¡Hasta siempre Comandante!

Misión Cultura Corazón Adentro

Poemario revolucionario de la Misión Cultura Corazón Adentro-Zulia

¡Hasta siempre Comandante!

¡Hasta siempre Comandante!

Edición de la Misión Cultura Corazón Adentro

1+Editores. Abril 2013Edición: Luisana SilvaDiagramación: Carlos SangronisPortada: Carlos Sangronis.

Una editorial del pueblo y para el pueblo Porque LEER ES SIEMPRE MÁS

Índice

El nieto de Maisanta....... Marisol D’ Aprile Á.

La hora aciaga ................ César Bracamonte.

A mi comandante............ Delimar Sánchez.

Y yo que te ví pasar......... .Luis Ignacio Cárdenas.

Un día llegó el Comandante Oda Hilda Nava.

Lucha ............................... César Bracamonte.

De Chávez a Chávez... del “por ahora” al por siempre” .................. Martín Majomoro.

Sin Título................... Nataly Duarte.

Chávez el dictador........... Vimbardo Mendoza.

Chávez en el viento......... Luis Graterol.

Llegó la hora Comandante Martín Morillo.

El nieto de MaisantaHoy, martes 5 de marzo,se nos fue el nieto de Maisanta,quien con mano en lanzaoreó un grito en el campo.Chapoteando ríos, montañas y lagosalzaste tu voz protestante:Venezolanos, habrá nuevos cambios…¡Empezamos la rebelión revolucionaria…!Zambo; teñido de negro, indio y del catire Maisanta,fuiste escapulario envueltopor aires revolucionariosrecorriendo toda América,integrando con tu pensamientoal pobre, al desamparado, al niño, al hombrey a nosotras las mujeres.Colocamos nuestra mano en el corazón.Chávez será siempre nuestro himno,el escudo y la banderade nuestra Revolución…

Marisol D’ Aprile AlvarezAnimadora de Teatro

Cabimas

La hora aciaga

Qué culpa tengo yo de haberte y de serte. Qué culpa hay por la lucha o por las batallas en vue-lo, que nadie se culpe por mí, que nadie deje el puño en alto, que nadie se pierda en oropeles, que nadie escuche al mentiroso que altera desde su poltrona milenaria.Qué culpa tengo yo de darte el peso de mi ban-dera, qué culpa tienes tu haberme hecho hombre de varas, de medir, de fruncir, de cobijar. Tú el hombre del pleno, de las botas embarradas, del niño adormecido en la mirada.Y eran la 4:25Y era las hora de todosY era la culpa, la maldita culpa, de nadieY el mundo quedó en silencioY se despertó la espada nuevamenteA eso de las 4: 35Sí...Y de nadie es la culpa

César BracamontePoeta, Músico y Periodista

Maracaibo

A mi comandante

A mi comandante un aplauso eterno a mi comandante un grito de guerra a mi comandante un para siempre a mi comandante hasta la victoria siempre. Bendito el vientre de tu madre Elena bendito el vientre de tu tierra Venezuela bendito nuestros corazones porque ahora todos somos Chávezsigamos la lucha que siga caminando la espada de Bolívar y Chávez por América Latina.

Delimar SánchezAnimadora cultural

Maracaibo

Y yo que te vi pasar Hay golpes tan fuertesque mueven la tierra,y yo que te vi pasarcon una boina rojaalzando tu mano al vientorompiendo el horizonte en un estallido.

Hay golpes tan fuertesque la tierra sola se estremece,y yo que te vi pasarcon la mirada tristecon resonancia que invocaba cantos nuevos de libertady detrásun polvoriento camino de voces, que gritaban Febreros para toda la historia.

Y yo que te vi levantar la caballería junto con Zamorate vi levantar todas las batallas junto a Bolíva, te vi levantar las lanzaste vi levantar las ideasComo se levantan las estrellas cuando despegan al parto de la noche.

Y yo que te vi cantartodos los cantos de los hombres que mueren de pietodos los cantos desesperados que surcan todos los rostros de esta América viva.

Yo que te vi lanzar poemas que galopabantan fuertes y rechinantesque el mismo Samán de Güere se enciende solito todas las tardes,hay golpes tan fuertesque la tierra cruje y se persigna.

Y yo que te vi pasarcomo silbo libre de polvo, por todo el Surcomo aurora que marchó por senderos de amor,y se levantaron a tu pasolas piedras,las selvas,los cielos,los matorrales.Hay golpes tan dolorososque la tierra se encoge sola y llora a prisa.

Y yo que te vi levantarel fusil de las mil concienciasdesde el Orinoco hasta el río Apure,

desde Kerepakupai Vená hasta la Península de La Guajira;desde el Cajón de Arauca hasta la Piedra del Cocuy;desde los Palmares del Llano hasta la cima del Waraira Repano;desde el Cerro Guayamurí hasta la Batalla de Carabobo;Desde el infinito hasta las miradasde ojos negros de la miseriaHay golpes tan fuertesque la tierra se achica como un grano de arena.

Y yo que te vi cruzartodas las sabanas en plena madrugadacuando tus sueños alumbran como luceros a los que venimos detrás de tus pasos.Hay golpes tan fuertesque la tierra llora desconsolada en las esquinas.

Y yo que te vi perderen medio de la multitud,en medio de la marcha clandestina,en medio de la marea embravecida,en medio del puñado de niños, ´como uno más que jugaba al taller de la utopía en medio de los corazones campesinos

en medio de la mirada obrerade donde germina la verdadera semilla del futuro

Y yo que te veré pasarCuando todas las manos del puebloLevantes todas las mañanas de luchas venideras

Luis Ignacio CárdenasAnimador de Literatura

San Francisco

Un día llegó el ComandanteUn día llegó el comandante con un puño desafiantepara luchar por el pobrepor el más desposeídoy también el estudiante.Vino el comandante un díacon la voz tan retumbantevino a decirle al mundolo que nadie se atrevía: estamos empobrecidospor la máquina gigantellamada capitalismo. No es que haya aparecidode la noche a la mañanay hoy también como en otroranos sigue fuñendo el bicho.Y por eso Dios medianteya no más van a fregarporque como dice el dichono hay mal que dure cien añosni pueblo que lo resista.Y con el ALBA tenemosese instrumento benditoque lo inventó el comandantepara que América toda

se sienta ahora importante.Venezuela orgullosa, contentale dice al mundo:mis puertas están abiertascon abrazos y alegrías de grandezas de este puebloque con revolución al mundole regala su belleza.Y pa’ que vos lo sepáis zuliano, llanero, andinoy los del centro también,queremos a nuestra Patria¡Que Dios la bendiga… Amén!.

Oda Hilda NavaAnimadora Literatura Santa Rita

Lucha A Chávez

Temo al cruce del destino, a la fractura de los de-signios diarios, tengo miedo a que tu luz cierre su círculo y queden sueños a la deriva. Temo por la esquiva providencia y por los embates que me asfixia una respuesta esquiva. Temo más por mí que por el destino adverso de cada recuerdo.

He soñado contigo y te veo en cada hombre, mu-jer, niño y árbol; te veo en esa pared que no libera tu palabra comprometida con el resto y sus vás-tagos más recientes. Tengo miedo a Dios y a su manera de proceder en algunos episodios de esta fábula que somos frente a ti.

Temo por la distancia que nos separa y por la misma que espacia tu sombra de tu suelo. Pero el hombre es fruto y al caer seco, da vida en otras ramas, aunque no creo que sea tu suerte, eres va-por y fragancia de una justicia en incienso, eres el efluvio de un pueblo; eres la raíz de una tierra en llamas, sé que no vives, ardes en las venas de cada ser humano bendecido por la hoz de tu bue-naventura, eres el trigo que ha fermentado el ím-petu de este amor asexual y sin remos.

Temo por ti y no me duele la flagrancia de quie-nes buscan tu tercer lado, hay rifles que sangran flores azules, hay balas que no queman, abren la herida para que fluya el veneno, temo por mí, por mi débil fe, porque tengo tiempo sin ir a la igle-sia y recurrir a mis más despreciables instintos. Temo por toda la vida que llevas luchando por mi cuero, y yo al garete y con la juventud remendada con criterios de terceros.

Temo al vuelo de su cisne, tan pulcro como la mies del recién nacido, aseado y de violencias justas. Temo a que no vuelvas a mi corazón por mi falta de sutura, por la jerarquía que he priori-zado en avatares hedonistas.

Temo a que tu balcón me caiga encima en la es-pera, a que muera yo en la lidia de una rebeldía devota. Temo más a mí que a las huestes que te adversan. Que Dios te traiga de vuelta es lo de menos, la llama está encendida, el vapor se hizo lúgubre y ya es muy tarde para tus enemigos.

César BracamontePoeta, Músico y Periodista

Maracaibo

De Chávez a Chávez.. del “por ahora” al “por siempre”

A cada latir Chávez,Comandante Supremo de la Revolución,Gigante,Libertador del siglo XXI,Cristo de los pobres,ya no será por ahora (el por ahora de la quijotada. Majadero)será por siempre ,siempre que tengamos pan,siempre que tengamos techo,siempre que tengamos patria,siempre que tengamos alegría.Ya no será por ahoraa la plenitud de tu vida te elevasteEstrella del cenitpara ser muchos. Ya no cabías en un cuerpo.Al sonido trepidante de corcelal son de marcha regiacímbalos y trompetasque rasgaron los cielos a tu paso,al trotar de los que guardaban tus espaldaslos de la Casa de los Sueños Azules

Los Próceres a viva llamase mezclan con lágrimasuna tarde de cielo templadotu carácter.Te acompañóun pueblo, tu puebloun pueblo en la calle,que llora, que grita,que ríe, que aplaude,corre tras ti,¿acaso a la siembra de sus cuerpos contigo?Comandante InvictoComandante Pueblo y tu madre Elena. María ¡y Hugo tu padre. Joséy todos tus hermanos pueblo.¿No le matamos? exclama el imperio,y le responde el clamor de las naciones que llego a los cielos,y se juntaron los pueblosy te lloraron los pobresy vinieron los de lejosTu nombre será siempre tu nombrecada vez que cada niñocada vez que cada pueblocada vez que cada hombrecada vez que cada Patriacada vez que cada mujerYo seguiré la oración de la Patria

La que ora el soldado nuestroal Cuartel de la Montañaen cada salva un rosarioen cada amor-fusilsanto y seña.Yo seguiré conjugando tu Nombre:Chávez soy yoTu eres, también Y él es ChávezChávez nosotrosy todos ustedesy ellos son Chávezy así cantando:“…patria, patriapatria queridatuyo es mi cielotuyo es mi sol patria, patriapatria queridatuyo es mi cielotuyo es mi amor.

Cuando vi llevaban Sus restos inmortaleshacia el Cuartel de la Montaña

Martín Majomoro

Sin títuloQue silencio en su voz llena de sueñosque amarga resignación de conquistase marcha un gran amigo del puebloque llena de esperanza hasta la brisa.

Se va, dejando tristeza aguda, pena, dolor y vacío en el alma…Pedazo de cielo que llueve secoCoraje y fortaleza, que desde siempre acompaña.

Su legado será eterno, como su voz de niño guerrero.Se fue de la mano con el Che, con Allende, y se vuelve ahora pueblo…

¡Viva Principito criollo!¡Viva Quijote cuerdo!¡Que viva tu amor carajo!¡Que eres lucha!¡Que eres pueblo!¡Hasta la victoria siempre!¡Vivirás y venceremos!¡Chávez vive!¡La utopía es posible!

Nataly DuarteAnimadora cultural

San Francisco

Chávez el dictadorHaciéndome el valientepara denunciar al opresorquiero hablarles aquíde Hugo Chávez… dictador.

Dicta cátedras de vida, dicta cátedras de amor, ahora sé por qué le dicen Hugo Chávez dictador.

Y sigue dictando cátedrashaciendo la nueva misiónél se inspiró en el hombre, un hombre llamado Simón.

Para erradicar el hambredel territorio nacionaldicta un nuevo decretoahora con Pdval.

Y si de salud se tratala dictadura es evidente allí no se paga nada lo dice toda esa gente.

En cuanto a la educación ¡que dictadura mi hermano!Tiene derecho a ellaextranjero y venezolano.

Es que este dictadordicta y dicta el muy gentilahora dictó la misiónllamada 13 de abril.

Investigué al dictador y viene de buena escuelaque siga dictando así en nuestra gran Venezuela

Vimbardo MendozaObrero

Bachaquero

Chávez en el viento Bolívar nos había dejado con las ganas de co-nocerlo, pero la historia mal escrita no nos los permitió. Nos mezquinaron la gracia de conocerlo y estre-charlo con el calor de un hermano, de mirarlo a los ojos y leer la historia verdadera que nos pa-rió. Los cuchillos y los fusiles nos desterraron de la oportunidad de asir su mano para decirle que no había arado en el mar, sino que su heren-cia se hizo efectiva en Barinas, desde donde nos llegó, traído por los vientos, un unificador con la aljaba llena de ilusiones y de sueños. Al prin-cipio, no muchos creían en él, pero al cambiar el destino de este país, se hizo muchos, millones y millones.Con una fuerza descomunal capaz de conmover los cielos de Venezuela y al mundo mismo. Y traía el verbo de Bolívar, y su espada y sus sol-dados, y sus libros e ideas. Ideas que convirtió en poemas de liberación y coplas de libertad. Chávez es su nombre. Tenía otros nombres legales, pero Chávez es el nombre colectivo que el sufrimiento, el hambre, la desesperanza y la decepción de los pueblos desfavorecidos le otorgó para convertirlo en esperanza.

Cuando todavía no era Chávez, honrando su ju-ramento ante el gigante de Guere, en fechas de-mandantes de la historia de las luchas y dramas nacionales, Hugo siempre estuvo militando en los frentes de las batallas que se libraban, cuan-do perdió las primeras, se agigantó para volver victorioso montado en la sonrisa de un niño y en la ternura de un rostro anciano. Ahí fue cuando lo llamaron Chávez. Ahí fue cuando millones lo bautizaron como el Comandante Chávez. Ahí fue cuando los credos del pueblo le otorgaron la eternidad.

Chávez logró un maridaje perfecto entre sus ideas y los pueblos, a pesar de la guerra, que en su contra emprendió la furia de los capitales salvajes. Las pomposas y rancias oligarquías, desde los cuatro vientos arremetieron con todo su blindaje de terror en contra de un hombre. Olvidándose que las ideas no mueren, ni aun matando al que las engendra.

Chávez se metió en el viento, tal como lo dijo muchas veces. Chávez se metió en la piel de los pueblos. Chávez se unió al silbido de la brisa que choca con los rostros de los hombres y las mujeres de la tierra, jóvenes y viejos.

Chávez se hizo mar, se hizo rio y se hizo sol de las sabanas, se hizo médano y araguaney. Chávez se casó con el amanecer de este país y en las noches oscuras, se hizo luna llena y estrellas para alumbrar los senderos y las vere-das oscurecidas por las tiranías y las mentiras. Chávez se hizo nota musical y corchea y rompió el silencio con las coplas de una nueva canción.

Chávez fue con Maisanta. Al encuentro de Si-món José Antonio, con Sebastián Francisco, con Antonio José, con Manuela, con Ana María, con Guaicaipuro, con Túpac Catarí Con Ernesto José, con Camilo, Con Jorge Eliezer, con Pa-tricio, con Néstor y con muchos otros dignos y dignas. Pasajeros y peregrinos, dueños de las fábulas de la esperanza, cabalgando en los lo-mos de la vida, visitando los molinos de las ex-pectaciones y las utopías, creyendo en el poder de las ideas y los pétalos, despertando el pasto dormido de los caminos, regando los desiertos del olvido y reivindicando cada gota de sangre ofrendada por la justicia, desde la misma cruz del Gólgota hasta hoy.

Chávez rescribió la historia con la tinta del amor incondicional sobre el papel del compromiso y la lealtad. Los pueblos lo reconocieron y lo

condecoraron con más amor. Mas que amor, fre-nesí. Hugo, el de Rosa Inés, Hugo el de Doña Elena y Hugo de los Reyes, Hugo el pájaro naranjero, el arañero de los campos del hambre y el sufrimiento, Hugo el de las alpargatas rotas. Quien lo diría. Hoy se hizo Chávez y la eterni-dad lo llamó a su presencia.

Pero en este caso, el pueblo le puso una condi-ción a la eternidad. Chávez es del pueblo. Su patrimonio espiritual y su temple trascendental son la punta de la lanza de los débiles y despo-seídos. Su verbo cambió el lenguaje de las lu-chas. Su visión cambió la manera de mirar y de ver la miseria. El amor cambio su ecuación con Chávez. Se hizo un corazón que sabe lo que quiere y sabe adonde va. Corazón de la Patria.

Chávez nos hizo encontrar la patria perdida. Nos hizo entender el misterio de la esperanza. Nos hizo entender la diatriba de la política y nos dio las armas para manejarla sin que ella nos maneje a nosotros. También nos reclutó para la causa en favor de los infelices. Los que nacieron aquí y los de otra tierras también lo llaman Chávez y han prestado su terreno para sembrar el fruto de la revolución. Así que su nombre traspasó las fronteras de las culturas y su credo creció en los

arboles de las alamedas vecinas.

Chávez se hizo lagrima, se hizo dolor, Chávez se convirtió en semilla y hoy esta sembrado el terreno inviolable de todos los corazones.

Ya Hugo no está, pero Chávez se quedo en el legado multiforme de la revolución. Nuestro compromiso es continuar con la esperanza he-cha práctica. Con el compromiso de sembrar el terreno que preparó para nosotros, con las semi-llas que nos entregó y con las aguas de riego que se desprenden de su verbo. Chávez crecerá más y más y sus frutos se contarán por millones.

Luis GraterolCabimas

Llegó la hora ComandanteLlegó la horade repartirte entre muchosde hacerte todos¡ ya no podías mas ser Uno!tu cuerpo ahora toda la Patriatodos los hombrestodas las mujerestodos los niños.Tu cristo de los pobres- esperanzatu otro Bolívar- Libertador ¡Padre! tanto amor tan grande,el Orinoco ha crecido lágrimas del pueblo que tributansu caudal. Centauro al sur, la Patria Grande: el Amazonas, el Paranáy el Titicaca reciben las lágrimas del que te llora.Aquí estoy,-vine de lejos cruzando los caminos polvorientoslos que tu pisaste-al pie de un cajónque me dijeron tenía tu cuerpoaquí estoy como te dije estaría, Ahora llevo tu nombre

ahora mi nombre es Chávezahora Chávez soy yo,también vino María en llantopariendo otra vez de dolor,el niño aquel que le diste un corazóny los viejitos que llorabanen Amor Mayor;Juan con su familiaque recibió una casay del rancho salió.Una muchacha de un barrioque se fue tras la Misión.Vino también un soldadolo ví te rendía honor,pues pasó antes que yoy un grupo de obrerosdejaron su corazón.“Amor con amor se paga”oí tras mi esa voz,ahora todos somos Chávezahora Chávez soy yo.Puedes irte tranquilono dejaremos que los canallasnos quiten lo que nos has dejado,vamos pa´ lante Comandanteen cada idea-cantoen cada plaza-revolución en cada barrio-puebloen cada gente-calleen cada esperanza-niño

en cada rosa-mujeren cada hombre-Patriaen cada siembra-semilla.Aquí estoy, traje a mi hijoque es tuyo, y con el todos recuerdosque desde aquel “por ahora vivimos”te puedes ir tranquilo- si es que en verdad te vas –no araste en el mar“tu muerte será vengada”-si es que en verdad moriste-ya que“ los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos”. Aquí estoyal pie de tus restos inmortales:quería decirte que ellos ¡no volverán!te puedes ir tranquilomás allá te aguardanBolívar, Sucre, Miranday tantos,ve a reunirte con ellos.Diles que ahora sí hay Patria.

Martín Morillo Poeta-activador cultural

Cabimas

“Hasta siempre Comandante” es una compilación de diversas figuras literarias plasmadas en la

pluma de quienes formamos parte de un pueblo que despertó a la vida gracias a la Revolución.

Chávez es lucha, batalla, ejemplo... pero Chávez también es poesía, cultura, arte.

Por eso hoy al cumplirse un mes de su desaparición física, nosotros sus hijos, hijos de esa gran Misión

Cultura Corazón Adentro, desde el Zulia nos unimos para retornar con la sencillez de nuestra esencia todo el amor que él nos brindara en cada

una de sus palabras y acciones, diciéndole entonces ¡Gracias Comandante, hasta siempre!

Luisana Silva