Download - Los medios contra la corrupción
SONIA VIRGINIA MOREIRA
LosMEDIOSCONTRALACORRUPCIÓN
rcotráfico- -k !\¿í« ,¿ma U'Hitmutilii* na
- .¡ i ¡ifi^'fHJ *ííi U"w*yrt-in» dt- = i * f « * •.ítittmrnui'»! iia vticaina
XAME»PERNAS
EBRMMS
La ola de moralización públicaque se dice que hoy recorreBrasil es el resultado en granmedida del cambio en elcomportamiento de los mediosde comunicación durante elproceso Collor. Sonia VirginiaMoreira considera que lanueva actitud puede no sertransitoria y establecerse comoun factor permanente en lalimpieza y modernización delEstado brasileño en sus nivelesmunicipales, estadualesyfederales.
Las escenas de apertura deDios nos ayude, la teleno-vela de las 19 horas trans-mitida por la Red Globo deTelevisión, reproducen unmapa de Brasil dibujado en
barro siendo absorbido por un remolinodonde aparecen algunos elementos quecaracterizaron el pasaje de Collor por elgobierno: jet, ski, auto importado,dólares.
Tales símbolos son la síntesis de loscasos de corrupción explícita estampa-dos en imágenes y textos por los mediosde comunicación brasileños entre marzode 1990 y setiembre de 1992. En eseperíodo buena parte de los telespecta-dores-ciudadanos pasó de la expectativapor un futuro mejor a la sorprendenteconvivencia diaria con denuncias dedesvío de fondos públicos con la partici-pación de altos personajes ligados algobierno. Desde la euforia inicial hasta laconstatación del mar de barro institu-cionalizado, los medios de comunicación
SONIA VIRGINIA MOREIRA, es brasileña yProfesora de Comunicaciones de laUniversidad del Estado de Rio de Janeiro.
participaron activamente de el ascenso ycaída de Fernando Collor de Mello.
Los canales circunstanciales delpoder
Para entender la meteórica trayecto-ria política de Collor hasta su retiro delcargo de presidente, es necesarioanalizar el papel desempeñado por losmedios antes y durante su gobierno ytambién examinar las circunstancias quepropiciaron su ascenso al puesto demayor prestigio del país.
Durante la campaña electoral, Collorfue apoyado por los más poderosos gru-pos económicos de Brasil, entre ellos laFIESP (Federación de la Industrias deSao Paulo) cuyo principal dirigente llegóa declarar que en la hipótesis de queLuis Inácio Lula da Silva (candidato delPartido de los Trabajadores) fuera elec-to, los grandes empresarios aban-donarían el país. Collor fue presentadopor la prensa como un político modernoencargado de eliminar la corrupción de lavida pública brasileña y arrancar al paísde su condición tercermundista.
Así fue que se consiguió una impen-sable alianza a su alrededor: desde los
12 CHASQUI 44, enero 1993
Sil CORRUPCIC
ricos empresarios paulistas, pasando porsectores de clase media, hasta losdescamisados -la enorme masamarginada de los centros urbanos- seproyectó la imagen del candidato delPRN (Partido de la RenovaciónNacional) como la esperanza para alcan-zar una vida mínimamente digna.
Como conductores, de esa etapa deconquista del electorado se destacaroninfluyentes medios de comunicaciónorganizados en redes de radio, tele-visión, periódicos y revistas de circu-lación nacional. El destaque fue para laRed Globo que en los últimos días de lacampaña presidencial fue acusada demanipular información para favorecer aCollor.
El inicio del fin
De la misma manera que (directa oindirectamente) colaboraron con la elec-ción de Collor, algunos medios tambiénmostraron agilidad al relatar datos esen-ciales para la comprensión de la crisispolítica que más tarde se instalaría en elgobierno nacional.
La revista Veja (publicación semanalcon tiraje de 836 mil ejemplares) en suedición del 27 de mayo de 1992 revelólas denuncias de Pedro Collor de Mello,hermano más joven del presidente, quetestimoniaba sobre el favorecimiento ilíci-to de Fernando en favor del empresarioalagoano Paulo Cesar Parías, extesorero de la campaña presidencial. Lasdeclaraciones fueron motivadas por ladisputa del mercado de comunicacionesen el estado de Alagoas, controlado porlas Organizaciones Arnon de Mello,dirigidas por Pedro.
Parías se preparaba para lanzar enMaceió, capital del estado, una empresacon catorce emisoras de radio, cuyasconcesiones dependen de aval presiden-cial, y el diario Tribuna de Alagoas.Paulo César Parías se transformaría enseria competencia de las radios y eldiario Gaceta de Alagoas, propiedad delos Arnon de Mello, que también tienenun canal de TV y una imprenta-editorial.Fue el inicio de la crisis política.
Tres meses después otra publicaciónsemanal consolidaba el papel denun-ciante de la prensa brasileña. En la edi-ción del 1 de septiembre la revista Isto é(competencia de Veja ) presentaba eltestimonio de Eriberto Franga y sacaba a
LAS INVERSIONES PUBUCITARIAS Y ELIMPEACHMENT
Según datos de una investigación realizada por la empresa de marketingLeda Nielsen, entre enero y setiembre de 1992 la inversión publicitaria enmedios de comunicación brasileños fue de US$ 2.722.526.000 contra
2:416.444.000 invertidos en los mismos meses de 1991, ío que significa unaumento total del 13%. Del total invertido, el'58% fue para la TV;" 27% paradiarios; 8% para revistas; 5% para radio y 2% para exteriores. En igual periodode 1991 fue 52% en TV; 34% en diarios; 8% en revistas; 5% en radios y 1% enoutdoOr. Los datos muestran la caída de un 7% de la inversión publicitaria endiarios, mientras que la TV registró una subida del (fío y el outdoor de 1%.Hubo una transferencia de inversión publicitaria de los diarios hacia TV youtdoor.
En cuanto a las cifras en dólares: a los diarios se destinaron US$ 746.740.000contra 809.766.000 invertidos en 1991; la TV consiguió la inversión de US$1.585.833.000 contra 1.254.067.000 de 1991, lo que le significó un aumento del2ó%; outdoor, tuvo la notable subida del 39%; la radio del 13% y las revistas del5%.
La investigación muestra una significativa disminución de las inversionespublicitarias de ta industria de la construcción, el comercio y el sectoragropecuario, tres sectores muy importantes.
Por su parte el presidente del grupo de marketing Midia de Sao Paulo señalóen noviembre de 1992 que "A pesar de la crisis que el país atravesórecientemente con el impeachment del presidente Collor, que colocó a losanunciantes en compás de espera, el mercado publicitario deberá reaccionar ycerrar el año con un número de inversiones 8% superior al del 91. El mediodiario por su parte conseguirá detener su caída, atenuando los númerosnegativos obtenidos hasta ahora. Todavía estamos lejos de alcanzar los :;volúmenes potenciales de nuestro mercado. En verdad nos estamosrecuperando lentamente de una caída abrupta que tuvo su auge en el 91. Estarecuperación seguirá-su curso en el 93 y solamente a partir de 1994 se podrá ;;hablar de crecimiento".
JORNAL ANJ
Inversión Publicitaria en dólaresEnero-Septiembre 1991 y 1992
TOTAL
TV
Radio
Revistas
Diarios
Outdoor
1991
2.416.444
1.254.067
118.954
203.601
809.766
30.056
1992
2.722.526
1.585.833
134.844
213.339
746.740
41.770
VAR%
13
26
13
5
-8
39;
%1991
100
52
5 :
8
;34
%1992
100
58
27
7
CHASQUI 44, enero 1993 13
luz el tráfico de influencias montado en elPalacio de Planalto, sede del gobiernobrasileño.
Reflejando (y orientando) laopinión pública
Durante cuatro meses (entre mayo ysetiembre de 1992) la prensa grandeasumió la función de ser ojos y oídos delciudadano interesado en conocer y com-prender las denuncias. Diarios comoJornal de Brasil, Folha de Sao Paulo y OEstado de Sao Paulo percibieron lagravedad del momento y sintonizadoscon los empresarios (a esta alturadescontentos con las medidas económi-cas llevadas adelante por el gobierno) setransformaron en las principales fuentesde información para un público quevolvía a homogenizarse, esta vez encontra del presidente.
Se volvía a dar un tipo de alianzasemejante a la verificada en el períodode campaña electoral de Collor, pero conpresencia más contundente de losmedios de comunicación y del pueblo enlas calles. La unión de fuerzas hasta esemomento dispersas y de intereses tradi-cionalmente incompatibles, como lossindicatos de los trabajadores y las fe-deraciones patronales.
Los diarios y revistas semanales for-talecieron su papel de transmisores deldescontento popular. La televisión si biendio seguimiento al proceso, lo hizo conciertas distorsiones. Debido a eso, dejulio a octubre la Folha de Sao Paulopublicó una columna diaria analizando lacobertura de la principales redes de tele-visión brasileñas.
Por otra parte la misma Folha y elJornal do Brasil abrieron un espacio paralas noticias sobre el proceso deimpeachment, publicadas en la prensainternacional. De esa manera el lectorpodía acompañar simultáneamente laevolución interna de los hechos y lasreacciones internacionales que provoca-ban.
En medio de la crisis, los medios decomunicación consiguieron informar ydiscutir sobre la conducción de la cober-tura periodística. La consecuenciainmediata de esta actitud de compro-miso, fue el inicio de un mejoramiento dela calidad periodística y del fun-cionamiento de los medios en general.
Hablemos de robos y corrupción. Río de Janeiro
-
i a moralidad eshoy una cuestiónnacional que está
presente en los noticieros enforma de denuncias demalversación de fondospúblicos, tráfico deinfluencias, soborno dejueces y políticos, evasiónde impuestos y licitacionesfraudulentas".
Revista Veja, diciembre de 1992
Asimilando lecciones de la crisisEn la primera semana de diciembre
de 1992, el editorial de la revista Vejaseñalaba la apuesta actual de la prensabrasileña al reconocer que: "la moralidades hoy una cuestión nacional que sedesparrama por los noticieros en formade denuncias de malversación de fondospúblicos, tráfico de influencias, escánda-los de corrupción, soborno de jueces ypolíticos, evasión de impuestos y licita-ciones fraudulentas".
En muy pocas ocasiones la discusióny reflexión sobre padrones éticos (indi-viduales, políticos, profesionales) con-siguieron contagiar a los medios decomunicación brasileños incluyendo laspublicaciones de las grandes ciudades ylos diarios y emisoras del interior delpaís. No es una exageración afirmar quela onda de moralidad que recorre Brasiles fruto de la participación de losmedios. A través de los medios, losbrasileños percibieron que todavíapueden influir en el destino del país. Talvez valga recordar a Shakespeare enuna de las frases de Hamlet: "Losgrandes con poder deben ser vigiladosde cerca". «
14 CHASQUI 44, enero 1993