Download - Batalla de boyacá
VA L E N T I N A
R O J A S
R O D R Í G U E Z
8 -1
fue la batalla decisiva que garantizaría el éxito de
la Campaña Libertadora de Nueva Granada y
una de las batallas más importantes de la guerra
de independencia de América del Sur.
Tras el aplazamiento de la guerra en Venezuela por la época de
lluvias Bolívar salió de Angostura, entonces capital de la
República de Venezuela, hacia los llanos de Apure, donde inicia
la Campaña Libertadora de Nueva Granada el día 26 de mayo
de 1819, luego de una dura travesía de 200 km y 45 días en
pleno invierno llegó a Tame, en la provincia de Casanare
sumando a sus dos divisiones la del general Francisco de
Paula Santander. Posteriormente siguen la travesía por los
llanos Orientales, hasta hacer contacto con la cordillera Oriental
atravesándola por el páramo de Pisba, ingresando al territorio
de la antigua provincia de Tunja.
La tercera división de las tropas
realistas al mando del coronel José
María Barreiro que se encontraban
acantonadas en Sogamoso, salen al
encuentro de las tropas granadinas; el
día 11 de julio se libra la batalla de
Gámeza como preámbulo la decisiva
batalla del Pantano de Vargas
ocurrida el 25 de julio de 1819 en la
cual las tropas realistas se ven
obligadas a retirarse al final de la
jornada.
Luego del éxito obtenido en el pantano
de Vargas, Bolívar reorganiza y da
descanso al ejército hasta el 3 de
agosto, cuando emprende la búsqueda
del ejército realista, que se ha retirado
esperando refuerzos y una mejor
oportunidad.
A las diez de la mañana del 7 de agosto de 1819 Bolívar dio la
orden de impedir el paso de los realistas por el puente del río
Teatinos, de cinco metros de largo por dos de ancho, sitio de
encuentro del camino de Samacá (utilizado por los realistas el
día de la batalla) y el camino real, movilizando su ejército
instalado en la ciudad de Tunja. El ejército libertador estaba
conformado por la vanguardia al mando de Francisco de Paula
Santander con unos 800 hombres, el centro del ejército al
mando de José Antonio Anzoátegui con 1320 hombres y la
retaguardia conformada por 600 a 800 reclutas y milicianos del
Socorro y Tunja. Las tropas de Simón Bolívar debieron cubrir
los 14 km de distancia que separan la plaza mayor (Hoy de
Bolívar) de Tunja con el puente sobre el río teatinos, (hoy
Puente de Boyacá), marchando apresuradamente a partir de
las 10:00 am, mientras que los españoles que tomaron la vía
del páramo cubrieron 18 km partiendo desde las 3:00 am, para
encontrarse ambos bandos a las 2:00 pm, cuando parte de la
vanguardia patriota liderada por el capitán Diego
Ibarra, desciende y sorprende a la vanguardia realista. En tanto
el general Santander se enfrentaba con sus tropas a la
retaguardia realista.
Hacia las tres de la tarde los combates entre las dos fuerzas
militares estaban en todo su apogeo; con los realistas en
desventaja por estar divididos en dos frentes, son atacados
por el batallón rifles haciendo retroceder dos cuerpos
españoles, al mismo tiempo que los bravos de Páez y la legión
británica caen sobre la artillería y los flancos de los batallones
de primera línea. En esa situación Barreiro trata de desplegar
el batallón cazadores, pero Bolívar ordena a Anzoátegui que
ataque el centro del dispositivo
español, desorganizándolo, para entonces enviar al
coronel Juan José Rondón en un fuerte contraataque con los
lanceros llaneros que consiguió que
los realistas retrocedieran en
desorden e incluso un batallón de
caballería huyera por la vía a
Samacá sin ofrecer resistencia.
El mismo día de la batalla, en las horas de la noche, el
coronel Barreiro fue capturado mientras se refugiaba en
unas rocas, según la tradición por un soldado
adolescente llamado Pedro Pascasio
Martínez, acompañado de otro soldado llamado Negro
José (ver abajo). Barreiro y otros 37 oficiales españoles
hechos prisioneros el día de la batalla, fueron ejecutados
el 11 de octubre de 1819 por orden de Francisco de
Paula Santander, dentro de la consigna de guerra a
muerte.