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Frente Nacional De Lucha En Defensa De Los Servicios Públicos y Los Recursos Naturales

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Guatemala, 19 de Febrero del 2007

¡Jalapa se vistió de pueblo!

yer, tal y como se había anunciado, en el marco de una multitudinaria, alegre y

combativa actividad, se realizó el lanzamiento del Movimiento Amplio de Izquierda, MAÍZ, en Jalapa. Ayer el pueblo jalapaneco, unido como un solo puño, decidió tomarse la palabra y, con ello, hizo temblar a las derechas y a toda esa retahíla de politiqueros de siempre que han venido engañándolos a lo largo de tantos años.

Ayer Jalapa se vistió de pueblo. Estrenó un hermoso traje tejido de unidad, de dignidad, de decoro, de conciencia y de voluntad de cambio. Ayer hombres y mujeres de Jalapa fueron a la vez protagonistas y testigos del renacer de la confianza, de la autoestima y de la certeza de que, cuando el pueblo dice “¡basta ya!”, no existe fuerza alguna que pueda detenerlo en su marcha por la conquista y construcción de su propio futuro.

Tras los hechos políticos de ayer, nadie que esté en su sano juicio puede negar o ignorar lo que resulta evidente: Este pueblo, nuestro pueblo, ha emprendido ya un irreversible camino de cambio, y está dispuesto a luchar por alcanzar el ejercicio pleno de cada uno de sus postergados derechos.

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Desde una hora antes de la anunciada para dar inicio al evento, ya era evidente la respuesta de la población al llamado de MAÍZ. De igual manera, quedaba clara la estrecha y armoniosa articulación existente entre las organizaciones que integran el Movimiento Amplio de Izquierda. Las fuerzas político partidarias y las de organizaciones populares se supieron entrelazar en un solo cuerpo social, en una sola y alegre marea triunfante.

Poco a poco, el pueblo y sus legítimas organizaciones se fueron haciendo presentes, encabezados por el Movimiento Campesino por la Dignidad, nacido en las montañas de Jalapa, y bien articulado con todas las otras fuerzas sociales. La foto muestra, al frente y orgullosos con sus playeras del FNL, (primeras que se producen en todo el país) a algunos de los compañeros y compañeras que formaron parte del Comité de Orden, quienes no tuvieron un minuto de descanso y realizaron un magnífico trabajo, a cuyo buen resultado contribuyó la actitud del pueblo, quien siempre buscó colaborar y hacer del acto un evento grato, alegre y lleno de fraternidad. Puede apreciarse, en la foto anterior, cómo apenas se estaban llevando las sillas para la tarima, lo que evidencia que la actividad aún no se había iniciado, aunque ya se había hecho presente una multitud de personas. Los compañeros y compañeras que sostienen la manta son la delegación de la estructura de MAÍZ en el Departamento de El Progreso, quienes también se disponen a desplazar a las derechas en su tierra.


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Ante la presencia anticipada de tanta población, Dora Regina Ruano, miembro de la Comisión Política del FNL y dirigente del SNTSG, se tomó el micrófono para improvisar una introducción, que supo conducir con excelencia. Se puede ver, con facilidad, cómo ya habían acudido mucho más personas. Hasta los techos de los camiones fueron utilizados por la población para seguir paso a paso el desarrollo del acto político.

Ni el intenso frío ambiental ni la amenaza de lluvia veraniega fueron suficientes para disminuir el caudal humano que, como río desbordado, se tomó las calles de Jalapa. La temperatura fue pronto combatida por el calor humano que brotó espontáneo de millares de personas que se entregaron de corazón al festejo cívico del pueblo y allí se mantuvieron, firmes y combativas, con la sonrisa a flor de piel y el puño izquierdo en alto levantado contra los opresores.

La mazorca de la URNG y el rojinegro del FNL se fundieron en una sola imagen, en un solo logotipo de pueblo y de partido, que no dejó un instante de ondear sostenida por orgullosas manos del pueblo, manos que hoy, además, se aprestan para construir su propio futuro, definido por ellos mismos. A nuestro juicio, esa fue la esencia misma de la actividad: la expresión clara de vocación de poder por parte del pueblo jalapaneco y sus organizaciones.


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Al iniciarse la actividad, sombrero y puño izquierdo en alto, el pueblo saluda a su propio futuro y vitorea la pronta construcción de una Guatemala justa, digna y humana, con la que han soñado a lo largo de tantos años. Porque de eso es de lo que se trata: de asumir el poder desde el pueblo, para construir los sueños del pueblo. Ya no más políticos llenos de promesas vacías. El pueblo, por sí mismo, está dispuesto a tomarse la palabra.

¡Un rubí, cinco franjas y una estrella! Orgullosa y digna, la bandera cubana ondeó movida por los aires jalapanecos. Allí, en el mismo Departamento en el que el Gobierno y el pueblo de Cuba instalaron recientemente una clínica oftalmológica al servicio de quienes no pueden pagar por ese tipo de atención especializada. El pueblo, agradecido, la recibió y la aplaudió como si fuera la suya propia. La solidaridad internacional fue una de las notas destacadas del evento. No sólo por las múltiples delegaciones que se hicieron presentes, sino, además, por la cantidad de saludos que hicieron llegar por diversas vías organizaciones hermanas que, desde otros países, se suman fraternas a la lucha emprendida por nuestro propio pueblo.


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Entre los oradores estuvo el joven y por mérito propio destacado dirigente del movimiento estudiantil, Calixto Morales, quien ha sabido estar al frente de las luchas por hacer valedero el derecho del pueblo a la educación. Hizo un ferviente llamado a preservar la unidad y a mantener en alto el espíritu de lucha, como requisitos indispensables para alcanzar la próxima victoria.

Desde el pueblo Kaqchikel, una compañera saludó al pueblo jalapaneco y, tanto en su lengua materna como en español, llamó a la unidad de los pueblos indígenas alrededor de un proyecto político de naturaleza revolucionaria, en el entendido de que sólo desde una posición auténtica de izquierda, será posible hacer valederos los derechos e identidad de los diversos pueblos que conforman la trama social propia de Guatemala.

Es importante destacar que la actividad, en su conjunto, se constituyó en una muestra clara de la alianza natural que se da entre el pensamiento político revolucionario y las organizaciones de los pueblos maya, garífuna, xinca y ladino, que se hicieron presentes con delegaciones propias y respaldaron el lanzamiento de MAÍZ en Jalapa.


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Dos compañeros delegados del Departamento de Santa Rosa, incluidas las organizaciones Xincas, se hicieron presentes e informaron sobre cómo, allá en su Departamento, las diversas organizaciones populares se han articulado alrededor de MAÍZ y se disponen a sacar del poder a las derechas que lo han usurpado por largo tiempo, en beneficio exclusivo de minorías egoístas y codiciosas, y en perjuicio de las grandes mayorías.

Desde Zacapa, un destacado dirigente comunitario de Río Hondo hizo uso de la palabra y expresó cómo, a lo largo de su vida, no es sino hasta ahora que encuentra en MAÍZ un proyecto político en el cual puede confiar y al cual, por lo tanto, han decidido respaldar las comunidades que, en defensa de sus recursos naturales, supieron derrotar en varias consultas populares, las ambiciones desmedidas de las empresas hidreoeléctricas y de las compañías mineras. La defensa cerrada y firme de nuestros ríos, lagos, bosques, playas, montañas, de las enormes riquezas que alberga nuestro subsuelo, incluso de la lluvia y del aire que respiramos, fue uno de los ejes centrales alrededor de los cuales se reunieron tantas y tantas voluntades.


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El Doctor Héctor Nuila, Secretario General de la Unidad Revolu-cionaria Nacional Guatemalteca, URNG, fue recibido con un aplauso cerrado y fuerte, y su discurso, claro, conciso, profundo y combativo, fue interrumpido varias veces con nuevos aplausos de aprobación masiva. Es una lástima no haberlo grabado, porque valdría la pena reproducirlo y circularlo como material de estudio.

Y correspondió intervenir al futuro Alcalde de Jalapa, compañero Abel Cruz, a quien los vítores incesantes casi no dejaron hablar. Allí, en la base, estaba su pueblo, aquellos con quienes creció y ha vivido, y cuyos problemas conoce porque también los sufre. Planteó la importancia de que el pueblo decida tomarse el poder y anunció su firme voluntad de respetar, desde su futuro cargo, esa voluntad popular que le asignará el rol de primer servidor del pueblo jalapaneco. Debe destacarse que el planteamiento de que se elegirán servidores, pero que la verdadera autoridad reside y residirá siempre en el pueblo, fue un eje transversal que estuvo presente en todas las intervenciones. Es decir, una nueva forma de entender el poder y de darle, entonces, la vuelta a la tortilla.


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Fue, entonces, el turno de Maco García, futuro diputado por Jalapa. Se comprometió a responder fielmente a las demandas del pueblo al que pertenece. A ser un diputado diferente, vinculado estrecha e indisolublemente a su pueblo y en constante comunicación con el mismo. Se comprometió a defender, desde su curul, los intereses superiores de los pobres, de los excluidos, de los marginados de Jalapa.

Cerró esta parte del evento nuestro dirigente Luis Lara, reconocido e infatigable luchador por los derechos superiores del pueblo. Sus palabras, enérgicas y vibrantes, llamaron al pueblo a generar el cambio necesario, a despertar en cada ciudadano y ciudadana una nueva y urgente vocación de poder, para estar así en posibilidad de desterrar para siempre a las derechas que han sumido al país al borde mismo del desastre.

En este punto, el acto político, iniciado puntualmente a las 2 de la tarde, llevaba más de dos horas. Sin embargo, nadie se había retirado, nadie mostraba señal alguna de cansancio. La algarabía, las consignas, el jolgorio, la fraternidad, la combatividad, brotaban desde el pueblo con constancia y con espontaneidad.


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La fotografía es suficientemente elocuente. A las 16:32, durante el discurso de Luis, el pueblo no paraba de saludar, de vitorear, de expresar su alegría y su combatividad. El sol ya empezaba a bajar en el horizonte, pero no así los ánimos en los corazones del pueblo. La consigna “¡La Lucha Sigue!” fue coreada una y otra vez por la multitud presente y no sólo como una consigna más, sino como un auténtico compromiso de darle

continuidad a esa lucha emprendida por la construcción de otra Guatemala posible, de un nuevo proyecto de nación en el que la justicia y la paz lleguen a ser realidades cotidianas y no sólo palabras para engalanar discursos.


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Como parte de la actividad, se realizó una invocación a la tierra y a su generosidad, realizada por la Asociación de Mujeres de Xalapán, así como la presentación de un grupo local de danza. Ambas actividades orientadas hacia el rescate y reafirmación de su propia cultura milenaria.

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