Grandes obras para pequeños artistas(Graciela Heguy)Capítulo 1: “Pequeños artistas”

 En este capítulo se considera los contenidos y el ambiente, el sentido de la educación artística y el talento, aprendizaje y tiempo. Elliot Eisner (1988) dice que “el arte proporciona acceso al capital cultural y, en última circunstancia, acceso al empleo” es por esto que el arte en la enseñanza de los niños es muy importante, cuando hablamos de los contenidos es muy importante que lo que le enseñemos a los niños ellos lo puedan retener, comprender y usar. Para eso hay que conocer y experimentar lo que rodea a los niños, es decir, su mundo. Reflexionar sobre lo que aprendieron y transferir lo aprendido a otros ámbitos de su vida, para lograr estas metas es muy importante que se utilice el juego, las rutinas y la interacción con otros, hay un factor que es muy importante, el ambiente, pero, ¿Cómo es un buen ambiente de trabajo? La autora plantea que el ambiente es muy importante en el aprendizaje del niño, uno de los aspectos que resalta es el clima de trabajo, este trae exigencias como: el nivel del tono de voz que se utilizará, la participación, la motivación frente a la propuesta del trabajo, contenido y profundidad de los intercambios comunicativos, entre

otros. Los materiales también conforman parte del ambiente, es muy importante que los materiales que se usen al momento de trabajar sean aptos y complementarios al aprendizaje, en el texto se recomienda que las imágenes, por ejemplo, sean abiertas y con varias lecturas, que permitan al niño seguir explorando. Cuando hablamos del sentido de la educación artística nos referimos a tres dimensiones fundamentales, que esta debe ser apreciativa: aprender a ver, escuchar, saber o comprender; productiva: aprender a hacer, representar o transformar y emocional: aprender a gozar y disfrutar de manera sensible. Por otra parte, el talento, aprendizaje y tiempo por su parte nos dice que cada niño puede desarrollar su talento y para eso el ambiente es muy importante ya que tiene que ser adecuado debido aque es una posibilidad de todos, para eso hay que desarrollar las posibilidades de expresión que son que el niño está expuesto a diversas situaciones de expresión.

Capítulo 2: “Los proyectos: instrumentos para pensar en equipo”

Este capítulo habla sobre los proyectos, la autora plantea que los proyectos articulan el hacer y decir y desafía la pretendida homogeneidad, ya que plantea diferentes temas. El proyecto por su parte permite:

integrar ideas, vincular colegio y vida cotidiana, motivar a los niños y profesores, reflexionar sobre el aprendizaje, generar experiencias gratas, entre otras. Gracias a los proyectos los niños aprenden como los protagonistas de su aprendizaje y los profesores usan el rol de creadores de este y les permite a los niños el aprender a trabajar en equipo. También habla sobre la integración como proyecto se refiere a que tiene que haber un concepto integrador, ya sea de una obra o artista, tiene que haber interés del niño y un ambiente adecuado. Para llevar a cabo el proyecto se deben realizar ciertas etapas: el diseño, la motivación, el desarrollo, un registro y la evaluación si seguimos esos paso podremos crear un buen proyecto.

Capítulo 3: “Grandes obras para pequeños artistas”

Este capítulo habla de proyectos de apreciación artística que podemos implementar con los niños, plantea que si nosotros exponemos al niño, en este caso, a la obra de arte, la eficacia de su aprendizaje será mayor, mientras más obras de arte le mostremos al niño más eficaz será el aprendizaje. En este capítulo cabe resaltar que se muestran muchos proyectos de obras de arte para aplicar en niños, estos proyectos son de ayuda al profesor para empezar a iniciar al niño en

el arte y explica el cómo desarrollar los contenidos abordados por el proyecto, para eso incluye: Secuencia de obras expuestas, Tips, Biografía de algunos artistas y una programación o planificación para los proyectos,

Capítulo 4: “El arte sale del aula”

En este capítulo se habla sobre el desarrollo del proyecto institucional “El arte sale del aula” este proyecto consiste en que en un colegio separaron a todos los alumnos por nivel y se les asigno a cada nivel una obra o un proyecto, por ejemplo a los de primaria se les asignó un mosaico con azulejos rojos y al jardín infantil se les pidió que pintaran los recipientes. A raíz de este proyecto, el capítulo habla de cómo se llevó a cabo. El desarrollo de los contenidos abordados: “La escultura contemporánea” cuenta un poco la historia de la escultura y su popularidad en los años “60”, que cuenta que en esa época hay una ruptura en el lenguaje artístico y hay una transición al arte experimental, este consiste en que los desechos se convierten en materia prima de una escultura, hay intención de unir la obra de arte con la vida, llevando este arte a la calle y que sea propio de cada uno. Luego de hablar del desarrollo de los contenidos abordados se muestra una programación de la actividad con los propósitos, contenidos, propuestas de actividades y recursos. Finalmente en este capítulo rescatan que este proyecto

es parte de enseñar el orden y cuidado del ambiente y también otorgarle una mirada estética a nuestro entorno.

Capítulo 5: “Animales con mirada de artista”

Este capítulo habla de la importancia del arte en el siglo XX y plantea los diferentes estilos de arte que nacieron en ese siglo, como el Arte y Vanguardia, Fauvismo, Expresionismo, Cubismo, Dadaísmo, Superrealismo y Abstracción. También hace referencia al arte latinoamericano en el que resalta sobre la diversidad cultural y nuestro pasado colonial y valorando nuestras riquezas tradicionales culturales autóctonas.

Capítulo 6: “Luna y sol” Proyectos para partir de un paisaje.

En este capítulo se considera la luz, la oscuridad, los astros, la luna, el sol y las estrellas como fuente inagotable de interés y curiosidad para los niños. Estos componentes han sido el foco de interés de los artistas impresionistas, que expresaron en sus obras una naturaleza plena de luz, color y movimiento. Estos intereses que hay en común se pueden aprovechar para introducir a los pequeños artistas en el impresionismo.

La propuesta consiste en observar con atención los cambios que se producen en un mismo paisaje en

distintos momentos del año (de día, de noche, en primavera, verano o invierno, entro otros).

Para lo anterior, se ubicó una ventana por la que se podían ver el lago, árboles y un poco del cielo. Los niños salieron al aire libre, con un marco y buscaron recortes de paisajes donde reconozcan lo que se había observado por la ventana, para que luego, ellos mismos propusieran un tipo de ventana distinta, en la que eligieran el paisaje que ellos querían mirar. Luego observaron cómo distintos artistas pintaban el día y la noche, y las estaciones del año, para que más adelante, ellos mismos realizaran sus propias versiones de un mismo paisaje. Con lo anterior, podemos concluir, que una mirada atenta al paisaje, es una mirada a una trama cultural.

Por otra parte, se da a conocer el arte en el siglo XIX, el cual se caracteriza por la necesidad de expresar pasiones y sentimientos; el siglo de la Ilustración y de la Revolución Industrial. Los estilos artísticos, que a continuación se mostrarán, contrastan fuertemente con el ideal de belleza del siglo XVIII, centrado en temas amables, carentes de compromiso social o político. El primer estilo es el Neoclasicismo, que surge con la Revolución Francesa e intenta demostrar las virtudes del régimen, es didáctico, utiliza frecuentemente los colores de la bandera francesa, privilegia la línea recta

y trata temas serios, sobrios, virtuosos y es una pintura de fuerte compromiso político. A continuación vino el Realismo, que elige los temas humildes en donde la pobreza es la protagonista, utiliza colores tierra, oscuros y terrosos, es una pintura de compromiso social, pues denuncia las injusticias sociales. Por otro lado, está el Impresionismo, el cual explica el color como una consecuencia lumínica. Sus principales rasgos son: buscan demostrar la teoría del color, usan colores empastados, con pinceladas yuxtapuestas, consideran al negro como “ausencia de luz” y al blanco como “toda la luz” y les interesan los paisajes con agua (en cualquiera de sus estados). Por último se encuentra el Romanticismo, al cual le interesan las temáticas amorosas o exóticas que buscan conmover al espectador.

Un aspecto primordial es recordar que el niño aprende a través de los estímulos sensoriales: su cuerpo, sus sentidos, el movimiento y sus afectos, y cuanto más se lo motive, más eficaz será su aprendizaje.

Capítulo 7: “La obra de arte: una escenografía posible”.

Esta propuesta considera la obra de arte como objeto de análisis, creación y recreación. El arte es marco para generar situaciones en las que el niño enriquezca sus percepciones y también su capacidad de imaginar y

recrear entornos culturales lejanos en el tiempo y en el espacio. A partir de un cuento, poesía o relato, se elige, como fondo escenográfico, una pintura. Es importante que el relato se vaya apoyando estableciendo un diálogo rico en imágenes visuales y reflexionando acerca de cómo se sentirían los personajes del cuadro. Con ese trabajo de motivación y aportes, se les pide a los niños que dibujen a los personajes, para luego colgar la “escenografía” elegida. La obra se representa en grupo (“público” y “artistas”), lo que permite una alternancia de roles, adecuada para desarrollar tanto la capacidad de observar, como la de actuar. La escenografía cumple un rol fundamental, ya que la obra de arte se integra al mundo cotidiano de los niños.

El paisaje a través de la historia: En la Edad Media, la pintura adopta una temática religiosa, en el Barroco representa el paisaje con formas complicadas, que obligan a mirar muchas veces la obra para percibir el complejo lenguaje del estilo. En este capítulo se dan a conocer también, distintos artistas y sus estilos. Algunos de ellos son: John Constable, Henri Rousseau, Pedro Figari, Cándido López y César Bacle.

Capítulo 8: “El tiempo y su representación”.

La concepción del niño acerca del tiempo parte de acontecimientos emocionales, narraciones

dramatizadas, hechos o anécdotas que incluyan la imaginación y sensibilidad. Se menciona que la ubicación temporal infantil es una construcción compleja y que se produce a lo largo de toda la infancia, pues el niño reconoce el paso del tiempo, fundamentalmente a través de los cambios de los objetos, percibidos por los sentidos. Las nociones de tiempo y los cambios van de la mano, pues son dimensiones básicas de la temporalidad histórica. En este capítulo se habla de la enciclopedia, que se caracteriza por ser sintética, de autoría colectiva y su contenido es de interés universal y de carácter atemporal. Estas características la convierten en un recurso conveniente y adecuado como actividad grupal para dar a conocer los resultados del proyecto y para que los mismos niños tomen conciencia del conocimiento como una construcción propia, en la que ellos son protagonistas. La “enciclopedia” es un recurso preciado porque es una especia de “bitácora” de viaje que registra frases risueñas de los niños, descubrimientos grupales, aprendizajes imprevistos y fotografías del proceso, entre otros.

Capítulos 9: “La familia” y 10: “Flores”.

En la realidad la familia ya no responde a un modelo único, por lo que es difícil no caer en estereotipos de familia modelo. Se habla de que la referencia a la

familia debe realizarse prudentemente, ya que los niños de dos y tres años están comenzando a ensayar cierta autonomía. Por otro lado, el capítulo 10, hace énfasis en que el universo vegetal tiene para un niño un atractivo especial, por el profundo interés que éste tiene en la vida y el crecimiento. El proyecto que se describe, se enfoca en las interrogantes del niño sobre la vida y esta dimensión del niño se manifiesta sobre todo con relación a la semilla y la vida que hay en su interior, en donde es indispensable acompañar esta reflexión con el diálogo. Temas como la naturaleza y la vida con muy atractivos para los niños, ya que éstos tiene una mirada naturalmente trascendente de la realidad y la transformación de la semilla en planta es una buena metáfora para explicar el desafío de la vida y de la muerte.