Download - El robot de otro nivel que amenaza tu empleo
El robot de otro nivel que amenaza tu empleo ‘Sawyer’ es capaz de realizar tareas complejas como el ensamblaje de
productos electrónicos; tiene un ojo que se mueve a par de su brazo
mecánico, acción similar a la vista humana.
NUEVA YORK (CNNMoney) — Sawyer,
el robot de un solo brazo, puede hacer
muchas cosas. Puede ensamblar
mercancías en la planta de una fábrica
día tras día sin cansarse, sin tomar
descansos para ir al baño ni pedir a su
jefe un aumento de sueldo.
Sin embargo, lo que Sawyer no puede hacer es entender el debate humano que
gira alrededor de su potencial para revolucionar la fabricación, e incluso a la
sociedad, como la conocemos.
Dependiendo de con quién hables, los robots como Sawyer presagian una nueva
era de desempleo en el mundo, o nos salvarán de la clase de trabajos aburridos
que no le desearías ni a tu propio hijo.
Es mucha responsabilidad para un robot de un metro de altura con un brazo y una
pantalla táctil por cara. De apenas un mes de edad, Sawyer ya se ha hecho de un
nombre por sí mismo como el nuevo chico de la robótica por su extremidad
súperflexible, capaz de realizar tareas complejas que antes se creían ajenas al reino
de las máquinas.
Sawyer, el robot ensamblador, tiene un valor de 29,000 dólares (Foto: Cortesía Rethink Robots para CNNMoney)
Máquinas que fabrican máquinas
Espera a ver a Sawyer juguetear con las placas de circuitos, junto con sus colegas
humanos en la fábrica, dice su creador Rodney Brooks, de la empresa con sede en
Boston, Rethink Robotics.
“Estamos apuntando a la industria de ensamblaje de productos electrónicos; y la
mayoría de ello está en Asia”, dijo el ingeniero de origen australiano, quien también
está detrás de los PackBots desactivadores de explosivos que fueron utilizados por
el ejército estadounidense en Irak.
El inusual diseño de un solo brazo de Sawyer se produjo tras analizar más de 150
tareas de fábrica, al hallar que muchas podían hacerse con una sola extremidad.
El robot de 29,000 dólares será un “hermano pequeño” de Baxter, un robot de dos
brazos más grande lanzado en 2012 y más adecuado para levantar objetos pesados
que para maniobras complicadas.
Ambos tienen ojos animados que miran en la dirección a la que se dirigen; justo al
igual que los humanos.
El auge de los robots
Pero el aumento de la destreza de Sawyer también nos podría llevar un paso más
cerca de lo que el empresario de Silicon Valley Martin Ford describe como el “Fin
del juego” de la fabricación: un momento en que las fábricas están casi totalmente
operadas por máquinas.
“Los robots están entrando al terreno en donde están comenzando a competir con
las personas por ese ese tipo de puestos que dependen de la coordinación mano-
ojo; cosas que hasta ahora, solo la gente podía hacer”, dijo Ford, quien también es
el autor del nuevo libro La rebelión de los robots: Tecnología y la amenaza de un
futuro sin empleo.
“¿Qué vamos a hacer por las personas que son desplazadas? La evidencia sugiere
que no serán suficientes los nuevos empleos creados en otras áreas. Habrá algo -
para ingenieros y demás- pero los números no empatan”.
A medida que los robots se vuelven más avanzados, no solo están en riesgo los
trabajadores de las fábricas, sino el personal de servicio y los empleados de oficina,
agregó. "Este es un gran problema; algo en última instancia al nivel del cambio
climático, en términos del desafío que representa para la sociedad”.
Muéstrame los trabajadores
Brooks ve las cosas de manera distinta, con el argumento de que las empresas ya
están luchando para encontrar suficientes personas dispuestas a hacer trabajos de
fabricación no especializados; ya no digamos robots.
“Si fuera el caso de que las personas hicieran fila en busca de trabajos de fábrica,
entonces eso sería un temor válido Pero en Estados Unidos la edad promedio de
un trabajador de fábrica es de más de 55 años; la gente no quiere esos empleos”,
dice el ex director del Laboratorio de Ciencias de la Computación e Inteligencia
Artificial del MIT.
“Cuando la gente me dice que los 'robots se van a robar los puestos de trabajo',
siempre les pregunto: '¿Quiere que su hijo trabaje en una fábrica?'. Y siempre me
dicen: 'Oh no, no mi hijo, pero ya sabes, los hijos de otras personas”.
Brooks dice que la destreza es uno de los mayores retos de la robótica en la
actualidad.
“Simplemente no sabemos cómo construir manos hábiles. Es un área en la que no
se ha avanzado mucho en los últimos 40 años”, dijo. “Así que esa es una de las
razones por la que los robots no van a dominar el mundo y a reemplazar todos”,
dijo.
“Creo que ahí es donde Hollywood confunde a todos. Los robots realmente no son
muy inteligentes. Ellos no entienden lo que están haciendo o por qué lo están
haciendo”, añadió el ingeniero de 60 años de edad, quien comenzó a fabricar robots
cuando tenía ocho años de edad.
Trabajos del viejo mundo
Tanto Sawyer como Baxter fueron nombrados con palabras en inglés arcaico para
designar profesiones: “Sawyer”, que significa alguien que serrucha madera, y
“Baxter”, que significa una mujer que hornea.
“Los nombres son de profesiones antiguas que ya no están en uso”, explicó Brooks.
Aún está por verse si reemplazarán algún día a la ocupación de “trabajador de
fábrica”.