estudio de caso n
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ESTUDIO DE CASO N°4
TEXTOCENTRISMO
El autor del libro Programas, compras oficiales y dotación de textos Richard Uribe, hace una reflexión acerca del valor o utilidad del libro de texto como herramienta pedagógica. Tomando ideas de Peña y Rojas, dice al respecto:
Traduce el currículo y hace públicos los objetivos, los contenidos y métodos educativos.
Sirve no sólo para apoyar el proceso de enseñanza-aprendizaje, sino que resulta
determinante en la selección de los contenidos que se enseñan. Cuando no existe un
programa oficial obligatorio, la influencia de los textos en este sentido es mucho mayor.
Hace más productivo el trabajo del docente y lo transforma: en consecuencia puede
dedicar la clase a ampliar la información en lugar de transmitirla y a desarrollar actividades
de aplicación, discusión y solución de problemas.
Orienta al docente en el manejo de grupos muy numerosos y heterogéneos en edades y
habilidades.
Ayuda a compensar las deficiencias de los docentes que no han recibido una buena
formación o a aumentar la efectividad de los mejor capacitados.
Facilita el estudio independiente ´por parte de los estudiantes, cuando, por alguna razón,
no pueden asistir a la escuela, o en ausencia del docente.
Comparado con otros costos educativos, como los salarios de los docentes, o la compra de
equipos, el costo del libro de texto resulta muy económico.
El impacto de los textos parece ser más importante en las escuelas rurales y entre los
estudiantes que provienen de familias de más bajos ingresos y con menores niveles de
escolarización.
En aquellas comunidades que no cu7entan con libros suficientes, los textos parecen
extender su efecto hasta las familias de los niños, como instrumento de aprendizaje y
lectura para las personas adultas.
Sin embargo, el autor aclara que así como los textos tienen esas virtudes, también debe admitirse
que su uso implica retos que afrontar. En la medida en que no se fomente una aproximación
única.
Peña y Rojas dice que: “el discurso convencional del aula de clase se hace alrededor del texto,
basado en el texto o dirigido por el texto, al que se considera como una versión autorizada del
conocimiento”. Más adelante, afirma que “con la tipografía y el surgimiento de la Educación
masiva, el saber considerado válido ha sido codificado y transmitido por medio de los libros que la
sociedad asume como válidos” y que por lo general, al hablar de currículo, se hace referencia a la
información contenida en los textos. Concluye diciendo que los textos son el currículo de facto.
Es por eso que muchos docentes acuden al texto como el centro de gravedad de sus clases y lo
siguen servilmente. Esta práctica se denomina el TEXTOCENTRISMO. En este caso, la labor docente
no dirige el acto educativo, sino se convierte en un administrador de textos. Como aseguran los
autores antes mencionados el texto se convierte en el criterio último de verdad y en el fin mismo
de la enseñanza, no es sólo una herramienta o un medio más de trabajo.
También se debe tener en cuenta que la interrelación del estudiante con el texto no es directa.
Desde los inicios de la educación masiva la transmisión de la información ha estado mediada por la
labor docente. Lo anterior tiene intrínseca la idea de que los contenidos del texto necesitan una
interpretación, una mediación y una guía responsable. El reto se encuentra en la siguiente
conclusión: “Si queremos saber cuáles son las fuentes reales de autoridad del texto, entonces
debemos considerar las prácticas extra textuales y las interacciones que mediatizan su uso
educativo”
Los estudiantes deben aprender a aproximarse de manera crítica a los contenidos de los textos, a
admitir que son escritos por gente real y que no están abstraídos de un contexto de conflictos y
negociaciones de orden político, económico y cultural.
ESTUDIO DE CASO N°1
EPÍLOGO
Dr. HAIM G. GINOTT
Universidad de Nueva York
El primer día de clases, todos los maestros de una escuela particular recibieron la
siguiente nota del director:
Querido maestro:
Soy un sobreviviente de un campo de concentración.
Mis ojos llegaron a ver lo que ningún hombre debería contemplar.
Cámaras de gas construidas por ingenieros capaces y eficientes.
Niños envenenados por médicos experimentados y conocedores.
Recién nacidos asesinados por enfermeras bien adiestradas.
Mujeres y niños a quienes habían matado e incinerado jóvenes competentes egresados de
la escuela secundaria y la universidad.
Por lo tanto, me muestro suspicaz cada vez que se me habla de lo que significa la
educación para el hombre.
Por eso quiero hacerles la siguiente petición: Ayuden a sus alumnos a volverse seres
humanos. Sus esfuerzos no deben dirigirse a producir monstruos de gran sabiduría,
sicópatas competentes, hombres instruidos y ocupados como Eichmann.
La lectura, la escritura y la aritmética son importantes solamente cuando pueden servir
para hacer que nuestros niños sean más humanos.
ESTUDIO DE CASO N°1
EPÍLOGO
Dr. HAIM G. GINOTTUniversidad de Nueva York