“PRINCIPIOS BASICOS
PARA LA APREHENSION
DEL CONOCIMIENTO”
M.A. Teresita Salgado Mejía
M.A. Alberto Córtes Hernández
UMSNH – F.C.C.A.
Resumen:
En nuestros años de trabajo con estudiantes
hemos llegado a una constatación muy
sencilla: el 80% de sus dificultades
escolares se debe no tanto a falta de
capacidad mental sino al desconocimiento
de las técnicas del trabajo intelectual.
En éste trabajo se describe una síntesis
breve y clara de las técnicas más eficaces
que ofrece hoy la pedagogía didáctica para
saber CÓMO ESTUDIAR HOY
aprovechando mejor el capital primordial
de tu tiempo y de tus energías.
Sólo cuando el hombre avanza como un
todo compacto -espíritu en el mundo,
fuerzas físicas y potencias psíquicas-,
tenemos trabajo serio y resultados
definitivos.
. . .ésta es tu fórmula
Hemos situado nuestras sugerencias en una
perspectiva de FORMACION
INTEGRAL, apelando a lo que hay en ti de
más propio, tu libertad, tu voluntad, tu
inteligencia, tu capacidad de entrega a un
ideal, tu fe en la vida.
¿Por donde empezar? ¡Hay tanto que
hacer! Tantas asignaturas tan dispares que
estudiar, tantos libros que leer, tantas notas
que tomar, tantas fórmulas que aprender. . .
Esta metodología del estudio no es una
asignatura más, ni un libro de texto que,
una vez leído pueda ser devuelto a su
estante a dormir el sueño de los justos y a
cubrirse de polvo.
Es la herramienta de tu trabajo escolar o,
mejor, un amigo y compañero de andanzas
por la escuela y, en cuanto cabe, por la
vida.
No olvides que del método ordenado y
eficaz en tu trabajo depende en gran parte
el éxito de tu vida.
Introducción
“Caminante, no hay camino, se hace camino
al andar”, decía el poeta Antonio Machado.
Y el filósofo Epicteto: “caminad para ser
caminantes, corred para ser corredores”. Y
concluimos nosotros: “estudiad para ser
estudiantes”.
Cómo estudiar mejor?
La programación, los apuntes, la memoria,
la clase, las lecturas, todo está referido al
estudio como a su centro de polarización.
• El estudio es uno de los momentos más
sagrados de tu vida, en el que desarrollas lo
más grande que tienes como persona, “tu
inteligencia”.
• En casa haz saber cortésmente a todos que, a
determinadas horas, como responden en
ciertas casas cuando llamamos a hora
importuna, sencillamente “el señor no está en
casa . . .”, para otra cosa que no sean tus
libros, claro está.
• Cuando te pongas a estudiar coloca un
cartel a la puerta de tus sentidos y al
mundo que te rodea (amigos, familiares,
televisión, radio, revistas. . .): Do not
disturb, please, “por favor, no molestar”.
1. El sueño:
Has de dormir bien un
promedio de ocho horas;si estás en período dedesarrollo, quizá necesitesuna hora más. Procuramantener regularidad entus hábitos de dormir,pues tu reloj biológicotrabaja mejor siguiendoritmos fijos: igual horapara ir a la cama, unamisma hora paralevantarse.
2. El lugar donde estudias:
Ha de estar bien iluminado, con
vista preferentemente al jardín o
al campo, para que de tiempo en
tiempo tu mirada repose; bien
ventilado, pues tu cerebro
necesita mucho oxígeno para
trabajar mejor.
3. Tu mesa y tu cuarto de estudio
Han de estar en orden: las
cosas fuera de lugar
profieren gritos que te
impedirán concentrarte.
Has de tu habitación
reflejo del orden y
armonía de tu espíritu.
1. La mente:
• Requiere higiene y cuidado.
• Acostúmbrate a controlar tus sentidos, temores y preocupaciones; no seas juguete de euforias o depresiones, como una veleta que cada cinco minutos apunta en una dirección distinta, según sopla el viento.
• Acostúmbrate a ver la vida con realismo, a aceptar las cosas como son, y a cultivar siempre el optimismo. Repite con frecuencia la oración siguiente:
Señor, dame la serenidad para aceptar las
cosas que no puedo cambiar;
El coraje para cambiar las cosas que
puedo cambiar; y
La sabiduría para conocer la diferencia.
Cada cosa tiene su tiempo, dice el libro del Eclesiastés:
“hay tiempo de nacer y tiempo de morir. . .,
“tiempo de llorar y tiempo de reir”,
“tiempo de divertirse y . . .tiempo de estudiar.
2. Motivarse
1. Es señal de madurez y fuente
de estímulo el saber fijarse
ideales y tender hacia ellos.
Nunca trabajes por trabajar, ni
estudies por inercia, hazlo
siempre como respuesta a una
aspiración tuya: preparar tu
futuro, satisfacer un interés
legítimo de saber, realizarse en
la vida, ser útil a los demás.
3. Habituarse
El hábito, dice
Aristóteles, es como una
segunda naturaleza; el que
desarrolla un hábito o
costumbre, se predispone a
actuar con facilidad en
determinada dirección.
Habituarnos a cumplir con
las cosas difíciles es hacerlas
más fáciles y asegurarnos un
sostén para cuando surjan
mayores problemas.
4. Autocrítica objetiva
• Conocerse a sí mismo y conocer la propia capacidad no es masoquismo o predisposición para la angustia.
• Es aceptarse serenamente, con sus límites y cualidades, viendo lo que admite mejora y empeñándose en ello.
Es decir:
“Tener una clara visión de las asignaturas que a uno le gustan, de las que le resultan más fáciles y de aquellas por las que quisiera pasar como gato
entre brasas y tragarlas como una purga, sin probarlas apenas”.
Este conocimiento es el mejor medio para
establecer tu metodología personal,
adaptando a tu medida las orientaciones
generales.
c) ¿Tarea pendiente o estudio?
¿Por dónde empezar?
Por la tarea que has de presentar al día
siguiente o por el estudio de las lecciones
que te han explicado y de las que quizá al
día siguiente te pedirán cuenta.
c) Completar los apuntes:
• Antes de iniciar la batalla, el soldado ha
repasado sus armas, ha inspeccionado su
funcionamiento, tiene las municiones a su
alcance.
• Antes de iniciar tu estudio sistemático, revisa
las notas que tomaste en clase, ordénalas,
subráyalas, complétalas con epígrafes o títulos
de diverso tamaño, con llaves, números y letras.
II. En estudio
Consulta tu guía y calendario de trabajo:
¿Qué me toca estudiar, en qué texto y con que instrumentos?.
Coloca sobre la mesa todo lo que necesitas para que no estés levantándote cada cinco minutos
porque te falta un cuaderno, un diccionario o un libro de consulta.
Tu mente no se concentrará totalmente ni trabajará con eficiencia si se ve interrumpida con
frecuencia.
Para tu estudio te sugiero una fórmula que te parecerá
extraña: el perro reirá; es un truco nemotécnico que encierra
los diversos pasos del estudio.
E: Examina
L: Lee
P(e): Pregunta
R: Reflexiona
Entender
En efecto, todo proceso de asimilación mental se mueve
en dos fases:
Primero nuestra inteligencia se esfuerza por
comprender;
después trata de retener lo que ha visto con
claridad.
Veámoslo por separado.
a) EXPLORA
• Un buen explorador antes de ponerse en marcha
explora el campo o estudia la ruta en el mapa.
• Antes de empezar a estudiar da una hojeada
rápida al libro, al tema o lección que te
corresponde, para enterarte de la extensión del
tema, de la intención del capítulo, de sus ideas
principales, poniendo atención a los títulos,
subtítulos o epígrafes.
b) LEE
• Lee activamente, procurando entender lo
que lees, viendo si te convence lo que dice,
si demuestra suficientemente el problema.
• Lee pausadamente, pero con tu mente
despierta, fijándote en los términos
importantes, en palabras o frases que están
en tipo cursivo, en epígrafes recalcados en
negrita.
c) PREGUNTA
Tus preguntas deben ir en busca de las ideas principales, de los
pasos que sigue el razonamiento.
¿Qué es lo que pretende el autor?,
¿Qué dice realmente?,
¿Cómo lo dice, con qué procedimientos?,
¿Cuál es la idea principal?,
¿Entiendo lo que he leído?,
¿Lo voy asimilando?,
¿Me resulta difícil, pesado?,
¿Por qué?.
d) REFLEXIONA
Es el momento más importante del estudio:
Ya empezaste a reflexionar mientras explorabas, leías y preguntabas;
(dicho en términos culinarios)
Ya has preparado los alimentos, los arrimaste a la mesa; ahora empieza a triturarlos y digerirlos.
Reflexionar quiere decir:
• Volver sobre lo que has visto, leído u oído para examinarlo a la luz de la mente.
• Si es historia o se trata de una narración, pregúntate cuál es su origen, su desarrollo y su fin.
• Esfuérzate, al final, por formarte una visión sintética donde se vea el armazón del tema estudiado.
e) RESUME
1. Ahora pon por escrito esta síntesis final, bien ordenada; será un elemento valiosísimo para el repaso final, antes de exámenes
2. Si puedes hacerla sin ver el libro de texto, mejor; si no te acuerdas de todos los detalles, consulta el libro, pero ahora ya sabrás lo que te interesa.
3. Un resumen nunca debe reducirse a copiar con menos palabras lo que dice el texto; entre el texto y tu pluma está tu mente triturando, como un molino, lo que lee, desechando lo que es paja y trasmitiendo a tu pluma lo que es harina blanca de trigo.
4. Escribe con tus palabras y como lo has entendido: cuando repases, lo recordarás mejor, porque serán nociones y términos familiares.
f) RECITA
• Con ayuda de tu resumen o esquema procura explicar la lección, imaginando que tienes delante a tus compañeros, o que rindes cuenta de la misma ante el profesor.
• Tu explicación ha de ser breve y clara.
• Dicen que nunca se aprende mejor que cuando se tiene que enseñar; al intentar explicar a otro, irás viendo las relaciones que tienen las ideas entre sí o te percatarás de que no has entendido bien el pasaje o el desarrollo de una fórmula y tendrás que volver al texto.
g) REPASA
• Es el momento de poner en funcionamiento tu memoria, hasta lograr repetir la lección sin el texto y sin ayuda del resumen escrito; es también el momento de rectificar las inexactitudes, las omisiones y fallos comprobados en la recitación.
• No te contentes con una sola vuelta, hay que repetirlo una y otra vez hasta que estés en condiciones de aferrarlo con seguridad.
III. Después del estudio.
Has concluido tu trabajo de estudio
Al principio se te habrá hecho un poco arduo; a medida que te ejercites, encontrarás mayor facilidad, hasta que llegues a hacer estas
operaciones de modo espontáneo, placentero y fecundo.
¿Puedes ya dejar todo y salir a distraerte?
Aun te faltan dos pequeños detalles:
a) Preleer
Preleer la lección que al día siguiente
explicará el profesor para que no te
encuentres, mientras habla él, como tonto
en vísperas.
b) Ampliar
* En realidad, tu jornada diaria de estudio ha terminado; te has ganado el descanso.
* Sólo te quiero hablar de una posibilidad para cuando quieras profundizar en una materia o tengas que preparar un trabajo.
* No seas estudiante-topo, que sólo conoce su hura, vuela alto y amplía el horizonte de tus conocimientos.
* No estudies sólo para el examen, sino para la vida.
Conclusión:
En la práctica nuestra mente hará varias cosas simultáneamente, como leer y preguntar, leer y reflexionar, pero sí te indican la pista para que aprendas a asimilar una materia; ensaya una y otra vez, hasta encontrar tu fórmula propia.
Habrá quien dedique más minutos a la lectura y menos a la recitación, otros, en cambio, se detendrán más en la reflexión o en el resumen.
Cada uno tiene su secreto; que lo ponga en obra, con tal de conseguir lo que buscamos, entender y retener bien la materia.
Bibliografía:
• 1.- BOSQUET, R., Cómo estudiar con provecho, Ibérico Europea de Ediciones, S.A. Madrid 1980.
• 2.- CONQUET, A., Cómo leer mejor y más de prisa, Ibérico Europea de Ediciones, S.A. Madrid 1980.
• 3.- DARTOIS, C., Cómo tomar notas, Ibérico Europea de Ediciones, S.A. Madrid 1990.
• 4.- HILGARD, E. R., Teorías del aprendizaje, F. C. E., México, 1991.
• 5.- STATON, T. F., Cómo estudiar, ed. Trillas, México, 1997.
• 6.- GUERRA D. H., Cómo estudiar hoy, ed. Trillas 1992.
¡¡ Gracias por su atención !!
M.A. Teresita Salgado Mejía
M.A. Alberto Córtes Herná[email protected]
Facultad de Contaduría y Ciencias Admtvas.