EL ESPACIO ES UN LUGAR COMPLICADO

Reunidos alrededor de la integración de las prácticas espacio-escultóricas, se tejen mati-ces, cadencias, énfasis, desvíos e inquietudes que indican posibles rutas desde las cuales es posible asumirlas en pro de la construcción de un paisaje investigativo acorde con la comple-ja dimensión que las determina.

De esta manera, integrar las corporalidades, en las espacialidades, articulando objetuali-dades desde capas temporales dinámicas, conduce inevitablemente al encuentro con dimensiones inéditas para las prácticas espacio-escultóri-cas capaces de hacer de estas categorías men-cionadas, el contexto propicio para revisar sus alcances, pero sobre todo, para evitar la domesticación a la que se ven sometidas des-de diversos frentes afines a la comodidad que brinda la exploración formalista.

La temporalidad de este entrecruce indica, sin duda alguna, que en un muy corto lapso, aquel-lo nombrado como lo que irrumpía para desvir-tuar cualquier noción estable consonante con lo artístico, hoy no opera en la misma esfera, de esta manera, la conjunción espacio-corpo-ro-temporo-objetual imbrica, quiérase o no, un campo de la escultura que lo que menos le importa es que sea pensado sólo desde sus rasgos. Hoy, la condición contemporánea de la escultura atraviesa la sugerencia de Giorgio Agamben que al respecto la refiere como aquello que no ha sucedido, es decir, simplemente re-cuerda cómo, después de haber acontecido todo en el arte, debemos de nuevo hacerlo, todo.

JUAN LUIS MESA SÁNCHEZPROFESOR ASOCIADOESCUELA DE ARTES. FAC. DE ARQUITECTURAUNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA

SEDE MEDELLÍN

María Isabel Medina.

Atrapada en el humo prohibido, recurre a la tiza para marcar las fronteras que, humeando, invaden la destreza de los pulmones inalcanzables.María Isabel Medina.

Karina Rodriguez

Balanza-olla-pesa-peso. Reunión de la convergencia del alimento que en estado de peso, deviene en el rango del bocado que abre el apetito al gesto alimentario.Karina Rodriguez

John Mario Alzate

Algo extraño cae, se pega, se camufla en el contorno del mundo convertido en máquina, prenda, corte, retazo, hilo, atmósfera. Algo extraño hace que el masculino polvo, se transforme en femenina pavesa.

John Mario Alzate

Manuela Martinez

Sólo se necesitaron dos puntos, también una cuerda, lo demás lo puso el viento, las vigas, el cemento.

Tania Ausecha.

El canto espiritual, recobra como el uso, el lanar proceder de la mujer que teje la funda del hombre macho, del machete que a su vez, inicia y culmina los ciclos. El lanar proceder dejar correr el líquido acuoso sobre los paisajes superpuestos de tanta lejanía con el primigenio es-tado. Canto de dolor, dolor de canto que canta, canta en la noche, a la noche que ve cómo le roban lo imposible.Tania Ausecha.

Lorena Zuluaga.

El abanico de aire y papel irrumpe en el espacio para acercar con su sonora caja el tañir de los encuentros que se quedan grabados en el ir, el venir, las vueltas, las devueltas. Todos, contenidos en el acto de invitar al otro, a los otros, sin más preámbulo que aquel de estar por estar.Lorena Zuluaga.

Alejandra Jaramillo.

Imaginar que los lazos filiales devienen en arbóreos nexos, conjuntos, cercanos, lindantes, convierte los nudos en apoyos, en tensos hilos que se templan con el batir del viento, que guían los ascensos por entre el aire que apa-rece, sin razón alguna, más allá de ser erecto junto a los brotes, los lóbulos y las derivaciones precoces que emergen gracias al vital ciclo.Alejandra Jaramillo.

Nataly Marín Quiceno.

En la pisada se transbordan las posibilidades del peso, del piso. Con el paso, el piso inmisericorde nosnrecibe, sin distingo, sin reato. Pase, a quien de repente cruza la basta capa material del pasar… anuncio, en el próximo e inevitable tránsito hacia un allá sin acá…. Nataly Marín Quiceno.

Yeny Mejía.

Envoltorio, envuelto, envoltijo gusano que se arrastra por el suelo-urbe, dormitando, tragando calle, alimentando plástico, pasado con plástico frío, duro, fiero.Yeny Mejía.

Alan Gómez H

Vehículo: piel para convertir mi cuerpo en el cuerpo del otro, en otro cuerpo que siempre pide a gritos los otros cu-erpos, que se dejan bañar por mantos litúrgicos, profanos, familiares, populares, eclécticos. Todo ello en medio de un único fin, moverse, movernos, movilizarnos dentro del cuerpo del otro, para otro.Alan Gómez H

Maria Isabel Giraldo

Un viento leve, se mueve como el viento. Una ligera brisa impregna el aire de patio que portan las mudas de las cercadas paredes convertidas en el orificio por el cual un viento leve, se mueve como el viento.Maria Isabel Giraldo

Liliana Bedoya.

Externo bordear por el que se derraman los ajustes, las escogencias de prendas del día a día, sometidas por la tirana postura de una apariencia que ampara el molde de lo que se convierte en celda.

Liliana Bedoya.

Juan Manuel Rico.

A la hora en la que el silencio-ruido se convierte en ruido-silencio, allá, algo invita, convoca al repaso, al contacto contiguo, al alma.Juan Manuel Rico.

Juan Bernardo Cano.

El paso, la mano, el lazo, se tensan en la postrimería. Lentamente, se produce lo invisible. Pausadamente, lo etéreo se desvanece en la penumbra. Languidez temporal que un lapso ínfimo, recoge y reúne la sutileza del gesto.

Juan Bernardo Cano.

James Rodríguez.

Aviso en movimiento que la domesticada puede cobrar venganza con el hocico rastrero.James Rodríguez.

Santiago Herrera.

Es usted capaz de decir: ¿me gusta, usted me gusta?, o siente que a través del auricular, la tecla, la pantalla, no sólo lo afirma en voz alta, sino que se aventura al roce, a la insinu-ación, al susceptible instante en el que se cruza el deseo?Santiago Herrera.

Claudia Velásquez.

La mirada en picada, grácil, ágil, ve, a la distancia, las capas de paisajes armados por la diaria tarea de arrojar la nada al piso graso….

ANDRÉS FELIPE VALENCIA.

EN EL HUEVO SE INCUBA LA CARNE, EN LA CARNE SE DESOLLA LA DERMIS, CON LA PIEL SE CUBRE EL CAJÓN, CON EL CAJÓN SE MARCA EL ESPACIO, CON EL ESPACIO SE VIAJA EN LA PIEL….

ANDRÉS FELIPE VALENCIA.

UNIVERSIDAD NACIONALMEDELLIN

2014