helios quantum-4 10x60 - observar el cielo · mantener la imagen lo sufi ciente-mente quieta como...

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HELIOS QUANTUM-4 10X60Este mes, probamos un prismático de observación astronómica de la marca Helios. El Quantum-4 de 10X60 promete prestaciones satisfactorias a un precio muy razonable. Comprobemos su rendimiento.

Texto y fotos: Jon Teus

Consultas: [email protected]

Hacía tiempo que no traía-

mos a la sala de pruebas

un prismático. Vamos

a hacerles más caso durante

los próximos meses. Si nos es

posible, probaremos algunos

modelos más en breve. De mo-

mento, en este caso, se trata de

un Helios (los fabrican también

bajo otras marcas) de la serie

Quantum-4. El modelo concreto

que vamos a probar es el 10X60

o , como ya deberíamos saber,

10X (10 aumentos) y 60 mm.

de abertura. Esta confi guración

aumentos-abertura nos da una

generosa pupila de salida de 6

mm. de diámetro. Es un bino-

cular que (en apariencia) roza la

gama de aquellos que necesitan

LO MEJOR ● Relación calidad-precio.● Acabados.● Ojeras retráctiles.

LO PEOR ● Exigencia posición ojo-eje

óptico.● Cromatismos en Luna.

trípode. No tiene excesivos au-

mentos, por lo que en principio

podría sujetarse con las manos.

Su abertura tampoco es grande,

que digamos, lo que nos da un

peso total de 1,49 kg. Lo dicho,

veremos si se maneja bien a pul-

so o necesita de un trípode para

poder utilizarlo adecuadamente.

Parece mentira que este pris-

mático esté dotado de una cons-

trucción, a priori, de calidad al

precio de venta que tiene en el

mercado. Este Quantum 10X60

posee prismas BaK-4 que, como

sabéis, son mejores que los

BK-7. Sus oculares son de alto

relieve ocular, lo que puede que

incluso permitan su uso para

usuarios que necesiten gafas.

Recordad que el astigmatismo

de la vista es más evidente con

pupilas de salida grandes, tal y

como es habitual en la inmensa

mayoría de los modelos de pris-

máticos del mercado.

EN PARADOSu interior está sellado y rellena-

do con nitrógeno para evitar la

condensación en las caras inter-

nas de las lentes, y éstas están

revestidas con un tratamiento an-

tirrefl ejo Fully Multi-Coated. Ade-

más, están catalogados como

waterproof, es decir, aguantan

bien excesos de humedad, can-

tidades altas de rocío, salpica-

duras de agua, incluso algo de

lluvia, aunque personalmente, yo

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no los metería debajo del agua.

Sobre el papel parecen estu-

pendos, pero sabemos que hay

diferentes calidades de vidrios

para la elaboración de las len-

tes, tanto para las del objetivo

como para las de los oculares,

así como controles de calidad en

el proceso de alineación óptica

más exhaustivos que otros; en

fi n, mil cosas que pueden mar-

car la diferencia entre un buen

instrumento y otro mediocre.

Lo primero que llama la aten-

ción es su generosa capa de

goma, que prácticamente recu-

bre toda la superfi cie del prismá-

tico. Posee además unos relieves

longitudinales alrededor de ella

que ayudarán a amortiguar posi-

bles golpes. Toda la parte mecá-

nica visible es metálica, salvo las

carcasas que alojan los oculares

y el anillo del ajuste dióptrico,

que son de plástico. Su sistema

de enfoque es del tipo central,

con la rueda de enfoque cubierta

por una capa de goma. Este pris-

mático tiene también (como es

costumbre en muchos modelos

de Helios) capuchas regulables

en los oculares. Por descontado,

el ocular derecho posee un anillo

para el ajuste de dioptrías. Entre

sus accesorios encontramos un

paño de limpieza óptica, la co-

rrea de toda la vida y una bolsa

rígida de transporte. Por último,

tiene la clásica rosca hembra

para adaptarle un adaptador en

‘L’ que nos permite usarlo sobre

un trípode.

CROMATISMOSLa primera sesión de pruebas la

hice una noche con Luna cre-

ciente de apenas tres días. Fui

derechito hacia ella para com-

probar el nivel de cromatismos.

Hay cierto cromatismo, se nota,

pero en una medida muy acep-

table. De hecho, no son muchos

los prismáticos que no adolecen

de cierto nivel de cromatismo

con objetos muy contrastados,

es decir, en determinadas situa-

ciones diurnas o sobre transicio-

nes ‘luz-negro’ elevadas. Ade-

más, es muy importante alinear

bien el ojo con el eje óptico de

los oculares, ya que en esta co-

rrecta posición, el cromatismo

pasa más desapercibido.

Lo dicho, claramente aprecia-

ble un nivel de cromatismo, pero

del todo aceptable y que en nin-

gún caso ‘estropea’ la imagen.

Vamos a ver si adolece de cro-

matismos con estrellas. Enfoqué

a Vega, y perfecto. Me gustó. No

pude detectar ningún cromatis-

mo sobre esta brillante

Me gustan las capuchas extensibles de los oculares de este prismático. Es ya casi una norma en la mayoría de los binoculares del mercado y, francamente, resulta muy práctico poder ajustarlas a la distancia adecuada para cada observador.

Los prismáticos Quantum-4 10X60 están sellados y rellenados de nitrógeno para evitar la condensación en las caras internas de sus lentes.

El enfoque de estos prismáticos es del tipo central. Resultó un poco duro y con cierto juego muerto en los cambios de dirección, pero nada fuera de lo normal.


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estrella. Por tanto, podemos de-

cir que, sobre campos estelares

con estrellas muy brillantes, este

10X60 se porta perfectamente

en cuanto a niveles de cromatis-

mos.

COMODIDADLos oculares del Quantum-4 son

de alto relieve ocular (algo que

cada vez tienen más prismáticos

del mercado), así que en princi-

pio no deberían plantear proble-

mas para usuarios con gafas.

Como suele ser costumbre, para

obtener la correcta posición ojo-

ocular en un prismático nos viene

de perlas contar con el apoyo de

la capucha de goma que suelen

tener los oculares. En este caso,

los oculares del Quantum-4

10X60 tienen una capucha de

goma retráctil, lo que realmente

viene muy bien. El apoyo ideal

para mi gusto fue con las ca-

puchas totalmente extendidas.

Apoyas las cejas y tienes la posi-

ción ideal con el 100% de cober-

tura del campo de visión.

Me gustó también usarlo con

gafas. Son cómodos para los

usuarios que las necesiten por-

que sólo tienes que plegar un

poco las capuchas de goma

retráctiles, y listo. Eso sí, pier-

des un poquito de campo en la

periferia, pero nada fuera de lo

normal. Sí es verdad que son

algo exigentes en la alineación

ojo-eje óptico, pues al desviarte

de esta posición, pierdes ima-

gen en algunas zonas del campo

de visión. Seguramente sea el

efecto conocido como Kidney-

Bean, que sufren oculares con

aberraciones esféricas en su pu-

pila de salida. Normalmente, es

Para observar en condiciones con estos prismáticos, necesitamos un trípode alto y estable. Una vez sobre él, la imagen se estabiliza y, francamente, es cuando se disfruta de verdad de todo el potencial de los Quantum-4 10X60.

una aberración más presente en

oculares de alto relieve ocular.

En cualquier caso, como digo,

con una correcta alineación este

efecto desaparece.

En cuanto a su estabilidad, es-

tos Quantum-4 10X60 piden un

trípode. No tanto por su nivel de

aumentos (que también), ya que

no es excesivamente alto, sino

por su peso. En observaciones

realizadas de pie, y sin ningún

punto de apoyo, me costaba

mantener la imagen lo sufi ciente-

mente quieta como para realizar

una observación decente. Pue-

des aguantar algo, pero decidida-

Los Quantum-4 10X60 de Helios tienen un acabado elegante, con una generosa capa de goma que evitará daños graves en caso de golpes.

Por su peso y aumentos, los Quantum-4 10X60 son ‘duros’ de mantener a pulso. La imagen se mueve demasiado, y los brazos acaban cansán-dose antes de lo deseado.


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mente, estos 10X, unidos al peso

del prismático, hacen necesario

un punto de apoyo. La situación

mejora cuando te sientas en una

tumbona, pues el peso se sujeta

mucho mejor al observar objetos

altos. En esta situación, y sin ne-

cesidad de trípode, mejoras mu-

cho la estabilidad, pero la forma

ideal para observar fue la realiza-

da con trípode. Con el uso de un

trípode sí que tienes una imagen

totalmente quieta, y es cuando

disfrutas de verdad de la obser-

vación. Además, con la imagen

estable, la capacidad de afi nar el

enfoque es mayor porque lo ha-

ces sobre una estrella totalmente

inmóvil, y eso ayuda.

OBSERVACIÓN NOCTURNAVamos a observar el cielo noc-

turno una noche sin Luna, que

es el coto de caza ideal para la

inmensa mayoría de los prismá-

ticos astronómicos. Madrugón

para tener a la Vía Láctea alta

en el cielo (hice esta prueba en

mayo) y venga, vamos a ello. Por

cierto, para hacer la observación

usé una tumbona regulable, aun-

que la mayoría del tiempo estaba

totalmente tumbado, práctica-

mente horizontal, ya que fue esta

posición la que más estabilidad

me daba para un rango mayor

de altitudes.

Antes de comenzar, quiero re-

cordaros que, para disfrutar de

una observación de cielo profun-

do con prismáticos, necesitamos

un mínimo de oscuridad. Un cie-

lo contaminado lumínicamente,

con un instrumento cuya labor

es captar luz en un campo am-

plio, no nos aportará nada inte-

resante. Necesitamos, por tanto,

un cielo rural, no el mejor, pero

sí mínimamente oscuro. Será en-

tonces cuando disfrutemos de

verdad de la observación de cie-

lo profundo con prismáticos.

Comencé a observar la zona

del Cisne y, la verdad, es una

gozada la cantidad de estrellas

que observas en el campo de

visión. Esto está plagado de pe-

queños alfi leres muy contrasta-

dos sobre el fondo del cielo. El

foco fue excelente, francamente.

Sólo las estrellas más brillantes

como Vega, Altair, Deneb o An-

tares ganaban algo de tamaño.

La sensación de nitidez en todo

el campo fue muy buena, y úni-

camente en zonas alejadas del

centro notabas una pérdida de

defi nición puntual, pero en nive-

les muy normales y aceptables.

Me están gustando estos

Quantum-4, eso sí, siempre con

estabilidad porque, si

La marca italiana Manfrotto dispone de trípodes con la posibilidad de colocar su barra central en posición horizontal, lo que puede venir muy bien

cuando observamos tumbados.


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no, las estrellas se mueven de-

masiado en el campo. Pude se-

parar Albireo, aunque por poco,

y aunque observé claramente su

tono amarillento-naranja, no fui

capaz de detectar el azulado de

su compañera. Faltan aumentos

para conseguir esto, eso está

claro. Observé también la zona

de Antares, que veía perfecta-

mente naranja, y con el cúmulo

globular M4 a su derecha. El cú-

mulo M13 también lo pude ver

perfectamente, mejor que M4

porque el cielo, en esta zona ce-

nital, es mucho más negro que

en Escorpio.

CONCLUSIÓNAdemás de tener una relación

calidad-precio excelente, los

Helios Quantum-4 de 10X60 son

unos más que dignos prismáti-

cos. Su calidad de foco en la ma-

yoría del área de visión es buena;

sólo notas cromatismos en la

Luna, y a un nivel razonable. Sus

ojeras de goma retráctiles facili-

tan mucho colocar los ojos a la

altura correcta. Exigen una posi-

ción ojo-eje óptico bien alineada

para evitar zonas del campo sin

imagen, y su aumento y su peso

necesitan como poco de una

tumbona. El caso ideal para este

prismático será, sin embargo, la

utilización de un trípode.

FICHA TÉCNICAHELIOS QUANTUM-4 10X60

Instrumento: BinocularAumentos: 10XAbertura: 60 mm.Tipo de prisma: Porro BAK-4Peso: 1,49 kg.Campo de visión: 5,3 gradosPupila de salida: 6 mm.Precio aprox.: 165 €Material cedido por: www.observarelcielo.com

Para apoyar el prismático en un trípode contamos con la clásica rosca hembra, a la que atornillamos el adaptador en ‘L’ para enroscarlo al trípode.

Una forma de ganar estabilidad es utilizan-do una tumbona de playa. De esta manera, podemos descansar el peso de los prismáticos sobre la cara y los codos.


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