Download - Cristo, la Ley y el Evangelio
Lección 9 para el 31 de mayo de 2014
“Aunque debemos dirigir al pecador a Jesús porque es el único que
puede quitar el pecado, también debemos explicarle lo que es el
pecado y hacerle sentir que debe cesar de transgredir la ley de Dios.
Puede ser salvo de sus pecados, pero no en sus pecados. Muchos años
después de la muerte de Cristo, Pablo pregunta: “¿Qué diremos,
pues? ¿La ley es pecado? En ninguna manera. Pero yo no conocí el
pecado sino por la ley; porque tampoco conociera la codicia, si la ley
no dijera: No codiciarás” (Romanos 7:7). De esta manera Pablo
exalta la ley de Dios y muestra la sabiduría divina para ayudarnos a
detectar el pecado y descubrir los defectos de carácter moral. A la
luz de la ley se ve la terrible deformidad del pecado”E.G.W. (Review and Herald, 27 de septiembre de 1881)
¿Cuál es la función de la ley en el
proceso de la salvación?
“Mirad, yo os he enseñado estatutos y decretos, como Jehová mi Dios me mandó, para que hagáis así en medio de la tierra en la cual entráis para tomar posesión de ella. Guardadlos, pues, y ponedlos por obra; porque esta es vuestra sabiduría y vuestra inteligencia ante los ojos de los pueblos, los cuales oirán todos estos estatutos, y dirán: Ciertamente pueblo sabio y entendido, nación grande es esta” (Deuteronomio 4:5-6)
El cumplimiento de la Ley por
parte de Israel debía servir como
un medio evangelizador para que
otros pueblos conociesen al
verdadero Dios.
“Dios deseaba hacer de su pueblo
Israel una alabanza y una gloria. Le
dio toda ventaja espiritual. No privó a
sus hijos de nada que favoreciese la
formación del carácter que los haría
sus representantes”
E.G.W. (Testimonios, tomo 6, pg. 225)
“Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas, sino que en toda nación se agrada del que le teme y hace justicia”
(Hechos 10:34-35)
“porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó” (Romanos 1:19)
¿Por qué el corazón de todo ser humano tiene
un deseo espiritual inherente (Eclesiastés 3:11)?
Aunque jamás hayan oído hablar de Jesús ni
del evangelio, las personas sinceras pueden:
1. Conocer a Dios en la naturaleza
(Hechos 17:26-27; Romanos 1:20)
2. Hacer Su voluntad, siguiendo los dictados
de la ley escrita en sus corazones
(Romanos 2:14)
Todo esto es la obra del Espíritu Santo en
cualquier nación.
Todos son responsables por las porciones de
verdad que han percibido.
“Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo” (Juan 1:17)
La palabra “pero” ha sido añadida por
los traductores. Juan no tiene el
propósito de insinuar que era malo el
sistema revelado por medio de Moisés,
en comparación con el que ahora era
revelado por medio de Cristo, sino que,
aunque era bueno el sistema de Moisés,
el de Cristo es mejor.
En su vida, Jesús nos dio un ejemplo
perfecto de obediencia a la Ley
(Filipenses 2:8; Juan 15:10)
Jesús es la Verdad (Juan 14:6), y el que cree
en la Verdad recibe la gracia de la salvación
(Efesios 2:8) y el poder para guardar la Ley
(Juan 14:15)
“Mientras andaba haciendo bien y sanando a
todos los afligidos de Satanás, demostró
claramente a los hombres el carácter de la ley de
Dios y la naturaleza de su servicio. Su vida
testifica que para nosotros también es posible
obedecer la ley de Dios.
Por su humanidad, Cristo tocaba a la humanidad;
por su divinidad, se asía del trono de Dios. Como
Hijo del hombre, nos dio un ejemplo de
obediencia; como Hijo de Dios, nos imparte poder
para obedecer”
E.G.W. (El Deseado de todas las gentes, cp. 1, pg. 16)
“Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro” (Romanos 6:23)
“Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados” (Efesios 2:1)
Una persona que vive en pecado es meramente un
cadáver que camina y solo espera el día en que el
último suspiro salga de su cuerpo (Romanos 7:24)
La ley dice: “Estás muerto”.
El Evangelio dice: “En Jesús, tienes vida”.
“¿Qué, pues, diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para que la gracia abunde? En ninguna manera. Porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él?” (Romanos 6:1-2)
¿Nos libera, pues, el Evangelio de
cumplir la Ley?
La Ley nos muestra el pecado y
nos condena
El Evangelio nos muestra el perdón y la salvación
Salvos por el Evangelio, podemos vivir en
armonía con la Ley
“El Evangelio de las buenas nuevas no debía
ser interpretado como algo que permite que
los hombres vivan en continua rebelión
contra Dios, transgrediendo su ley justa y
santa. Los que pretenden entender las
Escrituras, ¿por qué no pueden ver que el
requisito de Dios bajo la gracia es
exactamente el mismo que impuso en el Edén:
perfecta obediencia a su ley? En el juicio Dios
preguntará a los que dicen ser cristianos:
¿por qué afirmasteis creer en mi Hijo pero
continuasteis transgrediendo mi ley?”
E.G.W. (CBA, material suplementario sobre Romanos 3:31)