elpapa delfindel mundo - © marielena montesino de … · cómo se definiría?–, ... pasar por...

48
El Papa del fin del mundo

Upload: trinhnhan

Post on 29-Sep-2018

219 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

ESTE

EJEM

PLARACOMPA

ÑALA

EDICIONDEL

DIARIOCLA

RINDEL

DOMINGO17

DEMARZ

ODE20

13.PRO

HIBIDASU

VEN

TAPO

RSEPA

RADO.

SUPL

EMEN

TOES

PECIA

LDOMINGO17

DEMARZ

ODE20

13

ElPapadelfindelmundo

2| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

DeBergoglioaFrancisco,deFloresalVaticano

E s el Papa de los récords: primer no europeo des-de la creación de los Estados Pontificios; primerlatinoamericano, primer argentino, primer jesui-ta, primer Francisco... Sus primeros gestos en eltrono de Pedro parecen inaugurar algo más que

estas curiosidades. Con él, se abre un nuevo capítulo en lahistoria de la Iglesia, cargado de expectativas, desafíos e inte-rrogantes. La atención del mundo –más allá de la grey católicade la que ahora es sumáximo pastor– está puesta en la figurade Jorge Bergoglio.Hijo de un empleado ferroviario y un ama de casa, de orí-

genes italianos del Piamonte, vecino del porteño barrio deFlores, desde joven supo cuál sería su camino. Pero no sos-pechaba entonces que aquella vocación temprana lo llevaría aocupar el máximo sitial de la Iglesia. Llegó allí sin resignar susprincipios ni el estilo llano y austero que mantuvo a lo largode su ministerio.Este suplemento especial transita los diferentes aspectos de

su vida –los antepasados italianos, la infancia y adolescenciaporteñas, el descubrimiento de su vocación, los distintos tra-mos de sumisión sacerdotal hasta culminar con su consagra-ción como Sumo Pontífice–, los entretelones del cónclave enel que resultó electo y los desafíos que deberá enfrentar ensu incipiente papado. Distintos expertos –teólogos, filósofos,sacerdotes y periodistas, entre otros– analizan la designacióndel papa argentino y sus posibles implicancias para el futurode la Iglesia, y los efectos que puede causar en la Argentina yen América Latina. Además, el pensamiento de Bergoglio ensus propias palabras. π

Buonasera.Miércoles 13 de marzo de 2013. El arzobispo de BuenosAires, Jorge Bergoglio es ahora el papa Francisco. Y saluda a sus fieles

Indice

4ElPapaargentino.PerfilíntimodeFrancisco.

9LaspalabraspreferidasdelSantoPadre.

10Portacomaro,elpueblodesusantepasadositalianos.

13LosBergoglio:losorgullososparientesdelPontífice

14Jesuitas,laordendeFrancisco:400añosenlaArgentina.

15Lamisióndeconstruirpuentes.PorPérezDelViso.

16LashuellasdelpasadojesuíticoenlaArgentina.

18Polémica:latareadelPapaenlosañosdeladictadura.

22LatensarelacióndeBergoglioconlosKirchner.

24ElcardenalBergoglio,ensuspropiaspalabras.

|3DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

ELPAPADELFINDELMUNDO

EdiciónGeneral:Silvia Fesquet. Edi-ción, produccióny textos:ClaudioSavoia, Pablo Calvo,Gustavo Sierra yMarcelo Larraquy.Colaboraron: Silva-na Boschi y PatricioDownes. Ediciónfotográfica: Sebas-tián Alonso y PabloCerolini.Diseño:Diego Pallanch yCarlos Vazquez.

47El“findelmundo”,cunadelPapaFrancisco.

30PrimerasnoticiasdelCónclavequehizoPapaaBergoglio.

32Secretos,escándalosyproblemasquedeberáenfrentar.

34LosPapasmásinfluyentesenlahistoriadelaIglesia.

36Francisco,unnombrecargadodehistoriaqueinspiróaartistas.

38Análisis:Boff,NavarroValls,Küng,Tokatlian,López,Morandini.

44Anécdotasdeunhombrecomúnquehoyesúnico.

46SergioRubin: elvértigodelbiógrafo.

4| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

ROMA.ENVIADO ESPECIAL

Sergio Rubí[email protected]

CONTINUA EN PAGINA 6

Unavida dedicada al sacerdocio

ElPapaargentinoQuería que lo llamaran simplemente “padre Bergoglio”. Prefería siempre viajar entransporte público y tomarmate con los curas villeros. Gran lector, desde lasgrandes novelas hasta la prensa del Partido Comunista. Estudió en una escuelaindustrial y se recibió de técnico químico. A los 37 años ya era el Superior de losjesuitas argentinos.

C Cómo se definiría?–,le pregunté una vez.–Como Jorge, cura,

me respondió.Era ya cardenal y, el

máximo título que ostentaba cuan-do no le quedaba otro remedio, sepresentaba como “monseñor Ber-goglio”. Pero hasta no hacemucho–ya siendo obispo– lo hacía como“el padre Bergoglio”. De hecho,muchos que lo frecuentaban –ensumayoría gente muy sencilla– lollamaban de la misma manera.Sería un recurso demagógico, si-no fuese que lo acompañaba contoda una actitud de vida simple,austera y demuy bajo perfil. Comocuando, como cardenal primado ypresidente del Episcopado, recibióen el arzobispado a una familiahumilde del Chaco a quien habíaconocido y, él mismo le calentóel agua para el mate, le obsequiófacturas y la despidió con besos yel pedido de que se cuidaran en elviaje de vuelta a la provincia.Jorge Mario Bergoglio, el ahora

Papa Francisco, siempre fue así. Y

no cambió al llegar a lo más altode la Iglesia argentina. Rechazó elauto con chofer –prefirió el colec-tivo y el subte–, la coqueta residen-cia arzobispal de Olivos y hasta elconfortable despacho en la Curiaporteña, frente a la Plaza deMayo,que convirtió en un depósito. Has-ta su habitación, en el tercer pisodel edificio, sorprendía por su sen-cillez: una cama, unamesita y unaestufa para los fines de semana deinvierno porque no permitía quese encendiera la calefacción centralsólo para él cuando no estaba todoel personal. Como buen jesuita, sehabía tomadomuy en serio el votode pobreza.Hijo de piamonteses, sus abue-

los inmigrantes pasaron las deCaín en la nueva tierra que desdeel otro lado del océano se veía co-mo promisoria en contraste con lapobre Italia posterior a la PrimeraGuerra. La crisis del 30 los hun-dió. Pero, perseverantes, salieronfinalmente adelante. Laboriosos,sus padres lo criaron a él y a sustres hermanos en una casona delbarrio porteño de Flores con mu-cho esfuerzo, pero sin hacerlos pa-sar necesidad. De todas maneras,su papá quiso que Jorge, antes determinar la secundaria, comenza-ra a trabajar un poco para empezara inculcar de chico la cultura del

trabajo y el esfuerzo.Por la influencia de una de sus

abuelas, muy devota, Jorge empe-zó a volcarse a la religión. Iba regu-larmente amisa, participaba de ungrupo parroquial, pero no muchomás que eso. Hasta que un Día dela Primavera en que se aprestabaa salir a festejar con su noviecita ylos amigos sintió la necesidad depasar por la parroquia de San Joséde Flores para confesarse. Muchosaños después contaría que las pa-labras del sacerdote lo sacudieronde tal manera que le despertaronsu vocación religiosa. Salió delconfesionario con una convicción:quería ser cura.Con todo, Jorge no le reveló a

nadie su decisión. Ni lo haría porvarios años. El único síntoma fue

que, al poco tiempo, rompió consu novia de varios años. Prefiriófoguearse un poco más en la vi-da profana. Luego de terminar lasecundaria, consiguió un trabajoen un laboratorio que lo templó.En buena medida por la gran vo-cación docente de su jefa, EstherBalarino de Careaga, unamilitantecomunista muy exigente y prolija,que con la llegada de la dictaduraterminaría siendo secuestrada ydesaparecida. Esther, además, lesuscitó el gusto por la política entérminos de conocimiento intelec-tual, no demilitancia. “Leí de todo,incluso la publicación del partidoComunista, pero no lo era”, mecontó una vez Bergoglio.La vida, sin embargo, lo estaba

por someter a una dura prueba.Con pocomás de 20 años cayó gra-vemente enfermo. Se debatía entrela vida y lamuerte. Losmédicos nopodían acertar con el diagnóstico.Finalmente, dieron: una infecciónpulmonar. Tuvieron que extirparleparte de uno de ellos. El tratamien-to con sondas atadas a canillas fuedolorosísimo.Muchos se le acerca-ban para confortarlo con palabrasde circunstancias, que no le ser-vían. Hasta que, sorpresivamente,apareció una monja que le dijo:“Lo estás imitando a Jesús, quepadeció en la cruz”. Fue lo único

que realmente le ayudó a sobrelle-var tanto dolor y tanta angustia.Recuperado, empezó a contarle

a su familia su decisión de ser sa-cerdote. Su abuela estaba feliz, supadre, contento. Pero sumadre seenojó, no quería saber nada. No esque no fuese católica, pero pensa-ba que no era para él el sacerdocio.Sin embargo, Jorge no se amilanó.Siguió adelante con su decisión yoptó por los jesuitas, impactadopor su gran formación y vanguar-dismo. Claro que en los primerosaños de seminario su mamá noquería ir a verlo. Fue duro. Hastaque una vez ella lo aceptó. Y allí es-tuvieron los Bergoglio, orgullosos,el día de su ordenación.Profesor de literatura, la docen-

cia acompañó sus primeros pasosde cura. En el prestigioso colegiode la Inmaculada Concepción,de Santa Fe, donde sus alumnoslo apodaban cariñosamente “Ca-rucha”, enriquecía sus clases convisitantes ilustres. Llegó a llevar alpropio Jorge Luis Borges a dar unacharla.Con apenas 37 años fue designa-

do superior de los jesuitas en la Ar-gentina. Eran los tiempos terriblesdel país. Los jesuitas no escapabana las tensiones que atravesaban atoda la sociedad. Entre otras cosas,

Suspadreslocriaronjuntoasustreshermanosconmuchoesfuerzo,perosinhacerlospasarnecesidad.

|5DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

Lamisma sonrisa. El niño Jorge MarioBergoglio, en una de las fotos del álbumfamiliar que la semana pasada abrió suhermana para poder conocer a Francisco.

6| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

Bergoglio tuvo que hacer ingentesgestiones para que liberaran a dossacerdotes de su comunidad quese desempeñaban en una villa deBuenos Aires y que habían sidosecuestrados –y que fueron salva-jemente torturados–. Lo consiguiómeses después. Su comunidad sedebatía en una crisis con muchasdeserciones de sacerdotes. El pa-dre Bergoglio logró sortearla.“Salvó a la Compañía de Jesús desucumbir en el país”, diría muchodespués el tres veces secretario deCulto, Angel Centeno.Tomar decisiones enérgicas no

le granjearon el aprecio de todoslos miembros de su comunidad.Concluido su mandato, Bergogliomarchó a Alemania para una tesissobre el teólogo Romano Guardi-ni. A su vuelta, tras un paso porel colegio del Salvador, de BuenosAires, inició poco menos que unexilio en la iglesia jesuita de Cór-doba. Hasta que a comienzos delos 90 el entonces arzobispo deBuenos Aires, cardenal AntonioQuarracino, impactado por su es-piritualidad, inteligencia y humil-dad lo señaló para que fuera unode sus obispos auxiliares. Ahí fue-ra Bergoglio comenzó una carrerameteórica: en poco tiempo fue el

Unavida dedicada al sacerdocio

VIENE DE PAGINA 4

CONTINUA EN PAGINA 8

Herminia,CatalinayBianca,las“enfermerasdelpapa”

Hace tres días que ninguna de ellas se des-cuelga la sonrisa de la cara. A cada rato, laemoción les nubla la vista y alguna lágrima caesobre sus hábitos níveos. Herminia, Catalina ylamadre superiora Bianca son enfermeras dela orden de SanCamilo, e integran el equipo dereligiosas que con amor de hermanas atiendeen la clínica que lleva el nombre de su creador,en el barrio porteño de Caballito. Allí se atien-den los sacerdotes, monjas y sus familiares.Allí, también, le cuidaron la salud durante dé-cadas al nuevo papa.“Yo lo conocí hace cincuenta años,cuando era seminarista y se forma-ba en la casa que los jesuitas tienenen SanMiguel. Nosotras estábamosal lado, y los veíamos jugar al fút-bol. También fui a su ordenación,en 1969”, dice sor Herminia. Yrecuerda la vez que el padre Jorge,hace años, le reprochó una decisión:“Habíamos abierto una escuela deenfermería paramujeres, en eseentonces era así. Pero una vez nosquisomandar a un varón, y cuandole dije que nomemiró: ‘¿por quéesa discriminación? ¿Un varón nopuede ser enfermero? Pensalo’. Te-

nía razón. Después lo traté acá. Siempremuyinteresado por la salud de sus curas, por la desus familias. Si alguno caía enfermo o debíaser internado, el arzobispo venía sin falta avisitarlo y cuidarlo”.Herminia ofrece otros rasgos para el retrato:“siempre lo rebeló la injusticia, el maltrato alosmás pequeños y débiles. Y él como sabeescuchar, lo enoja que no lo escuchen”.Sor Bianca, italiana como la tarantella, conocióa Bergoglio hace un año ymedio, cuando vinoa hacerse cargo de lamisión. “Me impactómucho que fuera tan amable y humilde.Mehabló en italiano, y esome emocionómucho”,dice, y los ojos se le cargan de emoción. “‘Ellaes deNápoles, preparale la pasta a la putanes-ca’, les decía amis hermanas, para hacerme

sentir enmi casa. ¡Y cómo lo quieren todas! Elmiércoles, cuando salió al balcón de San Pe-dro, algunas se arrodillaron frente al televisor”.Sor Catalina lleva la bondad estampada enla cara, como un sello divino. “Yo también loconozco desde que éramos jóvenes, en SanMiguel losmuchachos nos pasaban el pancasero que hacían, los salames, eramuy lin-do”, dice. “En los años 70 su abuelita estabaalojada en nuestra residencia para ancianos. Ella adoraba, era su debilidad. Y ella sólo hacíacaso a lo que el padre Jorge le decía, nadamás. Fuemuy impresionante paramí verlo eldía en que ellamurió. Su nieto estuvo a su ladotodo el tiempo, y cuando su vida se apagó ensusmanos se postró en el suelo, y nos dijo ‘enestemomentomi abuela está en elmomento

más importante de su existencia.Está siendo juzgada por Dios. Esees elmisterio de lamuerte’. Unosminutos después, se puso de pie yse fue, sereno como siempre.”Silencio. Imaginar la escena quetodos escuchamos estremece.“Con el papa Francisco renace laesperanza”, retomaCatalina. Y lasonrisa interminable amanece ensu cara rozagante.

Hermanas. Sor Herminia, sor Catalina y sor Bianca, devotas del Papa./FERNANDEZ.

www.clarin.comLa entrevista con

hermanas enfermeras.

VERY LEER

En familia. Jorgito Bergoglio, junto a su hermano, el día en que tomó la comunión. A los 21 años decidió hacerrealidad su vocación sacerdotal. Su abuela y su padre lo apoyaron, pero su madre se tomó bastante más tiempopara aceptar que su hijo sería un sacerdote.

8| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

vicario general de Quarracino yluego su coadjutor con derecho asucesión por lo que ocupó su lugartras sumuerte, en 1998. A ellos sesumarían después el cardenalatoy dos presidencias sucesivas de laConferencia Episcopal.El prestigio se Bergoglio iba en

ascenso. En 2002 comenzaría suproyección internacional por unhecho fortuito. Como miembrode un Sínodo de obispos en el Va-ticano fue elegido relator suplen-te. Pero su titular, el arzobispode Nueva York, debió ausentarsea su diócesis para participar de laconmemoración del primer ani-versario de las Torres Gemelas.Bergoglio quedó, así, al frente dela asamblea, dando una impresiónóptima entre obispos de todo elmundo. Tanto es así que duran-te la elección del sucesor de JuanPablo II resultó el más votado des-pués de Joseph Ratzinger: obtuvo40 votos sobre 117. Nunca antes,no ya un argentino, sino un latino-americano había cosechado tantossufragios en una votación papal.A su vuelta vendrían tiempos de

tensión política. La homilía quepronunció en el Tedeum de 2004por la celebración del 25 de Mayo–cuando alertó sobre el autoritaris-mo– provocó el enojo del enton-

ces presidente Néstor Kirchner,que decidió no ir más a los oficiospatrios del cardenal. Desde aquelmomento, Bergoglio se convirtiópara el oficialismo en una suertede jefe de la oposición. Además, elkirchnerismo vio su mano detrásde la decisión del obispo JoaquínPiña –jesuita como él– de presen-tarse en las elecciones a conven-cional constituyente de Misionespara hacer fracasar los intentosdel gobernador kirchnerista CarlosRovira de introducir la reelecciónindefinida. Y lo logró pese a que elpropio Kirchner fue a la provinciaa apoyar a Rovira.Cuestionador de las políticas

neoliberales –se negó a recibir auna delegación del FMI en vís-peras de la crisis de 2002–, Ber-

goglio se convirtió en el principalexponente del ala moderada de laIglesia argentina después de unalarga hegemonía de los conser-vadores. De gran olfato político ydistante de las posiciones reaccio-narias, propuso a sus pares unaactitud contemporizadora cuandose avecinaba el debate por la leyde matrimonio gay. Creía, por unlado, que Kirchner haría todo, ape-lando a buenas y malas artes, contal de que se aprobara la ley. Y, porel otro, pensaba que un discursoduro de la Iglesia iba a ser contra-producente. Por eso, se inclinabapor la aceptación de la unión civily por un discurso moderado. Sinembargo, fue la única vez que per-dió una votación en el Episcopado.Ganó la posición dura. El desenla-ce en el Congreso le terminó dan-do la razón.Paralelamente, promovía la pre-

sencia en las villas. Potenciaba elEquipo de Sacerdotes de Villasde Emergencia, pero con un per-fil ajeno a un ideologismo, sinoevangélico. Y, preocupado por laindiferencia religiosa, la pérdidade fieles y la poca práctica, llegabaa proponer a sus curas “alquilarun garaje y poner allí una capilla”.Oficiabamisas con cartoneros y exprostitutas en populosas plazas dela Ciudad y se sumaba al combate

al trabajo esclavo de la mano de laasociación La Alameda. “La escla-vitud todavía no se abolió”, repetía.Visitaba centros de recuperaciónde adictos y lavaba los pies de pre-sos y enfermos de sida el JuevesSanto.El 17 de diciembre de 2011,

cuando cumplió 75 años –la edaden que deben jubilarse los obispossegún la ley canónica–, Bergoglioelevó su renuncia al Papa. Comoun gesto de deferencia que el pon-tífice tiene con todos los titularesde grandes arquidiócesis fue pro-rrogado de hecho. Pero sabía quea fines de ese año Benedicto XVIse la aceptaría. Por eso, tenía claroque iba a pasar sus últimos díasen el Hogar Sacerdotal de BuenosAires. La renuncia de Ratzinger lo

obligó a viajar a Roma para unaelección papal. Pero, a diferenciade la vez anterior, en esta ocasiónlos medios no lo tenían por can-didato. Su edad parecía mucha.Se pensaba que los cardenales noelegirían a alguien de más de 70años.Sin embargo, las especulaciones

previas al cónclave fueron erradas.Bergoglio estaba en carrera. Y, sialguna duda había, la terminó dedisipar durante su discurso en losplenarios previos al cónclave: fueel más aplaudido de los 160 discur-sos. Picó en punta en la primeravotación y en la quinta su triunfofue aplastante: más de 90 votos,dicen los vaticanistas. Por eso, lasorpresa fue grande cuando apa-reció de blanco en el balcón de labasílica de San Pedro. BergoglioPapa. Como también empezó asorprender al mundo con sus ges-tos de sencillez y austeridad ensus primeros días como pontífi-ce. Pero sus gestos no fueron unasorpresa para los que lo conocíanbien en Buenos Aires.El cura Jorge, el padre Jorge,

acaba de llegar a lo más alto de laIglesia con la misma simpleza yausteridad con la que transitó todasu vida. Es un buen punto de par-tida para una Iglesia que necesitamucho aire fresco. w

Unavida dedicada al sacerdocio

VIENE DE PAGINA 6

“En esa época los empleados no ingresaban a losempleos por avisos en los diarios sino por referenciaso recomendación de algún conocido, que daba ga-rantías”, indica Carlos Hickethier, director del labora-torio Hickethier-Bachmann.La empresa fue fundada en 1923. Treinta añosmástarde, uno de sus empleados fue Jorge Bergoglio, queya se había recibido de técnico químico. Trabajaba enel turnomañana, de 7 a 13. Su jefa era Esther Bales-trino Careaga, paraguaya, quien añosmás tarde seríasecuestrada por laMarina (ver página 19).“Jorge (Bergoglio) se ocupaba de controlar lasma-terias primas de los productos. Estaba en la parte dealimentos. Habrá estado en el laboratorio hasta elaño 1956. Ya eramuy religioso. Se percibía en susconversaciones.Mantuvo el contacto con los em-pleados. Les celebró el matrimonio a varios de ellos”,comenta Hickethier, que lo trató en la década del ‘50.Después el laboratorio semudó de barrio Norte a suactual sede de Parque Patricios. Y volvió a verlo demanera casual, cuando ya era arzobispo de BuenosAires.“Fue una circunstanciamuy especial, -recuerdaHickethier- porque era un día de lluvia y lo encon-trémientras estaba por tomarse un colectivo. Nosquedamos charlando un rato, recordando aquellostiempos. Y esa sencillez que tenía de joven confirmala forma de actuar de Bergoglio a lo largo de su vida”,indica.El director del laboratorio sonríe cuando comentaque Bergoglio, además de ser el primer Papa argen-tino y latinoamericano de la historia, es el primertécnico químico de Hickethier-Bachmann que llega altrono de San Pedro.

Suetapadelaboratorista

EMPLEOJUVENILEn las villas y enel subte. Bergogliosiempre prefirióla austeridad yestar al lado de lospobres. Protegióal Padre Pepe yotros sacerdotesperseguidos de lavilla de Barracas.

Suspadreslocriaronjuntoasustreshermanosconmuchoesfuerzo,perosinhacerlospasarnecesidad.

Promovíalapresenciaenlasvillasypotenciabaeltrabajoallídelequipodesacerdotes.

|9DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

AnálisisPadre VíctorManuelFernández

Rector de la UCA

El diccionario personal

Estas expresiones que Franciscousa con frecuencia contienen pro-fundas convicciones:

“Autorreferencial”. Indica unaIglesia que semira el ombligo, en-cerrada en intrigas, internas o ne-cesidades mundanas, en lugar deabrirse, de entregarse con alegríay de servir humildemente.

“Rezá pormí”. Lo dice siempre.Muestra la conciencia de sus lí-mites, de que necesita la ayudapermanente de Dios y la oraciónde los demás. Por eso, apenaselegido, se inclinó ante el pueblopidiendo su oración.

“Humillate”. Es lo que le dice auna persona que está haciendomucho bien. Está convencido deque la humildad es indispensablepara que no se arruinen las me-jores obras: “Humillate, para queel Señor pueda seguir haciendograndes cosas”. Cuando le ofre-cieron el papado respondió: “Soy

LaspalabraspreferidasdelpapaFranciscoLe gusta más escuchar que hablar. Perocuando lo hace, selecciona conprecisión los términos quemejorllevarán sumensaje. Y si no losencuentra, los crea.

un pecador, pero acepto”.

“Audacia”. La usa para dar alientoa los que se achican o se dejan ven-cer por los temores. Para él nuncaestá todo perdido. No se echa atráspormás que intenten voltearlo concalumnias y ataques. Está segurode que al final el bien y la verdadsiempre triunfan. Yo mismo pasépor situaciones en las que habríapreferido desaparecer, pero él mesostuvo con firmeza: “Animo. Le-vantá la cabeza y no dejes que tequiten tu dignidad”.

“Periferias existenciales”. In-vitó a los agentes pastorales a noquedarse encerrados y a llegar alas periferias, allí donde nadie va:“Salgan de las cuevas, salgan delas sacristías… Prefiero que losatropelle un auto y no que se que-den encerrados”. Exhorta a salirde la comodidad personal o delcírculo de personas agradables,para estar cerca de otros. Así lohacía Jesús, que dedicaba tiempoal ciego del camino, al leproso, a lamujer pecadora.

“Fervor apostólico”. Lo dice pa-ra motivar una entrega generosadesde el corazón. Porque nadiecambia el mundo haciendo cosaspor obligación. Los que han deja-do huellas en la tierra siempre han

tenido un fuego de fervor interiorque los hamovilizado. Por eso cri-tica la “mundanidad espiritual”de los que se aferran a prácticasexternas o a la apariencia religio-sa, pero vacíos de la fuerza internadel Espíritu.

“Cultura del encuentro”. Pro-cura fomentar todo lo que acerca,une, suma, conecta a las personasy a los grupos. Es un enamoradodel bien común y de la amistad so-cial. Por eso no mira con agradolas polarizaciones y las dialécticassociales.

“Cuidar la fragilidad del pue-blo”. Lo pide a cualquiera quetenga alguna autoridad. Nadietiene fuerza o poder para obtenerbeneficios o glorias mundanas,sino para cuidar a la gente, parasostener y promover a los más dé-biles.

“Dejatemisericordear”. Es unode sus felices neologismos. Invi-ta a las personas que se llenan deculpas y escrúpulos a dejarse per-donar y envolver por la ternura delPadre Dios.

Detrás de su apacible sonrisa, elpapa dice mucho en pocas pala-bras. Y lomás importante: las vivecon coherencia. π

10| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

Su familia en Italia

Dicen que se agachóy agarró un puñadode esta tierra. Quepidió permiso parallevársela y que son-

rió cuandoGiuseppeQuattrocchioRaviola, el dueño de casa, le dijoque sí, que claro, que si quería sela podía llevar. Sobre la puerta demadera del establo que los Quat-trocchio conservan tal como fueconstruido en el 1800 una cerámi-ca con la leyenda “Signore, benedicichi entra in questa casa” (“Señor,bendice a quien entra en esta ca-sa”) ya presagiaba el futuro.El hombre -nuestro hombre- que

hoy es Papa estuvo por aquí. Pero,excepto el matrimonio Quattroc-chio Raviola, nadie lo vio. Sin em-bargo, no hay vecino de este pueblopiemontés de dos mil habitantesque no recite la visita del Bergoglioobispo comoun salmo bíblico. Quesubió hasta la última casa de la coli-na de BriccoMarmolato, en Porta-comaro -a 48 kilómetros de Turín-,que tocó timbre y que pidió que lodejaran pasar a conocer la casa quesu abuelo, Giovanni Angelo Bergo-glio, compró con sus tres herma-

nos en 1854 a unmercader hebreocuando sólo abundaba la tierra sinlabrar y el viento. Fue la primeraconstrucción del pueblito de Ber-goglios que fue germinando allí.El papa Francisco llevaba treinta

y seis años de sacerdocio -fue or-denado en 1969- cuando conocióestas colinas fértiles para el grig-nolino -el vino típico de esta zonaque ya se cultivaba en el Medioevobajo la denominación de barbesi-no-. Fue en 2005, cuando vino aItalia para participar del cónclaveque terminó designando papa aJoseph Ratzinger –ya entonces elarzobispo de Buenos Aires sonabacomo posible candidato- y luegopara asistir a la XI Asamblea Ge-neral Ordinaria del Sínodo de losObispos en el Vaticano. Ese mis-mo año, Bergoglio fue electo presi-dente de la Conferencia EpiscopalArgentina, cargo que ocupó entre2005 y 2008.Los Quattrocchio Raviola, ter-

ceros dueños del terreno orginal,refaccionaron la vivienda de di-seño “contandino” (campesino)pero dejaron tal cual usaban losabuelos de Jorge Bergoglio el pisodel living -de baldosas terracota ybeige como todavía hoy se ven enalgunas iglesias del siglo XIX-, laescalera de piedra que conduce alas habitaciones superiores, un

balcón que da a las colinas delMonferrato, el establo de ladrillo ala vista, la prensa para pisar uva ytres barricas demadera que juntanpolvo en la bodega de la casa, en-tre una aspiradora en desuso, unaescalera de aluminio y otros cachi-vaches. De “mattoni” (ladrillos), lacasa de losQuattrocchio preserva laarquitectura típica de las viviendasque se construían en las colinas yen los pre Alpes durante los siglospasados: en la planta baja la “stalla”(establo) donde se alimentaban yordeñaban las vacas y,más enterra-da, la “cantina” (bodega), pensadapara conservar frescos los produc-tos campesinos. Allí compartíanla oscuridad el vino prensado yalmacenado en damajuanas, losquesos hervidos en ollas de cobrey la “salumería” (fiambres y embu-tidos) que se faenaba cada inviernopara hacer patas de jamón crudo ypancetas y salames con el resto dela carne picada.Aquí vivieron los abuelos del Pa-

pa que se autobautizó Francisco yaquí creció su padre, Mario, hastaque en 1929, cuando Mario teníaveintipico, se tomaron el buque.Literalmente. Partieron de Génovael 11 de septiembre de 1929 a bordodel vapor Giulio Cesare y tardaroncinco meses en desembarcar enBuenos Aires. Así figura en los

Portacomaro,elpueblodesusabuelositalianosEmocionado, Bergoglio fue aconocerlo en 2005. Pidió permisopara recoger un puñado de tierra yllevárselo consigo.

TURIN. ENVIADA ESPECIAL

Marina [email protected]

1

|11DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

registros del Centro Internacionalde Estudios sobre la EmigraciónItaliana y fue confirmado por elCentro de Estudios Latinoameri-canos de Buenos Aires. Ese año,174.802 italianos supieron lo queera dejar la propia tierra para emi-grar. Según el Istat, el Instituto Na-cional de Estadísticas italiano, losBergoglio estaban entre los 24.521que enfilaron para Argentina comonuevo hogar.En ese tiempo todo aquel que ha-

bitaba los once kilómetros cuadra-dos de Portacomaro, provincia deAsti, se apellidaba Bergoglio. “Hoyya no es así”, dice Anna Bergoglio,viuda de un primo del Papa. En elpueblo quedan sólo tres: ella, Del-mo y Armando Bergoglio, primoslejanos entre sí y primos en tercergrado de Su Santidad. Ninguno delos tres supo de la visita al pueblode 2005 y nunca tuvieron contactocon él. “Desde que sus abuelos y supadre emigraron, no volvimos a sa-ber de ellos. Ni siquiera nos escri-bíamos”, dice Anna, una empleadamunicipal jubilada que vive con suhija, Roberta, y su nieta en el 167de la única calle que sube hasta lacolina de Bricco Marmorito. “Nopuedo decir que esperábamos sunombramiento como Papa perosí que estamos muy felices. Nosgustaría mucho visitarlo en Roma

voz entrecortada de emoción, el pá-rroco de San Bartolomeo, AndreaFerrero, al alcalde del pueblo, Wal-ter Pierini, cuando en el Vaticanola fumata blanca ya tenía nombrey apellido. “Soy párroco aquí des-de hace tres años y medio. Nun-ca tuve contacto con Su Santidadpero ojalá podamos conocernos.Vamos a darle una señal este do-mingo (hoy) y presenciaremos elAngelus en la Piazza San Pedro delVaticano”, dice el cura, de 39 años,mientras los músicos de la bandamunicipal se acomodan en la plazaprincipal, con el sol de frente y laiglesia detrás. El párroco improvi-só esta tarde una reunión con loschicos del pueblo para contarles labuena nueva y que ellos pudieranhacer preguntas. “¿Para qué sirveun Papa?” “Si es de acá, ¿por quéno lo conocemos?”, fueron algunasde las cuestiones que don Ferreroafrontó frente a la platea infantil.“Algo vamos a organizar para

celebrar este momento”, había di-cho el intendente Pierini cuando elnombre de Portacomaro como cu-na de los ancestros del nuevo Papase convertía en trending topic. Nose lo dijo a nadie, pero lo primeroque ordenó fue que dos empleadosde la comuna le den una lavada decara a la calle que conduce a la casa

y conocerlo”, dice Anna, en la puer-ta de la iglesia de San Bartolomeo,patrono del pueblo, donde en unrato todos rezarán por el hijo dePortacomaro que hoy es noticia enel mundo entero.“Será un buen Papa. Nosotros,

los Bergoglio, siempre hemos sidogente de trabajo, gente seria y ho-nesta”, dijo Delmo Bergoglio, otrode los primos del Papa, cuando seenteró de la noticia. “Estaba en micasa mirando el televisor y cuandoescuché pronunciar mi apellidome emocioné. Estuve toda la no-che desvelado”, aseguró. Tal vezpor eso no abre la puerta de su ca-sa, no responde el teléfono ni estáentre los presentes que honran alnuevo Papa en la plaza del pueblo.Armando Bergoglio, de 70 años,

también faltó a la cita. Pero el díaanterior, conmocionado, recor-dó frente a los micrófonos que loacosaban: “Mi padre era primo ensegundo grado del padre del Papa.Habían hecho el servicio militarjuntos y eran vecinos aquí en elpueblo”.Todo Portacomaro revuelve en

su árbol genealógico buscando unaposible conexión con el Bergoglioque les pudiera allanar el caminoal cielo.“Tenemos un Papa en nuestra

iglesia”, le dijo por teléfono, con la CONTINUA EN PAGINA 12

1. Anna Bergoglio, viuda de un primo del Papa, y el cartel que saluda su elección. 2. El frente de la casa de los abuelos de Bergoglio, hoy propiedad de Giuseppe Quattrocchio Raviola.3. Atardecer en Portacomaro, sobre una colina que caminó el argentino. 4. El pueblo, movilizado por la designación de uno de sus descendientes. 5. La banda municipal de Portacomaro,en el festejo por la designación del Papa. FOTOS DE CEZARO DE LUCA/ENVIADO ESPECIAL.

2 3

4

Entodosladoshayunargentino

En todos lados hay un argentino“Desdemi ventana veo la casaque fue de los Bergoglio. Vivoen la colina de enfrente”, diceDaniel Ormegno, un argentinode 50 años que emigró a Italiaen los años 90 y es vecino dePortacomaro desde 2006.Ormegno nació en RamosMe-jía y antes demudarse a Italiavivió en Primera Junta, CapitalFederal, donde trabajaba en elBanco Nación.“Me vine detrás de las historiasque escuchaba desde chico deboca demi abuelo. Mi familiaes de Alessandria, a pocos ki-lómetros de aquí, y mi historiaestá vinculada a la de los papas,aunque con Bergoglio no somosparientes.”En 2004, Daniel se ocupaba delmarketing y la comunicaciónde un diario religioso de Asti ytuvo la posibilidad de conocera KarolWojtyla, quien fue JuanPablo II. “Vino de visita a Asti yantes de despedirse para volveral Vaticano quiso saludarnos a

todos. Cuando estuvo enfrentemíome preguntó de dónde erale dije que era argentino”, diceOrmegno, quien no conoce aBergoglio pero sabía que susorígenes eran de este pueblo.“Me lo comentómimamá, quevive en Argentina y sí tuvo lasuerte de conocerlo en BuenosAires. Cuando se presentanen el cónclave, los cardenalesdicen de dónde vienen y pareceque él comentó que sus an-cestros eran de Portacomaro”,cuenta Ormegno que armó sumundo de este lado del mapa:se casó con una italiana, tieneuna hija y se ocupa del comer-cio exterior de una empresafamiliar que se dedica a la fabri-cación de chocolates y huevosde pascua. “La vida aquí no escomo en Buenos Aires –dice-. Elpueblo son cuatrocientos me-tros de calle, todo el mundo seconoce y en esta época del año,que todavía hace frío, a las seisde la tarde no hay ni un alma porla calle.” Parece que el juevesfue la excepción: los vecinos dePortacomaro no se guardarontempranito en sus casas. Notodos los días un pueblo celebratener un Papa entre los suyos.

12| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

que habitaron los Bergoglio. “Esla primera vez que nos mandanacá”, dice Maurizio Pontogriello,el ordenanza de maestranza queestá limpiando el cartel azul conel nombre del pueblo mientras sucompañero, Oscar Berta, barre elripio del sendero. “Esperemos queesta buena noticia nos ayude ame-jorar el bacheo de las calles que síestán asfaltadas”, bromea RobertaBergoglio, la hija de Anna.En la plaza, ombligo de la vida

social de Portacomaro donde sóloentran la iglesia, el Municipio, labiblioteca cívica y el centro culturalCasa del Artista, un cartel en cas-tellano flamea desde un balcón:“Francisco querido, Portacomaroestá contigo”, dice. “Es una ins-cripción que vimos por televisiónentre los fieles de Argentina quecelebraban el nombramiento deJorge Bergoglio como Papa y quisi-mos copiar el gesto para honrarlo”,confiesa el intendente que, durantetoda la jornada, lucirá entre el pu-lóver y la campera la banda muni-cipal con los colores de la banderaitaliana que lo coronó “sindaco” (al-calde) de Portacomaro en 2009.A las cinco de la tarde, la gente

del pueblo se va arrimando. Alre-dedor de la fuente sin agua de laplaza los chicos juegan y los gran-

aferrada al protagonismo inusualque hoy le concedió el festejo, serehúsa a abandonar la plaza y siguetocando para el movilero de la RaiDue que sale en directo.El intendente, que también pre-

tende estirar su segundo de gloria,vierte sus últimas declaraciones avecinos y desconocidos mientrassu esposa, complaciente con la ver-borragia de su marido, se refugiadel frío en la biblioteca cívica queestá pegadita a la Municipalidad.Desandando la pendiente, dos pa-rroquianos de la edadmedia de loshabitantes del pueblo -casi todosover 50- enfilan para el Bar Gelate-ria Marconi, donde la pantalla pla-na, las máquinas tragamonedas ylas dos “brunettas” (morochas) queatienden dan testimonio de que elparaíso existe.Pero los dos grados de térmica

los desvían hacia el café más cer-cano, el del Club Social, donde elcartel de la entrada alerta que sóloson bienvenidos los socios. Pe-ro parece que hoy la emoción desentir al Papa uno de ellos abre lapuerta a locales y visitantes. “Deaquí en adelante, este pueblo ya nose llamará más Portacomaro -diceuno-, ahora esPapacomaro.” Comosi sus oídos hubieran escuchado lapalabra revelada, el otro dice que sícon la cabeza. w

des se maravillan con la cantidadde periodistas de toda Italia que sedieron cita aquí. “Portacomaro setransforma en un set y sus habi-tantes se sienten como Jim Carreyen The Truman Show”, exagera elportal de noticias Libero 24 x 7.Los instrumentos de viento y de

percusión de losmúsicos de Porta-

comaro le van poniendo banda desonido a la pequeña ceremonia. To-can y luego marchan alrededor dela fuente de la plaza. El intendenteabre el micrófono con palabras dealegría, emoción y promesas quellegan hasta asegurar que una comi-sión de Portacomaro aterrizará enel Vaticano con abundantes dosis

de grignolino para que el Papa ben-diga y deguste. Tímido, el párrocoinvita a rezar un Padrenuestro quelos fieles recitan en voz alta.Anochece en Portacomaro y el

viento frío que embrolla las colinasconfirma que la primavera euro-pea, perezosa esta temporada, tar-dará en llegar. La bandamunicipal,

VIENE DE PAGINA 11

5

Su familia en Italia1

Elpecadovenialdemejorar lasanécdotas

Desde que Jorge Bergoglio fuedesignado sucesor de San Pe-dro, las historias que lo tienencomoprotagonista semultipli-can.Todo elmundo quiere tener suanécdota papal aun cometiendoel pecado venial de forzar unpoco la realidad.En Portacomaro, nadie lo co-menta peroGiorgio Valpirola, eldueño de la casa de al lado de laque supo ser de los Bergoglio, eljueves recibió a la prensa italia-na en su jardín y aseguró que seescribe con el Papa desde quevisitó el pueblo, en 2005.

“La última carta del Pontíficela recibí el 19 de enero. Allí medecía que rezara por él.Tal vez lo hice con tanta devo-ción que lo eligieron Papa”, dijofrente a las cámaras.Otras versiones aseguran queBergoglio habla el dialecto pia-montés y que, desde que estuvoaquí, se hace enviar el grignolino-típico vino de la región deAsti-a casa.Giuseppina Ravedone, otra pri-ma lejana del Papa que vive enTurín, aseguró a los noticierosque hasta elmismoBergoglio se sorprendió de serelegido: “Ya tenía el pasaje deavión de regreso a BuenosAires.Ni él se lo esperaba”.Lo cierto es que todoslo consideran un buenhijo del lugar.

Próximaestación:Roma

La cartelera de la iglesia de SanBartolomeo de Portacomarosumó a sus anuncios demisas,peregrinaciones y tareas pasto-rales un cartelito improvisado amano sobre una hoja rayada deblock: “Estamos organizandoviajar a Roma para acompa-ñar al Santo Padre en el rezodel Angelus. Los interesados,contactarse con EmanuelleCotti o llamar a la parroquia”.“Será una visita anónima. Yatendremos tiempo de pedir unaaudiencia con Su Santidad y deinvitarlo a que nos visite”, seconsuela el párroco del pueblo,Andrea Ferrero.

|13DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

ParientesorgullososdeunhombrecampechanoDesde las colinas italianas, la familia del Papaextendió sus lazos hasta la Argentina, comohicieronmiles de inmigrantes el siglo pasado,en busca de un futuro.

L os vientos italianos lle-garon hasta la Argen-tina y, desde 1922, losBergoglio comenzarona echar raíces en Bue-

nos Aires, Córdoba y Entre Ríos.En 1929, el padre de Jorge desem-barcó en Buenos Aires, sin siquie-ra imaginar lo que vendría.Empezaron a trabajar en una

empresa de pavimentos en Para-ná. Crecieron hasta tener la pri-mera casona con ascensor de lacapital entrerriana, pero durante lacrisis económica mundial lo per-dieron todo. Tuvieron que venderla bóveda familiar del cementerio yarrancar otra vez. “Mirá, convieneque empieces a trabajar”, le dijo supapá al joven Bergoglio, que tenía13 años y voluntad de sobra.Y así retomaron el camino del

esfuerzo, siempre en un climade unión familar, la misma quese reflejó estos días con las expre-siones de alegría y orgullo por laconsagración de Jorge como elprincipal representante de Diosen la Tierra.En Ituzaingó, en el oeste del Co-

nurbano bonaerense, vive su her-manaMaría Elena, 12 añosmenor,que salió a la vereda a festejar laelección papal con sus vecinos:“Estaba convencida de que no ibaa ser Jorge, pero sucedió el mila-

1. El médico Hugo Bergoglio, primo del Papa, su esposa LauraMartinucci y su hija, en Azul/Foto: Leandro Monachesi. Al lado,una carta de puño y letra del pastor.2.María Elena Bergoglio, la hermana de Jorge, en Ituzaingó/AP.3. Amalia Damonte, la noviecita de la infancia del Pontífice/AP.

gro y me invadió la emoción”.Desde Azul, Hugo, el primomás

cercano a Jorge, también evoca elinstante increíble del anuncio va-ticano: “El miércoles, la gente quemiraba la televisión en la sala deespera de mi Instituto de Cardio-logía empezó a besarse, a saltar ya decir: ‘¡tenemos Papa argentino!’

Entonces, entrómi secretaria ymedijo: ‘Bueno... su primo es Papa’.Cardiólogo reconocido de la ciu-

dad, Hugo sintió esta vez que sucorazón latía como nunca antes.Unos 34 años atrás, el joven cu-

ra Jorge lo había casado con su pri-mera mujer. Al tiempo, el médicose separó y “Jorge me escuchó y

fue comprensivo. No tuvo unacharla aleccionadora conmigo”.Cuando se casó por segunda vez,

pudo pedir autorización a Roma yun sacerdote de Azul le pudo darla bendición.“Una noticia así se metaboli-

za de a poco, pero las primeraslágrimas se me cayeron apenaslo vi salir por el balcón. Jorge esun hombre por el cual siento unprofundo respeto, porque es untipo fantástico desde lo intelectualy brillante desde lo espiritual”, seemociona, en diálogo con Clarín.Sus recuerdos viajan hasta el díaen que Bergoglio se ordenó sacer-dote: “Fuimos todos a festejar aFlores. Mi abuela llamó ami casa,mamá atendió, cortó y dijo: ‘Jorgi-to ya es cura’, y fue una alegría”.“Jorge nació en Buenos Aires,

pero nuestra familia se desparra-mó por Córdoba y Entre Ríos. Miabuelo Lorenzo fue el primero quevino. Después lo siguió mi tío Ma-rio, el papá de Jorge”, precisó.Hugo destaca el carácter erudi-

to del nuevo Papa: “Además de serdoctor en Filosofía y Teología, ha-bla cinco idiomas. Es un hombretrascendente. Nada en su vida essuperfluo y no hay lugar por el quehaya pasado y no haya dejado unahuella. Es un hombre que, dondeestuvo, hizo el bien”.

Laura Martinucci, mujer deHugo, suele intercambiar cartascon su pariente más ilustre, unacostumbre que llega hasta la actua-lidad. “Que Jesús los bendiga y laVirgen los cuide […] No se olvidende rezar por mí”, les escribió Ber-goglio de puño y letra.Cuentan los parientes que Ber-

goglio ordenó hace unos años alobispo Hugo Salaverri y le dioun consejo fundamental: “No tela creas, no te agrandes, y nuncapierdas tu capacidad de asombro.Si dejás de sorprenderte, se te vaesclerosar el alma”.Recuerda Laura que “la última

vez que lo llamé fue para el 17 dediciembre, el día de su cumplea-ños, pero no pude comunicarmeporque él estaba en Roma. Pero esuna persona muy accesible, te po-dés comunicar enseguida con él”.Otra persona que lo recordó con

emoción fue su novia de la infan-cia, Amalia, que también recibiólas cartas de “Jorgito”, pero deamor. “Me puse de pie cuando loeligieron Sumo Pontífice. Le dije ala distancia: ‘Te abrazo con el cari-ño de toda una vida’”.Jorge tuvo cuatro hermanos, que

agrandaron la familia. Sonmás de100 los parientes del Papa en elpaís, una procesión. w

Informe: EmiliaVexler.

Su familia enArgentina

3 4

2

14| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

La orden de Bergoglio

Los primeros jesuitasllegaron a la Argentinaen 1585, desde Perú.Veinte años después seconstituyó la “Provincia

del Paraguay”, que comprendía avarios países, incluido el nuestro.Aquellosmisioneros trabajaron endos áreas, buscando integrarlas, lade españoles y la de aborígenes.Para la primera, crearon colegiosen varias ciudades, así como laúnica universidad que tuvimos enla época colonial, la de Córdoba.Estas instituciones educativas semantenían con el producto de lasestancias jesuíticas, hoy Patrimo-nio de la Humanidad.Con los pobladores originarios

crearon “Reducciones”. El nom-bre proviene del paso de una vidasemi nómade a una vida sedenta-ria. Eran reducidos o agrupadospara poder sembrar y trabajar enbeneficio de ellos. En esta áreaencontramos dos secciones, unala de las 30 Reducciones de losguaraníes, organizadas como unasociedad, otra la de Reduccionesdispersas por todo el territorio,lo que impedía una organización

Ignacio Pérez del Viso, SJPresbítero jesuita

similar. Estaban en Santiago delEstero, en el Sur con el jesuitaMascardi que dio nombre al lago,en Sierra de los Padres cerca deMar del Plata, etc.Durante el siglo y medio que

duraron las Reducciones, observa-mos un desarrollo notable. No sóloaprendieron a trabajar, sobre todoen carpintería, sino que llegaron aser artistas destacados, como pin-tores, escultores y músicos. Conotro siglo más, la integración en-tre los guaraníes y los criollos, sehubiera producido naturalmente.Ya existían vínculos notables. Laúnica imprenta del Río de la Pla-ta no estaba en la universidad deCórdoba sino en una Reducción,manejada por los guaraníes. PeroCarlos III, rey de España, expulsóa todos los jesuitas, en 1767. Elpapa Clemente XIV remachó elgolpe, en 1773, suprimiendo a laCompañía de Jesús.Al caer Napoleón, Pío VII resta-

bleció la Compañía en 1814. Vol-vieron los jesuitas en la época deRosas, pero por desencuentros conéste debieron irse nuevamente.Después de la batalla de Caseros yla caída de Rosas, regresaron paracontinuar hasta el presente. Huboconflictos puntuales, como el in-

cendio del colegio del Salvador, deBuenos Aires, en 1875, fruto de losenfrentamientos, hoy superados,entre las tradiciones católicas y lasnovedades liberales.En el siglo XX desarrollaron

“misiones populares”, para edu-car y catequizar a gente que vivíaen zonas algo apartadas de lasciudades. Eran como un eco delas Reducciones de la época co-lonial. Y crearon el Observatorioastronómico de San Miguel, otroeco del diálogo entre la ciencia y lafe. Pero cuando surgieron las uni-versidades católicas, en la segundamitad del siglo, este Observatorioperdió relevancia y fue dejado porla Compañía de Jesús. Ahora bien,la creación de las universidadescatólicas se inició con mucho en-tusiasmo, pero no siempre con eldebido discernimiento.Muchas deellas parecían institutos terciarios,con buenos profesores pero sinespacios de investigación.Pronto se vio que los jesuitas

carecíamos de recursos humanospara atender tres universidadesen el país. Yo trabajé ocho años enla Universidad del Salvador, ocu-pando diversos cargos, y lleguéa la conclusión de que debíamosentregarla a una asociación de lai-

Jesuitas,másde400añosenArgentinaLlegaron desde Perú en 1585. Fundaronlas 30 reducciones de los guaraníes ymuchas otras a través de todo elterritorio. Los expulsó el rey de Españaen 1767. Regresaron definitivamentetras la caída de Rosas.

1

|15DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

cos, para concentrarnos, más bien,en la Católica de Córdoba. Así lopuse por escrito en mayo de 1973.En julio de ese año asumió comoProvincial el P. Jorge Bergoglio.Ignoro si leyó mi escrito, perollegó a la misma conclusión. Enmarzo de 1975 se hizo la entrega alos laicos, motivo por el cual variosjesuitas criticaron a Bergoglio. Yocreo que hizo lomás razonable, enese momento.Bergoglio dirigió la Provincia

durante seis años y continuó in-fluyendo otros seis como Rectordel Colegio Máximo, donde seformaban nuestros estudiantes.Fue una época en que colgabanlos hábitos cantidad de sacerdotes.Cada uno hacía lo que le inspirabael Espíritu Santo, en la línea delConcilio Vaticano II. Había mu-cha buena voluntad, pero algo decaos. Bergoglio, entonces, introdu-jo un cierto orden, primero comoProvincial y después como Rector.Por ese motivo recibió críticas.Más de una vez me pregunté: siyo fuera el Provincial, qué podríahacer ante esa situación. Y confie-so queme sentía como turco en laneblina. Habría renunciado a las24 horas. Por eso creo que algu-nas críticas que se formulan a los

que actuaron en situaciones muydifíciles, son anacrónicas y descon-sideradas.Bergoglio es un pecador, como

lo somos todos, salvo la VirgenMaría. Lo confesamos en el PadreNuestro y en el Ave María: “ruegapor nosotros pecadores”. Pero meimpresionó que el papa Franciscodijera: “Soy un pecador”. Borrenesa frase. Es el “Santo Padre”. Noscuesta perdonar, tanto los pecadoscon culpa, como los errores sinculpa. Se han renovado las acusa-ciones contra Bergoglio por el se-cuestro de dos sacerdotes, cuandoél era Provincial. Sobre este temame remito a la declaración del P.

Lombardi, vocero del Vaticano.Ahora bien, antes de bendecir a losfieles en la plaza, el papa Franciscopidió que ellos lo bendijeran a él.¿Habrán sido muchos los que lobendijeron? Yo no, porque me to-mó de sorpresa y estaba choquea-do. Espero que me dé otra opor-tunidad, quizás cuando venga a laArgentina.Hace unos años, Bergoglio rea-

lizó la ordenación de un obispoauxiliar en San Benito. Despuéshubo una picada en las Esclavas,cruzando la calle. En un momen-to en que yo estaba con el nuncioCalabresi, se acercó Jorge. Le dijeal nuncio: “Al Padre Bergoglio lotuve de alumno en Teología”. Elantiguo alumno retrucó: “De allívienen mis herejías, Monseñor”.El nuncio miraba desconcertado.Como todo el mundo, Bergoglioes hijo de su tierra, hincha de SanLorenzo. Una señorame contó quesiendo chica, bailó una vez con elmuchacho Bergoglio. “¿Y qué talbailó?” le pregunté. “En esa época,todos bailaban bien”, me respon-dió. Bergoglio es un ser humano.Cuando los japoneses construyanun robot que pueda ser papa, todosaldrá perfecto. Pero prefiero un pa-pa humano, que cometa errores. w

2

La opción por los pobres 1. Los jesuitas, en su último cónclave mundial en Roma.2. .Bergoglio fue nombrado líder de los jesuitas argentinos a los 37 años.

DespuésdelabatalladeCaserosylacaídadeRosas,regresaronlosjesuitasalpaísparacontinuarhastaelpresente.

ConlamisióndeconstruirpuentesIgnacio Pérez del VisoPresbítero jesuita

¿QUE ES SER JESUITA?

Los jesuitas nos sentimosatraídos por el ideal de sanIgnacio de Loyola, un hombreque vivió entre la EdadMediay laModerna. Eso lo ayudóa no quedar atrapado en lamentalidad de un tiempomuyestructurado. Nuestro librito

de cabecera es el de los Ejercicios Espirituales,que nos ayuda a encontrar el camino a seguir. Locomenzó a escribir san Ignacio, recién convertido,en la cueva deManresa. Y Bergoglio lo tendrá bajola almohada, para echarle un vistazo cuando algúnproblema lomantenga desvelado.Los primeros jesuitas se sintieronmisioneros.

San Francisco Javier, partió hacia la India y Japón.Murió en una islita, cuando intentaba ingresar enChina.Marcó el camino a seguir. El jesuita italianoMatteo Ricci se convirtió en un sabio chino. Graciasa él y a otros jesuitas sumergidos en esa cultura, elemperador estuvo al borde de hacerse cristiano,gesto que hubiera sido imitado por su pueblo. EnRoma no vieron con buenos ojos algunas adapta-ciones, como la veneración de Confucio, y el puen-te entre Europa y China se derrumbó. Actualmente,recordando aMatteo Ricci, se va reconstruyendo elpuente entre Roma y el gobierno de Beijing.En Europa, los jesuitas iniciaron una revolución

cultural, creando colegios y universidades para laformación de líderes, a fin de conformar una socie-dad donde también los pobres fueran atendidos yeducados. Cuando un papa suprimió a los jesuitas,en 1773, el rey de Prusia, luterano, se opuso a esedecreto. Los jesuitas entonces, sin DNI religioso, seasociaron para continuar con los colegios a los queasistían alumnos no católicos.Dentro de las universidades, los jesuitas propi-

ciaron el diálogo entre la ciencia y la fe. Teilhardde Chardin, antropólogo, tendió un puente entreambas, que no se derrumbó. Somos 16.000 en elmundo y sentimos que nuestramisión no consisteen levantar murallas sino en construir puentes. Elpapa Francisco emerge como un puente entre elviejo y el nuevo continente. π

Vestigios con cara lavada. Esta iglesia de Córdoba es uno de lospuntos más visitados por viajeros católicos y turistas.

16| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

La orden de Bergoglio

RastrosyhuellasdelahistoriajesuíticaLamisión evangelizadora de la Compañíade Jesús dejó vestigios desdeMisioneshasta la Patagonia. Sus imprentas dieronlos primeros libros al país.

Cristian [email protected]

A unque los más no-torios vestigios dela misión evangeli-zadora desarrolladapor la Compañía de

Jesús en el Virreinato del Río dela Plata se conservan en la provin-cia de Misiones, su labor se exten-dió desde el norte del país hastala Patagonia, pasando por Córdo-ba, Cuyo y Buenos Aires. Es más:los primeros misioneros llegadosdesde Perú en 1585 se establecie-ron en Tucumán. Recién en 1609fueron fundadas las Reduccionesen el territorio poblado por losguaraníes, que abarca parte de lasactuales provincias de Misiones yCorrientes y se extiende a Brasil,Paraguay y Uruguay.Un tentativo mapa de las hue-

llas jesuíticas posibles de recorreren el Noreste de la Argentina vin-cula las misiones de San IgnacioMiní, Santa Ana, Nuestra Señorade Loreto y Santa María La Mayorcon las localidades correntinas deYapeyú, La Cruz, Santo Tomé ySan Carlos. Los restos de la mi-sión de San Ignacio son los me-jor conservados en la región. Unavisita al Centro de Interpretación

permite conocer cómo era la vidasocial, religiosa y cultural de lossacerdotes y los nativos, ademásde observar réplicas de sus herra-mientas y canoas. El recorrido porlo que queda de la Reducción serealiza a pie. Durante alrededorde una hora, los visitantes puedenapreciar la plaza central, parte dela Casa de los Padres, el cemente-rio, las viviendas y el cabildo. EnLoreto, los jesuitas introdujeronla primera imprenta tipográfica,con la cual fueron publicados almenos 22 libros –considerados“incunables guaraníticos”– entre1695 y 1727. Esa imprenta se ex-hibe desde 1942 en el Museo delCabildo porteño.Precisamente en Buenos Aires

los jesuitas establecieron su resi-dencia, iglesia y colegio a partirde 1608, mientras la incipientealdea era amenazada por corsa-rios y piratas ingleses, franceses,portugueses y holandeses. Buenaparte de ese hito fundacional esrecreado hoy a través de las visitasguiadas que se realizan en laMan-zana de las Luces –limitada porlas calles Bolívar, Moreno, Perú yAlsina–. Se aprecian la iglesia y elcolegio de San Ignacio, la Procura-duría de las Misiones y túneles.En la provincia de Córdoba, el le-

gado de la orden reluce en la Man-zana Jesuítica de la capital. Allí, eldiseño del techo de la iglesia dela Compañía de Jesús remite a laquilla invertida de un barco, unaproeza arquitectónica de 1660. Asu vez, el Colegio de Monserratconserva partes de una imprentadel siglo XVIII, a pasos del Recto-rado de laUniversidad de Córdoba,que atesora libros “incunables” delos jesuitas.A 35 km hacia el sudeste de la

ciudad, se levanta el monumentalcasco de la Estancia de Alta Gracia,construido por los jesuitas en el si-glo XVII, En esta ciudad tambiéncrearon el Tajamar, un embalsesostenido por unmurallón de pie-dra para llevar agua a las chacras ydos molinos harineros. El circuitojesuítico cordobés se alarga en elCamino de las Estancias Jesuíticas,que incluye Santa Catalina (casi in-tacta desde 1622), Jesús María, LaCandelaria y Casa de Caroya.Retazos de esta invalorable he-

rencia de los tiempos de la Coloniapueden rastrearse incluso en Tu-cumán. La capilla y el convento deLules –donde se organizan visitasguiadas– acreditan cuatro siglosde historia. En esta zona, además,realizaron los primeros cultivos decaña de azúcar. w

� ����� �

� � � � � �

�������� ������� ���������� �� ����� ������������� ����� ��������� ��������� � �������� ����������

� �������� �� ��

��

�������

�� ����������

������� �����

���� ������

�� �������

���� ��������

������������������

����� ��������

����������

�����������

������������

�����

� ������� ���

� ��� ������

��� ������ ��� �������

������

����� ���

����������

�����������

�������

������� �� ����

����������

��� ������

������������ �� ������

��� ����

���������

����������

��� ����

� � � � � � � �

����������

��������

����� ������

� �����

�������������

�������

� ���������

������������ ������

����������� ���

��

��

��

��

��

�������� �� ���� ������� �� ����� �� ���������� �� ������� �� ���� � ������� ���� ������� �� ����� � �������� ��������� ���� �������� � �� ������������

������ �� ��� ��������� ������ �������� ������ ������ �� �� ���������� ���������� ����� ����������������������������

������� �� ��� �� ���������� �� �� ���������������� ��������������� ��� ����������

� �������� �� ��

��

���

��

����

JESUITAS ENLAARGENTINA

18| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

Bergoglio y los derechos humanos

En febrero de 1976, elgolpe de Estado estabapresente en los comen-tarios del ambiente po-lítico, gremial y de toda

la sociedad. Los militares ya ha-bían fijado su “Día D”. Para el res-to, no había una fecha. Había unacerteza. Jorge Mario Bergoglio, de37 años, Prepósito Provincial dela Compañía de Jesús, el máximorango de la Orden Jesuita, preveíaque venía algo “muy pesado”. Fueal juzgado penal de la doctora Ali-cia Oliveira. Consideraba que ellaestaba en riesgo. Tenía pésimasrelaciones con la Policía Federal,institución a la que investigabapor el encarcelamiento de meno-res y su relación con el tráfico.Bergoglio y Oliveira se conocían

desde hacía cinco años. Eran ami-gos. “Nos reuníamos dos veces ala semana para conversar. Me pi-dió queme refugiara en el ColegioMáximo de San Miguel, donde élvivía. Le dije que no. ‘Prefiero queme lleven los militares antes quevivir con los curas´ me acuerdoque le dije”, indicó Oliveira a Cla-rín. Poco tiempo después, cuandoOliveira fue madre soltera, Bergo-glio bautizaría a su hijoPara el asalto al poder, las Fuer-

zas Armadas habían planificado elplan de acción contra sus “enemi-gos”, los activos y los potenciales:partidos políticos, gremios, religio-sos. Sector por sector, la represiónya estaba organizada. Faltaba eje-cutarla de manera orgánica.Bergoglio previó que podría al-

canzarlos a ellos también. Ordenólevantar la casa jesuita de la calleBogotá, en el barrio de Caballito.Estaba “marcada”. Desde hacía untiempo, allí se alojaba gente que,escapando de la dictadura urugua-ya, había encontrado un refugio.Bergoglio cerró la casa y los llevóal ColegioMáximo de SanMiguel.El argumento para hospedarlos erala realización de “retiros espiritua-les”, que servían como protección.En la casa de altos estudios de laCompañía, Bergoglio suponía quela represión no intervendría.En el gobierno de Isabel Perón

ya había secuestros y desapari-ciones en los barrios humildes.Aún antes del golpe de Estado, enla Iglesia Santa María Madre delPueblo, el párroco Rodolfo Ricciar-delli, uno de las figuras más caris-máticas del Movimiento de Sacer-dotes del TercerMundo junto a lossacerdotes Jorge Venazza y CarlosMugica, advertía sobre el peligrode continuar el trabajo militanteen los monoblocks del Barrio Ri-vadavia, en el bajo Flores, ubicadoal lado de la Villa 1.11.14.“Se tienen que ir”, les recomen-

daba Ricciardelli.El riesgo no era sólo para los

curas, sino para los pobres que serelacionaban con ellos. No basta-ba demasiado trabajo para que lasFuerzas Armadas interpretaranque “si hay rubios en las villas esporque hay subversivos”.En el barrio Rivadavia había mi-

litantes de distintos sectores. Entreellos estaban los sacerdotes de la

Marcelo [email protected]

Compañía de Jesús Orlando Yo-rio y Jorge Jalics. Bergoglio habíaconocido a Yorio a principios delos años ‘60, en el Colegio Máxi-mo. Fue profesor suyo durantedos años en Teología. A Jalics loconoció en el mismo lugar, en lamisma época.Bergoglio estaba distanciado con

ambos desde hacía un tiempo. ElSuperior provincial, designadoen 1973, no era proclive a que losjesuitas se comprometieran entareas políticas, y menos en aqueltiempo, por el potencial riesgo al

Rivadavia. Pero podían seguir ofi-ciando misa hasta que se “incar-dinaran”, es decir, se integraran aotra congregación o a otro obispolocal. Jalics y Yorio expresaron sudesacuerdo con la disolución. Fueun proceso de discusión internoque duró más de un año. Segúndeclararía Bergoglio como testigoa la justicia en el año 2010, amboscuras pidieron la salida de la Com-pañía. Y ese pedido de dimisiónfue remitido a Roma.Finalmente, la dimisión fue

otorgada a Yorio y Luis Dourrónel 19 de marzo de 1976. Jalics iríaal clero secular. A partir de enton-ces, debían buscarse un obispo.Dourrón lo encontró en el Obis-pado de Morón, con MonseñorMiguel Raspanti, que aceptó sóloa uno. Yorio, en cambio, quedó ala espera.“Les ofrecí vivir en la curia pro-

vincial, conmigo, a ellos y a Dou-rron también. Ya se hablabla de laposibilidad de un golpe, hasta queencontraran un obispo benévolo”,declararía Bergoglio a la Justiciaen 2010.Durante más de una semana,

desde el 11 hasta el 23 de mayode 1976, los grupos de tareas dela Armada allanaron, sin ordenjudicial, los domicilios de los mi-litantes y los habitantes del barrioRivadavia y la villa 1.11.14 del BajoFlores. Fueron muchos los quecayeron: Mónica Mignone fue se-cuestrada la semana previa de su

ElPapaenlosañosdeladictaduraEn ese período ocupó elmáximo rango de la Compañía deJesús. Su conducta ante el secuestro de dos curas jesuitasgeneró controversias. Sus reuniones conVidela yMassera.

Noeraproclivealcompromisopolíticodeloscuras,perorefugiabaenelColegioMáximoalosquecorríanriesgos.

que se exponían. Ambos curas,como tantos otros jesuitas, habíanorientado sus acciones pastoraleshacia los pobres. Vivían en el ba-rrio Rivadavia, y los fines de sema-na ayudaban en la villa 1.11.14. Losdos, Yorio y Jalics, estaban relacio-nados con militantes del Peronis-mo de Base (PB).Al momento del golpe de Esta-

do, ambos curas, además del pa-dre Luis Dourron, tenían las licen-cias ministeriales suspendidas. LaCompañía de Jesús había resueltodisolver la comunidad del Barrio

|19DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

de su provincial jesuita Jorge Ber-goglio, como una autorización pa-ra proceder contra él. Sin duda losmilitares habían advertido a am-bos acerca de su supuesta peligro-sidad”. En su libro interpreta quela Marina actuó con “luz verde” delos mismos obispos.“Mi primera sensación es que

los iban a liberar inmediatamen-te porque no tenían ninguna cosade que acusarlos. Además, estabaconvencido y aún hoy estoy bas-tante convencido de que no fue unoperativo para buscarlos a ellos so-los, sino que fue una redada dondeellos cayeron”, diría Bergoglio enel citado testimonio judicial, en elque declaró como testigo.Mignone había quedadomolesto

por la actuación de Bergoglio. Selo expresó en una misa de JuevesSanto en la sacristía de la Catedral,tiempomás tarde. Cuando el jesui-ta se acercaba a saludarlo, le hizoun gesto para desalentarlo. Añosdespués, a instancias de Alicia Oli-veira, cuando ésta ya era abogadadel Centro de Estudios Legales ySociales (CELS) que presidiríaMignone, logró un acercamientoentre ambos en Colegio del Salva-dor, en Buenos Aires, lugar al queMignone pasó a saludar a Bergo-glio.Por su parte, Horacio Verbits-

ky, en su “Historia política sobrela Iglesia”, Tomo III, publica untexto elaborado por un serviciode informaciones “especializado

en el seguimiento de los temas yactores eclesiásticos” en el que sedaba cuenta que Bergoglio evitabaque los jesuitas se comprometie-ran con “ideologías abstractas nocoincidentes con la realidad” y res-pondieran con “sana alergia cadavez que se pretende reconocer a laArgentina través de teorías que nohan surgido de nuestra realidadnacional y especialmente en elreconocimiento del sentido de re-serva religiosa que tiene el pueblofiel”. Está citado en su libro.Verbitsky se basa en este tex-

to de un servicio de informaciónpara interpretar que “Bergoglio seproponía limpiar la Compañía de‘jesuitas zurdos’.”“Yo lo recuerdomuy angustiado

a Jorge (Bergoglio) en losmeses dela desaparición de Yorio y Jalics.Estaba haciendo gestiones. Y Jor-ge no es un cínico. Tiene sensibili-dad. Se preocupa por la gente quesufre. Es una infamia pensar quelos pudo haber entregado. Al con-trario, les había advertido”, afirmóOliveira.-¿Por qué no lo denunció públi-

camente?-Tenía que contar con la autori-

zación del Superior General (de laCompañía de Jesús) Pedro Arrupe,que vivía en Roma. El lo tenía queautorizar”.En su declaración en la causa

ESMA, Bergoglio relató que pusoen conocimiento de los secuestrosa toda la jerarquía eclesiástica e in-

departamento de la avenida SantaFe; también desapareció una so-brina del ex capitán de la MarinaFrancisco Manrique; la cuñadadel marino Enrique Molina Pico,que era monja del Instituto Reli-gioso de Cultura Superior; MaríaMartha Vázquez, hija de un di-plomático de carrera, de 23 años,psicopedagoga, que realizaba apo-yo escolar y había participado enla construcción de una guarderíaen la villa. Desapareció junto a sumarido César Lugones. Su madreluego formaría parte deMadres dePlaza de Mayo. Los secuestradosno aparecerían nunca más.También se llevaron a los curas

jesuitas Yorio y Jalics, relacionadoscon el Peronismo de Base (PB). Elpadre Dourrón, que estaba en lasinmediaciones, logró escapar enuna bicicleta por la calle Varela.En su libro “Iglesia y Dictadura”,

Emilio Mignone, que inició unaactiva militancia por los derechoshumanos tras la desaparición desu hija Mónica, dedicó un párra-fo a la actuación de Bergoglio enrelación a los secuestros de Yorioy Jalics.“Una semana antes de la deten-

ción, el arzobispo Aramburu lehabía retirado las licencias minis-teriales, sin motivo ni explicación.Por distintas expresiones escu-chadas por Yorio en su cautividad,resulta claro que la Armada inter-pretó tal decisión y, posiblemente,algunas manifestaciones críticas

formó a los familiares de Yorio yJalics de las gestiones que estabarealizando.“Denuncia formal, como Com-

pañía de Jesús, no se hizo, sinoque se avisó al Arzobispado paraque fueran todas por el canal quela Iglesia tenía para las denunciasen ese momento”, dijo Bergoglio.Entonces, él no integraba el Cuer-po Episcopal ni la Asamblea Epis-copal de la Iglesia argentina.El padre Rodolfo Riciardelli,

en cambio, realizó una denunciapolicial y ante la justicia sobre lossecuestros.En 1976, la persecución de la

dictadura ya alcanzaba a aquellossacerdotes que denunciaban lasdesapariciones. Muchos de ellosno se sentían en paz confesandoy absolviendo en medio del terro-rismo estatal. Y mientras algunoscapellanes, en centros clandes-tinos, presenciaban torturas yofrecían palabras de consuelo alos torturadores o jugaban al teniscon la jerarquía militar, otros nolo hicieron. Se calcula que mediocentenar de religiosos desapareciódespués del golpe de Estado.La Iglesia no tuvo conductas

uniformes frente a la represión.Incluso quienes fueron parte delEpiscopado estuvieron en peligro.Uno de ellos era el arzobispo deLa Rioja, monseñor Enrique An-gelelli. En julio de 1976 le habíareclamado al general Jorge Videlala libertad del sacerdote Carlos de

Unaamigaenlos“vuelosdelamuerte”

En los años ‘50 Jorge Bergo-glio era técnico químico y ella,Esther Balestrino de Careaga,Licenciada en Química, era sujefa. Ambos trabajaban el labo-ratorio Hickethier-Bachmannde Arenales y Azcuénaga, Ca-pital Federal. Era un laboratoriode análisis de materias grasas,agua, productos alimenticios.Bergoglio se dedicaba a losalimentos, hacía análisis bro-matológicos que enviaban lasempresas para controlar susproductos. Por entonces, yatenía una fuerte vocación reli-giosa. Careaga, nacida en Para-guay, era militante comunista.Se había exiliado. La amistadse mantuvo a lo largo de losaños.En la dictadura, ella le pidió queviniera a su casa para darle laextremaución a un familiar, susuegra. Bergoglio se sorprendióporque la familia de Careagano era católica. Del pedido real,se enteraría al momento dellegar a su casa: le pidió que sellevara los libros marxista-leni-nistas de la biblioteca, que losescondiera. Su hija había sido

detenida y liberada y temía queen cualquier momento podíanallanar su casa.Bergoglio cumplió con el pedi-do y se llevó los libros deMarx,tal cual ella se lo había pedido.La presunción de Careaga secumplió. El 8 de diciembre de1977 Esther Ballestrino yMaríaPonce fueron secuestradas enla Iglesia de la Santa Cruz cuan-do trabajaba con otras madrespara publicar una lista de fami-liares desaparecidos. El agenteinteligencia que las delató fueel capitán Alfredo Astiz. Decíatener un hermano desapareci-do e iba a las reuniones del gru-po con una secuestrada de laEsma, que presentaba como suhermana. Astiz las señaló. Hu-bo once secuestros, entre ellaslas monjas francesas Alice Do-mon y Leonie Duquet. AzucenaVillaflor, fundadora deMadresde Plaza deMayo, también fuesecuetrada.Esther Careaga fue arrojadadesde los “vuelos de la muerte”y el mar la devolvió a la playade Santa Teresita. Fue ente-rrada como NN hasta que fueidentificada por el equipo deantopólogos forenses.Bergoglio, ya como Arzobispode Buenos Aires, autorizó quefuera sepultada en el jardín dela Iglesia Santa Cruz. Allí des-cansa su cuerpo.

Robodebebés

Otra de las causas en las que elentonces arzobispo de BuenosAires Bergoglio declaró comotestigo, por escrito, en 2011,fue por el secuestro de Elenade la Cuadra, embarazada decinco meses. Por pedido delsuperior general de la Compa-ñía de Jesús, el padre Arrupe,Bergoglio escuchó el relato delpadre de la víctima y derivó lainformación al obispo auxiliarde La Plata, Mario Picchi.En esa ciudad, donde “casi conseguridad”, se había producidoel secuestro. En su declaración,por escrito, Bergoglio dijo norecordar que le hubiesen infor-mado que Elena de la Cuadraestaba embarazada.Tiempo después, el obispo auxi-liar les comunicó a la familiaque, por información recibidapor la policía bonaerense, queel bebé había nacido y “estababien”.Se lo habían entregado a unafamilia que no podía tener hijos.La crítica que le hacen los fami-liares de la víctima a Bergoglioes que nunca pidió informaciónsobre el caso al Arzobispado deLa Plata. El bebé nació en cauti-verio en junio de 1977. Todavíase desconoce su identidad.

Antes y después. A la izquierda, la plana mayor de la Compañía de Jesús en 1976, conJorge Bergoglio (centro). Abajo, el jesuita Francisco Jalics, secuestrado por la dictadura.

20| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

Dios Murias y el párroco francésGabriel Longueville, secuestradosde la parroquia El Salvador, en ElChamical, La Rioja. El 18 de julio,los dos aparecerían con las manosatadas por la espalda, torturados yfusilados en un descampado. Fuedos semanas después de que ma-sacraran a los sacerdotes AlfredoLeaden, Alfredo Kelly y Pedro Du-ffau y los seminaristas SalvadorBarbeito y Emilio Barletti, de laorden de los palotinos, en la pa-rroquia de San Patricio.El 4 de agosto de 1976, le tocaría

a Angelelli. Cuando viajaba haciala ciudad de La Rioja, su camione-ta fue encerrada por un Peugeot404 y volcó. “Un accidente”, sedeterminó en ese momento. Lajusticia, años más tarde, probaríasu homicidio.Después de la muerte de An-

gelelli, Bergoglio protegió a tresseminaristas de su diócesis en LaRioja. Consta en el testimonio delsacerdote Miguel La Civita, quiendeclaró en la causa judicial por losasesinatos de Murias y Longuevi-lle. La Civita había conocido a Ber-goglio cuando fue a concluir susestudios al Colegio Máximo. Lefaltaba Teología.“En el Colegio se escondía gen-

te, se preparaba la documentacióny se hacía todo lo necesario parasacarla del país. Eso lo vi yo, nome lo contaron. Los jesuitas te-nían una organización para ayu-dar a gente a salir del país. En ese

momento en que la diócesis de LaRioja quedómuy golpeada, él asu-mió la paternidad sobre nosotros,cubrió ese espacio de soledad quehabía quedado con la muerte deAngelelli, nos llevó a vivir al Cole-gio Máximo”, relató La Civita a laradio LT3 de Rosario.Según indica el propio Bergoglio

en el libro “El Jesuita”, de SergioRubín y Francesca Ambrogetti, élentregó su cédula de identidad aun joven que se le parecía en sufisonomía y lo hizo salir por lafrontera de Puerto Iguazú. Le ha-bía prestado la camisa que utilizanlos sacerdotes.Luego de casi seis meses de cau-

tiverio, Yorio y Jalics aparecieronen octubre, en un campo de Ca-ñuelas. Estaban desnudos. Yoriollamó a Bergoglio y le informóque los habían liberado. Habían

estado en la Escuela Mecánica dela Armada junto a otros detenidosy luego los trasladaron a un lugarcercano que no podían especificar.Bergoglio hizo gestiones para queel secretario de la Nunciatura leayudara a Yorio a gestionar el pa-saporte en la Policía Federal, se in-tegró al Arzobispado de Quilmes,y luego fue enviado a Roma a es-tudiar derecho canónico. Jalics sefue a Estados Unidos, donde vivíasu madre.“Yo hablé con Yorio algunos

años después. Lo invité a que vi-niese a dar un retiro. Habíamossido compañeros en el ColegioMáximo. Quería que me aclarasequé había sucedido. El me dijoque fue secuestrado y torturadopero que no se debía involucrar aBergoglio. Incluso Jorge les habíadicho que se cuidaran”, indicó el

Alemania. Tiene más de ochentaaños. El día viernes 15 se conociósu declaración, a través de un vo-cero de la orden jesuita. “No fuesino años después que tuvimosla oportunidad de conversar conel padre Bergoglio sobre lo suce-dido. Después de eso celebramosunamisa juntos en público y nosdimos un abrazo solemne. Estoyreconciliado con los eventos yconsidero el asunto cerrado”.Una hipótesis que circuló acer-

ca de la liberación de Yorio y Ja-lics es que hubiese existido algúntipo de negociación con la Mari-na, dado que la Universidad delSalvador, el 25 de noviembre de1977, entregó de manos del rec-tor Francisco Piñón el doctoradode “honoris causa” al almiranteEmilio Massera, que todavía nole fue retirada.Para ello, Bergoglio dio una

respuesta en “El Jesuita”: “Reci-bí la invitación para el acto, perono fui. Además, la Universidadya no pertenecía a la Compañíade Jesús y yo no tenía ningunaautoridad más allá de ser un sa-cerdote”.Y en las fotos de aquella noche,

en la Facultad de Psicopedagogíade la avenida Corrientes 4471, en-tre las dos filas de sillas colocadasen el escenario para homenajearal dictador Emilio Eduardo Mas-sera, aplaudido por más de cua-trocientas personas, Jorge Bergo-glio no aparece. π

obispo jesuita Joaquín Piña, enentrevista con Clarín. En formainmediata después de su eleccióncomo Papa, el Premio Nobel de laPaz (1980) Adolfo Pérez Esquivel,señaló que “hubo obispos que fue-ron cómplices de la dictadura, peroBergoglio no”.Esta no es la impresión que tiene

la hermana del sacerdote, Gracie-la Yorio, que afirmó, en referenciaa los dos curas secuestrados, queBergoglio “los echó de la Compa-ñía y no protegió a mi hermanoal inicio de la dictadura”. OrlandoYorio falleció en el año 2000 cuan-do realizaba trabajos pastoralesen la parroquia Santa Bernardita,Uruguay.Bergoglio mantuvo relación

con Jalics a lo largo de los años.Desde 1978, vive en un monaste-rio en Wilhelmsthal, en el sur de

Los70segúnBergoglio

Enellibro“SobreelCieloylaTierra”enelquedialogaconelrabinoAbrahamSkorka,Bergogliodice:“LaIglesiaprivilegió,deentrada,realizargestionesantesquedeclaracionespúblicas.Huboobisposquesedieroncuentaenseguidadeloquepasaba,elcasomástípicofueeldemonseñorZazpe,quesupoquealintendentedeSantaFelotorturaronsalvajementeysemovióconrapidez.Otrosquetambiénsedieroncuentaenseguida,ylucharon,fueronhombresmuy

meritorioscomoHesayne,JorgeNovak,JaimedeNevares.Tambiénhubometodistas,comoAldoEtchegoyen.Hubogentequetrabajóentodoporlosderechoshumanos,quehablabanperoquetambiénhacían.Hubootrosquehicieronmucho,quenohablabantantoperosalvabanpersonas; ibanaloscuarteles,sepeleabanconloscomandantes.(...)¿QuéhizolaIglesiaenaquellosaños?Hizoloquehaceunorganismoquetienesantosypecadores.Tambiéntuvohombresquecombinaronlasdoscaracterísticas.Algunoscatólicosseequivocaron,otrosfueronadelantecontodo.

TRAMADERELACIONES

EmilioMignoneEx titular del CELS. Fue activo defensorde Derechos Humanos en la dictadura.Tuvo una hija, Mónica, que desapare-ció a los 24 años cuando militaba enel Bajo Flores, donde también fueronsecuestrados y luego liberados loscuras jesuitas Yorio y Jalics. En su libro“Iglesia y dictadura” indica que enalgunas ocasiones “la luz verde” parala represión fue dada por los mismosobispos. No mantuvo una buena rela-ción con Bergoglio. Murió en 1998.

RaúlZaffaroniMinistro de la Corte Suprema. Zaffa-roni fue designado Juez de Sentenciadurante la dictadura militar. Era do-cente de la Universidad del Salvador.Coordinó con Bergoglio la llegada deljurista Charles Moyer que promovía laadhesión de Argentina al Pacto de SanJosé de Costa Rica. Moyer expuso enla Universidad del Salvador. Cuandofue designado Papa, Zaffaroni destacóque tenía fe de que podía dar un “girosignificativo” a la Iglesia.

EmilioMasseraEx miembro de la Junta Militar. Loscuras jesuitas Yorio y Jalics fueronsecuestrados por grupos de tareas.Los mantuvieron cautivos en la ESMAy otra dependencia de la Armada, dela cual Massera era jefe. Bergoglio, enuna reunión privada, le reclamó porsu libertad. Tras casi seis meses desecuestro, ambos curas fueron libe-rados. Massera recibió el doctorado“honoris causa” de la Universidad delSalvador en 1977. Murió en 2010.

AliciaOliveiraEx defensora del Pueblo. Oliveira co-noció a Bergoglio cuando era jueza delfuero penal, en 1971. Ella era docenteen la Universidad del Salvador. Ber-goglio quiso guarecerla en el ColegioMáximo de San Miguel, la casa de al-tos estudios de la Compañía de Jesús,ante la inminencia del golpe de Estado,pero Oliveira se negó. Asegura queBergoglio se preocupó por los curasdetenidos y se movió para sacar delpaís a gente que estaba en riesgo.

|21DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

Respondió durante 4 horas, como testigo, laspreguntas del juez y del abogado de laquerella, Luis Zamora. El extracto.

En noviembre de 2010s(…) Juez: ¿Recuerda qué hizo us-ted ante esa noticia.Bergoglio: Sí, me empecé amover,a hablar con sacerdotes que supo-nía que tenían acceso a la policía,a las FuerzasArmadas, nosmovi-mos enseguida.J:¿Obtuvo alguna informacióndiferente a la que le había brindadoel vecino?B:Me confirmaron lo que habíapasado, y que no se sabía dóndeestaban. Después empezó a de-cirse que habían sido efectivos delaMarina. A los dos o tres días, almenos amíme dijeron.J: ¿Puso la noticia en conocimientode otra jerarquía eclesiástica?B: De todos losmiembros de laCompañía de Jesús y recurrí al Ar-

Bergoglio,testigoenlacausaESMA

DERECHOSHUMANOS

zobispado. Era un domingo, leavisé el lunes omartes al cardenalAramburu, y también a la Nuncia-tura, amonseñor Laghi.Zamora: ¿Cómo supo que habíasido laMarina?B: Se comentaba, vox populi, losque iban averiguando apuntabanallí.J: ¿Esomotivó alguna gestión di-ferente?B: Si, de hechome reuní dos vecescon el Comandante de laMarina,Massera. La primerame escuchó yme dijo que iba a averiguar. Le dijeque esos padres no tenían que veren nada raro. Y quedó en contes-tar. Como no contestó, al cabo deun par demeses pedí una segundaentrevista, además de seguir otrasgestiones. Ya estaba casi seguro

de que los tenían ellos. La segundaentrevista fuemuy fea, no llegóa los diezminutos. (...)Yo le dije,mireMassera, yo quiero que apa-rezcan.Me levanté yme fui.Z: ¿De dónde surgieron las ver-siones de que había actuado laMarina?Bergoglio: No sé, pero se instalócomo vox populi. La gente con laque uno hablaba, decía fueron losinfantes deMarina.Z: ¿A qué gente?B: A la gente que podía influir, a lagente que consultaba, que teníaconexiones con jueces, con policía,con algúnmilitar, con elMinisteriodel Interior, con el gobierno. Y to-dos apuntaban hacia laMarina.Juez: ¿Recuerda qué circunstancialo determinó a entrevistarse conMassera?B: Porque tenía la certeza… per-dón, la casi convicción de que eraél, por ese sentir de todos.Meacuerdo un sacerdote jesuita quehizomuy buenas gestiones parafortalecer esta hipótesis, que era elpadre Fernando Storni.(...) ConVi-dela dos veces, por lomismo. Fuemuy formal, tomó nota, dijo queiba a averiguar. Le dije que se decíaque estaba en laMarina. La segun-da,me enteré quién era el capellánmilitar que le iba a celebrarmisaen su casa, a la residencia delComandante en Jefe. Le pedí que

dijera que estabaenfermo y que yo lo iba a suplir.Ese sábado, después de lamisa ledí hablar. Ahíme dio la impresiónde que se iba a preocuparmáse iba a tomar las cosasmás enserio. No fue violenta, como la deMassera.Z: ¿En ningúnmomento semen-cionó a la ESMA?B: Almenos yo no lo oí, decían laMarina o los infantes deMarina.Z: ¿Dejó constancia escrita de esasentrevistas?B: Informaba constantemente alpadre general (...) desde un locu-

me digas donde estás ni temuevasde donde estás.Mandame unapersona a queme lo comunique ydónde nos podemos encontrar. Yaa esa altura había que tomar todaslas precauciones.Juez: ¿Qué le contaron?B-Me contaron todo. Que estabanencapuchados, engrillados, quedespués de un cierto tiempo lostrasladaron a otra dependenciaque les parecía que era una casapor lamisma zona o cercana a laESMA, donde estaban convenci-dos que habían estado.Estaban seguros que era lamismazona por el ruido de despeguey aterrizaje de aviones. Sentíanvoces de personas pero tengola impresión que estaban en unapartado, solos. Y que los libera-ron adormecidos en un campo enCañuelas.Z: Es decir que al salir, ellos teníanla certeza de que quedaba gentesecuestrada en ese lugar.B: Sí, sí.Z: Por la vida de esas esas per-sonas ¿usted no pensó en unadenuncia inmediata?B: Las hicímos todas vía jerárquicaeclesiástica.Z: ¿Y por qué no legal, si era undelito?B: Por disciplina preferimos ha-cerlas todas juntas vía jerarquíaeclesiástica. π

En1976,BergogliosereuniódosvecesconMasserayVidelaparareclamarpordoscurasjesuitassecuestrados

torio de la calle Corrientes, para nousar el teléfono de la Curia.Juez: Recuerda cómo tomóconocimiento que los padres Jalicsy Yorio habían recuperado su li-bertad, ¿se entrevistó con ellos?B-Me llamó el presbítero Yoriopara comunicármelo. Le dije no

22| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

Religión y política

E l cardenal Bergogliodejó a finales de 2011el Episcopado argen-tino tras seis años deuna relación compleja

con los gobiernos de Néstor y Cris-tina Kirchner. Se enfrascaron endiscusiones sobre la pobreza, lapelea con el campo y la aproba-ción del matrimonio igualitario.El ex presidente Néstor Kirchnerllegó a señalar al cardenal comoun opositor, unmote que el propioBergoglio odiaba.Cuando se conoció la renuncia

de Benedicto XVI, el gobierno deCristina Kirchner no se pronunció.Interpretó que cualquier cambio enlos altos mandos vaticanos podríadeterminar algún tipo de cambiosen la Iglesia argentina. Unas pocassemanas antes,mientras se decidíaen Roma quién sería el sucesor,Cristina llegó a decir en forma iró-nica “Decí que no hay papisa, sino, te disputo algún lugar”.Néstor Kirchner se reunió con

Bergoglio poco después de asumirel mando y parecía que podía ha-ber coincidencias. Pero en la homi-lía del Tedeum, un añomás tarde,afloraron las diferencias. El carde-nal cuestionó “el exhibicionismo ylos anuncios estridentes”. El ale-jamiento se hizo evidente cuandoNéstor decidió no asistir a la homi-lía de 2005, lo que provocó que eltedeum fuera cancelado. “No hayrelación de la Iglesia con el Gobier-no”, dijo un portavoz de Bergoglio

cuando le preguntaron sobre lasintonía con la Casa Rosada.Los líderes del Episcopado se

reunieron por primera vez conCristina unas semanas después desu asunción en 2007. Un añomástarde ya estaban enfrentados. Enmedio del conflicto con el campo,Bergoglio le había reclamado a laPresidente que tuviera un “ges-to de grandeza” para llegar a unanegociación. Después del famosovoto “no positivo” de Julio Cobos,Bergoglio se reunió con el vicepre-sidente paramarcar las diferenciasmuy claramente. La controversiavinomás tarde directamente desdeRoma, El entonces Papa Benedictopidió que en Argentina se termina-ra con el “escándalo” de la pobreza.El cardenal agregó que “desde haceaños el país no se hace cargo de lagente”.En 2011, Cristina prefirió asistir

al tedeum del arzobispo Sigampa,en Resistencia. Bergoglio emitióunmensaje en el que pidió “deste-rrar las ambiciones desmedidas”.En la Catedral de Plaza de Mayoel arzobispo criticó los “delirios degrandeza” de los gobernantes.Pero fue la aprobación de la ley

dematrimonio igualitario en 2010el momento más tenso. Bergoglioencabezó la marcha contra el casa-miento entre personas del mismosexo y pidió que se hablara en to-das las misas del “bien inalterabledel matrimonio y la familia”.

Pero circunscribir sólo a Ber-

LatensarelaciónconlosKirchnerSe enfrentaron por los índices de lapobreza, la pelea con el campo y laaprobación delmatrimonio igualitario.Bergoglio encabezó lamarcha contrael casamiento entre personas delmismo sexo.

Cristinallegóadecirenformairónica“Decíquenohaypapisa,sino,tedisputoalgúnlugar”.

goglio los conflictos permanentesque Néstor y Cristina Kirchner tu-vieron con la Iglesia Católica seríaincurrir en un reduccionismo. Escierto que, con quien fue duranteseis años titular del Episcopado ar-gentino, escribieron una historiade mutuos desencuentros. Pero ladesconfianza del matrimonio pre-sidencial reconoció también unaraíz muy profunda con la institu-ción eclesial. Incluso con el propioVaticano, durante un lapso del rei-nado de Juan Pablo II.El Papa polaco había designado

en el 2002 como obispo castrensemonseñor Antonio Baseotto. Enuna ceremonia religiosa en 2005,ese sacerdote evocó los años de laviolencia en la Argentina y equi-paró la responsabilidad de losmilitares con la de los guerrillerospor tantos crímenes cometidos.

|23DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

Ni más ni menos que la teoría delos dos demonios, denostada porel catecismo setentista. Baseottotampoco controló su lengua. Arre-metió contra las insinuacionesabortistas de ese momento y lapolítica de profilaxis encarada porel entonces ministro de Salud, Gi-nés González García. Desbarrancócuando aludió, en ese contexto, auna frase de Jesús sobre los niños:“Quienes escandalizan a los pe-queños merecen que le cuelguenuna piedra demolino en el cuello ylo tiren al mar”, afirmó. Kirchner,Cristina creyeron descubrir en esacita infortunada un aval a una delas tantas metodologías usadaspor la dictadura para el extermi-nio. Pidieron el retiro de Baseottoal Vaticano. Juan Pablo II se negó.Baseotto se terminó yendo solo yjubilado.La Iglesia Católica fue funcional

para los Kirchner en la construc-ción revisionista del pasado y en lahilación de un relato político queles sirvió para captar la atención,a la salida de la crisis, de ampliossectores de la sociedad. Las orga-nizaciones de derechos humanossignificaron, en ese aspecto, unpuntal. Ese libreto vinculó de ma-nera indisoluble, también, a lasFuerzas Armadas. En esas dosinstituciones afincaron la primeralógica de amigo-enemigo, de con-frontación irreductible, con quetiñeron la política nacional.En ese derrotero, como en tan-

Tampoco Kirchner y Cristinamiraron al cardenal del mismomodo.El ex Presidente masculló im-

potencia cuando asistió al primertedeum, el 25 de mayo del 2004.Pero volvió a su escritorio, releyóel mensaje y se tranquilizó. Cris-tina nunca volvió de su indigna-ción. Ese fue el primer mojón deuna relación compleja. A la Presi-denta siempre le hizo ruido unadenuncia sobre la desapariciónen 1976 de dos curas jesuitas quedependían jerárquicamente deBergoglio.Pero la comunión conspirativa

de ambos pudo más. A lo largo desu mandato episcopal, Bergoglioreiteró tres conceptos muy por en-cima del resto: la necesidad del diá-logo, la lucha contra la pobreza y elcombate contra la corrupción.El diálogo, en su estilo austero y

escondedor, era una práctica que leapasionaba. Lo hacía con empresa-rios, políticos, periodistas, sindica-listas y dirigentes sociales. Siemprese habló de su dilección por ElisaCarrió y Gabriela Michetti. Peroenfrente de su modesta silla estu-vieron socialistas, radicales, pero-nistas y hasta Mauricio Macri.Ese ejercicio nunca fue com-

prendido por los Kirchner, ciuda-danos de las antípodas. Supusieronsiempre que detrás de esa cortina,Bergoglio ocultaba aspiraciones dearticulador político del arco oposi-tor. π

tos, resultaron extremadamente li-neales. Mezclaron las institucionescon las conductas reprobables demuchos de sus hombres. Pero node todos. En ese camino aparecióBergoglio, apenas como un noblepastor. Jamás los Kirchner supie-ron distinguir algo: en una Iglesiade pensamiento sólidamente con-servador -a diferencia de Brasil y,por períodos, de Chile- el ahoraPapa enarboló un discurso y unaacción distinta, enfrentada con losexponentes reaccionarios. Lideró laparticipación de la Iglesia en la cri-sis de 2001 con un largo documen-to de su inspiración y su puño, enel cual clamó por un compromisocolectivo para pelear “por la equi-dad social y la justa distribución delingreso”. Casi un prólogo del relatoque dos añosmás tarde haría suyoel kirchnerismo.

Tensa relación. Bergoglio y los Kirchner se enfrentaron por la pobreza, las retenciones del campo y la ley de matrimonio igualitario. En2006 (fotos) asistieron al tedeum en la Catedral Metropolitana. Otras veces optaron por refugiarse en alguna provincia más adicta.

LacontroversiavinodirectamentedesdeRoma. ElentoncesPapaBenedictopidióqueenArgentinaseterminaraconel“escándalo”delapobreza.

LaIglesiadeRomavs.lareligiónKMarcos NovaroSociólogo y filosofo

EL CULTODEL PODER

Cristina dejó de ser nuestracompatriotamás poderosa einfluyente en el mundo. Tampo-co será de aquí enmás la únicaargentina, ni la única peronista,capaz de tocar el cielo con lasmanos y prometernos un futurode Gloria.

Es comprensible por ello que la noticia de un Papaargentino haya caído como una bomba apenas disi-mulada en la cúpula oficial. No lo son tanto, en cam-bio, las reacciones que se dispararon en su seno.En Cristinamisma, acostumbrada a salirse todo eltiempo con la suya y a entender el poder como unaunidad demil caras, del que se es dueño absolutoo servidor, despertó una desconocida vocación re-ligiosa: parece que también en esto querrá imitar aChávez y a Evita, y tratará de convertir sus discursosen homilías que compitan en sensibilidad y convo-catoria con las del Santo Padre. Si la religiosidad ar-gentina va a salir de sumodorra, no quiere que nadiemás que ella la gobierne. El problema es que, inten-tándolo, puede terminar cargando en lamochila desu personaje ya demasiadas facetas, contradiccio-nes y demandas, y ofrecermás flancos a sus críticospara que se lo cobren.Como sea, la presidentemostró al menosmejoresreflejos que sus seguidoresmás entusiastas, quie-nes en un ataque de flagelante paranoia, demani-fiestos ecos soviéticos (¿cómo es que se les ocurrióprecisamente a ellos traer a cuenta la comparacióncon Juan Pablo II y su lucha contra los regímenescomunistas?), salieron a objetar que Bergogliomereciera semejante distinción. Y contrapusieronlos valores auténticamente universales del modelooficial a la hipocresía que caracterizaría a la Curiaen general y al nuevo Papa en particular. Con esteplanteo parecieran querer acompañar y avalar la en-tronización de Cristina como papisa de la religión K.Pero lo que ofrecen es bastante poco. Corren inclusoel riesgo de enajenarle al gobierno uno de los otroramás firmes pilares de su prestigio, la capacidad dealimentar el orgullo nacional; completando la sus-titución de dicho orgullo por el pobre sucedáneode un nacionalismo herido y acorralado frente a unmundo hostil, que se viene alimentando ya desdehace tiempo con las sagas deMalvinas, los fondosbuitre, los inversores quemientras escapan sonacusados de ladrones, etc. Con lo que ya no podríandisimular que nos brindan, antes que un destinode Gloria, una autocomplaciente justificación delfracaso.Del otro lado, se comprende el entusiasmo de laoposición, sobre todo la peronista. Aunque tal vezle convenga tomarse las cosas con calma.Muchosargentinos podrán sentir ahora que vuelven al mun-do por la puerta grande, incluso que pueden hablarcon una voz a la vez nacional y universal y hacerlo enun tonomuy distinto del pueril y quejoso antiimpe-rialismo que imprime la presidente a sus discursosurbi et orbi. Sólo se trataría, según los aspirantes asucederla, de dar locución local al mensaje de pazpapal. Pero paramovilizar a la sociedad argentinacon ilusiones no tanmentirosas y frustrantes comohan probado ser las kirchneristas no alcanzará conpalabras. Tanto para los sacerdotes como para lospolíticos reconstruir los sentimientos de comunidadperdidos en sus respectivos campos requerirá ungran esfuerzo de colaboración e innovación. Que in-cluye aprender de los desafíos y las novedades queel kirchnerismo supo utilizar en su provecho y queno desaparecerán como unmal sueño. π

24| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

La preocupación del flamante Papa por temas comocorrupción, pobreza, trabajo esclavo, exclusión einjusticia social, trata de personas, droga,consumismo, superficialidad y los desvíos del poderquedaron reflejadas en sus homilías, cartas y cadavez que se dirigió a sus fieles.

CardenalBergoglioEnsuspalabras

El pensamiento

Patriaydesafíos

Todos, desde nuestras res-ponsabilidades, debemosponernos la Patria al hombro,porque los tiempos se acortan.La posible disolución la adver-timos en otras oportunidades,en esta misma fecha patria.Sin embargo, muchos se-guían su camino de ambicióny superficialidad, sin mirara los que caían al costado:esto sigue amenazándonos.Miremos finalmente al herido.Los ciudadanos nos sentimoscomo él, malheridos y tiradosal costado del camino. Nossentimos también desampara-dos de nuestras institucionesdesarmadas y desprovistas,ayunos de la capacidad y laformación que el amor a la pa-tria exigen. Todos los días he-mos de comenzar una nuevaetapa, un nuevo punto de par-tida. No tenemos que esperartodo de los que nos gobiernan:esto sería infantil, sinomásbien hemos de ser parte activaen la rehabilitación y el auxiliodel país herido. Hoy estamosante la gran oportunidad demanifestar nuestra esenciareligiosa, filial y fraterna parasentirnos beneficiados con eldon de la Patria, con el don denuestro pueblo, de ser otrosbuenos samaritanos que car-guen sobre sí el dolor de losfracasos, en vez de acentuarodios y resentimientos. Comoel viajero ocasional de nuestrahistoria, sólo falta el deseogratuito, puro y simple de que-rer ser Nación, de ser constan-tes e incansables en la laborde incluir, de integrar, de le-vantar al caído. Aunque se au-tomarginen los violentos (...)y que otros sigan pensando enlo político para sus juegos depoder, nosotros pongámonosal servicio de lo mejor posiblepara todos.”25.05.2003•Tedeumen la Catedral

“La difamación y el chisme,la trasgresión conmuchapropaganda, el negar los lími-tes, bastardear o eliminar lasinstituciones, son parte de unalarga lista de estratagemascon las que la mediocridad seencubre y protege, dispuestaa desbarrancar ciegamentetodo lo que la amenace. Es laépoca del ‘pensamiento débil’.

Y si una palabra sabia asoma,es decir si alguien que encarnael desafío de la sublimidad auna costa de no poder cumplirmuchos de nuestros anhelos,entonces nuestra mediocridadno se para hasta despeñarlo.Despeñadosmueren pró-ceres, prohombres, artistas,científicos, o simplementecualquiera que piensemás alládel inconsciente discurso do-minante. No los descubrimossino tarde. Pero cuando la cau-tividad proviene de nuestrassangrantes heridas y luchas in-ternas, de la ambición compul-siva, de las componendas depoder que absorben las insti-tuciones, entonces ya estamoscautivos de nosotros mismos.Una cautividad que se expre-sa –entre otras cosas– en ladinámica de la exclusión. Nosólo la exclusión que se hace através de las estructuras injus-tas, sino también las que po-tenciamos nosotros, esa otraforma de exclusión por mediode actitudes: indiferencia,intolerancia, individualismoexacerbado, sectarismo.”25.05.2004•Tedeumen la Catedral

“Fuera de ese hoy –fuera deltiempo del Reino, tiempo degracia, de buenos anuncios, delibertad y demisericordia– losotros tiempos, el tiempo dela política, el tiempo de laeconomía, el tiempo de la tec-nología, tienden a convertirseen tiempos que nos devoran,que nos excluyen, que nosoprimen. Cuando los tiemposhumanos pierden su sintonía ytensión con el tiempo de Diosse vuelven extraños: repetiti-vos, paralelos, demasiado cor-tos o infinitamente largos. Sevuelven tiempos cuyos plazosno son humanos: los plazosde la economía no tienen encuenta el hambre o la falta deescuela de los chicos, ni la afli-gida situación de los ancianos,el tiempo de la tecnología estan instantáneo y cargado deimágenes que no deja madurarel corazón y la mente de losjóvenes, el tiempo de la políti-ca parece a veces ser circular:como el de una calesita en laque la sortija la sacan siemprelos mismos. En cambio el hoyde Jesús, que a primera vistapuede parecer aburrido y pocoemocionante, es un tiempo enel que se esconden todos lostesoros de la sabiduría y dela caridad, un tiempo rico enamor, rico en fe, riquísimo enesperanza.24.03.2005•Misa el JuevesSanto.

|25DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

Poderypolítica

La ‘malaventura’ es lo contra-rio a la bienaventuranza: noaceptar el dolor del tiempo,negarse a la transitoriedad,mostrarse incapaz de aceptar-se como unomás del pueblo,unomás de esa larga cadenade esfuerzos continuos queimplica construir una nación.Tal vez ésta ha sido una cau-sa de tantas frustraciones yfracasos que nos han llevadoa vivir en vilo, en permanentesobresalto. En el hábito de po-larizar y excluir, en la recurren-cia de crisis o emergencias, losderechos pierden terreno, elsistema se debilita y se lo vacíaindirectamente de legitimidad.Los mayores precios son paga-dos entonces por los más po-bres, y crecen las posibilidadesde oportunistas y ventajeros.¿Cuántas veces hemos caídolos argentinos en la ‘malaven-turanza’ de no haber sabidoconservar tal mansedumbre?

En la ‘malaventuranza’ delinternismo, de la constanteexclusión del que creemoscontrario, de la difamacióny la calumnia como espaciode confrontación y choque.Desdichadas actitudes quenos encierran en el círculovicioso de un enfrentamientosin fin. ¡Pobre el que burla laley gracias a la cual subsisti-mos como sociedad! Ciego ydesdichado es, en el fondo desu conciencia, el que lesionalo que le da dignidad. Aunqueparezca vivo y se jacte degozos efímeros ¡qué carencia!La anomia es una ‘malaven-turanza’: esa tentación de“dejar hacer”, de “dejar pasar”,ese descuidar la ley, que llegahasta la pérdida de vidas; esamanera demalvivir sin res-petar reglas que nos cuidan,donde sólo sobrevive el pícaroy el coimero, y que nos su-merge en un cono de sombray desconfianzamutua. Quédicha en cambio siente unocuando se hace justicia, cuan-do sentimos que la ley no fuemanipulada, que la justicia nofue sólo para los adeptos, paralos que negociaronmás o tu-vieron peso para exigir. ¡Quédicha cuando podemos sentirque nuestra patria no es para

unos pocos! Los pueblos queamenudo admiramos por sucultura, son los que cultivansus principios y leyes por si-glos, aquellos para los cualessu ethos es sagrado.Desdichados en cambio si nonos quema el corazón ver có-mo en las calles, en lasmismaspuertas de las escuelas denuestros hijos, se comerciandrogas para destruir gene-raciones, convirtiéndolas enpresa fácil del narcotráfico ode losmanipuladores de po-der. Desdichados porque sepagamuy caro el drenaje de lacultura hacia lo superficial y elescándalomarketinero, (ex-presiones de desprecio de lavivencia espiritual que buscanavivar el vacío); se paganmuycaro lamentira y la seduccióndemagógica para transfor-marnos en simples clientes oconsumidores.Abramos los ojos, no es es-clavo el que está encadenado,sino el que no piensa ni tieneconvicciones. No se es ciu-dadano por el solo hecho devotar, sino por la vocación y elempeño en construir unaNa-ción solidaria.25.05.2006•Tedeumen laCatedral .

Aprenderaescuchar

Aprender a escuchar nospermitirá dar el primer pasopara que, en nuestras comu-nidades, se haga realidad latan anhelada acogida cordial.Quien escucha sana y recrealos vínculos personales, tan-tas veces lastimados, con elsimple bálsamo de reconoceral otro como importante ycon algo para decirme. Laescucha primerea al diálogo yhace posible el milagro de laempatía que vence distanciay resquemores. Esta actitudnos librará de algunos peligrosque pueden hipotecar nuestroestilo pastoral. El de atrinche-rarnos como Iglesia, edifican-domuros que nos impiden verel horizonte. El peligro de ser

Iglesia autorreferencial queacecha todas las encrucijadasde la historia y es capaz dehisteriquear con la enferme-dad de las internas hasta lasmejores iniciativas pastorales.El peligro de empobrecer lacatequesis concibiéndola co-mo unamera enseñanza, o unsimple adoctrinamiento conconceptos fríos y distantesen el tiempo. La actitud dela escucha nos ayudará a notraicionar la frescura y fuerzadel anuncio kerygmático tras-tocándolo en una fraguada yaguachenta moralina, quemásque la novedad del “Camino”se transforma en fango queciega y empantana. Necesita-mos ejercitarnos en el escu-char... Para que nuestra acciónevangelizadora se enraíce enese ámbito de la interioridaddonde se gesta el verdaderocatequista que, más allá de susactividades, sabe hacer de suministerio, diaconía del acom-pañamiento.Escuchar es más que oír... Estoúltimo está en la línea de lainformación. Lo primero, en la

línea de la comunicación, enla capacidad del corazón quehace posible la proximidad, sinla cual no es posible un verda-dero encuentro. La escuchanos ayuda a encontrar el gestoy la palabra oportuna quenos desinstala de la siempremás tranquila condición deespectador. ¿Querés comocatequista animar verdaderosencuentros de catequesis?¡Pedí al Señor la gracia de laescucha! Dios te ha llamadoa ser catequista, no simpletécnico de comunicación. Dioste ha elegido para que hagaspresente el calor de la IglesiaMadre, matriz indispensablepara que Jesús sea amado yconocido hoy. Escuchar estambién capacidad de com-partir preguntas y búsquedas,de hacer camino juntos, dealejarnos de todo complejo deomnipotencia, para unirnos enel trabajo común que se haceperegrinación, pertenencia,pueblo.08.2006•Carta a loscatequistas.

Angelelli,unejemplo

En La Rioja me encontré conuna Iglesia perseguida, entera,pueblo y pastor, monseñorAngelelli. Dosmeses des-pués, el 14 de agosto de 1973,siendo ya provincial vine conel padre Arrupe, general dela Compañía. El padre Arrupehabía quedado impresionadopor la paliza que le habíandado al padre Pucheta en SanJosé, el año anterior, cerca deFamatina y preguntaba por LaRioja. Como venía a hacer lavisita canónica a la Argentina,la visita de inspección quehacen los padres generales ala congregación, quedamosen que venía un día a La Rioja.Vinimos desde Córdoba enavioneta y ahí vi otra cosa:Veníamos el P. Arrupe y yocon el P. Di Nillo, y cuando laavioneta llegó a la cabecera dela pista para dirigirse a la cen-tral del aeropuerto, el pilotorecibe un llamado para que sequede ahí. El obispo Angelelliviene a buscarnos en un autoy dice: hicimos parar la avio-neta acá, vayámonos de acáporque afuera, los que hacedosmeses hicieron la pedradade la Costa, están esperandopara abuchear. Para abuchearal General de la Compañíade Jesús que venía a visitara sus jesuitas y obviamentepara estar con el obispo, conel pastor y con su pueblo. Esatarde, en la Casa de la Culturacon el P. General de la Compa-ñía tuvimos una reunión contodos los agentes de pastoraly nos contaron lo que hacían.Me acuerdo la última pregun-ta que le hicieron, dígannospadre (era una señora, unariojana guerrera, unamujerque llevaba adelante las cosasde Dios con verdadero coraje),‘¿esto que usted ha escuchadoes el Concilio Vaticano o no loes?’. El padre Arrupe contestó‘esto es lo que quiere la Iglesiadesde el Vaticano II’.Vimos allí el diálogo de un lai-cado vivo, fuerte con su pastor.El obispo por delicadeza noquiso estar presente en esareunión para que su pueblodijera lo que quisiera.Yo he vivido aquí ese dialo-go entre obispo y pastor, undiálogo que fue adelante, undiálogo de amor; había que vercómo había calado hondo ese

diálogo en el corazón del obis-po, estaba enamorado hastatal punto de su pueblo que sucorazón de poeta frustrado–como le decíamos en broma-llegó a escribir verdaderos re-quiebros de amor. Cómo vivíaél el alma de su pueblo: hon-duras de quebradas y silencio,arenales sedientos y bravíos,cardonales vigías en horizon-tes, llenos de cerros escon-didos... así es el alma demipueblo.”4.08.2006•Homenaje a Angelellien La Rioja

“Si ya en el momento de lacruz había quien sembrabadiscordia, a lo largo de la his-toria siempre los hubo. El de-monio no se queda tranquilo,es el padre de la mentira, es elpadre de la discordia, el padrede la división, el padre de laviolencia. Y a ese padre no loqueremos porque ese padreno nos hace hermanos, nosdivide. Madre, necesitamosvivir como hermanos. Madre,necesitamos recuperar me-moria, la memoria de cómose vive como hermanos; queno nos olvidemos de cómo sevive como hermanos, que ellanos dé esa gracia de recuperarla memoria de cómo se vivecomo hermanos.‘Y desde aquella hora’ dice elEvangelio, ‘el discípulo Juan sela llevó a su casa’, la cuidó. Latenía cuidándola y ella cuidabaa los discípulos. Quizás uno delos rasgos quemás se ven enuna familia es cuidarse unosa otros, el rasgo, quizás, quemás nos caracterizará comohermanos es cuidarnos unos aotros. Como aquel samaritano,se acuerdan que encontró aese hombre asaltado en elcamino de Jerusalén a Jericó;lo curó, lo subió arriba del bu-rro, lo llevó al hotel, lo cuidó.Cuidarnos. Madre, enséñanosa cuidarnos como nos cuidásvos. Eso es lo que le pedimosa Ella, hoy también. Venimos aexpresar esta necesidad, no undeseo, una necesidad. Madre,necesitamos vivir como her-manos. Y para eso le pedimosque saque toda la cizaña dediscordia, envidia, odio violen-cia que puede haber en nues-tros corazones. Madre, necesi-tamos vivir como hermanos. Ypor eso le pedimos la gracia derecuperar la memoria de cómose vive como hermanos. Ma-dre, necesitamos vivir comohermanos .1.10.2006•Basílica deLuján.

26| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

Lasdrogas

Los chicos salen de la escuelay en la esquina pueden com-prar merca. ¿Preparamos alos chicos para grandes ho-rizontes o para el horizontede la esquina, donde puedencomprar por unos pesos pastabase o lo que sea?”2010•Misa de la educación.

“Nuestra ciudad necesita serungida en los lugares en dondela bondad está en lucha, espa-

cios que son tierra de nadie yestán ocupados por el interésegoísta y la injusticia social yeconómica.9.4.2009• Homilía del Jueves Santo.

“En las mismas puertas de lasescuelas se vendemuerte...esto es evidente. Todos nosescandalizamos y decimos‘qué barbaridad’, sin embargo¿qué se hace? ¿quién le poneremedio a esto?5.4.2011• Misa anual por la Educación.

“¡Estamos en riesgo! Comosociedad poco a poco noshemos acostumbrado a oír ya ver, a través de los mediosde comunicación, la crónicanegra de cada día; y lo que aúnes peor, también nos acostum-

bramos a tocarla y a sentirla anuestro alrededor sin que nosproduzca nada o, a lo sumo, uncomentario superficial y des-comprometido.La llaga está en la calle, enel barrio, en nuestra casa,sin embargo, como ciegos ysordos convivimos con la vio-lencia quemata, destruye fa-milias y barrios, aviva guerrasy conflictos en tantos lugares,y la miramos como una pelícu-la más.El sufrimiento de tantos ino-centes y pacíficos dejó decachetearnos, el desprecio alos derechos de las personasy de los pueblos, la pobreza yla miseria, el imperio de la co-rrupción, de la droga asesina,de la prostitución obligada einfantil pasaron a ser monedacorriente, y pagamos sin pedir

recibo aunque tarde o tempra-no se nos va a pasar la factura.Todas estas realidades, y mu-chasmás, no sonmudas, nosgritan a cada uno de nosotrosy nos hablan de nuestra limita-ción, de nuestra debilidad, denuestro pecado… a pesar deque “nos hayamos acostum-brado”.El acostumbramiento nos diceseductoramente que no tienesentido tratar de cambiar algo,que no podemos hacer nadafrente a esta situación, quesiempre ha sido así y que sinembargo sobrevivimos. Por elacostumbramiento, dejamosde resistirnos permitiendo quelas cosas ‘sean lo que son’, o loque algunos han decidido que‘sean’.”17.02.2010•Misa por la Educación.

“¡Con qué facilidad, cuandono hay amor, se adormecela conciencia! Entregamoslas vidas de nuestros niñosy jóvenes a las solucionesmágicas y destructivas delas drogas (legales e ilega-les), del juego legalizado,de la medicación fácil, dela banalización hueca delespectáculo, del cuidadofetichista del cuerpo. Y, anuestros ancianos, que paraeste narcisismo y consumis-mo sonmaterial descarta-ble, los tiramos al volqueteexistencial. Y así, la falta deamor instaura la “cultura delvolquete”. Lo que no sirve,se tira”.25.05.2012•Tedeumen laCatedralMetro-politana.

El pensamiento

Eltrabajoesclavo

Hagamos un instante de silen-cio en nuestro corazón pararecordar a siete personas,que trabajaban aquí en unrégimen de esclavitud hacecinco años. Harry RodríguezPalma tenia 5 años;WilfredoQuispeMendoza 15 años;Juana Vilma Quispe 25 añosy un hijo que llevaba en elvientre cuyo nombre sólo Diosconoce; Elías Carabajal Quispe10 años; Rodrigo Quispe Ca-rabajal 4 años y Luis Quispe 4años. Esos chicos que teníantoda una vida por delante, chi-cos como algunos que estánsentados aquí. Ellos vierontruncada la vida por una con-ducta que se repitió siempre alo largo de la historia y que enla Biblia aparecemanifestadapor un señor muy poderosoque se llamaba Herodes, aquien no le importa matar alos chicos con tal de lograr sucometido. Esos chicos muerenen este incendio en una casaclandestina de trabajo esclavo.Dios le dijo una vez a Caín: ‘Lasangre de tu hermano clamajusticia…’. Esa frase de Dios larepetimos hoy: ‘La sangre deestos siete hermanos nuestros

clama justicia’. Se ha dege-nerado el sentido del trabajoporque el trabajo es lo que teda dignidad.La dignidad la tenemos por eltrabajo, porque nos ganamosel pan, y eso nos hacemante-ner la frente alta. Pero cuandoel trabajo no es lo primero sinoque lo primero es la ganancia,la acumulación de dinero, ahíempieza una catarata descen-dente de degradaciónmoral.Y termina esta catarata en laexplotación de quien trabaja.Esta frase no esmía, la dijoayer el Papa en una audiencia.Cuando se revierte el verda-dero fin del trabajo el centrodel trabajo que es la personaempieza a crecer el afán dedinero insaciable y ahí todoslos medios para terminar en laesclavitud.Una vez dije en Constitución,en una anterior misa por lasvíctimas de la esclavitud y ex-clusión, que lo que nos ense-ñaban en el colegio sobre quela asamblea del año 13 habíaabolido la esclavitud erancuentos chinos… a los más es-tá en un escrito. Pero en estaBuenos Aires tan vanidosa,tan orgullosa, ¡sigue habien-do esclavos! Sigue habiendoesclavitud! Todo se arregla …Buenos Aires es coimera y loes de alma, y el recurso a lacoima tapa todo. Los corazo-nes se endurecen.27.03.2011•Misa por las víctimas del tra-bajo esclavo

La gracia más linda que pode-mos recibir hoy es la de lloraren nuestro corazón. Señormirá esto: Cambiales el cora-zón a estos esclavistas, cam-biáselo. Estos que entran aesta ‘Ciudad abierta’ a ver quépueden saquear, qué vida pue-den anular, qué familia puedendestruir, qué niños puedenvender, quémujer puedenexplotar. Nosotros no venimosaquí a protestar, venimos a re-zar públicamente, en la plaza,en una Ciudad que es “Ciudadabierta” donde cualquierapuede entrar a esclavizar.Todos los que estamos aquírezando también le vamos apedir a Jesús la gracia de nohacernos los distraídos… ‘PeroPadre, ¿qué puedo hacer yopor unamafia?’ … ¡Rezar! Gol-peá el corazón de Dios… Si sa-bés algo contalo pero nomirespara otro lado porque puedeser tu hijo o tu hija a quien deun día para el otro conviertanen esclavo, o podés ser vos.Hace un tiempo tuve la alegríade bautizar a dos nenas, hijasde unmatrimonio rescatadode un taller esclavista. Señor,así como nos diste esta gracia,hacé que semultiplique, quepodamos rescatar a muchos,que podamos devolver a lasociedad a todos aquellosque tienen encerrados comoesclavos y explotados comoesclavos.25.09.2012•Misa en PlazaConstitución.

Crisisyparticipación

Hoy quiero compartir conustedes la percepción de queestamos justamente en unode esosmomentos decisivos.Pero no individualmente, sinocomoNación. Es una convic-ción compartida por muchos,incluso por el Santo Padre,como nos lo dio a entender ennuestra última visita episcopala Roma. La Argentina llegóal momento de una decisióncrítica, global y fundante, quecompete a cada uno de sushabitantes; la decisión de se-guir siendo un país, aprenderde la experiencia dolorosa deestos años e iniciar un caminonuevo, o hundirse en la mise-ria, el caos, la pérdida de valo-res y la descomposición comosociedad. Algo cambió, no pri-meramente, sino en el pueblo.En el interior de las familias,en la conciencia de cada unode los ciudadanos que decidióabandonar el negativismo o laqueja privada, mera rumia deamargura, para reconocer alvecino, al compatriota, solida-rizados aunquemás no fueraen el hastío y la bronca.Solamente quiero hacer pie enaquel momento de participa-

ción colectiva, en cuanto signode intento de recuperaciónde lo ‘común’, como puntode partida para la lectura denuestra realidad profunda.”Abril de 2002•Mensaje a las comunidadeseducativas.

“En 2002 los invitaba a re-flexionar sobre la misión delcatequista como adorador,como aquel que se sabe an-te unmisterio tan grande ymaravilloso que lo desbordahasta convertirse en plegaria yalabanza.Ante unmundo fragmentado,ante la tentación de nuevasfracturas fratricidas de nues-tro país, ante la experienciadolorosa de nuestra propiafragilidad, se hace necesarioy urgente, me animaría a de-cir, imprescindible, ahondaren la oración y la adoración.Ella nos ayudará a unificarnuestro corazón y nos dará‘entrañas demisericordia’ paraser hombres de encuentro ycomunión, que asumen comovocación propia el hacersecargo de la herida del herma-no. No priven a la Iglesia de suministerio de oración que lespermite oxigenar el cansanciocotidiano dando testimonio deun Dios tan cercano, tan Otro:Padre, Hermano y Espíritu;Pan, Compañero de Camino ydador de Vida.21.08.2003•Mensaje a loscatequistas.

|27DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

Tratadepersonas

Hoy en esta Ciudad queremosque se oiga el grito, la pregun-ta de Dios: ¿Dónde está tuhermano? Que esa preguntade Dios recorra todos losbarrios de la Ciudad, recorranuestro corazón y sobre todoque entre también en el cora-zón de los ‘caínes’ modernos.Quizá alguno pregunte: ¿Quéhermano? ¿Dónde está tu her-mano esclavo? ¿El que estásmatando todos los días en eltaller clandestino, en la red deprostitución, en las ranchadasde los chicos que usás paramendicidad, para ‘campana’de distribución de droga, pararapiña y para prostituirlos…?¿Dónde está tu hermano elque tiene que trabajar casi

de escondidas de cartoneroporque todavía no ha sidoformalizado…. ¿Dónde está tuhermano…? Y frente a esa pre-gunta podemos hacer, comohizo el sacerdote que pasó allado del herido, hacernos losdistraídos; como hizo el levita,mirar para otro lado porqueno es para mí la pregunta sinoque es para otro. ¡La preguntaes para todos! ¡Porque en estaCiudad está instalado el siste-ma de trata de personas, esecrimenmafioso y aberrante(como acertadamente lo defi-nió hace poco un funcionario):crimenmafioso y aberrante!¿Dónde está tu hermano? Yvos que estás mirando, quete hacés el distraído, no dejáslugar en tu corazón a que entrela pregunta; que decís esa noes para mi… ¿Cuál!?!? ¡¡Elesclavo!!!El que en esta Ciudad sufreestas formas de esclavitudquemencioné recién porqueesta Ciudad es una ‘Ciudadabierta’, aquí entran todos: losque quieren esclavizar, los que

quieren despojar… así comocuando se rinde una Ciudadse declara ‘Ciudad abierta’para que la saqueen, ¡aquínos están saqueando la vidade nuestros jóvenes! ¡La vidade nuestros trabajadores!¡La vida de nuestras familias!Estos tratantes… no, no losinsultemos sino recemos porellos también para que escu-chen la voz de Dios: ¿Dóndeestá tu hermano?A vos, tratante, hoy te deci-mos: ¿Para qué hacés esto?No te vas a llevar nada, tevas a llevar las manos pre-ñadas de sangre por el malque hiciste. Y hablando desangre, por ahí te vas a ir delbalazo de un competidor. Lasmafias son así. ¿¡¿¡Dóndeestá tu hermano, tratante?¡Es tu hermano! ¡Es tu carne!Tomemos conciencia que esacarne esclava es mi carne, lamisma que asumió el hijo deDios.25.9.2012•Misa enCons-titución .

EldramadeCromañón

Yo dejaré enmedio de ti a unpueblo pobre y humilde quese refugiará en el nombre delSeñor” (Sof. 3:12) Así suena lapromesa de Dios a su puebloenmomentos demucha difi-cultad y prueba. Lo acabamosde escuchar. No le prometeni riqueza ni poder; pero sí elcuidado y la seguridadmásgrande que se puedan encon-trar: “se refugiará en el nom-bre del Señor”. Le promete suintimidad, su calidez de Padre,su acogida llena de ternura ycomprensión. Y hoy nosotrosvenimos a pedir esto. Nuestrodolor, desde hace unmes, esmuy grande; un dolor que nose puede expresar con pala-bras; un dolor que abofeteó anuestra ciudad, que golpeó ahogares enteros. Venimos aencontrar refugio en el nom-bre del Señor. Pedimos su cari-cia amorosa de Padre.No somos importantes “ni

poderosos ni nobles” comoescuchamos decir recién a SanPablo, pero queremos ser elpueblo del Señor; queremosque nuestra fuerza sea sumirada bondadosa y, en nues-tro dolor, venimos a buscaral Señor, según nos lo pide elprofeta en la primera lectura:“Busquen al Señor, ustedes,todos los humildes de la tierra”(Sof. 2:3). Le contamos al Se-ñor lo que nos ha sucedido. Ledecimos que no somos pode-rosos ni ricos ni importantes;pero que sufrimosmucho. Lepedimos que nos consuele yno nos abandone porque que-remos ser ese “pueblo pobrey humilde que se refugia en elnombre del Señor” (Sof. 3:12).Le pedimos que nosmire mu-cho porque queremos seguircaminando y queremos seguirluchando. (...)Sí, escuchamos recién su pa-labra: “Felices los que tienenhambre y sed de justicia, por-que serán saciados” (Mt. 5:6)Por eso también le pedimosjusticia. Le pedimos que supueblo humilde no sea burladopor ninguna astucia mundana;que sumano poderosa pongalas cosas en su sitio y hagajusticia. La llaga es dolorosa.

Nadie tiene el derecho de ex-perimentar con los niños y conlos jóvenes. Son la esperanzade un pueblo y los debemoscuidar con decisión responsa-ble. Y así, afligidos y unidos,pobres y humildes, hoy ora-mos juntos. Que nuestra ora-ción atraiga la mirada de nues-tro Padre Dios. Que nuestraoración sea escuchada para eldescanso eterno de tantas vi-das jóvenes arrancadas por lairresponsabilidad. Que nuestraoración traiga consuelo a lasfamilias que sufren. Que nues-tra oración siga fortaleciendoa tantos hombres ymujeresque se desvivieron en estacalamidad: enfermeras, enfer-meros, médicos, voluntarios,bomberos... Que nuestra ora-ción sacuda y despierte a éstanuestra ciudad dolida para queno ponga su esperanza en lospoderosos sino en el Señor yentienda que con los niños ylos jóvenes no se experimenta.Que el Señor nos lleve de sumano y la Virgen Santa noscuide.30.1.2005•Homilía en la Catedral a unmes del incen-dio en la disco-teca Cromañón.

TragediadeOnce

En la primera lectura se hablade los pensamientos de losimpíos, de los necios, de esosque tienen explicación para to-do y que sabenmanejar la vidade tal manera que ensamblebien. Empezaba así el pasajedel Libro de la Sabiduría queleímos: ’Los impíos dicen entresí razonando equivocadamen-te...’ Todo aquel que quiera ex-plicar esto que pasa ahora, elmisterio del dolor, el misteriodel sufrimiento y de la muerte,razona equivocadamente. Elpasaje terminaba con esta fra-se: ‘No conocen los secretosde Dios.’ Y tengo ganas de de-cirle a nuestro Padre del cielo,hoy que estamos reunidos alos treinta días de esta trage-dia: ¿Cuáles son tus secretos,Padre? ¿Por qué tantas vidassegadas?… cincuenta y dos vi-das, una de las cuales todavíano había nacido… ‘.Y hoy de algunamanera so-mos como esos chicos delantedel padre… pero si observa-mos bien vemos que esos chi-cos no escuchan la respuestadel padre sino que cuando elpapá está hablando vuelven apreguntar el ‘porqué’ de otracosa… simplemente quierenatraer la mirada del padre.Y hoy al preguntar ‘por qué’,todos sabemos que no vamosa tener una explicación com-pleta…Quizá vamos a tenerexplicaciones de las mediacio-nes humanas que han fallado,de las irresponsabilidades, delos errores, pero del misteriopor qué una vida es segadano tenemos explicaciones,solamente nos queda que connuestro “por qué” de hoy, aquídolientes, fraternal y unidos,atraigamos la mirada del Pa-dre para que entre en nuestrocorazón y nos consuele.Rezábamos en el Salmo: ElSeñor está cerca del que sufre.¡Señor, si vos estás cerca denosotros hacelo sentir! ¡Señor,queremos que se haga justicia!Sabemos que detrás de estohay responsables irresponsa-bles, gente que no ha cumpli-do con su deber, no queremospegarle por pegarle pero sícorregir su corazón porque suirresponsabilidad cuesta tancaro, no hay precio que pagueuna vida. Sabemos que enme-dio de todo esto hay angustia

y búsqueda, sabemos que enmedio del dolor hay recuerdosdemomentos vividos con losque se fueron, y pedimos lagracia de llorar en esta Ciu-dad, que como dije en otraocasión, todavía no aprendióa llorar. No sabe llorar. Todolo arregla con anestesia, todolo arregla buscando comocomponer situaciones que nose arreglan sino sacando todoa la luz. Pedimos la gracia,Padre, vos que estás cerca delque sufre, la gracia de llorar.Pedimos la gracia de llorar.Esas lágrimas que limpiaránnuestros ojos y que nos haránver ‘mas allá del dolor’ comodijo uno de ustedes, nos haránver y celebrar la vida feliz deun hijo que se nos fue. Peropara eso hay que llorar mu-cho.Míranos Padre. Aquí no hayningún gurú que nos puedaexplicar el misterio humano:nadie nos puede decir queesto será así o así y estaremosbien…Tenemos que optar: eldolor o la anestesia, o el llantoo la hipocresía, el reclamosereno de justicia o tapar lascosas. Y con este deseo de re-clamar serenamente la justi-cia, tambiénmiramos al cielo,a este Padre que consuela, y lepedimos consuelo para tantasfamilias; consuelo para tantoscorazones; consuelo para lasociedad que se hace cargode esto y sufre por tantasvidas segadas… ¡Casi la totali-dad de ellos venían a ganarseel pan! ¡Dignamente! Que nonos acostumbremos, Padre aque para ganarse el pan hayque viajar como ganado. Queno nos acostumbremos, Padrea que en esta Ciudad no sellora nada, todo se arregla ytodo se acomoda. Que no nosacostumbremos, Padre a lamano fácil que se sacude y di-ce ‘Gracias a Dios amí nometocó’, y se aliena en otra cosa.Hoy la solidaridad esmás,somos hermanos en el dolory como hermanosmiremosal cielo… Padre, ¿por qué? Ycada uno de nosotros abra sucorazón. Y siga preguntandopor qué. Yo no puedo darlesuna respuesta, ni ningún obis-po, ni el Papa pero El los va aconsolar. El es capaz de veniry en la armonía de su presen-cia paternal hacernos sentirque el misterio de la vida y dela muerte tienen un sentidoaún cuando venga demanosirresponsables....23.3.2012•Misa en la Ca-tedral, a unmesde la tragedia deOnce.

28| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

El pensamiento

Latinoamérica

La V Conferencia del CELAMefectuada enmayo en el san-tuario brasileño de Aparecida,ha sido un acontecimientoeclesial.Unamirada aguda de la rea-lidad latinoamericana estáreclamando a la Iglesia elcumplimiento de sumisiónevangelizadora. No es algonuevo que la Iglesia propongacomometa de su accionar laevangelización, existe un im-pulso originario y fundante enel cristianismo por anunciar lasalvación a todos los pueblos.Pero la necesidad urgente demisionar que propone Apare-cida habla de la percepción deun desgaste en el catolicismolatinoamericano. A lo largodemás de quinientos añosla fe cristiana ha penetradola cultura del continente y haofrecido una religiosidad quealimenta la vida personal y denuestros pueblos cuando éstaes acogida con sinceridad. Sinembargo, aunque los católi-cos siguen siendomayoría,algo está cambiando. El PapaBenedicto dijo al inicio de laConferencia: ‘se percibe (…)un cierto debilitamiento de la

vida cristiana en el conjuntode la sociedad y de la propiapertenencia a la Iglesia cató-lica debido al secularismo, alhedonismo, al indiferentismo yal proselitismo de numerosassectas, de religiones animistasy de nuevas expresiones seu-dorreligiosas’.Estamos en una nueva épo-ca, con cambios profundosy acelerados. Esta realidadgenera incertidumbre, con-fusión ymiedo en el corazónde los hombres ymujeres denuestro tiempo. En el contextolatinoamericano y caribeñoesto se tornamás complejoy dramático porque nuestrospueblos viven una realidaddonde la pobreza y exclusiónse incrementa, la corrupcióninstitucionalizada se arraiga,la violencia de todo género seexpande amedida que se con-solida la pérdida de la propiaidentidad.Esta situación se ha ido ges-tando en cambios divisadospor el Concilio Vaticano II haceya cuarenta años. Esas trans-formaciones se han agudizadoy el cambio de época exigeuna nuevamanera de ubicar-nos en la historia que cambióy seguirá cambiando. Cosasque pensamos que nunca ibana pasar o que no las íbamos aver las estamos viviendo y elfuturo nos resulta incierto.Los fenómenos surgidos en laposmodernidad, los efectosde la globalización y tantosotros procesos no podemos

devaluarlos pensando que sonuna crisis pasajera ante la cualtenemos que esperar que pasepara que todo vuelva a sercomo antes. La irreversibilidadde la globalización—tan injus-ta enmuchos sentidos— en sudimensión positiva como ‘unentramado de relaciones a ni-vel planetario… como un logrode la gran familia humana yuna señal de su profunda aspi-ración a la unidad’ (BenedictoXVI, Discurso Inaugural, 2) es,sin embargo, una oportunidadnovedosa para que la evange-lización llegue a todo el mundoy para que la Iglesia puedatrabajar la unidad en los con-tinentes y entre los pueblos;para hacer más efectiva la co-laboración y la credibilidad delos cristianos. (...)No somos observadoresimparciales, sino hombres ymujeres deseosos de impreg-nar todas las estructuras dela sociedad de un amor quehemos conocido y que en elencuentro con la realidad escapaz de transformarla en vidaabundante. El Papa en el Dis-curso Inaugural dijo que esoes ‘lo mejor que nos pasó en lavida’ y ‘es lo que tenemos paraofrecer al mundo y contrarres-tar la cultura demuerte con lacultura cristiana de la solidari-dad, es un imperativo que nostoca a todos.’19.1.2008• Sobre la VConferencia delCELAM.

Ideologíaúnica

El poder como ideología únicaes otra mentira. Si los prejui-cios ideológicos deforman lamirada sobre el prójimo y lasociedad según las propias se-guridades ymiedos, el poderhecho ideología única acentúael foco persecutorio y prejui-cioso de que ‘todas las postu-ras son esquemas de poder’ y‘todos buscan dominar sobrelos otros’. De esta manera seerosiona la confianza socialque, como señalé, es raíz y fru-to del amor.Jesús, en cambio, manifestó elpoder del amor como servicio.Por más que se lo destruya elpoder del amor como serviciosiempre resucita. Su fuenteestá más allá de toda indica-ción humana; es la paternidadamorosa de Dios, fuente in-alcanzable e incuestionable.El amor procurado por unoal otro hace que éste no seamanipulado ni malinterpreta-do. Sólo lo superior, el amorde Dios, afianza el poder deJesús.Nosotros somos invitados arefundarnos en la soberaníadel amor simple y profundo,del amor que hoy escuchamos

en el Evangelio, mandamientoque anuda el amor de Cristoy de Dios Padre en los víncu-los y la dignidad de los otrosamados como ‘a nosotrosmismos’. Pero, en cambio,cuando se utiliza el nombre deDios para someter y violentar,o a cualquier otra entidad realo ideológica para lo mismo, secae en pura idolatría y, cuandolo hacemos, no obramos comoEl obra con nosotros.25.5.2012•Homilía en la Catedral.

Sin esa conjunción de pasado,presente y futuro, conjunciónque se da en la actividad delalma humana, no hay proyectoposible. Sólo improvisación.Borrar lo que pasó antes paravolver a escribir sin asideros loque alguien borrará mañana.Los actuales ‘progresismosadolescentes’ bloquean todoreal progreso humano y, enaras de un pretendido progre-so pero sin la fuerza de la me-moria, la realidad y la visión,configuran totalitarismos dediverso estilo pero tan cruelescomo los del siglo XX; totali-tarismos conducidos por los‘democráticos’ gurúes del pen-samiento único. Confundenel proceso demaduración delas personas y de los puebloscon una fábrica de conservaen lata.9.4.2003•Misa con edu-cadores en laCatedral.

Abortoyfamilia

El Sí deMaría abre la puertaa un largo camino: el del Hijode Dios entre nosotros. Hoycomienza este andar del Señorquien ‘pasó haciendo el bien’,curó nuestras heridas con susllagas, proclamó nuestro triun-fo con su Resurrección. Jesúscamina enmedio de su puebloya desde el seno de suMadre;quiere seguir todos nuestrospasos incluso el camino delniño por nacer. Se hizo igual anosotros en todomenos en el

pecado. Este acontecimientocambia radicalmente la exis-tencia humana. El Señor asu-me nuestra vida y la eleva alorden sobrenatural. La presen-cia del Verbo de Dios venidoen carne transforma, sin ne-garlo, todo lo humano, lo ele-va, lo coloca en la dimensióndel Reino de Dios. Así, Jesúspor nacer ilumina también lavida de la persona en el vientrede sumadre. Desde nuestra fe–por el misterio de la Encarna-ción del Verbo- lo humano, loque está en el orden de la leynatural, adquiere la nueva di-mensión sobrenatural que, sinnegar la naturaleza, la perfec-ciona, la lleva a su plenitud.Con este acontecimiento seabre una nueva perspectivapara considerar el origen yel desarrollo de nuestra vida

y, en el caso que nos ocupa,Cristo en el seno deMaríaes clave hermenéutica paracomprender e interpretar elcamino, la vida. Y los derechosdel niño por nacer, para enten-der más nítidamente lo queya, al respecto, nos dice la leynatural (...).Hoy también a los niños, y alos niños por nacer, los ame-naza el egoísmo de quienessufren la sombra de la deses-peranza en su corazón, la des-esperanza que siembramiedoy lleva amatar. Hoy tambiénnuestra cultura individualistase niega a ser fecunda, se re-fugia en un permisivismo quenivela hacia abajo, aunque elprecio de esa no-fecundidadsea sangre inocente. Hoy tam-bién estamos influenciadospor un teísmo biodegradador

de lo humano; ese teísmospray que pretende suplir ala gran Verdad: ‘el Verbo esvenido en carne’. Hoy tambiénla propuesta cultural a reple-garse sobre sí mismo en unadimensión egoísticamenteindividualista se construyea costa de los derechos delas personas, de los niños.25.3.2005•Día del niño por nacer.

“La esencia del ser humanotiende a la unión del hombrey de la mujer como recíprocarealización, atención y cuida-do, y como el camino naturalpara la procreación. Esto con-fiere al matrimonio trascen-dencia social y carácter públi-co. El matrimonio precede alEstado, es base de la familia,célula de la sociedad, anterior

a toda legislación y anterior ala misma Iglesia. De ahí quela aprobación del proyecto deley en ciernes significaría unreal y grave retroceso antro-pológico. No es lo mismo elmatrimonio (conformado porvarón ymujer) que la unión dedos personas del mismo sexo.Distinguir no es discriminarsino respetar; diferenciar paradiscernir es valorar con pro-piedad, no discriminar. En untiempo en que ponemos énfa-sis en la riqueza del pluralismoy la diversidad cultural y social,resulta una contradicciónmi-nimizar las diferencias huma-nas fundamentales. (...).2010 Carta al•Departamen-to de Laicos dela ConferenciaEpiscopal.

|29DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

Hipocresíaclerical

Nuestro Dios es un Dios quese aproxima. Un Dios que sehace cercano. Un Dios queempezó a caminar con supueblo y luego se hizo uno desu pueblo en Jesucristo parahacerse cercano. Pero no conuna cercanía metafísica sinocon esa cercanía que describeLucas cuando va a curar a lahija de Jairo, que la gente loapretujaba hasta sofocarlomientras la pobre vieja deatrás le quería tocar el bordedel manto. Con esa cercaníade la multitud que queríahacer callar en la entrada de

Jericó al ciego que a los gritospretendía hacerse oír. Con esacercanía que dio ánimo a esosdiez leprosos para pedirle quelos limpiara. Jesús estabame-tido en la cosa. Nadie se queríaperder esa cercanía, incluso elpetiso que se subía al sicómo-ro para verlo.Y con esa cercanía, con esecaminar, crea esa cultura delencuentro que nos hace her-manos, nos hace hijos, y nosocios de una ONG o proséli-tos de unamultinacional. Cer-canía. Esa es la propuesta.La segunda palabra es hipo-cresía. Me llama la atenciónque SanMarcos, siempre estan conciso, tan breve, que lehaya dedicado tanto a esteepisodio—y conste que enesta versión litúrgica estárecortado y esmás largo to-davía— parece que se ensañacon los que se hacen lejanos,con aquellos que el mensaje

de la cercanía de ese Dios, queviene caminando con su pue-blo, que se hizo hombre paraser unomás y caminar, hantomado esa realidad... la hanhecho puro precepto y la hanalejado a la gente. Jesús sí quelos va a acusar de prosélitos aéstos, de hacer proselitismo.Ustedes recorrenmedio mun-do para buscar un prosélitoy después lo matan con todoesto. Alejaron a la gente.Los que se escandalizabancuando Jesús iba a comer conlos pecadores, con los publica-nos, a éstos Jesús les dice: ‘lospublicanos y las prostitutaslos van a preceder a ustedes’…que era lo peorcito de la épo-ca. Jesús no los banca. Sonlos que han clericalizado a laIglesia del Señor. La llenan depreceptos y con dolor lo digo,y si parece una denuncia o unaofensa, perdónenme, pero ennuestra región eclesiástica hay

presbíteros que no bautizan alos chicos de las madres sol-teras porque no fueron conce-bidos en la santidad del matri-monio. Estos son los hipócritasde hoy. Los que clericalizarona la Iglesia. Los que apartan alpueblo de Dios de la salvación.Y esa pobre chica que, pudien-do haber mandado a su hijo alremitente, tuvo la valentía detraerlo al mundo, peregrina deparroquia en parroquia paraque se lo bauticen.A éstos que buscan prosélitos,los clericales, los que cleri-calizan el mensaje, Jesús lesseñala el corazón, les dice ‘delcorazón de ustedes salen lasmalas intenciones, las fornica-ciones, los robos, los homici-dios, los adulterios, la avaricia,la maldad, los engaños, lasdeshonestidades, la envidia,la difamación, el orgullo, eldesatino…’. Flor de piropo,¿eh? Así les pasa la mano de

bleque. Los denuncia.Clericalizar la Iglesia es hi-pocresía farisaica. La Iglesiadel ‘vengan adentro que lesvamos a dar las pautas acáadentro y lo que no entra noestá’ es fariseísmo.El peor daño que puede pasara la Iglesia incluso peor queel de los papas libertinos deuna época. Esamundanidadespiritual de hacer lo quequeda bien, de ser como losdemás, de esa burguesía delespíritu, de los horarios, depasarla bien, del estatus: ‘Soycristiano, soy consagrado,consagrada, soy clérigo’. No secontaminen con el mundo, di-ce Santiago. No a la hipocresía.No al clericalismo hipócrita.No a la mundanidad espiritual.22.9.2012•Misa de clau-sura de PastoralUrbana RegiónBs. As.

30| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

CONCLAVE

ROMA. CORRESPONSAL

Julio Algañ[email protected]

Su consagración comoPapa

Momento de decisión. Los cardenales se dirigen al centro de la Capilla Sixtina para comenzar el cónclave y la ronda de votaciones. Hubo cinco sufragios hasta que Bergoglio obtuvo una mayoría absoluta.

Llegóconelvotoyelapoyodemásde90cardenalesEl estilo espartano, la forma sencilla de trasmitir losmensajes importantes y las propuestas de Bergoglio deregresar a una Iglesia más cercana a los pobres, ledieron en los últimos dos cónclaves los votos tanto delos moderados como de los progresistas.

El magnífico anillo delpescador, símbolo delpontífice, era de oro enel dedo de Joseph Ra-tzinger, Benedicto XVI,

pero será de bronce o de cobre enel de Jorge Bergoglio. Franciscoha inaugurado una nueva era quepromete ser revolucionaria en lavida de la Iglesia, que sale de lascuerdas de una grave crisis exal-tada por la renuncia del pontíficealemán con la opción radical deun sucesor que seguirá un cami-no inspirado en San Francisco deAsís. Un estilo espartano que yacausa sensación y apoyo entre losfieles, la espiritualidad austera yla purificación neta de las estruc-turas infectadas de corrupción ymaniobras de poder de la Curiaromana, el gobierno central de laIglesia.La certidumbre de que era ne-

cesario un cambio radical parano seguir sumergiendo a la Igle-sia en una crisis de proporciones

enormes, que llevaban a una de-cadencia segura, fue el resorte quemovilizó a muchos de los 115 car-denales electores que votaron en laCapilla Sixtina.Mientras los especialistas na-

daban en la superficie de la luchaentre los candidatos en pugna, elarzobispo de Buenos Aires cam-bió de golpe los conciliábulos delas congregaciones preparatoriasdel Cónclave, cuando intervinopara hablar, como hacían suscolegas. “El impacto fue impre-sionante”, contó uno de los pro-tagonistas cuando Francisco eraya Papa. Jorge Bergoglio habló dela misericordia en la Iglesia, de laespiritualidad, de la recuperaciónde la vida austera y de privilegiarla atención a los que sufren, peromarchando siempre en camino enla edificación de la Iglesia siguien-do al Cristo crucificado.El arzobispo de Buenos Aires

había ganado mucho respeto en-tre los cardenales en los Sínodosmundiales de obispos, que reforzóen el encuentro en Brasil delantede Benedicto XVI cuando los obis-pos latinoamericanos se encontra-ron en el Santuario de Aparecida.

|31DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

Tanto no eran una novedad elestilo espartano, la forma sencillade trasmitir los mensajes impor-tantes y las propuestas de Bergo-glio, que en el Cónclave de abrilde 2005 se convirtió en el recep-tor de los votos progresistas comoalternativa al conservador JosephRatzinger. El argentino obtuvo 10votos en la primera votación, 35 enla segunda, 40 en la tercera y bajóa 26 en la cuarta tras pedir que loscardenales convergieran en el apo-yo triunfante a Ratzinger.Con estos antecedentes, se ex-

plica el “milagro” Bergoglio, queno era candidato en ningún papel.El rechazo de la mayoría de loscardenales frente al estado casi co-matoso de una Iglesia dividida porluchas internas explosivas, conge-ló la candidatura del arzobispo deMilán, Angelo Scola, el principalfavorito, y de los que eran alterna-tiva, como el brasileño Odilo Sche-rer y el canadiense Marc Ouellet.El apoyo abierto, militante de

los 11 cardenales norteamericanos,ansiosos por cañonear a la CuriaRoma y al mismo Scola por susantecedentes, hizo volar la candi-datura Bergoglio, a la que adhirie-ron en seguidilla Scola, los caposde la Curia y el cardenal Ouellet.En la quinta y definitiva votación,el argentino superó los 90 votos,más que los 84 que obtuvo en2005 Joseph Ratzinger al ser con-

sagrado.Eligió ser llamado Francisco, se

negó a sentarse en el trono prepa-rado en la Sixtina para el nuevoPapa y a colocarse la “mozzetta”,el manto rojo con armiños. Sólola sotana blanca. En 48 horas, lospequeños gestos que mostraroncuanto se revolucionaba a la Igle-sia, se multiplicaron.Francisco, el argentino jesuita

franciscano de 76 años, que res-pira despacio porque desde los 21años perdió gran parte de un pul-món debido a una infección, estáen camino. “¡No cedamos al pesi-mismo!”, dijo en la Sala Clemen-tina del Palacio Apostólico a loscardenales, al despedirse de ellostras haberlos apostrofado en bro-ma cuando lo eligieron: “Que Diosles perdone lo que han hecho”.Pesimismo, amargura, des-

aliento son sentimientos que hanpredominado en estos últimostiempos en el Vaticano mientrasla crisis se agravaba y terminó pordescerrajar la renuncia del PapaRatzinger, primera dimisión en600 años, debilitado en sus fuer-zas por la edad y la sensación deque se le había escapado el controldel gobierno de la Iglesia.Francisco echó la culpa al demo-

nio de estos bajones de ánimo y re-clamó a “los hermanos cardenales”caminar dóciles hacia Cristo refor-

zando la unidad. Sabe que el suyopuede ser el pontificado que saquea la Iglesia de la crisis en que lo su-mergió el fracaso de la gestión deBenedicto XVI, que cometió mu-chos errores y que al final agravócon su impotencia problemas quese acumulaban desde la época deJuan Pablo II. Entre los vaticanis-tas circula un chiste sobre los 26años de reinado del Papa polacoque para muchos era una cons-tatación. “Viajó mucho, gobernópoco y no cambió nada”.Gobernar y cambiar, en cambio,

son ahora dos apremios para Fran-cisco. Aunque la Curia romana enel fondo es una cuestión secunda-ria para el programa de pontifica-do de un Papa franciscano, espiri-tualista, Jorge Bergoglio sabe queahora le toca atacar en el frenteinterno de la Iglesia.El tradicionalismo de Joseph Ra-

tzinger lo llevó a esgrimir el pro-grama de reevangelizar la Europadescristianizada, volver a conver-tirla en el motor del renacimientoreligioso desinflado por el secula-rismo, el relativismo, el laicismo,la “indiferencia hacia Dios”, de lassociedadesmodernas. Fue un granerror porque Europa, vieja y en de-cadencia, no es el motor del cris-tianismo. El centro de gravedad seva moviendo hacia el sur.Benedicto XVI consiguió con es-

ta visión colisionar con una buenaparte de los episcopados europeos,sobre todo por querer volver haciaatrás el reloj de la Iglesia del Con-cilio Vaticano II, ya castigado porla restauración de Juan Pablo II yel mismo Joseph Ratzinger.El regreso a la misa tradicional,

a los ritos seculares, fue un fra-caso, que llevó también al Papaalemán a la desastrosa iniciativade levantar en enero 2009 la ex-comunión fulminante de cuatroobispos cismáticos del grupo delfrancésMarcel Lefebvre, por habersido consagrados contra el Papa deRoma, Juan Pablo II.Esta decisión multiplicó sus

efectos negativos porque uno delos cuatro, el inglés RichardWillia-mson negó en televisión la exis-tencia de las cámaras de gas nazisy del exterminio de seis millonesde judíos por parte de Hitler y suscómplices.Los esfuerzos del Papa ultra-

conservador para arreglar ese líomayúsculo no han llevado a nada.Benedicto XVI renunció tras fra-casar las tratativas para un arreglo.Estos carbones ardientes caen aho-ra sobre el nuevo pontífice.El caso de los obispos cismáticos

perdonados por el mismo Papaque ha castigado a tantos teólogosy curas progresistas en sus épocasde intransigente perseguidor dela Teología de la Liberación co-mo guardián de la ortodoxia entiempos de Juan Pablo II, causóuna rebelión extendida en variosepiscopados europeos y hoy lasprotestas y los movimientos orga-nizados, como la “Iniciativa de lospárrocos” y la “Iglesia somos no-sotros”, están esperando que conel Papa Francisco las perspectivashayan cambiado radicalmente.En los últimos tiempos del pon-

tificado de Benedicto XVI, las lu-chas internas entre los grandes

personajes de la Curia Romana lle-garon a niveles escándalosos quese convirtieron en una premisa dela renuncia de Benedicto XVI.En el centro de la borrasca estu-

vieron el secretario de Estado, car-denal Tarcisio Bertone, colabora-dor de extrema confianza del Papa,que lo defendió a capa y espada, ysu antecesor en el cargo, el carde-nal Angelo Sodano, que luchó paramenoscabar su poder.Esos forcejeos llevaron al escán-

dalo “Vatileaks”, con la filtraciónde documentos ultrasecretos, unaparte de los cuales fueron robadosde los aposentos pontificios. Losescritorios del Papa y de su secre-tario Geor Gaenswein, se convir-tieron en coladores permanentes.El mayordomo personal de JosephRatzinger, Paolo “Paoletto” o “Ilcorvo” Gabriele, sustrajo centena-res de documentos y los filtró a laprensa.No fue el único, porque otros

documentos explosivos fueronusados en la batalla interna por elcontrol del IOR, el Instituto paralas Obras de Religión, el llamadobanco del Papa.Estos casos fueron en definitiva

sofocados por la decisión del Papade arrestar y procesar sí a “Pao-letto”, pero favorecer una conde-na ridícula a 15 meses de prisión,rápidamente condonada con lagracia.

Un documento de 300 páginasyace en la caja fuerte de los apo-sentos pontificios, a disposicióndel Papa argentino. La “Relatio-nem” fue escrita por tres viejoscardenales presididos por el juristaemérito Julián Herranz, del OpusDei, tras dialogar con decenas decardenales y altos prelados de laCuria. La relación fue entregada aBenedicto XVI en diciembre y enlas congregaciones preparatoriasmuchos cardenales pidieron serdirectamente informados.El cardenal Herranz respondió a

los curiosos pero dio detalles gene-rales porque “La Relationem” yaceblindada a la espera de un solo parde ojos que podrán desentrañarsus secretos: los del argentino Jor-ge Bergoglio, el nuevo pontífice.En los últimos días creció entre

los purpurados y la opinión públi-ca católica la idea de que la mejormedida que se puede tomar conlos dolores continuos que causael IOR, con sus cuentas corrientesentre las cuales habría mafiosos,recicladores y casos de corrupción,lo mejor es cerrarlo. Otra corrientesostiene que el IOR debe ser con-vertido por Francisco en una ban-ca ética para que los dineros de laIglesia tengan un destino en sin-tonía con el camino que proponeel nuevo Papa de ayudar a los quesufren. π

Recuperarlainiciativaantelosevangelistas

ELMAYORDESAFIO

LaeleccióndelnuevoPapaconsagraelpoderparadójicodeunrostro,deunnombreydeunavoz;deunaimagentransformadainstantáneamenteensímbolo.

Semejante cambio de estrategia no puede dejarde tener repercusiones importantes en las prio-ridades políticas de la Iglesia y el “suspenso” quese ha creado alimenta la curiosidad y la esperanzade los que esperan algo. En una época en la cuallos factores que determinan el futuro son tan múl-tiples y complejos que cada vez nos cuesta másimaginarlo, la elección del nuevo Papa consagra elpoder paradójico de un rostro, de un nombre y deuna voz –de una imagen transformada instantá-neamente en símbolo. El deseo y la ilusión siguenformando, como sugería Freud, una dupla insepa-rable. π

Traducción de Cristina Sardoy

Marc AugeAntropólogo francés

Hoy, sin la ayuda de los mediosno hay acontecimiento. Laelección del Papa constituye,desde ese punto de vista, unacontecimiento ejemplar. La te-levisión francesa, por ejemplo,nos mostró durante horas imá-genes del fervor de los hombresy mujeres que esperaban en la

Plaza San Pedro. Las imágenes son acompañadaspor comentarios que amplían su alcance. Pero lomismo podría decirse de todos los acontecimientossusceptibles, por distintas razones, de tener unarepercusión mundial: la reelección de Obama porejemplo, o la muerte de Chávez, por quien los me-dios occidentales mostraron interés recién a partirdel día en que se supo que estaba moribundo.

La elección de Francisco I provee un ejemplo delpoder de la imagen en el mundo actual. La idea deque constituye una sorpresa y quizás una “renova-ción” es alimentada, además, por las condicionesde la elección –consecuencia de una dimisión y noun deceso.

De todas maneras, es en sí misma un aconteci-miento importante que ilustra, en mi opinión, la vi-talidad sostenida de la Iglesia Católica. Apostemosa que Francisco I será un papa combativo, comoJuan Pablo II, pero en un contexto y con objetivosdistintos. Los escándalos que salpicaron a la Igle-sia en este último tiempo no son quizá lo esencialdesde ese punto de vista. Lo esencial es más bienuna recuperación de la iniciativa frente a la expan-sión de las iglesias evangélicas (activas sobre todoen América Latina) con sus armas: de un lado, elinterés por los pobres y los problemas sociales,del otro, la firmeza respecto de los problemas deconducta moral y de sociedad. Mi hipótesis es, porlo tanto, que como buen soldado de Cristo (así sedefinen los jesuitas), Francisco I desplazará la líneadel frente en la lucha en materia de influencia queopone el catolicismo a los evangélicos y, en segun-do lugar, a los musulmanes.

Bergoglioganóporsuestiloespartano,laespiritualidadausteray eldeseodepurificarlasestructurasinfectadas.

BenedictoXVIsevioobligadoarenunciarunavezqueentendióquenopodíallegaraunacuerdoconsusenemigos.

32| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

InvestigaciónGustavoSierra

[email protected]

Antecedentes y desafíos

P aolo “Il corvo” Ga-briele, el mayordomoy hombre de máximaconfianza de Benedic-to XVI, saluda a los

guardias suizos de la Vía di PortaAngellica y cruza para tomar lacalle del Borgo Pío. Camina sietecuadras a paso firme levantándoseel cuello de su impecable sobreto-do negro para cubrirse del frío deesta tarde de domingo de noviem-bre de 2011 en el antiquísimo ba-rrio que se formó en el Medioevoa los pies de las murallas del Vati-cano. Cuando divisó claramente elCastel Sant’Angelo y los corredo-res superiores por donde escapa-ron con sotanas arremangadas losPapas perseguidos por las luchasinternas durantemil años, ya esta-ba esperándolo en uno de los ban-cos de mármol Gianluigi Nuzzi,el periodista a quien le iba a en-tregar documentos e información

capaz de hacer saltar por los airessiglos de secretismo, nepotismo ycorrupción dentro del Vaticano.Il Corvo Gabriele dejó en ma-

nos de Nuzzi un sobre con variascartas personales del Papa y docu-mentos que prueban la corrupcióndentro de la Iglesia. Acordaronque nada saldría a la luz antes deNavidad. En unos segundos, Ga-briele ya había desaparecido entrela muchedumbre de peregrinos.Tuvo que esperar ansioso casi dosmeses para ver el estallido en laprensa. El 25 de enero, la cadenade televisión La7 puso en el aireel programa “Gli Intoccabili” (LosIntocables) en el que Nuzzi logrócontar con grandes detalles lo quemuchos sospechaban desde siem-pre. Como prueba mostró doscartas que le envió el arzobispoCarlo María Viganó, el segundoadministrador de la Curia romana,a Benedicto XVI en las que denun-cia graves casos de corrupción encontratos de obras y le ruega queno lo castigue con un traslado.Poco después, Viganó fue envia-do como nuncio a Washington,no se sabe si por castigo o comopremio.Las revelaciones comienzan a

extenderse. Il corvo hace circularmás secretos. El diario Il Fatto

Quotidiano saca documentos delos desfalcos dentro del Institutode Obras de Religión, el BancoVaticano. Poco después apareceun supuesto complot paramatar alPapa denunciado por un cardenalcolombiano y otro italiano. El jefede los servicios de Seguridad delVaticano envía pruebas de escu-chas y fugas a la justicia y el porta-voz del Papa, Federico Lombardi,denuncia que se está produciendo“una especie de WikiLeaks” paradesacreditar a la Iglesia. Estalla elVatileaks, el mayor escándalo quesacude a la Iglesia en siglos.En forma paralela, la Unión

Europea lanza una ofensiva paratransparentar de una vez por to-das las finanzas vaticanas. El IOR,que tiene sus oficinas en una de

LossecretosylaoposiciónquedeberáenfrentarEn un proceso de pocomás de un añosalieron a la luz las luchas de poderdentro de losmuros de la Curiaromana, la corrupción en el bancovaticano y el encubrimiento de loscuras pedófilos.

las torres a los pies del PalacioPontificio, fue creado en 1942para funcionar como una simplecaja de ahorros para los sacerdo-tes y empleados de la Iglesia. Perodesde entonces se sospecha que esla banca que mejor lava dinero enel mundo, particularmente el de lamafia italiana. Durante décadas selo utilizó para transferir dinero a“lugares difíciles” como la UniónSoviética, Cuba o China. Pero aho-ra es una grieta por la que escapanmillones de euros que no puedenatravesar el sistema bancario euro-peo tradicional. La única concesiónque hacen los cardenales italianosque controlan la Curia y los movi-mientos de Benedicto XVI es dar aconocer que a principios de 2011 elbanco tenía 20.772 clientes, de loscuales el 68% pertenecían al cleroy que mantenían 8.200 millonesde euros en depósitos. Pero lascifras eran engañosas. Otro infor-me anterior hablaba de al menos33.000 cuentas. El escándalo seagrandaba.En febrero, Il corvo Gabriele da

un paso más allá. Acepta una en-trevista televisiva con el periodistaNuzzi. Aparece todo tapado y selo denomina como “la fuente Ma-ría”. Se desata la guerra interna.Aparece un intercambio de cartas

en duros tonos entre el secretariode Estado, Tarcisio Bertone, y suarchienemigo, el poderoso carde-nal de Milán, Dionigi Tettamanzi.Bertone es el secretario de Estado,jefe de gobierno de la Santa Sede,y muy cuestionado desde que seconvirtió en uno de los colabora-dores más cercanos del entoncescardenal Ratzinger en la Congre-gación para la Doctrina de la Fe.La puntada final la da el periodis-

ta Nuzzi que publica el libro “SuaSantita” en el que se desvelan lasintrigas contra el Papa y su secre-tario personal George Ganswein.Se habla de intentos de asesina-to, cobro de coimas para otorgaraudiencias y, por sobre todo, unatrama para tapar de cualquier ma-nera los casos de pedofilia en los

Seproduceunacataratadenombresde sacerdotesyfuncionariosvaticanosqueprotegenalospederastas.

Paolo“Ilcorvo”Gabriele,elmayordomodeconfianzadelPapaentregadecenasdedocumentossecretosalosperiodistas.

|33DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

que se ven envueltos sacerdotes yobispos en todo el mundo.Otros diarios menos cercanos a

la Curia y otros directamente an-ticlericales comienzan a dar datosmás concretos. En elmismo barriodel Borgo hay salones donde atien-den “taxiboys” y a los que concu-rren sacerdotes y funcionariosvaticanos. Se habla también de laresidencia privada de un obispo. Yde un túnel que pasa por abajo delrío Tíber por donde se llega a otrascasas non sanctas en el barrio delTrastevere.El Papa apunta una comisión

de tres arzobispos para que in-vestigue. Pero Bertone y AngeloSodano, el jefe del Colegio Car-denalicio, los hombres fuertes dela ortodoxia saben que eso es sólopara perder el tiempo. Ya se ente-raron de quién es el Topo que estápasando la información. Mandande inmediato a la policía al depar-tamento de Il corvo Gabriele, allado de los aposentos del Papa, yle encuentran centenares de do-cumentos secretos y dos extrañoselementos que lo mandan direc-tamente a la cárcel: un chequede 100.000 euros donados por laUniversidad de Murcia al Papa yuna pepita de oro peruano. Al díasiguiente, cae Claudio Sciarpellet-

ti, un experto en informática quetrabaja en los archivos vaticanos.Pero no hay pruebas suficientesde la entrega de los documentos ala prensa. Il corvo Gabriele pasa aarresto domiciliario. El informáti-co queda libre. Benedicto XVI diceque todo se trata de “exageracio-nes” y “rumores maliciosos”.El juez vaticano Piero Bonnet

acusa a Il corvo de robo agravadoque tiene una pena de ocho añosen una prisión común italiana.El juicio eclesiástico con mayorcobertura mediática de la historiatermina en una sentencia muy be-nigna para el hombre que lanzó elVatileaks: Il Corvo recibió apenas18 meses de prisión y una multa.Y no va a ninguna cárcel. Terminaen un arresto domiciliario dentro

del propio Vaticano. Los rumoresson de que se trata, simplemente,de un servicio más que le pidió elPapa. Hablan de que se trata deun plan muy bien diseñado porBenedicto XVI y que Il corvo Ga-briele fue apenas un peón de esteajedrez. Antes de la Navidad vinolo que ya muchos predecían, el in-dulto papal. Benedicto y Gabrielejuntos en una pequeña sala. Unopide perdón. El otro, lo otorga.En el Banco Vaticano las cosas

no resultan tan simples. El históri-co presidente del IOR, Ettore GottiTedeschi, envuelto en un escánda-lo por el lavado de 30 millones deeuros, es acusado de incompeten-cia desde adentro del Vaticano ytiene que renunciar. Antes de finde año, Benedicto nombra en sulugar a un aristócrata alemán desu máxima confianza, Ernst vonFreyberg. Y aparece a su lado elabogado suizo René Bruelhart, fa-moso por haber sacado a la bancadel protectorado de Liechtensteinde la lista negra de los lavadores dedivisas. Benedicto les quita a Ber-tone y Sodano todo el poder sobreel dinero vaticano.La poderosa Congregación para

la Doctrina de la Fe lanza la últi-ma bomba. Da a conocer un do-cumento en el que señala que en

los últimos diez años se recibieronoficialmente unos 4.000 casos deabusos sexuales realizados por sa-cerdotes y obispos en algún lugardel mundo. El prefecto de la con-gregación, William Levada, envíaun mensaje al Papa en el que ledice que proteger a las víctimas dela pederastia “debe ser una priori-dad de la Iglesia” y que ésta “debetener una limpieza y renovación atodos los niveles”. Una organiza-ción de esas víctimas en EstadosUnidos da a conocer una lista detodos los obispos y cardenales queincurrieron en actos graves o pro-tegieron a los agresores. Señalanpor sobre todo al arzobispo de Bos-ton, Bernard Law, a quien acusande haber protegido al menos a 150sacerdotes que abusaron de niños

en las escuelas de la ciudad estado-unidense conmayor población ca-tólica. El escándalo de la pedofiliaya no es posible ocultarlo.La última carta y la más pode-

rosa la tenía Benedicto XVI bajola manga ancha de su vestimentapapal. El 11 de febrero y ante dece-nas de cardenales les dijo en latin:“tras examinar repetidamente miconciencia ante Dios, he llegadoa la certidumbre de quemi forta-leza, debido a la avanzada edad,no es adecuada para el ejerciciodel ministerio”. Se convirtió en elprimer Papa en renunciar en 600años. Nadie lo veía tan abatido. Encambio, a partir de ese momentose lo vio aliviado.El 26 de febrero, Benedicto re-

cibe a los tres cardenales que in-vestigaron el Vatileaks, el españolJulián Herranz, el italiano Salva-tore De Giorgi y el eslovaco JozefTomko. Les pidió que entregaranel informe al nuevo Papa. Dos díasmás tarde se subió a un helicópte-ro. Il corvo Gabriele saludaba conlágrimas en los ojos desde el hos-pital del Vaticano donde ahora tra-baja. La nave avanzaba hacia la casade descanso de Castel Gandolfo so-bre una luz dorada. Hacia muchoque el cielo de Roma no aparecíatan limpio. π

Vatileaks. Francisco junto al secretario de Estado Tarcisio Bertone. Abajo, PaoloGabriele, el mayordomo de máxima confianza del Papa fue quien supuestamente robó yluego pasó los documentos secretos sobre la corrupción a un periodista italiano. El PapaBenedicto lo perdonó en diciembre de 2012.

LaUniónEuropeapresionaparaqueelbancodelVaticanotransparenteelorigendelascuentassospechadasdeserdelamafiaitaliana.

LapoderosaCongregaciónparalaDoctrinadelaFeseñalaqueenlosúltimosdiezañossedenunciaron4.000casosdeabusos.

34| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

Los sucesores de Pedro

Alfredo [email protected] Lospontificados

másinfluyentesDesde los años del apóstol San Pedro hasta el siglo XXI, unrecorrido por los principales líderes que tuvo la Iglesia Católicaa lo largo de susmás de 2.000 años de historia.

L a historia de la Igle-sia ha sido marcadapor la impronta de los266 papas que la handirigido en sus 2000

años de historia. De ellos, sólo 12no fueron europeos (8 de OrienteMedio, 3 de Africa y, ahora, Fran-cisco de Argentina). Aquí, un re-paso por algunos de los papasmásimportantes de la historia.

1. Pedro, deBetsaida, Galilea(Muereenelaño64o67)Fue uno de los 12 apóstoles y elprimer Papa, instituido por Jesúscuando le dice “Tú eres Pedro,y sobre esta piedra edificaré miIglesia” (Mateo 16:18). En su pri-mer encuentro, Cristo le habíacambiado su nombre (Simón)por “Pedro”, que se traduce como“piedra”. Pedro instituyó el primerorden eclesiástico y la oración delPadre Nuestro, que Jesús les habíaenseñado a sus discípulos. Murióen Roma, perseguido por Nerón.Fue crucificado con la cabeza haciaabajo: no se sentía digno de morirdel mismomodo que suMaestro.

2.Melquíades, deAfrica(311-314)Aunque los historiadores no con-

servan datos precisos de su lugarde origen, la tradición asegura quenació en el norte de Africa. Duran-te su papado, en el año 313, el em-perador Constantino proclamó elEdicto de Milán, que establecía lalibertad de religión en el Imperioromano y dio fin a las persecucio-nes de los cristianos. Unos añosmás tarde, el Edicto de Tesalóni-ca (380) de Teodosio hizo que elcristianismo se convirtiera en lareligión oficial del Imperio.

3. León IMagno, deToscana(440-461)Fue el primer Papa apodado “elGrande”. Durante su pontificadose celebró, en 451, el Concilio deCalcedonia, que definió el dogmade la divinidad y la humanidad deCristo (“consustancial al Padre porsu divinidad, consustancial a noso-tros por su humanidad”). Mantuvola unidad de la Iglesia combatien-do tendencias consideradas heréti-cas, como el maniqueísmo, el pe-

lagianismo y el priscilianismo. En452, protagoniza un hecho crucial:se reúne en Mantua con Atila, reyde los hunos, que había invadidoel Norte de Italia, y lo convence deque no avance sobre Roma.

4.Gregorio IMagno, deRoma(590-604)Con un perfil místico, fue el pri-mer monje en llegar al papado.Tuvo un rol determinante en laconsolidación de la posición me-

dieval que entendió al papado co-mo un poder separado del Imperioromano. Por su labor en favor delfortalecimiento de la sede roma-na, es uno de los cuatro “Padresde la Iglesia” latina junto con sanJerónimo, san Agustín de Hiponay san Ambrosio. Es célebre por ha-ber instituido el canto gregoriano.

5.Nicolás I elMagno, deRoma(858-867)Recibió el apelativo de “el Grande”porque, enmedio de una profundacrisis del reino carolingio, fue unfirme defensor de la doctrina quesostenía que el poder espiritual deRoma estaba por encima de cual-quier otro poder, incluido el civilrepresentado por el emperador.Durante su papado hubo gravesconflictos con la Iglesia Oriental(cuya sede estaba en Constanti-nopla), que derivaron en el Cismade 1054, por el cual la Iglesia deOriente se separó definitivamentede la de Occidente.

6.GregorioVII, deSovana(1073-1085)En plena Edad Media, época depermanentes conflictos entre elpoder imperial y el poder eclesiás-tico, San Gregorio VII fue autordelDictatus Papae, un documentoque establecía que el Papa “es elseñor absoluto de la Iglesia” y “el

SanPedroSimóndeBetsaidaFueunodelosdoceapóstolesyelprimerPapadelaIglesia,nombradoporJesús:“SobreestapiedraedificarémiIglesia”.

AlejandroVIRodrigodeBorjaEspañol,pertenecióalacélebredinastíadelosBorgia.PormediodeunabuladividiólosterritoriosdelNuevoMundoen1493.

InocencioIIILotariodeContiLuegodeunsueñopremonitorio,fueelpontíficequeautorizóaFranciscodeAsísacrearlaordendelosfranciscanos.

|35DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

señor supremo del mundo” (porencima del propio emperador). Seenfrentó con el emperador Enri-que IV en la denominada “Quere-lla de las Investiduras”, una dispu-ta en torno a quién –el emperadoro el Papa– tenía la autoridad paranombrar los obispos de la Iglesia.

7. Inocencio III, deAnagni(1198-1216)Fue el Papa que autorizó a Fran-cisco de Asís a crear la orden delos franciscanos en 1209, así comola orden de las hermanas clarisas.También apoyó a Santo Domingode Guzmán en la fundación de laorden de los dominicos. Durantesu pontificado impulsó tres cruza-das, entre ellas la famosa Cruzadaalbigense (contra los cátaros) y laCruzada de los niños.

8.AlejandroVI, deEspaña(1492-1503)Pertenecía a la famosa dinastía delos Borgia y accedió al pontificadogracias a su tío, Calixto III, en unaépoca en que el nepotismo eramo-neda corriente en Roma. Durantesu papado, los Reyes Católicos,Fernando II e Isabel I, emitieronel Edicto de Granada, que expulsóa todos los judíos de la penínsulaibérica. Tuvo un rol fundamentalen el reparto de las tierras del Nue-vo Mundo entre Castilla y Portu-

promovió la creación de la LigaSanta (constituida por España,Venecia y los Estados Pontificios)para combatir a los turcos, ymuriópoco después de la célebre batallade Lepanto, en la que los cristianosderrotaron a los otomanos.

11. Pío IX, deSenigalia(1846-1878)Durante su pontificado –el máslargo de la historia, con 31 años–,los Estados Pontificios dejaron deser un estado independiente, cuan-do el ejército del rey VíctorManuelII avanzó sobre Roma y la convir-tió en la capital de la Italia unifi-cada. En 1869 convocó el ConcilioVaticano I, para combatir el avancedel racionalismo. Allí se consagrócomo dogma la infalibilidad delPapa. Además, proclamó el dog-ma de la Inmaculada Concepción.Una curiosidad: visitó BuenosAires y mantuvo correspondenciacon José de SanMartín.

12. LeónXIII, deCarpineto(1878-1903)Es el padre de la Doctrina Social dela Iglesia, a partir de la publicaciónde la encíclica Rerum novarum en1891. Ese documento sistematizalas posiciones de la Iglesia frenteal problema obrero tras la Revolu-ción Industrial. Allí critica tanto alcapitalismo como al comunismo,

denuncia la opresión de los pobresy defiende la necesidad de un sala-rio justo y el derecho de los traba-jadores a organizarse. Además, de-finió el trabajo como “realizacióndel hombre” y afirmó el derecho ala propiedad, aunque subordinadoal bien común.

13. JuanXXIII, deLombardía(1958-1963)Conocido como “el Papa bueno”,pasó a la historia por haber con-vocado en 1962 el Concilio Vati-cano II, que introdujo profundasreformas en la Iglesia y terminótres años después, durante el pon-tificado de Paulo VI. Al explicarlos motivos del nuevo Concilio,Juan XXIII explicó: “Quiero abrirlas ventanas de la Iglesia para quepodamos ver hacia afuera y los fie-les puedan ver hacia el interior”.Entre otros cambios, se modificóel ritual de la misa –que hasta esemomento era en latín– por prime-ra vez desde el siglo VII. Tambiénse procuró un mayor acercamien-to al mundo contemporáneo y unnuevo ecumenismo.

14. PauloVI, deConcesio(1963-1978)Fue el encargado de aplicar elConcilio Vaticano II y modernizara la Iglesia. En plena Guerra Fría,tanto él como Juan XXIII fueron

defensores del rol de la ONU co-mo garante de la paz mundial ylos derechos humanos. La unidadde los cristianos y el diálogo con elmundo también fueron sus priori-dades. Entre otras reformas, esta-bleció que sólo los cardenales me-nores de 80 años podían participaren los cónclaves para la eleccióndel Papa. La nueva misa, estable-cida durante su papado, introdujola música pop y folk en reemplazode los cantos gregorianos.

15. JuanPablo II, dePolonia(1978-2005)Tal vez el Papa más mediático ycarismático de la historia reciente,además de ser el primer pontíficeno italiano desde el Renacimiento.Un sello de su papado fueron loscontinuos viajes, con los que llegóa 129 países. Tuvo un rol determi-nante en la caída del comunismoen su Polonia natal, y combatió laTeología de la Liberación en Amé-rica Latina.Trabajó para mejorar las relacio-nes de la Iglesia con el islam, eljudaísmo y la Iglesia Ortodoxa. En1978, sumediación entre Argenti-na y Chile por el conflicto del Bea-gle fue fundamental para evitar laguerra. Luego visitó nuestro paísen 1982 y 1987. Fue beatificadopor su sucesor, Benedicto XVI, el1° de mayo de 2011. π

gal: en las Bulas Alejandrinas de1493, que son previas al Tratado deTordesillas (1494), se fija el meri-diano divisorio de las zonas de in-fluencia española y portuguesa.

9.Pablo III, deToscana(1534-1549)Su papado comienza con el CismaAnglicano, cuando el rey EnriqueVIII se autoproclamó “Cabeza Su-prema de la Iglesia de Inglaterra”luego de que el Papa anterior, Cle-mente VII, no le permitiera anu-lar sumatrimonio con Catalina deAragón para casarse con Ana Bo-lena. En 1540 aprobó la fundaciónde la Compañía de Jesús, a la quepertenece el actual papa Francisco.Dos años después, en 1542, fun-dó la Inquisición Romana, creadapara perseguir el protestantismoy examinar y proscribir los libros“desviados”.

10. PíoV, deBosco(1566-1572)Fue el Papa que promovió laaplicación del Concilio de Trento(1545-1563), convocado como res-puesta a la Reforma Protestante.Estableció la misa romana comoceremonia de toda la Iglesia, uni-formando los distintos ritos queexistían hasta ese momento: eseritual recién sería modificado en1970. En tiempos de Cruzadas,

PíoIXGiovanniMariaFerrettiSupontificadofueelmáslargodelahistoria.ConvocóalConcilioVaticanoIyseescribióconJosédeSanMartín.

JuanPabloIIKarolJozefWojtylaUnodelosmáscarismáticosdelahistoriareciente.Fueelmásviajero:durantesupapadorecorrió129países.

JuanXXIIIAngeloGiuseppeRoncalliEl“Papabueno”fueelresponsabledeconvocaralConcilioVaticanoII,querenovóelcatolicismocomonuncaantes.

36| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

3

1

2

1.FranciscodeAsís

2.FranciscoJavier

3.FranciscoSolano

Francisco,unnombreconhistoriaenlaIglesiaEl santo de Asís es emblema depobreza, sencillez y austeridad: unhombre que promovió la renovacióndel catolicismo desde adentro.

C uando se conoció elnombre que habíaelegido el nuevo Pa-pa, todas las miradasapuntaron hacia un

mismo referente histórico: SanFrancisco de Asís, conocido co-mo “el santo de los pobres” porlos católicos. Y el día sábado 16, loconfirmó él mismo, cuando reci-bió a los periodistas. Contó que elarzobispo de San Pablo lo besó enel cónclave, lo besó y le dijo “no teolvides de los pobres”, mientras elescrutinio continuaba. Y entoncespensó en San Francisco de Asís,y al emularlo, frente a la prensa,como un suspiro, dijo que quería“una Iglesia pobre y para los po-bres” para explicar por qué eligióel nombre del San Francisco deAsís. Pero, ¿quién fue Francisco,el santo patrono de Italia?Giovanni di Bernardone, tal es

su verdadero nombre, nació hacialos años 1181 o 1182 en la localidadde Asís, en Italia. Eran los tiemposde las Cruzadas y el feudalismo,con la nobleza y el clero en la ci-ma de la pirámide social. Tambiéneran años de conflictos políticos yterritoriales entre el Papado y el Sa-

Ricardo Braginskiy Alfredo Dillon

cro Imperio Romano Germánico.Su padre era un rico comerciante

de telas. Cuenta la historia que, dejoven, Giovanni solía acompañarloa las ferias comerciales de Francia.Y que el cariño que tenía por esastierras hizo que el padre lo apodaraFrancesco o “el francesito”.Aunque nació en la riqueza,

Francisco terminó viviendo bajo lamás estricta pobreza. Todo cambióuna noche de 1205, cuando el jo-ven de Asís marchaba al campo debatalla para pelear en el ejército delPapa contra los germanos. En Es-poleto, Francisco tuvo un sueño enel que una voz que le pedía que vol-viese a su ciudad. Inmediatamenteobedeció y ya no volvió a ser el queera: a partir de entonces abrazó lapobreza por amor a Dios. Abando-nó los lujos y los negocios de supadre, y renunció a su herencia.Entonces se fue a convivir con

los leprosos, y las aguas se divi-dieron: muchos lo admiraron porsu decisión, otros aseguraban quese había vuelto loco. Con quienesse animaron a seguirlo, Franciscofundó laOrden Franciscana, cuyosmiembros se denominaban a símismos “losHermanosMenores”.Al principio se dedicaron a la re-construcción de iglesias en ruinas,luego de que Jesús –en sueños– le

pidiera: “Ve, Francisco, y reparamiIglesia en ruinas”. Por esos años, elsanto ya empezaba a ser conocidocomo “el pobrecito de Asís”. Mástarde fundaría, con Santa Clara, laorden de las Hermanas Clarisas,también caracterizadas por su votode pobreza y austeridad.Las órdenes fueron aprobadas

por el Papa Inocencio III quien,según la tradición, había visto ensueños a la basílica de Letrán apunto de derrumbarse, sostenidapor un hombrecito pobre de pe-queña estatura. En el sueño, unavoz le había anunciado a Inocen-cio: “Este es, en verdad, el hombreque con sus obras y su doctrinasostendrá a la Iglesia de Cristo”.Para el Papa emérito BenedictoXVI, en ese sueño se cifra la im-pronta transformadora de Francis-co: “Es interesante observar que noes el Papa quien ayuda para que la

iglesia no se derrumbe, sino un pe-

queño e insignificante religioso, que

el Papa reconoce en Francisco cuan-

do este lo visita. (...) Pero, por otra

parte, es importante observar que san

Francisco no renueva la Iglesia sin el

Papa o en contra de él, sino sólo en

comunión con él. En la unidad crece

la verdadera renovación”.En una época marcada por las

Cruzadas y los viajes a Oriente,Francisco hizo el intento de ir aSiria para expandir el Evangelio enla tierra de los “infieles”, y hasta seentrevistó con el sultán de Egipto.

ParaBenedictoXVI,FranciscodeAsís“norenuevalaIglesiasinelPapaoencontradeél,sinosóloencomuniónconél”.

Su receta para transmitir el cristia-nismo quedó plasmada en una fra-se que le atribuyen sus biógrafos:“Prediquen siempre el Evangelio.Si es necesario, usen palabras”. Esque, para Francisco, las accionesvalían más que los discursos.Los relatos sostienen que, en

sus últimos años, Francisco expe-rimentó los estigmas de Jesús ensus manos, sus pies y su costado,luego de tener una visión divina enel monte Alvernia. Poco despuésmurió, el 3 de octubre de 1226.

Los otros FranciscosAntes de la confirmación del

propio papa de que su nombre eraen honor a San Francisco de Asís,se había especulado que podía ha-berse inspirado en San FranciscoJavier, quien en 1540 junto a Igna-cio de Loyola y otros fundó laCom-pañía de Jesús.Otro Francisco con un vínculo

estrecho con América del Sur fueSan Francisco Solano, un misio-nero español que vivió en Limaen el siglo XVI. Desde allí predicóel Evangelio en el actual territoriosudamericano: llegó hasta Córdo-ba y el Río de la Plata.Un dato cu-rioso: el padre de Jorge Bergogliose llamabaMario José Francisco.¿Pura casualidad? π

Nacidoenunafamiliaacomodada,abandonólosprivilegiosparaabrazarlapobrezayvivirconlosleprosos.

JuntoconIgnaciodeLoyola,fundóenelaño1540laCompañíadeJesús,alaqueperteneceelactualPapa.

Misionerofranciscanoconformaciónjesuita,recorrióAméricadelSurparaevangelizaralcontinente.

|37DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

Un santo representado en filmes y obras

EldíaenqueBergogliofuealteatroporAsísPresenció la obra “El loco de Asís” y laapoyó enmedio de insinuaciones decensura. El santo de los pobres es unpersonaje recordado por el cineinternacional y representado en lassalas argentinas.

Que JorgeMarioBergo-glio haya sido espec-tador del musical “Elloco de Asís”, suponesu predilección por

esa figura y –ahora podríamos de-cirlo– un anticipo de la elección delnombre. Era a San Francisco (1182-1226) al que apodaban “el loco”.Manuel González Gil fue el autordel libro y Martín Bianchedi, dela música, de esa comedia que seestrenó en 1984, recorrió infinidadde escenarios argentinos e interna-cionales, y ganó varios premios.En 1993 se representó en el tea-

tro Cervantes, con un elenco en elque se encontraban, entremuchosotros, Germán Palacios, LauraOliva y Mariana Torres. Pero parapermanecer en cartel tantos años,debió sortear obstáculos: “Fue unaobra muy polémica”, dice Gonzá-lez Gil y cuenta que un sector de laIglesia la quiso prohibir. “Recuer-do que en una oportunidad vinoel cardenal Bergoglio a verla y nosdejó sus mejores deseos por nues-tra continuidad con el espectáculo.Obviamente, su visita toma ahora ladimensión de la felicidad que em-barga a todos los argentinos ante el

María Ana RagoESPECIAL PARA CLARIN.

papa Francisco y refleja, ya desdeentonces, un sentimiento muy es-pecial hacia el inmenso FranciscoBernardone (el Loco de Asís)”, ex-presa González Gil.A través del tiempo y en distin-

tas geografías, muchas otras obrasteatrales han hablado de San Fran-cisco de Asís y demostrado así suenorme vigencia. Hasta el escritorportugués y Premio Nobel de Lite-ratura, José Saramago (fallecido en2010), ateo confeso, se ha ocupadode él en “La segunda vida de Fran-cisco de Asís”, libro que, escrito en1987 y después de ser representadoen España y Portugal, se estrenó enItalia, en 2001. En el título, el autoromite el “san”, porque pretende ha-cer hincapié en la humanidad delprotagonista.En ese texto, Saramago imagina

que Francisco regresa por segundavez a la vida y encuentra una Igle-siamuy diferente de la que él habíadejado; y aunque querría volver ala pureza de los orígenes, comolos tiempos han cambiado, se veobligado a tomar conciencia de laimposibilidad de volver atrás.Distintas motivaciones han teni-

do los autores al escribir sobre estesanto de la pobreza. Su figura ha si-do siempre inspiradora para contarsu vida, para dejar una enseñanza,

En un musical. El cantante Antonello Angiolillo en una escena del musical sobre la vida de San Francisco de Asís, representada en Italia/AFP.

para establecer analogías, tanto demodo tradicional como innovador.Así es como hay piezas biográficasy obras que toman a san Franciscopara, a partir de él, hacer una críticaa la sociedad contemporánea, como“El amor no es amado”, una piezateatral musical creada y dirigida porLuis Carlos Vásquez en Costa Rica,estrenada hace un par de años.La vida de San Francisco de Asís

también ha sido contada por el cine,en su mayoría, largometrajes italia-nos. Todo aquel que haya estudia-do en un colegio religioso ha visto“Hermano sol, hermana luna”, enalguna clase de catecismo. “Herma-no sol, hermana luna” es el títuloen castellano de la película biográ-fica dirigida por Franco Zeffirelli en1972.El flamante Papa saludó diciendo,

precisamente: “Fratelli e sorelle”, yera San Francisco de Asís el quedesignaba a todos y a todo con elnombre de “hermanos”. El santo deAsís se despojó de sus riquezas y seconsagró a Dios.La película deZeffirelli versa sobre

esa conversión de Francisco y sobresu amistad con Santa Clara de Asís.La lista es extensa. En 1911 se filmó

“Il poverello de Assisi”, una películamuda dirigida por EnricoGuazzoni.En 1918 “Frate Sole” de Ugo Falenay Mario Corsi, también un filmemudo; en el 27, “Frate Francesco”,de Giulio Cesare Antamoro. En el44, en México, se estrenó “Francis-co deAsís”, dirigida porAlbertGout.“Francisco, juglar de Dios”, dirigidapor Roberto Rossellini, es de 1950.En 1961, Michael Curtiz dirigió elfilme norteamericano “Franciscode Asís”. En 1989, Mickey Rourkeprotagonizó la película dirigida porLiliana Cavani “Francesco” (en el 66Cavani había dirigido otra películasobre san Francisco). En 2002 seemitió en Italia la miniserie “Fran-cesco”, deMichele Soavi. Y en 2007se estrenó el filme “Chiara e Fran-cesco”, de Fabrizio Costa.Bergoglio es un admirador de

Borges. Y Borges escribió: “Si (co-mo afirma el griego en el Cratilo)/elnombre es arquetipo de la cosa/enlas letras de ‘rosa’ está la rosa/y todoelNilo en la palabra‘Nilo’”. Francisco,entonces, no es sólo un nombre. w

El“otro”Franciscotendrásufilme

Hubo otro Francisco en quienJorge Bergoglio puede haberpensado: San Francisco Ja-vier, jesuita como Bergoglio,evangelizador de la India ypastor incansable, según loslibros que lo evocan.Hace unos pocos años, el pe-riodista, escritor y guionistacolombianoGonzalo Robledoanunció que preparaba unapelícula sobre San FranciscoJavier en Japón. Y es proba-ble que el proyecto renazca.Cuentan que Francisco Javierllamó a sus colegas en Parísy les dijo: “Mientras ustedesdiscuten teología, yo tengo elbrazo cansado de bautizar”.

38| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

LEONARDOBOFF

Análisis y opiniones

E l precipitado verbo delbrasileño LeonardoBoff dispara ref lexio-nes apasionadas, unatras otra. Sus concep-

tos fusionan filosofía, política ymucho sentido crítico. Sólo muydebajo de ellos surgen viejos ba-samentos teológicos de su pasadavida como fraile franciscano. Conun entusiasmo poco frecuenterescata la figura de Jorge Bergo-glio como un “pastor” capaz deentender la vida cotidiana de loshombres, especialmente de losdesamparados. Cree, con un op-timismo cuestionador, que es lafigura del cambio, del quiebrede las corrompidas estructurasvaticanas. No es un pensador deelogio fácil. Por el contrario, suspalabras filosas le trajeron seriosproblemas. Este intelectual es, so-bre todo, un exponente de la Teo-logía de la Liberación, esa doctrinacristiana que supo luchar contra laopresión social de dictaduras y go-biernos neoliberales. Sus críticasle generaron grandes enemistadesen la Curia: las presiones de variosjerarcas, principalmente Benedic-to XVI que lo condenó a “silencio”,lo llevaron a dejar los hábitos sa-cerdotales en 1992. Lomás intere-sante es que habla sin tapujos, sinel cristal opaco de la moderación.Es brutalmente frontal. Para él,los otros Papas fueron cómplicesde dictadores y el Vaticano es unnido de “mafiosos”, del cual Ber-goglio, al que considera más cer-cano a la línea de la Teología de laLiberación, debe cuidarse.¿Qué significado le encuentra a

la elección de Jorge Bergoglio co-mo Papa?En primer lugar el Papa viene

del tercer mundo. Del gran sur,donde están los pobres de la hu-manidad donde vive el 60 % detodos los católicos. Ese es un he-cho notable porque rompe con lahegemonía, diría casi la domina-ción, que han tenido Europa e Ita-lia sobre la Iglesia. En Europa sólovive el 24 % de los cristianos, sinfuturo ninguno, en crisis con sucivilización. Entonces el hecho deque venga alguien de afuera consangre nueva, con otra perspecti-va, con una lectura diferente de larealidad, es un hecho altamentepositivo.Segundo, la elección del nom-

bre. Francisco no es sólo un nom-bre, es un proyecto de Iglesia. Esuna Iglesia pobre, evangélica. Elmismo ha dicho en su primeraaparición que quiere dirigir laIglesia en la caridad, porque esaes la misión. Antes, los Papaseran una monarquía absolutista,la dirigían como algo jurídico.Aquí no, es en la caridad, forti-ficando la fe de los cristianos. YFrancisco, como el hermano uni-versal, es alguien que tiene unarelación nueva con la tierra, la na-turaleza. Porque ese es un temafundamental. El problema másgrande no está en la Iglesia, sinoen la supervivencia de la civiliza-ción, de la vida, de la vitalidad dela tierra, que se ve terriblemente

Daniel [email protected]

“ConBergogliohabráuncambiosignificativo”El teólogo y filósofo brasileño, exponente de la Teología de laLiberación, ve al nuevo Papa como un pastor comprometidocon la realidad y los pobres, que impulsará el debate internoen la Curia sobre temas tabú como el celibato. Y consideraque tendrá una fuerte influencia política en Latinoamérica.

amenazada. Entonces, ¿qué diceel nombre de Francisco? Es unaconsigna, que quiere otro tipo deIglesia que no sea la del poder.Una iglesia del evangelio pobre,junto al pueblo.En tercer lugar, yo creo que hubo

un hecho altamente significativo:él no apareció con la vestimentatípica del Papa, especialmente conla mosseta, esa pequeña capa quetraen sobre los hombros, toda do-rada, que solamente los emperado-res traían, y que el papa BenedictoXVI cambiaba siempre tomandocomo símbolo e inspiración de lospapas renacentistas. Bergoglio vi-no sin nada, solamente de blanco,con la cruz de plata de obispo, nola de oro del Papa. Se presentócon una gran sencillez, no hizoun espectáculo con la figura delPapa. Al contrario, se dejó mirar,se dejó ver tranquilo, sereno, so-brio, yo diría casi asustado.¿Los ve como signos que marcan

un cambio?Yo creo que son signos funda-

mentales, que tienen que ver conel Concilio Vaticano II, que ponecomo centro de la Iglesia al pue-blo de Dios y después recién lasjerarquías. Bergoglio pidió que elpueblo rezara por él y que lo ben-dijera, para luego él bendecir al

|39DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

como una instancia de consulta.La Iglesia es continental, con susconferencias nacionales, y porlo tanto tiene que elegir distin-tos caminos. Es de una maneraen Africa y de otra en Asia o enAmérica Latina. Entonces no hayque ‘romanizar’ todo, no hay quehomogeneizar. Cada cultura lo-cal crea su liturgia, su teología, suforma de ser Iglesia. Y yo creo eneste tema él va a plantear la dis-cusión.Se lo escuchamuy optimista.Creo que este Papa va a descu-

brir el tercer milenio. El tercer mi-lenio es de la humanidad reunidaen el único lugar que tenemos,un planeta amenazado. Con lasmáquinas de muerte que hemosconstruido, las armas nucleares,químicas y biológicas. Con ellaspodemos destruir todo de 25 for-mas diferentes. Yo se lo dije per-sonalmente a Mijail Gorbachov–último presidente de la UniónSoviética–. Para mí Bergoglio vaa descubrir una Iglesia que tieneque ser planetaria, no una Iglesiasolamente occidental. Porque si nose cuida en ese aspecto, la Iglesiase va a convertir en una secta. Yocreo que él está muy atento a esto.Por eso eligió ser San Francisco.Por un lado es Asís, la Iglesia delos pobres; por el otro es FranciscoJavier, el misionero que fue has-ta china, donde organizó toda laliturgia al estilo de la china anti-gua, venerando a sus ancianos.Ambos fueron condenados porel poder, por supuesto, pero hanhecho una encarnación fenome-nal del cristianismo. El manejalos dos Franciscos, el franciscanoy el jesuita. Bergoglio es un jesuitamuy puro.¿Considera que los sectores que

detentan el poder en el Vaticano lepermitirán avanzar con estos cam-bios?No, no lo creo. Por eso él tiene

que descentralizar. No hay porqué mantener el Vicariato de lasReligiones en Roma, hay que me-terlo en Saigón, en Hong Kong,en China. El Vicariato de Justiciay Derechos humanos hay quellevarlo a America latina; el deMisiones a Africa; el de Diálogocon las Iglesias a Ginebra. Hayque descentralizar, hay que vaciarRoma porque son mil años de co-rrupción, porque ahí hay una ma-fia. Como lo que le ocurrió a JuanPablo I, que no murió de muertenatural. Entonces hay que prestarmucha atención a lo que ocurre.Este viejito puede correr un serioriesgo, porque dentro de la Curiahay mafiosos, hay hombres dela masonería y utilizan todos losinstrumentos de poder. Hay unaespecie de estalinismo religiosoferoz. En general la gente idealizaese lugar, idolatra la Curia. No hayque hacerlo: son hombres celiba-tarios, llenos de ambiciones porel poder, por el dinero, y manejanesto con alianzas muy oscurascon poderes civiles. Yo creo queel Papa va a enfrentarlos. Sin em-bargo, en estos días va a tener unfuerte dolor de estómago porqueva a tener que leer las 300 pági-nas del informe del relator de laCuria. Ahí van a aparecer nom-

––

–la gran tradición de Jesús, de lafraternidad universal, del amorincondicional. Hay cosas que noson negociables. Pero yo he vis-to discursos de él donde habla dela deuda con los pobres, de la in-moralidad, de la injusticia, de laindignidad, condenando las des-igualdades. Yo creo que hay quedistinguir. En lo social él es muyabierto, yo diría casi en la línea dela Teología de la Liberación. En loque respecta a la moral cristiana,ahí si tuvo que alinearse comocardenal, ponerse en línea con elVaticano. El Vaticano no admiteninguna resistencia. Pero ahoracomo Papa puede tener otro dis-curso, ya no con el superego cas-trador que lo obligaba a mantenerdeterminada línea.¿Entonces cree que en este pontifi-

cado se podrán tratar algunos temascomo el celibato?El puede favorecer la discusión

de la Iglesia sobre cuál es la ac-titud cristiana, cuál es el ideal, elsueño cristiano sobre la sexuali-dad. Algo que nunca hubo en elcristianismo. La sexualidad siem-pre fue una utopía, un tema tabú,siempre condenado. El placer ytodo lo relacionado se mantuvoen el campo del peligro y la tenta-ción. Yo creo que él va a permitir

bres de cardenales, de altos fun-cionarios, muy metidos en cosasde las cuales no se puede hablar.Entonces, él tiene que ir despacioy cuidarse. Hay que cuidarlo en-tre todos. Yo creo que sería buenoque un grupo de argentinos fueraa Roma a proteger al Papa. No latradicional Guardia Suiza, sino laGuardia Argentina, para protegera nuestro Papa.¿Qué influencia puede llegar a te-

ner en los gobiernos de Latinoaméri-ca, teniendo en cuenta que provienede esta región?El Papa es siempre un poder en

sí mismo. Primero, es el gran sím-bolo religioso de todo Occidente,una figura que por su historia leotorga mucho poder. Pero no esun poder abstracto, es un poderpolítico que puede influenciarlíneas de acción, puede apoyarciertos tipos de medidas políticasy económicas. Le doy un ejemplo.Juan Pablo II apoyó directamentea (Augusto) Pinochet, escribió unacarta cuando el dictador chilenocumplió 50 años de matrimonio,celebró una misa en la capilla delpalacio Vaticano, apareció en laventana junto a Pinochet. Se lle-vaba muy bien con los dictadores,sea tanto Pinochet como FidelCastro. Incluso yo hablando conFidel una vez salió el tema. Fidelme dijo ‘yo me entendí perfecta-mente con Juan Pablo II’. Yo lerespondí en broma, ‘evidentemen-te, son dos dictadores’. Entoncesél me golpeó con la mano en elhombro.¿Considera que se convertirá en

una figura de peso político en laregión?Yo creo que Bergoglio va a in-

fluenciar a favor de la justicia so-cial. Va a apoyar las políticas re-publicanas, las políticas públicasque van al encuentro del pueblo.Más participación, más democra-cia, más justicia. Como apoyó enArgentina a los pobres. Creo queél tiene sensibilidad para eso, y su-ficiente sabiduría. Porque no hayque olvidar que los jesuitas tienenuna formación muy rigurosa. Elhabla un montón de lenguas per-fectamente. Es una persona muysensible a los movimientos cultu-rales. Es muy abierto. Yo lo conocíen un encuentro religioso en SanMiguel. Bergoglio hizo una in-tervención de espiritualidad quehasta el día de hoy no me la ol-vido. Es una persona sumamenteespiritual, y le sale desde adentro.Siente la humanidad, sus dificul-tades, sus luchas, sus trabajos, laseparación de la familia. Es unpastor, no un doctor alejado delmundo. Alguien que entiende larealidad contradictoria.¿Y qué sintió que el cardenal bra-

sileño no haya sido elegido?Yo estoy feliz de que Odilo Sche-

rer no sea Papa porque es un car-denal reaccionario, autoritario, erael candidato de la Curia romana.Gracias a Dios que se quemó de-fendiendo públicamente la Curiay el banco Vaticano, como lo hi-zo tres días antes. Los medios lodestrozaron por eso y entró comocandidato derrotado. Gracias aDios tenemos al hermano argen-tino. w

una discusión amplia, posible-mente del celibato, empezandocon la inserción de los sacerdotescasados para que vuelvan. Porqueinstitucionalmente la Iglesia viveun fracaso total en ese sentido. EnBrasil deberíamos tener cien milsacerdotes en razón de la cantidadde católicos que hay, pero tenemossolamente 17.000, de los cuales7.000 son extranjeros. Yo creoque va a empezar con eso, permi-tiendo que los sacerdotes casadosregresen a la Iglesia.Parecen ser cuestiones muy com-

prometidas como para que sean ad-mitidos por la Curia romana.Hay que considerar a Roma sólo

pueblo. Así marcó que lo centrales el pueblo de Díos, no el Papa. ElPapa está para servir. Son peque-ños signos, como el de no utilizarel vehículo reservado para el Pa-pa y tomar un coche común. Sonpequeños signos que dicen aquíestá otro tipo de Iglesia, que no esla Iglesia de los palacios, sino laIglesia cercana al pueblo. Eso eslo que necesitamos para rescatarla credibilidad totalmente perdidade la Iglesia Católica.Sin embargo, algunos sectores lo

ven como un hombre conservador.Mire, yo haría una diferencia-

ción. Conservador uno tiene queser siempre si quiere conservar

“Hayquevaciar,descentralizarRoma,porquesonmilañosdecorrupción.Ahíhayunamafia.DentrodelaCuriahaymafiosos,hayhombresdelamasoneríaqueutilizanelpoder”.

Crítico. LeonardoBoff dice que enel Vaticano hayun “estalinismoreligioso feroz”,que utiliza elpoder en beneficiopropio. Por esopide cuidar alnuevo Papa, alque ve comoun renovadorde la fe. (DiegoWaldmann)

“Lasexualidadsiemprefueuntematabú.Yocreoquevaapermitirunadiscusiónamplia,posiblementedelcelibato,permitiendoquelossacerdotescasadosregresenalaIglesia”.

40| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

Análisis y opiniones

OpiniónJoaquínNavarro-Valls

Por mucho tiempo re-cordaremos la lluviosajornada romana enque a la Sede de Pedrosubió Jorge Mario Ber-

goglio. El miércoles, justamente,mientras de todas partes llegabagente por laVia della Conciliazione,daba la impresión de que el breveCónclave estaba acercándose ya ala esperada fumata blanca. Pero elmomento en que se percibió con-cretamente la novedad fue cuandoapareció en el balcón el protodiá-cono que pronunció la fórmula ri-tual con la indicación del nombreelegido previamente: Francisco.Una admirable novedad en un pe-ríodo ya lleno de acontecimientoshistóricos excepcionales.De aquí debe partir la primera

reflexión pertinente. El cristianis-mo heredó de la tradición semíti-ca la conciencia de que el nombredebe indicar, directamente, lascaracterísticas fundamentales deuna persona. Y no se trata de una

mera convención, como cuandose pone una etiqueta insignifican-te sobre un objeto. El nombre esla esencialidad de una biografía,su idea, su proyecto existencial. Elnombre que los padres ponen alos hijos resumiría, en realidad, laprecisa voluntad de representar yevocar algo preciso para ellos, unaespecie demisión inconfesada quese atribuye en forma anticipada.Obviamente, ninguno de nosotrostiene la posibilidad de imponersesu propio sustantivo. Nos descu-brimos ya llamados por nuestrospadres antes de poder decidirconscientemente quién desearía-mos ser.Para un Papa no es así. Más aún,

es la única excepción que nos re-sulta familiar. Desde hace ya lar-go tiempo el Pontífice se pone elnombre que quiere. Y con ese actodecreta quién es, confesando pú-blicamente el modo en que quiereser visto y cómo ve también, real-mente, la perspectiva de la Iglesiay su futuro.Por cierto, concebir el significado

contenido en el nombre Franciscoes pensar en un signo del destino,una finalidad que supera el tiempopresente abriendo las puertas delmañana. Bergoglio no era consi-derado por los medios una figura

de primer plano. Su perfil no seimpuso, empero, en el intervaloque separó las dos sesiones, sinoen la lógica calma de los tiemposy las sucesiones, tal como habíaocurridomuchos siglos antes paraBenito y Francisco, verdaderos pa-dres de la Europa moderna.Así como Francisco de Asís rom-

pió el manierismo de su época,desempolvando la autenticidad deuna santidad vivida radical y origi-nariamente, el Papa Bergoglio bo-rró en un instante la distancia quese creó subrepticiamente entre lainstitución y la gente. Ese inclinar-se para recibir una bendición delpopulus romanus fue el indicadorno sólo del vínculo que se man-tendrá constante con su diócesissino del valor de una inspiraciónuniversal presente en su alma.Se explica así la sensación de

sorpresa que generó en todos,muypor encima de las sugestiones quetantas veces logran apartarnos delo cotidiano. El shock es aquí elmodo delicado pero firme en queel Papa Francisco unió el vértice yla base de la Iglesia en un abrazovital instantáneo que es comuni-cación, sintonía, atención, compli-cidad.Por otra parte, la referencia a

San Francisco no constituye en sí

RomarecibeaunpaparenovadoryenérgicoCon audacia y belleza, el ex vocero deJuan Pablo II traza un paralelo entre lossantos Benito y Francisco deAsís y lospapas que tomaron sus nombres.“Bergoglio borró la distancia que se habíacreado entre la institución y la gente”.

|41DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

un elemento solamente de rupturao, peor aún, una promesa de irre-verencia hacia el pasado. Al contra-rio, el pobrecito deDios, en la EdadMedia, había fundado, contra todoy todos, una espiritualidad conver-tida entre las órdenes mendican-tes en la que más materializabala santidad de la Iglesia antigua,siendo, en cierto modo, su puntode llegada y vértice. En este senti-do, elmejor paralelismo es con sanBenito. El santo deNursia sentó enel siglo VII las bases de la religiosi-dad y la espiritualidad católica queel pobrecito de Asís llevó a términoen el siglo XIII, en esa inspiraciónprimitiva, con la afirmación prác-tica y efectiva del desapego, de lareligiosidad simple y natural.En estas cosas es muy impor-

tante no perderse, no confundirsey no detenerse en las sugestionesde la imaginación. La pobreza desan Francisco consiguió lo queantes había sido elaborado porsan Benito, porque así procede elorden humano de las cosas, des-de el interior hacia el exterior y delantes hacia el después. Para hacerel bien antes es necesario meditarcorrectamente, porque la pobrezaes, sobre todo, vida hacia adentro yalejamiento del culto idolátrico delpoder, introduciendo en nosotros

un principio de sana humildad y“haciendo desbordar la inteligenciaen la práctica”, como se decía entrelos académicos del siglo IV.¿Cómo no reconocer, por otra

parte, la precisa analogía entreBenito y Francisco, es decir entreRatzinger y Bergoglio? Una sime-tría complementaria que puedeilustrar bien la evolución en lacontinuidad que veremos prontoentre un predecesor emérito y unsucesor en el cargo que completa-rá su obra reformadora. En esto,Benedicto XVI fue maestro e in-térprete genial de la fe, del mismomodo que Francisco será artíficey realizador audaz de la misiónevangelizadora. Por eso no huboninguna concesión a la forma, nin-guna incertidumbre de parte delnuevo Papa. Ideas grandiosamen-te elementales, actitudes resueltasy, sobre todo, tanta gratitud haciael antecesor. Es fascinante pensarque hoy la Iglesia se renovará conla práctica de un pastor compene-trado con las demandas de la gentey motivado por las expectativas delos últimos, con la doctrina de Be-nedicto XVI en sus manos. Com-prender todo esto significa captarde pronto la verdadera esenciade un pontificado que innovaráguiando enérgicamente a la Iglesiade Roma volcada a la periferia delplaneta. Es más, una periferia queahora ya no es periférica.Sí, porque en el presente, la

cuestión de la relación entre Euro-pa y “el fin del mundo” está en elcentro del panorama geopolítico.Y si bien la Iglesia nace romananunca pensó en un destino exclu-sivamentemediterráneo. Debemosdecir más bien que la cristiandadfloreció en nuestra civilizaciónúnicamente porque debía comen-zar forzosamente en alguna parte,no porque haya un privilegio exclu-sivo para el Viejo Continente a laspeticiones del Evangelio.Bergoglio, justamente, es el

primer Papa no europeo de la his-toria. Y ese hecho constituye undesarrollo plausible. Es además elprimer Pontífice moderno de len-gua española. El predecesor fueBenedicto XIII, PedroMartínez deLuna y Pérez, un aviñonés depues-to en el Concilio de Constanza ymuerto antipapa en 1423.Lo que cuenta, en suma, es que

ahora hay un legítimo Jefe de laIglesia argentino que muestra en-seguida en la simplicidad de ungesto sobrio la quintaesencia de lajuventud de la fe. Y en la afabilidadde un “buenas tardes”, la normali-dad de la vida. Y en la cordialidadde un “hasta pronto”, la garantía deuna linealidad de comportamiento,que es revelación certificadora paraunmundo cada vezmás alejado delo genuino y de la veracidad.Es bueno ver, finalmente, que la

Iglesia no aceptó seguir siendo viejaen su expresividad comunicativa;herrumbrarse en el antiguo cultoautorreferencial en sumodo de pre-sentarse a símisma.Ciertamente, seda pormuerta la expresividad barro-ca de la curia romana. Era necesariohacer nacer unanueva expresividad.Queda ahora solamente hacerlaaceptar por todos. π©J.Navarro-VallsyLaReppublica

Habemus Papam. El anciano protodiáconoacaba de anunciar que Jorge MarioBergoglio es Francisco, el nuevo Pontífice.

Implacable. Küng participó del Concilio Vaticano II, y por sus críticas al papado fue marginado por Roma.

NOHAYTIEMPODEGRACIA

T eólogo disidente, hombre ínte-gro y libre, dueño de una prosamagnífica y gigante de la teo-logía mundial, el suizo HansKüng, muy crítico con el ponti-

ficado de Benedicto XVI y figura clave paraanalizar los caminos de la Iglesia Católicaen los últimos decenios, se mostró “espe-ranzado” por la llegada a la silla de Pedrodel cardenal argentino Jorge Bergoglio, aquien considera un hombre normal alejadode los fastos de anteriores papas.Küng, quien cumplirá 85 años este mar-

tes, envió unas líneas a Clarín. En ellaslanza varias cuestiones y dos respuestascontundentes. Bajo el título “¿Qué deberíahacer el nuevo Papa?”, Küng se dirige aBergoglio: “¿cómo se posiciona en cuantoa la reforma de la Iglesia? ¿llevará a cabo lasreformas que durante las últimas décadasfueron bloqueadas por sus predecesores?¿O simplemente dejará que las cosas sigancomo hasta ahora?”El teólogo, sacerdote y presidente de la

Fundación por una Etica Mundial, cree queestas preguntas tienen dos respuestas: “Siel Papa se embarca en la vía de la reforma,encontrará un amplio apoyo incluso fuerade los muros de la Iglesia Católica”. Pero sicontinúa “con el atrincheramiento actual,la presión será cada vez mayor y provocaráreformas desde fuera, sin la aprobación de

HayqueiniciarlasreformasyaEl teólogo suizo Hans Küng, muy crítico deBenedicto XVI, se muestra esperanzado con lallegada de Bergoglio, y lo urge a actuar con fuerza.

IdafeMartí[email protected]

la jerarquía e incluso contra los intentos dela jerarquía por paralizarlas”.Küng, desde su altura intelectual de emi-

nencia teórica de la teología ecuménica es elpadre del proyecto para la creación de unaética mundial que facilite el diálogo entrelas religiones. En 1962, con apenas 34 años,fue nombrado perito del Concilio VaticanoII por el papa Juan XXIII. Trabajó con eltambién teólogo y entonces simple sacer-dote Joseph Ratzinger, pero también coneminencias como los teólogos Karl Rah-ner, Edward Schillebeecks, Henri de Lubaco Hans Urs von Balthasar.Pero la mirada del Vaticano hacia Küng

se torció cuando en 1970 publicó el libro“¿Infalible? Una pregunta”, en el que po-nía en cuestión el dogma de la infalibilidadpapal. Cinco años después, la Congregaciónpara la Doctrina de la Fe le envió una convo-catoria para que se presentara en Roma. Sulibro había sentado muy mal y se esperabaun duro castigo. Küng nunca fue, y en 1979el Vaticano le quitó la preceptiva licenciapara enseñar teología católica. Su antiguocompañero Joseph Ratzinger, ya converti-do en el papa Benedicto XVI, lo convocó en2005: se reunieron por varias horas y la con-versación fue cordial, pero no resolvieronsus desavenencias.Instalado en Alemania desde hace déca-

das, Küng se dedica a la enseñanza en laUniversidad de Tübingen y ha escrito dece-nas de libros en los que profundiza en susestudios teológicos. w

42| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

OpiniónJuan GabrielTokatlián

Signos de una era que ya empezó

L as religiones constitu-yen actores de enormegravitación y signifi-cativa influencia en lapolítica mundial. Para

algunos observadores, en la últi-ma década se ha producido un re-surgimiento de lo religioso en lasrelaciones internacionales. Paraotros se trata en realidad de unareformulación de su peso y poder;de una transformación antes queun retorno de la religiosidad.La evolución reciente de las re-

ligiones pone en cuestionamientoel postulado central de la moder-nidad de que la secularización eraun proceso inexorable. Desde losaños setenta, en el cristianismo, eljudaísmo y el islam han surgidolas tendencias más fundamenta-listas, ortodoxas y tradicionalistas,lo que ha puesto en entredichola idea de que en las principalesreligiones monoteístas perma-necerían las vertientes más mo-deradas. Frente a la conjetura deuna natural convivencia entre lasreligiones muchas voces adviertenque, en un escenariomundial máshobbesiano que kantiano, no debesoslayarse la posibilidad de conflic-tos inter-religiosos. Frente al con-cepto de una religiosidad identifi-cada con determinadas culturas yterritorios la expansión geográficay la pluralidad de expresiones hangenerado, de hecho y según Oli-vier Roy, un “mercado” religiosovasto y variado a disponibilidad deindividuos y grupos. Por ello hoyes imperativo, tal como lo señalaVendulka Kubalkova, desarrollaruna Teología Política Internacio-nal orientada al estudio sistemáti-co de los discursos y las prácticasreligiosas en torno a los asuntosglobales.Así entonces, la elección de

Jorge Bergoglio como Papa de laIglesia Católica debe ser leída enel contexto de las mutaciones dela geopolítica de las religiones.De acuerdo con trabajos del PewResearch Center como el Global Re-

ligious Landscape, una de cada seispersonas dice no tener ningún tipode afiliación religiosa; hecho queen parte muestra un cierto desen-canto en el ámbito de las creenciasreligiosas. A su vez, la religión conmás fieles es el cristianismo, con2,2 billones de fieles (32 por cientode la población mundial) y de esetotal el 50 por ciento son católicos(37 por ciento son protestantes y12 por ciento ortodoxos). Los mu-sulmanes constituyen la segundareligión con 1,6 billones de fieles(23 por ciento de la poblaciónmundial). Sin embargo, los adhe-rentes al islam son, según cortespor edad, más jóvenes que loscristianos y su tasa de crecimientoanual (1,5 por ciento) es el doble aldel resto de religiones; con lo cualpodría llegar a 2,2 billones de fielesen 2030.En el mundo católico las difi-

UnaelecciónclaveparalageopolíticamundialCon la mayor cantidad de católicos enel mundo, América Latina también esuna zona de paz, no genera amenazas ala seguridad internacional, tienemayoríade regímenes democráticos y presentabuen crecimiento económico y social.

cultades y cambios son notables.Por un lado, hay un declive enel número de seminaristas y depersonas que se definen comopracticantes, al tiempo que las va-riantes cristianas en aumento sonlos evangelistas y pentecostales.Por el otro, el mapa del catolicis-mo varió: en 1910 en Europa selocalizaban el 65 por ciento de loscatólicos y en América Latina el 24por ciento; hoy la mayoría de loscatólicos está en Latinoamérica (39por ciento) y luego siguen Europa(24 por ciento), Africa Subsaharia-na (16 por ciento), el Asia Pacífico(12 por ciento) y Estados Unidos (7por ciento).Esta dinámica religiosa global

hay que superponerla con la geo-económica y política vigente en laque la relevancia de América La-tina es elocuente: es una zona depaz, epicentro de una riquísimabiodiversidad, no genera amena-zas a la seguridad internacional,tiene regímenesmayoritariamentedemocráticos, presenta importan-tes tasas de crecimiento económi-co, un mejoramiento gradual deindicadores sociales y una revitali-zación de los debates ideológicos;fenómenos que, simultáneamente,no ocurren en otras latitudes.Es en este cruce de mapas de

diferente índole que se debe eva-luar la elección del nuevo Papa dela grey católica. Es de esperar quecon el transcurso de los días el go-bierno argentino advierta y sepapotenciar el enorme impacto quetiene para Argentina la elección deBergoglio y el significado simbóli-co y real que tiene para el mundoun pontífice latinoamericano. Elque un argentino lidere una de lasprincipales religiones del mun-do le otorga, indirecta y discreta-mente, al país quizás una de lasmayores palancas de visibilidad einfluencia que jamás haya tenido.Para el mundo, y enmedio del tor-bellino actual, la presencia de unPapa de América del Sur fortalecetodo aquello que ha venido pros-perando lenta y pacíficamente enesta región. w

Rebaño. En América Latina son habituales las concentraciones masivas de católicos. Como en esta visita de Benedicto XVI a la ciudad mexicana de Silao, en marzo de 2012/ANSA

QueBergogliohayasidoelegidoPapaleotorgaalpaís,quizás,unadelasmayorespalancasdeinfluenciaquejamáshayatenido.

|43DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

OpiniónJosé IgnacioLópez

El gesto augural de Bene-dicto XVI, esa enormedecisión espiritual frutode su fe en Dios gestadapor su libre conciencia,

logró lo que buscaba: sacudir alhombre de este tiempo, conmover ala Iglesia.Meditado en la soledad dela oración, coherente con su teología,con su vida austera, con sus profun-das reflexiones sobre la fe y la razón,el gesto del Papa, su legado, no fuede abandono sino de inmolación.

Como nunca antes, el sillón dePedro quedó vacío no por lamuertedeunpapa sinopor el fin deunmo-do de pontificado. Con dos palabrasel papa que se fue dotó a su gesto deesa condición de histórica bisagra.Cuando Peter Seewald, su biógrafo,le preguntó: “¿Es usted lo último delo viejo o lo primero de lo nuevo?”,Benedicto respondió: “Ambas co-sas”.Imágenes sin precedente contem-

pló esta sociedad globalizada en laúltima tarde del febrero romano: un

UnagranbisagrahacomenzadoaconstruirseLa inmolación de Benedicto XVI con surenuncia lo colocó en un lugar único: ser“lo último de lo viejo y lo primero de lonuevo”, como él mismo dijo. Su sucesor,Francisco, tiene la misión de sacudir elcansancio que pesa sobre la Iglesia.

Papa que se iba para no volver a suventana sobre laPlaza deSanPedro,unhelicópteroque sepaseó sobre to-da sudiócesis, Roma. Imágenes quepudieron expresar tristeza, como entoda despedida, pero que no fueronde luto aunque algo se enterraba.La desnudez del sillón comunicó la

hondura del gesto que necesitó com-ponerBenedictopara conmover aunaIglesia en tiempos de crisis, perpleji-

dad, desvarío, intrigas y escándalos.Alumbró así un gesto liminar. Plantóel hito que demandaban estos tiem-pos de confusión, crisis, perplejidad,desvarío, intrigas y escándalos. El si-llón vacío fue eso, denuncia y llamadoa la conversión.Si habló de él hace tiempo, si lo

insinuó con detalles pequeños y losugirió en articuladas homilías, nohade extrañar el tiempoeclesial queescogió, la Cuaresma.Ultimo de lo viejo, primero de lo

LamundanidadespiritualyelclericalismolequitanalaIglesialacapacidaddesorpresaylaternura.

nuevo, el papa que se fue sugirióun rumbo de cambio y conversión.Y aunque haya habido intentos deatenuarla, esa sintonía prevaleció enel cónclave. Se trata de volver a lasfuentes, al Evangelio de Jesús, a laIglesia Pueblo de Dios, comunidadde creyentes.Hará pronto cinco meses cuan-

do pusimos en marcha la ediciónpara el Cono Sur de la revista Vi-da Nueva, el arzobispo de BuenosAires nos alentó a que trajéramos“aire fresco que libre a la Iglesia delcansancio que la lleva a esa trampade quedar encerrada en las que sonprobablemente las dosmás grandestentaciones que padece: la munda-nidad espiritual y el clericalismo.Ambas la van enclaustrando y laconvirtien no en una Iglesia quecamina, que dialoga con el mundosino en una Iglesia autorreferencialfundamentalmente estéril, incapazde ser fecunda, porque pierde doscosas fundamentales que la hacenmadre: la capacidad de sorpresa y laternura”. ¿No fue a eso que el papaFrancisco convocó a los cardenalesen la homilía de su primeramisa enla Capilla Sixtina? La gran bisagraha comenzado a construirse.w*Periodista. Ex vocero presidencial

y del Diálogo Argentino. Director de

la revista Vida Nueva.

Acontramano delmundo

Extraño país el nuestroque utiliza dos pesas ydos medidas para in-terpretar la realidad:emocionan las mani-

festaciones populares de los quelloran la muerte del presidenteHugo Chávez pero mal se entien-de la conmoción popular de losargentinos que se emocionan porla elección de un Papa argentino.La más alta, la más influyente, lamás universal de las distincionesa las que haya llegado jamás uncoterráneo nuestro. En términossimbólicos, equiparable, tal vez,al Premio Nobel de la Paz, deva-luado entre nosotros por esa en-fermedad nacional, el ideologismoque antepone la doctrina, el inte-

Elmaldecir,quenoesotroquelamentiraLa senadora del Frente Ampio Progresista reflexiona sobre el país que según lascircunstancias utiliza dos pesas y dos medidas para interpretar la realidad.

OpiniónNormaMorandini

rés personal al bien compartido y“maldice”, “el decir mal “que noes otro que la mentira, tal comoadvertía el cardenal Bergoglio enuna homilía. No se maldijo acasocuando, incapaces de respetar elorgullo colectivo, fuimos a con-tramano del mundo y en Argen-tina se descalificó personalmenteal otrora cardenal Jorge Bergogliopor la complicidad de muchosObispos con la dictadura tal comosucedió con todos los poderes quesustentaron a la dictadura. Sinembargo, en el Juicio a las JuntasMilitares se revelaron casos em-blemáticos de sacerdotes y religio-sas que siquiera la Iglesia pudoproteger, como fue el asesinatode los padres palotinos en BuenosAires o el secuestro de las monjasfrancesas. En el Juicio, también, loúnico que le hizo a Videla levantarla vista del libro que simulaba leercomo un forma de despreciar a losjueces y al tribunal, fue cuando elfiscal Julio Strassera, en la lecturade su alegato, recordó lo que dijo

el obispo Hesayne: “No se puedematar y luego ir a misa”.Las mismas características de

clandestinidad que impuso el te-rror, escondió los actos heroicos delos que corrieron riesgos para salvara otros. Ya está en la hora de que re-construyamos esos actos solidarioscomo el de los curas que corrieronriesgos por prestar sus parroquiasa las entonces “locas” del pañueloblanco o los mártires de la Iglesia,como Angelelli o el padre Mugica.Menos aún se puede ignorar el“mea culpa” sobre esa responsabi-lidad que vienen haciendo los hom-bres de la Iglesia ni dejar de recono-cer que aquella Iglesia que se senta-

ba a lamesa de los poderosos no esla misma Iglesia, al menos no es ladel Arzobispo deBuenosAires ni ladel Padre Pepe, tal como reconstru-yen ahora tantos testimonios sobreel compromiso de la Iglesia con losque sufren, sean pobres, mujeres oniños esclavizados.

En lugar de desentrañar al Terro-rismo de Estado como fenómenopolítico y social para evitar su repeti-ción, resultamenos laborioso sacaral policía que llevamos dentro y pa-trullarmoralmente a los otros. Es loque hemos visto en estos días con lainesperadadesignacióndeFranciscoI, el Papa porteño, argentino, al quesin pudor se le agregó el aditamentode “peronista” como si fuera sinóni-mode argentino y la Iglesia no fueralamás universal de las institucionesplanetarias, la que en su sabiduríamilenaria cambia para permanecer.La gran lección que debiera apren-der la política, anquilosada a viejasverdades que en el mundo de hoyresultan anacrónicas.Con cinismo se puede equiparar

la Iglesia al comunismo como lasdos ideas más poderosas de la uni-versalidad. Sin embargo, la rigidezdeun sistemaquehizodel poderunfin en sí mismo, derrotó la idea deigualdad planetaria.Como se trata de eludir las ver-

dades hechas desde las doctrinas,cuento con la experiencia privile-giada de la cronista que desde 1980acompañó el peregrinar del Papapolaco, que tuvo enormegravitaciónen la caída de laUnión Soviética pe-ro, también, contribuyó al fin de lasdictaduras sudamericanas y fomen-tó el surgimiento de líderes comoLula, nacido al amparo de la Iglesiade San Pablo, convertidomás tardeen el Presidente de Brasil. Vivimosen el continente demayor cantidadde católicos del planeta pero tam-bién en el demayor injusticia.Bergoglio que nació enArgentina

perdió su nombre. Ahora se llamaFrancisco, quien emociona al conti-nente americano por tener un Papanacido en estas tierras aunque seanlas del “fin del mundo”. Una emo-ción auténtica que contrasta con lamezquindad local que intentómatarsu reputación tal como hacen contodos los que contrarían el relatooficial. Sin reparar que aquellos queayer lo humillaronmañana deberánbesarle el anillo. Y que cuando visiteestas tierras, no alcanzaran losmedi-dores oficiales para contrarrestar lasque serán las mayores movilizacio-nes populares a las que jamás hayaasistido nuestro país. Tal vez, enton-ces, sepodráentenderque lospobresno son sólo clientes electorales y lasmanifestaciones populares puedenser espontáneas para celebrar valo-resdehermandadypiedad y libertadque el ideologismomal entiende. w

Unaemociónauténticaquecontrastaconlamezquindadlocalqueintentómatarsureputación

44| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

El papa en la vida cotidiana

placita”. En Liniers, les pidió alos niños que “construyan espa-cios de amor” y rezó para que“no hayamás chicos abando-nados o revolviendo la basura”.La idea de alternar templos conescenarios populares fue pen-sada para acercar elmensajecatólico amayor cantidad dechicos.

ElcuadroquesólocambiadeclavoEn la capilla de la clínica SanCa-milo, donde las religiosas de esaorden cuidan a los sacerdotes,monjas y sus familiares enfermos,hay un cuadro del papa (Bene-

dicto XVI) y otro del obispo local(Jorge Bergoglio). Hace unas se-manas, cuando Ratzinger anun-ció su renuncia, sor Herminiaestaba limpiándoles el polvo a losdos. “¿Y si en unos días sólo ten-go que cambiar la foto de lugar?”,pensó en un segundo. Divertidapor la ocurrencia, sacudió su ca-beza y siguió limpiando.

HastapapanoparaEl joven Bergoglio acababade regresar de Europa, conun título bajo el brazo y unascalificaciones extraordina-rias. En la residencia en laque estaba alojada, su abue-lita no cabía en sí del orgullo:“Miren a Jorge”, les decía alasmonjas que la cuidaban,mostrándoles el diario enel que salía la noticia delretorno de su nieto. “¡Hastapapa no para! ¡Hasta papano para!”

UnaquelegustabacontaraélEn sus años de cardenal, aBergoglio le gustaba contaruna anécdota que resumíasu visión social. Hablabade una convocatoria quehabía hecho el papa Pío XII,amediados del siglo pasado,a un grupo de nobles italia-nos, que para llegar hasta sudespacho tenían que atra-vesar un barriomuy pobrede la ciudad. Ocurrió que losindigentes insultaron a lospotentados y les arrojaron elcontenido de sus escupide-ras. Ya delante del pontífice,seguramente esperando unareivindicación, saludaron alpontífice, que les dijo en to-no aleccionador: “su hora deaudiencia ha terminado”.

AnécdotassimplesdeunhombrecomúnLos que conocieron a Bergoglio tienen atesoradashistoriasmínimas para contar. Sonmuy variadas, perotodasmarcan la sensibilidad popular y la sencillez desu conducta.

FuesupropioporteroEn elmedio de la crisis de 2001,el entonces embajador de EspañaenArgentina, CarmeloAngulo,y el ex portavoz presidencial deRaúl Alfonsín, José Ignacio López,pidieron ver a Bergoglio. Era unsábado por la tarde cuando yahabía poca gente en la ciudad. “Sí,por supuesto, los espero. Toquenbocina para que les abra”, fue larespuesta del cardenal. Anguloy López suben a una camionetadiplomática quemanejaba elespañol y se dirigen a la Catedral.Llegan al portón de la residenciaapostólica y tocan la bocina. Enesemomento aparece elmismísi-mo Bergoglio a abrirles la puerta.Impactado por la sencillez y la hu-mildad del cardenal, Angulo lo fe-licita. La respuesta del ahora Papafue inmediata: “¡Pero hombre! Silos arzobispos estamos para esto,para abrir puertas”.

UnpastorquecaminóelcéspedfutboleroAdemás de “patear la calle” y ca-minar por barrios pobres ofrecien-do ayuda, el cardenal Bergogliooficiómisasmultitudinarias enestadios de fútbol, como los deBoca yVélez. En la Bombonera,bendijo amás de 20mil alumnosde escuelas católicas y los convo-có a “luchar contra la división, serjustos y solidarios ymultiplicar elamor de Jesús en el barrio y en la

Cuandomeretiré,Bergogliomedijo‘¿paraquétefuiste?,nolehacemosungolanadie’.Meemocionaque,despuésdetantotiempodeentregarlelacamisetadeSanLorenzofirmadaportodoelequipo,puedacontarleamishijosquehoyesnuestropapa.” Alberto“Beto”Acosta.Elgoleador “santo”recibióunadistincióndelexcardenal.

|45DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013 | CLARIN

UnpactopararespetaraRacingCuenta el padre JuanGabriel que fue apedirle permiso al cardenal Bergogliopara desarrollar tareas sociales en unsitiomuy especial para él: la canchade Racing. El superior, de corazónazulgrana y código futbolero, no tardóen darle el OK y juntos acordaron nohacerse bromas por los resultados delos clásicos entre Racing y San Loren-zo, dos equipos por lo general necesi-tados. El pacto se cumplió, aseguranlas autoridades.

ElpandulcedeMoyanoEn el año 2000, bajo el gobierno de laAlianza, al dirigente de los camionerosHugoMoyano se le ocurrió organizaruna “Nochebuena solidaria” en la Pla-za deMayo. Consiguió una donaciónde 2.500 panes dulces y otra demilpollos. Luego reunió dinero para laorganización del acto, necesario paraalquilar baños químicos,mesas y ca-balletes. Todo estaba enmarcha, pero,por tratarse de una celebración tansensible al ánimo cristiano, fue a darexplicaciones al cardenal Bergoglio yse insinuó en la prensa que tambiénle pidió que participara del encuentro.Al salir de esa reunión,Moyano de-claró: “El arzobispome dijo que iba arezar para que la comida salga bien”.Alguien consideró queMoyano pre-tendía protagonismo personal. Y tuvoque salir a buscar otro sacerdote parala bendición.

Enlosaños80,BergogliotrajoalaArgentinalaimagendelaVirgenDesatanudosenestampitasymepidióquelehicierauncuño.AsísehicieronlasprimerasmedallasdeplatadelaVirgen.Leharemosahorauncálizmuy especial.” JuanCarlosPallarols.Elorfebrepreparauncáliz pararegalarlealpapaFrancisco.

Undíaenqueestabafuriosaporalgoquemehabíapasado,lollamédesdemi despachoylepedísimepodíarecibir.‘Venite’,medijo. Lecontéloquemepasabaymeescuchóconsumaatención.Semantuvoensilenciocincominutosyloquemedijomedevolviólafuerzaparaseguirconestavocaciónpolítica.” GabrielaMichetti.RecibióunconsejosabiodeBergoglio.

46| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

El cronista de Su Santidad

DíasinolvidablesparasubiógrafoSergio Rubin, periodista deClarínespecializado en temas religiosos, escribiójunto a una colega italiana el único librooficial sobre la vida del flamante papa.Desde la elección, es requerido por losmedios de todo elmundo.

Desde el miércoles,no puede caminartranquilo por lascalles del Vaticano.Los periodistas que

llegaron para cubrir la eleccióndel Papa lo siguen (y algunospersiguen). Le llegan llamadosde todo el mundo y saturan suteléfono. Ni hablar de su casillade mails: colapsa. Le escribendesde el New York Times y laCNN hasta la BBC y Le Figaró.Todos quieren entrevistarlo.Así es hoy un día en la vida deSergio Rubin, el periodista quemejor conoce al papa Francisco ycoautor, junto a la italiana Fran-cesca Ambrogetti, de su únicabiografía oficial.“En la plaza, cuando lo anun-

ciaron, fue una sorpresa enor-me”, cuenta desde Roma esteperiodista de Clarín. “Desdeentonces estoy sobrepasado,enloquecido, supongo que Fran-cesca también, pero yo aquí enel Vaticano”, explica Rubin, queha dedicado gran parte de su vidaperiodística a cubrir temas reli-giosos.La elección de Bergoglio como

Papa lo obligó a cambiar de hábi-tos. Hasta ese momento era unperiodista más entre los 5.600que viajaron a cubrir el cónclave.Ya no. “Trato de pasar inadverti-do, que no me reconozcan por-que me paran y no puedo traba-jar, pero… como decía mi abuela,

Pablo Javier [email protected]

ojalá todo sea para bien”, relata.La idea de hacer un libro so-

bre el hombre que se convirtióen el primer papa latinoameri-cano de la historia surgió de unacharla con su colega Francescadespués de la elección de Jose-ph Ratzinger en 2005. “Sergio,deberíamos hacer un libro sobreBergoglio, en el cónclave tuvo 40votos y nunca antes un latino ha-bía sacado esa cantidad”, le pro-puso. “Nos va a sacar corriendo,a Bergoglio no le gustan esascosas”, contestó Rubin. Y no seequivocó.Cuando le plantearon la idea

a Bergoglio su respuesta fueun “no” rotundo. Sin embargo,insistieron tanto que un día elcardenal aceptó. “Bueno, vamora ver”, les dijo. Charlaron sobrediferentes temas de su vida du-rante un año y medio. Una vezpor mes, Rubin y Ambrogetticumplían un ritual: llegabantemprano a la curia, se sentabanlos tres (con el arzobispo) en unapequeña sala y a veces tomabanté, mientras las conversacionesfluían.Inclusive tuvieron acceso al

lugar más íntimo de la vida delnuevo papa Francisco, su habi-tación.“Era una cosa espartana ymuy

austera”, recuerda Rubin. En sulibro, da más detalles: tiene una“simple cama de madera, uncrucifijo de sus abuelos Rosa yJuan y una estufa eléctrica”.El resultado de todas esas

charlas fue la biografía “El Jesui-

ta”, que será reeditada la próximasemana en Argentina y prometellegar a las librerías de todo elmundo en poco tiempo.Uno de los grandes logros del

libro, según Rubin, fue hacerhablar a Bergoglio sobre todoslos temas. “Fue la única vez quehabló sobre su situación en ladictadura”, señala y cuenta queel flamante Papa leyó el libro y legustó tanto que al final los aga-sajó con un almuerzo, austero,como es su estilo.Rubin conoció a Bergoglio a

principios de los años 90, cuan-do iba al arzobispado a grabar en-trevistas con el cardenal AntonioQuarracino para un programa detelevisión que conducía.“Lo veía pasar, tenía un perfil

tan, tan bajo que no se acercaba,yo lo veía a lo lejos, pero a me-dida que fue ascendiendo en lapirámide eclesiástica nos fuimosconociendo más”, reconstruye.Según cuenta el hombre que

mejor conoce al nuevo Papa, Ber-goglio ha dado menos de cincoreportajes en sus más de veinteaños de carrera eclesiástica y, en

En busca del destino. Rubin y Bergoglio caminan por la plaza San Pedro, horas antes de que se iniciara el Cónclave que lo convirtió en el papa Francisco./Víctor Sokolowicz.

Suhabitacióneraespartana,conunasimplecamademadera,uncrucifijodesusabuelos yunaestufaeléctrica.

Argentina, solo él y Francesca, dela agencia italiana de noticias AN-SA (que terminaron siendo susbiógrafos) pudieron hacerle uno.Su elección como papa no sólo

llenó de orgullo a Rubin, sino quetambién le dio una enorme paz.“Uno ha dedicado una vida a estetema, sonmás de 36 años. Yo em-pecé muy chico a cubrir religión,que es una cosa muy grata en unsentido, pero en el otro es ingra-ta, porque no es un gran temapara un diario o para un mediode comunicación”, marca. “Si yohubiera dedicado estos años a ha-cer economía por ahí sería rico”,ironiza desde la Santa Sede, a laque ha viajado en más de veinteoportunidades.“Yo hago religión, y en algunos

momentos duros siento que metoca bailar con la más fea”, se sin-cera Rubin, que jamás imaginóque aquella elección profesionalfuera a depararle la maravillosay convulsionada experiencia queestá viviendo en estos días.Está contento por la reedición de

su libro: “Ojalá sirva para mostrara esta persona realmente muy in-teresante y ojalá que a la gente lehaga bien leerlo”, suelta el especia-lista del papa Francisco, que por elmomento no piensa en hacer lasvalijas para mudarse a Roma.“Quiero volver a la Argentina.

Soy de los argentinos, delmate y eldulce de leche, y aunque yerba acáya se consigue, estoy muy arraiga-do y pienso regresar cuando todoeste sueño maravilloso termine”,promete Sergio. w

Hace poco, el Gobiernodiseñó un planisferiocentrado en laArgen-tina, quizá para ali-viar esa sensación detodo. Hay que cruzarunmar para asomarsedistancia que separatesorosmilenarios de

chicos. La ofreció Bergoglio a miles de alumnos que rezaron por la mejora de la educación. Fue el 14 de abril de 2010, un día en que la Catedral se llenó de alegría/DYN.

ha dado un sumo pontífice, cincopremios Nobel, películas adorablesy ganadoras del Oscar, escritores deensueño, la futura reina de Holan-da y los dos mejores futbolistas delplaneta?La respuesta tiene varias capas,

como las cebollas. Las autoridadesdicen que una persona puede co-mer con6pesos por día, pero tomarun café justo enfrente de laCatedralmetropolitana, dondeBergoglio lus-

viven en el país de las 40de verdades. País desigual,dividida, con gobernantesrios y un cardenal que fueprescindió de secretarios,celular ni televisión.

“Hay 150milmillones deen el exterior ¿qué podemospara que sean puestos al serviciopaís y saldar la deuda social?que los derechos humanospor la existencia de extremay de estructuras económicastas”, dijo Bergoglio en 2009,seminario sobre políticasque el Gobierno ignoró.Extraño país donde los ah

prefieren esconder sus dólaresmacetas antes que en losdonde los empresarios delporte engordan sus patrimoniosa medida que los pasajeviajan; donde casas de altaaprovechan de costurerasdonde los libros triplicaroncio en un año, mientras elniega que exista esa inflación.Bergoglio leyó a Dostoyevski,

escritor desterrado a Siberiazar Nicolás I, y a Jorge Luishumillado por el peronismo,mandó a inspeccionar avesrral. En el país del fin delhay crímenes sin castigo ysos que desearían abolir laque ellos no escribieron.El Papa del fin del mundo

bién leyó a Leopoldo Marechal,creador del caminante de arrab“Adán Buenosayres” y dequete de Severo Arcángelo”,habla del tránsito de unhacia su redención histórica,metáfora que calza en estosde renovación papal. Peronistaescritor, peronista su lector,país donde el peronismo cobijderecha, al centro y a la izquierda,y donde fueron sacerdotestian VonWernich, condenadodelitos de lesa humanidad,Mugica, asesinado en 1974militancia social. De contrasteslos ladrillos de este lugarvisto a la distancia de dondeMiguel Angel.Al elegido siempre le

atención que la Ciudad deAires, que gobernaba comopasaba de tener tres milloneshabitantes de noche a ochones de día. El caminaba entreellos, con unmaletín de cuerotenía más años que la injusticia.Ningún oro podían robarle,no lo llevaba.Caminar es lo que el papa

cisco le pide ahora a la Iglesia,pirado en la costumbre delejano de caminar kilómetrospedirle paz a la Virgen detrabajo a San Cayetano.“Tengan los pies en la

dijo en una misa. Bergogliometros de los restos del generalde SanMartín, el Padre de

Estelugaralfindelmundo,debajodelaCruzdelSur

del que partió Bergoglio ha logrado 30 años de democracia, perodesigualdades sociales. Hijo de un ferroviario, el pastor fue testigodecadencia de los trenes. Bailó tango, arte que necesita del abrazo.

El mapa cambia. Lapreocupación de laIglesia por extendersu oído hacialos continentesolvidados influyóen la designacióndel Papa. El Surrecobra presencia,como muestra estemapamundi oficial.

48| CLARIN |DOMINGO 17 DE MARZO DE 2013

ASergioRubinyFrancescaAmbrogetti,enellibro“ElJesuita”.

UnaltomiembrodelaCuriaromana,quehabíasidopárroco

durantemuchosaños,medijounavezquellegóaconocerhastaelnombredelosperrosdesusfeligreses.Yonopenséquébuenamemoria tiene,sinoquébuencuraes”.