LA GESTIÓN AMBIENTAL EN EL MARCO DEL PLAN DE

DESARROLLO MUNICIPAL

M.C. ENRIQUE BUDAR LENDECHPRESIDENTE

Profesor Investigador UAAU - UAG

Para que un Plan Municipal sea exitoso debe como todo modelo para Administrar ser congruente con:

Los recursos disponibles (materiales, humanos y financieros)

El contexto en donde esta inmerso (realidad espacial y económica)

Las directrices de sus participantes (habitantes y administradores)

Los indicadores y satisfactores de lo urbano, se ha demostrado en más de un caso, siempre son atendidos por el medio natural y sus recursos ambientales o el mal llamado “medio ambiente”, el agua, los alimentos, los combustibles, el aire, el suelo no se generan en la ciudad, pero dan subsistencia a las ciudades y esto no se asimila y se vuelve crítico, hasta que hay una carencia en cualquiera de los satisfactores anteriores, para volver los ojos al medio natural y sus recursos ambientales. Se ha pretendido, por una mala concepción, que las ciudades deben eliminar y/o sustituir a estos bienes naturales por bienes artificiales de más valor.

El caso contemporáneo de la ciudad y puerto de Dubai en los Emiratos Árabes, es el mejor ejemplo de cuanto puede valer un bien natural en donde no hay nada, al grado de sustituir desierto por naturaleza, no importa el costo, para alojar complejos urbanos que sin este Valor Agregado no podrían generar tan alta RENTABILIDAD.

La planeación Municipal debe implementar además de tibias acciones de saneamiento, verdaderos programas Ecológicos de SUSTENTABILIDAD; lo que significa conservar el capital ambiental que ha mantenido a estas ciudades y a todo el estado. La magnificencia turística de Guerrero se debe a sus recursos naturales, a sus vastas playas, a sus paisajes, a sus pueblos indígenas; y ojo, todo esto se esta perdiendo. En Europa, particularmente en España el turismo rural, el ecoturismo, los ranchos cinegéticos, el turismo de aventura, los deportes extremos, los senderos, la espeleología; han permitido obtener recursos frescos que apoyan la conservación y mantenimiento de estas áreas naturales permitiendo a los lugareños incrementar sus ingresos sin depredar al ambiente.

Los grandes bosques permiten bajar fondos internacionales del mercado de “Bonos de Carbono” que a su vez coadyuvan en su conservación a largo plazo permitiendo actividades compatibles con la agroforestería y silvicultura, que no necesariamente es simplemente el corte de madera. El mejorar y recuperar suelos otrora fértiles o abandonados por las actividades primarias por su baja capacidad productiva, reconvirtiéndolos en suelos remediados, enriquecidos o por lo menos en cultivos intensivos (hidroponia, cultivos verticales, bioespacios, fertiriego y otros más) aumentan la rentabilidad de los productores al tener predios que ya cuentan con trabajo previo que evitan la preparación de los nuevos y generalmente están más próximos a sus viviendas ahorrando tiempo en acarreos.

Pensar sólo en la ciudad sin contribuir a mejorar la zona natural que la rodea, es tener una visión corta de la “PROBLEMÁTICA AMBIENTAL”, desconocer el potencial que tienen zonas como Omiltemi, la Sierra de Coyuca, el Ocotito, Petaquillas y los lomeríos colindantes con Tixtla, para ayudar a resolver los problemas de saneamiento de la ciudad, es como se describía al principio, no ser congruente con el modelo para Administrarlo.

El recurso natural y el valor ambiental que contiene, no es simplemente para disponerlo en el momento y forma que las autoridades o los ciudadanos crean más conveniente.

Mantenido – Conservado – Reproducido – Manejado – Soportado – Aumentado –

Dispuesto Convenientemente.

Como todo recurso debe ser:

De lo anterior nada se hace en nuestros municipios, y lo poco que alguien diga que se esta haciendo es por cumplir con la normatividad de otros niveles de gobierno. Repito, basta mirar el caso europeo, algunas ciudades latinoamericanas ya lo han entendido y se están recuperando de la devastación porque entendieron que de esto depende su sobrevivencia y su ingreso económico, en México, el caso de Nuevo San Juan (Parangaricutirimícuaro) en Michoacán es reconocido hasta por la ONU y esto le ha brindado más de un programa de financiamiento por el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo.

El problema de Chilpancingo, Iguala, Taxco, Acapulco y Zihuatanejo, no es el agua, no es el drenaje, no es la basura, el problema es tratar de resolver algo que no se conoce, como la Gestión para su solución, con lo que no se cuenta, y desafortunadamente la Ciudad no ha sido capaz de generar ingreso, de generar DINERO suficiente para atender los puntos mencionados, sin embargo no se evalúa el potencial económico que nuestras áreas naturales tienen, ya viene el temporal, Dios provee, sino contamos con la infraestructura hidráulica suficiente, es tiempo de tomar manos a la obra y aprovechar otro recurso gratuito, reconvirtamos el campo dependiente y de extrema pobreza en una actividad económica sustentable, habiendo tantas y múltiples formas de hacerlo.

La tecnología está disponible, el capital humano son los mismos habitantes de cientos de comunidades dispersas y abandonadas que exigen la retribución a su sufragio, los recursos existen, habrá que hacer una inversión, sin embargo esta es más que una pequeña semilla, será la oportunidad, por ejemplo, de que Chilpancingo deje de estar en la lista de las seis peores ciudades a nivel nacional para invertir.

Por qué los campesinos vienen a la ciudad, será que la ciudad les proveerá de sus satisfactores y aún sabiendo que no es así, por qué dejan el campo, porque allá, no hay nada, simplemente NADA. Es la oportunidad de que este Gobierno, encabece el ejemplo en el país, es triste, ver tanta riqueza natural y a la gente en extrema pobreza. De verdad, el “Modelo para Administrar” está mal o los administradores no tienen la capacidad para administrarlo, el que no sabe, es como el que no ve, los colegios de profesionales y la academia, estamos para ayudar, es un simple ejercicio de voluntad política lo que falta nada más, para contar con un círculo virtuoso.