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INSTRUCCIONES (p.ej. 530.763)Collares con nudos entre las cuentas

ENHEBRAR Y ANUDAR

Collares con nudos entre las cuentas

Seguir el orden de las perlas que apare-ce en la ilustración.

Collar anudado en rojo y negroLargo: 40 cm

Material: Seda natural en negro, 0,75 mm øAprox. 30 perlas redondas de coral, 10

4 perlas redondas de onyx, 10 mm øColgante de concha3 cuentas dado, 12 x 12 mm

2 calotas doradas, 4 mm ø

2 perlas pequeñas2 anillas de cierre, doradas, 3,7 mm øCierre de bisutería., dorado, 17 mm

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ENHEBRAR Y ANUDAR

Collares con nudos entre las cuentas

Los collares con nudos entre las cuentas, en los cuales cada perla se separa de la siguiente mediante un nudo, son especialmente flexibles, aumentan el efecto de las perlas, y además tienen el conveniente de que, si se rompe el collar, las perlas

individuales no se pierden. Por último, los nudos protegen a las perlas para que no haya fricción entre sí.

Organizar las perlas para el collar en el orden correcto (o ponerlas en un tablero de enfilado). Recoger, con la aguja de enfilar en la que está enhebrada la seda para perlas, las tres perlas que más a la derecha se encuentran, recogiéndolas de izquierda a derecha, y empujarlas hasta unos 15 cm antes del final del hilo. Para finalizar, atar con un nudo. El diámetro de la seda para perlas debe adecuarse a la perforación de las perlas. Se recomienda comprobar si el diámetro es correcto o no haciendo un nudo y viendo si frena la perla, antes de continuar.

Justo antes de la última perla enfilada, hacer un nudo o colocar una perla pequeña (2,6 mm ø), que se podrá incorporar más tarde a la calota. Para un cierre profesional hay alternativas adicionales.

Pasar la aguja con el hilo largo a través de la última perla recogida, hacer un nudo y atarlo muy cerca de la perla. Empujar una perla más, pasar a través de ella el hilo largo, y volver a ha-cer un nudo y cerrarlo. Después de haber colo-cado la tercera perla de la misma forma, fijar el nudo con pegamento y cortar el trozo corto de hilo.

Engarzar todas las otras perlas y fijarlas al final del hilo a través de una perla de freno con im-perdible. Ahora traba-jar los nudos individual-mente con el hilo largo. Para ello, dejar colgar el trozo ya anudado más una nueva perla sobre la mano.

A continuación recoger el hilo de atrás hacia delante, cruzarlo con el otro hilo y fijar el punto de intersección entre los dos hilos con el pulgar.

Colocar la mano de forma que apunten los dedos hacia arriba, y dejar caer hacia abajo, entre el hilo tensado y la palma de la mano, el trozo ya anudado, que cada vez se va haciendo más largo. Si el agujero de una perla es más grande, dejar caer la seda de perlas con las perlas dos veces entre el hilo tensado y la palma, agrandando

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Hacer más pequeño el nudo con una pinza, estirando y empujando hacia la perla. Lo mejor para este fin es usar unas pinzas especiales para anudado, cuyas puntas redondas no dañan el hilo de enfilado de perlas.

Empujar las últimas dos perlas sin nudo, pero dejando margen de maniobra para los nudos que se harán más tarde. Empujar encima una rocalla (para la perla de separación) u otro cierre, y entonces retirar el hilo por la última y después la penúltima perla; asegurar el nudo entre las perlas con pegamento. Cortar el sobrante de hilo, al cual estará todavía colgada la aguja.