ejemplo módulo instruccional
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Tabla de Contenidos
Pág.
Introducción. 4
Competencias e Indicadores de desempeño. 5
Contenido programático. 6
Infografía. 6
Evaluación de los Aprendizajes. 8
Desarrollo del Aprendizaje. 9
Conocimientos Previos. 9
Subtema 1: dato, información, conocimiento. 9
A. Resumen. 14
B. Autoevaluación del subtema 1. 14
Subtema 2: Tipologías documentales. 14
A. Resumen. 17
B. Autoevaluación del subtema 2. 18
Subtema 3: La Ciencia de la Información y disciplinas científicas que la conforman. 19
A. Resumen. 21
B. Autoevaluación del subtema 3. 22
Subtema 4: Perfil ético del profesional de la información. 22
A. Resumen. 24
B. Autoevaluación del subtema 4. 25
Respuesta a las autoevaluaciones propuestas por subtemas. 26
Referencias. 30
Introducción
La especialidad de Información y Documentación impartida en esta casa de estudios superiores,
tiene entre sus propósitos fundamentales formar un profesional competitivo, revestido de las competencias
y habilidades como agentes de cambio en los servicios informacionales bien de carácter público o privado,
para lo cual utilizará métodos de gestión que le permita transformar y adaptar tecnologías para el
almacenamiento, recuperación, conservación y producción de información, a objeto de prestar la debida
orientación y formación del usuario en la búsqueda, manejo y consulta de productos y servicios de
información, aplicable a la toma de decisiones dentro de sus organizaciones y acorde a las necesidades
que demanda la sociedad en la cual se desenvuelve, para convertirse asî en un ciudadano o ciudadana
solidario, ético y con responsabilidad social.
En este sentido, el propósito de esta asignatura y en concreto de estos temas, es proporcionarle a
los participantes los elementos teóricos conceptuales que le permita valorar la información y la
documentación, como objetos de estudio de las distintas disciplinas que tributan a las Ciencias de la
Información, diferenciando los aspectos básicos correspondientes. De igual forma, aporta las bases ético-
profesionales que distinguen el perfil del Técnico Superior Universitario en Información y Documentación.
Competencias e indicadores de desempeño.
Competencia: Administra diversos centros de gestión de información, en concordancia con los conocimientos teóricos y prácticos establecidos en el área de las Ciencias de la Información; con ética, actitud crítica, responsabilidad y con capacidad de trabajo en equipo.Subcompetencia: Difunde los productos y servicios informativo-documentales en su comunidad.
Conocer Hacer Ser
1. Define conceptos fundamentales sobre información y documentación, y sobre Ciencias de la Información.
2. Analiza la ética profesional del T.S.U. en Información y Documentación.
Redacta conceptos relacionados con la tipología documental.
Planifica las actividades en los centros de gestión de información.
Elabora cuadros comparativos sobre información y documentación, según su soporte y naturaleza, en relación a las distintas disciplinas que conforman las Ciencias de la Información.
Elabora conceptos relacionados con la ética del profesional de la información.
Aplica las normas, regulaciones y demás leyes que rigen al profesional de la información.
Analítico, creativo y participativo en relación a la tipología documental y a los sistemas de información existentes.
Trabajo en equipo y reflexivo en la toma de decisiones.
Analítico, crítico y reflexivo. Asertivo en el reconocimiento
de las pautas fijadas para el profesional de la información.
Contenido programático.
1. Dato, información, conocimiento e inteligencia.2. Tipologías documentales.3. La Ciencia de la Información y disciplinas científicas que la conforman.4. Perfil ético del profesional de la información.
Infografía.
Las monografías sugeridas a continuación, constituyen el material complementario a esta guía
didáctica. Todos y cada uno de los textos indicados, son versados en la materia y están realizados por los
especialistas del área, con lo cual se espera fortalecer sus conocimientos en el tema en cuestión.
Asimismo, podrá localizarlos en la Biblioteca “Leticia Collazo” del IUETAEB.
Amat Noguera, N. (1990). De la información al saber. Madrid: FUNDESCO Cardón García, J. (1999). Manual de búsqueda documental y práctica bibliográfica. Madrid: Pirámide Merlo Vega, J.; Sorli Rojo, A. (s/f). Biblioteconomía y Documentación en Internet. Madrid: Cindoc López Yépez, J. (1999). Manual de información y documentación. Madrid: Pirámide Ponjuán Dante, G. (1998). Gestión de información en las organizaciones. [s.n]: Cecapi
De igual forma, se propone la navegación y examen de los sitios web siguientes:
Alexandria: revista de ciencias de la informaciónDisponible en: http://pergamo.pucp.edu.pe/alexandria/
Revista electrónica de la especialidad de Ciencias de la Información, entre cuyos objetivos se encuentran los siguientes: (a) dar a conocer a la comunidad los nuevos alcances de la carrera; (b) ofrecer un espacio de expresión a los estudiantes de la especialidad de Ciencias de la Información, particularmente de la Pontificia Universidad Católica del Perú; (c) presentar los nuevos espacios en los que se desenvuelve el profesional de la información; y (d) incentivar a los alumnos para la publicación de sus ideas o proyectos relacionados al ámbito de la información, especialmente los multidisciplinarios.
Anales de DocumentaciónDisponible en: http://www.um.es/ojs/index.php/analesdoc/
Revista anual editada por el Departamento de Información y Documentación y la Facultad de Ciencias de la Documentación de la Universidad de Murcia. La misma tiene dos ediciones complementarias: una edición impresa, que se publica en el mes de abril de cada año, y otra edición electrónica, en la dirección http://www.um.es/fccd/anales. Las aportaciones que se incluyen proviene de los distintos sectores y especialidades de las Ciencias de la Información Documental: Documentación, Archivística, Biblioteconomía, Restauración Documental, Gestión de Unidades de Información, Alfabetización Informacional, Estudios de Usuarios, Mercado de la Información, Planificación, aplicación y evaluación de proyectos y servicios de las unidades de información, Información científica, y otros temas afines.
Biblios: Revista electrónica de bibliotecología, archivología y museologíaDisponible en: http://www.revistabiblios.com/ojs/index.php/biblios
Publicación profesional arbitrada y especializada en Ciencias de la Información, que se publica trimestralmente en formato electrónico, ofreciendo sus contenidos a texto completo para su libre acceso vía Internet. Biblios tiene por objetivo proporcionar información que permita mantener debidamente actualizados a los especialistas en información sobre los temas de su interés. Sus contenidos abarcan estudios tanto profesionales como académicos sobre documentación, archivística, bibliotecología, museología, gestión del conocimiento, tecnologías de la información y comunicación; y demás temas de las Ciencias de la Información.
Cuadernos de informaciónDisponible en: http://fcom.altavoz.net/prontus_fcom/site/artic/20080929/pags/20080929181356.html
Revista de estudios de comunicación y medios que publica semestralmente la Facultad de Comunicacionesde la Pontificia Universidad Católica de Chile. La revista tiene como principal objetivo el análisis y la reflexión crítica en las distintas áreas de la comunicación, privilegiando aquellas investigaciones que aporten conocimiento nuevo y original, sobre fenómenos de comunicación y medios en Chile e Iberoamérica.
Leyes venezolanasDisponible en: http://www.leyesvenezolanas.com/
Portal informático contentivo de: índice de reglamentos de las leyes venezolanas, índice de convenios internacionales suscritos por la República Bolivariana de Venezuela, constitución venezolana, leyes orgánicas y códigos venezolanos. Asimismo, incorpora un buscador interno mediante el cual un usuario con un mínimo de manejo de estas herramientas podrá encontrar la información de su interés. Particularmente resulta importante como referencia, para el conocimiento y manejo de las leyes y reglamentos relacionados con el ámbito de la información y la documentación venezolanas.
El profesional de la informaciónDisponible en: http://www.elprofesionaldelainformacion.com/
Revista sobre información, bibliotecas y nuevas tecnologías de la información, indexada por dos de las bases de datos bibliográficas más relevantes en el ámbito internacional, a saber: ISI Social Science Citation Index y Scopus. En la misma, el profesional de la información y de quienes se inician en este campo encontrará artículos y temas de gran interés y actualidad.
Evaluación de los Aprendizajes
La evaluación constituye uno de los elementos importantes dentro del
proceso de enseñanza-aprendizaje, pues más allá de proporcionar los
indicadores de rendimiento al docente o facilitador de la asignatura, el
participante debe concebirlo como un mecanismo de retroalimentación que le permita obtener
información respecto de su actuación en la construcción de sus saberes, y que por tanto le
proporcionará los elementos de juicio a objeto de corregir las posibles fallas o fortalecer sus
estrategias de aprendizajes.
Es por ello que a objeto de verificar la construcción de sus saberes, se solicitará a los
cursantes la realización de las actividades siguientes, cuya ponderación total es de 15 ptos.
Un análisis de la lectura asignada, la cual será debatida en la fecha pautada atendiendo a las preguntas
previamente fijadas a inicio del curso.......................................................................................(Valor: 5 ptos.)
Una evaluación sobre los conceptos relacionados con el tema, para comprobar sus conocimientos en el
área objeto de estudio.......................................................................................................... (Valor: 10 ptos.)
Desarrollo del Aprendizaje
Conocimientos previos.
Para que obtengas una idea preliminar sobre los aspectos a tratar, en el enlace que se presenta a
continuación encontrarás un cuestionario con una serie de preguntas, las cuales deberás responder para
continuar avanzando. Por favor envía tus respuestas a través del correo electrónico suministrado.
¡...Ánimo y adelante...!
Subtema 1: dato, información, conocimiento.
Dato. Un dato es un conjunto discreto, de factores objetivos sobre un hecho real. Dentro de un contexto
empresarial, el concepto de dato es definido como un registro de transacciones. Un dato no dice nada
sobre el porqué de las cosas, y por sí mismo tiene poca o ninguna relevancia o propósito.
Las organizaciones actuales generalmente almacenan los datos mediante el uso de tecnologías.
Desde un punto de vista cuantitativo, las empresas evalúan la gestión de los datos en términos de coste,
velocidad y capacidad.
Todas las organizaciones requieren de datos, y algunas son totalmente dependientes de ellos para
su cabal funcionamiento, como por ejemplo: los bancos, las compañías de seguros, las agencias
gubernamentales, entre otros. En este tipo de organizaciones la buena gestión de los datos es esencial
para su labor, por cuanto operan con millones de transacciones diarias. Sin embargo, para la mayoría de
las organizaciones contar con muchos datos no siempre es recomendable, por cuanto su manejo en
cantidades significativas vuelven más complicado identificar aquellos que son realmente relevantes de los
que no lo son, especialmente cuando los datos no tienen significado en sí mismos tal como podrás apreciar
en el ejemplo siguiente:
Tabla 1a
Ítem (i) (ii) (iii) (iv)(x) 0,954 1,318 1,343 0,780(y) 1,020 1,070 1,223 0,987
En la tabla anterior, se interpreta como datos los elementos: 0,954; 1,318; 1,343; y 0,780, los cuales
constituyen un registro numérico de los cuales se infiere que representan unos hechos o conceptos.
Información.
El concepto de información se describirá como un mensaje, normalmente bajo la forma de un
documento o de algún tipo de comunicación audible o visible. Como cualquier mensaje, tiene un emisor y
un receptor. La información es capaz de cambiar la forma en que el receptor percibe algo, es capaz de
impactar sobre sus juicios de valor y comportamientos. Tiene que informar; son datos que marcan la
diferencia. La palabra “informar” significa originalmente “dar forma a “y la información es capaz de formar a
la persona que la consigue, proporcionando ciertas diferencias en su interior o exterior. Por lo tanto, pudiera
mencionarse que es el receptor y no el emisor, el que decide si el mensaje que ha recibido es realmente
información, esto es, si realmente le informa. Un informe lleno de tablas inconexas, puede ser considerado
información por el que lo escribe, pero a su vez puede ser percibido de manera confusa por el que lo recibe.
La información se mueve en torno a las organizaciones a través de redes formales e informales. Las
redes formales tienen una infraestructura visible y definida (cables, buzones de correo electrónico,
direcciones, entre otros). Los mensajes que estas redes proporcionan incluyen e-mail, servicio de entrega
de paquetes, y transmisiones a través de Internet. Las redes informales son invisibles. Se hacen a medida.
Un ejemplo de este tipo de red es cuando alguien envía una nota o una copia de un artículo indicando “para
tu información”.
A diferencia de los datos, la información tiene significado (relevancia y propósito). No sólo puede
formar potencialmente al que la recibe, sino que está organizada para algún propósito. Los datos se
convierten en información cuando su creador les añade significado. Transformamos datos en información
añadiéndoles valor en varios sentidos, a saber:
Contextualizando: esto es, para qué propósito se generaron los datos. Categorizando: se conocen las unidades de análisis de los componentes principales de los datos. Calculando: los datos pueden haber sido analizados matemática o estadísticamente. Corrigiendo: los errores se han eliminado de los datos. Condensando: los datos se han podido resumir de forma más concisa.
Continuando con el ejemplo anterior (ver tabla 1a), éste se convierte en información al contemplar los
elementos mostrados a continuación:
Tabla 1b
Pautas de crecimiento por grupos de países seleccionados durante el período 1975-1981
ÍtemGrupos de países
(i) (ii) (iii) (iv)Coeficiente de ingreso 0,954 1,318 1,343 0,780
Coeficiente de población 1,020 1,070 1,223 0,987
Fuente: Base de datos de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI).
En este caso se dice que la tabla 1a, adquiere valor informacional cuando los elementos (x), (y) y (i),
(ii), (iii) y (iv), se identifican como se indican en la tabla 1b, por cuanto el estado informacional ocurre cuando
“algo nuevo” guarda coherencia con “algo que se sabe”, como por ejemplo que “El coeficiente de ingreso
para los países del grupo ii durante el período de 1975 a1981 fue de 1,318” o que “Los países que
conforman el grupo iv registraron un coeficiente de ingreso de 0,780 mientras que su coeficiente de
población se ubicó en 0,987 durante el período 1975-1981”
Importante es mencionar que los computadores agregan valor al transformar datos en información,
pero difícilmente pueden apoyar el analizar el contexto de dicha información. Por tanto, debe tenerse
siempre presente que el medio no es el mensaje. Lo que se intercambia es mucho más importante que el
medio que se usa para realizarlo.
Conocimiento.
La mayoría de las personas intuyen que el conocimiento es algo más amplio, más profundo y más
rico que los datos y la información, y en este sentido se intentará realizar una primera definición de
conocimiento, que permita comunicar lo que desea expresarse cuando se habla de conocimiento dentro de
las organizaciones.
Para Davenport y Prusak (1999), el conocimiento es una mezcla de experiencia, valores, información
y “saber hacer” que sirve como marco para la incorporación de nuevas experiencias e información, y es útil
para la acción. Se origina y aplica en la mente de los conocedores. En las organizaciones con frecuencia no
sólo se encuentra dentro de documentos o almacenes de datos, sino que también está en rutinas
organizativas, procesos, prácticas, y normas.
Lo que inmediatamente deja claro la definición es que ese conocimiento no es simple. Es una mezcla de
varios elementos; es un flujo al mismo tiempo que tiene una estructura formalizada; es intuitivo y difícil de
captar en palabras o de entender plenamente de forma lógica. El conocimiento existe dentro de las
personas, como parte de la complejidad humana y de su carácter impredecible. Aunque suele pensarse en
activos tangibles, concretos; los activos de conocimiento son mucho más difíciles de manejar. El
conocimiento puede ser visto como un proceso (flujo) o como un stock.
El conocimiento se deriva de la información, así como la información se deriva de los datos. Para que
la información se convierta en conocimiento, las personas deben hacer prácticamente todo el trabajo. Esta
transformación se produce debido a procesos de: comparación, consecuencias, conexiones y conversación.
En el caso del ejemplo que viene citándose, el estado de conocimiento ocurre cuando se está en
condiciones de interpretar cabalmente qué significa “Los países que conforman el grupo iv registraron un
coeficiente de ingreso de 0,780 mientras que su coeficiente de población se ubicó en 0,987 durante el
período 1975-1981”. Estas condiciones equivalen al dominio precedente de un conjunto de
conceptualizaciones, valoraciones y experiencias de aprendizaje, adquiridas bien de manera formal o
informal, por lo cual se dice que se trata de información que puede ser comprendida por aquel que cuente
con una base memorizada de conocimiento para ello, como por ejemplo de una: disciplina escuela, teoría,
entre otros.
A. Resumen.
Los datos describen tan sólo una parte de lo que ocurre en la realidad y no proporcionan juicios de
valor o interpretaciones, y por lo tanto no son orientativos para la acción. La toma de decisiones se basará
en datos, pero estos nunca dirán lo que hacer. Los datos no dicen nada acerca de lo que es relevante o no.
Sin embargo, estos son importantes para las organizaciones por cuanto son la base para la creación de
información, la cual a su vez son los datos o material informacional relacionada o estructurada de manera
actual o también potencialmente significativa. Respecto del conocimiento, este tiene lugar dentro y entre las
personas, y al igual que se encuentran los datos en registros, e información en mensajes, puede obtenerse
conocimiento de los individuos, de los grupos de trabajo o de comunidades de conocimiento, e incluso de
rutinas organizativas.
B. Autoevaluación del subtema 1.
Antes de continuar, responde esta pregunta ¿Será cierto que dato, información y conocimiento tienen
significado diferente? Si su respuesta es afirmativa, entonces elabora un cuadro comparativo entre ellos, en
caso contrario, se sugiere que efectúe nuevamente la lectura del subtema 1. La respuesta correspondiente
al cuadro comparativo la encontrarás al final de esta guía.
Subtema 2: Tipologías documentales.
Uno de los aspectos atribuidos al documento, es que éste surge ante la necesidad del ser humano
de registrar los hechos para así transcender sus limitaciones espacio-temporales. Éste ha transido por
diversas etapas, y un ejemplo de ello lo encontramos cuando en la era primitiva, el hombre mientras
recolectaba objetos dibujaba en paredes animales o símbolos, y adquiría conocimientos de ellos.
Con el cursar del tiempo, el hombre acumuló una serie extraordinaria de datos los cuales necesitó
relacionar y colocar a su alcance, empleándolos como fuentes de información para diversos fines. Esos
datos, fueron recopilados y almacenados en distintos soportes (libros, informes, estadísticas, tarjetas, entre
otros) y relacionados manualmente para procesar información. En la segunda mitad del siglo XX, el hombre
desarrolló una herramienta para realizar sus operaciones a mayor velocidad, y procesar de forma más
sistematizada los datos, surgiendo el campo de la computación.
Posteriormente, la aparición de Internet y materialización de uno de sus principales productos la
Word Wide Web; el desarrollo de los navegadores; así como la evolución de las interfaces gráficas de
usuario en los sistemas de búsqueda y recuperación de la información, se integraron formando un gran
conjunto de componentes (protocolos, interfaces de aplicaciones, lenguajes de descripción de forma y
contenido), cuyo funcionamiento dinámico genera lo que hoy se conoce como la web, y en donde la
información debidamente procesada, organizada y estructurada en sitios web o productos digitales
similares, configuran los nuevos espacios relacionados con el documento.
Martínez Comeche (1995), considera que al ser todo mensaje potencialmente informativo, “podría
concebirse el documento como todo mensaje –icónico o simbólico- incorporado a un soporte permanente y
empleado con una finalidad informativa. A partir de esta concepción, el documento puede caracterizarse por
una triple dimensión que permite fijar su tipología, a saber:
Soporte físico. Mensaje informativo. Posibilidad de transmisión o difusión del conocimiento sustentado en el documento y actualizado en el
proceso documental.
Conforme a estas características, se puede establecer diversas clasificaciones del documento
resaltando las que inciden en:
La naturaleza del soporte. El código empleado en el mensaje. El rigor científico del mensaje. El área del conocimiento que abarca el mensaje. El tratamiento y consiguiente modificación del mensaje original. La capacidad de difusión.
Desde la perspectiva del soporte empleado, los documentos utilizan mayoritariamente el papel
(libros, artículos, folletos, etc.), los materiales magnéticos (cintas magnetofónicas y de vídeo, disquetes,
etc.) y los denominados soportes ópticos (CD-ROM), aunque a lo largo de la historia han variado mucho
(madera, piel, pergamino, piedra metal, entre otros) pudiendo afirmarse que cualquier material es apto para
la grabación en él de un mensaje.
La clasificación más habitual, y una de las más provechosas por su sencillez y utilidad práctica, sigue
siendo la que atiende al código empleado en el mensaje. Distingue entre documentos textuales (cuando los
signos corresponden a la lengua escrita), gráficos (mapas, planos), iconográficos (cuadros, diapositivas,
fotografías), sonoros o fónicos (cintas, discos), audiovisuales (películas, vídeos), plásticos o
tridimensionales (por ejemplo, cualquier objeto conservado en un museo), informáticos (legibles por un
computador), o documentos multimedia (cuando el documento combina varios de los códigos expuestos)
entre otros.
En cuanto al rigor científico del mensaje, los documentos suelen dividirse en científicos, técnicos y de
divulgación, según va disminuyendo el nivel de profundidad y precisión del mensaje emitido.
El documento puede también agruparse de acuerdo con el área del conocimiento que abarca en el
sistema de las ciencias, hablándose de documentos económicos, sociales, históricos, jurídicos o
lingüísticos, entre una enorme variedad de mensajes posibles.
La estructuración del documento, que considera el tratamiento a que es sometido el contenido del
mensaje, modificando su presentación, diferencia entre un documento primario (contenido original con su
presentación original: libros, artículos, entre otros), un documento secundario (cuyo contenido deriva del
original y lo referencia, bien describiendo su forma externa o bien condensando el tema o asunto de que
trata, y cuya presentación sigue reglas y normas específicas, tales como: una ficha bibliográfica, un
repertorio bibliográfico o un resumen), y un documento terciario (documento que difunde un contenido
primario, es decir, información original, más no referencial, presentada con una estructura típicamente
secundaria: diccionarios, léxicos, tesauros, enciclopedias, entre otros.
Finalmente, en lo que respecta a su capacidad de difusión, el documento puede ser portador de un
mensaje publicado o público (sin restricciones en cuanto a su transmisión, ya realizada), inédito
(desconocido o no comunicado), reservado (de acceso limitado), o personal (de interés individual y por
tanto, de difusión reducida).
A. Resumen.
Un documento se ha representado como todo objeto que ofrece información (soporte informativo),
que atiende a unas características físicas e intelectuales. Las características físicas, están relacionadas
con: el soporte (un objeto, signos utilizados, el tamaño, la forma de representación, accesibilidad y
periodicidad), con la textualidad (documentos impresos, el cual es un texto escrito con signos que debe
interpretarse, como por ejemplo: libros, informes, medios de comunicación, entre otros), y con los no
textuales (documentos no impresos, tales como los documentos visuales, audiovisuales, magnéticos,
electrónicos, entre otros). Mientras que las características intelectuales, son aquellas que tienen que ver
con el mensaje informativo, tales como: finalidad, contenido, tema, tipo de autor, fuentes informativas, modo
de difusión, accesibilidad y originalidad, todo lo cual ha originado las tipologías documentales. En este
sentido se entenderá como tipología documental, al conjunto de rasgos externos (clase, formato, soporte,
cantidad) e internos (estructura, fechas, letra, lengua, contenido) que distinguen a unos documentos de
otros. Cada tipo de documento, se crea para dejar testimonio de una determinada función o actividad, tanto
pública como privada.
B. Autoevaluación del subtema 2.
Con el propósito de verificar y validar los conocimientos adquiridos, a continuación se presentan un
conjunto de interrogantes, las cuales deberá responder antes de pasar al punto siguiente. Recuerde que su
formación incluye la ética, la responsabilidad y la actitud crítica y reflexiva.
1. Uno de los aspectos atribuidos al documento, es que éste surge ante la ___________________de
registrar los hechos para así transcender sus limitaciones ____________________.
2. Partiendo de la consideración de Martínez Comeche, ¿Cómo podría concebirse el documento?
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
___________________________________________________________________________________
3. Mencione algunas de las tipologías documentales, según:
3.1. La naturaleza del soporte.
3.2. El código empleado en el mensaje.
3.3. El grado de modificación de la naturaleza del mensaje original.
Subtema 3: La Ciencia de la Información y disciplinas científicas que la conforman.
El siglo XX estuvo acompañado de grandes descubrimientos científicos, y de transformaciones
tecnológicas que ampliaron significativamente el conocimiento del hombre acerca del mundo que le
rodeaba y que, a su vez, condujeron a cambios en la forma de interactuar con él.
El acceso a información científica y tecnológica relevante, actualizada y significativa, constituía una
necesidad. Progresivamente, ocurrieron cambios en los soportes de la información y se aplicaron las
nuevas tecnologías para la organización, almacenamiento y recuperación de la información, surgiendo así,
una nueva ciencia y un nuevo profesional, que aun cuando compartían algunas de las labores comunes a la
actividad bibliotecaria y otras disciplinas informativo documentales, tenían ante sí exigencias más complejas
que requerían de una especialización como la denominada Ciencia de la Información.
Según Borko (citado por Lináres Columbié, s.f), la Ciencia de la Información tiene como propósito
investigar las propiedades y el comportamiento de la información, las fuerzas que rigen su flujo y los medios
de procesarla para su mejor accesibilidad y aprovechamiento. Está interesada en un conjunto de
conocimientos relacionados con el origen, colección, organización, almacenamiento, recuperación,
interpretación, transmisión, transformación y utilización de la información. Incluye la investigación de las
representaciones de información en los sistemas naturales y artificiales, la utilización de códigos para la
transmisión eficiente del mensaje, el estudio de instrumentos y técnicas de procesamiento de la
información, tales como computadoras y sistemas de programación. Menciona Freire (s.f.), que es una
ciencia interdisciplinaria [...] relacionada con la matemática, la lógica, la lingüística, la psicología, la
biblioteconomía, la administración. Tiene componentes de una ciencia pura, que investiga el tema y la
relación con sus aplicaciones, y componentes de una ciencia aplicada, por cuanto crea servicios y
productos informativos.
La investigación científica en el área de la Ciencia de la Información, viene desarrollándose apoyada
en otras ciencias, como la Bibliotecología, la Archivología y la Museología.
La Bibliotecología, tiene su origen en el griego: biblion-libro, theke-caja y logos-discursos; es decir, la
bibliotecología estudia el libro y la institución que, a lo largo de los siglos, ha actuado como la que atesora y
difunde los libros: la biblioteca. La bibliotecología no se limita a un estudio de tipo histórico, sino que
también permite conocer internamente las características del libro y la biblioteca. Algunos autores afirman
que la bibliotecología no puede clasificarse como una ciencia, sino que está en fases de reflexiones sobre
el tema que se podría clasificar como el inicio. En el surgimiento de la bibliotecología, se debe destacar lo
relacionado con la evolución del libro, las bibliotecas y las técnicas; así como los métodos utilizados para el
estudio y organización de la información para su uso posterior.
La Archivología, como ciencia social que estudia los principios de la creación, desarrollo,
organización, administración y funciones de los archivos, sus fundamentos, legales y jurídicos, así como
sus problemas teóricos-históricos y métodos lógicos referentes a los documentos de archivo, los cuales
resuelve de manera netamente práctica. El servicio y la difusión de los documentos a la sociedad es uno de
los principios importantes de los archivos, aunque ellos se realizan dentro de los límites constitucionales de
cada territorio. El archivo, con esto, adquiere una misión social importante, que no es solo de tipo cultural,
de investigación, sino de información, de auxilio, de ayuda a los ciudadanos en todos los aspectos de la
vida humana.
La museología estudia la historia de los elementos internos del museo, sus determinantes externos
(público, organismos titulares) y las interrelaciones entre unos y otros. Pero la museología es también una
ciencia aplicada: partiendo del análisis propone nuevas formas de organizar los elementos internos, para
adecuarse a distintas finalidades.
A. Resumen.
La Ciencia de la Información surgió como respuesta a la creciente necesidad social de desarrollar
métodos y medios eficaces para recopilar, conservar, buscar y difundir la información, debido a la
diversificación de las ramas científicas, así como también, a la mezcla y surgimiento de nuevas áreas de
investigación que hicieron más complejo su proceso de organización y suministro. Su objeto de estudio lo
constituye la información, definida como el conjunto de datos registrados en cualquier tipo de soporte físico,
desde el papel hasta el medio óptico u electrónico. Se relaciona con otras disciplinas informativo
documentales, en tanto que la Bibliotecología, como en la Archivología, como en la Museología, o en el
proceso informativo, se pueden aplicar de forma general los mismos principios teóricos, las mismas
técnicas, las mismas formas de difusión. Son tres ciencias con características afines que difieren en el tipo
de documentos que manejan y el tipo de usuarios a quienes sirven. Archivistas, bibliotecarios, gestores de
información y museólogos, a pesar de las diferencias en términos profesionales e institucionales,
contribuyen todos a la disponibilidad de la información almacenada, configurando objetivos comunes.
B. Autoevaluación del subtema 3.
Pon a prueba tus conocimientos elaborando un mapa conceptual acerca de la relación entre Ciencia
de la Información, Bibliotecología. Archivología y Museología.
Subtema 4: Perfil ético del profesional de la información.
En el campo de la Ciencia de la Información, las instituciones de información enmarcan el entorno
del desempeño del profesional de la información. Las entidades que generan, procesan y difunden
información científica representan el marco social de esta actividad, y se identifican como especificidad de
este sector las relaciones entre los usuarios de la información y el profesional de la información. Se
identifican además, como herramientas y mecanismos de formación de valores socio-culturales e inciden
directamente en la formación de las actitudes de los usuarios de la información.
Las entidades de información presentan características singulares que conllevan a los deberes
morales del profesional en la actividad científico-investigativa, específicamente en el campo de la
información científica, por ser éste su contenido fundamental de trabajo. La actividad que precisa la
generación de actividad científica implica un reto diario para el profesional de la información, debido al
significado generado por la sociedad del conocimiento existente, que deben lidiar constantemente con el
uso de las tecnologías y la satisfacción del usuario.
Actualmente, no se concibe la generación, procesamiento y difusión de la información científica sin la
tecnología, un aspecto muy positivo por las facilidades que esta proporciona. Sin embargo, cabe
preguntarse cuánto y hasta dónde se maneja la tecnología por los profesionales de información y por sus
usuarios. La tecnología no representa un problema en cuestiones de ética, siempre que éticamente se
pueda utilizar, por lo cual se precisa de un enfoque holístico y sinérgico que estreche estos dos conceptos.
Las nuevas tecnologías de información amplían el espectro de trabajo del profesional de la
información, surgiendo desempeños o labor como por ejemplo el de gestor de información. Esto implica
que, más allá de los servicios y productos tradicionales generados por los centros de gestión de
información, se busca satisfacer la necesidad de los usuarios de la información, se objetiva la necesidad de
información, se evacua una carencia que provoca incertidumbre, debido a la falta de conocimiento.
Al analizar el desempeño moral del profesional de la información en la recolección, procesamiento,
generación y difusión de información, se evidencia que intervienen diversos procesos que requieren
actitudes pertinentes para efectuar esta actividad de manera idónea. Algunas de ellas son:
Se debe mantener una actitud disciplinada y organizada en el trabajo para evitar que la información recolectada sea inadecuada.
Se han de anular estereotipos existentes por la práctica de religiones diferentes por cuestiones raciales o diferencias socio-políticas.
El personal debe identificar las necesidades de información en caso que el usuario no sepa expresarlas debidamente.
Se ha de incentivar la duda científica que puede ser cubierta por el análisis de la información existente.
Se ha de mantener una postura flexible a las críticas y aceptar éstas como procesos constructivos que mejorarían la cotidianidad de la labor informativa.
Se debe establecer una familiarización entre el usuario y el centro.
Se ha de proporcionar la comodidad de la expresión oral para solucionar el desconocimiento, sea para el manejo de la tecnología del centro o para la localización de la información.
El profesional de la información debe conservar una apariencia cordial y profesional.
Se ha de evitar subestimar al usuario.
Se debe mantener una superación constante.
Se ha de tomar interés en el asunto de investigación planteada por el usuario.
El profesional de la información, ha de mantener absoluta conciencia de que el usuario es su razón
de existir dentro de la comunidad científica. Debe concebir al usuario como un sujeto que necesita
satisfacer una necesidad de información que presenta una repercusión e impacto social y al cual se brinda
información para apoyar sus procesos de toma de decisiones. Por tanto, se puede plantear que del
desarrollo de los deberes morales del profesional de la información, depende el desarrollo de la actividad de
un sujeto el que, a partir de su inteligencia desarrollará nuevos proyectos de investigación que se
concretarán en un bien social, político y económico. Sin embargo el reto fundamental se ubica en que el
usuario regrese a la institución de información, a partir del hecho de que el conocimiento es acumulativo,
por lo que siempre se generarán nuevas necesidades a partir del requerimiento cubierto y finalmente
satisfecho.
La formación y educación de usuarios es otro de los elementos que urge de principios éticos en el
profesional de la información actual. Se parte de la idea de contribuir al desarrollo de actitudes, como es el
caso de la búsqueda de información por diversos medios tecnológicos, como las bases de datos o la propia
navegación en la red, así como con el manejo de un catálogo tradicional y en línea.
La superación del usuario en materia de ética profesional armoniza la conducta del sujeto en su
propio campo de actividad, ejercitándolo en su cotidianidad profesional e incide en el aumento de su cultura
informacional y tecnológica, y en la mejora de sus relaciones interpersonales con la sociedad.
A. Resumen.
El profesional de la información es un sujeto formado por parámetros morales individuales, que es
afectado por estados anímicos y cambios políticos, sociales y económicos. Desprenderse de ciertos
apegos, estereotipos y tradiciones resulta difícil; sin embargo, esto puede ser manejable si la resistencia al
cambio es muy baja. La capacidad de ser flexibles es muy importante para incorporar un código ético a la
labor diaria del profesional de la información.
Los deberes morales de un individuo no instituyen la ética profesional, pero sí la forman, y ésta existe
como una parte de la ética profesional. Por tanto, la ética profesional no ha de constituirse en un régimen
del sujeto, sino en un principio que determina las acciones para el bien o para el mal de la moral.
El profesional de la información desempeña una función clave para la formación y educación del
usuario de la información. Una ética adecuada en este profesional, permitirá su mejor desenvolvimiento en
su proyección como individuo ante sí y ante la sociedad.
B. Autoevaluación del subtema 4.
1. Reflexiona en relación a los aspectos que se presentan a continuación, y responde cada una de las
interrogantes que se formulan, colocando una (V) en caso de considerarlo como cierto o una (F) si éste
fuera falso.
1.1. La Ciencia de la Información, como disciplina científica, permanece exenta de los problemas éticos
que se le presentan. ( )
1.2. El profesional de la información, debe ser responsable de cumplir los aspectos éticos como
administrador, formador, difusor de información, y como preservador del patrimonio documental ( )
1.3. El profesional de la información, tiene una responsabilidad ineludible ante la comunidad en la cual
presta sus servicios, sustentada sobre principios éticos. ( )
2. Menciona algunas de las actitudes que deben caracterizar al profesional de la información, para su
desempeño idóneo en los centros de gestión de información.
Respuesta a las autoevaluaciones propuestas por subtemas
Respuesta a la autoevaluación del subtema 1.
COMPARACIÓN ENTRE DATOS, INFORMACIÓN Y CONOCIMIENTO
Respuesta a la autoevaluación del subtema 2.
1. Uno de los aspectos atribuidos al documento, es que éste surge ante la necesidad del ser humano de registrar los hechos para así transcender sus limitaciones espacio-temporales.
2. Partiendo de la consideración de Martínez Comeche, ¿Cómo podría concebirse el documento?
Martínez Comeche, considera que al ser todo mensaje potencialmente informativo, el documento podría concebirse como todo mensaje –icónico o simbólico- incorporado a un soporte permanente, el cual es empleado con una finalidad informativa.
3. Mencione algunas de las tipologías documentales, según:
3.1. La naturaleza del soporte.
Papel: libros, artículos, folletos.
Magnéticos: cintas magnetofónicas y de vídeo, disquetes
Ópticos: CD-ROM
3.2. El código empleado en el mensaje.
Gráficos: planos, mapas.
Iconográficos: fotografía, diapositivas, cuadros.
Fónicos: disco y cinta magnetofónica.
Audiovisual: películas y vídeo.
Plástico: objeto museístico.
Informático: disquete y disco óptico.
3.3. Por el grado de modificación de la naturaleza del mensaje original
Primario: libro y artículo de revista.
Secundario: ficha bibliográfica, repertorio bibliográfico, resumen.
Terciario: diccionarios, léxicos, tesauros, enciclopedias.
Respuesta a la autoevaluación del subtema 3.
MAPA CONCEPTUAL
CIENCIA DE LA INFORMACIÓN, BIBLIOTECOLOGÍA. ARCHIVOLOGÍA Y MUSEOLOGÍA
Respuesta a la autoevaluación del subtema 4.
1. Reflexiona en relación a los aspectos que se presentan a continuación, y responde cada una de las
interrogantes que se formulan, colocando una (V) en caso de considerarlo como cierto o una (F) si éste
fuera falso.
1.1. La Ciencia de la Información, como disciplina científica, permanece exenta de los problemas éticos
que se le presentan. (F)
1.2. El profesional de la información, debe ser responsable de cumplir los aspectos éticos como
administrador, formador, difusor de información, y como preservador del patrimonio documental (V)
1.3. El profesional de la información, tiene una responsabilidad ineludible ante la comunidad en la cual
presta sus servicios, sustentada sobre principios éticos. ( V )
2. Menciona algunas de las actitudes que deben caracterizar al profesional de la información, para su
desempeño idóneo en los centros de gestión de información.
Se debe mantener una actitud disciplinada y organizada en el trabajo para evitar que la información
recolectada sea inadecuada.
Se han de anular estereotipos existentes por la práctica de religiones diferentes por cuestiones
raciales o diferencias socio-políticas.
El personal debe identificar las necesidades de información en caso de que el usuario no sepa
expresarlas debidamente.
Se ha de mantener una postura flexible a las críticas, y aceptar éstas como procesos constructivos
que mejorarían la cotidianidad de la labor informativa.
El profesional de la información debe conservar una apariencia cordial y profesional.
Referencias
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Freire, I.M. (s.f) Da construção do conhecimento científico à responsabilidade social da Ciência da Informação [Documento en línea]. Consultado el 9 de diciembre de 2008 en: http://www.informacaoesociedade.ufpb.br/1210207.pdf
Martín Vega, A. (1995). Fuentes de información general. Gijón: TREA
Martínez Comeche, J. A. (1995). Teoría de la información documental y de las instituciones documentales. Madrid: Síntesis
Linares Columbié, R. (s.f.). Bases teóricas de la Bibliotecología y la Ciencia de la Información. Material mimeografiado
López Yepes, J. (1999). Manual de Información y Documentación. Madrid: Pirámide
Pérez Matos, N. y Remigio Montero, M. (2007). Archivología, bibliografía, bibliotecología y ciencias de la información: ¿todas para una o una para todas?. [Documento en línea]. Consultado el 9 de diciembre de 2008 en: http://bvs.sld.cu/revistas/aci/vol15_02_07/aci03207.htm#cargo
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