La verdad sobre el EsequiboDiscurso del Presidente Nicols Maduro ante la Asamblea NacionalLunes 6 de julio del 2015

VENEZUELA, JUEVES 09 DE JULIO DE 2015

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Ratifico en esta Asamblea Nacional, en menos de 24 horas, nuestro reconocimiento y felicita-cin a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana que, sin lugar a dudas, ha logrado, por el lideraz-go y el esfuerzo de sus hombres y mujeres, un altsimo nivel de excelencia moral, disciplina, organizacin, capacidad de despliegue y adems de la utilizacin correcta y avanzada de todos los equipos y sistemas de armas modernos con los cuales la Revolucin Bolivariana ha dotado a nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana, a todo nivel, como sistemas tecnolgicos, sistemas blindados, defensa antiarea, de los que se cono-cen y de los que no se conocen tambin. Felici-taciones.

Ayer, por ejemplo, en el despliegue de las bri-gadas blindadas, en un minuto y diez segundos fueron capaces de armar y desarmar, montar y desmontar dos modernos tanques que tienen todos los equipos no solamente para defender nuestra tierra, sino para defender ataques a-reos.

La disciplina de una Fuerza Armada Nacio-nal Bolivariana que tiene hoy ms que nunca plena conciencia de sus races, de la causa a la que representan, de las ideas que enarbola. Por eso jams estar de ms decir que es una Fuerza Armada Nacional Bolivariana verdaderamente digna de las banderas de los libertadores y las libertadoras de Amrica, las banderas de liber-tad y de independencia antiimperialista, y como ellos mismos dicen: bolivariana y profundamen-te chavista.

Felicitaciones al pueblo de Grecia Sostuve una muy buena y larga conversacin con mi compaero Alexis Tsipras, Primer Minis-tro de Grecia, y le transmit en nombre de todo el pueblo de Venezuela y de los pueblos de la ALBA, la felicitacin por la gesta que estn viviendo, la jornada histrica que estn viviendo que est

dejando grandes lecciones para el mundo. El pueblo griego fue sometido -como compar-

ta en esa conversacin con el Primer Ministro Tsipras a una guerra que solo nosotros cono-cemos: intensa, brutal, brbara, por los medios de comunicaciones; cerraron los supermercados, las gasolineras, los bancos. Guerra econmica. Cualquier parecido con nuestra realidad es coin-cidencia.

Yo lea cuando vena para la Asamblea Na-cional unas declaraciones del Presidente del go-bierno espaol que son verdaderamente inaudi-tas, porque no creen en los pueblos, desprecian a los pueblos del mundo. El pueblo griego acaba de hablar con una voz de gigante: 61% de hom-bres y mujeres vencieron la campaa de miedo y dieron un paso de dignidad, de valenta, que slo nosotros podemos valorar porque somos un pueblo que con coraje ha enfrentado todas las guerras que nos han tocado.

As que vengo con el alma renovada de coraje, de optimismo por el futuro de la humanidad y de nuestra Patria; vengo con el alma renovada de este lder, joven lder, tiene 40 aos apenas.

Un saludo a los diputados y diputadas de la oposicin, de la MUD, que estn presentes. Un saludo respetuoso.

Alexis Tsipras naci un 28 de julio de 1974, es zurdo, hombre de 41 aos apenas. As van sur-giendo lderes que no pertenecen a macollas, a grupos econmicos, es la gran diferencia, bueno, de la gran mayora de quienes toman decisiones all, en el Fondo Monetario Internacional, en el Banco Central Europeo y en las instancias de la Unin Europea que son rehenes del capital financiero, de la burguesa financiera ms ran-cia y neoliberal que haya existido en los ltimos 50 o 60 aos en Europa, que tiene como objetivo desmontar el Estado de bienestar social e im-ponerle un modelo brbaro, salvaje. Estos son eventos como dira Walter Martnez en pleno

desarrollo.

Cada cosa en su lugarBueno, queridos compatriotas, un saludo a toda Venezuela. Esta intervencin que he venido a hacer ante el Poder Legislativo de la Patria, legtimo Poder Legislativo de nuestra Patria, nuestra Asamblea Nacional, es para hacer un llamado, convocar a nuestro pueblo y a todas las instituciones de nuestro pas, convocarlos a una lucha por poner las cosas en su lugar, desde el punto de vista histrico, en un momento en que nuestra Patria, como lo he venido denunciando en las ltimas semanas, ha sido sometida, est siendo sometida a nuevas formas de acoso, de agresin y se preparan tras bambalinas, un poco ms all tras bambalinas, ya de manera pblica y abierta, se preparan provocaciones que pudie-ran afectar gravemente la paz de nuestro pas y de nuestra regin.

Confieso que con un conjunto de estudiosos de los temas del Esequibo y de los temas geoes-tratgicos y geopolticos de nuestra regin, he-mos estado y he estado adentrndome en todos estos temas que, de alguna manera, al pasar del tiempo no han sido parte de la agenda pblica de nuestro pas, porque quizs si preguntramos a los ms jvenes y a los no tan jvenes so-bre el despojo del Esequibo en el siglo XIX, so-bre el Tratado de Pars y cmo fue impuesta la Doctrina Monroe para despojar a nuestro pas del Esequibo, pocos pudieran responder algu-nas preguntas bsicas sobre el desarrollo de esa historia que ha estado como una herida en el co-razn de la Patria durante ms de dos siglos y ahora ha pretendido ser tomada como tema para instalar un escenario de provocacin irritante contra la dignidad del pueblo venezolano.

As lo digo a la Venezuela de este siglo XXI, que nos caracteriza, en primer lugar, el ideal de la unin latinoamericana y caribea. Si algo ca-

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racteriza a la Venezuela del siglo XXI es una in-mensa conciencia del respeto hacia los pueblos del Caribe y de Amrica Latina como pueblos hermanos, no por casualidad hemos sido arqui-tectos y protagonistas de la construccin del nuevo sistema de organizaciones regionales en el continente: Petrocaribe, la ALBA, Unasur, la CELAC; no por casualidad hemos participado de manera activa en otros organismos con mayor tradicin como el Caricom y el SICA.

No por casualidad, de manera casi obsesiva, insistimos frente a mil provocaciones, hasta que fue aprobado nuestro ingreso como miembro de pleno derecho de Mercosur. De nuestra apuesta sabe nuestro pueblo, saben los pueblos herma-nos de Amrica Latina y el Caribe, y ha sido por la cooperacin, por la paz, por la integracin, por la unin, por el respeto, por el procesamiento de los conflictos por la va del dilogo, por la supe-racin de los conflictos por la va del derecho in-ternacional; y la prioridad de la poltica exterior de la Revolucin Bolivariana, en muchos casos tomando tradiciones histricas de los siglos XIX y XX de nuestra poltica exterior, ha sido im-pulsar la construccin de una slida base de en-tendimiento, de respeto, de confianza entre los pueblos, entre los gobernantes, sin desdear ni dejar de lado los problemas y las diferencias pero cubrindolos con un nuevo mtodo de la diplo-macia de paz.

Denuncia ante el Poder LegislativoConversbamos en estos das con varios prime-ros ministros del Caribe y le insistamos en esto, porque hay una gran y grave campaa, herma-nos y hermanas de nuestra Patria, una grave campaa promoviendo el odio, la desconfianza; promoviendo elementos negativos sobre el ca-rcter y el ser venezolano, sobre la historia de Venezuela, sobre la tradicin libertaria del pue-blo de Bolvar; campaas multimillonarias en el Caribe, en cada pas del Caribe, en Colombia; campaas que se pierden de vista tratando de instalar en el ser colectivo de estas patrias her-manas elementos de desconfianza, de revanchis-mo, de odio, que pudieran justificar en cualquier momento la escalada de un conjunto de eventos contra nuestro pas y as lo vengo a denunciar, Presidente del Poder Legislativo, diputado Dios-dado Cabello, ante toda esta Asamblea Nacional.

Hay una operacin poltica, diplomtica, me-ditica y econmica para implantarle a nuestra regin una operacin tenaza contra la Venezue-la Bolivariana, y as tratar de buscar conflictos de alta intensidad.

Hace apenas unos meses estuve aqu, exacta-mente el martes 10 de marzo, lo recuerdo porque un da antes el Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, haba firmado un Decreto que denunciamos en esta tarima desproporcionado que declaraba a Venezuela como un peligro y una amenaza a su seguridad, pero luego de un gran debate en Venezuela y en el continente, luego del gran apoyo y la unin del pueblo vene-zolano y de Amrica Latina y el Caribe logramos que el Presidente Barack Obama reconociera que no somos una amenaza para ellos.

Ms de 11 millones de venezolanos y venezola-nas, inclusive, con diferencias partidistas, ideo-lgicas, polticas y sociales salieron a respaldar durante marzo y parte de abril la solicitud de derogacin del Decreto, y es por eso que el 10 de abril cuando llegu a la VII Cumbre de Panam llevaba la fuerza de ms de 11 millones de com-patriotas, Vaya! lo que significa y signific esa fuerza espiritual de nuestra Patria, Vaya! lo que signific que en apenas un mes Venezuela logra-ra algo que pudiera calificar algn comentarista o periodista deportivo en relacin a algn de-

porte, y es que Venezuela en un mes lograra un record mundial, o sea, que el propio Presidente de los Estados Unidos desconociera el Decreto que haba firmado, y por eso se iniciaron los ca-nales diplomticos para la bsqueda de la paz, el respeto y el entendimiento.

Hay que reconocer tambin la valenta del Presidente Barack Obama al declarar lo que declar, dar el paso para acercarse y darnos las manos para conversar, y a partir de all instalar un canal diplomtico con los Estados Unidos que gracias a Dios y a la Virgen, como dicen por all en Oriente est funcionando muy bien, tam-bin por la participacin de los hermanos de la MUD y del Gran Polo Patritico.

Un ao antes en medio de las famosas gua-rimbas yo haba lanzado un conjunto de inicia-tivas de paz a nivel nacional e internacional, y haba designado en nombre de toda nuestra Ve-nezuela al compaero Diosdado Cabello Rondn como Jefe de un equipo diplomtico y poltico; y un ao despus luego de pasar todo lo que pasamos y llevan-do la situacin a pulso siempre con la verdad logramos ape-nas hace una semana el canal diplomtico oficialmente con la Repblica de Hait junto a nuestra Canciller, la compae-ra Delcy Rodrguez.

Son difciles las relaciones con los Estados Unidos, muy difciles, puesto que ellos son el imperio ms all del Presi-dente Barack Obama que bus-ca gobernar y dominar el mun-do, que tiene puesto sus ojos en la inmensa riqueza petrolera y gasfera de Venezuela, porque donde hay riqueza petrolera ah van ellos con sus intereses y su poder. Adems, tienen la seria y absoluta decisin de desmontar y derrotar el ejem-plo que significa en Amrica Latina y en el mundo la Revo-lucin Bolivariana y Socialista del siglo XXI, que ha echado andar desde Venezuela, primero de la mano del Comandante Hugo Chvez, y ahora bajo la con-duccin de este humilde obrero que est aqu frente a ustedes. Mximo inters geopoltico.

El inters geoeconmico es el petrleo y creo que nadie podra negar esto. El inters geopolti-co o geoideolgico pudieran decir los estudiosos del tema como el profesor Pompeyo Torrealba y geoestratgico de destruir este ejemplo de digni-dad y de independencia que permiti dinamizar una nueva Amrica Latina que ha nacido y un nuevo Caribe, nos quieren desmembrar y por eso atacan al compaero Rafael Correa, lder de nuestra nueva Amrica Latina, para detener su empuje, su avance, su prestigio, su fuerza moral y sus orientaciones, y adems por ser Presidente de la Celac y porque en Ecuador queda la sede de Unasur.

Segn los clculos del Pentgono y de la CIA, la Revolucin Bolivariana no sobreviva a los tantos ataques ni un mes, ni una semana, no lle-gaba a diciembre del 2013. Creo que si algo tiene de importante, compaeros Mayores, Generales, Almirantes y Jefes de las Regiones de Defensa Integral, las REDI, para quienes pido un aplauso ya que estn en las calles todos los das, son lde-res militares de la Patria; y a los Viceministros de Defensa. Tremendo liderazgo militar tiene la Patria! Gracias, hermanos.

Lo hablaba personalmente con el enviado es-pecial del Presidente Barack Obama, tambin

lo transmitieron en Hait nuestros compaeros Diosdado Cabello y la Canciller Delcy Rodr-guez, y lo harn en las prximas reuniones que estn planificadas para las siguientes semanas, y es que se reconozca a Venezuela como una rea-lidad, diversa? S, pero creo que nadie puede se-guir desconociendo la existencia de un poderoso movimiento popular de masas que ha asumido las banderas de Bolvar, y que se identifica con la bandera del chavismo como fuerza fundamental mayoritaria que cruza transversalmente todo el pas, porque donde usted se mete encuentra all una expresin humana y cultural de la hermo-sura de lo que somos.

Le deca al Presidente Barack Obama en Pa-nam que hemos realizado 19 elecciones, digan ustedes una fuerza poltica en este mundo, en Europa, en frica o en Asia en donde se realiza-ron 19 elecciones en 15 o 16 aos y donde se ga-naran 18 por la calle del medio, y donde se vaya perfeccionando el sistema electoral hasta un

punto que es objeto de admi-racin por tcnicos especialis-tas y lderes polticos de otros lugares del mundo y de otras ideologas.

Es cierto que con la diplo-macia de paz y con la verdad logramos hilvanar un pode-roso movimiento nacional e internacional que neutraliz lo que era una escalada a par-tir del Decreto del 9 de marzo.

Ahora vamos conociendo, mucho ms, los alcances de las medidas que posterior-mente se pensaban activar contra Venezuela a partir del famoso Decreto, que no iba a distinguir si su corazoncito era rojo rojito o era de otro color, los iba a tocar por igual. Esas medidas no discriminan, as como no discriminaron las bombas que cayeron en Bag-dad o en Trpoli. No discrimi-naron a nadie.

Cuando un imperio lanza la fuerza brutal que posee contra un pas no discri-mina, sino destruye, controla, domina, somete, arrodilla, humilla. Eso es lo que hemos evitado y seguiremos evitando, para que la Revolucin Bolivariana y la vida poltica, social y econmica del pas siga en paz. Nuestro objetivo es la paz, nuestra victoria es y debe ser siempre la paz, la paz nacional, la paz regional, la unin regional, la unin nacional.

Una vez que logramos controlar, neutralizar y disipar parcialmente esa amenaza, se fueron activando diversas amenazas, y as lo creo com-patriotas, seores y seoras magistrados de la Sala Plena, Fiscal de la Repblica Bolivariana de Venezuela, Poder Moral, Poder Electoral, Poder Judicial, ministros y ministras, lderes polticos de los distintos partidos polticos que hacen vida en la sociedad venezolana.

Compatriotas, el escenario que se ha venido montando contra Venezuela, con la complicidad de importantes sectores polticos y econmicos de la Repblica Cooperativa de Guyana, es un escenario grave, peligroso, que debe ser disipado y neutralizado con la unin nacional. Venezuela debe seguir levantando con ms fuerza que nun-ca la reclamacin justa sobre el Esequibo por la va del derecho internacional y debe reconquis-tarlo por la va de la paz.

Por eso, mi primera palabra y mi primer lla-mado, es a la unin nacional, hombres y mujeres de esta Patria.

Hay una gran y grave

campaa, promoviendo

el odio, la desconfianza; promoviendo elementos

negativos sobre el carcter

y el ser venezolano, sobre la historia de Venezuela, sobre

la tradicin libertaria del

pueblo de Bolvar campaas

multimillonarias en el Caribe,

en cada pas del Caribe, en

Colombia"

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Este es un tema que mueve pasiones, yo llamo a un debate. Aqu est el Presidente del Parla-mento del Mercosur (Parlasur), del Parlamento de Suramrica, el ciudadano Sal Ortega, un diputado venezolano, carabobeo, valenciano, maestro de escuela. Entonces, llamo a que se haga un debate revitalizador sobre esta situa-cin en la Comisin Permanente de Poltica Ex-terior, Soberana e Integracin, en la Plenaria de esta Asamblea Nacional, en las universidades, en las academias.

Nunca podrn pensar que en nuestro pas hay lderes trogloditas o que el pueblo es troglodita. No hay ni una gota en la sangre que corre por las venas de nosotros, los venezolanos, que jams haya ido a saquear, ni a robar a ningn pueblo del mundo, ni a bombardearlo; en esta sangre que corre aqu, corre sangre de libertadores, de hombres que dieron su vida por la libertad de otros pueblos. No podemos aceptar, por nada del mundo, que se nos acuse de pueblo agresor, de pueblo proimperialista.

Saben ustedes que hay que tener una gran paciencia, una gran altura, para pro-cesar, digerir y no vomitar cuando uno lee y escucha las declaraciones que ha dado contra Venezuela, con-tra nuestra historia y contra nuestro pueblo, el actual Pre-sidente de la Repblica Coo-perativa de Guyana, declara-ciones vomitivas, altamente ofensivas contra la dignidad de un pueblo de hroes, de un pueblo de libertadores, del pueblo de Bolvar.

Exxon Mobile y sus intere-ses Se ha montado toda una ope-racin de provocacin. De-trs de esta operacin est la Exxon Mobil y los intere-ses del lobby petrolero ar-mamentista que influye de manera decisiva en El Pent-gono y todos los planes impe-riales de los Estados Unidos; una provocacin que hemos ido conteniendo, disipando por vas diplomticas. A partir de esa provocacin, ante la reaccin firme que he teni-do frente al Gobierno de Guyana, privilegiando los mtodos diplomticos y polticos, se ha incre-mentado una campaa que no se puede calificar, porque no hay palabra para ello, si dijramos brutal quedaramos cortos, al referirse a nues-tro pas casi como un pas imperialista que pre-tende saquear a Guyana, que pretende despojar a Guyana, que pretende despojar a nuestros her-manos del Caribe.

Quin puede estar detrs de una campaa tan poderosa, donde se estn invirtiendo tan-tos recursos? Quin puede estar detrs de una campaa para buscar un gran conflicto poltico, diplomtico y que escale a otros niveles? Quin puede estar buscando eso? Quin puede sacar ganancias de un conflicto, de un enfrentamiento del ms alto nivel entre pases hermanos?

El pueblo de Guyana es un pueblo noble. No-sotros conocemos el pueblo de Guyana, es un pueblo luchador, es el resultado del mestizaje de pueblos amerindios, de pueblos afrodescendien-tes, de pueblos de la India; es la combinacin del mestizaje de un pueblo noble, trabajador, pacfi-co, al cual por dcadas le han inyectado lo peor para que sienta desconfianza, miedo, odio, hacia el pueblo de Venezuela, para que no conozca ni

reconozca a un pueblo virtuoso lleno de una es-piritualidad noble, como es nuestro pueblo; un pueblo que ha sido capaz de batallar por la liber-tad de este Continente y por su propia libertad una y otra vez. Esa es una campaa que ha tra-do declaraciones las tengo aqu sumamente ofensivas en contra de nuestro pueblo.

Desde el primer momento en que surgieron y fueron elevndose las declaraciones que genera-ban desconfianza y transmitan un mensaje no ajustado a la verdad para hablar en trminos diplomticos estoy obligado, ms all de la

pasin, del dolor y de la indignacin que me crea y que nos crean estas declaraciones ofen-sivas y esta actitud provocadora, como Jefe de Estado y de Gobierno al frente de nuestra Pa-tria, a canalizar para disipar y para neutralizar el escenario que est en marcha y que pretende instalarse.

Pero quiero que sepan, seores diputados y seoras diputadas, miembros de los Poderes P-blicos, que desde el propio momento en que se

instal el nuevo gobierno de Guayana, desde el primer da en que asumi la Presiden-cia el seor David Granger, envi una comunicacin a tla propia Embajadora de la Repblica Bolivariana de Ve-nezuela en Georgetown para intentar un dilogo directo y franco, lo hice una, dos y tres veces e inclusive mand all, como enviado presiden-cial, al Asesor en Asuntos Internacionales, el licenciado Ral Li Causi, joven venezo-lano, experto en el Caribe y en materia internacional; l personalmente, hace varias semanas atrs, se entrevist con altos funcionarios del go-bierno actual de Guayana.

Este gobierno que hoy est al frente de nuestra herma-na Repblica Cooperativa de Guyana es un gobierno que lleg al poder en medio de circunstancias crticas de la sociedad y de la poltica gu-

yanesa, en el que la Exxon Mobil tuvo una alt-sima influencia para su postulacin, su campaa y su llegada a la presidencia de Guayana.

Desde el primer da, sabiendo por dnde ve-nan las provocaciones, hice todos los esfuerzos, queridos hermanos de la Fuerza Armada, para conseguir, a travs de la palabra y de la verdad, disipar a tiempo y preventivamente lo que ya sabamos por informaciones polticas y de inte-ligencia, que eran un conjunto de acciones que se iban a adelantar contra Venezuela, avivando el histrico reclamo de Venezuela por el despojo del Esequibo.

Creo que debemos hacer un esfuerzo para que cada vez seamos ms venezolanos y ms venezo-lanas quienes estemos bien informados de lo que fue ese despojo y de la evolucin histrica en el siglo XIX, en el siglo XX y, hoy, en el sigloXXI.

No fue por falta de iniciativas diplomticas ni de dilogo que se desataron las declaraciones an-tivenezolanas, porque cuando declaran de esta forma no lo hacen contra el Presidente Maduro, lo hacen contra toda Venezuela, lo hacen contra la historia y contra nuestro pueblo.

Pero, efectivamente, todo forma parte de un plan de provocacin que cuenta con el apoyo decidido y el financiamiento de trasnacionales petroleras, como la Exxon Mobil, y cuenta con el apoyo decidido de importantes lobbies de poder

en Washington y en agencias del poder estadou-nidenses incluyendo el Pentgono.

Ha sido activado contra Venezuela un plan de provocacin, hermanos y hermanas, es nuestro deber mostrar la unin ms frrea de la Nacin venezolana para enviar un mensaje claro que nos permita vencer estos escenarios de violen-cia, de confrontacin, de conflictos, que se han activado en contra de nuestro pas desde el ex-tranjero.

Profesor, compaeros historiadores y no s si Pedro Calzadilla, cofundador del Centro Na-cional de la Historia, est por ah, trat de bus-car referencias de este signo de 1966, cuando el imperio britnico concedi la independencia a Guyana hasta nuestros das y no las consegu. Haba momentos de declaraciones duras pero ja-ms de este signo despectivo, racista inclusive, contra nuestro pueblo.

Dice el Presidente de Guyana, hace unos das apenas, ante el CARICOM: Guyana, al aproxi-marse al 50 aniversario de su independencia el prximo ao 2016, an lleva un mono sobre su espalda refirindose a Venezuela; esa carga es el peso insoportable de un reclamo opresivo y ofensivo sobre nuestros espacios terrestres y marinos.

Dice, desconociendo el Acuerdo de Ginebra: La frontera de Guyana con Venezuela fue fija-da hace 116 aos, fue determinada, fue defini-da, fue delineada, fue demarcada, por rbitros internacionales y yo le agrego, en un tratado llamado el Tratado de Pars de 1899, que en Ve-nezuela consideramos nulo e rrito, porque se le impuso con la Doctrina Monroe a nuestro pas.

Lo declaramos una vez ms: El Tratado de Pa-rs para Venezuela es nulo, es rrito y debe res-petarse el reclamo histrico de nuestra Patria.

En este caso, asumiendo la tesis antigua del imperio britnico, ms adelante dice: Cualquier Estado que sistemtica, cnica e incansablemen-te busque repudiar solemnes acuerdos interna-cionales y socavar la seguridad y la soberana de otro Estado debe ser condenado. La Repblica Bolivariana de Venezuela en los ltimos 50 aos se ha vuelto reaccionaria y cada vez ms agre-siva. Esta es la campaa sistemtica hecha por la prensa, radio y televisin en la maana, en la tarde y en la noche en Guyana. En el otro, todos los das hacen una campaa de odio ya que su objetivo es dividirnos, llevarnos a un conflicto de alta intensidad para destruir la unin caribe-a y latinoamericana que tanto esfuerzo le ha costado a nuestra regin durante ms de un si-glo, quieren traer la guerra a nuestra frontera, a nuestra tierra, porque es ese el objetivo supremo y mximo de esta estrategia que se ha desatado desde la ExxonMobile y desde el Pentgono a travs de este Presidente rehn de la Repblica Cooperativa de Guyana.

Seores de la oposicin, no es poca cosa, veo caras de desencantados, pero vengo a pedir su apoyo porque es la Patria de Venezuela la que est en juego, es la paz de Venezuela la que est en juego y es la soberana de nuestra Patria que nos pertenece a todos.

Este no es un tema de elecciones, no es un tema de colores y no es un tema de partidos, este es un tema que yo aparto de la confrontacin poltica interna, lo aparto de la confrontacin electoral y de las diferencias que tenemos como modelos polticos y econmicos; este es un tema de toda la Nacin y en el cual convoco el mejor sentimiento venezolanista, nacionalista, pacifis-ta, humanista y patriota.

El Presidente de Guyana, que tienen cinco se-manas en el Gobierno, ataca a Venezuela todos los das. No voy a leer las declaraciones del Can-ciller de Guyana porque creo que no merecemos

Se ha montado toda una

operacin de provocacin.

Detrs de esta operacin

est la Exxon Mobil y

los intereses del lobby

petrolero armamentista

que influye de manera decisiva en El Pentgono

y todos los planes

imperiales de los Estados

Unidos

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difundir tanta ofensa, tanto agravio, tanto des-precio y tanto racismo contra nuestro amado y noble pueblo. Ms all de las diferencias que podamos tener tenemos un pueblo noble, gran-dioso y amoroso, el pueblo de Bolvar.

Este pas contina dice un Estado miembro del Caricom amenazando el desarrollo de Gu-yana, tanto en tierra como en el mar. Adems, dice: Venezuela consciente de su riqueza supe-rior y su poder militar y naval, en vista de la si-tuacin de apuro del pueblo pobre de uno de los estados ms pequeos trata de victimizarse, ha recurrido una vez ms a la intimidacin con la amenaza del uso de la fuerza. Es muy grave que lo diga un presidente, puesto que Venezuela jams ha amenazado con el uso de la fuerza, ni jams lo har con el pueblo de Guyana, ni con ningn pueblo hermano de Amrica Latina, del Caribe o de este mundo. Venezuela es un pas espiritual y doctrinariamente pacifista, pero es grave porque en poltica internacional el lengua-je es muy importante ya que va presentando y escalando escenarios; este es un discurso intoxi-cado de violencia y de odio, sin lugar a dudas, de un provocador en todas las de la ley, que sabe usar el lenguaje para ofender, herir y manchar.

Ms adelante incorpora no s cuntas cosas, insultos y agravios contra nuestro pas. Nos acu-sa de agredirlos cuando la conducta histrica de nuestro pas, y la nuestra, al contrario, nos han permitido retomar esas relaciones sobre la base de la construccin de una nueva confianza mu-tua entre pases, dirigentes y pueblos; una pode-rosa cooperacin energtica, comercial, econ-mica, cultural y un dilogo permanente entre las cancilleras y los presidentes. Si algo debemos reconocer al Comandante Hugo Chvez es que

como Presidente de la Repblicadesde 1999 inici una nueva era de relacio-

nes con el Caribe, particularmente con la Rep-blica Cooperativa de Guyana, sin desdear, ni abandonar un milmetro los reclamos histricos por el despojo hecho por el imperio britnico contra nuestra Patria.

Frente a esta agresin hemos hecho esfuerzos diversos en el campo diplomtico, pero eso ha generado el incremento de ataques e insultos ha-cia nuestro pueblo, y es por eso que pido el apoyo unnime de todo el pas decente, nacionalista y patritico, de todos los venezolanos y venezola-nas, para tomar un conjunto de acciones polti-cas y diplomticas para detener la provocacin y buscar un punto que encause y reoriente las relaciones polticas y diplomticas con el Gobier-no de Guayana. Adems, que haya un proceso de reposicionamiento de la justa y legal reclama-cin por el Esequibo de Venezuela.

He decidido consultar con la Embajadora de la Repblica Bolivariana de Venezuela en Guyana, reducir el tamao y el nivel de nuestra Embajada en Guyana y he ordenado una revisin integral de nuestras relaciones con el Gobierno actual de Guyana, y es por esto que pido todo el apoyo del pas y de esta Asamblea Nacional.

No est de ms nuestro voto de amistad y de respeto sincero a todo el pueblo de la Repblica Cooperativa de Guyana. Tienen en nosotros un pueblo hermano, un pueblo caribeo, surameri-cano. Estoy seguro de que si nuestro

mensaje llega, ser comprendido por el corazn de los humildes y del pueblo de Guyana, pero por dignidad tenemos que reaccionar y defender la justicia de nuestra poltica y nuestra diplomacia de paz, sabiendo lo que hay detrs, sabiendo lo

que se busca: alentar este conflicto.Saben ustedes que este es un conflicto largo

no? Hay un conjunto de expertos presentes, no pretendo sustituir su conocimiento ni su funcin, pero deben saber, sobre todo nuestros nios, nias, nuestra juventud, que el despojo sobre el Esequibo ha marcado a nuestro pas du-rante dos siglos o ms. Ciertamente es una he-rencia, es una herida que hemos heredado del viejo colonialismo britnico. No lo vamos a sa-ber nosotros que somos las vctimas del despojo! Una herida dolorosa, porque adems fue reali-zada con arrogancia y prepotencia tpica de los imperios, sobre todo el britnico, aprovechando las debilidades que tuvo nuestro pas durante el siglo XIX, luego de una guerra que destruy nuestra Patria fsicamente y luego de la traicin y la divisin de la Gran Colombia potencia ame-ricana que naci de la espada del Libertador Si-mn Bolvar.

El imperio britnico se aprovech durante los siglos XIX y XX con la Doctrina Monroe para imponernos el despojo, grave despojo. Yo qui-siera compartir brevemente con ustedes una inquietud, a sabiendas de que tanto la Comisin Permanente de Poltica Exterior, Soberana e In-tegracin de la Asamblea Nacional y las distintas instancias, como los medios de comunicacin, ministerios del Poder Popular para la Educacin, para la Cultura, para las Comunas y Movimien-tos Sociales, tienen que hacer un esfuerzo en las universidades, un esfuerzo amplio de cono-cimiento por trasmitir esta historia, la historia del Esequibo, pudiramos decir la historia de la diplomacia, del saqueo imperial en el mundo.

Por eso, de generacin en generacin, de go-bierno en gobierno, este tema ha sido un punto

Mapa 1810

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de encuentro; en el siglo XIX con los liberales y conservadores, en el siglo XX desde los go-biernos de Juan Vicente Gmez, Jos Cipriano Castro, Isaas Medina Angarita, Marcos Prez Jimnez y los gobiernos sucesivos de Accin Democrtica y Copei, Rmulo Betancourt, Ral Leoni, Rafael Caldera, Carlos Andrs Prez, Luis Herrera Campins, Jaime Lusinchi, Carlos An-drs Prez (segundo mandato) y Rafael Caldera (segundo mandato), con uno que otro digamos punto de tensin o atencin que siempre ha sido una causa nacional, una causa justa.

Algunos elementos han sido presentados y sern presentados en el transcurso de las prxi-mas semanas y meses en todos los organismos internacionales que vamos a activar para dar esta batalla por la paz y por la soberana del pas. Vamos a acudir a todos los organismos, a la ONU, a la Celac, a la Unasur. Ya hemos activado algu-nos de ellos.

Fjense ustedes, (incluir mapa de vzla de 1810), de las Provincias Unidas de Venezuela, un mapa hecho por Agustn Codazzi en 1810 que refleja, los antiguos territorios de la Capitana General de Venezuela, creada por mandato del Rey de Es-paa el 8 de septiembre de 1777.

Para 1810, la frontera lmite de Venezuela siempre fue el ro Esequibo, la Guayana, la Pro-vincia de la Guayana, la Guayana Esequiba.

Dice nuestra Constitucin de manera consue-tudinaria, desde la Constitucin de 1811, que el territorio de Venezuela est compuesto por el territorio que formaba parte de la Capitana Ge-neral de Venezuela antes de las transformacio-nes polticas del 19 de abril de 1810 sobre esto hay mucha documentacin, y Venezuela las present en las reuniones del Tratado de Pars,

pero fueron desconocidas porque sencillamente nuestro pas no tuvo voz ni voto en ese Tratado, se nos impuso un Tratado absolutamente viciado de intereses imperiales y de nulidad absoluta.

El mapa de la Gran Colombia. Ya conformada Colombia la de Bolvar, no la de este mapa que no deja de emocionar, porque cuando vinimos al mundo, lo hicimos como una potencia, pero la traicin de las oligarquas mezquinas nos lle-varon a ser pases dependientes, de rodillas, sa-queados por los imperios durante los siglos XIX y XX. Por eso, Venezuela tiene que volver, en el marco de Amrica Latina y del Caribe, a ser una potencia respetada en lo poltico, en lo moral, en lo econmico y en todos los planos; porque en este mundo de poderes, nadie respeta al dbil, nadie respeta al cobarde, nadie respeta al que est de rodillas; se respeta al digno, al que est de pie, al que es fuerte por su propia naturaleza, por su propio espritu.

Qu belleza este mapa! El mapa de la Geo-graphic Status Historical Map Of Colombia; un mapa de aquel mundo en donde se hablaba in-gls. Dnde se hablaba ingls y se sacaban ma-pas? En Londres. Colombia era de las antiguas Provincias Unidas de Venezuela, de la Nueva Granada y de Quito, siempre llegbamos hasta el Esequibo, de eso no hay ninguna duda, en la fundacin de Venezuela y Colombia, y luego en la refundacin de Venezuela en 1830.

Venezuela siempre ejerci en las Provincias Unidas de Venezuela, en tiempos de colonia y en tiempos de independencia, la soberana indiscu-tida y plena sobre el territorio del Esequibo.

Mira esta hermosura, este inmenso territorio geopoltico! MOSTAR MAPA DE VZLA Un pas atlntico, caribeo, amaznico, pacfico, centro-

americano, suramericano, andino. Volvern los tiempos, como dice una cancin,

es lo nico que volver. Volver la Gran Colom-bia, volver Bolvar, volvern, ustedes vern, lo veremos. Tenemos que convertirnos en los cons-tructores del sueo de los libertadores.

Otro mapa, el de Agustn Codazzi en 1830. (Se-ala ese mapa de Venezuela 1830)

Igual que el anterior, est Colombia la unida, Colombia la potencia, Colombia la de Bolvar, Colombia la de los sueos, Colombia la unin de repblicas, Colombia la nacin de repblicas.

1830 fue un ao fatdico con el asesinato de Sucre y la muerte de Bolvar, completndose lue-go la pualada de la traicin con el fin de Colom-bia, la unida, la de Bolvar. Aqu est reflejado el ejercicio pleno hasta el ro Esequibo, sin lugar a dudas.

Igualmente, en este otro mapa de Codazzi so-bre Venezuela en 1840, se ve plenamente el Esequibo. (Seala ese mapa de Venezuela)

En los mapas de 1777 a 1811 y el de 1811 hasta 1840, las Provincias Unidas de Venezuela for-man parte del conjunto de materiales histricos que Venezuela ha consignado ante las instancias internacionales, que debidamente se han decidi-do llevar en este caso que seguiremos defendien-do.

Ahora, es el imperio britnico que inicia una maniobra de toma, de ocupacin, de marcaje de este territorio histricamente nuestro. En 1835 fue el primer intento para ocupar este espacio, pero por qu sucede esto? Sencillamente por una reaccin geopoltica. Se haba separado Co-lombia y nuestros pases estaban desmembrados en lo interno, Venezuela estaba profundamente debilitada en todos los aspectos de la economa

Mapa Gran Colombia

VENEZUELA, JUEVES 09 DE JULIO DE 2015 /// ESPECIAL 07 ANLISIS 07

y de la sociedad. Pez haba impuesto una dicta-dura, con una visin que pudiramos comparar-la hoy con la visin extrema del neoliberalismo salvaje; un pas debilitado que disolvi su Ejrci-to Libertador, despoj de las tierras que les ha-ba dado Bolvar, a los soldados que llegaron de Junn y de Ayacucho sin moral y con ejrcitos que respondan a caudillos y a terratenientes.

El imperio britnico viendo la debilidad de lo que haba surgido antes como una potencia, viendo nuestra divisin, comenz a poner el ojo sobre varios objetivos, uno de ellos las islas Malvinas, que nuestros hermanos argentinos en una batalla histrica hoy defienden y estoy se-guro que, ms temprano que tarde, las islas Mal-vinas sern recuperadas por la va del dilogo y el derecho internacional por el pueblo argentino.

El otro objetivo: el Orinoco y la riqueza inmen-sa en toda esa zona de la Guayana Esequiba, la fiebre del oro o la fiebre del petrleo, pudira-mos decir hoy. Hay suficientes documentos para que en este debate nacional podamos instruir a nuestro pueblo, informarlo, educarlo sobre cmo, de manera temprana, esa diplomacia im-perial, ese centro de poder que era Londres en el mundo, visualiz los objetivos estratgicos a capturar en el sur de la Amrica y uno de ellos fue poseer el Orinoco, atrapar las salidas del Ori-noco, para luego conquistar todas las tierras que van hacia arriba hasta el Meta. Hay documentos histricos hechos por estos mismos planificado-res donde hablaban de llegar hasta Bogot para conquistar todas estas tierras con sus riquezas.

Cronologa Tratamos de hacer algunos materiales que sim-plificarn esta primera exposicin para desper-

tar un debate que nos permita consolidar nues-tro reclamo histrico y consolidar la paz.

El ao 1824 lo pusimos como referencia de la lnea de reconocimiento britnico del territorio de la Gran Colombia, antes Provincias Unidas de Venezuela, y luego Repblica de Venezuela. En 1834 el imperio britnico contrat a un comer-ciante, naturalista, gegrafo de apellido Schom-burgk de origen prusiano, alemn, para que vi-niera a meterle el ojo a toda esta regin para que ustedes vean la historia de este despojo y es Robert Hermann Schomburgk que elabora para la Royal Geographical Society de Londres y Colonial Office un ministerio de colonias bri-tnicas que exista en aquel tiempo un primer mapa en 1835 y un primer informe donde pone el ojo sobre el Orinoco, que sera muy largo leer-lo. Esta es la lnea Schomburgk, donde el imperio britnico da el primer paso en el mapa, segn la lnea original Schomburgk, para tomar la rivera occidental del Esequibo.

Es en 1840 cuando se elabora un segundo mapa y, si el primer mapa pretenda incorporar 4.920 kilmetros cuadrados en territorio venezolano, este mapa dibujado por Schomburgk se engu-lle 141.930 kilmetros cuadrados en la segunda lnea. La lnea marrn es la lnea Schomburgk 35 y la lnea morada es la lnea Schomburgk de 1840.

En 1841, el doctor venezolano Alejo Fortique hace un reclamo al Gobierno britnico, pero ya es un gobierno dbil de la oligarqua terratenien-te, un pas dividido y debilitado en todos los sen-tidos.

En 1850, se firma un acuerdo entre el Reino Unido de Gran Bretaa e Irlanda del Norte y Venezuela un acuerdo donde se comprometen a

no ocupar el territorio en disputa. Creo que his-tricamente es el primer paso de ocupacin de los britnicos, porque se firma un acuerdo donde nosotros no podemos entrar a nuestra casa, esto es una de las debilidades de un pas que haba perdido el sueo original del Libertador, su mo-ral original.

Luego, en 1887 el imperio britnico pblica una nueva Lnea Schomburgk donde se pre-tenda tomar 167 mil 830 kilmetros cuadrados dentro del territorio venezolano, que es la lnea anaranjada.

Para entender un poco mejor a los venezola-nos de esa poca, hay que recordar que ellos se enfrentaban al imperio britnico que pretenda llevar sus despojos y sus arrebatos hasta terri-torios histricamente ocupados por la poblacin venezolana como Guasipati, Upata, El Callao, Tumeremo y las riberas del Gur; tenan la pre-tensin de controlar un vasto e inmenso territo-rio estratgico del Orinoco y de las riquezas de nuestra Guayana Esequiba.

En 1897, previa declaracin del Gobierno de los Estados Unidos de la Doctrina Monroe, se llev al Congreso una declaracin que fue aproba-da advirtiendo al Gobierno de su Majestad de Londres que los Estados Unidos no permitiran ningn tipo de ocupacin ilegal de territorio en la Guayana venezolana. Era la aplicacin de la Doctrina Monroe que se sintetiza en la frase Amrica para los americanos, no era ningn favor que nos estaban haciendo.

Se ha hecho un importante material, una sn-tesis. Dicho material lo estuvimos corrigiendo hasta hace una hora antes de venir, porque que-remos difundir la verdad de Venezuela, porque con la verdad que nosotros defendemos es po-

Mapa 1840

/// DEL 28 DE JUNIO AL 04 DE JULIO 2015

sible lograr los objetivos histricos y preservar la paz de nuestro pas, que es lo ms hermoso y preciado que debemos preservar. Que nadie venga a manipular a nuestros pueblos hermanos del Caribe y menos al pueblo de Venezuela.

El ttulo que le pusimos al libro: La verdad sobre el Esequibo. Con la verdad todo se puede, todo se logra, con la verdad siempre hemos podi-do. Este libro tiene realmente grandes virtudes, y una de ellas es que es una cronologa

completa, ao por ao, de lo que se ha hecho en relacin al despojo a la que fue sometida nuestra Patria.

Precisamente fue un 20 de julio de 1895 cuan-do el Gobierno de los Estados Unidos, previo de-bate en el Congreso estadounidense, enva una nota del Secretario Richard Olney en nombre del Presidente Grover Cleveland, quien haba in-vocado la Doctrina Monroe en el mensaje anual de su Gobierno al Congreso de los Estados Uni-dos, para emplazar al Reino Unido a someterse a un pro-ceso de arbitraje en relacin a las usurpaciones que esta-ba haciendo en territorio de Guayana.

Dentro del material que tenemos y creo que es per-fecta la explicacin est la nota del Secretario Richard Olney de parte del Presiden-te de los Estados Unidos, Gro-ver Cleveland, que fue cali-ficada como un can de 20 pulgadas, y este can para la poca era el ms poderoso del mundo por el efecto que caus en Inglaterra.

En 1896, el Congreso de los Estados Unidos nombra una comisin de seis miembros para determinar los verda-deros lmites de la Guayana britnica con Venezuela. Amrica para los america-nos. Pero las potencias ame-ricanas que surgieron del Sur se dividieron, fueron traicio-nados nuestros pueblos y fuimos sumergidos en la peor debilidad que jams haya tenido gobier-no y pueblo alguno en estas tierras, terminamos un el siglo XIX debilitados, de pena, sin dignidad y sin identidad.

El Congreso de los Estados Unidos en 1896 de-signa una comisin para determinar nuestros lmites, comenzaba el auge del imperio estadou-nidense y aos despus tomaran Cuba, Puerto Rico, Filipinas y las islas Guam, comenzando as su expansin por el mundo. Esto fue a finales del siglo XIX y principios del siglo XX.

Esa comisin dice en este libro estaba inte-grada por personalidades de alto prestigio inter-nacional como David Brewer, Juez de la Corte Suprema; Richard Albey, Presidente de la Corte de Apelacin; Frederic Coudert, Miembro del Foro de Nueva York; Daniel Gilman, Presidente de la Universidad de Johns Hopkins, y Andrew White de la Universidad de Cornell. El hispanis-ta y experto en derecho latinoamericano, Severo Mallet-Prevost, fue designado Secretario de esta Comisin. Memoricen el nombre de Severo Ma-llet-Prevost, porque despus fue muy importan-te para descubrir la farsa del Tratado de Paris.

El 12 de noviembre, de ese mismo ao 1896, se firm entre los Estados Unidos de Norteam-rica e Inglaterra las bases del Tratado de Arbi-tramiento para decidir la situacin de Guayana. Venezuela no exista. Bajo la presin del Gobier-no de los Estados Unidos fueron impuestas digo

yo en nuestro pas las condiciones establecidas, y ningn venezolano form parte, ni formara parte integrante del Tribunal de Arbitramiento que iba a tocar las cuestiones vitales del territo-rio y la vida de nuestra Patria. Formaron parte de ese arbitraje: Dos ingleses nombrados por el Reino Unido, dos norteamericanos nombrados por los Estados Unidos en representacin de Ve-nezuela, un ruso miembro de una corte de ad-miracin y de adulacin a la Reina de Inglaterra de ese entonces, era un probritnico ruso muy adulante al imperio britnico. Cinco miembros muy objetivos ellos!

A Venezuela se le entreg un Tratado precon-cebido por Londres y Washington. El 2 de febre-ro de 1897, Venezuela y Gran Bretaa firmaron el Tratado Arbitral de Washington bajo presio-nes norteamericanas, por lo que estos pases se vieron obligados a aceptar las condiciones des-ventajosas de ese arbitraje. Ese mismo ao el

Congreso venezolano ratific el Tratado que fundaba, crea-ba el arbitraje antes descrito.

Cada jurista present sus alegatos con documentos y anexos. Venezuela present tres volmenes, ms un atlas con las pruebas suficientes de la posesin soberana de la Guyana venezolana; mien-tras que Gran Bretaa pre-sent siete volmenes ms y un atlas tambin, y de all en adelante hubo 54 sesiones de trabajo y apelaciones de cua-tro horas cada una.

Entre los meses julio y oc-tubre de 1899 se reuni el Tribunal de Arbitraje en la ciudad de Pars, donde Gran Bretaa estuvo representada por cuatro consejeros ingle-ses y Venezuela por cuatro consejeros norteamericanos.

Las deliberaciones duraron trece das. El 3 de octubre de 1899, fecha infausta para la historia de nuestra Patria, el

Tribunal de Arbitraje dict una decisin unni-me que se conoce como Laudo Arbitral de Pars, para dirimir la demarcacin territorial del lmite entre los Estados Unidos de Venezuela para ese entonces y la Guayana Britnica, posesin colo-nial del imperio britnico.

Esa fue una decisin sumamente breve des-cribe este historiador, sin motivacin y argu-mentos legales, la cual se limit a describir la lnea fronteriza aprobada por este rrito tribu-nal, comenzando en Punta de Playa, alrededor de 43 millas al este de Punta Barima y Mururu-ma, para continuar hacia el sur a lo largo del ro Amacuro.

Esta sentencia le dio a Gran Bretaa el 90% del territorio en disputa dira yo, en despojo, reclamado por nuestro pas, menos la boca del Orinoco y 500 millas cuadradas de la desembo-cadura, que fueron reconocidas para Venezuela. Se argument que la decisin se hizo para evitar una guerra, por lo que los jueces dictaminaron sin tomar en cuenta los aspectos jurdicos ni his-tricos.

En la presidencia de Jos Cipriano Castro (1900), Venezuela denunci el Laudo de Pars y empez una larga, intensa, difcil y cuesta arriba lucha frente al imperio britnico, por rescatar lo que los libertadores dejaron en posesin de Ve-nezuela: la Guayana Esequiba.

Al pasar el siglo XX, todas las constituciones, incluyendo aquellas impuestas por dictadores

como Juan Vicente Gmez, mantuvieron el con-cepto de la Constitucin original de 1811, al reco-nocer nuestro territorio como el que en heren-cia nos tocara al conquistar nuestra libertad, es decir, la Capitana General de Venezuela sobre eso tengo bastante material de trabajado que de-muestra los distintos elementos conceptuales.

El profesor Earle Herrera tambin ha estudia-do bastante y ha escrito sobre este tema. Ah est una lnea completa, conformada por los di-putados Eduardo Piate, Earle Herrera y Pompe-yo. Lnea de dignidad.

A mediados del siglo XX, quien haba sido miembro de este tribunal arbitral, el ciudadano Severo Mallet Prevost nombre de un prestigio-so y famoso bufete internacional tambin.

Bueno, a mediados del siglo XX, el ciudadano Severo Mallet Prevost, casi al final de su vida, escribi lo que fue conocido como una confesin que vena a comprobar lo que all era un secre-to a voces, en Pars, en Londres, en Washington, en Upata, en Caracas, la manera ilegal, irregular, imperialista, en que se haba despojado a Vene-zuela de un territorio precioso para los intereses nacionales, que habamos conquistado regando los campos de batalla con la sangre de los negros primeros, de los humilde de esta Patria. Nadie nos regal a nosotros el territorio conquistado de las Provincias Unidas de Venezuela y de la Gran Colombia, fueron conquistados con esfuerzo, con mucha pasin, mucho amor patrio.

Seguramente a Severo Mallet Prevost le pes la conciencia, Puede ser. l dej este material para que fuese publicado, denominado: Despus de mi muerte.

El gobierno de Isaas Medina Angarita le hizo un reconocimiento en su momento a Mallet Pre-vost, gobierno que deca que l estuvo en los in-terines y que conoci los secretos de esta nego-ciacin y de este reparto imperial.

En ese material, Severo Mallet Prevost expre-sa lo siguiente: si bien es cierto que dio a Vene-zuela el sector en litigio ms importante desde un punto de vista estratgico, fue injusta para Venezuela y la despoj de un territorio muy ex-tenso e importante sobre el cual la Gran Bretaa no tena, en mi opinin, la menor sombra de de-recho. Qued para la historia.

En 1944 se abri todo un debate sobre eso, el 10 de diciembre de 1948 fallece Severo Mallet Prevost y en 1949 aparece un artculo titulado: American Journal Of International Law, rela-cionado con el fraude del Laudo Arbitral, lo que estimul grandemente el debate en Venezuela. Ya el imperio estadounidense estaba consolida-do como un imperio dominante y hegemnico en Amrica Latina y el Caribe, el imperio hege-mnico en el mundo en disputa con la antigua Unin Sovitica.

Pero este territorio lo controlaban gobiernos y grupos econmicos que utilizaban los ejrcitos y las fuerzas armadas como fuerzas de ocupacin, de dominacin. Cuando les fallaban los polticos de la poltica, utilizaban a los polticos con es-trellas, bayonetas, crceles y torturas, desnatu-ralizando la noble carrera militar que debe ser, como es en Venezuela, una noble carrera para defender la Patria, para defender la integridad territorial, para defender al pueblo y para defen-der la Constitucin, la paz y la libertad.

Con orgullo digo esto, como Comandante en Jefe me siento extremadamente orgulloso de la Fuerza Armada que tenemos, del Ejrcito, de la Armada, de la Aviacin, de la Guardia Nacional, de los milicianos y las milicianas. Le doy gracias a Dios que la tenemos y a nuestro Comandante Chvez, si me lo permiten, desde mi corazn le doy gracias por esa obra que dej esa doctrina en concepto estratgico, en disciplina, en organi-

A mediados del siglo

XX, el ciudadano Severo

Mallet Prevost, escribi

lo que fue conocido

como una confesin, la

manera ilegal, irregular,

imperialista, en que

se haba despojado a

Venezuela de un territorio precioso para los intereses

nacionales"

08 ESPECIAL

VENEZUELA, JUEVES 09 DE JULIO DE 2015 /// ESPECIAL 09

zacin y en armas en nuestra Fuerza Armada.Pasaron los aos 50 y el Gobierno de Marcos

Prez Jimnez intent, en los momentos de ma-yor amistad con los Estados Unidos, introducir el tema ante la Dcima Conferencia Interameri-cana de Caracas, pero saben ustedes que en esta Conferencia de 1954 el tema central fue el derro-camiento de Jacobo Arbenz y, lamentablemente, el tema que se intent introducir fue pospuesto o no atendido suficientemente.

Entrando la dcada de los 60 se present una coyuntura que amerita de estudios y que combi-n varios factores. Un primer factor fue el inte-rs del imperio britnico de establecer otro tipo de relaciones con sus antiguas colonias luego de la derrota en India con Mahatma Gandhi al frente, fue con golpe demoledor as como el refe-rendo de ayer en Grecia. Son golpes que quedan generando eventos, circunstancias e impactos en el tiempo.

Hay gente que cree que el golpe al principio no tiene mayor influencia, pero eso replante las relaciones del antiguo imperio britnico, derro-tado en el siglo XVIII en los Estados Unidos por las trece colonias. Fue el primer imperio global que tuvo posesiones en Asia, en Amrica, en frica, y que no fue tan global y poderoso como el imperio estadounidense hoy, porque no tenan el armamento, los satlites, el poder financiero, el control del mundo que tiene ste, por ahora.

La primera circunstancia fue el inters de ir estableciendo nuevos tipos de relaciones y sus-tituyendo la vieja posesin y gobierno colonial de la metrpolis, Londres, con sus antiguas co-lonias. Adems, en la mayora de estos pases, haba surgido, fundamentalmente vinculada al Partido Laborista Britnico, partido histrico de

ideas progresistas de izquierda, partido histrico de la clase obrera britnica e irlandesa, movi-mientos polticos progresistas que empezaban a buscar, con el proceso de descolonizacin que se dio despus de la Segunda Guerra Mundial, sus espacios de autonoma y de independencia. Fue como un primer elemento.

Un segundo elemento importante ah, en los aos 60, es la llegada de gobiernos que en Vene-zuela tenan fuertes lazos con los Estados Unidos y no es un secreto, pues es reconocido por ellos mismos no quiero ofender a nadie, Rmulo Be-tancourt y Ral Leoni. Y Rmulo, despus de ha-ber sido fundador del Partido Comunista de Cos-ta Rica cuando fue al Pacto de Nueva York, dijo: En Venezuela no se puede gobernar sin el apoyo de Fedecmaras, del alto clero de la Iglesia y de la Embajada estadounidense. Y esos lazos los fueron utilizando el gobierno de Rmulo Betan-court y el gobierno de Ral Leoni para comenzar a introducir, en distintos espacios y organismos mundiales, el tema de la Guayana Esequiba ve-nezolana.

Un tercer elemento fue el levantamiento de un movimiento histrico muy importante, lamenta-blemente echado a un lado, ignorado, por presio-nes imperiales estadounidenses y britnicas, el Movimiento de Amerindios en el Esequibo que deseaban que ste fuera venezolano e hicieron todo lo posible para que fuera atendido por Ve-nezuela y fueron ignorados durante dcadas, pero particularmente en esos aos 60 se organi-zaron y tocaron a la puerta de poder poltico en Venezuela.

En el libro que me prest Elas Jaua de la bio-grafa de Burelli Rivas, que fue Canciller de Caldera. Miguel ngel Burelli Rivas yo no lo

saba fue Canciller Interino de Rmulo Betan-court cuando Ignacio Arcaya (padre) sostuvo la posicin de no expulsin y de defensa de Cuba en la OEA.

Es una biografa bastante extensa y muy inte-resante. La le completa en una madrugada por-que cuenta detalles de cosas que solo l vivi en los aos 40, 50, 60, cuando Leoni estuvo siempre en el servicio exterior, despus fue candidato en el 68, cuando gan Prieto y no le reconocieron la victoria. Yo lo digo porque mi pap era prietista. Prieto gan y le desconocieron las primarias en las que le gan

a Gonzalo Barrios. Betancourt no lo acept. Di-gamos que eso es parte de la historia.

Escudriando todos estos libros histricos se presentaron esas tres condiciones, entre otras, y dieron un resultado que habra que evaluar porque una cierta gente dice una cosa y algunas dicen otra.

En 1962 el Canciller de Venezuela, Marco Fal-cn Briceo, denuncia, con motivo de la Asam-blea General de Naciones Unidas, en un informe histrico muy bien expuesto y acabado el ca-rcter nulo e rrito del Laudo Arbitral de 1899, y como resultado de esta intervencin, en 1963 se realiz una reunin los das 5, 6 y 7 de noviem-bre entre el Gobierno de la Gran Bretaa, impe-rio britnico, Venezuela y el gobierno colonial de la llamada Guayana Britnica, para empezar a revisar los temas, desde nuestros conceptos de-rivados, del despojo de nuestra Guyana Esequi-ba, el concepto periodstico-diplomtico y los temas relativos al diferendo. Este fue el inicio de un camino de reuniones y bsquedas.

El inters del imperio britnico era pactar la independencia de Guyana, pero las negociacio-

Presidente Maduro en su exposicin

nes concluyen con la participacin de Venezue-la y la firma del Acuerdo de Ginebra, el cual se firma el 17 de febrero de 1966. Este acuerdo fir-mado por ambas partes, ms el gobierno colonial de la Guayana Britnica, establece los mecanis-mos para iniciar un proceso llamado el diferen-do histrico por el Esequibo, entre la Repblica Independiente de Venezuela y la Repblica que se derivaba de la concesin de la independencia de Guyana, que ya tena un gobierno interino. Es un acuerdo firmado, y hay un debate histrico sobre el tema.

El propio Miguel ngel Burelli Rivas dice que debi haberse presionado el no reconocimiento de la independencia y la nueva Repblica; hay otros que creen que se lleg a un mximo por-que este Acuerdo 67 aos despus del ofensivo, abusivo e imperial Laudo Arbitral de Paris es-tablece en trminos diplomticos y en base al derecho internacional que nos obliga a todos, la obligatoriedad de buscar por la vas diplomti-cas un acuerdo justo, satisfactorio y legal. Hay que estar en los zapatos de quien negoci, con-vers y busc esto. Seguramente habr tiempo en el futuro o en este debate para establecer si pudo haber sido ms o menos avanzado; pero lo cierto es que desde su firma, el17 de febrero de 1966, y su publicacin en la Gaceta Oficial del 15 de abril de 1966, es un Convenio Internacional obligante para Venezuela y para Guyana, donde se establecen los trminos de fiel cumplimiento para canalizar este despojo histrico que hizo el imperio britnico contra nuestra Patria venezo-lana.

Seguramente habr muchos elementos que surgirn del debate, pero aqu hay un elemen-to clave: Hecho en duplicado en Ginebra, a los

diecisiete das del mes de febrero Por el Go-bierno de Venezuela firm el Ministro de Rela-ciones Exteriores, Ignacio Iribarren Borges; por el Gobierno del Reino Unido de Gran Bretaa e Irlanda del Norte firm el Secretario de Estado de Relaciones Exteriores, Michael Stewart, y el Primer Ministro de la Guayana Britnica, Forbes Burnham, quien luego fue lder de la Repblica Cooperativa de Guyana. Dada, firmada y sella-da en el Palacio Federal Legislativo, en Caracas a los 13 das del mes de abril de 1966. Ao 156 de la Independencia y 108 de la Federacin. Presiden-te del Congreso, Luis Beltrn Prieto Figueroa.

Este es el Acuerdo que coloca un nuevo co-mienzo entre un pas caribeo que surga de la independencia y fuera despus la Repblica Cooperativa de Guyana, y un pas histrico, lder de la independencia de Amrica Latina, la Rep-blica Bolivariana de Venezuela, nuestra Patria.

Este Acuerdo establece, primero, un elemento conceptual en el numeral 2, del artculo 5, que dice textualmente lo siguiente: Ningn acto o actividad que se lleve a cabo mientras se halle en vigencia este Acuerdo, constituir fundamento para hacer valer, apoyar o negar una reclama-cin de soberana territorial en los territorios de Venezuela o la Guayana Britnica, an era la Guayana Britnica, esto es muy importante a la luz del derecho internacional y del esfuer-zo diplomtico que nosotros vamos a reforzar en todas las instancias ni para crear derechos de soberana en dichos territorios, excepto en cuanto tales actos o actividades sean resultados de cualquier convenio logrado por la Comisin mixta y aceptado por escrito por el Gobierno de Venezuela y el Gobierno de Guyana, ninguna nueva reclamacin o ampliacin de una recla-

macin ser hecha valer mientras este Acuerdo, est en vigencia, ni se har valer reclamacin alguna sino en la comisin mixta, mientras tal comisin exista. Aqu estn los mecanismos, y es por eso que Venezuela no ha aceptado, ni aceptar que la ExxonMobile o cualquier trans-nacional venga a posicionarse de territorios que estn en debate y disputa del mar, de aguas ma-rinas y submarinas. No podemos permitirlo, no lo voy a permitir.

Estoy haciendo un gran esfuerzo porque, efec-tivamente, entre los aos de 1966 y 2015 hubo diversos sucesos.

En 1970, producto de las presiones estadouni-denses contra el presidente Rafael Caldera para desconocer su presidencia, el imperio estadouni-dense presiona de diversos signos que la historia dejar para la posteridad.

El Canciller Arstides Calvani firm lo que se llam y se aplic en su momento, el Protocolo de Puerto Espaa, firmado en Trinidad y Tobago el 18 de junio de 1970, cuatro aos despus del Acuerdo de Ginebra. Este Protocolo de Puerto Espaa estableci 12 aos de tiempo de espera; el mismo congel, suspendi la aplicacin del Acuerdo de Ginebra por 12 aos. Es en 1981, un ao antes que expirara este convenio interna-cional, que el presidente Luis Herrera Campins anunci oficialmente a Guyana su disposicin de no renovarlo y de activar los mecanismos del Acuerdo de Ginebra, cosa que sucedi precisa-mente. Venezuela propuso en su momento una negociacin directa con Guyana, Guyana no qui-so aceptar y propuso tres alternativas: llevar el tema a la Asamblea General de la ONU, llevarlo al Consejo de Seguridad de la ONU o a la Corte Internacional de Justicia.

Celac

10 ESPECIAL /// VENEZUELA, JUEVES 09 DE JULIO DE 2015

En el ao 1983, por iniciativa de Venezuela, se llev el caso del Esequibo, bajo los auspicios del Secretario General de las Naciones Unidas, en concordancia a lo establecido en el artculo 4, numeral 2, del Acuerdo y apegados al artculo 33 de la Carta de las Naciones Unidas que esta-blece mecanismos para la solucin diplomtica de conflictos en el mundo.

El 30 de marzo de ese mismo ao de 1983, el Secretario General de entonces, Javier Prez de Cuellar, acept la responsabilidad de buscar un arreglo prctico de esta controversia y design a Diego Cordobs, encargado de estudiar la recla-macin de Venezuela, servir de contacto entre ambos gobiernos.

En 1987 Guyana y Venezuela decidieron de mutuo acuerdo aceptar el mtodo de los buenos oficios, que es activado dos aos despus, a par-tir de 1989: el Buen Oficiante. Desde esa fecha hemos tenido tres buenos oficiantes, el primero, Alister Mac Intire, designado en 1989 y, lamen-tablemente, falleci en 1998. Por lo general, son magistrados estudiosos del derecho, historia-dores y con una edad a veces elevada. Luego se design en el ao 1999, con la llegada del gobier-no del Presidente Chvez, al Buen Oficiante Oli-ver Jackman, por mutuo acuerdo. Es el mtodo para su designacin, se proponen nombres en consulta con el Secretario General y, por mutuo acuerdo de los dos pases, se designa. El Buen Oficiante Oliver Jackman tambin muri en el 2007. Luego recuerdo que cuando era Canciller, duramos tres aos buscando un Buen Oficiante. Recuerdo un viaje que hice a Nueva York y has-ta que conseguimos designar un Buen Oficiante, un honorable hombre de la historia, jamaiquino, profesor Normar Girvan, nombrado en el ao 2010. Lamentablemente falleci en abril de 2014.

En este perodo, precisamente en este momen-to, estamos en esta fase. Yo, personalmente, me voy a comunicar con el Secretario General Ban Ki-moon, para activar, con base al Acuerdo de Ginebra, la asignacin del Buen Oficiante. Es el Acuerdo de Ginebra el mecanismo de los buenos oficios, del Buen Oficiante valga la precisin, el camino para que Guyana, el gobierno actual, respetando el derecho internacional, se siente en la mesa para continuar la bsqueda de una solucin satisfactoria, legal, prctica, y Venezue-la pueda satisfacer histricamente este reclamo por este despojo.

Apoyo de la CelacIgualmente he decidido y pido apoyo de la Asamblea Nacional, del Poder Judicial, del Po-der Moral, del Poder Electoral, para convocar una Comisin de Alto Nivel del Estado venezola-no, para que de manera inmediata se despliegue diplomticamente y solicite a la Presidencia pro tmpore de la Comunidad de Estados Latinoa-mericanos y Caribeos (Celac), en la direccin del Presidente Rafael Correa, que la troica de este organismo convoque a una reunin de di-logo entre el Gobierno de Guyana y el Gobierno de Venezuela con la presencia de la Presidencia pro tmpore.

Igualmente que se desplieguen el Fiscal, los magistrados, el Defensor del Pueblo, los dipu-tados y diputadas, la Comisin Permanente de Poltica Exterior, Soberana e Integracin de la Asamblea Nacional, los expertos de nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana, bajo la conduccin del Vicepresidente Ejecutivo, com-paero Jorge Arreaza y la Canciller Delcy Ro-drguez, de manera inmediata, una gira intensa, profunda, del mayor nivel de representacin del Estado, a todos los pases del Caribe, de America Latina y de Amrica del Sur, a explicar la justicia

de la causa venezolana y a despejar las mentiras que se han difundido.

Estas son iniciativas en el campo diplomtico para las cuales espero el mximo apoyo, porque mi esperanza es el apoyo unnime de la Asam-blea Nacional. No digo mi esperanza, la esperan-za de un pas entero. Igualmente, deben saber ustedes que recientemente, en todo este proceso de defensa y vigilancia de nuestros espacios te-rritoriales marinos y submarinos, se sac un de-creto de carcter administrativo, eminentemen-te administrativo, tcnico, creando la Zona de Defensa Integral Martima e Insular de nuestro pas, decreto con el mandato de nuestra Cons-titucin. Tengo que decirlo, esta Constitucin recoge la doctrina ms completa y acabada que, histricamente y constitucionalmente, se acu-mul como patrimonio en el pas, pero creo, as lo creo y someto este criterio a los historiadores y a los constitucionalistas.

Creo que es la Constitucin ms completa en la definicin del territorio venezolano que se ha hecho, la cual se hizo en un gran debate que recuerdo perfectamente; aqu estaba Juan Jos Marn, entre otros compaeros como Wi-lliam Ojeda, Cristbal Jimnez, Victoria Mata, Earle Herrera, Luis Gamargo Nikita, Iris Va-rela, Braulio Snchez, Carlos Marx, Marelis Prez, Sal Ortega, Elas Jaua, Desir Santos Amaral, Freddy Ber-nal, Noel Pocaterra, Tareck William Saab y mi persona.

El Captulo I, Del territorio y dems espacios geogrfi-cos, de la Constitucin Bo-livariana de Venezuela, ha sido usado para una campa-a brutal de manipulacin y todos los pases mienten al igual que todos los medios, porque es un decreto interi-no administrativo que tiene la marca de la Constitucin, no puede ser de otra manera. Con la vena del Presidente de la Asamblea Nacional voy a leer los siguientes artculos de la Constitucin:

Artculo 10. El territorio y dems espacios geogrficos de la Repblica son los que correspondan a la Capitana General de Venezuela antes de la transformacin poltica iniciada el 19 de abril de 1810, aqu recoge casi textualmente la Constitucin del ao 11 y varias constitucio-nes con las modificaciones resultantes de los tratados y laudos arbtrales no viciados de nu-lidad. Es un elemento clave que se coloc en la doctrina constitucional, y que adems crea nuestra fuerza para la doctrina internacional de los acuerdos y el tema del Esequibo, que es una herida abierta.

Luego, el artculo 11 establece lo siguiente:Artculo 11. La soberana plena de la Repbli-

ca se ejerce en los espacios continental e insular, lacustre y fluvial, mar territorial, reas marinas interiores, histricas y vitales y las comprendi-das dentro de las lneas de base rectas que ha adoptado o adopte la Repblica; el suelo y sub-suelo de stos; el espacio areo continental, in-sular y martimo y los recursos que en ellos se encuentran, incluidos los genticos, los de las especies migratorias, sus productos derivados y los componentes intangibles que por causas na-turales all se hallen. Este artculo de la Cons-titucin del 99 es extenso, pero preciso y dira

que perfecto tambin El espacio insular de la Repblica comprende el archipilago de Los Monjes, archipilago de Las Aves, archipilago de Los Roques, archipilago de La Orchila, isla La Tortuga, isla La Blanquilla, archipilago Los Hermanos, islas de Margarita, Cubagua y Coche, archipilago de Los Frailes, isla La Sola, archipi-lago de Los Testigos, isla de Patos e isla de Aves; y, adems, las islas, islotes, cayos y bancos situa-dos o que emerjan dentro del mar territorial, en el que cubre la plataforma continental o dentro de los lmites de la zona econmica exclusiva y luego sigue desarrollando estos conceptos.

Por qu traje la lectura de estos artculos? Por-que el Decreto emanado administrativamente e interinamente del propio Ministerio del Poder Popular para la Defensa est marcado por la Constitucin, por un pas que considera sagrado el derecho, sobre todo el derecho internacional, y que ha dejado marcado en esta Constitucin sus aspiraciones histricas y el ejercicio de su soberana a todo nivel, ms a nivel de siglo XXI pues, porque este es un artculo de este siglo y adaptado perfectamente para esta poca.

Es una campaa brutal que nos ha tocado re-montar cuesta arriba, y por eso le hice una con-sulta al Tribunal Supremo de Justicia en pleno a

travs del Consejo de Estado, en medio de esta batalla que hemos estado dando sobre los alcances del decreto ma-nipulado internacionalmen-te, y les ped un conjunto de recomendaciones, las cuales me han entregado en un dic-tamen muy temprano en el da de hoy.

Ha sido analizado el Decre-to en cuestin y se me hacen un conjunto de sugerencias para perfeccionarlo, para profundizarlo, para mejorar-lo en todo sentido, nacional e internacionalmente; es el primer concepto de nuestro mximo tribunal de justicia. Quiero agradecerle a travs de su Presidenta, la doctora Gladys Gutirrez, a todos los magistrados y magistradas que en pleno estn hacien-do brillar esta sesin de la Asamblea Nacional. Muchas gracias, a todas y todos uste-

des. Primero, establece muy claramente un crite-

rio poltico de Estado constitucional, de orden doctrinario y legal en su pgina 2, y me dice que como Jefe de Estado, en este decreto cuyo objeto no es la delimitacin fronteriza, se debe invocar la obligacin del Estado sobre la adopcin de me-didas necesarias para garantizar la independen-cia, la soberana, la seguridad y la integridad del espacio geogrfico sobre la base de la concepcin estratgica defensiva nacional.

Cuando hablamos de concepcin defensiva nacional, son los espacios vitales de un pas de acuerdo a sus lmites establecidos legalmente, de acuerdo al derecho internacional, y no al dere-cho imperial. Con todos los pases que tenemos establecidos lmites territoriales, martimos y submarinos con los mtodos del derecho inter-nacional, con aquellos pases que an estn pen-dientes negociaciones, la campaa es brutal.

Quizs a ustedes en su diario trajinar a mu-chos de ustedes les veo cara de candidatos y han estado en su precampaa en los distintos estados del pas les queda el tiempo suficiente para sa-

Arstides Calvani firm lo que se llam y se aplic en

su momento, el Protocolo

de Puerto Espaa, el 18 de

junio de 1970, cuatro aos

despus del Acuerdo de

Ginebra. Este estableci

12 aos de tiempo de

espera; el mismo congel, suspendi la aplicacin del

Acuerdo de Ginebra por

12 aos"

ESPECIAL 11 VENEZUELA, JUEVES 09 DE JULIO DE 2015 ///

ber cmo estn crendose condiciones para un gran conflicto que involucre a Venezuela, pero eso no es cualquier cosa, por eso insist tanto en la necesidad de hacer esta sesin de trabajo, e in-sisto mil veces en la necesidad de gestar la unin nacional para defender la paz y la soberana de nuestro pas.

Ms adelante dice este dictamen en las reco-mendaciones: En consecuencia, se sugiere al Consejo de Estado presentar ante el ciudadano Presidente de la Repblica, una recomendacin para que en conjunto el concierto institucional del Poder Pblico Nacional se verifique tcnica-mente el contenido y alcance del referido Decre-to, en cuanto a la delimitacin mediante coorde-nadas del espacio geogrfico de la Repblica en lo que atae a las jurisdicciones de las Zonas de Defensa Integral, Martima e Insular, Zodimain, bajo la circunscripcin de las Regiones Estratgi-cas de Defensa Integral Martima e Insular, Re-dimain, en el contexto de la revisin peridica de nuestros lmites territoriales que conforman la unidad poltica territorial de la Repblica y que describe el Estado democrtico y social de Derecho y de Justicia, que constituye la Repbli-ca Bolivariana de Venezuela.

As mismo, consultando sobre esta materia de tanta importancia nacional y regional, dice el Tribunal Supremo de Justicia que por la trascen-dencia del asunto sealado, se considera perti-nente que los objetivos que contiene el Decreto en cuestin, previa verificacin tcnica reco-mendada, recomienda sean incluidos, por ejem-plo valga la expresin, en el Decreto con Ran-go, Valor y Fuerza de Ley Orgnica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, o ms all sean plasmados en otro texto de rango legal, que in-

cluso podra ser un decreto ley con base a la Ley Habilitante vigente, que desarrolle los principios contemplados en el

Prembulo y en los Ttulos I y II de la Constitu-cin de la Repblica Bolivariana de Venezuela.

Es decir, el Tribunal Supremo de Justicia abre canales. Eso es para que ustedes vean cmo un elemento que ha tratado de ser utilizado nega-tivamente contra nuestro pas, nos abre nuevos caminos para la ratificacin de nuestra sobera-na y para perfeccionar su defensa a travs de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y de todas las instituciones.

Contino leyendo: En consideracin a lo ex-puesto, se reitera la atinada regulacin plan-teada por el Ejecuto Nacional en esta materia de gran trascendencia nacional, la cual, por tan sensible importancia, podra ser elevada a un instrumento de rango legal que incremente la plena vigencia y proteccin de los aludidos pos-tulados constitucionales en el desarrollo integral de la Nacin.

En este sentido, una vez conocida la consulta hecha debidamente ante el Tribunal Supremo de Justicia y haciendo el conjunto de evaluaciones necesarias, efectivamente, he decidido elevar todo el contenido de este Decreto 1.787 al Con-sejo de Estado y al Tribunal Supremo de Justicia.

Mientras tanto, tomando los criterios doctri-narios, constitucionales y de la justicia de la re-clamacin de nuestro pas, debemos emitir un nuevo decreto que sustituya en todas sus partes el Decreto 1.787, y a partir de hoy sera el Decre-to 1.859 que fijar todo los elementos constitucio-nales, legales y doctrinarios a partir de los cuales se crean las Zonas de Defensa Integral Marti-mas e Insulares (Zodimanin), y se establecern

las tareas de nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana en todo los espacios martimos de nuestro pas, debida y legalmente establecidos.

Por eso le he dado la orden a la Almirante en Jefa Carmen Melndez, para que publique este nuevo Decreto 1.859 maana a primera hora y lo demos a conocer. Creo que sera un abuso leerlo completo, tengo ganas, pero sera abusar de us-tedes.

Yo pudiera decir en lenguaje potico que este es un decreto hermoso, porque ha surgido de todo este debate, as que lo hemos blindado por todas sus partes para que estas oligarquas mediticas financiadas por la Exxon Mobil, y digo ms, esta oligarqua meditica de Bogot, deje de mentir. Los tiempos de los abusos y de las influencias de esas oligarquas se acabaron, gracias a Dios, a la Virgen y a la Revolucin Bolivariana.

Cero diplomacias de micrfono Este Presidente que ustedes ven parado aqu no depende de ninguna oligarqua bogotana, ni de ningn lugar del mundo que me d rdenes, que me intimide, que me manipule con faldas ni sin ellas como en el pasado.

Esto lo digo porque, efectivamente, tengo muy buenas relaciones, en este caso con el Presidente Juan Manuel Santos. Tenemos una relacin flui-da con la Cancillera, ms all de diferencias, y las veces que la Cancillera colombiana comete el error de caer en la diplomacia de micrfono, yo inmediatamente llamo y le digo a mi Canciller: Llame a la Canciller de Colombia y dgale que nosotros llegamos a un acuerdo que debe res-petarse, cero diplomacia de micrfono. Si tiene duda sobre algn tema, hablamos directamente, y si la duda es muy grande, va la Canciller para

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all o viene la Canciller para ac; pero si la duda es ms grande, yo me voy para Bogot o para C-cuta o se viene el Presidente Santos para ac.

Nuestras relaciones con Colombia se basan en el respeto, y el respeto es el Derecho Internacio-nal. Ahora hay una campaa en Bogot. Qu casualidad! Una campaa para tratar de acorra-lar al Presidente Juan Manuel Santos contra m, contra Venezuela. Si me pongo a leer todo lo que tengo aqu sobre lo que se dice todos los das en Bogota de m, de nosotros, dgame de Diosdado Cabello, Dios mo, no terminara.

Le pregunto a alguien que conozca bien sobre los temas de Colombia: A quin responde la Re-vista Semana? A quin responden todas esas televisoras?

Yo le digo desde aqu, Presidente Juan Manuel Santos, que debemos mantener las mejores re-laciones de respeto al Derecho Internacional, de respeto entre nuestros pases, ms all de las diferencias de carcter ideolgico, diferencias de Estado, diferencias de polticas, que podamos tener. Nosotros debemos seguir perseverando las relaciones de dilogo directo, de despeje, de asuntos, de cooperacin.

Ay, Dios mo! Algn da se escribir todo lo que hemos hecho y estamos haciendo por nues-tra amada Colombia para que consiga la paz, todo lo que se ha hecho, todo lo que hay que ha-cer y toda nuestra disposicin, mi disposicin de hacer todo. Cuando digo todo, digo todo, no es un decir. Cuando decimos desde Venezuela: Todo, es todo, ms all de lo imaginable hoy.

Cmo es que dice uno de los batallones del Ejrcito Bolivariano? Si es posible est hecho, si es imposible lo haremos. As le decimos a Colom-bia: Si la paz es posible, la ayudaremos a hacer, y

si es imposible tambin. As que, no a la diplo-macia de micrfono, Canciller Delcy Rodrguez.

Ahora, es difcil, compaeros de la oposicin, Gran Polo Patritico, por all est scar Figuera que siempre se sienta de ltimo, por all calla-dito, Oscar Figuera es clandestino, siempre es clandestino, siempre firme. Claro! Clandestina-mente firme, firmemente clandestino.

Yo le pregunto a Venezuela, le pregunto a us-tedes, los que tienen amigos en Bogota, en Co-lombia: Ustedes se imaginan qu en la prensa, televisin y radio de Venezuela todos los das se atacara al Presidente Juan Manuel Santos?

Ustedes se imaginan qu aqu los medios de comunicacin ms influyentes se dedicaran a mal hablar de Colombia y a decir cosas? Yo no las voy a decir aqu porque le tengo mucho amor y respeto a Colombia.

Es una cosa inaudita lo que se hacen contra Venezuela en los medios de Colombia, todos los das, a toda hora. Dgame los medios de la fron-tera, es una promocin permanente del odio, yo solo lo comparo, por lo inaudito, a las declara-ciones de Donald Trump contra nosotros los la-tinoamericanos, los mexicanos, va por el mismo camino.

Yo creo que aqu nadie est de acuerdo con Do-nald Trump, verdad? Dios nos salve!; creo que nadie est de acuerdo con ese pelucn, porque ese s es un pelucn de verdad, tiene su peluca para adelante.

Si ponemos a Donald Trump como ejemplo con lo que hizo, siendo esto el extremo del racismo y del desprecio hacia nosotros, al que creo que re-pudiamos unnimemente 100% de los que esta-mos aqu, de Amrica Latina y el Caribe, vemos que lo que hizo l lo hacen en Colombia en la re-

vista Semana, Caracol, RCN, NT24 todos los das contra m, contra el pas, contra Venezuela, con-tra la memoria del Comandante Chvez y contra el compaero Diosdado, ellos riegan esas aguas del odio y despus quin recoge esas aguas en-venenadas?

No lo voy a conversar con el Presidente Jos Manuel Santos porque l me va a decir que no tiene control sobre eso y tiene razn, l no tiene nada que ver con eso. Pero yo, como Presidente de Venezuela, si viera algo irregular as contra un presidente de otro pas, actuara un poquito aunque sea, llamara la atencin, por lo menos, y dira: Por favor, no promuevan el odio contra Colombia! Llamara la atencin a que no pro-muevan el odio contra el pueblo colombiano ni contra ningn poltico de ese pas.

Ustedes saben que tenemos muchas diferen-cias con Uribe, pero no promovemos el odio con-tra l; de vez en cuando le damos su tatequieto tcnicamente necesario por toda la maldad que nos hace, pero es una diferencia poltica. Si yo llegara a ver al presidente Uribe le diera la mano tranquilamente, despus me echo agua bendita, eso s. Bastante convers con el presidente Uribe cuando fui Canciller.

Convers bastante con el expresidente Uribe durante largas horas, porque siempre me tocaba ir a buscarlo a La Guaira y l mantena largas ho-ras de reunin con el Presidente Chvez, a veces hasta 7 horas, hablando de los temas de la paz en Colombia. Uribe quera que el Comandante Chvez fuera hasta las montaas de Colombia a hablar con el Comandante Marulanda y que una vez que estuviera con l y lo convencieran ini-ciar las conversaciones de paz, l se presentara all, en la selva. Uribe le propuso eso al Coman-

AN

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dante Chvez y Chvez estuvo de acuerdo y lo iba a hacer.

Eso entre muchas cosas que s, porque yo ten-go muchos secretos y no me voy a morir con ellos, algn da los voy a escribir. Tengo pruebas sobre todo esto.

Eso por un lado, pero que permitamos que se haga una campaa de odio contra un pueblo her-mano o contra lderes polticos, compaeros, no! En Colombia se destinan miles de millones de pe-sos para conspirar contra m, contra Venezuela, contra nosotros. No vayan a creer que lo que me hacen a m no se lo estn haciendo a ustedes, pues yo soy Presidente de ustedes, de este pas, y soy un ciudadano igual que ustedes. Algunos de ustedes son mis conocidos e inclusive pudieran ser mis amigos.

No vayan a creer, hermanos, que lo que se haga en Bogot contra m no es contra ustedes tambin. Quizs los que hacen las cosas en mi contra, me respetan ms que a ustedes. Es una reflexin, te-nemos chance de reflexionar o por lo menos yo hacerlo hacia all.

Qu bueno sera que pudiramos dialogar, con-versar, como saben ustedes que lo hacamos cuan-do yo era diputado aqu, pero se es otro tema. Eso se lo dejo a Jos Vicente Rangel en Confidenciales al cierre.

Hay un video que es preocupante y debe ser mostrado, porque hace unos meses atrs pedi-

mos explicaciones a la Canciller y al gobierno de Colombia ya que el exministro de Defensa, Juan Carlos Pinzn, hizo un evento en Colombia donde se habl de Venezuela y donde voceros del esta-blishment estadounidense, funcionarios formados en el Pentgono que han sido subsecretarios de gobiernos muy reaccionarios, seores lderes del departing, como Giuliani, estaban felices. Dice una de ellas que los militares colombianos se estn pre-parando para cuando firmen la paz, el posconflic-to, venir por Venezuela, algo as.

Nosotros le pedimos explicacin oficial al go-bierno de Colombia, porque s que son intrigas del norte, porque nunca entre Colombia y Venezuela, jams en la historia y eso est escrito en los libros sagrados tendremos un conflicto armado binacio-nal, eso est negado y tiene que estarlo, pero hay quienes intrigan, compaeros militares.

En el video se observa una bomba molotov , esta campaa de odio, de intriga gringa y luego tergi-versan un decreto, crean un incidente y llega el desastre. A quin beneficia ese tipo de polticas o sucesos, si llegaran a instalarse como escenario? Al pueblo de Venezuela? Al pueblo de Colombia? A los pueblos de Amrica Latina y el Caribe? A quin beneficia? A los enemigos de nuestra Patria.

Son temas que debemos ir llevando con la ver-dad, que debemos ir disipando con serenidad, con seguridad, con firmeza, con diplomacia, con clari-dad, con gestos nobles en el plano de la diploma-

cia y por eso he venido a esta Asamblea a traer este conjunto de temas. A dnde ms voy a ir, sino a la soberansima representacin de la voluntad popu-lar? Aqu, la Asamblea Nacional, nuestra Asamblea Nacional plural y diversa.

He venido a invocar en su corazn la causa de la paz y la soberana de nuestro pas, a tocar la puerta de su corazn para defender el derecho a la paz que tiene nuestro pueblo, el derecho a la soberana para defender nuestra Constitucin, para defender el de-recho internacional, para seguir avanzando en las polticas de integracin y de unin de Amrica La-tina y del Caribe. Para eso he venido y lo he hecho con el corazn abierto, sabiendo que en muchos ca-sos, como el de ustedes compatriotas de la oposicin, tenemos serias pugnas polticas y las dirimimos.

El 6 de diciembre tenemos una cita, vamos a ver por quin vota el pueblo. El pueblo votar y decidi-r, y a lo que decida le dir amn. Si ustedes ganan, muy bien. Si volvemos a ganar nosotros, las fuerzas patriticas y revolucionarias, muy bien, tiene que haber respeto y reconocimiento. Estar aqu el 15 de enero rindiendo mi examen del ao 2015, y segura-mente ver algunas caras que estn aqu y otras no, pues seguirn en otras tareas. Bienvenida la diatri-ba poltica, la diatriba electoral, la batalla de ideas y la confrontacin de posiciones, aunque a veces se les pasa un poquito la mano de acuerdo a mi apre-ciacin, pero estamos entre venezolanos, caribeos apasionados, que batallamos duro.

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Pero por el amor de Dios y por nuestro pueblo les digo: Tommoslos con la mayor altura, sen-sibilidad Patria y seriedad; no lo llevemos a la charca del debate electorero, se los pido. Ms all de las diferencias y de las circunstancias el pas contina su marcha, a este pas no lo va a parar nadie, ya que tiene su propia dinmica, su propia fuerza.

Quiero mostrarles este video, ya que estoy sus-tituyendo a Walter Martnez tengo que hacerlo bien, esta es una muestra de unos minutos, pu-diera mostrarles el archivo completo del expe-diente que tenemos sobre el anuncio de voceros estadounidenses en territorio colombiano, donde se est preparando a la Fuerza Militar Colombia-na para un conflicto contra Venezuela despus de firmar la paz. Yo he dicho y no soy un ino-centn en poltica, ni en la vida que a pesar de esa intriga nuestro deber bolivariano y nuestro deber chavista es trabajar y ayudar a Colombia en cualquier circunstancia para lograr la paz y superar la guerra que la ha desangrado durante 60 aos, desde que mataron a Jorge Elicer Gai-tn. Paz! Paz para Colombia! Es una gran causa americana, es una gran causa bolivariana. Estoy seguro que algunos no estn de acuerdo con esta idea, pero creo que es justo lo que estoy dicien-do, y debe ser la posicin de Estado, la posicin del pas, de lo dems nos ocupamos despus. Ga-rantizar que la intriga no fructifique all, que la clase poltica colombiana tenga racionalidad en su relacin con Venezuela y nos respete, y que nadie toque a Venezuela, de eso nos encargamos nosotros, que nadie toque a Venezuela nunca; de eso se encargar el pueblo colombiano tambin.

Bueno, esto es solo una parte de lo que se per-mite. Fjense ustedes, una presentacin pblica con la presencia oficial del Ministro de la De-fensa y dosvoceros estadounidenses, una mujer pieza del Pentgono (NSA), no son cualquier-funcionario, son funcionarios del ms alto nivel que ejercen asesora de losEstados Unidos, y en cualquier momento vuelven a cargos de alta im-portancia; yel otro es el seor Giuliani, a quienes llaman como consejeros para elpostconflicto, y lo nico que apuntan es a Venezuela.Ciudadana Canciller, estos son temas que hay que llevarlos de manera directa para despejar y evitar la di-plomacia de micrfonos, crear conciencia, aler-tar, proteger y defender nuestra Patria, hay que tener la paz como gran garanta del desarrollo.

Por ltimo, Presidente de la Asamblea Nacio-nal, compaero Diosdado Cabello, diputados, diputadas, magistrados, magistradas, rectores, rectoras, altos funcionarios del Estado, dirigen-tes de los partidos polticos, de la oposicin y del

Gran Polo Patritico, de acuerdo a la recomen-dacin del Tribunal Supremo de Justicia, en una de sus partes, y al anlisis del Consejo de Estado, me parece conveniente dictar una Ley Habili-tante que permita ordenar frente a estas provo-caciones mltiples e intento de posicionarnos en escenarios que pretendan detener el avance de Venezuela, y el avance de la unin latinoameri-cana y Caribea para ponerle la mano a nuestro pas.

En funcin de ordenar todos estos temas, estoy editando y firmando inmediatamente una Ley Habilitante con Rango, Valor y Fuerza de Ley para crear una comisin presidencial institucio-nal del Estado venezolano para llevar todos los asuntos limtrofes de nuestro pas con nuestros vecinos de Amrica Latina y del Caribe, los casos que estn pendientes por resolver y delimitar, ms all del tema del Esequibo, tema del que he hablado ampliamente el da de hoy.

Esta Ley Habilitante establece la creacin de una sola y nica comisin de Estado con rango presidencial, para que asuma cada uno de es-

tos temas, la cual tendr una secretara tcnica, presidida por el Vicepresidente Ejecutivo, com-paero Jorge Arreaza, y acompaada por los Ministros del Poder Popular para las Relaciones Exteriores y Defensa, Despacho de la Presiden-cia de la Repblica, Procuradura General de la Repblica, Presidente o Presidenta del Tribunal Supremo de Justicia y un representante desig-nado por la Asamblea Nacional; para que est el ms Alto Nivel del Estado, tanto del Poder Judicial como del Poder Legislativo. Esta Comi-sin permitir orientar correctamente, en base al derecho internacional, las relaciones bilate-rales y constructivas, las negociaciones que nos permitan ir resolv