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2do Congreso virtual de Ciencias Morfológicas
2da Jornada Científica de la Cátedra Santiago Ramón y Cajal
MORFOESTEREOLOGÍA DE LA CORTEZA RENAL EN FETOS
HUMANOS PROCEDENTES DE MADRES CLÍNICAMENTE SANAS.
ENERO – DICIEMBRE 2012.
Dr. Jesús Eligio Rojas Guerra1, Dra. Lisset de la Caridad Arévalo Nueva1, Dra. Miriela Sucel Vega González2, Dra. Elida Mendoza Jorge3, Dra. Nadia Blanco Figueredo4.
1 Especialista de primer grado en MGI y en Embriología Clínica, profesor Instructor, Facultad de Ciencias Médicas Celia Sánchez Manduley, Manzanillo, Cuba.
2 Especialista de primer grado en Histología, profesor Asistente, Facultad de Ciencias
Médicas Celia Sánchez Manduley, Manzanillo, Cuba.
3 Especialista de primer grado en MGI y en Embriología Clínica, profesor Asistente, Facultad de Ciencias Médicas Celia Sánchez Manduley, Manzanillo, Cuba.
4 Especialista de primer grado en Anatomía Patológica, profesor Asistente, Hospital
Materno Infantil Fe del Valle Ramos, Manzanillo, Cuba.
RESUMEN
Se realizó un estudio analítico correlacional retrospectivo de las principales
características morfoestereológicas de la corteza renal fetal en las gestantes
clínicamente sanas. El universo estuvo constituido por 64 fetos fallecidos obtenidos del
Hospital Materno Infantil Fe Del Valle Ramos de Manzanillo, en el período de enero a
diciembre de 2012, de las cuales se seleccionó una muestra aleatoria simple de 39 que
cumplieron los criterios de inclusión. El objetivo de la investigación consistió en
demostrar que existía relación entre los parámetros morfoestereológicos de la corteza
renal de fetos humanos procedentes de madres clínicamente sanas.
Se registraron en el formulario los datos de las variables de control: Sexo, edad,
peso fetal, número de capas de nefronas en S por debajo de la cápsula renal,
número de glomérulos visibles en la corteza renal y volumen glomerular en la
corteza interna y externa del riñón fetal. Para ello se formuló la hipótesis que
presupone que el patrón morfoestereológico normal de la corteza renal está
relacionado de forma positiva con la edad gestacional y el peso fetal y que existe una
relación inversa entre número y volumen de los glomérulos. Se rechazó la hipótesis
2
nula Ho al probar que existió una fuerte asociación positiva entre la edad, peso fetal y
el número de glomérulos visibles en la corteza renal fetal, así como una relación
inversamente proporcional entre el peso fetal con el volumen glomerular y entre este
último con el número de glomérulos visibles en la corteza renal.
INTRODUCCIÓN
La literatura científica del desarrollo renal es amplia en cuanto a la formación de sus
sistemas, su filogenia y anomalías, sin embargo es escasa en relación a su morfología
interna, o sus cambios por la edad gestacional.
La adaptación del riñón fetal a la vida extrauterina constituye todo un desafío, por
cuanto debe dar respuesta a necesidades funcionales rápidamente crecientes y en
ocasiones enfrentarse a diversos estados endógenos y principalmente exógenos de
stress. Esta capacidad de adaptación resulta más crítica en los prematuros, quienes no
sólo poseen riñones más inmaduros en cuanto a función, sino que antes de las 36
semanas, tampoco han desarrollado por completo todas sus nefronas. 1
Con el desarrollo de la citogenética en las últimas décadas, se ha facilitado la
comprensión de la embriología renal, donde se encuentra toda una interacción genética
programada para activarse y suprimirse en un determinado periodo de tiempo de la
organogénesis dando como resultado la formación y perfecto funcionamiento de las
nefronas.2
El ensamble espacial y la diferenciación de los diferentes tipos celulares durante la
nefrogénesis están gobernados por una compleja interacción de señales entre las
células que se están diferenciando y su medio ambiente. Uno de ellos es el complejo
GDNF/GDNF-c/RET que es el más importante para el crecimiento del brote ureteral en
el mesénquima metanéfrico. La expresión del GDNF (Glial cell line derived neurotrophic
factor) en el mesénquima metanéfrico restringe espacialmente el origen del brote
ureteral en el conducto mesonéfrico y es también responsable por la sucesiva
ramificación del mismo dentro del mesénquima metanéfrico3,4.
El gen c-Ret codifica para la proteína RET, la cual es un receptor tirosina kinasa. El gen
se expresa primariamente en el conducto mesonéfrico de Wolf, y subsecuentemente en
las puntas de las ramificaciones ureterales cuando el brote ureteral emerge del
conducto mesonéfrico de Wolf y se ramifica dentro del mesénquima metanéfrico en
3
respuesta a la estimulación de su ligando, el GDNF se expresa en el mesénquima
metanéfrico a los once días y medio de vida embrionaria.5,6,7.
La nefrogénesis es un proceso complejo que incluye la diferenciación y el crecimiento
direccional de varios tipos celulares resultando en la formación de nefronas, comienza
en la novena semana de gestación, y se extiende hasta la 36. Moore8 afirma que
comienza alrededor del inicio de la octava semana. Se inicia a partir de la yema o
brote ureteral con sucesivas dicotomizaciones o ramificaciones en cuyo extremo se
localiza el blastema metanéfrico, con el que interactúa. Algunas de estas células
inician una transición mesénquimo- epitelial que formará la mayoría del epitelio
tubular.
Tras la formación de vesículas y corpúsculos alargados en forma de coma luego a la
forma de S, ambas precursoras de la forma glomerular definitiva. La hendidura inferior
del cuerpo de forma S es penetrada por precursores celulares mesangiales y
endoteliales, los cuales eventualmente se diferencian para dar origen a los capilares
glomerulares y al mesangio glomerular9, el extremo distal se une al brote ureteral y el
proximal es invadido por células endoteliales inmaduras que inician la
glomerulogénesis y dan lugar a las nefronas.
Como resultado del proceso nefrogénico, el mesénquima metanéfrico se diferencia en
glomérulos, túbulos contorneados proximales, asa de Henle, túbulos contorneados
distales y fibroblastos intersticiales.
El 60% de las nefronas se forman en el tercer trimestre de gestación, 10 dando lugar a
9 o 10 capas de glomérulos visibles en las preparaciones histológicas. La dotación o
masa nefronal que se alcance en ese momento será aquella con la que el individuo
afrontará el resto de su vida. El proceso de inducción nefrogénica es tan preciso que la
cuantificación de la actividad nefrogénica presente en la corteza renal al nacimiento
puede usarse como índice anatómico de la edad gestacional. 11
La nefrogénesis se detiene generalmente antes de la completa maduración fetal, a esa
edad alcanza un promedio de un millón de unidades funcionales. Las 34 semanas
representa el momento a partir del cual se considera a la función renal con un grado
suficiente de madurez para la adaptación a las condiciones que impone el tránsito
hacia la vida extrauterina.12
4
Rodríguez MM y colaboradores publicaron un trabajo acerca de la
nefrogénesis/glomerulogénesis en el RN pretérmino y su expresión patológica. En el
estudio aplican la técnica de recuento glomerular radial al examinar los riñones de
recién nacidos pretérmino fallecidos. Gracias a este estudio, se sabe que el proceso
puede continuar en la vida extrauterina a lo largo de 40 días siempre que el ambiente
y la situación clínica que rodea al RN sean óptimos. Estos autores introducen por
primera vez el concepto de «oligonefropatía de la prematuridad», que sería una forma
especial de oligonefropatía producida por una detención precoz del proceso de
nefrogénesis extrauterina13.
El riñón fetal en desarrollo es sensible a la masa corporal fetal, de tal forma que el
tamaño renal al nacer y el peso están íntimamente relacionados. El peso al nacer es la
pista más valiosa de la masa nefronal total. Mañalich y colaboradores realizaron un
estudio histomorfométrico en neonatos fallecidos por diferentes causas que no tenían
malformaciones renales, encontraron en aquellos con bajo peso un número menor de
nefronas que aquellos que nacieron con 2 500 g o más. Afirman que el feto humano
necesita alcanzar 2 300 g de peso para completar la nefrogénesis.13
El estudio de embriones y fetos constituye desde siglos pasados una fuente de
obtención de conocimientos sobre la anatomía del desarrollo. Aún hoy profundizar en
su morfología es necesario para comprender mejor los acontecimientos del desarrollo y
los fallos que engendran las alteraciones del desarrollo.14, 15
Se asume el criterio de Gómez Estacio L y colaboradores 16 que consideran al
conocimiento de la Morfología y la Embriología como base de los conocimientos
médicos, proporciona elementos para mejorar y restaurar la salud en la medicina
aplicada y en la investigación.
En este sentido han surgido nuevas perspectivas al aplicar regladamente métodos
matemáticos y geométricos al estudio de la forma y de la estructura del cuerpo
humano. Pexieder17, es uno de los primeros autores en introducir la aproximación
cuantitativa en la investigación de la morfogénesis humana y Delesse introdujo las
técnicas morfométricas clásicas mediante superposición de retículas de puntos. 18, 19
Weibel20 definió con mayor precisión las aplicaciones del método de recuento de
intersecciones en histología, para medir superficie y el recuento de puntos para
estimar volúmenes.
5
Mediante la Morfoestereología de la corteza renal se puede medir objetivamente el
número, tamaño, y distribución de nefronas y otros componentes celulares que la
integran lo que permite detectar las eventuales modificaciones estructurales sufridas
por este órgano en diferentes condiciones. 21, 22
Habitualmente, el número de nefronas se estima como una medida subrogada del
número de glomérulos (Ng). La estimación directa del Ng in vivo hasta ahora en
humanos no es posible.23 La información cuantitativa más confiable hasta el momento
proviene de estudio de riñones completos provenientes de autopsias a través del uso
de técnicas histomorfométricas.24
Frente al número de autores que han estudiado aspectos relacionados con estereología
renal aplicados a diferentes biomodelos como ratas25,26, conejos27, 28 y ovejas,29, 30 son
escasos los que han realizado estudios en fetos humanos,31, 13 estos últimos
relacionados con el peso de los fetos y los efectos de la ingestión de medicamentos
sobre el desarrollo del riñón.
A pesar de que muchos autores resaltan la repercusión que tienen sobre la
nefrogénesis diferentes factores de riesgo maternos (desnutrición materna, hábitos
tóxicos, ingestión de medicamentos) 32 y fetales (edad, sexo, bajo peso al nacer,
CIUR); 33 así como varios factores antenatales (infecciones connatales, la asfixia fetal
con necrosis tubular aguda, daño tóxico por medicamentos, enfermedades congénitas
como la obstrucción urinaria unilateral, displasia renal y el riñón poliquístico 34, 35, 13
existen muy pocos estudios que presenten el patrón morfoestereológico de la corteza
renal de fetos humanos procedentes de madres clínicamente sanas y enfermas por lo
que se pretende en el presente estudio en un primer momento encaminar la
investigación a este primer grupo.
En correspondencia con lo anteriormente planteado, se delimita el siguiente: Problema
científico: Poco conocimiento en relación al patrón morfoestereológico de la corteza
renal de fetos humanos procedentes de madres clínicamente sanas.
Objeto de estudio: Los riñones de los fetos procedentes de madres clínicamente
sanas.
Campo de acción: El patrón morfoestereológico de la corteza renal de fetos humanos
procedentes de madres clínicamente sanas.
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Hipótesis teórica general:
Se presupone que el patrón morfoestereológico normal de la corteza renal está
relacionado de forma positiva con la edad gestacional y el peso fetal y que existe una
relación inversa entre número y volumen de los glomérulos.
Hipótesis estadísticas:
Ho: No existe relación entre los parámetros morfoestereológicos de la corteza renal de
fetos humanos procedentes de madres clínicamente sanas.
Hi: Existe relación entre los parámetros morfoestereológicos de la corteza renal de
fetos humanos procedentes de madres clínicamente sanas.
OBJETIVOS
1. Relacionar la edad y el peso fetal con las variables morfoestereológicas de la
corteza renal de los fetos procedentes de madres fisiológicas.
2. Relacionar las variables número de glomérulos y volumen glomerular de la corteza
renal de los fetos procedentes de madres sanas.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se realizó un estudio analítico correlacional retrospectivo. El universo estuvo
constituido por 64 fetos humanos fallecidos después de las 21 y hasta las 36 semanas
del desarrollo, procedentes de partos distócicos del Hospital Materno Infantil “Fe del
Valle Ramos” del municipio Manzanillo, provincia de Granma en el periodo de Enero a
Diciembre del 2012; Se analizaron las historias clínicas de todas las madres así como
los protocolos de fetos fallecidos del universo de estudio, con el objetivo de seleccionar
aquellas que cumplieron los criterios de inclusión, se seleccionó una muestra aleatoria
simple de 39 fetos a los cuales se les realizó la necropsia y serie histológica del riñón y
que se encuentran disponibles en el laminario del Departamento de Anatomía
Patológica. El propósito de esta investigación fue el de relacionar el patrón
morfoestereológico glomerular de la corteza renal en fetos humanos procedentes de
madres clínicamente sanas.
Criterios de inclusión:
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Edad de la madre entre 20 y 35 años
Madre clínicamente sana.
Feto fallecido a partir de 21 semanas.
Criterios de exclusión:
Presencia de hábitos tóxicos como alcohol y tabaquismo
Antecedentes de ingestión de medicamentos por la madre durante el embarazo.
Fetos macerados en cualquier caso.
Presencia de malformaciones fetales de cualquier tipo.
Mala calidad de las imágenes en examen microscópico de la serie histológica.
Técnica y procedimientos.
Recolección de la información: Se realizó una amplia revisión bibliográfica del objeto de
investigación en la Biblioteca del Hospital Materno-Infantil “Fe del Valle” y de la
Facultad de Ciencias Médicas de Granma, así como el análisis y síntesis de resultados
de investigaciones afines y de tendencias teóricas modernas que aparecen en la
literatura especializada relacionadas con el objeto de investigación.
Para la observación de los fetos y las muestras histológicas se confeccionó una guía de
observación la cuál fue diseñada por una de las tutoras (Anexo 1), donde se plasmaron
las principales variables.
En el departamento de Anatomía Patológica a cada feto se le realizó una
caracterización macroscópica general según la guía de observación.
Se realizaron las mediciones antropométricas de los fetos en fresco sin fijar, tales
como:
- Peso del feto
- Longitud Vértice Cóccix (LVC)
8
- Longitud Vértice Talón (LVT)
El peso fetal se determinó mediante una balanza una balanza Atom con rango de 5000
gramos. Para las longitudes se utilizó una cinta métrica milimetrada y sus valores
fueron expresados en centímetros. Se utilizaron instrumentos del Departamento de
Anatomía Patológica del hospital.
Se realizó la necropsia a cada feto, se observaron las características macroscópicas y
los datos obtenidos determinaron la inclusión del feto en el estudio.
Obtención de las muestras:
Obtención de los riñones:
Se separaron los riñones del cuerpo fetal mediante sección de los mismos a nivel del
hilio renal. Los riñones fueron lavados en agua corriente y secados. Se seleccionó el
riñón izquierdo de cada feto para el estudio.
Fijación del riñón: El riñón fue sumergido durante 24 horas en un recipiente con
formalina al 10%.
Luego se realizaron cortes transversales al eje longitudinal del órgano, se tomaron
lascas alternas y se seleccionó un fragmento para procesamiento histológico que
incluyó todo el espesor del órgano, los fragmentos de cada riñón fueron fijados en
formalina al 10% durante 24 horas previamente identificadas las muestras.
Preparación de láminas histológicas: cada fragmento se lavó con agua corriente y
fueron sometidos al procesamiento por el método de inclusión en parafina. Los bloques
fueron cortados con micrótomo horizontal de la Leitz. Se cortó una sección histológica
de cada bloque y se empleó la tinción de hematoxilina y eoxina.36 Se prepararon dos
láminas histológicas por cada feto fallecido con dos muestras de riñón en cada una de
ellas.
Operacionalización de las variables:
1. Sexo: Sexo del producto de la concepción registrado al momento del parto, sus
valores son: Masculino y Femenino.
9
2. Peso del feto: Variable cuantitativa se expresó en gramos: Según la tabla
prediseñada para el crecimiento ponderal intrauterino por USHER37 se clasificó en:
Inmaduros: Peso fetal entre 500-999 gramos.
Prematuros: Peso fetal entre 1000-2499 gramos.
Maduros: Peso fetal más de 2500 gramos.
3. Edad fetal: variable cuantitativa continua. Se determinó la semana de desarrollo
correspondiente a cada feto según la tabla prediseñada por NARBAITZ38 (edad en
semanas y LVC expresada en cm).
4. Número de glomérulos (Ng): Son las nefronas maduras. El glomérulo está
constituido por una red de vasos capilares que forman un ovillo rodeado por una
envoltura externa en forma de copa llamada cápsula de Bowman que conforman al
corpúsculo renal. Se determinó la cantidad absoluta de glomérulos visibles en la
corteza renal por campo. Se expresó en Ng/mm2.
5. Volumen glomerular (Vg): Valor de la superficie de la corteza renal ocupada por un
glomérulo. Se expresó en µc².
Para realizar el estudio morfométrico se aplicó el método estereológico de contaje de
puntos de intersección de Weibel y Gómez (W&G) que asume que el glomérulo es una
esfera pero permite la estimación del volumen (Vg) en una sola sección lo cual lo hace
más rápido y sencillo32. Para la aplicación del método se utilizó el lente ocular que
contiene en su interior un retículo de 25 puntos equidistantes. El mismo permite
obtener valores necesarios para el cálculo de múltiples elementos morfoestereológicos,
obteniéndose mediciones reales.
Para las mediciones se utilizó un microscopio óptico binocular (instrumento Rosbach
s.a). Con un lente objetivo de 10x y ocular 10x (amplificación 100).
Análisis morfoestereológico:
Se basó en el principio básico de la estereología que establece que la fracción de área
que un componente dado ocupa en un espacio dado, medida en secciones tomadas al
10
azar de ese espacio o en ese propio espacio es igual a la fracción del volumen que el
componente ocupa en el objeto estudiado. Vv = Aa.
Entonces la parte volumétrica (Vv) de un componente cualquiera (i) de un objeto
puede ser evaluada mediante la medición de la parte del área superficial del corte que
corresponde a la sección de ese componente.
Vv(i) = Aa(i).
El método estereológico de contaje de puntos de intersección aplicado por Weibel
establece que Pp = Vv, con lo que se establece la fórmula de (W&G)32.
Se sumaron todos los puntos por campos, luego el total se promedió y se dividió por
25 (número de puntos del retículo) se determinó así la fracción de elementos según
(W&G).
PC / 16= P (Promedios de puntos contados).
P / 25= Fracción de elementos.
Posteriormente el total de cada una de estas fracciones obtenidas se multiplicó por el
área del lente para 10x (72253,44 µc²) se obtuvo la densidad, área relativa que ocupa
cada elemento a estudiado.
Se seleccionó la lámina más representativa por feto fallecido. En cada muestra de
riñón se midieron 10 campos consecutivos por cada zona de la corteza renal medido
desde el borde de la capsula renal hasta el límite con la medula y moviendo la lámina
en una misma dirección para evitar el sesgo. Se desecharon aquellos campos poco
representativos. Se observaron un total de 20 campos por cada feto con un conteo de
500 puntos por estudio escogido.
Determinación del número absoluto de glomérulos visibles por milímetro cuadrado
(mm2). Se contaron en cada campo los glomérulos visibles que cumplieron las
condiciones siguientes:
Que estuvieron completamente dentro del retículo y que no estuvieron completamente
dentro del retículo pero contactaron con las líneas (superior e inferior).
11
Volumen glomerular (Vg): Es el valor de la superficie de la corteza ocupada por un
glomérulo. Con un lente objetivo de 10 X y ocular de 40 X (amplificación de 400) se
contaron los puntos que se superponen sobre cada glomérulo visible completo. Se
consideró el contorno del glomérulo visible incluido completamente en el retículo. Los
glomérulos se definen como el área que queda dentro del ovillo formado por los
capilares externos. Se contó el número total de puntos que llenan el ovillo. Se
estudiaron 10 glomérulos de cada zona de la corteza (20 por feto fallecido).
Del procesamiento de la información: el análisis estadístico se realizó a partir de las
variables objeto de estudio que aportaron las gestantes, los fetos fallecidos y la corteza
renal del riñón, a través de los instrumentos aplicados. Los datos obtenidos fueron
procesados por una computadora Intel mediante el paquete de programa estadístico
SPSS para Microsoft Windows siete ultímate.
Los resultados se presentaron en tablas y gráficos, como medida de resumen se utilizó
la media y la desviación estándar para las variables cuantitativas y el porcentaje para
las variables cualitativas. Se determinó el coeficiente de correlación para medir el
grado de asociación entre el Número de glomérulos, volumen glomerular, con la edad
y el peso fetal.
El coeficiente de correlación es una medida que establece la relación o grado de
asociación entre las variables; es una medida de la relación lineal entre dos variables
medidas en escala numérica, donde r (coeficiente de correlación) -1 representa una
asociación lineal negativa perfecta y +1 representa una asociación lineal positiva
perfecta, un valor de 0 indica que no existe en la muestra relación lineal.
Interpretación de los resultados de la prueba estadística:
Coeficiente de correlación muestral:
De 0 a menos de 0,25 correlación escasa.
De 0,25 a menos de 0,5 cierto grado de correlación.
De 0,5 a menos de 0,75 relación de moderada a buena.
Mayor o igual de 0,75 relación muy buena o excelente.
12
Consideraciones éticas: se tuvo en cuenta todos los principios éticos de la Medicina
Cubana en las recogidas de informaciones y procesamientos de las mismas y se brindó
información detallada de las investigaciones.
RESULTADOS
En la tabla 1 se observa la relación de las medias del número de glomérulos visibles
en la corteza renal con respecto a la edad fetal. Donde se observa que el promedio de
glomérulos visibles en la corteza fetal es de 217,26±22,30 por cada mm2 entre las 33
a 36 semanas del desarrollo.
Moore plantea que entre la décima y decima-octava semanas de la gestación el
número de glomérulos aumenta de manera gradual y a continuación se incrementa con
rapidez hasta la semana 32, cuando se alcanza el límite superior, aumentando más del
doble desde las 20 hasta las 38 semanas11 , por lo que se puede deducir que existe
una clara tendencia lineal ascendente que permite presuponer una fuerte asociación
entre la edad fetal y el número de glomérulos visible en la corteza renal fetal de
nuestro estudio, lo que se confirma al observar el coeficiente de correlación que fue de
r = 0.96, que permite afirmar que la asociación entre ambas variables es de muy
buena a excelente, por lo que existen razones para rechazar la Hipótesis nula (Ho).
El incremento sostenido de los valores promedio del número de glomérulos visibles en
la corteza fetal por semanas durante todo el período estudiado está en
correspondencia con el incremento rápido que se produce en esta etapa del desarrollo,
en el que se forma aproximadamente el 60 % de la población de nefronas39, 40.
Solbaug MJ plantea que en el ser humano la nefrogénesis se desarrolla entre las
semanas 6 y 36 de gestación, que se detiene generalmente antes de la completa
maduración fetal y a esa edad alcanza un promedio de un millón de unidades
funcionales. Por lo tanto, el número de glomérulos en la corteza renal está
determinado desde el nacimiento dado que no se forman nuevas nefronas
postnatalmente54.
13
Sin embargo, Rodríguez M y colaboradores, señalan que la nefrogénesis en el recién
nacido pretérmino puede continuar después del nacimiento durante seis semanas,
siempre que el ambiente y la situación clínica que rodea al recién nacido sean
óptimos13.
En el Gráfico 2 se muestra la relación que existe entre las medias del número de
glomérulos visibles en la corteza renal con el peso fetal, donde podemos observar que
el peso fetal promedio a las 24 semanas es de 668 gramos, relacionado con la
presencia de 188,25 de glomérulos visibles en la corteza renal por mm2 y a las 36
semanas es de 1965,00±919,61 gramos, relacionado con la presencia de 217,26 de
glomérulos visibles en la corteza renal por mm2 y con un nivel medio total de
1281,56±385,97 gramos relacionado con un nivel medio de 205,51±5,67 de
glomérulos visibles en la corteza renal por mm2. En este caso tendencia lineal
ascendente nos permite decir que existe una fuerte asociación, lo que se confirma al
observar el coeficiente de correlación que fue de 0.94 y nos permite afirmar que
existe una asociación lineal positiva entre ambas variables de muy buena a excelente.
El modelo de regresión lineal demuestra que a mayor peso al nacer mayor número de
glomérulos por lo que podemos apreciar que el desarrollo renal es sensible y guarda
relación con la masa corporal fetal, de tal forma que el tamaño renal al nacer y el peso
están íntimamente relacionados. Por lo que se rechaza la hipótesis nula (H0) y se
acepta la hipótesis alternativa.
Varios autores17, 19, 41 afirman que el peso al nacer es la pista más valiosa de la
dotación de nefronas total y que feto humano necesita alcanzar 2300 gramos de peso
para completar la nefrogénesis.
En la Gráfico 3 puede apreciarse la relación del número de glomérulos visibles en la
corteza renal con el volumen glomerular, donde se puede observar una clara tendencia
descendente en el volumen glomerular con 20866,79±463,77 µc² y 188,25±26,20
glomérulos visibles por mm2 en la corteza renal a las 24 semanas con respecto a
13113,99±3577,57 µc² y 217,26±22,30 glomérulos visibles por mm2 en la corteza
renal a las 36 semanas, esto nos hace suponer que existe una asociación lineal
negativa entre estas dos variables y que se confirmó al observar el coeficiente de
correlación que fue de r= -0,97 que permite aceptar la hipótesis alternativa ( Hi) al
afirmar que la asociación entre ambas variables es inversa y de muy buena a
excelente.
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La evaluación directa del número de glomérulos in vivo no es posible, sin embargo un
estudio realizado en perros demostró que el uso de resonancia magnética nuclear para
medir volumen cortical sumado a una biopsia renal, evaluada por morfometría para
determinar el volumen glomerular y la fracción de volumen cortical permite estimar el
número de glomérulo de manera bastante precisa42.
En el Grafico 4 se aprecia la relación entre las medias del volumen glomerular en la
corteza renal y el peso fetal donde se puede observar una clara tendencia lineal
descendente dado por un volumen glomerular de 19703,51±1006,94 µc² en fetos con
peso fetal entre 500 a 1000 gramos con respecto a un volumen glomerular de
9681,96±804,80 µc² en fetos con peso entre los 2001 y 2500 gramos lo que nos
permite presuponer una fuerte asociación entre estas variables, lo que se confirma al
observar el coeficiente de correlación que fue de r= - 0,98 que permite afirmar que
existe una asociación lineal negativa entre ambas variables de muy buena a excelente.
El modelo de regresión lineal demuestra que a mayor peso al nacer menor debe ser el
volumen de los glomérulos. Por lo que podemos rechazar la hipótesis nula (H0) y
aceptar la hipótesis alternativa (Hi).
El estudio realizado fue similar al encontrado por otros autores por ejemplo el estudio
realizado por Mañalich17 et al en autopsia de 35 neonatos fallecidos por distintas
causas, demuestra que aquellos con peso menor a 2,5 kg al momento de nacer tienen
un número significativamente menor de glomérulos que los niños con peso normal.
Además, incluye otro resultado respecto a la relación inversa entre número y volúmen
de los glomérulos. De manera que el Vg resultó significativamente mayor en los niños
con bajo peso al nacer con respecto a los de peso normal. Existe una fuerte
correlación directa entre el bajo peso al nacer y el Vg y una fuerte correlación inversa
con el número de glomérulos.
Keller en autopsias renales, encontró una significativa correlación entre el peso de
nacimiento y el Ng, el coeficiente de regresión predijo un incremento de 254426
glomérulos por cada kg de peso. Hallándose una poderosa relación inversa entre el
tamaño y número, lo cual demuestra un proceso adaptativo en el cuál el volumen se
incrementa para compensar la existencia de una baja población de nefronas43.
En el gráfico 5 se muestra los valores de las medias del peso fetal, el volumen
glomerular y el número de glomérulos visibles en la corteza fetal por semanas, donde
15
podemos observar que en la medida que aumenta la edad gestacional en una gestante
clínicamente sana el peso fetal debe ir aumentando tal y como se muestra en el
gráfico, el peso fetal promedio de la muestra estudiada sigue una línea de tendencia
positiva; con relación a la edad gestacional y el peso también aumenta el número de
glomérulos visibles en la corteza renal, este incremento sostenido del valor promedio
del número de glomérulos durante el período estudiado concuerda con lo planteado por
algunos autores13,54,44 que plantean que en esta etapa del desarrollo se forman la
mayor parte de la población nefronal. Moore11 plantea que el número de glomérulos
aumenta de manera gradual entre la décima a las dieciocho semanas de gestación,
luego se incrementa con rapidez hasta las 32 semanas, cuando alcanza el límite
superior, aumentando un poco más del doble desde las 20 hasta las 38 semanas.
Con respecto al volumen glomerular, tal y como se muestra en la fig.9 se puede
observar la línea de tendencia negativa que sigue esta variable con respecto a la edad
gestacional, el peso fetal y el número de glomérulos visibles en la corteza renal, lo que
entre estas variables existe una asociación inversamente proporcional, o sea que en la
medida que avanza la edad gestacional, se incrementa el peso fetal, con ello también
se incrementa el número de glomérulos y disminuye el volumen glomerular.
CONCLUSIONES
Se pudo comprobar que existe una fuerte asociación positiva entre la edad y el
número de glomérulos visible en la corteza renal fetal al rechazar la hipótesis nula (H0)
cuando se comprobó que el coeficiente de correlación que fue de r = 0,96.
El número de glomérulos visibles en la corteza fetal es directamente proporcional al
peso fetal al existir una fuerte asociación positiva entre ambos al observar que el
coeficiente de correlación fue de 0,94, lo que nos permitió rechazar la hipótesis nula
(H0).
Al observar que el coeficiente de correlación fue de r= -0,97, se aceptó la hipótesis
alternativa (Hi) demostrando que existe una fuerte asociación inversa entre el número
y el volumen de glomérulos visibles en la corteza renal fetal procedentes de madres
clínicamente sanas.
16
La relación que existe entre volumen glomerular en la corteza renal es inversamente
proporcional al peso fetal quedando demostrado al observar el coeficiente de
correlación que fue de r= - 0,98 permitiendo rechazar la hipótesis nula (H0).
ANEXOS
Tabla No 1: Relación de las medias del Número de glomérulos visibles en la corteza
renal con la edad fetal. Hospital Materno Infantil Fe del Valle Ramos. 2012.
Edad fetal
Ng/mm2
X DS
21-24 188,25 26,20
25-28 205,60 18,06
29-32 210,93 13,01
33-36 217,26 22,30
Nivel medio 205,51 5,67
Fuente: Datos del estudio. r= 0,96
17
Fuente: Datos del estudio.
Fuente: Datos del estudio.
668, 188.25
1066.67, 205.6
1426.6, 210.93
1965, 217.26
185
190
195
200
205
210
215
220
225
0 500 1000 1500 2000 2500
Ng/m
m2
Peso fetal en gramos
Gráfico 2. Relación de las medias del Número de glomérulos visibles en la corteza renal con el peso fetal. Hospital Materno Infantil Fe del Valle Ramos. 2012.
r=0,94
188.25, 208667.93 205.6,
177261.77 210.93, 154622.36
217.26, 131139.99
0
50000
100000
150000
200000
250000
185 190 195 200 205 210 215 220
Vg µ
c²
Ng/mm2
Gráfico 3. Relación del número de glomérulos visibles con el volumen glomerular en la corteza renal. Hospital Materno Infantil Fe del Valle Ramos. 2012.
r= - 0,97
18
Fuente: Datos del estudio.
1000; 19703,51
1500; 14872,16 2000;
13258,5
2500; 9681,96
0
5000
10000
15000
20000
25000
0 500 1000 1500 2000 2500 3000
Vg µ
c²
Peso fetal (gr)
Gráfico 4. Relación de las medias del volumen glomerular en la corteza renal con el peso fetal. Hospital Materno Infantil Fe del Valle Ramos. 2012.
r= - 0,98
19
668 1066.67 1426.6 1965
188.25 205.6 210.93 217.26
20866.79
17726.17
15462.23
13113.99
0
5000
10000
15000
20000
25000
21-24 25-28 29-32 33-36
Ng/m
m2 , P
eso f
eta
l y V
g µ
c²
Grupo de edades
Gráfico 5. Relación entre las medias del peso fetal, volumen y número de glomérulos visibles en la corteza fetal por semanas. Hospital Materno Infantil Fe del Valle Ramos. 2012.
Peso fetal (gramos)
Ng/mm2
Vg µc²
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