En esos años hubo
una gran inundación
provocada por un la-
go cercano y cuando
bajaron las aguas se
vio flotando un estu-
che de cuero. Dentro
de él estaba la ima-
gen de la Santísima
Virgen tallada por
José, el escultor indí-
gena.
Nada se supo de él,
que quizás se haya
ahogado en la inun-
dación, pero "La Vi-
gencia de los Mila-
gros", como se la lla-
ma popularmente fue
destinada al culto
público en Caacupé
(en guaraní: detrás
del monte)
La primera iglesia de
Caacupé data del año
1765. Fue remodela-
da y ampliada en nu-
merosas ocasiones,
constituyéndose en el
Santuario Nacional.
Nuestra Señora, la
pura y limpia Con-
cepción de Caacupé,
es la Patrona del Pa-
raguay. Su fiesta es el
8 de diciembre, y en
esa ocasión el país
entero peregrina a la
casa de su Madre.
CAACUPE, LA PATRONA DE PARAGUAY
Aprendí que un pueblo puede ser sabio y humano, sin pasar por una formación intelectual de occidente.
El pueblo paraguayo está
viviendo actualmente una
forma grave de dispersión,
un proceso político y
económico que lo expulsa
literalmente del país. Son
economías que desarraigan
al hombre y después lo
expelen como residuo mar-
ginal, que tendrá que ir a
buscar bajo otros cielos los
elementos para simplemen-
te sobrevivir.
En una tierra sin hombres
el paraguayo es un hombre
sin tierra. No puede conti-
nuar viviendo en la tierra
que lo vio nacer y ya no
tiene la seguridad de que
sus hijos seguirán siendo
paraguayos.
Muchos de ellos habitan La
Matanza, traen su cultura,
son los “teólogos de Amé-
rica”
Puntos de interés especial:
Ciudadanía en el mundo greco—romano.
Ciudadanía en la modernidad.
Democracia representativa y directa.
Nueva Ciudadanía en el siglo XXI
Historia y leyenda de la Virgen de Caacupé 2
Salud centrada en el ciudadano 3
Paciente, cliente, usuario o beneficiario 3
Ciudadanía en el mundo griego 3
Mundo romano, modernidad e Immanuel Kant 4
Nueva ciudadanía y Dignidad humana 5
Taller de capacitación en Salud Intercultural 2011 6
Contenido:
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Volumen 2, nº 5
Mayo 2011
VOLUMEN 2 , Nº 5
a la ciudad, en peregrina-
ción, para rendir homenaje
a la Virgen de los Milagros
de Ka´akupe.
Caacupé se encuentra ubi-
cada a 54 km de la ciudad
de Asunción, la capital del país. Está asentada
en la cumbre del cerro homónimo, desde la cual
se puede visualizar el hermoso lago Ypacaraí.
Es una ciudad muy acogedora rodeada de valles
verdes y cerros. El distrito está
dividido en 15 barrios y 17 com-
pañías. Entre los barrios más im-
portantes están Yvoty, San Miguel,
Loma y entre las compañías se
encuentran Cabañas y Azcurra.
Caacupé (Ka´akupe o Ka´aguy kupe, en idioma
Guaraní significa, detrás del monte) es una
ciudad de Paraguay, capital del Departamento
de la Cordillera. Su población es de 47.251 hab.
A 54 km de la ciudad de Asunción, es centro
religioso de la fe cristiana, considerada Capital
Espiritual del Paraguay.
El 8 de diciembre, fecha de la Inmaculada Con-
cepción de María, miles de paraguayos acuden
“El origen de la Virgen de los Milagros de Caacupé se remonta a la época del
coloniaje español y al tiempo de las Re-
ducciones indígenas de los Padres Fran-ciscanos, allá por el 1600. un poco antes,
un poco después , cierta mañana, un gru-
po de indios mbayáes perseguían a un guaraní en los montes cercanos a Tobatí,
con el propósito de darle muerte, quizás por pertenecer a otra tribu… por haberse
convertido al cristianismo y formar parte
de la “doctrina franciscana”.
Acorralado y a punto de ser alcanzado,
nuestro indio se escondió tras un árbol.
Agazapado y tembloroso, recordó a la Virgen de los Franciscanos y en íntima
plegaria le prometió que si lo salvaba del trance, haría una imagen del mismo tron-
co tras el cual se había protegido. Y el
milagro se produjo. Los indios enemigos
pasaron a su vera sin verlo.
De la parte extraída del tronco el indíge-na tallo dos imágenes: una, más grande
destinada a la iglesia de Tobatí; otra más
pequeña, para su devoción particular. Esta última es la que se venera en Caa-
cupé”.
Mons. Angel Acha Duarte. “Nuestra se-
ñora en América”. CELAM, Bogotá,
1986, pp. 71-72
Página 2
LA PATRONA DE PARAGUAY
Historia y leyenda de la Virgen de Caacupé
Imágenes
A fines del siglo XX se han propuestos nue-
vas soluciones así llamadas “neoliberales”, que han intentado reducir la presencia
estatal al mínimo y dejar en plena libertad
a los mecanismos del Mercado como supre-
mos reguladores de la vida social y econó-
mica de las naciones.
En Salud se ven proliferar ideas neolibera-
les donde hay preeminencia de la produc-
ción sobre la justicia, de lo económico so-
bre lo político.
La ciudadanía ha pasado muchas veces a
ser algo formal, que se requiere sólo cuan-do se ejercita el voto, y que luego desapare-
ce en el espectro de una democracia
“representativa” de carácter meramente
burocrática .
A esto llamamos pseudoparticipación o
“pseudo nosotros”. Un espacio donde se
plantea la participación comunitaria pero las
decisiones la toman sólo algunos.
Muchos argumentos sobre los “usuarios” como actores externos en la atención
sanitaria, definen a pacientes, clientes,
usuarios o beneficiarios como “centro del
sistema de salud”.
Sin embargo también aceptan que mu-chas veces no se contemplan sus necesi-
dades ni sus opiniones.
Llamamos a esto “pseudoparticipación”.
Actualmente existen varios términos
para referirse a la persona afectada por
una dolencia en el campo de la planifi-
cación sanitaria:
Paciente, Cliente, Usuario, o Benefi-
ciario, todos ellos presentan a la pobla-
ción por fuera de la administración y
planificación de la Salud. Son figuras
con escasa actividad en el tratamiento
de sus dolencias.
¿Porqué Ciudadano?: tomamos este
término a fin de referirnos a un sujeto
con derechos esenciales y propios co-
mo hombre.
Como un sujeto activo con derechos
sobre su salud, con una actitud activa
en el tratamiento de su dolencia y parti-
cipación en los planes de salud que le
competen, en su barrio, en su ciudad y
en su país.
Realizaremos un camino desde la vi-
sión greco-romana, a través de la mo-
dernidad, hasta llegar a la actualidad
donde emerge el concepto de “Nueva
Ciudadanía”
En el Medioevo Santo Tomás, inspirado en
Aristóteles, la llamará “bien común .
Aristóteles deriva la identidad del
“ciudadano” al afirmar que es “aquél que
participa o puede participar de alguna
magistratura en la gestión pública de la ciudad”. Para Aristóteles el “ciudadano” no
es un simple funcionario, ni un aspirante a
funcionario, sino alguien que puede ejercer
y eventualmente ejercita diversos tipos de magistraturas para “bien de la ciudad”, es
La Polis griega representa el ideal de la participación de todos los ciudadanos en
los asuntos del Estado; pero ni en la men-
talidad ni en la práctica se dio una igual-dad jurídica de todas las personas, por
cuanto incluía la esclavitud.
Aristóteles, en su “Política”, enseñará que una “Ciudad” estará bien gobernada y orde-
nada cuando sus gobernantes busquen la
“justicia” como un criterio supremo a partir
del cual todos encuentren su satisfacción.
decir, de todos los que componen la ciudad
Página 3
Usuarios. Pseudoparticipación
¿Porqué pensamos en una salud pública centrada en el “Ciudadano”?
Ciudadanía en el mundo Griego
Aristóteles ve al hombre como
“animal político” (zoón
politikón).
S ALUD I NT ER CULT UR AL
Este nuevo indicador de la
“libertad” del “ciudadano "emerge
ahora con una fuerza totalmente
nueva en el imaginario moderno,
que lo hace central tanto en la vida
como en el pensamiento. En el or-
den social los “esclavos” alcanzan
su “libertad”, como así también la
gente de color, que podrán ejercer
en adelante su “ciudadanía” como
cualquier otro ciudadano. También
recuperarán la “ciudadanía” los
artesanos, los agricultores y los
obreros de la incipiente clase obre-
ra, que se irá formando en el siglo
XIX al impulso de la Revolución
Industrial. De ahora en adelante la
pobreza, el oficio o la clase o con-
dición social no serán un obstáculo
para obtener la ciudadanía
Ahora el “ciudadano” ca-
racterizado por su “libertad” intrín-
seca y no acordado por ninguna ley
humana comienza a tener un rol
decisivo. De esta “libertad” intrín-
seca del hombre brotan todos sus
derechos: los derechos civiles, polí-
ticos y más tarde, a partir del siglo
XIX, los demás derechos sociales,
económicos y culturales.
Para Cicerón todos los hombres
son iguales en virtud de su humanidad.
Se recurre a la razón universal de la que
todos los hombres participan.
Cicerón sigue la concepción aristotélica del
“buen gobierno” donde se ha reemplazado, pero no suprimido el “bien común ,̈ al ex-
presarlo por “leyes” aprobadas por el
Senado.
Pero, además, le agrega su idea del “mejor gobierno” que será aquel donde haya una
mezcla de “monarquía”, “aristocracia” y
“democracia”.
Será la “experiencia republicana” de Ro-ma, que combinó el gobierno de los Cónsu-
les” (órgano de uno o dos personas), con el
“Senado” (órgano deliberativo formado
por los Senadores), y con otros órganos muchos más amplios, las diversas
“asambleas” (“comitia”), donde participa-
ba lo restante del pueblo.
No obstante esa fundamentación de la idea y de la conexión de la mentalidad jurídica
romana con el derecho natural de los estoi-
cos, la antigüedad pagana ignora todavía los
derechos humanos universales.
Los Derechos Humanos carecían de todo
carácter jurídico inequívoco en el sentido en
que hoy se habla de derechos humanos y
derechos fundamentales
hombre para afirmar su
“dignidad”, Kant, sostenía, por
el contrario, que la verdadera
“dignidad del hombre” está en
su “libertad”, que siempre podrá
ejercer, aunque sea un ignorante
o iletrado.
la libertad no es algo adquirido
por el hombre y arrancado al po-
der de los poderosos, sino una
cualidad inherente a todo ser
humano, dato central que consti-
tuye su más auténtica dignidad.
A diferencia de la Ilustración
francesa, que ponía el acento en
el “saber enciclopédico” del
Página 4
Ciudadanía en la Modernidad
Ciudadanía en el mundo Romano
Immanuel Kant
Para Kant la “libertad”
constituye al hombre como ser
moral
S ALUD I NT ER CULT UR AL
Volumen 2, nº 5
`polis” o del “estado mo-
derno”.
Hoy se habla de
“ampliar” la ciudadanía
y llevarla más allá de lo
“local” y “nacional”,
hasta lo “regional” y a lo
“global”.
La “nueva ciudadanía” sabe que la socie-
dad actual no le garantiza el cumplimiento
de sus derechos, por más
que ellos se hallen consa-grados por las Leyes, Cons-
tituciones y Declaraciones
universales. Sabe que esos
derechos para poder ser poseídos deben ser ganados
con el esfuerzo diario y
mancomunado.”
Lectura recomendada y cita bibliográfica:
Jorge R. Seibold S.J. LA CIUDADANÍA Y
LOS DERECHOS DEL NIÑO EN LA ÉPO-
CA DE LOS BICENTENARIOS
“El camino es volver a renovar
las realidades sociales y estatales, con un claro sentido popular y participativo, con
un convocante proyecto de país, dentro del
contexto regional y global en el cual hoy
nos movemos.
un enorme desafío al concepto tradicional
de ciudadanía tanto clásico como moderno que estaba encerrado en el marco de la
Ahora el “ciudadano” a través del
“contrato social” es el fundamento
legitimador del Estado y del Go-
bierno. Las formas que adquieren
los Estados serán, en general, las
de la Monarquía constitucional o
de las modernas repúblicas, con
sus tres clásicos poderes, el eje-
cutivo, el legislativo y el judicial.
Como sostendrá Montesquieu.
También habrá diferencias en
relación al tipo de democracia
alcanzada. Unos como Locke
preferirán una democracia
“representativa”, que será la
clásica del liberalismo inglés,
donde el pueblo no gobierna di-
rectamente a no ser por sus
“representantes” elegidos por elec-
ciones libres y públicas. Otros, los
menos, como Rousseau, preferirán
una “democracia directa y activa”,
donde el pueblo, sin la mediación
de sus representantes determina en
los asuntos substanciales de la Na-
ción y del Estado. Los mismos ciu-
dadanos son los que encarnan la
“voluntad general” y son los que la
llevan a cabo. Este ideal de Rousse-
au, solo realizable en pequeñas re-
públicas, es el ideal que todavía
hoy anima en nuestros días a todos
aquellos que desean una democra-
cia participativa y no meramente
representativa
valores y tradiciones.
Los Derechos Humanos son un hori-
zonte que debe guiar a los gobiernos,
incluyendo la política de salud para nues-
tro municipio en el siglo XXI.
Es fundamento, causa o fin de todas las
instituciones sociales.
Todos los derechos del hombre tomados
en su conjunto, deben estar asociados el marco de la Dignidad del ser humano,
comprendidos en su integridad, no redu-
cibles a una única dimensión.
Los principios deben formar parte inte-
grante de la vida de una comunidad y deben estar en relación armónica con sus
Página 5
La nueva Ciudadanía
Democracia Representativa y democracia Directa
Dignidad humana
Un conjunto de prácticas y saberes
que deben ser conquistados e
incorporados a la vida para ser vividos
y , si es posible, ser disfrutados .
Av. Juan Manuel de Rosas 5975
(Ruta 3, Km. 21)
San Justo
Prov. Buenos Aires, Argentina
HO SPI TAL DI EGO P ARO I SSI EN DE
L A MAT A NZA
equipo de salud y en
los servicios de salud.
Objetivos
● Comprender el concepto
de derechos humanos y su
estrecha vinculación con el
enfoque de interculturalidad
en salud.
● Identificar los derechos
humanos colectivos e indivi-
duales de los pueblos indíge-
nas y de la niñez indígena,
que tienen implicancias par-
ticulares en la práctica de los
profesionales de salud.
Reflexionar sobre el
significado de traba-
jar con enfoque inter-
cultural en las prácti-
cas cotidianas del
Segundo Semestre 2011.
(Agosto a Noviembre) clases
presenciales quincenales.
Lunes de 12 a 15 Hs.
Comienzo 8 de agosto 2011
Taller de capacitación en enfoque intercultural de la Salud, 2011
Teléfono: 54-15-6469-2317
Correo: [email protected]
Hondo sentir. Rumbo fijo. Corazón y Claridad.
Hospital Diego Paroissien
La Matanza
2011
Derechos humanos y libertades
individuales en la atención sanitaria .