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Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de Origen Natural Ana María López Pérez, Natalia Zurita Acosta, Oscar Álvarez Resumen El interes por los productos cosmeticos con componentes de origen natural ha ido creciendo en los ultimos años porque los consumidores de hoy en dia son mucho mas conscientes de el impacto ambiental que tienen sus deciciones. Es por esto que buscan productos que desde su contenido, proceso de produccion y envase no afecten negativamente al planeta. En este articulo de revisión se pretende recolectar la informacion relacionada con el uso de espesantes, surfactantes, conservantes y filtros solares de origen natural en formulaciones cosméticas, recolectados de diferentes base de datos. El reto principal consiste en lograr reemplazar las sustancias usadas comúnmente que son de origen sintetico por unas que sean de origen natural como plantas y microorganismos; logrando un producto con las mismas características de rendimiento y de estabilidad. Palabras clave: cosmeticos, origen natural, surfactantes, espesantes, conservantes, filtros solares. Introducción La industria cosmética está en constante crecimiento, y se pronostico un crecimiento del 6% anual entre los años 2019 y 2023(Tiwari et al., 2020). Los productos cosméticos y para el cuidado personal del cuerpo se utilizan en cantidades masivas, por lo tanto, su uso frecuente hace que vuelvan a filtrarse al medio ambiente en cantidades igualmente masivas. Muchas de las sustancias utilizadas en la producción de estos productos son contaminantes para el medio ambiente, bien sea por su proceso de obtención o cuando son desechadas y llegan nuevamente a la naturaleza. Todo esto esta haciendo que las preferencias de consumo de las personas cambien, pues ahora los consumidores prestan mayor atención a los productos usados en el cuidado de la piel. La demanda de las personas busca que los productos utilizados contengan sustancias que no sean contaminantes para el medio ambiente y traigan beneficios para las personas en su uso cotidiano (Amberg & Fogarassy, 2019). De la misma manera se busca que el envasado y los procesos de producción no tengan un impacto significativo en el medio ambiente. En este aspecto se está viendo un rápido cambio en el mercado pues la demanda se está inclinando a productos verdes; este es un factor significativo, que está haciendo que las empresas fabricadoras y los laboratorios formuladores reevalúen y reestructuren su producción en función de satisfacer las necesidades de los consumidores, velando por el bienestar del ecosistema y las personas. Lo anterior, está generando una nueva clase de cosméticos, mayormente conocidos como biocosmeticos. El prefijo “bio” es usado para referirse a cosméticos que en su proceso de producción se utilizan sustancias provenientes de la naturaleza y por lo tanto se elimina o reduce el uso de sustancias peligrosas tanto para el medio ambiente como para la salud y el bienestar de las personas. Esto representa una gran oportunidad de investigación para los científicos de todo el mundo y esta abriendo puertas a la innovación y desarrollo de nuevos productos. La gran mayoría de los cosméticos son emulsiones directas (O/W), para la realización de estos se usan varios tipos de sustancias que cumplen determinada función, y con estas lograr conseguir el producto deseado. Algunas de las sustancias más sobresalientes son los espesantes, surfactantes, conservantes y para el caso de los bloqueadores solares están los filtros UV. Estas sustancias son primordiales

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Page 1: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de Origen Natural

Ana María López Pérez, Natalia Zurita Acosta, Oscar Álvarez

Resumen

El interes por los productos cosmeticos con componentes de origen natural ha ido creciendo en los ultimos años porque los consumidores de hoy en dia son mucho mas conscientes de el impacto ambiental que tienen sus deciciones. Es por esto que buscan productos que desde su contenido, proceso de produccion y envase no afecten negativamente al planeta. En este articulo de revisión se pretende recolectar la informacion relacionada con el uso de espesantes, surfactantes, conservantes y filtros solares de origen natural en formulaciones cosméticas, recolectados de diferentes base de datos. El reto principal consiste en lograr reemplazar las sustancias usadas comúnmente que son de origen sintetico por unas que sean de origen natural como plantas y microorganismos; logrando un producto con las mismas características de rendimiento y de estabilidad. Palabras clave: cosmeticos, origen natural, surfactantes, espesantes, conservantes, filtros solares.

Introducción

La industria cosmética está en constante

crecimiento, y se pronostico un crecimiento

del 6% anual entre los años 2019 y 2023(Tiwari

et al., 2020). Los productos cosméticos y para

el cuidado personal del cuerpo se utilizan en

cantidades masivas, por lo tanto, su uso

frecuente hace que vuelvan a filtrarse al medio

ambiente en cantidades igualmente masivas.

Muchas de las sustancias utilizadas en la

producción de estos productos son

contaminantes para el medio ambiente, bien

sea por su proceso de obtención o cuando son

desechadas y llegan nuevamente a la

naturaleza. Todo esto esta haciendo que las

preferencias de consumo de las personas

cambien, pues ahora los consumidores prestan

mayor atención a los productos usados en el

cuidado de la piel. La demanda de las personas

busca que los productos utilizados contengan

sustancias que no sean contaminantes para el

medio ambiente y traigan beneficios para las

personas en su uso cotidiano (Amberg &

Fogarassy, 2019). De la misma manera se

busca que el envasado y los procesos de

producción no tengan un impacto significativo

en el medio ambiente. En este aspecto se está

viendo un rápido cambio en el mercado pues

la demanda se está inclinando a productos

verdes; este es un factor significativo, que está

haciendo que las empresas fabricadoras y los

laboratorios formuladores reevalúen y

reestructuren su producción en función de

satisfacer las necesidades de los

consumidores, velando por el bienestar del

ecosistema y las personas. Lo anterior, está

generando una nueva clase de cosméticos,

mayormente conocidos como biocosmeticos.

El prefijo “bio” es usado para referirse a

cosméticos que en su proceso de producción

se utilizan sustancias provenientes de la

naturaleza y por lo tanto se elimina o reduce el

uso de sustancias peligrosas tanto para el

medio ambiente como para la salud y el

bienestar de las personas. Esto representa una

gran oportunidad de investigación para los

científicos de todo el mundo y esta abriendo

puertas a la innovación y desarrollo de nuevos

productos.

La gran mayoría de los cosméticos son

emulsiones directas (O/W), para la realización

de estos se usan varios tipos de sustancias que

cumplen determinada función, y con estas

lograr conseguir el producto deseado. Algunas

de las sustancias más sobresalientes son los

espesantes, surfactantes, conservantes y para

el caso de los bloqueadores solares están los

filtros UV. Estas sustancias son primordiales

Page 2: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

para que el producto tenga la textura y

características deseadas.

El principal objetivo de este articulo de revisión

es mencionar los aspectos mas relevantes de

estudios que se han realizado sobre sustancias

de origen natural que pueden ser un

reemplazo a las comunmente utilizadas.

Espesantes

Los espesantes o modificadores reológicos son

usados en los productos cosméticos para

lograr la estabilidad frente a la sedimentación

durante el almacenamiento y para conferir

características físicas deseadas (como el flujo

de la emulsión) y sensoriales (como la

suavidad, la sedosidad y esparcibilidad), que

son percibidas en el momento en que se aplica

el producto y que hacen que este sea más

agradable al consumidor. Los espesantes

también pueden tener otro tipo de

propiedades como humectante o podrían

actuar como emulsificantes. Sin embargo, en

los productos para el cuidado de la piel son

usados principalmente como modificadores

reológicos de los sistemas acuosos. Los

espesantes logran que una solución acuosa

cambie su viscosidad debido a que las

moléculas de los polímeros cambian su

estructura, estas moléculas se entrelazan

entre si logrando un cambio en las propiedades

reológicas. La propiedades que más resaltan

en los espesantes son las reológicas; pues la

reología estudia la fuerza necesaria que debe

ser aplicada a un fluido para que en respuesta

a esta fuerza fluya. En este orden de ideas,

entre más viscoso sea un fluido mayor fuerza

necesitara para fluir, es por esto que es

importante conocer la viscosidad a la que

pueden llegar los espesantes en las soluciones

acuosas para poder hacer una buena elección

de espesante. En los productos cosméticos se

desea que los espesantes presenten un

comportamiento pseudoplastico, es decir, la

viscosidad del fluido decrece mientras la tasa

de cizalla incrementa; pues este

comportamiento permite que la emulsión se

esparza suavemente sobre la piel (Santos et al.,

2019).

Existen diferentes tipos de espesantes,

dependiendo de su origen se pueden clasificar

en naturales, semisintéticos y sintéticos.

Siendo el primer grupo nuestro caso de

interés, dentro de este grupo hay una

subclasificación que también depende de la

obtención de la goma, clasificándolas en

gomas de exudado de plantas, provenientes de

semillas de plantas, gomas provenientes de

microorganismos y gomas provenientes de

algas marinas. Una ventaja de los espesantes

naturales es que entran en la tendencia verde

que se está popularizando en los productos

cosméticos y que no requiere una gran

inversión económica para poder obtenerla y

usarla.

Goma Tara

La goma tara o goma caesalpinia spinosa se

obtiene al moler la endosperma de las semillas

de la planta Caesalpinia spinosa que es parte

de la familia de las leguminosas y pertenece a

las galactomanas. La dispersibilidad de este

polímero es proporcional al porcentaje de

unidades de galactopiranosa en las cadenas de

polisacáridos. Esta goma es parcialmente

soluble en agua fría, y se solubiliza fácilmente

en agua caliente, esto debido a que contiene

un 25% de galactosa y los movimientos

moleculares se facilitan cuando hay un

incremento de la temperatura. Cuando se

encuentra en solución a un 2% de

concentración, la solución obtiene un pH de

6,4 a 25 °C. Por otra parte, se evaluaron varias

soluciones con diferentes concentraciones de

la goma tara desde 0,1- 0,2%, estas soluciones

se sometieron a una prueba reológica donde

se demostró que la viscosidad no cambiaba al

incrementarse la fuerza cortante; así mismo

los geles mostraron que a medida que la

concentración aumentaba, la solución adquiría

propiedades pseudoplasticas y la viscosidad de

Page 3: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

la solución aumentaba. A concentraciones

superiores al 2% el comportamiento que se

evidencia es viscoelástico (Rigano et al.,

2019)(Santos et al., 2019). Por lo que se puede

concluir, el aumento en la viscosidad que

puede aportar esta goma esta directamente

relacionado con la cantidad de goma utilizada.

Así mismo, se comprobó que esta goma puede

suspender nanopartículas, para esto se mezcló

con polvos y se centrifugo; las muestras

resultantes no presentaron ningún tipo de

precipitado a 1000 rpm; por lo que esta goma

puede ser utilizada para realizar formulaciones

cosméticas como exfoliantes y bloqueadores

solares que requieren de la suspensión de

solidos en el medio.

Goma Guar

La goma guar es una de las gomas más

económicas en lo que corresponde a las

galactomanas. Esta goma se obtiene de la

endosperma de Cyamopsis tetragonolubus o

Cyamopsis psoraloides. Esta goma contiene un

alto peso molecular, posee un color amarillo y

no posee olor. Se disuelve fácilmente en agua

tanto fría como caliente, esto es debido a que

las moléculas de manosa de esa goma

interactúan con las moléculas de agua

logrando una cadena intermolecular que da el

efecto espesante e incrementa la viscosidad. Al

aumentar la concentración de la goma se

enriquece la cadena intermolecular formada,

llevando a que se incremente la viscosidad de

la solución. Una de las características más

interesantes de este polímero es que cuando

se encuentra en solución es una goma no

tóxica en un amplio rango de pH (4 a 10,5), esto

es debido a que no tiene ninguna carga en su

estructura química lo que la hace estable; por

lo que usualmente el pH no afecta la viscosidad

de soluciones con goma guar (Sharma et al.,

2018).

La viscosidad que se alcanza con la goma

depende de la fuerza de cizalla, de forma que

la viscosidad de una solución con goma guar

decrece al incrementar la fuerza de

cizallamiento (Thombare et al., 2016). Lo que

demuestra que esta goma presenta una

característica deseable en los espesantes

usados para productos cosméticos. Por otro

lado, la presencia de sal en las soluciones no

afecta la hidratación de la goma; un estudio

realizado en donde se analizó el

comportamiento reológico tras varios días de

almacenamiento de una solución con goma

guar, el cual arrojó como resultado que la

viscosidad de la solución cambia poco con el

paso de los días (20 días) (Chenlo et al., 2010).

Goma de Xanthan

La goma de xanthan es un polisacárido

producido por la bacteria Xanthomonas

campestris. La temperatura a la que se somete

la solución afecta la viscosidad de esta, puesto

que la temperatura controla la conformación y

estructura molecular; se ha comprobado que

en un rango entre 40-60 °C la viscosidad

incrementa al incrementar la temperatura. Las

soluciones realizadas con goma xanthan a

temperatura moderada tienden a tener alta

viscosidad. Adicionalmente, la goma tiene dos

configuraciones, en forma de hélice y bobina

aleatoria, dichas configuraciones dependen de

la temperatura en la que la solución se

encuentre, a baja temperatura la estructura es

más ordenada y a altas temperaturas la

estructura se desordena (Lochhead, 2017), por

lo que alcanza mayor viscosidad a alta

temperatura. Sin embargo, esta goma es

soluble tanto en agua fría como en agua

caliente. Las soluciones con esta goma

presentan comportamiento pseudoplastico y

la viscosidad de las soluciones incrementa al

aumentar la concentración de la goma

(D’Agostino Garcia et al., 2019). Las sales

presentes en la emulsión tienen efecto en la

viscosidad de esta; al estar en baja

concentración y en presencia de sales la

viscosidad tiende a bajar, esto es debido a que

la sal afecta las fuerzas electrostáticas

moleculares. Además, la viscosidad de la goma

no se ve afectada en un rango de pH entre 1-

13 (Garcıa-Ochoa et al., 2000). Por otro lado,

se realizó un estudio de textura en emulsiones

con diferentes agentes espesantes, entre estos

Page 4: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

se utilizó la goma xanthan y un

hidroxipropilado de la goma guar, en este

estudio se deseaba evaluar el atributo de

fibrosidad de las emulsiones que mide que tan

largo se forma un filamento al separar los

dedos o dos placas hasta que este filamento se

rompa. Los resultados arrojaron que la

emulsión con goma xanthan fue la que

presento la longitud más larga (40 mm/s)

seguido de la goma guar (35 mm/s), así mismo

la goma xanthan mostro la elasticidad más alta

(Gilbert et al., 2013). Del mismo modo la goma

xhantan mostro que se comporta bien cuando

está en combinación con otro tipo de gomas

como las galactomanas; al estar en mezcla con

estas gomas la viscosidad incrementa

notablemente, pues estos dos tipos de gomas

formas cadenas desordenadas lo que provoca

un aumento significativo de la viscosidad.

Un estudio realizado donde se deseaba evaluar

la seguridad al aplicar espesantes en la piel se

utilizaron las gomas tara, guar y xanthan

adicionadas en emulsiones cosméticas que

fueron aplicadas en conejos; los resultados del

índice de irritación ocular aguda mostraron

que las tres gomas son seguras, pues arrojaron

resultados inferiores a 15 que es el valor limite

para considerar una sustancia como no

irritante (9,15 para la goma guar, 6 para la

goma tara y 5,83 para la goma xanthan), por lo

tanto, estas tres gomas son seguras para ser

usadas en la piel (GUILLOT et al., 1982). Al ser

la piel de los conejos mucho más sensible que

la piel de los humanos, se garantiza que el uso

de estas gomas es seguro en la piel humana.

Goma Gellan

La goma gellan es un polisacárido producido

por la bacteria Pseudomonas elodea. De

acuerdo con su composición química, es un

heteropolisacárido aniónico compuesto por

unidades de glucosa, acido glucurónico y

ramnosa. Esta goma puede sufrir una

transición helicoidal ordenada que es

térmicamente reversible y las zonas de unión

de los geles se forman por agregación de

moléculas de gellan de doble hélice (Miyoshi et

al., 1996). Las soluciones que se realicen con

esta goma no suelen poseer color, lo que lo

hace un buen compueste para varias

formulaciones. La goma tiene varias

propiedades, como la textura versátil que

puede ser definida por la firmeza, elasticidad y

dureza. Es una goma que proporciona

estabilidad ante cambios en la temperatura, lo

que permite que el gel se pueda formar tanto

en caliente como en frio. Así mismo, los geles

o soluciones formadas son estable en un

amplio rango de pH (entre 2 y 10), lo que

facilita el uso de este polímero en varias

industrias.

La conformación y estructura de la goma son

funciones de la concentración del polímero, la

temperatura, el ambiente acuoso y la

presencia de cationes monovalentes o

divalentes en la solución. También, a bajas

temperaturas el polímero forma una hélice

ordenada de doble hebra, mientras que a altas

temperaturas se produce un polisacárido

monocatenario que reduce significativamente

la viscosidad de la solución. Las cadenas que se

forman, se unen entre sí en las “zonas de

unión” a través de puentes de sal o puentes de

hidrogeno, esta gran red molecular que crea el

polímero permite que las moléculas de agua

queden atrapadas lo que da como resultado la

gelificación (Valli & Miskiel, 2020). Sin

embargo, la goma puede solubilizarse sin la

presencia de sales, pero el resultado no será

igual de efectivo, ya que los cationes son

importantes para la formación de geles puesto

que facilitan la formación de las zonas de unión

antiparalelas en la doble hélice. Nakajima et al

(1996) demostró que diferentes cationes

pueden influir en la longitud de las cadenas

conformadas (Hashimoto et al., 1996).

La fuerza del gel incrementa al aumentar la

concentración de sales hasta alcanzar un

máximo, pues la adición de sal da como

resultado una reducción en la resistencia del

gel debido a que precipita el polímero

(Williams, 2007). Los cationes divalentes

producen geles más fuerte que los cationes

monovalentes (Miyoshi et al., 1994); por lo que

Page 5: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

los geles formados con cationes divalentes son

resistentes a los cambios de temperatura y por

lo tanto son estables ante estas alteraciones.

Por otro lado, las soluciones con cationes

monovalentes o solas formam geles menos

estables pues estas soluciones son

termorreversibles (Miyoshi et al., 1996), lo que

indica que los cationes divalentes forman

zonas de unión mucho más fuertes que las que

forman los cationes monovalentes. Un estudio

realizado en donde se adicionó un ion

divalente de calcio a una solución con goma

gellan dio como resultado que la

concentración de sal influye en la fuerza del

polímero, es decir que en una concentración

de aproximadamente 30 mM del ion se

observa la máxima fuerza que puede alcanzar

el gel. Por otra parte, este polímero no

requiere estar en gran concentración para

lograr modificar la reología de la solución,

usualmente se usa en concentraciones 0,04-

0,05% (p/v). Se ha demostrado que en

comparación con la goma de xanthan, la goma

gellan a una concentración de 1% (p/v) puede

aumentar la viscosidad de la solución en un

factor de 100.000 a velocidades de corte bajas.

Así mismo su conformación le permite

combinarse fácilmente con otras gomas para

obtener soluciones con características muy

marcadas. En otro estudio que se llevó a cabo

se prepararon emulsiones con goma gellan

como agente estabilizante, se comprobó que a

bajas cantidades se consigue que el

polisacárido estabilice la emulsión (Vilela & Da

Cunha, 2016). Lo anterior nos lleva a concluir

que esta goma puede ser usada en emulsiones

cuya formulación no se vea afectada por el uso

de sales y es un buen aliado si se desea

conseguir soluciones estables en amplio un

rango de temperatura.

Finalmente, se puede hacer una comparación

sobre el comportamiento y las propiedades

reportadas de estos espesantes para así poder

determinar cuál espesante es mejor o cual es

más adecuado usar. Particularmente, se puede

medir la reología de las gomas en solución a

distintas condiciones y evaluar las propiedades

reológicas para conocer el comportamiento de

cada goma. Es por esto por lo que Pavoni y

Fagioli (2019) con su grupo de trabajo

realizarón una comparación entre las gomas

tara, gellan, xanthan y guar a diferentes

concentraciones (0,5 y 1,5 (%w/w)) y pH

(solución acida (AS) a un pH de 1,2; solución de

buffer acetato (ABS) a un pH de 5,5; solución

de buffer fosfato (PBS) a un pH de 6,8). Las

soluciones fueron realizadas a dichas

condiciones y se les realizo una caracterización

reológica en donde las muestras fueron

sometidas a un aumento de frecuencia entre

un rango de 0,01 a 10 Hz con esfuerzo

conrtante (1 Pa o 10 Pa) a 25°C.

Posteriormente, con los resultados se realizó

una gráfica de modulo elástico y viscoso contra

frecuencia (Ilustración 1) en donde se pudo

observar dos comportamientos; el primero fue

que las gomas tara y guar se caracterizaron por

tener un comportamiento de un líquido a bajas

frecuencias, lo que significa que el módulo

viscoso es más alto que el elástico. Este

comportamiento es típico de soluciones

acuosas de polisacáridos y depende de la

conformación de la cadena en su estructura.

Por el contrario, las gomas gellan y xanthan

mostraron un comportamiento típico de un

sólido con un módulo viscoso superior al

módulo elástico. Para lo goma xanthan este

comportamiento es esperado pues según las

propiedades de la goma su comportamiento se

ve afectado por la conformación de la hélice en

su estructura que a su vez es afectada por la

temperatura en la que se encuentre la

solución, esto es debido a que como se

mencionó antes a bajas temperaturas la

conformación es helicoidal y por el contrario, a

altas temperaturas se forma una cadena

desordenada que hace que adquiera un

comportamiento más hacia un sólido. Así

mismo, se evidencio que la goma gellan es

dependiente del pH de la solución, puesto que

a un pH de 5,5 tiene un comportamiento de gel

(modulo viscoso con un valor alrededor de 103

(Oppermann et al., 1985)), se evidencio que la

capacidad de la goma para formar geles

decrece cuando el pH decrece. Observando la

Page 6: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

gráfica se puede concluir que el pH influye en

la viscoelasticidad de las dispersiones de

hidrocoloide pues para todas las gomas se

observó valores más altos cuando el pH de la

solución era alto. Así mismo, se realizó un

estudio variando la temperatura entre 25° C y

37° C, los resultados no mostraron diferencia

alguna entre las temperaturas. Del mismo

modo se puede observar en la ilustración 1 que

a mayor concentración de la goma mayores

valores se obtienen tanto del módulo elástico

como del viscoso (Fagioli et al., 2019).

Finalmente se puede concluir que las gomas

estudiadas se comportan de manera

satisfactoria, dependiendo de las condiciones

a las que son sometidas toman distintos

comportamientos, por lo que se deben tener

en cuenta las condiciones a trabajar para

poder escoger el polímero que mejor se adapte

a los requerimientos.

Ilustración 1. Barrido de frecuencia de diferentes hidrocoloides como función de concentración y pH a 25° C.

Surfactantes

Los surfactantes son ampliamente usados en la

industria cosmética, estos tienen efectos

detergentes, humectantes, emulsionantes,

solubilizantes, dispersantes y espumantes. Los

surfactantes son compuestos anfifílicos y

poseen propiedades hidrofóbicas e hidrofílicas

que reducen la tensión superficial y facilitan la

formación de emulsiones entre líquidos de

diferentes polaridades. Casi la mitad de todos

los surfactantes producidos son para los

sectores de lavado y limpieza (Lourith &

Kanlayavattanakul, 2009a).

La mayoría de estos tensioactivos comerciales

se sintetizan químicamente a partir de

derivados del petróleo y se utilizan

principalmente en aplicaciones de lavado, pero

pueden causar problemas ambientales con el

uso a largo plazo. Los más comúnmente usados

son conocidos como sodio lauril sulfato, lauril

sulfato de amonio, alcohol estearilico, alcohol

cetoestearílico, polisorbato 20/80; o también

se utilizan algunos provenientes de animales

como la proteína del huevo y la gelatina. Por lo

tanto, los surfactantes derivados de productos

naturales plantean menos problemas

ambientales cuando se seleccionan como

ingredientes cosméticos multifuncionales

debido a su seguridad, olor, color y pureza. Un

tensioactivo natural se refiere estrictamente a

un tensioactivo tomado directamente de una

fuente natural.

Las emulsiones directas son sistemas

termodinámicamente inestables que consisten

en pequeñas gotas de aceite dispersas en un

medio acuoso. Para poder crear emulsiones

cosméticas funcionales es necesario hacer que

Page 7: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

estos sistemas sean estables, para esto se

utilizan los surfactantes o emulsificantes, ya

que permiten que estas sean estables a lo largo

del tiempo y puedan cumplir correctamente

con sus funciones.

Los surfactantes cumplen dos funciones

básicas: i) facilitan la formación de pequeñas

gotas de lípido durante la homogenización; ii)

mejoran la estabilidad de estas gotas una vez

que estas se han formado (McClements &

Gumus, 2016). Para que los surfactantes

puedan cumplir con estas dos funciones

principales deben tener una estructura

química que les facilite esta función, para esto

deben ser moléculas anfifilicas que se

caracterizan por tener dos estructuras, la

primera es una cadena alquílica compuesta de

8-22 carbonos, a esta parte se le conoce como

hidrófoba (no tiene afinidad por el agua) o

lipofílica (afinidad por los lípidos); la segunda

estructura es un grupo funcional conocido

como hidrofílico que tiene afinidad por el agua

(Nakama, 2017). Así mismo los surfactantes se

clasifican en iónicos y no iónicos, los iónicos

son subclasificados en aniónicos, catiónicos y

anfóteros, donde en los dos primeros la parte

hidrofílica se disocia en aniones y cationes

respectivamente, los anfóteros dependiendo

del pH se pueden disociar en cationes o

aniones. Los surfactantes no iónicos no se

disocian en iones.

Además, existe un criterio utilizado que ayuda

a saber la solubilidad de los surfactantes

conocido como el balance hidrofílico-lipofílico

(HLB), desde su descubrimiento por el señor

Griffin se han reportado muchas fórmulas para

calcularlo. Usualmente los surfactantes iónicos

suelen ser hidrofílicos y los surfactantes no

iónicos pueden ser hidrofóbicos dependiendo

de su HLB. El sistema HLB usa una escala de 1-

20 dependiendo de la afinidad del surfactante

a los lípidos o al agua, entre más alto sea el

valor más afín al agua es el emulsificante. Los

surfactantes que tiene un valor de 1-3 son

agentes antiespumantes, 4-6 son usados para

emulsiones W/O, 7-9 son agentes

humectantes, 8-18 son usados para

emulsiones O/W, los que tienen valores 13-15

son agentes limpiadores, y los que tiene un

valor entre 10-18 son agentes solubilizantes

(Nakama, 2017). Una de las características

para que los surfactantes cumplan con su

función es la formación de micelas que en la

mayoría de los casos son esféricas. Las micelas

son estructuras en las que los surfactantes se

ubican de tal manera que la parte hidrofílica

este en contacto con el agua y la parte lipofílica

este en contacto con el aceite. Por lo tanto, las

gotas de aceite quedan rodeadas de

surfactante y de esta forma se pueden formar

las emulsiones sin el riesgo de que estas se

separen con el tiempo.

Los biosurfactantes tienen como ventaja que

son naturales, biodegradables, sostenibles y

usualmente tiene baja toxicidad. Algunos

ejemplos son los glicolípidos (soforolipidos,

ramnolipidos) y lipopectinas (surfactina). Los

biosurfactantes suelen ser clasificados por su

origen, microbiología, peso molecular o modo

de acción. La cabeza hidrofílica suele ser un

péptido, aminoácido, monosacárido,

disacárido o polisacárido. La cola hidrofóbica

es una cadena de ácidos grasos. Los

biosurfactantes con bajo peso molecular

suelen ser mejores para reducir la tensión

superficial de la interfase aire-agua y agua-

aceite, mientras que los de alto peso molecular

son más efectivos en estabilizar emulsiones

O/W. En comparación con los surfactantes

químicos, los biológicos son más efectivos

porque reducen en mayor medida la tensión

superficial y son más eficientes pues la

concentración micelar critica (CMC) es inferior

(Drakontis & Amin, 2020). La concentración

micelar criticar es la mínima concentración de

surfactante requerida para obtener la máxima

reducción de la tensión superficial (Bezerra et

al., 2018). Por lo que una baja concentración

micelar critica indica que el surfactante es

eficiente. Este criterio es económicamente

favorable para las industrias.

Page 8: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

Ramnolipidos

Los ramnolipidos son parte de los glicolípidos,

están compuestos por una o dos ramnosas y

tres cadenas de hidroxiácidos grasos, cada

cadena con aproximadamente 8 a 22

carbonos. Este surfactante es producido por

Pseudomonas aeruginosa como metabolito

secundario cuando está en presencia de

azucares, hidrocarbonos, glicerol o

triglicéridos. Dependiendo del pH y de la

concentración de sales, los ramnolipidos

pueden reducir la tensión superficial de 72

mN/m hasta 27 mN/m. Los ramnolipidos no

solo son efectivos como surfactantes si no que

mostraron excelentes propiedades

antimicrobianas en contra de hongos,

bacterias y otros microorganismos (Abalos et

al., 2001; Lourith & Kanlayavattanakul, 2009a).

Los biosurfactantes tiene bajos efectos de

irritación con la piel y son compatibles (Maier

& Sobero, 2000). De ahí que, en un test de

toxicidad se compararon ramnolipidos con

sodio dodecil sulfato (SDS), TEGO betain (TGB)

y bromuro de hexadeciltrimetilamonio (HTAB),

para esto se expusieron células de

mitocondrias y después se procedió a realizar

un análisis de captación del rojo neutro y la

actividad deshidrogenasa de la mitocondria,

los resultaron mostraron que en ambas

pruebas los ramnolipidos obtuvieron

resultados similares a los obtenido por el SDS

que es un surfactante comúnmente usado en

geles y ha sido usado en estudios de

irritabilidad (Torrego-Solana et al., 2014). Lo

anterior evidencia que este surfactante puede

ser usado en formulaciones cosméticas pues

no es toxico para la piel humana, por lo que es

una alternativa que se puede usar cuando se

requiera un surfactante aniónico. Por otro

lado, se realizo una emulsión con aceite de

sésamo en la que se utilizó ramnolipidos como

surfactante y estabilizante, los resultados

mostraron que un incremento en el

surfactante disminuía la viscosidad y se

estabilizaba, así mismo se debe garantizar un

aumento en el surfactante si se va a

incrementar la concentración de la emulsión.

Adicionalmente, se evidencio una relación

lineal en el aumento del surfactante y la

estabilidad de la emulsión, así como una

relación inversa entre el surfactante y la tasa

de perdida de turbidez (Torrego-Solana et al.,

2014). Lo anterior evidencia que este

surfactante puede ser usado en formulaciones

cosméticas pues no es tóxico para la piel

humana por lo que es una alternativa para los

surfactantes aniónicos comercialmente

usados.

Soforolipidos

Son producidos por un grupo de células no

patógenas conocidas como Candida

bombicola, estas células lo producen cuando

crecen en presencia de carbohidratos, ácidos

grasos, hidrocarbonos o mezclas de estos. La

producción de este surfactante es mayor

cuando a las células se les provee con dos tipos

de fuentes de carbono, hidrofílica e

hidrofóbica (Varvaresou & Iakovou, 2015).

Estas moléculas constan de un grupo de

soforosa hidrófilo (un disacárido) unido a una

cola de hidrocarburo hidrófobo (una cadena de

ácido graso). La cadena de ácido graso tiene

entre 16 y 18 carbonos que pueden

encontrarse en una forma acida o lactona, la

forma lactona puede ser esterificada en la

posición 4’’ o en algunos casos en la posición 6’

-6’’(Lourith & Kanlayavattanakul, 2009b). La

naturaleza del grupo de cabezas de la soforosa

y las colas de hidrocarburo dependen de la

cepa microbiana y los sustratos utilizados para

su producción, lo que conduce a

biosurfactantes con diferentes propiedades

fisicoquímicas y funcionales (Lang, 2002). Sin

embargo, gran parte de los soforolipidos

actúan como surfactantes no iónicos, estos

poseen propiedades emulsionantes,

espumantes, humectantes y altamente

detergentes. Los soforolipidos han mostrado

propiedades antimicrobianas y han sido

incorporados en formulaciones para

tratamiento de acné y olores corporales. De

igual manera, han sido ampliamente usados en

la industria cosmética y están presentes en

lápices de ojos, sombras para ojos, en labiales

Page 9: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

y cremas (Lourith & Kanlayavattanakul,

2009a).

Así mismo, se ha visto que inhibe el

crecimiento de microrganismos gram positivos

como Bacillus subtilis, Staphylococcus

epidermidis en concentraciones entre 50 y

29.000 µg ml-1 (Lang & Wagner, 1993).

Estos surfactantes son inestables a valores de

pH superiores a 7 - 7,5; a valores superiores a

este se observa fácilmente la hidrolisis de los

grupos alquilo y los enlaces ester. A pH de 5 o

inferiores se dispersa en agua y a pH 5,6 – 5,8

la solubilidad mejora llegando a ser

completamente solubles a pH de 6. Así mismo

se disuelven perfectamente en etanol,

metanol y son dispersables en aceite vegetal,

mineral, glicerol y propilenglicol (Van Bogaert

et al., 2011). Una característica que cabe

resaltar de estos surfactantes es que se

degradan fácilmente, esto de acuerdo al

método OECD 301F, en donde se mide la

biodegradabilidad del material mediante su

consumo de oxígeno (Renkin, 2003).

En su gran mayoría los soforolipidos son

biosurfactantes hidrofílicos con un HLB de

aproximadamente 10-13 por lo que son bueno

estabilizando emulsiones O/W (Van Bogaert et

al., 2007). Estos forman emulsiones que

contienen grandes gotas de aceite cuando se

preparan mediante un simple vórtice, pero

forman emulsiones que contienen pequeñas

gotas de aceite cuando se preparan mediante

micro fluidización (McClements et al., 2017).

Los soforolipidos reducen la tensión superficial

del agua de 72 mN m-1 a 25 °C hasta 35-60 mN

m-1 con una concentración micelar critica

(CMC) de 5-80 mg L-1 (Lourith &

Kanlayavattanakul, 2009a). En general los

soforolipidos que se encuentra en forma

láctica disminuyen mejor la tensión superficial

y tienen mejor actividad antimicrobiana,

mientras que los que se encuentran en forma

acida tienen una mejor producción de espuma

y tienen mejor solubilidad.

Surfactina

La surfactina es un lipopéptido cíclico de siete

aminoácidos y diferentes ácidos grasos 3-

hidroxi, siendo el principal componente el

ácido 3-hidroxi-13-metil-mirístico. Si bien la

surfactina presenta las propiedades

fisicoquímicas beneficiosas comunes de un

surfactante, los informes sobre sus fuertes

propiedades antibacterianas son

generalmente aceptados por los

investigadores. La biosíntesis de la surfactina

se realiza mediante una sintetasa peptídica

lineal no ribosomal (NRPS). Su alto rango

bioactivo se atribuye principalmente a su

conformación estructural (Henkel &

Hausmann, 2019).

La surfactina es a menudo considerada como

una molécula tensioactiva muy eficiente. Es

una molecula de alta pureza y reduce la

tensión superficial del agua de 72 a 27,90

mN/m a una concentración del 0,005%. En

general, los biosurfactantes tienen una CMC

más baja que los surfactantes químicos como

el oleato de potasio con 350 mg/L o el éter

sulfato de alcohol graso con 170 mg/L (Kočevar

Glavač & Lunder, 2018). Los valores bajos de

CMC de la surfactina la hacen atractiva ya que

se necesitan cantidades más pequeñas en

comparación con los surfactantes derivados de

la petroquímica. En general, incluso la

surfactina de menor pureza tenía un CMC

inferior al de sus homólogos químicos, lo que

resulta muy beneficioso para su aplicación,

como la biorremediación o la mejora de la

recuperación de petróleo. En este caso, la

demanda de productos de alta pureza es

menos esencial que, por ejemplo, en la

industria farmacéutica y alimentaria (Kočevar

Glavač & Lunder, 2018). Adicionalmente

caracterizaron la surfactina producida por una

cepa de B. subtilis con respecto a varias

características químicas. La solubilidad en

solución acuosa se dio a un pH > 5, siendo la

óptima a un pH de 8-8,5. De igual manera, se

encontró que fue estable en el rango de pH de

5 a 13. Con respecto a la temperatura y la

salinidad, la estabilidad no se vio influenciada

Page 10: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

por la esterilización en autoclave y en

salinidades de hasta el 6% de NaCl (Kočevar

Glavač & Lunder, 2018).

Adicionalmente, las aplicaciones potenciales

de la surfactina son terapéuticas y

medioambientales. La primera prueba de su

potencial terapéutico es que retrasa

enormemente la formación de coágulos de

fibrina al inhibir la conversión del monómero

de fibrina en polímero de fibrina. Las

aplicaciones terapéuticas de la surfactina son

antimicoplasmáticas, antibacterianas y

antivirales, antiadhesivas y antiinflamatorias.

Sin embargo, los altos costos de producción y

recuperación de la surfactina limitan su gama

de aplicaciones. Por lo tanto, es necesario

explotar nuevas estrategias de fermentación

en la producción y recuperación de la

surfactina para mejorar el rendimiento de la

recolección de la surfactina y reducir su costo

de producción. Las cepas recombinantes

obtenidas mediante modificación genética y

las cepas autóctonas que producen grandes

cantidades de surfactina deben poder

cultivarse con diversos nutrientes de bajo

costo, con el potencial de proporcionar el

avance necesario para su producción

económica.

Alquil poliglucósidos

Alquil poliglucósidos (APG) es un nombre dado

a un conjunto de tensioactivos

biodegradables. Estos tensioactivos son

únicos, ya que son no irritantes ni tóxicos y

son compuestos de alto rendimiento. El uso

de alquil poliglucósidos no ganó impulso

hasta hace poco, como resultado de la

creciente preocupación pública sobre los

productos químicos ambientalmente

seguros. Se utilizan en muchos tipos de

tensioactivos que se pueden encontrar en los

detergentes, cosméticos y actúan como

agentes emulsionantes. La mayoría de los

alquil poliglucósidos son sintetizados

mediante el uso de almidón de maíz y un

compuesto alcohólico enriquecido de grasa.

Los productos obtenidos por esta reacción

tienen habilidades no iónicas. Los

compuestos no iónicos son más tolerantes en

el agua, capaces de llevar a cabo de mejor

manera su función específica y son

compuestos iónicos sintetizados menos

duros para llevar a cabo la misma función. Sus

propiedades químicas únicas hacen que sean

tolerantes en muchas soluciones diferentes,

con diferentes niveles de acidez, sin mermar

su rendimiento. Pueden formar una variedad

de estructuras, como fases cristalinas líquidas

laminares y fases gelatinosas laminares,

dependiendo de los sistemas de emulsión

específicos en los que están presentes. Su

reciente crecimiento en formulaciones para el

cuidado personal puede explicarse por la baja

toxicidad y la ausencia de irritación de la piel

que proporcionan (Drakontis & Amin, 2020).

Se afirma que los APG tienen una serie de

ventajas en comparación con otras clases de

surfactantes; puesto que presentan seguridad

dermatológica y ocular, buena

biodegradabilidad, humectabilidad,

producción de espuma y buena capacidad de

limpieza (Varvaresou et al., 2009). Estas

propiedades beneficiosas han despertado un

gran interés en la comunidad investigadora.

Los surfactantes de origen natural tienen un

buen pronostico en la implementación de la

formulación de cosméticos, debido a que

reducen de manera significativa la tensión

superficial, además su compatibilidad con la

piel los hace aún mas atractivos para la

industria. Esto representa una gran posibilidad

de reemplazo para los surfactantes

comunmente usados que son derivados de la

petroquimica. De igual manera hay que

recalcar que faltan más estudios para medir la

estabilidad que pueden proporcionar en un

producto cosmético.

Conservantes

La calidad microbiológica se ha convertido en

una cuestión muy importante para la industria

cosmética. Las especificaciones

microbiológicas de las materias primas y los

productos cosméticos finales, así como los

Page 11: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

resultados de las pruebas de control son

elementos obligatorios del informe de

seguridad de los productos cosméticos, de

acuerdo con la legislación sobre cosméticos de

la Unión Europea (Flanagan, 2011). Sin

embargo, la contaminación excesiva de los

productos cosméticos con microorganismos

no es poco común. Esto suele provocar

cambios organolépticos en los productos

(cambios de color, olor, consistencia y

separación de fases) y disminuye sus

beneficios. Por otra parte, en la última década

se ha documentado un aumento significativo

de las alergias de contacto causadas por los

conservantes cosméticos (Kočevar Glavač &

Lunder, 2018). El término conservante natural,

que por lo general se limita exclusivamente a

las sustancias antimicrobianas de origen

natural (en su mayoría botánico), no están

regulado de manera global (Kočevar Glavač &

Lunder, 2018).

En un estudio se hicieron pruebas

antimicrobianas en una emulsión cosmética

O/W, sus componentes fueron manteca de

karité, aceite de almendras, alcohol cetearílico,

glucósido cetearílico, glicerol, goma xantana,

agua y un conservante. Cada conservante se

utilizaba en dos concentraciones: la mínima

recomendada y una concentración superior

que era la mitad de la máxima recomendada

por el fabricante en el momento de la compra

o por la Comisión Europea. La masa de agua se

calculó en consecuencia y ascendía

aproximadamente al 80%. La formulación del

cosmético de control no contenía ningún

conservante. El pH se ajustó a 5.5 utilizando

ácido láctico o bicarbonato de sodio, para

asegurar que el pH de la formulación era

adecuado para el uso dérmico. La estabilidad

física se evaluó usando la centrifugación a 1480

rpm durante 30 minutos (Kočevar Glavač &

Lunder, 2018).(Kočevar Glavač & Lunder,

2018). Las concentraciones probadas de

conservantes en las emulsiones fueron: 0,13 y

0,25 %p/p de ácido benzoico, 0,2 y 0,4 %p/p de

ácido deshidroacético: alcohol bencílico (8:92,

p/p), 0,15 y 0,3 %p/p de ácido deshidroacético,

0,05 y 0,15 %p/p de ácido p-anísico, 0,13 y 0,25

%p/p de ácido salicílico, 0,15 %p/p. Los cepas

de microorganismos usados fueron las

siguientes: Staphylococcus aureus ATCC 6538

(S. aureus), Pseudomonas aeruginosa A TCC

9027 (P . aeruginosa), Candida albicans A TCC

10231 (C. albicans) y Aspergillus brasiliensis

ATCC 16404 (A. brasiliensis).

El ácido benzoico (máx. 0,5 %p/p), el ácido

dehidroacético (máx. 0,6 %p/p), el ácido

salicílico (máx. 0,5 %p/p), el ácido sórbico

(máx. 0,6 %p/p) y el alcohol bencílico (máx. 1,0

%p/p) están todos categorizados como

conservantes en el Reglamento Europeo Nº

1223/2009 sobre productos cosméticos y

aceptados como conservantes naturales; las

concentraciones máximas permitidas para los

productos sin diluir figuran entre paréntesis. La

información que se encuentra en la literatura

describe la actividad más fuerte de los ácidos

antes mencionados contra los hongos, pero un

efecto significativamente más débil sobre las

bacterias, mientras que el alcohol bencílico es

más activo contra las bacterias Gram positivas

con efectos limitados contra las bacterias

Gram negativas y la levadura. En este estudio,

los conservantes usados cumplían el criterio de

aceptación A de la norma ISO 11930 que

clasifica como eficiente a los conservantes que

logren disminuir la concentración de bacterias

a 1.1 ∙ 105 𝑐𝑓𝑢 𝑚𝑙−1 en un cultivo con una

concentración inicial de 200 𝑐𝑓𝑢 𝑚𝑙−1

(Kočevar Glavač & Lunder, 2018) en todas las

formulaciones cosméticas, no sólo en la

concentración probada más alta sino también

en la más baja. Además, se observó una

eficacia antimicrobiana adecuada en las

pruebas de resistencia con A. brasiliensis y S.

aureus en la formulación de control que no

contenía ningún conservante. El crecimiento

de ambos microorganismos fue

aparentemente inhibido por la propia

formulación cosmética, esto se puede deber a

que se ha demostrado que la manteca de

karité y el glicerol tienen propiedades

antimicrobianas. En el caso del ácido p-anísico,

que actualmente está evolucionando como

Page 12: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

una nueva tendencia para la preservación de

los cosméticos, se observó una buena

protección antimicrobiana, lo que concuerda

con otros estudios.

De igual modo, hay una gran cantidad de

aceites esenciales y extractos de origen vegetal

que poseen excelentes propiedades

antimicrobianas y que se han utilizado de

manera individual o en combinación con

conservantes químicos para la preservación de

productos cosméticos. Los aceites esenciales

son sustancias aromáticas y volátiles de

diversas partes de las plantas, como flores,

semillas, hojas, tallos, corteza y raíces de

hierbas, arbustos, y árboles obtenidos por

destilación. Por otro lado, los extractos son

mezclas complejas de compuestos, no

aromáticos, isoilizados de diversas partes de

plantas que son obtenidos mediante la

extracción con los disolventes y técnicas

apropiadas. Los aceites esenciales y los

extractos como elementos de conservación

natural son rentables y en algunos casos

pueden mejorar las propiedades dermo-

cosméticas del producto final (Varvaresou et

al., 2009).

En un estudio realizado se midió la posible

actividad antimicrobiana de tres aceites

esenciales, como los de Laurus Nobilis,

Eucalyptus Globulus y Salvia O⁄cinalis, en

formulaciones cosméticas. El estudio se basa

en su efecto conservante, tanto por sí solo

como en combinación con el metil-p-hidroxi-

benzoato en tres tipos diferentes de formas

cosméticas (emulsión, hidrogel e hidrolito), así

como en el efecto sinérgico de los aceites

esenciales sobre un agente antimicrobiano

utilizado normalmente en los productos

cosméticos, a saber, el metil-p-

hidroxibenzoato (MPB) se incluyó en bajas

concentraciones (hasta 20 veces y 200 veces

menos que la cantidad habitual). Tras

comprobar la ausencia de contaminantes

microbianos en los productos descritos se

llevó a cabo una prueba experimental de la

conformación de la capacidad de conservación

de la esencia (MPB þ essen-de los aceites

esenciales); se llevó a cabo utilizando la Prueba

de Desafío, que consiste en una contaminación

simulada de las suspensiones con especies

microbianas normalmente presentes en el

entorno de la producción y el envasado de

cosméticos, como de las introducidas

casualmente durante el uso por el consumidor

o comúnmente asociadas a las infecciones:

Staphylococcus aureus ATCC 25923,

Pseudomo- nas aeruginosa CIP 100720,

Ascherichia coli ATCC 25922, Candida albicans

CDC B 385.

Sin embargo, se suele disuadir su aplicación

como antimicrobianos en los productos

cosméticos debido a que son mucho más

organo-especificos que los conservantes

sintéticos, y por lo tanto deben mezclarse

cuidadosamente para proteger efectivamente

a el producto contra la amplia variedad de

microorganismos que pueden afectar a los

cosméticos, en algunos casos causan alergias

dermatológicas; además, los aceites esenciales

suelen tener olores fuertes cuando se utilizan

a la concentración adecuada, por lo que

pueden ser muy inapropiados para algunos

tipos de productos que se apliquen en la cara.

Así mismo, en algunos casos se ha observado

una reducción de su acción antimicrobiana

debido a la volatilidad y la lipofilicidad.

(Varvaresou et al., 2009)

Por otra parte, en los últimos años, ha habido

un creciente interés en el desarrollo de

formulaciones cosméticas sin conservantes.

Las formulaciones acuosas libres de

conservantes pueden hacerse

microbiológicamente estables por medio de

una producción esterilizada y un empaque

apropiado. Sin embargo, este enfoque puede

no funcionar para los cosméticos más acuosos

envasados en recipientes de usos múltiples.

Hay que señalar que la definición común de

"libre de conservantes" significa que el

producto no contiene sustancias que estén

clasificadas como conservantes de acuerdo

con la legislación sobre cosméticos. Por lo

tanto, el término auto-conservante es más

apropiado que libre de conservantes. En las

Page 13: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

formulaciones auto-conservantes los

conservantes tradicionales han sido

reemplazados por otros componentes

cosméticos con propiedades antimicrobianas.

Estos ingredientes aún no han sido

reconocidos como conservantes por el Comité

Científico Europeo.

La actividad antimicrobiana de los dioles

vicinales comienza en longitudes de cadena

cortas y aumenta de butan-diol a octan-diol. La

eficiencia de los 1,2 dioles con cadenas más

largas disminuye rápidamente debido a su

limitada solubilidad en el agua. El 1,2-

Octandiol o caprilil glicol es un diol lineal C8

con propiedades humectantes. Además, por su

carácter anfifílico y su tamaño medio, presenta

unas propiedades moduladoras de la

viscosidad muy interesantes, especialmente

en las emulsiones O/W. Estas funciones

primarias del caprilil glicol se complementan

con sus propiedades antimicrobianas que

pueden aumentar la actividad de los

conservantes químicos.

En la ilustración 2 se observan los resultados

de los experimentos realizados por Jänichen

(2009) con respecto a una formulación O/W,

la combinación de caprilil glicol 0,3% (p/p) con

los conservantes tradicionales fenoxi-etanol,

ácido benzoico, ácido desdracético, en

aproximadamente el 50% de los niveles de uso

recomendados condujo a una mejora

significativa de la actividad antimicrobiana de

los conservantes. Como se muestra en la

Ilustración 2a, el 0,5% (p/p) de Fenonip

después de 28 días no fue suficiente para

controlar el crecimiento de los hongos y de la

Escherchia coli. Por el contrario, la adición de

0,3% (p/p) de caprililglicol mejoró

sustancialmente el control del crecimiento de

estos microorganismos. La actividad de apoyo

del caprilil glicol en el caso del Euxil K702 se

presenta en la Ilustración 2b, Mientras que el

0,3% (p/p) de Euxil K702 por sí solo no era

suficiente contra E. coli y Aspergillus niger, la

adición de 0,3% (p/p) de caprililglicol condujo

a la eliminación completa de E. coli y a una

reducción significativa de A. niger.

Recientemente se ha informado que el caprilil

glicol como único conservante en una

concentración del 0,5-1% (p/p) es suficiente

para la preservación de una variedad de

formulaciones O/W y acuosas(Varvaresou et

al., 2009).

Ilustración 2. Comparación de las pruebas de resistencia después de 28 días con combinaciones de conservantes químicos y caprilil glicol contra #1: Staphylococcus aureus, #2: Pseudomonas aeruginosa, #3: Escherchia coli, #4: Candida albicans y #5: Aspergillus niger. (a) A = 0,5% (p/p) de Phenonip, B = 0,5% (p/p) de Phenonip + 0,3% (p/p) de caprililoglicol. (b) C = 0,3% (p/p) Euxil K702, D = 0,3% (p/p) Euxil K702 + 0,3% (p/p) ccaprilil glicol.

Finalmente, están los conservantes que no son

de origen natural, tales como los parabenos,

que son uno de los conservantes más utilizados

en los productos cosméticos, se utilizan en una

amplia variedad de productos. Los parabenos

son sustancias blancas, inodoras y muy

cristalinas, además son bastante resistentes a

la hidrólisis y son estables en los rangos de

temperatura requeridos para la producción de

Page 14: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

cosméticos. La gran estabilidad frente a las

condiciones externas, combinada con los bajos

costos de producción, explica por qué los

parabenos se utilizan tan comúnmente

(Garner et al., 2014).

No obstante, los principales inconvenientes de

los conservantes de origen natural son: la poca

efectividad en un espectro amplio, la escasa

eficacia en concentraciones bajas, los olores

fuertes, la pigmentación que pueden tener, la

poca compatibilidad con otros compuestos, la

irritación o el potencial alergénico, y/o el alto

costo. Esto es un factor limitante, así como una

oportunidad para los investigadores y los

fabricantes de cosméticos (Kočevar Glavač &

Lunder, 2018).

Adicionalmente, a pesar de que hay

numerosos estudios antimicrobianos in vitro

en los que se utilizaron aceites esenciales

puros y extractos de plantas, se han realizado

pocas investigaciones científicas para probar

su actividad antimicrobiana cuando se

incorporan directamente a los productos

cosméticos, y sólo se dispone de unos pocos

informes sobre la eficacia de los conservantes

aprobados por las normas de certificación de

los cosméticos naturales (Flanagan, 2011).

Filtros solares

La radiación UV se divide en 3 grupos

principales, los rayos UVA, los rayos UVB y los

rayos UVC. Los rayos UVA tienen la menor

energía entre los rayos UV y pueden causar

que las células de la piel envejezcan y generar

daño indirecto al ADN de las células

(Organization, 2020). Los rayos UVA están

relacionados con el daño a largo plazo de la piel

como las arrugas, pigmentación indeseada,

perdida de colágeno, patologías dermales que

son acumulativas e irreversibles y algunos

cánceres de piel (Society, 2019).Los rayos UVA

tienen la menor energía entre los rayos UV y

pueden causar que las células de la piel

envejezcan y generar daño indirecto al ADN de

las células (Organization, 2020). Los rayos UVB

tienen un poco más de energía que los rayos

UVA; estos pueden dañar directamente el ADN

de las células de la piel y son los principales

rayos que causan las quemaduras de sol.

También se considera que son la causa de la

mayoría de los cánceres de piel. Los rayos UVC

tienen más energía que los otros tipos de rayos

UV, estos reaccionan con el ozono de la

atmosfera y no llegan al suelo, por lo que

normalmente no son un factor de riesgo para

el cáncer de piel. Sin embargo, esta radiación

también puede provenir de algunas fuentes

artificiales, tales como las lámparas de

mercurio y las bombillas desinfectantes UV

que se utilizan para matar bacterias y otros

gérmenes (Society, 2019). El uso de filtros

solares en regiones con altos niveles de

radiación solar es una medida de precaución

eficaz contra el desarrollo de estos problemas.

Para generar el efecto protector se usan

determinados compuestos que actúan como

barrera contra esta radiación, proporcionado

así la protección deseada a la piel (Society,

2019). Existen tres tipos de filtros, los

inorgánicos, orgánicos y naturales (Center,

2014; Organization, 2020).

Los filtros inorgánicos también conocidos

como filtros físicos son compuestos que

reflejan, dispersan y absorben la radiación UV,

estos filtros se encuentran como polvos secos.

Los filtros inorgánicos más comúnmente

usados en preparaciones cosméticas son

dióxido de titanio (TiO2) y oxido de zinc (ZnO),

estos dos filtros proveen protección contra los

rayos UVA y UVB (Gubitosa et al., 2020). Estos

filtros son usados en nanopartículas, no

obstante, el uso de nanopartículas al tener

tamaños tan pequeños penetra en el estrato

corneo de la epidermis causando efectos

nocivos con exposición prolongada como

dermatitis de contacto foto alergénica y

envejecimiento (Ngoc et al., 2019). Además,

tienen efectos adversos en los ecosistemas

acuáticos, tales como la adsorción en la

superficie de diversos microorganismos,

internalización celular y atrapamiento por

organismos que los ingieren.

El segundo tipo de filtros son los orgánicos,

también conocidos como filtros químicos. Los

Page 15: Elaboración de Emulsiones Cosméticas con Ingredientes de

filtros más conocidos y usados son oxibenzona,

Octil metoxicinamato y derivados del ácido

paraaminobenzoico (López-Hortas et al.,

2020). Al igual que los filtros físicos, los filtros

orgánicos también pueden causar daño en los

ecosistemas acuáticos. Dentro de los efectos

más grandes que causan, está el fenómeno

conocido como el blanqueamiento de los

corales, que puede llegar a causar la muerte de

estos. Por otro lado, estos filtros tienen efectos

sobre la salud de las personas, pues algunos de

los filtros más usados pueden ocasionar

dermatitis eccematosa, produciendo una

sensación de ardor y un mayor riesgo al cáncer

de piel (Ngoc et al., 2019).

El tercer grupo de filtros son naturales que están presentes en algunos extractos de plantas. Estos filtros tienen capacidad fotoprotectora puesto que en su composición cuentan con antioxidantes que en su estructura química tienen anillos aromáticos que le permiten absorber la radiación UV en un rango de longitud de onda de 200-400 nm, dentro de dicha longitud de onda se encuentra la radiación UVA y UVB (Cefali et al., 2016). Los antioxidantes ayudan a la piel a recuperarse del daño oxidativo producto de moléculas oxigenadas también conocidas como radicales libres que aumentan su cantidad por la prolongada exposición solar (Korać & Khambholja, 2011; Ngoc et al., 2019). Estas moléculas interaccionan con sensibilizadores endógenos que producen daño indirecto en el ADN, las proteínas y las membranas intracelulares (Moreno & Moreno, 2010). Los compuestos que más resaltan en este campo son polifenoles y carotenoides. Hay tres tipos principales de polifenoles (flavonoides, estilbenos y lignanos) que se clasifican por el número de anillos de fenol que contengan y las propiedades de unión de los anillos. Los anillos fenólicos están compuestos por estructuras de grupos fenilos e hidroxilos que poseen propiedades antinflamatorias, inmunomoduladores y antioxidantes (Cefali et al., 2016). (Cefali et al., 2016). Cada clase de polifenoles se puede subclasificar aún más por las interacciones de sus respectivos anillos fenólicos con las moléculas de carbono,

oxígeno y ácidos orgánicos. Esto crea la enorme diversidad de compuestos de polifenoles que se pueden encontrar. Al ser ampliamente abundantes y relativamente económicos, el uso de polifenoles es muy atractivo para la industria cosmética y farmacológica, puesto que es una alternativa rentable a las actuales demandas del mercado. Al ver las propiedades que tienen estos compuestos y la capacidad para absorber o bloquear la radiación UV han sido ampliamente investigados.

Quercetina y Rutina

La rutina y la quercetina son compuestos vegetales pertenecientes a la familia de los flavonoides y son de los extractos más estudiados con efectos protectores contra la radiación. Estudios que combinan estos compuestos vegetales con filtros inorgánicos muestran valores de SPF más altos que cuando se usa únicamente la quercetina o la rutina en aplicación tópica (Cefali et al., 2016). Sin embargo, las actividades espectrales obtenidas para la rutina y la quercetina en este estudio fueron muy similares, y los picos de absorción fueron observados a 373 y 341 nm respectivamente. Para cada sustancia se estudió la influencia de la concentración en su eficacia de absorción de rayos UV. Se investigaron tres combinaciones diferentes usando el mismo porcentaje de cada compuesto (10% w/w): i) sólo los flavonoides, ii) los flavonoides en combinación con el TiO2 y iii) flavonoides en combinación con ZnO. Cada combinación fue evaluada por los efectos aditivos y sinérgicos, así como el potencial de incompatibilidades (Choquenet et al., 2008). Las dos sustancias se comportaron de manera similar cuando se incorporaron en la emulsión de la combinación i) y mostraron valores de SPF similares a los filtros inorgánicos de los protectores solares. Adicionalmente, estos flavonoides también proporcionaron un nivel no despreciable de foto protección en el rango de los rayos UVA. No obstante, cuando se combinaron con el TiO2 y el ZnO las emulsiones exhibieron un SPF mayor en comparación con las emulsiones que únicamente

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contenían los flavonoides. Por lo tanto, los flavonoides combinados con filtros inorgánicos mejoran su capacidad fotoprotectora (Cefali et al., 2016). De manera similar, los estudios publicados por distintos autores describen el desarrollo y la evaluación de la eficacia in vitro de los protectores solares que contienen rutina con o sin filtros UVA (benzofenona-3) y UVB (etilhexil metoxicinamato). Las diferentes formulaciones fueron evaluadas in vitro utilizando la espectrofotometría de reflectancia con una esfera integrada para determinar parámetros como el SPF, longitud de onda crítica y la proporción UVA/UVB. La eficacia fotoprotectora de la rutina (0,1% w/w) se encontró que dependía de la concentración y la presencia de filtros UVA y UVB. Los resultados mostraron que el flavonoide aislado proporcionó una protección UVA superior a la proporcionada por la formulación sin los filtros UV (Cefali et al., 2016; Scalia & Mezzena, 2010).

EGCG

El té es una importante fuente dietética de polifenoles vegetales y, junto con el agua, es la segunda bebida más consumida en el mundo. Se produce principalmente a partir de una sola especie de planta, Camellia Sinensis. Las hojas y capullos de la planta se utilizan para producir té verde (Cefali et al., 2016). El extracto de té verde (GTE) se consume en muchas regiones del mundo por sus efectos antiinflamatorios. La mayoría de los polifenoles del té verde (GTPP) son flavanoles monoméricos llamados catequinas. Los cuatro principales compuestos de catequina son epigalocatequina-3 galato (EGCG), epigalocatequina (EGC), epicatequina-3galato (ECG) y epicatequina (EC) (Radice et al., 2016). El EGCG es el principal componente fenólico de esta planta que es capaz de bloquear el estrés oxidativo, además es la catequina más abundante y ampliamente estudiada con potentes efectos terapéuticos en la piel. Varios estudios demuestran que la aplicación tópica del EGCG puede disminuir los daños causados por la luz UV (Donglikar & Deore, 2017).

Por otro lado, las propiedades antioxidantes de ginkgo biloba y el extracto de té verde (EGCG) son un foco de estudio para determinar su posible aplicación como alternativas a los protectores solares convencionales. El efecto fotoprotector de los extractos de estas plantas solos o incorporados en emulsiones se evaluaron aplicándolas a la piel dorsal de ratones sin pelo antes de la irradiación UVA y UVB (Saraf et al., 2012). Después de 20 horas, se evaluó el daño causado, eritemas (inflamación con presencia de lesiones rojas y abultadas), alteraciones histológicas y formación de células de quemaduras de sol. Los resultados mostraron que sólo las formulaciones complementadas con los extractos de plantas protegían la piel contra el daño inducido por los rayos UV (Katiyar, 2003). Las formulaciones que contenían ginkgo biloba protegieron totalmente la piel contra los posibles daños causados por los rayos UV, y fueron más eficaces que las que contenían EGCG. Por lo tanto, los efectos fotoprotectores pueden no ser debidos a las propiedades de absorción de los filtros UV, sino a los efectos biológicos inducidos por la aplicación de las formulaciones que contienen extracto de ginkgo biloba. Sin embargo, las formulaciones que contienen una combinación de ambos sugieren que los extractos de plantas proporcionan una importante foto protección debido a que cada uno de ellos protege contra diferentes afecciones de la piel (Heinrich et al., 2011). El EGCG contiene un cromóforo caracterizado por la presencia de un doble enlace conjugado, que es responsable de absorber la luz ultravioleta, especialmente la luz UVB, también evita efectos adversos en la piel. En otro estudio, el valor del SPF de 200 µg/mL de extracto de té verde que contiene 50% de EGCG fue de 14,29. Basándose en el cálculo inicial, se obtuvo que 250 µg/mL de EGCG darían un valor de SPF de aproximadamente 30; sin embargo, el SPF resultante fue de 18.88±0.42 por lo que la concentración probada se incrementó alrededor de 1,6 veces hasta 400 µg/mL obteniendo un valor de SPF de 31.02±0.72. Este valor indica que la actividad de fotoprotección de 400 µg/mL de

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EGCG alcanzó la ultra protección (SPF >15) (Yusuf et al., 2007). Otro estudio sugiere que la aplicación tópica de EGCG antes de la exposición a la radiación UVB también podría reducir eritemas y quemaduras de sol inducidas por estos rayos. Por lo tanto, cuando se aplicó el EGCG tópicamente, provocó un efecto fotoprotector. Lo que permite concluir que a un SPF más alto, la absorbancia también fue más alta. Sin embargo, hay que recalcar que en este estudio hubo varios factores que pudieron haber influido en la determinación de los valores de SPF, tales como la emulsión, el efecto y la interacción de diluyentes como los ésteres, emolientes y emulsionantes utilizados en la formulación, así como el pH y viscosidad (López-Hortas et al., 2020). (López-Hortas et al., 2020).

Safranal

El safranal es un compuesto aromático orgánico presente en los estigmas de las flores de azafrán (Crocus Sativus). Además, este componente volátil no sólo contribuye al aroma del azafrán, sino que posee propiedades antioxidantes, antidiabéticas, antiulcerosas, antiasmáticas, anticonvulsivas, antidepresivas, cardio protectoras, anticancerosas y protectoras de los rayos ultravioleta. La mayoría de estas acciones terapéuticas son aportadas por su potencial para sofocar las especies reactivas de oxígeno (ROS) (Saewan & Jimtaisong, 2015). Los componentes bioactivos del safranal tienen el potencial de proteger las capas epidérmicas y dérmicas de la piel, que se componen principalmente de elastina y colágeno. Cuando los rayos UV penetran en las capas dérmicas, hay una mayor producción de elastasa, colagenasa y la hialuronidasa, que provocan la degradación del colágeno, la elastina y el ácido hialurónico respectivamente. Estos componentes dérmicos son los responsables de proporcionar fuerza, elasticidad y humedad a la piel por lo que una perdida significativa de etas puede llevar a la formación de arrugas y flacidez de la piel, estas condiciones pueden ser promovidas por la exposición a luz solar (Madan & Nanda, 2018).

Se realizó una evaluación in vitro en donde se evaluaron las propiedades antielastásicas, anticolagenasas y antihialuronidasas del safranal, junto con la determinación del factor de protección solar (SPF). Donde la actividad fotoprotectora del safranal se determinó por el método de absorbancia de UV y el SPF calculado resultó ser de 6.6. La importancia de la actividad inhibitoria del safranal sobre las metaloproteinasas de matriz (MMP) responsables del envejecimiento y un alto valor SPF establecieron que esta molécula bio-orgánica es un fuerte agente fotoprotector. Es por esto por lo que su capacidad de eliminación de radicales libres, junto con las características mencionadas anteriormente, lo convierten en un componente valioso para ser incorporado a las formulaciones herbales de antienvejecimiento (Cefali et al., 2016).

Apigenina

La apigenina es un flavonoide vegetal que se encuentra en las hojas y tallos de plantas vasculares, así como en frutas, verduras y bebidas. Los flavonoides tienen capacidad de eliminar radicales libres presentes en el daño celular y la promoción de tumores, pues se cree que retrasan o previenen la carcinogénesis (Rithidech et al., 2005). Esto es debido los flavonoides pueden mantener la comunicación célula a célula lo que contribuye en su propiedad quimiopreventiva (Lepley et al., 1996). El mecanismo de acción que usa se puede describir en varias partes

• Detención del ciclo celular G1 al inhibir la actividad de la cdk2 quinasa en fibroblastos diploides humanos.

• Acumulación de la forma hipofosforilada de la proteína de retinoblastoma que es importante en la detención del ciclo celular; esta proteína es supresora de muchos tipos de cáncer entre los que resalta el melanoma (Instituto Nacional de la Nutrición (Mexico) et al., 2005).

• Inducción del inhibidor de cdk p21/WAF1.

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La apigenina es eficaz en la prevención de carcinogénesis de piel inducida por radiación UVA y UVB, esto se da al estimular la vía de respuesta de las proteínas supresoras de tumores p53-p21/WAF1. Así mismo, la apigenina es un fuerte inhibidor de la actividad tumoral inducida por TPA (enzima elaborada por el cuerpo) en células epidérmicas, puesto que favorece la proliferación de células mutadas (Shukla & Gupta, 2010)(Gómez García et al., 2007). De acuerdo con esto, se realizaron estudios en ratones en donde se descubrió que la aplicación tópica de este flavonoide antes de la irradiación UV es eficaz en la prevención de tumor génesis en la piel, puesto que inhibe la inducción de la actividad de ODC causada por los rayos UV. La apigenina protege los queratinocitos humanos de efectos nocivos de la radiación UV protegiendo el ADN por su propiedad antioxidante (Das et al., 2013). Conclusión Cada vez más, los consumidores buscan

productos que tengan menos impacto en el

medio ambiente. Hoy en día, los cosméticos

son más "ecológicos", ciertos procesos sobre

las materias primas utilizadas en la

formulación de los productos son realizados

para para evaluar la eficacia, comportamiento

y la toxicología que puedan tener sobre las

personas y el medio ambiente. Esto ha

provocado la búsqueda de bio cosméticos por

parte de los consumidores. La formulación de

cosméticos naturales u orgánicos es el desafío

para garantizar la estabilidad, la seguridad y la

eficiencia. Muchos productos naturales

pueden utilizarse en productos cosméticos que

cumplen una función biológica y una

evaluación toxicológica. El uso de plantas y

hierbas tiende a aumentar en el mercado de

productos cosméticos con más sostenibilidad,

por lo que las empresas pueden adquirir más

cuota de mercado.

La formulación de cosméticos utilizando materias primas provenientes de recursos naturales es una tarea difícil pero no imposible. Es un desafío al que se están enfrentando las industrias cosméticas, en donde se debe hacer una investigación para poder conocer bien el comportamiento de cada sustancia dentro de una formulación y las propiedades y beneficios que estas tengan. El reto principal consiste en poder reemplazar las sustancias usadas comúnmente que sean perjudiciales o contaminantes por unas que sean amigables tanto con el medio ambiente como con las personas. Por lo tanto, se desea lograr sacar al mercado

productos que tengan las mismas

características que presentaban los cosméticos

que usan en su formulación sustancias no bio,

debe lograrse un producto con las mismas

características de rendimiento y de estabilidad

microbiológica físico-química. Adicionalmente,

otro desafío es que no hay un ente regulador

unificado que garantice la veracidad de la

información que se encuentra en la etiqueta

de los productos pertenecientes a los bio-

cósmeticos.

A pesar de que el interés por los productos con

compuestos de origen natural ha aumentado,

se encuentran pocos estudios que evidencien

el comportamiento de estas sustancias en

productos de belleza. Así mismo, no hay

suficientes estudios que evidencien las

características sensoriales que se logran con

estas sustancias en las formulaciones.

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