1
<<
La solución kantiana del conocimiento
científico
2
La solución kantiana del conocimiento científico
Autor: Antonio Brunet Merino
El filósofo alemán Immanuel Kant (1724-1804) intenta realizar una
síntesis que hiciera posible el conocimiento científico universal y necesario pero
cuyas verdades no fueran meramente formales y analíticas sino que pudieran ser
materiales. Para ello intenta justificar la posibilidad y existencia de unos juicios
sintéticos a priori, que serían los juicios propios de la ciencia: universales y
necesarios, por ser “a priori” pero sintéticos porque amplían el conocimiento en
su contenido material al extender los posibles predicados con independencia de la
noción del sujeto (Mendiola, 2008: pássim).
Para justificar tales juicios rechaza que el entendimiento sea como una
"tabla rasa" que se limita a recibir pasivamente la información que le
llegue de los datos sensibles (Guyer, 1996: pássim; Mendiola, 2008:
pássim), de la misma forma que rechaza la capacidad de intuición del
entendimiento.
Por el contrario afirma que el entendimiento es activo. Considera que la
intuición viene dada por la sensibilidad y que los conceptos son elaboración del
propio entendimiento y sirven como justificación del conocimiento científico. Al
mismo tiempo a partir de dichas condiciones no empíricas “a priori” se pueden
determinar las condiciones generales de la experiencia lo que permite la
predicción y previsión científica en el dominio de la naturaleza (vid. Nota 1).
Nota 1:
Kant's most famous work was the 'Critique of Pure Reason' (published in German
in 1781). In it he tried to set up the difference between things of the outside world
and actions of the mind.
He said that things that exist in the world are real, but the human mind is needed
to give them order and form and to see the relationships between them. Only the
mind can surround them with space and time. The principles of mathematics are
part of the space-time thoughts supplied by the mind to real things.
3
For example, we see only one or two walls of a house at any one time. The mind
gathers up these sense impressions of individual walls and mentally builds a
complete house. Thus the whole house is being created in the mind while our eyes
see only a part of the whole.
Kant said that thoughts must be based on real things. Pure reason without
reference to the outside world is impossible. We know only what we first gather up
with our senses. (Kant’, 1994)
Muchos están de acuerdo en que existen razones por las que queremos
que la Ciencia descubra propiedades y explicaciones. Tales asuntos surgen de
una preocupación de que no existe una concepción absoluta de la realidad, es
decir, una caracterización de la realidad tal y como la Ciencia dice proporcionar.
Este argumento es cercano al argumento kantiano de que, en último término, la
Realidad es incognoscible y que todos los modelos no son más que
aproximaciones imperfectas a ella. (Kant, 2000: pássim; Lapuojade, 1988:
pássim)
La intuición empírica es una percepción cualquiera que refleja a un objeto,
y así el conocimiento es considerado como un medio.
La intuición empírica es la que se refiere a un objeto, pero por medio
de la sensación.
El fenómeno es el objeto indeterminado de la intuición empírica. El árbol
puede afectarnos y de él tenemos una representación fenoménica. Nada
podemos saber del árbol en sí. La realidad de la cosa, en ella misma, es un
noúmeno no alcanzable. (Kant, 2000: pássim; Lapoujade, 1988: pássim)
El noúmeno (del griego "νοούμενoν" "noúmenon": "lo pensado" o "lo que se
pretende decir") en la filosofía de Kant, es un término que se introduce para referir
a un objeto no fenoménico, es decir, que no pertenece a una intuición sensible,
sino a una intuición suprasensible (http://es.wikipedia.org/wiki/No%C3%BAmeno).
Según Kant en todo tipo de conocimiento se dan dos condiciones: unas son
exteriores o materiales, asociadas a los sentidos; y otras son intrínsecas al
4
individuo o formales, que son las que la mente humana impone a la información
que procede del exterior. Las primeras son de fuera de la mente humana y las
segundas son elementos totalmente “a priori”.
La tesis de Kant supone una síntesis entre el racionalismo y el empirismo.
Afirma que todo conocimiento humano tiene su punto de partida en la experiencia,
pero, por otro lado niega que todo el conocimiento proceda de ella, puesto que
existen una serie de “elementos innatos a la razón humana” que no proceden de la
experiencia.
El objetivo de Kant era encontrar y definir estos “elementos”, es decir,
averiguar lo que de “a priori” hay en el conocimiento.
La importancia de estos elementos “a priori”, estriba en que la universalidad
y la necesidad del conocimiento solamente pueden provenir de ellos. (Kant, 2000:
pássim; Lapoujade, 1988: pássim).
El “idealista y a la vez materialista” Kant creyó que la mente impone a
la realidad conocida características que son consecuencia de la propia naturaleza
de la mente (el tiempo y el espacio, por ejemplo). Para Kant nuestra mente
influye en el objeto conocido, pero más allá de la realidad conocida hay
otra realidad plena, independiente de nuestro pensamiento, incognoscible pero
cierta: la cosa en sí (Kant, 2000: pássim; Lapoujade, 1988: pássim).
En definitiva, para Kant, los juicios sintéticos a priori no son posibles en el
dogmatismo de la metafísica tradicional, que no es ciencia, pero sí en
las matemáticas y en la parte racional de la física (Guyer, 1996: pássim;
Mendiola, 2008: pássim).
Con esta posición, Kant acepta en pleno siglo XVIII la existencia del
conocimiento científico, consolidado como ciencia moderna con la física
de Newton.
5
Bibliografía
Guyer, Paul (1996) Los principios del juicio reflexivo, trad., Efraín Lazos Ochoa,
En: Diánoia, Anuario de Filosofía. Núm. 42, UNAM-IIF-FCE, D. F., México.
Kant’, Immanuel (1994) en: Compton’s Interactive Encyclopedia. Published by
Compton's New Media Inc. Carlsbad. California. U.S.A.
Kant, Immanuel (2000) Crítica de la razón pura, pról. y trad. Pedro Ribas. 18ª. ed.,
(Col. Los clásicos de Alfaguara), B XVIII. (Publicación original 1781 para la
primera edición; 1787 para la segunda edición), Grupo Santillana de
Ediciones, S.A. Madrid, España.
Lapoujade, María, (1988) Filosofía de la imaginación, Siglo XXI. D.F., México.
Mendiola , Carlos (2008) El poder de juzgar en Immanuel Kant, Universidad
Iberoamericana, D.F., México.