edición nº 502: con el ojopuesto eninternet

20
Semanario Nacional Viernes 8 al jueves 4 de marzo de 2013 Santa Cruz de la Sierra, Bolivia Año 10 Número 502 Bs 5 Con el ojo puesto en Internet El Gobierno central alista un decreto para regular Inter - net. Quiere que Entel tenga más control. El movi - miento Por Más y Mejor Internet en Bolivia da la voz de alarma. Págs. 4-5 Él es editor de libros, pero desde hace cinco años incorporó a su tarjeta de presentación un corredor aficio- nado . En Bolivia Viva cuenta cómo correr le cambió la vida. Págs. 18-79 Jenny Ybernagaran, Navy Pillar y Waldo Albarracín aprovechan el Día Internacional de la Mujer para recordar qué lejos están de gozar de sus derechos. Págs. 6-9 Alfonso Cortez y una filosofía de vida inspirada en los pies Mujeres: muchas leyes a su favor, pero solo en el papel Divagaciones sobre la muerte del venezolano Hugo Chávez Edward Serrate evalúa cómo afecta la muerte de Chávez en la política boliviana. Susana Seleme y Enrique García traen la voz crítica.Y cómo lo vio García Márquez. Págs. 12-16

Upload: semanario-uno

Post on 15-Mar-2016

235 views

Category:

Documents


5 download

DESCRIPTION

El Gobierno central alista un decreto para regular Internet. Quiere que Entel tenga más control. El movimiento Por Más y Mejor Internet en Bolivia da la voz de alarma.

TRANSCRIPT

Page 1: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

Semanario Nacional • Viernes 8 al jueves 4 de marzo de 2013 • Santa Cruz de la Sierra, Bolivia • Año 10 • Número 502 • Bs 5

Con el ojo puesto en Internet

El Gobierno central alista

un decreto para regular Inter-

net. Quiere que Entel tenga más

control. El movi-miento Por Más

y Mejor Internet en Bolivia da la voz de alarma.

Págs. 4-5

Él es editor de libros, pero desde hace cinco años incorporó a su tarjeta de presentación un ‘corredor aficio-nado’. En Bolivia Viva cuenta cómo correr le cambió la vida. Págs. 18-79

Jenny Ybernagaran, Navy Pillar y Waldo Albarracín aprovechan el Día Internacional de la Mujer para recordar qué lejos están de gozar de sus derechos. Págs. 6-9

Alfonso Cortez y una filosofía de vida inspirada en los pies

Mujeres: muchas leyes a su favor, pero solo en el papel

Divagaciones sobre la muerte del venezolano Hugo Chávez

Edward Serrate evalúa cómo afecta la muerte de Chávez en la política boliviana. Susana Seleme y Enrique García traen la voz crítica. Y cómo lo vio García Márquez. Págs. 12-16

Page 2: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

2

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

EDITORIAL

2

Page 3: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

3

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013

Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

EDITORIAL

Voz compartida

Sin vueltas

Santa Cruz y sus dilemasEsa afirmación repetitiva de que hay que ver a las crisis como oportunida-

des antes que como obstáculos para crecer y avanzar viene al pelo hoy para abordar, desde el pensamiento crítico, lo que está ocurriendo en

Santa Cruz, tanto con sus elites intelectuales y empresariales, como con las que ejercen su representación política. Unas y otras protagonistas de actitudes con-tradictorias, confusas y bochornosas que no hacen otra cosa que alimentar una sensación de impotencia, frustración y hasta de desesperanza en la población, a la que habría también que responsabilizar de la peor de las crisis que puede afectar a la sociedad: la crisis de la incompetencia, como diría Einstein (“La verdadera crisis es la crisis de la incompetencia”).

Incompetencia es lo que se percibe, por ejemplo, en la Brigada Parlamenta-ria Cruceña para resolver algo tan simple como es la elección de su directiva. Los aludidos dirán en su defensa que eso no es tan simple como suponemos, porque para lograr un acuerdo deben lidiar con intereses de toda laya, ¡como si esto no fuera una constante en todo proceso eleccionario! A esa pugna de intereses se atribuye también la causa para la no menos vergonzosa actuación del Gobierno Municipal de Santa Cruz de la Sierra, en el que la incompeten-cia de sus actores, sumada a la falta de escrúpulos, no ha hecho otra cosa que alimentar el crecimiento caótico de una ciudad que merece mejor suerte. A ello sumémosle la inoperancia de la Asamblea Legislativa Departamental y la falta de claridad y coherencia vistas en el resto de la institucionalidad cruceña –profesionales, empresarios, productores, sindicales, cívicos, etcétera- para terminar de configurar un escenario adverso que, de no ser revertido pronto, frustrará el proyecto cruceño.

Un proyecto que apuesta por un modelo de desarrollo humano y económico en el que la planificación, la inclusión social, la integración con lo universal y la consolidación de las libertades democráticas son tareas ineludibles. Nada de otro mundo, en todo caso. Esta es una apuesta propia de sociedades progre-sistas que viven el presente y miran al futuro con optimismo, sin complejos, resentimientos y, menos aún, sentimientos de culpa, tan presentes hoy en estos tiempos de cólera, del cólera real y del figurado, a los que están sucumbiendo torpemente las elites tradicionales cruceñas que no logran resolver de una vez por todas un dilema central, claramente identificado hace poco por Carlos Hugo Molina: o se abandonan al llanto, lamentando lo que consideran su mala suerte (vivir sometida a un centralismo secante y autoritario que apuesta a liquidarlas, junto al proyecto y modelo cruceño de desarrollo integral), o asumen el rol de vanguardia al que está llamado Santa Cruz por su ubicación geográfica y sus cada vez más numerosas y diversas potencialidades.

Dadas las circunstancias, todo parece indicar que las aludidas elites cruceñas están lejos no solo de resolver ese dilema, sino incluso de identificarlo y com-prenderlo. No se explica de otra manera lo que está ocurriendo en los espacios de representación política cruceña, marcados por el bochorno y la sin razón, así como también en los ocupados por una institucionalidad hoy venida a menos, no por simple azar del destino, sino como resultado de una sistemática y clara apuesta política del gobierno de turno que ve en el proyecto cruceño una ame-naza a su proyecto hegemónico. Un proyecto –el cruceño- al que el partido de gobierno está dispuesto a combatir incluso con violencia, como lo demostró con claridad en el burdo montaje del caso Ròzsa, en el que cayeron no pocos representantes de esa institucionalidad cruceña formal.

Pero no hay fatalidad que valga frente a la fuerza de la realidad, como bien se encarga de anotar también el propio Carlos Hugo Molina, entre otros cruceños. Una realidad marcada por las potencialidades de desarrollo humano y econó-mico de las que hace gala Santa Cruz, y a las que el mismo gobierno central ha echado el ojo (no se explica de otra manera la repentina y asidua presencia de las autoridades gubernamentales en la capital cruceña, al lado incluso de quienes hasta hace poco acusaba de ‘enemigos’, ‘separatistas’ y hasta ‘terroristas’). Pena que esa ‘echada de ojo’ venga acompañada de una visión distorsionada de Santa Cruz, de su gente y su modelo de desarrollo; y pena también que algunas elites cruceñas alimenten a esa distorsión, dificultando la tarea de resolver el dilema aquí planteado. En otras palabras, frenando el rol al que Santa Cruz está llamado a encarnar: el de vanguardia.

En la práctica...

Número 1 es elaborado por un grupo de periodistas independientes que han formado una sociedad editorial

para publicar este semanario de circulación nacional.

Maggy Talavera (directora)Ignacio Talavera Alpire (gerente)

Jorge Caero (columnista) Diego Jaramillo (reportero)

Asesor legalDr. Jerjes Justiniano Atalá

ColumnistasWinston Estremadoiro (antropólogo)Alcides Parejas Moreno (historiador)

Susana Seleme (periodista, cientista política)

Modelo gráfico: Fernando Pérez ChristensenDiagramación: SemanarioUno

Colaboran en esta edición Mario Durán Chuquimia (periodista)Enrique García Fernández (filósofo, escritor y político)Jenny Ybernagaray (psicóloga)Waldo Albarracín (ex Defensor del Pueblo)Edward Serrate Peña (politólogo)Alfonso Cortez (editor de libros)Carlos Valverde Bravo (periodista investigador)Gabriela Suárez Urenda (profesora)Fotografías: Diego Jaramillo / Elvio Montero / InternetFoto de portada: Internet

Correo electrónico: [email protected] [email protected]: www.facebook.com/semanariouno Twitter: @semanariouno Dirección: Calle San Germán Nº 15 Urb. La MadreRecepción/telefax: 350-3585

Cada año, cuando llega el 8 de Marzo, entro en una discusión que parece no tener fin con muchas ami-gas, de esas que batallan a diario y entregan la piel en defensa de los derechos de las mujeres. Hago cues-tión de subrayar la calidad de estas amigas, porque ahí radica en gran parte los dilemas que me plantea la discusión que tengo con ellas cada vez que llega la hora de conmemo-rar el Día Internacional de la Mujer. Es que mientras ellas destacan la validez de las celebraciones en esta fecha, por el significado histórico que tiene y por las muchas victorias logradas desde que se instituyó la fe-cha a inicios del siglo pasado, yo no puedo sino renunciar a tales celebra-ciones, convencida como estoy de que nada valen las fechas si sirven más de pretexto para aumentar las ventas y el maquillaje de la violen-cia cotidiana que siguen padeciendo millones de mujeres en el mundo.

Mis pesares aumentan porque mientras protesto por la fecha usa-da con fines que nada tienen que ver con los auténticos derechos a la igualdad por los que peleamos las mujeres, no puedo dejar de sentir al-

go así como un sentimiento de culpa por no estar en las celebraciones que se suceden cada 8 de Marzo. Pero es que cada vez, a pesar de todos los esfuerzos para evitarlo, es mayor mi pesar por las graves y profundas conradicciones que nos plantea es-ta conmemoración en una realidad cada vez más violenta e injusta en contra de las mujeres.

Es lo que veo hoy en Bolivia. El 8 de Marzo llega cuando aun están abiertas las heridas provocadas por más de medio centenar de muertes violentas de mujeres registradas en Bolivia en lo que va del año. Muchos nombres apenas son re-cordados, porque son de víctimas anónimas, mujeres desconocidas para la mayoría de los bolivianos y por esto también, más sufridas. Otros nombres todavía dan vueltas por las redes sociales, gritados por bocas que piden justicia, como son los nombres de Hanaly Huaycho, o el de Sara Hochsttater, o el de Len-ny Flores, todas ellas muertas con una violencia absurda a manos de quienes debían amarlas y proteger-las, sus compañeros de vida. Así, no puedo celebrar nada...

Page 4: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

4

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

EN DEBATE

Una alerta oportunasobre InternetLa filtración del proyecto de Decreto Supremo que alista el Gobierno sobre Punto de In-

terconexión de Tráfico devela intenciones de censurar Internet, asegura el movimiento ‘Más y Mejor Internet para Bolivia’, del que Mario Durán Chuquimia se hace eco.

Hace unas horas, un miembro de Anonymous Bolivia pu-blicó capturas de pantalla de

un documento en el grupo de Face-book perteneciente al colectivo “Más y Mejor Internet para Bolivia”, cuya redacción permite apreciar el proyec-to de Decreto Supremo que, presunta-mente, establecería las características del Punto de Interconexión de Tráfico (PIT) en el territorio del Estado Pluri-nacional de Bolivia.

Para saber de qué se trata, es im-portante conocer qué es un Punto de Interconexión de Tráfico (PIT). Un punto neutro (del inglés IXP, Internet Exchange Point, también llamados NAP -Network Access Point o Punto de Acceso a la Red) es una infraes-tructura física a través de la cual los proveedores de servicios de Internet (ISP) como Entel, TIGO, VIVA, AXS, Comteco, COTAS y otros intercambian el tráfico de Internet entre sus redes.

El propósito principal de un punto neutro es permitir que las redes se in-terconecten directamente a través de la infraestructura, en lugar de hacerlo a través de una o más redes de terce-ros. Las ventajas de la interconexión directa son numerosas, pero las razo-nes principales son un menor coste, baja latencia y mayor ancho de ban-da disponible para el tráfico de datos.

Dicho tráfico, el cual pasa a través de esta infraestructura “neutra”, no tendría que ser facturado por cual-quiera de las partes, a diferencia del tráfico hacia el proveedor de conec-tividad de un ISP.

La interconexión directa, a menu-do situada en la misma ciudad que ambas redes, evita la necesidad de

“Uno de los riesgos que involucra esta medida técnica está en la eventual censura en el acceso a ciertos contenidos de Internet en desmedro de la población, aspecto que con la promulgación del Decreto se consolidaría como atribución de Entel. El principal exponente de este problema es China.”

que los datos viajen a otras ciudades (potencialmente hacia otros conti-nentes, como sucede en el caso bo-liviano donde los paquetes de datos van hacia Estados Unidos y luego regresan al país) para pasar de una red a otra, lo que reduce la latencia.

La tercera ventaja –la veloci-dad– es más notable en las áreas que tienen poco desarrolladas las conexiones de larga distancia (1). Sin embargo, muchas de estas ca-racterísticas están condicionadas al beneficio directo en cuanto a re-caudación económica y administra-ción, en favor de la Empresa Nacio-nal de Telecomunicaciones (Entel), tal como se aprecia en el documento filtrado que muestran las fotografías

que acompañan este artículo y que puede ser leído y analizado en el si-guiente enlace:

https://www.facebook.com/groups /ads lbo l iv ia /pe rma -link/618940101466169/.

Tras su minuciosa revisión, los miembros del colectivo “Más y mejor Internet para Bolivia” plan-tearon varias observaciones sobre su contenido, llegando a concluir lo siguiente:

Primero. Entel quedaría como el encargado directo de administrar el PIT y las salidas internacionales, ya que actualmente es el opera-dor dominante en telefonía –no en provisión de servicios de internet-; esto implica una capacidad de ad-ministración total y monopólica que afectaría la competitividad de los otros proveedores del servicio de internet, lo cual derivaría inclusive en un tácito amedrentamiento a la libertad de elección en los servicios para el usuario final, lo cual no es nada democrático.

Segundo. Uno de los principales riesgos que involucra esta medida técnica consiste en la eventual cen-sura en el acceso a ciertos conteni-dos de Internet en desmedro de la

El movimiento Por más y mejor Internet en Bolivia accedió al proyecto de decreto supremo que estudia el Gobierno para controlar la informa-ción que circula por las redes sociales y sitios en Internet. Una tendencia que se repite en varios países del mundo y que refleja control político.

MarioDurán

Chuquimia Periodista

población en general, aspecto que con la promulgación de este Decre-to Supremo se consolidaría en una atribución de Entel. El principal ex-ponente de este problema es China, cuyo gobierno el año pasado censu-ró el acceso completo al buscador Google y sus servicios (Gmail, Maps, etc.) (2) por motivos que –sin justificación plena– vulneran la libertad al acceso de información, expresión y garantías constitucio-nales básicas emergentes de los derechos humanos. De la misma manera, Irán busca desconectarse completamente de la red para tener una Internet “nacional” para cortar la influencia del mundo Occidental y evitar las protestas en busca de la democracia (3).

Tercero. Existe el riesgo de una desconexión total de la red. En dis-tintos países, el gobierno ordenó “apagar” el Internet para frenar las protestas, tal como aconteció al otro lado del mundo en la denominada “primavera árabe”, evitando el co-nocimiento de hechos históricos que cambiaron totalmente las lec-turas en la distribución del poder constituido [4][5]; y si en Bolivia un único operador controlará las

Page 5: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

5

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013

Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

EN DEBATE

salidas internacionales y el PIT, tras un sometimiento pleno a las nor-mas de derecho administrativo que rigen la cosa pública, “desconectar el Internet” en Bolivia se convierte en un supuesto muy fácil tanto legal como técnico.

Cuarto. Al parecer, se pretende cobrar una tarifa discrecional por la interconexión a los otros operado-res en función a su tráfico cursado; esto quiere decir que los costos se elevarán para las cooperativas tele-fónicas y empresas. Se debe tener presente que una de las causas de los elevados costos de telefonía es precisamente por el costo de inter-conexión, el cual representa el 50% del valor que pagamos por cada mi-nuto de llamada.

Quinto. El Artículo 2º del proyec-to de Decreto Supremo pone límites a los alcances y beneficios de la tele-fonía VoIP, tal como fue desarrolla-da e implementada en el resto de los países, toda vez que otorga a Entel la administración de los nodos de salida internacional, lo cual implica también la potestad tarifaria mono-pólica que se le estaría otorgando, permitiendo el estancamiento en el uso de esta tecnología en favor de la telefonía móvil, la cual le ha venido reportando pingües ganancias a cos-ta del bolsillo del ciudadano común, quien en su ignorancia sigue finan-ciando altos costos por paupérrimos servicios.

Sexto. Los Artículos 153º y 154º del Reglamento General de la Ley de Telecomunicaciones y TICs, aún vigentes, establecen con clari-dad las características del Punto de Interconexión de Tráfico (PIT) (6), estableciendo que será utilizado para interconexión dentro el territorio na-cional, no limitando la capacidad de los ISPs para tener conexiones inter-nacionales propias, dejando única-mente a definición de una resolución ministerial expresa las características meramente técnicas.

Con carácter preventivo y ad-virtiendo las anormalidades e in-congruencias con las garantías constitucionales, se envió un correo electrónico a autoridades del Vice-ministerio de Telecomunicación (VMTEL) y de la Autoridad de Regulación de Transportes y Te-lecomunicaciones (ATT) para que mediante comunicado oficial hagan expresa su posición sobre las carac-terísticas técnicas del PIT y la neutra-lidad de red que tendrían que ser im-plementadas a nuestro ordenamiento jurídico nacional.

Neutralidad de red, ¿que es? Es el principio de que los proveedores de Internet (ISPs) y el Gobierno de-ben tratar todos los datos de Internet equitativamente, sin discriminar, ni limitar o bloquear datos por el tipo de contenido, usuario, plataforma, medio de acceso, etc.

¿Porqué es importante la neutra-lidad de la red? La libertad de ex-presión es un derecho fundamental en el desarrollo de las sociedades contemporáneas. La red, como he-rramienta de comunicación, difusión e interacción, no puede ni ha de estar controlada por el gobierno, ya que esto supondría una merma sobre la capacidad de los individuos a expre-sarse libremente, ser críticos con las voces oficiales y emprender accio-nes legales sobre posibles violacio-nes a los derechos humanos.

El acceso a la información es la base sobre la que se fundamente la red. Ésta no se construye de forma jerárquica tradicional, eliminando la organización descentralizada para potenciar una lógica distribuida de creación y comunicación.

Debemos entender por tanto la red como una plataforma abierta, multiforme, con capacidad para servir a múltiples fines. Un campo de acción colectivo pero también individual, ya que es en la diversi-dad donde encontramos la riqueza de voces, sean estas o no críticas con los poderes oficiales, la cual evidentemente requiere una regula-ción propia pero consensuada, res-petuosa de los derechos humanos y que tenga jerarquía de ley, garanti-zándose así el control del procedi-miento legislativo.

(*)Este documento fue elaborado colaborativamente por los miembros del grupo ‘Más y mejor internet para

Bolivia’, que reúne a 11.449 activistas que promueven la mejora de las condi-ciones del acceso a Internet en Bolivia.

DatosNotas:[1] http://es.wikipedia.org/wiki/Pun-to_neutro[2] http://www.elmundo.es/elmundo/2012/11/10/navegan-te/1352537706.html[3] http://www.infobae.com/notas/584517-Iran-se-desconecta-del-mundo-occidental-y-crea-su-propia-internet.html[4] http://www.lanacion.com.ar/1345356-por-los-disturbios-egipto-se-desconecta-de-internet[5] http://www.publico.es/446658/al-asad-desconecta-a-siria[6] https://docs.google.com/file/d/0B-y4rmFH2xjtY2s5VFd6amZheWs/preview Más información en:Facebook: https://www.facebook.com/groups/adslbolivia/https://www.facebook.com/mejorin-ternetyaTwitter: http://twitter.com/adslboliviaInternet: http://www.masymejorinter-net.org.bo

¡Ajá! ...la semana en joda

Entre la venida de Arjona y los via-jes de Evo: el problema no es que Arjo-na venga, dicen en el “feis”, el problema es que lo van a ir a ver. Igual, el problema no es que Evo viaje, es que “lo tienen que ir a escuchar”.

Evo dijo: “Algunos cancilleres mas-can coca en su estado natural”. Pregunto nomás, porque no sé: los otros, ¿la consu-men ‘industrializada’ y por la nariz?

Momificaron (embalsamaron) a Chávez, con lo que se convierte en la primera momia del Siglo XXI. Momia muerta, porque Fidel es la primera y úni-ca viva…

Dicen que el examen de ADN dio 99.99% de certidumbre de que la chalo-na encontrada bajo un árbol es de Clavi-jo. Pese a ello, se dice que el caso no está cerrado. ¿Será porque el 0.1% faltante anda por frontera con Perú? Y a quienes preguntan dónde están los dientes del muerto, les digo: sencillo, se quedaron en el 0,1% ¡já!

Mi amigo relaciona todo con políti-ca: ‘¿ADN, cómo le van a hacer examen de ADN si ADN se murió con Banzer? ¡Claro que tiene que salir mal!’ (qué me voy a poner a explicarle..)

Elección del nuevo Papa: salió humo negro… “No se confundan, no eligieron al Cardenal africano”, recomendaron en varios “twiters”.

Publicado en Página Siete: el marido la dejó y ella decidió crear un sitio de citas on line. El sitio es para judíos y es, por su-puesto, gratuito (ella sigue soltera).

Carlos ValVerde BraVo

“El 99.8% de los malvinenses apoya la soberanía británica”, dice la noticia. ‘¡Já -dijo mi amigo- más votos tuvo el ADN de Clavijo!’ (…no entiende, qué le vamos a hacer).

Cerraron un local que vendía pollo con ‘heces de rata’, ¿y los que tienen chu-lupis en sus instalaciones? No, esos van a tener que esperar, están buscando mierda de rata, ¿se entiende?

"La gente consume alimentos en cualquier sitio y sin importar la higiene”, dice el titular. Claro, la Alcaldía se preocupa por eso, ¿o no?

Leí en el periódico: “Se carga solo, es barato y fácil de manejar”. Pensé que hablaban del Poder Judicial… ¡había sido un nuevo celular!

Mostraron fotografías de Marcelo Soza con la red de extorsión en una fiesta. Dicen que él, al verlas, pidió una copia de cada una (¿congraciándose por si llega a vivir con ellos?).

Azkargorta no se conforma con ju-gar bien. Ahora que explique, la selección siempre juega mal y pierde. Si juega mal y llegara a ganar, ¿no vale?

Edith González, de la novela Cora-zón Salvaje, dijo que usa una doble para las escenas eróticas, aseguró que le “da vergüenza”. Claro, dizque también habría dicho “bueno, si ven celulitis y flacidez, ¡no soy yo!”

Selena Gómez: ‘Me pongo nerviosa y sudo en la alfombra roja’. “¡Vaya! -dijo mi amigo- ¿desfila o hace el amor?”

Los futuros astronautas pilotarán con el poder de la mente. Misses, ¡abste-nerse!

Jeannine Gonzales volvió a realizar una sesión de fotos semidesnuda. La re-dondita y rubia platinada apenas se puso la bandera tricolor para tapar parte del cuerpo semidesnudo. ¡Protesto! ¿Cuándo vamos a saber si tiene o no pezón?

Page 6: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

6

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

ESTADO DE DERECHO

socialmente “tolerado”.Celebro “la marcha de las putas”

que, recorrió desde Canadá varios países del mundo respondiendo con coraje a un policía de ese país que dijo: “las mujeres deberían dejar de vestirse como putas para evitar violaciones”, como si la violación fuese resultado de la “provocación” de las mujeres hacia seres irracionales incapaces de controlar sus más elementales “instintos”. Celebro la presencia de cientos de miles de hombres en esas marchas, hombres que también se sienten ofendidos por semejante exabrupto, hombres que se saben hombres en otra dimensión de hombría: la que rechaza la violencia hacia las mujeres como mandato masculino inexcusable.

En resumen, celebro este 8 de marzo más allá y al margen de las voluntades políticas de los poderes constituidos, porque cada vez que la gente se levanta para repudiar al patriarcado en cualquiera de sus expresiones, cada vez que se pronuncia en contra del “sentido común” de su naturalización, siento que habito una sociedad humana más humana, aunque sólo sea “a ratos”.

Es fácil que a una boliviana se le borre la sonrisa si su mirada sobre el 8 de Marzo se estanca en las actuaciones de autoridades y funcionarios públicos, dice Jenny Yberna-garay. Por eso, ella invita ahora a recuperar las conquistas alcanzadas por las mujeres.

Durante muchos años, al aproximarse la fecha del “Día Internacional de las

Mujeres”, he puesto la mirada en los avances y retrocesos de las políticas públicas a favor de las mujeres. Las más de las veces, me ha quedado un regusto amargo en la boca porque, pese a las promesas, los compromisos y los discursos, el balance ha arrojado un resultado, por decir lo menos, mezquino.

Esta mirada tiene que ver con el contexto de la declaración de esta fecha conmemorativa, proclamada por la Organización de las Naciones Unidas para promover, en el ámbito de los países miembros, compromisos internacionales de políticas públicas orientadas a la eliminación de todas las formas de discriminación en contra de las

mujeres. En consecuencia, creía que había que evaluar, año tras año, en qué medida los gobiernos del mundo – y en particular el de Bolivia– estaban avanzando en dirección al cumplimiento de esos compromisos.

Este 8 de marzo quiero alejar mi mirada de los estados y de los gobiernos, en particular del gobierno boliviano, cuyo principal acto programado para la fecha es la promulgación ¡al fin! de la “Ley Integral para Garantizar a las Mujeres una Vida sin Violencia”, asunto que ya ha generado gran controversia y al que no me referiré en esta oportunidad. Quiero alejarme de ahí para volcar mi mirada en la gente, en

las mujeres de mi país y del mundo, para evaluar en qué medida este 8 de marzo nos significa algo.

Creo que para la mayoría de las mujeres del mundo esta fecha no representa nada, tal vez ni siquiera sepan que en esta fecha se conmemora “nuestro día”, sumergidas como están en las condiciones de pobreza, de sumisión al poder patriarcal, de inaudita y horrorosa violencia, sin demasiada capacidad de reacción, quien sabe por simple instinto de supervivencia. Condiciones sostenidas por esos mismos gobiernos que tan fácilmente suscriben compromisos como los olvidan o postergan y por el propio sistema de las Naciones Unidas que –a más de emitir “recomendaciones”– poco o nada hace o puede hacer para exigirles el

cumplimiento de los compromisos retóricos que promueve. ¿O es que acaso alguien puede dar testimonio de que la mencionada organización ha sancionado alguna vez, de alguna manera aunque sea “simbólica”, a algún país que los incumple?

Sin embargo y a pesar de ello, creo que también hay motivos de celebración. En lo particular, celebro este 8 de marzo recordando las diversas manifestaciones que se sucedieron en nuestro país y en el mundo durante el último año, manifestaciones de repudio a la violencia en contra de las mujeres, de reivindicación de nuestros derechos, de rechazo a cuanta forma

de discriminación se hizo evidente y celebro, sobre todo y ante todo, la presencia de mujeres y hombres jóvenes en esas manifestaciones. Las “locas” de antaño ya no estamos solas, hay una nueva generación que levanta banderas con identidad y simbolismo propio, con convicción y entusiasmo propio, con formas y contenidos que señalan un camino de avanzada.

Celebro que el mundo entero condene a los talibanes que osaron agredir de manera tan brutal a la pequeña-inmensa Malala Yusafzai, por atreverse a exigir el derecho a la educación para todas las niñas pakistaníes, y celebro su vida salvada de manera prodigiosa. Repudio con todas mis fuerzas la violación y posterior fallecimiento de Jyoti Singh Pandey, en la India el pasado diciembre, al mismo tiempo que celebro con las mismas fuerzas la reacción de la gente que enrostró al estado y a la sociedad hindú su indiferencia ante hechos cotidianos como ese. Celebro el despertar de una sociedad que dejó de mirar la violación como algo inevitable, “culturalmente” aceptado,

“Celebro este 8 de marzo... porque cada vez que la gente se levanta para repudiar al patriarcado en cualquiera de sus expresiones, cada vez que se pronuncia en contra del ‘sentido común’ de su naturalización, siento que habito una sociedad hu-mana más humana, aunque sólo sea a ratos”.

JennyYbernagaray

OrtizPsicóloga

Otra mirada y otro sentir sobre el 8 de marzo

Page 7: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

7

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013

Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

ESTADO DE DERECHO

Navy Pillay sabe muy bien de qué habla cuando invoca al mundo a salir de la apatía frente a toda forma de violencia hacia las mujeres. Una realidad que golpea no solo a mujeres pobres y a las que viven en países subdesarrollados, sino también a las otras.

El pasado mes de febrero, en el altiplano de Papúa Nueva Guinea, una joven de 20 años

y madre de dos hijos fue desnudada y torturada hasta hacerla confesar que practicaba la brujería. Luego, fue que-mada viva en el vertedero local frente a una multitud de aldeanos.

Aunque horroroso, este evento no resulta inusual. La Comisión de Re-formas Legales y Constitucionales de Papúa Nueva Guinea estima que al menos 150 personas acusadas de brujería –la mayoría de ellas mujeres– son asesinadas cada año solamente en una de las 20 provincias del país. An-tes de ser asesinadas, muchas de ellas sufren torturas prolongadas, públicas y generalmente de carácter sexual. Dos circunstancias hicieron excep-cional al asesinato del mes pasado: desató la indignación pública, y dos presuntos responsables del crimen fueron arrestados.

El mes pasado, tres hermanas de cinco, nueve y once años que vivían en una remota aldea en la India fue-ron violadas, asesinadas y lanzadas a un pozo. Inicialmente las autori-dades no reaccionaron, pero luego de que los aldeanos bloquearan una carretera en protesta, la Policía inició tardíamente una investigación.

Hace un mes en Sudáfrica, una joven de 17 años fue encontrada horriblemente mutilada en un edi-ficio en construcción. Había sido violada por un grupo de personas, y había muerto horas después. Los sospechosos de este ataque fueron identificados y arrestados tras una inusual ola de protestas.

En semanas recientes, en tres países con poco en común, la indi-ferencia generalizada hacia la vio-lencia contra la mujer ha generado consternación pública, al menos mo-mentáneamente. Las demandas pú-blicas para que se adopten medidas que pongan fin a las atrocidades tan frecuentemente padecidas por mu-jeres y niñas han inspirado a líderes de Gobierno a realizar importantes declaraciones de intenciones, e inci-tar a aquellas policías apáticas a que investiguen estos hechos.

La indignación es contagiosa. La violación múltiple y asesinato de una estudiante de fisioterapia de 23 años en Nueva Delhi en diciembre pasado desató lo que podría convertirse en un cambio radical en la actitud pú-blica hacia los crímenes de violencia

“Necesitamos sacar al mundo de este letargo y ver la realidad: cada minuto de cada día, en todos los continentes, mujeres y niñas son violadas y abusadas, víctimas de trata, torturadas y asesina-das. Esto no sucede sólo en conflictos en lugares lejanos. Pasa también en sofisticadas capitales...”

sexual en la India. Esta ola de recha-zo se ha expandido no sólo dentro de India y sus países vecinos, sino tam-bién más allá de la región, incluyen-do a Sudáfrica, donde la violación de Nueva Delhi fue citada por activistas que cuestionaron por qué la violen-cia sexual crónica en su país motiva tan poco rechazo público.

La violencia contra la mujer es una de las violaciones a los derechos hu-manos más generalizadas. Y sin em-bargo, constantemente las autoridades responsables de proteger a las víctimas y perseguir estos crímenes enfrentan estos actos con indiferencia.

No basta sólo con legislar. Casi todos los países en el mundo poseen algún tipo de marco legal al respecto. Los Gobiernos son conscientes de que el derecho internacional les obli-ga a prevenir estos crímenes traba-jando en eliminar la discriminación subyacente hacia mujeres y niñas. Sin embargo, en muchos países las y los políticos, las fuerzas policia-les, la justicia, hombres comunes –y mujeres también– colectivamente se encogen de hombros y miran hacia otro lado cuando se enteran de vio-laciones y otros crímenes sexuales o basados en género.

La ira temporal no es suficiente. Las investigaciones serias de los ac-tos de violencia contra la mujer de-berían convertirse en la norma, y no sólo algo que las fuerzas policiales se vean forzadas a realizar cuando los medios destacan un caso particular.

Necesitamos sacar al mundo de este letargo y ver la realidad: cada minuto de cada día, en todos los con-tinentes, mujeres y niñas son viola-

das y abusadas, víctimas de trata, tor-turadas y asesinadas. Esto no sucede sólo en conflictos en lugares lejanos. Pasa también en sofisticadas capita-les, así como en pequeñas ciudades y aldeas, e incluso en la casa de al lado.

En enero, el informe del Comité Verma en India propuso reformas ra-dicales, incluyendo severos castigos para la violación marital, violación doméstica y violación en relaciones del mismo sexo; demandando a los oficiales de policía a registrar cada caso de violación, y asegurándose de que quienes no lo hagan enfrenten serias consecuencias; garantizando la rendición de cuentas de personal po-licial y militar por violencia sexual; castigando con prisión delitos como el acoso o el voyeurismo; cambiando el humillante protocolo de exámenes médicos que experimentan las vícti-mas de violación; desarticulando los consejos locales extrajudiciales, que a menudo emiten edictos contra las mujeres; y llevando a cabo reformas legales y electorales para garantizar que personas culpables de crímenes no puedan postular a cargos políticos.

Estas recomendaciones requieren

de un seguimiento serio y sostenido. Además, pueden servir como mode-lo para otras situaciones.

Durante el último mes, el mundo ha sido testigo de cómo los movi-mientos callejeros pueden ayudar a buscar justicia para las tres hijas de un aldeano pobre en la India; para una adolescente de un suburbio de Ciudad del Cabo; para una joven acusada de “embrujar” a su vecino en las remotas montañas de Papúa Nueva Guinea; y para una estudian-te arrojada desnuda desde un bus en movimiento en la capital de la India.

Debemos impedir que esta aten-ción se desvanezca. Necesitamos presionar más a los y las líderes po-líticos para obtener cambios serios y duraderos, como aquellos propues-tos por el Comité Verma. Cada país debe encontrar la solución más apro-piada para asegurar la investigación y aplicación de las sanciones perti-nentes por los crímenes sexuales y basados en género. No cabe duda que continuar dando la espalda a lo que está ocurriendo con millones de mujeres alrededor del mundo no es la respuesta.

Violencia contra las mujeresNavi PillayAlta Comi-sionada de la ONU para los Derechos Humanos

Page 8: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

8

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

El Día de la Mujer es una fecha conmemorativa que recuerda la tragedia ocurrida en la fábrica Triangle Shirtwaist de Nueva York, en 1911, en la que murieron casi doscientas trabajadoras. Y, también, otros hitos históricos que marcan la lucha de las mujeres.

¿Qué hay detrás del Día de la Mujer?

“Para algunos, la fecha decisiva para la imposición del Día Internacional de la Mujer fue en 1911, en la que cientos de mujeres murieron en un incendio en una fábrica textil reclamando por sus derechos. Pero lo cierto es que antes de ese año y después se dieron otros acontecimientos importantes...”

No solo es un día, como muchos piensan, para los regalos y las atenciones

para las mujeres, sino también pa-ra recordar los hechos históricos que marcaron la pauta para esta celebración. Una historia de va-lentía, de perseverancia y de con-vicción que ha hecho que a través de los años, cada 8 de marzo se rinda un homenaje a todas las mu-jeres del mundo.

Desde los siglos XIX y XX, las mujeres empezaron a protestar por sus derechos. En la historia de esta fecha, las protagonistas fueron aquellas, que en el sector

industrial, comenzaron a reclamar por una mejor calidad de trabajo, de salario, de horarios y de trato. Con el tiempo, no solo las mujeres pedían mejores condiciones, sino también una inclusión en las acti-vidades sociales, políticas y en ge-neral, una igualdad de derechos y de oportunidades, como por ejem-plo, el derecho al voto.

Para algunos, la fecha decisiva para la imposición del Día Interna-cional de la Mujer fue en 1911, en la que cientos de mujeres murieron en un incendio en una fábrica textil re-clamando por sus derechos. Pero lo cierto es que antes de ese año y des-pués se dieron otros acontecimien-tos importantes que influyeron en la determinación oficial de este día.

Según la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultu-ra) y la Organización de las Nacio-nes Unidas (ONU), estas son las fechas que marcaron la historia de esta celebración:

1909: El día 28 de febrero, te-niendo en cuenta una declaración del Partido Socialista de los Esta-dos Unidos de América, se celebró en todo el país el primer Día Na-cional de la Mujer.

1910: Después de la prime-ra Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, celebrada en 1907, en Copenhague (Dinamar-ca), cientos de mujeres se reunie-ron en la segunda versión de esta conferencia y decidieron organizar anualmente una jornada de la mu-jer teniendo como objetivo refor-zar su lucha por obtener el derecho al voto universal.

1911: Teniendo en cuenta la decisión tomada en Copenhague, en este año se celebra el Día Inter-nacional de la Mujer en numero-sos países europeos y en Estados Unidos.

1911: El 25 de marzo, más de 140 jóvenes trabajadoras, la mayo-ría inmigrantes italianas y judías, murieron en un incendio en la fá-

cuando la ONU reconoció el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer. Desde esas fechas y hasta la actualidad, este día ha ad-quirido una dimensión mundial pa-ra las mujeres, pues ha significado una reivindicación de su papel y ha traído oportunidades que antes no tenían. Además de ser una fecha para homenajearlas, es una reafir-mación de la importancia de ellas en la sociedad y en la cultura.

En Colombia, por citar un ejem-plo, la participación de las mujeres en la política ha ido en ascenso, aunque faltan retos por superar. De acuerdo al boletín de 2011 ‘La par-ticipación política de las mujeres en Colombia: Avances, retos y aná-lisis sobre la presencia y acceso de las mujeres a los espacios de deci-sión en el país’ de la Alta Conseje-ría Presidencial para la Equidad de la Mujer, desde que las mujeres ob-tuvieron el derecho al voto, el de-sarrollo legal en el país ha tratado de incluirlas en cargos de decisión. “En primer lugar, la Constitución de 1991 no solo reconoció la igual-dad entre hombres y mujeres, sino la obligación de garantizar la ade-cuada y efectiva participación de la mujer en los niveles decisorios de la Administración Pública, así como la aplicación de la equidad de género como principio rector de los partidos políticos”.

Así, según información recopi-lada por el Departamento Admi-nistrativo de la Función Pública (DAFP), vemos en la actualidad que más del 30% de los cargos pú-blicos de las entidades del orden nacional son ocupados por muje-res. Y no solo en el ámbito político, también el económico, artístico, cultural, educativo, entre otros, han sido escenarios para que las mujeres tengan más participación y confirmen sus capacidades y la constante lucha que se ha visto re-flejada a través de la historia.

Esta fecha no es solo una excu-sa de felicitación, sino también un momento para seguir teniendo en mente el poder que tiene la mujer y su convicción cuando de conseguir sus ideales se trata.

brica Triangle en la ciudad de Nue-va York. Este suceso tuvo grandes consecuencias en la legislación laboral de los Estados Unidos, y en las celebraciones posteriores del Día Internacional de la Mujer se tuvieron presente las condiciones laborales que condujeron a este desastre.

1913 a 1914: En vísperas de la primera guerra mundial, surgieron movimientos en pro de la paz y las mujeres rusas celebraron su primer Día Internacional de la Mujer el úl-timo domingo de febrero, organi-zando reuniones clandestinas.

1915: En medio de los estragos de la Primera Guerra Mundial, se dio en La Haya (Países Bajos), una gran reunión de mujeres el 15 de abril. En esta participaron más de 1.300 mujeres originarias de 12 países.

1917: Como reacción a los 2 mi-llones de soldados rusos muertos en la guerra, las mujeres escogie-ron el último domingo de febrero para declararse en huelga. Las tra-bajadoras salieron a la calle y pro-clamaron una protesta general el 23 de febrero, según el calendario juliano utilizado en Rusia, o el 8 de marzo, según el calendario utiliza-do en otros países. Por esta razón la celebración oficial se da en marzo.

Estos fueron los primeros hitos de la historia que marcaron la pau-ta para lo que hoy en día se cele-bra, Pero fue finalmente en 1977

ESTADO DE DERECHO

Page 9: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

9

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013

Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

tica precisamente en estas fechas o cuando conviene políticamente abordar el tema.

Sin embargo hay algo que es imposible detener, me refiero a la fuerza, el coraje de muchas muje-res que venciendo las adversidades incluso las que se presentan en el seno familiar, han iniciado y con-tinúan desarrollando una lucha militante, tenaz y consecuente en aras de consolidar sus derechos, ellas se enfrentan todos el tiempo contra los persistentes mecanis-mos de injusticia que las atropelle, combaten a los “usos y costum-

bres” que pretenden justificar la violencia doméstica, interpelan a autoridades públicas que desde el poder hacen gala y ostentación de su mentalidad patriarcal.

Ellas nos están mostrando el camino por donde debemos traji-nar hombres y mujeres para cons-truir sociedades más justas, que permitan una convivencia sobre la base de la igualdad de derechos y oportunidades para todos y todas. En esas mujeres, en el referente altruista de su accionar cotidiano están representadas las personas que aspiramos un mundo mejor, en ellas está concentrada la digni-dad de un pueblo y es para ellas –las mujeres del mundo y las bo-livianas- mi sincero homenaje en este 8 de marzo. Gracias por su lucha y por enseñarnos con senci-llez e inteligencia cómo debemos actuar para hacer realidad nues-tros derechos humanos.

La tutifruti...A mí que pocas cosas ya me sorpren-den, me ha sorprendido, y mucho, la tozuda insistencia de los masistas en imponer el cambio de nombre del aeropuerto de Oruro. Hasta han ofre-cido darle al difunto Juan Mendoza un feriado, a cambio de que ceda a Evito el privilegio de darle nombre al aeropuerto. Ah, no… pero dizque no es capricho de Evito…

TelefonomaniáticosParece ser el nuevo mal de dirigentes vecinales. Digo, después de conocer el escándalo que estalló en el Comité de Vigilancia de El Alto por un gasto de 157.000 bolivianos en llamadas tele-fónicas hechas el primer semestre de 2012. ¿Tanto llaman los dirigentes?, ¿a quién? Vaya a saber uno, solo que me picó el bichito de la curiosidad por conocer cómo andamos en casa…

Guerra de odiosBueno, hasta que por fin escucho a alguien decir algo más cercano a la ver-dad sobre la crisis que arrastra la ‘institu-cionalidad’ cruceña: ‘Acá no hay guerra de poder, sino guerra de odios’, ha de-clarado la diputada Jessica Echeverría a SemanarioUno. Miechica, conociendo los detalles de las peleas, parece que así nomás es, ni qué telenovela venezolana

¿Palacio o teatro?En vez de pensar en cambiar el nombre del aeropuerto de Oruro, el Gobierno debería proponer cambiar el nombre al 'Palacio de Justicia', como aun se le llama al edificio del Poder Judicial en Santa Cruz. Que se llame teatro o circo (perdón a ambos por el mal uso de sus nombres), porque lo que allí hay a diario no es más que una cadena de malas teatralizaciones, no para sancionar, sino para liberar a delincuentes de toda laya.

...y es 'plurinacional'Una aclaración urgente: ese cambio de nombre al Poder Judicial tiene que ser de alcance plurinacional, habida cuenta de que el circo o teatro de mala cala-ña está, incluso, comandado desde La Paz. Así quedó demostrado en el caso Ostreicher y la red de corrupción denun-ciada: la red era manejada por 'super-fiscales' llegados a Santa Cruz expresa-mente desde la sede de gobierno.

¿Y 'Ternurita'?No tengo noticias de doña Ternurita desde que estuvo muy contenta en el corso carnavalero de Santa Cruz de la Sierra. ¿Será que a Alvarito no le agra-da mucho andar con su 'media naran-ja' o acaso es ella que le hace lance a su amado? O, quien sabe, adelantó estaciones y ya está invernando...La frase“Algunos ex viceministros y constituyen-tes del MAS son enemigos del Gobierno y del MAS. Hemos llegado a la conclu-sión de que estos compañeros, como Al-maraz y Chato Prada, son de la llamada clase media.” / Presidente Evo Morales

Ya estamos en el siglo XXI, conviviendo en un mundo supuestamente

civilizado, donde la ciencia, la tecnología, el internet y la televi-sión regulan nuestras relaciones sociales, escenario en el cual un abanico de instrumentos jurídicos nacionales e internacionales con-sagran nuestros derechos funda-mentales. El siglo XX proclamó la Declaración Universal de los Derechos Humanos y un conjunto de convenios que reivindican los derechos de la mujer, las constitu-ciones de diferentes países mos-trando una orientación progre-sista nos hablan de igualdad de derechos y de igualdad de género, prohibiendo además todo tipo de discriminación o actos de violen-cia contra la mujer.

Bajo ese escenario parecería que todo está resuelto y que vivi-mos en verdaderos paraísos don-de por fin los diferentes sectores vulnerables de la sociedad, entre ellos las mujeres, encontraron el espacio ideal para desarrollar sus potencialidades, porque supuesta-mente hay un Estado que las pro-tege y le garantiza una vida digna.

Sin embargo, en el ámbito de la realidad fáctica advertimos con enorme preocupación y ver-güenza ajena que, no obstante la cantidad de instrumentos jurídi-cos protectores de los derechos de la mujer, los estados y socie-dades patriarcales aún perviven, permanecen intactos, enraizados muchas veces en los denomina-dos “usos y costumbres” o en las estructuras jurídicas de algunos Estados como los árabes, para permitir las prácticas machistas más indignantes que en sus efec-tos someten a las mujeres a una condición de sub ciudadana o persona de segunda, con derechos muy limitados.

En ese orden de cosas, el mun-do no ha cambiado pese al Siglo XXI, porque los escenarios don-de se materializan un conjunto de atropellos están vigentes, la vio-

lencia doméstica y la impunidad de los agresores se mantiene firme y subsistente, lo mismo que la dis-criminación de género, la explota-ción laboral y el acoso sexual.

Es más, los Estados grandes y chicos muestran una alarmante ineficiencia y falta de sensibili-dad humana para combatir y ex-tinguir a las mafias organizadas que trafican con mujeres para someterlas a regímenes de ex-plotación sexual o prostitución forzada, que es lo mismo que convertirlas en esclavas moder-nas. La cosificación de la mujer, su utilización comercial, forma parte de la angurria de muchos grupos de poder económico.

En ese escenario descrito ca-be preguntarse ¿dónde están los derechos de las mujeres?, ¿en la estratósfera?, quizá en los escrito-rios de autoridades públicas que sólo se acuerdan de la problemá-

Un justo homenajeSi no fuera por el coraje que caracteriza a las mujeres en su lu-

cha por hacer valer sus derechos, ya hubieran sucumbido. Es lo que ve y valora el ex Defensor del Pueblo, Waldo Albarracín,

Waldo AlbarracínAbogado

“...advertimos con enorme preocu-pación y vergüenza ajena que, pese a la cantidad de instrumentos jurídicos protectores de los derechos de la mu-jer, los estados y las sociedades patriar-cales aun perviven, están intactos...”

ESTADO DE DERECHO

El Loro Colla

Page 10: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

10

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

ESTADO DE DERECHO

Un Barlamentos distinto es el que comparte ahora Winston Estremadoiro. ‘Sabro-so’ de leer, en cualquier caso. Está inspirado en un sueño ¿o pesadilla? en el que el Presidente Morales es protagonista. Ah, cómo hace falta un poco de humor…

Andaba confundido por esco-ger entre dos caminos, auto-censura o juicio por racismo,

calumnias o lo que fuera con tanto juez complaciente del régimen, sobre si Hugo Chávez estaba vivo por mo-dernos tubos o en convalecencia diná-mica. El embrollo se agudizó cuando coincidieron dos correos. Uno, con la nota de que habría tratado asuntos de su gestión durante ocho horas, con foto del bolivariano rozagante leyendo noticias entre sus dos hijas: ah, la magia del Photoshop… Otro, un filtrado dando cuenta que tiene pa-rálisis intestinal, huelga renal, dificul-tad respiratoria grave; metástasis en pulmones, acoplada a las que atacan

hígado, páncreas, riñones, intestinos y columna: no duraría siete minutos sin aparatos.

Entonces reír me sacudió el dia-fragma –cosa buena dicen los en-tendidos- con la carta del diablo a Chávez, transcrita por Claudio Na-zoa, que le hiciera acreedor a un pre-mio al periodismo humorístico y ojala ninguna pateadura por gamberros bo-livarianos. Recordando al Presidente besa-crucifijos, no me contuve y leí a mi esposa la parte en que Satanás le dice al dictador de Sabaneta “Pe-ro con lo que sí te botaste fue con la vaina esa de decapitar a la mamá del flaquito ese que, desde hace dos mil años, anda dando lástima clavado en una cruz y que me tiene ladillado con su mariquera del amor, el perdón y la tolerancia entre los seres humanos. En fin, hermanazo, ¡te las estás co-miendo!”.

“Desperté, sudoroso, cuando revoleaba el ava-ro íncubo verdoso en los cuantiosos regalos llunq’us que Evo ha acumulado, dizque para el museo en Orinoca... Cavilé que mi pesadilla no incluyó a la pereza, la envidia y la gula, pecados capitales que quizá el mandatario no carga...”

Debatí un dilema permanente de mi sardonia, riendo del diablo que palmea a Chávez: “no sé cómo lo lo-graste, sinvergüenzón, pero no tienes idea de cuánto lo disfruto, de cuánto placer malsano experimento al ver a cientos de niños durmiendo en la calle bajo cartones y periódicos, acuñados entre sí para evitar el frío... ¡chico, esa gente de verdad cree que tú la quie-res!… ¡Hermano, es que ni yo! ¡Tú eres grande! Esas maldades son tan tuyas, tan criollas, tan bolivarianas.” Tanto llenarse la boca en Bolivia con los indígenas, sentí pena por los “originarios” que deambulan, como siempre, pidiendo limosna en las calles. Me vino a la mente Giovanni Tomasi de Lampedusa y su magistral “El gatopardo”, donde el príncipe amenazado por las huestes de Gari-baldi es consolado por un contestata-rio, con una frase vigente casi siem-

pre, que cala hoy en nuestro país: “si queremos que todo siga como está, es preciso que todo cambie”.

Tal vez por tanto diablo en Oruro, donde la estatua de la Virgen ha em-pezado a resquebrajarse al apurar su inauguración para el carnaval; o quizá fue la indigestión al repetir el ají de co-lita que preparó un condiscípulo en un ágape de lasallistas de la Generación 61, apelativo con que disfrazamos la paradoja de que los más entusiastas no se graduaron, o la vida les llevó a otros rumbos. La cosa es que tuve pesadilla de pecados capitales acosando a Evo Morales. Ojala que no me acusen de misoginia por relacionarlas con dia-blos de sexo femenino.

Estuvo una presumida de ojos saltones, piernona pasada en carnes, pavoneándose en suntuosa capa alba y envuelta en humo blanco. Era doña vanagloria, también llamada sober-bia por unos y orgullo por otros. Le enrostraba a Evo los alardes tiahua-nacotas de sus dos investiduras indi-genistas, y los sellos de correo con su egregia figura en cada inicio de presi-dencia, que evidencian cuán anticons-titucional es su tercera reelección. ¿No es vanagloria dejarse adormecer por pringosos cantos de adulones que le hacen creer que es el nuevo Pacha-cuti? ¿Pensará que le hacen sabio sus doctorados honoris causa?

Apareció un ángel de las tinieblas

zapateando rabiosa en nubes amari-llas ante el contraste electoral de una ex modelo oficialista en Beni, pese a las estadísticas de alguna encuesta por encargo, que quizá leyó las pro-yecciones en coca. Era la ira. Antes había visitado al mandamás de Ori-noca, por los desaires de los indígenas del Tipnis al adelantado, no español sino plurinacional, que regaló abalo-rios y prometió una ‘tierra sin mal’ de motores de luz cautivos de envíos de diesel, amén de televisión, celulares y desfiles de modelos color canela, que pasados los veinticinco quizá acabarían preñadas o en catálogos de hoteles para viajeros.

Se vino encima la lujuria, libidi-nosa de máscara roja y redondeces voluptuosas, quizá infladas por un clérigo de la silicona. Acosó a Evo mostrando el calzón que él aseveró que sacaba a sus ministras en una car-navalesca copla machista. Le echó en cara que presumía de mujeres calien-tes, Evo Presidente y que las hembras aguantan, porque él no se cansa. Abo-feteó la recomendación a sus machos cocaleros que seduzcan a mujeres indígenas para doblegar la resistencia a la carretera asesina de la portentosa reserva natural del Tipnis.

Saltó al ruedo la avaricia. Vestía un revelador y escaso atuendo verde, quizá para evitar dispendios innece-sarios de tela. Santo Tomás de Aquino la describió como un pecado en el que el hombre desdeña los bienes eternos por las cosas temporales, siendo que en el mejor de los casos, uno se lleva puesto su mejor traje en el féretro de tránsito al otro mundo. Desperté, su-doroso, cuando revoleaba el avaro ín-cubo verdoso en los cuantiosos rega-los llunq’us que Evo ha acumulado, dizque para el museo de su memoria en Orinoca, que seguramente tendrá sucursal en el Chapare.

Cavilé que mi pesadilla no inclu-yó a la pereza, la envidia y la gula, pecados capitales que quizá el actual mandatario no carga en su haber. Es solo cuestión de tiempo, porque el poder corrompe, y el poder absoluto corrompe absolutamente.

Pesadilla de pecados capitales

Barlamentos

WinstonEstremadoiroAntropólogo

Page 11: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

11

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013

Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

FDSAFDAS

11

Page 12: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

12

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

A FONDO

¿Chávez for ever?La confirmación de la muerte del presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, genera

en Bolivia una especial atención, dada la influencia del líder venezolano en el gobier-no de Evo Morales. Edward Serrate plantea interrogantes y ensaya respuestas.

Muchos se declararon sor-prendidos de escuchar la voz entrecortada del

presidente de Bolivia, Evo Morales, al anunciar el fallecimiento del pri-mer mandatario venezolano, Hugo Chávez. Esa voz y esas lágrimas con-tenidas estaban cargadas de una nega-ción implícita de perder un referente, un ser apreciado... un guía político.

Pero veamos un poco lo que sig-nificó Chávez y su influencia en la carrera política de Morales y nos da-remos cuenta que los procesos polí-ticos de Venezuela y Bolivia se desa-rrollaron en una especie de simbiosis discursiva que hace entendible el desconsuelo y las interrogantes que ahora enfrenta el MAS.

El reciente deceso de Hugo Chávez ¿influirá en el panorama

político y económico de Bolivia? Sí y de manera muy profunda y no superficial como muchos afirman. Las repercusiones se verán desde la manera en la cual encararán la campaña en Venezuela el oficialista Nicolás Maduro y el opositor Hen-rique Capriles, y que seguramente tratarán de ser emuladas en Boli-via en las próximas elecciones de 2014, hasta la manera en la cual se manejaran los recursos del Estado, en una búsqueda desesperada de armonizar las conquistas sociales con las presiones de un mercado en permanente crisis.

Más allá de

la Muerte

“Bolivia tuvo mar… Yo sueño con bañarme en una playa bolivia-na”. Esta podría ser una frase suelta, una más de las que Hugo Chávez arengaría en sus multitudinarios discursos, pero no, no es una frase

“El enclave de la política venezolana en Bolivia no radica solo en la esfera de lo económico, sino tam-bién en lo discursivo y en lo fáctico –en cuanto a mecanismos de reproducción de poder- y eso lo sa-ben muy bien el Gobierno, que mira expectante el acomodo de piezas en el tablero político venezolan”

suelta. Aquella expresión de sueño vertida en el estadio Ramón Tahui-chi Aguilera de Santa Cruz de la Sierra, en el marco de la Cumbre Social –paralela a la XIII Cumbre Iberoamericana de 2003- podría in-terpretarse como el inicio formal de una relación de directa influencia de Chávez en la política boliviana.

Por aquel entonces, Evo Morales lograba, en su calidad de diputado y con la ayuda de Chávez- desviar a atención de los temas tratados dentro de la formalidad de la XIII Cumbre, y centraba la atención de la prensa internacional en lo que se avizoraba como el surgimiento de un movimiento que buscaría y pos-teriormente lograría transformar la administración del poder en Bolivia.

Los años precedentes a la elec-ción de Evo Morales como Presi-dente de Bolivia estuvieron mar-cados por la fuerte influencia de Chávez en el aparato de campaña

del MAS. La construcción discur-siva de la campaña de Evo Morales se elabora bajo los ejes centrales del cambio, la inclusión y el reconoci-miento real de la autodeterminación de los pueblos.

Indudablemente, el discurso en sí se construye en base a elementos particulares de la realidad boliviana, pero sin embargo encuentran en la influencia chavista la manera de ser articulados y, sobre todo, difundidos. Allí es precisamente donde ingresa la mano de Chávez, quien venía de un complicado proceso de transforma-ción del modelo venezolano. El apo-yo logístico venezolano se manifies-ta en un diseño de campaña centrado en dos ejes principales: Cambio y Evo Morales.

‘¡alCa, alCa... al Carajo!’

La cercanía de Morales a Chávez explica la forma de manejar la eco-nomía que ha desarrollado el MAS en el actual proceso de cambio. Ve-nezuela y su modelo de socialismo del Siglo XXI influyeron en el de-nominado socialismo comunitario desarrollado en Bolivia.

Es por ello que se puede entender la posición crítica que tuvo el gobier-no de Evo Morales al planteamiento del ALCA como alternativa económi-ca para los países de América Latina, proponiendo en su lugar la consolida-ción del ALBA como escenario de un

mercado en cual los Estados serían protagonistas de los nuevos procesos económicos, construidos a partir de la premisa de una redistribución justa y equitativa de la riqueza.

Sin embargo y en términos rea-les, las dificultades para consolidar la nueva propuesta de mercado en-cuentran su principal obstáculo en las débiles economías de los países miembros del ALBA.

La propuesta de nuevo modelo económico desarrollado en Bolivia se estructura, en términos generales, con bastantes similitudes al modelo bolivariano. La directa intervención del Estado en la economía, sustitu-yendo a la “mano invisible del mer-cado” y fortaleciendo el asistencia-lismo estatal a través de los bonos –en el caso venezolano, las misio-nes- hacen que un gran porcentaje de los recursos que ingresan al TGN sean destinado al gasto y no así a la inversión.

Sobre estas premisas, se conso-lida un modelo, que si bien da sa-tisfacción a las demandas sociales, también genera susceptibilidades en cuanto al gasto y la deuda interna, más aún cuando ambos países son mono productivos: el gas en el caso boliviano, y el petróleo en el caso de Venezuela.

Bolivia en la ‘era de Evo Mora-les’ ha preferido marcar su tenden-cia económica alrededor del modelo chavista, que dista mucho del mode-

Documento

El presidente venezo-lano tenía una relación muy estrecha con el primer mandatario de Bolivia, Evo Morales. Lo demostraba no solo en sus discursos, sino en sus manifesta-ciones de gran afecto por Evo Morales, como muestra la fotografía.

EdwardSerrate

PeñaPolitólogo

Page 13: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

13

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013

Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

El fin de un abominableredentor

El militar, político y autócrata Hugo Rafael Chávez Frías ha muerto. Lo hizo el mismo

día en que, hace seis décadas, perecía Iósif Stalin, ese monstruo con quien tuvo grandes coincidencias. Su an-helo de gobernar eternamente Vene-zuela no fue satisfecho. Terminó así una espantosa tentativa de salvar el mundo que, usando a Bolívar hasta la saciedad, lideró durante varios años. Dejo a otros seres que se ocupen de reconocerle virtudes; yo le identifico numerosos defectos, los cuales me impiden experimentar congoja por el deceso. Al contrario, recordando sus diversas arbitrariedades, siento alivio gracias a que una persona de tal cala-ña sucumbió. Los hombres infames no deben imponernos la obligación de respetarlos. Si ellos se esforzaron en desgraciar al semejante, agre-diéndolo porque rechazaba sus im-becilidades, no tienen que aguardar condolencias. La coherencia vuelve imposible que cometa esa hipocresía. Nunca elogiaré al sujeto que dinamitó la democracia, encarceló a los oposi-tores, apadrinó el terrorismo e incitó al odio entre sus conciudadanos.

Ante todo, debemos recordar a Chávez como un enemigo de la liber-tad. Ardoroso defensor del socialis-mo, le molestaba cualquier expresión de un valor tan fundamental como ése. Prefería soñar con la instauración de un reino en el que los individuos sean radicalmente siervos del Estado. Por enésima vez, se quiso construir una sociedad que, contradiciendo los intereses más sensatos del hombre, forzara su involución. Poseído por el espíritu del cesarismo, él asumió la misión de materializar aquella utopía. Ninguna otra persona estaba en condiciones de hacerlo, porque el experimento tolera apenas un practi-cante. Sólo el déspota podía gozar de autonomía, siendo soberano para dic-tar la ruta que debían seguir los subor-dinados. Su veneración de políticos que, en distintas épocas, trabajaron con dicha finalidad no es casual; el aprecio revelaba cuánto ansiaba ese destino alcanzado por los apóstoles del colectivismo. Estimo que hizo lo necesario para estar en el panteón de Guevara y demás criminales.

El difunto ya citado ganó eleccio-nes, pero jamás adoptó la convicción de un verdadero demócrata. Su ca-risma y la predilección de muchos individuos por los caudillos per-mitieron que conquistara el poder. Aunque haya sido un golpista frus-trado, tuvo las cualidades requeridas para recuperarse del descalabro. No obstante, al igual que Adolf Hitler, utilizó los mecanismos de las insti-tuciones republicanas, mas, cuando llegó a la cima, optó por desnatura-lizarlas. El objetivo era evitar que alguien pudiera sucederle. A fin de lograrlo, fueron empleados todos los recursos que la imaginación del ré-gimen pudo concebir. El paso hacia la tiranía fue trabajado sin descanso. Lo malo es que abundantes ciudada-nos celebraron la decadencia. Em-pujados por el resentimiento, miles de sujetos integraron sus legiones, estando siempre dispuestos a secun-darlo. Los venezolanos vivieron esa desventura en otras ocasiones; tris-temente, la peste del autoritarismo parece inmortal.

La megalomanía hizo que sus dis-parates afectaran a diferentes países. Con el pretexto de atacar a Estados Unidos, financió movimientos que, generalmente, estaban marcados por la violencia. Son múltiples los grupos que, a nivel mundial, recibie-ron el apoyo de su presidencia. Ello provocó graves problemas a quienes pretenden tener una convivencia que sea civilizada. Por ejemplo, Colom-bia sufrió debido al patrocinio a las FARC, pues buscar la paz ha sido algo circunstancial. Por esa clase de colaboraciones, hubo gobernantes en Latinoamérica que tuvieron dificulta-des para cumplir el mandato del elec-torado. Acontece que la intromisión en los asuntos regionales fue grosera. Conviene resaltar que, con placer, bu-rócratas de la izquierda lo ayudaron a expandir el mal. Esta misma gente, repudiable como pocas, aplaudió que se hubiese reunido con algunos de los mayores dictadores. Supongo que lo evocarán al lado de Sadam Husein y Muamar el Gadafi, sus condignos compañeros.

[email protected]

lo económico brasileño de Lula. Si bien tanto el modelo chavista

como el modelo de brasileño bus-can equitativa redistribución de la riqueza, ambos se apartan en cuan-to a mecanismos de aplicación. Es precisamente la forma de aplicación del modelo chavista lo que ha lleva-do a Bolivia a tener una pesada car-ga financiera con Venezuela: aun-que si bien se logró bajar la abultada deuda de más de cuatrocientos mi-llones de dólares, todavía se man-tiene el nexo de dependencia por el cordón umbilical de la provisión de carburantes.

‘¡Váyanse al Carajo, yanquis de Mierda!’

Si hay alguien a quien Evo Mo-rales agradece su vertiginoso creci-miento en su nivel de popularidad es al ex embajador de Estados Unidos en Bolivia, Manuel Rocha, quien en 2002 señaló textualmente que “El electorado boliviano debe conside-rar las consecuencias de escoger lí-deres de alguna manera conectados con el narcotráfico y el terrorismo”. Aquellas palabras, lanzadas a modos de advertencia, lograron únicamente que una gran parte del electorado in-deciso emitiera su voto en favor de Evo Morales, a modo de rechazo a la política intervencionista de Esta-dos Unidos. Paralelamente Hugo Chávez se veía fortalecido, luego del frustrado golpe de Carmona y que a la postre sería un momento político que marcaría el accionar del chavismo, tanto en discurso como en hechos, en su relación con el país del norte y con los sectores de la oposi-ción venezolana.

Evo Morales contó con la ayuda del aparato venezolano durante los periodos de mayor conflictividad a los que estuvo expuesto y que se manifestaron durante las moviliza-ciones en procura de la causa auto-nómica, el planteamiento y el debate sobre la capitalidad y por último, du-rante la aprobación de nueva Consti-tución Política del Estado.

Si analizamos brevemente todos esos escenarios de conflictividad, vemos que el apoyo de Chávez fue permanente y determinante para que dichos conflictos fueran ate-nuados estratégicamente con la mo-vilización de los sectores sociales, el control jurídico de la oposición, el desarrollo del paralelismo insti-tucional y el manejo de medios de comunicación.

el fantasMa de CanterVille

Muchos dirán que el reciente fa-llecimiento de Hugo Rafael Chávez Frías no tendrá un impacto directo en lo que se refiere a la política bolivia-na, otros dirán que las repercusiones serán meramente en el campo eco-nómico y otros en la arena política.

Desde ya considero que sería un error pretender separar estos cam-pos de influencia, si lo que tratamos de explicar es cuál será el escenario político que se desarrollará en Boli-via a partir de la ausencia de Hugo Chávez.

Indudablemente el discurso de “Chávez somos todos” ha tenido un impacto profundo en Venezuela, pero en gran medida éste impacto definitivamente será diferente con la ausencia de Chávez. Entender el chavismo sin Chávez es un dilema que nos propone escenarios muy difusos y mucho depende de los ac-tores que tomen la posta del actual proceso de la llamada “revolución bolivariana” para comprender lo que podría generarse en Bolivia en las próximas elecciones de 2014.

La nueva carrera electoral vene-zolana se inicia con Maduro y Capri-les como los gestores de un proceso de campaña que a primeras luces se puede percibir que será mucho más hostil que aquellas de 2012. Ma-duro ya ha dado muestras de ser un candidato de mano dura y radical. Esto se podría entender bajo la lógi-ca chavista que, ante la ausencia de Chávez, se necesita una persona que pueda encarar un periodo compli-cado tanto política como económi-camente. Por otro lado, Capriles se ha dispuesto enfrentar una campaña con un discurso de confrontación y de cuestionamiento hacia la legi-timidad y legalidad de la figura de Maduro.

Lo cierto es que cualquiera sean los resultados de las elecciones ve-nezolanas, Bolivia enfrentará un panorama muy complicado. Tanto Maduro como Capriles se disponen a realizar un giro en lo que se refiere a la política exterior de Venezuela para enfocarse en sus propios pro-blemas, relegando a un segundo plano la perspectiva regional desa-rrollada por Chávez.

Si bien en la actualidad el gobier-no de Morales encara sus programas sociales con financiamiento propio, sería muy reduccionista pensar que por el simple hecho de que Vene-zuela ya no aporta con la cantidad de recursos que lo hizo en el primer periodo de gobierno del MAS, este dejará de tener influencia en la polí-tica boliviana.

El enclave de la política venezo-lana en Bolivia no radica solamente en la esfera de lo económico, sino también en lo discursivo y en lo fác-tico –en cuanto a mecanismos de re-producción de poder- y eso lo saben muy bien en La Paz. El Gobierno de Evo Morales ahora mira expectante el acomodo de piezas en el tablero político venezolano, un replanteo de estrategias políticas en procura unos de cambiar la estructura chavista y otros de seguir gobernando sin Chávez… pero con Chávez.

“Estos hombres no se sienten humanos. Se sienten dioses.” / Paul Berman

Navi PillayAlta Comi-sionada de la ONU para los Derechos Humanos

Page 14: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

14

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

A FONDO

El enigma de los dos Chávez

AGabriel García Márquez escribió en 1999 el mejor retrato que se conoce del fallecido presidente venezolano Hugo Chávez, tras asumir el poder en el vecino país. Excélsior reproduce el texto publicado por El País de España. Vale la pena leer de nuevo.

Carlos Andrés Pérez descendió al atardecer del avión que lo llevó de Davos, Suiza, y se

sorprendió de ver en la plataforma al general Fernando Ochoa Antich, su ministro de Defensa. “¿Qué pa-sa?”, le preguntó intrigado. El mi-nistro lo tranquilizó, con razones tan confiables, que el presidente no fue al Palacio de Miraflores sino a la re-sidencia presidencial de La Casona. Empezaba a dormirse cuando el mis-mo ministro de Defensa lo despertó por teléfono para informarle de un levantamiento militar en Maracay. Había entrado apenas en Miraflores cuando estallaron las primeras cargas de artillería.

Era el 4 de febrero de 1992. El co-ronel Hugo Chávez Frías, con su culto sacramental de las fechas históricas, comandaba el asalto desde su puesto de mando improvisado en el Museo Histórico de La Planicie. El Presiden-te comprendió entonces que su único

recurso estaba en el apoyo popular, y se fue a los estudios de Venevisión para hablarle al país. Doce horas des-pués el golpe militar estaba fracasado. Chávez se rindió, con la condición de que también a él le permitieran di-rigirse al pueblo por la televisión. El joven coronel criollo, con la boina de paracaidista y su admirable facilidad de palabra, asumió la responsabilidad del movimiento. Pero su alocución fue un triunfo político. Cumplió dos años de cárcel hasta que fue amnistiado por el presidente Rafael Caldera. Sin embargo, muchos partidarios como no pocos enemigos han creído que el discurso de la derrota fue el primero de la campaña electoral que lo llevó a la presidencia de la República menos de nueve años después.

El presidente Hugo Chávez Frías me contaba esta historia en el avión de la Fuerza Aérea Venezolana que nos llevaba de La Habana a Caracas, hace dos semanas, a menos de quince días de su posesión como presidente constitucional de Venezuela por elec-ción popular. Nos habíamos conocido tres días antes en La Habana, durante su reunión con los presidentes Castro y Pastrana, y lo primero que me im-presionó fue el poder de su cuerpo de cemento armado. Tenía la cordialidad inmediata, y la gracia criolla de un venezolano puro. Ambos tratamos de vernos otra vez, pero no nos fue posi-ble por culpa de ambos, así que nos fuimos juntos a Caracas para conver-sar de su vida y milagros en el avión.

Fue una buena experiencia de re-

o cualquiera cosa que sea el soplo mágico que ha regido sus actos desde que vino al mundo en Sabaneta, es-tado Barinas, el 28 de julio de 1954, bajo el signo del poder: Leo. Chávez, católico convencido, atribuye sus ha-dos benéficos al escapulario de más de cien años que lleva desde niño, heredado de un bisabuelo materno, el coronel Pedro Pérez Delgado, que es uno de sus héroes tutelares.

Sus padres sobrevivían a duras pe-nas con sueldos de maestros prima-rios, y él tuvo que ayudarlos desde los nueve años vendiendo dulces y frutas en una carretilla. A veces iba en burro a visitar a su abuela materna en Los Rastrojos, un pueblo vecino que les parecía una ciudad porque tenía una plantita eléctrica con dos horas de luz a prima noche, y una partera que lo recibió a él y a sus cuatro hermanos. Su madre quería que fuera cura, pero sólo llegó a monaguillo y tocaba las campanas con tanta gracia que todo el mundo lo reconocía por su repique. “Ese que toca es Hugo”, decían. Entre los libros de su madre encontró una enciclopedia providencial, cuyo pri-mer capítulo lo sedujo de inmediato: Cómo triunfar en la vida.

Era en realidad un recetario de opciones, y él las intentó casi todas.

“El golpe de febrero parece ser lo único que le ha salido mal a Chávez... él lo ha visto por el lado positivo como un revés providencial. Es su ma-nera de entender la buena suerte, o la inteligen-cia, o la intuición, o la astucia, o cualquiera cosa que sea el soplo mágico que ha regido sus actos”

Reeditando

SDFASFioOdDSFASDFSA

portero en reposo. A medida que me contaba su vida iba yo descubriendo una personalidad que no correspondía para nada con la imagen de déspota que teníamos formada a través de los medios. Era otro Chávez. ¿Cuál de los dos era el real?

El argumento duro en su contra du-rante la campaña había sido su pasado reciente de conspirador y golpista. Pero la historia de Venezuela ha dige-rido a más de cuatro. Empezando por Rómulo Betancourt, recordado con razón o sin ella como el padre de la democracia venezolana, que derribó a Isaías Medina Angarita, un antiguo militar demócrata que trataba de pur-gar a su país de los treintiséis años de Juan Vicente Gómez. A su sucesor, el novelista Rómulo Gallegos, lo derribó el general Marcos Pérez Jiménez, que se quedaría casi once años con todo el poder. Éste, a su vez, fue derribado por toda una generación de jóvenes demócratas que inauguró el período más largo de presidentes elegidos.

El golpe de febrero parece ser lo único que le ha salido mal al coronel Hugo Chávez Frías. Sin embargo, él lo ha visto por el lado positivo como un revés providencial. Es su manera de entender la buena suerte, o la in-teligencia, o la intuición, o la astucia,

Page 15: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

15

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013

Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

A FONDO

“...me estremeció la inspiración de que había viajado y conversado a gusto con dos hom-bres opuestos. Uno a quien la suerte empe-dernida le ofrecía la oportunidad de salvar a su país. Y el otro, un ilusionista, que podía pasar a la historia como un déspota más.”

Continúa en la siguiente página

Como pintor asombrado ante las láminas de Miguel Ángel y David, se ganó el primer premio a los doce años en una exposición regional. Como músico se hizo indispensa-ble en cumpleaños y serenatas con su maestría del cuatro y su buena voz. Como beisbolista llegó a ser un catcher de primera. La opción mili-tar no estaba en la lista, ni a él se le habría ocurrido por su cuenta, hasta que le contaron que el mejor modo de llegar a las grandes ligas era in-gresar en la academia militar de Barinas. Debió ser otro milagro del escapulario, porque aquel día empe-zaba el plan Andrés Bello, que per-mitía a los bachilleres de las escuelas militares ascender hasta el más alto nivel académico.

Estudiaba ciencias políticas, his-toria y marxismo al leninismo. Se apasionó por el estudio de la vida y la obra de Bolívar, su Leo mayor, cuyas proclamas aprendió de memoria. Pe-ro su primer conflicto consciente con la política real fue la muerte de Allen-de en septiembre de 1973. Chávez no entendía. ¿Y por qué si los chilenos eligieron a Allende, ahora los mili-tares chilenos van a darle un golpe? Poco después, el capitán de su com-pañía le asignó la tarea de vigilar a un hijo de José Vicente Rangel, a quien se creía comunista. “Fíjate las vueltas que da la vida”, me dice Chávez con una explosión de risa. “Ahora su papá es mi canciller”. Más irónico aún es que cuando se graduó recibió el sable de manos del presidente que veinte años después trataría de tumbar: Car-los Andrés Pérez.

“Además”, le dije, “usted estuvo a punto de matarlo”. “De ninguna ma-nera”, protestó Chávez. “La idea era instalar una asamblea constituyente y volver a los cuarteles”. Desde el pri-mer momento me había dado cuenta de que era un narrador natural. Un producto íntegro de la cultura popular venezolana, que es creativa y alboro-zada. Tiene un gran sentido del ma-nejo del tiempo y una memoria con algo de sobrenatural, que le permite recitar de memoria poemas de Neru-da o Whitman, y páginas enteras de Rómulo Gallegos.

Desde muy joven, por casuali-dad, descubrió que su bisabuelo no era un asesino de siete leguas, como decía su madre, sino un guerrero le-gendario de los tiempos de Juan Vi-cente Gómez. Fue tal el entusiasmo de Chávez, que decidió escribir un libro para purificar su memoria. Es-cudriñó archivos históricos y biblio-tecas militares, y recorrió la región de pueblo en pueblo con un morral de historiador para reconstruir los itinerarios del bisabuelo por los testi-monios de sus sobrevivientes. Desde entonces lo incorporó al altar de sus héroes y empezó a llevar el escapu-lario protector que había sido suyo.

Uno de aquellos días atravesó la

frontera sin darse cuenta por el puen-te de Arauca, y el capitán colombia-no que le registró el morral encontró motivos materiales para acusarlo de espía: llevaba una cámara fotográfi-ca, una grabadora, papeles secretos, fotos de la región, un mapa militar con gráficos y dos pistolas de regla-mento. Los documentos de identi-dad, como corresponde a un espía, podían ser falsos. La discusión se prolongó por varias horas en una ofi-cina donde el único cuadro era un re-trato de Bolívar a caballo. “Yo estaba ya casi rendido, –me dijo Chávez–, pues mientras más le explicaba me-nos me entendía”. Hasta que se le ocurrió la frase salvadora: “Mire mi capitán lo que es la vida: hace apenas un siglo éramos un mismo ejército, y ése que nos está mirando desde el cuadro era el jefe de nosotros dos. ¿Cómo puedo ser un espía?”. El ca-pitán, conmovido, empezó a hablar maravillas de la Gran Colombia, y los dos terminaron esa noche be-biendo cerveza de ambos países en una cantina de Arauca. A la mañana siguiente, con un dolor de cabeza compartido, el capitán le devolvió a Chávez sus enseres de historiador y lo despidió con un abrazo en la mitad del puente internacional.

“De esa época me vino la idea concreta de que algo andaba mal en Venezuela”, dice Chávez. Lo habían designado en Oriente como coman-dante de un pelotón de trece soldados y un equipo de comunicaciones para liquidar los últimos reductos guerri-lleros. Una noche de grandes lluvias le pidió refugio en el campamento un coronel de inteligencia con una patru-lla de soldados y unos supuestos gue-rrilleros acabados de capturar, verdo-sos y en los puros huesos. Como a las diez de la noche, cuando Chávez em-pezaba a dormirse, oyó en el cuarto contiguo unos gritos desgarradores. “Era que los soldados estaban gol-peando a los presos con bates de béis-bol envueltos en trapos para que no les quedaran marcas”, contó Chávez. Indignado, le exigió al coronel que le entregara los presos o se fuera de allí, pues no podía aceptar que tortu-rara a nadie en su comando. “Al día siguiente me amenazaron con un jui-cio militar por desobediencia, –contó Chávez– pero sólo me mantuvieron por un tiempo en observación”.

Pocos días después tuvo otra ex-periencia que rebasó las anteriores. Estaba comprando carne para su tropa cuando un helicóptero militar aterrizó en el patio del cuartel con un cargamento de soldados mal he-ridos en una emboscada guerrillera. Chávez cargó en brazos a un soldado que tenía varios balazos en el cuerpo. “No me deje morir, mi teniente...”, le dijo aterrorizado. Apenas alcanzó a meterlo dentro de un carro. Otros siete murieron. Esa noche, desvelado en la hamaca, Chávez se preguntaba:

“¿Para qué estoy yo aquí? Por un la-do campesinos vestidos de militares torturaban a campesinos guerrilleros, y por el otro lado campesinos guerri-lleros mataban a campesinos vestidos de verde. A estas alturas, cuando la guerra había terminado, ya no tenía sentido disparar un tiro contra nadie”. Y concluyó en el avión que nos lleva-ba a Caracas: “Ahí caí en mi primer conflicto existencial”.

Al día siguiente despertó conven-cido de que su destino era fundar un movimiento. Y lo hizo a los veintitrés años, con un nombre evidente: Ejér-cito bolivariano del pueblo de Ve-nezuela. Sus miembros fundadores: cinco soldados y él, con su grado de subteniente. “¿Con qué finalidad?”, le pregunté. Muy sencillo, dijo él: “con la finalidad de prepararnos por si pasa algo”. Un año después, ya co-mo oficial paracaidista en un batallón blindado de Maracay, empezó a cons-pirar en grande. Pero me aclaró que usaba la palabra conspiración sólo en su sentido figurado de convocar vo-luntades para una tarea común.

Esa era la situación el 17 de di-ciembre de 1982 cuando ocurrió un episodio inesperado que Chávez considera decisivo en su vida. Era ya capitán en el segundo regimiento de paracaidistas, y ayudante de ofi-cial de inteligencia. Cuando menos lo esperaba, el comandante del regi-miento, Ángel Manrique, lo comi-sionó para pronunciar un discurso ante mil doscientos hombres entre oficiales y tropa.

A la una de la tarde, reunido ya el batallón en el patio de fútbol, el maes-tro de ceremonias lo anunció. “¿Y el discurso?”, le preguntó el coman-dante del regimiento al verlo subir a la tribuna sin papel. “Yo no tengo discurso escrito”, le dijo Chávez. Y empezó a improvisar. Fue un dis-curso breve, inspirado en Bolívar y Martí, pero con una cosecha personal sobre la situación de presión e injusti-cia de América Latina transcurridos doscientos años de su independencia. Los oficiales, los suyos y los que no lo eran, lo oyeron impasibles. En-tre ellos los capitanes Felipe Acosta

Carle y Jesús Urdaneta Hernández, simpatizantes de su movimiento. El comandante de la guarnición, muy disgustado, lo recibió con un reproche para ser oído por todos:

“Chávez, usted parece un políti-co”. “Entendido”, le replicó Chávez.

Felipe Acosta, que medía dos me-tros y no habían logrado someterlo diez contendores, se paró de frente al comandante, y le dijo: “Usted está equivocado, mi comandante. Chávez no es ningún político. Es un capitán de los de ahora, y cuando ustedes oyen lo que él dijo en su discurso se mean en los pantalones”.

Entonces el coronel Manrique pu-so firmes a la tropa, y dijo: “Quiero que sepan que lo dicho por el capitán Chávez estaba autorizado por mí. Yo le di la orden de que dijera ese dis-curso, y todo lo que dijo, aunque no lo trajo escrito, me lo había contado ayer”. Hizo una pausa efectista, y concluyó con una orden terminante: “¡Que eso no salga de aquí!”.

Al final del acto, Chávez se fue a trotar con los capitanes Felipe Acosta y Jesús Urdaneta hacia el Samán del Guere, a diez kilómetros de distancia, y allí repitieron el juramento solem-

Page 16: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

16

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

tes de aterrizar en Caracas. “Entonces veo que están sacando las tropas, y le pregunto a un coronel: ¿Para dónde van todos esos soldados? Porque qué sacaban los de Logística que no están entrenados para el combate, ni menos para el combate en localidades. Eran reclutas asustados por el mismo fusil que llevaban. Así que le pregunto al coronel: ¿Para dónde va ese pocotón de gente? Y el coronel me dice: A la calle, a la calle. La orden que dieron fue esa: hay que parar la vaina como sea, y aquí vamos. Dios mío, ¿pero qué orden les dieron?. Bueno Chávez, me contesta el coronel: la orden es que hay que parar esta vaina como sea. Y yo le digo: Pero mi coronel, us-ted se imagina lo que puede pasar. Y él me dice: Bueno, Chávez, es una or-den y ya no hay nada qué hacer. Que sea lo que Dios quiera.

Chávez dice que también él iba con mucha fiebre por un ataque de rubéola, y cuando encendió su carro vio un soldadito que venía corriendo con el casco caído, el fusil guindan-do y la munición desparramada. “Y entonces me paro y lo llamo”, dijo Chávez. “Y él se monta, todo ner-vioso, sudado, un muchachito de 18 años. Y yo le pregunto: Ajá, ¿y para dónde vas tú corriendo así? No, dijo él, es que me dejó el pelotón, y allí va mi teniente en el camión. Lléveme, mi mayor, lléveme. Y yo alcanzo el camión y le pregunto al que los lleva: ¿Para dónde van? Y él me dice: Yo no sé nada. Quién va a saber, imagíne-se”. Chávez toma aire y casi grita aho-gándose en la angustia de aquella no-che terrible: “Tú sabes, a los soldados tú los mandas para la calle, asustados, con un fusil, y quinientos cartuchos, y se los gastan todos. Barrían las calles a bala, barrían los cerros, los barrios populares. ¡Fue un desastre! Así fue: miles, y entre ellos Felipe Acosta”. “Y el instinto me dice que lo mandaron a matar”, dice Chávez. “Fue el minuto que esperábamos para actuar”. Dicho y hecho: desde aquel momento em-pezó a fraguarse el golpe que fracasó tres años después.

El avión aterrizó en Caracas a las tres de la mañana. Vi por la venta-nilla la ciénaga de luces de aquella ciudad inolvidable donde viví tres años cruciales de Venezuela que lo fueron también para mi vida. El presidente se despidió con su abra-zo caribe y una invitación implícita: “Nos vemos aquí el 2 de febrero”. Mientras se alejaba entre sus escoltas de militares condecorados y amigos de la primera hora, me estremeció la inspiración de que había viajado y conversado a gusto con dos hombres opuestos. Uno a quien la suerte em-pedernida le ofrecía la oportunidad de salvar a su país. Y el otro, un ilu-sionista, que podía pasar a la historia como un déspota más.

http://www.excelsior.com.mx/glo-bal/2013/03/06/887590

A FONDO

ne de Simón Bolívar en el monte Aventino. “Al final, claro, le hice un cambio”, me dijo Chávez. En lugar de “cuando hayamos roto las cade-nas que nos oprimen por voluntad del poder español”, dijeron: “Hasta que no rompamos las cadenas que nos oprimen y oprimen al pueblo por vo-luntad de los poderosos”.

Desde entonces, todos los oficiales que se incorporaban al movimiento secreto tenían que hacer ese juramen-to. La última vez fue durante la cam-paña electoral ante cien mil personas. Durante años hicieron congresos clandestinos cada vez más numero-sos, con representantes militares de todo el país. “Durante dos días hacía-mos reuniones en lugares escondidos, estudiando la situación del país, ha-ciendo análisis, contactos con grupos civiles, amigos. “En diez años -me dijo Chávez- llegamos a hacer cinco congresos sin ser descubiertos”.

A estas alturas del diálogo, el Presidente rió con malicia, y reveló con una sonrisa de malicia: “Bueno, siempre hemos dicho que los prime-ros éramos tres. Pero ya podemos decir que en realidad había un cuarto hombre, cuya identidad ocultamos siempre para protegerlo, pues no fue descubierto el 4 de febrero y quedó activo en el Ejército y alcanzó el gra-do de coronel. Pero estamos en 1999 y ya podemos revelar que ese cuarto hombre está aquí con nosotros en este avión”. Señaló con el índice al cuarto hombre en un sillón apartado, y dijo: “¡El coronel Badull!”.

De acuerdo con la idea que el co-mandante Chávez tiene de su vida, el acontecimiento culminante fue El Caracazo, la sublevación popular que devastó a Caracas. Solía repetir: “Napoleón dijo que una batalla se de-cide en un segundo de inspiración del estratega”. A partir de ese pensamien-to, Chávez desarrolló tres conceptos: uno, la hora histórica. El otro, el mi-nuto estratégico. Y por fin, el segundo táctico. “Estábamos inquietos porque no queríamos irnos del Ejército”, de-cía Chávez. “Habíamos formado un movimiento, pero no teníamos claro para qué”. Sin embargo, el drama tremendo fue que lo que iba a ocurrir ocurrió y no estaban preparados. “Es decir –concluyó Chávez– que nos sorprendió el minuto estratégico”.

Se refería, desde luego, a la aso-nada popular del 27 de febrero de 1989: El Caracazo. Uno de los más sorprendidos fue él mismo. Carlos Andrés Pérez acababa de asumir la presidencia con una votación cauda-losa y era inconcebible que en veinte días sucediera algo tan grave. “Yo iba a la universidad a un posgrado, la no-che del 27, y entro en el fuerte Tiuna en busca de un amigo que me echara un poco de gasolina para llegar a la casa”, me contó Chávez minutos an-

Viene de la página anterior

Un repaso por la historia para recor-dar cómo nació la capital cruceña. Lo hace la profesora Gabriela Suárez.

Ñuflo de Chávez y la fundación de Santa Cruz de la Sierra

Gabriela Suárez UrendaProfesora de Estudios Sociales

Los sueños han llevado lejos a los seres humanos a través de la historia; buscando riquezas,

una vida mejor, o incluso la paz, entre otros motivos que los llevó a soñar, porque soñar es una forma de visuali-zar el futuro y caminar hacia él.

Hace 40.000 años la búsqueda de alimento y mejores condiciones de vida trajo a los primeros seres huma-nos al continente americano y hace más de 500 años la necesidad de co-merciar con Asia trajo a los conquis-tadores europeos a América.

Los conquistadores eran hombres de ciudad, de entre 35 y 45 años, muchos de ellos tenían profesiones, escribanos, licenciados, oidores, jueces, contadores, etc., aunque también muchos eran analfabetos. El común denominador fue la va-lentía, aventurarse a lo desconocido, buscando riquezas tal vez, pero con la certeza de que si morían sería una muerte violenta, y eso en el mejor de los casos, muchos de ellos sufrieron largas y terribles dolencias por ata-ques de animales desconocidos o enfermedades tropicales.

Un sueño nació en España, el año 1518, en un pueblito del sur llamado Trujillo, ve la luz del Sol un soñador como muchos otros, se crió en Santa Cruz de la Sierra, zona de Extrema-dura; de familia acomodada de ori-gen portugués, de allí el apellido que en español significa “llaves”. En esa época los hombres podían elegir qué apellido llevar de cualquiera de sus antepasados y nuestro soñador tomó el de Chávez, apellido de sus abuelos portugueses.

Ñuflo Chávez llegó a Sudamérica por el Atlántico sur, remontando el río de La Plata, en 1542, acompañando a Alvar Núñez Cabeza de Vaca, ambos se quedaron en Asunción. Desde allí se prepararon para “navegar” por lo desconocido, como si se tratase de un barco en alta mar. Las distancias

no eran una preocupación, solían re-correr cientos de kilómetros, miles si eran necesarios cargando con ellos in-cluso barcazas para poder cruzar los muchos ríos de América.

Hasta 1558 viajó por todo el Cha-co, recorriendo el río Pilcomayo. Todo esto lo preparó para su propia aventura, concretar su sueño, fundar una gobernación y hacerse con el car-go de gobernador. Emprende su viaje en 1558, recorriendo los ríos Guapay y Grande, hasta llegar a tierras de los paikonekas, kibicikas, poojikas, etc. Todas tribus pacíficas conocidas hoy como Chiquitos. Lo acompañaban en esta aventura algunos españoles y muchos indígenas itatines, de origen guaraní (más de 200).

Es en este lugar, a la sombra de un cerro, el Turubó, cerca de las crista-linas aguas del río Sutós, que un 26 de febrero de 1561 fundó su primera ciudad, le puso por nombre Santa Cruz de la Sierra, para no olvidar su lugar de origen, esta ciudad fue tras-ladada dos veces. Realizó más viajes al sur, para regresar por su familia en Asunción, sin embargo en uno de es-tos viajes es asesinado por los itati-nes que se sintieron traicionados por el español. Dejó viuda muy joven a Doña Elvira de Mendoza y Manri-que, valiente mujer que lo acompañó en todos sus sueños hasta el “Nuevo Mundo”.

Somos hijas e hijos de valientes exploradores, de incansables guerre-ros, podemos seguir avanzando sin temor ante nuevos desafíos, estamos hechos de la mejor mezcla, somos la esperanza hecha carne, somos los sueños hechos realidad. No nos detengamos, sigamos desafiantes a vencer o con gloria morir, llenemos de orgullo a nuestra tierra siendo ca-da día mejores, más libres, más sa-bios, más honestos y más soñadores.

Felicidades Santa Cruz por tus 452 años de fundación.

Page 17: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

17

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013

Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

BOLIVIA VIVA

La revolucionaria Participa-ción Popular transfirió nuevas competencias a los municipios

y con ello, la infraestructura física en educación, salud, deportes, caminos vecinales, micro riego, con la obliga-ción de administrarla, mantenerla y renovarla, hasta ahora continúa así.

También estableció el principio de distribución igualitaria, por habitante, de los recursos de coparticipación tri-butaria correspondiente al 20% asig-nado, y posteriormente se incluyó la coparticipación del IDH a todos los municipios del país, para que puedan cumplir con las competencias transfe-ridas, buscando corregir los desequi-librios históricos existentes entre las áreas urbanas y rurales.

La Participación Popular también definió el proceso de descentraliza-ción municipal y estableció la figura de agentes municipales en cantones, electos por el voto popular directo y por mayoría simple. En Montero Ho-yos, El Palmar y Paurito se eligieron agentes municipales que terminaron siendo sometidos a la autoridad de los sub-alcaldes designados por el alcal-de de turno en la ciudad capital.

Aquí se demostraba parte de la deformación de la lucha autonómica por parte de algunos cruceños: por un lado se era bravucón para pedirla al Gobierno central y por otro lado resul-taba engañoso para otorgarla hacia los distritos. Esto sigue igual hasta ahora.

La Ley de municipalidades del año 1999 ratificó la descentralización mu-nicipal distrital que nunca se ejecutó.

La actual Ley Marco de Autono-mías y Descentralización, cuya base es la Constitución, establece que los distritos municipales, al igual que las regiones, son ámbitos territoriales de descentralización de las autonomías (art.18-27), correspondiendo a la cualidad legislativa de sus Gobiernos ejecutar dicho proceso de descentrali-zación distrital.

Si alguien dice “es mediante la Carta Orgánica”, no es correcto, porque la elaboración de la Carta Orgánica es potestativa. Es decir no tiene término, y porque el proceso de viabilidad de la descentralización dis-trital es parte de la cualidad legislativa municipal exclusiva.

José LuisSantistevanAbogadomunicipalista

A treinta años de la existencia del Plan Tres Mil, los gobernantes mu-nicipales deben entender que el Plan Tres Mil ya no es un Plan, es una realidad material de ciudadanos que lucharon por las autonomías para: ad-ministrar sus recursos, elegir sus auto-ridades distritales y realizar la gestión menor que está cerca de ellos. No re-conocer aquello es actuar en idéntica forma que el Gobierno central.

¿Que necesita el Plan Tres Mil? Una Ley municipal que otorgue el ini-cio del proceso de Descentralización distrital en la Ciudad de Santa Cruz, bajo los siguientes parámetros institu-cional, territorial y jurídico:

1. La distribución de sus recursos de coparticipación tributaria y del IDH debe realizarse por habitante en el lu-gar en que se encuentre, es decir, como dice la Ley Marco de Autonomías.

2. Hay que descentralizar la ges-tión municipal: elegir sub-alcalde en el distrito, transferir competencias y distribuir los recursos provenientes del censo, que solo alcanza al 30% del pre-

supuesto anual del municipio. 3. Transferir competencias me-

nores como ser: administrar los recur-sos económicos asignados, adminis-trar la infraestructura municipal del distrito, como ser la salud (primer y segundo nivel), educación (refacción de escuelas), prestar y fiscalizar el desayuno escolar, ejecutar planes de seguridad ciudadana, ejecutar obras menores, construcciones, refacciones etc., presentar iniciativas legislativas del distrito, ejecutar acciones y polí-ticas de desarrollo humano, género y asuntos generacionales, protección de la mujer, proteger y administrar y defender sus bienes de dominio mu-

nicipal, prestación y fiscalización de servicios públicos y servicios institu-cionales y otras atribuciones y com-petencias transferidas.

4. Según los datos del Censo 2012, el Plan Tres Mil tendrá una po-blación aproximada de 360.000 habi-tantes, por lo cual le correspondería por coparticipación tributaria y por IDH la suma anual aproximada de Bs. 144.334.260 que deben ser distri-buidos como sentencia la Disposición Transitoria Tercera de la Ley Marco de Autonomías, por habitante.

Este sería el mejor regalo para el Plan Tres Mil que no necesita que nadie le regale nada, solo que se le reconozcan sus derechos políticos y de ciudadanía establecidos por la Constitución y las leyes. Solo así será posible terminar con el centra-lismo, que para contratar un desayu-no escolar, refaccionar una escuela, comprar insumos o refaccionar una posta sanitaria, obliga a pedir la au-torización y firma de un alto jerarca del Gobierno Municipal.

El mejor regalopara el Plan Tres MilEl aniversario de la Ciudadela Andrés Ibáñez, más conocida co-

mo Plan Tres Mil, sirve de pretexto a José Luis Santistevan para recordar qué poco avance hay en Santa Cruz en utonomía.

“El Plan Tres Mil no necesita que nadie le regale nada, solo que se le reconozcan sus derechos políticos y de ciudadanía establecidos por la Constitución y las leyes. Solo así será posible terminar con el centralismo obliga a pedir permiso hasta para contratar desayuno escolar...”

S eis Parabas Barba Azul (Ara glaucogularis) fueron regra-sadas a Bolivia, procedentes

de Inglaterra, gracias al Programa de Conservación. Las parabas nacidas en cautiverio fueron donadas al Es-tado Plurinacional de Bolivia por el Paradise Park en Cornwall Inglaterra con el objetivo de conservar esta es-pecie que está En Peligro Crítico de Extinción en estado silvestre.

La iniciativa es posible gracias a la colaboración de la Dirección Ge-neral de Biodiversidad y Áreas Pro-tegidas del Viceministerio de Medio Ambiente, Biodiversidad y Cambio Climático, el Gobierno Autónomo Departamental del Beni, el Seanasag Nacional y las distritales de Santa Cruz y de Beni, World Parrot Trust, la Fundación Noel Kempff Mercado, el Instituto de Ecología – UMSA y el establecimiento Nueva Esperanza.

La Paraba Barba Azul es una ave hermosa, endémica de los llanos de Mojos de Beni. Esta especie es gran-de, las partes superiores de color azul turquesa, un poco más apagado en la corona y más claro en la grupa. Su cuerpo, pecho y las partes bajas de sus alas son de color amarillo intenso, casi naranja. Esta especie tiene la ca-beza más pequeña que la Paraba Azul Amarilla (A. ararauna). Cuando está alarmada tiene voz estridente.

Debido a su rareza y belleza, la pa-raba Barba Azul ha sido objeto de una reducción rápida de su población, especialmente entre 1970 y 1980 de-bido al tráfico ilegal. Hoy hay pocos ejemplares. En 2007, la población to-tal estimada de la Paraba Barba Azul fue de 250 a 300, con apenas 70 indi-viduos descubiertos en terrenos secos. Según registra la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), el tamaño actual de la pobla-ción en estado salvaje se estima en un número de 110 a 130 individuos, equivale aproximadamente a 73 a 87 individuos adultos.

Esta especie endémica de los lla-nos de Mojos, utiliza los bosques islas y bosques de galería que se encuen-tran fragmentados a lo largo de las sabanas de Beni. El motacú (Attalea phalerata) forma parte importante de la dieta, especialmente durante el pe-riodo de crianza, se alimenta también de otros frutos de palmera como el totaí (Acrocomia aculeata). La Para-ba Barba Azul se encuentra más en parejas, aunque también en pequeños grupos de 7 a 9 individuos.

Seis parabas azul vuelven a su habitat en Bolivia

Page 18: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

18

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

BOLIVIA VIVA

El pasado 27 de enero cumplí el sueño de cualquier corre-dor de fondo, completé los

cuarenta y dos kilómetros y ciento noventa y cinco metros de mi primer maratón. Saliendo ileso, emocionado, satisfecho y muy feliz de cumplir con este reto personal.

El maratón es la prueba atlética de mayor resistencia en la categoría olímpica, y por esa razón, los jue-

gos olímpicos cierran sus festejos con esta carrera.

Yo llegué a la actividad física para combatir las tensiones laborales. El stress me producía problemas esto-macales. Siempre fui un jugador de fútbol de fin de semana y no hacía ningún otro ejercicio en los días la-bores. Hace más de una década co-mencé a hacer ejercicios diarios en el gimnasio -en especial Body Pump-, y esa rutina semanal cambió total-mente mi disposición física, anímica y psicológica.

Hace unos cinco años incursioné en lo que se ha convertido en algo más que un pasatiempo, correr.

El famoso novelista y maratonis-ta japonés, Haruki Murakami, cuyas cavilaciones se presentan en su libro “De qué hablo cuando hablo de co-rrer”, reflexiona sobre la influencia que este deporte ha ejercido en su vida y en su obra: “Mientras corro, simplemente corro. Como norma,

corro en medio del vacío. Dicho a la inversa, tal vez cabría afirmar que co-rro para lograr el vacío”.

Para mí, correr es una forma de meditación en movimiento. Luego de algunos minutos, cuando se alcanza una dinámica del cuerpo casi automá-tica, los pensamientos se aquietan, y se consigue un estado de conciencia que permite “mirarse hacia adentro”. Si esto fuera poco, mientras corro dis-

fruto del aire limpio, muchas veces me acompaño de buena música, des-pejo mi mente y dejo que mis múscu-los se oxigenen.

Intento participar en todas las ca-rreras que se hacen en el medio: la Corrida Internacional del Oriente, los 10K de Cemento Warnes, los 5K de la administradora de fondo de pen-siones, los 10K Unidos contra la Dia-betes, la Media Maratón de Cotoca, entre otras. Y, desde 2009, tengo en mi agenda de viajes algunas carreras internacionales: 10K de Nike en Bue-nos Aires, Media Maratón de Santia-go, Media Maratón de Río de Janeiro y otras carreras que son siempre un buen pretexto para viajar.

En estas pruebas se corre contra uno mismo. Nadie espera ganar, sino llegar a la meta con dignidad y supe-rando sus propios tiempos. Es un reto muy personal. Como para todo, es útil tener un objetivo y un plan para cumplirlo. Al principio es necesaria

Alfonso Cortez es una prueba de que es cierto el refrán que reza “mente sana en cuerpo sano”. Lo demuestra con un testimonio inspirador en el que destacan las decisiones acer-tadas y la constancia para alcanzar metas.

Confesiones de un corredor de fondo

AlfonsoCortez

Editor delibros y

corredoraficionado

“El que corre identificado con la masa en vio-lento movimiento pierde, por un momento, la noción de sí mismo, olvida los consejos de los expertos... El camino es largo y la meta es un objeto de deseo de millares. Competir es poner a prueba el ego, la voluntad y la fuerza espiritual.”

cierta disciplina, y después los entre-namientos se convierten en parte de una rutina placentera.

Se debe intentar comer saludable y equilibrado. El ejercicio me per-mite darme ciertas licencias con los alimentos. Las pastas, los mariscos y los buenos vinos son un beneficio co-lateral que premia ciertos sacrificios.

Mi priMer Maratón

Me preparé durante seis meses pa-ra correr el 4 de noviembre de 2012 el maratón de New York. Sin embar-go, el huracán Sandy impidió que la prueba se realizará y un sentimiento de frustración y tristeza nos envolvió a todos quienes estuvimos presentes en la “capital del mundo” que sufría los embates de la naturaleza.

Al regresar a Bolivia me tomó al-gunas semanas cambiar esa sensación de desánimo y plantearme un nuevo reto para el año que se iniciaba. Ahí surgió la posibilidad de correr el Ma-ratón de Miami a finales de enero. Ese fue un incentivo para retomar y alar-gar mi plan de entrenamiento y cerrar un ciclo que había quedado inconclu-so el año pasado.

Todos tienen una razón para co-rrer un maratón. Cada uno tiene sus propias y personales razones para correr, y ese domingo 27 de enero habían más de 25 mil razones pisan-do las calles y avenidas de Miami, donde por un día, todos podíamos

ser campeones. Según los expertos, una carrera de

fondo se debe correr de la siguiente manera: primero, con la cabeza; des-pués, con las piernas; y al final, con el corazón. Intenté seguir esa estrategia. Me había inscrito con el objetivo de llegar a la meta en un tiempo alrede-dor de las cinco horas. Sin embargo, cuando se inició la prueba tomé con-fianza y me uní al pelotón de corredo-res que tenían el ritmo para cubrir los cuarenta y dos kilómetros en cuatro horas y media.

Los primeros kilómetros deben ser de calentamiento. Muchos de los competidores se dejan llevar por un mar menos poético y tranquilizador: el mar de gente que sale corriendo, desesperada por descargar esa excesi-va acumulación de nervios y ansiedad reprimida.

El que corre identificado con la masa en violento movimiento pier-de, por un momento, la noción de sí mismo, olvida los consejos de los expertos que insisten en administrar las propias fuerzas ante el riesgo de gastarse entero en el primer impulso. El camino es largo y la meta es un ob-jeto de deseo de millares. Competir es poner a prueba el ego, la voluntad y la fuerza espiritual.

Hasta el kilómetro treinta mi tácti-ca era hidratarme cada tres kilómetros y consumir un gel energético cada cuarenta y cinco minutos. Estaba co-rriendo con la cabeza, y mis piernas

“Running is the greatest metaphor for life, becauseyou get out of it what you put into it.” / Oprah Winfrey

Completar el maratón de 42 kilómetros en cinco horas era la meta que Alfonso Cortez se pro-puso alcanzar en Miami. Lo hizo en cinco horas y media, pero el sabor a victoria se mantuvo: com-pletó el recorrido a pesar de haber sufrido un pro-blema estomacal en plena carrera

Page 19: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

19

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013

Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

reloj vibró a los 42K comencé a sentir nuevamente esas mariposas en el estómago. Los últimos 195 metros finales son indescriptibles. Al ingresar al pasillo angosto de la recta final, donde había público en ambas tribunas, la gente gritaba mi nombre que estaba impreso encima de mi número. Escuché alientos en diferentes idiomas y con diver-sos acentos. Levanté los brazos a metros de ver la línea de llegada, y con el último aliento, lancé un grito emocionado que remató las 5 horas y 32 segundos más intensos que me ha regalado esta afición.

Todos los que completan el reco-rrido reciben una medalla que premia su esfuerzo. Esta medalla de mi pri-mer maratón significa para mí una celebración de la vida. Dedico un sen-tido agradecimiento a quienes fueron parte de esta aventura.

Alfonso y Rodrigo Cortez: padre e hijo unidos por algo más que los lazos de sangre. Los dos comparten la pasión por el deporte y la vida sana. Lo demostraron en el maaratón de Miami.

mayoría de nosotros no puede cantar o bailar, y nunca estará sobre un es-cenario: correr un maratón es como estar en Broadway y recibir una ova-

FDSAFDAS

19

me llevaron a cubrir esa distancia sin mayores contratiempos. Eso fue lo que habíamos planeado con Marco Ortiz, el encargado de mi preparación física y técnica.

Todas las teorías sobre las reservas de carbohidratos, la rehidratación permanente, los sachets de gel re-constituyentes, el control del ritmo cardiaco, la adecuada respiración, la reposición de sales minerales y otros tantos supuestos pueden venirse aba-jo en un instante. Un incidente esto-macal impidió que pudiera seguir con ese ritmo y casi me saca de la carrera, a partir de ese momento, comencé a correr los últimos doce kilómetros con el corazón.

Para mí, el kilómetro 30 fue mi hora de la verdad, donde la soledad resultante es la esencia cruda de la carrera de fondo, el punto de origen al que invariablemente llega un corre-dor de largo aliento. En el kilómetro 30, cuando ya tenía más de tres horas de competencia, uno se comienza a cuestionar si lo que está haciendo tiene sentido, y se convierte en una máquina de correr que sufre. En este momento se entra a lo que muchos llaman “el muro”, o la soledad. El gran desafío es aprender a cortejar la soledad y dejarse llevar por ella hacia lo profundo, sin detenerse.

Jerome Groopman, un profesor de medicina de Harvard y además maratonista, dice al respecto: “Esta-mos condicionados biológicamente por recursos físicos de dolor y por lo tanto evitamos sufrir voluntariamen-te. Tras la carrera, llegué a la conclu-sión de que correr un maratón es una excepción a esta regla, que ofrece a los hombres la oportunidad de ha-cerse una idea de una experiencia también excepcional: el parto. En ambos casos, el dolor y agotamiento se compensan con una sensación tan gratificante que, incluso, dan ganas de repetir todo el proceso”.

El dolor es inevitable, pero el su-frimiento es opcional, depende de uno. Ahí es cuando uno se da cuenta que está corriendo con el corazón. En esos kilómetros de quiebre pude ver algunos de mis colegas corredores detenerse por el cansancio y la fati-ga, u obligados por algún calambre. A partir de ahí, cada kilómetro es una pequeña victoria. Es necesario acudir a todos los pensamientos positivos que están al alcance de uno, y a la repetición de mantras. El principio de un mantra es el concepto básico de que el sonido es vibración y toda vibración a su vez genera energía. El ritmo y vibración que éstos producen permiten enfocar la mente y concen-trarnos en un propósito. En este caso, llegar a la meta.

Me gustan las palabras de Fred Lebow, creador del maratón de New York, sobre las motivaciones para enfrentar este tremendo desafío: “No podemos echar alas y volar. La

BOLIVIA VIVA

ción de pie”.Eso es exactamente lo que sentí

cuando corría los últimos metros de mi primer maratón. Cuando mi

Page 20: Edición Nº 502: Con el ojopuesto enInternet

www.semanariouno.orgViernes 8 de marzo de 2013Santa Cruz de la Sierra • Bolivia

20