no produjo una obralírica muy fecunda no se debió ello alas causas enunciadas tan sin fundamentospor Alberto Ghiraldo: Jaimes Freyre es

de manifestarse con anterioridad en di­versos e s t u dio s y semblanzas, aunque-fuera de sus trabajos sobre la versi­ficación- no llega a dejar aquí obrasperdurables. Claro que esto no quita quetodavía en Tucumán sea un recuerdo VIVO

el entusiasmo y la palabra sonora deJaimes Freyre en sus clases de literatura.

En 1917 y 1918 fue redactor -con­juntamente con Alberto Rougés y JuanHeller- de la Revista de Tuc:tmán, ór­gano de extensión uni~ersitar~a edit~d.o

por la Universidad de fucuman y dlfl­gido por Manuel Lizondo Borda. La par­ticipación directa de J aimes Freyre esmuy escasa: en rigor, un poema. (L~ :e­vista ofrece, sin embargo, algunas noticiasacerca de su actividad docente y un breveestudio de Octavio Lobo sobre su libroLos s~teños son vida.) Demás está decirque hay, en cuanto él su prese~cia, unadistancia enorme entre esta, revista y laRevista de Letras y Ciencias Sociales.

De su participación activa en la vidade la Universidad tenemos otro dato va­lioso; a mediados de 1920, el Consejo Su­perior lo designa --conjuntamente conAlberto Rougés y Abis Bachmann- paraque estudie la posible nacionalización dela Universidad de Tucumán. 14 Sin em­bargo, ya no estaba en Tucumán cuandoel 4 de abril de 1921 se firmó e! acta denacionalización.

Por esa época también hace algunosviajes a Bolivia, invitado a dar confe­rencias. En 1916 dio conferencias en Po­tosí, y en 1917, en Sucre, en la Univer­sidad Femenina. Estos viajes tienen másimportancia de lo que a primera vistaparece, y son algo así como el puente queacercará, de nuevo y de manera lenta,a Jaimes Freyre con su patria.

Esa proximidad se hace más patentealrededor de 1920, cuando nace y triunfaen Bolivia el Partido Republicano, orga­nizado por Escalier, Bautista Saavedra yDaniel Salamanca. La Revolución de 1920permitió la ascensión del Partido Repu­blicano, partido que llama a Jaimes Freyrepara que viaje a Bolivia y tome parteactiva en tareas de gobierno. En esascondiciones, no puede extrañar que Ri­cardo Jaimes Freyre deje Tucumán en1921. Tengo conocimiento de que en prin­cipio solicitó licencia de sus cátedras, loque obliga a pensar que no consideraba'el viaje como un alejamiento definitivo,sino -más bien- transitorio. O que, detodos modos, quería salvaguardar sus cá­tedras de Tucumán. Por lo visto, el ale­jamiento fue más largo de 10 que en uncomienzo imaginó, puesto que salvo unabreve gestión, ya muy cerca de su muerte,en 1921 se cierra la etapa, la gran etapatucumana de Ricardo Jaimes Freyre.

No puede desconocerse la importanciafundament:l ¡ que tiene Tucumán en lavida de Jaimes F reyre. Los veinte añospasados aquí constituyen su época de ma­durez y de mayor producción intelectual.T a m p o c o puede desconocerse lo que-dentro del medio- llegó a _~~g!1ificar.

"Fui testigo muy próximo -escribió mástarde Juan B. Terán- de esos años re­cogidos, entre Daría y la diplomacia, pa­sados en la ciudad provincial, que llegóa amar como uno de sus hijos, y comonosotros, sin quebrantarse el amor porla ausencia." "Nunca fui más feliz queeh Tucumán, decía a un amigo en Río de

UNIVERSIDAD ,DE MEXICO 21

NOTICIAS DEL REINO UNIDO

Una exhibición de pintura, esculturay cerámica, fue inaugurada en Londrespor el artista chileno Luis Guzmán Reyes.Guzmán estudia cerámica en Londresbecado por la UNESCO.

*

El 11 de noviembre se transmitió porprimera vez en Gran Bretaña, a travésde la B. B. c., la ópera basada en un temade Don Quijote. Su autor, MauriceOhana, de descendencia anglo-española,la escribió en 1956.

*Se inauguró en Londres una exposición

del escultor británico Kenneth Annitage.Armitage es bien conocido en NuevaYork, Estocolmo, París y Sao Paulo.

*

Una figura de tamaño natural de PapúN oel recibirá a los visitantes que acudana la exposición de figuras de cera elemadame Tussaud, cerca de la estaciónlondinense de Barker Street.

5 Adolfo Costa du Rels cita estas pal<:brascomo dichas por Ricardo Jaimes Freyre:"Los revolucionarios liberales, al exonerarme deun cargo diplomático creyeron hacerme un daño:me hiciera un bien. Reanudé mis tareas lite­rarias, conocí a Daría y Lugones. Esto bienvale un puesto de secretario de legación." (Verprólogo de A. Costa du Rels a las Páginas dis­re,-.lOs, de Ignacio Prudencia Bustillo, Sucre,1946, p. 17.)

Ahora bien, aquí hay datos que chocan:la "Revolución liberal" o federal no puede serotra que la que triunfó en 1899 (ver AlcidesA rguedas, Historia contemporánea de B alivie"en Historia de América, dirigida por RicardoLevene, x, Buenos Aires, 1941, pp. 98-99). ADarío y Lugones -claro está- los conocióantes, particularmente a Daría, que ya no es­taba en Buenos Aires en 1899.

ú Cruz e Souza (1861-1898), poeta SImbo­lista brasileiio, agregó al valor de sn obra liricaresonancias extraliterarias: "poeta negro" y 'or­ganismo vencielo por la tuberculosis.

J aimes Freyre, que tuvo oportunidad de tra­t::rl0 en el Brasil, mostró particular estimaciónpor este hermano de escuela. Y,¡ en 1899 habíapronunciado una conferencia sobre Cruz e Souzaen el Ateneo de Buenos Aires, conferencia pu­hlicada en El Mercurio de América, lb BuenosAires, 1899, IV. (Cf. Otto María Carpeaux,Pequena bibliografia critica da literatura bra­sileira, Río de J aneiro, 1955, p. 200.)

7 En una carta de Emilio Becher dirigida aEmilio Ortiz Grognet, fechada en Buenos Airesel 4 de diciembre de 1903, leemos:"Después de lo cual marchamos hacia'la moradade J aimes Freyre, donde hicimos nuestras COll­

versaciones ..." (ver Nosotros, segunda época,Buenos Aires, 1937. n, NQ 15, p. 168).

La "morada" de J aimes Freyre en BuenosAires era probablemente la casa de su padre,don Lucas L. J aimes.

8 eL Unamuno, en Taine, caricatltrista:"De las varias revistas que recibo de la Américade lengua española, una de las que hojeo siem­pre con más interés y complacencia es la Re­vista de Letras y Ciencias Sociales, de Tucumán,que dirige don Ricardo Jaimes Freyre y redac­tan los doctores Julio López Mañán y Juan B.Terán ..." (Ver Temas argentinos, ed. de Bue­nos Aires, 1943, p. 75.)

9 Juan B. Terán pronunció el discurso ina­ugural, como presidente de la sociedad Sar­miento. (Ver Revista de Letras y Ciencias So­ciales, Tucumán. 1906, Y, NQ 25.) Los primeroscursos fueron el de .Taimes Freyre y otro elelDr. Ubaldo Benci sobre Conflictos .\aciales.

Digamos también que el Dr. Ubaldo Benci-en 1904- había anticipado esos cursos y. sucarácter. vinculándolos a lo que la bibliotecade la Sociedad Sarmiento podía significar -ensí- como comolemento. (Ver Revista, 1904, I,NQ 4, pp. 338-341.) En esta forma, y más allá

ele agregados postizos, puede medirse tambiénlo que la Sociedad Sarmiento, como institucióny a través de sus hombres representativos, re­presentó en la posterior creación de la Uni­versidad.

10 En 1907. al hablar sobre Juglares JI tro­~Icdores, dijo Jaimes Freyre:"Por tercera vez llamaré a los poetas a recibirel premio de sus versos, bellos y armoniosos ..."(Ver Revista de Let-ras y Ciencias Sociales,Tucumán, 1907, VI, NQ 35, p. 284.)

Antes, con motivo de los primeros JuegosFlorales, había escrito en la Revista una notatitul?da nrecisamente Juegos Florales. (VerRev:'sta, Tucumán, 1905, III, NQ 13.)

11 La parte ejecutiva del decreto dice losicruiente:"Art. 19 Se procederá a organizar y completarel Archivo Histórico de la Provincia, declaradosección de la Universidad de Tucumán."Art. 2Q El trabajo a realizarse, mientras seestablece la Universidad, consistirá en clasificarlas piezas y disponerlas para su publicación;gest:onar la devolución de docuinentos queha"<:n pertenecido al Archivo y obtener coniasauténticas de piezas relativas a la historia vgeogTafía de la provincia que se encuentren enarchivos ¡lacionales y extranjeros."Art. 3Q Encárguese al Sr. Ricardo JaimesFreyre, para dirigir los trabajos que este de­creto ordena ..." (Universidad Nacional deTucumán, Compilación de antecedentes . .., Tu­CtImán, 1939, p. 32.)

12 Recordemos, de nuevo, que por ley pro­vincial ele 1875 se había creaelo la Facultad deTurispruelencia y Ciencias Políticas, Facultadque murió en 1881, con el veto del ministroPizarro. Recordemos también, los cursos libresele la Sociedad Sarmiento.

13 Ver el discurso en Raúl J aimes Freyre,Anecdotario, pn. 139-152.

14 Ver Universidad Nacional ele TUCllmán,Com.bila.ción de antecedentes .. ., p. 132.

15 Juan B. Terán, Ricardo .raú1/es Freyrf',en Nosotros, de Buenos Aires, 1933, XXVII, pp.280-281.

16 Ver Alberto Ghiraldo, El archivo deRubét; Daría, Buenos Aires, 1943, pp. 260-261.

17 Alberto Ghiraldo, El archivo, p. 261.

18 En estos cargos, constituyó preocupaciónfundamental de Jaimes Freyre el problema dela salida al mar, tan infructuosamente recla­mada por Bolivia. En Ginebra, en Chile y enlos Estados Unielos propuso la revisión deltratado ele 1904. (Naturalmente, defendió laidea, con más fervor, en Chile.)

19 Ver Boletín de la. Academia Argentinade Letras, Buenos Aires, 1933, l, NQ 1, p. 84.

*Por primera vez en el último cuarto

de siglo, en el famoso teatro londinenseDrury Lane, se presentará como atrac­ción ele Navidael, una obra ele Shakes­peare.

*El Premio N obel de Química para

1957, ha sido otorgado al biólogo ele laUniversidad de Cambridge, Sir Alexan­der R. Todd, descubridor de la vitamitnB]~.

*Los miembros de las Universidades de

Oxford y Cambridge, que han preparadola expedición a la América Latina, ini­ciaron su viaje hacia Brasil con objetode realizar una jira de ¡;xploración. Laexpedición tomará películas documentalespara la B. B. C.

*En los terrenos del nuevo colegio uni­

versitario de Rhodesia y N yasalandia seha eregido un mástil de 20 mts., ele alturadotado ele antena para transmiti r señalesverticales a la ionósfera.

*El avión británico, a reaCClOn, Comet-3

aterrizó en Johannesbu rgo, después dehaber realizado un vuelo de 10,400 kiló­metros desde Hatfield en 13 horas y unminuto. N o existe récord anterior paraeste trayecto.

*Australia va a construir 5 centros de

observación sísmica para estudiar los mo­vimientos debajo de la superfici~ ten'es­tre, que ayudarán durante el Ano Geo­físico Internacional, y para otros proyec­tos futuros.