En México se bebe para presumir un estatus o fraternizar, para ligar, para negociar, por amistad. La bebida te acerca, te desinhibe para conseguir diferentes fines: amorosos, sexuales, de negocios, dice Ana Vázquez Colmenares, experta en imagen y relaciones públicas.

"El beber y dejar caer los nombres de bebidas exclusivas, exóticas o cotizadas; mencionar cosechas, etiquetas, reservas, añejamientos; distinguir las mezclas de las maltas te puede dar un estatus superior, te da ´caché´; poder", agrega Vázquez Colmenares.

Los consumidores de tequila son "originales, poco inhibidos, sin miedos, auténticos y sacan lo mejor de sí mismos. Revelan un yo interior escondido, posiblemente llegando a los límites, sin romper las reglas del juego en las relaciones sociales, siempre guardando la cordura", según Francisco Quijano Legorreta, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Tequilera.

"Beber es un acto social. La cerveza la toma todo el mundo. Y no sólo los gobers preciosos toman coñac", comenta Sophie Arvernin, directora general de Grandes Viñedos de Francia.

Una cantina, un bar o un antro en la playa. Cualquier lugar es bueno para tomar un gran tequila. "Derecho o cocteleado". El tequila se toma sin limón, sin sal y sin gestos. No interesa mucho la celebración, el tipo de negocio, las relaciones públicas (fraternizando) o la fiesta.

Se toma como aperitivo o digestivo, va muy bien con cualquier tipo de comida mexicana, básicamente la preparada de maíz, con mucho picante, mariscos y un buen corte de carne a la parrilla.

Hay un consumidor llamado "purista, quien defiende la autenticidad del tequila, no lo aceptan saborizado, e incluso aceptan una mayor graduación -40% o 42%- de alcohol", comenta Quijano Legorreta.

"El vodka es la bebida de moda. Ahora la toman los chavos. Tiene mayor demanda porque es la única permitida en las dietas", señala Sophie.

"Se toma derecho y congelado. Cocteleado o tónic, es un aperitivo, y hace muy buena sobremesa. Se acompaña de pescados, una buena comida rusa, o quizá con algunas comidas nórdicas".

Es una bebida bien hecha. Un buen referente es que el whisky es para el papá y el vodka para los hijos, añade la directora Arvernin.

La cerveza posiblemente no da buen estatus. Entra el juego de las marcas, es mucho menos sensible, se toma en automático. Es natural. No se fijan si hay mejores o no, dice Sophie Arvernin.

Todo el mundo toma cerveza, para quitar la sed, para el calor, por el picante, el aburrimiento e indudablemente en el estadio.

Los whiskys son destinados para los mayores de 40 años, hombres empresarios de trago largo. En México no hay producción de esta bebida, todos son importados.

"Se toma derecho y en las rocas en la sobremesa acompañado de una buena comida. Es buen relajante, después de un día de chamba.

"El whisky es también un acto social", indica Sophie Arvernin.

"Es una bebida de mucho estatus, es recomendado para los diabéticos y no es barato. Es para empresarios", sostiene.

Los que toman whisky representan 12% o 15% del universo de bebedores. La gente normalmente no se emborracha con whisky. Tomarlo es para la pose, quien quiere celebrar no toma whisky, es una bebida para platicar, para pasar el rato, dice Juan Pablo Garmilla, gerente general de operaciones del bar Celtics y con 23 años de experiencia,

"Los coñacs son tragos digestivos, se usan para cerrar negocios entre empresarios. También los toman los gobernadores de Puebla", bromea por su parte Arvernin.

"La moda es hacer maridajes, escoger una buena combinación entre coñac y puro. Da mucho estatus, se combina con un postre". dice.

Los cumpleañeros y los casados utilizan siempre las champañas. Es un vino de celebración. No se come con él, únicamente se toma al final de comida. Muy poca gente lo toma como aperitivo.

El pop tiene todo el status del mundo. Es el clímax de la celebración, el punto exacto de la celebración. Son caros. Se toma frío, en copa champañera y cuando alguien quiere quedar bien con una chava, comenta Sophie.

Muy poca gente toma mezcal, tiene la imagen que tuvo el tequila en un momento dado, de ser la bebida proletaria. Se está reivindicando. El mezcal es el "coñac mexicano". Es una bebida artesanal, mucho más interesante que el tequila, señala la directora general de Grandes Viñedos de Francia. Arvernin agrega que se puede encontrar en restaurantes mexicanos de abolengo, todos tienen mezcal.

En México se está volviendo una novedad vanguardista, finaliza Sophie Arvernin.

Un mezcal se toma por gusto, en una buena cantina o un restaurante de lujo, que tenga ese respeto por dar buenas bebidas. Se toma derecho. Se mezcla con botana, sal de gusano y tercios de naranja, no limón. Y se acompaña con tlayudas, cecina, con mole negro.

Para Juan Pablo Garmilla, cualquier edad, cualquier clase social es buena para tomar cerveza, porque no te embriaga tanto.

"Tiene un sabor ligero y agradable, se toma de ley para los deportes, en pláticas, para la cruda, y también ´porque voy a empezar a beber´", indica el gerente general de operaciones del bar Celtics.

Se toma derecho, en michelada, o mezclada con tequila (submarinos). Se acompaña de platillos picantes, moles, carnitas, tacos, carnes, pescado, mariscos.

Y la encuentras en todos lados, cervecerías, bares, antros, "donde menos se toma una cerveza es en los table dances porque te la venden igual de cara que el licor", asegura Garmilla.

¡Salud! y disfrute su trago.