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CASTELLS. ANTlBLÁSTICOS 431
La di.seminación de células tumorales es una complicación más teórica
que práctica, pues las zonas neoplásicas suelen estar aisladas de la corriente
linfática y la velocidad de inyección del contraste es menor que la normal
de la linfa (7 cc/rnin).
CoNCLUSIONES. - Como hemos pretendido demostrarles la linfografía
es un medio más a nuestro alcance para intentar reconocer la metastatiza
ción linfática antes de la intervención quirúrgica.
Aunque por ahora existen muchas ocasiones en que somos incapaces
de definimos ante una imagen determinada, esperamos que llegará un día
en que podrán sistematizarse al máximo todas las imágenes y entonces
estaremos en condiciones de presentar la linfografía como un medio de
diagnóstico rutinario. Las imágenes típicas de metastatización son poco frecuentes y, además,
signos tardíos cuya aparición no debemos esperar. Es por esto que toda linfografía debe ir seguida de un estudio anatomo
patol6gico que confirme el diagnóstico linfográfico. De esta simbiosis
Anatomía patológica-Linfografía, saldrá beneficiada grandemente la inter
pretación linfográfica.
Sesión del día 25 de febrero d.e 1966
ANTIBLASTICOS EN DERMATOLOGtA
A. CASTELLS RODELLAS
Agrupamos bajo este nombre a unas sustancias químicas heterogéneas
entre sí, cuya acción farmacológica más patente es la de inhibir la repro
ducción de las células vivas, con acción más o menos selectiva sobre las
células tumorales. Cuando un organismo se ve invadido por microorganismos patógenos
despiertan en aquél un mecanismo complejo de defensa que tiende a des
truir y a eliminar al agente perturbador. Podemos facilitar la defensa
del organismo enfem10 administJando sustancias que inhiban la reproduc
ción del germen sin causar ninguna lesión o al menos la mínima al orga
nismo huésped. Pero si son las propias células constitutivas de un organis
mo, las que se comportan como un agente patógeno al perder su tendencia
n.a~l.ral a la unidad orgánica funcional, por pasar a un estadio de irrever
Sibilidad mucho más estable debido a una desorganización de los delicados
-132 AXALES. SF.CCIÓl\ ESPECIALIDADES
mecanismos de información genética, adquiere entonces el problema unas c:araclerbticas tan peculiares a las que todavía no se ha encontrado una solución satisfactoria. Conociendo algunos detalles del intrincado metabolismo celula1· normal y tumoral, es posible encontrar diferencias de tal forma íltle nos es en parte posible hacer actuar compuestos químicos que interfieran con algún eslabón de su cadena metabólica sin apenas dmiar a las células normales.
Cenb·ado el problema se han propuesto diversas soluciones, unas mutilaotes que extirpan al grupo celular anómalo, pero la imposibilidad de llevar la cirugía a nivel celular es causa de muchos fracasos. Otras interfieren a la reproducción tumoral por medios físicos como son las radiaciones ionizantes, que en el caso de las neoplasias cutáneas adquiere toda su vigencia. Pero en estos últimos años han terciado en el problema la aparición de unos compuestos químicos sintéticos en su mayoría y los menos extraídos de vegetales o animales, cuya acción común es la inhibición de los procesos de reproducción celular de tal forma que cuanta mayor sea la capacidad reproductiva de una célula más sensible será a estos preparados.
Según sea su modo general ele acción podemos clasificar a estos fármacos en:
a) Antimetabolitos. - Son los que antagonizan de forma espedficn a los constituyentes normales esenciales del metabolismo celular.
b) Citostáticos.- Son los derivados del gas mostaza nitrogenadn y todos los que llevan en su fórmula estructural un anillo etileno-imina.
e) Antimit6ticos. - Su acción es inhibidora de la mitosis al formarse el huso cromático, o sea, durante la metafase.
d) Hormonas.
e) Grupo vario en que se agrupan sustancias de características especiales por lo que se apart<ln algo de ]os anteriores.
ANUMETABOLlTOS.-Su efecto farmacológico es sustitutivo, o sea, desplazan a los metabolitos normales presentes en la célula en división sustituyéndolos y dando como resultado trastornos metabólicos graves como es la imposibilidad de sintetizar a los ácidos nucleicos y las coenzimas. Estos ácidos están formados por una base purínica o pirimidíoica, ribos.a y ácido fosfórico. La síntesis de estos ácidos la podemos interferir administrando núcleos purínicos o pidmidínicos falsos o mocliflcados, que la célula no es capaz de distinguir de los normales e incluso en muchas ocasiones tiene una apetencia extraordinaria para los mismos. Jncorpora?os al metabolismo celular no llegan nunca a sintetizar ]as sustancias prec1sas para la reproducción celular. También administrando sustancias antiglutamlnic:as tan necesarias para la síntesis purínica llegamos al mismo resultado.
Los núcleos falsos más utilizados son: 6-mercapto-puTina y la aza~6-guanina como representantes del grupo de las antipurinas. El .'5-fluouraCJJo,
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6-aza-uridina y la yodo-5-desoxi-uridina en el grupo de las antipir:imidinas. Un grupo e~peciallo componen los inhibidores del ácido fólico, inhiben
la síntesis de las bases purínicas y pirimidínicas al bloquear la dehidrofólicoreductasa impidiendo el paso de ácido fólico a folíuico. Detienen a las mitosis antes de la anafase, siendo normales las figmas de mitosis observables en los estadios de profase y metafase. Los principales representantes del grupo son la aminopterina y la ametopterina (Methotrexate).
CrTOSTÁncos.- Son los derivados del gas mostaza nitrogenada ~' los compuestos activos que llevan un grupo etileno-imina. Se llaman también agentes alquilantes por ceder con facilidad radicales alquilo cuya capacidad de reacción es extraordinaria. Esencialmente su fórmula estructural consta de un grupo de transporte y w1as cadenas alquilicas que al desprenderse reaccionan con las proteínas y especialmente en el ácido desoxirribontJcleico.
Su mecanismo de acción es todavfa osc1..tro, pero se admite por muchos autores que los 1·adicales alquílicos liberados se combinan con las nucleoproteínas provocando tma desnaturalización de las mismas. En algutlos casos no se había comprobado tma inhibición de las deshidrogenasas y de las glicolisis de las células tumorales, pero al usar nuevos agentes alquilantes se observó que esta disminución era muy pequeña consiguiéndose un gran efecto encolítico, por lo que se pensó que dicha disminución era secundaria (ÜBERCHT). Siendo su mecanismo de acción muy semejante al de las radiaciones se ha convenido en llamarlos tóxicos radiomiméticos. De acuerdo con su constitución química podemos establecer los siguientes apartados:
a) Derivados de la cloro-etil-amina o mostazas, cuyo p rincipal representante por su buena tolerancia y su uso tan va1iaclo es la ciclofosfamida.
b) Derivados que contienen el grupo etileno-imina cuyos p rincipales representantes son el Tem, Trenimón, Azetepa y Tiotepa.
e) Esteres sulfónicos como el Myleran cuyo uso prolongado puede determinar amenorrea y pigmentación melánica.
d) Epóxidos que no han tenido mucha aplicación por sus cualidades altamente tó:~.icas.
A!>'Tn.JITÓncos. - Se llaman también tóxicos del huso por impedir la ordenación cromosórnica en el plano ecuatorial de la célula. Detienen a las mitosis en la metafase. Parece ser (DusTIN) que actúan bloqueando los grupos SH de la célula. Pertenecen a este grupo la Colchicina y sus derivados, la Podofilinotoxina y sus derivados, la Vincaleucoblastina y sus derivados y probablemente la Actinomicina C.
HonMONAS. -Su utilización viene limitada a las neoplasias de órganos con regulación fisiológica hormonal y concretamente en las neoplasias de
434 Al>~ALES. SECCIÓN ESPECIALIDADES
mama y próstata. Estudiando el sexo morfológico de Jos núcleos celulares representados por los corpúsculos de Barr que se encuentran en los núcleos celulares de animales hembras y personas del sexo femenino adoptando una forma biconvexa y estando sobre la membrana nuclear, se llega a la conclusión que en un 10% de casos hay un comportamiento heterosexual de la cromatina; según algunos autores (REGALE) esta heterosexualidad llega a algo menos de la mitad de los casos. Por lo tanto llegan a la conclusión de que independientemente del sexo del portador podemos citol6-gicamente distinguir dos tipos de carcinoma: uno masculino y oh·o femenino. En el carcinoma de mama los tumores de tipo masculino tienen un pronóstico sombrío en lo que se refiere al tratamiento hormonal. Los de tipo femenino responden por lo general bien al tratamiento con andrógenos.
En este grupo podemos también incluir a los corticosteroides y sus derivados por su manifiesta acción sobre determinados tipos de neoplasias.
Resaltamos en este apartado el que sustancias hormonales se comportan como antiblásticos de primer orden.
GRUPO DIVERSO. - Encuach-amos en este grupo a una serie de fármacos que difieren de Jos precedentes por apartarse estructural y funcionalmente de los citados. Entre las sustancias extraídas de microorganismos y que tienen tma cierta actividad antibiótica están: Actinomicina C y D y la Mitomicina. Parece ser que su mecanismo de acción es la despolimerización de las cadenas del DNA.
El metil-glioxal-bis que actúa como .inhibidor de la respiración celular. Vistos a grandes rasgos Jos aspectos f:-umacológicos de estos preparados
entramos en el terreno de las formas y vías de administración. Se pueden utilizar, ya sea uno cualquiera solo o combinando dos o más
simultáneamente o separadamente, estableciendo una serie de combinaciones que actúan en diversas fases del metabolismo celular y por lo tanto los hacen más eficaces, pero también mucho más peligrosos.
Pueden combinarse también con sustancias que alteren la fosforilización oxidativa de la respiración celular produciendo tm "desacoplamiento"; tales sustancias son la triyodo-tironina y la clorpromacina, lienen una acci~n preferente sobre las mitocondrias de las células tumorales atacando mas tardíamente a las mitocondrias de las células normales. BACIGALUI'E obtuvo una regresión completa de un carcinoma sólido de la piel asociando una de estas sustancias con la ciclofosfamida por vía tópica.
Estudiando el crecimiento tumoral se ha observado (PoHLE y cols.) que ésta está sometido a :fluctuaciones rítmicas en el transcmso de las 24 horas ascendiendo hasta w1 máximo en las horas 20-24 para descender a un mínimo sobre las 4-8 horas de la mañana. Administrando el fármaco en las primeras horas de la tarde su acción era escasa; por el conb·ario era mayor si se daba en las primeras lwras de la mañana. Sin embargo, se están estudiando todavía estas :fluctuaciones.
CASTELt.S. AXTI8LÁST1COS 435
ViAs DE ADMlNISTRAClÓN.- Son variadas podemos resumirlas en:
a) Vía tópica pudiendo admirustrarse en ungüentos, toques o pincela
ciones siendo aconsejable util.izar previamente una coagulación superficial
o rasgar muy superficialmente J¡¡ piel que recubre la neoplasia ya <1ue de lo
conb·ario puede fracasar el tratamiento. Al utilizar esta via es necesario
vigilar al enfmmo para evitar la progresión de la neoplasia y hacerle perder
un tiempo precioso.
b) Vfa intratumoral, aceptada por muchos autores y rechazada por
otros ya que según éstos se fnvorecería la diseminación del tumor. Una
variante es la de infiltrar los bordes y el fondo del rumor al proceder
a biopsiarlo para evitar por bloqueo el paso a los tejidos circundantes,
vasos sanguíneos y linfáticos de células neoplásicas por las maniobras qui
rúrgicas. También una vez extirpada una tumoración maligna pueden
infiltrarse los tejidos sanos.
e) Vía intraarterial. Muy indicada siempre que sea posible inyectar
en la arteria principal de la parte afecto\. Puede administrarse el medi
camento inyectando por punción en la arteria de forma más o menos
periódica o bien manteniendo por un tiempo una perfusión de forma
continua recogiendo por la vena eferente la máxima cantidad de producto
lOO%
90% . . . 80%
70%
60%
50%
40% ~ Estaciono . . . 30% D Fracasos . 20% rn Mejoría
+
10% D Curados
B E M MS S P FS EM
Cuadro de porcentajes de lo< cursos ellnicos de los enfermos tratado•.
436 ANALES. SECCIÓN ESPECL.U.JDADES
perfundido posible, Jo que implica la inclusión ele un aparato de circulaci\m extracorpórea que complica extraordinariamente el procedimiento. Tambiéu es muy eficaz la perfusión continua sin recuperación del fármaco y tal vez la más utilizada ya que une a su simplicidad una gran eficacia.
d) Vía endovenosa, insuficiente para tratar neoplasisas cutáneas como única terapéutica, sin embargo su administración durante el acto operatorio nos parece muy acertada por cuanto actúa sobre las células tumorales que han pasado al torrente circulatorio por las manipulaciones del foco tumoral. También se utiliza en las neoplasias tratadas por otros medios como coadyuvante del b·atamiento realizado. También en los tumores en fases tan avanzadas como último esfuerzo para mejorar lo irreparable.
e) Vía oral, de elección en tratamientos prolongados o discontinuos una vez tratada la lesión por otros medios, actuando como pro6láctico.
f) Vía intramuscular es una ampliación de la anterior cuya ventaja reside en su mejor absorción y efecto, pero su administración más incómoda.
Son mt1y numerosos los casos de neoplasias cutáneas tratadas con antiblásticos exclusivamente o asociándolos a otros tratamientos (cirugía y radia· ciones) publicados en la literatura médica mundial. Entresacamos de ellos 271 casos (véase gráfico aparte) lo que nos permite llegar a las siguientes conclusiones:
I.a Los epiteliomas basocelulares responden relativamente bien al tratamiento con antiblásticos lográndose un 63 % de curaciones y en la variedad de epitelioma pagetoide se logra el lOO% de curaciones (casos de DE ASPR.ER y PoNs), pero como contrapartida no se logró curar ningún ulcus rodens.
2." L as precancerosis responden muy bien con dicho tratamiento lográndose un 97% de curaciones.
3.• Los epiteliomas espinocelulures responden con un 31% de curaciones lo que representa un fracaso frente a las medicaciones clásicas de éstos.
4.11 Los melanomas, melanosnrcomas, fibrosarcomas y epiteliomas epidermoides ya constituyen un verdallero fracaso terapéutico por su exiguo porcentaje de curaciones.
En un caso nuestro tratado juntamente con RoSELLÓ y DE AsPRER en el que hubiéramos tenido que realizar una gran resección pudimos curar!~ con una resección muy económica gracias a la utilización de la ._ciclofos· famida. Se trataba de una enferma ele 73 años vista hace seis meses c1ue presentaba una tumoración vegetante y fácilmente sangrante en la región preauricular izquierda. Al iniciarse, hace dos años, su tamaño era de un garbanzo, lentamente fue creciendo hasta que bruscamente hace dos meses adquiJ·ió el tamaño de un huevo de gallina. No le causaba ningún dol?r. En su base se apreciaba una discreta infiltración, no se palpaban ganghos
.·\utor Diagnóstico N .o 1\fejorias EstatiOJHl. CurnciQn Fracasos Íf'atnmien to
Vilanova E. espinocelular 1 1 Po~ojili~o top.
" E. basocelular 13 5 8 de· Asprer E. pagetoide 2 2 D~mecolcín tog· Belisario Ulcus rodens . 5 2 3 V1t. K11 y Po .
Sitard E. espinocelular 1 1 Trenimón i.t.
Truehaut " 1 1 D-T-C + Radiote.
Boffi Melanoma 3 2 1 SP-1 i.a.
~talan Melanosarcoma 2 2 Wup,pertal Mela noma 3 1 2 Trenimón i.m.
Sarcoma 4 3 1 ,
o
Tullís Melanoma 13 2 2 9 Tiotepa i.m. i.v. > "'
Lon~orc Melanoma 1 1 Tiotep~' i.a. -l '-'!
Fibrosarcoma 1 1 1:"' 1:"'
Bacigalupe E. espinocelular 1 1 CiF. + Clorpro. !"
Stiefel E. basocelular 1 1 SP-1 i.a.
E. espi~ocelular 6 3 i 2 :\.fTX. La. ~ :7. 2 :\HX. i.a. + Oper. ~ 1 1 5-FU i.a. 1:"'
1 1 SP-1 + MTX i.a. >· "'
1 1 SP-I + Oper. ::l o
E. epic1~rmoide 2 2 5-FU o "'
1 l SP-I i.a. 1 1 Metilhidracina i.n.
Fishcr Precancerosis 30 29 1 Trenimón
" E. basocelulares 156 101 55 Trenimón E. espinocclulares 10 2 8 Trenimón
f.lmcicla E. basocelular 1 1 SP-1, SP-G + Rad. .. 1 1 SP-I, SP-G + Op. 1 1 SP-I, SP-G tóp.
E . esp~ocelular 1 1 SP-1, SP-G 1 1 SP-1, SP-G + Op. 1 SP-1, SP-G + Rad. ¡!>..
Lcrat E. metastásico 2 2 SP-I, SP-G +Op. w ....¡
438 ANALES. SECCIÓN ESPECIALIDADES
linfáticos regionales. Fue requerido nuestro compañero RoSELLÓ para extirpar en bloque toda la neoformación. Para ello se dispuso en un primer tiempo preparar un colgajo pediculado tubular del brazo izquierdo para reparar la pérdida de sustancia que supondría tal extirpación. Entretanto
Ci\STELLS. ANTlBLÁl;TICOS 439
decidimos cateterizar la arteria temporal superficial y practicar una arterio
grafía previa para determinar si la tumoración se inigaba a través de
dicha vía. En la arteriograHa aparece la neoplasia más opacificada y en
cuadrada dentro del área de la temporal superficial.
Se dejó el catéter colocado y diariamente se perfundían 200 mg de
ciclofosfamida. A las 24 horas de la primera perfusión, la superficie tumoral
que aparecía húmeda, enrojecida y fácilmente sangrante se había secado.
A los siete días se obturó el catéter por trombosis de la atteria temporal
Tumor~ci .Jn visto. de frent e.
superficial. Al día siguiente se desprendió una parte de la tumoraci6n.
A partir de este momento y animados por el resultado obtenido aplicamos
la ciclofosfamida en inyección intratumoral. A los 15 días la tumoración
estaba reducida a su tamaño inicial, o sea, al de un garbanzo.
A las tres semanas se exru·pó el resto de la tumoracióu implantando el
c~lgajo tubular, siendo la resección mucho más económica y con mejor
resultado estético. En la actualidad esta enferma está completamente
curada. De la pieza operatoria se practicó un estudio histológico por el doctor
HUBlÓ cuyo dictamen es el siguiente: en la zona ulcerada hay una excre
cencia o e8oración exofítica de la misma constituida por tejido carcinoma
toso. ltste muestra células de tipo epitelial de enorme anaplasia con mons
truosidades. Esta gran anaplasia es seguramente por lo menos en parte
responsable a la inlluencia del antimitósico.
440 ANALES. SECCIÓN ESPECIALIDADES
E l corion superficial muestra una degeneración sen i 1 colastínica con
esclerosis sobreañadida, neovascularización de tipo cicatr iza! y un gnm~l· loma crónico inespecífico con transformación en granuloma a cuerpo extraño
con células gigantes en algún punto. La epidermis que lo cubre es hiper-
Tumoración ,·istn desde arriba.
plásica, irregular con proliferaciones pseudoepiteliomalosas hacia la pro· fundidad. En un punto vecino a la ulceración muestra una proliferación reticular del tipo del fibroepitelioma de Pinkus.
En todo el resto de la dermis hay una inflamación crónica que se acentúa en la hipoclerníis. La base de la úlcera se halla particularmente in flamada, pero siu importantes lesiones en los vasos de algún calibre.
Hay que destacar que la admil1istración de la ciclofosfamida no pre
sentó en ningún momento ninguna intolerancia ni depresión alarmante de la médula ósea. Eran frecuentes al administrar el fármaco fenómenos vaso
motores en la zona perfundida tales como palidez al iniciar la inyecci~n por vasoespasmo seguida de parálisis capila1· con amorntamienlo que ced1a
com LJletamente a los pocos minutos. No rep,·esentó tampoco ni11gún retraso en la cicab·izaci6n , 6sta fne completamente normal.
Podemos tlcducir del caso prescllhHlo Cjlle el uso ele un antiblásti~o Pll tl<juellos procesos que deban ser extirpados y reparados mediante plasha
peclicuiada, tiene toda su indicacióu siempre que sea posible el tratamiento.
ya que nos dejará la zona receptora en unas condiciones buenas para
CASTELLS. ANTIDLÁSTlCOS 441
recibir el injerto, cosa que no suele ocmrír en los casos tratados preopera
toriamente con radiaciones. También el uso de estos medicamentos nos puede facilitar su extirpa~
ción al reducir el tamaño de la tumoración.
bmiCACIONES.- En Dermatología son limitadas y precisas, por ser
neoplasias fúcilmente diagnosticables por los dermatólogos expertos, por
ser vistas muchas veces antes de dar metástásis, por responder bien al
tratamiento hasta ahora utilizado, o sea, radiaciones y exéresis y por
la poca eficacia, en general, de estos medicamentos en algunas neoplasias
por vía tópica. Por lo cual podemos sentar las siguientes:
l) Tumores metastásicos o primarios que abarquen zonas cutáneas
que por su extensión o por el hecho de presentar otras metástasis en otros
órganos no puedan ser extirpadas en su totalidad, aunque la tendencia
general es irradiarlas.
\' i•ta lateral tic la tumoración. Obsérvese la situación tlel catéter coloc:ttlo en la arteria lemporal superficial.
2) Tumores primarios en espera de realizar un tratamiento quirúrgico
o radiológico, o también combinar cualquiera de éstos con el antiblástico
especialmente en los casos limitados a las extremidades incluida también la cabeza.
3) Como pro:61áctico una vez realizado el tratamiento más idóneo.
442 AXALES. SI::CClÓI\ ESPECIALIDADES
4) Como tratamiento en ciertas neoplasias que según expeliencias sabemos que responden bien a estos h·atamientos.
Fuera de estas indicaciones corresponde al c1iterio del dermatólogo el sen lar una indicación de la terapéutica con antibláslicos en cada caso particular.
CoNTHAil\'DICACIONES. -El uso de estos mecbcamentos presupone contra indicación formal en los siguientes casos:
l) Embarazo por cuanto es manifiesta su capacidad teratógena y abortiva.
2) Depresiones graves de la médula ósea, especialmente si coexiste con alguna infección por colocar al paciente en una situación crítica de defensa contra la infección.
3) Estados caquécticos o desnutriciones intensas por el peligro c¡ue supone el administrar fármacos inhibidores de la síntesis proteica.
4) Enfermedades renales en las que está p erhlrbada la producción de orina por eliminarse la mayorí~l de estos medicamentos por esta vía.
co~IPLlCACIONES. -Son variadas; unas dependen del fármaco en sí V
oh·as de su adminish·ación.
a) Depresiones de la médula ósea con leucopenia, trombopema y anemia. Podemos evitarlas practicando a menudo hemogramas en sangre periférica o en médula ósea si el caso lo reqtilliese. Se h·atarán suprimiendo el fármaco, administrando Complejo "B", practicando transfusiones de poca cantidad, pero repetidas y en el caso de haber utilizado un antimetaboli to dar el antídoto correspondiente.
b) Síntomas digestivos con estomatitis, náuseas, vómitos y diarreas a veces sanguinolentas, cecle11 al snprimir el fármaco.
e) Síntomas minarios cou cistitis hemorrágica por irritación vesical al eliminarse el medicamento.
el) Alopecias reversibles en su mayoría, para evitarla NISSEN y MuER
atan una cinta alrededor del cráneo antes de la administración venosa o arterial del medicamento.
e) Polineuritis ceden al suprimir el antiblástico y administrar Coro· piejo "B" y citroflavonoicles.
/) Atrofia testicular especialmen te al utilizar la Vincaleucoblastina que cede con arginina y úcido glutámico.
g) Necrosis ele las mucosas al perfunclix por vía intrartcrial y recibir la mucosa el impacto del medicamento a gran concentración.
h) Tromboflebitis química al adminish·arlo por via venosa.
i) Trombosis arterial en casos cuva administración se ha hecho por esta vía. Se debe a irritación de la ínti;na por el medicamento o por trom·
C \STELLS. ANTlllLÁSTICOS 443
bosis a nivel de la herida arterinl al cateterizar la arteria. E11 algún caso
se han descrito embolias periféricas a partir de un coúgulo proximal ilíaco
o femoral. Hemos visto a través de esta breve exposición Jos resultados de algtmos
casos tratados mediante est::t nueva modalidad terapéutica, vamos a cerrar
la estableciendo algunos criterios de aplicación que pueden sernas de
utilidad en la práctica diaria.
Frente a un enfermo portador de una neoplasia cutánea interesa curarlo
causándole las menos molestias posibles y exponerle a los peligros mínimos.
Por lo tanto si la tumoración está en w1a fase precoz que permita aplicar
radiaciones con éxito asegurado y sancionado ya por el uso no es prnclente
aplicar solamente antibláslicos. En Centros bien dotados se practica un
antibiograma neoplásico poniendo en contacto el agente antiblástico con
las células tumorales ~, escogiendo el más operante en cada caso particular,
aplicándolo al enfermo en dosis adecuadas pa1•a evitar las resistencias del
tumor al agente. Éstas pueden tener su origen en el desarrollo de sistemas
enzünúticos que anulen la acción del fármaco, por eliminación de las células
más sensibles y apuición de otras insensibles o por mecanismos muy com
plejos todavía desconocidos. Por lo tanto es muy conveniente practicar asociaciones de diversas
terapéuticas, o sea, radiaciones y antihlásticos o ci.rugía y antiblásticos, ya
que la gran mayoría de autores reconocen la actividad favorable de las
mismas. Pero en la práctica diaria nos encontramos a veces con enfermos en
los qne ya no cabe ninguna otra solución por la exi:ensión del tumor o sus
metástasis; nosotros con ROSELLÓ hemos tenido varios casos de carcinomas
mamarios tratados con extirpación y sometidos luego a radioterapia que
vuelven con metástasis "in situ" muy graves, estos son los enfermos más
idóneos para realizar esta terapéutica ya que han fracasado los u·atamientos
que ho~' se consideran más eficaces para ln enfermedad neoplásica.
Es en definitiva el criterio del médico el que establecerá la conveniencia
de un tratamiento de este tipo sin jamás perder de vista los resultados
previsibles y los peligros a que somete al paciente frente a las otras tera
péuticas.