entrevista a laura bravo - daniel expósito sánchez

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8 LAURA BRAVO por Daniel Expósito Sánchez ENTREVISTA Doctora en Historia del Arte por la Universidad Autónoma de Madrid, Laura Bravo ha mostrado una notable inquietud por la investigación y difu- sión en torno a la fotografía, lo que le ha llevado a recorrer diversas instituciones internacionales como la Maison Européenne de la Photographie, en París, la Tate Modern de Londres o el MoMa de Nueva York. Autora de Ficciones certificadas: invención y apariencia en la creación fotográfica (1975-2000) (Metáforas del Movimiento Moderno, 2006), en la actualidad es profesora y coordinadora del Programa de Historia del Arte en la Facultad de Humanidades de la Universidad de Puerto Rico (Recinto de Río Piedras). ¿Cuál es la visión de la gestión cultural que se desarrolla en España, en general, y Andalucía, en particular, desde el otro lado del Atlántico? Creo que, por desgracia y por muy paradó- jico que parezca, Puerto Rico y España son dos mundos un tanto desconocidos entre sí. A pesar de que compartimos tantos lazos his- tóricos y tantos denominadores culturales co- munes, la que acontece en la actualidad del mundo del arte en el otro lado del océano es un misterio para cada uno de nosotros. Por eso, proyectos como el que ha gestado la Uni- versidad de Granada contribuyen enorme- mente a crear vínculos entre artistas, críticos o gestores, en general, que antes no existían. Sí es cierto que desde la Isla del Encanto se conoce la realidad expositiva y museística es- pañola por su calidad y por su incansable di- namismo. La proliferación de nuevos museos y centros de arte, así como de proyectos per- sonales o gubernamentales, es un hecho que se reconoce, y que España supone un ejemplo de apoyo a la cultura y de conservación y di- fusión del patrimonio artístico incuestionable. Si bien es cierto que el fantasma de la crisis ha viajado más rápidamente que los proyectos que sobreviven y que nacen a pesar de ella, lo cierto es que en Puerto Rico se valora, pero también se echa de menos, un apoyo sólido de fondos públicos hacia la creación artística y hacia la promoción cultural, que finalmen- te recaen en la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos. La escasez, los constantes obstáculos burocráticos y la falta de periodi- cidad de algunas ayudas son, en muchas oca- siones, un factor de desaliento común en la vida de este vecino transatlántico. ¿Y qué hay de la escena artística? No cabe duda de que Andalucía se reconoce como la cuna de grandes artistas y de grandes nombres de la cultura, desde Diego Veláz- quez a Pablo Picasso y García Lorca, así como de hitos artísticos como la Mezquita de Cór- doba, la Alhambra o la Catedral de Sevilla. Si

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Entrevista realizada a Laura Bravo, profesora de Historia del Arte en la Universidad de Puerto Rico (Recinto de Río Piedras).

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  • 8LAURA BRAVOpor Daniel Expsito Snchez

    ENTREVISTA

    Doctora en Historia del Arte por la Universidad Autnoma de Madrid, Laura Bravo ha mostrado una notable inquietud por la investigacin y difu-sin en torno a la fotografa, lo que le ha llevado a recorrer diversas instituciones internacionales como la Maison Europenne de la Photographie, en Pars, la Tate Modern de Londres o el MoMa de Nueva York. Autora de Ficciones certificadas: invencin y apariencia en la creacin fotogrfica (1975-2000) (Metforas del Movimiento Moderno, 2006), en la actualidad es profesora y coordinadora del Programa de Historia del Arte en la Facultad de Humanidades de la Universidad de Puerto Rico (Recinto de Ro Piedras).

    Cul es la visin de la gestin cultural que se desarrolla en Espaa, en general, y Andaluca, en particular, desde el otro lado del Atlntico?

    Creo que, por desgracia y por muy parad-jico que parezca, Puerto Rico y Espaa son dos mundos un tanto desconocidos entre s. A pesar de que compartimos tantos lazos his-tricos y tantos denominadores culturales co-munes, la que acontece en la actualidad del mundo del arte en el otro lado del ocano es un misterio para cada uno de nosotros. Por eso, proyectos como el que ha gestado la Uni-versidad de Granada contribuyen enorme-mente a crear vnculos entre artistas, crticos o gestores, en general, que antes no existan.

    S es cierto que desde la Isla del Encanto se conoce la realidad expositiva y musestica es-paola por su calidad y por su incansable di-namismo. La proliferacin de nuevos museos y centros de arte, as como de proyectos per-sonales o gubernamentales, es un hecho que se reconoce, y que Espaa supone un ejemplo de apoyo a la cultura y de conservacin y di-fusin del patrimonio artstico incuestionable. Si bien es cierto que el fantasma de la crisis ha viajado ms rpidamente que los proyectos

    que sobreviven y que nacen a pesar de ella, lo cierto es que en Puerto Rico se valora, pero tambin se echa de menos, un apoyo slido de fondos pblicos hacia la creacin artstica y hacia la promocin cultural, que finalmen-te recaen en la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos. La escasez, los constantes obstculos burocrticos y la falta de periodi-cidad de algunas ayudas son, en muchas oca-siones, un factor de desaliento comn en la vida de este vecino transatlntico.

    Y qu hay de la escena artstica?

    No cabe duda de que Andaluca se reconoce como la cuna de grandes artistas y de grandes nombres de la cultura, desde Diego Velz-quez a Pablo Picasso y Garca Lorca, as como de hitos artsticos como la Mezquita de Cr-doba, la Alhambra o la Catedral de Sevilla. Si

  • 9Andaluca es un enclave con el que muchos crea-dores y, sobre todo, jve-nes estudiantes, quieren tener contacto directo.

    bien es cierto que hay que potenciar la comu-nicacin entre artistas y gestores culturales andaluces y puertorriqueos actuales, Anda-luca es un enclave con el que muchos creado-res y, sobre todo, jvenes estudiantes, quieren tener contacto directo. Creo que es un campo de relaciones de tremendas posibilidades.

    Lo que s parece es que, salvo contadas excep-ciones, existe una ausencia de crtica de arte que vaya ms all del elogio fcil o interesado.

    Fjate que no comparto esa perspectiva. La realidad de la crtica de arte que conocemos en Puerto Rico no se limita a ese mito de la alabanza movida por in-tereses econmicos o por lazos de amistad. La crtica de arte es en s un gnero muy diverso, que va desde el breve catlogo de una exposicin en una gale-ra (que al fin y al cabo constituye un ensayo en el que se destacan los aciertos de la propuesta de un artista) hasta el texto que se publica en un peridico de gran difusin o en una revista online especializa-da, e incluso el catlogo extenso propio de una publicacin de un gran museo. Creo que la misin del crtico es describir, analizar, ex-plicar, interpretar, y claro est, valorar lo que tiene ante su mirada y en su mente. No me gusta pensar que la crtica se limita solamen-te a sealar lo bueno o lo malo en una pro-puesta artstica, puesto que no podemos pasar por alto la capacidad de buscar ms all de lo evidente, de desentraar el por qu, de buscar referencias iconogrficas o tericas en la obra de un creador plstico. La calidad de los argu-mentos y la solidez con la que se defienden las perspectivas del crtico, por otro lado, me lle-van a pensar que la crtica es un gnero nada sencillo de practicar.

    La crtica espaola Anna Mara Guasch da una definicin de crtica tan breve y sencilla como enigmtica: La crtica es el arte de decir el arte. Defiendo totalmente esta visin del cr-tico como un escritor especializado que sabe narrar en palabras lo que el artista cuenta con

    imgenes. Y, en mi opinin, la mejor crtica es la que nos deja pensando, aquella que nos hace querer saber ms de un artista, la que nos hace desear ir a visitar una exposicin de arte, la que nos deja con ganas de aprender.

    Cules son, en tu opinin, las diferencias ms notables entre los estudios de Historia del Arte a un lado y a otro del Ocano?

    La diferencia fundamental entre un Bachi-llerato en Historia del Arte en Puerto Rico y una Licenciatura en la misma materia en una universidad espaola recae en que en Espa-a los estudios universitarios se concentran

    ms en la disci-plina protagonista. La mayor parte de los cursos de una Licenciatura se en-focan, por lo tanto, en la Historia del Arte, mientras que en Puerto Rico, los estudiantes univer-sitarios pasan sus dos primeros aos

    tomando cursos de otras materias tales como Filosofa, Espaol, Literatura, incluso Biologa o Psicologa. Aunque en esos primeros semes-tres comienzan estudiando algn curso gene-ral de Historia del Arte, es en los dos ltimos aos donde despega su formacin directa-mente vinculada con la disciplina. Los estu-diantes en Espaa acaban sus estudios, por lo tanto, con una formacin ms especializada en la disciplina que eligen estudiar. Este he-cho puede entenderse como una desventaja para los que estudian en Puerto Rico, pero hay que considerar tambin que estos acaban con una formacin ms global, lo cual les ayuda a entender y a contextualizar muchos aspectos propios de las metodologas de la Historia del Arte.

    Por otro lado, otra diferencia que habra que destacar es que los cursos en la Universidad en Puerto Rico tienen un nmero de estudian-tes mucho ms reducido que en la espaola, puesto que no pasan de 30 estudiantes por sa-ln. Por lo tanto, la educacin se hace mucho ms individualizada, y la relacin entre estu-

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    Se calcula que en un solo da en la actualidad se ha-cen ms fotografas de las que se hicieron a lo largo de los cien primeros aos de vida del medio.

    diantes y profesor es ms estrecha. Estrategias de enseanza como los debates, discusiones en grupo o presentaciones orales, que por el tamao de muchos cursos en Espaa son di-fciles de implantar, son la orden del da en el sistema puertorriqueo. En Espaa se sue-le dar ms nfasis al conocimiento, mientras que en Puerto Rico se alienta ms la capacidad de descubrir, de interpretar y de actuar que el estudiante tiene ante ese conocimiento.

    En el mbito acadmico boricua, s se hace es-pecial nfasis en el arte contemporneo, algo casi inimaginable en comunidades autnomas como la andaluza.

    Bueno, aqu habra que tener tambin en cuenta el arraigo de cada comunidad a sus tradiciones artsticas. Momentos como el Re-nacimiento y estilos como el Barroco o el Ro-coc, sin olvidar, claro est, el arte musulmn, han hecho de Andaluca un referente interna-cional en creaciones arquitectnicas y artsti-cas. Ese maravilloso foco cultural es difcil de eclipsar por otros movimientos artsticos. En Puerto Rico, por otro lado, existen etapas y nombres de radical im-portancia en su trayec-toria histrico-artstica, como son las creaciones de los tanos, la produc-cin de Jos Campeche (pintor del siglo XVIII discpulo de Luis Paret durante su destierro en la Isla), de Ramn Fra-de, de Francisco Oller (quien trabaj con los impresionistas en Pars), as como la impor-tancia de la arquitectura militar, con los for-tines de San Felipe el Morro y San Cristbal o el Cuartel de Ballaj. Sin embargo, hay que enfatizar que es a lo largo del siglo XX y espe-cialmente en la actualidad cuando se ha pro-tagonizado una autntica efervescencia arts-tica. Existen muchas y excelentes propuestas creativas en el panorama actual boricua. Tal vez nuestra asignatura pendiente es traspasar las fronteras de la Isla y dar a conocer con ms fuerza lo que se produce entre sus lindes na-turales, sobre todo en esa otra orilla del At-lntico.

    Con Ficciones certificadas llevas a cabo una verdadera indagacin en el universo de la fo-tografa a lo largo de casi tres dcadas. De dnde surge ese inters? Por qu ese intervalo de tiempo?

    Mi inters en la fotografa surge, en un prin-cipio, durante mis estudios de Licenciatura en Historia del Arte, que es donde muchos universitarios descubrimos las posibilidades creativas que tiene ese medio. Recuerdo que, como parte de una de las clases que cursamos, visitamos la coleccin de fotografa de la Bi-blioteca Nacional de Madrid y, entre cianoti-pos y daguerrotipos, descubr una profunda atraccin por la foto. Al momento de afrontar la formacin doctoral, tena ya claro que que-ra dedicar varios aos de mi vida a estudiar algo relacionado con esta disciplina. Por aquel entonces, la fotografa digital estaba despun-tando con mucha fuerza, lo cual traa al es-cenario histrico y terico continuos debates acerca de la verdad que tradicionalmente se ha asociado a este medio. Lo que ms des-pert mi curiosidad fue apreciar que nume-rosos fotgrafos que trabajaban en esas tres

    ltimas dca-das que sealas incidan con su produccin en demostrar que la asociacin de la fotografa con la realidad o con la verdad se haba cons-truido sobre un mito, pero que

    no lo hacan a travs de propuestas digitales, sino con tcnicas fotogrficas muy tradiciona-les y con un planteamiento ms cercano a la teora y a la historia. Artistas como Joan Font-cuberta, Sophie Calle, Duane Michals, Tina Barney o James Casebere son algunos de los artistas que se analizan entre las pginas de Ficciones certificadas, puesto que sus trabajos fueron un punto de inflexin en la creacin fotogrfica de las dcadas finales del siglo XX. En ese espacio de tiempo en el que el debate sobre la verdad fotogrfica se concentraba en el potencial de los trucos digitales, su produc-cin artstica marc protagonismo dentro del

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    medio, demostrando que la fotografa anlo-ga es un autntico arma para engaar.

    Hasta dnde llega hoy da la banalizacin de la fotografa como un medio artstico? Pienso, por ejemplo, en aplicaciones como Instagram.

    Creo que la fotografa ofrece una infinidad de posibilidades como medio creativo en la actualidad que, lejos de banalizarla, la hacen ms rica y ampla su potencial y su alcance a cualquier tipo de pblico. Hay que tener pre-caucin, claro est, para no confundir una fo-tografa cualquiera, de las que todos hacemos a diario, con una obra de arte creada en el me-dio fotogrfico, aunque, como sabemos, en el mundo artstico actual ambos mbitos se nu-tren mutuamente. Elementos como la mirada del fotgrafo, la composicin, la textura, el concepto o la intencin del artista, entre otros muchos elementos, no son incompatibles en el arte actual con la facilidad de reproduccin del medio ni con los reducidos costes de los aparatos.

    Por otro lado, la proliferacin de imgenes fotogrficas que se crean hoy en da es literal-mente asombrosa: se calcula que en un solo da en la actualidad se hacen ms fotografas de las que se hicieron a lo largo de los cien primeros aos de vida del medio, contando desde su nacimiento en 1839. Sin embargo, el devenir del tiempo nos demuestra que la masificacin que permiten medios como la fotografa no plantea una enemistad con su potencial artstico. Baste recordar, por ejem-plo, la ya vetusta propuesta de Umberto Eco en Apocalpticos e integrados. En 1859, en un momento en el que este medio despega-ba en su potencial reproductivo y en el que los fotgrafos luchaban por ser reconocidos como artistas, al igual que los pintores, Char-les Baudelaire escribi un texto fascinante so-bre su visita al Saln de Pars. Con muy poca fortuna visionaria, al augurarle a la fotografa el destino de ser la muy humilde sierva del arte, escribi lo siguiente: Un Dios venga-dor ha atendido a los ruegos de esta multitud. Daguerre fue su Mesas. Y entonces se dice: Puesto que la fotografa nos da todas las ga-rantas deseables de exactitud (eso creen, los insensatos!), el arte es la fotografa. A partir

    de ese momento, la sociedad inmunda se pre-cipit, como un solo Narciso, a contemplar su trivial imagen sobre el metal. Una locura, un fanatismo extraordinario se apoder de todos esos nuevos adoradores del sol (). Aunque con una distancia temporal de ms de siglo y medio, el anlisis del crtico francs parece ser eco tambin de lo que sucede hoy da con las prcticas que me planteabas: la necesidad del ser humano por crear imgenes, pero sobre todo, por ver reflejada su propia imagen en este caso la fotogrfica y por compartirla, en-traa una fascinacin inmortal.

    Como conclusin, hblame sobre Visin Do-ble.

    Visin Doble es una publicacin digital que tiene pocos meses de vida, puesto que naci este pasado marzo, pero que crece progresi-vamente tanto en la calidad de sus colabora-ciones como en difusin, tanto dentro como fuera del mbito boricua. Se trata de una re-vista de crtica de arte enfocada hacia lo que acontece en la actualidad artstica de Puerto Rico. Visin Doble abarca diversos gneros, puesto que all se exploran y se analizan expo-siciones abiertas en museos, galeras o centros de arte; se publican entrevistas a artistas puer-torriqueos, se realizan anlisis crticos de la produccin de estos creadores o de publica-ciones que se hayan realizado recientemente, e incluso se informa sobre las exposiciones que artistas locales estn realizando a una es-cala internacional. Aunque la creacin y la ex-posicin artstica gozan de una gran vitalidad en la Isla, notbamos que la respuesta crti-ca y escrita a lo que sucede aqu da a da no era acorde con aquellas, y que era necesario analizar propuestas que de otro modo quedan sin documentar. Adems, www.visiondoble.net representa una oportunidad material para que crticos que gozan de una carrera slida puedan difundir su conocimiento y para que jvenes escritores que representan el futuro de la crtica de arte en Puerto Rico tengan una plataforma donde publicar sus perspectivas y comenzar a ejercer esta hermosa profesin que es analizar el arte.

    Fuente de la fotografa: Alberto Aponte