el sendero teosofico de la meditacion

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Articulo de Pablo Sender sobre Meditación

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EL SENDERO TEOSFICO DE LA MEDITACIN

Pablo D. Sender

Artculo aparecido en THE QUEST Enero 2011

Revista de la S. T. EUA

La Sociedad Teosfica fue probablemente la primera organizacin en tiempos modernos en promover ampliamente la meditacin en Occidente. Hoy, ms y ms personas son conscientes que la meditacin es un aspecto importante de la vida espiritual, y cuando entran en contacto con la Teosofa quieren saber qu tipo de prctica se recomienda. Aunque el enfoque Teosfico se abstiene de promover un sistema particular de meditacin para ser seguido por todo el mundo, en la literatura Teosfica puede encontrarse una gran cantidad de enseanzas acerca de la meditacin. En este artculo exploraremos algunos de los mtodos recomendados.

Objetivo

La gente llega a la meditacin por una gran variedad de razones. Muchos ven en ella una tcnica de relajacin, o un mtodo para reducir el estrs causado por la vida cotidiana. Otros la ven como una forma de generar estados emocionales y psicolgicos agradables, como paz, armona y alegra. Otros meditan con el fin de experimentar visiones o desarrollar poderes psquicos. Pero desde el punto de vista Teosfico la meditacin tiene un objetivo ms trascendental. Aunque esta prctica puede producir algunos de los efectos descritos anteriormente, su verdadero propsito es, como dice el Dr. I. K. Taimni, poner a la personalidad inferior en contacto consciente con el Yo Superior, hacindola cada vez ms consciente de su origen, destino y naturaleza divina (Taimni, 1970). Una vez que este objetivo se logra, la prctica de la meditacin puede llevar al aspirante incluso ms all. Geoffrey Hodson dice: El segundo objetivo [de la meditacin] es darse cuenta que el Yo Espiritual del hombre es por siempre una parte integral del Yo Espiritual del Universo (Hodson, 2003).

Si uno llega a la meditacin solamente con el fin de derivar beneficios fsicos o psicolgicos, una prctica simple puede traer los resultados deseados. Este tipo de prctica es con frecuencia la ms adecuada para las personas que comienzan a explorar la meditacin. Sin embargo, sin bien puede sentar las bases de un enfoque ms profundo, en s misma puede no ser suficiente para permitirle al aspirante entrar en contacto con su verdadero Yo Espiritual. Para alcanzar tan alto objetivo la prctica de la meditacin tiene que cumplir ciertas condiciones, como se mostrar a continuacin. Adems, toda la vida del aspirante tiene que sintonizarse gradualmente con tan elevado propsito. Por esto es que la tradicin Teosfica ve la meditacin como slo una parte de la prctica espiritual, que debe acompaarse de estudio, servicio, auto-conocimiento, y un esfuerzo general hacia la auto-transformacin.

Fundamentos

Lo primero que la mayora de la gente pregunta cuando se aproxima a este tema es qu tcnica de meditacin deberan practicar. ste puede no ser el mejor lugar para comenzar. Antes de empezar a caminar uno debera estar seguro que va en la direccin correcta. Hugh Shearman escribi: La cuestin, entonces, no es qu tcnica de meditacin se est usando, sino quin la est usando, qu motivacin ha puesto en marcha este proceso (Shearman, 1981). Como ya se ha dicho, la meditacin Teosfica pretende trascender el yo personal. Si es usada como un medio para el engrandecimiento personal, esta prctica puede producir algunos resultados a ese nivel, pero es improbable que tenga efectos trascendentes. Es importante reflexionar sobre este asunto porque la espiritualidad es frecuentemente abordada de una forma mundana; como un proceso de adquisicin. Uno puede no estar acumulando objetos, y sin embargo estar tratando de adquirir virtudes, paz, felicidad, etc., como posesiones personales. Si bien es cierto que el desarrollo de las virtudes es necesario en cierta etapa de nuestro crecimiento espiritual, stas slo pueden florecer cuando son buscadas, no para nuestro goce personal, sino porque son puertas a travs de las cuales nuestra verdadera naturaleza espiritual puede expresarse. La mayora de las personas no se da cuenta que el yo personal es la verdadera fuente de conflicto. Soltar lo personal y descubrir el verdadero Yo es el nico camino hacia la verdadera felicidad. De hecho, la meditacin espiritual comienza cuando uno es capaz de dejar atrs al yo personal. Las tcnicas son solamente los medios preliminares para llegar a ese punto, pero uno nunca ser capaz de alcanzar tal estado si medita con la intencin de adquirir algo. Como lo dijo Annie Besant: Meditacin significa esta apertura del alma a lo Divino, dejar que lo Divino brille adentro sin obstruccin del yo personal. Significa renunciacin. Significa arrojar todo lo que uno tiene, y esperar, vaco, a que entre la luz (Besant, 1918). As pues, en el enfoque Teosfico la prctica de la meditacin tiene como finalidad guiar al aspirante a un estado donde pueda dejar atrs el yo personal y todos sus procesos mentales, para poder entrar en contacto con su naturaleza espiritual.

Todas las tradiciones espirituales serias hablan de la necesidad de una preparacin fsica, moral y mental para poder meditar efectivamente. La tradicin Teosfica tambin enfatiza como parte de la prctica espiritual la adopcin gradual de un estilo de vida puro y saludable; el desarrollo de madurez emocional, que se consigue con una vida moral y con la disminucin de nuestros apegos, pasiones y deseos inferiores; el cultivo de la comprensin de uno mismo y del universo; y el desarrollo de una actitud inegosta. Esto, por supuesto, no significa que uno no pueda meditar comenzando desde el lugar donde se encuentra en este momento. Por el contrario, cuando el enfoque es holstico, la prctica de la meditacin ayudar en los esfuerzos hechos en estas reas, y viceversa.

Mtodos

Meditacin sobre conceptos espirituales

En este enfoque el practicante escoge un tema espiritual relevante y emplea todos sus poderes mentales para meditar, examinar y reflexionar profundamente sobre l. Cuando tiene lugar un proceso de indagacin con una mente centrada y calma existe la posibilidad de despertar la intuicin espiritual. Pero para que esto suceda, tiene que haber un esfuerzo por comprender la verdad del tema en su aspecto ms universal. C. Jinarajadasa dijo: A medida que la mente contempla las cosas en un marco de unidad, despierta en ella la nueva facultad de la intuicin. La conciencia, entonces, comprende la naturaleza interna y verdadera de todo lo que est presente ante la mente (Jinarajadasa, 1938).

ste es un buen mtodo para el principiante. Esta indagacin profunda estimula la mente superior o abstracta, que es la que percibe las realidades espirituales y recibe los destellos de la intuicin. De este modo, la meditacin sobre conceptos espirituales proporciona una comprensin profunda sobre la realidad de la vida y de uno mismo, generando sabidura gradualmente.

Algunos temas Teosficos centrales para meditacin son: la unidad de la vida, la ley del karma, la evolucin espiritual como propsito de la vida, el poder del pensamiento, y el verdadero Yo que se encuentra ms all de los vehculos de conciencia temporales. Tambin se puede meditar en aforismos espirituales. Una buena coleccin de los mismos se puede encontrar en libros como Pensamientos para Aspirantes de N. Sri Ram, Regalos del Loto (Gifts of the Lotus) de Virginia Hanson, entre otros. Tambin hay libros inspiradores como A los pies del Maestro (por Jiddu Krishnamurti), Luz en el Sendero (por Mabel Collins) y La Voz del Silencio (por H. P. Blavatsky) que pueden ser usados con este propsito.

Meditacin sobre virtudes

La literatura Teosfica explica que cada pensamiento y sentimiento atrae materia sutil que construye los cuerpos mentales y emocionales de quien los genera. Es a travs de estos cuerpos que la persona piensa, siente, percibe el mundo y reacciona ante l. La meditacin sobre una virtud purifica gradualmente los cuerpos sutiles y les permite vibrar en respuesta a emociones y aspiraciones superiores y ms refinadas. Adems, este tipo de meditacin ayuda a expandir la conciencia a travs de un comprensin profunda de la naturaleza real de las virtudes. Recordemos, no obstante, que cuando meditamos en una virtud, debemos hacerlo con humildad por amor y devocin a esa expresin particular de la Verdad y no por la codicia de adquirirla.

Para esta clase de meditacin usted puede escoger cualquier virtud que lo atraiga, una cualidad que usted crea que todo aspirante espiritual debera tener. Como alternativa, usted puede examinar su carcter para identificar alguna deficiencia de la que quiera librarse. En este caso, no se debera meditar en la debilidad en s misma, sino en su virtud opuesta. As, si usted es irritable, puede meditar en la paciencia. Pero debe examinarse a usted mismo y tratar de ir a la raz del problema. Por ejemplo, si usted no es veraz, naturalmente pensar que debe meditar en la veracidad. Pero si usted no es veraz porque est ansioso por ser aceptado por otros, puede que en realidad deba meditar sobre la valenta o la auto-confianza.

Una vez que se escoja la virtud puede meditar, primero, tratando de comprender su esencia. Luego trate de percibir esa virtud en su interior, as como los obstculos internos que estn impidiendo su expresin. Finalmente, se puede meditar sobre cmo esta virtud se expresara en su vida, en situaciones generales o especficas.

Adems de la tcnica anterior hay un enfoque diferente, que involucra el uso de la imaginacin. En sta, usted se visualiza expresando la virtud. Annie Besant describe este proceso: Una de mis formas favoritas porque yo era muy irritable en mis das de juventud era el convertirme en la encarnacin de la paciencia; usted nunca vio un santo del tipo que yo era en mi meditacin; ms all de cmo pudiera haber sido fuera de ella durante el da, en la meditacin yo era absoluta, completa y perfectamente paciente! Luego, traa mentalmente a mi alrededor las personas ms desagradables y provocadoras que conoca, y aumentaba su poder de provocacin tanto como aumentaba mi propio poder de paciencia; y as haca un pequeo drama mental, en el cual ellos me provocaba de todas las formas posibles, y yo responda como una moderna Griselda (Besant, 1913).

La doctora Besant indica que esta tcnica requiere que uno se esfuerce por expresar tal virtud tanto como sea posible en la vida diaria, de modo que el proceso de construir los cuerpos sutiles no se deshaga durante el resto del da.

Meditacin en la Vida Una

Uno de los conceptos centrales de la Teosofa es que, en ltima instancia, no hay sino una Vida y un nico Ser animando todo en el universo. Aunque la conciencia en la mayora de las personas est obligada a trabajar a travs de lo que llaman yo, este lmite no es intrnseco a la conciencia. Es perfectamente posible percibir la Vida una tal y como se manifiesta en cada criatura porque, como muchos msticos han afirmado, no hay lmites para la conciencia.

Al principio de la prctica, la percepcin de la unidad se da principalmente a un nivel intelectual, o al nivel de la imaginacin. Gradualmente, esta percepcin se hace ms y ms intuitiva, hasta que se puede experimentar una expansin de la conciencia.

Un enfoque tpico para esta meditacin consiste en una expansin mental, en imaginacin, en todo el espacio, abarcando reas ms y ms grandes. A medida que la mente se expande, uno trata de concebir y sentir la unidad con todo, incluyendo cada manifestacin de la vida divina.

Puede comenzar imaginando que est viendo su casa desde arriba mientras trata de sentir la unidad con todas las personas que viven en all, sea que usted sienta afinidad o no por ellas. Luego, usted puede incluir aquellos que visitan su casa con frecuencia, as como otras formas de vida presentes, tales como mascotas, aves, insectos y plantas. No se enfoque en las formas, sino que piense en la vida divina que las est animando a todas. Tmese su tiempo en este paso hasta que se sienta listo para ir ms all. A continuacin vaya ms arriba, como si hiciera un zoom, por sobre la ciudad en la que se encuentra. Trate de sentir la unidad con todo lo que se encuentra all; con la gente buena, as como con la ignorante, la infeliz, o el criminal; tanto con los lugares bonitos como con los feos. Nuevamente, deseche las apariencias externas y trate de identificarse con la Vida una que est luchando por expresarse a s misma a travs de todas estas diferentes formas. Como C. W. Leadbeater escribi: Durante la meditacin uno puede tratar de pensar en el Ser Supremo en todo, y todo en l. Trate de entender cmo el Ser est esforzndose por expresarse a s mismo a travs de la forma (Leadbeater, 1996). Recuerde que el Ser universal es siempre perfecto, puro y divino, incluso si la forma obstruye y distorsiona su manifestacin.

Ascienda de la misma manera hasta que incluya su pas, el planeta, el sistema solar y finalmente el universo entero. Pero recuerde no ir muy rpido a travs de las diferentes etapas. No necesita pasar por todas ellas. Es ms importante hacer el mximo esfuerzo por comprender la unidad en cada paso, incluyendo en su conciencia todos los diferentes elementos que pertenecen a cada etapa de la meditacin.

Meditacin en un Ser Divino

Durante esta meditacin el aspirante pone ante su ojo mental un ideal de perfeccin, encarnado en la forma de un ser santo o divino. En la tradicin Teosfica el objeto de meditacin es normalmente un Maestro de Sabidura, o el Yo Superior. Pero el aspirante puede tambin meditar en una deidad, sabio, o persona santa hacia la cual sienta devocin.

Para que esta meditacin sea efectiva, es necesario tener cuidado de no proyectar las propias limitaciones tales como sentimientos de celos, parcialidad, ira, o egoismo sobre el ser divino. De otra manera no ser posible ponerse en relacin con lo sagrado. El Mahatma Morya nos advierte acerca del magnetismo y los resultados invisibles procedentes de creencias errneas y sinceras. Los pensamientos son cosas vivientes, y cuando los aspirantes sostienen una creencia errnea, sta atrae millones de influencias extraas, entidades vivientes y agentes poderosos alrededor de ellos que bloquean las influencias espirituales (Barker y Chin, 1998).

Los Tesofos fueron los primeros en Occidente en hablar clara y abiertamente acerca de los Maestros de Sabidura, hace ms de un siglo. Hoy existen toda clase de ideas incompatibles acerca de ellos. Por ejemplo, la idea de la Nueva Era sobre los Maestros Ascendidos tiene caractersticas que difieren en aspectos muy importantes de la idea Teosfica. ste es un tema complejo, pero bsicamente la Nueva Era trata al Maestro como si fuera un conocido nuestro, pero dotado con poderes sobrenaturales, de modo que uno puede pedirle cosas para satisfacer necesidades personales. As, desde esta perspectiva, uno puede llamar al Maestro, visitarlo cuando uno quiera, y as sucesivamente, como si los Maestros estuvieran simplemente pasando el tiempo en los planos internos. H. P. Blavatsky escribi una vez una carta para ciertos miembros que haban comenzado a concebirlos de esta forma, dicindoles que ellos estaban profanando a los Maestros al hacer eso. Ella sostuvo que los Maestros consideran el plano fsico como una ilusin y no les importa mucho la personalidad. Su trabajo concierne principalmente al Ego Superior en desarrollo, y se relacionan con el plano fsico de una forma muy limitada, slo si es realmente necesario. Consecuentemente, en la visin Teosfica, las personalidades de los Maestros (sus cuerpos, nombres, etc.) no son tan importantes como en la de la Nueva Era. Los atributos externos son tomados slo como la sombra de ese magnfico estado de conciencia que el Maestro realmente es.

Para usar un Maestro de Sabidura como el objeto de la meditacin se recomienda primero que uno estudie su naturaleza como ha sido descrita en la literatura Teosfica. Los primeros captulos del libro El Camino del Discpulo (The Way of the Disciple) de Clara Codd pueden ser un buen punto de partida.[1]

Para esta meditacin se puede proceder de dos maneras:

Visualice la santa figura en frente suyo, concentre su mente en la imagen con un sentimiento de amor o devocin, o trate de sentirse uno con este ser. Si el sentimiento de devocin no es particularmente fuerte, puede meditar profundamente en la naturaleza real del ser divino, mientras contempla su imagen. Si es incapaz de formarse una imagen clara y estable, hay dos opciones adicionales: o bien se concentra en el sentimiento de la sagrada presencia ante usted, o medita con sus ojos abiertos mirando una imagen, estatua, o smbolo del objeto de la meditacin.

Como alternativa, la figura sagrada puede ser visualizada en la regin del corazn. Se reporta que el Maestro Koot Hoomi dijo: Su mejor mtodo es concentrarse en el Maestro como un hombre viviente dentro de usted. Haga Su imagen en su corazn y foco de su concentracin, hasta perder todo sentido de la existencia del cuerpo en ese pensamiento nico (Citado por Blavatsky, 1977-1991). El corazn es tenido en gran estima en la mayora de las tradiciones espirituales. Blavatsky escribi: El Corazn es el rgano de la Conciencia Espiritual es la morada del Hombre Espiritual, mientras que el Hombre Psico-Intelectual habita en la Cabeza (Blavatsky, Ibid). No obstante, es importante comprender que aqu el corazn no indica el msculo fsico. ste se refiere a un centro no fsico, situado en esa regin del cuerpo, a travs del cual podemos contactar la conciencia espiritual. La figura puede ser visualizada, bien en la cavidad del corazn, o bien levemente afuera del cuerpo, al nivel del rgano fsico, donde se encuentra el centro etrico sutil.

Meditacin en los Cuerpos Sutiles y ms all

El ltimo mtodo que exploraremos est basado en la enseanza Teosfica sobre los cuerpos sutiles. Por consiguiente, una buena comprensin de este tema ayudar enormemente el proceso de meditacin. De acuerdo a la Teosofa, adems del cuerpo fsico, los humanos poseemos varios cuerpos sutiles: el emocional, mental y causal. Los cuerpos fsico, emocional y mental componen el yo personal o inferior. Ms all de la personalidad est el cuerpo causal, que es el vehculo del alma individual, tambin llamado Ego Superior. Pero incluso ms all del cuerpo causal est el espritu o Mnada, la chispa divina en cada persona, que es una con el universo. En su Meditacin sobre la Vida, N. Sri Ram escribi:

El primer objeto de la meditacin es descubrir la propia individualidad espiritual como distinta del vehculo personal, fsico, emocional, mental, y la conciencia activa en ellos. Comenzamos con un ejercicio de disociacin buscando darnos cuenta de la distincin entre el Ser Espiritual Inmortal y la personalidad mortal cambiante. Luego logramos comprender que el Yo Espiritual del hombre es por siempre una parte integral del Yo Espiritual del universo, el Seor Supremo Omnipresente. El hombre es uno con Dios y a travs de l con Todo lo que vive.

Hay dos enfoques generales para este tipo de meditacin, que pueden denominarse positivo y negativo. El enfoque positivo busca generar la ms alta vibracin posible en cada cuerpo para elevar progresivamente el nivel de la conciencia. Por ejemplo, primero trate de generar un sentido de salud y armona en el nivel fsico; luego vaya al emocional y siente paz y amor; y luego al nivel mental y piense en un concepto espiritual que lo atraiga. Ahora vaya ms all e imagnese a usted mismo como el Ego Superior en el cuerpo causal. Sienta que su identidad real est ms all del cuerpo, de las emociones y la mente. Finalmente, trate de comprender que usted es una chispa del fuego divino, y more en el sentimiento de unidad.

El enfoque negativo, como su nombre lo sugiere, est basado en un proceso de negacin. En esta prctica, trate de darse cuenta que usted no es los principios inferiores, dejando atrs un cuerpo tras otro. Comprenda que, dado que el cuerpo fsico no es eterno, ste no puede ser su verdadero Yo. Haga lo mismo con los cuerpos emocional y mental, dejando atrs las emociones y los pensamientos. Finalmente, permanezca en el estado ms elevado posible sin imaginar nada, esperando por la llegada de la conciencia superior.

Tal meditacin ayuda a generar el hbito de identificarse con lo superior. Esto debera complementarse en la vida diaria con un esfuerzo por percibir las cosas ms all del punto de vista personal.

Este artculo ofrece slo un resumen de unos pocos mtodos de meditacin recomendados en la literatura teosfica. Para mayor informacin y material puede visitar el sitio de internet www.dzyantheosophy.org

Traduccin: Juan Guillermo Vieira

Bibliografa

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