el asesino rojo

EL ASESINO ROJO

Era una noche muy lluviosa, la detective Huanca como siempre se encontraba sentada en su viejo escritorio, revisando los nuevos casos que nos habían llegado. Entré bruscamente, lo que hizo que se sobresaltara por la impresión. Sin esperar a que se recuperara del susto me apresuré a contarle sobre el nuevo asesinato acontecido en las afueras de Catacocha, luego de darle los detalles del crimen quedó impresionada al saber que las victimas eran viejos conocidos del colegio.

Las víctimas eran dos jóvenes que tenían entre 20 y 30 años. Al siguiente día comenzamos con la investigación, fuimos ante nuestro jefe a notificarle el caso que íbamos a tomar. Empezamos nuestra investigación esa misma tarde, al llegar al lugar de los hechos la detective Huanca se quedó viendo los cuerpos de sus amigas. Una se llamaba Vanessa, era una chica que le gustaba conocer cosas sobre el espacio y quería llegar a ser una científica; la otra era Lili, le encantaba la pintura y era muy talentosa en ello. Al aproximarnos más a los cuerpos se nos acercó un joven alto, bien vestido y con buenos modales.

-Buenas tardes -dijo el joven con una voz triste- me presentó ante ustedes me llamo Jonatán, soy el prometido de Vanessa, es un honor ella me ha contado mucho de usted señora Huanca, es un gusto conocerla.- El gusto es mío, ¿qué ha pasado aquí?-Alguien ha asesinado a la mujer con la que me iba a casar sin motivo alguno.-¿Quién cree que pudo ser el homicida?- No lo sé, lo único que sé es que iba a visitar a sus padres para darles la noticia de nuestra boda.

Al escuchar al joven nos pusimos a pensar sobre quién habrá sido el homicida y por qué lo hizo. Esa misma noche nos desvelamos revisando las pistas pero no eran suficientes para dar con el homicida. En la mañana la detective salió a dar un paseo para aclarar su mente y en el camino iba recordando los buenos momentos que pasó con ellas. Al llegar su antiguo colegio se puso a pensar sobre las personas que odiaban a Vanessa fue corriendo hasta mi casa. En ese momento estaba revisando las fotos del crimen en busca de una pista que nos ayude en la investigación.

Cuando ella llamó a mi puerta, fui apresuradamente a abrirla, con una voz ronca con el cansancio me dijo:- Rivera, he recordado que mi amiga me dijo que iba en compañía de su amigo Víctor a visitar a sus padres ya que él es como su hermano, eso fue horas antes del crimen.Al oír esto fuimos rápidamente al auto y partimos rumbo a la casa de Víctor. Al llegar llamamos a su puerta pero nadie contestó, llamamos otra vez hasta que abrió y nos invitó a pasar.

Nos fijamos en su mirada de dolor y en las heridas de su cuerpo, después de presentarnos le pregunté: ¿Qué le ha pasado?-Cuando iba en el auto con mis amigas otro nos embistió haciéndonos perder el control y chocar, ellas se desmayaron por el impacto, yo quede muy desconcertado, solo pude ver como un hombre con una capucha roja las sacaba del auto, después de eso me desmayé y desperté en el hospital- dijo Víctor- ¿Cómo sabemos que dices la verdad?-¿Por qué motivo he de ser yo el asesino?

-Pudo haber sido que estabas enamorado de Vanessa, sentiste tantos celos que no pensaste en otra cosa que asesinarla y hacerla sufrir, esas heridas pudiste hacértelas tú mismo para que nadie sospechara de ti.- No fui yo, ella era como mi hermana mayor ya que siempre me ayudaba y me aconsejaba, jamás le hubiera hecho algo como esto, pues de no ser por ella sería una persona sin oficio y hasta puede que hubiera llegado a ser un drogadicto.

Luego de oír esto ambos salimos sin decir ninguna palabra, en el camino nos dimos cuenta que una parte de un cerco faltaba y nos detuvimos a ver. Nos fijamos que un auto se había impactado, nos acercamos y vimos los asientos llenos de sangre, la detective estaba analizando el interior de auto, mientras que yo daba vueltas buscando alguna pista.

-Mira esto-grité- el lado izquierdo del guardachoque trasero está deformado, como si algo lo hubiera golpeado, parece que Víctor nos decía la verdad.- ¿Cómo estas tan seguro que este es el auto?-dijo Huanca- Nos ha llegado un reporte últimamente sobre un accidente de auto y parece que aquí estaban tres personas en el momento del accidente.

Al abrir el maletero nos dimos cuenta que ese auto era en el que viajaban porque a Lili siempre le gustaba llevar sus pinturas a donde sea que vaya, en busaca de más pistas encontramos un celular donde había un mensaje con una amenaza de muerte de un número desconocido. Al llegar a la oficina hicimos un recuento de las pistas que teníamos hasta entonces, pero no eran suficientes así que al día siguiente buscamos el dueño del número del celular de donde fue enviado el mensaje.

Al descubrir quién era fuimos rápidamente a su casa pero para nuestra sorpresa el dueño registrado del celular era un hombre en silla de ruedas de unos 75 años que hace un par de meses le robaron el celular, le pedimos descripciones de aquel ladrón y nos dijo:- El hombre que me robo el celular era de media estatura, tenía una barba gruesa, era flaco, tenía una cicatriz en la mejilla derecha como si un cuchillo se la hubiera hecho y una mirada llena de odio como si estuviera pensando matar a alguien.

Tras su testimonio le agradecimos su colaboración y salimos a reunir las nuevas pistas. En la mañana siguiente nos llegó una carta anónima que decía:“Su investigación es inútil nunca me van a encontrar, se han de preguntar muchas cosa, ¿Quién soy? ¿Por qué lo hice? La verdad es que no tuve motivo alguno para hacerlo y me dicen el asesino rojo”

Desconocíamos el origen de la carta pero en el sobre había otra pista, una marca de aceite de auto como si el homicida hubiese sido un mecánico, como en Catacocha había solo 9 mecánicos fuimos interrogando a cada uno, pero fue inútil y en ese momento la detective me dijo: -Rivera, que crees que significará esto;esta pista no apunta al presunto homicida. -Parece ser que solo ha estado jugando con nosotros talvez no sea de aquí.Esa misma noche un hombre misterioso llamó a nuestra puerta, le invitamos a entrar y comenzó decirnos:

“-Hace años que conozco a Vanessa y a Lili pero nunca me imaginé que morirían tan jóvenes, hace años Vanessa vivía en Guayaquil donde tuvo un novio, los dos eran muy muy felices, pero su madre no quería que sigan juntos así que se mudó aquí a Catacocha, años después cuando se graduó en la universidad como mecánico y tuvo una profesión para poder ganarse la vida y poder casarse con ellas, vino aquí pero vio a su amada con su prometido Jonatán, él se sintió tan enojado que se acercó a ella y le dijo:

-Yo te entregué mi corazón y así es como me pagas, creí que me amabas de verdad, algún día te arrepentirás.Después de decirle esto el joven salió.”-Muchas gracias-contestó Huanca-,esto nos sirve de mucho. Una última pregunta, ¿Sabe cuál es el nombre del joven?- Si, se llama Dylan.Le agradecimos y al instante el hombre se retiró con una gran sonrisa. Comenzamos la investigación sobre el supuesto homicida y descubrimos en su expediente médico que tiene problemas mentales, sufre de demencia crónica y se ha escapado varias veces del manicomio. Al ver esto le dije:

-Tenemos que encontrarlo antes de que le haga daño a alguien más.-Entonces vamos, no tenemos que perder nada de tiempo.Fuimos corriendo al auto, para ir lo más rápido posible a la comisaría y poner al sospechoso en la lista de captura, fuimos a hablar con el comisario Romero pero al llegar lo encontramos casi muerto por una golpiza, revisamos las cámara de seguridad y pudimos identificar al presunto agresor, de inmediato la policía salió a su captura. Al arrestarlo lo trajeron a la comisaria donde fue interrogado y confesó ser el asesino.

El juez lo sentenció a 20 años en prisión y al salir nos encontramos con la mamá de Vanessa y nos dijo:-Muchas gracias por encontrar al asesino de mi hija, ese chico nunca me agradó y espero que nunca salga de prisión.No tiene que agradecérmelo-dijo Huanca- es nuestro trabajo y Vanessa también era mi amiga y me dolió mucho su perdida.

También se acercaron a nosotros Jonatán y Víctor para saber quién fue el homicida y por qué lo hizo. Antes de que fuera trasladado a la penitenciaria de Loja fuimos a hablar con él, para saber las razones por lo cual la mató, lo único que nos respondió fue:-Yo le entregue mi corazón pero nuestras familias nos separaron, después de varios años vine a buscarla pero vi que ya estaba con otro, lo que me llevó a la locura. Fue tanto el odio que sentí dentro de mí que no pensé en otra cosa más que en vengarme.¡Por qué!- dijo Jonatán- ¡Por qué no me mataste a mí si lo que querías era hacerla sufrir!

Al decirle esto no contestó, la policía se lo llevó. Jonatán y Víctor se retiraron a sus casas.Mientras veíamos como se alejaban ella me dijo:-Después de todo esto me he puesto a pensar que hace mucho tiempo que no veo a mi madre y a mis amigos, he estado pensando en pedir vacaciones este mes que viene. Luego me pregunto qué vas a hacer tú, Rivera.-Yo he de seguir trabando el resto del año, luego talvez pida vacaciones para ir a visitar a mi familia.Después de eso nos fuimos a nuestras casas.

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