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Generación de petróleos y carga de reservorios en Manantiales Behr, Cuenca

del Golfo San Jorge: un caso de exploración en áreas maduras

Conference Paper · January 2002

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Eduardo Bellosi

Museo Argentino de Ciencias Naturales (CONICET)

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GENERACION DE PETR~LEOS Y CARGA DE RESERVORIOS

EN MANANTIALES BEHR, CUENCA DEL GOLF0 SAN JORGE:

UN CASO DE EXPLORACI~N EN AREAS MADURAS *

Guillermo A. ~alf in ' , Eduardo S. ~ e l l o s i ~ , Eduardo smith3 y Guillermo ~ a f f i t t e ~

' Repsol YPF . Dpto. Tecnologia E & P, Madrid. gajalfins@repsolypf.com Museo Argentino de Ciencias Naturales. CONICET. Buenos Aires, ebellosi@sei.com.ar

%opatagonia. Comodoro Rivadavia. Consultor. Buenos Aires

* Presentado en Hedberg Conference New Technologies and New Play Concepts in Latin America. American Association of Petroleum Geologists. Mendoza, Noviembre 200 1.

Keywords: San Jorge Basin, Hydrocarbon kitchens, Reservoir charge, Biodegradation.

Abstract

Four main kitchens (Granson, Diadema-Escalante, Cafladon Perdido and Caflad6n Botella) were recognized as responsible for filling the Manantiales Behr's traps. The expulsion started at 65 Ma in Granson kitchen from a Neocomian source rock, and since 50 Ma from Diadema-Escalante kitchen from Neocomian + D-129 beds. The expulsion rim reaches Caflad6n Perdido kitchen at 40 Ma. The oil generative system was totally developed at 30 Ma, where even the Neocomian sequence at Caflad6n Botella kitchen gets the oil window. The continued subsidence of the Neocomian + D-129 at Granson kitchen leaded to the first expulsion of very light oil/gas/condensate at 20 Ma, which played a main role in the solubilization of oils previously reservoired and biodegraded. The main superficial water invasion occurred at 40 Ma (hiatus between Sarmiento-No Chico Formations). The presence of this pulse marks the difference between the producible oils from the dead oils (<lOOAPI). The remaining expulsed oils from Granson kitchen filled the deeper reservoirs (top of D-129 closures). Finally, Diadema-Escalante kitchen in the last 10 Ma expulsed very light/gas/condensate, filling the southernmost traps against Escalante lineament. This predictive model of the migration pathways, accompanied by the history of the reservoir filling, has been achieved from the integration of sedimentological, structural and geochemical studies. The drilling of the sweet spots suggested by this model has leaded to the discovery of light oils from deeper reservoirs (lower Mina del Carmen and upper Pozo D-129 Fms.) in two new blocks (La Carolina and Granson). The successful exploration of remote areas and deeper reservoirs has triggered an aggressive development plan resulting in both a significant increment in the daily production and the revalorization of the field with the incorporation of new proved reserves.

El Area Manantiales Behr fue descubierta en 1928 y hasta el presente se han perforado poco mBs de 1000 pozos. Si bien siempre se la ha considerado un h i c o yacimiento, en realidad esta vasta comarca situada en el Flanco Norte de la Cuenca del Golfo San Jorge comprende 15 bloques productivos (fig. I). Cada uno de ellos por sus caracteristicas geol6gicas, tipo de hidrocarburos y producci6n constituyen yacimientos en si mismos y deben ser tratados individualmente. Este trabajo tiene por objeto mostrar 10s resultados obtenidos en la exploraci6n dentro de esta Brea considerada "madura". El anhlisis integrado de datos estructurales, sedimentarios y geoquimicos permiti6 desarrollar un modelo predictivo donde se reconocieron 10s posibles mejores objetivos (sweet spots) a partir de la historia del llenado de 10s principales reservorios (Jalfin et al., 2001). De este modo, habikndose identificado las principales cocinas de maduracit~n, la cronologia de la generaci6n y expulsi6n de hidrocarburos y sus probables vias de migracih, se disefl6 un plan de acci6n que condujo a1 descubrimiento de tres nuevos bloques dentro del Brea (i.e. La Carolina, Granson y Grinbeek). Tanto la alta productividad de 10s pozos descubridores como el tipo de petr6leo (liviano en 10s dos primeros) han tenido un gran impact0 econ6mico no s610 por la incorporaci6n de reservas, sino tambiCn por la rhpida generaci6n de un flujo de caja resultante de un sostenido increment0 en la producci6n diaria.

Jalfin G., E. Bellosi, E. Smith & G. Laffitte. 2002. Generacion de petroleos y carga de reservorios en Manantiales Behr, Cuenca del Golfo San Jorge: un caso de exploration en areas maduras. 5" Congreso Exploration Y Desarrollo de Hidrocarburos, Actas CD Rom. 19 pp. Mar del Plata, Argentina

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M A N A N T I A L E S B E H R

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1'1g. I Map? dc Ubtcscerjn > didin;io~i dc bbqucs pmdurtivos on hlsfii~,llr~ialcs Bchr

La Cuenca del Golfo San Jorge estuvo sometida a un rkgimen extensional durante el Mesozoico y fue parcialmente invertida desde el Oeste durante el Ne6geno. En secci6n regional NS, perpendicular a1 eje de la cuenca, se comprueba su perfil simktrico donde la distribucibn de las fallas principales poseen vergencia hacia el centro de cuenca. No obstante, un analisis m h detallado revela que en el Flanco Norte se habria desarrollado tambih un importante conjunto de fallas de buzamiento contraregional y e dio lugar a pequefias subcuencas cuyo relleno estuvo fuertemente controlado por la tectimica (fig. 2). Dentro de este esquema morfotect6nico se encuentra Manantiales Behr, donde un sistema de fallas EO y NE-SO brinda rasgos particdares a la regi6n. Este conjunto de fallas de buzamiento N debe su origen a la configuraci6n del basamento, respondiendo a la reactivaciim de antiguos lineamientos dmnte la evoluci6n del rkgimen extensional del Jurhsico superior-Crethcico. La disposici6n oblicua de alguno de 10s planos de falla puede localmente mostrar una ligera tendencia a1 desplazamiento de rumbo, per0 de escasa magnitud. Desde el centro de cuenca a1 Norte, el primer carnbio en la vergencia de fallas se advierte en el extremo septentrional del yacimiento Escalante, limite austral de Manantiales Behr (fig. 2). Este constituye un alto estructural que separa sectores con evoluciones tectonosedimentarias distintas y, consecuentemente, disimiles historias de generaci6mmigracibcarga de hidrocarburos. A1 norte del mismo, en Manantiales Behr se define un depocentro (Granson) con forma de hemigraben en el bloque colgante de esta falla (fig. 3), cuyo relleno se inicia con fangolitas lacustres neocomianus. El fallarniento que limita este hemigraben no resdta de un lhrico plano sino que por el contrario se integra por una serie de fallas de rumbo EO que en conjunto dan lugar a1 Lineamiento Escalante. En sentido paralelo, el lineamiento esth integrado por fallas sint6ticas que se relevan lateralmente a1 mismo tiempo que se curvan ligemente hacia NE a medida que se aproximan a un conspicuo alto basamental en Voster (fig. 4A). Desde alli hacia La Begonia, sector oriental de Manantiales Behr, el Lineamiento Escalante pierde algo de identidad aunque puede seguirse a1 norte de Diadema y hacia el extremo E en Cafiad6n Perdido. En el extremo S de Manantiales Behr, la presencia de fallas buzantes a1 S

flanquean el alto que separa este campo de Diadema Aqui se desarrolla otro depocentro neocomiano E-0, atravesado marginalmente por el pozo D-129, que alcanzd tambikn el basamento granitico.

S N Centro de Cuenca El Trebol I Esealante Manantiales Behr

& A

Fig. 2. Corte &I F b Norte de la Cuenca &l &lfo San Jorge &ndo ubioaci6n de Manantiales Behr.

El lineamiento El Alba es un sistema de fallas de rurnbo ONO-ESE localizado en el sector noroeste del bea (fig. 4). Sobre el sector oriental de Manantiales Behr, la primer falla importante buzante al N (contrarregional) time menor rechazo que las del depocentro de Granson (fig.3). A h asi, al pie de esta falla se define, hacia el N de La Begonia (fig. 5), otro depocentro neocomiano (CaAad6n Botella). Su limite septentrional esth determinado por una falla E-0 de vergencia N (fig. 4A), cuya continuidad hacia el E es desconocida; per0 hacia el 0, flanquea a1 yacimiento Grimbeek y se relaciona con la porci6n NO del Lineamiento El Alba Es dable destacar que relaciones de rechazo vertical versus longitud horizontal de las fallas indica que atm modestos desplazamientos pueden provocar una rhpida propagaci6n lateral de 10s planos de falla. Los Linearnientos El Alba (al norte) y Escalante (al sur) se conectan mediante un conjunto de fallas de basamento de rumbo NO-SE, el cud ha servido de limite occidental a1 hemigraben neocomiano de Caf'iad6n Botella. De este modo, el Alto de Voster esth definido por una "zona de conjunci6n" (fig. 4A). De este mod0 quedan delineados en la comarca tres depocentros originados en el Neocomiano (fig. 4B):

1) Depocentro Granson, hemigraben en el oeste de Manantiales Behr, limitado al S por el Lineamiento Escalante y hacia el E por un alto de basamento (alto de Voster), extendikndose al 0-NO hacia el bea de Cerro Tortuga y Colhue-Huapi.

2) Depocentro CaAad6n Botella, hemigraben del sector centro-oriental, separado del de Granson por el alto de Voster. Se encuentra limitado al S por el Lineamiento Escalante que mediante un horst se separa del depocentro Diadema. En el N esth flanqueado por la falla E-0 que se prolonga al yacimiento Grimbeek.

3) Depocentro Diadema-CaAad6n Perdido, se dispone a1 S, fuera del bea de estudio. Tiene una elongacibn E-0 y polaridad inversa con respecto a 10s dos anteriores. Hacia el E, se extiende en CaAad6n Perdido ocupando un bajo estructural coincidente con el denominado sinclinal del Diablo.

Depocentro Granson La Carolina El Alba Valle 9 P N

Fig . 3 - Estructura del extrerno occidental de Manantiales Behr con fallas principales buzantes a1 N

Fig. 4 -A. Mapa del tope del h p o Lonco Trapial (basamento econ6mico). B. ConfiguracMn de 10s principales depocentros neocomianos en el iirea

R La Begonia Depocentro Cafiadon Botella N

Fig. 5 - Corte Estructural S-N del extremo oriental del Yacirniento Manantiales Belu

La columna e ~ t r a t i g r ~ c a de Manantiales Behr (fig. 6) comprende tres sucesiones principales dispuestas sobre el basamento. Este ultimo se compone por un conjunto volcimico-sedimentario (Gr. Lonco Trapial) del Jurbico medio. La sucesi6n epiclbtica m b antigua o Neocomiano, acumulada durante Jurbico cuspidal- Crethcico temprano, incluye dos unidades. En lapsos de alto nivel de base, 10s depocentros alcanzaron grandes profundidades y desarrollaron un rkgimen hidrol6gico meromictico con acumulacibn y preservaci6n de espesos paquetes de fangolitas ricas en materia orgimica (F. Pozo Anticlinal Aguada Bandera-1). La F. Pozo Cerro Guadal-1 no se hallaria en el hea de estudio ya que ocuparia s61o posiciones centrales y sud- occidentales de la cuenca (Barcat et al., 1989; Uliana y Legarreta, 1999). El Neocomiano no se distribuye uniformemente sino que su desarrollo se circunscribe a hemigrhbenes y grhbenes separados. En Manatiales Behr, su reconocimiento se realiz6 a travBs de registros sismicos, lo cual impuls6 el estudio cutting y coronas del pozo D-129 (Diadema). En Bste se detectaron asociaciones palinol6gicas (Barreda, 2001) que comprobaron su existencia en niveles antes atribuidos a la Fm. Pozo D-129 (Lesta, 1968). La subsecuente revisi6n de lineas sismicas de Diadema confirmaron que dicho sondeo perfor6 el borde norte (activo) de un hemigraben neocomiano E-0. En consecuencia, en la localidadlpozo tip0 (pozo D-129) de la Fm. Pozo D- 129 deberia reasignarse su tramo inferior (3335- 3570 mbbp) a1 Neocomiano (fig. 7). Mhs tarde, el sondeo Gr.xp-602 (Granson) afirma la interpretaci6n sismica llevada a cab0 en Manantiales Behr. Recientemente, Bellosi et al. (este congreso) enseflan las evidencias de Neocomiano en Colhue-Huapi, inmediatamente al 0 de Manantiales Behr. Tal como ocurre en el Flanco occidental de la cuenca (Archangelsky et al., 1984; Peroni et al.., 1995, Uliana et al., 1999), la sucesi6n neocomiana del pozo D-129 esth dominada por el alga Celyphus rallus (60-90%). El espectro esporopolinico hauteriviano tambikn incluye gimnospermas (Balmeiopsis limbatus, Cyclusphaera psilata, Classopollis sp y Podocarpidites sp), esporas (Aequitriradites verrucosus, Densoisporites velatus, Foraminispons microgranulatu, F. wonthaggiensis, F. variornatus,

Klukispontes sp, Reticulatisporites sp., Gleichenidites sp., Baculatisporites comaumensis, Ceratosporites equalis, Cicatricosisporites australiensis, Cicatncosisporites sp, Interulobites sp, Taurocusporites segmentatus), abundantes algas (Celyphus rallus) y un quiste de dinoflagelado Parreda, 200 1).

COMODORO

RlVAD AVl A

DEL CARMEN

Fig. 6 - Cmdm Estrati&ico de les secuencias reconocidas efi Manantiales BehrvQido para el Flanco Norte de la Cuema del h l f o San Jorge.

El segundo conjunto de secuencias cretiicicas se apoya en discordancia sobre el anterior y corresponde a1 Grupo Chubut. La Fm. POZO D-129 (Hauteriviano tardio-Aptiano temprano) posee 600 m de tobas, areniscas, fangolitas oscuras con materia orgknica y pirita y calizas delgadas con abundantes ostrhcodos, escamas de peces, car6fitas; depositadas en un expandido sistema de multiples lagos bien estratificados, alimentados por deltas y con costas de ooides (Van Nieuwenhuise y Ormiston, 1989; Fitzgerald et al., 1990, Uliana et al., 1999). La intercalaci6n de facies fangoliticas oscuras no bioturbadas y otras claras con trazas f6siles sugieren variaciones en la oxigenaci6n del fondo lacustre. La microflora de subsuelo (CC es-1, CS x- 1, CG es-1, H-327, H-348) y superficie (Anticlinal CO Chenque), estii dominada por Classopollis y esporas e incluye polen de angiospermas primitivas y elementos fitoplanct6nicos (Botryococcus). En esta oportunidad se efectu6 un nuevo muestro palinol6gico (cutting y coronas) en varios sondeos del Flanco Norte (D-129, EA-12 y H-297), hallimdose abundante material lefloso-carbonoso (esporas de pterid6fitas y bri6fitas y polen de gimnospermas), con predominio de Classopollis sp. En casi todos 10s niveles aparecen algas de agua dulce a salobre. En el pozo D-129, 10s niveles fkrtiles francamente pertenecientes a la Fm. Pozo D-129 (3059-3320 mbbp) tambiCn incluyen Celyphus rallus, per0 en proporciones muy inferiores a1 Neocomiano. El conjunto de palinomorfos de la Fm. Pozo D-129 corroboraria una antigaedad hauteriviana tardia?- barremiana (Barreda, 2001). Se reconocieron gimnospermas (Classopollis sp., Araucanacites sp., Cyclusphaera psilata, C. Patagonica, Coptospora sp., Podocarpidites sp. y Balmeiopsis limbatus), esporas

(8% 1) ssa? aP oPE:,r$poN 'Iowa1 ~aa) se:,ypi$er~sa sapep!un seaanu uo:, '6~1~ ozod lap o:,~~l:,a~a pjlad - L '8g

Por encima yace la Fm. Mina del Carmen (Aptiano tardio-Albiano) formada por tobas, chonitas y escasas areniscas acurnuladas en un sistema fluvio-lacustre y cuyos cuerpos arenosos constituyen reservorios de moderada a pobre calidad. Le sigue la Fm. Comodoro Rivadavia (Cenomaniano-Turoniano), conjunto fluvial arenoso con 10s principales reservorios. La unidad superior es la Fm. Yacimiento El TrCbol (Coniaciano-Maastrichtiano) que incluye las secciones San Diego (Complejo II) y Valle "C" (Complejo I). El tercer conjunto de secuencias comprende el Supracretticico-Ne6geno (Bellosi, 1995; Legarreta y Uliana, 1994)

CARACTER~STICAS GEOQU~MICAS DE ROCAS GENERADORAS

Este estudio incluye tanto la caracterizaci6n geoquimica de las potenciales rocas generadoras como la de crudos producidos desde distintos niveles estratigrhficos (Villar, 2001a). Las 129 muestras de rocas provienen de 12 pozos perforados en el Flanco Norte cuyas posiciones relativas cubren desde sectores pr6ximos a1 centro de cuenca, hasta la vecindad con Manantiales Behr (fig. 8). Para un mejor entendimiento del peso de las muestras en el mode10,se consideraron dos Grupos I y II donde el primer0 se constituye de aquellas muestras que provienen de pozos ubicados en 10s sectores m b centrales de la cuenca y por lo tanto m b alejados del area en estudio. Por su parte en el Grupo I1 (fig. 8) se incluyeron a 10s pozos m b marginales y por ende mtis pr6ximos a1 yacimiento objeto de este estudio.

COLHUE HUAPI

EL CARMEN

r U U E S ~ DE ~ereomo LNESTRAS DE EOCAS

Fig. 8 - Mapa de ubicacion de 10s pozos muestreados en este estudio

Neocomiano

El estudio estratigr#ico de varias lineas sismicas del Flanco Norte de la cuenca y el anhlisis palinol6gico de muestras de cuttings del pozo D-129 del Area Diadema han permitido confirmar que por debajo de la Fm. Pozo D-129 se preservan sedimentos del Neocomiano (fig 7), 10s cuales representan el relleno de un graben de orientaci6n E-0 (Depocentro Diadema-Caflad6n Perdido). La secuencia neocomiana mide en este sondeo s6lo 115 m de espesor, aunque hacia el S la potencia se incrementa fuertemente (> 600 m). Estos dep6sitos poseen moderado a alto COT (0.63 a 2.06 %), por lo que se convierten en una roca madre con potencialidad

generadora igual o aun mejor que la tipica Fm Pozo D-129. Este hallazgo del Neocomiano, similarmente a1 realizado en el Flanco Sur (Sylwan et al., 1998), abre nuevas posibilidades exploratorias, ya que representa un sistema de generaci6n alternativo, principalmente para 10s sectores margnales del Flanco Norte y Sur de la cuenca donde la Fm Pozo D-129 puede encontrarse en facies orghicas inmaduras o inapropiadas para la generaci6n de hidrocarburos (Bellosi et al., este congreso). En Manantiales Behr, la secuencia neocomiana ha sido sismicamente mapeada en 10s depocentros de CaAad6n Botella y Granson. En este ultimo, el sondeo Grxp-602, atravez6 230 m de sedimentitas lacustres apoyadas en discordancia sobre el Grupo Lonco Trapial. Los valores de Ro%, TAI y Tmax de la pir6lisis Rock-Eval indican que el Neocomiano en el pozo D-129 se encuentra en estado de generaci6n tardia de petr6leo en transici6n a condesadolgas humedo (Villar, 2001 a). Debido a la alta madurez tkrmica (Ro-1.3-1.4%), el anhlisis de cuatro extractos del Neocomiano no ha permitido una suficiente caracterizaci6n molecular que posibilite una definitiva correlaci6n con 10s petr6leos. Considerando que las facies orghicas de la Fm. Pozo D-129 y el Neocomiano no son extremadamente diferentes y teniendo en cuenta que en Manantiales Behr ambas entidades se encuentran en ventana de generacih, la correlaci6n roca/petr6leo se hace potencialmente dificultosa debido a1 enmascaramiento que resulta de las mezclas de crudos provenientes de ambas rocas generadoras. La composici6n de facies de la Fm. Pozo D-129 observada en Manantiales Behr en 10s sondeos de Granson (Grad01 y Grxp-602), La Carolina (ALCa-401) y El Alba Valle (AEAa-516) permite afirmar que existe un drbtico desmejoramiento de la potencialidad generadora de esta unidad hacia el N y NO debido a1 increment0 de clhsticos gruesos aportados por sistemas fluvio-deltaicos desde el N. En contraposici6n, las facies lacustres profundas del Neocomiano tienden a ser m h homogeneas dentro del hemigraben de Granson, alcanzando espesores considerables hacia el 0 de Manantiales Behr, con lo cual podria predecirse que en esa direcci6n habria crudos de origen neocomiano puro (ver Bellosi et al., este congreso). En comparaci6n con la Fm. Pozo D-129, 10s extractos del Neocomiano son m h paraflnicos y sus relaciones de idtopos de carbon0 saturados versus aromhticos sugiere una mhs marcada influencia terrestre.

Formaci6n Pozo D-129

Esta es la principal roca generadora de la cuenca. A pesar que el estudio detallado de 10s extractos orghicos de 10 muestras ha demostrado poseer caracteristicas similares a las que ya han sido observadas en otros sectores de la cuenca (Figari et al., 1999), existen ligeras diferencias en algunas de las facies orghicas detectadas. Las fangolitas de la Fm. Pozo D-129 fueron depositadas en un ambiente lacustre, moderadamente reductor bajo una influencia de aguas salinas carbonatadas (Peroni et a1.,1995), siendo su contenido orghnico una mezcla algal-bacterial con significative aporte terrestre. El contenido orghico de las muestras de roca aqui analizadas es muy variable, con rango de COT de 0.04 a 5.30 % y promedio de 1 a 3 %. Como muchas de las muestras exhiben alta madurez tkrmica, se asume que el contenido orghico original de las sedimentitas fue sustancialmente mayor. El potencial generador de estas rocas tambih cubre un amplio espectro desde pobre-regular a bueno e incluso excelente. Los mejores valores hallados pertencen a1 pozo Bxp-443, de Caflad6n Perdido. Tambidn se observ6 en el extremo S de Manantiales Behr, en una b i c a muestra del pozo H-297, baja a moderada madurez tkrmica. Asimismo, muchas de las muestras analizadas pertenecientes a 10s pozos D-129; CCe es-1 y CCe-1937 presentan capacidad limitada de producci6n de hidrocarburos, aunque es posible que originalmente, es decir antes de su maduraci6n avanzada, hayan poseido una calidad similar a la observada en el pozo Bxp-443. En las muestras de 10s pozos CLV x-l y CLV x-3 (Caflad6n Las Vertientes), el COT es elevado per0 revisten un muy bajo potencial residual de generaci6n debido a su clara sobremaduraci6n. Los ker6genos detectados varian desde el Tipo UlI (petr6leo) a mezclas de Tipo II/III e incluso Tipo III (gas). Esto es coincidente con lo que anticiparan 10s resultados del potencial total de generaci61-1, confirmtindose que la Fm. Pozo D-129 en 10s sondeos Bxp-443 y H-297 muestra las mejores condiciones para la generaci6n de petr6le0, mientras que en 10s pozos CLVx-1, CLVx-3, y en parte en CCe es-1, es muy pobre en hidr6geno debido a su alta madurez.

Los 33 petr6leos investigados (Villar, 2001a y b) en Manantiales Behr cubren un rango de densidad API de 9.95" a 44.63'. Los m k pesados provienen de la Fm. Comodoro Rivadavia o Complejo III, 10s m k livianos fueron extraidos de la base de la Fm Mina del Carmen y del tope de la Fm Pozo D-129. Los petr6leos de estas dos ultimas unidades, enseflan una m h rica composici6n de hidrocarburos saturados en contraste a1

-4t.t API: 11.7O *Mezcla de petrdleos paleobiodegradado+

rejwenecldo *Mezcla nuevamente biodegradada *Carga adklonal de petr6leo fresco

L"." T..

API: 17.a0 *Mezcla de petr6leos paleobiodegradado+

rej wenecldo

I -,. *La mezcla es presewada *Rejuvenecido por petrdleo similar a1 de la

I ~ I i I . base de la Fm. Mina del Carmen

API: 12.5O

-", *Metcia de petr6leos paleobiodegradado+ rejwenecldo

~Mezcla nuevamente biodegradada *Carga adklonal de petrdleo fresco *Fraccionamlento evaporatio?

API: 12.7O *Mezcla de petr6leos paleobiodegradado+

rej wenecido *Mezcla nuevamente biodegradada

API: 35.1° Petr6leo de alta madurez t4rmlca,

YCwU no degradado *Alto contenldo ceroso

5 1 Paleobiodegradaci6n

Ausente

Fig. 9. Trazas cromatogrhficas y procesos de alteraci6n y mezcla inferidos para 10s petr6leos de AEA-5 11, s e a Villar (200 1 a)

resto de 10s petr6leos que son ricos en componentes NSO y resinas m b asfaltenos. Asimismo, poseen un restringido rango de azufre entre 0.029% y 0.285%. Tal como se verifica en casi toda cuenca la mayoria de 10s crudos contienen una participaci6n variable de 25- norhopanos (10-desmetilhopanos) 10s que son tipicos indicadores de una severa biodegradaci6n (Villar et al., 1996; Jalfin et al., 1999). Sin embargo, algunos de ellos muestran a mod0 de envoltura una cromatografla de gas completa e inalterada que sefiala una ligera a inexistente alteraci6n de las n-parafinas (fig 9). Esto resulta de mezclas de crudos altamente biodegradados con petr6leos j6venes que poseen su composici6n original, generados en tiempos m b recientes y que han ingresado a1 reservorio en un nuevo pulso de migraci6n (Villar et al., 1996, Figari et al., 1999, Jalfin et al. 1999). En numerosos casos se advierte que dichas mezclas fueron a su vez biodegradadas y eventualmente recibieron una nueva carga de petr6leo liviano. Los procesos de alteraci6n m b antiguos referidos, donde se forman 10s 25-norhopanos son referidos como paleobiodegradacidn en contraste con la biodegradaci6n m b reciente y moderada que ha alterado las cargas frescas de n-parafinas y colas de livianos. La mayoria de 10s petr6leos alojados en la Fm. Comodoro Rivadavia y tope de la Fm. Mina del Carmen son 10s crudos m b pesados (10" a 23" API), conteniendo muy bajas proporciones de componentes livianos, grandes cantidades de NSO m b asfaltenos, cubiertas parafinicas que pueden estar o no alteradas con participaci6n limitada de componentes cerosos y conteniendo moderada a alta proporci6n de elementos paleobiodegradados. La distribuci6n de biomarcadores sugiere un regimen termico de generaci6n sigmficativamente menor si es comparado con el que diera lugar a 10s petr6leos livianos alojado en 10s reservorios profundos. Todos 10s petr6leos producidos de la base de la Fm. Mina del Carmen y tope de la Fm. Pozo D-129 presentan nula a muy baja proporci6n de 25-norhopanos, tienen un rango de gravedad API de 35" a 45", contienen abundantes componentes livianos y elevadas proporciones de hidrocarburos saturados y muestran una completa e inalterada cubierta de parafinas con un abundante componente ceroso (nC22+). Estos petr6leos, no presentan componentes de paleobiodegradacidn ni tampoco han experimentado una biodegradacibn reciente. Asimismo, la distribuci6n de biomarcadores indica un Ambit0 de generaci6n a m b alto regimen ttrmico. Entre 10s dos extremos de crudos livianos y pesados, en el pozo PCN.a-401 se han identificado petr6leos que ensefian caracteristicas intermedias y son interpretados como resultado de procesos de biodegradaci6n y mezcla.

V ~ A S DE MIGRACI~N Y MECANISMOS DE CARGA

En Manantiales Behr se desarrolla, a travts de dos linearnientos estructurales principales (El Alba Valle y Escalate), una configuraci6n de altos de basamento y cubetas que alojaron sedimentitas lacustres ricas en materia orghnica (Neocomiano y Fm. Pozo D-129). La historia termica de estos depocentos (fig. 4B) permite identificarlos como cocinas activas que tuvieron la capacidad de expulsar hidrocarburos a partir de 10s 65 Ma La proximidad de estas cocinas a 10s reservorios cargados y la orientaci6n y evoluci6n de las fallas principales, indica que la migraci6n fue corta, esencialmente vertical y a travb de ellas. La migraci6n lateral ha sido probablemente menos significativa. No obstante existen algunos puntos a considerar: a) la existencia de estratos portadores (carrier beds) podrfa haber sido factible unicamente para la Fm. Comodoro Rivadavia, descarthndose para la Fm. Pozo D-129 y Mina del Carmen debido a la desconexi6n de 10s cuerpos permeables. b) Cabe la posibilidad de existir rnigraci6n lateral a lo largo de la superficie de discordancia entre las Fms. Pozo D-129 y Mina del Carmen. Esto explicaria la carga de petr6leo liviano en reservorios de esta idtima unidad a distancias relativamente alejadas desde la cocina de Granson, c) La posibilidad de cierto desplazamiento lateral de 10s fluidos a traves de zonas fisuradas alrededor de 10s planos de fallas, principalmente a lo largo del lineamiento El Alba Valle explicaria la profusa carga de hidrocarburos, principalmente en la Fm. Comodoro Rivadavia, que da lugar a 10s yacimientos Wyburg, San Diego, CaAad6n Botella, El Alba Pampa, El Alba Valle) que ocurren a uno y otro lado de dlcho lineamiento. El llenado de reservorios ocurri6 iterativamente en ciclos de generaci6n-migraci6n que se alternaron con procesos de alteraci6n de 10s petr6leos ya almacenados, resultando en complejas mezclas de crudos (Villar et al., 1996; Jalfin et al, 1999). Estos ultimos explican que el mecanismo de carga que se observa en toda la cuenca es un proceso selectivo gobemado por las relaciones entre las presiones de entrada (Pe) de 10s reservorios y la presi6n de desplazamiento (Pd) originada por la columna de hidrocarburos generada . De este modo, la altura de la columna (hc) se asume constante y por lo tanto en sucesivas cargas 10s reservorios

receptores son esencialmente 10s mismos, coincidentemente con aquellos cuya presi6n de entrada es menor a la de desplazamiento (1). A trav& del tiempo, se genera* crudos mL maduros y de menor densidad, producikndose en consecuencia un aurnento de la presi6n de desplazamiento ya que se incrementa el contraste de densidad. Esta situaci6n posibilita la habilitacibn de reservorios de menor calidad petrofisica con la carga de petr6leos mL livianos (2).

Pe < Pd * Carga (1) Pd=0.441 h c ( ~ ! , , - ~ ~ e ~ ~ c o > (2)

Siendo, Pd= Presi6n de desplazamiento; Pe = Presi6n de entrada; hc = columna de hidrocarburos (se asume constante para cada punto determinado); p ., = densidad del agua; p pc(r61eo = densidad del petr6leo

Los reservorios del Gr. Chubut de menor calidad petrofisica son 10s de la Fm. Mina del Carmen. Estos habrian sido 10s idtimos en ser cargados y con 10s crudos m h (maduros) livianos. A1 mismo tiempo, ya que son 10s reservorios m h profundos, el petr6leo almacenado tiene un mayor potencial de preservacibn mantenikndose alejados de 10s agentes de biodegradaci6t-1, con lo cud hun conservan sus caracteristicas en forma original o muy poco alteradas. Esta predicci6n del modelo se curnpli6 para 10s hallazgos de La Carolina (ALC a-401), donde 10s reservorios cargados con crudos de 35" a 42' API es th alojados en la base de la Fm Mina del Carmen, en Granson (Gr a-401) y Pampa del Castillo Norte (PCN a-401).

EXPULSION E HISTORIA DE CARGA DE RESERVORIOS

El modelado geoquimico unidimensional fue realizado utilizando el programa Cienex0 3.3.0., teniendo en cuenta un total de 17 puntos de control, de 10s cuales 12 son porns perforados en distintos sectores desde centro de cuenca hacia el norte y 5 pozos ficticios distribuidos estratdgicamente en Manantiales Behr (G. Laffitte en Villar, 2001a). En la mayoria de 10s pozos se consider6 una columna que comprende desde la base de la Fm. Porn D-129 hasta la superficie. No obstante, para el pozo D-129 (Diadems) y 10s poms ficticios se tom6 una columna que incluia el Neocomiano, dado que su ocurrencia se comprob6 por estudios paleontol6gicos o se infiri6 por el estudio dsmico en uno y otro caso. Cabe sefIalar que, muy pr6ximo a uno de 10s pozos ficticios, el sondeo GR xp-602 corrobor6 m h tarde la presencia de Neocomiano en el Depocentro Granson. En raz6n de las caracteristicas de la migraci6n secundaria, 10s resultados generados por 10s pozos del Grupo I (fig. 8) se consideraron irrelevantes para la carga de reservorios de Manantiales Behr, pero significativos para el conocimiento de la evoluci6n del Flanco Norte. Este conjunto de pozos seflala con claridad que la generaci6n habria ocurrido desde el centro de cuenca a partir de 10s 85 Ma. No obstante, se crey6 mL conveniente asumir que el total de hidrocarburos que llenara 10s reservorios de Manantiales Behr provino desde las cocinas pr6ximas de Granson, Diadema-Caflad6n Perdido y CaAad6n Botella. Su historia de expulsi6n habria comenzado prhcticamente desde el comienzo del Terciario (65 Ma). Los mapas de la figura 10 muestran, al tiempo de la expulsi6n, las posibles vias de migraci6n para el llenado de las principales trampas formadas durante la estructuraci6n cretficica. Las trampas combinadas (estructural-estratigrhfica) tienen en general una configuraci6n simple de bloques basculados donde 10s reservonos cargados se encuentran preferencialmente contra la falla en el bloque elevado. Estas fallas han sido siempre un conduct0 para 10s fluidos (no sellante), por lo tanto, el sello lateral esta dado por la yuxtaposici6n reservorio/sello a ambos lados de la falla (Jalfm et al., 1999). La variaci6n de facies de canal fluvial a planicie de inundaci6n prevee el sello lateral y vertical a 10s reservorios que, en general, poseen contactos petr6leo-agua individuales, seflalando un marcado aislamiento hidrhulico. La primera fase de petr6leo expulsado (65 Ma) desde la base del Neocomiano en la cocina Granson (fig. 10) habria sido alojado en reservorios de las Fms. Cro Rivadavia y Yacimiento El Trkbol de El Alba Valle. Luego, a 10s 50 Ma, cornienza la equlsi6n desde la base de la Fm. Porn D-129 y se sumaria el petr6leo proveniente de la Cocina Diadema-Escalante, cargando 10s reservorios de 10s yacimientos San Diego, Voster, Myburg, La Begonia y Alba Pampa. A partir de 10s 40 Ma, se expanden las Breas generadoras occidentales y comienza la expulsi6n desde la Cocina de Cafiad6n Perdido cargando 10s reservorios pr6ximos al lineamiento El Alba. Probablemente en esta etapa se logre tambib la carga de 10s reservorios del tope de la Fm Mina del Carmen. Alrededor de 10s 30 Ma el sistema esth totalmente desarrollado y

Neocomiano + base D-129

rn Gas Humedo y Condensado 1 . 3 < R o < 2 %

Migracion de Gas Humedo y Condensado

Migracion de Petroleo

Fig. 10 - Mapas de expulsion y posibles vias de migration dentro del h b i t o de Manantiales Behr

comienza la expulsi6n desde el Neocomiano y base de la Fm. Pozo D-129 desde la Cocina de Caflad6n Botella. Esto promueve la carga de 10s reservorios de la Fm. Comodoro Rivadavia y Yacimiento El TrCbol en Grimbeek y Caflad6n Botella Norte. La subsidencia continua de la Cocina Granson posibilita que a 10s 20 Ma comience a expulsar crudos livianos, gas y condensado. El arribo de estos hidrocarburos favoreci6 la solubilizaci6n de mezclas previamente almacenados y ya paleo-alteradas por el ingreso de aguas mete6ricas. Este ~ t i m o evento de carga habria tenido un fuerte impact0 sobre la calidad (= productividad) de 10s crudos ya que marca la diferencia entre 10s petr6leos que poseen movilidad y 10s que permanecieron como petr6leo muerto (OAPI < 10). Tal proceso de solubilizaci6n y mezcla esth claramente documentado en el Alba Valle (fig. 9) y El Alba Pampa. El excedente de crudo de esta generaci6n se habria comenzado a almacenar en 10s reservorios del tope de la Fm. Pozo D-129 y base de la Fm. Mina del Carmen, a travts del mecanismo explicado precedentemente, produciendo asi el llenado de las trampas cuyo control estructural radica fundamentalmente en cierres al nivel de la discordancia de 112 Ma. En esta etapa se habrian llenado con petr6leo liviano 10s reservorios de La Carolina y con gas el tope de la Fm. Comodoro Rivadavia en la culminaci6n de las estructuras. A 10s 10 Ma la Cocina Diadema-Escalante habria iniciado la expulsi6n de hidrocarburos livianos, gas y condensado, cargando 10s reservorios vacantes de la Fm. Mina del Carmen Inferior que configuran las trampas contra el lineamiento Escalante (v.gr. pozo AEA-5 11, AEA-5 10, AEA- 410, AEA-5 1 1, ALCa-401 y PCNa-601) (fig. 1 I).

SAT 100%

Fig. 11. Diferencias composicionales entre 10s petroleos de la Fm Mina del Carmen Inferior en 10s pozos AEA-5 11. AEA-5 10, AEA-4 10, AEA-5 1 1, ALCa-401 y PCNa-601 (circulos negros) y del resto del yacimiento (cuadrados).

ALTERACI~N Y MEZCLA DE CRUDOS

Similarmente a lo descripto para otros sectores de la cuenca (Villar et al. 1996; Jalfin et al., 1999) en Manantiales Behr pueden reconocerse varios eventos de carga, biodegradacibn y recarga con petr6leos frescos e inalterados. La incorporaci6n de crudos frescos a aquellos ya almacenados y la subsecuente biodegradaci6n y alteraci6n de las mezclas resultan procesos iterativos que actuaron a travCs de largos periodos de tiempo. La figura 12 resume 10s mecanismos de alteraci6n de 10s crudos, su cronologia y 10s procesos geol6gicos asociados. La biodegradaci6n m b antigua en la cud se formaron 10s 25-norhopanos (paleobiodegradaci6n) corresponde al evento Bo; en contraste con la m b reciente y moderada biodegradaci6n que alter6 las cargas de n-parafinas y colas de livianos del petr6leo fresco arribado en subsecuentes pulsos. A1 igual que lo reconocido por Jalfin et a1 (1 999) en el SO de la cuenca (regi6n Las Heras), la paleobiodegradaci6n afect6 de

Fig. 12. Cuadro de eventos sintetizando 10s procesos de alteracion de petroleos en Manantiales Behr.

BO

B1

F1

L I

mod0 uniforme y masivo a 10s reservorios tempranamente cargados de la Fm Comodoro Rivadavia, manifesthdose prhcticamente en todo Manantiales Behr (El Alba Valle, Alba Pampa, Grimbeek, Myburg, San Diego Sur y Voster). La distinci6n de procesos de paleobiodegradaci6n a escala cuencal (Villar et al., 1996; Figari et al., 1999; Jalfin et al., 1999; Boll et al., 2000; Villar et al., 2000) y el marco de referencia temporal logrado por el modelo geoquimico aqui elaborado sugiere que este evento podria relacionarse con el hitaus entre las Fms. Rio Chico y Sarmiento (aproximadamente 18 Ma). Durante este prolongado lapso de no depositaci6n se podrian haber infiltrado en el subsuelo aguas mete6ricas necesarias para la biodegradaci6n generalizada del petr6leo cargado en reservorios. La segunda fase de biodegradaci6n (B,) que habria afectado no s6lo a petr6leos frescos sino tambikn a mezclas previamente alteradas y solubilizadas, se la podria circunscribir entre 10s 30 y 20 Ma. En este caso, el ingreso de aguas de superficie, aunque arealmente extensivo, no fue uniforme, por lo cud se lo relaciona con aquellas fallas que sirvieron de conduct0 a1 haber sido reactivadas durante la fase tect6nica Pehuenche. Entre 10s 20-10 Ma, la mayor subsidencia de 10s depocentros Granson, Diadema y CaAad6n Perdido favoreci6 la migraci6n de gas, el que a1 circular a travCs de reservorios cargados produjo fraccionamiento evaporativo de 10s petr6leos. Finalmente, el proceso de alteraci6n m b reciente ( 4 0 Ma) se deberia a1 lavado por aguas y habria afectado hicamente a 10s reservorios profundos cargados con petr6leo liviano. Este proceso de circulaci6n de aguas subterrheas se lo asocia a una de las fases tect6nicas que diera lugar a la faja plegada San Bemardo. Si bien en Manatiales Behr no se registran evidencias de reactivacion, el campo de esfuerzos compresivos a 10s que estuvo sujeta la cuenca podria haber sido suficientemente importante como para generar gradientes diferenciales de presi6n que provoquen la circulaci6n de aguas subterrhneas .

IMPACT0 ECON~MICO DE LA EXPLORACI~N EN AREAS MADURAS

de alteraci6n

lngreso de aguas mete6ricas

lngreso de aguas metdricas

Fraccionamiento Evaporativo

Lavado por Aguas

La Cuenca del Golfo San Jorge es una de las mhs proliferas y la m b antigua cuenca productiva de hidrocarburos de la Argentina. Desde su descubrimiento se han perforado m b de 15.000 pozos exitosos. Las caracteristicas de 10s reservorios (delgados cuerpos areno-tobhceos y de limitada continuidad lateral) condicionan el mod0 de explotaci6n que en muchos casos se hace desde conjuntos que incluyen varios reservorios que aportan distintas calidades y volumenes de petr6leo a1 pozo. Los sondeos logran producciones acumuladas que oscilan entre 50 Mbbl a 315 Mbbl y tasas muy variables de 19 y 756 bblld. A pesar de 10s esfuerzos realizados a travCs de una constante reducci6n de costos, el precio del crudo tiene aim un enorme peso en la ecuaci6n econ6mica y en el caso de esta cuenca es critico. Este perfil de negocios exige una gran exposici6n de capital a partir de una inversi6n continua en la perforaci6n de nuevos pozos para sostener y hacer crecer la curva de producci6n. En un caso asi, la introducci6n de nuevas tecnologias produce generalmente un impact0 positivo pero este resultado no s610 depende del Cxito alcanzado en su aplicaci6n sino tambiCn de la relaci6n costo~beneficio.

Cronologia

Despues de 40 Ma

30 Ma< B1 <20 Ma

20 Mac F1 < I 0 Ma

L, <lo Ma

Evento

Hiatus entre Fms Rio Chico y Sarmiento

Fase Tect6nica Pehuenche

Subsidencia del de- pocentro Granson

Diadema Escalante

Fase Deformaci6n Faja Plegada

Observaciones

Extensiva, uniforme, afecto todos 10s rese~orios cargados

Extensiva,no uniforme, afect6 a las mezclas de B, + Petr6leo fresco

la generaci6n de gas, restringida, afect6 las mezclas de B, + B, + Petrbleo liviano

Restringida, afect6 la carga m8s reciente de petr6leo liviano en la base de la Fm. Mina del Carmen

Fig. 13 - Ubicacion de 10s prospectos seiialados por el modelo de migration y 10s resultados obtenidos en 10s pozos propuestos : 1- AGBK.a-401, 260 bbVd, lSOAF'I; 2 - ALC.a-401, 1260 bbWd, 42"API; 3- PCN.a-601,554 bblld, 40°AF'I; 4- Gr.a-601,657 bblld, 38OAPI; 5- LE.a-602, improductivo.

El advenimiento en la idtima dBcada de la sismica 3D ha brindado la posibilidad de reconocer nuevas estructuras o trampas e~ t r a t i g r~cas . La incorporaci6n de estudios de geoquimica orghnica en las rutinas de trabajo se ha ido incrementando en el transcurso de 10s hltimos cinco afios. A 10s tradicionales equipos de exploraci6n y desarrollo integrados por ge6logos y geofisicos (G&G); se ha sumado la participaci6n activa del geoquimico en la conformaci6n de 10s grupos de trabajo, denominados "equipos 3G". El modelo elaborado para Manantiales Behr predijo cinco nuevos prospectos (fig. 13) de 10s cuales cuatro resultaron existosos y tres dieron lugar a1 descubrimiento de nuevos yacimientos que permitieron un rhpido desarrollo del hrea de Granson, La Carolina y Grimbeek. En 10s dos primeros, el hallazgo de secciones de alta productividad de petr6leos livianos con pozos de 700 a 1200 bblld produjo un rhpido impact0 sobre la produci6n diaria del yacimiento; mientras que en Grimbeek la producci6n de crudos pesados hace que su aparici6n en la curva sea menos espectacular pero miis sostenida en el tiempo. El significado econ6mico de estos descubrimientos se traduce finalmente en una importante incorporaci6n de reservas probadas de petr6leo y gas, acompaflada por un fuerte aumento en la producci6n (fig.l4), la que alcanz6 un 85% de increment0 net0 en dos aflos (de 6300 bblld a 11655 bblld).

CONCLUSIONES

Las fallas principales de buzamiento N, en Escalante y Manantiales Behr han jugado un rol preponderate en la paleogeografia de esta regi6n. La configuraci6n del basamento ha tenido un fuerte control sobre la sedimentaci6n desde el Tithoniano hasta a1 menos el Aptiano, lapso en el que la actividad de 10s lineamientos El Alba y Escalante condicion6 la evoluci6n de dos depocentros: Granson y Cafiad6n Botella, y otro a1 sur (Diadema-Cd6n Perdido) asociado con la depresi6n del Sinclinal del Diablo. En ellos se ha comprobado la existencia de sedimentitas del Neocomiano, reconociBndose palinol6gicamente en el pozo D- 129 (Diadems) una secci6n fangolitica basal perteneciente a esta unidad. En estas cubetas se desarrollaron lagos estrechos y profundos donde se depositaron fangolitas ricas en materia orghnica, con pequeflos deltas y cursos fluviales que aportaron agua y sedimentos dando lugar a litosomas arenosos con calidad de reservorio. La existencia de Neocomiano con capacidad generadora en 10s depocentros Granson y Escalante-Cd6n. Perdido abre nuevas perspectivas exploratorias en el Flanco Norte de la cuenca, principalmente para sectores

Mbbl D m t o .

12 La Carolina IGranson

1998 1999 2000

Fig. 14 - Jncremento net0 en la producci6n diaria media anual (MbbVd)

marginales donde la Fm. Pozo D-129 podria encontrarse inmadura o bien en facies pobres en materia orghica. La historia tCrmica indica que la primera expulsi6n de hidrocarburos se origin6 alrededor del limite K-T en el depocentro Granson, inicihndose asi el llenado de reservorios de las Fms. Yacimiento El TrCbol y Comodoro Rivadavia del 0 de MANANTIALES Behr (El AlbaValle y La Carolina). No obstante, la esterilidad observada en La Enramada (fig. 13) se deberia a la pobre calidad de reservorios m k que a la falta de carga de hidrocarburos. Entre 10s 50 y 30 Ma el sistema petrolero esth totalmente desarrollado, sumhdose la expulsi6n desde las cocinas Diadema-Cd6n Perdido desde donde se opera la carga de reservorios del centro y E de Manantiales Behr. El arribo de hidrocarburos livianos, gas y condensado (20 Ma) desde la cocina Granson a 10s reservorios del N de Manantiales Behr marca una diferencia sustancial en las posibilidades de producci6n. Por un lado, aquellos que fueron cargados y biodegradados (figs. 9, 10 y 12) masivamente a 10s 40 Ma, recibieron este crudo liviano que favoreci6 la solubilizaci6n de 10s pesados y 10s convirti6 en m6viles a la hora de ser explotados (v. gr. El Alba Valle, El Alba Pampa). Por otro lado, en sectores no alcanzados por este pulso, 10s petr6leos resultan inm6viles con una densidad < 10°API (v. gr. La Paulina). El petr6leo liviano excedente de este pulso se almacen6 en reservorios profundos de las Fms. Pozo D-129 y base de Mina del Carmen (v. gr. La Carolina). Desde 10s 10 Ma se produce la expulsi6n de hidrocarburos livianos, gas y condensado en la cocina de Diadema-Cd6n Perdido, 10s que fueron entrampados contra el lineamiento Escalante en el S de Manantiales Behr (v. gr. Yacimientos Granson y Pampa del Castillo Norte). A1 igual que lo observado en la regi6n Las Heras (Jalfin et al., 1999), en Manantiales Behr se comprueba que la carga selectiva de reservorios estuvo controlada por las relaciones entre presiones capilares de entrada de 10s reservorios y la de desplazarniento generada por la colurnna de hidrocarburos. Con el trancurso del tiempo, 10s crudos expulsados son m k livianos y aumenta la presi6n de desplazamiento, la cud puede vencer la presi6n de entrada de reservorios de inferior calidad. En principio, 10s petrbleos livianos entran en reservorios someros ya cargados (< Pe) y se mezclan con 10s pesados. Luego, el hidrocarburo remanente

tiene capacidad de ingresar en reservorios profundos cuya Pe es mayor. Este razonamiento condujo a concluir que el petr6leo liviano se aloj6 en 10s reservorios de la Fms. Mina del Carmen y Pozo D-129, 10s que comparativamente resultan de una mayor Pe respecto de las Fms. Comodoro Rivadavia y Yacimiento El TrCbol. Los petr6leos mhs profundos tienen m k probabilidad de preservarse inalterados. Entre 10s procesos de alteraci6n se reconoce unapaleobiodegradacidn generalizada que habria ocurrido alrededor de 10s 40 Ma y se relacionaria con el hiatus entre las Fms. Sarmiento y Rio Chico. Un segundo proceso de biodegradaci6n se registr6 entre 10s 30 y 20 Ma, pero su carhcter m k localizado sugiere que el ingreso de aguas mete6ricas ocurri6 selectivamente s61o a travCs de las fallas que fueron reactivadas durante la fase tect6nica Pehuenche. A partir de entonces el sistema permaneci6 cerrado, con fen6menos de fraccionarniento evaporativo por la circulaci6n de gas entre 10s 20 y 10 Ma. Mhs recientemente, el lavado por agua en petr6leos livianos frescos result6 de la circulaci6n de aguas subterrimeas probablemente asociado a gradientes diferenciales de presi6n producidos durante el plegamiento de la Faja San Bemardo. Finalmente, cabe destacar que el modelo de migraci6n fue elaborado previamente a la perforaci6n de 10s pozos que resultaron en el descubrimiento de tres importantes bloques productivos: Granson, La Carolina y Grimbeek. La posibilidad de contar con un modelo predictivo permiti6 diseflar una agresiva estrategia de perforaci6n que culmin6 con una sustancial incorporaci6n de las reservas probadas como asi tambiCn un aumento de la producci6n media diaria del yacimiento, registrimdose un increment0 del orden del 85% en dos afios.

AGRADECIMIENTOS

Los autores desean dejar constancia de su agradecimiento a REPSOL-YPF por apoyar esta investigacidn y permitir su difusi6n y a HCctor J. Villar por el aporte de sus ideas y conocimientos que enriquecieron notablemente este trabajo. TambiCn se agradece a CAPSA y en particular a G. Pando y G. Robles por la informaci6n del Area Diadema; a G. Cardinalli y R. Gorrofio la colaboraci6n en la recolecci6n de muestras y a P. Lafourcade por la linea sismica regional (fig. 2). Finalmente, se agradece a A. Eloff y J. Marquez por su confianza y continuo apoyo a1 proyecto y a D. Parra y J. Riguetti por las fructiferas discusiones sostenidas en las distintas etapas de este estudio.

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