XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA
EN HONOR DE
SAN ISIDRO LABRADOR
Presentadora: Aitana Sollo DoñaPregonero: Manuel Sollo Fernández
TEATRO MUNICIPAL LOS PALACIOS Y VILLAFRANCA
29 DE ABRIL DE 2012
PRESENTACIÓN A CARGO DE AITANA SOLLO DOÑA,HIJA DEL PREGONERO
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Señor alcalde, don Juan Manuel Valle,
Señor párroco de Santa María la Blanca,
Señor presidente y miembros del Consejo de Hermandades y Cofradías,
Juntas de Gobierno,
Señor hermano mayor de la Hermandad de San Isidro, José Manuel Antequera,
romeros y vecinos;
Señor pregonero, don Manuel Sollo, papá.
Con su permiso vengo hoy, 29 de abril de 2012, a presentar al pregonero de nuestra Romería en honor de San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza. Y me muestro ante ustedes llena de emoción y alegría porque es para mí todo un honor que San Isidro haya elegido a mi padre, quién con botos en los pies, sombrero de ala ancha en la cabeza y varal en mano recorre cada mayo la carretera de El Monte hasta el parque de la Corchuela, cierto es que unos ratitos a pie y otros subido en el carro, cantando, disfrutando de familiares y amigos, y acompañando a sus santos en una fiesta que rebosa amor, confraternidad y fe.
Además, ¿quién mejor para hablar de un padre que una hija?
Mi padre, Manuel Sollo Fernández, nació un 17 de diciembre de hace 51 años. Natural de aquí, “del pueblo”, creció en una casa que su abuelo tenía en la avenida de Cádiz. Mi abuela Rosario siempre cuenta que, como en aquel tiempo no existían los parques para niños, lo crió en una caja de tomates. A él le gusta decirlo porque, por más que haya viajado, jamás ha olvidado de donde procede y lleva orgulloso sus raíces por bandera allá donde va.Comenzó a estudiar en lo que antiguamente era el colegio Palenque y ya algo más mayor pasó a las Escuelas Parroquiales, donde Cipriano Ogállar, su profesor, convenció a mi abuelo para que estudiase: “¡Qué este niño vale, don José!”. Y tanto que valía.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Era, y sigue siendo bajito, aunque ya no tan enclenque como entonces, y pasaba más tiempo en la consulta del doctor don Casto Estefanía que jugando en la calle. Un niño de matrícula de honor que lo que más temía en el mundo era la hora de la clase de Educación Física. Este fue uno de los motivos que impulsó a mi abuelo a inscribirlo en los Salesianos de Utrera, donde cursó de cuarto a octavo de EGB. En esta época comenzó a sentirse atraído por el mundo de la poesía.
Para hacer bachillerato se trasladó hasta el Instituto Virgen del Valme, de Dos Hermanas, donde descubrió de verdad la literatura y la política, debido a que entabló buenas relaciones con profesores, la mayoría escritores, como Antonio Rodríguez y el pintor Diego Ruiz, quién le hizo un retrato a carboncillo que conserva mi abuela en el salón como si de un Picasso se tratara.
Los cambios políticos y sociales que acarreó la llegada de la Transición le abrió un abanico de posibilidades para tener una juventud intensa. Entre canciones de Triana y poesías de Antonio Machado, Félix Grande, Omar Khayyam... nuestro pregonero se va convirtiendo en hombre; en un hombre bueno, como nuestro San Isidro, porque mi padre quizás no conozca mucho del campo y la labranza, pero sí del sacrificio y del trabajo. Abriéndose camino en el mundo literario, gana varios certámenes de literatura. A mi abuela le gusta recordarme aquel en la Feria de La Algaba, cuando con sólo catorce años le regalaron un jamón y dos mil pesetas, las cuales ella dice que, si hubiese tenido dinero, las hubiera enmarcado como recuerdo.
Demostró su deseo de libertad participando en numerosas movilizaciones estudiantiles, luchador desde chico, defensor de los derechos humanos. Así era nuestro Manolo, un alma joven cuyo más puro deseo era colaborar para hacer de este un mundo mejor, más justo.
En los pocos ratos libres que le dejaban los estudios se dedicaba a las actividades que el pueblo le ofrecía. Porque siempre ha estado muy vinculado a Los Palacios, y en 1977, cuando era todavía un chiquillo de 17 años, se convirtió en el primer presidente de la Asociación Cultural Juvenil “Searus” y participó en la edición del libro de poemas “Por la Ventana”, junto a otros autores locales.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Una vez aprobada la Selectividad, consiguió convencer a mis abuelos para que lo dejaran ir a estudiar Periodismo a Madrid, puesto que a él, aparte de vivir los momentos, lo que realmente le apasionaba era contarlos. Mis abuelos, con un gran esfuerzo personal y económico, le apoyaron en todo lo posible. Mi padre siente que nunca les estará lo bastante agradecido por todo lo que hicieron y hacen por él.
Gracias a esa ayuda, junto con una beca, nuestro joven soñador consiguió sobrevivir en el Madrid de principios de los 80. Pero a él nunca le han regalado nada, y al poco tiempo de su llegada empezó a ejercer de periodista en una agencia que surtía de reportajes a revistas del corazón (sí, créanselo), y después, mientras cursaba tercero de carrera, comenzó a trabajar como redactor en la revista Noticias Obreras, además de crear y gestionar los gabinetes de prensa de los congresos de Teología convocados en Madrid por los sectores más progresistas de la Iglesia.
Durante su etapa en la capital llevó a cabo colaboraciones en publicaciones como la revista “Comunidad Escolar”, editada por el Ministerio de Educación, y el periódico “Liberación”, además de ser el responsable de la elaboración del primer “Fondo Básico de Documentación sobre Animación Sociocultural” realizado en España, encargado por el Ministerio de Cultura. ¡Pues sí que era verdad que el niño valía, don José!
Aparte de los logros académicos y de la experiencia profesional, nuestro periodista en ciernes también supo exprimir el Madrid de la movida, con un millón de posibilidades en exposiciones, conciertos y nuevas culturas.Este cambio en su vida lo alejó físicamente de su pueblo, mas no en espíritu; un espíritu impregnado de aires de marisma que echaba de menos el repicar de las campanas de la Iglesia grande un domingo de mayo, un despertar de cohetes antes de las 7 y el olor a madera y huerto que desprende la carreta de, entonces, sólo San Isidro Labrador.
Y el corazón de este joven no sólo estaba ocupado por sueños y letras, sino también por una mujer, María José Doña Oliveros, Pepa, que, cuatro años menor que él, residía aquí, en Los Palacios. Él siempre bromea diciendo que se hacía mil kilómetros en un fin de semana solo para poder verla y aún así mi abuelo Paco (mi otro abuelo) la obligaba a estar a las 11 en casa. Pero es lo que tiene el amor, papá, y tú mejor que nadie sabes que
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
hubieras recorrido el doble y las veces que hiciera falta, si hubiese sido necesario.
Una vez terminada la carrera y con su beca de prácticas en Radio Nacional de España, concedida y renovada varias veces, el 26 de enero de 1986 contrajo matrimonio en la Parroquia del Sagrado Corazón con la que hoy día sigue siendo la mujer de su vida, mi madre. Él tenía 25 años, ella tan sólo 21. Y desde entonces, todavía jóvenes e ingenuos (recordar que a mi madre le robaron el pasaporte el día antes de su viaje de novios a Lisboa), hasta ahora, han sabido hacerse feliz y apoyarse, y organizar una vida juntos llena de vivencias, esfuerzos y más alegrías que tristezas.
Marcharon a vivir a Madrid, donde mi padre todavía tenía que hacer la mili al tiempo que trabajaba. Una vez terminada, convocaron oposiciones en la radio y ambos decidieron que se presentara por Sevilla, puesto que aquí estaba su gente y pensaron que para crear una familia no habría mejor lugar.Como no podía ser de otra manera, aprobó. Y volvieron a casa, y mis abuelos más contentos que niños con zapatos nuevos.
Aunque la adaptación no fue fácil, acostumbrado después de nueve años a vivir en una gran ciudad, jamás se ha arrepentido de volver a Los Palacios. Siempre rodeado de sus seres más queridos: Desde sus cuatro hermanos, Florencia, Francisco José, Aurora y Conso, ellos saben que él los adora, hasta sus amigos del alma: mi tío Pollo, Paco Márquez, mi tío Bene... tanto en los momentos malos, que junto a ellos no lo son tanto, como en los buenos, que nunca han sido pocos, gracias a Dios. Creo que no me equivoco si digo que todos los que lo han necesitado lo han tenido.
Una vez establecido en nuestro pueblo y con su trabajo en Sevilla, cada vez que ha podido ha llevado a cabo otra de sus grandes pasiones, viajar, y lo ha hecho por casi toda Europa, por Turquía. Le gusta recordar su viaje a Nueva York y a Los Ángeles, éste último de trabajo, donde asistió a una fiesta en la casa de Antonio Banderas rodeado de estrellas de Hollywood.
En Radio Nacional de España en Andalucía ha hecho de todo, desde retransmitir un partido de fútbol hasta seguir a un partido político en una campaña electoral por toda la comunidad en una furgoneta cual cantante de Rock. Ha coordinado campañas electorales, ha sido editor, Coordinador de Redacción, Jefe de Informativos y en la actualidad Director Adjunto.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Sigue formándose y hace unos años realizó los cursos previos al Doctorado. Ahora busca tiempo para realizar su tesis.
Heredó de mi abuelo el sentido del trabajo, del esfuerzo y del deber, y de mi abuela la facilidad para compaginar todo esto con la diversión. No le veréis perderse sin motivo la Romería, la Semana Santa (de la que fue pregonero en 1997), o la feria, momentos en los que se rodea de buena gente, la gente de su pueblo, su gente.
Mi padre tiene grandes inquietudes culturales, le encanta la buena música, ir al teatro y sobre todo leer. En casa ya no caben más libros, y más de una vez ha escuchado la frase “¡Manué, no cabemos con tus libros, como traigas más... serán o los libros o tú, tu verás!”, pero él siempre les encuentra un hueco.
Con el tiempo ha dejado en un segundo plano la novela y hasta la poesía y se ha centrado en el ensayo. En los últimos años lee sobre la evolución humana, ya que él mismo se define como “un hombre de letras que ha envidiado siempre a los científicos”, a los que ahora se afana por entender. Y no le queda otra, ya que su única hija, Aitana Sollo Doña, “la niña de Sollo, el periodista”, nacida el 25 de mayo de 1992, que hoy os habla, está estudiando Ingeniería Química.
Nuestro pregonero, tan independiente como comprometido con la cultura, la educación y el progreso, con los años se ha ido haciendo más escéptico, pero eso no quita para que siga luchando a diario, con tesón, por todo aquello en lo que siempre ha creído: la justicia, la libertad, la solidaridad. En definitiva, sigue buscando alternativas, intentando poner su granito de arena para que los que venimos detrás nos encontremos un mundo un poquito mejor.
Aquí te dejo a tu pueblo impaciente por escuchar ese pregón que con tanto cariño y esmero has realizado. Aquí te dejo a tu gente deseosa de acoger tus palabras de pregonero. ¡Padre, alza tu voz de romero!
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
PREGÓN DE ROMERÍA
“SEMBRADOR DE
PALABRAS”
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Verán ustedes,
He tenido un sueño.
Soñaba que María con Isidro,
Santos que fueron de Madrid al cielo,
Viven en Los Palacios y Villafranca,
Capital de los manchoneros,
Y residen en Santa María la Blanca,
En una capillita de ensueño
Que iluminan los ángeles al alba
Con flores frescas de tallos tiernos.
Soñaba el pregonero que la tierra
Con sus manos, su bestia y sus aperos
Cultivaba para alimentar a su prole
Y ayudar al hermano hambriento.
He soñado que la primavera brotaba
Para vivir la pasión del romero
Como si la esperanza renaciese
Del surco que se alza al firmamento.
Soñaba que los campos florecían
Renovados de savia nueva, ángeles
Que en el repique de campanas
Anunciaban la Romería.
He soñado vivir en una calle encalada
En la que los vecinos en familia
Hacíamos de luz una carroza,
Con papelillos de amor y alegría.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Soñaba con ser cohete de alerta
Que guiara a San Isidro hasta la Gira,
Con Santa María de la Cabeza,
Por un camino abierto a la vida.
Andaba el pregonero entre el gentío,
Caminante feliz con su pueblo
Que a los pinos de la Corchuela iba
Con sus santos labriegos benditos.
Rezaba por sevillanas a su paso,
Rompía la voz en un revuelo de palmas
Unida a otras voces de siglos
Que se elevaban como plegarias.
Resonaban en las calles
Los relinchos de mi jaca,
Y una palaciega de ojos oscuros
Se ceñía a mi faja.
Pinturero sobre la bestia,
Cante que a la bestia amansa,
Camino de La Corchuela
Abriendo vereda en la mañana
Para gloria de mi patrón
Que me bendijo al alba.
En el sueño llevaba yo
La fe en una jarra de plata
Y la esparcía desde la torre
A cada una de las casas,
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Que está de fiesta, en romería,
Los Palacios y Villafranca.
Pero en el alterado despertar
Se desdibujó el embrujo del sueño
Y ante la imagen noble de San Isidro
Tuve que confesar mi desaliento.
Que no, Isidro, que yo no soy agricultor
Ni sé de cultivos ni de labranzas.
Que no tengo una calle para hacer la carreta
Y lo cohetes me asustan y sobresaltan.
Que yo no soy caballista,
Que el camino es largo y me cansa,
Que mi voz rota no puede cantarte
Y por no tener, no tengo ni medalla.
Y la fe, ay la fe, cuantas noches a oscuras
Siento que me falta.
Que no sé por qué, San Isidro,
Tengo la osadía de ser tu pregonero
Si estas manos agradecidas
Sólo se sostienen en la palabra.
Y en el principio fue el Verbo. Sea pues.
Que este romero, sencillo peregrino,
En alabanza quiere ofrecerte su sueño.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
SALUDOS AUTORIDADES
Quiero dar la bienvenida al
- Señor Párroco de Santa María la Blanca, don José María Guzmán-Sánchez
de Alva.
- Señor alcalde de Los Palacios y Villafranca, don Juan Manuel Valle Chacón.
- Señor Presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, don Miguel
Bernal.
- Señor representante de la Policía Local, Coordinador de Protocolo y Prensa,
don Jorge Davir Villén Molina.
- Señor Hermano Mayor de la Hermandad y Cofradía de San Isidro Labrador y
pronto quizá también de Santa María de la Cabeza, don José Manuel
Antequera Salmerón.
- Señora presentadora, doña Aitana Sollo Doña, que ha conseguido vencer una
semana de fiebre para estar hoy aquí.
Agradecer también la presencia de familiares, amigos, romeros y vecinos.
Gracias por vuestra presencia.
Y perdonen ustedes, disculpen el atrevimiento, pero me llama el Santo.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
DEDICATORIA FAMILIAR
Vaya presentación de la niña. Estarás orgulloso, me dice.
Y agradecido, le respondo. Ya ves cómo crece, buen amigo. Hasta hace nada
era “Aitana, niña mía”, como aquel poema de Rafael Alberti del que surgió su
nombre. Pero esta chiquilla cumplirá en unos días 20 años y sigue siendo un
don del cielo. Por eso te pido que me la cuides, que la ayudes en la vida, y que
le cumplas todos sus deseos. Ten en cuenta que más que de ingeniera, con lo
que le gustan las fiestas, tiene alma de concejala de festejos.
¿Y la madre? Se interesa San Isidro. María José, a la que yo llamo Pepa, es la
dueña de esta medalla, que ella sí es auténtica romera. Imagínate, en 26 años
de matrimonio esta mujer ha demostrado una paciencia infinita, un carácter
poderoso y un amor a prueba de calendario. Tú lo sabes también, qué sería de
nosotros, los hombres, sin estas compañeras fuertes, leales y dúctiles como
juncos con las que compartimos la vida a diario.
Mis padres hace mucho que no vienen de romería. Mi madre Rosario trabajó
con tanto ahínco en el arroz de niña y de moza que creo que se le fueron
quitando las ganas de campo. Y mi padre José, hombre de taller y yunque,
tampoco es aficionado. De sus manos salieron muchos de los carros que
todavía hoy llevan a los vecinos a La Corchuela y, antes de jubilarse del todo,
hace solo unos meses, nos ha legado un charré y un carro de tanto tronío que
parecemos hacendados.
De mis padres guardo, como oro en paño, una vieja foto en la Gira, que
demuestra que ellos también fueron jóvenes, circunstancia que a los hijos se
nos hace tantas veces extraña. Como os quiero, tan mayores, José y Rosario.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
A mi hermana Florencia, que de un trozo de tela te dibuja el más hermoso traje
de flamenca, la tienes casi siempre cerca, Isidro, con mi sobrino Antonio, en la
carreta de “Por poquito”, detrás de “Añoranza”; las dos de papelillos y
cadenetas, y tiradas por varias toneladas de bueyes, a la antigua usanza.
La Aurora sólo vive pa su Remedios y su sor Ángela, y de verdad que le dan
una fuerza suprema que tantos quisiéramos. Protégela tú también, santo mío,
que ya la vida le ha dao más sustos de los que soportar pudiéramos. A la chica,
Consolación, basta con tararearle unas coplillas y se arranca como un pavo
real. Y mi hermano Francisco es más de playa, y eso que los botos de mi
camino me los prestó él hace tres años, y ahí los tengo, ya ahormaos,
preparados para caminar.
Qué quieres que te diga, de to hay en cada casa. Ahí tienes a mi cuñada Mari,
quién nos iba a decir que sería miembro de la Junta de Gobierno de tu
Hermandad, al lado de nuestro querido hermano mayor, José Manuel
Antequera. Y a su marido, mi compadre, Francisco González, el Pollero, capaz,
si no lo hubiera, de criarte una rosa en sus manos para adornar con mimo tu
carreta.
Cuánta gente, pregonero, cómo para que se te acerquen al carro. Y faltan
algunos más que saben que están aquí dentro. Pero no te preocupes, Patrón,
que al que comparte lo que tiene no se le puede pedir más, como bien dice el
refranero.
PROLEGÓMENOS DE ROMERÍA
Está fresca la mañana. Menos mal, San Isidro, que la caló vendrá luego. Qué
días de caballos y mulas, de charrés y de carros para acostumbrar a los
animales al ruido de las calles del pueblo.
Qué días de compras y arreglos: Que si tengo que probarme el traje, que si me
faltan la flor y los pendientes, que si vaqueros, que si tirantes, y para los pies,
mejor unas zapatillas, si te aprietan los botos camperos.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Qué colas en los supermercados para comprar... lo que todos compramos. Qué
tiempos aquellos, ¿verdad?, de la tarde entera en familia o con amigos,
haciendo tortillas y filetes empanaos... Y el que coja una gamba que la
devuelva, que está justita la cosa.
¿Cuánto hay que poner para el costo? …Algo más, que habrá que invitar a los
que se acercan, a ver si nos vamos a quedar cortos. Ya lo contó mi amigo Paco
Márquez en su pregón del Rocío: compramos lo que le gusta a la gente, y ya
está. Y quién es la gente, decía Paco, para responderse: Pos quién va sé, pos
nosotros y to el que se presente.
Pero todo cambia. Y ahora..., ahora echamos un rato en el Mercadona, vengan
carros de licores, refrescos y cervezas, unos plastiquitos de queso y de
chacinas, poquito jamón en la despensa y las gambas casi ni olerlas, que más
que a la Gira parece que vamos de botellona. Dime tú, San Isidro, si no es para
ir poniendo alguna regla.
Anda, déjate de bromas. Viste ayer tarde qué momentos más emotivos en la
misa de romeros. Cierto, cuando vino Dios para quedarse y se derramó la
gracia por todo el pueblo. Se hará presente en la alegría de los palaciegos. Nos
acompañará por la gloria de este bendito sendero, camino de La Corchuela,
que es como peregrinar por una vereíta de ensueño hacia el cielo.
Desde la madrugá se vive un trajín inquieto. Unos terminan de preparar los
carros, otros enjaezan mulos y caballos, el más listo se retrasa y se recrea en
el traje corto, el perfil de las patillas y el sombrero de ala ancha. Ellas se
adornan en las interioridades de las casas; tranquilas, que hay tiempo, que
todavía es de noche, ahora vendrá el alba.
A mí, tan torpe en los quehaceres cotidianos, siempre me toca ir a por el hielo,
mientras mi compadre carga y ordena el carro: debajo de los asientos las
bebidas, más allá las tortillas, a mano los montaditos, no vayas a esconder la
chacina, deja cerca el fino y el seven up y la cafetera de los rebujitos. Luego
ayuda a enganchar las bestias al cochero.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
- Aquí no hay sitio pa tos.
- Si nos apretamos cabemos, y si no, a andar, que también el Santo quiere
compaña. No solo a la ida, que la vuelta se hace más larga.
La emoción puede al frío. Nos va abrigando la mañana.
- Toma una copa de anís, que notes el calorcillo.
Amanece tan lentamente que es caricia el rocío.
- ¿Qué número tenemos? Deja espacio. Ponte en el sitio. Hazle caso al alcalde
de carretas, cochero, que es hombre cabal, alegre y dicharachero.
En torno a la Parroquia de Santa María la Blanca ya hay revuelo. Repican las
campanas sobre tanto jaleo. Alertan las cigüeñas. Por la torre sube un
cosquilleo. Serán las notas de José Antonio, el tamborilero. Será el silbido de
un cohete jaranero. De esos que anuncian que San Isidro y Santa María de la
Cabeza nos esperan en el templo. Sobre el gentío hay quien musita una
oración para sus adentros. Se va haciendo la luz como de la nada y los
congregados ya sentimos un íntimo escalofrío. Esta súplica a solas, mi santo
labrador, es la devoción de un pueblo que por ti se hace peregrino.
LA VIRGEN DE LAS NIEVES NOS DESPIDE
Afectuoso nos despide el párroco don José María, el año pasado ante las
miradas sorprendidas del Gran Poder y la Virgen de la Soledad, acogidos en la
Parroquia mientras terminaban las obras de su casa.
Entre rezos y gracias, la Virgen de las Nieves nos arropa como una madre
nerviosa. Hijos, sed prudentes, Manué tu no bebas, respetad la fila, ojo con los
caballos, agarra fuerte las riendas, lleva con suavidad el carro, cuidad de las
bestias...
Con un amor infinito nos aconseja... Festejad con San Isidro los dones de la
tierra, amad al prójimo como a vosotros mismos, perdonad las ofensas y
compartid el pan y el vino como cuando mi Hijo os invita a su mesa.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
La Virgen de las Nieves, tan contenta que se quiere venir de romera para estar
con su pueblo en este día de fiesta. Y gritar con todos nosotros: Que Dios
bendiga a San Isidro en esta celeste primavera.
La devoción se hace asombro cuando un ramillete de mujeres, como ángeles
custodios, lleva al Santo del altar a la carreta, luminosa en colorido de flores
nuevas. Las campanillas tintinean. Narciso con su mando a los bueyes sosiega.
Con mimo, manos temblorosas colocan sobre su peana la imagen sagrada de
madera. Y detrás, como en volandas, traen a Santa María de la Cabeza.
Después de 50 años, el tesón de Antequera y su Junta logró que la mujer de
San Isidro peregrinara con la Hermandad por primera vez el año pasado y este
pueblo acogedor y abierto hizo suya a esta dulce pareja. Cumplió su sueño de
niña Ana María Acosta. Hasta el señor párroco propuso en el pregón de hace
un año que su hijo Iván, también santo, al matrimonio se uniera.
Que así sea si ha de ser, que esta familia es ejemplo cristiano del amor; de ese
amor que los palaciegos siembran en su romería para cosechar durante el año
convivencia, solidaridad, paz y armonía; para que la fe y la tradición
permanezcan como lazos que nos unen a lo más profundo de esta tierra; para
que broten del fondo del alma la esperanza, la justicia y la sabiduría. Para que
seamos hermanos de corazón en aquel que dijo “Yo soy el camino, la verdad y
la vida”.
POR LA RAÍZ DE LOS PALACIOS
Bajamos del porche y enfilamos Cristóbal Colón. ¡Mira que cambiar por el
conquistador lo que fue calle del Paraíso! Ni Andrés Bernáldez, el Cura de Los
Palacios, lo hubiera creído.
Ahora la callecita de cuesta se convierte en alfombra y entiendes por qué nadie
puede cambiarle la seña; por qué se abren de par en par los soberaos de viejas
casas labriegas, por qué el pueblo palaciego a estos santos venera.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Desde la esquina con Antonio Machado, otra calle con solera, aparece, como
en una foto en sepia, el perfil de San Isidro recortado sobre la torre señera,
fulgor en la espadaña que a diario nos vela, arcángeles divinos hacen tronar las
trompetas, y embelesada a las puertas del templo la Virgen del Rosario sueña
con un traje de flamenca, rojo, azul y amarillo, colores de nuestra bandera, para
venirse, con su niño de la mano, a la gira del Santo Patrón, devota peregrina
que por sevillanas reza.
Avanzamos a la sombra de Santa María la Blanca, por la raíz de Los Palacios,
por la húmeda entraña que nos enlaza con nuestra historia, esa sucesión de
hechos que han ido esculpiendo a nuestros antepasados hasta llegar a
nosotros, ese ideario que nos identifica con las imágenes que nos conmueven
desde niño.
En aquel Pregón de Semana Santa del año de gracia de 1997 me referí a esa
profunda artería del pueblo que va de la calle Abajo a San Sebastián, pasando
por la Aurora y Real de Villafranca, como un Viacrucis penitente de capilla a
capilla.
Quién nos diría que pocas semanas después la Romería nos iba a traer la
máxima expresión de una resurrección gozosa, la de nuestras gentes
compartiendo el ánimo de la fiesta y la virtud que esparcen por nuestros
campos San Isidro y Santa María de la Cabeza.
ANTE LA CAPILLA SERVITA
Así esta marea humana que se mueve al son de la brisa de la marisma llega a
la Capilla de los Servitas. Allí donde el tiempo se detuvo un Viernes Santo en
las implorantes manos de la Virgen de los Dolores ante su Hijo Yacente, Cristo
de la Misericordia.
Escuchará los golpeteos de las jacas, las palmas, el tambor, el revuelo de
volantes, la flauta. La gente arremolinada a su puerta. Y esa Madre Dolorosa
que al cielo mira acogerá en su seno a nuestra santa pareja, y bendecirá a los
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
miles de romeros que iniciamos el camino, el que ya viene marcado y el que
nos dicta el corazón, los dos florecidos de pureza.
Es un abanico colorista que se extiende calle alante, abierto por jóvenes
hermanos que portan los estandartes.
Es una riada de luz que viene a compás del cansino paso de los bueyes, a
compás de los briosos jinetes que abren la mañana isidreña para guardar y
proteger a los caminantes, a compás de los naranjos, plenos de azahares, que
al paso del imponente cortejo mecen y perfuman el aire.
Las ilusiones renovadas se hacen cante. ¿Has visto alguna vez, hermano,
tanto donaire? ¿Todavía te preguntas por el misterio cuando todo este sentir es
una explosión de arte? Mira, asómate a la puerta. No hay estampa más bonita
ni sinfonía de más belleza que esta buena gente palaciega, que expresan la
más bella alegría ante un templete de santidad construido por manos
jornaleras.
HOMENAJE A LA MUJER
Mira a nuestras mujeres, su gallarda hermosura, su empaque de bellas
hembras, sus andares firmes, su profundo carácter, su dulzura excelsa, su
coraje vitalista, su matriarcal fortaleza. Mira cómo lucen vestidas de gitanas,
acariciadas por finas prendas.
Aquí una toquita para el fresco, escondido no se sabe dónde un abanico para
la calor, sobre los hombros un mantoncillo de seda. En la cabeza la flor,
peinecillos y la peineta. Con que encanto se embellecen, qué gallardía más
flamenca. Con qué gracia cantan y bailan, con qué primor te galantean.
Las ves venir caminando, calle Abajo hasta la Aurora, y parecen rosas
desprendidas de la carreta, pétalos que San Isidro regala a Santa María de la
Cabeza, mujer que simboliza mejor que nadie este homenaje a la mujer
palaciega.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Se oirán al paso las frases consabidas: Niña, este año va más gente que
nunca. ¡Qué bonitas las flores de la carreta! Y lleva tomate y sandía, y trigo y
algodón, frutos y cultivos de nuestras huertas. Pues no parece que se ríe Santa
María de la Cabeza, con tanta bulla a su vera. Y San Isidro, con esa carita de
bueno, solo de mirarlo te quita las penas.
Mira qué traje tan bonito, le dice la una a la otra. Ese seguro que es comprao
en Sevilla. Deja, deja, que en el pueblo también los hay con tela de gracia. Este
es del año pasado, que me lo hizo una vecina costurera, y esta la cosa mu
mala pa añadirle gastos extras. Pero, hija, tú crees que alguien se dará cuenta.
Cómo que si... ya me han dicho que este corte no se lleva.
Y le he respondido que yo a la romería vengo a acompañar a mis santos, a
compartir con mis vecinos y a disfrutar de la fiesta. Que qué más da si se lleva
o no se lleva. Que lo importante es tener un corazón de una pieza, querer a tu
gente y entregarte a tu pueblo de los pies a la cabeza. Que no por tener más al
cielo antes se entra. Eso le dije, pero vamos, que el año que viene yo estreno
un traje de flamenca.
ANTE LA CAPILLA DE LA AURORA
De nuevo Isidro se acerca, a la sombra de las altas palmeras. Este año
volveremos a parar en la Aurora, acicalada tras la restauración esa capilla
coqueta.
Volveremos a contemplar la maestría del boyero para bajar la testuz de las
bestias ante esa virgencita que se llama como mi hermana y mi abuela, que
Dios la tendrá en su gloria. Qué conmovedor será rezar de nuevo ante la
poderosa imagen del Gran Poder con la voz queda para no alterar el silencio
de cuantos siglos aquí reposan. Esa Cruz sobre los hombros del Nazareno
alumbrará el devenir de San Isidro, que le pedirá a la Virgen de la Soledad,
ahora más acompañada que nunca, que nos aliente y proteja. Igual que guarda
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
la memoria del bueno de Paco Cabrera, feliz esta mañana con los bulliciosos
cantes en su plazuela.
Los vecinos se agolpan al paso mientras ya vamos por Real de Villafranca.
Cada casa es una ermita. Se elevan los ecos de las gargantas. La flauta anima
el andar. Marca el compás una guitarra. El tambor anuncia el camino. Entre
azahares relincha una jaca. Un jinete altanero se adorna con una filigrana. La
alegría se desborda donde la calle se ensancha. La esencia de este pueblo
enraíza en Villafranca que fue de las Marismas hasta que buscó a Los Palacios
al otro lado del arroyo de la Raya, y en un apretón de manos, como bien refleja
nuestro escudo, dos labriegos sellaron esta alianza.
CAPILLA DE SAN SEBASTIÁN
El Furraque al fondo, con su capillita de fina estampa. San Sebastián, Cautivo,
Vera Cruz y Madre Remedios se preguntan por el alborozo y la algarabía
inusitada. Repican de nuevo, con más fuerza si cabe, como avisando a los
cielos, las festivas campanas.
Miles de personas llegan en bandada. Ante el templo se inclinan, se descubren,
se persignan. Las Juntas de Gobierno se desean parabienes y se abrazan.
Narciso empuja a los bueyes hasta el quicio mismo de la puerta. Van a temblar
los cimientos de esa santa casa. Feliz se siente San Isidro, labrador pobre, con
su mujer del brazo. Laborioso agricultor arropado por el pueblo, que antes de
salir al campo, va a rezar ante nuestra Virgen, toda ternura, de los Remedios.
También entonces nos llegará por el aire el cariñoso adiós de las Parroquias
del Sagrado Corazón de Jesús y del Buen Pastor. Y de la Almazara vendrá una
coplilla de despedida, la tararea la Virgen de los Ángeles, madre risueña que
consuela a la Borriquita que anhela en su capilla venirse de Romería.
LA GLORIETA DE LOS PEREGRINOS
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Nos queda un instante más antes de tirar para La Corchuela. La Glorieta de los
Peregrinos, donde la Gira y el Rocío confluyen en un mismo sentimiento y nos
señalan la santificada senda.
Aparecerá la comitiva desde el Furraque, como una explosión de encanto. La
escultura, mujer de empaque rociero y niño isidril, ambos con su medalla
puesta, parece recobrar vida entre jinetes, carros y flamencas.
Vendrán las autoridades con su homenaje de flores y espigas. La fotografía
para el recuerdo, que pasado el tiempo mis nietos la vean. Y el baile que dibuja
la gracia de un revuelo de faldas y zahones, y ese caballista joven que se
pavonea con su guapa morena.
Aquí cobran vida todos los meses de mayo que nos han sido concedidos. Aquí
se hermanan nuestras fiestas de primavera. De aquí parten nuestras romerías
para ir sembrando de peregrinos las tierras de la baja Andalucía. Florecen los
campos que engendran el milagro de la cosecha. Crece un tímido clavel
aferrado al humus de una maceta. Se adornan de frutos y flores silvestres las
tierras.
Desde las entrañas de mayo no hay más motivo que la fe para hacerse romero
desde esta primorosa glorieta. Como bien dice la copla, no es suficiente el vino
y el cantar, no basta con la fiesta. Hay un impulso interior que del rezo a la
gloria te lleva. Andemos, pues ya solo nos queda un camino, que terminará, si
Dios quiere, entre los pinares de La Corchuela.
CABALLOS Y JINETES
Por la Carretera del Monte, con ese medio siglo de alegrías que
conmemoramos el año pasado, vamos a paso firme, pero con tiento, que la
prisa es mala consejera. Desde el Puente de la Rubia, cómo refulge entre tanto
barroquismo esa neoclásica carreta; qué marejada de carros, que uno teme
que el último todavía no haya salido de la Avenida de las Marismas, y la cola
llegue a los pies de la Iglesia.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Jadeantes por la breve subida, crece el ambiente. Cientos de caballos abren la
Romería y jalonan los pencales y las cunetas en una imagen única que tiene a
gala esta tierra. Que dicen que aquí nació, entre marismas y toros, la doma a la
vaquera.
El ganado con sus mejores arreos, van los jinetes ataviados de etiqueta, a la
grupa las más guapas flamencas, las hermosas amazonas con dulzura
apaciguan a las bestias. Hasta las burras y las mulas van de pitiminí, con garbo
postinero. Que esta gira es ejemplo de galanura y prestancia romera, como una
niña presumida que se mira en el espejo.
Qué caritas de asombrados llevan San Isidro y Santa María de la Cabeza.
Caballistas para arriba y para abajo, siempre alertas, y los charrés, las carrozas
y los carros detrás, con familias risueñas y una juventud animosa.
Si la caló aprieta, que apretará, siempre hay quien va y viene a la despensa.
Por voluntad o mandao, que todos contribuyen en la faena. Ahora trae rebujito
en una cafetera, luego una cerveza, con suerte alguna tapita. Niño, mira que
traé chorizo, si el jamón está al lao de la nevera. Y así vamos haciendo la
mañana más llevadera.
El tamboril y la flauta al ensimismado despiertan. Que ahora se arranca uno a
cantar por sevillanas de época. Que ya otra redobla las palmas y la de más allá
levanta los brazos y mueve las caderas. Si lentas, las bailamos lentas; si
corraleras, las bailamos más ligeras. Así vamos abriendo la ruta que nos ha de
llevar a la gloria que habita en La Corchuela.
LA HERMANDAD, GENTE NOBLE Y SENCILLA
Verás, hombre santo, que los palaciegos te veneran. Hasta los colegios quiere
llevarte el hermano mayor, Antequera, para que la semilla del santo en la
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
inocencia clara de nuestros chiquillos prenda, que arraigue la devoción, que
este espíritu de concordia nunca se pierda.
Ya ves, San Isidro, cómo vives en nuestros corazones, con Santa María de la
Cabeza. Para eso trabaja todo el año esta Hermandad de gente sencilla,
humilde y noble, de fuertes convicciones entroncadas en lo mejor de nuestro
pasado, la agricultura milenaria de nuestros campos, pero también presentes
en lo que haya de venir. Porque quien reniega de su historia o la olvida está
condenado a perder el futuro.
Siempre faltan manos para sacar adelante la hermandad. Por muy austero que
se sea, nunca alcanza el presupuesto, si se tapa aquí, agujerea por allí. Pero
todavía queda para la solidaridad, y este pasado agosto, se organizó, con la
Hermandad Sacramental de Nuestra Señora de las Nieves, el primer Gran
Festival Flamenco de Cantaores Palaciegos. Los beneficios fueron para
Cáritas. Con eso está todo dicho.
Por eso mismo, yo quisiera hoy pediros un pequeño esfuerzo. Es opinión
generalizada que a la romería va todo el pueblo. Bueno, dejémoslo en más de
la mitad, más o menos. Pues bien, os animo en mi condición de modesto
pregonero a que os hagáis hermanos de San Isidro, la cuota es casi simbólica
y aportaréis vuestro gratificante granito de arena.
Luego sería mejor para todos que vivamos durante el año el hondo significado
de ser romero, de proclamar a San Isidro a los cuatro vientos, y seguir los
pasos de este hombre bueno, que regó los surcos con la semilla que nuestros
antepasados nos legaron, aquellos hombres y mujeres cabales, que
cimentaron esta fe y que con amor y sacrificio esta hermandad levantaron.
Así, es justo recordar hoy aquí a los cientos de vecinos que desde hace más de
50 años han trabajado duramente y bajo todo tipo de circunstancias por
organizar nuestra Romería, por crear la primitiva Agrupación Parroquial que
durante 18 años se afanó por convertirse en Hermandad, lo que al fin se logró
en 2004 cuando el Arzobispado de Sevilla aprobó sus reglas.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Recitar sus nombres requeriría otro pregón. Valga decir en agradecimiento y
como mejor homenaje que viven para siempre en nuestra memoria.
RECUERDO A NUESTROS MAYORES
Todavía en 2007 esta labor incansable dio otro fruto que llevamos a gala como
un adorno en el ojal o una espiga en el sombrero: la Junta de Andalucía declaró
a nuestra romería Fiesta de Interés Turístico de Andalucía. Lo que vino a
reconocer lo que tantos de nosotros ya sabíamos, su poderosa tradición
popular y sus valores turísticos, sociales, religiosos y humanos. Aquella
declaración vino a valorar la singularidad y la raigambre de una festividad que
tiene su atractivo principal en el fervor isidril y la alegría de la buena gente
nuestra.
Porque no estaríamos aquí sino fuera por el tesón y el compromiso de nuestros
mayores, de aquellos que descansan en las campiñas y las marismas
celestiales, y de los que todavía hoy nos enseñan y aconsejan sobre el tránsito
de nuestras vidas.
No estaríamos aquí sin la azada quejumbrosa del manchonero que extrae el
fruto del calor tibio y húmedo de la arena de la campiña, sin la lucha denodada
y titánica de los colonos de los poblados que arrancaron el cultivo con sus
manos de la sal de la marisma.
No estaríamos aquí sin las espaldas quebradas de los jornaleros que
alimentaban con el sudor una tierra que no era suya.
No estaríamos aquí, como hombres y mujeres libres, sin esa sedimentación de
siglos que nos ha permitido –de forma tortuosa unas veces y compartida otras-
construir una cultura y un sentimiento y una religiosidad que se alzan por
encima de cualquier diferencia y están reflejadas en una trama de afectos que
se proyecta en esos dos hombres que en nuestro escudo se dan la mano bajo
la significación exacta de “La Unión”.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
No estaríamos aquí sino fuera por el ejemplo cálido de gentes como nuestro
San Isidro, que bien pudiera ser ese vecino agricultor del que desde niño
hemos aprendido de sus elocuentes silencios, de sus íntegras actitudes, de sus
parsimoniosos gestos, lo que significan palabras jondas como la solidaridad y
el amor. No estaríamos aquí sin todos ellos.
ESPERANZA CONTRA LA DROGA
Se dejan sentir los rigores de la calor cuando nos detenemos ante el Centro
Regional de Rehabilitación de Drogodependientes para intercambiar ramos de
flores y esperanzas. Allí, donde un puñado de hombres y mujeres luchan a
brazo partido por abandonar la peor de las cárceles, la que esclaviza tu propia
voluntad bajo las drogas; allí conmueven especialmente los mejores deseos,
como aquellos que expresó el año pasado uno de los internos cuando leyó este
texto ante nuestros santos:
“Otro año más te damos la bienvenida a ti, San Isidro Labrador, y a tus romeros
y romeras, que te acompañan en este grandioso día de romería al paso por
nuestra casa. Esta casa humilde, tan necesitada de fe y de ser personas
válidas para esta sociedad.
Por eso te pedimos, en nombre de todos los usuarios de este centro llamado
Juan Gallardo, hijo predilecto de esta villa, para que intercedas por todos
nosotros y que se vean cumplidos nuestros sueños. Deseamos este año y los
venideros que esta tierra tan fértil y bendecida por tus manos dé muchas
alegrías y prosperidad a toda la comarca de Los Palacios y Villafranca”. Así lo
escribió y lo leyó, y así le quiero rendir homenaje esta mañana, a él y a sus
compañeros, porque creemos desde el fondo de nuestros corazones que San
Isidro intercede por ellos y que ya estarán más cerca cada cual de su
aspiración y su anhelo.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
ISIDRO ENTRE SANTOS
Todos conocemos la vida de nuestras imágenes sagradas. Nos la han contado
magníficos pregoneros. Pero un dato me ha llamado la atención y hoy quiero
recordarlo.
Después de casi cinco siglos de maravillosos milagros, San Isidro fue
canonizado por el Papa Gregorio Quince el 12 de marzo de 1622. Lo
sorprendente es que con él también lo fueron San Francisco Javier, San
Ignacio de Loyola y Santa Teresa de Jesús, los tres españoles, y el italiano San
Felipe Neri, al que tengo en singular estima en mi devocionario porque dejó
para la historia aquel consejo irreprochable: “Sed buenos si podéis, el resto es
vanidad”.
Cinco santos de una tacada, y qué cincos. Vaya talla. Es como la selección del
mundo en santidad, dicho con el mayor de los respetos. Y así quedó aquel
glorioso día para los restos. Personalmente me conmueve que, junto a esas
glorias del catolicismo universal, estuviera nuestro Isidro, el único laico,
venerado en su modestia por las sencillas gentes del pueblo.
Qué cosas tienes, pregonero, me dice Isidro, mientras aligeramos el paso hasta
Adriano. Pesarosos tiran los bueyes. Aquí relincha un caballo. Allí una mula se
inquieta. Aquí una garganta se alza. Allí una voz se quiebra. Aquí hay quien
habla de males. Allí, quien de esperanza eterna.
- Compadre trae rebujito, que tu cuñá está sedienta. Ahora tu mujer dice que
quiere tortilla y cerveza. El próximo que pida algo que vaya por su cuenta, que
se me pasa el camino entre la ida y la vuelta. Compadre, arráncate con unas
sevillanas rocieras, verás cómo la seduces con tantear la primera. Después de
tantos años de casaos, necesito la segunda y la tercera. La cuarta la dejo para
mis santos que bailan en la carreta.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
El sol, compasivo, se asombra desde lo alto. ¿Adónde va esta gente tan alegre
caminando? Un rayo se detiene sobre los ángeles alados. Un suspiro
compadece este cansancio. Como dijo Curro el Ronco el año pasado: “Si hace
caló, caló; si hace frío, frío. Y es que no nos aclaramos”. Una voz hermana
dice: No te apures, que al Hornillo ya llegamos.
AGRADECIMIENTO POR SEVILLANAS
Vamos a tiempo para entregar las medallas que son bálsamos para los dolores
de la vida cuando la vida nos va pesando. Primero a los niños chicos, después
a algún rezagado. Con permiso de la audiencia, Antequera, quiero que este
año me la coloquen tus manos, que no puede ser que este sembrador de
palabras todavía no sea hermano.
Ya estamos a la entrada de la Hacienda, donde también se anunciarán los
pregoneros. Están grabados en mi alma ese sitio y ese momento, que allí me
eligió San Isidro y me enseñó las lindes del sendero. En esta otra mañana, a
las puertas del mayo de los romeros, quiero dedicarte estas sevillanas, que no
son arte de poeta ni verso iluminado, son los sonidos encendidos del más cabal
de los agradecimientos.
I
Una pareja de santos
Ilumina la carreta.
Isidro se llama él,
María se llama ella.
Peregrino ábreles paso
Camino de la Corchuela
Que son romeros mis santos
Con mi gente palaciega.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
II
Buena gente te acompaña
Santo labrador del cielo.
Al compás de una plegaria
Este cante se hace rezo.
Hermano sigue su vida,
San Isidro es todo amor,
Él ha sembrado los campos
Para abrir tu corazón.
III
Santas manos del labriego
Imploran tu bendición.
María de la Cabeza
Le va a aliviar el sudor.
Con lo poquito que tengo
San Isidro, hago el camino
Y en Romería comparto
Con familiares y amigos.
IV
Una campana nació
De una torre marismeña.
Y repicó una mañana
Para alegrar tu carreta.
De Los Palacios los bueyes,
Ángeles de Villafranca,
Isidro y Santa María,
De mi pueblo son el alma.
(Canta, Andrea González Soyo
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Música y guitarra, Fernando Larios
Letra, Manuel Sollo)
JUAN PABLO, MARIANO
Pero no acaba aquí la pará del Hornillo. Antes de partir, cuando las manecillas
del reloj se encuentran, todo se detiene. Es tiempo del Ángelus. Lo reza un
joven sacerdote, Juan Pablo Domínguez, vicario parroquial que nos llegó de La
Palma del Condado.
Ahora recuerdo que el año pasado, en su primera gira, vino perfectamente
ataviado. No cabe duda, se sabe la liturgia de los caminos marianos. No en
vano me cuentan de su veneración rociera, que un Lunes de Pentecostés
cantar a la Virgen quisiera a hombros de sus paisanos en un rincón de la aldea
y allí ofrecer desde los más hondo una oración que brota de sus fuentes
maternas. La misma con la que acompaña a San Isidro y Santa María la
Cabeza.
SANTUARIO DE LA CORCHUELA
Un último esfuerzo y entraremos en La Corchuela, como viejos colonos que
alcanzan la tierra prometida que allí nos espera. Ese parque será ahora
santuario para acoger a los peregrinos que han amasado los sueños de la
esperanza, entre cante y cante, por el camino.
Bajo los frondosos árboles, cada cual buscará la mejor sombra para colocar el
carro y que descansen las bestias. Unos más recogiditos. Otros más cerca del
jaleo. Ya se dispone el mantel, ya se prepara la mesa.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
- Niño, trae algo de comer, refrescos y cervezas.
- Yo lo saco to y que cada cual coja lo que quiera.
De carro a carro se oye: Prueba la tortilla, que no hay papas como estas.
Llévate este cuenco de caracoles. Qué rica está la paella. Toma un poquito de
gazpacho, esta hecho con genaros, nuestros tomates de primera.
En medio del pinar, nuestros santos están radiantes, felices como una familia
más, sintiendo que esos carros son ermitas de armonía y confraternidad. Y así,
no están solos ni un momento. Unos van a rezarles en paz; otros a pedir para
los suyos; algunos se admiran de la templaza, otros descubren la nobleza. Que
no falte la foto ante esta carroza que rezuma verdad.
De pronto se hace un corro y alguien se lanza a cantar con pellizco y tonalidad
añeja. El baile levanta una breve polvareda, mientras dos miradas se cruzan
como si el amor amaneciera.
Ay, cuántos novios se han declarado en la romería. Cuánto ha sonreído San
Isidro al ver de la mano a dos adolescentes que empiezan a tantear la vida.
Cuántas veces han germinado familias de estas parejas.
Esos también son misterios que quedan al resguardo de los pinos, entre el
rumor del agua de la acequia y la mirada cómplice del Patrón, siempre sabio y
comprensivo ante las debilidades ajenas.
AMOR FRATERNO PARA EL NECESITADO
Vendrá la tarde a mecer el sueño. Todo se aquieta a la hora de la siesta. Se
amansa el bullicio en el parque. Por un momento cada cual está a sus cosas, y
este pregonero aprovecha para acercarse a la sagrada carreta.
- Isidro, amigo, ¿cómo te encuentras?
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
- Disfruto de este remanso, momentos de susurros antes de iniciar la vuelta.
Me gusta ver a los lugareños cansados y hacendosos, compartiendo lo que
tienen, con más alegrías que penas.
Pero ¿qué te preocupa, pregonero, que tan cabizbajo llegas? No son buenos
tiempos, santo Patrón, el mundo vive una pesadilla que sabe a dolorosa
condena. La avaricia de los poderosos se ha apoderado de la tierra. Desde sus
falsos tronos mandan sobre vidas y haciendas.
No hay trabajo, que es el fundamento de la dignidad de las personas. El paro
asuela toda esperanza y miles de hermanos cada vez tienen más dificultades
para ganarse honradamente el sustento.
Los jóvenes no encuentran salidas a sus lógicas aspiraciones. Los mayores
temen por sus escasos ingresos. Los agricultores tienen que abandonar sus
tierras; sus ojos cansados lloran sobre las semillas secas. Nos vence el
desánimo. Nos puede la tristeza. Es terrible comprobar que cuanto construimos
con tantísimos esfuerzos y sudores parece venirse abajo sin que sirva de
mucho el coraje de manos como las que han arrancado durante siglos la
cosecha de manchones y parcelas.
Isidro, muchas familias comienzan a malvivir y su subsistencia depende de las
ayudas de Cáritas y otras organizaciones sociales y humanitarias. Porque
humanidad es de lo poco que nos queda. Y si la necesidad sigue apremiando
será el instante en que habremos de dar un paso al frente, solidarios y
fraternales, para atender al necesitado.
En esa ardua tarea la Iglesia, y con ella las hermandades y cofradías, tendrá
que estar la primera para dar consuelo al pobre y de comer al hambriento. Lo
mandan las Escrituras, plasmado está en los Evangelios. Lo dice San Isidro
casi en confesión a este humilde pregonero, que con lágrimas le pide: Aquí los
hombres no nos ponemos de acuerdo, intercede tú ante el Altísimo, que nos
conceda la clarividencia de los cielos, la fuerza de la fidelidad, el amor fraterno,
que no podemos quedarnos impasibles si un hermano está sufriendo.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
CUIDAR EL PARQUE
Un jinete se descubre al paso. La maleza parece despertar. Se desperezan los
animales. Vuelven los cantes, la guitarra se queja. Cuñá, baílate la penúltima,
antes de recoger, que va llegando la hora del regreso. Los rayos de sol, ya
más suaves, se entreveran por las copas. Deja la manta a mano, que en un
ratito hará fresco.
¿Es el camino más lento o es que queremos que avance muy despacio ese tic
tac que suena en nuestro interior, como si pudiésemos apaciguar el tiempo?
Atrás queda silenciosa La Corchuela, a la que es preciso cuidar y conservar
con esmero; esa frondosidad verde forma parte de la historia del pueblo, y si
reclamamos lo que es de todos, también es nuestra responsabilidad
defenderlo. Por favor, que no se te olvide, romero.
Se arremolinan en los carruajes los más cansados, y los más decididos van y
vienen a pié. Se comparte la tapita de la tarde, la copita que se ofrece al
caballista de paso, la pará que hace la flamenca para romper a cantar cuando
el sol se va postrando.
HISTORIAS DE CANTES Y CONFIDENCIAS
Sevillanas lentas y profundas que muy adentro se van prendando, como las
que cantó Manolito Nieto y su nieta en una vuelta junto a mi carro.
Historias de caminos que una vez se soñaron.
Historias de recuerdos que en nuestros corazones vibraron.
Historias compartidas con amigos y con extraños,
Historias de medallas antiguas que en el pecho nos acariciamos.
Historias de alegría, alivio y consuelo que nos otorga el aliento de Dios si
estamos a punto de caer, ya cansados.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Historias que nos hermanan con el vecino que para la eternidad es hermano.
Historias de caminantes que aprenden los misterios de la vida en esa imagen
modelada en barro.
Es tiempo de confidencias cuando la noche nos va arropando.
San Isidro acuérdate de tantos enfermos y necesitados,
de los padres que se han quedado solos,
del que llora en silencio,
del que en el dolor grita,
de los hijos huérfanos.
Compadece al débil,
apacienta al desesperado.
Qué más quisiera uno que ser bueno, si no santo,
todos los días del año.
EL BUEN AMIGO
La nostalgia acecha en esos instantes en los que aun no somos conscientes de
que la romería se va acabando, y vendrá el santo dejando la simiente en el
camino para asegurarse de que el año que viene volvamos.
Un altavoz nos sobresalta al acercarnos al puente de la Rubia. La asociación El
Buen Amigo nos reclama que bajemos del carro para no cansar aún más a los
animales. Cómo nos puedes pedir eso, Candela, si a muchos de nosotros no
hay quien nos sostenga. Pero obedientes, descendemos y subimos a pié el
pequeño montículo.
Qué buen trabajo desde hace años venís haciendo. Que es verdad, era un
mensaje necesario: hay que velar por el cuidado de las bestias y habéis
conseguido que todos nos concienciemos. Que tan bruta puede ser la mula
como el dueño, si los dos no nos tratamos con respeto.
NAZARET PALACIEGA
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
Y una vez llegado arriba, asómbrate palaciego que a tus pies tienes a tu
pueblo. Esta Nazaret dibujada con trazos de terciopelo y guirnaldas de estrellas
columpiándose en su firmamento. Este gentío que se agolpa en las aceras para
sumarse al cortejo, que espera como al hijo pródigo a nuestros santos en su
regreso, San Isidro y Santa María de la Cabeza, que vislumbran a lo lejos la
espadaña que protege a su templo.
Alumbrarán la tenue oscuridad los truenos coheteros. No dejarán de sonar el
tamboril y la flauta, el cante y las palmas, ahora en un coro con todos los
vecinos que, Furraque abajo, a los peregrinos custodian y abrazan.
Cada cual se recogerá despacio bajo su techo y unos pocos llegarán a la
Parroquia con el Patrón y su esposa. Ya en la noche cerrada, las campanas al
aire sobresaltarán a las cigüeñas que, como vigilantes luceros, esperaban la
vuelta.
Quedarán en su altar de Santa María la Blanca San Isidro y Santa María de la
Cabeza. Ya estamos aquí, Virgen de las Nieves, patrona y alcaldesa honoraria,
que nos recibe como siempre acogedora y cariñosa. Entonaremos el himno de
agradecimiento: “No temas que ya tienes ganao el cielo / Te rodea la gracia del
Padre eterno / Y todo lo que haces es por amor”.
Alguna lágrima escurridiza dibujará otro churrete en una carita inocente. La
satisfacción se reflejará en la felicidad de los abrazos. No olvidaros de que
mañana será la misa de Acción de Gracias, dice alguien mientras nos vamos
yendo satisfechos y cansados, con el cosquilleo del recuerdo en la memoria y
el murmullo de un rezo en los labios.
EL PREGONERO CUMPLE SU SUEÑO
Un último cohete prenderá por la vigorosa palmera que asciende a los cielos
desde el patio de la Casa Hermandad y será como una bendición postrera
cuando el pueblo parezca dormitar descontando los días que ya faltan para la
próxima romería.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
No te apesadumbres, compadre, respira tranquilo, Antequera, son más o
menos 365 días. Pidamos que nada malo nos pase, que crezcan las espigas
en los trigales, que las vides renazcan en el vino, que den telas los
algodonales, que no enfermen las bestias, que la cosa se vaya arreglando y
que el trabajo... el trabajo, por Dios, que no falte.
Mientras todos recogen, en un descuido, San Isidro lanza un guiño cómplice al
pregonero, que se acerca. Vamos acabando, amigo. Cumplí mi sueño,
labrador, a tu lado la Romería es un descubrimiento de savia nueva, una
renovación del espíritu, una convivencia plena.
A tu lado esta Gira es la mirada franca del hermano que una ayuda presta, la
oración de un romero que canta su pena, la alegría del joven que en su
montura te reza, la mujer que a su hijo la fe entrega.
Sin ser agricultor, ni jinete, ni cantor... cumplí mi anhelo, Isidro, y fui peregrino
junto a tu carreta, del camino la flor que marcaba tu senda, sombra acogedora
de un pino de La Corchuela y luminaria de esperanza en el surco de la vuelta.
Cumplí mi sueño y en esta mañana de domingo pregoné desde el fondo de mi
alma, gracias a ti, mi más hermoso sentimiento, la devoción y el amor infinitos
a la esencia de nuestro pueblo, que por los siglos de los siglos peregrinará
contigo, Santo Labrador del cielo.
- Aquí te espero el año que viene, pregonero.
Muchas gracias.
XVIII PREGÓN DE ROMERÍA EN HONOR DE SAN ISIDRO LABRADOR
AGRADECIMIENTOS
Quiero agradecer su colaboración a los compañeros que han preparado el
Teatro Municipal, en especial a Nando y Manuel; el trabajo de la Hermandad y
en particular a Antequera, y a mi compadre, Francisco González, que lleva todo
el pregón entre bambalinas, más nervioso que yo. Es justo también agradecer
la colaboración de Inmaculada Begines Palma; de Comunicamedia, joven
empresa palaciega; de Televisión Los Palacios, que nos ha cedido imágenes;
de mi amigo, genio audiovisual, Paco Granados; de Fernando Larios,
extraordinario guitarrista que ha tenido a bien acompañarnos, y muy
especialmente agradecer la colaboración de nuestra jovencísima y maravillosa
artista, Andrea González Soyo, que ya para siempre irá en mi corazón y a la
que deseo y estoy seguro que tendrá una gran carrera.
Fotos: Francisco Álvarez y María José Doña.
Nota: Todos los derechos de propiedad intelectual de este Pregón, incluida la letra de
las sevillanas que en el se insertan, pertenecen a la Hermandad y Cofradía de San
Isidro Labrador de Los Palacios y Villafranca por decisión del pregonero y autor,
Manuel Sollo Fernández.
Descargado desde http://www.sanisidrolospalacios.com