EN ESTE NÚMERO LIBRO DE CAPELLANÍAS – S. XVII (1614) ARCHIVO PROVINCIAL DE TOLEDO UNA FUNDACIÓN PARA LA PAZ ¿QUIÉN SABE DÓNDE? UN INVENTARIO PARA UNA IGLESIA: - Platería

- Capas - Casullas - Palias - Mangas

UNA TORRE PARA UNA IGLESIA UN ALTAR PARA SAN GERMÁN ¿QUEDA SUFICIENTEMENTE CLARO? SE DERRIBÓ LA SACRISTÍA LIBRO DE VÍNCULOS Y CAPELLANÍAS: - Inventario de La Soledad

- Juicio de Salomón - Capellanías más importantes - Campanas siempre rotas - Reparación del Órgano - Mucho cura y mucho vino - Capilla de San Francisco - Bronca en una misma Visita - Que se arreglen los tejados - Purificación en la Sacristía - Mucho ruido en la Iglesia - Un relicario especial - Más decoro en el vestir

REALES PROVIDENCIAS DE SU MAJESTAD:

- No a los retablos de madera - Invertir en rentas de tabaco - Capítulo de Diputados - Papel con sello

FIESTAS PERDIDAS EN EL TIEMPO ROPAS PARA AMORTAJAR CURAS UN SAN JOSÉ PARA LA VILLA DE BURUJÓN SANTOS ÓLEOS ¿POR QUÉ NO SE DORÓ EL RETABLO? LA CRUZ QUE NOS PRESIDE AUMENTO DE SALARIO A LOS MONAGUILLOS UNA PIEZA DESCONOCIDA TESORO QUE SE SALVÓ POR LOS PELOS UNOS CURAS UN TANTO ESPECIALES

LIBRO DE CAPELLANÍAS – S. XVII (1614)

Estamos en pleno siglo XVII cuando algunas Fundaciones, como la de D. Pedro Alonso Baxo, comenzaban a dar algún tipo de problemas a los Visitadores del Arzobispado de Toledo (Portada Revista nº 1) Pareciera que el cura no tenía autoridad suficiente para hacer cumplir las últimas voluntades a los sucesores en el tiempo de quienes dejaban no sólo misas sino cantidades espléndidas de dinero, tierras, casas, etc, para fundaciones en la Parroquial de Santa María Magdalena de Escalonilla. Cuatrocientos ducados de renta era mucho dinero como para permitir que alguien no pagara o cumpliera la última voluntad del fundador. Diego Alonso Baxo tenía que cumplir con la voluntad de su tío en la forma establecida. Su tío D. Pedro Alonso Baxo había dejado doscientos ducados para casar dos huérfanas del lugar de Escalonilla a cien ducados cada una. De la misma manera otros doscientos para otras dos huérfanas de Val de Santo Domingo. Pero con la condición de que han de ser parientas de dicho fundador. La una, de parte de padre en el lugar de Escalonilla, y la otra, de parte de madre, en el lugar de Santo Domingo. Personalmente esta nota me parece importantísima. Es posible y casi seguro que los padres de D. Pedro Alonso Baxo fuesen uno de Escalonilla, el padre, y la madre del cercano pueblo de Val de Santo Domingo. Así se podría explicar el amor de este Arcediano por el pueblo de su padre, al que mas tarde dotaría de algunos objetos preciosos para el ajuar eucarístico parroquial y que son de sobra conocidos ya por todos. Caigamos en la cuenta de que el tal Diego Alonso Baxo era capellán de la Fundación de su tío D. Pedro Alonso Baxo, y que estaba casado con Ana Pérez Reyes que muere en 1787. El Documento de la Fundación a la que hacemos referencia es de 1614. D. Pedro Alonso Baxo dejó otros doscientos ducados para la Capellanía que fundó en la Parroquial de Escalonilla con cargo a cuatro misas rezadas en cada semana del año, nombrando por primer capellán a Pedro Alonso Baxo, estudiante, hijo de Melchor Alonso Baxo, su sobrino, y mientras llegaba a la edad de poder decir las misas nombró a su padre Melchor Alonso Baxo como patrón de la Fundación. El tal Melchor Alonso Baxo era un sobrino de D. Pedro Alonso Baxo. En el número anterior, ahora lo corregimos, afirmábamos que se refería a un hermano de D. Pedro Alonso Baxo. Melchor era hijo de otro Melchor Alonso Baxo, pero en este caso era estudiante eclesiástico como vemos en el Documento de Rentas de la Fundación de D. Pedro fechado en Madrid en 1634. La portada de la Revista sobre temas históricos de Escalonilla es precisamente el Documento donde aparece el nombre de Melchor como patrón de la Fundación de D. Pedro Alonso Baxo.(Portada revista Temas Históricos sobre Escalonilla – nº 1) Digamos también que dicha Fundación la Pudo hacer D. Pedro Alonso Baxo gracias a las rentas que recibía de la minas de azogue de las que si no era propietario sí era un gran accionista. Así figura en el Documento investigado y en otros a los que ya hicimos referencia anteriormente fechados ante notario en Madrid allá por 1646 y que ha tenido la amabilidad de leer Doña Carmen Vaquero Serrano, Catedrática de Literatura y autora de varios libros y publicaciones.

En este Documento de 1614 hace referencia explícita a esas minas de azogue (nombre arcaico que se le daba al mercurio) y que hacen referencia a una Escritura de Censo otorgada en 1612 con fecha de cuatro de marzo en Madrid.

En la portada podemos leer: “Melchor Alonso Baxo, Patrón de la Memoria y Obras Pías de D. Pedro Alonso Baxo…”

El tal Melchor al que hacíamos referencia anteriormente es el mismo que aparece en este Documento y el parentesco con D. Pedro Alonso Baxo sería el de sobrino nieto. Es decir, Pedro Alonso Baxo, el joven estudiante, era hijo de Melchor Alonso Baxo y benefactor de la espléndida fortuna de la herencia de D. Pedro que como ya sabemos venía en forma de ducados de los Reinos del Perú como activos de las minas de azogue, que a su vez no eran pocas ya que hasta el mismísimo Rey estaba interesado en dichas rentas.

También puede consultarse en época posterior el Libro de Vínculos y Capellanías – 1759 folios – 89 y SS.

Este mineral al que hacíamos referencia fue descubierto en el Perú en 1570, fechas en las que ya estaba allí D. Pedro Alonso Bajo como Arcediano de Arequipa. Las minas de Azogue fueron descubiertas en el departamento de Huancavelica estando relativamente cerca de la Ciudad de Arequipa. Huancavelica fue fundada por el virrey español Francisco Toledo con el nombre de Villarrica de Oropesa. Oropesa en España era la Ciudad del virrey Toledo. Huancavelica fue durante el virreinato la ciudad más importante del Perú desde el punto de vista económico. D. Pedro Alonso Baxo era una persona influyente en la época a la que hacemos referencia. Seguramente conoció personalmente al virrey Toledo y este sería quien le influyó para invertir en las minas como un negocio seguro y muy rentable. Como persona influyente poseía amigos influyentes. El Arcediano de Arequipa no era un español más que llegaba al Perú en busca del Dorado. Los amigos de D. Pedro, entre los que estaba el mismo virrey hacían fortuna en las Indias. D. Pedro aprovechó la ocasión de los negocios mineros influyentes para hacer algo de fortuna que después influiría de alguna manera en su familia, en su pueblo y en su Parroquia de Santa María Magdalena de Escalonilla.

(Lápida dedicada al Virrey Francisco de Toledo que se encuentra en el Parador de Oropesa su Villa natal)

1515-1582

Sin duda que el primer capellán de dicha Fundación fue D. Pedro Alonso Baxo antes de su muerte y explícitamente reparte sus ducados entre dos Capellanías en Escalonilla y Val de Santo Domingo, aunque este último es citado en dicho Documento como “Santo Domingo del Valle” Dicha fundación la hace con las condiciones de que se cumpla de esa forma ante el notario José de Arriaga, escribano residente en provincia, en la Ciudad de Madrid con Escritura de Fundación, en el oficio de Juan de Piña, realizada el 21 de Octubre de 1623, pero que es mandada sacar de una anterior denominada “Libro viejo de Memorias” y ponerla aquí por mandato de D. (Melchor) de Quintana, Racionero de la Santa Iglesia de Toledo y examinador sinodal de este Arzobispado. Pero el problema es que los responsables de cumplir con lo mandado no lo hacen por lo menos en cinco años. Así queda constancia en la Visita realizada a la Capellanía en 1660 donde se ordena, bajo pena de excomunión late sentencie, que se cumpla con lo establecido en la Fundación de D. Pedro Alonso Baxo. Y para que conste se ordena publicar y exponer en sitio público, y notificar al cura y al tal Diego Alonso Baxo. Lo firma “Martín Calderón de la Barca”

(Parte del Documento del Libro de Capellanías referente a D. Pedro Alonso Baxo)

(1614 – Fol. 17)

Aunque uno no quisiera seguir profundizando en algunos temas y apellidos, los Libros van arrogando datos que no podemos ignorar porque pertenecen a la historia pasada de nuestro pueblo. Me refiero otra vez a D. Juan Alonso Maldonado. Es un personaje ya estudiado desde distintos puntos de vista pero siempre hay alguna cosa que aunque no queramos se nos puede escapar por la complejidad de la escritura que tratamos. No parece que sea importante que un 8 de Mayo de 1692 D. Juan Alonso Maldonado estuviera en Escalonilla. A fin de cuentas era su pueblo y aquí vivía su familia. Lo interesante es que en esa fecha D. Juan Alonso Maldonado aún no estaba ordenado de Presbítero. Sólo tenía Órdenes Menores. Así reza en el Libro de Capellanías en el folio 64: “…Don Juan Alonso Maldonado, clérigo de Menores Órdenes, Colegial de Santa Catalina de la Ciudad de Toledo, y residente al presente en este lugar que vino a visitar…” Si esto es así, y teniendo en cuenta que D. Juan Alonso Maldonado nació en 1660 (Escalonilla – Apuntes Históricos – Pág.35 – P. Gonzalo Fernández) D. Juan Alonso Maldonado tenía en esas fechas unos 32 años. (Capellanías – 1692 – folio 64 – Fundación de Fernando Alonso y su mujer) Parece que eran malos tiempos para el cumplimiento de las Capellanías. En este caso los Señores Visitadores también tenían problemas para poder hacer cumplir los compromisos de los Testamentos de Misas. Aunque ya está dicho hasta la saciedad y repetido un montón de veces, en esta Fundación queda claro que D. Agustín era el padre de D. Juan Alonso Maldonado. A ellos se hace constantemente referencia como padre he hijo. Otra vez, aunque no queramos, tenemos que afirmar que ambas familias, los Alonso Baxo y los Alonso Maldonado, eran familias importantes en la Escalonilla de entonces. Las posesiones de estas familias en la Escalonilla de entonces eran múltiples. Así se confirma en el Catastro del Marqués de la Ensenada del Archivo Histórico Provincial que he tenido ocasión de consultar estos días. Las tierras ambas familias son muchas, pero me parece importante haber localizado algunas de sus casas dentro del casco urbano del pueblo. Por ejemplo Agustín Alonso Maldonado vivía en una casa que tenía en el camino de Santo Domingo (AHP – 251) Fernando Alonso Maldonado tenía dos casas, una en las Cuatro Calles y otra en el Camino de Carmena (AHP – 131-96) Más datos referentes a D. Pedro Alonso Baxo se pueden constatar también en los folios 98-81 de la misma fuente histórica. Sería muy interesante poder dedicar un número de esta revista a dicho Catastro del Marques de la Ensenada ya que en el se encuentran incluso los dibujos correspondientes a las tierras y posesiones que por entonces tenía nuestra gente de Escalonilla. Por si acaso alguien se anima alguna vez a realizar dicho estudio me limito a poner las fuentes para hacer más fácil su trabajo.

ARCHIVO PROVINCIAL DE TOLEDO NOMBRE DEL INSTRUMENTO DE DESCRIPCIÓN: CATASTRO DE ENSENADA SIGNATURA / SIG. INICIAL: H.251 PROVINCIA: TOLEDO LUGAR: ESCALONILLA (Lugar) DESCRIPCIÓN: Índice del registro de haciendas del estado seglar (9 hojas) -Interrogatorio y respuestas generales (3 hojas + folios 1-27) Estado Seglar: -Autos generales (23 hojas) -Certificados de rentas decimales (3 hojas) -Autos generales (continuación) (3 hojas) -Libro de familias (109 hojas) -Resumen G. (por oficios) (3 hojas) -Enajenado de la Corona: -Título de contador de cuentas y particiones del lugar. La Reina Gobernadora, 1702 (5 hojas). Confirmación de título de Alguacil Mayor del lugar. Felipe V, 1715 (5 hojas) -Título de Regidor del lugar. Felipe V 1739 (3 hojas) -Carta sobre el título de Escribano del lugar 1752 (1 hoja) -Tabla de clasificación de tierras (folio 28) -Registro de haciendas (folios 29-376) -Resúmenes (32 hojas) De la misma manera sería muy interesante consultar lo relacionado a Escribanos y Escrituras. Es muy poco lo que se encuentra en los fondos del Archivo pero aún siendo escaso forma parte de la historia más profunda de nuestro pueblo. Las fuentes de dicho Archivo Provincial son las siguientes: SIGNATURA: P-16343/6 NOTARIO: RUIZ MACHUCA FECHA: 1734 LOCALIDAD: ESCALONILLA (TOLEDO) SIGNATURA: P-15958/4 NOTARIO: MARTÍNEZ DÍAZ NICOLÁS FECHA: 1744 LOCALIDAD: ESCALONILLA (TOLEDO) NOTAS: ESCRITURAS VARIAS SIGNATURA: P-05065/09 NOTARIO: SALAMANCA JUAN ANTONIO DE FECHA: 1857 LOCALIDAD: ESCALONILLA (TOLEDO) NOTAS: ESCRITURAS SUELTAS

UNA FUNDACIÓN PARA LA PAZ

El Documento que leemos es de 1660 aproximadamente pero en él se hace referencia a otra fecha más antigua de donde procede su fundación en la Parroquial de Escalonilla. Nos referimos a 1592 haciendo referencia al folio 263 de un Libro perdido y del que se pasa al actual. En la Parroquial de Escalonilla se realiza una Fundación para una Fiesta de Nuestra Señora de la Paz sobre seis olivas. Dos en Casas Albas y dos camino de Veragüe y las otras dos en las Cárcavas. Esta fiesta se fundó por vía de traspaso y mejora en las casas que al presente tiene María Cruz, mujer de Bartolomé García y que consta de un auto que está en el Archivo de esta Iglesia en el año de 1592. En una nota marginal realizada por el Visitador hace constar dónde se encuentra ubicada dicha casa. Concretamente en la Calle del Falderín. (Capellanías – 1670 – folio 74- Fundación de Bartolomé García)

(Parte del Documento fundacional de la Capellanía de Nstra. Sra. De la Paz) (1592)

En este Libro aparecen fundaciones de todo tipo. Me limito a poner a su consideración sólo algunas que a mi parecer pudieran ser las más importantes porque al día de hoy ya se han perdido incluso de la memoria de los más viejos. Es el caso de otra Fundación de la Fiesta de La Encarnación.(Capellanías – 1654 folio 81 Fundación de Ana Díaz, mujer de Pedro García)

¿QUIEN SABE DONDE? ______________________________________________________________________

Las personas más mayores están acostumbradas a llamar a las tierras por sus antiguos nombres. Nombres que a su vez pusieron nuestros mayores para identificarlas sin hacer falta escrituras u otras técnicas modernas. Seguramente que lo que expongo más abajo es de sobra conocido por la mayoría. “…linda con tierras de la Señora Marquesa de Lanzarote por solano y por gallego con tierras del Licenciado Don Juan Alonso Maldonado y con el camino de Torrijos…) (Capellanías – 1659 folio 97 Fundación de Alonso González Escribano) Más adelante en vez de “Marquesa de Lanzarote” cita “Marques de Lanzarote”. Aprovechando, un poco más adelante se habla de una Fundación de San Juan ante Porta Latinam donde se hace referencia al “pozo dulce” (folio 109). El vino de las tinajas también valía en la época para hacer fundaciones y capellanías. Es el caso de una sobre una fiesta a Santa Ana. (Capellanías 1660 – folio 113). Una advocación que parecía también tener su importancia era la de Nuestra Señora de las Nieves sobre la que se encuentran distintas capellanías fundacionales de misas principalmente. (Capellanías – 1657 folio 129) Son también muchas las referencias que se hacen a olivas y tierras que se encuentran en el lugar conocido como “Valle del Judío” que está cerca de la ermita de Nuestra Señora de la Estrella. De la misma manera en las notas marginales de dichas capellanías se cita muchas veces “las tierras pertenecientes a las monjas del Convento Santo Domingo el Real de Toledo” Creo, por lo que me dicen que dichas monjas estaban en posesión de muchas tierras de nuestro pueblo en esa época, así que se me hace difícil identificar el lugar exacto al que se hace referencia. (Capellanías – 1657 folio 153) Otra de las referencias que me parece importante ya que en el número anterior lo enumeraba es las veces que se cita a “las monjas de Perovéquez” a la hora de describir los linderos de las tierras de las Capellanías. Yo imaginaba la relación entre Escalonilla y Perovéquez que, sin duda, era más profunda y fuerte de lo que podemos imaginar. (Capellanías – 1654 folio 185)

UN INVENTARIO PARA UNA IGLESIA

No será fácil, pero lo voy a intentar. Me refiero a que dicho Libro de Bienes o Inventario Parroquial se encuentra en mal estado de conservación y su letra en muchos párrafos se hace ilegible casi por completo. Pero será apasionante, como todos estos libros, poder tener entre las manos y recuperar un trozo de la historia de Escalonilla que en gran parte ha llegado hasta nuestros días. Yo creo que en esa época se era mucho más riguroso que en la nuestra, pero que gracias a ese rigor hoy podemos tener y disfrutar muchas piezas de arte que nos están continuamente haciendo referencia al modo espiritual de concebir la vida de nuestros antepasados. Me limitaré sólo a enumerar y hacer referencia de algunas notas marginales. Intentaré mezclar, porque son tres o cuatro los inventarios, las distintas piezas para no repetirlas pero observando sus desperfectos o arreglos a lo largo del tiempo. Lo ideal sería que cada escalonillero pudiera identificar en estas obras su pasado y sus raíces. El primer Inventario o Libro de Bienes lo encuentro fechado un seis de Septiembre de 1635. Sólo enumeraré las piezas más importantes y de más valor religioso, cultural he histórico. Los Inventarios son muy amplios y de nada nos serviría enumerar una a una de las cosas inventariadas. Se hará más fácil si lo hacemos por apartados. Es decir, enumeraré la platería, casullas, etc.

PLATERÍA

*Una Cruz de Plata ( ) labradas y doradas. Labradas de relieve ( ) Se encuentra una pequeña nota realizada a lápiz que dice lo siguiente (Año de 1692. No hay tornillos en la Cruz y sus piedras se han caído y perdido) *Otra Cruz de madera con un sencillo Crucifijo por la una parte y por la otra el Padre Eterno. En él están Jesucristo en brazos de Nuestra Señora, San Francisco, la Magdalena, San Pedro y San Pablo y Santiago (…) *Un incensario de Plata blanca con cuatro cadenillas (…) Donado por el Arcediano. *Un copón grande con su tapado y dorada la copa por dentro y con su pie labrado (…) Se entregó, parece que para su arreglo, a un tal Miguel (de) Arroyo el 27 de Abril de 1650) pero que era regalo del Arcediano D. Pedro Alonso Baxo. *Un cáliz grande con su copa todo dorado con su patena labrada a lomo que le dio el Arcediano. *Una Custodia de plata sobre dorada labrada a lo moderno con su viril y vidrieras y una cruz…seis libras y dos onzas. Regalo del Arcediano *Dos vinajeras de plata blanca con su tapado (…tres libras y seis onzas…) y al final denomina al donante “El Arcediano”y una naveta de plata blanca que pesó cinco libras y nueve onzas (…) También cita al Arcediano. *Dos candeleros de plata blanca altos a modo de ciriales con su altar de hierro que pesaron dieciséis libras y cuatro onzas. Lo donó el Arcediano D. Pedro Alonso Baxo.

*Un coponcillo de plata blanca liso (…) Se mandó deshacer por orden del Visitador en 1691.

*Un cáliz con su patena y todo de plata dorado (…) Lo donó Fray Diego el Menor. Sólo quiero recordar aquí, aunque sin duda saldrá más adelante, que Fray Diego el Menor era el confesor personal de la Reina, primera mujer de Felipe IV. Es evidente que en el apartado de la Platería se hace referencia a otras muchas cosas, como cálices y candelabros, que ya tenemos identificados y son de sobra conocidos por todos. Especialmente hace referencias múltiples al conocido Arcediano del Perú. Cuando se especifica el peso de cada pieza tendremos en cuenta que una libra castellana es el equivalente a 460 gramos. Por tanto es fácil sacar el peso en plata de las piezas.

Custodia de plata sobre dorada labrada a lo moderno donada por el Arcediano D. Pedro Alonso Baxo a la que se hace referencia en el Inventario anterior del apartado de Platería.

CAPAS

*Una capa de damasco blanco con cenefa de imaginería bordada de oro. De esto sólo puedo decir que hoy no queda nada. Hace referencia a otras capas de otros colores de las mismas características pero que hoy son desconocidas para nosotros.

CASULLAS

*Una casulla de damasco de Indias amarilla y dorada con su estola y manipulo. Diola el Sr. Licenciado Fuente, cura de la dicha Iglesia. Yo supongo que al reseñar que es de Indias pertenecería a D. Pedro Alonso Baxo como otras de las cosas del ajuar donde se cita el origen. También ya en esa fecha se pone una nota marginal que dice textualmente: “No hay noticia de esta casulla”. Lo que significa que desapareció en épocas anteriores a la que se hizo el Inventario Parroquial.

*Una casulla de tela de oro morada sin estola ni manipulo. La nota marginal

dice “Diosele a la ermita de San Sebastián, año 1660” Sólo quiero resaltar que en esa época en Escalonilla había una ermita dedicada a este Santo. Parece que nos referimos a la que hoy conocemos como ermita de la Soledad.

Tengo que señalar que en este apartado de las casullas, aunque también en otros,

la iglesia de Escalonilla era muy rica. Son tantas y todas de muy buena calidad que se hace imposible poderlas enumerar, más cuando no ha llegado ninguna hasta nuestros días. Incluso cuando alguna falta se señala la razón. Por ejemplo “se enterró con ella el Licenciado Alonso Zazo”. Otra de las cosas que podemos saber es que el tal Pedro Alonso Baxo, el estudiante, llegó al sacerdocio y se enterró con una casulla de damasco verde sin estola ni manípulos allá por 1672.

PALIAS *Cama para adentro de la Custodia del Santísimo Sacramento es de

tela de plata blanca… Y cuatro cortinas y armadura de madera de Indias. *Una mucetita de ámbar bordada de oro para el Baso en que se

lleva el Santísimo a los enfermos. Diole el Licenciado Fray Diego el Menor. (Recuerdo que este Fray Diego el Menor era el confesor de la Reina) También hace referencia a dos palias para encima de las patenas regalo del mismo. El mismo Fray Diego regaló a la Parroquial de Escalonilla otras muchas cosas hoy ya desaparecidas. Encuentro, en el inventario me refiero, unas bolsas para corporales bordadas en oro carmesí y en damasco.

MANGAS *Una manga grande bordada de oro con cuatro insignias. Una de

Santa María Magdalena, otra de Nuestra Señora del Rosario, otra de San Germán, otra de San Sebastián y flecos de oro abajo.

*Otra manga de terciopelo carmesí bordada de oro con cuatro

insignias. Una de San Pedro, otra de la Magdalena, otra de Nuestra Señora de la Concepción, otra de San Cristóbal. Con flecos de oro.

Me parece un tanto extraño no encontrar en todo el Documento referencia alguna a otras piezas, como por ejemplo el arca de carey, cuadros o imágenes del templo parroquial. De todas maneras creo que el Documento no es completo porque se encuentra separado de otro y descosido. Ignoro por qué razón sólo quedó esta parte.

UNA TORRE PARA UNA IGLESIA

Siempre me he preguntado por qué aparentemente la torre de la Parroquia tiene como dos cuerpos muy bien definidos. La respuesta tal vez esté, como casi siempre, en una cuestión meramente económica. Es posible que la Escalonilla de entonces, hablo de 1637, no fuera muy boyante económicamente. Esto lo vemos por el tipo de donativos, casi siempre en especie, que se ofrecían para las distintas obras de la Parroquia. En este caso descubrimos que se trata de la Torre de la Parroquial de Santa María Magdalena del lugar de Escalonilla. Así figura en el Libro de Fábrica – 1635 – folio 23 y SS. En dicho libro, que como sabemos sería el equivalente a los actuales libros de economía parroquial, el Mayordomo, siempre con conocimiento del cura propio, exponía el concepto a la izquierda y el dinero a la derecha de la hoja. Al final siempre termina con un Acta de aprobación del Mayordomo por parte del Sr. Visitador General del Arzobispado. Encontramos los gastos de incienso, altares, cera, lavandera de la ropa de la iglesia, sueldo del Escribano y el Sacristán. Los ingresos son casi siempre en especie. Corderos, lana, cebada, olivos y, esta es la pista a la que me refería con anterioridad, cientos de ladrillos específicamente conceptuados como “para la torre de la iglesia”. Lo que significa que por lo menos el segundo cuerpo de la Torre de la Parroquia es de esa fecha. Claro que también se podría mantener que nos referimos a la torre completa desde abajo. Cualquiera de las dos teorías sería válida en este momento. Pero me parece interesante hacer conocer que era 1600 más o menos, cuando la torre de nuestro pueblo empezaba a cumplir su función.

En la primera anotación se hace referencia al precio de cuatrocientos ladrillos para la torre más el porte que fueron cuarenta y dos reales.

En la segunda se hace constar el precio de una vigueta para la torre por el precio de veinte y cinco reales que dio Fernando Alonso Maldonado.

En la fotografía podemos observar un primer cuerpo de construcción donde incluso el ladrillo es más blanco y de otra calidad distinta del superior. Es posible que en ese año de 1635 se estuviera construyendo la parte superior dado que se puede intuir que la inferior se construyó a la par del resto del templo dejando iniciado el resto de la torre de las campanas. Parece incluso que ya en la Visita de 1641 había campanas en la torre. En el Libro de Fábrica el cura escribe un concepto de “veinte reales para el arreglo de las campanas.” Han pasado cinco años desde la última Visita y parece que la torre ya estaba terminada. O sea, que la Torre se terminó entre 1635 y 1641. Será algo después, en la Visita de 1692 cuando aparece que en la torre se colocan unas campanas nuevas y pareciera que es sencillamente porque “las anteriores se han quebrado” (Libro de Fábrica – 1692 – folio 169) También es posible que se pusiera el primer Sagrario y unas casullas góticas que se mandaron hacer en Madrid. (Libro de Fábrica – 1641 folio 40) De todas formas en esa fecha aún es posible afirmar que se tenía una Parroquia inacabada ya que son múltiples las referencias a distintas rectificaciones o modificaciones de los muchos aposentos de la Iglesia. Por ejemplo se habla de dos

lacenas. Una en la Virgen del Rosario y la otra en San Germán. También de una puerta que da de la torre a la Tribuna. (Libro de Fábrica – 1641 folio 43) Yo creo que se refiere a la puerta existente de la torre actual. Es posible que a la Tribuna se subiera por otro lugar antes de hacer el hueco en lo que hoy es la puerta que da al llamado coro. Es decir, no se subía a la Torre y a la Tribuna por el mismo sitio. Así parece en el folio 43 vuelto donde se hace referencia a la puerta y postigo para subir a la torre. De igual modo es en esta fecha cuando se construye la escalera y peldaños de madera para subir a las campanas.

UN ALTAR PARA SAN GERMÁN

Párrafo donde se deja constancia de lo que costó hacer, pintar y dorar el altar de San Germán. Era aún el año 1641. (Libro de Fábrica – 1641 folio 44) Parece que fueron unos cincuenta y dos mil reales. Otra de las cosas que se puede afirmar es que la Iglesia no estaba solada. Es decir, no tenía aún piso en esas fechas de 1641. Incluso el interior del templo estaba sin pintar y se gastan “diez cargas de cal” para la misma. (Libro de Fábrica – 1641 folio 49 vuelto) Aunque es posible que esta tarea se hiciera cada año por motivos de higiene en el interior del templo. Y puestos a imaginar casi podemos ver cómo se encontraban las calles del pueblo o por lo menos los alrededores de la iglesia. En múltiples ocasiones la parroquia tiene que gastar sus maravedíes en empedrar varios remiendos de su puerta principal exterior y “del callejón de la Iglesia” No hago cita alguna por que son muchas las veces que se especifica dicho concepto y sería suficiente abrir el Libro de Fábrica al que nos referimos para poderlo comprobar.

¿QUEDA SUFICIENTEMENTE CLARO?

Valdría la pena transcribir todo el Documento pero evidentemente nos falta

espacio. Sólo resaltar que se trata de una prohibición de decir misa y permanecer en el pueblo más de 30 días de Agosto y quince días más en tiempo de vendimia para Fray Juan Fariñas, religioso de la Orden de San Francisco de Paula y Fray Antonio de Lujan.

Parece que los religiosos eran “vagos”. Se pasaban años y años por estas tierras diciendo misas de encargo o fundaciones y viviendo a expensas de los feligreses. Incluso parece que no eran de muy buena conducta porque se hace alusión a que se les niegue incluso la limosna de pan que se les da a los más pobres. Se les manda regresar a sus conventos para hacer vida religiosa. Si no fuera así se les condena a pena de Excomunión, pero también les toca algo al Párroco y al Sacristán en caso de que no hagan cumplir dicha orden.

SE DERRIBÓ LA SACRISTÍA El año de 1660 fue malo para el cura, el mayordomo y la Parroquia misma.

Tengamos en cuenta que la iglesia estaba continuamente siendo reformada y terminada. Estando en estas, ignoro la razón, se derribó la Sacristía. Tampoco sabemos si se refiere a la actual o a otra ubicada en otro lugar. Lo que sí está claro es que debía encontrarse en muy malas condiciones para tenerlo que hacer por mandato del Visitador. Parece que entre madera y todo la obra costó unos novecientos ochenta y seis maravedíes. Se dice textualmente: “…gastado en la obra que se ha hecho en la sacristía de esta iglesia que se derribó toda y se volvió hacer…” (Libro de Fábrica – 1660 – folio 102)

Llegados aquí sólo quiero recordar la fecha de su confección. Me refiero al

Púlpito. En mi libro anterior ya lo reflejé y además junto a él en el Templo Parroquial hay una plancha de metacrilato que nos recuerda sus características incluido el precio que se pagó. (Libro de Fábrica – 1709 – folio 281) De igual modo reflejar lo referente a

la Sacristía Nueva para futuras investigaciones. (Libro de Fábrica – 1709 – folio – 280 vuelto)

Con el Retablo del Altar Mayor pasa exactamente lo mismo. Ya ha quedado reflejado suficientemente en otros Documentos y ediciones que se han hecho sobre estos asuntos u otros sobre Escalonilla y más concretamente sobre la Parroquial de Santa María Magdalena. De todos es sabido que el magnífico retablo es de Andrés de Huerta y que está realizado entre los años 1713-1718 con un coste de veinte mil reales más las obras de ponerlo que correrán a cargo de la iglesia. Cantidad que se le manda a al Licenciado Don Juan Alonso Maldonado y al Mayordomo de entonces para que con conocimiento del cura propio se ejecute la obra. El cura propio al que nos referimos era en aquel entonces el Licenciado Don Juan Alonso Maldonado. (Libro de Fábrica – 1713-18 – folio 301)

Siempre me he preguntado por qué llegaría esta arca hasta nuestros días y qué

sería lo que se guardaría bajo tres llaves. Tenía que ser importante. Muy importante y de mucho valor para que cada una de las llaves se le entregara a una persona distinta y se tuviesen que juntar las tres para poderlo abrir. Encontré la respuesta casi sin buscarla. En el folio 304 vuelto del Libro de Fábrica está la respuesta a tan alto secreto “…por mandato del Sr. Visitador… pasar a la Sacristía Nueva el Arca de Tres Llaves de la Memoria de Baxo y la entregue a Alonso del Castillo sacristán de esta Iglesia para que la tenga en cuidado y custodia como las demás cosas de esta Iglesia y todo lo que en esta se encerrase…” 1714 era la fecha de entrega de la tercera llave del Arca. Otra tenía Don Juan Alonso Maldonado y otra el Mayordomo. Lo importante, por lo menos para mí, es que en dicho Arca se guardaba sólo la Memoria de Don Pedro Alonso Baxo. Documentos que se encerraban bajo tres llaves pero que, por lo menos de momento, no

han llegado hasta nosotros como tal Fundación. Alguien abrió el cofre, pero tenían que ponerse de acuerdo los tres para hacerlo.

Muchas veces no es fácil elegir el libro para trabajar. Conforme se hace van apareciendo temas que nos gustaría relacionar o por lo menos tener en cuenta de una forma cronológica. Seguir las fechas y las pistas se convierte en algo complicado. Es más, cuando ya crees que se ha podido agotar un tema aparecen anotaciones o referencias al mismo en fechas muy posteriores o en libros distintos. Hay que estar continuamente pasando de una caja a otra, releer nuevamente lo ya pasado, anotar otra vez fechas y datos y encajarlos en su sitio por fechas más o menos cercanas y correlativas.

Creo que es oportuno empezar haciendo alguna referencia al Libro de Vínculos y Capellanías – 1759 porque en él encontramos no sólo algunas curiosidades sino que están las claves interpretativas, en parte, para poder reconstruir o recrear la historia pasada de nuestro pueblo.

LIBRO DE VINCULOS Y CAPELLANÍAS 1759

Las primeras hojas del libro son un desastre. Están separadas del mismo aunque

tratan el mismo tema. Sin duda que pertenecen a un libro antecedente sin fechar dado que se encontraran referencias en muchas ocasiones a dichas hojas o folios sueltos. No contienen por otra parte ningún dato de interés salvo las referencias que se hacen a Visitas posteriores.

Pero sí me ha parecido interesantísimo detenerme aunque sólo sea un instante en una Capellanía donde hace un inventario de las pertenencias de la Ermita de la Soledad, que no sólo tenía culto sino que también poseía un riquísimo ajuar. Tan rico era este que los mismísimos franceses en 1809 lo expolian casi todo incluido unas piezas litúrgicas desconocidas hoy para nosotros. Como en inventarios anteriores no me detendré en enumerarlo todo, pero sí, por lo que tiene de romanticismo, en las cosas más sentimentales de nuestro patrimonio religioso, cultural y también histórico.

INVENTARIO DE NUESTRA SEÑORA DE LA SOLEDAD

*Primeramente un cáliz con Patena y cucharita de plata, en peso de ciento y ocho onzas y catorce adornos. Lo curioso de esta pieza es la nota marginal realizada en una Visita posterior a la fecha. “Cuando el saqueo de los Franceses de la Iglesia se lo llevaron : año de 1809” Lo que significa que nada más llegar los franceses a la Península Ibérica ya entraron en nuestras tierras y además podemos intuir que si se llevaron esa pieza lo hicieron también con muchas más. *Un Platillo con sus vinajeras y campanilla de plata que pesa veintiocho onzas. *Un hostiario de concha con sus cantoneras de plata. *Seis candelabros de bronce.

*Dos láminas de Nuestra Señora con el niño y Santa María Magdalena. Yo creo y estoy seguro de que se refiere a los dos cuadros pequeños en piel que están actualmente en la sacristía.

Estos son los cuadros a los que se refiere en Inventario en cuestión que según esto pertenecían a la Ermita de la Soledad. Están realizados en piel de vaca y según los expertos son de buenísima calidad. *Dos espejos con sus marcos dorados y tallados, como de tres cuartos. *Otro con dos cornucopias pequeñas.

*Una pintura de San Jerónimo como de cinco cuarterones con marco negro. *Dos pinturas apaisadas con la historia de Salomón con marcos negros. Esta se encuentra actualmente en el despacho parroquial y en muy mal estado de conservación aunque es una de las mejores pinturas que tenemos de nuestro patrimonio.

En una de las notas marginales puede leerse también: “En Visita de 1797 se halló todo lo existente y hay de aumento un cáliz nuevo de plata con su patena y cucharita con los dolores de Nuestra Señora al pie y que donaron D. Ramón y Doña Manuela de la Nava vecinos de Salamanca y naturales de este lugar y una ara de altar y la Diadema de plata de Nuestra Señora.”

JUICIO SE SALOMÓN

Es una pena que el lienzo se encuentre en este estado. Sólo pongo un primer plano de la escena central del Juicio donde aún se puede observar a un criado sujetando al niño boca abajo. Lo demás de la historia ya lo sabemos todos. (1ª de Reyes, 3, 16 y SS) Este cuadro estaba en la Tribuna de nuestra Parroquia cuando lo encontré. Algunos pensaban que era mejor desistir de saber qué era lo que representaba. Después

de algunas maniobras intentando averiguar y dando algunos productos para resaltar la pintura y fotografiarlo palmo a palmo pude comprobar no sólo lo que representaba sino que se pudo intuir lo interesante y magnífico de este cuadro. Ojala algún día, si ya no es demasiado tarde, pueda volver a enseñarnos la justicia salomónica.

CAPELLANÍAS MÁS IMPORTANTES

De esta Capellanía es interesante resaltar y extraer uno de sus textos en Visita realizada a la Capellanía el 27 de Octubre de 1769.

“Visitada en 27 de Octubre de 1769 por el Sr. Doctor Don Marcos Antonio de Espinosa, Visitador eclesiástico de estos Partidos y halló ser a cargo de el Doctor Don Juan Antonio Alonso Maldonado Canónigo Magistral de la Santa Iglesia Catedral de la Ciudad de Cuenca, por quien pareció a visitar Juan Alonso Maldonado su padre…” Yo personalmente es la primera noticia que tengo al respecto. No sabía que uno de los descendientes de los Alonso Maldonado había sido canónigo en la Catedral de Cuenca. (Libro de Vínculos y Capellanías – 1759 – folio 261) El tal Juan Antonio Alonso Maldonado fallece un 6 de Octubre de 1782 según comunicado por carta del Doctor Don Tomás Melgaredo, Deán de la Catedral. Suponemos que allí fue enterrado en dicha Catedral de Cuenca. (Libro de Vínculos y Capellanías – 1759 – folio 263)

Esta Capellanía es muy interesante. Es uno de los personajes menos conocidos de nuestro pueblo y sin embargo es de los de más altura intelectual y más influyente. Es importante resaltar que su Capellanía la fundó para resaltar el honor y culto a Nuestra Señora de la Soledad que se venera extramuros de este lugar, en su ermita nuevamente construida. Capellanía fundada para que la gozasen sus parientes. La obligación es que el capellán al que le diesen dicha capellanía tenía la obligación de decir y celebrar por su propia persona y en el altar de la ermita de Nuestra Señora de la Soledad, cinco misas rezadas en cada semana y al final de la misa un responso por las intenciones del Fundador. Que así mismo han de ser obligados a rezar el Rosario a Nuestra Señora en la expresada ermita todos los días del año que con esta grande devoción y culto a la Señora. Se insta a los vecinos de este lugar a rezar el Santo Rosario en dicha ermita y que a cuando no esté el capellán de la misma por ausencia o enfermedad, lo haga otro sacerdote con la limosna de cinco reales de plata cada una. Nombra por capellán único y perpetuo al cura propio del lugar para que en sus respectivas vacantes pueda nombrar y nombre al goce de ella. El capellán queda obligado a cuidar con el máximo respeto y limpieza la ermita de Nuestra Señora, como los sagrados ornamentos y vasos que han de servir al altar. Para poder cumplir con estas cargas deja una casa principal con todas sus viviendas en la Población de este lugar, que linda con solano con calle que sale al camino de Torrijos. Por cierzo con una calle sin salida y con casas de herederos de Juan de Ochoa, de Francisco de Rojas y otras. Una Tierra de doscientos estadales que linda por solano con tierras del Sr. Marques de Lanzarote y por cierzo con tierras de la Iglesia de este lugar. Deja también otras tierras, la más grande de seis fanegas y doscientos dieciocho estadales, en el camino de La Puebla. De igual manera hace otras fundaciones como por ejemplo una a Santa Teresa de Jesús en el altar que hay en la Parroquial de este lugar con casi idénticas obligaciones que la anterior pero con una peculiaridad importante. Los patronos y capellanes de la misma han de ser naturales de este lugar, dados y entregados al estudio, de buena vida y costumbres, temerosos de Dios, para descender al estado de Presbíteros. Si no fuesen naturales de este lugar han de requerir las mismas condiciones. La condición para poder disfrutar de dicha Capellanía ha de ser la de que con el tiempo sean ordenados de Presbíteros precisamente a los veinticinco años de su edad, que no después, y si a no se cumpliese pase el goce de dicha Capellanía al siguiente llamado o nombrado por el Sr. Patrono de la misma. Los que llegando al sacerdocio disfruten de la Capellanía quedan obligados a decir una misa rezada por sus Patronos perpetuamente, otra cantada cada año y cuando sea el Jubileo de la misma, siempre aplicadas por el alma de Don Diego Moreno Ortiz Los llamados pueden ser ordenados a título de la Fundación o Capellanía. Y así era ya que son tantas las tierras y bienes que posee para tal fin que todos se disputan disfrutar de las rentas de dicha Capellanía como la Señora Doña Francisca Paula del Yerro y el Sr. Vizconde de Palazuelos, su padre, por una dehesa en Velvís u otras de Camarenilla. Inmensos son también los olivares. Casi todos los del pueblo le pertenecían en propiedad. En cuanto a las propiedades de casas en la Villa de Escalonilla resaltaremos solamente algunas como la que está en el lugar que llaman de la Piedra Redonda y que hoy sirve de taberna, otra que está frente a la puerta principal de la carnicería pública, etc. Todo le pertenecía en propiedad al referido D. Diego Moreno Ortiz.

Son muchas las cláusulas que nos llaman la atención, pero principalmente la siguiente, que es referente a sus casas en la Villa de Escalonilla. “…con prohibición de que se puedan vender o enajenar ni en otra manera disponer de ellas con ningún motivo ni pretexto pues han de estar siempre y perpetuamente gravados a esta Capellanía y al cumplimiento de sus cargas…” (Libro de Vínculos y Capellanías – 7 de Junio de 1797 – folio 388 y SS)

Olivo que aún hoy conserva la letra “D” referente a D. Diego Moreno Ortiz

LAS CAMPANAS SIEMPRE ROTAS

Las campanas ya llevaban puestas muchos años. Casi todos los años seguidos había que componerlas porque se rompían las cuerdas o la cabeza de la campana. Creemos que las actuales datan de 1776 y que fueron encargadas al maestro Martín de Hüermes. (Libro de Fábrica – 1777 – hoja cosida en la tapa y folios siguientes)

REPARACIÓN DEL ORGANO Del mismo modo que las campana pasa con el órgano. A lo largo del tiempo y por motivos de diversas reformas en el interior de la iglesia hay que estar continuamente componiéndolo. Son muchas las referencias a este asunto, pero por lo que pueda tener de interés sólo cito una que me parece importante por hacer también alusión a una reforma importa dentro de la Parroquia, concretamente en la tribuna donde se encuentra el órgano. “…diez reales de vellón…el apeo que se hizo de la caja y órgano de esta Iglesia con motivo de la obra que hubo que hacer en el coro alto: consta de recibo que dio José Monzón, Maestro organero de la Ciudad de Toledo…” (Libro de Fábrica – 1779 - reformas en la Iglesia)

MUCHO CURA Y MUCHO VINO La siguiente nota del Libro de Fábrica aporta algunos datos curiosísimos. No sólo hace referencia al nombre del Sacristán y los curas que había en la Parroquia sino hasta del vino que se consumía para la celebración de la Misa. “Y por cuanto Manuel Martín Abad, Sacristán de esta Iglesia Parroquial, ha comparecido en el Tribunal, y representado,, que el cuartillo de vino con que por estos temas de fábrica se le concurre por día, para el surtido de vino a las Misas en tan limitada porción, que no le alcanza. Respecto a que se persone, y lo más del año se juntan en este pueblo siete sacerdotes del hábito de San Pedro y además la continua concurrencia de religiosos, y algunos por largas temporadas. Dijo Su Merced que atendiendo a lo cierto de cuanto viene expuesto debía mandar y mando que el Mayordomo de esta dicha Iglesia, de las rentas de ella, concurra al expresado Sacristán, y para que haga de su cuenta el surtido de vino para las misas, de dos cuartillos de vino diario, entendiéndose desde primeros de octubre pasado de este año de la fecha en adelante…” (Libro de Fábrica 1781)

CAPILLA DE SAN FRANCISCO Cuanto más avanzo en la lectura de este Libro de Fábrica más me asalta la pregunta de cómo sería la Parroquia en esa época. Reformas y más reformas, altares, imágenes, sepulturas, montón de curas, campanas, arreglos, etc. En una de sus páginas puede leerse: “sesenta y dos reales de vellón en que se vendió la madera que se formaba de una escalera que desde la Capilla de San Francisco de esta Iglesia había a la tribuna, que por no verse utilidad para cosa alguna se quitó de dicho sitio…” (Libro de Fábrica – 1781)

BRONCA EN UNA MISMA VISITA

Atención a esta Visita de 1797. Es un tanto especial ya que han transcurrido 16 años desde la anterior. Es mucho tiempo para la Visita pero ignoramos cuál es la razón. El Sr. Visitador General se llamaba Licenciado D. Diego Vicente Salgado Osma y parece que encuentra todo un tanto descuidado y desordenado. Por cierto que el cura era D. Celestino Sánchez Vela y Agüero.

QUE SE ARREGLEN LOS TEJADOS “Igualmente mandó Su Merced que luego que sea tiempo oportuno y a la mayor brevedad se recorran y compongan los tejados de esta Iglesia para evitar la mayor ruina que puede resultar de la omisión…que se valgan de maestro inteligente que lo ejecute…”

PURIFICACIÓN EN LA SACRISTÍA “… mandó Su Merced se ponga en la Sacristía de esta Iglesia agua, manil y toalla para que puedan lavarse los sacerdotes al tiempo que van a celebrar el Santo Sacrificio de la Misa y más divinos Oficios que ocurran…”

MUCHO RUIDO EN LA IGLESIA “Y porque en los días de Jueves y Viernes Santo, del presente año, experimentó y vio Su Merced que dentro de la Iglesia y durante el tiempo que Su Majestad Sacramentado está reservado en el Monumento las gentes andaban ya en cuadrillas ya cada uno de por sí visitando las estaciones o cruces, causando las irreverencias que no es dudable. Para el remedio de estas en lo sucesivo mandó el Sr. Visitador que el cura propio y ecónomo que son y fueren de esta parroquial no permitan que en semejantes días ni en otros en que dicho Señor Sacramentado esté manifiesto se visiten dentro de la Iglesia las estaciones o cruces. Lo que cumplan y hagan cumplir sin contradicción y con apercibimiento de que por ella se les exijan diez ducados de multa que desde ahora para entonces y por cada vez se impone al cura aplicados para la Cámara de Su Excelencia el Arzobispo de Toledo mi Señor”

UN RELICARIO ESPECIAL

“Y porque apresto de confianza que parece tenía hecha D. Diego Moreno Ortiz, difunto, Canónigo que fue de la Santa Iglesia de Toledo, natural de este lugar; se hallaba en poder de Felipe Moreno Ortiz, su vecino, la llave del Relicario del Altar de Santa Teresa, sito en esta Parroquial, que costeó dicho D. Diego, la que le hizo Su Merced presentarse en este tribunal, por no ser justo que al referido Felipe hayan de trascender los respetos que motivaron la tolerancia de que le D. Diego hubiese de tener dicha llave en su poder, pues para esto aún faltaba jurisdicción para la permisión que se puso por Providencia en Visita del año pasado de mil setecientos setenta y nueve colocada en el principio del Libro de Inventario de alhajas y ornamentos de esta Iglesia respecto de que en la (…) que se concedió por el Eminentísimo Arzobispo de Toledo para la erección de dicho Altar y colocación en él de las Reliquias, no se comprendió semejante gracia . Para que no continúe por más

tiempo este hecho que cede en (…) de esta Iglesia y sus regalías. Dijo Su Merced debía mandar y mandó que el cura ecónomo de ella a quien se ha entregado dicha llave y de que firmara su recibo al margen, y los curas propios que fuesen en adelante; con ningún motivo ni pretexto la entreguen a dicho Felipe Moreno ni otra persona alguna y que sólo exista y se halle de continuo bajo su dirección y cuidado, lo cual cumpla dicho cura bajo la multa de veinte ducados que se le exigirán por la contravención y además se procederá a lo que halla lugar en derecho”

Relicario que contiene diversos huesos muy pequeños y donde se puede leer en uno de los medallones

de cera “San Pedro y San Pablo”. Superior derecho. Es muy posible que al Relicario al que se hace referencia se este y otro que se encuentra actualmente en la Sacristía de la Parroquia y que contiene sólo una reliquia ya que las demás fueron extraídas en algún momento. Este que reproducimos contiene más de 15 trozos muy pequeños engarzados en hilo de oro. También es muy probable que estuvieran en sus correspondientes relicarios de plata u otro metal precioso.

Parece que estos Relicarios estuvieron hasta tiempos muy recientes en la Ermita de la Soledad de donde perdemos la pista de los mismos hasta nuestros días en los que felizmente han sido recuperados y expuestos nuevamente después de muchos años a la veneración pública. No hay restos de ningún tipo, ni escrito ni de ningún otro modo, de que en la Parroquial de Escalonilla hubiese otras reliquias ni relicarios. Esta es la razón por la que, hasta el momento, estamos en condiciones de afirmar que se trata de estos y no de otros que podrían haber desaparecido. Me parece que el hallazgo ha sido de un altísimo valor sentimental y a su vez histórico. Recuperar dichas reliquias se puede catalogar de un auténtico privilegio para nuestro pueblo y para nuestra Parroquia. Volver a venerar y tener entre nosotros lo que nuestros antepasados veneraron y besaron tantas veces implorando de esos santos tantas bendiciones y deseos es hoy para Escalonilla uno de sus muchos motivos de orgullo. Tener entre nosotros nuevamente algo de tan alto valor sentimental debería provocar entre los hombres y mujeres de hoy sentimientos más altos de estima hacia su pasado y su legado histórico, cultural y religioso. Lo que en otros tiempos pasados los Señores Visitadores del Arzobispado mandaban guardar con tanto celo, como no podía ser de otra manera tratándose de reliquias, a los Presbíteros de esta Iglesia, ojalá quedara guardado bajo tres llaves en el corazón de cada hijo de este pueblo.

MÁS DECORO EN EL VESTIR “Y porque es cosa vergonzosa y de mal ejemplo que los sacerdotes y demás eclesiásticos destinados por su ministerio al culto de Nuestro Señor Jesucristo se porten con indiferencia en rendirle los más reverentes obsequios en ocasión en que sale Su Majestad Sacramentado públicamente a los enfermos e impedidos para el cumplimiento del precepto Pascual; debía mandar y mandó Su Merced, que en adelante todos los Presbíteros y demás eclesiásticos concurran precisamente de sobrepelliz a dicho acompañamiento bajo la multa de veinte ducados a la Cámara de Su Excelencia el Arzobispo de Toledo mi Señor, en que incurran lo contrario haciendo y no hallándose legítimamente impedidos; y se encarga al cura o su teniente cuide del más exacto cumplimiento de esta Providencia con Apercibimiento de que además de incurrir por su tolerancia y omisión en la misma multa se procederá contra él a lo demás que halla lugar”. “… se venda inmediatamente un copón con su patena de plata… y una corona de plata que perteneció a Nuestra Señora de la Paz, por no tener utilidad alguna… se cambie esta en otra alhaja que haya necesidad… Se compongan y doren un cáliz y patena de plata que se hallan inservibles… que se componga también el incensario más pequeño… que con el manto nuevo de tisú que fue de Nuestra Señora de la Paz se haga una casulla con su estola… que se haga una sobrepelliz nueva para el sacristán o sotanas de paño para los acólitos… que se compre zapatos a los acólitos…

REALES PROVIDENCIAS DE SU MAJESTAD (30 de Mayo de 1802- Libro de cuentas)

Las Parroquias del Reino de Castilla no eran ajenas a la vida, tampoco a los impuestos, de la sociedad civil. Llegaban a ellas continuamente correos que daban disposiciones reales que por otra parte había que cumplir a rajatabla y nadie quedaba fuera no sólo de cumplir sino también de hacer cumplir. Nuestra Parroquia de Escalonilla se salvó por los pelos. Me refiero a que una de esas Providencias negaba a los pueblos la posibilidad de poder construir retablos de madera para sus Iglesias. Ardía Castilla y empezaba haciéndolo por las Iglesias. Había que poner fin a tanto incendio intencionado muchas veces por pequeñas revueltas locales como forma de protesta contra el poder establecido. No hacía mucho que Andrés de Huerta había colocado el Retablo del Altar Mayor en la Parroquial de Santa María Magdalena del lugar de Escalonilla. Normalmente desde Toledo se llegaba al pueblo por la Cañada Real a lomo de mulas u otro tipo de caballería. Había que pagar la Parroquia receptora no sólo el correo sino el alojamiento y manutención y proveer de caballería fresca a quienes repartían tales ordenanzas reales por los pueblos y parroquias. La Cañada Real era un ir y venir continuo de gente de un lado para otro. Pobres y ricos, santos y villanos, reyes y nobles utilizaban dicho camino como única vía de comunicación entre los pueblos. Carruajes y caballerías se cruzaban en un ajetreo constante. Escalonilla era uno de esos pueblos por donde pasaba la Cañada Real, y aunque no era sitio de parada ni había palacio alguno o noble con poder, sí tenía un hospital para pobres y transeúntes y una Parroquia donde se podían decir muchas intenciones de misa y donde hacer el agosto muchos religiosos de “misa y olla” y seguir camino para poderlo hacer en un par de jornadas. Junio de 1797 fue uno de esos meses, caluroso ya, cuando llegaba el Sr. Visitador del Arzobispado de Toledo a las calles de nuestro pueblo. Tras visitar el Templo Parroquial se alojó en la casa que tenía la Parroquia en la calle Sileras. La Visita duraba aproximadamente tres o cuatro días, en los que como ya he dicho antes, la Parroquia se hacía cargo de todos sus gastos. Sin duda que era un acontecimiento para el pueblo y es fácil imaginar el trasiego de cura y feligreses los días antes para tenerlo todo en regla.

NO A LOS RETABLOS DE MADREA “Así mismo mandó Su Merced que el cura propio de esta Iglesia Parroquial observe y guarde y haga guardar cumplir y observar las Reales Órdenes expedidas por Su Majestad, que Dios guarde. A saber: La que prohíbe que en las Iglesias de estos Reinos y Señoríos se hagan nuevos retablos ni adornos de madera para obviar los incendios que se experimentan… no lo permita a no ser que sean de piedra o de estuco”

INVERTIR EN RENTA DE TABACO

“La que previene que los censos pertenecientes a Obras Pías se dispongan contra la Real Hacienda y a su consecuencia todos los capitales correspondientes a esta Fábrica, Memorias, Capellanías, Ermitas, Cofradías y demás Fundaciones exigidas en esta Iglesia que en este día se hallaren redimidos y depositados y los que en adelante se redimiesen. Disponga que a la mayor brevedad se remitan a la Capital de esta Provincia para su imposición para la Real Renta de tabaco solicitado, se otorguen a favor de las Obras Pías las correspondientes Escrituras recogiendo copias auténticas de ellas para resguardo de derecho de aquellas”

CAPÍTULO DE DIPUTADOS (Presbíteros de Oficio)

“Prohíben pasen al siguiente Capítulo de Diputados sin justa y fundada causa y sin que preceda Real Permiso de Su Majestad los Canónigos o Prebendados de oficio de las Iglesias o que tengan a su cargo cura de almas o gobierno o jurisdicción eclesiástica mediante ser más precisa y vigorosa Su Providencia por el Infinito y fin de la creación de su oficio y por lo dispuesto en el Santo Concilio de Trento”

PAPEL CON SELLO “…Y ordena proveerse de papel sellado en todos los Tribunales y Juzgados eclesiásticos usando y haciendo usar en el modo cuanto ocurra de actuar en virtud de comisiones, sellos y de las Providencias de cuenta o si se saca algún testimonio como también en las partidas que se compulsen de los Libros Parroquiales. Todo conforme a lo mandado por Su Eminencia mi Señor en tantas órdenes dirigidas así mismo por su Secretario de manera que con ejemplares de las referidas Reales Órdenes encargándole cuide del cumplimiento y observancia en la parte que le toca y las haga observar y cumplir en las Iglesias de los Pueblos de estos Partidos” “Igualmente mandó Su Merced el señor visitador que el Cura propio de esta Iglesia Parroquial y los demás Presbíteros de ella en observancia y cumplimiento de las referidas órdenes y decretos de Su Eminencia el Cardenal Arzobispo de Toledo mi Señor, tengan semanalmente Conferencias Morales y de Sagradas Ceremonias lo que cumplirán sin jamás tener excusa con apercibimiento en forma. Y bajo del mismo el citado cura propio continúe explicando con frecuencia la Doctrina Cristiana y Santo Evangelio visitando a sus feligreses en las enfermedades aplicándoles en su última hora la Indulgencia Plenaria concedida para este caso” En esta misma Visita Eclesiástica se hace referencia y se pide permiso por parte del Párroco D. Luis Carlos y Zúñiga a los Señores del Consejo de la Gobernación para hacer diferentes obras en el Templo Parroquial. Las más importantes fueron:

• Componer el Órgano. • Hacer arreglos de la puerta lateral del Cierzo. • Hacer un confesionario. • Frontales de altar y varias casullas de distintos colores. • Comprar un Terno bueno para días de primera clase.

FIESTAS PERDIDAS EN EL TIEMPO

Normalmente en las Iglesias Parroquiales y más habiendo tantos Presbíteros, se celebraban todas las fiestas litúrgicas. Algunas han desaparecido ya del Calendario pero otras se han perdido por no quedar devotos o por otras circunstancias. Concretamente en la Parroquial de Escalonilla allá por el año de 1802 se celebraban las siguientes fiestas.

• Fiesta de Nuestra Señora de la Candelaria. • Fiesta de San José. • Fiesta de San Antonio de Pádua. • Fiesta de Santa María Magdalena. • Fiesta de San Germán. • Fiesta de La Asunción. • Fiesta de Nuestra Señora del Rosario. • Fiesta de San Francisco de Asís. • Fiesta de Las Ánimas. • Fiesta de Santa Bárbara. • Fiesta de Nuestra Señora de La Estrella. • Fiesta de Nuestra Señora de la Sangre. • Fiesta de las Cruces de Mayo.

No puedo intuir por qué razón no figura en esas fechas y en ese listado de fiestas la del Santísimo Cristo. Tal vez se pueda encontrar más adelante. (Libro de Cuentas y Rentas de Fábrica – 1777-1809) La primera razón pudiera ser que hasta fechas posteriores no empieza a venerarse la imagen del Santísimo Cristo de la Cruz a Cuentas(1834). Es en una Visita posterior, ya en 1819, cuando aparecen otras fiestas como una dedicada al Santísimo Cristo de la Sangre.

ROPAS PARA AMORTAJAR CURAS Son muchas las veces que aparece este concepto. Me fijo ahora más en él porque casi siempre que aparece es para enterrar algún sacerdote del pueblo. En este caso es a un tal D. Juan López Moreno, Presbítero de esta Villa de Escalonilla. Evidentemente se conceptuaba como gasto ya que la ropa que se ponía no podía ser devuelta a la Fábrica de la Parroquia. Esto ocurría en el año de 1801-1802.

UN SAN JOSÉ PARA LA VILLA DE BURUJÓN

“Y por último se cargan ochocientos reales que percibió el difunto Mayordomo por el valor de un San José que se vendió para la Iglesia de Burujón como consta de la Declaración del cura de esta Parroquia” (Libro de Cuentas 1801-1802) El anterior Mayordomo consta que había muerto un tres de Septiembre y fue nombrado y aceptado para tal cargo Pedro López de Fulgencio, de esta vecindad.

SANTOS ÓLEOS

Puede resultar un tanto extraño pero así figura en las cuentas parroquiales de 1819. Hoy, en la tarde del Jueves Santo, cada sacerdote trae a su Parroquia los Óleos que el Arzobispo consagra y bendice en la Santa Iglesia Catedral de Toledo. En esas fechas era un correo el que los traía hasta cada Parroquia a lomos de caballo y por supuesto había que pagarlo. La nota dice lo siguiente: “…al conductor que ha traído los Sagrados Óleos desde Fuensalida a esta Iglesia…”

¿POR QUÉ NO SE DORÓ EL RETABLO?

“Habiendo constatado Su merced que en un pueblo como este de bastante vecindario, algunos hacendados y muchos devotos afectos al culto divino tengan el Altar Mayor de su Iglesia Parroquial sin dorar ni hermosear (a lo menos) causando por esta razón mucha oscuridad y lobreguez a esta Iglesia. Mandó Su Merced que el cura propio de ella concite a sus feligreses a fin de que cada uno contribuya según sus posibles para dorar dicho Altar o ya costeando algunos (…) para dicho fin, o se valga de otros arbitrios que le diese su sabia (“paternidad”) como acostumbra hacerlo en todas sus cosas” (Libro de Cuentas y Rentas – 1807)

LA CRUZ QUE HOY PRESIDE “El Licenciado, Doctor D. José Pérez Sedano, cura propio de esta Parroquial compareció en este Tribunal y ante Su Merced exhibió una cuenta de Francisco Arenas, Maestro Platero de la Ciudad de Toledo, por la que consta haber construido una Cruz de plata para la manga de esta Parroquia y por ella haber percibido en metálico, después del “rebatimiento” de plata vieja, mil seiscientos noventa y nueve reales y nueve maravedíes, de dicho Cura…” (Libro de Cuentas y Fábrica – año 1819)

AUMENTO DE SALARIO A LOS MONAGUILLOS

“Mediante a que están los Acólitos de esta Parroquial con sólo cinco reales de dotación cada mes y haber sido informado del Sr. Cura de ello, el trabajo tan penoso y lastimo que verifican, les aumenta Su Merced hasta ocho reales, debiéndose entender desde el último abono en adelante.” (Libro de Cuentas y Fábrica – año 1819) Un poco más adelante, ya en 1821 sabemos incluso el nombre de los acólitos y que eran tres al servicio permanente de la Parroquia. Se trataba de Nicolás Fernández, Pablo Martín y Francisco Alía. También en el año 1833 la Parroquia, a petición de los padres de los Acólitos, tenía que proveer dos veces al año, una para la fiesta del Corpus y otra para Navidad, de zapatos nuevos a los mismos.

UNA PIEZA DESCONOCIDA

“Así mismo se abonan al referido Sr. Cura setenta reales, los mismos que ha importado un cuenco para la Pila Bautismal y su conducción desde Talavera según consta de recibo de Antonio Velasco de primero de mayo de mil ochocientos veinte y uno”

Seguramente en cerámica de Talavera sea la única pieza que se encuentra en la Parroquia y que además esté fechada y con el nombre del autor incluido el precio exacto de su valor de compra en su momento. Por su antigüedad se trata de una pieza única en su género de las que se encuentran muy pocas y éstas están ya en manos de coleccionistas muy expertos en cerámica de esa época. Podemos tener el honor de poseer entre las muchas cosas de nuestra Parroquia una pieza única en cerámica Talaverana. (Libro de Cuentas de las Rentas de Fábrica – año 1777-1821).

TESORO QUE SE SALVÓ POR LOS PELOS

“Las Tropas Constitucionales se llevaron las alhajas de plata de esta Iglesia a Toledo. Para la recaudación de ellas, que se verificó sin faltar nada se ha hecho los gastos siguientes: Por el primer viaje hecho a Toledo para la dicha recaudación abonó quince reales por cinco días a tres personas que con sus caballerías fueron de segunda vez a Toledo para hacerse cargo y no se pudo verificar y se gastaron en ello ciento ochenta y cinco reales. Hubo que retirarse sin traerlas. A los pocos días se volvió y para su recaudación y gastos hechos abonó este Mayordomo doscientos cuarenta y seis reales y doce maravedíes con los de la primera y segunda vez que se fue para traer las Alhajas importando cuatrocientos cuarenta y seis reales y doce maravedíes” Sin duda que sería una de las escenas más bonitas para representar. Imaginemos a las tropas llegando al pueblo montados a lomo de caballo y con la parafernalia de un ejército. Lo primero fue arramblar con todo lo que tenía algún valor. Su objetivo era el oro y la plata que se encontraba normalmente en las Iglesias, ermitas y lugares de culto. Había que abrir las puertas y los tesoros de par en par pues se trataba de ayudar a las tropas. Los curas poco podían hacer salvo esconder lo más valioso en casa de algún vecino o lugares apropiados como alguna cueva. Pero las tropas llegaban por sorpresa a los pueblos. Normalmente era la noche el momento elegido. Podemos imaginar nuestras calles empedradas sonando los cascos de los caballos. La Iglesia iluminada con los últimos cabos de vela y la lámpara del Santísimo ardiendo con el poco aceite del día que había puesto el Sacristán de turno. Cura, Mayordomo y vecinos corriendo para salvar alguna cosa si era posible. Un Sacristán que se afana por esconder lo más valioso aprovechando la oscuridad de la noche y tal vez saliendo por la puerta del cierzo. En poco tiempo quedaba la Iglesia desvalijada y las tropas proseguían con algunos en la avanzadilla para desvalijar lo mismo en otros pueblos de alrededor. Con un poco de fantasía es fácil reproducir esos momentos, pero poco más o menos sería de esa manera como ocurrieron los hechos. (Libro de Cuentas de la Renta de Fábrica – año 1777-1827)

Evidentemente tampoco se salvó del saqueo la Ermita de la Soledad, donde en ese mismo año figura que fueron enterrados aproximadamente unos cuarenta y cinco por lo que el Mayordomo abona la cantidad de 142 reales. Es posible que fueran enterrados en el mismo cuerpo de la ermita ya que parece que el cementerio aún no existía. (Libro de Cuentas de la Renta – año 1826-1827) En este mismo año hubo que trasladar a Su Merced y cubrir todos sus gastos de carruaje y caballos hasta la Villa de Maqueda, además de pagar casa, amas y cocineras durante sus tres días de estancia en Escalonilla.

La Parroquia en esas condiciones quedaba mal herida desde el punto de vista

económico. Había que empezar a vender algunas de sus posesiones que procedían de sus muchas Fundaciones y que comenzaban a convertirse en una carga más que en un medio de rentas. D. José Pérez Sedano comenzó vendiendo la casa que estaba situada en la plaza que sale a la Ermita de la Soledad y que fue tasada en seis mil novecientos setenta y cinco reales en el año 1820 cuando dicho presbítero ya no era el Párroco por

encontrarse en Toledo en la Iglesia de San Vicente y tener que hacer la gestión ante el Señor Visitador el Párroco titular que era a la sazón D. Lázaro Antonio Díaz, que a su vez se vale del Presbítero Esteban Martín Abad, vecino de este lugar. (Libro de Cuentas de la Renta de Fábrica – año 1820-1821)

UNOS CURAS UN TANTO ESPECIALES

A Escalonilla en esos momentos llegaban curas de todas partes y en distintas circunstancias. Algunos en circunstancias muy especiales. Un 9 de Septiembre del año 1828, cuando eran las seis menos cuarto de la tarde se presentó llamando a la puerta de la casa cural un individuo llamado D. Enrique Fernández Gallardo que dijo ser Presbítero secularizado del Orden de Carmelitas Descalzos. Venía con Carta del Arzobispado donde se decía que hasta el momento había estado adscrito a la Parroquia de Burujón pero que ahora lo era de la de Escalonilla. El 20 de Diciembre de 1849 se presentaron ante el cura del lugar D. Felipe Díaz, secularizado de la Orden de Predicadores, D. Cecilio Collado, exclaustrado de la Orden de Franciscos Descalzos, D. Isidro Antonio de Celayeta, exclaustrado de la Orden de San Norberto, Canónigos Premostratenses, D. Hermógenes Fernández, de la de Predicadores de Santo Domingo y también exclaustrado, D. Marcelo Alonso, carmelita calzado, D. José Arroyo, Presbítero exclaustrado de la Orden de San Francisco de la regular observancia, y por último D. Vicente Cuevas, de la Orden de Predicadores de Santo Domingo. Todos ellos quedaban adscritos a la Parroquia de Santa María Magdalena de Escalonilla con los mismos derechos y obligaciones que los sacerdotes residentes, que eran otros dos. O sea, que en Escalonilla había permanentemente 9-10 curas más los frailes que llegaban para hacer el agosto en esta tierra. Imaginemos las misas que tenía que haber diariamente en todos los altares y los sitios para vivienda y manutención de los mismos. Gastos que podía cubrir fácilmente esta Parroquia por sus muchas Fundaciones pues de lo contrario no habrían sido adscritos a la misma. (Libro de Cuentas de Fábrica – últimas hojas y una suelta)