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El municipio de Puerto Nariño y el resguardo indígena Ticoya: historia local e historia oficial Juan José Vieco Albarracín Universidad Nacional de Colombia

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  • El municipio de Puerto Nario y el resguardo indgena Ticoya: historia local e historia oficial

    Juan Jos Vieco AlbarracnUniversidad Nacional de Colombia

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    La constitucin del municipio de Puerto Nario y del resguar-do indgena Ticoya representan dos imaginarios que se confrontan y se complementan a travs de dos figuras territoriales diferentes, tanto en lo administrativo como en lo jurdico-poltico. De un lado, se tiene la visin del Estado y sus fronteras amaznicas, donde se procura implan-tar la nacionalidad y/o la colombianidad, a travs de la constitucin del municipio de Puerto Nario como representante de la soberana na-cional. Del otro lado, la figura del resguardo, cuya constitucin legal es reconocida como parte integrante de la vida jurdica, poltica y admi-nistrativa de la nacin, pero que representa una sociedad cuyos valores no son totalmente representativos de la nacionalidad colombiana y que no permite el completo dominio de la territorialidad del municipio por parte de sus autoridades, puesto que la casi totalidad del territorio es pro-piedad colectiva del resguardo Ticoya.

    A travs del anlisis del proceso organizativo del resguardo (iniciado en los aos 70 y 80 y que culmina con la fundacin en 2007 de Atico-ya Asociacin de Autoridades Indgenas Tradicionales del Resguardo Ticuna, Cocama Yagua, y en especial del papel cumplido por la figura casi mesinica del lder indgena Adelso Laureano, por una parte, y del establecimiento del municipio de Puerto Nario por otra, el artculo tie-ne como objeto ilustrar la manera como se confrontan la historia oficial, ligada a la constitucin del municipio de Puerto Nario y la historia local relacionada con el establecimiento del resguardo indgena.

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    Para ilustrar la forma en que estas dos historias se confrontan y en algunos aspectos se contradicen, se tomarn los siguientes relatos. Para la historia oficial de Puerto Nario, la presente ponencia se apoyar, en-tre otros, en dos documentos: el primero titulado Resea histrica de Atacuari: Puerto Nario ayer y hoy, de Jos Humberto Espejo Baos y que forma parte del libro Puerto Nario: el pueblo que se mira en el ro, de Ochoa, Wood y Zrate. Espejo Baos es hijo del cabo primero de la Polica Nacional Jos Humberto Espejo Hernndez, considerado como el fun-dador del corregimiento y del municipio de Puerto Nario. En segundo lugar, se utilizarn algunos apartes sobre la historia de la fundacin de Puerto Nario que se encuentran en el Esquema de Ordenamiento Terri-torial de Puerto Nario (EOT), elaborado por el consultor Gerardo Cha-varro Muoz y publicado en el 2007. Para la historia del resguardo de Puerto Nario y la fundacin del municipio de Puerto Nario desde el punto de vista de los indgenas, se fundamentar en los relatos que recog en el periodo del 2004 al 2011 con Mauricio Laureano Bento, uno de los lderes indgenas ms representativos del municipio.

    El Estado colombiano y el Trapecio amaznico

    En una zona de frontera, como el Trapecio amaznico colombiano, la forma de ocupacin territorial del Estado y de las instituciones aparece inextricablemente ligada a la idea del desarrollo y su aplicacin. En efec-to, el Estado y la sociedad nacional se perciben como los portadores de la luz civilizadora que sacar de la oscuridad y del salvajismo a la regin amaznica y a sus pobladores.

    El desarrollo del capitalismo en Colombia y su configuracin es-pacial, han establecido un proceso de desarrollo desigual entre sus di-ferentes regiones (Fajardo 1994). El pas ha estructurado su desarrollo social y econmico en torno a la regin Andina y, en menor medida, a la regin Caribe. La Amazonia, al igual que otras zonas de bosque tropical hmedo (Pacfico, Magdalena Medio, Catatumbo, Urab) se ha visto so-metida a una relacin de subordinacin con respecto al Estado central. El modelo de desarrollo implementado en el pas a partir de la dcada de los cincuenta se caracteriz por impulsar el proceso de urbanizacin y la agroindustria en el campo. Dentro de ese modelo de desarrollo no hubo, ni hay, cabida para las regiones marginales, en la medida en que los grandes capitales no tienen asegurados altos niveles de rentabilidad econmica, debido a la carencia de una infraestructura vial y a las consi-

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    derables distancias con respecto a los mercados de las grandes ciudades del interior, as como al escaso nmero de consumidores y su bajo poder adquisitivo. Para el capital resulta ms atractivo esperar que el proceso de ampliacin de la frontera agrcola y adecuacin de tierras sea llevado a cabo por colonos annimos que asumen los riesgos, mientras aguarda la valorizacin de los predios para su futura especulacin. Posteriormente, mediante expropiacin econmica o por medio del uso de la violencia, el gran capital invierte en las regiones aisladas, mediante el establecimiento de la ganadera extensiva o de inversiones en cultivos industriales como el arroz (piedemonte llanero) o la palma africana (costa Pacfica narien-se). Para la regin Amaznica, el predominio de la economa legal sigue siendo la ganadera extensiva; sin embargo, la base econmica regional est representada por la economa ilegal de la coca. En este esquema de apropiacin territorial, en el que el capital tiene el Estado a su servicio, el modelo territorial indgena, en sus aspectos econmicos, polticos y socioculturales, no est contemplado.

    No obstante, en ese proceso de desarrollo desigual de las regiones en Colombia, el Estado no ha sido simplemente un instrumento de poder exclusivo al servicio de las clases dominantes, ya que jams ha alcanzado un nivel tal de hegemona sobre el conjunto de la sociedad, pues siempre han existido intersticios donde los diferentes sectores y actores sociales generan contradicciones a las pretensiones hegemnicas de las clases do-minantes sobre el Estado. De hecho la Constitucin de 1991 es esencial-mente un esfuerzo de la sociedad colombiana para generar espacios de participacin ciudadana en la planeacin y en la definicin de polticas de desarrollo social, as como el reconocimiento de la diversidad tnica y cultural y la existencia de relaciones desiguales entre las regiones. Su importancia radica en que se constituye un nuevo pacto poltico de la sociedad colombiana para superar los grandes problemas del pas, como la violencia poltica, social y econmica y las desigualdades estructurales existentes a nivel econmico, poltico y social.

    Tradicionalmente el Estado colombiano no ha mostrado mayor inters por la regin Amaznica. No obstante, el control efectivo del territorio no se reduce a si el Estado hace o no presencia en regiones marginales como la Amazonia, sino a cmo se establecen y reproducen las estructuras polticas y econmicas que permitan la consolidacin de las relaciones de poder existentes, a travs de prcticas polticas como el clientelismo. Estas relaciones se fundamentan en la explotacin de los recursos naturales que constituyen la base material sobre la cual se edifi-

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    can dichas relaciones de poder. Efectivamente, la explotacin de recursos naturales, especialmente de madera y pescado para el caso del Trapecio amaznico, as como las actividades econmicas ligadas a la explotacin y puesta en marcha de la economa de la coca, constituyen la base sobre la cual se fundamentan las relaciones que establecen los pueblos indgenas del Trapecio amaznico con los actores sociales dominantes en lo econ-mico y poltico. Una vez establecidas estas relaciones, la territorialidad estatal se superpone a la territorialidad indgena, de manera que impulsa a esta ltima a integrarse y someterse a la visin territorial del Estado y de los actores sociales que detentan el poder poltico y econmico. La forma como la territorialidad moderna del Estado se materializa es a travs de los proyectos de desarrollo y de los programas asistencialistas, que posibi-litan la expansin del mercado y del modelo de desarrollo de capitalismo salvaje1 que caracteriza a la regin Amaznica.

    El Estado y la sociedad colombiana, independientemente de si ha sido un proceso intencional o no, han establecido una territorialidad so-bre la base de jerarquas y relaciones de subordinacin de las poblaciones locales (indgenas y colonos). De esta manera se genera un sistema de aprovechamiento y explotacin de los recursos naturales que en la prc-tica se traduce en un despojo de los territorios indgenas, expoliacin de los recursos naturales y la creacin de zonas de refugio2 alrededor de los pequeos resguardos, para el caso de los tikunas del Trapecio amaznico, y un desplazamiento de la poblacin de los colonos, una vez han adecua-do las tierras selvticas para establecer grandes hatos ganaderos.

    A pesar de que el discurso del Estado promulga el desarrollo soste-nible unido al respeto de la identidad de los pueblos indgenas, el ver-

    1 El capitalismo salvaje se refiere a un modelo extremo de capitalismo que lleva la ex-plotacin de los trabajadores a lmites de supervivencia, en condiciones de semi- o de esclavitud total, al tiempo que los excluye de cualquier beneficio de seguridad social, educacin, salud y de riesgos profesionales.

    2 Por zonas de refugio se entiende la estrategia desplegada por las comunidades indgenas que se han visto obligadas a concentrarse en determinados lugares a causa de una pr-dida importante de poblacin debido a factores derivados del contacto con la sociedad nacional, especialmente por la ocupacin de sus tierras ancestrales. En el caso de la comunidades del Trapecio amaznico, que si bien no han sufrido un agudo proceso de colonizacin como el experimentado por las comunidades situadas en el piedemonte amaznico, s han sufrido un lento pero progresivo problema de prdida de sus tierras, especialmente aquellas situadas en las riberas del ro Amazonas, por la expansin de la ganadera extensiva y actividades ligadas a la explotacin ilegal de la coca. Posterior-mente el Estado colombiano les reconoce la propiedad de la tierra mediante la consti-tucin de resguardos.

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    dadero objetivo de la territorialidad estatal es integrar sus territorios a la dinmica del mercado, a travs de la creacin de formas organizativas como el corregimiento y el municipio y, de esta manera, favorecer las relaciones de poder establecidas entre los pueblos indgenas y los actores sociales que detentan el poder econmico y poltico. La dinmica del mercado y las relaciones de poder que se generan, les restan capacidad de gestin y decisin a los pueblos indgenas para asumir e implementar proyectos de desarrollo de acuerdo con sus usos y costumbres, como lo estipula la Constitucin de 1991.

    Esta concepcin de la territorialidad por parte de la sociedad co-lombiana entra en abierta confrontacin con el concepto de territoria-lidad que manejan los pueblos indgenas amaznicos. Existe una con-cepcin distinta por parte de estos pueblos, donde otro tipo de factores cumplen un papel predominante en las relaciones sociales que establecen con su territorio, que incluyen aspectos ideolgicos, histricos, econmi-cos, polticos, ambientales y sociales. La territorialidad constituye, para los pueblos indgenas, la base objetiva para su reproduccin fsica y social e implica un derecho al uso y defensa de los recursos naturales.

    Para las tierras fronterizas y las marginales de la nacin como la Amazonia, la Iglesia tuvo un rol muy importante. El Estado colombiano firm con la Santa Sede un concordato en 1888, por medio del cual el Estado deleg en la Iglesia la tarea de reducir a los pueblos indgenas a la vida sedentaria e integrarlos paulatinamente a la nacin colombiana. Adems de la enseanza de la religin catlica y el castellano, las misiones catlicas fomentaron prcticas econmicas como la ganadera, activida-des que poco a poco lograran el objetivo trazado: la integracin de los indgenas a la civilizacin y a la vida moderna (Arango y Snchez 2006). En 1952, en los primeros aos de la fundacin del corregimiento de Puer-to Nario, sobresale la llegada de monseor Marceliano Canyes, figura emblemtica de la evangelizacin catlica y abanderado de la colombia-nidad en el Trapecio amaznico.

    Para el Estado colombiano, la regin amaznica solo cobr una importancia relativa a partir del conflicto con el Per en la dcada del treinta. No obstante, su reconocimiento se realiz a partir de su consi-deracin como regin dependiente y subalterna, habitada por una re-ducida poblacin indgena salvaje y de algunos colonos y campesinos aislados en lo profundo de la selva y cuya principal caracterstica espa-cial era la de poseer amplias zonas deshabitadas, las llamadas tierras baldas de propiedad de la nacin. Con la figura de los Territorios

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    Nacionales se cre una legislacin especial, en la cual las decisiones en torno a la regin corren por cuenta del poder ejecutivo, privando a esta o reducindole al mximo su participacin en el poder legislativo. En el debate regional al interior del Congreso de la Repblica, la represen-tacin de los intereses de la regin Amaznica recaa en el gobierno de turno. Los temas amaznicos en los debates del Parlamento se reduje-ron a alusiones en torno a conceptos vagos de soberana nacional y pre-sencia del Estado, realizadas por parlamentarios que solo conocan la regin por referencias mticas, coloreadas por trminos como infierno verde, salvajes o canbales.

    Para la administracin de los denominados Territorios Nacionales que cubran la regin Amaznica (con excepcin del departamento del Caquet), la Orinoquia (sin el departamento del Meta) y los Territorios Insulares, se cre, durante el gobierno de Lpez Michelsen (1974-1978), el Departamento Administrativo de Intendencias y Comisaras, Dain-co, entidad adscrita a la Presidencia de la Repblica y que funcion en-tre los aos 1975 y 1991, pues la Constitucin de 1991 dispuso su liquida-cin. El Dainco ejerca su jurisdiccin sobre los Territorios Nacionales, que equivalan a ms del 60% del territorio de la nacin, y adems le daba un carcter legal a la situacin de dependencia y subordinacin jerrquica de la regin Amaznica con respecto a los departamentos del interior del pas, de mayor desarrollo relativo, en la estructura poltico-administrativa del Estado. A los Territorios Nacionales pertenecan las intendencias y comisaras (siendo estas ltimas las de menor rango administrativo), que a diferencia de los dems departamentos del in-terior del pas, no contaban con representacin poltica propia en el Senado y dependan directamente de la Presidencia de la Repblica.

    Este organismo, que lleg a tener una nmina de ms de 150 fun-cionarios, no solo tena facultades legales y administrativas para disear los planes de desarrollo de la regin de la Orinoquia, la Amazonia y los Territorios Insulares, sino tambin de vetar las propuestas ciudadanas originadas en el interior de la vasta regin bajo su jurisdiccin. El lento proceso de integracin de la regin Amaznica a la nacin se haca bajo la consideracin de ciudadanos de segundo orden, a su vez habitantes de una regin de segundo orden. Esta figura es similar a la condicin reconocida por la Constitucin de 1886 a los indgenas como meno-res de edad. El establecimiento de Puerto Nario como municipio en 1984 y la constitucin del resguardo Ticoya de este municipio en 1990 se realizaron cuando todava exista este organismo.

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    La historia oficial: la fundacin de Puerto Nario

    La historia de la fundacin oficial de Puerto Nario, el segundo mu-nicipio del departamento del Amazonas, se encuentra resueltamente unida a la disputa territorial entre las naciones de Per y Colombia por el Trape-cio amaznico, y que en el mximo momento de tensin origin el con-flicto entre las dos naciones de 1932 a 1933. Una vez finalizado, Colombia impuls una poltica de presencia del Estado en el Trapecio amaznico, zona estratgica para la nacin, ya que garantizaba sus derechos de nave-gacin por el ro Amazonas, principal va de comunicacin que permita a la economa extractiva la exportacin de productos amaznicos a la econo-ma mundial.

    Los orgenes del conflicto se remontan a 1922, fecha en que se fir-m el tratado Lozano-Salomn y a su aprobacin final en 1928. Como lo anota Zrate (2008, 353), el tratado no fue dado a conocer en la re-gin Amaznica sino varios aos despus y en Iquitos y la regin del Loreto (Per), la gente se enter de su existencia por medio de la prensa extranjera. Esta situacin gener en la sociedad loretana una sensacin de insatisfaccin, pues consideraban, como lo titulaban los peridicos regionales de la poca, que por medio del tratado se ceder a Colombia gran parte del departamento de Loreto (Zrate 2008, 354). En efecto, el tratado reconoca los derechos de Colombia sobre Leticia y el territorio situado entre los ros Putumayo y Caquet, los viejos territorios cauche-ros donde el loretano Julio Csar Arana haba establecido su imperio del caucho. El 1. de septiembre de 1932, las tropas peruanas se toman Leticia y el conflicto termina con la firma de un tratado de paz, auspiciado por la Sociedad de Naciones entre Per y Colombia, en 1933.

    A partir de ese momento, Colombia intenta establecer una preca-ria institucionalidad en el Trapecio amaznico. Domnguez y Gmez, en su libro Nacin y etnias (1994, 225), nos dicen que en la dcada de 1920 [] exista un nmero reducido de pequeos fundos o chagras en el trayecto comprendido entre Atacuari y Leticia, por la margen izquierda del ro Amazonas, donde al fin y al cabo los colonos que all habitaban podan comercializar sus productos ms fcilmente. En los aos 40 y 50, la regin donde se ubica actualmente Puerto Nario era conocida como el Atacuari y sus lmites se ubicaban entre la desembocadura de la quebrada Amacayacu en el ro Amazonas y el hito fronterizo entre Per y Colombia en el ro Atacuari. En esos aos y hasta la dcada de los aos 70, los asen-tamientos eran de tipo disperso, las comunidades actuales solo se confor-

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    maron despus de la gran inundacin sucedida en 19703. La coyuntura de la inundacin fue aprovechada por el Estado colombiano para impulsar la formacin de poblados en torno a la oferta de servicios pblicos, a travs de la construccin de escuelas y puestos de salud, y para promover formas organizativas como las juntas de accin comunal.

    Para consolidar la presencia colombiana en el Trapecio amaznico, se comenz por impulsar la formacin de los entes administrativos existentes en el interior del pas para la gestin de los asuntos locales, tales como el co-rregimiento, la inspeccin de polica y el municipio. De esta manera, Puer-to Nario fue erigido como corregimiento de la regin del Atacuari el 18 de agosto de 1961 y fue elevado a la categora de municipio el 18 de enero de 1984 mediante decreto emitido por el Consejo Comisarial del Amazonas.

    Se trataba de dotar a esta regin, a travs de esas figuras administra-tivas, de instituciones representativas de una sociedad moderna como la nacin colombiana, pero en la cual no se tuvieron en cuenta las formas organizativas de los pueblos indgenas, pues eran consideradas como insti-tuciones atrasadas, propias de pueblos salvajes y que solo podran ser teni-das en cuenta como parte de la nacin colombiana una vez que estos pue-blos fueron reducidos a la vida civilizada y adoptaran patrones modernos en sus estructuras sociales, polticas, econmicas e ideolgicas. En efecto, para ninguno de los Estados nacionales de Brasil, Per y Colombia, los pueblos indgenas constituan una garanta para el ejercicio de la sobera-na nacional y ms bien generaban desconfianza. La situacin transfron-teriza del Trapecio amaznico era todava ms compleja, pues los pueblos indgenas de la regin, en especial los tikunas, los yaguas y los cocamas, estaban presentes en los tres pases y este hecho acentuaba la percepcin de los Estados nacionales de la imposibilidad de que estos pueblos cons-tituyeran una garanta para el ejercicio de la soberana nacional, en espe-cial despus de sucedido el conflicto entre Per y Colombia. Durante los aos del conflicto, algunos miembros de estos pueblos indgenas fueron incorporados a las filas de los ejrcitos nacionales, pero la mayor parte de ellos se marginaron e incluso se desplazaron de las zonas de confrontacin armada. Es por esto que para el Estado colombiano es claro que son las instituciones de la sociedad colombiana las que van a permitir construir la colombianidad en el Trapecio amaznico, y no las formas tradicionales de organizacin practicadas por los pueblos indgenas de la regin.

    3 En 1970 sucedi una gran inundacin del ro Amazonas que gener una emergencia en los asentamientos situados a orillas y en las islas habitadas del ro. Aprovechando esta coyuntura, el gobierno de la poca busc que los asentamientos se ubicaran en las partes altas de los ros Amazonas y Loretoyacu.

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    En este sentido, los dos documentos, el EOT 2007 y el de Espejo Baos (2006) mencionan la presencia de los indgenas al momento de establecer quines fueron los pobladores presentes en lo que es hoy Puerto Nario, cuando la nacin colombiana intenta establecer, de manera duradera, las instituciones del Estado. Llama la atencin que el indgena identificado como el primer habitante es un uitoto proveniente de la Chorrera y que llega a este lugar huyendo de la zona cauchera de Julio Csar Arana. En adelante, los dos documentos solo sealan la presencia de lderes indgenas como el curaca o el curandero en los actos relativos a la fundacin del co-rregimiento y del municipio, ocupando un lugar secundario. En el caso de Espejo Baos (181) se mencionan los nombres de las familias indgenas que estaban asentadas en el ro Loretoyacu al momento de su fundacin y que seran reubicadas para habitar en la zona urbana del corregimiento. Pero, anotan los documentos, a los pocos aos ya se encuentra la presencia de colonos colombianos como representantes de la colombianidad, pero que en realidad se dedican a las labores extractivas que sucedieron a la explota-cin del caucho: explotacin de madera y pieles y la pesca ornamental.

    Los primeros habitantes del municipio de Puerto Nario llegaron en 1940, poca en que el sitio era conocido como Atacuari; estos pertenecan a las etnias uitoto y tikuna y fueron don Luis Francisco Vargas y esposa, Alcibades Coello y esposa, Albino Coello y esposa.

    Cuatro aos despus arribaron al lugar dos colonos que se dedicaron a la pesca ornamental y a la explotacin de pieles; ellos fueron Liborio Guzmn y Jos Bandurriaga, se ubicaron en el sitio el barracn, actual-mente conocido como la hacienda.

    En el ao de 1950 el seor Luis Francisco Vargas y esposa comenza-ron a habitar a pocos metros del ro Loretoyac, considerndose el pri-mer habitante de la cabecera municipal, despus lleg el seor Alcibiades Coello y su esposa. Posteriormente, se integra al lugar el curandero tikuna Nicanor Palma y se incrementa el nmero de familias conformadas por el mdico Meza, el agente de polica Jos Humberto Espejo Baos entre otros y Monseor Marceliano Canyes.

    A partir de 1954-1960 el lugar poblado se conoca con el nombre del Zancudo por decisin e iniciativa de los colonos y el lazo de amistad que exista con los tikunas que vivan cerca del poblado. (EOT 2007, 38)

    Espejo Baos tambin menciona al seor Vargas, uitoto de la Cho-rrera, como fundador y a los primeros colonos que arribaron al lugar, mencionados por el EOT (2007).

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    En 1940 llega el seor Luis Francisco Vargas Martnez, perteneciente a la etnia uitoto de la Chorrera, casado con Cndida Coello de la etnia tikuna; llegaron a este lugar desplazados por los miembros de la Casa Arana, due-os de las caucheras (siringa). Y los seores Rafael Wandurraga Gmez y Liborio Guzmn colonos [] que se dedicaron a explotar madera, peces ornamentales y pieles. (Espejo Baos 2006, 186)

    Aunque Espejo Baos (2006, 186) menciona que entre 1945 y 1954 funcion la escuela Antonio Nario, primera institucin pblica pre-sente en la regin, para l es claro que el origen del municipio de Puerto Nario estuvo ligado al conflicto con el Per y que la primera institu-cin estatal fue la Polica Nacional. Incluso, entre 1945 y 1963 los comi-sarios del Amazonas fueron oficiales del Ejrcito, activos o retirados.

    En el conflicto armado que se present entre los aos 1932 y 1933 entre Colombia y Per por el Trapecio y la ribera del ro Putumayo, donde Colombia sali airoso y gan al Ejrcito peruano, se inici el denomina-do corregimiento de Atacuari y como capital se localiz en el cuartel de polica en la desembocadura del ro Loretoyacu con una vasta y amplia zona, rica en flora y fauna.

    [...].

    El 22 de mayo de 1951 llega a Leticia el siguiente personal de la Polica Nacional [] [menciona varios nombres entre ellos el de su padre, el cabo primero de la polica Jos Humberto Espejo Hernndez]. El 12 de junio del mismo ao fue trasladado al puesto de polica localizado en la desembocadura del ro Loretoyacu, afluente del Amazonas. (Espejo Baos 2006, 179-180)

    En 1961, el cabo segundo de la Polica Jos Humberto Espejo im-pulsa la fundacin del actual municipio de Puerto Nario, liderando y poniendo en prctica el deseo de los colonos y de los indgenas tikunas de consolidar un asentamiento urbano. Por lo anterior, es considerado como el fundador del municipio de Puerto Nario.

    En el mes de mayo de 1961, por iniciativa de los colonos y por lazos de amistad que existan con los tikuna que vivan cerca del lugar, se pu-sieron de acuerdo para organizar la poblacin, aprobando la propuesta del seor Jos Humberto Espejo Hernndez quien en ese entonces era

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    cabo segundo de la Polica y viendo las necesidades de los indgenas y de algunos agentes []. Se inicia la limpieza, con los habitantes, de tres hectreas aledaas a la zona prxima a urbanizarse, solo los sbados en una jornada laboral completa, con un personal aproximado de 40 entre hombres y mujeres, donde se consuma masato de yuca y se fumaba ciga-rrillo pielro[ja] hasta dejar totalmente socolado el terreno donde se iban a reubicar las personas que vivan en diferentes sectores de la ribera del ro Loretoyacu [...]. (Espejo Baos 2006, 180-181)

    Una vez finalizados los trabajos de limpieza del terreno por urba-nizar, se realiz un acto oficial en el que se determin el sitio donde se ubicaran las primeras calles del municipio.

    En agosto de 1961, mediante acta de fundacin toma el nombre de capital del Corregimiento de Atacuari y se disea el trazo de calles y carreras. (EOT 2007, 38)

    El 26 de agosto de 1961 se reunieron a las dos del tarde en la casa del seor Dosantos Prez, el teniente coronel de la infantera [] comisario especial del Amazonas y los doctores [] de Insfopal, hoy Empoleticia, el ingeniero de ECA hoy Aerocivil, el cabo segundo Jos Humberto Es-pejo Hernndez, corregidor y comandante del puesto de polica, Octavio Coello Pinto, curaca, y el secretario del corregimiento con el fin de llevar a cabo el trazo de la urbanizacin destinado, y que ms tarde llevara el nombre de capital del corregimiento de Atacuari.

    El trazo de las vas lo realiz el topgrafo [] demarcando tres calles y dos carreras de 20 metros, diez de calzada y cinco a cada lado del ante-jardn y una zona verde para el campo de recreacin y deporte, frente a la desembocadura del ro Loretoyacu, afluente del Amazonas. (Espejo Baos 2006, 182-183)

    De esta manera, se dio inicio a las obras de construccin de vas y lugares de habitacin y se dispuso de mecanismos para que la poblacin indgena se desplazara al corregimiento y construyera all su sitio de habi-tacin. En el siguiente aparte menciona los lugares donde se ubicaba en ese momento la poblacin indgena.

    Una vez terminada la urbanizacin, el comisario especial envi un bul-dcer DC-4 para el arreglo de las vas de comunicacin y autoriz al corregidor, cabo segundo de la Polica Nacional, Jos Humberto Espejo Hernndez, las entrega de los lotes de 20 por 20, los esquineros, y los

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    otros de 20 por 40 de fondo, a quienes lo solicitaron y por sugerencia del corregidor; el seor comisario colabora con materiales de construc-cin para los primeros que vinieran a construir sus viviendas como ta-blas, listones, puntillas [] diferentes medidas y medios de transporte para aquellos que quisieran venir a construir sus viviendas en el sitio urbanizado. Este apoyo se solicit con el propsito de atraer a los que vivan aislados de la zona urbanizada: Loretoyacu, Pichuna, Soc, Tara-poto, Correo, Zancudo, Zancudillo, San Martn de Amacayacu, Valen-cia y Mocagua. (Espejo Baos 2006, 183)

    Finalmente, se expide el Decreto 106 de 1984 por medio del cual se constituy el municipio de Puerto Nario, como segundo municipio del departamento del Amazonas.

    El Consejo Comisarial del Amazonas consolida la solicitud de la creacin de Puerto Nario como municipio, para lo cual el gobierno nacional, me-diante el Decreto No. 0106 de Enero 18 de 1984, lo erige como municipio, con el primer alcalde, el seor Luis Muoz Vsquez nombrado tambin por decreto. (EOT 2007, 38)

    De esta manera, por medio de la presencia de las instituciones del Estado colombiano se funda y se consolida la colombianidad en el Tra-pecio amaznico y se crean las condiciones para que la territorialidad ejercida por el Estado se superponga a la territorialidad indgena, a la vez que la invalida y desconoce. La territorialidad estatal es ante todo la organizacin de un espacio urbano, en el sentido de organizacin mo-derna del espacio. De esta forma se domestica la selva, que deja de ser un espacio vaco, baldo en trminos del Estado, habitado por indgenas en estado semisalvaje, para convertirse en un espacio urbano moderno, representativo de la colombianidad y sus instituciones.

    La otra historia oficial: historia local del resguardo y del municipio de Puerto Nario

    Para los pueblos indgenas, la historia de la fundacin del municipio de Puerto Nario est ntimamente relacionada con la conformacin del resguardo. Los habitantes tradicionales de esta regin han sido los tiku-nas, que constituyen la etnia ms numerosa, los cocamas y los yaguas.

    Bajo la presin de ocupacin del territorio del Trapecio amaznico por parte de narcotraficantes, fueron declarados los resguardos indgenas

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    en el rea de influencia de Leticia durante los aos setenta y en especial en los ochenta. En efecto, con el auge de la economa de la coca de los aos setenta, se comienza un proceso de despojo de las tierras de los indgenas, por medio de compras efectuadas en condiciones precarias de negociacin de estos ltimos. Debido a este proceso, la Divisin de Asuntos Indgenas del Ministerio del Interior, con la colaboracin de algunas ONG, gestiona ante el Gobierno Central la constitucin de los resguardos para el Trapecio amaznico. El primer resguardo que se cons-tituye en el Trapecio es el de Arara en 1979. Durante los aos ochenta se conformaron la mayora de los resguardos sobre el ro Amazonas en la jurisdiccin del municipio de Leticia. Su principal caracterstica es su trazado en forma de cuello de botella, ya que los resguardos tienen una limitada extensin sobre la ribera del ro, uno o dos kilmetros, mien-tras que la mayor parte de su superficie se extiende en la tierra firme (Vieco 2000, 2010, 2011).

    El resguardo Ticoya de Puerto Nario se estableci en 1990, inicial-mente sobre una extensin de 86.871 hectreas. Ms tarde, en el 2003, se ampli hasta la superficie actual de un poco ms de 140.000 hect-reas. A diferencia de los resguardos de la jurisdiccin de Leticia, donde a cada comunidad le corresponde un resguardo individual, en el resguardo Ticoya se localizan 23 comunidades en los ros Amazonas, Loretoyacu, Boyahuaz y Atacuari.

    Su relativa amplitud, con respecto a la escasa superficie de los res-guardos de la jurisdiccin de Leticia, se debe a que a partir de finales de los aos ochenta, y en especial durante el gobierno de Virgilio Barco (1986-1990), el Estado colombiano implement una poltica de recono-cimiento de amplias reas de la Amazonia colombiana como territorios indgenas y constituy los macrorresguardos de la Amazonia oriental colombiana.

    El proceso organizativo, que condujo a la constitucin del resguardo Ticoya de Puerto Nario, comenz, de acuerdo con Mauricio Laureano Bento (2004), en los aos ochenta del siglo pasado. Mauricio es un ind-gena tikuna, nacido en Campo Alegre, Brasil, en 1938. Al igual que mu-chos pobladores del Trapecio amaznico, a lo largo de su vida ha vivido en diferentes lugares de la regin. En los aos 60 Mauricio se encontraba en Santa Sofa, y de ah se dirigi hacia Puerto Nario en 1963. Ya haban pa-sado dos aos desde la fundacin del corregimiento en 1961. En esos aos, los indgenas se encontraban dispersos, las casas estaban distantes unas de otras, a veces a considerables distancias. Ya no existan malocas, las casas eran de tipo neoamaznico, de estructuras palafticas.

  • Figura 1. Resguardo indgena tikoya, Puerto Nario, Amazonas.

  • Figura 2. Municipio de Puerto Nario.

    Figura 3. Mauricio Laureano Bento.

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    Yo no soy de aqu, yo soy de otro lugar, yo vena de Santa Sofa en el ao 63, cuando organizando el corregimiento en este pueblo, estn organizados los indgenas, el seor Jos Humberto Espejo, ese es una autoridad polica y al mismo tiempo fue jefe de mando y despus baj a asumir como comandante y al mismo tiempo corregidor, pues esto fue creado por l primero cuando fue corregimiento y las comunida-des indgenas estn todos regados, as independiente unos viven por ac otros viven por all y as, y l sigue organizando este pueblito poco a poco y ya por ltimo cuando se form casero aqu le pasaron el corregimiento a lo que es ahorita la alcalda.

    Haba vivientes no ms, todava no existan comunidades, no haba organizacin de comunidades, no es como ahora. Viven as no ms, esa gente salieron de Tarapoto, ah unos grupitos que viva ah, y de otra parte venan de Cocha Redonda, pero todava no se pobl, no viven as vecinos, uno all, otro all, otro ms lejitos y as. No vivan en malocas ya, casas no ms. En aquel tiempo todava no hay divisiones, no hay comunida-des, solamente un global, hasta Atacuari, ya. Estaba Naranjales, Cocha Redonda, Tarapoto, San Francisco, Veinte de Julio y San Martn, esas no ms eran la que existan.

    Bueno de ah para adelante cuando yo llegu en 1963, ese puebli-to ya estaba poblado, ya haba vivientes, ya hay gente, cosa como de unos algo de 40 casas, de frente, pero no es todava, todava falta mucho, no existe todava puesto de salud, la Polica s estaba ac abajo, donde est ahorita base militar, ah era el corregimiento, todava exista ac abajo. Entonces despus paadelante sigue poco a poco, llegando un poco de gente, colonos, y vinieron de Leticia organizando poquito a poco, as va yendo. Yo viva en la bocana, en la isla de Zancudo, ya, yo estoy hablando del 63 al 65. Bueno, de ah paadelante sigue poblando, sigue llegando la gente. En el 70 hubo una inundacin bien grande y todos los que vivan en la baja, en la zona baja, se fue ubicando all, van solicitando sus lotes, en el 70. Era todava corregimiento, sigue de corregimiento. (Entrevista con Mauricio Laureano 2004).

    A Mauricio Laureano lo eligen como curaca de Puerto Nario en 1980, reemplazando a Emiliano Pinedo. En 1982, los pueblos indgenas de Brasil, Per y Colombia se renen en Benjamin Constant (Brasil) con el fin de aunar esfuerzos para garantizar su derecho a la tierra, debido a que en los ltimos aos comerciantes, polticos y especialmente narcotra-ficantes estaban apropindose indebidamente de las tierras indgenas en

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    los tres pases. La reunin cont con la participacin de ms de seiscien-tas personas y se extendi durante diez das.

    En el ao 80 me eligieron como curaca, como representante de las comu-nidades indgenas, mejor dicho como mandatario del pueblo, a m me co-rresponde San Martn, Naranjales, tena que velar por esas comunidades, es corregimiento. En el 82, yo llevaba ya dos aos, cuando de repente, se me present una invitacin al Brasil, a Benjamin Constant, me lleg una invitacin del Funai, que tambin estaba organizando en ese tiempo a los indgenas. En representacin de Colombia fuimos mi persona como cu-raca del corregimiento de Puerto Nario, que representaba uno solo a San Francisco y San Martn; Jorge Pea, curaca de Cocha Redonda; Cornelio Len de Macedonia y Grimaldo Pereira de Nazaret. De Brasil s hartos, bastantes. Entonces yo me fui a Brasil como gobernador de este territorio, ah nos reunamos, todos los indgenas, puros indgenas, los gobernado-res, capitanes, mayores, menores, profesores, promotores, nos reunamos como 600 personas, ese encuentro fue de 10 das de debate de cmo vamos a crear, a proteger y a formar nuestro territorio en cada zona, en cada fron-tera, por ejemplo Colombia, Brasil y Per, como vivimos en tres fronteri-zas, entonces, cmo vamos a crear, cmo vamos a fortalecer este territorio. Entonces nos pusimos de acuerdo, qu, cmo vamos hacer para organizar nuestro territorio... qu es lo que piensa? Qu es lo que piensa tal pas indgena como tikuna? Cul ser el premio de nosotros, para que nosotros recuperemos nuestro territorio? Por ejemplo, Brasil, cuando en toda parte, en Colombia, en Per, no hay organizacin de verdad, todo siempre los blancos, nos vienen a quitar nuestro territorio, nos vienen aduear y bue-no, nos echan, nos echan por donde, alguna persona viene de una parte, nos saca de una parte, de otra... entonces, qu vamos a hacer? Nos tene-mos que organizar Cmo vamos a hacer? Proteger y crear esta marcacin de tierras como le dicen all en Brasil y que nosotros decimos resguardo. Bueno, cada comunidad tiene que tener su propio territorio.

    En Brasil nos reunimos una semana a ver cmo es que nosotros nos vamos a organizar, como Brasil y como Colombia, cul es el mtodo y gua y que podemos hacer para proteger, para crear, para defender la re-forestacin, o cmo vamos a cuidar, ya, cmo vamos a guardar el bosque. Entonces nosotros decimos ah, bueno, cada cual tiene su informacin, su visin de cmo organizar, no, pues ver a ver cmo es que se organiza el pueblo, a un solo acuerdo y vivir en un solo territorio, es para todos, s. (Entrevista con Mauricio Laureano 2009)

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    Una vez que Mauricio regresa a Puerto Nario, comienza el trabajo organizativo en torno a reivindicar el derecho a la tierra en momentos en que la ocupacin del territorio por parte de los narcotraficantes amenaza-ba con expandirse de forma incontrolable.

    Bueno, entonces hablamos siempre entre nosotros, entre curacas, pues yo, Francisco Pinto en San Francisco, Jorge Pea en Cocha Redonda, pues entonces, ya empezamos nosotros a trabajar cmo vamos a hacer nosotros para sacar adelante? Pues nos unimos y todava no exista nada, nada de organizacin de lo que estamos viendo ahorita en el resguardo, nada todava y llegaron esa gente, pues todo en ese tiempo era la puerta de narco siempre era todo, mejor dicho, peligroso... bueno, como yo era el curaca de Puerto Nario, yo era el que llevaba ms del bulto, todo, todo, amenazas... yo me sal en ese critico, critico... pues no me pas nada, porque todo lo que hablan los dems no era cierto. (Entrevista con Mauricio Laureano 2009)

    En el ao de 1984, comienzan las gestiones para que el corregimien-to se convierta en el municipio de Puerto Nario. Mauricio, en su con-dicin de curaca, es llamado por el corregidor para ayudar en el proceso. Lo que en apariencia significaba la superposicin de la territorialidad estatal a la territorialidad indgena a travs del impulso de las formas ad-ministrativas de la nacin colombiana, los indgenas van a aprovechar la propuesta de conformacin del municipio para integrarla a sus propias reivindicaciones del territorio. De esta manera, es finalmente la territo-rialidad indgena la que se superpone a la territorialidad del Estado, pues con la conformacin del resguardo en 1990 y su ampliacin en el 2003, la casi totalidad del rea territorial del municipio pertenece al resguardo Ti-coya. Es por esto que, legalmente, el municipio de Puerto Nario como entidad territorial no tiene rea rural.

    El principal problema que se plantea para la creacin del municipio es la escasa poblacin que habita en el incipiente sector urbano del corre-gimiento y sus reas cercanas. No haba ms de sesenta familias, con pocos miembros, y se necesitaba asegurar un mnimo de trescientas personas para crear el municipio. En ese momento Mauricio se rene con otros curacas para analizar la situacin y se le ocurre la idea de organizar una fiesta cultu-ral indgena en Leticia, con lo tpico, incluyendo la eleccin de reinas de belleza. Esta parada cultural indgena se realizara con la participacin de algunas comunidades en representacin de todo el territorio reivindicado por los pueblos indgenas del corregimiento. La figura del municipio es vis-ta como un factor positivo en el proceso de asegurar la tenencia de la tierra

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    y la conformacin del resguardo. En este sentido, la estrecha visin de la territorialidad estatal reducida a un espacio urbano es reemplazada por la territorialidad indgena que abarca la totalidad del territorio.

    A comienzos del 84, mes de febrero, el corregidor me llam. Su nombre era Jos Ramrez Yepes, era leticiano, porque ya haba programado la so-licitud de pasar Puerto Nario a municipio, a Leticia. Y l me dijo, mire curaca, le toca esta tarea como curaca mayor, como mayor, eso es para ustedes, a m no me corresponde ese trabajo, es para ustedes los indge-nas. Este van a crear como municipio indgena, porque aqu hay mayora indgena tikuna, entonces por eso es que yo te busco, organice que el nmero de personas porque el comisario necesita 300 personas para crear este corregimiento para municipio. Yo digo no compaero eso est difcil porque no hay ese nmero, aqu solo hay por el momento 60 familias, entonces no se puede. Pero mire, djeme pensar un da ms, a ver qu analizo, para conseguir las 300 personas con tiempo.

    Entonces yo ya me fui a la casa, ya pens y dije qu voy a hacer por-que ese trabajo es duro, es largo, entonces pens ms bien voy a organizar con dos comunidades, San Francisco y San Martn. En aquel tiempo to-dava no hay divisiones, no hay comunidades, solamente un global, hasta Atacuari, ya. Entonces con el curaca Azulai Vsquez de San Martn y con el curaca Francisco Pinto de San Francisco, entonces les llam la atencin y nos pusimos a sentar, a conversar, yo hablaba como curaca mayor con ellos, mire que tenemos esta tarea para orientar, para crear este municipio de Puerto Nario, qu dicen ustedes porque se tiene que conseguir 300 personas, con pura, a pura cultura, ya, qu dicen ustedes, se puede o no se puede, lo aceptamos. Pero vamos a pensar bien primero, vamos a orga-nizarnos bien a pura tpica.

    En San Martn hay buena gente, cantantes tikunas, gente que saben hacer disfraces en yanchama. En San Francisco con el curaca preparamos tambin una reinada ah, una reina en San Francisco, en San Martn una tambin y aqu en casco urbano de Puerto Nario yo tambin saco una reina. Vamos a organizar bien, con tiempo, para que nosotros vamos a hacer esa demostracin, porque hay dos opciones para municipio, una es Santa Sofa y la otra es Puerto Nario. Bueno si ustedes desean, arranca-mos. Vamos a organizar, vamos a prepararnos, creo que eso no est muy difcil pero vamos a trabajar, porque tenemos un mes libre para trabajar porque dicen a ver si coronamos este mes de abril.

    Bueno, ah arrancamos a organizarnos, el curaca Azulai en su comu-nidad y el curaca Pinto en San Francisco y yo en Puerto Nario. Organi-

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    zamos por grupos y coronamos los 300 entre todos y podemos alzar este movimiento. Ahora cuando ya estamos listos y tenemos todas estas con-versaciones, con la dems comunidades, con dos, que ya estn organizadas, entonces yo me fui a donde el corregidor y le dije mire seor corregidor est el trabajo, ya tengo apoyo de dos comunidades para sacar el nmero de 300, lo tengo ya. Le dije, vamos a preparar antes de tiempo, vamos a sacar este trabajo con puro cultural, pura a punto de tpico. Yo ya tengo organizada, San Martn y San Francisco y yo ac me pongo a trabajar con la gente de Puerto Nario para que podemos salir adelante. Bueno listo

    Faltando un mes, vinimos primera salida all, a Leticia, ya, presenta-cin, con Santa Sofa y Puerto Nario. Ese tiempo no hay tantas movili-dades como ahora, nico que tiene bote grande era, que paz y descanse, finado Pompeyo Gamba, nos prest el bote y motor y el corregidor puso la gasolina. Salimos a las tres de la maana y llegamos a Leticia a las siete. Completo la gente, 300 personas, ya como caravanas, las tres comunida-des. Salimos ac a puerto de monseor y arrancamos, se disfrazaron to-dos, los cantantes, con mscaras, todo tpico, hicimos la caravana, hasta la calle de Parra, ah dimos la vuelta, la iglesia y frente a la gobernacin, que ese tiempo todava es comisara, bueno. Y Santa Sofa, poquita gente y no tiene suficientes presentaciones y quedamos nosotros en primer puesto, primera salida, qued en primer puesto.

    El 15 de marzo me llaman a Leticia, me fui a hablar con el goberna-dor, que qu estoy haciendo, si ya nos organizamos para organizar mu-nicipio, entonces yo llev la lista de las personas, esa informacin y al gobernador le dije como le tomamos nosotros esto, a punta de cultura, para que quede Puerto Nario, como se fund una parte, en principio, creada por indgenas, territorio indgena.

    Bueno, regresamos y seguimos organizando, ms gente. De ah, con la segunda vuelta, perdieron ya Santa Sofa, ya no presentaron ms, solo nosotros con ms personal y ms presentaciones, con ms personaje y ms disfraces, bueno.

    Faltando una semana, pa 1 de abril, de ah el comisario est conten-to, aprobado para crear municipio de Puerto Nario, aprobado. Bien, llegamos y yo dije, compaeros va a ser este primero de este mes de abril, vamos a prepararnos bien, con ms cosas, vamos a invitar ms gente, porque la coronacin va a ser en Leticia, el nombramiento ya, aprobacin de todo, para crear ya municipio de Puerto Nario. De verdad llega el da primero de abril, y los sacamos. O sea que la creacin del municipio fui yo y los fundadores lo que ya le nombr primero, los que fundaron, los que organizaron, apoyo de tal Jos Humberto Espejo pa poblar el pueblo,

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    s. Entonces para crear el municipio pues fue mi persona, yo fui el crea-dor, pero luego me anularon ah, cuando hablaron de creacin de muni-cipio, hablaron no ms de Jos Humberto Espejo y a m me dejaron por fuera. Quin sabe dnde pas el acta que yo firm cuando yo entregu. Acta de creacin, de aprobacin de municipio, eso se firm ah mismo en el corregimiento, ah firm yo. (Entrevista con Mauricio Laureano 2011)

    Mauricio Laureano trabaj como curaca de 1980 a 1984. Lo sucedie-ron varios lderes, entre ellos el primer curaca mayor de Puerto Nario, Antonio Morn. La figura de curaca mayor refleja la necesidad de contar con un lder que coordine el trabajo organizativo con los curacas nom-brados en las comunidades que surgan y que iban en aumento ao tras ao, hasta llegar al nmero de 23 comunidades en la actualidad.

    En 1988, la eleccin de curaca mayor recae en un hijo de Mauricio, Adelso Laureano del guila. Adelso fue un lder excepcional que dej una huella imborrable en el proceso organizativo, ya que logr la cons-titucin del resguardo de Ticoya en 1990. Estuvo en el cargo de curaca mayor entre 1988 y 1994, ao en que, segn unas versiones, muri ahoga-do, y segn otras, muri a causa de su afiliacin a la Unin Patritica, el partido poltico que surgi del fallido proceso de paz entre la guerrilla de las FARC y el gobierno de Belisario Betancur (1982-1986) y cuyos miem-bros fueron exterminados casi en su totalidad en una guerra sucia llevada a cabo por grupos armados de extrema derecha.

    Adelso adelant el proceso organizativo mediante continuos reco-rridos por las comunidades, incluso lider la conformacin de varias de las comunidades actuales. Haber recogido la idea impulsada por su padre Mauricio, de la unidad del territorio compartido por todos los vivientes, es lo que permite concebir la idea de crear el resguardo como un munici-pio. El proceso de constitucin del resguardo Ticoya como una unidad, facilitado por la creacin del municipio, va a marcar un claro contraste con los resguardos pertenecientes a la jurisdiccin de Leticia, los cuales son pequeos resguardos asignados individualmente a cada comunidad. Por su parte, el resguardo Ticoya est conformado por 23 comunidades.

    A Adelso lo nombran curaca en Arara, como era un solo globalizacin de Puerto Nario hasta Leticia, le corresponde los kilmetros, le co-rresponde todo. Fue en el 88. En el 90 ya lo eligieron como cabildo mayor, en reemplazo de Luis Pereira que era de Nazaret. Porque ms antes, el primer cabildo mayor fue Antonio Morn, despus Luis Pe-reira y despus Adelso.

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    Antes de que lo eligieran como curaca, se cre el Primer Congreso Indgena en Colombia. Como Puerto Nario ya es alcalda, hubo una seora que fue a trabajar all como juez y tena un amigo, y como Adelso era curaca se hizo amigo. Le hablaba bastantes cosas y le cay bien el mu-chacho, l era muy inteligente.

    Entonces cuando el seor fue para Bogot hubo el Primer Congreso Nacional de Indgenas, entonces ese seor la mand a invitar a Adelso, que fuera a Bogot para participar en el congreso nacional. Ese congreso dur como 15 das. Cuando l lleg, ya lleg con mejor idea, con mejor organizacin, con ms base, con ms conocimiento. Entonces cuando l lleg se organiz, todava no es curaca, estuvo como lder, como re-presentando a Puerto Nario. Entonces la comunidad ya mirndole as, entonces lo eligieron como curaca mayor en el 88. l tena 28 aos cuando lo nombraron, cuando l falleci tena 33. Cuando es curaca se va otra vez a Bogot, a preparar all.

    De ah, t sabes quin fue el que lo respald a l, fue un partido que se llama Unin Patritica en Bogot, el que era el partido de las Farc, ese fue el que lo dirigi a l. Cuando se vino de Bogot se vino con ellos, los congresistas de la Unin Patritica llegaron a la casa, para conocer bien a la organizacin en Puerto Nario.

    Como tres veces lo invitaron a Bogot. La ltima vez dur como un mes all en Bogot. Ese muchacho Adelso se fue a preparar all. Y cuando l vino de all, ah s vino con ms base, con ms conocimien-to. Ah empez a organizar, hizo su recorrido por las comunidades, reunindose con la gente para crear el resguardo. l fue el que cre el resguardo, de ah fue que naci el resguardo. Se cre desde all, desde el centro de nuestro territorio.

    De ah empez a organizar a las comunidades, enseando a los cura-cas de cada comunidad, as hizo su trabajo, pero como dijeron, la gente no alcanz a terminar todo su trabajo. Empez a organizar todo, para tomar lo que son fincas, lo que est tomado por los mafiosos, l busca el reglamento, si tiene documentos, si tiene propiedad. nicamente como dos personas como que tienen propiedad. Eso es tiempo de Incora. Mo-desto Cardona, Rafael Wandurraga en el pedacito ese que est Zoraida. Los dems eran los mafiosos que tomaron as no ms, ilegal, por eso luch y trabaj Adelso, pero l no lo poda terminar, pues muri.

    Adelso se ahog. Se fue a atarrayar como ahorita en invierno, suba mucho mijano de pescado, fue a atarrayar donde est ahorita Puerto Es-peranza en el chorro, en la correntada, ah fue que se ahog. La canoa se volte y la atarraya se le enred en el brazo y los jal padentro. Lo en-

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    contraron 90 minutos despus, pero ya muerto. Eso no era como ahora, era remolino, chorro, feo, feo. Usted sabe que cuando la muerte llama... (Entrevista con Mauricio Laureano 2011)

    Despus de la muerte de Adelso, el proceso organizativo decay, pues ninguno de los lderes que le siguieron tuvo mayores logros, unos por falta de dedicacin y carisma y otros por falta de tiempo, pues desempeaban labores contratadas con entidades oficiales. Incluso otro hijo de Mauricio, Edilberto, estuvo un ao en el cargo. Hasta que la designacin de curaca mayor recay en otro de los hijos de Mauricio, Jernimo Laureano del gui-la. Jernimo no quera asumir el cargo, pero su hermano Adelso se le apa-reci en un sueo y lo convenci de que l (Jernimo) era la nica persona que poda culminar el proceso emprendido por su hermano Adelso. Desde este momento, la figura de Adelso adquiere un carcter casi mesinico, espi-ritual, pues a travs de su aparicin le imprimi a la eleccin de su hermano Jernimo como curaca mayor una legitimidad que le permiti ejercer el car-go entre 1988 y 2003. Adems, gener el imaginario de una presencia latente que cuidaba desde el otro mundo el proceso organizativo del resguardo.

    Entonces de ah cuando muri Adelso, par la organizacin. Lo reem-plaz Rosendo Ahu, pero no puede trabajar, no puede seguir con lo que dej Adelso. Al tiempo renunci y sigui Edilberto, mi hijo, en reempla-zo de mi hijo. Trabaj un aito, era su secretario Juan Rojas. Le dej el cargo a ese muchacho. Pero Rojas trabajaba en el colegio como motorista, entonces no poda hacer nada porque no tena tiempo.

    Jernimo no quera saber nada de la organizacin, resiente mucho a su hermano y no quera saber nada de la organizacin. Entonces viene Juan Rojas y me dice, yo no puedo coronar todo lo que dej Adelso, no puedo, por el trabajo que tengo me ausento mucho de las reuniones, no puedo asistir. No ser que Jernimo est bueno para ese trabajo, si le gus-ta. Pues yo le dije pues habla con l, a ver si acepta o no acepta. Y habl con l y le dijo que no s, que l todava resiente mucho la muerte de su hermano, porque mi hermano muri por trabajar en la organizacin, por envidia, no quiero sufrir as como sufri l.

    Entonces Jernimo sigui pescando, as como est ahora. Un da en invierno, que estaba creciendo el ro, estaba pescando, en la noche, en Zancudo, con anzuelo, como a las siete u ocho de la noche estaba po-niendo carnada en su anzuelo, cuando l sinti que vena una persona alumbrando en el gap, como pescando. Jernimo no le paraba bolas, cuando vino as cerquita como a cinco metros le alumbr y apag la lin-

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    terna. Y al ratico Jernimo alumbr a ver quin es que viene por ah, pero no hay nada. Entonces Jernimo, ah, yo voy a descansar. Busc una tierrita por ah y guind su toldillo para descansar, cuando estaba medio dormido con los ojos cerraditos, pero estaba escuchando, cuando escuch una bulla en la canoa.

    Entonces sali Adelso y dijo: hermano que t haces aqu? Y Je-rnimo le dijo: nada estoy pescando. Y dijo Adelso: yo te acompao hermano, te estoy acompaando, yo no te dejo en ningn lado. Mira t sabes que, lo que yo te quiero entregar. Antes de que me sucedi esta cosa que estoy en el otro mundo, haba una carta que lleg de Bogot, una in-vitacin, pero yo s para qu, porque cuando me sucedi esto, yo la recib esa maana, eso est entera. Es una carta, tiene su forro, como forma de manila. Busca, esa carta est selladita, est entera. Pregntale a pap dn-de guard todos mis documentos, lo que tengo ah en el medio esa carta est ah, ah debe estar. Bscala hermanito y acepta ese cargo. Antes de que te ocurra algo de lo que me est pasando a m, termina ese trabajo que yo abandon ah, porque yo siento mucha tristeza de no poder organizar esa tierra. Trabaja, levntalo.

    Y Jernimo se levant, recogi su toldillo y anzuelos y como a las cinco de la maana lleg a la casa y me llam: Pap! Y me dijo as como llorando, y yo le pregunt: qu te pasa, hijo? Y me dijo: no pap, no me pas nada. Que dnde estn los libros de mi hermano, t le guardas-te? Y le dije: s, all lo tengo en su maleta. Dijo: bueno, entrgamelo que yo tengo que buscar una cosa. Pero l no me dijo nada. El busc, busc, busc, hasta que encontr y dijo: este papel es que me dijo mi hermano en mis sueos, l habl conmigo en mis sueos, este papel es el que l me explic, este es. Lo cogi y lo llev.

    Entonces Juan Rojas le llam la atencin, que l ya estaba con esa idea. Antes de que lo eligieran curaca, Jernimo tena una invitacin a Bogot y se fue. Cuando l vino de all, el viene preparado tambin, y ah le llamaron la atencin que si l aceptaba para gobernar. Eso fue en el 98. Entonces Jernimo s, que claro, yo necesito, necesito esa ayuda para terminar el trabajo que dej ac mi hermano Adelso, nadie lo puede levantar, para salir adelante con el resguardo. Y de verdad trabaj, luch y coron toda esa tierra donde est Puerto Esperanza, tierra de Veinte de Julio, Patrullero y de ah para arriba todo lo que es Aticoya, ya, Jernimo lo gan, al Ministerio. Tambin gan las comunidades de Puerto Rico, Doce de Octubre, Santa Teresita, Nuevo Paraso, San Juan de Soc, San-tarem, esas son las comunidades que l trabaj, l fue que las fund todas esas comunidades. (Entrevista con Mauricio Laureano 2011)

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    Jernimo, adems de organizar muchas de las comunidades actua-les, fue el lder del proceso que culmin con la formulacin del primer plan de vida del resguardo Ticoya en 1999. En 2003 Jernimo renuncia al cargo de curaca mayor, en medio de una crisis que surge en el interior de la organizacin y se crea una profunda divisin entre las comunidades: en un momento dado hubo simultneamente dos curacas mayores.

    Finalmente se impone otro lder, Manuel Ramos, que es nombrado en el 2004 como curaca mayor del resguardo Ticoya. Manuel desarrolla un importante proceso organizativo y bajo su liderazgo se formula la versin final del plan de vida que se publica en el 2008. Un ao antes, en el 2007, y tambin por su iniciativa, se constituye la Asociacin de Autoridades Tradicionales del Resguardo Ticuna, Cocama, Yagua de Puerto Nario, Aticoya, la cual ya no es presidida por el curaca mayor, sino que se crea la figura de presidente de Aticoya. Esta Asociacin es una figura reconocida por el Estado mediante el Decreto 1088 de 1993 y permite un mayor grado de autonoma con respecto a la anterior figura de cabildo mayor.

    En el 2009 surge una nueva crisis y Manuel Ramos renuncia, y en-tre ese ao y el 2011 se han nombrado dos presidentes de Aticoya. No obstante y a pesar de estos momentos de crisis, el proceso organizativo y la consolidacin de la territorialidad indgena a travs del resguardo es un proceso dinmico no exento de contradicciones, pero que contina su paso inexorable en aras de avanzar hacia la siguiente etapa: la consti-tucin del resguardo Ticoya, como Entidad Territorial Indgena (ETI).

    Conclusin

    Para el Estado colombiano la regin amaznica nunca ha constitui-do un espacio donde impere la colombianidad, sino un lugar salvaje, habitado por pueblos primitivos y algunos colonos aislados, refugio de criminales y de grupos armados y delincuenciales, que forman lo que el presidente Lpez Michelsen (1974-1978) denomin en su mandato como la otra Colombia.

    El conflicto con el Per en 1932 y la amenaza de perder una porcin de la Amazonia colombiana, en momentos en que todava la ciudadana se dola de la prdida de Panam, convoc por primera vez a la nacin colombiana en torno a la defensa de la Amazonia.

    Para consolidar la presencia colombiana en el Trapecio amaznico, se comenz por impulsar la formacin de los entes administrativos exis-tentes en el interior del pas para la gestin de los asuntos locales, tales como el corregimiento, la inspeccin de Polica y el municipio. De esta

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    manera, Puerto Nario fue erigido como corregimiento de la regin del Atacuari el 18 de agosto de 1961 y fue elevado a la categora de municipio el 18 de enero de 1984, mediante decreto emitido por el Consejo Comisa-rial del Amazonas. El objetivo era consolidar la territorialidad estatal en esta regin estratgica del Trapecio amaznico.

    Se trataba de dotar a esta regin, a travs de esas figuras adminis-trativas, de instituciones representativas de una sociedad moderna como la nacin colombiana, pero en la cual no se tuvieron en cuenta las for-mas organizativas de los pueblos indgenas. Para el Estado colombiano es claro que son las instituciones de la sociedad colombiana las que van a permitir construir la colombianidad en el Trapecio amaznico y no las formas tradicionales de organizacin practicadas por los pueblos indge-nas de la regin.

    Esta concepcin de la territorialidad por parte del Estado y de la so-ciedad colombiana entra en abierta confrontacin con el concepto de te-rritorialidad que manejan los pueblos indgenas amaznicos. Existe una concepcin distinta por parte de estos pueblos, donde otro tipo de facto-res desempean un papel predominante en las relaciones sociales que es-tablecen con su territorio, que incluyen aspectos ideolgicos, histricos, econmicos, polticos, ambientales y sociales. La territorialidad constitu-ye para los pueblos indgenas la base objetiva para su reproduccin fsica y social, e implica un derecho al uso y la defensa de los recursos naturales.

    La propuesta de conformacin del municipio, que en apariencia significaba la superposicin de la territorialidad estatal sobre la territoria-lidad indgena, fue aprovechada por la poblacin nativa para integrarla a sus propias reivindicaciones del territorio. A travs de la organizacin de una fiesta cultural tpica, con la participacin de tres comunidades en representacin de todos los vivientes que ocupaban el rea del mu-nicipio de Puerto Nario, se logr que la territorialidad indgena fuera la que finalmente se superpusiera a la territorialidad del Estado, ya que con la posterior conformacin del resguardo en 1990 y su ampliacin en el 2003, este ocupa la casi totalidad del rea territorial del municipio. El siguiente paso en la consolidacin de la territorialidad indgena ser la constitucin del resguardo Ticoya en Entidad Territorial Indgena.

    Bibliografa

    Arango, Ral y Enrique Snchez. 2006. Los pueblos indgenas de Colombia en el umbral del nuevo milenio. Bogot: Departamento Nacional de Planeacin.

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    Fuentes documentales orales

    Mauricio Laureano Bento, entrevista personal, Puerto Nario, Colombia, 25 de abril del 2004.

    Mauricio Laureano Bento, entrevista personal, Puerto Nario, Colombia, 12 de noviembre del 2009.

    Mauricio Laureano Bento, entrevista personal, Puerto Nario, Colombia, 4 de abril del 2011.