LED. SOFÍA DE ÁVILA LÓPEZ
ORIGEN DEL CENDI
• EMINENTEMENTE ASISTENCIAL. DENOMINACIÓN “GUARDERIAS”
• CONTINUO CON CARÁCTER ASISTENCIAL Y SE ENRIQUECIÓ CON PROCEDIMIENTOS DE ESTIMULACIÓN AL DESARROLLO.
• INTERVENCIÓN PEDAGÓGICA
ANTECEDENTES1837. Se crea el primer establecimiento de este tipo. 1869. Se funda el “Asilo San Carlos”
1928. Se crea la Casa Amiga de la Obrera
1943. La Secretaría de Salubridad y Asistencia materno-infantil y desayunos infantiles.
1944. Por decreto presidencial se dispone la elaboración de los Programas Materno-Infantil.
1976. Se cambia la denominación de Guarderías por “CENDI”
1989. Se crea la Dirección General de Educación Inicial y Preescolar
1992. Se presenta la versión experimental del PEI
1994. Se hacen modificaciones al reglamento interior de la SEP
¿Qué significa brindar
educación incicial en un CENDI?.
“Se trabaja para que los infantes integren aprendizajes fundamentales que son indispensables para la vida”
•Aprender a conocer
•Aprender a hacer
•Aprender a ser
•Aprender a vivir juntos
•Aprender a aprehender
LOS CENDI Y EL PROGRAMA DE EDUCACIÓN
INCIAL
METODOLOGÍA
¿Cuáles son los propósitos de los CENDI?
¿Cómo funcionan los CENDI?
Clasificación de niños y niñas
¿Qué servicios brinda el CENDI?
• Médicos
• Odontológicos
• Trabajadores Sociales
• Pedagógicos
• Nutriólogos
• Generales
Un niño alzó su
mirada a Dios y le
dijo:
”¿Y qué voy a hacer cuando quiera hablar
contigo?“.
Dios sonrió y le dijo:
“Tu ángel te juntará las
manitas y te enseñará a
orar”.
El niño dijo: “También me han dicho que en la Tierra hay
hombres malos”.
“¿Quién me va a
proteger?”
Dios le rodeó con Su brazo y le dijo:
“Tu ángel te defenderá, ¡al punto de entregar su vida por ti si fuese necesario!”.
El semblante del niño se
ensombreció y dijo: “Pero
siempre estaré trieste porque ya no te voy a ver”.
Dios abrazó el niño.
“Tu ángel te hablará simpre de mí y te enseñará
el camino de vuelta hacia mi presencia, aun cuando yo esté
siempre a tu lado”.
En ese momento se sintió una
gran paz en los cielos, pero ya se
escuchaban voces
provenientes de la Tierra.
El niño, apresurándose,
planteó una última
pregunta:
“Si me voy ahora
mismo, Dios, ¡dime
cómo se llama mi ángel!”.
A lo que Dios le contestó: “Su nombre no importa
mucho… sólo tienes que llamarle
“¡MAMÁ!"