es pura la azucena - (n.otaño)_red

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Es pura la azucena Compila [email protected] Presentación Reproductores de audio Letra de la canción Partitura Archivos adjuntos Paseo por la Playa de Fuente Prior (Mío Burgos) Es pura la azucena Remigio Vilariño & Nemesio Otaño, S.J. Burgos - Agosto 2013 Page 1 of 11 21/08/2013 Compila [email protected]

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  • Es pura la azucena Compila [email protected]

    Presentacin

    Reproductores de audio

    Letra de la cancin

    Partitura

    Archivos adjuntos

    Paseo por la Playa de Fuente Prior (Mo Burgos)

    Es pura la azucena Remigio Vilario & Nemesio Otao, S.J. Burgos - Agosto 2013

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  • Presentacin

    La cancin que te presento hoy, Es pura la azucena, tiene letra de P. Vilario y msica de Nemesio Otao, S.J. Se trata de una de aquellas canciones del mes de Mayo con las que, de nios, obsequibamos a Nuestra Seora al cantar las flores. Hace unos das que me rondaba la meloda mientras paseaba con Nines al atardecer a orillas del Arlanzn, y he buscado para ella la ambientacin que ahora dejo en este PDF dinmico.

    En abril de 2010, escriba Rafael Manero:

    Puesto a enrrollarme, remato "dando una larga torera / sobre el mar y los arroyos" As pues, tal como plantea el debate nuestro Secretario, declive o adaptacin?: la palabra sera "adaptacin". Prieto adapt su forma de componer a las exigencias de la reforma litrgica. Esto llevaba consigo, una mayor sencillez en la escritura sobre un texto en castellano, un menor protagonismo de la Schola y una mayor participacin del pueblo. Podra ser ste el comn denominador de sus composiciones en esta nueva etapa? Sera injusto el considerar esta nueva "manera" como un declive de su talento. El Otao popular del "Es pura la azucena", delicadsima y muy bella meloda con un sencillo acompaamiento que enriquece todava ms su ya "rico pensil", es el mismo del gran Miserere a 5 v.m. Este sera el caso tambin de Prieto. Eso creo.

    ( En la URL: http://www.scholacantorumdecomillas.es/audi-comen-4.htm )

    A partir de la meloda que me asaltaba, y antes de encontrar en Internet el archivo con formato MUS que recoge el canto y la partitura del Repertorio comills, tuve que recomponerla desde el recuerdo e improvisarla con una de las armnicas diatnicas de Blues que me acompaan este verano. Ahora encontrars aqu tres reproductores de audio con sendas interpretaciones de la cancin mariana, la letra, la partitura y el complemento de seis archivos adjuntos.

    Es pura la azucena Remigio Vilario & Nemesio Otao, S.J. Burgos - Agosto 2013

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  • Paseo por la Playa de Fuente Prior (Mo Burgos)

    Reproductores de audio

    Estos tres reproductores de audio te permitirn escuchar sendas interpretaciones de la referida cancin.

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  • Primero

    Es pura la azucena. Solo de armnica diatnica Suzuki-Manji afinada en C ([email protected] ).

    Segundo

    Es pura la azucena. Oral. Conversin de un archivo MUS.

    Tercero

    Es pura la azucena. Superposicin sobre las pistas del segundo reproductor con una armnica diatnica Hohner-Bluesband afinada en E ([email protected] )

    Es pura la azucena Remigio Vilario & Nemesio Otao, S.J. Burgos - Agosto 2013

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  • Paseo por la Playa de Fuente Prior (Mo Burgos)

    Letra de la cancin

    Aunque la msica es del jesuta Nemesio Otao Eguino (1880-1956), la letra de la cancin es del Padre Remigio Vilario, S.J. (1865-1939).

    ES PURA LA AZUCENA

    244.- "Es pura la azucena cuando en abril perfuma su fragancia rico pensil. Pero ms pura de tu divino rostro es la hermosura.

    Es pura la azucena Remigio Vilario & Nemesio Otao, S.J. Burgos - Agosto 2013

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  • Es pura de los mares la dulce brisa y pura de los nios es la sonrisa. Pero ms pura de tu divino rostro es la hermosura. Es pura la plegaria que al cielo sube y puro el amor santo de los querubes. Pero ms pura de tu divino rostro es la hermosura."

    (En la URL: http://www.aragob.es/edycul/patrimo/etno/valtorres/mreligiosos2.html )

    ( En Alcalde, Antonio: Pastoral del canto litrgico. Santander: Sal Terrae (Ritos y Smbolos, 31), 1997, pg. 119 ).

    ( Cfr. edicin en Google Books )

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  • ( En la URL)

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  • Paseo por la Playa de Fuente Prior (Mo Burgos)

    Partitura

    Encontrars una partitura polifnica en los archivos adjuntos (C01_Es pura la azucena_partitura_Finale), procedente de la impresin en PDF de un archivo con el formato Finale Notation File que hemos realizado con la aplicacin Finale 2012 v2012.r3, de MakeMusic, Inc. Insertamos a continuacin una partitura ms sencilla:

    Es pura la azucena Remigio Vilario & Nemesio Otao, S.J. Burgos - Agosto 2013

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  • [ Repertorio Comills. Coleccin de cantos religiosos. Para uso privado. Comillas (Cantabria): Universidad

    Pontificia, s.a., pg. 91]

    ( En Vega Garca-Ferrer, M. Julieta: Conventos de Clarisas Franciscanas de Granada. Nuestra Seora de

    los ngeles. Santa Ins. Santa Clara de Loja. Granada: PDF, 1-07-1994, Pg. 384)

    Es pura la azucena Remigio Vilario & Nemesio Otao, S.J. Burgos - Agosto 2013

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  • Paseo por la Playa de Fuente Prior (Mo Burgos)

    Archivos adjuntos

    Con un simple clic en el interior del recuadro rojo que bordea la captura de abajo, puedes conmutar la vista/ocultacin del panel izquierdo de este PDF dinmico. Dicho panel contiene los archivos adjuntos cuyos titulares y descripcin mnima muestra la siguiente imagen.

    Es pura la azucena Remigio Vilario & Nemesio Otao, S.J. Burgos - Agosto 2013

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  • Paseo por la Playa de Fuente Prior (Mo Burgos)

    Compila [email protected]

    Es pura la azucena Remigio Vilario & Nemesio Otao, S.J. Burgos - Agosto 2013

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    ( En Alcalde, Antonio: Pastoral del canto litrgico. Santander: Sal Terrae (Ritos y Smbolos, 31), 1997, pg. 119 ).

  • [email protected]

    Sticky Note

    Clic en el reproductor de audio, para or un recuerdo de la cancin interpretada con una armnica diatnica Suzuki-Manji afinada en C .

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    na,cia

    cuan-de

    doenlos

    A -jaz -

    brilmi - nes,

    per -Cuan-

    fu -doa-

    mador-

    sunan

    fra-su

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    sil.di -

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    ro ms pu - ra de tu di - vi - no ros - tro es laher -mo - su - ra.|

    Todos

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    3) Es pura de los mares La dulce brisa, Y pura de los nios Es la sonrisa.

    4) Es pura la plegaria Que al cielo sube, Y puro el amor santo De los querubes

    Es pura la azucena

    N. OtaoDespacio y tiernamente

  • EL P. OTAO, ALMA DE LA REFORMA DE LA MUSICA RELIGIOSAEN LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX

    JESS M. MUN E T A

  • I.-DATOS BIOGRAFICOS (1)

    Nemesio OTAO nace en Azcoitia el 19 de noviembre de 1880. Susprimeros estudios musicales (solfeo, piano y rgano) los inicia con los or-ganistas de Escoriaza, Zumrraga, Azcoitia y Mondragn (Victoriano BA-LERDI). Desde nio se considera a OTAO muy bien dotado para la msica,sin llegar a ser un nio prodigio. A los 14 aos ingresa en la preceptorade Baliarrin, siendo nombrado organista y director del coro, Por estasfechas hojea la armona con Faustino SARASOLA, discpulo de GORRITI.En el noviciado de Loyola (1896/98) maneja el rgano Cavaille-Coll, tienela oportunidad de conocer a GUILMANT y al P. Agustn WALDNER, miem-bro de la escuela ceciliana de Ratisbona, quien le anima a conocer elmovimiento ceciliano y la msica de J. S. BACH.

    Al ser destinado a la Iglesia de la Merced de Burgos (1900) se hacecargo del coro. Entabla amistad con Federico OLMEDA, uno de los msnotables compositores y musicgrafos de la poca. Monta y dirige algunasmisas y motetes de HAYDN, MOZART, CHERUBINI.., obras que poco des-pus habra de rechazar por incompatibilidad litrgica (2).

    En el Colegio Mximo de Oa (1901-1903) lee los oratorios deBA C H, HAENDEL, MENDELSSOHN y GOUNOD; las peras de VERDI yW AGNER; la obra para piano de BEETHOVEN, SCHUBERT y CHOP I N.Asombraba su memoria musical, capaz de reproducir al piano obras en-teras.

    Aqu termina la formacin autodidacta, orientada ms a la formacincultural y a conocer repertorio moderno que o un conocimiento de la ar-mona, contrapunto y composicin.

    Destinado a Valladolid (19051907) -aos decisivos-, superar la

    (1) Cfr. LARRAAGA, Victoriano, Introduccin al Cuaderno I de las Obras Completasdel P. Otao. ID EM, Datos biogrficos del P. Nemesio Otao, S. J., Tesoro Sacro Musical,2-1957, pp. 28-36.

    (2) Cfr. OTAO, N., La Msica religiosa y la Legislacin eclesistica, nota, p. 93.

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  • JESUS MARIA MUNETA

    fase autodidacta de la mano de Vicente GOICOECHEA, Vicente ARREGUI,Jacinto R. MANZANARES (armona) y Facundo LA V IA (piano). V. GOI-COECHEA le ensea el canto gregoriano solesmense y la polifona clsicade MORALES, PALESTRINA, GUERRERO y VICTORIA. En el verano de 1904vivir y saborear el canto gregoriano en el Monasterio de Silos, realizan-do los estudios paleogrficos con el P. Casiano ROJO (3).

    Con ARREGUI se adentra en los secretos de la composicin e instru-mentacin. Los artculos de la Civilt Cattolica, firmados por el P. A. DESANTI, le descubren el valor de la Liturgia y el puesto que le correspondea la msica como parte integrante de aquella. Los frecuentes contactos conPEDRELL, -su gua en los estudios histricos y musicologa-, le des-cubren el contenido y sabor del folklore (4). El Motu Proprio de Po X ledefinir de por vida como jaleador de la reforma de la msica sacra,tarea que se inicia en 1905 con un acto pblico sobre el Motu Proprio, alque seguir el I Congreso de Msica Sagrada de Valladolid (1907) y quehabra de cerrarse con el de Madrid (1954).

    Estaba ya sealado apstol de la restauracin, Vea lainmensa labor que haba que realizar en Espaa por el artereligioso, comprend que ese era el camino, dada mi vocacin,y aunque segu da a da todas las orientaciones de la msicamoderna profana, me atuve a la religiosa, aportando a ellacuantos elementos pudieran acoplarse al carcter litrgico. Alsalir de Valladolid en 1907 me senta dueo de m, haba ad-quirido una gran facilidad en todos los estilos (5).

    La revista Msica Sacro-Hispana le pone en relacin con los mejoresmaestros de msica sacra nacionales y extranjeros. Entre estos cabe citara DE SANTI, - OTAO era un doble de A. DE SANT I-, Julio BA S, -secomunicaba con OTAO semanalmente-, PEROSI, MITTERER, GRIESBA-c H ER, DINDY... Su Adagio para rgano ( 1908) coloca a su autor comoun renovador de la msica sacra destinada a este instrumento.

    El perodo ms rico y fructfero de la actividad del P. OTAO fue suestancia en la Universidad de Comillas ( 1910/ 1919). No fue igualada sulabor literaria, direccin coral, su actividad compositiva y an musicolgicaalrededor de la msica sagrada. Mont con su clebre Schola Cantorum uninmenso repertorio de polifona clsica y moderna, tanto de autores na-cionales como extranjeros. All compuso lo mejor de su produccin coraly sus canciones religioso populares, all hizo, -quizs lo ms eficaz pararenovar la msica religiosa de entonces-, crear escuela de composito-

    (3) Cfr. OTAO, Autobiografa, trece folios manuscritos por ambos lados, BibliotecaMusical P. Otao, Loyola.

    (4) Cfr. PEDRELL , Felipe, Cancionero Musical Popular Espaol, Apndice 1: El cantopopular montas, t. II, pp. 77 SS. Barcelona 1958, 3 ed.

    (5) Cfr. OTAO, Autobiograf ia.

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  • EL P. OTAO, ALMA DE LA REFORMA DE LA MUSICA RELIGIOSA

    res, organistas y directores de coro que, al decir de Federico SOPEA, co-nocen de pe a pa la msica profana del tiempo (6).

    Fue separado de la obra que ms quera (1919), de la Schola Canto-rum de Comillas, motivado por la divisin jesutica de la Antigua Provin-cia de Castilla en dos. Su superior general fue tajante. Visita varios pasesde Europa en viaje de estudios, conociendo a Dom MOCQUEREAU en la islaWight (1920). De regreso funda la Schola Cantorum de Burgos; intervieneen el III Centenario de San Ignacio, S. Francisco Javier... investiga enSimancas y en varias catedrales (Ciudad Rodrigo)... hasta que es trasla-dado a San Sebastin (1922). All funda el Crculo Cultural y Accin Ca-tlica, Los Caballeros de San Ignacio, la revista cultural Agere... elColegio de San Ignacio. Tal actividad apostlica y cultural restringe elcampo musical: se reduce al mnimo su quehacer compositivo.

    Yo he sido muchas veces trado y llevado de aqu all,y muchas cosas no se explican en mi vida, si no es recurriendoal voto de obediencia... (7).

    En 1931, ante la situacin poltica creada por la repblica, con la di-solucin de la Compaa en Espaa, obliga al P. OTAO a cobijarse conlos suyos en Azcoitia. Providencialmente este aislamiento va a ser fecundoen nuevas composiciones. Es la revelacin de un nuevo OTAO (Eduar-do TORRES). Compone el gran motete-cantata Tota Pulcra, el Christus fac-tus est, a 6 v. mixtas, Cuatro Canciones Montaesas, Trptico para piano,sobre temas gregorianos...

    Sabiendo que las obras ms extensas eran poco conocidas, no estabadispuesto a ir fabricando churros para el uso diario. Fuera del canto po-pular, que siento profundamente, escribir todo lo mejor y ms grande quesepa si no para los hombres, para los dioses (Carta del 26 de abril de1934).

    La Guerra Civil le sorprende en Azcoitia no sin algn peligro parasu vida. Ya en zona nacional, su temple jesutico le impulsa a estudiar, re-dactar y escribir msica de tema militar, versiones instrumentales y co-rales de los Toques de Guerra de 1769, y otras pginas circunstancialesdel momento (8).

    Una quincena de grandes obras para rgano, entre ellas la Suite Gre-goriana, saldrn de su mano como eplogo de su estro creador.

    A partir de estas fechas, el P. OTAO aparece como figura indiscu-tible de la msica espaola: Director del Conservatorio Nacional de M-

    (6) Cfr. SOPEA , Federico, Historia de la Msica espaola contempornea, pp. 46-47 y148-149, Madrid 1958.

    (7) Cfr. OTAO, N., Comunicacin al V Congreso de Msica Sagrada de Madrid, 1954.(8) Misa de Requiem, inacabada, por los cados de las Brigadas Navarras; Diversos

    Himnos patriticos. Toques de Guerra del Ejrcito Espaol, Burgos, 1939.

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  • JESUS MARIA MUNETA

    sica (1939-1951), Comisario de la Msica, Presidente de la Orquesta Fi-larmnica, Acadmico de Bellas Artes de San Fernando, Gran Cruz deAlfonso X el Sabio, Hijo predilecto de Azcoitia, creacin del InstitutoNacional de Musicologa.

    La labor pedaggica como profesor de folklore y las preocupacionesal frente del Conservatorio restringen su numen compositivo al mnimo.Desde su puesto de direccin intenta por ensima vez crear la Escuela Su-perior de Msica Sagrada, integrando al mejor grupo de maestros: GABIO-LA, GURIDI, TURINA, PARRA, PREZ CASAS, ANGLS, RIPOLLS, PRADO...Una vez ms fracasa en su empeo, sabiendo, -y fue su pena-, que sinescuelas nunca tendremos maestros competentes y doctos (9).

    En 1951 se jubila del Conservatorio quebrantado de salud y se refu-gia en el Colegio de San Ignacio de San Sebastin. Previendo cercana lamuerte, prepara la posible edicin de sus obras y revisa alguna de ellascomo el Tota Pulcra, que va a tener la dicha de verla publicada.

    En 1954, en un carrito de ruedas por estar invlido, dirige su ltimoadis a los asistentes al V Congreso de Msica Sagrada, celebrado enMadrid. Este es su ltimo aliento en favor de la msica sacra del autnticohroe.

    El 29 de abril de 1956 el P. OTAO mora en San Sebastin, cerrandoel mejor y ms bello captulo de la Msica Sagrada de la primera mitaddel siglo XX.

    II.-LA MUSICA RELIGIOSA EN EL SIGLO XIX Y PRINCIPIOSDEL SIGLO XX

    1. Tras la muerte de J. S. BAC H y HAENDEL los compositores lai-cos, que en su mayora estn ligados a las cantoras eclesisticas o a lascapillas de los prncipes y nobles, se apartan de tales mecenazgos y conse-cuentemente de la msica sacra; los que habran de quedar an ligados re-currirn a los procedimientos compositivos ms en boga, derivados de lapera italiana: el aria da capo y los esquemas concertados en los quese alterna el coro, fragmentos solsticos e interludios instrumentales. Lamoda es aceptada sin ningn reparo por los clrigos que se hallan al serviciode las capillas catedralicias.

    El canto gregoriano acabo de desfigurarse desde la pretendida e in-feliz reforma de PALESTRINA y ZOILO. La edicin Medicea era la quesegua mandando en la mayora de las capillas de catedrales, monasteriosy conventos. Los organistas, fascinados por el clavicordio, perdieron todosentimiento de respeto religioso: En Pars, en el momento de la devacin

    (9) Cfr. OTAO, N., La Msica religiosa y la Legislacin eclesistica, nota p. 97. Cfr.OTAO, Autobiografia.

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  • EL P. OTAO, ALMA DE LA REFORMA DE LA MUSICA RELIGIOSA

    slo haba arietas y zarabandas, y durante las vsperas, redobles, minuetos,repiques de campanas, romanzas y rigodones (10).

    Jos SUBIRA seala tres etapas en la decadencia de la msica religiosaespaola del siglo XIX:

    1. Hasta 1835: msica religiosa segn los moldes de la tradicin,con tendencias hacia formas ms libres donde el respeto litrgico dejabamucho que desear.

    2. Con la desamortizacin de bienes eclesisticos (1835), que obliga cerrar monasterios, conventos y capillas musicales, se inicia la cada ver-tical y final de la msica religiosa.

    3. Restauracin iniciada por Hilarin ESLAVA, Francisco ASENJOBARBIERI y Felipe PEDRELL (11).

    La restauracin que pretende el recientemente desaparecido JosSUBIRA se dio ms en el campo de la musicologa que en el cultivo de unarenovacin de la msica litrgica. Es un dato revelador que todo el reper-torio que presenta SUBIRA de Misas de Requiem, composicin por exce-lencia de los autores romnticos-, Te Deum, Miserere, Stabat Mater,Motetes, Responsorios y Lamentaciones, etc., an admitiendo obras deuna cierta categora, ninguna de ellas ha impresionado o ha sido anotadafuera de nuestras fronteras (12).

    Don Hilarin ESLAVA pareca el ms capaz para emprender la re-forma de la msica religiosa, pero aquel tiempo no era el ms indicado porla tirana del estilo operstico italiano que invada todos los sectores mu-sicales. Su clebre Miserere (1835-37) fue calificado por Norberto ALMAN-DOZ, discpulo del P. OTAO, como la mejor pera de ESLAVA. La msi-ca de ESLAVA fue el triste final de toda una poca y de un estilo que se-veramente juzgado y censurado tanto por el Motu Proprio de S. Po Xcomo por los documentos pontificios posteriores y los Congresos Naciona-les de Msica Sagrada ( 13). A pesar de las crticas que recibi la msicasagrada de ESLAVA en la revista Msica Sacro-Hispana, de parte de FelipePEDRELL y del Padre OTAO, un juicio ms correcto ha quedado fijadoen el estudio del P. Jos LPEZ CALO, Hilarin Eslava, compositor demsica sagrada (14).

    Eduardo RINCN seala en el prlogo al libro Espaa desde la peraa la zarzuela, de Antonio PEA Y GOI: Cmo es posible que en el pasde MORALES, CABEZN, GUERRERO y tantos otros pudiera llegar a estan-carse en un letargo de un siglo largo, girar en vaco alrededor del Clasi-

    (10) COLLING, A., Historia de la Msica cristiana, pp. 114-116, Andorra 1958.(11) Cfr. SUBIRA, Jos, Historia de la Msica, pp. 736 SS., Barcelona 1951.(12) Cfr. ID EM, Musique de Espagne, Encyclopdie de la Pliade, vol. II, pp. 382-383,

    Pa r s 1960 .(13) AYAKRA , Jos Enrique, Hilarin Eslava en Sevilla, pp. 73-74, Sevilla 1979.(14) Cfr. LPEZ CALO, Jos, Hilarin Eslava, compositor de msica sagrada, Monogra-

    fa de Hilarin Eslava, Primer Centenario, pp. 121-150, Pamplona 1978.

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  • JESUS MARIA MUNETA

    cisma, del romanticismo y del impresionismo musical -casi la mitad de lahistoria de la msica- sin aportar nada a estos movimientos (15).

    Todos coinciden, como lo hace la legislacin eclesistica, en que lacausa de la pobreza y desorientacin de la msica litrgica est en el ser-vilismo a la pera italiana que sofoc el genio de nuestros compositores.Rossini era el modelo supremo e indiscutido, dir Rafael MITJAINA (16).

    Vicente ARREGUI ( 1871-1925), profesor de composicin y admiradorde la obra del P. OTAO, cuenta esta monstruosidad litrgica: So, so, so,soberano San Roque; -so, so, so, soberano Seor; -que fuiste virgen ymrtir -y tambin madre de Dios. -Arre, arre, arre, arrepentido estoy,que trae SUBIRA como muestra de mal gusto de la msica sagrada. El P.OTAO halla la causa de la ruina de la msica sacra en las disposiciones delConcordato de 1851 que reduca al mnimo los componentes de las capi-llas catedralicias ( 17 ).

    2. LEGISLACIN ECLESISTICA

    En 1912 public el P. OTAO un compendio de los principales do-cumentos de la Santa Sede desde LEN IV (s. IX) hasta nuestros das, bajoel ttulo La Msica Religiosa y la Legislacin Eclesistica (18). Aada co-mo apndice la Carta Pastoral del Cardenal SARTO y las conclusiones delos Congresos de Msica Sagrada tenidos en Valladolid, Sevilla y Barce-lona.

    La autoridad de la Iglesia ha velado desde muy antiguo por la purezalitrgica y del canto, como elemento integrante de la Liturgia. Desde laConstitucin de JUAN XXII (1316-1334), pasando por la crisis planteadaa la polifona sacra durante el Concilio de Trento (1562) a causa de laininteligibilidad del texto litrgico y del carcter profano de muchas com-posiciones (19); la Bula de ALEJANDRO IV (23-IV-1657); la Carta Enccli-ca de BENEDICTO XIX (19-11-1749) en la que se recoge, adems de lalegislacin anterior, el sentir de los concilios y autores eclesisticos sobrela msica sagrada, citando entre stos al P. Jernimo FEIJO en sus diatri-bas contra la Msica en los Templos (20); Las cantadas que ahora seoyen en las iglesias son, en cuanto a la forma, las mismas que resuenan enlas tablas, todas se componen de menuetes, recitados, arietas, alegros, y alo ltimo se pone aquello que llaman grave pero de eso muy poco, porqueno fastidie.

    (15) Cfr. op. cit., pp. 9-10.(16) Cfr. MITJANA, R., La Musique en Espagne, vol. 4, Encyclopdie de la Musique et

    Dictionnaire du Conservatoire, col. 2257.(17) Cfr. SUBIRA , op. cit., p. 543. Cfr. OTAO, Interpretacin de la Polifona segn

    la tradicin eclesistica, Razn y Fe, t. CXVIII (diciembre 1939).(18) OTAO, Nemesio, La Msica religiosa y la Legislacin eclesistica, Barcelona 1912.(19) IDEM, Sentido litrgico de la Polifona y su interpretacin segn la tradicin ecle-

    sistica, discurso pronunciado en la Exposicin de Arte Sacro de Vitoria.(20) FEIJO , J., La Msica en los Templos, Teatro crtico universal, discurso 14.

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  • EL P. OTAO, ALMA DE LA REFORMA DE LA MUSICA RELIGIOSA

    Un Edicto de la SS. CC. de Ritos (16-VIII-1842) advierte que lamsica sagrada ha degenerado en escandalosa profanacin teatral, porusarse instrumentos ruidosos e inusitados hasta ahora... Prohbe termi-nantemente el uso de cajas, timbales, arpas y dems instrumentos delmismo gnero (21).

    A pesar de tanta norma eclesistica los resultados no eran tan efica-ces ni siquiera en San Pedro; mucho menos podra pretenderse un nuevoestilo, ms sobrio y religioso, en Sevilla. Lo teatral, con sus coros y estre-pitosos y expansivas cavatinas que tanto gustaban, llenaba los templos.En 1869, un Requiem en honor de ROSSINI, en la Baslica de San Pedro,fue enriquecido por el director musical (Melchorre BALBI) con fragmentosde peras del compositor, iniciando el aplauso el cardenal que oficiaba,lo que dio lugar a una repeticin de la interpretacin (22).

    Apenas ser nombrado el Cardenal SARTO, Patriarca de Venecia, hom-bre muy sensible por la pureza de la liturgia y de la msica sagrada, ycontando con los buenos servicios del joven PEROSI, maestro de la capillamarciana, escribe una Carta Pastoral a su clero sobre el significado y usode la msica sagrada (1-V-1895), creando las bases litrgicas y jurdicas,que luego habra de recoger, siendo ya Pontfice, en el Motu Propio del22 de noviembre de 1903 (23).

    El peso del Motu Propio de Po X iba a caer con toda su fuerzasobre la msica religiosa espaola e italiana. En Centroeuropa se dabaya un despertar de la liturgia y de la msica sacra desde mediados delsiglo XIX. Dom Prspero GURANGER y sus monjes solesmenses luchabanrehabilitando la liturgia y el canto gregoriano. En Alemania se volva haciala polifona clsica palestriniana. Eran conocidos Karl PROSKE (1794-1861) llamado Musicae restaurator ingeniossimus, Franz Xaver WITT(1834-1888), fun ad dor en Bamberg de la Sociedad Ceciliana, cuyos obje-tivos eran la promocin del canto gregoriano, el canto popular, la polifonapalestriniana, la polifona moderna y la msica de rgano. El ms clebrefue el musiclogo y director de la Escuela de Msica Sacra de Ratisbona,Franz Xaver HABERL (1840-1910), editor de la obra de PALESTRINA .

    Los pioneros en Italia, ya en los albores del siglo XX, habran de serLorenzo PEROSI y Angelo de SANTI.

    De destacar alguno entre nosotros, durante el siglo XIX, habra quecitar nombres de esta tierra, ESLAVA, GORRITI, Nicols LEDESMA... y, so-bre todos ellos, a Vicente GOICOECHEA, que se adentra ya con prestigioen el siglo XX.

    La tarea reformadora estaba reservada al Padre OTAO.

    (21) OTAO, op. cit., pp. 95-97.(22) HUTCHINGS, A. J. B., Historia General de la Msica, dirig. por A. ROBERTSON y

    D. STEVENS , t. III, p. 340, Madrid 1972.(23) Cfr. OTAO, op. cit., pp. 155-165.

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  • JESUS MARIA MUNETA

    EL MOTU PROPRIO DE PIO X

    Se ha llamado el Cdigo jurdico de la Msica sagrada.He aqu las ideas que han de servir de norma a la Iglesia durante ms

    de sesenta aos y cuyo pregonero en Espaa va a ser el P. OTAO.- La msica sagrada, como parte integrante de la Liturgia, tiende a

    la gloria de Dios y santificacin de los fieles (I.1).- La msica sagrada debe tener en grado eminente las mismas cua-

    lidades de la Liturgia:SANTIDAD - exclusin de todo lo profano.BONDAD DE FORMAS - que sea arte verdadero.UNIVERSALIDAD - que el oyente quede bien impresionadoI ,2) .

    - El CANTO GREGORIANO es el gnero musical por excelen-cia por ser el propio de la Iglesia romana, prescripto exclusiva-mente en algunas partes de la Liturgia. Ha sido tenido siemprecomo acabado modelo de msica religiosa. De aqu se deduce:Una composicin religiosa ser ms sagrada y litrgica cuantoms se acerque en aire, inspiracin y sabor a la meloda grego-riana (II,3).

    - La composicin que ms se acerca es la POLIFONIA clsica, es-pecialmente la que deriva de la Escuela Romana, que llega a laperfeccin con PALESTRINA... (II, 4).

    - Como la Iglesia reconoce el progreso de las artes... se admiten lascomposiciones de la msica moderna que posean bondad, serie-dad y gravedad (II, 5).

    - En consecuencia ha de excluirse de la Liturgia:- Lo profano,- Las reminiscencias de motivos teatrales.- Las composiciones que en su forma externa imiten las com-

    posiciones profanas (composicin en estilo concertado).- El gnero menos adecuado a las funciones del culto es el teatral,

    tan de boga en Italia en el siglo pasado. Ofrece el gnero teatralla mxima oposicin al canto gregoriano y a la polifona clsica(II,6). (24).

    (24) El Motu Proprio excluye la lengua vulgar de las solemnidades litrgicas (III, 7),prohibiendo mutilar, alterar o posponer el texto litrgico (8-9). Se excluyen aquellas formascompositivas que puedan separarse de las restantes y reemplazarse por otras (10-11). (OTAO:Como sucede con las misas de Bach, Haydn, Mozart y Beethoven, etc.), as mismo quedanexcluidos los salmos llamados de concierto (las formas del gnero melodramtico: arias,recitados, allegros...). Se prohbe el uso del piano, los instrumentos fragorosos o ligeros, comoel tambor, el chinesco, los platillos y otros semejantes (19), las bandas de msica (20).

    Para el cumplimiento del Motu Proprio se pide a los obispos y a las comisiones queestos nombren, que cuiden: que la msica sea buena en s, buena para los cantores ybuena en la ejecucin. Cfr. OTAO, op. cit., pp. 82-98. Cfr. MANZARRAGA , T., La Msica sa-grada a la luz de los documentos pontificios, Madrid 1968.

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  • EL P. OTAO, ALMA DE LA REFORMA DE LA MUSICA RELIGIOSA

    III.-EL P. OTAO, ALMA DE LA REFORMA DE LAMUSICA SAGRADA

    Hemos sealado cmo algunos pases se adelantan en la restauracinde la msica sagrada: el Canto Gregoriano en Francia, la Polifona en Ale-mania. Lorenzo PEROSI, lanzado a la reforma por el Cardenal SARTO, lle-gar a ser un hito para los maestros de capilla del siglo XX. Cuntas fa-cetas tienen en comn PEROSI y OTAO!

    1. ASIMILACIN DE LA DOCTRINA ECLESISTICA

    Antes de la publicacin del Motu Proprio, OTAO estaba al corrientede los nuevos aires que soplaban para la Msica sagrada en Alemania yFrancia, a travs de los artculos del P. Angelo de SANTI, -inspirador delMotu Proprio y ms tarde primer director del Pontificio Istituto di Mu-sica Sacra de Roma-, escritos en la Civilt Cattolica. Dir el P. OTAO:Fue mi mentor y con quien me carteaba todas las semanas... y l fuequien me orient maravillosamente en todas las cuestiones relativas a lamsica sagrada (25).

    El estudio y la puesta en prctica como compositor y director fueemprendido con singular empeo.

    Sea el Motu Proprio nuestro devocionario estilstico, cuyos consejosy mandatos pongamos luego en prctica con suavidad en los modos, perocon firmeza en la constancia (26).

    Su estudio era prctica laboriosa: asimila el canto gregoriano y lapolifona clsica guiado del hombre mejor dotado del momento, VicenteGOICOECHEA. GOICOECHEA era un verdadero talento, una eminencia,y por sus obras sabis que no ha habido msico ms grande en nuestrosltimos tiempos en Espaa, dir OTAO (27). La armona y la composi-cin moderna la estudia con Vicente ARREGUI (1871-1925). Hay un es-tudio autodidacta y febril en aquellas fechas al contacto con las obras deL ISZT, BRAHMS, GOUNOD, FRANK. El canto popular lo saborea bajo latutela de Felipe PEDRELL:

    A l debo tambin mi primera iniciacin en el folkloreespaol. El fue quien me dio a conocer toda su coleccin ri-qusima de canciones populares... Cuando an las tena ma-nuscritas, las manej yo y las tuve en Comillas. As me asi-mil perfectamente la cancin popular espaola (28).

    Esta robusta preparacin, apenas delineada, le proporciona una clari-

    (25) OTAO, N., Comunicacin al V Congreso de Msica Sagrada, Madrid 1954.(26) IDEM, Discurso de Apertura al I Congreso de M. Sagrada, Valladolid, abril de 1907.(27) IDEM, Comunicacin al V Congreso de M. Sagrada.(28) ID E M, art. cit.

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  • JESUS MARIA MUNETA

    videncia con respecto a la msica sagrada, que suscita, en los congresosque inspira y dirige, el entusiasmo y el fervor de los maestros de capilla,organistas, cantores, que van a considerarse amigos y discpulos de OTAO.

    Las ideas litrgicas acerca de la funcionalidad de la msica sagrada,extradas de la legislacin eclesistica, en particular del Motu Proprio, con-figuran el futuro musical de OTAO. Ideas expuestas machaconamente enlas ponencias a los Congresos y en la revista que l funda y dirige, MsicaSacro-Hispana, y que pueden resumirse en estas dos:

    - La msica es parte integrante de la Liturgia, no es seora, sino laesclava de la Liturgia y del Culto.

    - La msica tiene razn de medio, no de fin (29).

    2. LOS CONGRESOS DE M SICA SAGRADA

    El P. OTAO fue el inspirador y el organizador de los Congresos deMsica Sagrada que tanto habran de contribuir a la renovacin de la mis-ma. El objetivo inmediato recaa en la presentacin del Motu Proprio dePo X, constatar la situacin de la msica que se interpretaba en catedra-les y templos, y extraer consecuencias prcticas. El P. OTAO fue impulsa-do y defendido por la jerarqua. Con 27 aos daba forma a los planes ydirige el I Congreso tenido en Valladolid contra todas las objeciones deGOICOECHEA. Fue un primer paso muy bien dado hacia la reforma dela msica sagrada en Espaa. Fruto de este congreso fue la aparicin dela revista Msica Sacro-Hispana y el Manual de Canto Gregoriano (30).

    En noviembre de 1908 tiene lugar el II Congreso en Sevilla, am-plindose el contenido de las conclusiones del de Valladolid. En el III Con-greso tenido en Barcelona (noviembre de 1912) se concretan an ms lasconclusiones anteriores, sobre todo en lo concerniente al estudio y prcticadel canto gregoriano, polifona y msica figurada-moderna en los semina-rios. Se esboza la creacin de una Escuela de Msica Sagrada en Barce-lona, invitando a los profesores Luis MILLET, Francisco PUJOL y Vicen-te M. de GIBERT, para que estudien, de acuerdo con el Prelado, los me-dios ms eficaces para la puesta en marcha. Se declara constituida la Aso-ciacin Espaola Ceciliana, aceptndose el reglamento propuesto por elP. OTAO. Era sabedor del peligro de un rgido cecilianismo, de la mono-tona, de la falta de vida, espritu y saber de muchas composiciones que,no teniendo nada de profano, tampoco tienen mucho de divino (31).

    (29) OTAO, N., Msica Litrgica Moderna, comunicacin al III Congreso de MsicaSagrada.

    (30) Cfr. OTAO, La Msica Religiosa y la Legislacin Eclesistica, notas al pie depgina. IDEM, Autobiografa. Cfr. BA S, Julio, Manual de Canto Gregoriano, edicin espaolanotablemente ampliada y retocada por el autor y acomodada por el P. Nemesio Otao,Dsseldorf 1909.

    (31) Cfr. OTAO, N., La Msica Religiosa y la Legislacin Eclesistica, pp. 166-203.IDEM, La Msica Litrgica Moderna, ponencia al III Congreso de Msica Sagrada, Barcelona1912.

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  • EL P. OTAO, ALMA DE LA REFORMA DE LA MUSICA RELIGIOSA

    Los Congresos divulgaban las normas emanadas del Motu Proprio,despertaban un enorme entusiasmo por el canto gregoriano solesmense yla polifona clsica. Se daba un golpe mortal a las formas opersticas tan enuso, quebrndose poco a poco la oposicin de ciertos maestros de capillareticentes por lo que pareca una innovacin. Hasta los seglares aceptaronla nueva orientacin de la msica sagrada. En primera lnea, entre losmaestros eclesisticos, encontramos a GOICOECHEA, VILLALVA, SUOL,PRADO, ROJO, ROMEU, DONOSTIA, TORRES, VALDS...; entre los seglares,vemos a PEDRELL, URTEAGA, GURIDI, GABIOLA, MILLET, LAMBERT , BEO-B I D E. . y tantos otros.

    3. MSICA SAC RO- HI SPANA

    Otros de los frutos en pro de la renovacin de la msica religiosa vinode la mano de la revista Msica Sacro-Hispana (1907-1922), creada y di-rigida por el P. OTAO. La revista, surgida del Primer Congreso, abra suspginas a los maestros consagrados y a los noveles compositores, en formade artculos, composiciones, armonizaciones y edicin de obras antiguas.All se hizo crtica, con seudnimos de Cecilio y Gregorio, de la msicareligiosa del siglo anterior, de los Grandes Misereres, grandes y enormesaberraciones artsticas y litrgicas, por cuya desaparicin hemos hecho...fervientes y enrgicos votos (32).

    En la revista dej el P. OTAO parte de su vida; su quehacer com-positivo quedaba constatado peridicamente, sus artculos translucan susentir sobre la msica sacra. La revista era creacin y hechura suya. Sirvipara hacer escuela en nmero y calidad de compositores (33). Cuando laobediencia lo aparta de Comillas y lo enrolan en la creacin del Colegiode San Ignacio de San Sebastin, se da el golpe de gracia a la publicacinde msica sacra ms importante de entonces. La potente figura del P. IRUA-RRIZAGA, gran amigo del P. OTAO, habra de recoger la antorcha en larevista Tesoro Sacro Musical (1925), al transformar el Tesoro Musical deIlustracin del Clero (1916), asumiendo el espritu y contenido de la de-saparecida Msica Sacro-Hispana.

    Luego viene, para dar satisfaccin a los organistas, la Antologa Or-gnica Espaola (1909), con obras propias, media docena de autores delsiglo XIX, entre ellos ESLAVA, BALERDI, OLMEDA, GORRITI, y de sus ami-gos y colaboradores como GURIDI, GABIOLA, MAS y SERRACANT, URTEA-GA... Nombres que transpasan fronteras, causando admiracin. Una nueva

    (32 ) Ib id .(33) Cabe citar a Goicoechea, E. Torres, L. Iruarrizaga, E. Mocoroa, J. M. Usandizaga,

    Usobiaga, Villalva, Ms y Serracant, Ageras, Romeu, Cumellas Rib, Lambert, Arabaolaza,Urteaga, Massana, Beobide, Vads (premiado en el 1.Guridi, Almandoz, Erausquin, J. Bas...

    Concurso de Msica Sacro Hispana),

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  • JESUS MARIA MUNETA

    Antologa Orgnica Prctica (34) con obras propias y de compositoresmodernos aparece en dos tomos en 1919.

    4. LA SCHOLA CANTORUM DE COMILLAS

    Fue fundada por el P. OTAO durante el curso 1910/11, llegandoa concertar en sus mejores momentos ms de 130 voces mixtas (nios yhombres). La Schola ha dado aos de gloria y prestigio a la Universidady a la msica religiosa espaola. All se cre un escuela de maestros decapilla y organistas de primera fila que hicieron posible, bajo el magisteriode OTAO, el cambio que peda el Motu Proprio de Po X en casi todaslas catedrales espaolas. En Comillas se formaron y ayudaron al P. OTAOlos maestros de capilla RUIZ AZNAR, ALMANDOZ, ARTERO, USOBIAGA, SA-GARMNAGA.. lstima no tener grabaciones de aquellos aos! El P. PRIE-TO, su discpulo y sucesor, recogi una Schola formidable (1920), y unosxitos en las ltimas dcadas, a travs del disco, que hubiramos deseadoverlos compartidos con su fundador. Pero aquel coro fue gloria y labor deOTAO, con sus Semanas Santas, su formidable repertorio de polifona cl-sica de PALESTRINA, MORALES, GUERRERO y VICTORIA, y, entre los mo-dernos, de GOICOECHEA y las propias robustas creaciones corales. En susconciertos de saln la Schola interpretaba oratorios de LISZT, BACH,DVORAK, FRANCK, HAENDEL, MENDELSSHON y WAGNER... y obras cora-les modernas de NICOLAU, MILLET, PUJOL, LAMBERT , GURIDI y las suyaspropias (35).

    El perodo de Comillas (1910/ 1919) acaso sea la mejor obra queyo he hecho en este mundo (36).

    Su mejor repertorio, sus composiciones populares, en estilo y ritmogregoriano, sus potentes canciones a 5 y 6 v. mixtas, la Suite vasca -granpoema coral-, el clebre Miserere a 5 v. mixtas -superior al de su maes-tro GOICOECHEA-, la Marcha de San Ignacio, el Repertorio Msico SalTerrae -cancionero popular religioso-...

    El mismo P. OTAO enjuicia aquellos aos:

    He tenido la mala suerte de haber gustado las mielesde aquel gran coro de Comillas, que form y dirig por nueveaos, y para el que escriba sin ningn miedo obras a cinco yseis voces mixtas. Aquella Schola Cantorum se puso a tantaaltura, que poda darlo todo. En cambio, yo no he dado ape-nas obras para dos y tres voces, fuera de las canciones popu-lares, en las que s he puesto toda mi alma (37).

    (34) Cfr. OTAO, Nemesio, Antologa Orgnica prctica, para las funciones eclesisticascon obras de organistas espaoles contemporneos, Casa Erviti, San Sebastin 1919.

    (35) Cfr. ARREGUI, Vicente, La Schola Cantorurm de Comillas, rev. Musical Hispano-Americana, julio 1914, pp. 6-8.

    (36) Cfr. OTAO, N., Comunicacin al V Congreso de Msica Sagrada.(37) Cfr. OTAO, N., Comunicacin al V Congreso de M. Sagrada.

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  • EL P. OTAO, ALMA DE LA REFORMA DE LA MUSICA RELIGIOSA

    Jos ARTERO, auxiliar del P. OTAO en la preparacin de la Schola,dir: Cuntas scholas de Seminarios y Corales han recibido generososimpulsos de aquella schola o de sus miembros activos o de los que prc-ticamente conocieron sus bienhechores influjos y luego llegados a jerarquashaban de implantar en su jurisdiccin lo que en Comillas admiraron! FueComillas para el P. OTAO palestra y megfono para aprender y difun-dir (38).

    Vicente ARREGUI al visitar Comillas con el nico objeto de conocer laorganizacin de su Schola Cantorum, escribe un detallado reportaje sobrela misma, aadiendo estos juicios: Ya era sonada la hora de la desapari-cin de esa tradicional ignorancia del noventa por ciento del clero espaol:ya era sonada la hora de la desaparicin de esa msica teatral, exenta dereligiosidad y de buen gusto: ya era sonada la hora de la desaparicin deesos escndalos religiosos... Ya era sonada la hora de la desaparicin demisas, como aquella clebre, y cuyo autor no he de citar de propsito, enque se cantaban a grito pelado sesenta y nueve amenes... (39).

    IV.-SU CREACION MUSICAL SAGRADA

    No pretendo dar el catlogo de las obras religiosas del P. OTAO; es-capan al cometido de esta ponencia. Tras su muerte se convoc a los msamigos y eminentes compositores de msica sagrada para preparar la edi-cin completa, que ya preparaba el P. OTAO durante sus ltimos aos deenfermedad. Se programaron 14 volmenes, 9 de msica religiosa y 5 demsica instrumental y folklrica espaola. El antiguo orden ha sido va-riado en lo ya publicado: el V Cuaderno que inicialmente se destinabaa Himnos varios, recoge las obras para rgano.

    Hasta el ahora se ha publicado:

    I Cuaderno: Ciclo de Navidad, Hechos y Dichos 1956.II Canciones Marianas, Hechos y Dichos, Zaragoza 1956.III IV

    Canciones Eucarsticas, Hechos y Dichos, Zaragoza 1959.Canciones al S. Corazn, Hechos y Dichos, Zaragoza 1963.

    V Obras Orgnicas, El Mensajero, Bilbao 1966.VI Semana Santa, Casa Erviti, San Sebastin 1971.

    Si el P. OTAO fue el alma de la msica sagrada como portavozdel Motu Proprio de los congresos, a travs de la revista Msica Sacro-Hispana, creando escuela y estilo en Comillas, lo es ms en su tarea decompositor religioso. Crea un repertorio que abarca toda la exigencia mu-sical del culto: la cancin popular religiosa para el pueblo, las canciones

    (38) Cfr. AR T E RO, J., El Patriarcado del P. Otao, Tesoro Sacro Musical, 2-1957,p. 37-39.

    (39) Cfr. ARREGUI, V., art. cit., p. 7-8. PR IETO, Jos I., El R. P. Nemesio Otao, S. J.,organizador y compositor, T.S.M., 2-1957, pp. 26-27.

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    al estilo gregoriano tan utilizadas en las parroquias y comunidades reli-giosas, los motetes polifnicos y las composiciones para rgano para lasscholas y los maestros organistas.

    En todo su quehacer compositivo rompe amarras con el pasado in-mediato nacional. Es tal su vivencia del sentido litrgico, de la msica co-mo integrante de la liturgia -carcter funcional-; es tal el entusiasmopor el canto gregoriano, que ste ha de ser tema y sugerencia de la mayorade sus composiciones; es tal su ingenio y grandiosidad en el rgano, quesu creacin no encuentra modelos en los compositores nacionales inme-diatos. Si lanzamos nuestra mirada nos fijamos unas veces en el virtuosis-mo de LISZT, otras en la serenidad ondulante de C. FRANCK, en la progre-sin armnica de MAX REGER, o en el fluir sonoro que no se detiene deWAGNER o RICHARD STRAUSS.

    1. LAS CANCIONES RELIGIOSAS POPULARES

    Las breves composiciones populares son las ms universales y lasque han dado mayor nombre al autor. La temtica de estas pginas hacenreferencia a la Navidad, a la Virgen, a la Eucarista y al Sagrado Corazn.El Cuaderno I, 15 canciones son propias y el resto (17) son armonizacio-nes de villancicos y melodas populares. De las 68 composiciones marianasque se publican en el Cuaderno II, estn escritas en estilo popular y gozande tal carcter ms de 40 (Venid y vamos todos, p. 15; Estrella hermosa,p. 40; Es pura la azucena, p. 30; Slvame, Virgen Mara, p. 96 y 98). Esel Cuaderno III -canciones eucarsticas- el que contiene las composicio-nes ms populares y conocidas, tanto las de estilo y ritmo gregoriano enlatn (O sacrum convivium, p. 19; O quam amabilis es, p. 20), como lasque llevan texto castellano (Venid a m, p. 34; Jess, vivir no puedo, p. 39;Viene ya mi dulce amor, p. 41).

    El Cuaderno IV contiene las composiciones al Sdo. Corazn de Jess;42 obritas entre armonizaciones a melodas gregorianas y populares, ypropias. Algunas de estas cancioncillas han estado en labios de todos (Due-o de mi vida, p. 16).

    Juicios a las Canciones religiosas populares:

    Luis URTEAGA: La genialidad est en crear una artstica cancin, ystas (canciones eucarsticas) son buenas, artsticas e inspiradasen grado superlativo. Y llevan, adems, acertadsimo acompaa-miento, que les sirve de adecuado marco y en el que se revela lamano del maestro (40).

    Jos Mara OLAIZOLA: En cierta ocasin le o decir al Padre: Noparece sino que solamente soy el autor de Dueo de mi vida. S

    (40) Cfr. URTEAGA, Luis, Introduccin al Cuaderno III.

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  • EL P. OTAO, ALMA DE LA REFORMA DE LA MUSICA RELIGIOSA

    mi queridsimo Padre, le contest. En toda su inmensa obra degeniales melodas populares, el Dueo de vida hay que colocarloen la cspide (41).

    El Mtro. Conrado del CAMPO contestando al discurso del P. OTAO,con ocasin de la entrada de ste en la Academia de Bellas Artes de SanFernando (21 de junio de 1943) dice: El P. OTAO ha conseguido crearun extenso y valioso repertorio de ntimos poemas corales -un verdaderocancionero religioso y popular- en que abundan las pginas maestras-que para clasificarles de tales, poco importa la relativa brevedad de sudesarrollo-, verdaderamente impresionante, por lo que en ellas se encie-rra de noble y ponderado equilibrio, de sobriedad litrgica y de sano per-fume campesino, avaloradas por el prestigio de un estilo intachable, cor-dial y acendrado, y por una escritura limpia, robusta y de moderno trazo,en la que no se advierte la ms leve sombra de afectacin o de inadecuadopropsito efectista (42).

    2. CANCIONES EN ESTILO Y RITMO GREGORIANO

    El P. OTAO estudi profundamente el canto gregoriano en su aspec-to meldico y modal, no en el aspecto paleogrfico o semiolgico por noser stos posibles. De la mano de GOICOECHEA lleg a dominar el reper-torio y el estilo solesmense, conocido ste en el Mtodo del P. SUOL y,ms tarde en Le nombre Gregorien, de Dom MOCQUEREAU, y las MelodasGregorianas, de Dom POTHIER, En 1920 pas una gran temporada al ladode Dom MOCQUEREAU en la abada solesmense, exilada en la isla de Wight.

    Las composiciones en estilo y ritmo gregoriano alcanzan la lnea maes-tra, la serenidad y pureza, el encanto y sencillez que supo darles DomPOTHIER a las suyas. Baste recordar el O sacrum convivium, O quamambilis es, Anima Christi, sanctificame...

    Elenco: (de los seis cuadernos publicados):- Obras escritas en imitacin rtmica gregoriana, en latn (13).- Escritas al estilo gregoriano, texto vulgar ( 18).- Armonizacin de melodas gregorianas (27).- De las 22 composiciones para rgano (Cuaderno V), ocho llevan

    temtica gregoriana expresa, ms una titulada Cancin en estilogregoriano (p. 44). Entre ellas se encuentra la Suite Gregoriana(1937), en memoria de Dn. Eduardo TORRES, escrita en cuatropartes sobre los incipit gregorianos del Alleluia-Psllite, RexPacficus, In pace in idipsum, y sobre el recitado salmdico delcuarto modo gregoriano (Deuterus plagalis).

    (41) Cfr. OLAIZOLA Y AZCUE, Jos Mara, Introduccin al Cuaderno IV. ARTERO, Jos,Introduccin al Cuaderno I. RUIZ AZNAR, Valentn, Introduccin al Cuaderno II.

    (42) Cfr. URTEAGA, Luis, Introduccin al Cuaderno III.

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    La Polifona por estar al servicio del culto ahonda sus races en elcanto gregoriano al que glosa, como en los Misereres y los himnos o cn-ticos litrgicos (Veni Creator Spritus, Benedictus, Magnficat, Venite po-puli).

    3. POLIFONAS DE SEMANA SANTA

    La Schola Cantorum de Comillas con su solemne celebracin de la Se-mana Santa oblig al P. OTAO a la composicin de todo un repertoriosacro, uno funcional y otro de ms vuelos, que sola interpretarse en losOficios de Maitines y Laudes y restantes celebraciones litrgicas del TriduoSacro. El repertorio comillense se complet ms tarde (1933), en su reti-ro de Azcoitia, con varios Misereres, Vexilla Regis prodeunt, Pange lingua,a 4 v. i. Tambin incluye el Cuaderno VI un Chistus factus est y un Mise-rere a 3 v. mixtas (1908), homenaje al Christus y Miserere, de V. GOI-COECHEA.

    Esta coleccin polifnica de Semana Santa es la ms importante paraconocer la tcnica armnica y contrapuntstica, el manejo de las voces ysu reflejo sonoro, as como la expresin religiosa. Era una recreacin mo-derna del Officium Hebdomadae Sanctae, de Toms Luis de VICTORIA.El bloque de 18 responsorios, en estilo afabordonado, con cadencias detradicin polifnica, han gozado en los seminarios y pequeas scholas deun prestigio solamente superado por los del maestro abulense. Desde supublicacin (43) hasta hace pocos aos, los Responsorios de OTAO se in-terpretaban en los seminarios, catedrales y casas religiosas de Espaa y deotras latitudes. La sencillez armnica y modal (acordes de tnica, dominan-te y subdominante, cadencias perfectas y plagales, crculos breves modu-lantes a los tonos relativos...) obtiene suma funcionalidad y una gravedadexpresiva muy honda.

    Junto a los esquemas de polifonas homfona -recitadas-, hay quesumar el Miserere (1933) a 4 v. i., para un coro incipiente, el Miserere(1914) a 4 v. m., el cntico Benedictus (1914) a 4 v. i., tomado de laSalmodia Orgnica, de A. de CABEZN, y los himnos para la procesin eu-carstica del Jueves Santo, obras escritas en homofona coral, en la lnea ycon idntico efecto sonoro que produce el elemental motete O salutarisHostia, de L. PEROSI.

    El gran estilo polifnico, con el sello ms depurado de nuestros cl-sicos, lo encontramos ya esbozado en el Christus y Miserere (1908), escritoa 3 v. mixtas. Ser el Chistus de 1933 a 6 v. mixtas y el grandioso Mise-rere comillense (1914), a 5 v. mixtas, una de las obras ms monumentalesde carcter litrgico, en lo que llevamos de siglo. Dentro de la SemanaSanta de Comillas (1915-1918), el Miserere a 5 v. mixtas era la obra cum-

    (33) Msica Sacro Hispana, abril 1916.

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    bre y fuera de serie, que impresionaba al grupo de msicos que acudan aestas celebraciones. Es esta obra superior a la homnima de GOICOECHEA,reconocida as por el mismo maestro del P. OTAO. El joven IRUARRIZAGA,que gir en sus comienzos en torno al P. OTAO, dir tras las audicionescomillenses de la Semana Santa: El P. OTAO se ha mostrado en esteMiserere un verdadero coloso como tcnico y como artista. Posedo de unprofundo sentimiento dramtico, ha hecho una obra de enorme peso, cuyassonoridades, llenas de novedad y grandiosidad, suavemente subyugan elnimo del que las escucha... digna de figurar al lado de las geniales pro-ducciones de BRAHMS y Max REGER (44).

    El conjunto de estas obras, de tanta utilidad en la Liturgia solemne dela Semana Santa, dieron el golpe mortal a los restos de polifonas decaden-tes y de mal gusto del siglo anterior. Sevilla, sede del II Congreso deMsica Sagrada, evit como pudo la supresin del Miserere de ESLAVA. Fueel Cardenal SEGURA Y SENZ, quien, aplicando severamente el Motu Pro-prio de PO X y apoyndose en las opiniones del P. OTAO, P. DONOSTA,PEDRELL, ALMANDOZ e, incluso, FALLA, -algunas de ellas muy seve-ras- (45), prohibe en 1945 su interpretacin por incompatibilidad con laliturgia. Eliminando el Miserere de ESLAVA, sern interpretados en adelantelos de OTAO, GOICOECHEA, PALESTRINA y PEROSI (46).

    En su refugio de Azcoitia compone la cantata Tota pulcra (47), a6 v. mixtas, solos de tenor y bartono, y gran rgano. Es la gran obracoral, concertada con un rgano, que asciende con sabor mstico, dando en-trada a la entonacin gregorianizante del tenor y respuesta glosada delcoro, sucedindose los dilogos del slo con el coro con breves fragmentosinterludiales del rgano. Un rgano, que potencia su sonoridad con nuevey diez sonidos en oleadas sucesivas. Su tcnica avanza con respecto a po-lifonas anteriores, los pentagramas se abarrotan de notas y cromatismos,se matizan al mximo la dinmica y la aggica, para crear con palabras deEnrique MASS, una grandeza csmica que sobrecoge y trasciende el tiem-po y el espacio, una fuerza vital que desborda los estrechos moldes hu-manos. Todo ello lo consigue, asociando la armona y el contrapunto, laescritura vocal horizontal y vertical, utilizando las disonancias con liber-tad, vertebrando con orden y claridad el proceso tonal, en lnea con lameloda infinita de Wagner.

    Un estudio detallado del Tota Pulcra, para su autor su mejor obramoderna, ha sido realizada por Enrique MASS (48).

    (44) IRUARRIZAGA , Luis, Miserere a cinco voces del P. Nemesio Otao, Ilustracin delClero, XII, Madrid 1918. pp. 35-36.

    (45) Cfr. ANSORENA , Jos Luis, Monografa de Hilarin Eslava, Introduccin, pp. 3-7.(46) Cfr. AYARRA, op. cit., pp. 87 S S.(47) OTAO, N., Tota pulcra, para gran coro a 6 voces mixtas y solos, con acompaa-

    miento de gran rgano, Barcelona 1956.(48) Cfr. MASSO, Enrique, El Padre Otao y el Motete moderno. Notas para el estudio

    de su Obra, Tesoro Sacro Musical, 2-1957, pp. 40-42.

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  • JESUS MARIA MUNETA

    4. LA OBRA PARA RGANO

    Son 22 las composiciones para rgano que presenta el Cuaderno V,incluyendo las tres marchas, versiones de la Marcha Real Espaola (1921),Antigua Marcha de Infantes (1937) y el Himno Pontificio (1917).

    Las composiciones para rgano representan un punto culminante delOrgano Espaol. La temtica preferentemente gregoriana, la exposicinarmnica y contrapuntstica dentro de la tcnica del rgano, desconocidaen el siglo anterior; la escritura semiclavicembalista y ambigua de loscompositores anteriores deja paso a la ampulosa, virtuosstica, de sonori-dad plena que anuncia su Adagio (1908), de visible influencia wagneriana,por su cromatismo y circular modalidad.

    La Suite Gregoriana (1937-1940), escrita en cuatro partes sobremotivos gregorianos, posee ambicin arquitectnica, riqueza estilstica ytorrencial sonoridad en el Alleluia-Psllite y en el Salmo Sinfnico. En laI Parte -Alleluia Psllite- evoca la sonoridad orquestal de R. STRAUSS,por la acumulacin simultnea de motivos meldicos, rtmicos y grficos(totalidad de sonidos en agregados mviles que es capaz de pulsar el orga-nista). Oratio Vespertina, sobre el tema Rex pacificus, est planteada sobreesquema modal, doble pedal, y agregaciones de cuartas superpuestas (sp-timas), de sabor impresionista. La pgina es ms lrica y de menos dificul-tad que la primera. El sabor impresionista se esparce en la tercera parteIn Pace, donde se potencia al mximo la dinmica expresiva. Muchas de lasindicaciones expresivas (acentos, filados, esforzandos), anotadas en estaspginas, van ms all de las posibilidades reales del rgano (doble pedal yutilizacin simultnea de la expresin), pueden ayudar a la intencionalidadde la interpretacin.

    El Salmo Sinfnico, cuarta parte de la Suite, de estructura tripartita,desarrolla el tema del cuarto modo gregoriano, amplindolo a modo demeloda infinita, as como la dinmica del piano al fuerte y la aggica,como es ya habitual, Emplea procedimientos tcnicos strawinskianos (agre-gados de segundas y terceras a contratiempo para efectos rtmicos) e im-presionistas (escala exatonal). El Allegro final, con arranque exatonal enel manual, lanza al espacio toda la capacidad sonora del instrumento y tientaal mximo la virtuosidad del intrprete.

    Cul es el estilo tcnico del P. OTAO en estas obras? Es un estiloeclctico, afn al de los autores postromnticos. No llevo en todo ello afnalguno de determinadas tendencias, ni reparo en frmulas prescritas; lasadapto todas, con tal de que me sirvan para exteriorizar la idea que lasanima (49).

    Por estos esbozos de la Suite Gregoriana adivinamos que los modelosde la escritura orgnica del P. OTAO no pudieron ser los organistas na-

    (49) Cfr. LARRAAGA , V., Prlogo a las Obras Completas del P. Otao, S. J., Cuader-no I, p. XI.

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    cionales del siglo XIX, ni J. LIDN, Mximo LPEZ, H. ESLAVA, GORRITI,A. OLLER, E. BARRERA, J. FORNET, V. ZUBIAURRE , N. LEDESMA, UBEDA...Los Nueve Versillos para la Salmodia del Primer Tono (1939), por sugracia y serenidad, por la brevedad y menor dificultad, estn ms cercadel rgano de Santa Clotilde, de los discpulos de Csar FRANCK.

    Otro gran organista y compositor de esta tierra, el P. DONOSTIA , fuetambin heredero de los discpulos de Csar FRANCK, pero su escrituraAlbum para rgano, que vera la luz en la revista Msica Sacro-hispana, esms ntima, recogida y mstica que la de OTAO. Con sabor impresionistaescribira el Itinerarium Mysticcum, de lnea ms difana y por lo tanto msutilizable, sin alcanzar las pretensiones de gran rgano, virtuosista y or-questal de OTAO. En aqul hay ms asimilacin de FRANCK, en ste deMAX REGER, WAGNER y an STRAUSS (50).

    Las peculiaridades tcnicas del conjunto de la produccin para rganoy los breves comentarios a cada composicin hechos por Enrique MASSO,son ajustadsimos:

    Su obra es tan perfecta, ya desde sus comienzos, quedifcilmente ser superada despus. Posee ya un justo sentidode la proporcin y equilibrio formal, y, en consecuencia, unadisciplina de pensamiento, y sin merma de vuelo expresivo,con perfecta lgica compositiva, a lo que hay que aadir unprofundo conocimiento de las posibilidades tcnico-expresivasdel instrumento (51).

    Si el rgano de OTAO, reducido en su conjunto y escrito en dife-rentes momentos, no cre propiamente una escuela de composicin de-finida, s signific un nuevo estilo, ms orgnico, de lnea europea, quehabra de encontrar eco en sus admiradores, compaeros y discpulos que,salvando estilos, forman una plyade: TORRES, URTEAGA, GABIOLA, GU-RIDI, ZUBIZARRETA , DONOSTIA, ELDUAYEN, IRUARRIZAGA , THOMAS, PU-JADAS, MASSANA, PADRO, ARABAOLAZA, PRIETO, ALCACER...

    V.-LORENZO PEROSI Y NEMESIO OTAO

    Existe una afinidad entre ambos reformadores de la msica sagrada.Descubrimos puntos de coincidencia: el genio musical precoz, una prime-ra formacin autodidacta con lectura de los grandes maestros, una segundaetapa de formacin clsica concienzuda, PEROSI con HABERL en Ratisbona,OTAO con GOICOECHEA en Valladolid. Ambos aceptan responsabilida-des, nada ms estrenar la juventud. PEROSI se hace cargo de la clebre

    (50) Padre DONOST IA, Organo, vol. XI, Archivo Padre Donostia, Lecaroz (Navarra),1975.

    (51) Cfr. MASSO, E., Introduccin al Cuaderno V. Obras Completas del P. Otao,Ed. El Mensajero, Bilbao 1966.

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    Capella Marciana de Venecia, contando tan slo 22 aos. OTAO se cons-tituye en pionero de la reforma de la msica sagrada; inspirando y diri-giendo el Congreso de Valladolid, contaba 27 aos. Ambos son creadoresde coros: uno organiza la Capella Marciana introduciendo voces infan-tiles y luego lo har con la Capella Sistina, el otro organiza coros enBurgos Valladolid, Oa, culminando con la Schola Cantorum de Comi-llas, Los datos comunes se hacen ms expresivos, si se estudia su activi-dad compositiva bajo el signo del Motu Propio.

    Lorenzo PEROSI fue catapultado a la Capella Sistina por el CardenalSARTO y, elegido Pontfice, ser aqul quien lleve a la prctica las nor-mas y deseos del Motu Propio. Como director perpetuo de la capilla pa-pal (1898) ha de permanecer hasta su muerte (1956), acaecida unos me-ses ms tarde que la de OTAO. PEROSI, desde la Sistina, se convertiren modelo de todos los maestros de capilla del mundo catlico. Sus mi-sas y motetes se imponen en las capillas y hasta en los elementales corosde nuestras parroquias, como acontece con las canciones religiosas deOTAO, que llegan a estar en labios de todos.

    Sus melodas y sus pequeos motetes funcionales poseen un perfume;es la sencillez y esa cercana que se aprecia con respecto al gregoriano.Cualidad que surge del modo de sentir religiosamente, con profunda fe, laliturgia y el arte, ajeno a toda vulgaridad.

    Ambos estuvieron relacionados con los mejores maestros nacionales:PEROSI con MASCAGNI, MALIPIERO , TOSCANINI..., el P. OTAO con PE-DRELL, GRANADOS, MILLET , ARREGUI... y, ya en Madrid como director delConservatorio y Comisario de la Msica, con todo el mundo musical.

    Las facetas compositivas son muy semejantes: la cancin religiosa po-pular, los motetes funcionales litrgicos, las composiciones para rgano.Las misas eran exigidas de continuo por la Capilla Papal, de ah las cua-renta misas perosianas a 1, 2, 3 y 4 voces, y las veintids grandes partitu-ras -oratorios y cantatas-, gnero no cultivado por OTAO. De ste seconserva una Misa de Requiem inacabada, una serie de poemas polifnicossobre temas populares y msica de cmara.

    Uno y otro se han hecho clebres, no tanto por las obras grandes, demayores proporciones, siempre de difcil montaje, sino por las pginas bre-ves, aquellas que irradian una extraordinaria facilidad y funcionalidad parael pueblo y los pequeos coros. Estas composiciones barrieron aquellasmusiquillas que arrastraban el lastre de mal gusto del siglo XIX. Lo con-siguieron, porque supieron inyectar esa pureza y sencillez que emana delgregoriano, que era lo que peda Po X (52).

    Y como sucede a los grandes espritus, ambos se conocan y se aprecia-ban, estando al tanto de sus mutuas composiciones. Es el P. Victoriano

    (52) Cfr. MUNETA , Jess M., Primer Centenario del nacimiento de Perosi, T.S.M., 1-72,pp. 17-21.

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    LARRAAGA, gran amigo y primer bigrafo de OTAO, quien nos hace elregalo de la carta de despedida que dirige el P. OTAO a PEROSI con mo-tivo de jubilarse del Conservatorio de Madrid ( 1951).

    ...Le recuerdo a Ud. siempre en primer lugar. Desdeque comenc a conocer sus obras a los 15 aos, le he seguidoa Ud. da por da ininterrumpidamente. Faltara al ms ele-mental deber de amistad y de gratitud, si no me despidiera deUd. especialmente. S que me ha seguido Ud. con gran carioy simpata, desde que me conoci a travs de la revista M-sica Sacro-Hispana y del inolvidable Padre Angelo De SANTI,de gloriosa memoria.

    No me olvide, hasta que nos encontremos en el cielo. Esde esperar que el Santo Papa, PO X, se encargar de propor-cionarnos all un sitio escogido para los promotores de su ideams obsesionante (53).

    El P. OTAO quiso terminar su carrera de promotor y alma de la re-forma de la msica sagrada, acudiendo al V Congreso de Msica Sacra,celebrado en Madrid en 1954. Se despidi, en medio de una impresionan-te salva de aplausos, de los cientos de congresistas amigos y discpulos.

    Cuando yo empec, aqu no se oa nada decente, se can-taba mal, se interpretaban obras muy malas, muy condenadaspor la Iglesia, y desde entonces ac se han aprendido muchascosas. Yo soy bastante exigente y, sin embargo, comprendoque se ha hecho en pocos aos un adelanto enorme... Ahorase canta bastante bien. No digo que sea una perfeccin; masen todas partes se oyen unos motetes bien cantados, el cantogregoriano y la polifona sagrada han entrado en el Seminario,iglesias y catedrales, ocupando el puesto de honor que les co-rresponda. Y hay agrupaciones corales que merecen nuestragratitud y aplauso. Las cosas van bien, no hemos perdido eltiempo. En cincuenta aos no hemos volado... pero creedmeque se ha avanzado mucho... (54).

    (53) Cfr. LARRAAGA , V., Introduccin al Cuaderno I, p. XV.(54) Cfr. OTAO, N., Comunicacin al V Congreso de Msica Sagrada. Las partituras,

    documentos, libros y revistas del P. Otao se encuentran en la Biblioteca Musical P. Otao,Archivo Histrico de Loyola, Azpeitia (Guipzcoa).

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