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147 EL EPISCOPOLOGIO DE GIL DÁVALOS Y ALONSO DE SALAZAR E L U C I D A R I O ELUCIDARIO. Nº 3 (Marzo 2007). págs. 147 a 159 Seminario Bio-bibliográfico Manuel Caballero Venzalá E El episcopologio de Gil Dávalos y Alonso de Salazar LUIS CORONAS TEJADA R E S U M E N Es un estudio de la relación de obispos de la diócesis de Jaén compuesta por los canónigos Gil Dávalos y Alonso de Salazar a fines del siglo XVI. Se ve que la información de datos para la realización de esta serie de obispos era muy deficiente para estos autores por la pérdida del archivo en 1368, por lo que solo a partir de esta fecha empizan a moverse con más seguridad. INTRODUCCIÓN En la Biblioteca Nacional se conserva un ma- nuscrito titulado «Relación de todos los obispos que ha avido de Jaen desde que fue ganada de moros esta tierra por el Rey don Hernando» 1 . Aparece tal ma- nuscrito como anónimo aunque se sabe que fue obra de los canónigos Gil Dávalos Zambrana y Alonso de Salazar Frías redactado a petición del obispo don Francisco Sarmiento de Mendoza aproximadamente por 1590, según Jimena Jura- do 2 . El documento que estudio no es autógrafo de alguno de los autores, pues la letra es del si- glo XVIII. Según informaron los realizadores del Inventario General de Manuscritos de la Biblio- teca a Manuel Caballero se trata de una copia que debió llevar a cabo, como de otros manus- critos, el erudito Andrés Marcos Burriel 3 . Son 9 folios en papel de 31,5 x 21,5. Existe otro manus- crito en la Biblioteca de la Real Academia de la Historia 4 . Además de la existencia de un manus- crito en la catedral de Jaén, se sabe que tenía uno don Pedro de Rojas, conde de Mora, que se lo prestó a Jimena Jurado y éste comprobó que des- pués de la Relación... había otra en la que se aña- dían algunas cosas más; se trataba del llamado Segundo Memorial más cumplido y noticioso que el trabajo primero 5 . 1 B.N.M., ms. nº 5732, fol. 83-91.- 2 JIMENA JURADO, M., Catálogo de los obispos de las Iglesias catedrales de Jaén y Anales eclesiásticos de este obispado, Madrid, 1654; utilizo la ed. facsímil de 1991. 3 CABALLERO VENZALÁ, M., Diccionario Bio-biblio- gráfico del Santo Reino de Jaén.Tº III, pp. 50-51 4 B.R A.H., Salazar, O-8, fol. 152 r-167 v. . 5 JIMENA JURADO, Catálogo de los obispos,... pp. .257- 258

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EL EPISCOPOLOGIO DE GIL DÁVALOS YALONSO DE SALAZAR

ELUCIDARIO

ELUCIDARIO. Nº 3 (Marzo 2007). págs. 147 a 159

Seminario Bio-bibliográfico Manuel Caballero Venzalá

E

El episcopologio de Gil Dávalos yAlonso de Salazar

LUIS CORONAS TEJADA

R E S U M E N

Es un estudio de la relación de obispos de la diócesis de Jaén compuesta por los canónigos Gil Dávalos yAlonso de Salazar a fines del siglo XVI. Se ve que la información de datos para la realización de esta serie deobispos era muy deficiente para estos autores por la pérdida del archivo en 1368, por lo que solo a partir deesta fecha empizan a moverse con más seguridad.

INTRODUCCIÓN

En la Biblioteca Nacional se conserva un ma-nuscrito titulado «Relación de todos los obispos queha avido de Jaen desde que fue ganada de moros estatierra por el Rey don Hernando»1. Aparece tal ma-nuscrito como anónimo aunque se sabe que fueobra de los canónigos Gil Dávalos Zambrana yAlonso de Salazar Frías redactado a petición delobispo don Francisco Sarmiento de Mendozaaproximadamente por 1590, según Jimena Jura-do2. El documento que estudio no es autógrafode alguno de los autores, pues la letra es del si-glo XVIII. Según informaron los realizadores delInventario General de Manuscritos de la Biblio-teca a Manuel Caballero se trata de una copiaque debió llevar a cabo, como de otros manus-critos, el erudito Andrés Marcos Burriel3. Son 9folios en papel de 31,5 x 21,5. Existe otro manus-

crito en la Biblioteca de la Real Academia de laHistoria4. Además de la existencia de un manus-crito en la catedral de Jaén, se sabe que tenía unodon Pedro de Rojas, conde de Mora, que se loprestó a Jimena Jurado y éste comprobó que des-pués de la Relación... había otra en la que se aña-dían algunas cosas más; se trataba del llamadoSegundo Memorial más cumplido y noticiosoque el trabajo primero5.

1 B.N.M., ms. nº 5732, fol. 83-91.-2 JIMENA JURADO, M., Catálogo de los obispos de las

Iglesias catedrales de Jaén y Anales eclesiásticos de este obispado,Madrid, 1654; utilizo la ed. facsímil de 1991.

3 CABALLERO VENZALÁ, M., Diccionario Bio-biblio-gráfico del Santo Reino de Jaén.Tº III, pp. 50-51

4 B.R A.H., Salazar, O-8, fol. 152 r-167 v. .5 JIMENA JURADO, Catálogo de los obispos,... pp. .257-

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El «Segundo Memorial de los Obispos deJaén» debió redactarse por 1594. El deán Martí-nez Mazas conoció el trabajo de estos dos canó-nigos6.

El título del Catálogo, según José AlonsoChacón que lo utilizó para su obra sobre Gonza-lo de Stúñiga, era «Información sobre los obisposhasta 1595 hecha a requerimiento del obispo don Fran-cisco Sarmiento de Mendoza»7. El manuscrito queestudio corresponde a la Relación primera, aun-que la sospecha de Caballero Venzalá de acuer-do con Rodríguez de Gálvez8, por incluir a donBernardo de Rojas y Sandoval, sucesor de donFrancisco de Sarmiento pudiera llevar a pensar-se que fuera el Segundo Memorial. Don Agustínde la Fuente conoce el manuscrito que estudio através de la citada obra de Chacón y en su obrasobre Don Gonzalo de Stúñiga da la signaturade la Biblioteca Nacional.

Este episcopologio de Dávalos y Salazar sir-vió de guía para la realización de una serie deretratos de los obispos de Jaén dispuesta por donSancho Dávila ya a comienzos del siglo XVII.

LOS AUTORES DE LA RELACIÓN

Don Gil Dávalos Zambrana

Gil Dávalos Zambrana por sus progenito-res pertenecía a linajes nobiliarios llegados delNorte en tiempos de la conquista de Baeza. En eltiempo que estudio, fines del siglo XVI, los Dá-valos llevaban mucho tiempo instalados en Ibrosy Úbeda, y los Zambrana en Baeza y Úbeda. Ar-gote de Molina recoge la noticia de los Dávalosprocedentes de Navarra así como señala cualfuera su escudo: cuatro jaqueles, dos rojos y dosde oro9.

Toral Peñaranda en su estudio genealógicosobre los Zambrana destaca su linaje noble, concasa solar en la montaña, cerca de la Rioja y ensu escudo en campo azul, un castillo de oro condos estrellas en lo alto y orlado con ocho aspasde oro en campo rojo. Toral ha escrito con segu-ridad: Don Gil Dávalos Zambrana, hijo sexto de Fer-nando Dávalos Zambrana el bueno y de doña

Madalena Merino, fue canónigo de Jaén, de gran sa-ber en materias de historia y genealogía. Le sucedióen la canonjía su sobrino don Fernando DávalosZambrana»10. Según se dice en ese estudio doñaMagdalena era sobrina del cardenal Merino. Enla información de limpieza de sangre cuyos au-tos son de enero de 1580 para ingreso en el cabil-do catedralicio coinciden los datos con los queproporciona Toral pero además figura que po-see el título de Maestro11. Gil Dávalos recibió lacanonjía de su tío Gabriel Dávalos.

En 1609 con las debidas bulas apostólicas elclérigo de menores Gil Dávalos Cobo es coadju-tor de su tío Gil Dávalos Zambrana12; sin embar-go, por los datos que poseo a don Gil no le susti-tuyó ninguno de los dos sobrinos citados sinodon Jorge de Contreras Torres, pues así se ve porun documento pontificio que se conserva en unanaquel de Bulas en mal estado13 de la Catedral deJaén. A pesar de las pésimas condiciones Nievesha podido descifrar el documento. Se trata deun rescripto de gracia de Urbano VIII en el queprimeramente se expone la petición elevada alpapa de la necesidad que tiene don Gil de uncoadjutor porque no puede atender por enfer-medades y pérdida de visión la canonjía y pre-bendas manifestando que ya había tenido mu-chos años atrás otro coadjutor.

6 MARTINEZ MAZAS, J., Memorial al Illmo y mui Ve-nerable Estado eclesiástico del Obispado de Jaén sobre el indebidoculto que se da a muchos santos no canonizados a que no le perte-necen por otro título que el de los falsos chronicones,,Jaén, 2001,Diputación Provincial, vid. cap. IV.

7 FUENTE, A.de la, Don Gonzalo de Stúniga, obispo deJaén,1423-1456 Córdoba, 1978, p. 144.-

8 RODRÍGUEZ DE GÁLVEZ, R., Apuntes históricos so-bre el movimiento de la Sede episcopal de Jaén, Jaén, 1873, p. 74.

9 ARGOTE DE MOLINA, G., Nobleza de Andalucía,,Jaén, ed. !991, cap. XXXIII, pp. 346-348.

10 TORAL PEÑARANDA, E., «Los caballerosZambrana de Úbeda, Baeza y Murcia y sus enlaces» enB.I.E.G., nº 167, pp. 251-306, vid. pp 252 y .266.

11 A.H.D.J., Sec. Limpieza de sangre, Caja 483.12 A.H.D.J., Sec. Limpieza de sangre, Caja 49913 NIEVES SANZ, E.J., «Un nombramiento de coad-

jutor perpetuo conservado en el Bulario de la Catedral deJaén» en B.I.E.G., nº 171, pp. 319-359.

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En ese documento se ve que don Gil muchosaños antes había tenido como coadjutor a GilDávalos Cobo, pero éste pudo alcanzar la canon-jía en 1619, sin previo cese de aquel, por lo quepasados los años y ya en la vejez, o al menos conlos achaques de los años el pontífice concede adon Gil un nuevo coadjutor, don Jorge de Con-treras Torres. El documento pontificio está fecha-do el 20 de junio de 1635 en Castelgandolfo.

Se dice en este documento que don Gil seencuentra en el quincuagésimo año de su vida,lleva disfrutando la prebenda veinticuatro añosy padece enfermedad ocular que le impide y nopuede cumplir la función de hebdomadario. Ennoviembre de 1636 se hacía el expediente de lim-pieza de sangre de don Jorge de Contreras To-rres14.

Don Alonso de Salazar Frías

En 1579 el rey Felipe II propuso a don Fran-cisco Sarmiento de Mendoza, obispo de Astorga,su promoción al obispado de Jaén que lo aceptó;hechas las gestiones oportunas se cubrió la va-cante episcopal de Jaén en el prelado ya citado15.El nombramiento a favor del burgalés don Fran-cisco Sarmiento supuso siguiendo la costumbrede la época la llegada a Jaén de muchos clérigosburgaleses. Y uno de ellos fue Alonso de SalazarFrías. La apariencia de nepotismo desaparececuando se ve que junto con los nombramientosde clérigos gienennenses lo que quería el prela-do era tener un Cabildo competente por su sa-ber y ejemplar en su conducta16.

Nació Alonso de Salazar en Burgos hacia elaño 1564 siendo bautizado en su parroquia, SanEsteban. Ese dato aproximado se debe a que loslibros parroquiales no se conservan por azaresde las guerras, como por un fuego en 1930. Lainformación de limpieza de sangre llevada a caboen 1588 en las localidades de Burgos, Segovia yArlanzón para acceder a la plaza de racioneroseñalaban dos aspectos, uno que sus antepasa-dos eran todos cristianos viejos, otro que erande familia hidalga. El padre, licenciado Bernar-dino de Salazar, era letrado en Burgos. Y de su

matrimonio con María de Encinas tuvieron mu-chos hijos. Un hermano del padre, el doctor Fríasde Salazar, ejercía también la abogacía.

El abuelo paterno de Alonso de Salazar, li-cenciado Tomás de Ortiz de Frías Salazar, estu-vo al servicio del condestable de Castilla donPedro Fernández de Velasco, sin que esté clarocuál fuera su misión, si de gobernador de los es-tados del citado noble, si como regidor y admi-nistrador de sus bienes. El bisabuelo, Rodrigo deFrías Salazar, casado con doña María Ortiz de laCostana, era «un opulento mercader y una delas perdonalidades más destacadas de Burgos afines del siglo XV» aprovechando una etapa flo-reciente mercantil gracias al comercio de la lanaa través del Consulado de Burgos17, con la ex-portación del producto a Flandes. Hubo otrosmiembros de la familia paterna dedicados al ne-gocio de la lana, cuyos beneficios serían eleva-dos. Así se comprende que el bisabuelo pudierafundar una capilla en la iglesia parroquial de SanEsteban, obra de arte plateresco, seguramente di-señada por Francisco de Colonia, que en los añosde su construcción privaba como artista en la ciu-dad. La capilla de los Frías, como se solía nom-brar se dedicaba a enterramiento de miembrosdel fundador y de la esposa así como de sus des-cendientes. En el arco de entrada figuraba escul-pida la Flagelación y en el entablamento una ins-cripción declarando que fue Rodrigo de Fríasquien la mandó construir. Aparecen también losescudos del matrimonio; el del fundador a la iz-quierda, tripartito, el primero trece estrellas deoro sobre gules, el de los Salazar, el segundo doslobos andantes en campo de oro y el tercero el

14 A.H.D.J., Sec. Limpieza de sangre, Caja 516.15 Un excelente estudio del episcopado de Sarmiento,

obra de MARTÍNEZ ROJAS, F.J. (en principio su teis doc-toral) ha sido editado con el título El episcopado de don Fran-cisco Sarmiento de Mendoza (1580-1595). La reforma eclesiásti-ca en el Jaén del siglo XVI, I.E.G., 2003

16 CORONAS TEJADA, L. Unos años en la vida y refle-jos de la personalidad del «Inquisidor de las brujas», I.E.G., 1981,p. 21-23:

17 Vid. CASADO ALONSO, H., «Le edad dorada delcomercio burgalés (siglos XV y XVI)» en Historia del comer-cio de Burgos, Burgos, 2005, pp. 115-134.

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castillo de Frías sobre el puente en oro y campoazur; por orla ocho arboles de sinople sobre oro.A la derecha estaba el escudo de doña MaríaOrtiz de la Costana. En el interior se repiten losescudos. En el retablo aparece también una alu-sión a los Salazar18.

Los estudios genealógicos de Alonso deSalazar demuestran una especial atención a laabogacía, así como también al comercio de lalana19; de acuerdo con esa primera tendencia dela familia áquel tenía decidida vocación por elderecho y aprovechó su residencia en Jaén entre1588 y 1595 para dedicarse a la práctica de la ju-risprudencia ejercitándose al lado del Obispo. En1588 se licenció en derecho canónico en la Uni-versidad de Sigüenza. Fue un leal colaboradordel prelado, ayudándole en la visita pastoral, yéste tenía tal aprecio que le nombró albacea ensu testamento.

Su importante labor como abogado se iniciócuando fue elegido agente del cabildo en Ma-

drid para llevar los pleitos ante cualquier juris-dicción que fuere; su prestigio crece y fue desig-nado procurador general del estado eclesiásticoen la Congregación de las Iglesias de Castilla yLeón; por este cargo tenía ocasión de relacionar-se con consejeros e incluso con el valido del Rey,duque de Lerma. No obstante, su ilusión era in-gresar en el Santo Oficio de la Inquisición lo queconsiguió en 1609 merced a don Bernardo de Ro-jas y Sandoval, inquisidor general y amigo suyodesde los tiempos del episcopado de éste en Jaén;como tal inquisidor Alonso de Salazar tuvo queintervenir en el proceso de los brujos de Zugarra-murdi, enfrentado por su talante racional a todoel montaje de la brujería20. Ascendió a fiscal delConsejo Supremo de la Inquisición y por últimollegó a ser consejero de la institución muriendoen Madrid desempeñando tal cargo en enero de1636. El nivel de vida propio de un consejero sedelata por el inventario de los bienes después desu muerte: muebles, pinturas algunas de granvalor, una caja de coche nuevo forrado de damas-co, menaje de plata y muchos libros, una granparte publicados en el extranjero21.

ESTUDIO DE LA RELACIÓN DE OBISPOS

La Relación... (como así por abreviar la cita-ré) es un breve episcopologio, en el que se reco-ge una coordinación o serie de los obispos hastadon Bernardo de Rojas y Sandoval. No puedoestablecer qué participación tuvo cada uno delos autores en este trabajo. Son conscientesDávalos y Salazar de la falta de documentaciónpara realizarlo por lo que hasta llegar laRelación...al obispo don Nicolás de Biedma sonconstantes la palabra pareze,... a lo que pareze...según pareze. Saben que las fechas son impreci-

18 LÓPEZ MATA, T., El barrio e iglesia de San Esteban,Burgos, 1946, pp 84 y ss.

19 Se puede ampliar la genealogía en CORONAS, Unosaños en la vida...pp 26-30

20 La actividad como jurista se puede ver en CORO-NAS TEJADA, L., unos años en la vida... Para conocer suactividad de inquisidor en el proceso de las brujas HEN-NINGSEN, G., El abogado de las brujas, Madrid, 1983, ed.española.

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sas y ellos mismos declaran que cuentan comotiempo de cada obispo el que no se halla ocupa-do por otro. Han podido usar como ellos diceninstrumentos y privilegios pero no eran todos losnecesarios. Evidentemente el saqueo musulmánen 1368 destruyendo documentación catedraliciaexplica esos errores y ausencias; los autores nopudieron tener a la vista una documentaciónprecisa y no fueron a investigar al Archivo de lacatedral de Toledo en donde había datos que his-toriadores posteriores han usado para comple-tar el episcopologio de los siglos XIII y XIV.

La Relación... se inicia con el establecimientode la silla episcopal en Baeza en la persona deldominico Fray Domingo; los autores dan unalarga etapa de gobierno episcopal a este preladode Baeza, en total 59 años contados hasta el de 1248,lo que no coincide con la realidad histórica. Esinteresante que Dávalos y Salazar hablen de ha-ber visto instrumentos y privilegios, pero creoque esta documentación está referida a las con-cordias con la Orden Militar de Calatrava. Sedestaca cómo el prelado biacense se preocupóde organizar su diócesis y dicen que tuvo queresolver dos cuestiones: los límites jurisdiccio-nales enfrentado al arzobispo de Toledo, cues-tión que se debía resolver por una comisión for-mada por los obispos de Calahorra y Osma y eldeán de Zamora nombrados por el pontífice. Losautores de la Relación...afirmaban que los comi-sionados «dividieron i amojonaron su obispado portodas partes asi de lo ganado como de lo que todavíaestaba en poder de moros. La otra cuestión se resol-vió por medio de una concordia con el maestrede la Orden Militar de Calatrava sobre diezmosy vasallos.. Esta cuestión con los calatravos severá tratada en la Relación... con varios preladosde la diócesis.

El segundo obispo, ya con sede en la ciudadde Jaén, fue, según este episcopologio, don Pe-dro de acuerdo con una bula de Inocencio IV de1249 y solo debió de regir la diócesis un año22.La segunda mitad del siglo XIII en esta Relación...ofrece lagunas debido a falta de datos lo quemotiva errores y ausencias. A don Pedro le suce-dió don Pascual, que rigió la sede 24 años conta-dos desde que vacó por don Pedro hasta el de 127423

De nuevo se detienen los autores en una nuevaconcordia con los calatravos, aunque la fecha ci-tada de 1269 no coincide con la que da Jimena,la de 125624.

A don Pascual dan como sucesor en el obis-pado a don Ibañes. Ignoran Dávalos y Salazar adon Martín Domínguez25, cuyo episcopado sedesarrolló entre 1276 y 1283. Los datos confu-sos, escasos, originaron que para la etapa 1274-1296 estos autores la cubrieran con el citado donIbañes cuyo gobierno según escriben duró 9 añoscontados desde el que llevamos de setenta y quatrohasta el de 1284. aunque en realidad se desarrollósu episcopado entre 1283 y 1285 y con don Juanque se considera por los historiadores el Segun-do de este nombre a quien Dávalos y Salazar ad-judican solo un año de gobierno de la diócesis.Rodríguez Molina reconoce que desconoce casitodas las noticias que puedan ilustrarnos siquieracronológicamente de don Juan II26. Los historiado-res citan a un Juan III (1287-1289)27, último delgrupo soriano creado por Fray Domingo, que eradon Juan Miguel, obispo electo, enfrentado aFortun que fue elegido también obispo28, situa-ción que ignoran los autores de la Relación...Ambos cederían sus derechos y el Papa BonifacioVIII nombraría obispo de Jaén a don Pedro

21 BRAVO MOYA, J.L., «El inquisidor Alonso deSalazar y Frías: el inventario de sus bienes» en B.R.A.H., tºCLXXXIV, 1987, pp.139-172.

22 EUBEL. K., Hierarchía catholica medii Aevi, Munster,1913, I, p. 130

23 Este obispo vivió hasta el 5 de diciembre de 1275.Vid. RIVERA, J.F., «Notas y documentos para elepiscopologio de la sede de Baeza-Jaén, durante los siglosXIII y XIV» en B.I.E.G., nº 80, pp 9-74, v. p. 31

24 JIMENA JURADO, Catálogo de los obispos..., p. 21925 Ibidem, pp. 224-226, RIVERA, «Notas y documen-

tos...» pp. 31-32; RODRÍGUEZ MOLINA, J., El Obispado deBaeza-Jaén. Organización y economía diocesanas, Siglos XIII-XVI, Jaén 1986 Dip. Prov. pp. 36-37.

26 RODRÍGUEZ MOLINA, J., El Obispado de Baeza-Jaén..., p. 38

27 JIMENA JURADO, Catálogo de los obispos... pp. 231-233

28 Esta duplicidad de obispos en Jaén se resolvió conla renuncia de ambos y posterior nombramiento de San Pe-dro Pascual.

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Pascual en 1296. Sin embargo, de acuerdo con laforma de contar los autores dieron al episcopa-do de don Pedro Pascual de 1286 a 1300.

Dávalos y Salazar se extendieron más en laexposición de don Pedro Pascual al que ponencomo exemplo de virtud, letras y christiandad, rela-tan su cautiverio en Granada en donde predica-ba a sus compañeros de prisión, convirtiendoinfieles. Los autores de la Relación... escribierony al fin se tiene por cierto que murió este santo prela-do mártyr estando en su captiverio. Detallaron quefue enterrado por los cristianos en una mazmo-rra en el sitio llamado de los Mártires en Grana-da. Se relata como unos años antes, en 1586, loscarmelitas descalzos, a los que se les había dadoterreno para construir en ese lugar encontraronunos huesos blanquísimos con una cruz pectoral yotras ynsignias pontificales encima de ellos los qualesguardan allí con gran veneración y con ellos se havisto hacer muchos milagros. En el Segundo Me-morial Dávalos y Zambrana relatan como donFrancisco Sarmiento en 1594 dispuso el trasladode unos huesos que tenía la catedral de Baeza asu altar mayor, huesos que se dizen ser del ObispoSanto. No pueden asegurar más: lo que sí sabenpor la Relación... es que don Pedro Pascual mu-rió cautivo en Granada, y no así, pese a ciertosrelatos, el obispo Gonzalo de Stúñiga. Recogie-ron la noticia Dávalos y Salazar que don PedroPascual escribió un libro muy docto para alibio yconsuelo de los pobres captivos29, pero aunque serefieran a su santidad nunca lo citaron como san-to a pesar del culto inmemorial de más de tressiglos; su canonización llegaría en 1670.

No estaban seguros de quien fuera el suce-sor de San Pedro Pascual, porque dicen parezeque fue don García que estuvo de obispo 13 años.Lo expuesto es cierto aunque en el episcopolo-gio giennnese figure como don García Pérez. Lainseguridad se vuelve confusión con el siguien-te prelado al que dan el nombre de don Martín,al que adjudican cinco años de obispo; en reali-dad este don Martín fue don Gutierre Téllez, querigió la diócesis de 1317 a 1322, o sea, cinco años30.Aciertan con el sucesor de don Gutierre, aunqueno dan con el nombre completo como se le cono-ce, don Fernando Martínez de Ágreda, ni con el

numero de años de episcopado, pues tan solo leadjudican tres y en realidad estuvo trece, de 1322a 1335; un nuevo error de los autores de laRelación...es el de decir que había sido obispo deBadajoz31 y de allí vino a Jaén cuando fue a lainversa32, ya que vino de Oporto a la vez que ce-saba en Jaén don Gutierre Tellez promovido parala diócesis de Idanha en Portugal. Son compren-sibles los errores por cuanto Jimena Jurado tam-bién equivoca en este caso haciendo chantre ocapiscol de Jaén a don Fernando antes de su pro-moción episcopal y desconociendo que pasó,como ya se ha dicho, de Jaén al citado obispadode Badajoz33.

De nuevo aparecen lagunas y errores en laetapa siguiente, motivada por la presencia de dosJuanes de obispos. Como sucesor de don Fernan-do citan a don Juan del que solo afirman gober-nó siete años, según la cuenta de ellos hasta 1331al que sigue otro don Juan de Soria del que ase-guran hizo con éxito muchas entradas en el rei-no nazarí con la ayuda de caballeros de Soria, dedonde procedía, y de otros de Andalucía comoel caudillo mayor del obispado de Jaén don MenRodríguez de Biedma y Benavides. Con estos dosobispos de nombre Juan cubren según su cuentalos años 1324 a 1366. Rivera también llenan condos obispos de nombre Juan la etapa de 1335 a1357; el primero de ellos era don Juan de Mora-les, que es el llamado de Soria que rigió la dióce-sis 23 años al que sucedió en el obispado donJuan de Valderas, que solo lo hizo durante unaño, el de 135734. Jimena Jurado señala como su-cesores de don Fernando Martínez de Ágreda alos siguientes obispos: don Juan IV (1331), don

29 Vid. CABALLERO VENZALÁ, M., «Una aproxi-mación al estudio bibliográfico de San Pedro Pascual, obis-po de Jaén» en B.I.E.G., nº 53, pp. 23-83 y JIMENA JURA-DO, Catálogo de los obispos... pp. 271 y ss.

30 EUBEL, Hierarchía... I p.26831 EUBEL, Hierarchía... I p. 26232 RIVERA «Notas y documentos...» pp.41-42

RODRÍGUEZ MOLINA, El Obispado de Baeza-Jaén... p. 42.33 JIMENA JURADO, Catálogo de los obispos... pp. 326-

32734 RIVERA, «Notas y documentos...» pp. 42-43

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Fernando el II (1331-1333), don Juan de Soria elV (1334-1357) y don Juan el VI (1357-1359)35.

Para Dávalos y Salazar el inmediato sucesorde don Juan de Soria fue don Andrés al que ad-judican un solo año de obispo, el de 1367, y comosucesor de éste a don Alonso Pecha36 del que afir-man se retiró en 1376 para fundar con otros laorden de San Jerónimo, viajando luego a Romapara terminar su vida retirado en el convento desan Martín de Luchana donde murió y está enterra-do. Desconocen la etapa en que el obispado deJaén tuvo dos obispos, don Andrés nombradopor el cabildo y don Alonso Fernández de Pechanombrado en 1359 por Inocencio VI37. Rodríguezde Gálvez al tratar esta situación anómala de 1359a 1367, no cismática, de dos obispos en Jaén, afir-ma que quien ejerció con plena potestad fue donAlonso quien dió Estatutos y celebró Sínodo; elfinal de esta duplicidad episcopal llegó con lamuerte en 1367 de don Andrés que también ha-bía actuado en actos como obispo38.

La renuncia que hizo don Alonso Fernándezde Pecha dio ocasión a que el Papa proveyese ladiócesis en don Nicolás39, que según los autoresde la Relación... estuvo ocho años contando por su-yos (según el estilo que se lleva) todo el tiempo en queno se halla haver havido otro obispo. Destacan quefue prelado muy señalado por su gran valor y bue-nas partes. Señalan la difícil situación de su mo-mento por el Cisma, pero él por disposición deClemente VII que para Castilla era el verdaderofue de visitador a los obispados de Córdoba,Badajoz y Sevilla y luego a diócesis de Portugal.Estos datos fueron sacados por Dávalos y Salazarde las Bulas que estaban en el Archivo de la Ca-tedral40. Se está en una nueva situación respectode tiempos anteriores a 1368, fecha en que fue-ron destrozados los archivos y documentos deJaén por el ataque musulmán en el verano deese año. Según Higueras Maldonado se está en-tonces en la hora cero para la historia de Jaén41.Es de señalar que los autores de la Relación... nohacen mención de que don Nicolás de Biedmatrajera el Santo Rostro a Jaén42 ni de que él inicia-ra una nueva construcción de la Catedral. Asímismo desconocen que don Nicolás fue trasla-dado a la sede de Cuenca en 1378 y de nuevo ala de Jaén en 1381. Como es natural desconocíanel episcopado de don Juan de Castro (1378-1381)43 que en 1381 fue promovido a la sede deSigüenza.

35 JIMENA JURADO, Catálogo de los obispos... pp. 328-338, También es así la relación de MARTÍNEZ DE MAZASMemorial... pp. 310-323: RODRIGUEZ DE GÁLVEZ Apun-tes históricos... p. 103

36 EUBEL, Hierarchía... I. p. 26337 HIGUERAS MALDONADO, J., en Humanistas gien-

nenses (s.XIV-XVIII), Jaén , 1998, pp. 19-30, nos proporcio-na una biografía de este obispo, con escogida bibliografía.

38 RODRÍGUEZ DE GÁLVEZ, Apuntes históricos... pp.104-108

39 EUBEL, Hierarchía... I, p. 26340 HIGUERAS MALDONADO en «La diócesis de Jaén

a finales del siglo XIV (Notas y documentos latinos)» B.I.E.G.nº 103. pp. 9-92. En pag. 24 se reseñan las bulas citadas ex-pedidas por Gregorio XI.

41 Ibidem, p.1 542 Sobre esta cuestión vid. MARTÍNEZ DE MAZAS,

Memorial... pp. 289-296; RODRÍGUEZ DE GÁLVEZ, Apun-tes históricos... p. 101

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La Relación...describe la nueva situación crea-da al morir en 1483 don Nicolás y el cabildo dela catedral apresurarse a elegir sucesor en la fi-gura de don Rodrigo de Narváez a la sazón ar-cediano de Jaén cuando el Papa se había reser-vado la provisión de todos los obispados deCastilla, pero el Pontífice para honrar al preladoelegido lo confirmó44. Se equivocan los autoresal hacer las cuentas, pues dicen acertadamenteque murió en 1422, lo que significa que rigió 39años y no 33 como ellos afirman. De su episco-pado solo hablan de la fundación de la Iglesiacolegial de Santa María del Álcazar de Baeza quedotó disponiendo los canónigos y beneficiadosque debían atenderla. No relatan nada respectode su actuación militar.

Dávalos y Salazar se extienden mucho másen la exposición del sucesor, don Gonzalo deStúñiga, hermano del conde Plasencia y Ledes-ma, de quien hacen una correcta biografía, rela-tando sus entradas en tierras de moros, habien-do sido prisionero de éstos en el segundo año deepiscopado en una escaramuza cerca de la villade La Guardia. Consiguió pronto la libertad ycontinuó con frecuentes entradas en el reino na-zarí; dicen los autores de la Relación... que en elsitio de Huelma, entonces en poder de los mo-ros, se le vio el primero subiendo por una escalay que el vulgo en refranes y tradiciones (seránlos romances) lo consideraron cautivo y mártir.Dávalos y Salazar declaran que no se sabe dondemuriese y que por tradición casi cierta se dice queestá enterrado en la Iglesia catedral de Baeza. En unamonografía sobre este obispo se recoge toda cla-se de datos para conocer su vida episcopal y seafirma que en Sevilla hizo testamento y murió45.

En la Relacion... se señala que el obispo habíaestado anteriormente casado y tenía un hijo quele acompañaba en sus correrías militares. No sedice en ella que antes había sido obispo de Pla-sencia. Fue Martín V quien expidió en octubrede 1422 la bula a favor de don Gonzalo para lasede de Jaén46. Es de señalar que siendo obispoen Jaén ocuriera un hecho milagroso, el Descen-so de la Virgen María en la noche del 10 de juniode 1430. Como siempre los autores de laRelación...dejan a un lado tradiciones, y en este

sentido puede que pensaran como el deán Mar-tínez de Mazas47.

Da la impresión que en Dávalos y Salazarno hay simpatía por el sucesor de don Gonzalode Stúñiga; dicen que conforme a la reservaciónpontificia a petición del rey Enrique IV el Papadesigna a Alonso Peleas o Pellas, un cantor de sucapilla real y mudando el nombre se llamó Acuña poraver sido criado de Pedro de Acuña, señor de Due-ñas. Solamente he encontrado en la Crónica delCondestable Miguel Lucas que se le llamara enuna ocasión Alfonso Vázquez Peleas48. Hay quepensar que esta actitud adversa de los autoresde la Relación... se deba a la lectura de la crónicade Alonso de Palencia, que ataca a los partida-rios de Enrique IV. Por un lado Nicás da unaamplia genealogía que afirma arranca de donPelayo Fruela el Diácono, infante de León, lo queno creo convenza a Toral49 que escribió que deeste obispo como de otros personajes de la épo-ca se ignora su patria y linaje «ya que es falsoque fuera del linaje de los Acuña de Buendía ysobrino del obispo Zúñiga»50. Los autores queluego ya lo nombran como don Alonso de Acu-ña solo añaden que rigió la diócesis 18 años des-de 1456 a 1474, desconociendo las fechas de labulas que son de 145751. Aunque repetidamente

43 EUBEL, Hierarchía... I, p. 26344 Ibídem45 FUENTE GONZÁLEZ, A. de la, Don Gonzalo de

Stúñiga, Obispo de Jaén, 1423-1456, Córdoba, 1978. Vid. ca-pítulo VIII

46 EUBEL, K., Hierarchía... I, p. 263 En esta obra se re-cuerda que la Iglesia de Jaén había elegido obispo a su deándon Rodrigo Diéguez, que renuncia al episcopado dejandovía libre a don Gonzalo

47 MARTÍNEZ DE MAZAS, Memorial.. p. 273-28048 Relación de los hechos del muy magnífico e más virtuoso

señor, el señor don Miguel Lucas muy digno condestable deCastilla, ed. de Cuevas y del Arco, Jaén, 2001, vid. p. 220; enla nota 9 se dice que en el ms. de la R.A.H. hay nota margi-nal que dice: «Don Alonso Peláez, alias don AlfonsoVázquez de Acuña, obispo de Jaén»

49 NICÁS MORENO, A., Heráldica y genealogía de losobispos de la diócesis de Jaén, Jaén, 1999, pp. 56-63

50 TORAL PEÑARANDA, E., Jaén y el condestable Mi-guel Lucas de Iranzo, Jaén, 1987, p. 80

51 En Jimena Catálogo de los obispos... se transcriben losdocumentos y se expone cómo fue su entrada en el obispa-do y toma de posesión, pp. 411-417

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se ha dicho que era era sobrino de don Gonzalode Stúñiga hay también quienes opinan que nohabía tal parentesco52. Señalan los autores de laRelación... la fecha de su muerte, el 9 de mayo de1474 en Begíjar y que fue enterrado en la cate-dral de Baeza. Los autores no hacen mención deque era de familia noble, ni de que previamentehabía sido obispo de Mondoñedo. No dan tam-poco relación de los enfrentamientos con el cita-do condestable.

En la Relación esta vez, teniendo mucha másdocumentación, los autores dan a conocer unaetapa de sede vacante, y no aplican ese tiempoal prelado siguiente, Don Íñigo Manrique, obis-po de Coria, que fue preconizado en 1475, parael obispado de Jaén53. Dávalos y Salazar cuentansiete años de episcopado, de 1476 a 1483, año enque fue promovido para el arzobispado de Sevi-lla. Destacan estos autores que estuvo siempreocupado en negocios de grande importancia y degobierno de el reyno, como presidente del Consejo Real,que fue muchos años por los Reyes Católicos. No ci-tan que este obispo hubiera ocupado la sede deOviedo, ni que celebrara en Jaén el segundo sí-nodo y actualizara las constituciones de su ca-bildo catedralicio54.

Dávalos y Salazar exponen en la Relación...que cuando fue promovido don Íñigo al arzo-bispado de Sevilla sucedió en el Obispado deJaén don Luis de Osorio55, natural de Astorga,donde fue arcediano y después capellán mayor de losReyes Católicos. En realidad fue capellán mayordel príncipe don Juan y de la reina Isabel. Losautores de la Relación... escribieron que anduvo conellos (los Reyes) siempre ocupado en su servicio entiempo en que trataban de la conquuista del reyno deGranada.. Dicen que gozó el obispado de 1483 a1496, en total 13 años. El obispo participó en estaempresa contra los moros y que por ello residiópoco en la ciudad de Jaén. Afirman que murió el9 de octubre pero no saben si en Flandes o Ale-mania cuando llevaba a la Princesa Juana archi-duquesa de Austria a casar con don Phelipe Primero,padre del emperador Carlos Quinto. A esta sucintarelación con datos casi todos correctos puedoañadir que en la guerra contra los moros partici-pó en la conquista de Cambil, celebró Sínodo en

1492 que puede ser considerado el primero decarácter diocesano e inició la construccción deuna nueva Catedral. Hay que también pensarque fue el último de los prelados que ademásdel báculo empuñó la espada, pues en su tiem-po se termina la reconquista.

Escasos pero correctos son los datos del su-cesor de don Luis de Osorio. Dávalos y Salazarescriben que don Fray Diego de Deza, de la or-den de santo Domingo, natural de la ciudad deToro, habÍa ocupado antes la sede episcopal deSalamanca56 y era confesor de los Reyes Católi-

52 TORAL PEÑARANDA, E., en el estudio crítico dela edición de Prohezas y casos de guerra... de J. ARQUELLA-DEA; en esta edición en el apéndice onomástico se dice entreparéntesis Alonso Peleas.

53 EUBEL, Hierarchía... II, p. 15954 MARTÍNEZ ROJAS, «Anotaciones al episcopologio

giennense de los siglos XV y XVI», B.I.E.G., nº 177, pp. 285-423. Vid. pp. 287-292.

55 EUBEL, Hierarchía... II, p. 159

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cos. Solamente fue obispo de Jaén tres años, has-ta 1499 en que fue promovido al de Palencia y de allial Arzobispado de Sevilla y despues de haverle goza-do algunos años dicen que murió electo Arzobispo deToledo yendo a tomar la posesión de esta Yglesia. Equi-vocaron el año de la promoción a Palencia quefue en 1500 y olvidaron decir, que antes de serobispo de Salamanca lo fue de Zamora, que fueinquisidor general y que había rehusado la Igle-sia primada por su avanzada edad, aunque yase habían expedido las bulas pertinentes. Murióen Sevilla.

Muy corta es la biografía que dan Dávalos ySalazar del sucesor, don Alonso Suárez de laFuente del Sauce, que con anterioridad dicenhabía sido obispo de Lugo. La fecha de promo-ción a Jaén es errónea, pues señala la de 1499cuando fue en 150057. Le adjudicaron más añosde episcopado, hasta el año 1522, pues en reali-dad falleció el 5 de noviembre de 1520. Los auto-res de la Relación... por el sistema que habíanpracticado anteriormente dieron a don Alonsopor año de su muerte el de fin de la sede vacanteque comprende 20 meses y seis días desde lamuerte de don Alonso y la posesión del nuevoobispo Esteban Gabriel Merino. Es corta biogra-fía pero correcta en los demás datos que apor-tan. Murió en Jaén, y se mandó enterrar en la Capi-lla Mayor que havía edificado en la Yglesia cathedraldonde está sepultado al lado del Evangelio. Dávalosy Salazar verían como es natural la lápida conepitafio sobre el nicho que se practicó para de-positar los restos mortales en el lado del Evan-gelio de la Capilla Mayor; más tarde, en 1635,serían sacados por las obras de la Catedral Nue-va y habría un largo pleito entre cabildo y fami-liares del Obispo por el lugar donde reposaransus restos58. Y mientras tanto estuvo hasta el 2001insepulto en una cajonera en la Capilla Mayorfigurando como año de su fallecimiento el 1522.Dávalos y Zambrana destacaron que don Alonsodejó buena memoria por sus edificaciones, se-ñalando de forma especial el puente del Obispoque en la Relación... llaman de Baeza59. No citanlos autores que celebrara Sínodo en 1511, ni queantes de Lugo rigiera la sede de Mondoñedo, nique durante la etapa de gobierno de Felipe I pre-

sidiera el Consejo Real, ni que fuera inquisidorgeneral60.

Escriben Dávalos y Salazar que en 1522 donEsteban Gabriel Merino succedió inmediatamentea don Alonso61. Lo hacen natural de Castellar, aña-diendo en el Condado de Santisteban del Puertoque es el que se le adjudica. Dicen que primerofue obispo de León y después arzobispo (deja-ron en blanco el lugar o el copista no distinguióBari) si bien el orden es inverso, pero teniendo ala vez el arzobispado y obispado. Afirman quefue hombre de muy gran prudencia y como a tal leencargó negocios de grande importancia el empera-dor Carlos Quinto; a petición de éste Clemente VIIlo hizo cardenal del título de los santos mártiresSan Juan y San Pablo62; murió en Roma en 1535;todos estos datos que aportan son ciertos si bienno citan que residió en Jaén cinco años, que sepreocupó en la Curia de conseguir beneficiospara la diócesis, en especial es de señalar su in-terés por conseguir la bula Salvatoris Domini efi-caz documento pontificio que posibilitaba eco-nómicamente continuar la obra nueva de laCatedral, que se completaba con la autorizaciónde formar la cofradía de los 20.000 hombres y20.000 mujeres63.

56 EUBEL, Hierarchia... II, p. 15957 Ibídem58 Vid. sobre esta cuestión MONTIJANO CHICA, J.,

Historia de la diócesis de Jaén y sus Obispos, Jaén, 1986, pp.114-119

59 HIGUERAS MALDONADO, J., «El Puente del Obis-po don Alonso Suárez de la Fuente del Sauce (1500-1520)»en Giennium, nº 4, pp. 117-138

60 Vid. MARTÍNEZ ROJAS, F.J. «La labor episcopal dedon Alonso Suárez de la Fuentesauce en el contexto de lareforma eclesiática pretridentina en España» en Giennium,nº 4, pp. 91-115; CORONAS, «El inquisidor general donAlonso de la Fuente del Sauce» en Giennium, nº 4, pp. 139-151.

61 VAN GULIK, G. Hierarchia Catholica medii et recentorisaevii... Munster, 1923, III, p. 203.

62 Fue en el año 1523, VAN GULIK, Hierarchía... III, p.21

63 MARTÍNEZ ROJAS, F.J., «Documentos episcopalesy pontificios para la construcción de la Catedral de Jaén»,en Giennium, nº 2, pp. 384-388.

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El sucesor del cardenal Meri-no fue don Francisco de Mendo-za; los autores de la Relación...., di-cen que gobernó la diócesis cincoaños, de 1535 a 1541; acertaron enque fueron cinco años, pero entre1538 y 1543. Desconocían dos añosde sede vacante en la que se pro-dujo una etapa excepcional, deadministración apostólica64. Losdemás escasos datos que aportanson correctos: era hermano delmarqués de Mondéjar, estuvosiempre al servicio del rey y en esteservicio le llegó la muerte fuera desu obispado acompañando a Car-los V. Murió en Spira (Alemania). En la biografíade este obispo existe una cuestión a debatir quelos autores de la Relación... desconocen: si dis-frutó de capelo cardenalicio. Ibáñez de Segovialo consideró cardenal65. Montijano66 ha encontra-do dos datos que vienen a confirmar que fue car-denal y Martínez Rojas considera que fue carde-nal in pectore de Pablo III67.

A la muerte de don Francisco de Mendozahay larga sede vacante que los autores de la Re-lación... razonan así: Por haverse tratado de proveereste obispado a un estrangero, que por serlo no tomóla posesión, ni cuenta por obispo duró esta vez la va-cante casi dos años hasta que se dio al obispo de Pam-plona que a la sazón era don Pedro Pacheco. Añadenque era hermano del conde de la Puebla de Mon-talbán. Declaran los autores que antes había sidoobispo de Ciudad Rodrigo, pero no citan queantes hubiera ocupado la sede de Mondoñedo.En tiempo de su episcopado giennense es pro-movido a cardenal68 hecho que recogen Dávalosy Salazar citando que era con el título de santaBalbina a la vez que destacan que estaba ocupa-do en Roma por asuntos del Reino por lo que notuvo lugar de venir personalmente a residir en suIglesia por espacio de más de diez años que gozó elobispado hasta el de 1554 que fue promovido al deSigüenza. Recogen dos hechos, uno que fue vi-rrey de Nápoles, a la vez que era obispo de Jaény más tarde cuando ya era obispo de Sigüenzapudo llegar a ser Papa69; los autores equivocan

el año de este suceso, pues dicen que fue en 1557,cuando en realidad fue en el cónclave de 1559.En la Relación... dan importancia a que hicieraeste obispo con acuerdo del Cavildo el estatuto de lascalidades, que han de tener los beneficiados que nue-vamente fueran admitidos, el qual después aprobó elPontífice Paulo III y también su sucesor y de estamanera se asentó el año de 1551. No dicen los auto-res que este estatuto llamado de limpieza desangre era establecido a imitación del de la Ca-tedral de Toledo; fue confirmado y ratificado porJulio III a petición del cardenal Pacheco si bienel texto se debe al provisor don Gabriel de Gue-

64 MARTÍNEZ ROJAS, F.J., Anotaciones al episcopologio...,pp. 336-341

65 IBÁÑEZ DE SEGOVIA, L., Historia de la casa deMondéjar, R.A.H., Colección Salazar.

66 MONTIJANO CHICA, Historia de la diócesis... pp.124-126.

67 MARTÍNEZ ROJAS, Anotaciones al episcopologio... pp.354-355.

68 VAN GULIK, Hierarchía, III, p. 2969 Le faltó tres votos para ser elevado al solio pontifi-

cio.70 La Bula de 6 de junio de 1552 fue expuesta en la

Semana Cultural de Historia: Inquisición y Brujería, orga-nizada por la Escuela Universitaria de Profesorado de E.G.B.en mayo de 1984. (Se publicó Memoria y Catálogo de laExposición en donde hay ilustración de esta bula. Vid. NIE-VES SANZ, «El Bulario de la Catedral de Jaén: los perga-minos pontificios», en Giennium, nº 2, pp. 439-449

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vara70; el año de concesión fue de 1552 y no de1551. En la Relación... no se cita su labor en elConcilio de Trento en donde el cardenal Pachecohizo una magnífica defensa de la InmaculadaConcepción71. Olvidan que el cardenal Pachecoconsiguió también la Bula Desiderantes por la queJulio III en 1553 amplía y extiende los favoresdados para la construcción de la Catedral de Jaénpor Clemente VII72 y que tuvo como colaboradorun obispo auxiliar, el canónigo don Cristóbal deArquellada73.

Los autores de la Relación... dan para donDiego Tavera, sucesor de don Pedro Pacheco seisaños; cuentan desde la promoción de éste a Si-güenza hasta su muerte en 1560. No dicen queera electo para el obispado de Ávila, pero sí queera miembro del Consejo Supremo de la Inquisi-ción. La biografía que dan es cortísima; tras sunombramiento74 en 1555 pasan a relatar su muer-te en 1560 en Toledo; dicen que murió en la ciudad

71 Vid. MARTÍN GONZÁLEZ, A., El cardenal don Pe-dro Pacheco, obispo de Jaén, en el Concilio de Trento, 2 vol., Jaén,1974

72 Vid. HIGUERAS MALDONADO,J., «Un importan-te documento latino sobre las Catedrales de Jaén y Baeza»en B.I.E.G., nº 94, pp. 9-34.

73 MONTIJANO, Historia de la diócesis... pp. 130-132;MARTÍNEZ ROJAS, «Anotaciones... pp. 365-368

74 VAN GULIK, Hierarchía... III. p. 20375 Catálogo de los obispos... pp. 477-47876 MARTÍNEZ ROJAS, Anotaciones..., 375-376; GALE-

RA ANDREU, P.A., Andrés de Vandelvira, Madrid, 2000, pp.113-114.

77 VAN GULIK, Hierarchía... III, p. 203

de Toledo asistiendo a un Concilio Provincial que allíse celebraba entonces y así fue enterrado en la capilladel Hospital que en aquella ciudad havia mandadoedificar el cardenal don Juan Tabera, su tío. Hay enesta referencia una inexactitud, pues si bienmurió en Toledo y fue enterrado en el llamadoHospital de Afuera construido por el cardenaldon Juan Pardo de Tavera, su tío, no pudo asis-tir a ningún concilio provincial en ese año, puesno se celebraba por entonces tal reunión eclesiás-tica; según Jimena lo que tenía lugar en la ciu-dad imperial entonces eran Cortes y tal vez hu-biera ido para llevar a cabo gestiones en aquellaocasión75. Por otra parte olvidan Dávalos y Sala-zar que en tiempos de don Diego Tavera se ini-ciaron los trabajos dirigidos por Vandelvira dela Catedral de Jaén76.

Dávalos y Salazar son cada vez más conci-sos en los últimos obispos de su catálogo; vie-nen a señalar donde han sido obispos anterior-mente, el número de años de su episcopadogiennense y lugar de enterramiento. El sucesorde don Diego Tavera fue don Diego de los Co-bos77, que había sido hasta entonces obispo deÁvila. Le contaron cinco años de obispado gien-nense desde el pasado de 60 hasta el de 1565 que tam-bién murió en Toledo, como su predecesor, asistiendoen otro Concilio. Esta vez aciertan, pues murió an-tes de la apertura del sínodo provincial de 1565.Fue enterrado en el Hospital de Santiago en Úbe-da que él mandó edificar a su costa; pero no fueposible su túmulo funerario e incluso la mismaubicación de la cripta, fuera de la capilla Mayor

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y del crucero, alteraba las disposiciónes del obis-po; según Montes Bardo las disposiciones triden-tinas sobre enterramiento en iglesias fueron larazón de estos cambios contra la voluntad delfundador del hospital78.

El obispo de Lugo don Francisco Delgado fuepromovido a Jaén en 1566 después de unos me-ses de sede vacante79. Dávalos y Salazar en sucortísima biografía dice que sucedió en este obispa-do el mismo año que murió su predecesor. Ya hemosvisto que don Diego de los Cobos murió en 1565.Le computan once años de obispo de Jaén. Losdatos de su muerte, en Baeza y a 2 de octubre de1576, son exactos así como el lugar de su enterra-miento Castil Delgado en la Rioja, donde el era natu-ral y alli mandó edificar una Capilla. Los autores dela Relación... no nombran el topónimo Villa dePun, como era conocido el lugar que cambió sunombre al conceder Felipe II el señorío de la villaal obispo giennense80. Los autores de la Relación...

78 MONTES BARDO, J,M., El Hospital de Santiago enÚbeda. Arte, Mentalidad y Culto, Jaén, 1995. Vid. pp.146-151.

79 VAN GULIK, Hierarchía... III, p. 20380 CABALLERO VENZALÁ, M., Diccionario..., tomo

III, p. 7481 MARTÍNEZ ROJAS, Anotaciones... pp. 397-398.82 VAN GULIK, Hierarchía... III, p. 20383 No señalan en tan corta biografía que pertenecía a

la misma familia de fray Diego de Deza, anterior obispo deJaén, y a una distinguida familia asentada en Sevilla: losTavera. Vid. JIMENA, Catálogo... pp. 489-490 y MARTÍNEZROJAS Anotaciones... pp. 399-400.

no citan nada de la actividad de este obispo ni enlo pastoral ni en actividades de la política, peroen este último aspecto participó económicamen-te para sofocar la rebelión de los moriscos grana-dinos, y Felipe II le encargó el traslado de restosmortales de miembros de la familia real que es-taban depositados en Granada para ser inhuma-dos en El Escorial. Tampoco se hacen eco de lafundación por este prelado de un colegio mayor,el de san Miguel, en Salamanca81.

Dávalos y Salazar nos dan un corto curricu-lum del nuevo obispo de Jaén: don Diego deDeza: cuando fue preconizado para la sede deJaén82 regía la de Coria; era natural de Sevilla ygozó el obispado de Jaén dos años, hasta el 13 deseptiembre de 1579, fecha de su fallecimiento.Había sido auditor de la Rota en Roma, y obispode Canarias y electo de Palencia. No vino jamás aresidir a esta Yglesia el tiempo que le tuvo porque suedad y enfermedad no le dieron lugar a ello. Fue en-terrado en el Convento de San Pablo de la orden desanto Domingo en la Capilla que allí tienen los Tabe-ras83 .

Dávalos y Salazar conocieron a los dos últi-mos obispos de esta Relación..., don Francisco Sar-miento de Mendoza y don Bernardo de Rojas ySandoval. Por ello dan los datos principales deambos, señalando del primero su tumba en elcoro de la catedral de Jaén detrás del facistol ydel segundo su promoción al arzobispado deToledo.

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