Héroe CivilMexicano

Casa Museo Dr. Belisario DomínguezComitán de Domínguez, Chiapas, México.

Belisario

Palencia

Domínguez

El Dr. Belisario Domínguez Palencia es ejemplo de entereza, generosidad y valor civil. En él se conjuntaron varias de las virtudes más destacadas de la condición humana: la congruencia entre el pensar y el actuar, la generosidad prodigada mediante sus conocimientos médicos a sus pacientes, la filantropía en su actuación diaria con el resto de sus conciudadanos, la integridad moral y una inquebrantable voluntad demostrada en su ineludible destino de mártir al enfrentarse al gobierno espurio de Victoriano Huerta, luego del condenable asesinato del paladín de la democracia: Francisco I. Madero.

Aún a sabiendas de que al hacer valer como Senador su derecho a denostar al gobierno huertista, el Dr. Belisario Domínguez no se arredró ante aquella circunstancia que consideró un deber confrontar. En medio de aquellos sucesos en que los legisladores mexicanos de la época estaban sitiados y por lo tanto atemorizados ante el poderío militar del usurpador Huerta, el Doctor Domínguez levantó aquella su voz de bronce para arengarlos e incitarlos: “Cumpla con su deber la Representación Nacional y la Patria está salvada y volverá a florecer más grande y más unida y más hermosa que nunca”, fueron sus palabras en aquel discurso libertario que debería estar siempre presente en la conciencia de los mexicanos.

Rendir tributo al héroe civil comiteco y compartir su vida y obra, es el propósito de este folleto que el lector tiene en sus manos, con la esperanza de que cada vez se conozca mejor la biografía de los hombres y mujeres preclaros que han modelado a golpe de talento y heroísmo lo que nuestra patria es.

Jorge Constantino KanterPresidente Municipal Constitucional

de Comitán de Domínguez

BELISARIO DOMÍNGUEZ PALENCIA

Nació en la ciudad de Comitán, Chiapas, el 25 de abril de 1863. Fueron sus padres, d o n C l e o f a s Domínguez Román y doña María del Pilar Palencia Espinoza, o r i g i n a r i a d e l a R e p ú b l i c a d e Guatemala.

Don Cleofas fue comerciante; sin embargo, durante las luchas por la Reforma y contra la Intervención Francesa y el Imperio, supo poner a prueba el patriotismo peculiar de la familia Domínguez. Don Cleofas era hermano de don Gregorio y del General don José Pantaleón, de los mismos apellidos.

Don Gregorio murió en 1847, defendiendo a Comitán de las fuerzas reaccionarias, que al mando del General Barberena, la atacaban. Don Pantaleón, por su parte, fue un extraordinario militar que comandó el glorioso Batallón de Chiapas, en el histórico sitio de Puebla, contra las tropas invasoras francesas.

Don Cleofas perdió una pierna en el combate que sostuvieron unos cuantos civiles defendiendo la plaza de Comitán contra el vigoroso ataque de las fuerzas clericales del reaccionario Juan Ortega, el 15 de mayo de 1863.

El Doctor Belisario Domínguez desde la niñez denotaba la rectitud y la energía que habrían de hacer de él un mártir. La bondad de su corazón, en el ejercicio de la medicina, lo convertirían en un Apóstol de la Caridad.

Estudió la primaria en escuelas particulares, y desde esta etapa fue respetado por sus condiscípulos y amigos. Al término de su instrucción primaria se dedicó a los estudios de lengua y cultura latina, siendo su profesor el insigne maestro don Braulio García. En 1879 continuó sus estudios en San Cristóbal de Las Casas cursando la Preparatoria en el Instituto de Ciencias y Artes del Estado.

Pero por el desbordamiento del río Amarillo, en septiembre de ese mismo año, se paralizaron todas las actividades comerciales y las escuelas fueron cerradas. Por tal motivo su hermano Evaristo le pidió regresaran a Comitán, para posteriormente, ambos hermanos, viajaran a París y realizaran allá sus estudios preparatorios y profesionales.

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A diez años de estudiar en la Ciudad Luz, Belisario Domínguez volvió a su ciudad natal, con los títulos de Médico, cirujano y partero, así como oculista. Se dedicó a ejercer su profesión con modestia y empeño, poniendo sus conocimientos al servicio de los más neces i tados , a qu ienes no só lo a tend ía profesionalmente sino hasta obsequiaba los medicamentos.

Poco después contrajo matrimonio con la señorita Delina Zebadúa. De ese matrimonio nacieron cuatro hijos: Matilde, Hermilia, Carmen y Ricardo. Antes de su matrimonio, su padre, don Cleofas, enfermó gravemente. Fue operado por Belisario, con éxito; pero su anciano padre quedó en estado delicado y necesitado de la atenciòn mèdica de su hijo, éste no lo abandonó jamás; le prolongó por algunos años la vida. Para no dejar a su padre, declinó altos honores, como el de haber sido designado por el Gobierno del Estado Delegado a un Congreso Médico que tuvo lugar en la capital de Rusia, por el año de 1897. En 1897 falleció su madre, y cinco años después, su padre. Poco después saliò a México, a buscar en esa capital, médicos más capaces que él, y curaran a su esposa, de la enfermedad que padecìa ella, desde hacía varios años. Todo esfuerzo fue inútil y Delina falleció en 1902.

Del año de 1903 son sus hojas sueltas impresas y hechas circular profusamente en la capital de la República. En la primera, titulada "Chiapas", da a conocer nuestras riquezas desconocidas, la incuria de los gobiernos de Chiapas, su desenfrenado afán de lucro, antes que demostrar un interés por el verdadero progreso del Estado, e invita a todos los patriotas, y especialmente a los periodistas de México a colaborar con sus valiosos elementos de propaganda, para

informar al resto del paìs las necesidades de este apartado r i n c ó n d e l a República.

En la segunda hoja, dirigida a l o s s e ñ o r e s periodistas de la c i u d a d d e México, hace a éstos un severo reclamo por no haber oído sus s ú p l i c a s anteriores. En 1904 volvió a C o m i t á n e l

Regresa el médico de París

cirujano, obstetra y oftalmólogo

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doctor Domínguez, ya viudo, con tres hijos: Matilde, Hermila y Ricardo, pues Carmen había fallecido años antes. Estableció una farmacia llamada "La Fraternidad". Contigua a ella, tenía establecido su consultorio, comunicado con aquélla por una ventanilla. A èl acudìan a consulta personas de diferentes clases sociales.

Recibía el costo de la consulta de quienes, a su juicio podían pagárselo, sin sacrificio. Habían a quienes no cobraba la consulta, pero pagaban las medicinas; pero era mayor número el de pacientes pobres a quienes no sólo no les cobraba la consulta, sino que además se les obsequiaba inmediatamente el medicamento recomendado.

Por aquella ventanita que comunicaba su consultorio con la farmacia, le servía para pasarle a su boticario las recetas que deberían despacharse gratis, cuantas veces necesitara el enfermo el medicamento prescrito por el doctor.

Su humanitarismo tuvo casos notables, alguna vez se le vio por los arrabales de la población, confeccionando personalmente el alimento de algún enfermo; y una noche un grupo de jóvenes paseaban con música en el barrio de San Sebastián, apartado del centro. Una persona de estas se dio cuenta que alguien, decentemente vestido, llevaba sobre sus espaldas algunas tablas. La curiosidad hizo que todos se propusieran reconocer a aquel hombre, ante su sorpresa, identificaron al doctor Domínguez. Le pidieron las tablas para conducirlas a donde él quisiera, pero él les pidió que siguieran su paseo y le dejaron cumplir su misión. Llevaba aquellas tablas que había comprado en una casa del mismo barrio con el propósito de improvisar una cama a un enfermo que yacía en el suelo de una humilde choza.

Como médico, era un hombre profundamente comprens i vo con l a s necesidades humanas y ejercía su profesión con un gran sentido de caridad. Atendía gratuitamente a la gente económicamente desprotegida, le regalaba los m e d i c a m e n t o s s i s u situación de estrechez era desesperante, e incluso podía llegar al extremo de poner dinero de su bolsillo para que un enfermo tuviera la atención y cuidados que requería.

Dr. Etienne Lancereaux

Dr. Tilleaux

Maestros delDoctor Domínguezen la Facultad deMedicina de París

Comitán a principios del siglo XX

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Cuando el gobierno del E s t a d o i n c a u t ó , indebidamente, el capital del Hospital Civ i l de C o m i t á n , e l d o c t o r D o m í n g u e z d e f e n d i ó aquellos intereses, no sólo mediante la prensa de la capital del país y por medio de impresos sueltos, sino personalmente, hasta e n f r e n t a r s e c o n e l Gobernador del Estado, don Rafael Pimentel, a quien, con respeto, pero con entereza pidió la devolución de aquellos f o n d o s d u r a n t e u n banquete que se le dio en la ciudad de Comitán.

Fue p romoto r de l a c o n s t r u c c i ó n d e u n hospital, higiénico y dotado de solar para enfermos , con amplio terreno para jardines. La construcción se hizo al sur de la ciudad, con dinero del pueblo, por medio de una junta que administraba los fondos. El edificio se construyó, pero

el Gobierno Federal lo ocupó posteriormente para darle cabida a una escuela.

Aunque no fue político, el pueblo comiteco lo eligió en 1911 como presidente municipal. Ese año el Obispo de Chiapas, don Francisco Orozco y Jiménez, con el pretexto de que existían diferencias políticas entre los pueblos de Tuxtla Gutiérrez y San Cristóbal de Las Casas, desconoció al Gobierno del Estado. Chiapas se dividió: Comitán, en su mayoría, se mantuvo con el gobierno constituido, a pesar de la amenaza que representaba una posible invasión de los "chamulas" a Comitán, aconsejada por el Obispo Orozco y Jiménez. Pero el peligro fue conjurado a tiempo, y se recuerda el hecho histórico, en el que el Presidente Domínguez Palencia, da a conocer su viril y abnegada conducta, retando a su homólogo sancristobalense a batirse en un duelo para evitar que se derramase sangre de tantos otros chiapanecos en una guerra fratricida.

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En 1912 fue electo Senador suplente de Chiapas, habiendo aceptado pese a su reiterada negativa a ocupar un cargo político. Siendo Senador propietario don Leopoldo Gout, quien falleció durante la "Decena Trágica" en marzo de 1913. Belisario Domínguez fue llamado para ocupar la curul vacante. Desde

entonces, la República conoció la actitud viril y estoica del doctor Domínguez en e l Senado. Redactó un discurso que no tuvo o p o r t u n i d a d d e pronunciar . Esta pieza d e o r a t o r i a d e n u n c i a b a l a s tropelías de Victoriano

Huerta, su condición de usurpador y su culpabilidad en el asesinato del Presidente Francisco I. Madero y del vicePresidente José María Pino Suárez.

No satisfecho con ello y consciente de que otro ataque de esa naturaleza contra Huerta le costaría la vida, pronunció un discurso señalando duramente al régimen usurpador, el cual fue publicado con grandes dificultades debido al temor de los impresores ante las probables represalias del Presidente Huerta, hasta que finalmente lo imprimiò una mujer, la señorita Marìa Zarco*. Debido a ese segundo discurso el tirano Victoriano Huerta ordenó su asesinato. Ese heroico gesto del Dr. Domínguez y su posterior muerte por la democracia, hicieron que gobiernos posteriores emanados de la Revolución, instituyeran la medalla "Belisario Domínguez", para honrar a mexicanos que se distinguieran por su valor cívico.

El doctor Belisario Domínguez fue asesinado el 7 de octubre de 1913, por sicarios de Victoriano Huerta, en el Panteón de Coyoacán. El 13 de agosto de 1914, los restos de Belisario Domínguez fueron trasladados al Panteón Francés y en mayo de 1938 al cementerio de Comitán, Chiapas.

*Merecedora de la primera medalla que lleva el nombre del procer Belisario Domínguez, instituída por el Senado de la República.

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Inmerso en la política en la época del torbellino revolucionario, Belisario Domínguez no pudo menos que indignarse cuando don Francisco I. Madero y don José María Pino Suárez fueron asesinados, así que clamando justicia pidió la destitución del usurpador Victoriano Huerta.

La presidencia de la Cámara impidió que el representante popular leyera su protesta en el recinto legislativo. Sin embargo, Domínguez no estaba dispuesto a solapar la injusticia por lo que envió imprimir el texto de su protesta y él mismo se encargó de distribuirlo por las calles.

Así, por la ciudad de México, circuló el texto a través del cual Belisario Domínguez acusaba Victoriano Huerta de serios delitos contra la nación.

Como era de esperarse, Victoriano Huerta se sintió agraviado por la denuncia hecha por el Senador, a quien ordenó arrestar, en hecho consumado el siete de octubre de 1913, en su habitación del hotel Jardín. Una vez hecho prisionero, Domínguez fue conducido a Coyoacán en donde fue asesinado.

El discurso ante el Senado

Mártir de la libre expresión y el valor civil

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Señor Presidente del Senado:

Por tratarse de un asunto urgentísimo para la salud de la Patria, me veo obligado a prescindir de las fórmulas acostumbradas y suplicar a usted se sirva dar principio a esta sesión tomando conocimiento de este pliego y dándolo a conocer en seguida a los señores Senadores. Insisto, señor Presidente, en que este asunto debe ser conocido por el Senado en este mismo momento, porque dentro de pocas horas lo conocerá el público y urge que el Senado lo conozca antes que nadie.

SEÑORES SENADORES: Todos vosotros habéis leído con profundo interés el informe presentado por D. Victoriano Huerta ante el Congreso de la Unión el 16 del presente.

Indudablemente, señores Senadores, lo mismo que a mí, os ha llenado de indignación el cúmulo de falsedades que encierra ese documento. ¿A quién se pretende engañar, señores? ¿Al Congreso de la Unión? No, señores, todos sus miembros son hombres ilustrados que se ocupan de política, que están al corriente de los sucesos del país y que no pueden ser engañados sobre el particular. Se pretende engañar a la Nación Mexicana, a esta noble Patria que confiando en V. Honradez y en vuestro valor, ha puesto en vuestras manos sus más caros intereses.

¿Qué debe hacer en este caso la Representación Nacional?

Corresponder a la confianza con que la Patria la ha honrado, decirle la verdad y no dejarla caer en el abismo que se abre a sus pies.

La verdad es ésta: Durante el gobierno de don Victoriano Huerta, no solamente no se ha hecho nada en bien de la pacificación del país, sino que la situación actual de la república es infinitamente peor que antes: La Revolución se ha extendido en casi todos los Estados: Muchas Naciones, antes buenas amigas de México, rehúsanse a reconocer su gobierno, por ilegal; nuestra moneda encuéntrase despreciada en el extranjero; nuestro crédito en agonía; la prensa entera de la República amordazada o cobardemente vendida al gobierno y ocultando sistemáticamente la verdad; nuestros campos abandonados; muchos pueblos arrasados y por último, el hambre y la miseria en todas sus formas amenazan extenderse rápidamente en toda la superficie de nuestra infortunada Patria.

¿A qué se debe tan triste situación?

Primero y antes que todo, a que el pueblo mexicano no puede resignarse a tener por Presidente de la República a D. Victoriano Huerta, al soldado que se amparó del poder por medio de la traición y cuyo primer acto al subir a la Presidencia fue asesinar cobardemente al Presidente y Vicepresidente legalmente elegidos por el voto popular, habiendo sido el primero de éstos quien colmó de ascensos , honores y distinciones a D. Victoriano Huerta, y habiendo sido él igualmente a quien D. Victoriano Huerta juró públicamente lealtad y fidelidad inquebrantable.

El DiscursoTexto original

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Y segundo, se debe esta triste situación a los medios que D. Victoriano Huerta se ha propuesto emplear para conseguir la pacificación. Esos medios ya sabéis cuáles han sido: Únicamente muerte y exterminio para todos los hombres, familias y pueblos que no simpaticen con su gobierno.

La paz se hará, cueste lo que cueste, ha dicho D. Victoriano Huerta. ¿Habéis profundizado, señores Senadores, lo que significan esas palabras en el criterio egoista y feroz de D. Victoriano Huerta? Esas palabras significan que D. Victoriano Huerta está dispuesto a derramar toda la sangre mexicana, a cubrir de cadáveres todo el Territorio Nacional, a convertir en una inmensa ruina toda la extensión de nuestra patria, con tal que él no abandone la Presidencia ni derrame una sola de su propia sangre.

En su loco afán por conservar la Presidencia, D. Victoriano Huerta está cometiendo otra infamia: Está provocando con el

pueblo de los E s t a d o s Un idos de América un c o n f l i c t o internacional en el que, si l l e g a r a a r e s o l v e r s e por las armas i r í a n estoicamente a dar y a encontrar la muerte todos

los mexicanos sobrevivientes a las amenazas de D. Victoriano Huerta; todos, menos D. Victoriano Huerta ni D. Aureliano Blanquet, porque esos desgraciados están manchados con el estigma de la traición, y el pueblo y el ejército los repudiarían llegado el caso.

Esa es en resumen la triste realidad. Para los espíritus débiles parece que nuestra ruina es inevitable, porque D. Victoriano Huerta se ha adueñado tanto del poder, que para asegurar el triunfo de su candidatura a la Presidencia de la República en la parodia de elecciones anunciadas para el 26 de octubre próximo, no ha vacilado en violar la soberanía de la mayor parte de los Estados quitando a los Gobernadores constitucionales o imponiendo Gobernadores militares que se encargarán de burlar a los pueblos por medio de farsas ridículas y criminales.

Sin embargo, señores, un supremo esfuerzo puede salvarlo todo. Cumpla con su deber la Representación Nacional y la Patria está salvada y volverá a florecer más grande y más unida y más hermosa que nunca.

La representación Nacional debe deponer de la Presidencia de la República a D. Victoriano Huerta, por ser él contra quien protestan con mucha razón, todos nuestros hermanos alzados en armas y de consiguiente por ser él quien menos puede llevar a efecto la pacificación, supremo anhelo de todos los mexicanos.

Me diréis, señores, que la tentativa es peligrosa, porque D. Victoriano Huerta es un soldado sanguinario y feroz que asesina sin vacilación ni escrúpulo a todo aquél que le sirve de obstáculo: ¡No importa, señores! La Patria os exige que cumpláis con vuestro deber aún con el peligro y aún con la seguridad de perder la existencia. Si en vuestra ansiedad de volver a ver reinar la paz en la República os habéis equivocado, habéis creído las palabras falaces de un hombre que os ofreció pacificar a la Nación en dos meses, y le habéis nombrado

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Presidente de la República, hoy q u e v e i s claramente que este hombre es un impostor inepto y ma l vado, que lleva a la Patria c o n t o d a velocidad hacia la ruina. ¿Dejaréis por temor a la m u e r t e q u e continúe en el poder?

P e n e t r a d e n vosotros mismos, s e ñ o r e s , y re so l ved es ta pregunta: ¿qué se d i r í a d e l a tripulación de un

gran navío que en la más violenta tempestad y en un mar proceloso nombrara piloto a un carnicero que sin ningún conocimiento náutico navegara por primera vez y no tuviera más recomendación que la de haber traicionado y asesinado al Capitán del barco?

Vuestro deber es imprescindible, señores, y la Patria espera de vosotros que sabréis cumplirla.

Cumpliendo ese primer deber, será fácil a la Representación Nacional cumplir los otros que de él se derivan, solicitándose en seguida de todos los jefes revolucionarios que cese toda hostilidad y nombren sus delegados para que de común acuerdo elijan al Presidente que deba convocar a elecciones presidenciales y cuidar que éstas se efectúen con toda legalidad.

El mundo está pendiente de vosotros, señores miembros del Congreso Nacional mexicano, y la Patria espera que la honréis ante el mundo evitándole la vergüenza de tener por Primer Mandatario a un traidor y asesino.

"Nota: Urge que el pueblo mexicano conozca este discurso para que apoye a la Representación Nacional; y no pudiendo disponer de ninguna imprenta, recomiendo a todo el que lo lea que saque cinco o más copias, insertando también esta nota y las distribuya a sus amigos y conocidos de la capital y de los Estados. ¡Ojalá hubiera un impresor honrado y sin miedo!"

Septiembre 29, de 1913

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En 1977, siendo Gobernador del Estado Don Juan Sabines Gutiérrez, adquiere la casa ubicada en la Av. Doctor Belisario Domínguez Sur No. 35 que perteneció al propio doctor y fue destinada a ser la Casa Museo.

En los museos los pueblos admiran su pasado y proyectan su futuro. Por eso, es plausible la idea de organizar en Comitán un museo, consagrado a la vida y la obra de Don Belisario Domínguez, hombre notable por muchos conceptos; hombre extraordinario que es enseñanza permanente en la historia.

El gobierno del E s t a d o , a c a t a n d o l a v o l u n t a d d e l pueblo, expidió con fecha 10 de abril de 1984 el decreto número 120, mediante el cual se crea el Patronato “Casa Museo Doctor B e l i s a r i o

Domínguez Palencia”, que tiene como objetivo organizar una serie de actividades con el propósito de dar a conocer y enaltecer la fecunda obra del ilustre benefactor, del esclarecido abanderado.

El General Absalón Castellanos Domínguez (nieto directo del doctor), Gobernador del Estado Libre y Soberano de Chiapas, a sus habitantes hace saber: Que la Honorable Quincuagésima Quinta Legislatura Constitucional del estado Libre y Soberano de Chiapas. En Uso de las facultades que le concede la constitución política local, y CONSIDERANDO: Que desde hace varios años distinguidos chiapanecos comitecos concibieron un proyecto en el que con verdadero tesón han venido trabajando para hacerlo realidad: Consistente éste en crear un patronato encargado de difundir y dar a conocer la Vida, Obra y Trayectoria Política del egregio Legislador Doctor Belisario Domínguez Palencia, quien “Murió por la Patria en defensa de la libertad”.

Para tal efecto, se han reunido numerosos estudios bibliográficos, decretos del H. Congreso de la Unión y del H. Congreso del Estado, reuniendo documentos públicos y privados, periódicos, revistas; e incluso, objetos personales como ropa, equipo quirúrgico, epistolarios, retratos, libros, certificados, diplomas, títulos y Constancias de estudios y otras reliquias familiares celosamente conservadas y ahora donadas por su hija, la señora Hermila Domínguez viuda de Castellanos.

Actualmente este edificio que alberga esta Casa Museo Doctor Belisario Domínguez, pertenece al Gobierno del Estado y depende del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes de Chiapas, a través de su Dirección de Museos Estatales.

Antecedentes de la

Casa Museo Dr. Belisario Domínguez P.

Casa Museo Dr. Belisario Domínguez

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En este edificio, cuya arquitectura vernácula corresponde a las viejas casonas de principios del siglo XIX, nació el ilustre filántropo comiteco y héroe civil nacional, el Dr. Belisario Domínguez Palencia, el 25 de abril de 1863.

El inmueble conserva el estilo arquitectónico propio de su época y el jardín reproduce las mismas forma característica de entonces y conserva las plantas preferidas de don Belisario.

Es importante mencionar que los objetos y documentos que se exhiben fueron donados por la Sra. Hermila Domínguez Vda. de Castellanos (hija del doctor), en el año de 1980, para la creación de esta Casa Museo.

La Farmacia

Es una reproducción similar a la farmacia La Fraternidad, propiedad del galeno, en la cual podemos encontrar los objetos que fueron hallados en el tapanco de la casa y donados por la hija del doctor, Doña Hermila Domínguez de Castellanos.

Los muebles son una reproducción de los que él tenía; en cambio, el rótulo de la farmacia “La Fraternidad” es original junto con los demás objetos que se exhiben. También podemos encontrar fotografías de personas que ayudaban al doctor en la botica.

La farmacia colindaba con el consultorio y por medio de un buzón el Dr. Domínguez pasaba las recetas al boticario con claves que únicamente ellos conocían y que habla de la generosidad del médico para con sus pacientes de escasos recursos. Por ejemplo si decía:

R un realR. dos realesR- un tostón

O en su caso si decía “A mi cuenta” significaba que habría que regalarle la medicina al paciente, lo cual ocurría en la mayoría de las ocasiones.

La sala Familiar

Esta sala está decorada según costumbres del siglo XIX: con cielos aparentes, de mantas pintadas, y cenefas en las paredes.

En esta sala podemos encontrar fotografías de su familia. Un paño luctuoso con las iniciales de sus padres: Don Cleofas Domínguez Román y doña Pilar Palencia de Domínguez. Cartas de sus profesores, correspondencia suya de su época parisina, invitaciones y demás tarjetería social.

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La Recámara

Se encuentra tapizada con motivos austeros. Está su ropero original y otro que sirve como vitrina para exhibir cosas personales del galeno, tales como pecheras, traje de gala, cuellos removibles, puños, bastones, tirantes. Se encuentra también la cama con cabecera de latón, un buró, una silla y el viejo baúl que nos remonta a los usos y costumbres de la época que le tocó vivir a don Belisario. Se conserva ahí la fotografía de su esposa doña Delina Zebadúa de Domínguez y la del General José Pantaleón Domínguez (tío del doctor). También podemos encontrar el escritorio, la pluma fuente y tinteros.

El Consultorio

Se exhibe el escritorio y todo el instrumental medico quirúrgico que le perteneció. Como fue médico cirujano, obstetra y oftalmólogo se exhibe material de todo tipo, así como también de odontología ya que llevó algunos cursos. Su diploma y otras reliquias profesionales del doctor.

La sala del Marco Histórico

En esta sala inicia la parte histórica, donde todo es valioso y digno de la más cuidadosa observación, porque existen documentos que demuestran las ideas liberales del doctor, sus preocupaciones por el progreso y su lucha por la libertad. Están sus periódicos Chiapas, Señores Periodistas y El Vate, en los cuales expone las más brillantes ideas a favor de Chiapas y de México; donde también refiere su tesis progresista y de justicia social. Hay que admirar y leer todo para darse cuenta cabal del valor del hombre y de la situación de la época. Además podemos encontrar documentos que marcan la vida política del Dr. Belisario Domínguez.

La sala del Senado

En esta sala se exhiben documentos que nos remontan a su elección como suplente de don Leopoldo Gout, de quien se encuentra una fotografía, en la parte donde se exhiben sus famosos discursos, incluso el que imprimió doña María Hernández Zarco. Están las insignias de la patria custodiando su grandeza.

Además se exhiben fotografías de la Decena Trágica, ocurrida del domingo 9 al sábado 22 de febrero de 1913, cuando Victoriano Huerta da el cuartelazo y traiciona a don Francisco I. Madero y José María Pino Suárez, presidente y vicepresidente, respectivamente.

La sala del Discurso

Esta sala es la de más alto contenido político.

En ella se alberga el documento original del discurso que costó la vida al Senador Domínguez. En este documento esboza los actos de crueldad cometidos por Huerta y analiza la situación caótica del país; con este argumento exhorta a sus

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colegas para que la Representación Nacional (el Congreso) solicite la renuncia del usurpador Victoriano Huerta a la primera magistratura del país.

La sala de Documentos

Comprende 48 años de vida social del Dr. Belisario Domínguez y de sus familiares más cercanos. Exhibe documentos de los años 1863 a 1911.

Sala de usos múltiples

En ella se realizan conferencias, presentación de libros, recitales, conciertos, mesas redondas y seminarios sobre temas histórico y sociales.

En esta sala encontramos algunas fotografías de las personas que han recibido la medalla Dr. Belisario Domínguez que el Senado entrega cada 7 de octubre a mexicanos ilustres cuya actividad profesional o participación social sean destacadas.

Biblioteca

Aquí se guardan todos los libros, documentos y revistas que pertenecieron a Don Belisario Domínguez. La mayoría de estos son publicaciones en francés que nuestro prócer adquirió y leyó durante su estancia en el París de principios de siglo, mientras cursaba estudios de Medicina.

El jardín

En el centro del jardín hay un farol, es original y era la forma como se iluminaba la casa ya que no fue sino hasta 1908 cuando se instala la luz eléctrica en Comitán, teniéndolo a él como uno de los impulsores de ese b e n e f i c i o p a r a l a población.

Alambique

Jorge Constantino KanterPresidente Municipal Constitucional

Jorge Antonio Ruiz MandujanoSíndico Municipal

Fernando Bermúdez Bermúdez Tesorero Municipal

Luis Armando Suárez ArgüelloDirector de Proyección Municipal

Flor de María EspondaDirectora del

Centro Cultural Rosario CastellanosHermilo Aranda Rojas

Director de la Casa Museo Dr. Belisario Domínguez Palencia

Matías Castellanos GuillénPrimer Regidor

José Baltazar EspinozaSegundo Regidor

Alejandra Fuentes GarcíaTercera Regidora

Eduardo Javier Pérez ÁguedaCuarto Regidor

Claudia Gordillo AvendañoQuinta Regidora

Flor de María Alfonzo LópezSexta Regidora

Ivonne Guillén CruzSéptima Regidora

José Gabriel Aguilar LópezOctavo Regidor

Ramiro Alermo Domínguez RuizRegidor Plurinominal

Fernando Avendaño MandujanoRegidor Plurinominal

Pedro Carlos Bermúdez NájeraRegidor Plurinominal

Julio César Flores BorrazRegidor Plurinominal

Víctor Manuel Pulido GuillénRegidor Plurinominal

REGIDORES

DIRECTORIO

UN GOBIERNO DE TODOS PARA EL

H. AYUNTAMIENTO CONSTITUCIONAL 2005-2007

DE TODOSCOMITÁN

Así vivimos mejor en Comitán...