Expedición Extraordinaria Sistema de Alba al sifón Mireia, que se halla en el rio arriba de la sala Leonor, los dias 2, 3 y 4 de

Noviembre de 2012

WWW.aemuntanya.net, Grup d’Exploracions i Recerques Subterr{nies

Unió Excursionista de Sabadell— Espelo Club de Sabadell

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A la atención de la Federación aragonesa de Espelologia:

A pesar de que en el camino a la cueva, habia poca nieve. La boca estaba medio cubierta, porque se halla en un corredor de aludes. No seria la primera vez que un grupo se encuentra pillado a la salida. En la foto faltan 2 de los exploradores.

Introducción i Resumen técnico

Expedición Extraordinaria Sistema de Alba, al sifón

Mireia, que se halla en el rio arriba de la sala Leonor.

Días 2, 3 y 4 de Noviembre de 2012.

Participantes: Pau Sànchez (escafandrista), Marta

Tudela (logística exterior), Gonzalo Navarrete, Susana

Cubells, Eva Samitier, Ignasi de Yzaguirre, Siscu Rise y

Boris Berenguer (todos ellos espeleólogos

especialistas).

Tiempo de permanencia subterránea: 18 horas. Entrada

a las 12:30 h del sábado día 3 de noviembre. Salida a las

6:30 del domingo día 4 de noviembre de 2012

Mireia Boltas y Antonio Cabezas al finalizar un curso de submarinismo el año 2006.

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Sifó Mireia 3/11/2012

Inmersión Leonor de: 21:49 a

22:07 (trayecto de ida 18 min).

12’ de permanencia en el

exterior. Retorno desde “Riu

avall”: 22:19 a 22:33 h (trayecto

de vuelta 14’ de inmersión).

Profundidad máxima: 6.5 m

Profundidad media: 3.8 m

Distancia 67.1 metros.

Temperatura del agua: +4.4 C°

Peso: el material de inmersión tenía un peso de 45 kg en seco y se distribuyó según criterios de prestaciones físicas y % del

peso magro corporal entre 7 exploradores, incluido el buzo, que también participó en el transporte del peso.

1- Desde la boca de entrada en la cueva de Alba, hasta la sala Leonor y...

El transporte del material, se puede dividir en dos fases o tramos:

1.- En el primer caso requirió una lenta progresión por la cueva de Alba (con un único petate por explorador y de tamaño estándar: Petate Serac de Ø 30x40x70 cm) En los pasos estrechos los petates

progresaron por la cadena de exploradores. Debido a la circunstancia de un único petate por explorador, hubo que renunciar al uso de bidones rígidos. La comida y los enseres personales, manta térmica, se ubicaron en este petate personal, al costado del material de submarinismo. Los ordenadores iluminación y material más delicado, fue trasladado por el buzo, por decisión propia. El tramo de la cueva es muy variado: Hay estrecheces, zonas

de transito fácil por galería, desniveles que requieren progresión por cuerda, tramos en los que se circula a distancia del suelo, expuestos a caída o muy expuestos según el nivel de fatiga acumulado. Todo este primer tramo requirió 6 horas de trabajo continuado, solo interrumpido para hacer pequeñas colaciones y rehidratación. Se reparó y se substituyó un tramo de cuerda en la zona de acceso a la sala Leonor.

2.- El ascenso del material por la cascada Leonor.

2.- De la Sala Leonor al sifón. Los exploradores progresaron sin llevar petate por las escaladas realizadas los años anteriores por Pere Miralles (IIES Sabadell) (hasta la ventana de su mismo nombre) y por Brauli Torres (Grup d’Espelologia de Badalona) que escaló en extraplomo hasta el ático de la Cascada Leonor y realizó “la gran Travesía” por el techo de la sala. Los petates subieron directamente con una cuerda de 60 metros, dinámica. El ruido impedía cualquier comunicación y los

Topografia 2 (GERS-AEM i Espeleoclub de Sabadell-UES): en verde parte del trayecto hasta el sifón. En rojo los dos sifones que finalmente serian unidos en esta expedición. 65 metros de distancia

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silbatos usados para dirigir las maniobras, resultaron también ineficaces por el ruido. Por ello el ascenso de material resultó complicadísimo; se renunció a la cuerda guía que permitía recuperar la cuerda dinámica, porque se lió. Al final hubo que optar por “cazar” la cuerda que estaba suspendida en aéreo a 10 metros del fondo de la sala, desde una repisa, utilizando otra cuerda a modo de lazo o látigo. Este fue el período más crítico debido a que tres exploradores estaban bloqueados en la subida de la Sala Leonor, con el agua pulverizada que les caía encima y con un ambiente de ruido ensordecedor. Afortunadamente, cuando se estaba tomando la decisión de abortar la operación y hacer bajar a los exploradores, se desatascó la subida de material. En menos de 40 minutos estábamos reunidos en el sifón, el submarinista y cinco de los seis

espeleólogos en la estrecha galería de acceso al mismo.

3.- Bajo las aguas del sifón Mireia

Durante un tiempo largo el submarinista se preparó, instaló las botellas laterales, todo por duplicado, la múltiple iluminación, la cámara de filmación unida al casco, los ocho quilos de plomos que precisaba para equilibrarse...El sifón es inferior, es como un manantial, con una corriente poderosa, que obligará al buzo a nadar contracorriente, a través de la fría agua. El buzo nos informó que tenia pensado estar solo 30 minutos debajo del agua, pero que en función de la profundidad, tiene aire disponible para una hora, respetando los la normas de seguridad. ( Tiene una idea clara de las características iniciales del trayecto ya que 4 meses antes ya había inspeccionado visualmente el inicio del sifón). Se despidió de nosotros después de instalar el hilo guía; durante unos minutos

vemos su luz, después...la negra noche del alma se adueña del sifón.

Proyección en planta: En rojo: El sifón explorado por Pau Sánchez el día 3/11/2012. A propuesta de Pau Sánchez se llamará Sifón Mireia en memoria a la espelobuceadora Mireia Bolta que falleció este año en el curso de una exploración subacuática en una cueva.

En el camino de subida, haciendo un descanso, debido al sobrepeso que tubimos que soportar los expedicionarios.

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Mientras estaba ausente manteníamos una conversación animada entre nosotros, hay quien fuma,

Il·lustració 1 Topografía. Proyección en alzado (Espeloclub de Sabadell UES i GERS de l’AEM). En verde: Vía Clásica de 1984. En Azul celeste la Vía Nova (2006) que une la Sala Maladeta, Sala Llopis y Sala Leonor. En rojo:Vía directa, del sifón, abierta en noviembre de 2012.

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Todo el equipo interior está presente en la foto: Marta Tudela (2) segunda por la izquierda y autora de la misma, se encargó de la intendencia y permanencia exterior. 1: Boris ; 3: Siscu Rise; 4: Ignasi de Yzaguirre; 5: Susana Cubells; 6: Gonzalo Navarrete; 7 :Eva Samitier; 8: Pau Sánchez. Los perros 9 y 10 se llaman Bibo y Son

pero a los 25 minutos de esperar, nos quedamos en silencio, al tiempo que el infernal ruido de la sucesión de cascadas que conducen a la Leonor se convierten en una monotonía. Mi cabeza estaba en ebullición, 30, 35, 40 minutos de espera.... si a la hora no ha vuelto Pau, habrá que trasladarse, a la desesperada a la “Despensa” (vía clásica), por el camino recorrido 15 días antes y con la cuerda depositada al comienzo del “riu avall”, bajar los 4 desniveles que conducen a la entrada superior del sifón. Tenemos las luces de nuestros cascos apagada, intentando ver algún reflejo luminoso. A los 45 minutos unos leves reflejos verdes despejan nuestro temor. Pau está

ya cerca de la salida, tarda unos largos minutos aún, porque está levantando la topografía del sifón, Finalmente entre sus propias luces aparece su mano simbolizando un OK. Su cabeza emerge entre los gritos de entusiasmo y aplausos de nosotros cinco. Nos comunica que ha nadado 70 metros y que ha salido al otro costado del sifón y que ha encontrado la cascada de 12 metros que precede al sifón. Nos explica que la profundidad máxima es de 6 metros y que hay alguna zona estrecha.

4.- Salir sanos y salvos.

A partir de este momento empezamos a recoger todos los bártulos y a descender la cascada Leonor. En la base de la misma nos reunimos todo el grupo u comenzamos el largo retorno al exterior. Somos conscientes de que realmente constituimos una cadena que si no respetamos nuestras limitaciones, se romperá por los eslabones más débiles pesar de que intentamos distribuir correctamente los pesos en función de la fortaleza de los expedicionarios, no siempre lo conseguimos y en función de

Alegria a la salida de la cavidad.

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como se van fatigando los expedicionarios hacemos las correcciones pertinentes. A las 6:30 horas de la mañana, muy fatigados pero muy contentos, salimos por la cueva de Alba, tal como muestran las fotografías. Nos aguarda la lluvia, tal como pronosticaban las previsiones meteorológicas. Esta lluvia, a veces abundante, fue un trámite. En 30 minutos estábamos en Baños de Benasque y poco después en las explanadas del hotel Turpí, bajo una constante lluvia. Todavía pudimos dormir cuatro horas,

reparadoras, protegidos por las tiendas de

campaña. Agradecimientos a Pepe Castan que siempre nos hecha una mano, al Hotel Turpí, A Jorge mayoral de la Fundación Valle de Benasque, a la Guardia Civil de Benasque que estuvo pendiente de nuestra salida indemnes....

Especial recuerdo a los compañeros

desaparecidos Albert Lloveras y Bernat Renom .

A la familia Barrabés por aquel refugio del año 82.

Agradecimiento a los dirigentes de la Federación

Aragonesa de Espeleología por la paciencia que

han tenido con todos nosotros y por la confianza

que han mostrado con nuestras posibilidades.

Asistiendo a Pau mientras se preparava para la inmersión.

Eva saliendo de la cueva a las 06:30 de la mañana del domingo

Magnífica caliza betada en blanco negro y grises , estratificada verticalemtnte en el suelo de la cavidad.

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El buen humor presidió la expedición, hasta que la fatiga se adueño de nuestros rostros y de nuestros espíritus

Progresando en dirección a la sala Leonor. Todavia íbamos límpios.

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Narración del espeleosubmarinista Pau Sanchez:

Sifó “Mireia” de la cova d’Alba.

Després de moltes hores d’esforç, hem aconseguit portar tot el material al inici del sifó. Preparo tot el material: ampolles amb reguladors, ala amb arnés “sidemount” (permet dur les ampolles al costat del cos), focus principal, carrets marcats cada 5 metres amb fletxes d’orientació, casc amb llums per a poder filmar i de reserva, i més “quincalla”… Després i amb el vestit sec tril·laminat, m’equipo del tot, per últim les aletes. L’Eva em fa d’assistent, però tot i això, estic força estona fins que al voltant de les 22 hores inicio la immersió.

Fixo el inici del fil guia, em relaxo tot el que puc, malgrat el fred i la forta corrent i dic arreveure als companys. Sento les seves paraules d’{nim mentre fico el cap a l’aigua fredíssima, 4’4 graus. Només conec els primers metres del sifó de quan vam venir

fa uns mesos amb l’Ignasi i en Siscu i vaig fer una cabussada per a veure si era viable explorar-ho o no. Al cap d’un moment, primer fraccionament del fil i arribo al terreny desconegut.

Pau Sanchez, el espelobuceador dedicó meses a preparar esta inmersión. En la foto está talonando el hilo guia, con una señal cada cinco metros, para después poder hacer la Topografia del sifón.

Poligonal en perfil del Sifó Mireia: A corresponde al lado de la Sala Leonor y B al final del riu avall.

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Tot i que els companys estan a pocs metres, hi ha tot un món de distància. Sé que estaran amb angoixa fins que em vegin sortir altre cop al seu costat i encara més la Marta ,que a l’exterior, encara trigarà hores a tenir notícies nostres. Sé que estic sol i que per això mateix no haig d’assumir més riscos dels què ja té per si mateix l’espeleobusseig. Davant de qualsevol problema amb l’equip d’immersió, estretor severa, etc.. la primera opció és la tornada. Però les ganes i la il.lusió , són d’anar endavant i sortir all{, a l’altra banda, on fa uns 28 anys, els primers exploradors, i les poquíssimes persones més que han estat en aquell punt, van quedar aturats en trobar el pas barrat per l’aigua. Passo per sota d’un petit arc a uns tres metres de fondària que em recorda al “Sifó de

Vent”. Al cap de deu metres de galeria arribo als sis metres de fondària, i es manté més o menys així fins els vint-i-cinc de recorregut.

Després d’una petita pujada, “planejo” en els tres metres de fons. Segueixo instal·lant el fil, concentrat en “ara i aquí”, mirant ordinadors i manòmetres i miro per on vaig però bàsicament només em fixo on podré posar el següent fraccionament. Per a veure el “paissatge” ja tindré la tornada i a més porto la c{mera de vídeo al casc filmant continuament. La visió subjectiva filmada potser marejar{ però ser{ d’un gran valor documental. Tot va bé, poca fondària, visibilitat bona, i encara que el pas no és ample, cap restricció… El fil del primer carret es van acabant; té 70 metres, el màxim del què calculàvem segons la topografía actual. Penso que si haig d’unir el segon carret, amb 35 metres més, començarà a ser un sifó més llarg del previst i hauré de valorar si continuar o no. El passadís es manté ara ens uns dos metres de fondària, així que l’autonomia d’aire no ser{ cap problema. Decideixo continuar “només una miqueta més…!” Miro el sostre, amb una veta de pedra blanca com la neu que el ressegueix i de cop una cosa també blanca però diferent: escuma d’aigua remenada! Un metre més enll{ el típic “mirall” de la superfície…he arribat!!!

Planta (vista de pájaro) del sifón Mireia. A corresponde al lado de la Sala Leonor

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Trec el cap fora de l’aigua i sento el fort soroll d’una cascada. Miro de no emocionar-me massa; primer de tot he de fixar el final del carret, seria el meu camí de tornada inclús en cas de visibilitat zero . Les mans

fredes dificulten la maniobra però un cop acabada, gaudeixo d’on sóc. Després d’uns petits resalts, es veu la cascada que cau per una paret d’uns 10 metres, calculats a ull. Coincideix tot amb la topografía que he mirat i remirat un munt de vegades a casa. Com que he quedat amb l’Ignasi que no sortiria de l’aigua per evitar qualsevol accident que m’impedís tornar, m’esforço en il·luminar el millor que puc, des d’el lloc on estic, perquè es vegi bé la filmació. He passat deu minuts amb l’aigua per la cintura, començo a tenir fred i els companys potser es comencen a amoïnar. Decideixo tornar. Preparo la pissarra de

topografiar, faig les primeres anotacions i em submergeixo.

La tornada és més tranquila, vaig a favor de la corrent, la visibilitat no s’ha espatllat gaire, només m’aturo a les fletxes cada cinc metres per a prendre nota de la fondària i el rumb de la galeria. Faig un parell de rectificacions del fil i suaument desfaig el camí d’anada. Em sobra aire i llum però començo a

primer notar el fred. Arribo a l’última fletxa i miro cap a dalt: altre cop el mirall d’aigua… a poc a poc trec

Inspeccionando el sifón antes de la inmersión.

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la m{, fent “OK!” i després el cap. Sento els crits d’alegria dels companys i els dono la bona noticia: Hem connectat la Sala Leonor amb el sector “Riu Avall”. Només acostar-me a ells, em trobo amb un got de sopa bullint a les mans, boníssima! me la prenc sense treure’m ni les ampolles. Cansat, i amb una mica de fred, començo a desequipar- me i empaquetar-ho tot. A cada petate fet, un company inicia el descens a la sala Leonor, camí de la sortida. Jo soc l’últim a marxar. Em giro cap al sifó i li dono les gràcies per haver-me deixat explorar-ho... L’esforç ha valgut la pena! Encara queda la tornada a l’exterior. Unes sis horetes de res… Només jo he entrat a l’aigua però sense l’ajuda de tots i cada un dels companys, mai no ho hagués pogut fer. Gràcies de tot cor a: Eva, Susana, Gonzalo, Boris, Siscu i Ignasi. També al Marc pel seu suport anímic, material i informatiu. I el meu sincer reconeixement a tots els què van fer possible l’escalada de la sala Leonor, una feina dura i espectacular a parts iguals. I gr{cies des de l’{nima, a la Marta pel seu recolzament i companyia en aquestes dèries meves! A aquest nou sifó explorat l’anomenarem sifó “Mireia” en record de la nostra amiga Mireia Bolta Josa, espeleosubmarinista que va patir un fatal accident mentre practicava la seva afició el febrer de 2012. Material utilitzat: A més del material personal, d’emergència, dues cordes per reposar altres malmeses, menjar i aigua,etc… el grup va haver de transportar tot l’equip d’immersió, uns 45 - vestit sec tril·laminat - arnés i ala sidemount - 2 ampolles de 6 litres a 300 bars - 2 reguladors de càmera seca - aletes - guants de latex i de neoprè - caputxa de neoprè de 7 mm. - 2 carrets de fil guia i un “spool” - focus principal de 1.500 lúmens - 2 focus vídeo - 2 llanternes de reserva - 8kg de plom .