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i i i iii^i Núm. 10181 HD GASES CO NTAM I NANTES DEL AMBIENTE DE LOS ALOJAMIENTOS GANADEROS JOSE MANUEL HERNANDEZ BENEDI Veterinario Técnico del Servicio de Extensión Agraria -_ ^ -^^ ^ ^ __-^ ŝ^^ ^ rw ^^^^^ ^+ ^j.. ^ill,t -- ^ "!^ ^// /% 111^ ^ ^ ^ ^ ^ l^ . ,/1 ^/^T77^1! ^^ ^^ ^®N^ urns+^^w^ ^ ^ `^.. ^1 l^9^ í~íZ^ ^ ^„^^,,^ MINISTERIO DE AGRICULTURA , ,í'> 1 ^^t^;;^^ ^,^^,

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Núm. 10181 HD

GASES CO NTAM I NANTESDEL AMBIENTE

DE LOS ALOJAMIENTOSGANADEROS

JOSE MANUEL HERNANDEZ BENEDIVeterinarioTécnico del Servicio de Extensión Agraria

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GASES CONTAMINANTES DEL AMBIENTE

DE LOS ALOJAMIENTOS GANADEROS

El ambiente de los alojamientos ganaderos cerrados dependede una serie de factores tales como la temperatura del aire, lahumedad relativa del mismo, su composición química, la ilumina-ción, etc.

Existen instalaciones ganaderas modernas en las que muchosde estos factores se regulan de forma totalmente automática yprecisa, pero hay todavia muchas explotaciones en las que los ani-males permanecen encerrados durante todo el año o, por lo me-nos, en la época invernal, viviendo en un ambiente más o menosperjudicial e incluso peligroso para el ganado y para las personasque atienden a su manejo.

El problema preocupa a muchos ganaderos que son conscien-tes de que la explotación de los animales en un ambiente inade-cuado es causa de pérdidas económicas.

A falta de estadísticas sobre esta cuestión, puede ser significa-tivo señalar que en el departamento francés Costas del Norte, si-tuado en la región de Bretaña, un servicio de asistencia a losganaderos, el EDE (Etablissement Départemental de 1'Elevage),ha realizado en los tres últimos años más de 200 controles deambiente en cochiqueras. Los técnicos de este servicio han con-trolado en cada uno de los alojamientos que han visitado a reque-rimiento de sus propietarios, la temperatura, la humedad relativay, sobre todo, la ventilación y la contaminación del ambientepor gases. Después, basándose en los resultados de estas obser-vaciones, han indicado a los ganaderos las medidas que debíanadoptar para mejorar las condiciones ambientales de explotacióndel ganado. El resultado en muchos casos ha sido conseguir unmejor estado sanitario de los animales y la disminución del índicede conversión de alimentos.

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Después de hacer estas consideraciones previas que ayudan acentrar el problema, vamos a referirnos a continuación a la com-posición química del aire dentro de las construcciones en las quese alojan las distintas especies de ganado, por ser éste uno de losaspectos que hay que considerar para conseguir un ambiente sanoy agradable.

COMPOSICION DEL AIRE

El aire que respiramos tanto las personas como los animalesestá formado por una mezcla de gases, que en lo que se refierea volumen está constituida por un 78 por 100 de nitrógeno y un21 por 100 de oxígeno; es decir, en un metro cúbico de aire hay2101itros de oxigeno, elemento químico que es indispensable parala vida de los seres superiores. El nitrógeno y el oxígeno cons-tituyen, por tanto, el 99 por 100 del aire; el uno por ciento res-tante son dióxido de carbono, argón, hidrógeno y pequeñísi-mas cantidades de otros gases inertes (helio, neón, criptón, xenóny radón).

Todos los gases citados anteriormente se denominan compo-nentes constantes del aire, para diferenciarlos de otros, llamadosocasionales, que sólo se encuentran en él cuando por alguna cir-cunstancia se producen o desprenden en un sitio y se difunden enel aire que hay a su alrededor.

Fig. 1.-Un ambiente sano dentrodel alojamiento contribuye a quelos animales gocen de buena saludy aprovechen mejor los alimentos

que consumen.

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En las explotaciones ganaderas, sobre todo en aquellas dota-das de emparrillados y fosas en las que se recogen las deyeccionesanimales en forma de estiércol fluido, estos gases ocasionalesson, entre otros, el amoníaco, el sulfuro de hidrógeno y el metano.

Cuando se habla de la composición química del aire hay quehacer referencia necesariamente al vapor de agua. El aire que res-piramos contiene siempre una cantidad más o menos grande devapor de agua, que se expresa en forma de humedad relativa.La humedad relativa del ambiente es un factor importante en lasexplotaciones de ganado y hay establecidos para este valor unoslimites óptimos, que varían en función de la especie ganadera deque se trate, de la edad de los animales, del tipo de producciónque se pretende obtener de ellos, de la temperatura ambiente, etc.Sin embargo, en esta publicación no vamos a referirnos a todoesto, porque, por una parte, el tema de la humedad ambientalde los alojamientos ganaderos merece ser tratado aisladamente;por otra, el vapor de agua no constituye un componente esencialdel aire, y, finalmente, porque aunque la humedad relativa alcan-ce valores próximos al 100 por 100, la gran cantidad de vaporde agua que hay en el aire entonces no constituye un contami-nante del ambiente.

LOS GASES CONTAMINANTES

La contaminación del ambiente de un recinto ganadero pue-de ser fisica, química, microbiana o radiactiva. En esta publi-cación nos ocuparemos solamente de la contaminación químicadel aire de los alojamientos ganaderos, producida por ciertos ga-ses cuando alcanzan niveles que resultan perjudiciales o tóxicospara los animales y las personas que cuidan de ellos.

Los gases que entrañan más o menos peligro para los anima-les y el hombre, y que se encuentran con más frecuencia en losalojamientos ganaderos, son el dióxido de carbono, el amoníaco,el sulfuro de hidrógeno y el metano. Vea.mos cuáles son sus prin-cipales características y las consecuencias de su presencia comoagentes contaminantes.

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Dióxido de carbono (COZ)

Este gas, conocido también con el nombre de anhidrido car-bónico, se encuentra siempre en el aire, ya que se trata de uncomponente constante del mismo. En espacios abiertos, la pro-porción de dióxido de carbono en el aire es, por término medio,de 0,035 volúmenes por 100. En locales cerrados la cantidad dedióxido de carbono que contiene el aire puede superar con mu-cho esta cifra, dependiendo ello de diversos factores biológicos,tales como la respiración de los seres vivos que hay en su interioro el desarrollo de fermentaciones microbianas aerobias. Los ani-males cuando respiran, eliminan cantidades importantes de dióxi-do de carbono; se estima que por cada 500 kilos de peso vivo loscerdos producen 1701itros de este gas cada hora, y los pollos, 360.

Por otra parte, las fermentaciones de materia orgánica y,entre ellas, las que sufren las deyecciones animales en presenciade oxígeno, producen una gran cantidad de dióxido de carbono,que se difunde en el ambiente y hace aumentar considerable-mente su proporción en el aire, si los locales están mal ventilados.

El dióxido de carbono es un gas inodoro y más denso queel aire, por lo que en lugares mal ventilados tiende a acumular-se en las capas de aire próximas al suelo. No se trata de un gastóxico por sí mismo para el hombre o los animales. El peligroque entrañan las altas concentraciones de COZ en el ambiente delos locales cerrados radica en la cantidad de oxígeno que desplazay sustituye con respecto al volumen total de aire. Se ha com-probado experimentalmente que cuando el volumen de oxigenoque contiene el aire es inferior al 17 por 100, los animales no soncapaces de captar y aprovechar mediante la respiración el oxígeno

Fig. 2.-En las zanjas o fo-sas situadas debajo de losemparrillados para recogery almacenar el estiércol flui-do se producen gases quecontaminan el ambiente delos alojamientos ganaderos.

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que necesitan para mantener sus funciones vitales; el mínimo deseguridad de un aire respirable, por lo que se refiere a su conteni-do en oxígeno, es del 19 por 100 en volumen.

La tolerancia a las atmósferas viciadas con COz depende dela especie y de la edad de los animales. Así, por ejemplo, enalojamientos ocupados por pollos de carne el máximo de COZ quedebe contener el aire es de 0,3 volúmenes por 100, mientras quelas ponedoras toleran sin riesgo 4 volúmenes por 100 e inclusoalgo más.

El ganado vacuno tolera bien hasta 0,35 volúmenes por 100.Cuando se alcanzan concentraciones de 1 por 100 hay una ciertadisminución de los rendimientos y los animales se muestran untanto apáticos. En el caso de que la proporción se eleve y sobre-pase e12 por 1001a salud de los animales se resiente.

En condiciones normales es difícil que la concentración dedióxido de carbono alcance concentraciones nocivas en los aloja-mientos ganaderos, pero habrá que sospechar que esto sucede sise observa que todos los animales que hay dentro de un edificiorespiran con dificultad y su número de respiraciones por minutoes superior al normal de la especie.

También hay que tener presente que en cochiqueras dotadasde emparrillado, debajo del cual se almacena el estiércol fluido,el riesgo de accidentes por dióxido de carbono es mayor por dosrazones. La primera es que, a medida que las fosas se van llenan-do de estiércol, la capa de COz que se forma y acumula encimade él va ascendiendo. La segunda es que los cerdos, por ser ani-males de poca alzada, respiran constantemente el aire de las capasmás próximas al suelo, que es precisamente el que más dióxidode carbono contiene, si el local no tiene una ventilación adecuada.

Amoníaco (NH^)

Es un gas incoloro, de olor picante caracteristico, menos den-so que el aire y que se disuelve con facilidad en el agua. El airelibre no contiene normalmente amoníaco, sin embargo, este gasestá presente en mayor o menor proporción en el ambiente delos alojamientos del ganado, como consecuencia de las fermenta-

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ciones anaerobias que experimentan las sustancias nitrogenadasque contienen las deyecciones sólidas y líquidas de los animales.

La concentración de amoníaco en el aire que toleran losanimales depende, como sucede con el dióxido de carbono, dela especie y de la edad. Veámóslo con unos ejemplos. Los pollosde menos de un mes de edad crecen mejor en ambientes quetienen alrededor de 0,001 volúmenes por 100 (10 ppm) de estegas que en otros en los que la concentración es del 0,004 por100 (40 ppm); en cambio, las gallinas toleran bien concentracio-nes de hasta 0,005 por 100 (50 ppm). Por encima de este nivelse ha observado que las ponedoras mantenidas durante nuevesemanas en un ambiente en el que se alcanza una concentracióndel 0,01 por 100 de amoníaco (100 ppm), la producción de hue-vos se reduce apreciablemente y no se recuperan los indices depuesta normales, aunque se haga disminuir el contenido de amo-niaco en el aire del gallinero hasta los mínimos recomendables.

Con carácter general se considera que la concentración deamoniaco admisible sin riesgos en el aire de los alojamientos ga-naderos es la de 0,005 vol. por 100 (50 ppm). Cuando se sobrepa-sa e10,01 por 100 (100 ppm) y, a veces, antes, pueden presentarsemolestias en los animales que se manifiestan en forma de lagri-meo, tos, disminución del apetito, flujo nasal, etc., porque elamoniaco es un gas irritante de los ojos y de la mucosa de lasvías respiratorias. Si aumenta todavía más la concentración deamoniaco en el aire respirable pueden producirse lesiones corrosi-vas en tales mucosas, que facilitan el ataque de gérmenes pató-genos. Por último, concentraciones superiores a 0,25 volúmenespor 100 (2.500 ppm) mantenidas de forma continuada originandificultad respiratoria, congestión y edemas pulmonares, que ter-minan con la muerte de los animales por asfixia.

Conviene tener en cuenta que la presencia de amoniaco en elambiente en cantidades moderadas, pero superiores a los mínimosadmisibles indicados anteriormente, y mantenidas durante perío-dos de tiempo prolongados, no causan lesiones específicas, perohacen que disminuya la resistencia de los animales a catarros,gripes y otras enfermedades del aparato respiratorio y tambiénpueden dar lugar a conjuntivitis crónica.

Finalmente y por lo que respecta a la contaminación del am-

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biente de las cochiqueras por concentraciones relativamente ele-vadas de amoniaco, hay que señalar un riesgo indirecto que,en explotaciones porcinas noruegas e irlandesas, ha dado lugar aenvenenamientos de los animales que han causado su muerte.La causa del envenenamiento ha sido que el amoníaco atmosféri-co, por ser muy soluble en el agua, se ha depositado en las zonasbajas de las paredes y del suelo que estaban húmedas o mojadas,y, con el tiempo, ha sufrido una oxidación que lo ha transforma-do en nitratos o nitritos, siendo estos compuestos químicos losque han originado la intoxicación de los animales que los haningerido.

Sulfuro de hidrógeno (SHZ)

El sulfuro de hidrógeno o ácido sulfhídrico procede tambiénde la descomposición, en condiciones anaerobias, de sustanciasproteicas en cuya composición entra el azufre. Se desprende engrandes cantidades de las fosas de estiércol fluido cuando se rom-pe, para sacar su contenido, la costra y capa esponjosa que seforma en estos depósitos con el tiempo.

Es un gas incoloro, más denso que el aire, soluble en aguay de olor característico y muy desagradable, como el que des-prenden los huevos podridos.

Para comprender la enorme toxicidad de este gas, el más pe-ligroso de todos los que se producen en las explotaciones de gana-do, conviene recordar que la mayor parte de los accidentesmortales que se producen entre el personal que realiza la limpiezade pozos negros y fosas sépticas, se deben a la inhalación de ácidosulfhídrico. La intoxicación en estos casos es casi siempre mortal,como se ha dicho, y se debe a que el sulfuro de hidrógeno que sedesprende de forma violenta de la materia orgánica en descompo-sición que hay en estas instalaciones sanitarias, por ser másdenso que el aire, queda en la parte más baja del pozo o fosa, y,al inhalarlo, origina la pérdida brusca del conocimiento y la muer-te rápida, porque el sulfuro de hidrógeno impide que los fermen-tos respiratorios de las células cumplan su cometido.

El contenido de ácido sulfhidrico admisible en el ambiente delas instalaciones de ganado se cifra en 0,002 vol. por 100 (20

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ppm). Concentraciones de10,015 a10,02 por 100 (150 a 200 ppm)causan irritaciones en los ojos; a10,05 por 100 (500 ppm) da lugara trastornos nerviosos puestos de manifiesto por un estado deexcitación de los animales; a10,08 a 0,1 por 100 (800 a 1.000 ppm)causa la muerte en media hora, y, finalmente, al 0,15 por 100(1.500 ppm) provoca la muerte instantánea.

Metano (CH,)

El metano es un gas incoloro, inodoro y más ligero que elaire. En los alojamientos ganaderos se origina al descomponersela celulosa sometida a la acción de fermentaciones anaerobias.

Las altas concentraciones de metano en el aire resultan no-civas para las personas y animales, porque desplaza al oxígeno ycausa asfixia, pero tales concentraciones es muy difícil que se Ile-guen a alcanzar en los alojamientos ganaderos, porque su ligerezahace que se difunda con facilidad y rapidez.

La mezcla del metano con el aire en la proporción del 5 a 6por 100 resulta explosiva, razón por la que se aconseja no en-cender cerillas o mecheros en las proximidades de fosas dondeexista materia orgánica en descomposición.

LOS MALOS OLORES

Además de los gases nocivos ya citados, algunos de los cualestienen olo^ desagradable, como el amoníaco o el ácido sulfhídri-co, el aire de los alojamientos ganaderos contiene con frecuenciaotras sustancias quimicas que comunican al ambiente malos olo-res, que, en ocasiones, pueden llegar a ser nauseabundos.

Fig. 3.-Establo con cubículos yzona emparrillada debajo de lacual está situada la fosa en la que

se acumula cl estiércol fluido.

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Los estudios realizados han permitido identificar más de 40compuestos químicos olorosos en el estiércol; su concentracióny el que predominen unos sobre otros depende, entre otros fac-tores, de la especie ganadera de la que procede el estiércol y delgrado de envejecimiento de éste. Así, la gallinaza de más de undia contiene bastante ácido butirico, cosa que no sucede con lafresca. En el estiércol de vacuno se encuentran y de él se despren-den fundamentalmente aminas, aldehidos y ésteres olorosos;finalmente, el olor tan desagradable del estiércol de porcino sedebe principalmente a aminas, sulfuros y mercaptanos, aunquetambién contiene disulfuros, carbonilos y otras sustancias mal-olientes.

De todo esto se deduce que la naturaleza quimica de estassustancias malolientes es muy diversa; algunas de ellas son pro-ductos azufrados, como los mercaptanos y sulfuros, otras sonproductos resultantes de la degradación de la celulosa, tales comolas aminas y carbonilos. Todos ellos se originan, como sucedecon los gases nocivos, al producirse fermentaciones anaerobiasen el estiércol almacenado.

En condiciones ordinarias de teinperatura y presión, algunosde estos compuestos químicos son gases, mientras que otros sonlíquidos que se volatilizan fácilmente en el ambiente.

Los mercaptanos o tioalcoholes son compuestos sulfurados,derivados de los alcoholes mediante la sustitución de un átomo deoxígeno del grupo funcional por otro de azufre. A temperaturaambiente se encuentran en estado líquido, pero, lo mismo quesucede con los alcoholes de bajo peso molecular de los que pro-ceden, se volatilizan en el aire con gran facilidad, comunicandoal ambiente un olor sumamente desagradable. Su capacidad con-taminante es tan grande que, por ejémplo, es posible detectarla presencia de etanotiol en el ambiente cuando se encuentra enla proporción de 1 a SO billones de volúmenes.

Las aminas contaminantes del ambiente de los alojamientosganaderos pertenecen al grupo de las alkil-aminas, es decir, sonderivados del amoníaco que resultan al sustituir uno ó más áto-mos de hidrógeno del amoníaco por radicales de hidrocarburossaturados.. La más abundante en los establos de ganado vacunoes la trimetilamina N(CH,),; se trata de un gas incoloro, de

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olor acre mezcla de olor pescado y a amoniaco, soluble en agua.La trimetilamina tiene efecto atrayente sobre los insectos, lo quecontribuye sin duda al aumento del número de éstos en los alo-jamientos de ganado.

Por lo que respecta a la concentración que todas estas sustan-cias químicas malolientes pueden alcanzar en el ambiente delos alojamientos ganaderos hay que distinguir dos límites o valo-res distintos. El más bajo de ellos es aquel en el que resultanperceptibles para el olfato; el otro, mucho más elevado, indicala concentración a partir de la cual la sustancia química co-rrespondiente no sólo resulta molesta sino que puede causarefectos tóxicos sobre las personas y los animales que respiranen ese ambiente. El primer valor es bastante bien conocido paradiversos compuestos olorosos, mientras que sobre el segundo haytodavia muy pocos datos o estos son bastante imprecisos.

HECHOS QUE FAVORECEN LA CONTAMINACIONGASEOSA DE LOS ALOJAMIENTOS GANADEROS

El riesgo de que se alcancen en ciertos alojamientos gana-deros concentraciones nocivas de alguno o varios de los gases alos que nos hemos referido anteriormente, depende por una partedel tipo y características de la instalación y, por otra, de circuns-tancias que sólo concurren, a veces, en determinadas épocas delaño o en un momento concreto del periodo de explotación.

Fig. 4.-La contamina-ción del ambiente porgases nocivos o desagra-dables es menor en aque-Ilos alojamientos que tie-nen bien diseñados y cons-truidos los canales deevacuación de deyecciones.

EI tipo de alojamiento

En lo que concierne al tipo de alojamiento hay que señalarque la formación de gases nocivos y nauseabundos es mayor enlas cochiqueras y establos de ganado vacuno que tienen emparri-llado total o en la mayor parte del piso y que almacenan el es-tiércol fluido, durante períodos de tiempo que duran varios me-ses, en canales o fosas situados debajo de la superficie ocupadapor los animales.

En el caso de que la fosa de almacenamiento del estiércolfluido esté situada fuera del establo o cochiquera, pero cerca deestas construcciones, la contaminación ambiental por gases no-civos puede alcanzar niveles peligrosos o, por lo menos, desacon-sejables, cuando los canales y colectores que llevan las deyeccio-nes hasta la fosa están diseñados o construidos de forma ina-decuada en lo que se refiere a pendientes o trazado, o no existealgún dispositivo trampa que impida el retorno de gases desde lafosa. Los defectos de construcción o trazado de los canales deevacuación de las deyecciones originan retenciones e incluso atas-cos, lo cual facilita la formación de gases y su difusión en elambiente del alojamiento, y obliga a realizar desagradables tra-bajos de limpieza. Por otra parte, la falta de dispositivos trampahace que, en determinadas situaciones climáticas, el viento dé lu-gar a la formación de corrientes de aire ascendentes que intro-ducen en el alojamiento de los animales, a través del emparri-llado, el aire de la fosa cargado de gases nocivos y malolientes.El empleo de tubos fumígenos permite comprobar la forma enque circula el aire dentro del establo o la cochiquera en condi-ciones normales o cuando se dan las circunstancias climáticasque modifican el sentido habitual de circulación del aire de venti-lación en el alojamiento, y ayuda a descubrir procesos de conta-minación ambiental producidos de esta forma.

Si se trata de alojamientos para aves, la producción de gasestóxicos es mucho mayor en aquellos gallineros con yacija perma-nente o dotados de emparrillados situados sobre fosas en las quese acumulan las deyecciones, que en las granjas en las que lasaves se encuentran en baterías y las deyecciones caen sobre bandasrodantes que las sacan al exterior.

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Las circunstancias ocasionales

Por lo que respecta a las circunstancias que favorecen la con-taminación del ambiente de los alojamientos ganaderos debida agases nocivos, cabe destacar las siguientes:

- Excesiva densidad de ganado por unidad de superficie.Esto es relativamente frecuente en explotaciones dedicadas a lacría, recría y engorde de terneros, cebo de cerdos y cría de pollos.

- Cierre prolongado de las ventanas y otras aberturas des-tinadas a permitir y favorecer la renovación del aire en aloja-mientos con ventilación natural o estática. Algunos ganaderosadoptan con bastante frecuencia esta medida cuando las tempera-turas en el exterior alcanzan mínimos muy rigurosos, para evi-tar pérdidas de calor.

- Capacidad del sistema de ventilación dinámica disminuidasensiblemente como consecuencia de la acumulación de impor-tantes cantidades de polvo en los ventiladores y en otros elemen-tos de la instalación (rejillas, deflectores, obturadores, etc.).

- Defectuoso funcionamiento de los sistemas de ventilaciónforzada debido a averías en ventiladores, termostatos u otroselementos de la instalación.

- Agitación del estiércol fluido al extraerlo de la fosaen que se encuentra almacenado desde hace varios meses.

Por la importancia que tiene en la práctica este último punto,le dedicamos a continuación un comentario especial.

Los riesgos derivados de la extracción del estiércol fluido

,^ .. . ^^^

Fig. 5.-Esquemade las capas que seforman en el estiér-col fluido almacena-do en una fosa du-rante un períodolargo de tiempo(medidas en centí-

metros).

^Costra seca

^Sólido esponjoso

Líquido

Fañgo1

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acumulado durante largos períodos de tiempo en zanjas o fosassituadas en el interior o en las inmediaciones del alojamiento,se explican de la siguiente forma. En explotaciones de ganado va-cuno, el estiércol fluido almacenado contiene pajas, restos de ali-mentos tales como heno, forrajes frescos o ensilados, etc., que semezclan con las deyecciones sólidas y líquidas de los animales.Como consecuencia de ello y también de los fenómenos de se-dimentación y de las fermentaciones que sobrevienen en la masaacumulada, se produce normalmente y en la mayor parte de loscasos un proceso de separación, que da lugar a la formación decapas de distinta densidad, aspecto y consistencia; cabe distin-guir, por tanto, una capa de sedimentos y lodos que ocupa elfondo de la fosa, una capa líquida situada encima de la anteriory, por último, una superior, de consistencia esponjosa, cuya su-perficie, al estar en contacto con el aire, se seca y forma unacostra. Esta disposición del estiércol fluido hace que una grancantidad de gases formados como consecuencia de las fermen-taciones anaerobias que experimentan las materias orgánicas quecontiene, queden atrapados en la parte esponjosa o disueltos enla parte líquida, y, cuando se remueve e incluso se bate parahomogeneizarlo con el fin de facilitar su distribución y evitar quese atasquen las cisternas esparcidoras, muchos de estos gasesquedan en libertad, pudiendo pasar a los alojamientos del gana-do con más o menos facilidad según la situación de las zanjaso de la fosa, las medidas de seguridad que se hayan adoptadoantes de realizar la operación y los detalles constructivos delsistema de evacuación del estiércol desde el establo a la fosa, talescomo trampas o sifones que impidan el retorno de gases.

Prueba del peligro que entraña la agitación del estiércolfluido almacenado en fosas situadas debajo del área que ocupanlos animales son unos estudios llevados a cabo en Alema-nia en unas cochiqueras dotadas de emparrillados. La con-centración de amoníaco en el ambiente era habitualmente del0,001 por 100, mientras que cuando se removía el estiércol laconcentración subía al 0,07 por 100, es decir, esta circunstanciahacia que el contenido de amoníaco en el ambiente fuera 70 ve-ces mayor y alcanzase ya niveles claramente nocivos para el ga-nado.

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PERJUICIOS O.UE OCASIONA LA CONTAMINACIONQUIMICA DEL AMBIENTE DE LOS ALOJAMIENTOS DELGANADO

El daño más grave que puede producir la presencia de gasesnocivos en el aire de un alojamiento ganadero es la muerte delos animales que hay en él e incluso de las personas que atiendena su manejo. Este accidente, aunque no es frecuente afortuna-damente, puede sobrevenir y de hecho se produce de vez en cuando.

No obstante, sin llegar a este caso extremo, la contamina-ción del ambiente de los alojamientos ganaderos por gases noci-vos o desagradables, alcanzando éstos unos niveles que sobre-pasan los considerados como admisibles, ocasiona también otrosperjuicios que, de forma escueta, se resumen a continuación:

- Disminución de la resistencia natural de los animales aciertas enfermedades, especialmente del aparato respiratorio, fa-voreciendo la presentación y difusión de procesos patológicos decurso crónico tales como bronquitis.

- Aumento del índice de conversión del pienso, lo que sig-nifica una disminución de las producciones por cantidad de ali-mento consumido.

- Disminución real de las producciones ganaderas, sin quesea posible mantenerlas dentro de los límites normales, aunquese fuerce el suministro de alimentos. Se estima que esta disminu-ción puede llegar al 20 por 100 cuando los distintos factores delos que depende el ambiente del alojamiento, son desfavorables.

La importancia de estos perjuicios o daños es directamenteproporcional a los niveles de contaminación ambiental y, encualquier caso, se traducen en una pérdida económica para elganadero.

MEDIDAS PARA EVITAR LA CONTAMINACION O.UIMICADEL AMBIENTE

Hay aparatos capaces de detectar la cantidad de dióxido decarbono que hay en un determinado ambiente o la presencia deciertos gases tóxicos en el mismo, sin embargo, razones de tipo

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económico, principalmente, impiden utilizarlos de forma habi-tual, al menos en la actualidad, para controlar las condicionesambientales de los alojamientos ganaderos.

También existen técnicas de recogida de muestras de aire derecintos cerrados con el fin de efectuar los análisis que permitandeterminar su composición y descubrir la presencia de gases tó-xicos en el ambiente. Sin embargo, una medida de este tipo sóloes necesaria en casos que resultan excepcionales en una explota-ción ganadera de tipo medio.

En cambio, hay otras medidas y precauciones, como las quese indican a continuación, para evitar la excesiva concentraciónde gases nocivos o desagradables dentro de una instalación gana-dera, en un determinado momento o durante un período de tiem-po más o menos largo, coincidente generalmente con la épocainvernal.

Tales medidas se refieren, por una parte, a alojamientos denueva construcción o que van a sufrir un proceso de reconver-sión o modernización y, por otra, a instalaciones que se encuen-tran ya en pleno funcionamiento.

Respecto a los primeros, antes de realizar las obras corres-pondientes hay que prever y buscar solución a los problemas quepueda plantear la extracción de las deyecciones, su almacena-miento, la posibilidad de que los gases que se produzcan en lafosa de almacenamiento del estiércol retornen al alojamiento, laventilación adecuada de la nave, tanto si se piensa en que seanatural como forzada. La previsión de todos estos detalles y elcálculo correcto de instalaciones y servicios evitarán la presenta-ción posterior de problemas de dificil o, por lo menos, costosasolución.

Si se trata de instalaciones ganaderas que se encuentran yaen pleno funcionamiento es necesario:

- Graduar adecuadamente la abertura de las ventanas y chi-meneas en aquellos alojamientos en los que la ventilación se rea-liza de forma natural.

- Mantener en buen estado los sistemas de ventilación for-zada, si los hay, efectuando periódicamente y con frecuenciala limpieza de los ventiladores, rejillas y deflectores que puedahaber en las aberturas; comprobar los termostatos, etc.

Fig. 6.-Para facilitar la extrac-ción del estiércol fluido acumu-lado en las fosas situadas deba-jo de los emparrillados es conve-niente situar los registros de va-ciado en el exterior de los aloja-

mientos del ganado.

- Instalar, si es preciso, trampas de gas para evitar que re-tornen al alojamiento los gases producidos en la fosa de alma-cenamiento del estiércol cuando está próxima al alojamiento delganado, pero fuera de él.

- En aquellas explotaciones dotadas de zanjas de recogidade deyecciones que descargan cada cierto tiempo su contenido enla fosa de almacenamiento, mantener un cierto nivel de agua parafavorecer la disolución en ella de los gases contaminantes solu-bles (NH,, SHZ, etc.).

- En alojamientos ganaderos en los que el estiércol fluido seacumula debajo de los emparrillados, sacar el ganado cuando seva a proceder al vaciado de las zanjas o fosas y no meterlo hastaque se haya terminado la operación y el local esté bien venti-lado. En este caso, los operarios que realicen el trabajo debenadoptar todas las precauciones necesarias, incluso emplear care-tas antigás, para evitar que sean ellos los intoxicados.

- Vaciar las fosas y zanjas de almacenamiento del estiércolfluido situadas en el interior de los alojamientos ganaderos, an-tes de que estén casi completamente llenas para evitar que la capade gases nocivos que se acumula sobre el estiércol, asciendahasta niveles próximos al suelo del local y se difunda en el am-biente del mismo.

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EL CONTROL DE LOS MALOS OLORES

Las medidas indicadas anteriormente están dirigidas funda-mentalmente a evitar la presencia de gases tóxicos en el ambientede los alojamientos ganaderos en cantidades peligrosas; esto noimpide que contribuyan también a reducir los malos olores, perohay que tener en cuenta que no son específicas para luchar con-tra ellos. ^

Los tratamientos que se utilizan actualmente para combatirlos malos olores que produce el estiércol fluido, tanto dentro delos alojamientos como después al distribuirlo, se basan en algunode los siguientes principios y procedimientos:

1) Impedir el desarrollo de fermentaciones anaerobias en elestiércol y, por consiguiente, la formación de compuestos quí-micos malolientes, mediante la incorporación de ciertos produc-tos quimicos al estiércol o la puesta en práctica de determinadas me-didas. Entre los productos que cumplen este cometido están elhipoclorito sódico y el permanganato potásico. En cuanto a medidasadecuadas para evitar la proliferación de gérmenes anaerobios,la más utilizada es la aireación limitada del estiércol.

2) Enmascarar o neutralizar los malos olores ya existentesdistribuyendo en los alojamientos o difundiendo en su ambienteproductos comerciales o compuestos químicos capaces de con-seguir este efecto. La diferencia que existe entre una acción y otraes que el enmascaramiento consiste en difundir un olor más omenos agradable que impida detectar el producido por los gaseso sustancias volátiles desprendidas del estiércol; la neutralización,en cambio, modifica el olor desagradable del alojamiento hacien-do que los compuestos gaseosos malolientes reaccionen con otrassustancias quimicas. Entre los agentes neutralizantes utilizadoscon este fin está el peróxido de hidrógeno. Análogos efectos selogran difundiendo ozono en el interior de las cochiqueras enconcentraciones inferiores a 0,01 mg/1. Tanto el peróxido como elozono son oxidantes enérgicos.

3) Adsorber los gases malolientes del ambiente por medio dematerias sólidas que tienen la propiedad de retenerlos en su su-

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perficie en grandes cantidades. Estas materias suelen ser muy po-rosas, porque esto contribuye a que tengan una gran superficiede adsorción. La más utilizada es el carbón activado en polvo,que tiene una superficie de adsorción de 1.000 mz/g, aproxima-damente.

Todos estos procedimientos tienen ventajas e inconvenientesque, a veces, son de tipo económico. En general, la mayor partede ellos hacen que se reduzca el mal olor, pero no consigueneliminarlo totalmente. Puede ocurrir, incluso, que cuando se em-plean productos enmascaradores o neutralizadores aparezca unolor diferente, pero que puede no resultar mucho más agradableque el que se trataba de combatir.

Cualquier producto empleado para combatir el mal olor delos alojamientos ganaderos además de ser eficaz ha de ser barato,fácil de manejar, no debe tener efectos perjudiciales sobre laspersonas o los animales y, si se emplea incorporado al estiércol,no debe perjudicar tampoco al suelo agrícola ni a las plantasque se cultiven en él, cuando se distribuya sobre el terreno.

Fig. 7.-La buena ventilación de los alojamientos ganaderos impide que los gasesnocivos o malolientes alcancen en su interior niveles perjudiciales o molestos.

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CONCLUSION

A modo de resumen cabe destacar lo siguiente:- La contaminación del ambiente de los lojamientos gana-

deros por gases nocivos y desagradables, es más frecuente eninstalaciones en las que las deyecciones se recogen en forma deestiércol fluido y éste se almacena debajo de la nave que ocupanlos animales o en fosas contiguas a ella.

- El gas más peligroso es el sulfuro de hidrógeno.- La época en que los riesgos son mayores es el invierno,

cuando, para defenderse del rigor de las temperaturas, se reducela ventilación y, por tanto, la renovación del aire.

- El momento que ofrece mayor peligro de contamina-ción coincide con la extracción del estiércol fluido, porque al re-mover el estiércol se libera una gran cantidad de gases tóxicos.

- Un ambiente inadecuado, mantenido de forma prolonga-da, puede no causar daños graves en el ganado, pero siempre ori-gina pérdidas económicas al ganadero.

- Existen una serie de medidas que deben conocerse y po-nerse en práctica para evitar accidentes y pérdidas económicasdebidas a la contaminación del ambiente de los alojamientos ga-naderos por gases nocivos.

- Hay distintos procedimientos para combatir los malos olo-res de los alojamientos ganaderos, pero todos ellos tienen venta-jas e inconvenientes, por lo que hay que considerar que esteproblema no está resuelto completamente todavía y las investi-gaciones en torno a él continúan.

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