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ESCUELA DE FORMACIÓN POLÍTICA HUMANISTA +

PARTIDO HUMANISTA PERUANO.

¿Que el Partido Humanista Peruano?

Es una organización política democrática e inclusiva de ciudadanos que se adhieren en doctrina y práctica al humanismo. Con la finalidad de construir un Estado nacional democrático, descentralizado y participativo, en donde el desarrollo humano sea sustentable en el Perú. El Partido Humanista Peruano también es reconocido por la sigla o nombre abreviado PHP.

¿Cómo es su símbolo?

El símbolo del Partido Humanista Peruano está constituido por la letra “H” inserta en su interior en color verde, que representa la naturaleza y la vida, constituido con una franja roja solamente en las barras paralelas que representa la patria, conforme al siguiente diseño:

¿Cuáles son sus objetivos del Partido Humanista Peruano?

Asegurar la vigencia y defensa del sistema democrático.

Contribuir a preservar la paz, la libertad y la vigencia de los derechos humanos consagrados por la legislación peruana y los tratados internacionales a los que se adhiere el Estado.

Formular sus idearios, planes y programas que reflejen sus propuestas para el

desarrollo nacional, de acuerdo a su visión de país. Representar la voluntad de los ciudadanos y canalizar la opinión pública.

Contribuir a la educación y participación política de la población, con el objeto

de forjar una cultura cívica y democrática, que permita formar ciudadanos capacitados para asumir funciones públicas.

Participar en procesos electorales.

Contribuir a la gobernabilidad del país.

Realizar actividades de cooperación y proyección social.

Los demás que sean compatibles con sus fines y que se encuentren dentro del

marco normativo establecido por la Ley de Partidos Políticos.

PARTIDO HUMANISTA PERUANO- APURÍMAC Documentos de Formación Política N° 01

1 Noviembre de 2013

ESCUELA DE FORMACIÓN POLÍTICA HUMANISTA ¿Cuáles son los principios del Partido Humanista Peruano?

Compartir los valores de libertad, igualdad, equidad, justicia, trabajo, solidaridad y paz; trabajando para afirmar los derechos de los ciudadanos y promoviendo un desarrollo sostenible, en una sociedad multiétnica y pluricultural.

Trabajar y crear conciencia para el desarrollo de un espíritu de igualdad de

oportunidades para todos los hombres y mujeres. Aliento a toda creación y acción humana orientada hacia la construcción de una

economía solidaria. Promoción de conciencia práctica y responsabilidad hacia la conservación de la

naturaleza y de la vida en todas sus formas, orientándose al aprovechamiento sostenible de los recursos naturales, de modo que se garantice la vida de las generaciones futuras sobre la tierra.

La creación de la vida interna y para su proyección hacia la sociedad, relaciones

de confianza, afecto y reciprocidad de reconocimiento e interculturalidad, de respeto y tolerancia por las diferencias de fomento de los liderazgos democráticos.

Dr. Yehude Simon Munaro, Presidente Fundador de PHP.

De formación Médico veterinario, sociólogo y político Peruano, fundador y actual Presidente del Partido Humanista del Perú. Reconocido político peruano con una larga trayectoria en la gestión pública. Ha sido Presidente del Concejo de Ministros del Perú 2008-2009, Presidente del Gobierno Regional de Lambayeque en dos periodos (2003-2006 y 2007-2008). Diputado por Lambayeque 1985-1990. Actualmente es Congresista de la Republica, asimismo ha participado como ponente sobre temas de Gobernabilidad, Cambio Climático y Gestión Pública en diversos países como Ecuador, España, Francia entre otros

La ideología humanista.

La doctrina humanista plantea como aquella capaz de dar respuesta a las distintas problemáticas que afectaban a los seres humanos, organizando las relaciones sociales desde y para el ser humano. En términos ideológicos el humanismo se centra el ser humano con fin y supremo de la sociedad para actuar y transformar en base a principios y valores morales para propiciar una cultura humanista que no sea exclusivamente teórica y abstracta sino de ejercer una influencia esencial en nuestro modo de pensar y actuar en la vida diaria sobre todo practicar los valores y principios

El Humanismo nos induce intuitivamente a pensar en la filosofía, los sentimientos y los valores intrínsecos a la dignidad del ser humano. La política nos lleva al terreno de la praxis, como una actividad humana que pretende conciliar, resolver o solucionar los complejos problemas de la vida en común.


2 Noviembre de 2013

ESCUELA DE FORMACIÓN POLÍTICA HUMANISTA Ser humanista es una decisión de amarnos y respetarnos a nosotros mismos y a nuestros compañeros de aventura, aceptándolos como son y respetando sus peculiaridades, será capaz de darnos visión y materia suficientes como para construir una propuesta eficaz de reconstrucción y reinvención del país.

El humanismo aspira a que todo ser humano, cualquiera sea su condición social tengan capacidad para entender y producir filosofía, ideología, política; pero hasta en tanto generamos condiciones para la inclusión total, necesitamos una doctrina igualmente inclusiva, accesible y susceptible de ser comprendida y aplicada por toda persona, sin diferencias. Haciendo síntesis de todas sus fuentes, desde el humanismo clásico, el humanismo cristiano y el humanismo socialista. El Humanismo nos induce intuitivamente a pensar en la filosofía, los sentimientos y los valores intrínsecos a la dignidad del ser humano. La política nos lleva al terreno de la praxis, como una actividad humana que pretende conciliar, resolver o solucionar los complejos problemas de la vida en común.

En conclusión hay tres convicciones básicas: que los seres humanos poseen dignidad intrínseca, es decir, que nada hay más valioso que un ser humano sobre la tierra; que la libertad es el bien más preciado en la vida de una persona humana; que la búsqueda de la felicidad propia no solamente no debe colisionar con la búsqueda similar que hagan otras personas, sino que la suma de esfuerzos puede garantizar mejores resultados que la confrontación o la enemistad.

En lo que atañe a la economía y al régimen económico y de propiedad compatible con el humanismo la cosa es también muy clara. No hay antagonismo entre la propiedad y la iniciativa privadas y una opción humanista. Al contrario, incentivas el esfuerzo individual, liberar las fuerzas creativas y productivas de los individuos es una tarea típicamente humanista. Lo único que debe cuidarse es que el desarrollo individual sea compatible y ayude a empujar el desarrollo colectivo. Las únicas actividades económicas no legítimas son aquellas que perjudican claramente al conjunto o que ponen en peligro en bienestar presente o futuro de la comunidad. Ninguna actividad depredatoria, ninguna actividad que implique la destrucción sistemática del hábitat o del medio ambiente, ninguna actividad que implique el empobrecimiento o la baja de calidad de vida de las mayorías son legítima. Pero lo son y deberían ser apoyas e incentivadas todas aquellas que generen riqueza, trabajo y bienestar. El estado democrático humanista, en este sentido, puede caracterizarse como un estado impulsor, incentivador, pero a la vez regulador y supervisor. El que se haga rico dentro de la ley deberá ser premiado; el que pretenda hacerlo contra la ley y el bienestar general, deberá ser castigado.

Las políticas sociales del humanismo son evidentes y se derivan de los principios arriba señalados. Ninguna persona, menos aún los más débiles, pueden quedar desamparados, ninguna persona debe padecer hambre, ninguno debe morir prematuramente, ninguno debe permanecer en la ignorancia o sin acceso a la educación.


3 Noviembre de 2013

ESCUELA DE FORMACIÓN POLÍTICA HUMANISTA Los siete ángulos de la reflexión doctrinal humanista Resumen.- Sea entendido por “hombre”, la categoría que engloba varón y mujer.

1. Del Hombre y su naturaleza

Adoptamos como punto de partida de toda acción colectiva y de toda interrelación humana tres principios básicos: a) que los seres humanos poseen dignidad intrínseca, es decir, que nada hay más valioso que un ser humano sobre la tierra; b) que la libertad es el bien más preciado en la vida de una persona humana; c) que la búsqueda de la felicidad propia no solamente no debe colisionar con la búsqueda similar que hagan otras personas, sino que la suma de esfuerzos puede garantizar mejores resultados que la confrontación o la enemistad.

2. Del hombre y su entorno

Asumimos que el ser humano constituye la especie llamada a dedicar los signos distintivos de su naturaleza exclusiva y excluyente; racionalidad, afectividad y voluntad, para asegurar el imperativo de construir una relación armoniosa con las demás especies de vida en la naturaleza, conservar la salud del planeta y del universo en su conjunto.

3. Del hombre y sus potencias.

Todo ser humano está potencialmente capacitado a desarrollar todas las formas del pensamiento, prácticas y quehaceres, cuanta forma de construcción las cosas materiales e inmateriales, las artes, técnicas, las ciencias y la cultura; a condición de contar con iguales oportunidades y condiciones, aún mucho antes de que el misterio de la vida les haya sido dado.

4. Del hombre y la violencia, el gran tema germinal del nuevo humanismo.

El uso de la violencia y su estado extremo en la guerra, constituyen expresiones de la era del aprendizaje hacia el reconocimiento del valor del otro. La violencia en todas sus formas busca excluir y dar fin al otro, convertido en contrario por diferencia de ideas e intereses, que constituyen manifestaciones finitas en tanto el ser humano crece en el dominio de sus facultades, racionalidad, afectividad, volición. Así, el concepto doctrinal de la guerra como “prolongación de la política por otros medios” obedece a estadíos del ser humano en aprendizaje hacia la convivencia pacífica de perspectiva, basado en interés recíproco concedido y el derecho mutuo reconocido; por lo que constituye aserto sustantivo del humanismo, que la humanidad marcha hacia el fin de las guerras y de los móviles que le fan origen.

5. Del hombre y la economía

La posesión de medios y bienes de producción por unos seres humanos y la enajenación de sus derechos de otros al disfrute de la riqueza producida, ha abierto brechas profundas en las relaciones entre los seres humanos; los seres humanos enajenados son los excluidos de la economía; sin embargo, no hay fenómeno de creación de riqueza –aun como bien escaso- que no concurra toda una comunidad de seres humanos asumiendo roles diversos, de cuya razón nace el derecho de cada quien. La exclusión en


4 Noviembre de 2013

ESCUELA DE FORMACIÓN POLÍTICA HUMANISTA esencia no es resultado que los más reciban menos o nada de los frutos del progreso, sino el resultado de la carencia de oportunidades para que el ser humano haga ejercicio de sus facultades para crear riqueza y acceda por derecho a la participación que le corresponde. Desde esta perspectiva, no constituye un concepto éticamente válido “no quitar riqueza a quien la tiene, sino crear riqueza para quien no tiene”, desde la razón humanista corresponde más bien “dar oportunidad a todos para crear y acceder a riqueza, por derecho propio. La propuesta de “expropiar los medios de producción, bajo la oferta de socializar su funcionamiento y resultado, devino en estatismo, dando lugar al parasitismo burocrático y la mutilación de las energías emprendedoras de las personas. En el otro extremo, el liberalismo mercantilista y el neoliberalismo, postula libertades que no están dispuestos a observar; Jurgen Schulz refiere a la paradoja del capitalista que logra construir la escalera que lo sitúa en una planta superior y que luego retira la escalera para evitar que otros lo hagan y sin embargo difunde el derecho de todos a subir. Así, en contraposición al control absoluto de la economía por el Estado, el humanismo postula el Estado como gestor de oportunidades para la creación y acceso riqueza, por derecho, para todos y el ejercicio de la política, como medio para hacer de ese instrumento –el Estado- cumpla con esta misión.

6. Del hombre, el Estado y el poder.

La vieja concepción marxista estigmatizó a los núcleos humanistas multiplicados en los tiempos de la revolución francesa y los estigmatizó de “socialistas utópicos” bajo la propuesta que sólo el cambio de las condiciones materiales y el control político del estado haría posible el cambio del ser humano, el cambio de la condición humana, y la historia demostró que la coerción estatal no hizo germinar cambio alguno en la condición humana. Hacia el otro extremo, otros predicamentos alientan la idea cambiar al hombre para que el mundo cambie, este es un concepto que, más allá de la empatía que provoca, no puede demostrarse que sea viable. El Humanismo, de primera intención reivindica a las comunidades fraternales que decidieron construir nueva sociedad “islas utopía”, como diría Thomas Mann, “socialistas utópicos” en el lenguaje marxista, precursores del cooperativismo y hoy emulados en las iniciativas de desarrollo de los territorios locales, en propuestas de “cambiar el todo desde las partes”. De manera coherente, postulamos que el cambio en la condición humana se produce en eventos dialécticos de cambio del medio y la persona, en los procesos de acción social y política, en los que el escenario principal es la sociedad y los partidos políticos tan sólo una forma de actuación, importante, pero no esencial, en el sentido que la esencia está en la gente. En tiempos recientes se advierte el surgimiento de neo nacionalismos fascistas, autoritarios y violentistas, que hace necesario desmitificar la política como simple ejercicio de poder. Promover todas transformaciones posibles en el Estado, de tal manera que cambien su condición de mecanismos vacíos de la democracia formal, hacia su conversión en instrumento sustantivo de cambios en la condición humana. De manera correlativa, la política en el siglo 21 abre la necesidad de un nuevo pacto a escala humana, para construir nueva realidad desde las colectividades y territorios locales, con mayor concentración de insatisfacción material y espiritual, bajo inspiración del concepto “construir democracia total”, es decir, democracia en todos los campos de la actividad humana, no solo en la electoral; ello obliga a que todo militante del humanismo, sea en esencia un promotor de desarrollo humano.


5 Noviembre de 2013

ESCUELA DE FORMACIÓN POLÍTICA HUMANISTA

7. Del hombre y la cultura unión.

La diversidad cultural es consustancial a la existencia humana. Se coexiste como grupos humanos con tradiciones culturales diferentes. Por razón de la voluntad y las interacciones, cada ser humano toma de otro aquello que racional y afectivamente encuentra coherente con su propia identidad pero sin renunciar a ella. A partir de cultura, se construyen ideologías no estructuradas pero enriquecidas y sostenidas por los pares. El ser humano, poblador amazónico, que vive en una relación armónica con la naturaleza, de la cual toma cuanto necesita para afrontar el reto de la vida y donde las estructuras sociales no se construyen sobre la base de posesión de bienes materiales, tampoco de dinero, no otorga igual valor al gran proyecto de inversión y la política como expresión de intereses contrapuestos. Más allá de la existencia de hecho de relaciones interculturales, los humanistas tomamos la interculturalidad como principio normativo de la vida nacional. El basamento doctrinario humanista postula asumir positivamente la situación de diversidad cultural en la que uno se encuentra, como principio orientador de la vivencia personal, la convivencia humana inmediata y de los procesos sociales en el plano axiológico social. El humanismo postula la interculturalidad como aglutinante subjetivo para la construcción de una sociedad democrática, puesto que los actores de las diferentes culturas que por ella se rijan, convendrán en encontrarse, conocerse y comprenderse con miras a cohesionar un proyecto político a largo plazo. En sociedades significativamente marcadas por el conflicto y las relaciones asimétricas de poder entre los miembros de sus diferentes culturas, como la nuestra, es un principio desde que deseamos ser una sociedad diferente por ser justa. En sentido más amplio, las clases sociales y las colectividades políticas, interesadas en gestar íconos de identidad, mística y fidelidad, construyen de manera natural formas culturales, a partir de las cuales al exacerbarse en contiendas devienen en grandes y muchas veces trágicas divisiones. En base a la razón intercultural y su correlato político, expresado en la necesidad vital de construir futuros y visiones compartidas, el humanismo postula la lucha por la aceptación fraternal de las diferencias, el reconocimiento de las virtudes de los otros y el allanamiento de los acuerdos de acción concurrente y de interés común, aplicable para hacer viable un Proyecto Nacional Peruano, así como el Proyecto Latinoamérica.

Los humanistas coincidimos en:

La ubicación del ser humano como valor y preocupación central.

La afirmación de la igualdad de todos los seres humanos en tanto tales.

El reconocimiento y respeto de la diversidad individual y cultural.

La búsqueda constante del desarrollo y el reconocimiento por encima de lo aceptado o impuesto como verdad absoluta.

La afirmación de la libertad de ideas y creencias.


6 Noviembre de 2013

ESCUELA DE FORMACIÓN POLÍTICA HUMANISTA El repudio de la violencia.

El Partido Humanista Peruano, considera que existen grandes desafíos que todos juntos deberemos enfrentar para el desarrollo tan esperado de nuestra nación frente al Bicentenario de la Independencia.

1. Un estado eficiente al servicio del ciudadano.

2. Un País que cuida su infancia y prioriza la educación.

3. Un País con crecimiento e inclusión social.

4. Un País seguro y pacífico.

5. Un País con ética pública.

Viva el Partido Humanista!!!..

Hasta la victoria.

Por nuevo Perú

Desde sus Regiones………

Abancay, Apurímac noviembre de 2013.

Bibliografía.

1. Estatuto del Partido Humanista Peruano. CEN 2012.

2. Proyecto Político Humanista, Perú siglo XX1, unión y prosperidad para todos y todas. Documento de trabajo, 05 marzo de 2009.

3. Yehude Simon Munaro, Mi visión del Perú, más allá de las ideologías. 2011.

4. Situación Política del Perú y el Rol del Partido Humanista, primer documento político del Perú, CEN Febrero de 2013.


7 Noviembre de 2013

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