formar al estilo de jesús
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ENLACE
Toda formación cristiana tiene su fuente en Jesucristo
Vivo y resucitado. Sin una referencia a Él, la formación
Podría ser humana, mas no cristiana.
Jesús es el Camino que habremos de recorrer, la Verdad
Que hemos de buscar y la Vida que alcanzaremos. Por
Ello, este primer tema nos invita a buscar en Jesús los
Fundamentos que iluminen la importante tarea apostólica
Que realizamos: acompañar a otros en su proceso de
Formación.
OBJETIVO
Descubrir en Jesús al Maestro, contenido y modelo
De todo proceso de formación.
Seguir la pedagogía que utiliza Jesús para formar a
Sus discípulos, como itinerario para la formación cristiana.
LA PALABRA
Pasando Jesús junto al lago de Galilea, vio a Simón y su
Hermano Andrés que estaban echando las redes en el lago,
Pues eran pescadores. Jesús les dijo: Vengan conmigo y los
Haré pescadores de hombres. Ellos dejaron inmediatamente
Las redes y lo siguieron
Mc 1,16-18
Yo soy la vid, ustedes las ramas. El que permanece unido a
Mi, como yo estoy unid a él, produce mucho fruto; porque
Sin mí no pueden hacer nada.
Jn 15,5.
1.1 La formación cristiana consiste en seguir a Cristo
Formación viene del latín formare y significa “dar forma”.
Refiriéndonos a nuestra propia persona, supone dejarnos
Moldear de acuerdo a algo o alguien. La formación abarca
Muchos aspectos de nuestro ser: la persona, las actitudes,
Los valores, los compromisos. Para los cristianos, la
Formación consiste en hacernos cada ve más como Jesús:
“Aprendan de mí que soy sencillo y humilde de corazón…
(Mt 11,29).
«Aprendan de mí», «sean como yo», ¡he aquí nuestro
Programa de formación! La existencia cristiana consiste
Precisamente en el seguimiento de Cristo, en responder
Al llamado de Jesús que dice: ¡Sígueme! (cf. Lc 5,27b).
La formación cristiana implica un crecimiento personal y
Comunitario por el que vamos adoptando los valores, las
Preferencia y los compromisos de Jesús y va más allá de
«saber» o «conocer» cosas acerca de Dios o de la Biblia.
1.2 Jesús, Maestro, contenido y modelo del proceso
formativo
En diversos pasaje del Evangelio, Jesús es llamado «Maestro»
(cf. Mc 9,5;10,51). Los discípulos y la gente lo reconocieron
Así y verdaderamente lo era. Él es Camino, Verdad y Vida
(cf. Jn 14,6).
Pero Jesús era un Maestro especial, ya que enseñaba con
Autoridad (cf. Mc 1,22) y con verdad:
Maestro, sabemos que eres sincero y que no te dejas
influir por nadie… sino que enseñas con verdad el camino
de Dios (Mc 12,14).
Al enseñar, Jesús no exponía su propio conocimiento sino lo
Que el Padre le comunicaba:
Yo no hago nada por mi propia cuenta, solamente enseño
lo que aprendí del Padre (Jn 8,28b).
Así, Jesús se convierte en un modelo para toda persona que
Quiera acompañar a otros en su acercamiento a Dios. Más
Aún, Él es el verdadero Maestro, lo demás (métodos,
programas) son solamente medios. Es a Él a quien
Comunicamos y por tanto, es también el contenido.
3. Formar al estilo de Jesús
Jesús empleó un estilo especial para formar a sus discípulos.
Su pedagogía fue gradual y estuvo llena de sabiduría y de un
Conocimiento profundo de la respuesta humana (cf. Jn 2,25):
Subió después a la montaña, llamó a los que él quiso y se
acercaron a él. Designó entonces a Doce, a los que llamó
apóstoles, para que estuvieran con él y para enviarlos a
predicar con poder de expulsar a los demonios (Mc 3,13-15).
En el proceso de formación de los apóstoles destacan:
• La iniciativa de Jesús que llama,
• El encuentro,
• La conversión,
• El discipulado,
• La comunión,
• Y la misión.
Este es el mismo itinerario que estamos llamados a recorrer
Todos los discípulos-misioneros de Jesucristo. Un camino
Que consiste en vivir en intimidad con Él, imitar su ejemplo
Y dar testimonio (cf. Discurso inagural de Aparecida 3).
1.4 El encuentro con Jesucristo
El punto de partida del proceso formativo es el encuentro con
Jesús. El seguimiento de Jesús parte de la experiencia
Fascinante de haber hallado a Cristo. Los Evangelios
Muestran muchos ejemplos en los que después del encuentro
Con Jesús ya nada vuelve a ser igual.
Andrés y Juan al ver pasar a Jesús le preguntan: «Maestro,
¿dónde vives?» (Jn 1,38b); sorprendidos, acogen la
Invitación de Jesús –Vengan y lo verán- y pasan aquel día
Con Él (cf. Jn 1,39).
Este momento fue una experiencia única, que dejó a los
Discípulos marcados para siempre. Toda formación busca
Llevar a la persona al encuentro con Jesucristo y renovarlo
Constantemente:
El itinerario del discípulo misionero tiene un carácter personal:
se trata de que cada uno se encuentre con Jesús. Par el que
quiera seguirlo no existe otra fuente alterna de conocimiento
(Orientaciones Pastorales 2009. Formarnos para continuar
la misión en la ciudad. Arquidiócesis de México, 23).
1.5 La conversión
El encuentro suscita una respuesta. Para quien se abre a la
Acción de Dios, lo siguiente es la conversión.
Convertirse es decidir ser amigo de Jesús e ir tras Él, cambiar
La forma de pensar y de vivir (cf. DA 278). La cercanía con
Jesús hacer a Pedro descubrir sus limitaciones y exclamar:
Apártate de mí, Señor, que soy un pecador (Lc 5,8b).
Pero la conversión no es un momento, es el punto de partida
De un proceso y el mismo Pedro reconocerá que necesita
Volver nuevamente a los criterios de Jesús:
Jesús, dirigiéndose a Pedro le dijo… Eres para mí un
obstáculo, porque no piensas como Dios, sino como los
hombres (Mt 16,23).
El itinerario de formación requiere retornar constantemente a
La conversión personal y comunitaria.
1.6 El discipulado
Jesús llamó a sus discípulos y los instruyó de modo cercano,
Personal, concediéndoles el privilegio de estar cerca de él y
Comprender:
A ustedes Dios le concede conocer los misterios del Reino de
los cielos… Dichosos ustedes por lo que ven sus ojos y por lo
que oyen sus oídos (Mt 13,11.16).
Los discípulos aprendieron mirando, escuchando y atestiguando
El camino de la Bienaventuranzas, el amor, el servicio, la
Fraternidad, la misericordia, la búsqueda de la justicia…; en
Suma, los valores y los criterios del Jesús (Mt 5-6).
Si alguien quiere venir detrás de mí, que renuncie a sí mismo,
cargue con su cruz y me siga (Mt 16,24).
El discipulado es un proceso de toda la vida. Quien
Acompaña a otros en el camino del discipulado, tendrá
Que mantener presente que sólo viviendo profundamente
Su propio discipulado será capaz de atraer a otros al
Seguimiento de Cristo.
1.7 La comunión
Jesús les hizo un llamado personal y a la vez comunitario a
Sus discípulos. El número doce, representa el Nuevo Israel,
La ekklesia o comunidad de bautizados. El vivir la experiencia
De fe con común-unión con otros es esencial al cristianismo:
Quiso… Dios santificar y salvar a los hombres no
individualmente y aislados entre sí, sino constituirlos en un
pueblo que le conociera en la verdad y le sirviera
santamente (LG 9).
En el seguimiento de Cristo crecemos con los otros y a través
De los otros. Una formación auténticamente cristiana llevará
A fortalecer la experiencia comunitaria, tal cual fue el deseo de
Jesús:
Te pido que todos sean uno lo mismo que lo somos tú y yo,
Padre (Jn 17,21).
1.8 La misión
Los que entraron en contacto con Jesús se sintieron movidos
A anunciarlo, y a dar testimonio del encuentro. Tal ha sido la
Experiencia de la samaritana, quien va a decir a su gente:
«vengan a ver a un hombre que me ha dicho todo lo que he
hecho» (Jn 4,29).
Jesús prepara a sus seguidores para que sean misioneros y
Vayan a anunciar el Reino (cf. Lc 9,1-6). Este será un mandato
Después de la resurrección y el envío del Espíritu Santo (cf.
Mt 28,19-20). Ser discípulos-misioneros son dos rostros de la
Misma tarea (cf. DA 146).
La misión es inseparable del discipulado, por lo cual no debe
entenderse como una etapa posterior a la formación (DA 278).
1.9 La fuerza del Espíritu
Jesús sabe que el itinerario del discípulo-misionero no es fácil,
Por lo que nos envía al Espíritu Santo.
Después de Pentecostés, el Espíritu fecunda a la Iglesia y la
Llena de dones y carismas (cf. 1 Cor 12,1-11). Es por medio de
Esos dones como la comunidad de discípulos se fortalece en
El tiempo.
El Espíritu continúa suscitando misioneros decididos y
Valientes como Pedro y Pablo (cf. Hch 4,13;13,9-10) y
Continúa guiando la misión de la Iglesia (cf. Hch 13,2; DA
149-150). La tarea formativa habrá de ser una experiencia
Que deje su lugar al Espíritu Santo, el Maestro interior:
El Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará
en mi nombre, hará que recuerden lo que yo les he enseñado
y les explicará todo (Jn 14,26).
ACTIVIDADES INVIDUALES
Lectura reflexiva de los número 129-163 del Documento
de Aparecida.
Reflexiona si tu discipulado es convincente para formar
a otros en el discipulado y misión de Jesús.
o ¿Cuál es la novedad del llamamiento que hace Jesús?
(dos cosas originales en el llamamiento de Jesús)
o ¿Cuál es la finalidad que tiene la formación en el discípulo de Jesús?
o ¿Cuáles son los dos tipos de vinculación a la que llama Jesús al
convertirse en discípulo? Define cada uno de ellos.
o ¿Qué necesitamos para configurarnos verdaderamente con Jesús
nuestro maestro?
o En el seguimiento de Jesús aprendemos y practicamos las
bienaventuranzas, enuncia las 4 cuatro características del estilo de
vida de Jesús.
o ¿Cuándo podemos decir que se inaugura el Reino de Dios
entre nosotros?
o Dios padre sella una alianza con el pueblo de Israel, por ello le llamamos
pueblo de la Antigua Alianza, en qué consiste la Nueva Alianza y cuál
es el sello de ésta.
o ¿En qué consiste la misión según los número que hemos leido.
o ¿Qué sucede cuando el discípulo está plenamente enamorado de
Jesús?
o ¿Cuál es la labor del Espíritu Santo en la misión?
o Explica cuál es la tarea de la comunión en el discípulo de Jesús
y qué tiene que ver con la Iglesia.
ACTIVIDADES GRUPALES
Comenten :
¿Qué diferencias descubren entre formar e informar?
¿Cómo formar para animar hacia un auténtico discipulado
Y compromiso cristiano?
EVALUACIÓN
¿Qué descubrí de la pedagogía de Jesús, para aplicarla
A mi forma de aprender y enseñar?