evolución del big ban al hombre 2010 - copia

7/21/2019 Evolucin Del Big Ban Al Hombre 2010 - Copia

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An. R. Acad. Nac. Farm., 2006, 72: 235-281

Revisiones

La evolucin y el ascenso bioqumico-moleculardel hombre: del Big Bang a la conciencia valrica

MARIO SAPAG-HAGAR

Acadmico correspondiente de la Real Academia Nacional de FarmaciaProfesor Emrito-Universidad de Chile

A la memoria siempre viva del Profesor Doctorngel Santos Ruiz, maestro generoso que, con sabidu-ra y humanidad, me transmiti su entusiasmo por laBioqumica, agonista del alma que contribuy tambina mantener nuestra amistad y afecto a ambos lados delAtlntico.

1. INTRODUCCIN

Al momento de examinar la asociacin de hitos que han marcadola historia de la Ciencia, se deduce que los sistemas basados engrandes ideas unificadoras suelen asociarse, consciente o incons-cientemente, con pensamientos o creencias acerca del destino huma-no y de su origen.

A este mbito pertenecen la Teora de la Evolucin Biolgica deDarwin (a quien se le llam, acertadamente, el Newton de la Bio-loga), y la Teora Molecular del Cdigo Gentico, eje de la Biolo-ga Molecular que ha permitido, como ya lo sealramos en otraoportunidad (1), la manipulacin por ingeniera gentica de la infor-macin hereditaria misma con lo cual ha abierto la posibilidad deintervenir en la evolucin de los seres vivos.

A Darwin corresponde el gran mrito de haber hecho que la

evolucin, como fuente creadora de materiales y formas, fuera un


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MARIOSAPAG-HAGAR AN. R. ACAD. NAC. FARM.

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hecho inobjetable, un concepto unificador y un proceso continuo ycomprensible en el que, a travs de la orientadora seleccin natural,

se generen inevitablemente nuevas formas, estructuras y funciones,as como mejoras autoadaptables al medio, las que se traducen enun avance en la organizacin general de los seres vivos (1).

Pero como las propiedades de los seres vivos se deben a las ca-ractersticas e interacciones de las molculas que las componen, enuna verdadera suerte de anatoma molecular, los bilogos se hanpreocupado de perseguir a las molculas que constituyen los orga-nismos vivos y, con ayuda de los cosmlogos, han rastreado su ori-

gen hasta la creacin de la materia inanimada misma tras la granexplosin (Big Bang) que origin sus primeros elementos.

La Ciencia ha desplegado, desde hace ya mucho tiempo, susmejores esfuerzos y reflexiones para alcanzar una visin unificadade la realidad intentando suprimir algunos desniveles evolutivos,todava inexplicables, entre materia inanimada (o inorgnica), vida y

conciencia valrica, desafo que est a punto de lograr, an cuandose le sigue resistiendo la unificacin de la aparicin de los fenme-nos de conciencia a partir del sistema nervioso (2).

Los tres desniveles evolutivos anteriormente descritos, materiainanimada, vida y conciencia valrica, tienen su interpretacin, res-pectivamente, a travs de tres grandes creadores de nuevos materia-les y formas: elBig Bang,el ADN y la mente.

En el presente trabajo desarrollaremos actualizada y secuencial-mente estas tres etapas evolutivas cuya mxima expresin es elhombre,con el propsito de alcanzar una comprensin bioqumico-molecular de l que incluya, adems, su pensamiento lgico y su

conciencia tica y valrica (Homo moralis) en las cuales se basan suscaractersticas humanas y su preeminencia sobre los otros seres vi-

vientes que lo precedieron. Para ello, consideraremos el equilibrioentre lo gentico y su entorno (medio ambiente) que hace que elhombre, ms queHomo sapiens, sea elHomo humanusque sealabaCicern. Tanto la naturaleza con sus caracteres hereditarios, comoel ambiente, explican en su interaccin la conducta humana y una

voluntad libre influida por el instinto (genes, cultura, experiencia,entorno). No se trata ya de la herencia o naturaleza frente al am-biente sino de la herencia a travs del ambiente (3). As, la vida y el


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VOL. 72 (2), 235-281, 2006 LA EVOLUCINY ELASCENSO BIOQUMICO-MOLECULAR...

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hombre mismo se han convertido en objetos de investigacin y noslo de revelacin.

Antes de describir las etapas evolutivas de la materia y de la vida,que desembocan en el hombre, analizaremos algunos conceptosbsicos de carcter biolgico, cultural, filosfico y sociolgico delgran proceso creador e integrador que es la evolucin, as como laya clsica controversia entre ciencia y religin.

2. LA EVOLUCIN: UN GRAN PROCESO CREADOR

Y UNIFICADORElhombre es la Evolucin

hecha consciente de s misma.

J. HUXLEY

2.1. La evolucin del hombre: de la evolucin biolgica2.1. a la evolucin cultural

El que la humanidad tiene un origen bioevolutivo es una conclu-sin cientfica de la cual no cabe duda razonable alguna, aun cuandoresten detalles por investigar y descubrir. La adaptacin de una es-pecie a su ambiente es el proceso principal que mueve y dirige laevolucin biolgica. La adaptacin se produce gracias a laseleccinnatural,es decir, debido a la reproduccin diferencial de las varian-tes genticas existentes en la especie del ser humano, ya que slo enl la cultura constituye un mtodo de adaptacin ms rpido y po-deroso, puesto que an durante los ltimos milenios ha adaptado elambiente a sus genes con ms frecuencia que los genes al ambiente,sin necesidad de recurrir a mutaciones, lo que conduce a que la Hu-manidad sea la especie ms evolucionada sobre la Tierra.

Es conveniente, sin embargo, tener presente que la evolucinbiolgica, en la que desempe un papel principal el ADN de losgenes hace ya ms de 3.000 millones de aos, y cuya mxima expre-sin biognica se alcanz en el hombre, fue precedida por la evolu-cin prebitica o cosmolgica, basada en los cambios energticos

y de la materia inanimada, apareciendo los tomos y las molculas


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que constituiran los sillares de la vida. En esta ltima etapa, haceun milln y medio de aos, se alcanzara la creacin de la mente

humana (noognesis) caracterizada por los inicios del pensamientolgico y la conciencia valrica.

La evolucin es un proceso continuo del ser humano, el cual, aligual que los dems organismos, sigue an evolucionando. Si nofueran capaces de adaptarse a los cambios de su medio ambiente,quedaran condenados a la extincin. La especie humana continaevolucionando al cumplir con las dos condiciones fundamentalespara toda evolucin biolgica: una gran diversidad gentica y cam-

bios ambientales, lo que se traduce en una seleccin natural quelleva a la transmisin de variantes genticas. Si la evolucin se pro-longa en una direccin ms o menos determinada durante un perio-do suficientemente largo, se hacen observables los cambios, comoha ocurrido con el aumento de tamao del cerebro del hombre de500 a 1.400 cc en los ltimos millones de aos.

Entre las adaptaciones ms recientes del ser humano se encuen-tran: la piel clara para absorber mejor la vitamina D, especialmenteen las latitudes ms nubosas; un gen para ayudar a digerir la leche,alimento que otras especies slo consumen en la infancia; en losasiticos, un nuevo gen que provoca intolerancia al alcohol.

Hay, pues, amplia evidencia de que la seleccin natural ha sidola fuerza principal de nuestra evolucin en los ltimos diez mil aosy no hay razn para suponer que el proceso est detenido.

La evolucin humana se diferencia de la de los dems organis-mos por tener dos dimensiones: una biolgica, por transmisin deinformacin gentica, y otra cultural, basada en la transmisin nogentica de informacin.

Esta ltima, la cultural, es especficamente humana y constituyeel conjunto de ideas vivas que el tiempo posee y de las cuales eltiempo vive (4). Las evoluciones biolgica y cultural son interde-pendientes, dependiendo enteramente la existencia de la cultura dela naturaleza y cualidades de la base biolgica cuyo poder de adap-tacin se extiende, a su vez, sobremanera, gracias a la cultura, la queconstituye la fuente ms importante de los cambios ambientales que

determinan la evolucin biolgica del hombre.


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Las dos dimensiones de la evolucin humana, biolgica y cultu-ral, responden a las dos clases de herencia, gentica y cultural, exis-

tentes en el ser humano, que Medawar denomina, respectivamente,herencias endosomtica y exosomtica (5).

En 1976, Dawkins introdujo el trmino meme como un equi-valente cultural del gen. El meme representara un replicador deentidades culturales y la base de la continuidad cultural, as como elgen es un replicador de rasgos o caracteres biolgicos, base de laherencia. Memes pueden ser ideas, conceptos, conductas, estilos de

vida, etc. Utilizan a las personas para perpetuarse, al igual que los

genes que portan los seres humanos perecibles que les permitenperpetuarse y replicarse para luego desaparecer. Los memes se sir-ven de una capacidad fundamentalmente humana: la imitacin (mo-das, costumbres, etc.). As, las culturas se podran interpretar comoinmensos aparatos de replicacin. Al igual que los genes, los memesmutan y se transforman al traspasarse a otros individuos o comuni-dades. Las culturas no seran, pues, sino conjuntos de estas unidadesfundamentales o memes.

J.-P. Changeux, por ejemplo, llega a identificar un cuadro artstico

como un meme de una complejidad extrema o, ms bien, una sn-tesis compleja de memes cuya transmisin y propagacin se llevan acabo a travs del cerebro del artista, de un lienzo a otro en la obra delpintor y de la obra de un pintor a otro. El historiador intenta, por otraparte, reconstruir una evolucin de un artista mediante la bsquedade elementos variables en el conjunto de una masa relevante de inva-riantes que caracterizan el estilo del pintor o de la colectividad deartistas a la que pertenece. Intenta reconstruir una evolucin que, a lapostre, slo es realizable porque el pintor, a la vez que inventa, tomade s mismo y principalmente de los dems, esquemas, figuras y for-masque se convierten en otras tantas unidades de rplica, de memes,

que se perpetan a lo largo de la historia(6).

La teora de Dawkins proporciona un valioso modelo sinttico yun apoyo biologizador. La evolucin cultural es, sin duda, muchoms rpida que la evolucin biolgica (gentica). La reproduccinaculturada de memes representara una clonacin cultural sin dudatan peligrosa como la biolgica (2, 7, 8).


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2.2. El hombre, un ser tridimensional

Es conveniente destacar tres niveles constitutivos en el hombre:a)lo corporal (orgnico);b)lo psicolgico (mente-conciencia senso-rial);c)lo axiolgico (valores): conciencia moral, espritu libertario.A este ltimo tambin se le aade la necesidad de explicar, desdeuna perspectiva bioqumico-gentica, nuestra conducta como sereshumanos.

La seleccin natural es un proceso que no tiene en s objetivos,pero el hombre s los tiene constituyndose ste en la nica especie

biolgica consciente de su evolucin y con el poder de moldearla enconformidad a sus propias necesidades imperiosas, direccin evo-lutiva que constituye un asunto tico de gran importancia para laHumanidad por su creciente gravitacin sobre su comportamiento.El ser humano no es slo Homo sapiens, tambin es, como ya diji-mos, Homo moralis, un ser tico por su naturaleza biolgica intrn-seca que le permite anticipar las consecuencias de sus propias accio-nes y discernir su comportamiento bueno o malo, moral o inmoral,segn las normas generadas por la evolucin cultural y no por la

biolgica. El comportamiento tico requiere o depende de la capa-cidad de hacer juicios de valor y, a la vez, de elegir entre variaslneas alternativas de accin.

2.3. Qu es el hombre?: Evolucin, Verdad y Ciencia

El hombre, centro de perspectiva, es al propiotiempo centro de construccin del Universo. Hacia l

es donde hay que orientar finalmente toda cienciaTEILHARD DECHARDIN

Gracias a la Ciencia puede el hombre decir como Don Quijote,pero con ms fundada razn, yo s quien soy y quien puedo ser.El hombre es producto de un proceso evolutivo que an contina yque ir determinando lo que, en cada etapa, llegar a ser (9).

A decir de Zubiri: la Ciencia no es una simple adicin de verda-

des que el hombre posee, sino el despliegue de una inteligencia


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poseda por la verdad, aludiendo a la bsqueda de las propias racesen lo ms profundo de uno mismo, lo cual es, simultneamente, lo

ms externo y radical, lo superior. Esto equivale a llegar a conocerlo primordial de la realidad misma, poder de lo real que representa,en s mismo, la unidad intrnseca de la realidad y la inteligencia.

El concepto de evolucin orgnica constituye, junto a los concep-tos de clula y de organismo, uno de los ms importantes principiosbsicos de la Biologa. La evolucin orgnica es el desarrollo progre-sivo de animales y plantas a partir de ancestros de formas y funcio-nes diferentes. Es un proceso muy lento, que se mide en tiempo

geolgico. El trmino evolucin se aplica, en general, a cualquieraumento en complejidad a travs del tiempo, tales como la evolucindel sistema solar, la evolucin orgnica de los seres vivos, la evolu-cin del hombre y de la sociedad humana, etc. La similitud funda-mental de los organismos apoya la existencia de un ancestro comna todos ellos. El protoplasma y la clula y sus manifestaciones de

vida metabolismo, crecimiento y reproduccin son esencialmen-te los mismos en todos los organismos. Los cambios en la constitu-cin gentica de un organismo pueden deberse a nuevas condicio-

nes, a bricolaje, a mutaciones de los cromosomas o a mutaciones delos genes.

La combinacin de la teora de la seleccin natural de Darwin yla teora de las mutaciones de De Wries es lo ms aceptado por losbilogos modernos.

En la sociedad humana deben convivir los investigadores de laverdad terrena sin negar ni combatir a priori la trascendencia de loabsoluto que plantean la religin y la filosofa.

Claude Bernard deca que en todos los conocimientos humanosy en todas las pocas hay una mezcla, en proporcin mayor y menor,de tres cosas: religin, filosofa y ciencia. Las tres se depuran y seperfeccionan la una con la otra.

Pasteur, por otra parte, afirmaba que en cada uno de nosotroshay dos seres: el hombre de ciencia, que hace tabla rasa de todo yquiere remontarse hasta el conocimiento de la naturaleza por mediode la observacin, la experiencia y el raciocinio, y el hombre sensi-

ble, que vive de la tradicin, de la fe, de los sentimientos (10). Hay


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mucho de verdad en aquello de que la Ciencia y el Humanismo hande constituir un solo brazo en vez de un monoltico muro que separa

injustificadamente razn y sentimiento.

Al igual que en Pasteur, en no pocos hombres de ciencia coexis-ten, sin mutua interferencia y sin implicacin entre ellas, estas dosformas de vida.

La verdad, ms que cuestin de explicaciones, lo es de actitu-des profundas de las personas. Estar a favor de la verdad no signi-fica poseer la verdad, sino ms bien ir tras ella, buscarla, investigarlay dejarse poseer o estar posedo por ella.

En la presente exposicin deseamos reflexionar sobre algunosaspectos esclarecedores del origen y evolucin de la vida a partir delo inanimado hasta culminar en el hombre, valindonos de los apor-tes de la fsica, la qumica, la bioqumica, la gentica, la sociologa,la antropologa y otras ramas de las ciencias del hombre.

De esta manera, aspiramos a llegar a una concepcin coherentede lo que es el hombre en conformidad con la ciencia de hoy hastaalcanzar una posicin que nos permita, con el tiempo, decir: Eccehomo, pero desde una perspectiva distinta a la de Pilato. ste, trashaber hecho flagelar a Jess, lo hizo adelantarse hasta el balcnque daba sobre la plaza y grit: Ecce homo (he aqu al hombre)(Jn 19,5). La historia se encargara de transcribir estas palabras, a la

vez misteriosas y profticas de Pilato que, en realidad, iban muchoms all de lo que l mismo sospechaba pues, como bien lo ha dichoJos Martn Descalzo, cruzaran la historia como una profeca: Jessera verdaderamente hombre, el hombre verdadero, el de la dimen-sin biolgica impregnada de la consiguiente primera humanidad,el primer hombre de la Humanidad nueva que slo en l alcanzaratoda su plenitud, la del hombre ms humano, el Homo humanus,que ya mencionamos. En ese instante Pilato no poda comprenderesa situacin en toda su trascendente humanidad y en todo su dolor.El Ecce homo constituira, en Jess, el motivo y smbolo del msencendido amor y entrega a los dems; en cambio, en Pilato, llegaraa ser el smbolo de la cobarda.


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Bergson sostena que el ser humano se puede explicar a partir deun proceso de evolucin y apoyaba que la funcin de los sentidos no

era la de representar la realidad circundante sino la de estimularreacciones como proteccin ante los peligros del entorno, razn porla cual no representan hoy fielmente el mundo real. Adems, invo-caba la presencia en las especies, evolutivamente, de un impulso quedenomin corriente o fuerza vital (lan vital) que impulsa a unamayor individualidad (11).

Ortega y Gasset haca notar que los fenmenos vitales comienzandonde concluyen los fenmenos mecnicos: el enamorado que se

consume de deliquio contemplando el divino valo de la faz amada,no se extasa ante una disposicin oval de tomos, y la liebre quehuye del galgo no huye de una ecuacin fsico-qumica (la de laradiacin luminosa). Y aada: medio biolgico es slo aquelloque existe vitalmente para el organismo. Hay un mundo para cadaespecie; hay un mundo para el hombre y otro para el guila, y otropara la araa. No slo el organismo se adapta al medio, sino que elmedio se adapta al organismo. El cuerpo es slo la mitad del ser

viviente; su otra mitad son los objetos que para l existen, que l

percibe y que lo incitan a moverse, a vivir. Para entender una vida,humana o animal, hay que hacer antes el inventario de los objetosque integran, con sus cualidades percibibles, su mundo propio, loque Ortega denomina su paisaje, su medio vital (4).

Nada hay en el mundo fsico que no tenga su correspondenciasicolgica, y viceversa, para el ser humano. As, Goethe cantaba esahermandad entre alma y espacio, el mundo como expresin del alma:

nada hay dentro, nada hay fuera;

lo que hay dentro, eso hay fuera.

3.2. Materia viva y no viva: vitalismo y mecanicismo (12)

Distinguir lo vivo de lo inerte o abarcar en una misma definicinal ternero, el pltano y la bacteria no es nada fcil, requiriendocierta flexibilidad al momento de hacerlo. Las formas vivas se pue-den individualizar por poseer una membrana celular (los pluricelu-

lares adems poseen un cuerpo), por su capacidad de intercambiar


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materia y energa con su entorno, por crecer y reproducirse y por lacapacidad de responder a los estmulos externos.

Respecto a un criterio simple que permita distinguir entre mate-ria viva y no viva, la complejidad del fenmeno vital y su naturalezaesencialmente misteriosa hace de ello un tema de conjetura. Engeneral, existen dos aproximaciones opuestas para entender el fen-meno de la vida: el mecanicista y el vitalista.

El mecanicista considera que un organismo vivo es una mquina,cuyas partes e interacciones obedecen a las mismas leyes de la fsicay de la qumica que conocemos en el mundo no viviente. El vitalista,

en cambio, estima que las leyes fsicas y qumicas ordinarias no sonsuficientes para explicar el fenmeno de la vida y que la condicinde estar vivo se debe a otro factor del cual no sabemos nada, perocuya existencia debemos asumir. Est claro que el primer punto de

vista, el mecanicista, ha sido el ms fructfero en la investigacincientfica y si bien no prueba que la vida es un mecanismo, al menossugiere que el abordaje prctico y metodolgico implica la hiptesisde que las leyes de la fsica y de la qumica explican la materia viva.De aqu que los bilogos modernos son mecanicistas en el abordaje

experimental cualesquiera que sean sus convicciones fundamentales.

A todo aquel que se ha introducido en cualquiera de las ramas dela biologa le llama la atencin la gran variedad de organismos vivosexistentes en nuestro planeta y, ms an, le sorprende que esto noguarde consonancia con lo reducido de los procesos fsico-qumicosy estructuras atmicas, moleculares y celulares empleados para lle-

var a cabo esta maravillosa diversidad de organismos vivos. Es decir,que la naturaleza es prdiga en seres vivos pero no en mecanismos.

Lo que podra parecer una complejidad inexplicable no lo es por lasorprendente unidad que presenta la materia viva en composicin,estructura y funcin, acompaada de un origen comn y una admi-rable evolucin qumica y biolgica develada a travs de la capaci-dad racional de la mente del hombre plasmada en un rbol de la

vida comn a todos los seres vivientes.


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3.5. La controversia Ciencia-Religin

l moraba en el principioy principio no tena,

l era el mismo principio,Por eso de l careca

S. JUAN DE LA CRUZ

La Historia muestra numerosas y desafortunadas controversiasentre los defensores de las principales religiones y los cientficos,controversias que, las ms de las veces, han estado basadas en super-

ficialidades ya sea de fe o de conocimiento. Estos dos ltimos m-bitos representan puntos de vista diferentes pero no necesariamenteopuestos radicando las controversias, en su mayor parte, en la evo-lucin orgnica, especialmente en su aplicacin al hombre. Losopositores de la doctrina evolutiva, ninguno de los cuales es de for-macin biolgica, coinciden en un punto de vista comn que no escompatible con los descubrimientos de la Biologa. La inconsisten-cia de esta postura se debe a que su fundamento es la interpretacinliteral de la Biblia (ms especficamente del Antiguo Testamento) y

el estricto apego a cada palabra de las diferentes traducciones. Porsupuesto que los puntos de vista de los llamados creacionistasreligiosos no son consistentes con los descubrimientos de la Biologani tampoco respecto a los hallazgos en otros campos. Hay muchoscasos histricos en los cuales algunos grupos de creyentes hicieron

ver la intervencin divina como un fenmeno que despus fue expli-cado como debido a causas naturales. Todos hemos sido testigos delpoder de la seleccin natural. As, hace poco ms de cincuenta aos,los mdicos mantenan una confianza ciega en los antibiticos y hoy

da, en cambio, vemos cmo un nmero cada vez ms grande debacterias son resistentes a ellos a travs de un proceso de seleccinnatural. Por lo mismo, no disponemos de una vacuna permanentecontra la gripe ya que el virus muta rpidamente y se adapta norespondiendo a la accin de los anticuerpos. Lamentablemente, losfanticos religiosos no suelen convencerse de aquello que constituyeuna evidencia para el cientfico y ponen su fe en los dictados de lareligin, negando la evidencia que le proporcionan sus propios sen-tidos. Lo crucial de esta controversia radica en una diferencia fun-

damental de los puntos de vista, la que implica la naturaleza de la


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3.6. Sociobiologa y competicin evolutiva

La Sociobiologa, como ciencia que estudia los comportamien-tos sociales de los seres humanos y de todos los organismos vivos,se basa en la preocupacin de estos seres por sacar el mejor parti-do posible en el juego de la competicin evolutiva (reflejos de lateora darwiniana). R. Dawkins, en su controvertido libro El genegosta (7), ms que centrarse en el organismo individual, adopta elpunto de vista en relacin a la naturaleza. La teora del gen egostaes la teora de Darwin expresada de una manera distinta a la elegi-da por el naturalista ingls. El punto de vista de Dawkins es que no

existen dos caminos al momento de considerar la seleccin natural:la apreciacin desde la perspectiva del gen y la aproximacin desdeel individuo. Son dos visiones de la misma verdad del neo-darwinis-mo. En suma,Dawkins postula que el organismo no sera ms que un

conjunto de genes que encontraron el medio de optimizar su perma-nencia y expresin con el mximo de beneficios en el desarrollo evo-lutivo; un modo de perpetuarse como el que encontr el huevo alhacer otro huevo. Los genes egostas estn interesados en vivir

juntos para crear esa reserva gentica que son los organismos. La

biologa molecular ms reciente as lo indica (genes saltarines, genesmltiples, etc.). Si la Naturaleza no realizara saltos, la especie huma-na no existira. La teora del gen egosta lleva al espritu competi-tivo hasta el interior mismo del organismo, generalizndolo comple-tamente.

3.7. Las enfermedades como instrumento de la seleccin3.7. natural (2, 14)

Las evidencias sealan que las enfermedades, ya sea de carcterhereditario o provocadas por agentes ambientales (biolgicos, fsicoso qumicos), nutricionales, etc., desempean un papel importantecomo factor selectivo en la evolucin humana, llegando a ser, enocasiones, ms homicidas que las guerras y los genocidios. Esteconjunto de fenmenos patolgicos ha producido muchsimas msmuertes que las guerras y los desastres naturales a lo largo de lahistoria evolutiva del hombre. As, por ejemplo, la mayor parte delos abortos espontneos son producto de enfermedades hereditarias,


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con lo cual la Naturaleza dispone de un filtro selectivo muy impor-tante.

Igualmente, en toda la historia del hombre, las grandes epide-mias han afectado fuertemente a pueblos y ciudades. Tal es el casode la peste negra, considerada como el mayor desastre demogrficobiolgico-ambiental de toda la historia, llegando a producir la muer-te de ms del 30 por 100 de la poblacin de Occidente. Tambin lalepra, el paludismo, el clera, el tifus, etc., han afectado principal-mente a los ms desheredados, a los que viven en la suciedad y enla miseria y han representado, en gran medida, la historia de la

Humanidad, una historia de enfermedad y muerte que supera laprotagonizada por guerras y catstrofes naturales y de la cual el artepictrico ha dejado vvida constancia (15).

Cabe hacer notar que los individuos de grupo sanguneo 0 resis-ten mejor la peste que los del grupo A. Son, pues, los peores azaresde la resistencia los que nos han hecho nacer despus de una seriede enfrentamientos y desastres.

En igual direccin han operado las enfermedades hereditarias

como filtro selectivo. Son, pues, las causas genticas persistentes ylas causas naturales las que mueven la seleccin.

4. LA CUESTIN DEL ORIGEN DEL UNIVERSO,DE LA VIDA Y DE LA MENTE: LAS TRES ETAPAS

DE LA EVOLUCIN

El hombre est en medio de la creacin,

entre la materia y el espritu,entre el tiempo y la eternidad

SANALBERTOMAGNO

Ya hemos mencionado que son tres las etapas o niveles distinti-vos de la evolucin, proceso que se inicia con lacosmognesis,haceunos 14 mil millones de aos, seguida de un nivel biolgico o bio-gnesis que comenz hace 3.500 millones de aos, proceso en elcual se origin la vida. En la tercera y ltima etapa onoognesis,

se desarroll la mente humana hace un milln y medio de aos,


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dando origen a la aparicin del pensamiento lgico y la concienciavalrica, atributos propios del ser humano (16) (Fig. 2).

FIGURA 2. Las tres etapas de la evolucin.

Los 3 Los 3 Inicioniveles constructores

Creacin (millonessucesivos de la de materiales y aos)

Evolucin formas

La materiaCosmolgico Big Bang (tomos, 13.600

molculas)

Genes-Vida

Biolgico ADN(reproduccin,

3.500energa,

informacin)

PensamientoLa mente lgico

1,5Noolgico humana concienciavalrica

4.1. Etapa de cosmognesis: el Big Bang y la creacin4.1. del Universo (hace 13.600 millones de aos)

Debemos simplificar las cosas lo ms posiblepero no ms

A. EINSTEIN

Se inicia hace 13,6 mil millones de aos con una gran explosincuando, en medio de la nada, se produjo una luz muy brillante y uncalor enorme (energa) que bordeaba lo infinito, as como una ma-teria de mxima concentracin con radio casi cero. Esta hiptesis dela explosin inicial se ha denominado tambin Big Bang o hi-ptesis del tomo primitivo. El universo tuvo entonces una fasemuy caliente, superior a un billn de grados, y muy densa (superiora 100 kg/cm2) y comenz a expandirse de manera brusca (Big Bang).

Desde entonces el universo no ha cesado de expandirse y enfriarse


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al mismo tiempo que aparecan partculas y antipartculas que, auna velocidad vertiginosa, aparecan y desaparecan. Cuando la tem-

peratura del universo descendi a 3.000 millones de grados, los pro-tones y los neutrones presentes se condensaron originando ncleosde deuterio y luego de helio (Fig. 3).

As el Big Bang se constituy en el creador de las materias primasal generar los pilares bsicos para la formacin de todos los elemen-tos qumicos, evolucin qumica que necesariamente precedi a laaparicin de la vida en los inicios de la evolucin biolgica. Estosestudios se han visto fortalecidos con los aportes de los fsicos y

stos, a su vez, con los descubrimientos de los cosmlogos.Es el caso de la unificacin de las teoras sobre la energa y la

materia. Esta unificacin llev de manera natural a la equivalenciade los conceptos de masa (m)y energa (E),pero mediada por unfactor de conversin relacionado con la velocidad de la luz (c). Laequivalencia se expresa por la clebre ecuacin E = mc2, establecidapor Einstein en su teora de la relatividad, que revolucion las no-ciones fsicas de espacio y tiempo y la interconversin entre masa yenerga, fundamental al momento de analizar el proceso de creacin

del Universo.

De igual importancia ha sido la teora de la cosmodinmica cun-tica de Gell-Mann, que explica la contribucin de las partculas for-madas porQuarks:los protones y los neutrones estn formados porpartculas ms elementales denominadas quarks con la interaccinde Gluones(la denominacin de gluones se debe a glue, pegamen-to en ingls, los cuales mantienen cohesionados a los quarks dandoforma a protones y neutrones, teniendo cada protn tres quarks que

se mantienen unidos por gluones).Poderosos aceleradores de partculas, como el de Brookhaven en

EE.UU. y el europeo CERN, han reconstruido la situacin de lamateria cuando el Big Bang apenas haba estallado y el universocomenzaba a expandirse en una masa informe denominada plasma.As, se ha logrado provocar experimentalmente una tremenda coli-sin de ncleos de oro (iones formados por neutrones y protonesdesprovistos de sus electrones) al impulsarlos en un acelerador li-neal hasta alcanzar una velocidad prxima a la de la luz, dandolugar a partculas altamente energizadas las que luego se sometieron


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a rfagas de ondas de radio. A continuacin, las partculas se divi-dieron en grupos que se hicieron correr en direcciones opuestas en

los anillos de un acelerador de partculas. Con ello, los fsicos logra-ron retratar la materia tal cual estaba en el momento en que eluniverso haba completado una diezmillonsima de segundo. El ra-diotelescopio CBI (Cosmic Background Images) en el desierto deAtacama, en el Norte de Chile, est contribuyendo al estudio de losprimersimos momentos que, despus de esos 13.600 millones deaos, llegan hasta nosotros.

La calidad de los cielos chilenos facilita los estudios astron-micos que derivan en nuevos aportes cosmolgicos. Es as como un

equipo de astrnomos europeos que trabajan con el Very Large

FIGURA 3. La cadena nuclear en la Cosmognesis.


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Telescope (VLT) en el observatorio de Paran, en la II Regin deChile, inform que la Va Lctea tiene 13.600 millones de aos, con

un margen que oscila alrededor de 800 millones de aos. Esto fuedeterminado al medir la cantidad del elemento berilio en dos estre-llas que forman parte de lo que se conoce como grupo globular. Elcontenido de berilio en las estrellas aumenta con el tiempo, de ma-nera que ste puede ser usado como un reloj csmico para calcu-lar sus edades. sta es la primera vez que se obtiene una precisinindependiente para este valor numrico fundamental.

Otra contribucin corresponde al profesor de astronoma Mark

Whittle, de la Universidad de Virginia, quien descubri que las on-dulaciones que constituyen las variaciones leves de la densidad dela materia donde se forman las estrellas y las galaxias podran versecomo ondas sonoras de rebote cuando el universo tena slo 380.000aos. Whittle desplaz hasta el rango audible por el hombre esasondas sonoras, que no podan ser apreciadas por el odo humano,usando modelos computarizados para generar las cuerdas csmi-cas desde la creacin hasta el primer milln de aos, que l con-dens en cinco segundos como un acorde de un motor de un avin

a chorro.As como los fsicos han profundizado cada vez ms en el origen

del cosmos, lo mismo han hecho los bioqumicos y los bilogos mo-leculares respecto al origen de la vida.

4.2. Etapa de biognesis: el ADN y la aparicin de la vida4.2. (hace 3.500 millones de aos)

La propia lucha hacia la cumbrebasta para henchir el corazn de un hombre.

Hay que imaginar a Ssifo dichoso

ALBERTCAMUS(Le mythe de Sisyfo)

La teora de la evolucin por seleccin natural de Darwin es lamejor alternativa para explicar cmo llegan las partes de los organis-mos a tener funciones. Dicha teora de Darwin se resume en que, dada

una poblacin de entidades con las propiedades de multiplicacin,


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variacin y herencia, y dado que algo de la variacin afecte al xito deesas entidades en la supervivencia y en la multiplicacin, entonces esa

poblacin evolucionar, es decir, la naturaleza de sus entidades cons-tituyentes cambiar con el tiempo. Si la herencia fuese exacta, el cam-bio evolutivo acabara disminuyendo y terminndose; la continuacinde la evolucin requiere que la herencia sea inexacta, de modo quesurjan nuevas variantes de vez en cuando (17).

Tras un silencio relativo originado a comienzos del siglo XX eldarwinismo, bajo la forma denominada neodarwinismo o teorasinttica de la evolucin, se convirti en la doctrina universalmente

aceptada de la biologa, avalada por nuevos tipos de pruebas ecol-gicas, paleontolgicas, genticas y embriolgicas. Esta concepcinevolucionada de la bisfera emergida de las diferentes pruebas plan-teaba, sin embargo, la interrogante relativa al origen mismo de la

vida en nuestro planeta (18), situacin que, en lo principal, conside-raremos a continuacin.

La etapa de cosmognesis haba provisto las molculas y con-diciones para posibilitar el desarrollo de la vida (biognesis). Laevolucin qumica haba generado mediante los elementos C, H, O,

N, etc., los compuestos orgnicos (aminocidos, bases purnicasy pirimidnicas, etc.) que habran permitido el escenario que hizoposible, ms adelante, la sntesis de cidos nucleicos, pptidos y,a la postre, protenas con funciones de creciente especificidad deaccin (enzimas, protenas contrctiles, etc.) hasta la generacinde seres vivos desde una clula o un microorganismo primitivo hastael hombre.

El primer paso hacia la vida lo constituy la generacin qumica

de compuestos orgnicos, es decir, compuestos que contienen carbo-no. Al comienzo, el oxgeno estaba ausente de la atmsfera primitivapor lo que los compuestos orgnicos, que reaccionaron fcilmente,pudieron formarse de manera ms expedita.

El escenario clsico para explicar el origen de la vida surgi dela proposicin de Oparin y Urey al plantear que al comienzo existiuna atmsfera reductora en la cual se pudo producir sntesis or-gnica. S. Miller y colaboradores demostraron que, bajo esas condi-ciones y con un adecuado aporte de energa, se poda producir un

conjunto de unidades de construccin para originar la vida. Qui-


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zs estos compuestos orgnicos, suplementados con aportes adicio-nales provenientes de material de impacto extraterrestre, se acumu-

laron en el ocano para formar una rica sopa prebitica de la cual,de alguna manera, evolucion la vida.

La mayora de los investigadores considera un prerrequisito elque se desarrollara un sistema gentico capaz de evolucionar paraproducir la aparicin del metabolismo. El descubrimiento de RNAcataltico por T. R. Cech (19) pareci resolver el par de problemasrelacionados con la catlisis y con los genes. Se vio que el RNA, conunas cuantas coenzimas, podra haber manejado tanto el metabolis-

mo primitivo como su propia replicacin.La hiptesis de la sopa primigenia entr en dificultades por lo

que se propusieron alternativas. Cairns-Smith propuso los cristalesde arcilla como una superficie informacional gentica prebiticasobre la cual podra haberse iniciado un primitivo metabolismo,considerado en trminos generales. Otras propuestas fueron que laenerga de tiosteres precedi a la energa de enlaces de fosfato paraposibilitar varias reacciones endergnicas (por ejemplo, la sntesisde pptidos). Una de las teoras ms detalladas sobre los orgenes delmetabolismo se debe a G. Wachtershuser, la cual postula que una

versin arcaica del ciclo reductivo autotrfico del cido ctrico, im-pulsado por la formacin de pirita y contenida en la superficie de lapirita resultante constituy el primer ciclo metablico a partir delcual surgieron las vas metablicas centrales, inicialmente sin enzi-mas ni cidos nucleicos (20, 21). Una exposicin bastante completade estas alternativas se encuentra en el trabajo de Maden (20) y enel reciente libro del Profesor Athel Cornish-Bowden (22), en el quese analizan aspectos bioqumicos de la evolucin. El gran mrito deeste ltimo es que analiza las diversas soluciones propuestas para lasreacciones y secuencias metablicas para aportar luego la solucinptima a los problemas metablicos. Son igualmente valiosas lasadaptaciones de accidentes del proceso evolutivo.

Numerosas otras propuestas han aportado diversas solucionesposibles para reforzar la generacin evolutiva de seres vivos desdeuna clula hasta el hombre, biognesis que debe cumplir las trescondiciones clsicas: capacidad de reproduccin, aporte energtico

permanente y sistema de informacin externo e interno.


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El proceso fotosinttico, atrapador de la energa solar y transfor-mador de sta en energa qumica concentrada en las molculas

orgnicas, producidas a partir del material inorgnico (O2, H2, NH3,CO2, etc.), se convirti en el nexo e interdependencia fundamentalentre los reinos vegetal y animal a travs del ciclo del CO2/O2.

La evolucin impuso, pues,dos dictaduras moleculares, la genti-ca (ADN) y la energtica (fotosntesis), que hasta ahora el hombre nohaba podido modificar.

Existe una clara unidad estructural y funcional entre los diferen-tes seres vivos, en todo el abanico que va desde la bacteria hasta elhombre, pues muchas reacciones son bsicamente idnticas. El cdi-go gentico es el mismo y la maquinaria de traduccin de la informa-cin del ADN en protenas no difiere sustancialmente (este lenguajebioqumico comn es el que ha permitido la manipulacin e ingenie-ra genticas). A nivel molecular metablico se utilizan las mismascoenzimas; a nivel energtico, el ATP es la molcula universal para lastransacciones bioenergticas intracelulares de prcticamente todoslos seres vivos, como lo es la glucosa para las transacciones molecula-res. La existencia de universales bioqumicos moleculares y funciona-les constituye, pues, el fundamento unificador de todos los organis-mos vivientes.

La traduccin de un mensaje (informacin) lineal, como el delADN (secuencia de bases), en uno espacial o tridimensional, como elde las protenas (secuencia de aminocidos que determinan la confor-macin espacial) es, sin duda, uno de los ms relevantes aportes de laevolucin molecular. l posibilit que la informacin biolgica (hor-monas, neurotransmisores, antgenos, sustratos, moduladores alost-

ricos, etc.), al ser reconocida por receptores especficos, se tradujeraen funcin o accin biolgica. Los cambios conformacionales o alos-tricos en la estructura tridimensional de las macromolculas (princi-palmente protenas) se constituyeron en el proceso qumico clave quehizo posible la regulacin intracelular e intercelular.

El cambio conformacional une as el programa de informacingentica con el funcional, representado fundamentalmente por quie-nes ejecutan la accin (enzimas, receptores, protenas transportado-

ras, etc.) y determina las estructuras celulares, es decir, las protenas.


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Se fue imponiendo as, a travs de la evolucin, unplan maes-tro, universal, para todos los seres vivientes, desde las bacterias al

hombre. Los cuatro sistemas informacionales, gentico, endocrino,nervioso e inmunitario pasaron a constituir la unidad de los organis-mos pluricelulares complejos.

La evolucin biolgica cre tambintres sistemas de memoria:lagentica (ADN), la inmunolgica(formacin de anticuerpos especfi-cos) y la neuronal (esencial para el desarrollo de la mente en la etapa denoognesis). Las dos primeras toman nota del pasado de la especie ydel individuo, y la ltima, la neuronal, registra o recuerda los aconte-

cimientos de la vida de cada ser y sta, en ltima instancia, como diceF. Jacob, adquiri la capacidad de inventar el porvenir (13).

Se ha avanzado mucho en la confirmacin experimental de lasetapas propuestas para la biognesis primigenia, pero no se ha logra-do crear vida en el laboratorio. Al respecto, slo mencionaremos doshechos promisorios. Uno lo constituye la secuenciacin completa delgenoma ms simple conocido, el del Mycoplasma genitaliumpor elgrupo de Craig Venter en 1995. Este parsito de los tractos genital yrespiratorio humanos tiene un genoma de slo 580-kb de longitud. Porlo tanto, es razonable pensar en que esta secuencia genmica, la mspequea conocida de un organismo viviente, revele el conjunto mni-mo de genes necesarios para la vida independiente. Sorprende queeste microorganismo, que contiene un solo tipo de membrana, invier-ta 140 (30%) de sus 482 genes para codificar protenas insertas en lamembrana. Igualmente inesperada es la observacin de que alrededordel 4,5% del genoma sea utilizado para evadir la respuesta inmune delhusped mamfero. Adems, 117 secuencias de protenas del M. geni-talium(24%) no se corresponden con ninguna otra secuencia proteicade cualquier otro organismo. Se espera poder aclarar cul es la defini-cin de vida mnima completa desde el punto de vista molecular y sucomparacin con muchas otras especies, as como los mecanismos y

vas bioqumicos que se requieren para la vida.

El segundo aspecto de inters es el intento de crear vida artifi-cial (una especie de microorganismo sinttico) a partir de bio-rreactores vesiculares con capacidad de expresar genes. Estosbiorreactores consisten en pequeas vesculas sintticas parecidas a

una clula biolgica. Se construyen sus suaves paredes celulares em-


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hard de Chardin, la noognesis o evolucin de la mente (23). Repre-senta uno de los principales desafos de la biologa moderna, a la vez

que su ms grande potencialidad y promesa.

La hiptesis darwinista de la adquisicin gradual de las faculta-des superiores de la mente asentadas en el cerebro, estn apoyadaspor datos provenientes de la arqueologa (pruebas indirectas) y porla anatomofisiologa (pruebas directas). La mente humana es unafuncin del cerebro y no una entidad totalmente diferente a la cualse suele identificar con un sustrato no material.

El hombre, en relacin a otros animales de igual peso corporal,

posee un cerebro de mayor tamao. En el uso comparado con susparientes ms prximos de hoy, los chimpancs y los gorilas, elcerebro del hombre es ms voluminoso, compartiendo incluso conestos antropoides hasta casi un 99% de identidad en su ADN.

Cmo y por qu nuestra capacidad cerebral ha aumentado tantoy tan rpido en el curso de los ltimos millones de aos?

El estudio de la evolucin de la capacidad craneana de los hom-bres en el curso de los ltimos cuatrocientos millones de aos mues-

tra que dicho volumen se ha estabilizado hace cien mil aos.

Se ha propuesto que dicha fase de estabilizacin del volumen ce-rebral del hombre se acompa de: 1) una reorganizacin funcionaldel cerebro, 2) economa en energa, y 3) una modificacin anatmi-ca general y un desarrollo de una adecuada agudeza auditiva, liga-dos principalmente a la evolucin del lenguaje, fundamental en laevolucin de la mente.

4.3.1. Paleontologa del cerebro humano: la evolucin econmica4.3.1. del lenguaje

Cundo y cmo surgi la palabra?

La invencin y perfeccionamiento de un lenguaje simblico pornuestros ancestros no solamente permiti grandes progresos en laorganizacin social de nuestra especie (especialmente para la caza)sino que adems aceler notablemente su evolucin cultural y tcni-

ca. El cerebro del primer hombre capaz de hablar deba poseer al


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menos un esbozo de las dos reas implicadas en el lenguaje: el reade Broca, vinculada a su expresin, y el rea de Wernicke, ligada a

la comprensin.

El rea de Broca no es ms que una pequea regin de la cortezacerebro-temporal. La importancia de esta regin cortical son lasmltiples conexiones modulables que la conectan con numerososotros sitios cerebrales implicados en otros circuitos, para formaruna red neuronal plstica muy compleja que nos permite aprendery dominar un idioma, comunicarse socialmente y de manera lgica,

valrica y trascendente en funcin de lo aprendido en la proyeccin

al futuro con la experiencia del pasado.El lenguaje y el desarrollo de la mente surgieron por la necesidad

de intercambiar y de transmitir conocimientos, necesidad que seacenta a medida que se van formando grupos sociales.

Desde el punto de vista anatmico general (no cerebral) esta inven-cin no ha significado ms que una muy modesta modificacin ana-tmica: el descenso de la laringe que constituy un avance cognitivoconsiderable, realizado con poco gasto, tanto en el plano fisiolgico

(necesidades energticas) como en el anatmico (modificacin delesqueleto). El perfeccionamiento de esta invencin econmica yadaptativa ha debido ser favorecida considerablemente por la selec-cin natural, en vez de un adicional crecimiento costoso y problem-tico del cerebro. El cerebro humano se reorganiza as logrando unamejor comunicacin social y un mejor manejo de los conceptos eideas, aplicaciones adaptativas mltiples y ventajosas (24).

Pero si el cerebro viene siendo como la centralita del lenguaje(as como del resto de las funciones del cuerpo humano) la laringees su rgano de fonacin, junto a la faringe, los labios, la boca y lascuerdas vocales (estas ltimas se encuentran dentro de la laringe).Es la posicin excepcional de la laringe humana en la parte baja delcuello lo que permiti la aparicin de un lenguaje desarrollado comoel del hombre, ligado al surgimiento maravilloso de la mente y supotencialidad.

En los mamferos, a excepcin del hombre, la laringe se sita enla parte alta del cuello, lo cual les facilita el poder beber y respirar

al mismo tiempo, pero les impide producir una gama de sonidos tan


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amplia como la humana, ya que su cavidad farngea, que sirve decaja de resonancia, es ms pequea.

La peculiar posicin de la laringe en el hombre se debe a que,hace cerca de 2 millones de aos, el clima se torn excesivamenteseco, lo cual forz al homnido africano, precursor del hombre ac-tual, a tener que estirar el cuello para poder respirar mejor. Se fueproduciendo as un aumento en la longitud del cuello y un descensogradual de la laringe, que es lo que determin, junto a un aumentode la agudeza auditiva, la evolucin del lenguaje humano, ntima-mente ligado al desarrollo de la mente. Como el estudio de las larin-

ges pretritas no es posible, por tratarse de tejido blando que no sefosiliza, Laitman (EE.UU.) obvi el problema al demostrar que laforma de la base del crneo depende de la posicin de la laringe,base que es plana en los mamferos excepto en el hombre modernoen el que es arqueada. As, una base craneal lisa significara incapa-cidad para hablar (caso delaustralopiteco) y, por el contrario, diver-sos grados de curvatura indicaran inclinaciones variables de la fa-cultad del lenguaje. El crneo delHomo erectus(que vivi hace cercade 1.600.000 aos) presenta un grado de curvatura muy similar a la

de un nio actual de seis aos, lo que se interpreta como que yapodra expresarse con una gama de sonidos bastante amplia, peroera incapaz de pronunciar algunas vocales como u, a, i.

Adems hay que mencionar el hueso hioides, situado en la reginposterior del suelo de la boca de donde arrancan varios msculos dela lengua y otros que elevan la laringe.

Es importante sealar el gran aporte de los paleontlogos es-paoles, particularmente de J. L. Arsuaga e I. Martnez Mendizbal,

de la Universidad Complutense de Madrid y de la Universidad deAlcal de Henares, respectivamente. Sus investigaciones se han rea-lizado en los yacimientos cuaternarios de la Sierra de Atapuerca,cercana a la ciudad espaola de Burgos, que conserva el ms com-pleto registro fsil de Eurasia. Desde 1999 se han encontrado alre-dedor de 3.000 fsiles humanos de casi 300 mil aos de antigedad,antecesores de los neandertales, lo que permite por primera vez enla historia de la paleoantropologa, estudiar un grupo humano (25).


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4.3.2. Gentica evolutiva del cerebro humano: desarrollo de odo,4.3.1. olfato y lenguaje

Se ha establecido que modificaciones en los genes del odo, delolfato y del lenguaje constituyeron el impulso decisivo de la ventajadel hombre en relacin a su primo menor, el chimpanc, de acuer-do a una comparacin minuciosa del genoma casi idntico de ambasespecies que realizaron cientficos norteamericanos encabezados porMichele Cargill (26).

Las secuencias de los ADN del hombre y del chimpanc son se-

mejantes en un 99%, a pesar de lo cual estas especies se diferencianpor el modo distinto en que regulan la expresin de sus genes. Apa-recieron as discrepancias importantes como el lenguaje, la longitudde los brazos, el vello, la capacidad de trepar y otros. Estos cambiosgenticos correspondieron a desafos completamente distintos a losque se vieron enfrentadas estas especies, los cuales ayudaron a me-

jorar, en la misma proporcin, sus posibilidades de supervivencia.As, por ejemplo, el mejoramiento del sentido del olfato habra in-fluido en la evolucin humana en cuanto a la alimentacin y la

eleccin de pareja. Los investigadores se concentraron en los 7.600genes comunes a ambas especies comprobndose, sin embargo, que1.547 genes humanos mutaron con mayor frecuencia contra 1.534de los chimpancs. De ah deriva la evolucin humana, que ademsde mejorar el sentido del olfato, mejor tambin el del odo facili-tando el desarrollo del lenguaje. En cambio, en el chimpanc, lasmutaciones modificaron la estructura del esqueleto facilitando suagilidad para trepar a los rboles y el aumento del vello que aumen-t la proteccin a los agentes externos (lluvia, etc.). El estudio mos-

tr tambin que, desde el ltimo antepasado comn, se modific enel hombre y en el mono uno de cada diez genes. As, de 78 genesresponsables del metabolismo de las protenas, mutaron 11, pero notodas estas mutaciones representaron una ventaja evolutiva, puesalgunas se tradujeron en desventajas: 7 de esos 11 genes son cono-cidos por su accin patgena.

Un hecho de gran inters en el estudio realizado por Cargill ycols., confirma tambin la importancia de un factor de transcripcinrecientemente descubierto, el Forkhead-Box-P2, que interviene enel desarrollo del lenguaje. Este factor ha experimentado muchas mo-


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dificaciones en el genoma humano, lo cual no es habitual. Con igualfrecuencia mutaron tambin en el hombre los genes relacionados

con la comprensin del lenguaje hablado (26).

Otro ejemplo ilustrativo es la mutacin del gen MYH16, hace yams de dos millones de aos, gen del cromosoma humano 7q22 quecodifica para una protena de la musculatura mandibular correspon-diente a un tipo de miosina. Como los cambios de la musculatura delesqueleto influyen sobre los huesos que sostienen, el debilitamientotensional del mencionado tipo de miosina permiti que los huesosdel crneo se volvieran ms grandes, posibilitando a su vez un cere-

bro ms voluminoso y de mayor potencialidad, cosa que no ocurraen el mono (27).

4.3.3. La relacin mente-cerebro: la ruta del pensamiento4.3.1. y de la creatividad

Hace tres siglos, Ren Descartes consider a la mente como unaentidad extracorprea que se expresaba mediante la glndula pineal.

El filsofo francs estaba equivocado en cuanto a esa glndula, perosuscit un debate en la relacin mente y cerebro al querer explicarla forma en que la mente inmaterial influye sobre el cerebro y rec-procamente. Descartes no poda saber en ese tiempo que la maqui-naria del cerebro est construida y mantenida conjuntamente porgenes y experiencia y, por supuesto, desconoca que la persona ac-tual es consecuencia de millones de aos de evolucin. Es la selec-cin natural la fuerza motriz de la evolucin y la responsable de que,a diferencia de un computador, la construccin del cerebro no obe-

dezca a propsito especfico ni a principio concreto de diseo.Cmo da cuenta el cerebro del misterio de la imaginacin hu-

mana, de la memoria y de los estados de nimo? Para estudiar estosproblemas, es conveniente considerar a la mente como una sucesinde procesos mentales, en lugar de una sustancia o un espritu. A me-nudo se establece, adems, una identidad entre mente y conciencia,considerada esta ltima como un sentido de percepcin y conoci-miento de uno mismo. Por otra parte, la mente no est limitada a laconciencia ni a la corteza del cerebro. As, los anhelos, los estados

de nimo, los deseos y las formas de aprendizaje subconsciente han


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de ser considerados, en un sentido amplio, entre los fenmenos men-tales. Tanto los afectos como el pensamiento consciente dependen

de la funcin neuronal (el cerebro contiene alrededor de cien milmillones de neuronas). Parte importante de la complejidad cerebralse basa en la diversidad de tipos de neuronas. En cuanto al lenguaje,podra ser entendido como un sistema tripartito constituido por laformacin de palabras, la representacin de conceptos y la media-cin entre ambos. El lenguaje habra evolucionado para ser un ins-trumento de comprensin y comunicacin eficiente de conceptos yla dilucidacin de su estructura anatmico-funcional permitira lle-gar al centro mismo de la naturaleza de lo mental.

El futuro de la neurociencia cognitiva depende de nuestra capaci-dad para el estudio del cerebro vivo. En este aspecto, se ha avanzadogracias a la tomografa por emisin de positrones (TEP), as como porla confeccin de imgenes mediante la resonancia magntica (IRM),metodologas que representan una promesa basada en que son tcni-cas no invasivas y estn fundadas en el estricto acoplamiento entre laactividad neuronal, el flujo sanguneo regional y el consumo energti-co. Los acontecimientos mentales presentan una correlacin con se-

ales elctricas. Ser, pues, la mente una propiedad emergente de laactividad elctrica y metablica del cerebro? (28, 29).

Mente, alma, espritu, psique, son las palabras con las cuales sedesigna aquello que en la persona es diferente del cuerpo llamadoorgnico. Es decir, que la parte espiritual es distinta del cuerpo ensu naturaleza, pero que forman un solo todo que constituye la per-sona, es decir, el ser humano. Esto, a menudo, suscita algunos pro-blemas respecto a creencias religiosas pero, en general, podemosdecir que el alma es el principio espiritual e inmortal, capaz deentender, querer y sentir, que informa al cuerpo humano constitu-yendo con l la esencia del hombre, el constituyente de la vida queanima a la materia.

En psicologa el trmino mente es sinnimo de conciencia oespritu (conjunto de hechos psquicos observables). El espritu, enun sentido actual y general, representa la realidad pensante, presen-te en cada sujeto individual, pero sin su subjetividad y opuesto a lomaterial y, en lo teolgico, vendra a ser lo opuesto a la condicin

finita y dbil del ser humano. La tradicin escolstica designaba


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tambin al espritu como la parte que piensa en el hombre, y latradicin occidental cristiana se refera al alma como la parte es-

piritual de las dos que componan al hombre (cuerpo y alma).

Por ltimo y en un intento por aclarar algo ms estas defini-ciones, la Academia de la Lengua ha definido a la mente como lapotencia intelectual del alma (pensamiento, propsito, voluntad) y,en psicologa, representara el conjunto de las actividades o procesospsquicos conscientes e inconscientes, con lo que el alma humanapasara a identificarse, en parte, con la psique.

Desde tiempos muy antiguos, se ha pensado que en la mente o

psique existen varios valores o expresiones. Entre estos valores, po-demos mencionar los siguientes: la inteligencia, la memoria, la con-

ciencia, el criterio, el juicio, el sentido moral, el discernimiento, lavoluntad, los sentimientos, la imaginacin y la fantasa. A decir deS. Garretn (30), del conjunto de todos estos valores y de sus infi-nitas combinaciones y coordinaciones, surge al exterior, bajo la for-ma de palabra hablada o escrita, el pensamiento. Dada esta com-plejidad y con sobrada razn, se ha dicho que cada mente humanaes un mundo propio, el cual se construye con nuestras sensaciones,

percepciones y memorias en el maravilloso rgano que es el cerebrohumano, el cual no slo es capaz de pensar sino que, adems, puedecoordinar los dedos de un pianista o crear un paisaje tridimensionala partir de la luz que incide sobre una retina que es bidimensional.

5. GENES, AMBIENTE Y COMPORTAMIENTO:LO QUE NOS HACE SER HUMANOS

El hombre, pues, no como centro estticodel mundo, sino como eje y flecha de la evolucin,

lo que es mucho ms bello

TEILHARDDECHARDIN

La naturaleza humana es una mezcla de los principios generalesde Darwin, la herencia adquirida, los instintos o impulsos, los genes,las leyes de la herencia, los reflejos condicionados, el entrenamien-to, las asociaciones, la historia personal, la experiencia formativa, la

realidad de los hechos sociales, la cultura, el desarrollo con la imi-


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tacin del aprendizaje y la creacin de lazos afectivos descrita porK. Lorenz.

Si bien todos estos fenmenos confluyen en la mente humana yconstituyen la naturaleza del comportamiento del hombre, no seracorrecto situar todos estos fenmenos como un espectro que va desdelo gentico a lo ambiental, pues hay que entender los genes si es quese desea comprender cada uno de los fenmenos mencionados.

El paradigma biolgico dominante durante la penltima dcadadel siglo XX (1980-1990) lo constituy la mxima importancia atri-buida a los genes en la especificidad de numerosas acciones fisiol-gicas, patolgicas, conductuales, antropolgicas, etc., atmsfera quecontinu con la proliferacin de noticias relativas a los avances enla clonacin y funcin atribuida a los genes. El clmax lo protagoni-z Craig Venter al anunciar en febrero de 2001 la secuenciacin deprcticamente los 30.000 genes que contiene el genoma humano,fortaleciendo una corriente reduccionista que atribuye al genomahumano la clave de nuestra condicin humana. Paralelamente, ungrupo de destacados cientficos considera un error el enfoque 100por 100 reduccionista, pues los genes actan en el contexto del or-ganismoin toto,entero, y tambin del entorno (ambiente). Los actoshumanos residen tanto en la herencia como en el ambiente, temacentral desarrollado magistralmente por Matt Ridley en su libroQu nos hace humanos? (3). Su postulado es que tanto la natu-raleza (herencia) como el ambiente explican en su interaccin laconducta humana y una voluntad libre influida por el instinto: ge-nes, cultura, experiencia (entorno). No se trata ya de la herencia onaturaleza frente al ambiente sino de la herencia a travs del am-biente.

Jean Piaget, notable psiclogo, pedagogo y bilogo suizo queestudi la inteligencia humana y el desarrollo mental del nio, ela-bor una epistemologa de tipo gentico (una teora del conocimien-to cientfico basada en el anlisis de su propio desarrollo en el nio).Postul que las estructuras mentales necesarias para el desarrollointelectual venan determinadas genticamente, pero el proceso porel cual se desarrolla el cerebro que est madurando requiere infor-macin sobre el resultado de la experiencia y la interaccin social

(su ambiente). K. Lorenz fue defensor de lo gentico (naturaleza) y


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R. F. Skinner, del entorno. Piaget eligi prudentemente el caminodel medio y fue el primero en tomar en serio la cuarta dimensin de

la naturaleza humana: la dimensin temporal (3).

Los genes permiten que la mente aprenda, recuerde, imite, esta-blezca lazos afectivos, absorba cultura y exprese instintos. No son nimaestros de tteres ni planes de accin ni tampoco son solamenteportadores de la herencia. Permanecen activos durante toda la viday se activan y desactivan mutuamente para responder al ambiente ya la experiencia. Como bien dice Ridley, constituyen causa y con-secuencia de nuestras acciones pero, a pesar de su inevitabilidad y

poder, no cabe duda de que los genes no estn en contra de los par-tidarios del papel del entorno sino, ms bien, de su parte (3, 31).

Los genesbox,cuya funcin es trazar el plano del cuerpo durantesu desarrollo precoz, codifican para los factores de transcripcin,que son protenas que se unen a una regin especfica del ADN lla-mada promotor, la cual est en una posicin anterior al propiogen. Los promotores actan como interruptores, permitiendo que seexprese o no el gen correspondiente. Es en los promotores, segn

Ridley, donde los cientficos esperan encontrar la mayor parte delcambio evolutivo en animales y plantas (31).

Se concluye que la evolucin de las especies es una diferencia degrado, no de clase, y sorprende el que los animales evolucionen adap-tando los interruptores situados en el exterior de los genes (promo-tores, etc.). Se puede as estimular la expresin de un gen cuyo pro-ducto estimula la expresin de otro gen el cual suprime, a su vez, laexpresin de un tercero, y as sucesivamente. En esta pequea cadenase intercalaran los efectos de la experiencia. Algo externo como laeducacin, la alimentacin, una ria, un frmaco, una carencia bio-qumica o un amor correspondido, por ejemplo puede influir en unode estos interruptores o promotores. De repente, el entorno puedeempezar a expresarse a travs de la naturaleza (los genes).

As es como se puede explicar que una criatura tan paradjicacomo el ser humano pueda tener una voluntad libre y, a la vez, estarinfluido por el instinto, la cultura y el ambiente. Ah yacen las racesdel comportamiento humano y cmo los genes crean cerebros para

adquirir experiencia (3).


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La evolucin hasta los homnidos se produjo a travs de la adap-tacin de los promotores de genes ms que de los propios genes,

como se explic anteriormente respecto al agrandamiento del crneoy el consiguiente aumento del tamao del cerebro humano.

5.1. Ejemplos gentico-moleculares de lo que nos hace5.1. humanos

La atencin de la Humanidad debe volverse, de las mquinas yla materia inanimada, al cuerpo y al alma del hombre.

Realmente el hombre est por encima de todas las cosasA. CARREL

a) El instinto maternal de amamantar a las cras

La Doctora Brown y cols. demostraron que, si se bloquea (me-diante la tcnica del knock out) el gen de la protenafosB del cerebrodel ratn hembra, despus de parir estos ratones dejan de amaman-

tar a sus cras y las rechazan, lo cual demuestra la importancia delgen fosB para una conducta maternal normal. Este gen es un factorde transcripcin que activa la expresin de otros genes especficosen respuesta a determinados estmulos externos. Esta prdida delinstinto maternal no se debe a una falla cognitiva pues, en las hem-bras normales que han parido, el estmulo lo constituyen el olor y la

vista de sus cras recin paridas (su entorno). Se ha observado que,en esta circunstancia, es en la regin preptica del hipotlamo don-de se sintetiza la protena fosB y que, en las hembras que no la

producen y que han parido, el estmulo que les provoca la vista y/oel olor de sus cras recin paridas no basta para producir una lactan-cia normal, pero s cuando se repone el gen. Esto ha abierto uncampo de investigacin muy estimulante para el estudio y correc-cin de trastornos en la expresin del comportamiento en nuestraespecie y en particular de las fallas en la lactancia humana pues elgen fosB existe tambin en humanos y tiene una estructura muyparecida a la del gen de la rata (32).


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b) Transformacin transgnica de un ratn polgamob) en mongamo: un caso de neurobiologa del amor

William James estimaba que el amor es el ms fuerte de losinstintos y algunos han postulado que debe haber algn factor here-ditario que d lugar a un cambio fsico-qumico en nuestros cerebroscuando nos enamoramos y que es ese cambio y no al revs el queproduce la emocin de enamorarse. Tom Insel y cols. (33) han plan-teado que la conducta sexual est relacionada con la accin de lashormonas oxitocina (ox) y vasopresina (vp) en sus respectivos recep-tores del sistema lmbico cerebral. Esta situacin se da en el ratn

de campo, que constituye una rareza entre los ratones debido a sufidelidad conyugal: viven en pareja, son mongamos y tanto la ma-dre como el padre cuidan de las cras durante muchas semanas. Encambio, los ratones de monte son mamferos ms tpicos: la hem-bra se aparea con un macho polgamo que est de paso y enseguidase separa de l; pare a sus cras sola y, pocas semanas despus, lasabandona para que se valgan por s mismas. Los investigadoresdemostraron el aumento del nmero de receptores lmbicos para oxen la hembra del ratn de campo y de vp en el macho y, adems, que

en la mitad del promotor de ambos receptores existe una porcin detexto adicional de 460 pares de bases. Ninguna de estas situacionesexiste en el ratn de monte lo que explica la diferencia conductualcon los de campo. Adems, Insel produjo un ratn transgnico apartir de un ratn de monte (polgamo) al cual le alarg su promotorasemejndolo al ratn de campo. Este ratn de monte transgnico sedesarroll con un cerebro como el del ratn de campo (mongamo),expresando los receptores de vp en los mismos sitios (palliumven-tral) (Fig. 4).

Se concluye que:

1. Para que un ratn de campo macho se empareje debe tenervp y receptores de vp en supalliumventral: el resultado de estimularla expresin del gen del receptor es facilitar la creacin de preferen-cia por una pareja, o sea hacer que se enamoren. En el caso dela hembra, se requiere de ox y receptores de ox en la amgdalamedial. La ox ayuda a la memoria social, a no olvidar el aspecto del

cnyuge con el cual se emparej.


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Los receptores de ox que se expresan en la amgdala medial es-timulan el sistema dopamina con sensaciones de aprecio personal

hacia la persona amada.

2. Puede ser que la capacidad de un roedor para formar unaunin duradera con su pareja sexual dependa de la longitud de unaporcin de texto de ADN en el promotor de un cierto gen receptor.A su vez, esto decide precisamente qu partes del cerebro expresarnel gen.

& %

Tipo de receptor Rox Rvp

Promotor porcin texto de DNA porcin texto de DNAadicional adicional

Ubicacin amgdala medial palliumventral

N. de Receptores alto alto

preferencia por una preferencia por una

Efectos pareja (monogamia) pareja (monogamia),memoria social agresividad

FIGURA 4. Participacin de los receptores cerebrales de las hormonas Oxitocina yVasopresina en la conducta sexual del ratn de campo.

Un ratn y un ser humano comparten gran parte de su genoma;la oxitocina y la vasopresina son idnticas en ambas especies y seproducen en ambos casos en lugares equivalentes del cerebro; los

receptores para estas hormonas son prcticamente idnticos enlas dos especies y se expresan en partes equivalentes del cerebro; losgenes de estos receptores humanos poseen, en su parte promotora,igual que en el ratn de campo, una insercin cuya longitud vara deun individuo a otro. Pero los ratones no son hombres y las extrapo-laciones de una especie a otra requieren confirmaciones adicionales.


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c) Conducta antisocial con manifestaciones de agresividad enc) jvenes debida a una baja actividad de la monoaminoxidasa-A

c) (MAO-A) cerebral

Otro ejemplo relacionado con el comportamiento humano y enel que participan los genes y el entorno es la expresin de rasgosconductuales con violencia, ligados al fenotipo en adultos jve-nes con un pasado de maltrato y abuso fsico, sexual o emocionalen su niez. El trabajo realizado por Moffitt y Caspi seala (34) laimportancia de los factores sociales y la participacin de un genparticular representado por cierta forma de la enzima MAO, deno-

minada MAO-A, la cual es de menor actividad y provoca, como con-secuencia, una anomala conductual de violencia al no poder degra-dar adecuadamente el exceso de neurotransmisores, no logrando unasatisfactoria comunicacin interneuronal. La conducta de hiperagre-sividad antisocial era mucho ms frecuente (el doble) en varones congenotipo asociado a bajo nivel de MAO-A y que haban sido maltra-tados en su niez.

d) Generacin de personalidades neurticas y depresivas

Una mutacin puntual (G192 A192) del gen correspondiente alFactor Neurotrfico Derivado del Cerebro (BDNF), que se traduce enun cambio de val66met66provoca la aparicin de una personalidadneurtica y depresiva. Para las dos copias del gen se tienen las si-guientes alternativas y los grados de neurosis:

met/met (+) met/val (++) val/val (+++)

Los met/met son claramente menos neurticos que los met/val yestos son, a su vez, sin duda, menos neurticos que los val/val (35).

As, los extraordinarios avances de la biologa molecular estndemostrando la presencia de determinantes genticos frente a la

vida, como lo seala tambin un estudio en 1.500 pares de gemelosidnticos con distinta formacin cultural, diferentes ingresos econ-micos, matrimonio, etc., que mostraron ms de un 90% de identidad

frente a la vida (actitud positiva o negativa, etc.) (36).


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Por otra parte, si bien somos casi un 99% idnticos genticamen-te a los chimpancs, hemos llegado a ser ms exitosos que stos por

nuestra capacidad inventiva, un talento derivado en gran medida porla adquisicin del lenguaje.

6. EL HOMBRE ANTE S MISMO Y DE CARA A LA TICA,LA CULTURA, LA CIENCIA Y LA TCNICA

La cultura es el conjunto de ideas vivasque el tiempo posee y de las cuales el tiempo vive

J. ORTEGA YGASSET

La evolucin del hombre ha corrido pareja con el desarrollo dela cultura y la generacin de la ciencia y la tcnica. Las ideas quegeneran la cultura son producto del encuentro del hombre consigomismo, con su mundo interior. Es el nico animal que encontr ens mismo el mundo interior y, a partir de sus ideas sobre ese mundoy sobre su entorno, desarroll la cultura. Del mismo modo, de su

observacin y pensar fue surgiendo la ciencia como el conocimientocierto de las cosas por sus principios y causas, actividad progresiva-mente acumuladora no slo en las ciencias exactas y naturales, sinotambin en las humanas. Estas ltimas, acompaadas de un sentidotico, han buscado constituirse en la herramienta primordial paranivelar las enormes diferencias sociales y econmicas que genera larevolucin cientfico-tcnica la cual va acompaada de una revolu-cin sociocultural. La Ciencia no es slosaber,es tambinhaceryes en lo que hace donde ha encontrado su espritu. Por otra parte,

el hombre impone reformas a la naturaleza con el fin de satisfacersus necesidades y de este creciente accionar surge la tcnica sin lacual el hombre actual no podra existir. l la ha creado como unasobrenaturaleza en un nuevo da del Gnesis. La tcnica se haconvertido en un gigantesco problema en el contexto afanoso desatisfacer las necesidades del hombre: contaminacin ambiental, ago-tamiento de recursos naturales, etc., situacin que exige una posturatica.

La historia del hombre, al igual que su conducta tica, la va

marcando una serie de revoluciones culturales, de evoluciones, por


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seleccin natural, con un poder explicativo que supera sus alcancesbiolgicos en las etapas del camino de la inteligencia y del vivir en

comunidad. Esto demanda el desarrollo sostenido de una biologadel maana en una triple dimensin: humana, biolgica y social,adems de las descripciones de los mundos fsico y cultural coexis-tentes con el biolgico. Se va configurando as un nuevo paradigmacapaz de explicar con mayor nitidez la realidad y sus repercusionesen temas tan cargados de discusiones y conflictos como los de lamoral, el mercado, la propiedad, etc. (37).

La revolucin cientfico-tcnica, que evoluciona paralelamente

con la sociocultural, no debe prescindir de una ciencia impregnadade profundo humanismo y moralidad: debemos aspirar no slo al

Homo sapiens (ciencia) y al Homo faber (tcnica) sino tambinal Homo humanusde Cicern y al Homo moralisde Aristteles. In-cluso en estos tiempos en que se estima que, en la lgica econmica,puede descansar la base del xito de la humanidad debido a lo de-cisivo, fundamental y dominante que se ha tornado en todas partesel punto de vista econmico, se habla de una variante del Homo

faber, el Homo economicus. ste no se contenta con slo satisfacer

sus necesidades, sino que se dedica adems a despertar necesidades(muchas veces bajo la consigna haz dinero, hijo mo!). SegnShogren y cols., de la Universidad de Wyoming, hay evidencias deque el comercio y la especializacin son las razones por las que el

Homo sapiens desplaz a sus antepasados y se constituy en la es-pecie dominante: no fueron ni las pinturas en cavernas ni las mejo-res puntas de lanza las que llevaron al H. sapiens a la dominacin.Fue un sistema econmico mejor, realizado hace 40.000 aos y quelos hombres de Neandertal no hicieron o al menos no hay prueba

alguna de que lo hubieran practicado.

El ser humano sigue evolucionando biolgicamente en un pro-ceso que es continuo y cuyas condiciones son la diversidad genti-ca y los cambios ambientales y, al igual que para las dems especies,si no es capaz de adaptarse a los cambios del ambiente su destinosera la extincin. Slo en el ser humano se puede llevar a cabo laadaptacin al ambiente por medio de la cultura y lo hace ms efi-cazmente que el mtodo biolgico por ser ms rpido y poderoso

que ste.


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El cerebro, fundamento de lo espiritual y lo cultural es, a fin decuentas, un sistema de construccin y proyeccin del ser humano

fuera de s mismo, una admirable mquina humana para la cons-truccin de ideas, cultura y mundo. Con su ejercicio nos hemosacercado as ,en el curso descriptivo de las pginas anteriores y atravs de la evolucin de la materia, de la vida y de la mente, a unconocimiento ms integrador del hombre y a su ascenso evolutivodesde una perspectiva que Pilato no pudo siquiera imaginar en su

Ecce homo, carente del profundo sentido valrico superior que en-cierra en s todo ser humano.

6.1. La relacin cuerpo-mente-espritu:6.1. la gran frontera biolgica

Malherbe ha introducido el concepto de integridadque define ala persona en su triple dimensin orgnica, psicolgica y simblica(corporal, psicolgica y axiolgica). La integridad, en cada parte, ac-ta por el bien del conjunto, lo cual es sinnimo de salud. La enfer-medad equivale a des-integracin, o ruptura de la unidad de la perso-

na en una o ms de las tres esferas: corporal, psicolgica y axiolgica,cada una con sus propias implicancias mdicas y ticas (38).

La teora escolstica tradicional afirmaba que el hombre era uncompuesto de cuerpo yalma, dos sustancias diferentes cuya interac-cin resultaba difcil de explicar a pesar de los esfuerzos de filsofosy telogos para encontrar una solucin que permitiera apoyar ymantener esta teora dualista.

La posicin monista de La Mettrie en el siglo XVIII era opuestaa la del dualismo. En su clsica obra El hombre mquinaconsideraal hombre como un todo orgnico, como una unidad. La importan-cia de esta concepcin reside en que por primera vez se hace depen-der la conducta humana, tanto en lo fisiolgico como en lo psicol-gico, del funcionamiento cerebro-mente, en consonancia con variosde los axiomas de la psicologa moderna contempornea (39).

Est toda la actividad de la conciencia determinada puramentepor un fenmeno biolgico? Es posible llegar a explicar toda la es-

piritualidad del hombre como una mecnica actividad neuronal? O


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es la conciencia responsable y trascendente, algo especial que slorequiere la actividad mental y la arquitectura neuronal como un

simple sustrato o elemento de expresin del espritu? En relacin aesto se aprecia un doble determinismo:

1. Un producto qumico puede recrear un pensamiento: efectopsicofarmacolgico (psicotropos).

2. La existencia de sistemas de pensamiento accesibles a la psi-coterapia en que el soporte neuronal no est sometido a ningunaaccin farmacolgica. Pero esto a su vez interfiere con mecanismosbsicos o elementales de regulacin que son sensibles a este tipo deaccin sin ser accesibles al trabajo psicoteraputico.

Parece preciso pensar que un producto qumico puede recrear unpensamiento de contenidos normales, lo cual obliga a repensar lasrelaciones cerebro-mente-espritu. Tres fuentes de informacin sonutilizables para este anlisis:a)efecto placebo, es decir, aquel pro-ducido por sustancias que carecen por s mismas de accin terapu-tica pero que producen algn efecto farmacolgico si el enfermo estconvencido de que s lo tiene;b)la comparacin entre medicamento

y psicoterapia, y c) la experimentacin (40).Lo esencial es admitir que a todo suceso o accin mental le co-

rresponde un suceso fisiolgico, es decir, que a todo estado mentalle corresponde un estado cerebral. Cuando se alteran los sistemascomplejos del pensamiento se desorganizaran las funciones

El hombre de hoy parece moverse entre dos grandes motivosextremos: el racionalismo extremo y lo sensorial (placer, etc.).

La historia de la Humanidad es, en muchos aspectos, la historiade sus ideas, la construccin de las cuales podramos llegar a com-prender en el cerebro de cada individuo en base al plan bioqumi-co-molecular unitario del organismo mediante la interaccin de re-ceptores y mediadores de seales internas y externas, que hoy en daconstituyen los dos niveles de accin de los procesos comunes.

Esta interaccin cuerpo-espritu es permanente, siendo los ner-vios los que dan las instrucciones a los dems rganos. Confirmaesto el que el espritu tenga alguna relacin con determinados atri-

butos fsicos. As lo indica la influencia del psiquismo sobre el esta-


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do inmunitario: una depresin psicolgica puede cursar a la par conuna depresin inmunolgica. Igualmente, los grandes disgustos pre-

disponen a enfermedades (asma, etc.).

Las investigaciones realizadas sugieren que, sin duda, existe unefecto del espritu sobre la salud, proceso en el cual las endorfinasseran mediadores moleculares importantes. Tambin apoyara estola analgesia promovida por hipnosis. Se enlaza as el mundo de laqumica y bioqumica con el de las sensaciones y las ideas: un ver-dadero poder creador de molculas ideolgicas.

Otro trnsito de inters es el que va del espritu a la cultura,

puesto que el cerebro es, a fin de cuentas, anlogo a un sistema deconstruccin y proyeccin del ser fuera de s mismo: una mquinade construir mundo (14, 41).

Cabe aqu mencionar la importantsima puerta que abriera elProfesor D. Ingvar en la conquista del ms fascinante de todos losnuevos continentes del ser humano: el cerebro, al lograr registros to-polgicos de lo que ocurre en este rgano mediante el seguimientode istopos radioactivos inyectados en la circulacin sangunea du-

rante la accin de pensar, descansar, mirar algo, etc. Fue el primerinvestigador en ver y registrar el momento en que piensa el cere-bro humano, mtodo que luego se perfeccion mediante las tcnicasde resonancia magntica nuclear(RMN) que han proporcionado ex-traordinaria informacin bsica y aplicada en medicina, etc. (29).

6.2. A manera de eplogo: la Ciencia y el futuro6.1. de la evolucin humana

Nada es ms temible quela ciencia sin conciencia

B. HOUSSAY

Ya en el transcurso del siglo XX la ciencia experimental no esms un simple medio de conocer y un cuerpo de saberes. Se ha con-

vertido en una manifestacin sociocultural importante que orienta lasuerte de nuestras sociedades. No se trata nicamente de descifrar

el mundo, sino tambin de transformarlo. A juicio de F. Jacob, el


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gran peligro de la Humanidad no es el desarrollo del saber. Es laignorancia (42).

Es,sin duda, la notable capacidad del sistema nervioso presididapor el cerebro y la mente, lo que ha permitido al hombre imitar ala Naturaleza e incluso modificarla, cortando y uniendo segmentosde ADN, insertndolos, etc. Est as en condiciones de modificar ointervenir a voluntad las memorias gentica e inmunolgica e inclu-so la del sistema nervioso mismo, traspasando as el umbral de supropia evolucin. Ello puede traducirse en grandes beneficios (co-rreccin de enfermedades hereditarias, mejoras en la explotacin

econmica de animales y vegetales, etc., pero tambin en graves ries-gos para el futuro del hombre incluyendo su supervivencia. Es estaingeniera gentica la que asusta a algunos y preocupa a muchos,creando un halo de misterio, sobrenaturalidad y potencialidad ge-neradora de situaciones contra natura, de monstruos y pesadillasque dejan, como lo ha expresado F. Jacob, un gusto a sabor prohi-bido (43). Es, tambin, lo que ha servido para acusar a los cientficosde atentar contra la calidad de vida, de hacerla peligrar y de crearla desconfianza hacia la Biologa. Se repite as el problema del genio

encerrado en la botella, como cuando los cientficos advirtieron sobreel mal uso de la energa atmica para el futuro y supervivencia dela humanidad. Pero, al igual que antes, los cientficos se han esfor-zado responsablemente en establecer normas ticas rigurosas para laexperimentacin gentico-molecular, conscientes de que todo ade-lanto cientfico puede ser fuente de bienestar y, al mismo tiempo, degrandes males. La ciencia tiene mucho de exigencia moral que nosdemanda desplegar todos nuestros esfuerzos para instaurar y respe-tar, en todos los campos de la ciencia, la primaca de la tica.

El hombre debe escoger sus metas, lo cual entraa sopesar valoresy no pueden hacerlo por s solos en nombre de sus conciudadanos, conprecisin y objetividad. Deben exigir de ellos y de sus gobernantesla oportunidad de discutir los riesgos, problemas y beneficios, asis-tindoles por otra parte el deber de informarles y responder a susconsultas. La ciencia ha establecido su base social y ha solicitado in-sistentemente el apoyo de la sociedad y, por tanto, no slo ha adqui-rido responsabilidades sociales sino que adems ha comprendido cu-les son sus propios principios ticos fundamentales. Merced a ellos,

se constituye en este mundo visible como nico sujeto, objeto y trmi-


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no de la cultura y en ella encuentra su propio eq

evolución del big ban al hombre 2010 - copia

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