el reino de dios en las pequeñas comunidades de fe

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El Reino de Dios, dentro de las Pequeñas Comunidades de Fe.(Crecimiento y cantidad de miembros dentro de las iglesias)

Cita Bíblica. Hechos 15:36: Después de algunos días, Pablo dijo a Berna-bé: Volvamos a visitar a los hermanos en todas las ciudades en que hemos anunciado la palabra del Señor, para ver cómo están.

Inicio recordando al lector una de las promesas que Dios ha dado a aquellos que se dedican al servicio dentro de la obra de Dios (servicio ministerial) y de la tarea pastoral junto con la predicación del evangelio. (1ª Pedro 5:2-4: “Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey. Y cuando aparezca el Príncipe de los pa-stores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria”) Personalmente me alborozo y agradezco a Dios, por la fe de hombres y mujeres que han dedicado sinceramente sus vidas a servir dentro del evangelio aun a pesar de sus imperfecciones, no valiéndose de ellas sino cargándolas como agen-tes (casi medios) para que Dios se glorifique en sus vidas, como ejemplo a los creyentes. Inicio así este ensayo, puesto que dentro de mí se mueve el ardiente deseo de la evangelización y el cuidado de las personas, como en muchos siervos de Dios, hago esto como un preámbulo para el tema en cuestión ya que este pone de manifiesto tópicos que se encuentran a la vista de todos nosotros pero que lastimosamente pasamos de largo debido a la costumbre del contacto con ellos. Este tema es el modelo del servicio pasto-ral en el área eclesial, que la biblia nos muestra, enfocándome en la cantidad de membresía de una iglesia. Vale recalcar, que ante toda teoría, su puesta en práctica es un largo trecho, sin embargo en la puesta en práctica de estas teorías ¡Gracias a Dios! estas (teorías) son realmente fáciles y prácticas.

La cita bíblica que he propuesto al inicio de este material, refleja una de las inquietudes pastorales del apóstol Pablo, fundador de las iglesias de Asia Menor en el Siglo I y uno de los grandes autores literarios del cristianismo, pretendo usar de ella, como punto inicial para acercarme al modelo de la iglesia cristiana en Siglo I. En este breve ensayo quiero referirme la cantidad de miembros que convendría poseer una iglesia, que a partir de acá me de-

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dicare a nombrar como “comunidad de fe” entendiendo esta como el grupo de personas que se reúnen a compartir una fe común en Jesucristo como Salvador y Redentor de parte de Dios para la humanidad. Deseo ser deta- llista en el desarrollo de este ensayo, ya que actualmente se mueve dentro de la iglesia cristiana una ansia exacerbada de acaparamiento y obtención de una gran cantidad de miembros dentro de las congregaciones, la cual, lejos de abonar a la expansión del evangelio, semejante acción está pro- ciendo que la sociedad cuestione muchos planteamientos eclesiales, debido a malas prácticas en las que incurren, un tipo específico de iglesias, que actúan de esta forma, ya que al parecer, en lo único en lo que se mues-tran interesadas estas entidades, es en la obtención de nuevos miembros o prosélitos. Por ello, aquí hare un breve repaso sobre algunas instrucciones bíblicas acerca de la vida en comunidad y de los anhelos bíblicos de evan-gelización. Para así contribuir a una correcta instrucción en relación a las prácticas de evangelización dentro de la iglesia del Señor. Digo pues la i- glesia en vez de preocuparse por llamar miembros a los templos mejor debe preocuparse con comportarse y vivir la fe, de tal manera que las mismas per-sonas decidan seguir el camino del evangelio de amor a Dios y al prójimo.

¿Por qué decir que Dios prefiere las Comunidades Pequeñas?“El rebano tiene que ser pequeño” Esta frase forma parte de los cuestiona- mientos que muchos sectores del cristianismo se están planteando ante las irresponsabilidades de los directores eclesiales y de las juntas directivas de muchas iglesias que descuidan el área pastoral dentro de sus miembros, y esto, en muchas ocasiones a pesar de las grandes capacidades económicas de una iglesia para cuidar de los desprotegidos, viudas, y necesitados en diversas modalidades dentro de las congregaciones. Pensemos en la ima-gen de un pastor de ovejas: “Rebaño de ovejas y un pastor a cargo de ellas, moviéndose por los campos y tierras de Israel en el tiempo bíblico” Este pas-tor no tenía preocupación de tener gran cantidad de ovejas (en este caso, sino solo las necesarias para el sustento familiar) ya que simplemente se procuraba por tener un cuidado y contacto personal con cada una de ellas. La imagen de un granjero (“pastor”) con miles y miles de ovejas, es más una imagen moderna y capitalista, en la que actualmente, esto es posible debido a que se utiliza de granjas para alimentar y tener gran cantidad de animales de granja, (de una forma “inhumana”) Es decir: (En una analogía forzosa

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pero pertinente) La imagen de un pastor que solo llega a predicar a la iglesia a miles y miles de personas, que tiene una gran burocracia para dirigirse hacia su persona, al punto que se tiene que hacer una cita con su secretaria o grupo administrativo para posteriores fechas y, en la mayoría de casos no atiende a dichas llamadas particulares o como única alternativa manda a un “pastor asociado” para ese trabajo, es una imagen más mercantilista, administrativa, institucional que forma parte de la mentalidad del siglo XXI y de la modernidad, en pocas palabras. No es bíblica. Quien actúa así, es entonces un motivador, y movedor de masas de personas, no un pastor de personas que cuida de ellas en sus momentos difíciles , ayudándoles en su camino y caminar. Respondo entonces a la pregunta: Dios prefiere los rebaños pequeños porque en ellos se cuida integralmente de todas las per-sonas que forman parte de la iglesia, por ello en vez de promover métodos de proselitismo se debe enfocar los recursos de la iglesia dentro de la misma membresía de las iglesia, ya que las ovejas se reproducen solas. Es decir las ovejas (miembros) se multiplican por ellas mismas, si ellas se encuen-tran bien cuidadas, he de recalcar que una oveja no solo vive de palabras o predicaciones, igual ocurre con los miembros (ovejas) de una iglesia.

¿Qué es una Comunidad de Fe?Quiero dar una definición bíblica pero orientada un poco al tema con la ayu-da de una descripción personal, En 1ª Corintios 16:19,1 Pablo saluda a la Iglesia de Corinto en nombre de otra comunidad y de conocidos de la iglesia en Corinto (Priscila y Aquila). Ha de notarse que la iglesia a la que hace alusión en el saludo, se encuentra en una casa, esto nos muestra, que en tiempos bíblicos las iglesias eran los hogares, en donde cantidades de pocas decenas de personas se reunían y cuidaban entre ellas. Una iglesia es entonces un grupo de personas que se reúnen en torno a su fe en Jesu-cristo como Salvador de los hombres y que crean entre ellas un vínculo de hermandad, de amor y cuidado interpersonal.2

1 1ª Corintios 16:19: Las iglesias de Asia os saludan. Aquila y Priscila, con la iglesia que está en su casa, os saludan mucho en el Señor.2 Colosenses 3:14: Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto.

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Características de las Pequeñas Comunidades de Fe.Las pequeñas comunidades de fe se caracterizan por dos actitudes peculi-ares: A) La preocupación de ellas es vivir su fe sin la pretensión de formar alrededor de ellas un aparataje religioso, es decir que preocupan primordial-mente en practicar su fe a través de relaciones interpersonales, lo que está muy lejos de montar un acto religioso en torno a la liturgia como lo hacían los cultos paganos de antigüedad. El ideal de las pequeñas comunidades de fe es la relación interpersonal entre todos los miembros de la comunidad. Sin duda esto fue la gran diferencia entre los cultos paganos y el cristianismo primitivo, ya que los paganos se preocupaban por la liturgia dedicada a un dios, en cambio los cristianos se relacionaban en torno a su fe, por medio de relaciones interpersonales, laborales, familiares y el cuidado de miem-bros de la iglesia. Una pequeña comunidad de fe se preocupa por vivir su fe a través de la práctica de sus principios cristianos sin mayores preocupa-ciones y pretensiones partidarias. B) Las comunidades pequeñas viven una interrelación bajo los valores de la solidaridad, compañerismo, amor frater-nal, ya que en ellas, se puede estar al tanto con mucha facilidad la situación particular de cada uno de los miembros en ella. La práctica de los valores del reino de Dios reflejados en los evangelios sinópticos y las enseñanzas de las epístolas del nuevo testamento son aplicables a todos los miembros de la comunidad. En pocas palabras: peculiarmente es más fácil vivir en una forma verdaderamente cristiana, entre todos los miembros de una iglesia pequeña.

El Efecto Mega-Iglesias: Pro y Contras.Por regla común, ya muchos han intuido ¿qué es una mega iglesia? quiero igual recalcar que el término es utilizado por sectores evangélicos, en El Salvador, se hallan mega-iglesias de diferentes denominaciones dentro del protestantismo evangélico. Una mega iglesia, es aquella que en sus celebra-ciones litúrgicas reúne más de mil miembros, y que cuenta con la capacidad de desarrollar una liturgia con una cantidad semejante de personas. Ahora bien, la mega-iglesia es buena si posee la capacidad administrativa y logísti-ca de atender a todos los miembros que posee y no solo en el sentido de o- frecer una liturgia desde un pulpito durante un par de horas a los asistentes, sino que además de ello, pueda velar por las necesidades individuales de cada uno de los miembros de ella, en el sentido ministerial y pastoral de

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atención a los miembros de la iglesia, de lo contrario una aglomeración de personas de este tipo, es como lo vimos al principio: solamente una entidad religiosa institucional y no una verdadera comunidad de fe.3 Veamos los ben-eficios (pro) y defectos (contras) de una mega iglesia.

PRO.• Mayor Cantidad de Miembros o Feligreses. Mucha cantidad de miembros equivale a mucha influencia social en el entorno geográfico de la iglesia en cuestión.• Proyección Social. La proyección social es requisito de las iglesias en el siglo XXI. Una iglesia no puede llamarse iglesia cristiana sino tiene proyección social en su entorno geográfico y lugar de acción social. Una iglesia con mayor cantidad de miembros puede realizar mucha proyección social debido a su capacidad de recursos humanos y económicos.• Administración Económica. Mucha cantidad de miembros, es manejar determinada cantidad de recursos económicos, los cuales permiten la facilidad de obtención de bienes materiales, con fin del cuidado de los miembros de la iglesia y de la evangelización, ya sea por medios de comu-nicación o de diversos recursos para evangelismo masivo.

CONTRAS.• Deficiente Vida en Comunidad. Usencia de vida en comunidad de manera interpersonal debido a la gran cantidad de miembros dentro de la congregación.• Deficiente Atención Pastoral. Dificultad de atender casos particu-lares y repentinos dentro de todos los miembros, a pesar de la división de la iglesia en sectores o distritos geográficos a cargo de pastores auxiliares.3 Latinoamérica se encuentra llena de este tipo de iglesias (iglesias con más de mil miembros) lo cual no es malo en sí, ya que esto es una muy buena circunstancia, pero esto lastimosamente si es en un fuerte abono a la cultura de individualismo que caracteriza a la civilización occidental, ya que no es difícil encontrar dentro de este tipo de iglesias a personas que por variedad de motivos no viven en comunidad dentro de la congregación, y por ende este modelo se aparta considerablemente de los parámetros bíblicos para la vida en comunidad.

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Sistema Celular y Crecimiento de la Iglesia. Personalmente he tenido contacto con el sistema de evangelismo celular, he sido parte de él, ejercien-do la labor ministerial y pastoral, en este, he visto surgir los beneficios y bon-dades que esta forma de evangelismo suscita en la tarea de evangelización, por parte de la iglesia cristiana.4 Pero también he visto el decaimiento de este sistema cuando aquellos que lo implementan olvidan la promoción del amor y de la vida cristiana dentro de su actuar metodológico. Ya que lo único que persiguen, agentes como estos, es la obtención de nuevos devotos den-tro de su organización.5 Este último fenómeno dentro del sistema de evan-gelismo celular, ha causado que las personas cuestionen el afán de evan-gelización de los cristianos. Ya que comportamientos sectarios han hecho su aparición y maliciosamente han tomado este método para introducir sus ideologías y alcanzar sus objetivos materiales y de diversa índole. De allí, que no todas las iglesias deben aventurarse a utilizar el sistema celular, sino hasta que primero estén seguras de que su objetivo sincero es la expansión del evangelio y del reino de Dios. Cuidando de no caer involuntariamente en proselitismo religioso o ideológico. En la temprana experiencia personal, claramente he presenciado como las mismas personas rechazan este tipo de acciones y a las entidades de no utilizan bien los métodos de evange-lismo o lo hacen a conveniencia. Tengo que decir entonces que la actividad pastoral debe ser minuciosamente cuidada, ya que no cualquier persona puede ser llamada pastor y montar el aparataje de eclesial administrativo de una iglesia, sino que debe hacerlo por el llamamiento divino de cuidar honestamente de las personas.4 Este sistema bien enfocado provoca el crecimiento acelerado de miembros den-tro de las congregaciones de las iglesias, ya que el solo hecho de que los mismos miembros de la iglesia participen en la evangelización por medio de sus casas o en ministerios dentro de las reuniones evangelísticas (células), sectores o distritos, es un mover altamente significativo del aparataje de una iglesia.5 Diré organización, ya que en un lugar en donde no se promueva la vida cristiana basada en el cuido de los creyentes a través del ayuda mutua y la práctica del amor, fácilmente se puede identificar un accionar sectario, en el sentido peyorativo de la palabra.

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Pequeñas Comunidades de Fe.Para ingresar a este apartado, quiero aclarar que el objetivo de este ensayo no es promover la mediocridad ministerial, y mucho menos debilitar el fervor evangelístico que caracteriza a los cristianos comprometidos con Dios, con respecto a la salvación de los hombres por medio de la predicación y de la procura de una vida justa fundamentada en la rectitud, sino que el objetivo de este, es hacer notar la necesidad de focalizar nuestro esfuerzo ministerial dentro de los miembros de nuestra comunidad, ya que el proceder evan-gelizador va unido estrechamente con el actuar ministerial y con la tarea pastoral primordialmente.

Pastores bifocales. Orientados en dos tareas: el Reino y al cuidado de sus hogares a través de un trabajo digno. No deseo detenerme mucho en este tema pero si deseo dejar muy claro que “El obrero cristiano es digno de su salario pero no es competente de lujos superfluos” Ahora bien, las pequeñas comunidades de fe se caracterizan porque los pastores que presiden dichos rebaños (o sea los siervos de los siervos de Dios) no solo se ocupan del cui-dado de la vida de la congregación y de los servicios del templo sino que se dedican a una trabajo secular para el sustento y cuidado de su familia y aun para socorrer a la membresía de la iglesia. Esto es parte de lo que diferencia a los cultos no cristianos del culto cristiano, es decir que la intención del culto cristiano es la promoción del estilo de vida cristiano y no la promoción de un sistema religioso, por ello, un pastor que se dedica al servicio en la iglesia y a un trabajo secular es alguien que no se verá tentado en convertir su minis- terio en un accionar religioso sino que estará moralmente solvente ante la sociedad y bien podrá desarrollar su ministerio de evangelización y cuidado pastoral de las personas.

El Rebaño tiene que ser pequeño. La membresía tiene que ser pequeña porque una cantidad de 100, 200, 300, o 1000 personas es una cantidad de miembros que es posible de cuidar para un solo ministro, pero más de 1000 personas hacia arriba es un poco más difícil de cuidar, más de lo que cualquiera se podría imaginar. Los miembros y el cuidado de ellos es el obje-tivo primordial de las comunidades de fe que se comprometen con la promo-ción del establecimiento del reino de Dios en la tierra. Ahora bien, me dirán entonces los lectores, teniendo el número preferencial de miembros de una

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iglesia6 ¿Cuáles son lugares idóneos para el servicio ministerial? En una frase muy de la denominación evangélica: “Los lugares difíciles o duros” Los lugares difíciles deben de ser nuestro interés, me refiero a aquellos en donde la carencia de valores morales y éticos es alta, igual la presencia de injusticia social, la alta inestabilidad de las relaciones interpersonales y en donde las condiciones económicas son adversas. De allí, que el objetivo de la iglesia no es solo predicar el cielo sino es también ponerlo en práctica en la tierra. Digo pues que el trabajo dentro de la pequeña comunidad de fe es el menos reconocido ante los ojos de los demás y también es el menos visto, sin embargo es muy apreciado ante los ojos de Dios. Esto es algo más que un consuelo digno de atención, es sobre todo una promesa de Dios y, es una de la cual estoy muy agradecido. Continúo diciendo que las comunidades pequeñas desarrollan mejor su tarea de cuidado a las ovejas y debido a ello, el esqueleto (sistema óseo) del Reino de Dios está constituido princi-palmente por comunidades pequeñas. Es decir que en relación al nivel de importancia y trascendencia entre las iglesias de gran cantidad de miembros y las de poca cantidad de miembros, son las de poca cantidad de miembros la que cumplen íntegramente la labor del cuidado de las personas y, es gra-cias a ellas, el motivo por el que el reino de Dios perdura y se mantiene en el mundo. Ya que a Dios le gusta actuar un poco en secreto y no en grandes cantidades de personas porque prefiere la fidelidad y fe sincera. Concluyo este apartado con el ejemplo de las primeras comunidades cristianas (estas eran casas, en las que probablemente no había más de unas treinta-cuaren-ta personas debido al estilo de vida dentro del modelo de la casa patriarcal del primer siglo) Me enfoco particularmente en la Iglesia de Éfeso, que se muestra en Apocalipsis 2:5 y a quien se dirige una carta del nuevo testa-mento que lleva su nombre. Aquí se nos muestra cual era el estilo de vida de las primeras iglesias. El escritor bíblico hace referencia al estilo de vida que compete a una iglesia cristiana y lo denomina como “Las primeras obras…”

6 Aunque si se cuenta con mucho más miembros que estos, esto representa un gran aporte al reino de Dios, solamente se ha de procurar, de cuidarse en constan-temente velar por cumplir los parámetros necesarios para vivir de una forma verda- deramente cristiana, en el estilo de vida en comunidad, entre todos los miembros.

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Veamos cuales son estas primeras obras y por ende el modelo ministerial para las iglesias modernas: De todas las aclaraciones que se encuentran de los versículos del 1 al 7, resalta el celo ministerial reflejado en: A) El Arduo Trabajo y B) Paciencia, por amor al nombre de Dios. Tradicionalmente este pasaje se utiliza solo para recalcar la defensa de la doctrina cristiana ante las herejías pero claramente queda de manifiesto que esta defensa se hace a través de un estilo de vida basado en el amor y en el cuidado del prójimo como mandamiento a los miembros de la iglesia. “…os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz” Efesios 4:1-3 “Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados. Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante. Efesios 5:1-2.

El Culto Pagano, la Asamblea Cristiana.La idea de que grandes cantidades de personas hagan marcha hacia un templo es más una idea relacionada a los cultos paganos y al culto del tem-plo judeo-israelí, que a la iglesia cristiana (asamblea), pues ella, lejos de eso, es la simple reunión de los creyentes para celebran su fe en un ambi-ente familiar, de allí, que en el libro de los Hechos de los apóstoles, todos los creyentes se llamaban entre ellos con el calificativo de “hermano” (Creo que esta no es una casualidad o antojo). Muchos sectores evangélicos y algunos sectores cristianos de diversas denominaciones todavía tienen la nobleza de dirigirse entre los miembros con el calificativo “hermano/herma-na” Veamos, con pericia, a ver a que nos suenan estos enunciados, si a culto cristiano o a culto pagano: Mercadeo de gran cantidad de alimentos y productos a las entradas de los templos y dentro de ellos. (A mí me suena a culto pagano) Deseos de construcción de edificios lujosos y la obtención de reconocimiento a nivel social (Personalmente me suena a culto pagano ya que un local dedicado para la reunión cristiana no tiene por qué ser lujo-so, necesariamente) Petición de ofrendas o donaciones especiales para el fortalecimiento de los servicios del templo (No deja de sonarme a culto NO cristiano), Cuidado de los enfermos y atención a los miembros necesitados (Asamblea Cristiana) Compartimiento de alimentos y víveres dentro de los miembros de la comunidad (Asamblea Cristiana) Promoción de la vida en

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comunidad entre los miembros asistentes de la asamblea a través de la pro-moción de las opiniones de cada uno de los miembros y del fortalecimiento las numerosas capacidades de ellos (Asamblea Cristiana). Si bien yo me tome la libertad de escribir entre paréntesis mi opinión personal para darla a conocer, esto no significa que cada quien tenga su propia opinión con respecto a los temas, yo doy mi opinión en base al modelo de vida en co-munidad propuesto para los cristianos. 1ª Corintios 12:31: “Procurad, pues, los dones mejores. Mas yo os muestro un camino aun más excelente” 1ª Corintios 13:2-3: “Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe…” La vida cristiana se basa en la práctica del sincero amor, sin esto, nada de ella sirve. Termino este breve apartado diciendo que si queremos ganarle las almas al diablo, hagámoslo por medio de nuestras buenas intenciones y de nuestra conducta, y no por proselitismo religioso o demostraciones de religiosidad, fundamentalistas y agresivas. Que nuestras buenas intenciones y nuestra buena conducta, sean nuestras mejores armas de evangelización. Mateo 5:16: “Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vues-tras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos”

Pablo dijo a su compañero Bernabé, volvamos a ver cómo están los her-manos en donde hemos anunciado la palabra de Dios, Hechos 15:36, esto demuestra que entre las intenciones de Pablo, el evangelismo no solo era que las personas se convirtieran y de allí nunca más volverlas a ver,7 sino que pretendía cuidar de ellas en su crecimiento espiritual, ahora bien, como podrá una sola persona cuidar a miles y miles de personas, muchos lo hace con la ayuda de otros ministros pero bíblicamente esto no es correcto ya que simplemente no hay relación entre el pastor principal y todos los miembros, muchos tiene mucha cantidad de miembros gracias a los medios tecnológi-cos y de comunicación, pero si quitamos esto, este tipo de ministros no7 De aquí, que el evangelismo en las casas por parte del sistema celular es más ori-entado al área pastoral, aún más que el evangelismo personal –persona a persona- aunque ambos son dos métodos bíblicos de evangelismo. Pedro predica a la familia de Cornelio el Centurión en un hogar (Hechos 10) y Felipe lo hace al etíope eunuco, al cual parece no vuelve a ver nuevamente (Hechos 8:26-39).

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conocerían a su membresía, ya que la relación interpersonal se acaba en poca cantidad de personas, a pesar de la ayuda de “diáconos (servidores)” o “ancianos (maestros)” en la iglesia. Y sobre todo ya que el objetivo del evan-gelio no es que haya grandes cantidades de personas en una sola iglesia sino que es el que evangelio llegue a todas partes del mundo en pequeñas comunidades de fe, por lo que la práctica de los valores cristianos supera en relevancia a la cantidad de miembros de una iglesia. Finalizo este apartado enfatizando que el “efecto megalomanía”8 no es efecto Reino de Dios, es decir que no es la intención de tener una gran cantidad de miembros en la iglesia la que contribuirá en el establecimiento del reino de Dios, sino que, simplemente lo hará la calidad de vida de las personas que forman parte de la comunidad de fe. Dios no es apocado en este sentido sino que Él busca la calidad en vez de la cantidad. ¿Por qué Dios prefiere los rebaños pequeños? Porque así los ministros encargados de la comunidad pueden atender ín-tegramente las necesidades del rebaño, produciendo verdaderamente una vida en comunidad.

Consideraciones Ministeriales.Volvamos a nuestro ejemplo del pastor de ovejas en los tiempos bíblicos: Para atender bien a todas las ovejas que constituían el rebaño, este debía ser pequeño, ya que cuidar, asear, dirigir, alimentar a una gran numero de ovejas de manera personal, es una terea que no ha de concluir en una sola

8 No deseo llamar el malestar en el lector, pero comento personalmente que lasti-mosamente me he encontrado con ministros engañados de una forma sincera, es decir que sus ansias de evangelización son muy sinceras pero en la práctica de sus ministerios, lo único que se hace es promover un sistema excluyente debido a los ideales exacerbados de reconocimiento y admiración, al punto de llamar la atención de las personas, haciendo presunción del número de miembros de su congregación, digo: Este accionar equivocado se encubre fácilmente interpretando mal unos pocos versículos bíblicos, ya que en la práctica, como hemos venido viendo; lo único que tales personas hacen en introducir una ideología proselitista en sus colaboradores y luego la legitiman en nombre de Dios, utilizando la vida de sus colaboradores y amedrentando la vida de aquellos que se acercan a su organización. Una iglesia no se reconoce por su cantidad de miembros sino por la forma en que sus miembros viven de acorde a los valores del reino de Dios.

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persona. Igual ocurre con los miembros de una iglesia. De allí, que en térmi-nos prácticos: cien, doscientos o trescientos (por decir algo) es el modelo del número de miembros que pueden tener una vida en comunidad y ser cuidados fielmente por un pastor, (Esto lo digo por mi experiencia ministerial, dentro de las comunidades evangélicas de El Salvador, en una diversidad de contextos tanto económicos, geográficos hasta culturales, por lo cual, dicha afirmación también puede estar sujeta a juicio con intenciones de ser actualizada) más de esta cantidad de miembros provoca la imposibilidad de una relación interpersonal entre el pastor y los miembros de la iglesia, la misma imposibilidad para relacionarse, surge en las relaciones de los miem-bros con los demás miembros de la comunidad. Esto significa que la misión de evangelización no cosiste en fundar megas iglesias sino en colocar una comunidad de fe en cada lugar del mundo, en donde se necesite predicar el evangelio, para que precisamente allí se desarrolle el reino y los valores que este conlleva, por ello, el efecto mega iglesia, es muy fácil sea proclive a convertirse en mercantilismo, publicidad o proselitismo religioso con inten-ciones de adquirir poder mediático, social o político. Así, el objetivo de las misiones debe ser el fundar una comunidad y uno una institución (organ-ización) religiosa.

Él le dijo: Está bien, buen siervo; por cuanto en lo poco has sido fiel, tendrás autoridad sobre diez ciudades. Lucas 19:17

Una iglesia de pequeña membresía es mejor que una iglesia, ¡Tan grande!, que debido a ello realmente no tenga la capacidad de cuidar pastoralmente a su membresía.Ya que no es la cantidad de miembros de una iglesia la que refleja la grandeza de esta, sino que, lo es la calidad de las relaciones que existen entre los miembros de esta, la cual se ve reflejada en la capacidad de apertura, recepción y recibimiento de nuevos creyentes en la comunidad. Por ello, a muchos pregunto: ¿Para qué quiere tener tantas ovejas si actual-mente no puede cuidar las que tiene? (Sin embargo, si se puede cuidar a muchas de ellas ¡En hora buena!) Y aconsejo a todos aquellos que fórmanos parte del ministerio pastoral, y aun a mi persona: Mejor cuide los miembros que ya tiene a su cuidado, ya que repito nuevamente: Las ovejas (miembros) se reproducen (multiplican) por si solas, si ellas están bien cuidadas y aten-didas, semejantes ocurre con los miembros de una congregación.

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Ejerciendo plenamente nuestra misión pastoral veremos como las iglesias crecen en su membresía y convivencia de acorde a los valores del Reino de Dios.

© SERIE: ESCRITOS MINISTERIALES Y ENSAYOS TEOLÓGICOS.Hecho el Depósito conforme a la ley.El Salvador, 2014.