el misterio de cristo

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  • 7/24/2019 El Misterio de Cristo

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    SAN ELREDO DE RIEVAL

    EL MISTERIO DE CRISTO

    EN LOS SERMONES LITRGICOS

    -PRIMERA COLECCIN DE CLARAVAL-

    1

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    (Hna. Mara Jos - Hinoo!

    PRESENTACIN GENERAL LOS SERMONES LITRGICOS DE SAN ELREDO ("". #-$!

    LA PRIMERA COLECCIN DE CLARAVAL ("". %-&&!- E' )*o+ ,ansrios/ )0iion)s 1 ra0ion)s- Esrra 1 on)ni0o- E' 2n)ro 1 )' )si'o- Las 3)n)s "rini"a')s- La Sa2ra0a Esrira

    - La on,),orai4n 'i5r2ia

    TEMAS PRINCIPALES (".&6!

    APROXIMACIN AL MISTERIO DE CRISTON7ESTRO SE8OR JES7CRISTO PRESENTE EN EL ANTIG7OTESTAMENTO ("".-&$!- Pro,)sa 1 "ro3)a- Sara,)no 1 r)"r)s)nai4n

    - Es")ra 1 0)s)oEL VER9O SE HI:O CARNE ("". &$-&;!- Dios 1 )r0a0)ro- L? 0)' ,n0o- Por nosoros 1 "or n)sra sa'>ai4n- Ca,ino a Dios

    EL SE8OR @7E VENDR (". &B!- V)ni0a 2'oriosa 0) J)sriso- Lo >)r),os a' a' )s

    UNA CLAVE DE LA DOCTRINA ELREDIANA("". &-&!LA MEDITACIN CONTEMPLATIVA AFECTIVA

    EL MISTERIO DE CRISTO EN UNA SELECCIN DE TEXTOSBREVES ("". 6-6$!

    ANLISIS DE UNA SECCIN MAYOR

    SERMN 6B EN LA FESTIVIDAD DE TODOS LOS SANTOS- Pr)s)nai4n (".6%!- Es),a 0)' s)r,4n 6B (".6;!

    2

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    - T)*o 0)' s)r,4n 6B ("". 6B-#!- Co,)nario a' )*o ("". #&-#B!

    SNTESIS FINAL("". #-#!

    ANEXOTETO DEL SERMN $6 EN EL DA DE PENTECOSTKS("". $-$&! COMPENDIO DE LA PRIMERA COLECCIN DE CLARAVAL ("". $6-$%!

    BIBLIOGRAFA(". $;!

    E L M I S T E R I O D E C R I S T O

    EN LOS SEMONES LITRGICOS DE SAN ELREDO DE RIEVAL- PRIMERA COLECCIN DE CLARAVAL -

    PRESENTACIN GENERAL

    LOS SERMONES LITRGICOS DE SAN ELREDO

    A lo largo de sus 24 aos como abad (1143-1167), san Elredo dispens con abundancia ladoctrina espiritual a sus ermanos a tra!"s de la ensean#a capitular$ %sta se ten&a todos los d&asdespu"s del 'icio de rima, * con recuencia se comentaba alg+n cap&tulo de la egla$ En las

    grandes solemnidades lit+rgicas los sos de la "poca prescrib&an al abad predicar un sermn 1$ Estoes para .a!idad, Epian&a, ascua, Ascensin, entecost"s, todas las solemnidades de /anta 0ar&a,

    .ati!idad de /an uan autista, /an edro * /an ablo, /an enito, odos los /antos * edicacinde la 5glesia tambi"n el primer domingo de Ad!iento * el domingo de amos$ e au& nacen losamplios repertorios de sermones lit+rgicos ue o* tenemos de nuestros adres 8istercienses$

    /in embargo, esta acti!idad de predicacin de Elredo ue progresi!amente m9s all9 de sucomunidad * de las casas cistercienses inglesas, llegando asta los mon:es benedictinos * loscannigos$ ;alter aniel, en su biogra&a de Elredo seala en particular las predicaciones ante lasasambleas sinodales * de mucedumbres de pueblo2$ En la rimera 8oleccin de 8lara!alencontramos, por e:emplo, un sermn ue Elredo pronunci al clero en el s&nodo de ro*es, *sabemos ue ue elegido para dar la omil&a en la Abad&a de ;estminster con ocasin del trasladodel cuerpo de san Eduardo el 8onesor en el ao 1166$

    sus sermones en sentido propio, a dierencia desan ernardo * de otros abades cistercienses del siglo ?55 ue re!isaron los su*os con cuidado antesde diundirlos$ or este moti!o, a e@cepcin de la serieDe Oneribus Isaiae dedicada a ilberto deBoliot, obispo de Condres, todas las dem9s colecciones de sermones de san Elredo tienen

    1

    $ 8$ Ecclesiastica Officia Cisterciens du XIIe sicle 67,3-D, La Documentation Cistercienne 22, 'elenberg,einingue, Brance, 1F, p$ 11$2 $ =/ermones disertissimos et omni laude dignos in capitulis nostris et in s*nodis et ad populos perora!it, ui adducentas ni allor determinationes per!enerunt>$ aniel, ;$, Vita Aelredi32, B$ 0$ oGicHe, Condon, 1DI, p$ 42$

    3

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    claramente la nota de inconclusas3, e indica ue las mismas estaban destinadas al uso interno deie!al * sus iliales, o a comunidades amigas como 8lara!al * eading4$

    En este conte@to debe situarse el eco de ue !arios sermones de nuestro abad nos an llegadocon distintas redaccionesDpropias de las dierentes colecciones, de las ue cada una tiene sucontenido particular, su coerencia * su estilo propio$ ero como no a* una !erdadera =edicin>

    por parte del autor, estas repeticiones m9s o menos amplias de los mismos te@tos nos permiten tenerun acceso m+ltiple * mati#ado al pensamiento de Elredo * a su oratoria$;alter aniel, al ablar de las obras de san Elredo, menciona una coleccin de 2II sermones

    o* en d&a, gracias al traba:o del padre aetano aciti ue en las +ltimas d"cadas a identiicadouna serie de sermones lit+rgicos pertenecientes a Elredo6, se conocen un total de 1F3$ Estossermones se encuentran distribuidos en cinco coleccionesJ

    - Primera Coleccin de Claraval, compuesta de 2F sermones$Bue publicada casi enteramente por $issier en 1662$ Este te@to ue tomado por $ $ 0igne

    para la atrolog&a Catina t$1D publicada en 1FDD$Ca edicin cr&tica e &ntegra de esta coleccin se encuentra en 8orpus 8ristianorum,

    8ontinuatio 0ediae!alis755A, urnout-repols, 1F, con los n+meros 1 a 2F$Est9 traducida al castellano en adres 8istercienses t$12 * en iblioteca 8isterciense t$24 * t$2D

    (!er m9s detalles en la presentacin general de esta coleccin)$

    - Segunda Coleccin de Claraval, ormada por 1F sermones$Esta serie ue descubierta en 1F2 * la edicin cr&tica a sido publicada en 8880 55A,

    urnout-repols, 1F, con los n+meros 2 a 46$.o a* traduccin al castellano de esta coleccin (espera ser publicada en iblioteca

    8isterciense)$- Coleccin de Durham, ue consta de 32 sermones$

    24 sermones de esta coleccin ueron editados por 8$ $ aciti, $,Introduction, enAelredi !ie"allensis #ermones I$XLVI, 8orpus 8ristianorum,8ontinuatio 0ediae!alis 55A, urnout- repols, 1F, p$ K$

    6 $ 8$ aciti, $, LDeu% collections de #ermons de s& Aelred $une centaine d'in(dits$ d(cou"ertes dans les fonds deClun) et Clair"au% * en Collectanea Cisterciensia+4D (lF3) pp$ 16D-1F4$ran parte de estos sermones se an traducido al ranc"s a partir de la edicin cr&tica * an sido publicados por laabad&a .otre-ame-du-Cac ('Ha), en la coleccin ain de 8Mteau@, serie 3J-rimera 8oleccin de 8lara!alJ sermones 1 a 14 (!olumen 11) * sermones 1D a 2F (!olumen 12)$-/egunda 8oleccin de 8lara!alJ sermones 2 a 46 (!olumen 1F)$

    -8oleccin de uramJ sermones 47 a 64 (!olumen 23) * sermones 6D a 7F (!olumen 24)$-/ermn de 0ateo de ie!alJ 7 (!olumen 24)$-8oleccin de CincolnJ sermones FI a F4 (!olumen 24)$7 $ =8orpus 8ristianorum 8ontinuatio 0ediae!alis> en adelante se abre!iaJ 8880$

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    - n sermn aislado de Elredo (En la Anunciaci,n del #e-or) a sido allado por el $ aciti enuna compilacin de obras reali#ada por 0ateo de ie!al en el siglo ?555 F, * se encuentra editado en8880 55, urnout-repols, 2II1, con el n+mero 7$

    - Coleccin de Lincoln, compuesta de D sermones$

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    Cas edicionesde esta coleccin ueron mencionadas m9s arriba, pero aremos aora algunasprecisionesJ

    $5//5E,.ibliot3eca 6atrum Cisterciensium t$D, ono-Bonte, 1662, a seguido el manuscritoApero omitiendo los sermones 1D, 16 * 2F$ El sermn para el Ad!iento est9 ba:o el t&tulo de sermnpara los amos * el sermn marial a sido puesto al inal de la coleccin$

    $ $ 05.E,6atrologa Latina (C) t$1D, ar&s 1FDD, a tomado el te@to de issier$

    $ A855, Cor/us C3ristianorum Continuatio 2ediae"alis 55A, urnout- repols, 1F, areali#ado la edicin cr&tica de la coleccin completa, es decir inclu*endo los sermones 1D, 16 (uees un corto ragmento para la iesta de /an edro * /an ablo) * 2F$ El /ermn para el Ad!iento *el de la Asuncin de la Kirgen 0ar&a an sido reubicados$

    Cas traduccionesue tenemos al espaol siguen cada una un te@to dierenteJAE/ 85/E85E./E/ (88) t$12, Caminar con Cristo, A#ul, 1F6, traduce el te@to de C

    t$1D$5C5'E8A 85/E85E./E (8) t$24 * t$2D, #ermones Litrgicos 6rimera Colecci,n de

    Clara"al, 0onte 8armelo, urgos, 2IIF, traduce el te@to de 8880 55A

    8on!iene tener presente la concordanciaen la numeracin de los sermones au& estudiados, *aue -de acuerdo con lo mencionado m9s arriba- a* algunas dierencias entre la edicin cr&tica(8880 55A) del $ aetano aciti * la atrolog&a Catina (C 1D) de 0igne, * esta dierencia se

    encuentra tambi"n en las dos traducciones de ue disponemos en espaolJ

    C 1D 8880 55A(88 12) (8 24)

    1 1 (1I) 2

    2 3 3 4

    4 D D 6 6 7 7 F F 1I 1I (2) 11 11 12 12 13 13 14 14

    C 1D 8880 55A (88 12) (8 2D)

    - 1D- 161D 1716 1F

    17 11F 2I(2D) 21

    1 222I 2321 2422 2D23 2624 272D (21)- 2F

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    En este traba:oJ ara las reerencias del n+mero de sermn * de p9rrao se a seguido 8orpus8ristianorum 8ontinuatio 0ediae!alis (8880 55A), ue es la ue se encuentra tambi"n eniblioteca 8isterciense (8) 24 * 2D$

    ara las citas de los te@tos se an ido cote:ando las dos traducciones disponibles con la edicincr&tica, preiriendo una u otra o una combinacin de ambas$

    Estructura y contenido

    Esta coleccin est9 ormada por 2F sermones en los ue est9n representadas catorce iestaslit+rgicasJ al comien#o del ao en el primer domingo de Ad!iento * al comien#o de la /emana/anta en el domingo de amos cinco iestas del /eorJ Anunciacin, .a!idad, Epian&a, ascua *Ascensin tres iestas de la Kirgen 0ar&aJ .ati!idad, uriicacin * Asuncin * las iestas de /anenito, de la .ati!idad de /an uan autista, de /an edro * /an ablo * de odos los /antos$

    Ca disposicin de los sermones sigue el plan del ao lit+rgico * el contenido de la coleccin esel siguienteJ

    2 sermones en el Advientodel /eor ( 1- 2 )1 sermn en la Natividaddel /eor ( 3 )1 sermn en la ani!estacindel /eor ( " )1 sermn en la Puri!icacinde /anta 0ar&a ( # )3 sermones en el .atalicio de San $enito (%- & - ' )1 sermn en la Anunciacindel /eor ( ( )1 sermn en el domingo de Ramos (1) )2 sermones en el d&a santo de Pascua ( 11 - 12 )1 sermn en la Ascensindel /eor ( 13 )1 sermn en la .ati!idad de San *uan $autista ( 1" )4 sermones en el .atalicio de los Santos Pedro y Pa+lo ( 1#- 1%- 1& - 1' )3 sermones en la Asuncinde /anta 0ar&a ( 1(- 2)- 21 )3 sermones en la Natividad de /anta 0ar&a ( 22- 23- 2" )3 sermones en la esti!idad de ,odos los Santos ( 2#- 2%- 2& )1 sermn al cleroen el s&nodo de ro*es11 ( 2')

    na bre!e presentacin de cada sermn se encuentra en =Ane@o> (pp$ 42 a 4D)$

    El gnero y el estilo

    entro de la literatura mon9stica, el sermn es el g"nero m9s culti!ado, * lo es por dosmoti!os, uno patr&stico * otro pastoral12$ Enrai#ado en toda la tradicin omil"tica antigua, elsermn es al mismo tiempo un elemento de la obser!ancia mon9stica como *a emos mencionado$

    11 $ Ad clerum in s)nodo 4recensi, se reiere a la ciudad rancesa de ro*es, en lat$ 4recae$ Ca edicin de 0onte8armelo, urgos, 2IIF, atribu*e por error ue este sermn ue predicado al clero en el s&nodo de r"!eris$

    12$ 8$ Ceclerc, $, Cultura ) "ida cristiana, /&gueme, /alamanca, 16D, pp$ 2I6-2IF$ ara los sermones cistercienses,!er 8ase*, 0$, en Introducci,n al 6atrimonio Cisterciense& Estudiot$ 5 (acona 14), A#ul, 0onasterio rapense,1, pp$ 11-1D$

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    En la predicacin de san Elredo se destaca como una unidad !ital la lectura * meditacin de laalabra de ios ue re!ela el 0isterio de 8risto ( lectio di!ina), la celebracin lit+rgica ueactuali#a ese 0isterio * la ensean#a del abad ue prolonga * completa la insercin personal *comunitaria en %l$ As& dice, por e:emplo, al inicio del sermn en el omingo de amosJ

    Aunue la realidad misma de este d&a, ue todos los cristianos celebran con tanta de!ocin * tan

    intensamente, basta para mo!er nuestros cora#ones a la de!ocin, tanto por la lectura de la asin del/eor como por la memoria de nuestra sal!acin, no obstante debemos orecer el ser!icio de nuestrapalabra$ As&, en eecto, tenemos determinado para ue no nos alte ning+n medio con el cual se puedaninlamar nuestras almas en el amor de ios (1I,1)$

    En estos sermones el lengua:e de Elredo es sencillo * amiliar, nos parece estar escuc9ndolo

    ablar a sus mon:es en el cap&tulo de ie!al$ /u predicacin tiene una clara inalidad pedaggica *mistaggica, "l =parte> el pan de la alabra de ios e@poniendo los misterios ue la liturgia celebra(c$ D,1-3 * 1I,1) para =ediicar a los o*entes>$ or eso acomoda su palabra a la condicin de suauditorio (14,1) adapt9ndose a los m9s sencillos (c$ 4,3) para ue todos reciban el alimentoespiritual$ 8omo sabemos, al sermn capitular asist&an tambi"n los ermanos legos (c$ 13,F * F,11)$

    El estilo es directo, aable * cordial$ /e dirige a sus ermanos a uienes conoce, educa * corrigecon amor$ As& podemos imaginarnos algo de esa comunidad numerosa * eterog"nea ue eraie!al$

    iensen cmo ios los a tra&do au& de lugares tan di!ersos, * de u" di!ersas costumbres$ Algunosde ustedes cuando estaban en el mundo, Pu" eran por su seme:an#a sino un len, ue despreciaba porsu soberbia * riue#as a los dem9s * se cre&a m9s ue ellosQ Alguno de ustedes Pno era como un lobocuando !i!&a de rapia * estudiaba cmo pod&a robar las cosas de otroQ ($$$) RSu" ermoso es !er uealgunos de ustedes ue en el mundo eran tan sabios, tan poderosos, tan soberbios * astutos aora seantan simples e ignorantes como si no supieran nadaT (1,33$36)$

    Cada uno 3a recibido el /ro/io don de Dios+ (ste uno+ a7u(l otro $ no puede orecer m9s traba:o,otro !igilias, otro a*uno, otro oracin, otro lectio o meditacin ($$$) Sue no se ue:en, pues, nuestrosermanos legos ue no salmodian * !elan como los mon:es$ Sue no se ue:en los mon:es de ue notraba:an como los ermanos legos (F,$11)$

    N conocer el cora#n compasi!o de este padre abad ue ue san Elredo$

    R8mo me gusta !er ue el /eor de la 0a:estad se muestra en las acciones corporales * en losaectos umanos, no al modo de los uertes, sino al modo de los d"bilesT R8u9nto me conorta esto en midebilidadT ($$$) As& pues, si !iere ue mi ermano, de cu*a alma * cuerpo e de cuidar -pues no amo atodo el ombre si descuido alguno de ellos-, si !iera ue padece necesidad, sea por la aspere#a de los

    alimentos, de los traba:os o de las !igilias, si le !iera, digo, ue sure en el cuerpo o es tentado es elesp&ritu ($$$), si le !iera pues, as& aligido * tu!iera bienes de este mundo * le cierro mis entra-as+ 8c,mo/ermanecer9 el amorde Dios en mQ (3,33$34)$

    ran persecucin es tener cuidado de todos, surir por todos, entristecerse cuando uno est9 triste,temer cuando uno es tentado$ Su" insoportable es tambi"n la tentacin ue a !eces nos sucede, cuandoalguno de los ue alimentamos * protegemos * amamos como a nuestras entraas ( nutrimus etcustodimos et amamus 7uasi "isceras nostra), es !encido por el diablo asta tal punto ue se separa denosotros, o ue lle!e una !ida tan depra!ada * perdida ue nos es necesario apartarlo de nosotros$ /iustedes, ue son ermanos, sienten el dolor * una gran triste#a cuando ocurren tales cosas, Pcu9ntatriste#a piensan ue no tendremos nosotros, ue somos ermanos * padres * custodios, ue emosrecibido el encargo de dar cuenta de ellosQ (26,1F-1)$

    F

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    Las fuentes principales

    En estos sermones, como en las dem9s obras de san Elredo, se nota la inluencia de la doctrinade san Agust&n, asimilada e incorporada a su propia doctrina espiritual$ ambi"n, aunue en menormedida, encontramos reminiscencias de otros adres$ En particular de san regorio 0agno, de sanCen 0agno * de 'r&genes en algunos sermones$ ecordemos ue =entre los mon:es medie!ales, el

    mane:o asiduo de la Escritura !a inseparablemente unido a la lectura de los adres ue lacomentaron>13, * as& encontramos su uella en la e@"gesis b&blica posterior$

    unto a esta tradicin patr&stica, Elredo a recibido tambi"n la ensean#a de san ernardo$ /ibien no se dio por un trato personal, los escritos de ernardo estaban mu* diundidos * sin duda seallaban en ie!al ue era undacin de 8lara!al$ Ca meditacin de Elredo en estos sermones siguea la escuela clara!alense, aunue con acentos propios * personales$

    eniendo esto presente, podemos airmar ue la uente !i!a en ue bebe san Elredo * de la cualbrota su palabra es la /agrada Escritura, la liturgia * su propia e@periencia del misterio de ios$La Sagrada Escritura

    En cada esti!idad lit+rgica el misterio celebrado es des!elado a la lu# de la alabra de ios,recuentemente de auella misma ue se proclama en la liturgia del d&a$

    or lo general, a partir de uno o de dos pasa:es de la Escritura, Elredo orma la urdimbre * latrama de su meditacin, en la ue ir9 entrete:iendo ilos di!ersos de im9genes b&blicas *sentimientos ue nos !an implicando en ella de orma mu* personal$

    or eso podemos decir ue cada sermn es como un tapi# de !i!os * !ariados colores en el uecontemplamos el 0isterio de 8risto -al ue se unen la Kirgen 0ar&a * los /antos en susesti!idades- * ue es al mismo tiempo como un espe:o en el ue cada uno puede !erse rele:ado$

    .uestro abad entiende toda la /agrada Escritura, tal como la conceb&an los adres * toda latradicin mon9stica, como istoria de la sal!acin$ %sta se inicia en el antiguo testamento, secumple en el nue!o * se contin+a en la 5glesia * en cada iel asta su consumacin escatolgica$ oreso !a a buscar siempre a 8risto =oculto> en las Escrituras (11,2F) * nos ar9 !er =cmo concuerdanlos dos testamentos$$$ el e!angelio en la proec&a * la proec&a en el e!angelio> (4,16)14$

    En su e@"gesis !a a usar el m"todo de los cuatro sentidos de la Escritura 1D, como "l mismo nosdice con la imagen de la rueda ue !io el proeta E#euiel 16J =Auella rueda signiica la /agradaEscritura$ N esta rueda tiene cuatro caras, * unas !eces nos i:amos en una sola de ellas, otras endos, otras en tres * otras en cuatro$ /u primera cara es la istoria, la segunda la moralidad, la tercerala alegor&a, la cuarta la anagog&a, es decir, el sentido de las cosas superiores> (2,2)$ /in embargo, no

    se cie estrictamente a estas categor&as, e indaga sobre todo en el sentido literal * en el espiritual,como lo dice a !eces e@pl&citamente (c$ 4,17 11,4$2F 13,F 21,3-4)$

    13 $ Dei Verbum, 16$ 8$ Catecismo de la Iglesia Cat,lica1I4-1ID$1D$ Este m"todo, ue tiene su origen en la interpretacin tipolgica de las Escrituras ue los mismos autores del nue!otestamento icieron (c$ 1 8or 1I,11

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    urante la primera mitad del siglo ?55 se !an deiniendo tres tendencias a partir de este m"todoe@eg"ticoJ una en el estudio istrico, cr&tico * ilolgico de la iblia, otra en la l&nea del sentidoalegrico desarrollando una consideracin especulati!a * dogm9tica de los misterios de la e, *nuestros adres, siguiendo a san ernardo, dar9n la prioridad al sentido tropolgico o moral conuna rele@in m9s sub:eti!a * de e@periencia del misterio de ios, dando inicio as& a unaespiritualidad$

    En estos sermones, Elredo !a a utili#ar tambi"n los recursos ue eran abituales en lospredicadores medie!ales para e@traer del te@to sagrado un sentido ocultoJ

    - Ca etimolog&a de las palabras * de los nombres, para lo cual se ser!&an del traba:o reali#adopor san 5sidoro de /e!illa * san ernimo17$ or e:emploJ los =ebreos> ue signiica transilientes,lat$ (/$ ernimo,;om$ 3D) son los ue pasan de las obras * !icios de la carne (1,D6 * 1I,13) *=etania>, ue signiica =casa de la obediencia> (/$ ernimo, ;om$ 6I), es Abraam * el cora#nobediente a los mandatos de ios (2,1D * 13,2I)$

    - El uso del e:emplo como ilustracin * medio de persuasin, es tomado de la misma /agradaEscritura o de la naturale#a$ As& se nos presenta el e:emplo de los pastores del relato e!ang"lico, ue

    pasan la noce custodiando sus rebaos1F * a los ue debemos imitar !igilando nuestrospensamientos * acciones (3,17-1F) la trtola * la paloma, ue son a!es ue arrullan * nunca cantan,signiican las l9grimas * gemidos con los ue nos puriicamos (D,23) el cabrito por su mal olorsigniica la lu:uria, * el cordero la inocencia (1,34 c$ ,13)$

    - ambi"n !a a utili#ar el simbolismo de los n+meros$ or e:emplo, el n+mero tresJ las tres:ornadas de camino para orecer sacriicios al /eor1son los tres primeros grados de umildad ueensea san enito (6,22-27) o los tres grupos de catorce generaciones en la genealog&a de nuestro/eor2Ison tres grados de ascenso asta ios (24,1I) * el n+mero cuarenta ue tiene =proundosmisterios> (D,2I * 13,D-F)$

    La conmemoracin litrgica

    Sueremos destacar el aspecto lit+rgico-sacramental ue caracteri#a a estos sermones$En su meditacin, Elredo parte de la esti!idad lit+rgica ue la 5glesia celebra * de la alabra de

    ios ue en ella resuena, aciendo uso tambi"n de ant&onas, responsorios * otros elementospropios de la liturgia$ As&, por e:emplo, en un pasa:e !a a comentar esos !ersos ue toda!&a o*cantamos en nuestra liturgia del domingo de amosJ Al entrar el #e-or en la ciudad santa+ los

    ni-os 3ebreos con /almas en las manos /roclamaban la resurrecci,n de la Vida+ ) gritaban:Hosanna en las alturas (1I,12-1D)$

    ambi"n nos llaman la atencin sus reerencias al autismo (D,1D$1F$22 12,1I$31 23,1 2F,13-14, a la Eucarist&a (3,3-4I ,1 1I, 11,6-7$1I-12$2$31 12,26-27 2F,13-14$23) * a la 8onesin(1,7 D,1D$1F$22)$

    /in embargo, lo m9s signiicati!o es el sentido de actuali#acin * de contacto real con nuestro/eor ue nos orece la conmemoracin de sus misterios, * ue Elredo pondr9 de relie!e$

    17$ 8$ Ceclerc, $, Cultura ) "ida cristiana, /&gueme, /alamanca, 16D, pp$ -1I3$ Ca obra ue usa san Elredo es la

    de san ernimo Liberinter/retationis 3ebraicorum nominum&1F $ Cc 2,F1 $ E@ F,2D-2F, Vg&2I $ 0t 1,17

    1I

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    %l nos in!ita a alegrarnos en el /eor, porue slo =es un !erdadero go#o el go#o de lasal!acin> (3,14) ue se actuali#a en el =o*> de la liturgia (3,14 ,3$6 24,1-2$$$)21$

    8ada esti!idad ue la 5glesia celebra es lugar pri!ilegiado de encuentro con el /eor$ .uestroautor !a a ablar de una =!isita> del /eor a su amilia, con la cual nos alimenta * conorta en elcamino de nuestra peregrinacin prepar9ndonos para el d&a de la =gran !isita> (c$ 2D,1F-23)$

    nas !eces nos !isita por medio de algunos de sus sier!os, otras por medio de mucos, otras pormedio de su amad&sima 0adre, * lo ue es m9s, otras por s& mismo$ Pues u" son estas esti!idades delos santos, ue celebramos con tanta recuencia, sino !isitas ue nos ace nuestro /eor * con las uenos conortaQ (26,1 c$ 2I,1)$

    /abemos ue con el t"rmino =!isita>, Elredo designa una e@periencia uerte de la gracia di!inaligada a la con!ersin * al progreso espiritual (c$ 4,3I * #/ec55, cap$ K55-?555), * es re!elador ueau& lo aplica a la conmemoracin lit+rgica de los misterios del /eor, de la Kirgen 0ar&a * de los/antos$

    espu"s de su Ascensin, es+s, nuestro /eor * /al!ador, se a ale:ado de nosotros con su

    presencia corporal, pero seg+n su di!inidad * por la accin de su gracia est9 siempre con nosotroscomo lo a prometido 3asta el fin del mundo22 (,1 * 13,2D), * se ace presente de maneraparticular cuando recordamos sus misterios$

    En un te@to ue se repite en dos sermones dierentes, podemos !er cmo la accin lit+rgica !arestaurando la seme:an#a perdida en nuestras acultades (memoria, ra#n * !oluntad) corrompidas

    por el pecado23$ /i la /agrada Escritura nos recuerda las mara!illas ue ios, en 8risto, a obrado aa!or nuestro, por su =amorosa pro!idencia> (/ie /ro"idit) la liturgia las =representa con algunasacciones espirituales>$ Al acerlas as& presentes * actuales24 -despertando nuestra memoria *rea!i!ando nuestro er!or- interiori#amos la !ida misma de 8risto$

    8omo nos con!en&a tener siempre presente el bien ue Ues+s, nuestro /eorV nos ab&a eco con supresencia corporal, * como sab&a ue nuestra memoria est9 corrompida por el ol!ido, el entendimientopor el error, el deseo por la codicia, a pro!isto piadosamente ue no slo se nos recuerden susbeneicios en la Escritura, sino ue se representen (re/raesentarentur) con algunas acciones espirituales$or eso, cuando entreg a sus disc&pulos el sacramento de su cuerpo * de su sangre les di:oJ Hagan estoenmemoria ma$ or esta ra#n, ermanos, an sido instituidas estas esti!idades en la 5glesia para uepor lo ue representamos (re/raesentamus) de su nacimiento, o de su pasin, resurreccin * ascensin,est" siempre resca en nuestra memoria auella admirable piedad, auella admirable sua!idad * auellaadmirable caridad ue nos maniest en todas estas cosas (,1-2 * 26,2-3)$

    Esta =re/raesentatio> tiene su undamento en el mandamiento de nuestro /eor a susdisc&pulosJ Hagan esto es memoria ma2D$ e esta manera toda la liturgia participa de la gracia dela =presencia real> de 8risto en la Eucarist&a ue es al mismo tiempo =memorial>$

    21$ ecordemos lo ue dice el 8oncilio Katicano 55 en la 8onstitucin dogm9tica sobre la sagrada liturgiaJ=8onmemorando as& los misterios de la redencin, abre las riue#as del poder santiicador * de los m"ritos de su /eor,de tal manera ue, en cierto modo, se acen presentes en todo tiempo para ue puedan los ieles ponerse en contactocon ellos * llenarse de la gracia de la sal!acin> #acrosanctum Concilium, 1I2$ 8$ Catecismo de la Iglesia Cat,lica ,11I4)22 $ 0t 2F,2I$23 $ 8$ #/ec5, 12-13$24$ 8$ Catecismo de la Iglesia Cat,lica1363, 1364 * 1366$2D $ Cc 22,1 * 1 8or 11,24$

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    TEMAS PRINCIPALES

    En una mirada de con:unto a toda la coleccin a* algunos temas ue se !an destacando por sureiteracin$ /iguiendo estos temas principales encontramos ue Elredo nos tra#a un itinerario deadesin a ios en 8risto a tra!"s del cual alcan#amos el in para el ue uimos creados a imagen

    de iosJ tener nuestra biena!enturan#a perecta en %l, en el cuerpo * en el alma$

    .uestra !ida presente es una =cautividad>, en la ue e@perimentamos en carne propia lo uedice san abloJ Veo otra le) en mis miembros 7ue se o/one a la le) de mi es/ritu+ ) me tienecauti"o en la le) del /ecado+ 7ue est9 en mis miembros ), nuestro /eor esucristo (1,17 4,1I 14,12$1F 26,2D)$

    /in embargo aora alcan#amos slo las primicias$ El amor * el deseo se saciar9n en lacontemplacin de ios cara a cara, * la pa# estable * duradera est9 reser!ada para ms all de estavida, en la !ida eterna * en la resurreccin, cuando a*a cesado todo combate * la !ictoria sobre lamuerte * el pecado sea deiniti!a (1,11$D7 2,F$41 7,D F,F$1 1I,1D-16 11,37 12,3I$32 13,6-714,21 17,22 1,3I-31 22,27 24,4D-D7)$

    26 $ m 7,23 (et ca/ti"antem me in lege /eccati >) me 3ace cauti"o ba?o la le) del /ecado@+ Vg&

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    APROXIMACIN AL MISTERIO DE CRISTO

    Elredo i:a su atencin en el misterio central de nuestra sal!acinJ la Encarnacin edentora del (D,6-7 11,27), es decir, signo *maniestacin de la sal!acin en 8risto$ Ca le* antigua contiene en s& misma un conocimiento de8risto pero =me#clado> con obser!ancias carnales (11,F-$12 2I,1D)$

    En el sermn 11,7-13, a la lu# del /almo 74,2F Elredo mostrar9 cmo la signiicacin del8uerpo * la /angre de 8risto, es decir, la =conmemoracin> de su sacriicio redentor, se allaba *aen la inmolacin del cordero de la ascua :ud&a$ Esta signiicacin en 8risto es la =inteligencia

    espiritual> de toda la le* antigua ue, como un !ino, embriagaba del amor de ios a auellos ue laalcan#aban$

    .uestro /eor se encuentra tambi"n =re-presentado> en los acontecimientos y en losersona0esdel antiguo testamento, * esto tiene una implicancia rec&procaJ si el 0isterio de 8ristoes iluminado por auellos acontecimientos * persona:es, ellos a su !e# reciben su pleno sentido de8risto$

    As&, por e:emplo, Elredo nos ar9 !er ue el sacriicio de nuestro /eor est9 en auella oracinde 0ois"s por la cual 5srael !enc&a a Amalec2(13,27-2), ue 8risto en udea la /emana de asin

    27 $ n 22,1F 26,42F$ El #e-or tiene en la mano un c9liB de "ino /uro+ lleno de meBclas+ ) lo 3ace /asar de uno a otro, Vg$2$ 8$ E@ 17,F-16$

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    es el arca en el paso del ord9n en tiempos de osu"3I (1I,7-14) * ue su ascensin se allasigniicada en el arrebato de El&as al cielo en el carro de uego31(13,11-12)$

    .os descubre cmo el (/$ ernimo,;om$ 63), * Elredo ablar9 con recuencia de nuestro /eor esucristo como el =!erdadero/alomn>, porue %l es la misma pa#, nuestra /aB32, uien nos a reconciliado con el adre(1,16-17 2, 4,-1I 1I,14 26,3F-3)$

    Espera y deseo

    entro de la lectura cristolgica del antiguo testamento, Elredo seala con insistencia el deseoardiente de Cristoue tu!ieron todos los santos padres ue precedieron su primera !enida$

    %ste se e@presa en la espera de Abraam * de los atriarcas ue ab&an recibido la promesadi!ina, en el deseo de 0ois"s de ue el /eor en persona !iniera a liberar a su pueblo33(,4-6), en elgran deseo de a!id por beber el agua de la uente ue est9 en el"n34(1,1F-1), en todos auellosre*es ue deseaban !er el rostro de /alomn * o&r su sabidur&a3D(1,16), en el proeta 5sa&as * losdem9s proetas ue se dol&an * lamentaban porue tardaba tanto * con admirable =deseo deseabansu !enida>36(1,22-26)$

    Es destacable la mirada eclesial de san Elredo$ odos los :ustos del antiguo testamentoJ Abel,.o", 0ois"s, Abraam, a!id, los proetas,$$$ son llamados =santos> * orman parte de la 5glesiaue espera la !enida de su /eor (c$ 1,47$DI 2,D$ 31$34 3,2F 26,37$$$)$

    odos ellos nos dan e:emplo de e, de amor * de un gran deseo de nuestro /eor esucristo ue

    nosotros debemos imitar (en este sentido se desarrolla pr9cticamente todo el #erm,n1)$

    EL VERBO SE HIZO CARNE

    El misterio del (12,14$1D)$

    3I$ 8$ os 3,14-16$31 $ 8$ 2 * 2,F-11$32$ E 2,14$33$ E@ 4,13J4e /ido+ #e-or+ en"es al 7ue 3as de en"iar, Vg&34 $ 2 /m 23,1D-17 c$ /al 41,2-3$3D$ 2 8ro ,23 c$ 1 * 1I,24 Cc 11,31$36

    $ 5s 64,1J O?al9 rasgases los cielos ) descendieras, Vg$ c$

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    Elredo no se cansar9 de ponerla a nuestra consideracin porue =el pan de nuestraperegrinacin ac9 aba:o es el misterio de la Encarnacin de 8risto> (D,2) * con %l debemosalimentarnos * puriicarnos en este tiempo, para llegar a gustarlo en la atria, en la saciedad de lacontemplacin de su i!inidad (c$ D,2 * 12,3-4)$

    Dios y homre !erdadero

    Elredo sostiene con irme#a la e de la 5glesiaJ El Kerbo encarnado es !erdadero ios *!erdadero ombre3F (1,D2-D3 2,24$2F-2$36-37 4,4 ,16$22)$ En Fl 3abita cor/oralmente la

    /lenitud de la di"inidad3(1I, * 14,7)$=En nuestro /eor esucristo -dice nuestro autor- a* dos naturale#as, la di!ina * la umana$

    Estas dos naturale#as su*as son tan perectas ue la di!ina no a disminuido por la umana, ni laumana a sido aniuilada por la di!ina$ or eso es a la !e# igual al adre * menor ue el adre$5gual por la di!inidad * menor por la umanidad> (2I,4)$

    ios adre lo engendr en su eternidad, =coeterno * consubstancial con %l> (,27), * por suEncarnacin naci =peueo * pobre, i:o de una pobre doncella> (4,26)$ esucristo es la /iedra

    sacada del monte sin mano 3umana4I (3,27 * ,), es decir, nacido de /anta 0ar&a la Kirgen sinconcurso de !arn, ella lo engendr ecundada por el Esp&ritu /anto (3,27 ,-13$22-23 1,11$172I,3$24-2D 23,14)$

    8on di!ersas im9genes tomadas de la /agrada Escritura, Elredo mostrar9 ue Auel ue es=uno con el Padre, ios perecto * omnipotente> (26,3I) asumi lenamente la naturale.ahumana, el cuerpo * el alma, e@cepto el pecado (2,21-24)$ Ca carne sant&sima del /eor es llamadanube le"e41, es decir, li!iana, sin el peso de la iniuidad (,7$2$33)$ Ella es la tnica multicolor )talar=con la ue el adre lo a en!iado para ue !isite a sus ermanos * o!e:as>42$Ca multitud decolores, ue aseme:a al cielo, signiica ue %l es el ombre celestial, adornado con toda la !ariedadde las !irtudes$ Esta t+nica est9 eca toda ella deuna sola /ieBa43porue por encima de todo lo

    re!iste la caridad, * llega asta los talones =porue auella santa carne se mantu!o incorrupta astael in> (,F$3I-31$33)$

    Lu" del mundo

    Entre las !arias im9genes b&blicas con las cuales Elredo presenta a nuestro /eor, sobresalela de la lu#, con su Encarnacin amanece la lu. ara el mundoue antes de este d&a era tinieblas$/iguiendo a los adres, Elredo compara a todo el g"nero umano antes de la !enida de 8risto con eltiempo de cauti!idad ue el pueblo de 5srael suri en Egipto -=Egipto> signiica =tinieblas> (/anernimo,;om$ 73)-, ba:o el dominio del =aran> ue es el diablo (,4-6 c$ 6,11-13)$

    Ca mente umana -dice nuestro autor- estaba en!uelta en las =tinieblas del error, las tinieblasdel paganismo, las tinieblas de orrible inidelidad>, por eso, obrando misericordiosamente, con suEncarnacin atemper el resplandor de su i!inidad (4,14 ,7) * con su 0aniestacin a los tres

    3F$ ecordemos ue durante los siglos ?5-?555 surge el debate cristolgico sobre el modo de unin de la naturale#adi!ina * la naturale#a umana, alma * cuerpo, en la persona de 8risto * el papel desempeado por la naturale#aumana$ En esta contro!ersia se alla la opinin de Abelardo uien por sal!aguardar la trascendencia de la di!inidaddice ue la naturale#a umana =nada> (ni3il) signiicaba para la persona di!ina (=niilismo cristolgico>)$ 8$Iniciaci,n 4eol,gicaIII+

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    re*es paganos amaneci para el mundo auel d&a primero de la nue!a creacin en ue ios diceJH9gase la luB+ ) la luB se 3iBo44 (4,12)$

    En su con!ersin cada uno a escucado la !o# de ios ue le di:oJ Le"9ntate!es/landece4Dpara ue abandonando la !ida de !icios * pecados se pusiera en el camino de lalu# ue 8risto nos ensea con su palabra * el e:emplo de su !ida (4,2F-34 c$ 23,7)$

    Por nosotros y por nuestra sal!acin

    Brente al misterio de la Encarnacin del , es decir,a a!or nuestro$

    /u

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    EL SEOR QUE VENDR

    Al considerar el 0isterio de 8risto, san Elredo tiende su mirada a lo le:os, acia el pasado -*aemos !isto cmo lo alla presente en la istoria !eterotestamentaria- * acia el uturo, auel d&a enue esucristo !endr9 como nuestro *ue.47 (1,2-3 2,D 17,22 23,1 21,3F)$

    $ Aranguren, 5$ * uti"rre#, $, nota F en Vida !eclusa, /an Elredo de ie!al, O/sculos,adres 8istercienses 4, A#ul, 17, pp$ 14F$4F$ Elredo ace reerencia a 1 d D,6J Humllense ba?o la mano /oderosa de Dios+ /ara 7ue los e%alte el da de su"isita+ Vg&4$ 0t 16,27$DI

    $ 1 8or 1D,DD$D1$ /al 44,3 ue es citado en reerencia a esucristo en los sermones 1,1 4,12 ,14 14,21 24,46 26,24$2F * 27,22$D2$ 1 n 3,2$D3$ 0t 2D,31$

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    Esto es auello 7ue ningn o?o "io+ ni odo o),+ ni lleg, al coraB,n del 3ombreD4Jla !isinde su di!inidad, en la ue es saciado todo nuestro deseo (D,2 7,D 24,4D-47)$ UNA CLAVE DE LA DOCTRINA ELREDIANA

    LA MEDITACIN CONTEMPLATIVA Y AFECTIVA

    En la espiritualidad de san Elredo la memoria tiene un papel principal$ %l sigue la doctrinaagustiniana sobre el rol de la memoria, centro del alma, ue en su antropolog&a corresponde al adreen la rinidadDD$

    =El 8reador de las naturale#as -dice nuestro autor en el Es/e?o de la caridad- inundi en ellaUla criatura racionalV tres acultades para acerla capa# de la eternidad di!ina, part&cipe de lasabidur&a * saboreadora de la dul#ura$ Estas tres son la memoria, la cienciaUinteligenciaV * el amoro !oluntad ($$$) 8reado el ombre con estas tres acultades a imagen de la rinidad, ten&a presente aios en la memoria sin ol!ido, lo conoc&a sin error por la inteligencia, * con el amor lo abra#aba sincodiciar nada m9s$ or eso era eli#> (#/ec 5, )$ ero esta imagen di!ina en el ombre uedcorrompida -aunue no totalmente eliminada- desde ue nuestro primer padre !oluntariamente seale: de su 8readorJ la memoria padece el ol!ido de ios, el error oscurece el conocimiento * lacodicia mengua el amor (c$ #/ec5, 1I-13)$

    En los p9rraos inales de un sermn pronunciado en la Anunciacin del /eor, Elredo descubrecmo aora la =parte de nuestra memoria ue debe ser slo para ios> est9 ocupada por los =&dolosde Egipto>, esas antas&as disgregantes (=los recuerdos * las im9genes de la !ida ue emosde:ado>, la =ligere#a * di!agacin de la mente>, la !ana curiosidad$$$) ue mancan el cora#n eimpiden ue slo el /eor posea e inabite nuestra alma (c$ ,36-3 * tambi"n D,1 13,3F 1F,1F22,31)$

    Ca memoria es, pues, la puerta de entrada a nuestra interioridad ue a de ser morada del /eor$Co ue percibimos por los sentidos e@teriores * lo ue recordamos ocupa en la memoria su lugar, *todo auello en lo ue ella se detenga a pensar con solicitud llegar9 asta lo &ntimo del cora#n D6,

    por eso nos dice Elredo ue es necesario !igilar (c$ 3,1F-1 17,12$1F)$

    09s a+n, es necesario puriicar nuestra memoria * el o:o del cora#n para ue se restable#ca enel alma la imagen perdida * reencontremos la uniicacin de nuestro ser en ios$

    8on recuencia seala ue las obser!ancias mon9sticas, tanto las corporales (!igilias, a*unos *traba:o) como las espirituales (lectio, meditacin * oracin) tienden a este inD7, sin embargo ellasalcan#an su eicacia por el 0isterio de 8risto, el , * as& gustar * saborear la dul#ura de su amor (1,42 3,31-33 6, 11,1-3

    D4$ 1 8or 2,$DD $ 8$ umont, 8$, 1ne (ducation du cur& La s/iritualit( de saint .ernard et de saint Aelred, ain de 8Mteau@ 1I,

    .otre-ame-du-Cac, 'Ha, Suebec, 16, pp$377-3FI$D6 $ En el sermn 32,1I-2I (/egunda 8oleccin de 8lara!al), Elredo describe con detalle este proceso ue podemosresumir as&J los recuerdos * pensamientos una !e# acogidos en la memoria -=atrio e@terior> de nuestro =ediicioespiritual>- pro!ocan el deleite, luego la deliberatiode la !oluntad introduce en la =casa> lo ue uiere$ Ca casa es el

    consensus, donde el ombre se alimenta con el consentimiento de sus deseos, malos o buenos$ N cuando alconsentimiento de los deseos buenos se une el affectusse llega al =t9lamo>, donde el alma descansa en el goce delabra#o &ntimo del bien pose&do$D7 $ 8$ 3,7 6,1I$2D F,1D$1F 14,16-1F 1,3$1-21 21,42-4D 24,3$

    1F

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    12,3$F 1D,2I 22,24$$$)$ Es, pues, nuestra mirada interior (esta =memoria> ue llega al cora#n) laue a de estar puesta en su santa $ allego, $, nota 71 en #an Elredo de !ie"al+ #ermones Litrgicost$ 5, iblioteca 8isterciense t$ 24, 0onte8armelo, urgos, 2IIF, pp$ 2D2$D$ 8$ umont, 8$,La sabidura ardiente, iblioteca cisterciense t$ 1, 0onte 8armelo, urgos, 2IID, pp$1D-16$ Ker

    tambi"n 'li!era, $,6ara Cristo, /oledad mariana, uenos Aires, 1F6, pp$ 1D7-16$6I $ En este pasa:e las !ersiones en espaol traducen tambi"n por =ternura> * =bondad> el t"rmino dulcisJdulcedo$engamos presente ue para nuestro autor esta =dul#ura> signiica * maniiesta el amor de 8risto ue a de ser acogido

    por nuestro amor, =paladar del cora#n> capa# de gustarlo (8$ #/ec5, 2)$

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    EL MISTERIO DE CRISTO EN UNA SELECCIN DE TEXTOSBREVES

    Ca palabra de san Elredo nos adentra en el 0isterio de la Encarnacin redentora de 8risto * nosdescubre su signiicacin prounda en nuestra !ida personal * comunitaria$

    entro de cada te@to seleccionado emos uerido destacar alguna rase signiicati!a$

    El dulce nombre de Kess

    8omo es su nombre as& es su obra$ PN a u" nombre se reiereQ 8onocen su nombre PA u" suena, au" sabe, u" ragancia tiene su nombreQ leo& leo derramado es tu nombre61$Por u" leoQ oruesu nombre sabe a amor, sabe a misericordia$ PN a u" suena el dulce nombre de es+sQ /uena a nuestrasal!acin, porue el mismo Dios mo es mi *ess4 es decir4 mi Salvador, mi sal!acin, * por tanto mimisericordia (12,16)$

    Cristo 6astor

    Aora piense cada uno en s& mismo si sigue a nuestro pastor, o si "ste lo lle!a delante de s& ( minet)62($$$)$ El ser lle!ado, ermanos, es propio del temor, el seguimiento, del amor (dilectionem)$.os condu:odelante de s& cuando i#o ue nos di"ramos cuenta de nuestros pecados, de nuestra mala !ida cuandoi#o ue temi"ramos las penas del inierno, * por este temor nos lle! a de:ar el mundo * !enir au&$ Ntoda!&a, ermanos, el ue est9 au& * obedece * es umilde * est9 en su sitio por temor para no sercondenado porue sabe ue el ue no se mantiene en lo ue a empe#ado no puede sal!arse, el ue porestas ra#ones ace lo ue se le manda * lo ue corresponde a su estado, a+n es conducido por el pastordelante de s&$ En cambio, el 5ue ya gust muchas veces 5u6 dulce es nuestro Se/or , el 5ue yaeme. a amarlo (dilegere), el ue !e ue su cora#n es tal ue, aunue no ubiera castigo sino slouna oensa a su /eor, o una peue&sima disminucin de su amor ( amoris), no de:ar&a lo ue empe#,6ste ya lo sigue * no es necesario ue lo condu#ca su pastor, sino ue slo lo preceda * le muestre elcamino por el ue uiere ue lo siga$ Ese puede decirJ Corr /or el camino de tus mandamientos

    cuando me ensanc3aste elcoraB,n$ .o como cuando ten&a ue clamarJ !e/rime mi carne con tu temor$A+n no ab&a recibido auel mandamiento dilatadocon el ue ue ensancado su cora#n cuando corri(1,4I-42)$

    Cristo en la Eucarista

    el"n, la casa de /an, es la santa 5glesia, en la ue se distribu*e el cuerpo de 8risto, ue es el!erdadero pan$ El pesebre en el"n, el altar en la 5glesia ($$$)$ En este/esebreest9 es+s en"uelto enpaales$ Ca en!oltura de los paales63es el re!estimiento de los sacramentos$ Eneste/esebre, ba:o lasespecies de pan * de !ino, est9 el !erdadero cuerpo * la sangre de 8risto$ 8reemos ue all& est9 elmismo 8risto, pero en!uelto en /a-ales, es decir, in!isiblemente en los mismos sacramentos$ No

    tenemos unase/al ms grande y evidente del nacimiento de Cristo 5ue el reci+ir cada da en elsantoaltar su cuero y su sangre, * ue el !er ue el ue naci una !e# de la Kirgen se inmole todoslos d&as por nosotros (3,3-4I)$

    8on auella UYltimaV 8ena conclu* la ascua antigua ue celebraban los :ud&os, * comen# laascua nue!a ue celebramos nosotros$ PN cmo pod&a mostrarnos ma*or dul#ura ue de:9ndonos sucuerpo * su sangre en memoria su*aQ Suiso ue auel precio ue una !e# dio por nosotros estu!ierasiempre ante nuestros o:os$ 8omo una prueba admirable de su amor (affectione) 5uiso 5ue su cuero ysu sangre no slo !ueranuestro recio4 sino nuestro alimento(11,6)$

    61 $ 8t 1,2$62 $ El t"rmino de la Vulgataue usa Elredo es minatioue literalmente signiica =amena#a> * puede ser traducidotambi"n por =conducir> en el sentido de =lle!ar delante de s&>$ or lo tanto se distingue claramente del =seguimiento>(secutio) ue es =ir detr9s de>$63 $ .uestro abad :uega en estos p9rraos con la asonancia de los t"rminos/anis(=el pan>) */annis(=los paales>)$

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    La Virgen 2adre

    ice el Apstol de nuestro /eorJ Mue 3a sido 3ec3o /or Dios /ara nosotros sabidura+ ?usticia+santificaci,n+ ) redenci,n$ or lo tanto ella ue es la 0adre de 8risto, es madre de nuestra sabidur&a,madre de nuestra :usticia, madre de nuestra santiicacin, madre de nuestra redencin$8onsiguientemente ella es ms madre nuestra 5ue nuestra madre carnal $ e ella nos !iene nuestro

    me:or nacimiento porue de ella procede nuestra no!edad, nuestra santidad, nuestra sabidur&a, nuestra:usticia, nuestra santiicacin * nuestra redencin$ or eso con regoci?o celebremos el nacimiento deuien tenemos tan buen nacimiento (23,F)$

    En mi lec3o durante la noc3e bus7u( al amor de mi alma lo bus7u( ) no lo encontr(64$0ientras !i!ien este mundo, era de noce, sin embargo no ces de buscar durante esta noce, * por eso cuando pasala noce, encuentra$En mi lec3odice, bus7u( al amor de mi almaP8u9l es este lecoQ ($$$)$ 0e pareceue este lec3oes au"l del ue en otra parte diceJ;uestro lec3o est9 florecido6D$ PN cu9l pod&a ser eselec3om9s ue su cora.n en el 5ue ha+a toda clase de virtudesQ Kerdaderamente un leco porauella admirable uietud * tranuilidad ue tu!o Uen el cora#nV, pues all& no ab&a el tumulto de lospensamientos llenos de !anidad, ni las ambiciones de este mundo, ni las pasiones ni los deseos carnales$onde est9n estas cosas no a* un leco, pues no puede tener uietud ni tranuilidad el ue tiene estetumulto en el cora#n (2I,7-F)$

    #acerdote eterno

    Auella ele"aci,n de las manos de 0ois"s66 signiicaba la pasin de nuestro /eor esucristo, uesubi, al monte a orar, *a ue ascendi, al cielo /ara interceder ante el 6adre /or nosotros$ All& ele!asus manos para ue no pueda !encernos Amalec, es decir, el diablo, porue all& est9 en la/resencia de

    Dios /or nosotros* ace presente (re/raesentat)67la pasin ue suri por nosotros$ ambi"n nosotros,ermanos, mientras estamos en esta !ida miserable, ue es una /rueba en la tierra, mientras tenemos7ue sufrir una luc3a contra los /rinci/ados ) las /otestades+ contra los /rnci/es de estas tinieblas+contra el mundo de los es/ritus del mal en los aires , es necesario ue nuestro /eor tenga sus manosele!adas en nosotros, uiero decir, ue tengamos siemre en nuestro esritu la memoria de suPasin$ N estemos seguros, ermanos, ue mientras tengamos en nuestro cora#n la memoria de suasin, mientras nuestra esperan#a est" all& donde est9 8risto intercediendo por nosotros a la derecadel adre, no nos podr9 !encer el Amalec espiritual (13,2-31)$

    Vida fraterna

    Sue nadie, pues, se glor&e por una gracia ue ios le a*a dado como algo propio ue nadie tengaen!idia de su ermano por alg+n don ue ios le a*a dado como si uese algo particular, sino ue todolo ue tiene m&relo como algo de todos sus ermanos, * lo ue es de su ermano, no dude ue es su*o$Es cierto ue ios omnipotente podr&a lle!ar a la pereccin en un momento al ue uisiere * dar a cada

    uno todas las !irtudes$ ero obra con nosotros con amorosa pro!idencia de modo ue cada uno necesitedel otro, * lo ue no tiene en s& lo alle en el otro, para ue as& se mantenga la umildad, aumente lacaridad * se !ea la unidad$ or tanto, cada cosa es de todos4 y todo de cada uno, * as& se coseca elruto de las !irtudes con pro!eco, a la !e# ue se mantiene la umildad al sentir la propia pobre#a(F,1I)$

    .uestro /eor tiene tambi"n dentro de cada alma unas o"e?as, es decir, las !irtudes, ue a deapacentar el ue ama a 8risto$ Estas o!e:as son la caridad, la umildad, el go#o espiritual * las dem9scosas perecidas$ Apacentamos estas o!e:as cuando practicamos las obras por las ue estas !irtudescrecen en nosotros$ 8ada uno de nosotros debe tambi"n alimentar estas virtudes en el otro, * al

    64 $ 8t 3,1$6D $ 8t 1,1D$66 $ /e reiere al relato de E@ 17,F-16J el combate entre los israelitas * los amalecitas$67$ Elredo emplea con recuencia el !erbo re/raesentareal ablar de la conmemoracin lit+rgica$ Esta liturgia celeste enla ue 8risto orece al adre la asin ue suri por nosotros, es el aruetipo de auella ue se celebra au& aba:o$

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    comportarnos ante nuestros ermanos de tal modo ue con nuestro e:emplo aumente su caridad, sugo#o, umildad * paciencia$ Pues como ar" crecer (/asco)6Fen mi ermano la umildad si me portocon orgullo ante "l, si ablo con soberbia, si respondo * ando con altaner&aQ P8mo promo!er" (/asco)en mi ermano la obediencia, si no me !e as&, sino desobedienteQ P8mo le inducir" (/asco) a lapaciencia si murmuro, me a&ro, ablo con dure#a, o alardeo delante de "lQ El ue ace estas cosasdelante de su ermano no apacienta en "l las o!e:as de 8risto, sino ue en lo ue est9 de su mano leconunde * mata (1F,13-14)$

    8ada uno de ustedes antes de !enir au&, ten&a un alma ue slo era su*a$ /e an con!ertido a ios, *en seguida el Esp&ritu /anto, el uego celestial ue nuestro /eor en!i a la tierra ue uiere ue arda,incendi sus cora#ones, incendi sus almas, * de todos sus cora#ones * sus almas i#o un solo cora#n *una sola alma ($$$) or tanto, ermanos, los ue ui#9 son m9s endebles * d"biles, * no pueden acertantas cosas como los dem9s, ue no se contristen ni se desaliente$ asta ue cada uno tenga cuidado deno omitir conscientemente por pere#a o negligencia nada de lo ue pueda$ ema, en eecto, lo ue diceel proetaJ2aldito a7u(l 7ue 3ace negligentemente la obra del #e-or6$orue el ue a sabiendas * sinmoti!o de:a de acer lo ue puede, comete un raude, *a ue su virtud y su !uer.a no son nicamentesuyas sino de toda la comunidad (congregationis)7I$ Cos ue pueden m9s, por su parte, no se engr&ansobre los otros, porue la gracia ue an recibido no la an recibido slo para s&, sino tambi"n para

    auellos ue pueden menos$ or tanto, si a* !erdadera unin * caridad entre ustedes, no duden ue loue ace uno ser9 de todos, * lo ue acen todos ser9 de cada uno (26,43$46-47)$

    La CruB de Cristo

    0e diri:o a ustedes, ermanos m&os, i:os m&os, ue no slo adoran, sino ue acen proesin de a8ru# de 8risto * no slo acen proesin, sino ue aman su 8ru#$ 0e diri:o a ustedes, piense cada unolo ue uiera, m&relo como uiera, tenga consigo las consideraciones ue uieraJ en la 8ru# de 8risto noa* nada tierno, nada blando, nada delicado, nada ue agrade a la carne * a la sangre$ La Cru. deCristoha de ser como el ese0o del cristiano$ En esa 8ru# de 8risto mire si su !ida, sus costumbres,est9n de acuerdo con la 8ru# de 8risto, * est" con!encido ue participar9 de la gloria de 8risto en lamedida ue participe de la 8ru# de 8risto$ En cambio, el ue reca#a el surimiento de la 8ru# de 8ristotema ser reca#ado de la presencia del 8ruciicado$ or su parte, ermanos m&os, ad!iertan cu9nto ande alegrarse ustedes ue est9n cruciicados con 8risto (1I,2-3I)$

    La fuerBa de la caridad

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    Cristo es el camino

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    alimentar9 a es+sQ /i descuidan a 0ar&a, Pde u" les sir!e ue Kess entreen la casa de ustedes, si nogustan en modo alguno de su dul#uraQ (1,2I-21)$

    Cristo ilumina nuestros afectos

    Estos aectos UcarnalesV, como unas nubes, oscurecen el alma * esconden todo el encanto espiritual$

    ero debemos pensar au&, especialmente, en esta nuestra Estrella, ue resplandece para nosotros en estanoce * en esta oscuridad$ ebemos considerar al a*o ue sale de esta Estrella 73, ue en cierto modose a oscurecido por nosotros para librarnos de estas oscuridades$ resent"moslo contra todos losaectos carnales, * mir6moslo como a nuestro adre4 madre4 hermano y amigo$ adre porue nosensea madre porue nos consuela * nos nutre con la lece de su dul#ura ermano porue por nosotrosa tomado carne de nuestra carne amigo porue a derramado su sangre por nosotros (24,31)$

    Virtudes

    esucristo, nuestro /eor, Kirtud de ios * /abidur&a de ios, el sumo ien del ue proceden todoslos bienes, la suma Kirtud, de uien proceden todas las !irtudes, (l es el #e-or de las "irtudes ) el re) dela gloria$ El cual, oseyendo en s todas las virtudes4 muestra sin em+argo4 5ue tiene tres esecialesporue en ellas est9 undada toda la le) ) los /rofetas, ycon ellas se tienen todas, es decir, lacastidad,la umildad * la caridad74$ %stas predic de palabra * mostr con el e:emplo el nacido de la Kirgen 0ar&a, =Estrella del mar>$74 $ /on las tres !irtudes =especiales> no slo de nuestro /eor sino tambi"n de la Kirgen 0ar&a (1,14-1D * 23,1I) * uesan Elredo recomienda a mon:es * cl"rigos (1,7-13 * 2F,21)$7D $ Es la cita de 5s 2F,21J #e/an 7ue el #e-or se le"antar9 N&&&& /ara 3acer su obra+ una obra 7ue es a?ena a Fl /ara3acer su obra+ una obra 7ue es e%tra-a a Fl+ Vg&, sobre la ue nuestro autor desarrolla este sermn$

    2D

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    ANLISIS DE UN TEXTO MAYOR

    SERMN 2 EN LA FESTIVIDAD DE TODOS LOS SANTOS

    Presentacin

    /an Elredo desarrolla este sermn en la Biesta de odos los /antos siguiendo el e!angelio deld&a, el pasa:e de las iena!enturan#as seg+n san 0ateo (0t D,1-12), * se inspira para el mismo enun sermn de san ernardo para la misma esti!idad76$

    En su sermn ernardo recorrer9 las iena!enturan#as a la lu# del cap&tulo 3 del libro del"nesis, present9ndolas como el remedio ue se nos orece para sanar la erida causada por el

    pecado de nuestros primeros padres Ad9n * E!a$ Elredo por su parte ir9 entrete:iendo la ensean#ae!ang"lica con el relato de la creacin de "nesis 1,1-2,4 * nos descubrir9 cmo con cadaiena!enturan#a se !a reali#ando la obra de nuestra =re-creacin> en un desarrollo progresi!o$

    ara comprender esta !isin de Elredo debemos recordar la doctrina antropolgica ue sub*aceen toda su obra, * ue resumidamente podemos e@presar as&J El ser umano ue creado a imagen dela /anta rinidad * eco capa# de una biena!enturan#a +nica * pri!ilegiada ue consiste en laadesin a ios por el conocimiento * el amor sin embargo, por libre eleccin, se ale: de su8reador * perdi la seme:an#a di!ina$ ara alcan#ar aora auella biena!enturan#a ser9 necesaria larestauracin de su naturale#a, * "sta es tambi"n una obra trinitaria$

    En el sermn ue comentamos ios adre reali#a esta =nue!a creacin> por la accin de sualabra -el 0isterio de 8risto en nosotros- * de su Esp&ritu, seg+n el te@to de 5sa&as 11,2-377$

    En la concordancia de ambos estamentos, Elredo nos recuerda tambi"n el in escatolgico delas iena!enturan#as cuando !a sealando ue en cada d&a de esta =creacin> de ios, como enauella primera, a* =una tarde * una maana>, es decir, ue se inicia en la =oscuridad> de la !ida

    presente en la ue pre!alece el esuer#o asc"tico de puriicacin * ue tiende acia una plenitud ueser9 colmada m9s all9 de esta !ida$

    ebemos sealar ue el sermn au& estudiado recibe su perspecti!a claramente cristolgicadel sermn 42 En el da de 6entecost(s7F,donde lo encontramos ba:o una redaccin m9s bre!e$En "l se resalta el rol ormador del Kerbo EncarnadoJ toda =su orma de !ida ( con"ersatio) en latierra a sido una ensean#a para nosotros> en cada una de sus edades * desde su inancia asta suascensin al cielo, nos a de:ado un e:emplo a seguir$ 8risto por sus 0isterios restaur la naturale#aumana * con el en!&o del Esp&ritu /anto la lle! a su plenitud (consummatio)$

    resentamos a continuacin un esuema del sermn 27 con el aporte espec&ico ue recibe del

    sermn 42$ En la arte 55 del esuema podemos !er tra#ado sucintamente el itinerario del alma ue,por el traba:o puriicati!o * la accin di!ina en ella, tiende a la plenitud de la caridad * a sudescanso en ios$ Este el in de la =ormacin> -en el sentido uerte del t"rmino- de cada mon:e *mon:a en esta escuela de 8risto ue es el monasterio$

    76$ /an ernardo, En la festi"idad de 4odos los #antos, /ermn 1, Obras com/letas t$ 5K, A8, 0adrid, 1F6,pp$DI6-D2F$77 $ Et re7uiescet su/er eum s/iritus Domini: s/iritus sa/ientiae et intellectus+ s/iritus consilii et fortitudinis+ s/iritusscientiae et /ietatis et re/lebit eum s/iritus timoris Domini+ Vg&

    7F$ El /ermn 42 En el da de 6entecost(s pertenece a la /egunda 8oleccin de 8lara!al * se alla inconcluso$ /etrata de una redaccin dierente del /ermn 27 (8$ =resentacin eneral>, p$ 3 nota D de este estudio)$

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    Es&uema del Sermn '( en la )esti!idad de *odos los Santos

    Parte 8(5ntroduccin) /5 8'.E0CA.', /5 A0A.'27,1- 1-2 Vengan+ subamos al monte del #e-or

    8risto-monte del ue lu*e nuestro alimento espiritual 3-D Al "er Kess al gento subi, al monte

    Ca turba de pensamientos mundanos impide acercarse a es+s 6- cuando se sent,+ se acercaron a Fl sus disc/ulos& abriendo su boca les ense-aba&&&

    /er !erdaderos disc&pulos por el amor raterno

    Parte 88 (esarrollo) CA/ 5E.AKE.A.ZA/ E CA .EKA 8EA85[. 27,1I-2I 1I-12 Dic3osos los /obres en el es/ritu&&&

    Es el 19 dade nuestra recreacin en el cual =surge la lu#> de la umildad, el reconocimientode la propia debilidad, * por el don de temorcomien#a a crecer el amor * toda :usticia

    8risto nos ensea la umildad en su inancia\

    13-14 Dic3osos los mansos&&&Esta mansedumbre es el 29 dade nuestra reparacin en ue =aparece el irmamento> ue es

    la /agrada Escritura en ella, por el don de iedad, empie#a a conocer a ios * a 8risto8risto ense la piedad en su nie#\

    1D-16Dic3osos los 7ue lloran&&&En este 39 da, por el don de cienciaue da un conocimiento m9s !erdadero de s&, =se

    re+nen las aguas ue est9n ba:o el cielo> -los pensamientos !anos * terrenos- * =aparece la tierraseca> ue, regada con las l9grimas de la compuncin, =produce ierba !erde * rutos> de buenos

    pensamientos8risto ense esta ciencia en su adolescencia\

    17 Dic3osos los 7ue tienen 3ambre ) sed de ?usticia&&&rogresando as& en el ser!icio de ios es necesario el don de !ortale.a para mantenerse

    irme en la prueba, * en este "9 daen ue se crean =los astros del d&a * de la noce> est9 el e:emplodel /eor para la prosperidad * de la 5glesia * de los /antos para la ad!ersidad

    8risto ense la ortale#a en su :u!entud * muerte\ 1F Dic3osos los misericordiosos&&&

    ras aprender a compadecerse de s& llega a esta biena!enturan#a en ue se abre a lacompasin con el pr:imo * "ste es el conse0oue se le da as&, en el #9 da, comien#a a =producirreptiles !i!ientes> ue son las buenas obras de misericordia acia el ermano

    8risto lo ense en su resurreccin\\ 1 Dic3osos los /uros de coraB,n&&&

    'brando el bien de esta manera recibe el don de entendimientopor el ue conoce a ios, *con este conocimiento ue puriica el cora#n llega al %9 daen ue =el ombre es creado a imagende ios>

    8risto lo ense en su ascensin al cielo\\ 2I Dic3osos los /acficos&&&

    A esta biena!enturan#a corresponde el =descanso> sab9tico del &9 daue es la pa# del almadesaparece el temor ser!il * se recibe el amorde los i:os de ios

    Es la eusin de entecost"s\\

    Parte 888(8onclusin) EC 8A05.' E C'/ /A.'/ 27,21-23 21-23 Dic3osos los 7ue /adecen /ersecuci,n /or la ?usticia&&&

    Este es el camino laborioso acia la atria por el ue los /antos nos an precedido, * uedebemos seguir contando con su intercesin * el au@ilio de ios

    ]]]]]]]]]]]]]]]]]]]]]]]]

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    \ /ermn 42,-14 (En =Ane@o> pp$ 4I-41)\\ 8$ /ermn 42,7-F (no lo allamos e@pl&citamente por estar el sermn inconcluso)$

    *exto del Sermn '( en la )esti!idad de *odos los Santos

    1: .uestro /eor esucristo uiso mostrarnos en el monte no slo banuetes carnales, sino tambi"nespirituales, maniest9ndonos as& ue debemos dirigir nuestros cora#ones con todo el aecto * deseo a auel

    monte del ue dice 5sa&asJ en los ltimos das estar9 /re/arado el monte de la casa del #e-or en la cumbrede los montes7$ Este es el monte f(rtildel ue no de:a de luir para nosotros la ertilidad celestial el montees/esoFIdel ue destila tantas !eces para nosotros la lece espiritual la tierra mara!illosa de la ue cant0ois"sJLo /uso en una tierra mara"illosa /ara 7ue comiera el fruto de los cam/os+ ) sacara miel de la

    /iedra ) aceite del /edernalF1$2: or eso dice mu* bien el e!angelistaJAl "er Kess el gento+ subi, al monteF2, para mostrar as& ue "l

    era el monte, * recomendar la e@celencia de sus mandamientos$ Venid+pues+ subamos al monte del #e-or ) ala casa del Dios de Kacob+ ) nos ense-ar9 sus caminos F3$ N abriendo su boca les ense-aba diciendo:

    Dic3osos los /obres en el es/ritu+ /or7ue de ellos es el reino de los cielosF4$ Estos son los alimentos reales alos ue no est9 in!itado el gent&o, * por eso al "er Kess el gento+ subi, al monte& Este es el gent&o ueincre/aba al ciego de eric ue clamaba tras de es+s/ara 7ue se callaseFD$

    3:Bue un impedimento para el ba:o Zaueo ue uer&a !er a es+s$ ero como no ten&a la posibilidad desubir al monte, encontr un sic,moroF6, suiciente para su ba:e#a$Los montes escar/ados+en eecto, sonbuenos /ara los cier"os+ las /iedras como refugio /ara los eriBos F7$ or lo tanto, el ue desea !er a es+s, sies grande, suba al montepara !erlo gloriicado si es peueo, suba a un sic,moropara !erlo cruciicado$ Elsicmoro, en eecto, se llama 3iguera necia, con la ue se igura mu* bien la cru# de 8risto$ or eso dice elApstolJ;osotros /redicamos a Kess crucificado+ "erdadero esc9ndalo /ara los ?udos+ ) /ara los gentilesnecedadFF$

    ": As& ue el ue uiere !er a es+s, si est9 empe#ando, ue se suba a un sic,moropara abra#ar al uemuere por "l si es perecto, suba al montepara escucar al ue maniiesta los secretos del adre$ Escape,digo, del gent&o, para ue sienta la pa# ue no tiene el gent&o, pues este gent&o apretu:a a es+s, como dicenlos apstolesJEl gento te a/retu?aF$

    ues el /eor acababa de sanar a la mu:er de las emorragias al tocarle, * diceJ 8Mui(n me 3a tocadoGNlos disc&pulosJEl gento te a/retu?a+ ) t dices: 8Mui(n me 3a tocadoG ero no dice el /eorJ PSui"n me est9apretu:andoQ /inoJ 8Mui(n me 3a tocadoGna cosa es tocar a es+s * otra apretu:arlo$ El amor toca, elgent&o aprieta$ #:N nosotros, ermanos, si llegamos a tocar a es+s con la mano del santo deseo si nosunimos a "l al menos por un momento con un trago espiritual, en seguida nos !iene el gent&o importun&simode los pensamientos de este mundo * le apretu:an para ue nuestro cora#n no guste su dul#ura, o lo ue a*ue sentir m9s ue nada, le apartan completamente$ al "er el gentode los pensamientos carnales,Kess

    sube al monte+esto es, de:a el cora#n turbado * sube a la mente dada a las cosas celestiales, en la ueresidiendo como en su sitio propio re!ela los arcanosde sussecretosI$

    %:Al "er Kess el gento+ Kess subi, al monte& 3abi(ndose sentado+ se acercaron a (l sus disc/ulos1$8on algunos es+s camina, con otros se detiene, con otros se sienta$ ues al /ecar Ad9n+ ) 3abi(ndosea/artado del camino recto+ el #e-or se /aseaba en la brisa de la tarde 2$8on 0ois"s se detu!o, cuando

    dec&aJ6ero t estate a7u conmigo3

    $ara 5sa&as, en cambio, se sent, pues Vio al #e-or sentado sobre un7 $ 5s 2,2$FI $ /al 67,16$F1 $ t 32,13$F2 $ 0t D,1$F3 $ 5s 2,3 c$ 0i 4,2$F4 $ 0t D,2-3$FD $ 8$ Cc 1F,3D-3$F6 $ 8$ Cc 1,2-4$F7 $ /al 1I3,1F$FF $ 1 8o 1,23$F $ Cc F,4D$I $ 8$ 5s 4D,3$1 $ 0t D,1$2 $ n 3,F$3 $ t D,31$

    2F

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    trono e%celso ) ele"ado4$ /e sentaba eecti!amente, al re!elar con su :uicio secreto la obcecacin de los:ud&os, * la iluminacin de los gentiles$ ambi"n estaba sentado con los disc&pulos en el monte al iluminar alos mismos gentiles instru*"ndoles a ellos$

    &: N 3abi(ndose sentado+ se le acercaron sus disc/ulos $ .o se acercan a es+s los ue est9n entre lamultitud, *a ue con recuencia est9n turbados, sino los disc&pulos ue buscan la pa#$ N esto mismo insin+ael /eor con suiciente claridad a sus disc&pulos con estas palabrasJ En esto conocer9n todos 7ue son misdisc/ulos+ si se aman los unos a los otrosD$REa, ermanosT, !ea cada uno con este criterio si es disc&pulo de

    es+s, o no$ ':.o mire a la sabidur&a, ni a los bienes ue tiene, ni a su prodigalidad, ni a las cualidades de sucuerpo, pues dice el ApstolJAun7ue 3able las lenguas de los 3ombres o de los 9ngeles+ si no tengo caridad+de nada me sir"e6$Sue no mire, uiero decir, a las cosas e@teriores, sino discierna el amor de su cora#n,pues el 7ue ama a Dios debe amar tambi(n a su 3ermano 7$ero si ama como manda el mismo es+sJEstees mi mandamiento+ 7ue se amen los unos a los otros como )o los 3e amado F$ /uban, pues, los disc&pulos almonte, pero ue no suban solos, sino ue suban tambi"n los ue contemplan, los ue aman$

    (: Nsent9ndose+ se acercaron a (l sus disc/ulos ) abriendo su boca les ense-aba$ RSu" dignacin tanadmirableT Habiendo 3ablado Dios en otro tiem/o de muc3as maneras ) de muc3os modos /or los /rofetasa los /adres+ finalmente en estos das nos 3a 3ablado /or su Hi?o ,ue/oni(ndose a 3ablar les ense-aba$#u boca, dice, pues para ablar a los antiguos padres, en ciertas ocasiones abri las bocas de los proetas, enotras se sir!i de las lenguas de los 9ngeles, en otras de los elementos$ En cambio, para ablarnos a nosotros,abriendo su boca+ enseabadiciendo: Dic3osos los /obres en el es/ritu1II$

    1): Kean, ermanos, el ant&doto contra el !eneno de la antigua !enenosa serpiente1I1 con el ueen!enen a todo el g"nero umano dici"ndolesJ #er9n como dioses1I2$Este es el c9liB dorado 7ue embriagaa toda la tierra1I3,ue orece, es !erdad, la apariencia de elicidad, pero ue en el ondo lo ue da es labebida amarga de la desgracia$ #er9n como dioses$ n recipiente bonito, pero ue dentro contiene !eneno$0ira, desgraciado Ad9n, ue te as eco un desgraciado al escucarJ #er9n como dioses$ /" eli# alescucarJDic3osos los /obres de es/ritu$

    11:

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    e7ui"ocados+ no conociendo las Escrituras ni el /oder de Dios 11I$ 8risto es, en eecto, el oder de ios * la/abidur&a de ios$or tanto el ue no uiere ignorar a Cristo+ el /oder de Dios111, procure entender lasEscrituras$ 1":/ea dcil, para estar dis/uesto /ara escuc3ar+ ) tardo /ara 3ablar112$ cil, para aprenderumildemente dcil, para no oponerse sin miramiento, pues en esta !irtud, como en el segundo d&a denuestra reparacin se nos aparece especialmente el irmamento de las Escrituras, ue se/ara las aguas dearriba de las de aba:o113,uiero decir, el conocimiento ang"lico del umano$ Aba:o "stas, arriba auellas$ambi"n este d&a empie#a para nosotros por la tarde, es decir, con la consideracin de nuestra ignorancia, *

    !a asta por la maana, o sea, la iluminacin de la gracia di!ina$ N en !erdad es una subida a la tierra de los!i!os, la tierra de promisin114, la tierra del perpetuo descanso$Dic3osos+ /ues+ los mansos+ /or7ue ellos

    /oseer9n la tierra11D$1#: El ombre ue *a se conoce * ue se abre poco a poco al conocimiento de ios, necesita la ciencia,

    no la ue procede de la soberbia ue inca, sino de la caridad ue ediica 116$ ues necesita saber cu9ntas sonlas miserias de esta !ida, cu9nto el temor para no caer en la tentacin, cu9nto el dolor para no ensoberbecerseen la prosperidad, para ue sus l9grimas sean /an de da ) de noc3e117, * uiera m9s llorar ue re&r$ 1%:araue en esta tercera biena!enturan#a, como en el tercer d&a, por mandato del /eor se renan las aguas 7ueest9n ba?o el cielo en un solo lugar, me reiero a los pensamientos !anos * terrenos,) a/areBca la tierra

    seca11F, ue con la llu!ia de las l9grimas d( la 3ierba "erde ) 7ue da simiente+ ) los 9rboles frutales 7ue danfruto11$ues la tierra de nuestro cora#n, regada por las l9grimas, da el frutode los buenos pensamientos,ue cambian la antigua !ida en una uer#a para ue, del nue!o ombre pueda surgir el nue!o ruto$ N sinembargo, este nue!o d&a empie#a la !&spera, es decir, en las l9grimas, * !a acia la maana 12Idel consuelodi!ino, puesDic3osos los 7ue lloran+ /or7ue ellos ser9n consolados121$

    1&: As& el ombre ue !a progresando * acerc9ndose al ser"icio de Dios necesita el Esp&ritu defortaleBa, para mantenerse irme * preparar su 9nimo, no para el descanso sino para la tentaci,n122$ Suesupere con ortale#a la prosperidad, soporte con ortale#a la ad!ersidad, teniendo slo ambre * sed de la:usticia, * de:ando todas las cosas con la contemplacin$ ara ue pueda conseguir esto, en esta cuartabiena!enturan#a como en el cuarto d&a el /eor *a nos pone la lumbrera ma)or /ara 7ue ri?a el da , esdecir, el e:emplo de nuestro /al!ador, para ue ilumine el d&a, es decir, cuando las cosas nos !an bien paraue no nos en!uel!an las tinieblas de la soberbia, la lumbrera menor ) las estrellas /ara regir la noc3e 123,uiero decir, el e:emplo de paciencia de la 5glesia * el aguante de los santos, para ue no nos !eamospri!ados de toda lu# en la noce de nuestra ad!ersidad$ ambi"n au& el d&a tiene una tarde, es decir, la

    grande#a de la tentacin * el ambre de la :usticia, pero camina acia la maana, ue es la de la prosperidad* la saciedad eterna$ or eso, Dic3osos los 7ue tienen 3ambre ) sed de ?usticia+ /or7ue ellos ser9nsaciados124$

    1': Este *a a aprendido a tener compasin de su alma agradando a Dios12D$ Aprenda tambi"n a tenercompasin del pr:imo, pues no a* nadie tan :usto ue no tenga necesidad de misericordia, * "ste es elmismo * +nico conse?o, ue el ue uiere misericordia para s&, la tenga tambi"n con el otro$ Sue produ#can,pues las aguas, seg+n el mandato del /eor, los re/tiles "i"os126, me reiero a las obras buenas ue !ienen delos buenos pensamientos, no muertas, sino !i!as$ Sue reparta su pan con el 7ue tiene 3ambre, * aco:a en sucasa a los /eregrinos ) /obres, ue !ista al desnudocuando lo encuentre, * nodesprecie a su propia carne127,* as& con la uinta lu# casi se reali#a la uinta biena!enturan#a$ iene ciertamente tarde, es decir,

    11I $ 0t 22,2$111 $ 8$ 1 8or 1,24$112 $ /t 1,1$113 $ 8$ n 1,6-7$114 $ 8$ /al 26,13 /al 141,6$11D $ 0t D,4$116 $ 8$ 1 8or F,1$117 $ /al 41,4$11F $ n 1, cr /al 142,6$11 $ n 1,11$12I $ 8$ n 1,13$121 $ 0t D,D$122 $ 8$ /i 2,1$123 $ n 1,16$124 $ 0t D,6$12D $ 8$ /i 3I,24$126 $ n 1,2I$127 $ 5s DF,7$

    3I

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    consideracin con su propia necesidad, de la ue aprende a tener compasin de los otros como la uiere paras&, pero camina acia la maana, es decir, a la recompensa por la misericordia de ios, pues Dic3osos losmisericordiosos+ /or7ue ellos alcanBar9n misericordia12F$

    1(: ero el ue *a se a apartado del mal* a aprendido a acer el bien12!erdaderamente merece llegaral entendimiento$ ues los ue procuran acer el bien sin duda ue merecen conocer a ios$ Esteconocimiento puriica el o:o del cora#n, a in de ue el ue conoce a ios en es/e?o ) en enigma13I,al in lo!ea cuando se maniieste$ En esta se@ta biena!enturan#a, como en el se@to d&a, es creado el ombre o m9s

    bien es recreado a imagen de Dios131, para ue el ue ab&a sido com/arado con los brutos animales /or laignorancia132, sea eco como ios por la inteligencia$ N este d&a tiene tarde, es decir, el espe:o * el enigma,*a ue no puede !er con claridad, pero con la puriicacin del cora#n camina acia el d&a del ue dice elsalmistaJ6or la ma-ana me /resentar( ante ti ) te "er(133,pues.iena"enturados los lim/ios de coraB,n+

    /or7ue ellos "er9n a Dios134$2):As se a terminado este mundo inteligible * todo su adereBo13D$Por tanto, u" ueda m9s ue el

    s9badoQ ues despu"s de estas obras de seis d&as, ue no se pueden lle!ar a cabo sin traba:o, se llega aldescanso * a la pa# del alma e@cluido el temor ser!il !iene el amor de los i:os136, pues de sier!o se acei:o de ios, para ue "l pueda descansar en ios * ios en "l$ Dic3osos+ en efecto+ los /acficos+ /or7ue

    ser9n llamados 3i?os de Dios137$21: Este es el camino, amad&simos ermanos, por el ue emos de !ol!er a la patria * a la compa&a de

    auellos cu*a esti!idad o* celebramos$ or este camino laborioso subieron ellos mismos tambi"n antes uenosotros$ .inguna persecucin ni ad!ersidad pudieron apartarlos de este camino$

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    #omentario al texto

    P!""#$%& ' # (

    En estos p9rraos introductorios se destacan tres temas mu* propios de la ensean#a elredianaJla centralidad de la Encarnacin del Kerbo como el 0isterio ue reabre nuestro acceso a ios, lamemoria del cora#n como centro del alma * lugar de la presencia del /eor, * la caridad raternacomo sello de una !ida espiritual aut"ntica$

    ^1-2_ El pasa:e e!ang"lico de las iena!enturan#as pronunciadas sobre el monte sugiere aElredo la imagen de 8risto-monte, * con el doble mo!imiento de ascenso * descenso ue "sta e!ocase nos recuerda ue el $ Elredo :uega au& con la asonancia de los t"rminos montem* mentem$

    En esta luca contra los pensamientos ue procuran ale:ar del cora#n a es+s, se nos proponela meditacin aecti!a del 0isterio de 8risto$ /i uno es =peueo> * est9 en los comien#os delcamino espiritual, a de =subir> por la contemplacin de su como =iguera necia> con lo cual se signiica la 8ru# de 8risto necedad /ara los /aganos (1 8or 1,23 c$/$ Agust&n, #erm$ 174,3, Obras Com/letas A8 443, 0adrid, 1F3, p$ 7II)

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    ^6-_ Kemos ue Elredo a puesto desde el principio este sermn en cla!e de encuentro *adesin a esucristo por medio del affectus-amor * deseo- imprimiendo con ello un mo!imientode ascenso a nuestra b+sueda espiritual$

    /in embargo, esto no deber9 ale:arnos de la realidad concreta, sino todo lo contrario porue side:amos =la turba> * buscamos la pa# por la contemplacin amante del 0isterio de 8risto, Elredonos recuerda ue la autenticidad del discipulado se maniiesta en la caridad raterna seg+n el

    mandamiento del /eorJ mense unos a otros como o los3e amado$ N en esto cada uno a de=discernir (el t"rmino usado es e%/lorareJ e@aminar, reconocer, poner a prueba) el amor de sucora#n, pues -como ensea san uan- el ue ama a Dios+ debe amar tambi(n a su 3ermano>$

    Entonces subiremos :unto con los disc&pulos, contemplando * amando, para recibir en el montela ensean#a de 8risto$

    P!""#$%& ') # 2)

    .os allamos en el cora#n del sermn, donde nuestro abad tra#a de orma admirable elcamino ue el alma recorre desde el comien#o de su con!ersin a ios mo!ida por el temor ser!ilasta el desarrollo pleno de la caridad, mo!ida *a totalmente por el amor ilial$

    Encontramos au& una gran riue#a de doctrina espiritual ue san Elredo entrela#a con loste@tos b&blicos ue orman la urdimbre * la trama de su meditacin (n 1,1-2,4 5s 11,2-3 * 0t D,3-) * ue le permiten condensar su pensamiento por medio de im9genes * t"rminos cargados desentido$ 5remos, pues, comentando los p9rraos a la lu# de otros sermones de esta misma coleccin$

    , !aso ermoso ue adentro oculta !eneno 144-, la ca&da del g"nero umano ue, enAd9n, se de: seducir por la !o# del tentador$ /igniicati!amente esta !o# resuena au& tres !ecesJ#er9n como dioses$ %ste es =el antiguo ermento de la soberbia> (11,1D c$ 3,23) ue :unto con lacorrupcin nos tra:o tambi"n la =amarga inelicidad> (c$ #/ec5, 11-12)$

    En estas =tinieblas> nos allamos cuando brilla =para nosotros la lu#> de la gracia di!ina en el=primer d&a de nuestra creacin * recreacin>, es el momento de nuestra con!ersin a ios, en uetomamos conciencia de la !ile#a de nuestra condicin de pecadores (c$ 4,2-3I)$

    e esta manera uedan unidos en una e@periencia undanteJ conocimiento de s& * aba:amiento$Este aba:amiento es la umildad * la e@presin concreta de "sta, la pobre#a de esp&ritu14D$

    =Este d&a empie#a entonces en la consideracin de nuestra debilidad>$Infirmitases la debilidadpropia de nuestra naturale#a desde ue perdi la seme:an#a di!ina, lo ue uno es por s& mismo sin elau@ilio de la gracia$ En un sermn en la Asuncin de la Kirgen nos dice ue esta ragilidad es comola =tierra !il> de nuestro cora#n ue emos de sacar auera * tener siempre a la !ista * as& =abr9un oso en nuestro cora#n, la tierra umilde * prounda> de la umildad ue proteger9 la moradadel /eor ue es nuestro cora#n (c$1,7)$

    144 $ El uso del contraste es un recurso mu* com+n en los sermones de san Elredo$14D $ /an ernardo sinteti#a esta ensean#a cuando deine la umildad como =una !irtud ue incita al ombre amenospreciarse ante la clara lu# de su propioconocimiento> (Hum 2, Obras Com/letas5, A8, 0adrid, 1F3, p$ 17D)$

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    En este =primer grado de ascenso al reino de los cielos> nos mue!e el =Esp&ritu del temor del/eor>, en una clara reerencia al primer grado de la escala de umildad de san enito * a toda ladoctrina b&blica * patr&stica sub*acente$ En otro sermn 146 nuestro autor dice ue este =temoralimenta el amor> * =como una na!a:a bien ailada> corta los la#os con ue el diablo nos tieneatados$ Estas ligaduras son =las riue#as * ocupaciones de este mundo> (c$ 24,2D-26)$

    /lo sobre esta base de desprendimiento radical es posible construir el =ediicio espiritual>como claramente ensea nuestro /eorJ El 7ue no renuncia a todo lo 7ue /osee no /uede ser midisc/ulo(c$ 24,11-12$23-24)$ En la iesta de san enito Elredo actuali#a para sus mon:es los tres

    primeros grados de umildad de la eglaJ El desprecio de las riue#as * onores como primerindicio de umildad, la mortiicacin de los deseos de la carne por medio de los e:ercicios asc"ticos* la renuncia a la propia !oluntad por la obediencia (6,23-27), * pensamos ue todo esto uieresigniicar cuando abla au& de la pobre#a del esp&ritu como =renuncia !oluntaria por ios del alma* del cuerpo> (c$ tambi"n 1,4F-4)$

    ^13-14_ Ca segunda biena!enturan#aJ Dic3osos los mansosueda asociada al segundo d&a denuestra reparacin, cuando es creado el irmamento$ Este =cielo>, dice Elredo, es la /agrada

    Escritura$%l :uega en estos p9rraos con el doble sentido de algunos t"rminosJ el firmamentum, lo

    =irme>, el =apo*o> es al mismo tiempo lo ue =separa> el conocimiento superior de los 9ngeles delinerior de los ombres$ Ca /agrada Escritura est9 as& desplegada como el cielo apropiado a nuestracapacidad * en ella podemos conocer =el poder de ios> ue es 8risto$ El t"rmino "irtus, =poder> *=uer#a>, signiica tambi"n =!irtud> * as& lo aplica a la mansedumbre en la ue =aparece sobre todoeste irmamento de las Escrituras>$ El !ocablo latino mitissigniica =manso> * tambi"n =dcil>,=aable>, =dulce> con lo ue se destaca la capacidad recepti!a de la escuca * la docilidad paraaprender, * ue au& se une a la =piedad> para =empe#ar a conocer a ios>$

    En esta *u@taposicin de im9genes * sentidos se destaca una sentenciaJ =El ue no uiereignorar a 8risto, oder de ios, procure entender las Escrituras>, como un eco de auella tanconocida de san ernimoJ =5gnorar las Escrituras es ignorar a 8risto>$ Es ue para Elredo como

    para todos los santos adres la iblia toda abla de 8risto, ella es =la estrella ue nos lle!a a es+s>(4,32 c$ 11,27-2F)$

    En el sermn 22, en la .ati!idad de la Kirgen 0ar&a, nuestro abad dice ue a* tres cosas uenos separan del /eor * nos impiden ir a %lJ el mar de este mundo, el muro de nuestros !icios *

    pecados * la nube de la ignorancia$ na !e# ue emos resuelto seguirlo embarcados en la na!e denuestra 'rden mon9stica * ue destruimos auel muro con los e:ercicios propios de la umildad * la

    pobre#a, necesitamos la /agrada Escritura =ue es como lu# * l9mpara a la ue debemos mirar sin

    cesar> para no acer esos e:ercicios =seg+n la propia !oluntad, sino seg+n la regla> ue ella nos da(c$22,F-)$Elredo a seguido en su propia ormacin mon9stica el conse:os de nuestro padre san enito

    ue in!ita a encontrar en la alabra de ios una =norma rect&sima para la !ida umana> (73,3)147* as& lo ensea a sus mon:es$ En el pensamiento de nuestro autor el primer medio deeducacin mon9stica es sin duda el contacto continuo con el te@to /agrado, considerado comoalabra del ios !i!iente14F$

    146 $ /e trata del sermn 24En la ;ati"idad de la Virgen 2ara, en el cual Elredo describe el ascenso acia ios atra!"s de tres grados (la con!ersin, la puriicacin * la espera) * ue !ol!eremos a citar en este comentario$147 $ $14F $ 8$

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    ^1D-16_ En la tercera biena!enturan#aJ Dic3osos los 7ue lloransan Elredo !a a ablar de lasl9grimas en unin al tercer d&a de nuestra recreacin$ Esta tristeBa segn Dios-como la llama elApstol en 2 8or 7,1I- ace reerencia a la e@periencia de compuncin, cuando el cora#n es=pun#ado> (/unctio) por la gracia di!ina para ue =despierte> * tome conciencia de su propiarealidad rente a ios$

    Elredo nos dice ue estas l9grimas nacen de una =ciencia> ue es necesaria al alma en esta

    etapa del camino$ odemos decir ue se trata de una ciencia =!ital>, reerida a la !ida * ue lle!a ala Kida$ Es la ciencia ue =ediica por la caridad> * ue consiste en =saber cu9ntas son las miseriasde esta !ida> * as&, al dolor por el reconocimiento de la propia debilidad en la tentacin, se aade eldolor por la le:an&a * el deseo de la atria eterna$

    Estas son para nuestro autor, lo mismo ue para toda la tradicin, las dos causas principales dedonde surgen las l9grimas ue la!an * puriican el alma como un segundo autismoJ l9grimasamargas de arrepentimiento o l9grimas dulces por el anelo del eino$

    En la esti!idad de la uriicacin de /anta 0ar&a, "l desarrolla el tema de las l9grimas a partirdel sacriicio de las dos trtolas * los dos picones de paloma con el cual es posible entrar en elemplo de ios$ Estas dos clases de a!es, ue arrullan * nunca cantan, nos dice, =simboli#an las

    l9grimas * gemidos con los ue podemos purgarnos de todos nuestros !icios>$ N distingue tresclases de l9grimasJ las del temor, las del pudor * las del amor$ Cas ue son pro!ocadas por el temor-signiicadas en los dos picones de paloma- es temor de ser condenados por los pecados cometidos* temor de reincidir en ellos, * las ue son pro!ocadas por la !ergWen#a (lat$, /udor) -signiicadasen las dos trtolas- es !ergWen#a por abernos mancado * corrompido con nuestros pecados *!ergWen#a por nuestra ingratitud ante los beneicios recibidos de ios$ El tercer g"nero de l9grimas,ue nace del amor, =no tanto puriica cuanto alimenta * restablece> (c$ D,22-2F)$

    En el sermn ue estamos comentando es interesante la s&ntesis ue logra acer Elredo de estauncin puriicadora * reno!adora de las l9grimas, a partir de las im9genes ue le proporciona elrelato del d&a tercero de la creacinJ =los pensamientos !anos * terrenos>, luctuantes como el agua,impidiendo todo recogimiento * compuncin acen inecunda la tierra del cora#n$ 8uando =pormandato del /eor> estas =aguas> se re+nen aparece la =tierra seca>, es decir, el cora#n sediento deios ue, con la =llu!ia> ecundante de la compuncin =da el ruto de los buenos pensamientos uecambian la antigua !ida en un nue!o !erdor>$

    ^17_ 8on el itinerario recorrido asta este momento, el alma a ido =progresando> en el ser!iciode ios llegando as& a la cuarta biena!enturan#a, con lo cual dice nuestro abad, =teniendo sloambre * sed de la :usticia desprecia todas las cosas al contemplarla>$

    Kamos a ampliar la concisin de esta rase con lo ue "l mismo ensea en el sermn 24 *a

    mencionado$ .os allamos all& en el segundo grado de ascenso a ios ue corresponde a lapuriicacin de nuestros !icios * diceJ =) el !erdadero * deleitable bien * el ue au& no tenga ambre de la :usticia, no comprendosi, alguna !e#, podr9 ser saciado por ella>$ Suiere decir ue, aunue a*amos a!an#ado en elcamino, no es tiempo de descanso sino de luca contra las tendencias terrenas ue =pro!ienen de lamisma debilidad ue a+n no est9 sanada del todo> (c$ 24,41-42)$

    Kemos entonces ue para san Elredo este =ambre * sed de la :usticia> signiica por una parteel deseo del alma ue tiende a la pure#a de cora#n *, al mismo tiempo * m9s all9 de s&, el deseoacia Auel ue es el +nico bien !erdaderamente deleitable$ or eso puede decir au& ue al

    contemplar ese in al ue se aspira se llegan a despreciar todas las cosas de este mundo$

    3D

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    ero para tener =slo ambre * sed de la :usticia> se necesita el =Esp&ritu de ortale#a>, capa#de mantener al alma irme tanto en la ad!ersidad como en la prosperidad$ N como esta es una=tentacin> ue aceca en gran parte del camino, Elredo con recuencia pre!iene * anima a susmon:es para ue sean umildes en la prosperidad, pacientes en la ad!ersidad * perse!erantes entodo bien con ortale#a (c$ 7,1I-11 17,4 1F,2I-22 21,1F$22-23$33 22,21 24,32-33)$ En estesermn, el e:emplo de nuestro /al!ador es el =astro ue preside el d&a> para no enorgullecerse

    !anamente en la prosperidad * el e:emplo de paciencia de la 5glesia * de los /antos los =astros uepresiden la noce> de la ad!ersidad$

    ^1F_ En esta uinta biena!enturan#aJ Dic3osos los misericordiosos, el alma llega a un puntodecisi!o en su camino de ascensoJ a aprendido a compadecerse de s& agradando a ios por lacon!ersin * la puriicacin de sus pasiones, * sabe por e@periencia ue todo a sido obra del/eor, ruto de la =!isita> de la gracia di!ina (c$ #/ec55, cap$ ?5-?555) porue =no a* nadie tan

    :usto ue no tenga necesidad de misericordia>$ N as&, por la consideracin de su propia necesidadaprende a compadecerse del pr:imo$

    .uestro autor sigue au& de cerca la ensean#a de san ernardo, ue en su 4ratado sobre los

    grados de 3umildad ) soberbiadescribe cmo el alma tras el conocimiento de s& * siguiendo =elconse:o de la Kerdad> maniestado en esta biena!enturan#a, alcan#a el segundo grado de la !erdad$=Cos ue llegan a "l -dice ernardo- adi!inan las indigencias de los dem9s en las su*as propias *

    por lo ue suren, aprenden a compadecerse de los ue suren>14$

    En la presentacin de san Elredo se destaca la asociacin de este itinerario del alma con lasim9genes del uinto d&a de la creacin, con lo cual se subra*a no slo ue nuestra e@perienciareorma nuestra conducta sino tambi"n ue son nuestros pensamientos los ue dan orma a nuestroobrar$ Na en el =d&a tercero> los pensamientos ueron comparados a las aguas, ue all& -toda!&a!anos * dispersos- se ab&an reunido !ol!iendo sobre s& por mandato del /eor$ Aora se trata de=las aguas> de los buenos pensamientos las ue, por el mandato del /eor, producen =animales!i!ientes ue reptan>, es decir, obras =!i!as -dice "l- no muertas> ue pro!ienen de los buenos

    pensamientos1DI$

    8on la cita del proeta 5sa&as DF,7 pensamos ue Elredo uiere destacar ue esta compasinabierta a los dem9s no puede ser slo aecti!a, mero sentimiento del cora#n, sino ue a de sereecti!a * concreta en buenas obras de !ida para los ermanos * ermanas, al mismo tiempo uenos recuerda ue este es el in ordenado de toda aut"ntica ascesis * de donde brota la !ida para la

    propia alma$Esta compasin ue es caridad se aseme:a, dice nuestro abad en otro sermn, a la =torre> del

    castillo ue preparamos en nuestro cora#n para recibir al /eor, porue ella =est9 por sobre todas

    las !irtudes del ediicio espiritual> * lo resguarda de todos sus enemigos$ Ca caridad, no a* duda,es el camino m9s e%celenteue lle!a a la !ida (c$ 1,12-13 * tambi"n 13,22 ,33 * 27,7-F)$

    ^1_ En toda la tradicin patr&stica * mon9stica la se@ta biena!enturan#aJ Dic3osos los /urosde coraB,ne@presa el anelo del alma ue busca a ios$ N en ella Elredo sinteti#a admirablementesu doctrina espiritual ue, sin ser original, lle!a el sello de su propia e@periencia ue ampliamentea desarrollado en su obraEs/e?o de la caridad$

    14 $ /an ernardo,Hum1F, Obras Com/letas5, A8, 0adrid, 1F3, p$ 1$1DI $ El te@to latino permite !er el paralelo ue au& ace ElredoJ =6roducant ergo e% /raece/to Domini a7uaere/tilia animarum "i"entium+ e% bonis scilicet cogitationibus bona o/era+ non mortua+ sed "i"entia+ donde estos=pensamientos> parecen obedecer al =mandato del /eor>, es decir, al precepto del amor$

    36

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    El =o:o> del alma es el amor (c$ #/ec5, 2), el cual es al mismo tiempo don de ios * tendenciaacia %l$ se limpie, poco a poco, de toda concupiscenciamala1D2para ue, reorientado as& el amor por la caridad, se restable#ca en el alma la seme:an#aperdida$ Entonces =en esta se@ta biena!enturan#a, como en el se@to d&a, el ombre es creado o m9sbien recreado a imagen de ios>$

    Elredo nos muestra cmo esta pure#a de cora#n es ruto de la obra con:unta entre el esuer#oumano * la gracia di!inaJ por la caridad, ue sucesi!amente a ido tomando la orma decon!ersin (amor a s& mismo) * compasin (amor al pr:imo), el ombre =a aprendido a acer el

    bien> * en eso mismo se le concede =conocer a ios>$

    Ca e@periencia del amor-caridad puriica el o:o del cora#n * abre al alma a un conocimiento1D3

    interno (in