Download - Biografías de escritores reconocidos.pdf
1
Otilio-Vigil-Díaz.
Nació en Santo Domingo, el 6 de abril de 1880. Poeta y
narrador. Hijo de Francisco Vigil e Isabel Díaz. Cursó su
educación primaria y secundaria en Santo Domingo, pero no
siguió estudios universitarios. Su paso por New York y Cuba y
estadía en París durante las primeras décadas del siglo XX,
marcó su producción literaria.
La literatura francesa del momento despertó en él un
inquietante espíritu de renovación artística. De regreso a la
República dominicana fundó el Vedrinismo, primer intento de movimiento literario de van-
guardia en la República Dominicana que abogó por la introducción del verso libre a la poesía
nacional.
A pesar de ser el único representante del Vedrinismo Vigil Díaz logró, con la publicación del
poema "Arabesco" en 1917, que la poesía dominicana diera sus primeros pasos hacia la
modernidad. Sus poemas y en-sayos de opinión fueron difundidos en las revistas Cromos,
Letras, La Cuna de América, Renacimiento, Cosmopolita, Ahorco, El día estico y Blanco y Negro.
Durante varios lustros mantuvo la columna Fatamorgana, primero en el periódico Listín Diario,
luego en La Opinión y finalmente en La Nación. En el inicio de su carrera literaria estuvo liga-do
al Postumismo, pero las diferencias estéticas con los postumistas lo obliga-ron a distan-ciar de
dicho grupo. Murió en Santo Domingo el 20 de enero de 1961.
POESIA. Góndolas. Santo Domingo: Imprenta Vda. Roques y Cia., 1913; Miserere patricio. Santo
Domingo: Imprenta Vda. Roques y Cia, 1915; Galeras de Pafos. Santo domingo: Edición libre,
1921. Del Sena al Ozama. Santo Domingo: Imprenta Vda. Roques y Cia., 1922; Música de ayer.
Santo Domingo: Editora Montalvo, 1925. CUENTO. Orégano. Santo Domingo: Imprenta
Dominicana, 1949. ANECDOTA. Lilís y Alejandrito. Santo Domingo: Editora Montalvo, 1956.
2
Andrés Avelino García.
Poeta dominicano nacido el 13 de diciembre de 1900 en San Fernando de
Montecristi y falleció el 18 de marzo de 1974en Santo Domingo. Es uno
de los tres creadores del Postumismo, siendo los otros Domingo Moreno
Jiménez y Rafael Augusto Zorrilla. Se caracterizó principalmente por ser
el teórico del grupo, al dar al movimiento sus bases estéticas e
ideológicas que aparecieron en el Manifiesto Postumita publicado en
Fantaseos.
Su labor poética, al igual que la de Moreno Jiménez, puede decirse que se inicia con una forma
muy especial de modernismo haciendo énfasis en los elementos más débiles y externos del
Romanticismo, del que provenía. En ocasiones su estilo se identifica tanto con el de su
compañero de ideales, que su poema de mayor alcance: "Cantos a mi muerte viva", elogiado
por el poeta francés Jules Supervielle, presenta en cuanto a forma y contenido paralelos
sorprendentes con otros de Moreno Jiménez. Con este poema y el de "La hija reintegrada",
escrito años después y al que lo unen sorprendentes analogías, podría hacerse un extenso
estudio comparativo revelador de las fuentes, recursos y elementos utilizados por el
Postumismo para irrumpir en nuestro medio provocando asombro. Al disgregarse el grupo y al
mismo tiempo que Moreno Jiménez emprende sus andanzas a lo largo del país como
portaestandarte del movimiento, Andrés Avelino se refugia en sus labores de filósofo y de
matemático, de las que nacerían, junto a una obra filosófica brillante y de repercusiones
continentales, unos intentos poéticos originales que se conocen como su "poesía matemática".
Mucho después Juan Jacobo Bajarlía, en la Argentina, ofrece muestras de una poesía similar.
Llevado por estas mismas corrientes y después de la experiencia de La Poesía Sorprendida, que
incorporó en forma definitiva el subjetivismo a nuestra literatura, Avelino da la espalda a sus
características realista-postumistas, y emprende una aventura abstracta, que él llama su
«poesía metafísica» y donde "nada está dicho en forma directa".
3
Domingo Moreno Jiménez.
Nació en Santo Domingo el 7 de enero de 1894. Poeta y educador.
Fruto del matrimonio formado por Domingo Moreno Arriaga y María
Josefa Jiménez, hija de Juan Isidro Jiménez, quien fuera presidente de
la República Dominicana en 1899 y 1914. Cursó su educación básica
en la escuela primaria San Luis Gonzaga y se graduó de Maestro
Normal de Segunda Enseñanza en la Escuela de Bachilleres de Santo
Domingo dirigida por Federico Henríquez y Carvajal. Se inició muy
joven en el magisterio llegando a ser director de la Escuela Primaria Graduada de Sabaneta en
dos ocasiones (1918 y 1926) y profesor de la Escuela Normal de San Pedro de Macorís.
También dirigió el Instituto de Poesía Osvaldo Bazil (1950-1970), fundado a instancia suya en
San Cristóbal por el dictador Rafael Leonidas Trujillo Molina. Sus primeros versos fueron
divulgados en las revistas Páginas, Renacimiento y Letras. En 1921 junto a Rafael Augusto
Zorrilla, Andrés Avelino, Vigil Díaz y Francisco Ulises Domínguez, anunció en la revista La Cuna
de América, el nacimiento del Postumismo, movimiento poético que patentizó, mediante el uso
de elementos genuinamente nacionales, el versolibrismo iniciado por Vigil Díaz en la segunda
década del siglo XX. Su extensa obra poética abarca innumerables temas y ha sido
ampliamente difundida por todo el país, tanto a través de sus libros como de un largo
peregrinaje literario que lo llevó por todos los rincones de la geografía nacional durante medio
siglo.
Fue la figura más destacada del movimiento postumista y poseyó por muchos años el título de
Sumo Pontífice del mismo. Además, contribuyó significativamente a la formación del grupo La
Poesía Sorprendida. Víctima del rechazo de los intelectuales de su época, quienes lo tildaban de
“poeta sin formación ni escuela”, la figura de Moreno Jiménez, gracias al esfuerzo de su
biógrafo José Rafael Lantigua y de su más lúcido defensor Manuel Mora Serrano, ha ido
adquiriendo lentamente la estatura y el espacio que le corresponde en las letras nacionales.
Murió en Santo Domingo el 21 de septiembre de 1986.
4
Vicente Huidobro.
(Santiago, 1893 - Cartagena, Chile, 1948) Poeta chileno fundador
del Creacionismo, movimiento poético vanguardista. Fue además
uno de los impulsores de la poesía de vanguardia en América
Latina. Vicente Huidobro nació en el seno de una familia de la
elite oligárquica, vinculada a la gran propiedad agrícola, a la banca
y a la política. Cursó la enseñanza primaria con institutrices
privadas y la secundaria en el Colegio de San Ignacio de la
Compañía de Jesús. Aunque fue crítico con la enseñanza jesuítica,
tomó de ella una postura elitista ante la vida.
Desde su juventud realizó frecuentes viajes por Europa, que le valieron un profundo
enriquecimiento cultural y una depuración de sus gustos estéticos. Particularmente intenso
desde la experiencia intelectual fue el largo período en que residió en París, ciudad a la que
llegó en 1916, en plena guerra mundial; allí conoció a Picasso, Juan Gris, Max Jacob y Joan Miró,
entre otras figuras de la cultura del momento. Escribió en revistas literarias junto a poetas
como Apollinaire, Réverdy, Tzara, Breton y Aragon; es decir, lo más granado de la poesía
francesa del momento.
A finales de 1916 llega a París, no como un principiante que se arroja al mundo de las letras,
sino un poeta consolidado que trae bajo el brazo el primer movimiento de vanguardia
aparecido en América Latina. Su primera estancia en París habría de prolongarse por espacio de
dos años, tiempo que le sirvió para entrar en contacto con los miembros más destacados de las
diferentes vanguardias -tanto pictóricas como literarias-: Max Jacob, Picasso, Juan Gris, Pierre
Reverdy... Desde entonces, Huidobro se ha ganado un lugar de preeminencia dentro de las
vanguardias, aunque lo cierto es que su obra maestra no aparecería hasta 1931, año en que se
dieron a las prensas el poema-libro Altazor y el conjunto de prosas que conformaron Temblor
de cielo, uno de los títulos favoritos de su autor.
5
Carlos Pellicer.
(Villahermosa, 1899 - ciudad de México, 1977) Poeta mexicano.
Considerado el poeta de más amplio registro y mayor intensidad
de la primera mitad del siglo XX, abrevó en la fuente de las
corrientes de vanguardia y las asimiló en una obra original y
consistente. Estudió en la Escuela Nacional Preparatoria de
México y, posteriormente, hizo estudios en Bogotá, Colombia.
Profesor de Literatura y de Historia en escuelas secundarias, fue
un excelente periodista y un fino y agudo crítico literario. Como
promotor cultural, fue museógrafo e impulsor de las artes plásticas, y en su faceta política
ejerció la diplomacia y fue senador de la República.
Integrante del círculo de creadores formado en torno a la revista Contemporáneos, a diferencia
de ellos no se inclinó por una poesía metafísica, centrada en la conciencia. Se interesó, más
bien, en la exuberancia del paisaje natural y los elementos que lo integran (el aire, el viento, el
fuego). De ahí que la crítica no considere racionalista su poesía, sino más bien un canto que
celebra al mundo.
Destacan en su obra Colores en el mar y otros poemas (1921), la lírica amorosa de Hora de
junio (1931) y el aspecto religioso de Práctica de vuelo (1937). Su manera singular de
contemplar e interpretar la vida da a su verso perfiles personales, ya hable de amor humano o
se eleve a cantar al amor divino. Enemigo acérrimo del nerudismo, que consideró una plaga
para América, fue uno de los escritores más populares de su país. Recibió en 1954 el Premio
Nacional de Literatura.
6
Jorge Luis Borges.
Nacido el 24 de agosto de 1899 en Buenos Aires, e hijo de un
profesor, estudió en Ginebra y vivió durante una breve temporada
en España relacionándose con los escritores ultraístas. En 1921
regresó a Argentina, donde participó en la fundación de varias
publicaciones literarias y filosóficas como Prisma (1921-1922), Proa
(1922-1926) y Martín Fierro en la que publicó esporádicamente;
escribió poesía lírica centrada en temas históricos de su país, que
quedó recopilada en volúmenes como Fervor de Buenos Aires
(1923), Luna de enfrente (1925) y Cuaderno San Martín (1929). De esta época datan sus
relaciones con Ricardo Güiraldes, Macedonio Fernández, Alfonso Reyes y Oliveiro Girondo.
En la década de 1930, a causa de una herida en la cabeza, comenzó a perder la visión hasta
quedar completamente ciego. A pesar de ello, trabajó en la Biblioteca Nacional (1938-1947) y,
más tarde, llegó a convertirse en su director (1955-1973). Conoció a Adolfo Bioy Casares y
publicó con él Antología de la literatura fantástica (1940). A partir de 1955 fue profesor de
Literatura inglesa en la Universidad de Buenos Aires. Durante esos años, fue abandonando la
poesía en favor de los relatos breves por los que ha pasado a la historia. Aunque es más
conocido por sus cuentos, se inició en la escritura con ensayos filosóficos y literarios, algunos de
los cuales se encuentran reunidos en Inquisiciones.
La historia universal de la infamia (1935) es una colección de cuentos basados en criminales
reales. En 1955 fue nombrado académico de su país y en 1960 su obra era valorada
universalmente como una de las más originales de América Latina. A partir de entonces se
suceden los premios y las consideraciones. En 1961 comparte el Premio Fomentor con Samuel
Beckett, y en 1980 el Cervantes con Gerardo Diego. Murió en Ginebra, el 14 de junio de 1986.
7
Federico García Godoy.
1857-1924). Novelista, crítico literario, historiador, periodista y
educador dominicano. Defensor de la soberanía nacional durante la
intervención militar de los Estados Unidos en 1914. Nació el 25 de
diciembre en Santiago de Cuba. Hijo de Federico García Copley y
Josefa Godoy. Al iniciarse la guerra de independencia en 1868 en su
país, sus padres se trasladaron a República Dominicana y se
establecieron en Santiago de los Caballeros. Finalmente se radicó en
La Vega. Recibió la primera educación bajo la orientación de su padre antes de ingresar al
Colegio San Luis Gonzaga de Santo Domingo.
Adoptó la nacionalidad dominicana en 1888. Escribió sobre la crisis financiera de 1907 y la
ocupación norteamericana. Incursionó en el periodismo y fundó en 1880 El Esfuerzo, en 1889 El
Pueblo y en 1914 El Día, del que fue director. En 1910 fundó la revista literaria Patria. Fue el
primer narrador dominicano en incorporar la historia nacional contemporánea a la narrativa
criolla.
Escribió la trilogía narrativa de carácter histórico compuesta por las novelas Rufinito, Alma
dominicana y Guanuma. Durante la intervención militar norteamericana de 1914 escribió su
obra El derrumbe, que fue incinerada por no ser del agrado de los interventores. Se salvaron
algunos ejemplares, lo cual permitió la reedición a cargo de la Universidad Autónoma de Santo
Domingo, con prólogo de Juan Bosch. Murió el 12 de febrero en La Vega.
Como crítico, Federico García Godoy fue generoso siendo justo en la apreciación y transigente
sin dejar de ser sincero con sus propias convicciones. Su crítica era orientada a juzgar la vida y
la obra de los grandes hombres. De igual manera tuvo las dos orientaciones supremas que
inspiraron todos los actos de su vida espiritual; la verdad y la belleza. Ante la primera vivió su
pensamiento en perenne genuflexión; ante la segunda vibraron todas sus fibras sensoriales,
como si el coraje del sentimiento, sublimándose en el éxtasis, fuese capaz de dar a plenitud la
sensación de lo infinito.
8
José Ramón López.
(1866-1922). Periodista, escritor y educador dominicano. Nació el 3
de febrero en Montecristi. Hijo de José María López Escarfuleri y
Juana de Lora. De pequeño se trasladó con sus padres a Puerto Plata.
Estudió en el Colegio Municipal San Felipe donde obtuvo lauros.
Desde temprana edad trabajó para aliviar la situación económica de la
familia. Fue distribuidor de periódicos, aprendiz de impresor, a la vez
que asistía a la escuela primaria y secundaria.
A los dieciocho años fue perseguido por sus artículos en contra de la
dictadura de Ulises Heureaux. Participó en la insurrección de Casimiro de Moya, como refuerzo
del general Benito Monción, en Pontezuela. En 1884 fue apresado por escribir el artículo Receta
para embalsamar el cadáver de la Patria, publicado en el periódico La Libertad y encerrado en la
fortaleza de Puerto Plata, desde la cual logró huir al extranjero. En 1886 regresó de forma
clandestina y se unió al batallón de puertoplateños bajo las órdenes del general Félix María
Tavárez. Derrotada la rebelión, fue apresado nuevamente y llevado a La Torre del Homenaje, de
la que también se fugó para refugiarse en el Palacio Arzobispal, donde monseñor Fernando
Meriño lo envió a Mayagüez, donde fue articulista y editorialista de los periódicos El Imparcial y
El Resumen. También estuvo exiliado en Venezuela y fue redactor de los periódicos El Progreso
y El Tiempo y sus trabajos aparecieron en la revista Cosmópolis. Además en este país ingresó a
la Universidad para continuar la carrera de Derecho.
A su regreso al país, vivió con su familia en la calle Santo Tomás, de Santo Domingo. Escribió en
el Listín Diario artículos sobre temas de denuncia de los males sociales y políticos que padecía la
sociedad dominicana. Fue profesor de la Escuela Normal de San Pedro de Macorís. También,
director de la Escuela Normal de Montecristi y en 1908, de la Escuela Superior de Montecristi, y
encabezó la campaña electoral del general Ramón Cáceres para la presidencia de la República.
En 1909 fundó el diario político El Dominicano y en 1911, El Nacional. En 1910 fue intérprete
del gobierno y en 1913 apoyó la candidatura de Nouel. También, escribió en las revistas Pluma
y Espada y La Cuna de América.
9
Tulio Manuel Cestero.
Nació en (San Cristóbal, el 10 de julio de 1877. Escritor, político y
diplomático. Hijo de Mariano Antonio Cestero Aybar y Mercedes
Leiva y Puello. Realizó sus primeros estudios en el colegio San Luis
Gonzaga en Santo Domingo, ciudad a donde sus progenitores lo
llevaron a residir desde muy niño. Desde la adolescencia estuvo
liga-do a la política nacional. Fue secretario personal de Horacio
Vázquez y colaborador del presidente Carlos Morales Languasco,
patriotas a quienes acompaño en varias de sus campañas armadas.
Durante una década (1928-1938) representó al país en convenciones políticas, firmas de
tratados internacionales y conferencias sobre derechos humanos celebradas en los Estados
Unidos, Sudamérica y El Caribe. Escribió para los periódicos El Teléfono, el Listín Diario, La
Campaña y El Hogar y para la revista Letras y Ciencias.
Se inició en la literatura como ensayista, con la obra Notas y escorzos (1898), donde reseña la
vida y obra de los más notables integrantes del movimiento modernista. También publicó los
poemarios Del amor (1901), El jardín de los sueños (1904) y Sangre de primavera: poemas en
prosa. (1908) y la pieza teatral Citerea (1907).
Sin embargo, es en la prosa creativa donde logra expresar verdaderas cualidades de escritor,
especialmente su libro de relatos Ciudad romántica (1911) y con la novela La sangre (1913),
Gran parte de su obra se caracteriza por la severidad con que asumió la problemática social del
pueblo dominicano, como ocurre en La sangre, donde que denuncia abiertamente muchos de
los desacatos cometidos por la dictadura de Ulises Heureaux. Murió en Santiago de Chile, el 27
de octubre de 1955.
10
Rómulo Gallegos.
Escritor y político venezolano, Rómulo Gallegos nació en Caracas
el 2 de agosto de 1884, y está considerado uno de los más
importantes novelistas en español del siglo XX.
En sus inicios literarios Gallegos publicó varias antologías de
cuentos, pero no fue hasta 1920 que publicaría su primera
novela, El último Solar, obra en la que ya se aprecia su estilo
costumbrista y cargado de crítica social.
Su carrera siguió con varias novelas, siempre ahondando en
temas especialmente conflictivos, sobre todo aquellos relacionados con el indigenismo, como
los matrimonios de carácter mixto en La Trepadora (1925). En 1929 publicaría Doña Bárbara,
considerada la gran novela venezolana de todos los tiempos, y que se convertiría en un gran
éxito de manera inmediata. Aupado a la vida pública durante la dictadura de Juan Vicente
Gómez, decidió exiliarse, primero a Estados Unidos y luego a España en 1932.
A la muerte del dictador, Gallegos regresó a Venezuela donde reinició su carrera como político,
llegando a ser elegido presidente de la república. Por desgracia, un nuevo golpe militar le
impidió desarrollar su cargo y tuvo que volver a exiliarse, esta vez hasta 1958.
Rómulo Gallegos murió en Caracas el 5 de Abril de 1969. En su honor se otorga anualmente el
prestigioso Premio Rómulo Gallegos de novela desde 1964.
11
Ricardo Güiraldes.
(Buenos Aires, 1866 - París, 1927) Narrador argentino, uno de los
mayores exponentes hispanoamericanos de la novela autóctona,
con su obra maestra Don Segundo Sombra (1926). Nació en el seno
de una adinerada familia que en 1887 se trasladó a París. Puede
decirse que se educó en francés y el castellano fue su segunda
lengua. Los Güiraldes regresaron a Buenos Aires y alternaron su
residencia en la ciudad con largos períodos en su estancia de San
Antonio de Areco.
Este viaje fue fundamental en su vida: comenzó a preocuparse por la ética y la metafísica, a la
vez que se vinculaba con pintores, músicos y escritores. Realizó un periplo por diversos países
europeos y Oriente; regresó a París, decidido ya a ser escritor, y más tarde a Buenos Aires.
Hacia 1912 frecuentaba un grupo que reunía a artistas y escritores de las clases altas, donde
conoció a Adelina del Carril, con quien se casó un año más tarde.
En 1915 decidió publicar lo que tenía escrito: El cencerro de cristal, poesía, y Cuentos de
muerte y sangre, relatos al estilo de H. Quiroga, por cuya mediación algunos aparecieron en
Caras y Caretas. La crítica no recibió bien ni a uno ni a otro libro y Güiraldes, decepcionado,
emprendió un nuevo viaje, esta vez a las Antillas, que le proporcionó material para una novela,
Xaimaca (1923), que obtuvo parecida respuesta. A ésta siguieron Raucho (1917), con elementos
autobiográficos, y Un idilio de estación (1918), publicada luego con el título de Rosaura.
Güiraldes dedicó varios años a la composición de esta novela: comenzó a escribirla en París en
1920 y la concluyó en Argentina años después, cuando el panorama literario porteño estaba ya
dominado por las propuestas de vanguardia. Los poetas aglutinados en torno a las revistas
Martín Fierro y Proa se contaron entre sus primeros lectores y fueron también quienes
dedicaron elogios y reconocimientos que borraron definitivamente el estigma del "fracaso"
asociado a la figura de Güiraldes, consecuencia de la casi nula aceptación crítica de sus primeras
obras.
12
Rafael Damiron.
(1882-1956). Narrador, poeta, dramaturgo, periodista, político
dominicano, uno de los principales cultivadores del relato
costumbrista nacional.
Nació el 9 de junio en Barahona. Hijo de Rafael Damirón y Clemencia
Sánchez Carvajal. Cursó sus estudios primarios en la escuela La Fe y los
secundarios en el colegio San Luis Gonzaga. Fue autodidacta. Fundó la
revista de artes y letras Osiris (1909) y los periódicos El Monitor (1912)
y El Nacional (1913). Durante el régimen trujillista tuvo a su cargo el departamento de prensa
del Partido Dominicano. Además, fue diputado al Congreso Nacional, cónsul en Puerto Rico,
Barcelona y Madrid, y Encargado de Negocios en México.
Trabajó como redactor del Listín Diario, El Tiempo y La Nación. Su capacidad de coordinar las
ideas le permitió dictar artículos y noticias a dos linotipistas a la vez. En 1944 La cacica ganó
primer lugar como novela. Se le considera uno de los promotores de la novela nacionalista
dominicana. Su producción literaria de corte costumbrista abarca casi todos los géneros
literarios, y su aporte más valioso a las letras nacionales son las novelas La cacica y Ay de los
vencidos.
Escribió junto a Arturo Logroño Una fiesta en el Castine y Los yanquis en Santo Domingo. Dejó
inédita la obra Pasó una garza morena. En 1983 se colocó su nombre a una calle de Santo
Domingo. Murió el 6 de enero en Santo Domingo.
13
Mariano Azuela.
(Lagos de Moreno, 1873 - México, 1952) Narrador
mexicano que con Los de abajo y un conjunto amplio y
diversificado de obras dio forma (y fue quizás su mayor
exponente) a la llamada Novela de la Revolución Mexicana.
Estudió medicina en Guadalajara, Jalisco. Tras la caída del
gobierno de Francisco I. Madero, a consecuencia del golpe
de estado de Victoriano Huerta, se sumó a la causa
constitucionalista que pretendía restaurar el estado de derecho como médico militar. Su
participación en el conflicto le dio amplio material para escribir Los de abajo (1915): un
impresionante fresco, más por los hechos narrados que por la técnica empleada, sobre la
Revolución Mexicana.
A esta obra la habían antecedido novelas menores de corte costumbrista, como Fracasados
(1908) y Mala Yerba (1909) en las que retrataba la tensión social que precedió al estallido de la
lucha armada. Por su claridad para presentar hechos, su innegable tono de denuncia social y su
oposición a la dictadura de Huerta, Los de abajo marcó las pautas de un género cuya práctica se
extendió hasta muy avanzado el siglo XX, con títulos como Pedro Páramo, de Juan Rulfo, y La
muerte de Artemio Cruz, de Carlos Fuentes. La novela fue traducida a varios idiomas por su
intenso contenido testimonial.
Tras la publicación de esa obra, Azuela avanzó en su estudio de la vida mexicana en los ámbitos
rural y urbana, en los medios políticos, agrarios y familiares. Las obras de ese período son
amargas y nunca están exentas de una ironía cruel. Entre ellas pueden citarse Los caciques
(1917), Las moscas (1918), Las tribulaciones de una familia decente (1918), La luciérnaga
(1932), Avanzada (1940) y Nueva burguesía (1941). Para cerrar su carrera escribió La marchanta
(1944), La mujer domada (1946) y La maldición (publicada en 1955).