el club de los que leen

3
Reporte de lectura Marysol Enríquez Fernández 2° “B” 03/Sept./2013 Smith, Frank, “El club de los que leen y escriben”, en De cómo la educación apostó al caballo equivocado, Buenos Aires, Aique (serie de la palabra), 1994,pp. 11-29 La escuela no es del todo necesaria. El club de los que leen y escriben La lectura y la escritura nunca es exclusivamente una cuestión de educación formal. Los niños inevitablemente infieren en cuánto saben y en qué pueden demostrar, no creen que los niños aprendan a leer y escribir como resultado de la educación formal. Hay evidencias que aún antes de ir a la escuela, gran parte de los niños sabe muchas cosas sobre la lectura y la escritura y tienen sutiles y decisivas hipótesis sobre la naturaleza misma de la alfabetización. (Goleman, Oberg y Smith, 1984) El club de la lengua hablada. Los niños se integran a un club de hablantes mediante un único acto de aceptación recíproca, todo lo que hace falta es un reconocimiento mutuo de aceptación en el grupo; las expectativas no garantizan el aprendizaje, aunque si lo hace posible. Las diferencias de capacidad y de interés específicos son algo que se da por supuesto. Los beneficios son: los niños no aprenden la lengua como un sistema abstracto, aprenden simultáneamente la lengua y sus usos (Halluday, 1973). No hay discriminación, se les Estoy de acuerdo con la autora, ya que los niños no aprenden mediante un sistema donde este los obliga a aprender a leer, escribir y hablar, mientras, sino que se debe de tener un club sin exclusión de ningún alumno. Los niños aprenden mucho antes de asistir a la escuela sin condicionamiento ni reglas que seguir dentro de un sistema, aprender con lo que ven y necesitan. No se deben cambiar a los niños porque sería atentar contra lo que ellos traen, sino seguir retroalimentando sus conocimientos y deberes como seres pensantes. El profesor como su función es incluir a los alumnos, enseñarles a sus superiores las diferentes formas de trabajar sin tener la necesidad de dividir a los niños para que estos se desarrollen de igual manera, claro encontraremos alumnos con un desempeño más avanzado pero nunca mejor, ya que todos avanzan de una manera donde se sientan preparados para seguir con lo que van aprendiendo viendo, practicando, leyendo a su ritmo.

Upload: sol-fernandez

Post on 05-Jul-2015

85 views

Category:

Documents


3 download

TRANSCRIPT

Page 1: El club de los que leen

Reporte de lectura Marysol Enríquez Fernández 2° “B” 03/Sept./2013 Smith, Frank, “El club de los que leen y escriben”, en De cómo la educación apostó al caballo equivocado, Buenos Aires, Aique (serie de la palabra), 1994,pp. 11-29

La escuela no es del todo necesaria.

El club de los que leen y escriben

La lectura y la escritura nunca es exclusivamente una cuestión de educación formal. Los niños inevitablemente infieren en cuánto saben y en qué pueden demostrar, no creen que los niños aprendan a leer y escribir como resultado de la educación formal. Hay evidencias que aún antes de ir a la escuela, gran parte de los niños sabe muchas cosas sobre la lectura y la escritura y tienen sutiles y decisivas hipótesis sobre la naturaleza misma de la alfabetización. (Goleman, Oberg y Smith, 1984) El club de la lengua hablada. Los niños se integran a un club de hablantes mediante un único acto de aceptación recíproca, todo lo que hace falta es un reconocimiento mutuo de aceptación en el grupo; las expectativas no garantizan el aprendizaje, aunque si lo hace posible. Las diferencias de capacidad y de interés específicos son algo que se da por supuesto. Los beneficios son: los niños no aprenden la lengua como un sistema abstracto, aprenden simultáneamente la lengua y sus usos (Halluday, 1973). No hay discriminación, se les

Estoy de acuerdo con la autora, ya que los niños no aprenden mediante un sistema donde este los obliga a aprender a leer, escribir y hablar, mientras, sino que se debe de tener un club sin exclusión de ningún alumno. Los niños aprenden mucho antes de asistir a la escuela sin condicionamiento ni reglas que seguir dentro de un sistema, aprender con lo que ven y necesitan. No se deben cambiar a los niños porque sería atentar contra lo que ellos traen, sino seguir retroalimentando sus conocimientos y deberes como seres pensantes. El profesor como su función es incluir a los alumnos, enseñarles a sus superiores las diferentes formas de trabajar sin tener la necesidad de dividir a los niños para que estos se desarrollen de igual manera, claro encontraremos alumnos con un desempeño más avanzado pero nunca mejor, ya que todos avanzan de una manera donde se sientan preparados para seguir con lo que van aprendiendo viendo, practicando, leyendo a su ritmo.

Page 2: El club de los que leen

ayuda a convertirse en expertos, no hay enseñanza formal ni horario especial para aprender, su vocabulario crece a un promedio superior a las veinte palabras diarias (Miller, 1977), la lengua es tan personal y significativa como la ropa, accesorios etc. Tratar de modificar la lengua de una persona es rechazar la esencia misma de esa persona. El Ingreso al club de los alfabetizados. ¿Cómo aprenden los niños todo esto? Saben cómo y por qué hacen esas cosas, los chicos ven para qué se usa el leguaje oral, ven cuáles son las múltiples utilidades que presta a los escritores o a los lectores. Maestros y escuelas, los niños se consideran a sí mismos como personas que leen y escriben, tienen que encontrar multiplicadas en la escuela sus oportunidades de participar en las actividades del club. Ningún niño debe ser excluido; pero existen limitaciones de los programas. En esos programas rara vez establecen actividades de lectura y escritura significativas para los niños, ninguna de las ejercitaciones muestra que la lengua es significativa ni útil. Su único propósito es la propia enseñanza. Las escuelas se amurallan y aíslan del mundo exterior, pero la responsabilidad del maestro interesado debe ser la de garantizar que los clubes existan y ningún alumno sea excluido de ellos. NO hace falta un sistema educativo ideal para que los chicos puedan ingresar al club de los alfabetizados.

El leguaje la escritura y la lectura se va adquiriendo conforme a su crecimiento y conforme el cree para que le sirva. Estoy muy de acuerdo que el sistema dentro de una escuela hace que esta misma se aleje de la realidad y la realidad es la sociedad, no se enfoca del todo en las necesidades del alumno sino en las necesidades de la escuela la rúbrica que debe cumplir.

Page 3: El club de los que leen