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ARGUMENTACIN JURDICA
Dr. Juan Abelardo Hernndez Franco
LA ARGUMENTACIN JURDICA COMO INSTRUMENTO
DE LA RAZN EMPRICA
Tal como ha quedado expuesto, cuando la mente humana (o la mente del jurista) se enfrenta
a una nueva situacin -o se le presenta un nuevo problema- no emplea la lgica en un primer
momento. En todo caso, tal y como lo sealan Daniel Kahneman y Amos Tversky,1 se vale de
atajos heursticos.2 Es decir, la mente tiende a resolver problemas a partir de nuevas
asimilaciones y ajustes mentales. La mente de los operadores realiza recategorizaciones para
lograr ajustar categoras previas con las nuevas circunstancias asimiladas. Una vez alcanzadas la
asimilacin y el ajuste de las categoras a la nueva circunstancia, se genera en la mente del jurista
la conciencia o insight por la que comprende, por lo menos intuitivamente, lo que est
percibiendo.
Utilizando el trmino del profesor Ilmar Tammelo, el jurista, al momento de realizar una
asimilacin y un ajuste sobre una nueva situacin o problema, est llevando a cabo un
razonamiento zettico.3 Posteriormente, una vez concluido este proceso de asimilacin y
adaptacin zettico, aparece un insight o sentencia mental sobre lo que ha percibido. Por decirlo
de otro modo, el jurista, juez o abogado, por las categoras aprendidas y su experiencia asimilada,
al estudiar un nuevo caso, lleva a cabo la asimilacin y el ajuste de categoras. Una vez terminado
el ejercicio operativo de asimilacin y ajuste, de alguna manera intuitivamente, en la mente del jurista se genera un insight. Es decir, una respuesta o sentencia sobre lo analizado. Sin embargo, probablemente no pueda explicarlo claramente de modo inmediato. El instrumento que
le permitir dar razn de su insight jurdico, ser precisamente la argumentacin jurdica.
Mediante ella, el abogado explica al juez su pensamiento y defensa; el fiscal, su acusacin y, el
mismo juez, puede explicar sus conclusiones y la razn por la que ha decidido sentenciar en un
sentido o en otro. Por esta razn Daniel Mendonca en su obra Claves del Derecho, afirma:
Por lo comn, la expresin, dar un argumento significa ofrecer una razn o un conjunto de razones en apoyo de cierta conclusin. Los argumentos son as,
1 Teora de las prospectivas (prospect theory).
2 Del griego euristikein que significa hallar o inventar. De este mismo vocablo deriva la expresin eureka.
3 Trmino que deriva del griego zetein, que significa buscar, indagar o investigar.
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intentos de apoyar ciertas afirmaciones o decisiones con razones. De este modo,
argumentar tiene una importancia especial, porque constituye una manera de
informarse acerca de qu afirmaciones o decisiones son mejores que otras, y as
saber cmo algunas conclusiones pueden apoyarse de buenas razones, y darse cuenta
que otras tienen un sustento mucho ms dbil.4
DEFINICIN DE ARGUMENTACIN
La palabra argumentacin deriva del trmino arguere que quiere decir sacar en claro o dejar ver con claridad. Los fonemas indoeuropeos de los que deriva son argu y arg, trminos que se refieren a la claridad y al brillo.
5 La argumentacin jurdica se distingue por lo menos en
su sentido clsico y etimolgico como el ejercicio de razonamiento que busca que una idea o una explicacin sea clara y brille por s sola. Por eso Cicern define a la argumentacin como
las razones que hacen fe de una cosa dudosa,6 y San Isidoro de Sevilla sostiene que: El argumento no ofrece nunca prueba a base de testigos o de documentos
escritos, sino que encuentra la verdad sirvindose nicamente del raciocinio. Y de ah
viene el nombre de argumentum, es decir, argutum inventum (invencin sagaz).7
DEBATE Y ARTE ERSTICA
Argumentar jurdicamente no es debatir, aunque algunas personas consideren que ambos
son trminos anlogos. La palabra debate, de hecho, no tiene un origen griego o romano. Deriva
del celta: bat.8 Al unirse el prefijo De que significa separar al trmino Battere que significa golpear, la voz debate cobra el sentido de una lucha entre ideas, ms que el de una indagacin sobre la verdad de algo. Los griegos identificaron el debate con las discusiones en discordia. De
ah que la llamaran tkhne eristikn o Arte de la Erstica, por ser el arte tutelado por la diosa Eris
o ride, divinidad vinculada con la discordia.9 Tambin encontramos en la misma palabra
erstica la raz eris y su vinculacin con Ares, dios de la guerra. La Erstica, a diferencia de la
argumentacin, no es una contra-argumentacin, sino una anti-argumentacin. La erstica no
busca aclarar hiptesis ni propone nuevas. No emplea la argumentacin, sino que evita que se
lleve a cabo argumentacin alguna. Se trata de tcnicas para impugnar con sutileza en una
discusin forense.10
La literatura erstica moderna cuenta con dos ejemplares extraordinarios. Por una parte,
debemos hacer mencin a la Lgica Parlamentaria de William Gerard Hamilton. Su obra,
aunque orientada a ayudar a los parlamentarios a ganar causas, presenta elementos muy
4 Mendonca, Daniel, Las claves del Derecho, Ed. Gedisa, Barcelona, 2000, 1 edicin, p. 165.
5 Los latinos llamaron al metal plata argentum, por ser un metal brillante y claro. De ah vienen palabras como
Argentina. Watkins, Calvert, Editor, The American Heritage dic.tion.ar.y of indo-european roots, Hougthon Mifflin
Company, Boston, New York, 2000, p.5. 6 Tpica, 2, 7.
7 De Sevilla, Isidoro, Etimologas, XVIII, 15, 5.
8 De l derivan tambin las palabras batera, batir, combate y batalla.
9 De ah el nombre romano de la diosa Eris: Discordia.
10 La relacin estrecha entre erstica y dialctica nace con Zenn de Elea y la escuela megrica, cfr. Digenes
Laercio., VIII, 57 y Epifanio II, o 33 de BCG. Arthur Schopenhauer en su Die Kunst, Rect zu behalten. In 38
Kunstgriffen dargestellt desarrolla un interesante estudio sobre la dialctica erstica definindola como el arte de
discutir de tal modo que uno siempre lleve la razn.
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importantes para la discusin dialctica de litigantes. La segunda obra que apuntamos lleva por
ttulo Arte Erstica o El arte de tener razn, expuesto en 38 estratagemas, de Arthur
Schopenhauer. Bien podra considerarse como una forma sinttica de las ideas de Hamilton.
William Gerard Hamilton, despus de terminar sus estudios en Oxford, a sus veinticinco
aos fue nombrado miembro de la Cmara de los Comunes por el burgo de Petersfield, en
Hampshire. Durante su primer ao se limit a observar en silencio y escuchar los discursos en el
Parlamento. El 1775, intervino por primera vez en el debate de respuesta al mensaje de la Corona.
Su discurso fue de tal altura que cobr gran fama en el Parlamento, al grado que fue llamado
Hamilton, el del discurso nico (Single-speach Hamilton). No lleg a nuestros das aquella clebre pieza de oratoria; sin embargo, a la muerte de Hamilton, se encontr entre sus
documentos un texto indito, titulado Lgica Parlamentaria (Parliamentary Logic), en el cual haba recopilado todas sus observaciones sobre las discusiones en la Cmara.
La primera edicin de esta obra data del ao 1808. No obstante, su aparicin se vio opacada
por la pugna entre la Francia napolenica e Inglaterra. Ser hasta la edicin de Robert von Mohl,
en 1820, que por primera vez se vern difundidas las 553 mximas que fueron consideradas como
el catecismo del debate parlamentario. Courteny S. Kenny, profesor de la Universidad de
Cambridge, percibi que von Mohl haba cambiado el orden de las mximas y las reajust bajo
una forma sistemtica segn los diferentes temas. Siguiendo esta clasificacin podemos ver que
Hamilton trabaj en su Lgica Parlamentaria los siguientes aspectos:
I. Lgica Parlamentaria:
1) Preparacin del orador.
2) Sobre cmo distribuir la materia del discurso.
3) Sobre las pruebas.
4) Observaciones a la argumentacin de los oponentes.
5) Contradiccin.
6) Reglas y observaciones lgicas varias.
II. Poltica Parlamentaria:
1) Observaciones psicolgicas. 2) Observaciones polticas. 3) Reglas de prudencia acerca de cmo.
a) Presentar del modo ms favorable un caso. b) Distribuir los temas. c) Ataques personales al oponente. d) Presentar el caso del oponente de tal modo que lo perjudique. e) Atraer la benevolencia del auditorio.
III. Retrica Parlamentaria:
1) Plan del discurso. 2) Reglas sobre cmo se debe hablar ante un auditorio. 3) Reglas y observaciones retricas varias. 4) Sobre el arte de presentar un asunto.
Ejemplo de algunas mximas de la Lgica Parlamentaria son las siguientes:
1. Cuando cites como prueba un ejemplo, haced que ste sea tan irritante de por s, como probatorio.
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2. Haced pasar lo bueno por malo, y viceversa. Examinad uno por uno con mucho cuidado vuestros puntos, y tened siempre en cuenta los prejuicios
dominantes. 3. Distinguid entre lo que es evidente y lo que parece evidente. 4. La distincin aclara los asuntos, y la divisin los enturbia. 5. Cuando no tengis la razn, emplead expresiones amplias y generales
(porque son equvocas), y multiplicad las divisiones y distinciones hasta lo
infinito. 6. Combatir el argumento y no la cosa, combatir la palabra y no la intencin. 7. Hay pruebas insuficientes y hay pruebas precarias. 8. Tened mtodo, pero disimuladlo. 9. Un argumento probable no es un argumento concluyente: la verdadera seal
de que una cuestin es discutible est en que puedan alegarse por una y otra
parte argumentos plausibles o probables, pero las probabilidades han de
contrapesarse. 10. La mencin de un derecho por un acta del Parlamento trae consigo el
reconocimiento de ese derecho.
El arte de tener razn de Schopenhauer, fue redactado diez aos despus de que Robert von
Mohl publicara su edicin de la Lgica Parlamentaria. Sin embargo, al igual que sta, dicha obra
no ver la luz pblica en vida de su autor. La primera edicin apareci en 1864 a cargo de Julius
Frauenstdt, con el ttulo de Eristik, la cual formaba parte de una recopilacin de textos inditos
titulada Legado manuscrito de Arthur Schopenhauer.11
Al inicio de la obra, Schopenhauer define
el arte erstica como:
El arte de discutir y de discutir de tal modo que uno siempre lleve la razn, justa o injustamente. Uno puede tener razn objetiva en el asunto mismo y sin
embargo carecer de ella a los ojos de los presentes, incluso a los propios ojos. Schopenhauer se percata de que la verdad objetiva de una proposicin no necesariamente
coincide con la aprobacin de aquellos que la escuchan. Una cosa es enunciar la verdad, pero otra
es mostrarla de tal modo que la gente lo crea. En parte, sta es tambin la funcin de la retrica.
Convencer a alguien de algo. Aristteles por ello defini la retrica como: capacidad para contemplar en cada caso los medios apropiados para persuadir.12
Y convencer, persuadir, significa exactamente que los dems abandonen sus puntos de vista para sustituirlos por los que el orador quiere inculcarles Que abandonen su posicin para abrazar la nuestra; por consiguiente, no hay espacio para
dialogismo alguno, si es que se entiende por tal escuchar y estar dispuesto a hacer
valer la posicin ajena. No, el arte retrica no tiene nada que ver con eso (ms bien se
relaciona con lo que hace la publicidad o la propaganda), de modo que, sin
exageracin, quienes hablan de dialogismo a propsito de la retrica, simplemente no
se han enterado de lo que es sta.13 Sin embargo, el convencimiento no necesariamente est ntimamente ligado a la verdad.
Uno puede quedar convencido de algo que no es verdadero. La erstica de Schopenhauer
proporciona 38 estratagemas, no tanto para convencer, sino para des-convencer sobre un
11
Arthur Schopenhauers Handschriftlicher Nachlass. Brockhaus, Leipzig, 1864. 12
Aristteles, Retrica, 1355b 25-26. 13
Romo Feito, Fernando, La retrica, Montesinos, Espaa, 2005, p.29.
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argumento expuesto por la contraparte. Con ello cumple su funcin de texto erstico y, en todo
caso, dialctico, ms que de argumentacin. Tal como podemos ver, su lectura puede ser un
extraordinario complemento de la Lgica Parlamentaria de Hamilton.
Entre las principales ideas de su texto podemos considerar las siguientes:
1. La ampliacin. Llevar la afirmacin del adversario ms all de sus lmites naturales, interpretarla del modo ms general posible, tomarla en el sentido ms amplio
posible y exagerarla; la propia, por el contrario, en el sentido ms limitado posible,
reducirla a los lmites ms estrechos posibles: pues cuanto ms general se hace una
afirmacin, tanto ms expuesta queda a los ataques.14
2. Suscitar la clera del adversario, ya que, encolerizado, no est en condiciones de juzgar de forma correcta y percibir su ventaja. Se le encoleriza no hacindole
justicia, enredndole abiertamente y, en general, mostrndose insolente.15
3. No plantear las preguntas en el orden que requiere la conclusin a extraer, sino con todo tipo de desorden: en ese caso el adversario ya no sabe a adnde quiere uno
llegar y no puede prevenirse. Tambin pueden utilizarse sus respuestas para
conclusiones diversas, incluso opuestas, segn se vayan produciendo. Esto est
relacionado con el estratagema nmero 4, en el sentido en que uno debe enmascarar
su forma de actuar.16
4. Si efectuamos una induccin y nos concede los casos particulares mediante la que debe ser formulada, no debemos preguntarle si tambin admite la verdad general
que se sigue de esos casos, sino introducirla ms adelante como algo demostrado y
admitido: pues en ocasiones l mismo creer haberlo admitido y as se lo parecer a
los oyentes, puesto que recuerdan las numerosas preguntas por los casos
particulares que han debido encaminar a ese fin.17
5. Cuando le hemos preguntado por las premisas y l las ha concedido, no tenemos que preguntar tambin por su conclusin, sino extraerla nosotros mismos
directamente: es ms, incluso cuando falta una u otra cosa en las premisas, la
tomamos igualmente por admitida y extraemos la conclusin.18
6. Forzar consecuencias. De la tesis del adversario, mediante falsas conclusiones y tergiversaciones de los conceptos, se fuerzan tesis que no estn en la suya y que no
se corresponden en lo absoluto con su opinin, sino que por el contrario, son
absurdas o peligrosas: y puesto que parece que de su tesis se desprenden tesis
semejantes, contradictorias consigo mismas o con verdades reconocidas, se hace
pasar esto por una refutacin indirecta, apagoge, lo que es otra aplicacin de la
fallacia non causae ut causae.19
7. Una jugada brillante es la retorsio argumenti (dar la vuelta al argumento) cuando el argumento que el adversario quiere utilizar en su favor puede utilizarse mejor en
contra de l: Es un nio, hay que tener paciencia con l; retorsio: precisamente
14
Estratagema 1. 15
Estratagema 8. 16
Estratagema 9. 17
Estratagema 11. 18
Estratagema 20. 19
Estratagema 24.
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porque es un nio hay que corregirle para que no se empecine en sus malas
costumbres.20 8. Si ante un argumento el adversario se enfada, se le debe acosar insistentemente con
ese argumento: no slo le ha encolerizado porque es bueno, sino porque hay que
suponer que ha tocado el punto dbil de su razonamiento y es probable que en ese
punto se le pueda atacar ms de lo que no mismo ve de momento.21
9. Eso puede ser cierto en la teora, pero en la prctica es falso. Mediante este sofisma uno admite las razones pero niega las consecuencias; en contradiccin con
la regla a ratione ad rationatum valet consequentia (es vlido extraer la
consecuencia a partir de sus premisas). Esa afirmacin supone una imposibilidad: lo
que es cierto en teora tiene que serlo tambin en la prctica. Si no lo es, hay un
fallo en la teora. Se ha pasado algo por alto y no se ha tenido en cuenta. Y por
consiguiente tambin es falso en la teora.22
10. Aturdir, desconcertar al adversario mediante palabrera sin sentido. Se basa en que: Suele creer el hombre cuando slo oye palabras, que deberan sin embargo, tener algn sentido.23 Cuando es consciente en secreto de su propia debilidad, cuando est acostumbrado a escuchar cosas que no entiende y, sin embargo, a hacer como
si las entendiera, uno puede apabullarle diciendo con gesto grave un disparate que
suene erudito o profundo y con el que pierda odo, vista y pensamiento, y hacer
pasar esto por la prueba ms irrefutable de la propia tesis.24
La erstica ha significado para muchos litigantes el autntico quehacer argumentativo
jurdico. Para estos litigantes argumentar no se trata de esclarecer un asunto, sino de producir en
los jueces la conviccin de que lo expuesto por la contraparte no tiene valor alguno. El fundador
de la ciberntica contempornea, Norbert Wiener, ha dado cuenta de los problemas que trae
consigo la falta de claridad en los razonamientos jurdicos. En trminos tcnicos, los
estratagemas ersticos representan un equivalente al ruido en los sistemas de comunicacin. el ruido, considerado como un factor de confusin en las comunicaciones
entre seres humanos, es perjudicial, pero carece de malicia consciente. Esto es cierto
en lo que respecta a las comunicaciones cientficas y, en gran parte, se aplica a la
conversacin corriente entre dos personas. Pero es absolutamente falso en lo que
respecta al lenguaje que se utiliza en las cortes de justicia Toda la naturaleza de nuestro sistema legal es la de un conflicto. Es una conversacin en la que hablan por
lo menos tres partes. En un juicio civil, por ejemplo: el conjunto del demandante, el
demandado y el sistema legal representado por el juez y el jurado. Es un juego
plenamente con el sentido que Von Neumann25
da a esa voz; un juego en el que los
litigantes intentan poner de su lado al jurado mediante mtodos que estn limitados
por lo legal. En ese juego, el abogado de la parte contraria, a diferencia de la
naturaleza, puede y deliberadamente trata de introducir la confusin en los mensajes
de su opositores. Intenta convertir sus declaraciones en cosas sin sentido y
20
Estratagema 26. 21
Estratagema 27. 22
Estratagema 33. 23
Goethe, J.W., Fausto. 24
Estratagema 36. 25
El hngaro John von Neumann haba publicado un artculo en 1928, estableciendo los fundamentos de la teora de
juegos, pero no fue sino hasta 1944 que apareci como tal en un libro escrito en coautora con Oskar Morgenstern
titulado Theory of games and economic behavior (Teora de juegos y comportamiento econmico).
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conscientemente interfiere las que se cruzan entre la otra parte y el juez o el jurado.
En esas interferencias, es inevitable que el bluff se lleve en ocasiones la palma Hay en los litigios ocasiones en las que el bluff, o sea, el envo de mensajes con el
deliberado propsito de ocultar la estrategia propia del emisor, no slo est permitido,
sino tambin fomentado.26
LGICA OPERATIVA
RAZONAMIENTO ZETTICO
Tal como lo hemos visto, cuando la mente humana se enfrenta a un asunto nuevo lleva a
cabo un proceso de bsqueda o indagacin para comprenderlo y juzgarlo. Dicho procedimiento
es conocido con el nombre de razonamiento zettico, y se trata de un doble proceso. Por un lado,
la asimilacin, que consiste en recibir un conjunto de datos que se aportan sobre la nueva
situacin. Por otro, la adaptacin, la cual es la recategorizacin y conciliacin de categoras
previas en la mente del jurista. Esta forma de razonamiento no es ni crtico ni analtico, sino
creativo y heurstico. El doctor Edward de Bono llama a este proceso de pensamiento
operatividad, mismo que considera propiamente, como la actividad de pensar inteligentemente. En segundo lugar, quedan las tcnicas de pensamiento o razonamiento analtico, equivalentes a lo que Piaget considera como formas de axiomatizar el razonamiento de operatividad.
Ahora bien, el primer paso del razonamiento zettico consiste en percibir los datos sobre
la nueva situacin presente. La mente lleva a cabo una organizacin de estos datos con base en
patrones o categoras. El doctor de Bono, en su libro de 1969 The Mechanism of Mind, describe
de qu forma la conducta neurofisiolgica en el cerebro da origen a los patrones de percepcin.
Sus descubrimientos han servido de base al desarrollo de neurocomputadoras avanzadas.27
La
categorizacin, propiamente, consiste en direccionar todos los datos en un slo sentido, de tal
manera que puedan resolver un problema. Es entonces cuando el conjunto de datos organizados
se convierten en informacin. La informacin es la reunin de datos direccionados para juzgar
algo y resolver algo de manera intuitiva. Esta direccin de datos nos permite mentalmente tomar
posesin o asimilacin de lo expuesto en un asunto. Esta direccin atencional genera un cierto
ahorro psquico de energa. El esfuerzo atencional o reunin de datos en un solo sentido ayuda a
reducir el esfuerzo de atencin y permite el ejercicio axiomatizador de la argumentacin.28
Para
comprender mejor esta asimilacin y ajuste zettico que, por ahorro psquico conforma un insight
hipottico a partir del cual se conformar el proceso argumentativo, es oportuno explorar algunas
ideas de la teora Gestalt que aclararn la operativdad de este proceso.
GESTALT
El razonamiento jurdico, al igual que todos los razonamientos de la vida emprica, inicia
alejado de la lgica formal. Se trata de una forma racional llamada lgica operativa o lgica de
accin, misma que consiste en la formacin de estrategias mentales para abordar un asunto o
26
Wiener, Norbert, Ciberntica y Sociedad, CONACYT, Mxico, 1981, p.98. 27
De Bono, Edward, La enseanza directa del pensamiento en la educacin y el mtodo CoRT, en Mclure, Stuart &
Davies, Peter, Aprender a Pensar, Pensar en Aprender, Ed. Gedisa, Barcelona, 2003, p.42. 28
Cfr. Kahneman, Daniel, Atencin y Esfuerzo, Ed. Biblioteca Nueva, Madrid, 1997, p. 127.
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resolver problemas nuevos. De hecho, las proposiciones operativas varan con cada situacin y no
tiene sentido formalizarlas a modo general y universal. Lo que se piensa en la vida emprica est
ubicado exclusivamente en el espacio y en el tiempo presente del evento analizado. Tal como lo
seal en su momento Noam Chomsky y ms adelante, Jerome Bruner, el ser humano opera
mentalmente de modo innato, generando hiptesis en cada situacin nueva que experimenta.29
Es
en el procesamiento de datos donde se otorga significado a una situacin nueva, no los brinda su
sola recepcin.30
Tanto el receptor como la situacin recibida son mutables, inestables y efmeras.
Por eso, el razonamiento operativo bajo determinadas circunstancias, se plantea a modo de
hiptesis situacional y circunstancial. Y en ese contexto, puede generarse una hiptesis con su
propia lgica operativa.
Tal como se ha mencionado, esta actividad psquica es un primer intento de establecer una
coherencia formal de orden emprico. De hecho podemos decir que es un proceso semejante a la
visualizacin de imgenes estudiadas por la teora Gestalt. Esta teora psicolgica coincide en
parte con el pensamiento de Piaget en cuanto que, en cada caso, el esquema tiene una estructura,
una forma particular. Sin embargo, para los seguidores de la Gestalt, la estructura no es una
construccin mental sino que se halla dentro de lo percibido.31
Para Piaget, por el contrario, se
trata de una estructura operativa, es decir, del producto de una construccin mental sobre una
tarea o un objeto particular que se nos presenta. En nuestro caso ya que encontramos en el modelo epistmico de Piaget una clave coincidente con el desarrollo del razonamiento jurdico, consideramos que en cada caso el esquema tiene una estructura que se conforma operativamente,
tanto por parte de la actividad del sujeto como del objeto.
En la figura 1 (la joven vieja de Boring)32
podemos percibir a una joven o una anciana,
dependiendo del punto de referencia que se considere. En la figura 2 (nfora y los rostros de
Edgar Rubin)33
podemos percibir una copa, o bien, dos perfiles.
Figura 1 Figura 2
29
Bruner, Jerome, En busca de la mente, FCE, Mxico, 1985, p.264. 30
Bruner, Jerome, La importancia de la educacin, Paids, Barcelona, 1987, p.149. 31
Lonergan, Bernard, Piaget y la idea de una educacin general, Filosofa de la Educacin, Ed. UIA, Mxico, 2006,
p.261. La traduccin del texto al espaol en esta edicin es de Armando J. Bravo. 32
La figura original es de W.E. Hill. Se titula Mi esposa y mi suegra, tira cmica de Puck, noviembre de 1915. G.E.
Boring la public en 1930, en el American Journal Psychology. 33
Psiclogo originario de Dinamarca.
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Para comprender mejor cmo lleva a cabo la lgica operativa sus procedimientos, podemos
recurrir de forma didctica al anlisis del fenmeno de construccin psquica desde la perspectiva de la teora Gestalt. Como un ejemplo, analicemos la figura 3 que, a primera vista, si
miramos al centro de ella nos dar la impresin de ser un hexgono. Sin embargo, si nuestra
mirada cambia de punto de referencia y nos dirigimos a cualquier extremo probablemente figura
se convierta en un cubo.
Figura. 3
El hexgono de la figura 3 se construye visualmente, dirigiendo la mirada al centro como
punto de referencia. A partir de ste se definen el resto de los puntos de la figura. Dependiendo
de dnde se coloque el punto de referencia, la mirada integra al resto de los elementos en un
mismo sentido. Para comprender ms fcilmente tal fenmeno, visualicemos slo los puntos que
integran la figura, sin tomar en cuenta las lneas.
Frente a este conjunto de puntos nuestra mente puede dirigir la mirada especficamente a
uno de ellos. Al hacerlo, por un lado intenta asimilar lo que est percibiendo por primera vez con
algo que ya conoce previamente. Por otro lado, pretende resolver la nueva tarea (o el nuevo
objeto) ajustando o acomodando las operaciones que conoce (y le son familiares) a la nueva
situacin. Tambin puede ocurrir que establezca una serie de nuevas categoras que le ayuden a
completar una imagen, en cierto sentido. As, la mente, al modificar las estructuras operativas
previas, crea una estructura diferente adaptada a las nuevas circunstancias. Al intentar llevar a
cabo la asimilacin, la mente se plantea una hiptesis de cierta imagen. Ahora bien, en este
conjunto de siete puntos, al tomar como punto de referencia el ubicado en el extremo derecho y
empezamos a desplazar lneas a partir de los puntos inferiores y laterales, en referencia a dicho
punto, por ajuste mental, podemos concebir la cubierta X de un cubo.
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Establecido el punto de referencia y un primer recuadro, diramos que el resto del ajuste
se lleva a cabo para terminar de asimilar el conjunto de elementos presentes. De esta manera
parece que los puntos se posicionan por la mirada dirigida por la actividad psquica operativa.
sta busca equilibrar el conjunto de estmulos recibidos con base en su desarrollo psquico. Por
tal razn, los otros puntos nos parecen quedar en correlacin lineal, generando en nuestra
percepcin una nueva cubierta Y del mismo cubo.
XX
YY
Por ahorro psquico, la mente se esforz en establecer un parmetro de referencia y
empez a desplazar el resto de los datos con menor esfuerzo. As, los dems puntos cobran
sentido en razn de la estructura mental que sirvi de modelo de asimilacin. Es as como se nos
presenta la imagen de un cubo con una superficie X del lado derecho en direccin inclinada. Una
cubierta Y superior y una superficie M lateral.
XX
YY
MM
Por otra parte, volviendo a nuestros siete puntos, si escogemos como punto de referencia
el inferior izquierdo, establecemos una nueva hiptesis de imagen a partir de la cual se llevar la
asimilacin y ajuste. Si empezamos a desplazar lneas de los puntos ubicados en la extrema
izquierda, aparecer una cubierta R de un nuevo cubo en otra direccin.
RR
Una vez construida esta cubierta por la mirada, parecera que el resto de los puntos sern
ajustados a modo de competencias respecto del primero definido. Parecer que los dems puntos
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se van relacionando entre s de tal manera que irn apareciendo las superficies P y Q. En realidad
la mente lleva a cabo el ajuste y asimilacin, pero en un nuevo sentido.
PP
RR
PP
RR
QQ
Cuando la mente ha logrado establecer operativamente una forma coherente en la que se
vinculan los diversos elementos en juego, de algn modo ha logrado equilibrar sus experiencias.
Se puede decir que ha llevado a cabo una compensacin de los estmulos exteriores con la
actividad subjetiva mental. Conforma una estructura de coherencia entre el estmulo externo y su
actividad mental. Jean Piaget afirma que el insight, o el chispazo del darse cuenta
conscientemente de algo, acontece cuando la mente ha llevado a cabo los procesos de
acomodacin y asimilacin. Recordemos que la acomodacin (o ajuste) consiste en el
ajustamiento del esquema mental a la situacin particular. La asimilacin, por otra parte, es
determinada por el sujeto, conforme a su estadio y sus experiencias previas. No hay acomodacin
sin asimilacin.
El ajuste (accommodation)34 es un mtodo para manejar lo que es nuevo; durante este manejo, los hbitos adquiridos sufren una modificacin. El objeto no
familiar es manejado con operaciones familiares, pero se introduce al menos un
cambio menor y obvio que corresponde a los requisitos del nuevo objeto y tarea; se
hace un esfuerzo para adaptar las habilidades a la nueva situacin. De aqu que la
adaptacin no necesite ser perfecta al primer intento; podr necesitarse una serie de
ajustes; la prctica perfecciona al operador, y al aprendizaje es lento... Para la
asimilacin, el ejercicio es lo ms importante. Al manejar un nuevo objeto, al ejecutar
una nueva tarea, [el individuo] asimila el nuevo objeto o tarea a algn otro objeto o
tarea con la que ya est familiarizado, y as emplea las operaciones (y los esquemas
sensorio-motores existentes) que empleara con el objeto familiar. La asimilacin es
pues, usar un hbito adquirido o emplear operaciones que uno ya puede ejecutar.35 Remitindonos al campo propio del derecho, el objeto nuevo no familiar o la nueva tarea
puede ser cualquier nuevo asunto o cuestin de orden jurdico. Los asuntos que se nos presentan,
ya sea como abogados o jueces, primero son asimilados a las formas normativas legales o a otros
casos que se hayan llevado. Obviamente nos encontraremos con el hecho de que tales casos no
son coincidentes con precisin. Para ello, la mente realiza una operacin de asimilacin. Si lo
pensramos bajo el tradicional esquema de la premisa mayor, como la norma legal y la premisa
menor, como el evento particular, la asimilacin sera intentar establecer o formular el caso
34
Ajuste es la palabra que Bernard Lonergan emplea para traducir del francs el trmino accommodation. 35
Lonergan, Bernard, Conocimiento y Aprendizaje, Ed. UIA, Mxico, 2008, p.174.
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concreto como una premisa particular que se pudiera adecuar complementariamente a la premisa
mayor (o norma legal). Sin embargo, esa adaptacin del caso a premisa menor requerira un
ajuste para quedar adaptada lo mejor posible. Por otra parte, tambin podra pensarse que la
premisa mayor o norma jurdica no responde exactamente a la necesidad del caso planteado.
Entonces, la lgica operativa intentar hacer un ajuste a una hiptesis a la cual deber asimilarse
la premisa mayor. Esta misma situacin ocurre en Mxico, donde muchos jueces, para llevar a
cabo una correcta aplicacin de las normas jurdicas emplean decisiones judiciales de casos aparentemente similares. Estas decisiones reciben el nombre de precedentes y su fuerza radica en
haber sido emanadas de las cortes supremas. Es evidente que los jueces pretenden ajustar una
decisin previa de otro tribunal a una asimilacin actual. No obstante, es necesario que el ajuste
sea bien pensado ya que la similitud no garantiza una decisin eficaz. Probablemente, eficiente
para los parmetros sistemticos, pero ineficaz como respuesta emprica.
La asimilacin consiste en el uso de lo que uno ya puede hacer, que ya entiende, que ya conoce; ella implica usar los esquemas y los hbitos adquiridos de
los que uno ya tiene dominio, para realizar una operacin nueva; as, lo nuevo es
asimilado en trminos de lo antiguo. Ahora bien, adems, est la idea del ajuste
(acomodacin). ste es la modificacin agregada para embonar con el caso presente.
Cuando no basta la asimilacin para manejar la nueva operacin, se hace algn
esfuerzo para que la operacin conocida se adapte a la nueva situacin. 36
DEFINICIN DEL SENTIDO A PARTIR DEL AJUSTE:
RITMO, ORDEN Y POSICIN
El proceso de equilibracin psquica (de ajuste y asimilacin) primero percibe el objeto o la
nueva tarea a realizar. La mente intentar trasladar (metafricamente) la nueva experiencia a una
experiencia previa ya asimilada. Para ejecutar la asimilacin, la operacin de ajuste llevar a
cabo la combinacin posible de elementos presentes, contextualizndolos de un modo semejante
a los contextos ya asimilados previamente. El proceso de contextualizacin supone:
1. Una ordenacin de los elementos experimentados. 2. Posicionamiento de los mismos. Es decir, una forma de vinculacin relacional entre s. 3. Una consolidacin rtmica de todos los elementos.
Demcrito el gran sabio presocrtico de Abdera designaba dicha combinacin de elementos con el nombre de symploke, trmino que significa ligazn o trabazn.
37 Deca que,
gracias a este entrelazamiento al que llaman epllaxis,38
se cambiaban39
las imgenes de un modo
convencional.40
En trminos de Demcrito, la lgica operativa ajusta o contextualiza mediante
tres actos bsicos mentales:
Txis: Ordenacin de elementos.41
Thsis: Definicin de las posiciones de los elementos ordenados.42
Skhema o Rhythms: Determinar una figura43
rtmica.44
36
Lonergan, Bernard, Conocimiento y Aprendizaje, Ed. UIA, Mxico, 2008, p.270. 37
Tambin se permite la acepcin cpula o encuentro. 38
Tambin de ah deriva epallasso, epallatto. 39
Simplicio. Del cielo 609,25. 40
Digenes Laercio, IX, 44; DK (68 A 1). 41
Txis (orden) es la palabra con la que Aristteles traduce diathige (contacto). 42
Thsis (posicin) es la palabra con la que Aristteles traduce trope (direccin o sentido). 43
Skhema (figura) es la palabra con la que Aristteles traduce rhythms (estructura).
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13
El orden expresa la ubicacin de los elementos o puntos en una distribucin, mientras que
la posicin indica cmo cada elemento o punto se orienta o relaciona con respecto a los otros
elementos.45
Pensemos que hay dos elementos: A y H. El modo de ordenacin de los dos
elementos puede ser AH, o bien, HA. Un orden brinda un sentido diferente del otro, ya que no es
lo mismo decir que una persona ha hecho algo, que la expresin Ah! Ahora entiendo. El sentido es el grado de creencia sobre algo. Es el modo simblico de uso de algo en los contextos.
En este caso, el orden de los elementos cambia el sentido de lo que se entiende de la unin de los
mismos.
Por otra parte, el orden de los elementos de una expresin tambin puede cambiar la
posicin de los mismos. Por ejemplo, pensemos en la clebre enunciacin de Lewis Carroll en su
libro Alicia en el pas de las maravillas: No es lo mismo Me gusta lo que como, que Como lo que me gusta. Las palabras son las mismas, pero el sentido cambia por el orden y la posicin de las palabras.
46 En una misma frase, no estn en su mismo lugar ni tampoco se relacionan del
mismo modo entre s. La primera enunciacin: Me gusta lo que como hace referencia a un tiempo
presente en el que, la persona que habla, afirma que lo que est comiendo le agrada. Por otra
parte: Como lo que me gusta es una enunciacin atemporal, en la que el sujeto seala que l se
alimenta solamente de lo que le agrada.
El psiclogo norteamericano Joseph Jastrow47
nos brinda un ejemplo visual que nos permite
entender a qu se refiere la posicin de los elementos. Este dibujo (figura 4), conocido como el
pato-conejo, muestra cmo las orejas del conejo pueden, al cambiar de posicin, convertirse en el
pico de un pato. El elemento oreja tiene una posicin en relacin con el ojo y la nariz del conejo. Pero si visualizamos las orejas como pico de pato, la aparente nariz del conejo pierde su
posicin y se convierte en la parte posterior de la cabeza del pato. La posicin del ojo tambin se
mueve. Al ver hacia delante, ver como pato; por el contrario, al ver hacia atrs, ver como
conejo. Gracias a este ejercicio, podemos confirmar que la percepcin no depende slo de los
estmulos de la imagen, sino tambin existe actividad mental por parte del sujeto epistmico.
Figura 4
44
Se traduce rhythms como estructura. El equivalente en tico es rhysms (movimiento regulado por tiempos,
disposicin simtrica, medida o cadencia). 45
Idem. p. 199, nota 75. 46
Por posicin debe entenderse el lugar que ocupan en la relacin contextual. 47
Hijo del clebre Marcus Jastrow y hermano de Morris Jastrow. Ambos grandes estudiosos del Talmud. Se gradu
en la Universidad de Penn en 1882 y fue profesor de psicologa en la escuela Johns Hopkins en 1885.
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La imagen fue publicada originalmente en la revista Fliegende Bltter
en octubre de 189248
Versin del psiclogo Walter Ehrenstein (1930)
Cuando en el campo de lo jurdico se narra una serie de hechos, es importante confirmar el
orden en el que cada uno de los mismos se est presentando, ya que al final, el modo de
vincularse cada uno de ellos tendr una posicin operativa en todo un asunto. Las partes que
actan dentro del mismo, tambin cobran una posicin, pero sta depende adems del orden de
cada uno de sus actos y la forma (sentido) en que se relacionan entre s. De hecho, cuando se
afirma que se van a resolver posiciones en juicio, prcticamente se est diciendo que entre las partes se llevar un reconocimiento de la situacin; del dibujo (bild en alemn) del estado en
cuestin de las cosas que llevaron al litigio; o que se piensan llevar a un litigio, como sera en el
caso de un juez de control en un sistema acusatorio. La relacin final, en la que todas y cada una
de las partes juegan un nexo coherente, es considerada por los tericos de la argumentacin como
el ritmo general que tiene un asunto. 48
Apareci el 23 de octubre de 1892, pg. 147.
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La palabra ritmo, la cual encuentra su etimologa en la palabra rhein que significa fluir49
y
en la raz eru, ru que significa sostener o mantener,50
expresa el resultado final de la operacin de
relacin entre puntos ordenados y posicionados. Platn define al movimiento como la aplicacin
del orden al movimiento51
y, Aristteles, afirma que el ritmo es un patrn de recurrencia impuesto
a un discurso o a otros sonidos, que da lugar a expectativas. A las palabras con ritmo las llama
medidas.52
El ritmo es un sistema formado a partir de puntos o tiempos53
dispuestos en cierto orden.54
Si pensamos en msica, las seales que indican el comps son marcas o puntos que limitan el
fluir temporal.55
Por esto, a la imposicin de lmites al fluido temporal se le llama ritmo. En el
caso de la danza, los puntos son figuras corporales o posiciones (skhemata) que limitan el fluir
del movimiento corporal.56
LAS FORMAS DEL PENSAMIENTO DIRECCIONADAS POR EL RITMO,
ORDEN Y POSICIN DE LAS PALABRAS
La experiencia Gestalt puede ser advertida en las formulaciones de tipo legal y, por lo tanto,
en las formas de razonamiento jurdico. A modo de ejemplo, las interesantes investigaciones del
premio Nobel Daniel Kahneman57
psiclogo de la universidad de Princeton y su colaborador el psiclogo Amos Tversky, nos muestran los alcances en materia de decisin y razonamiento
prudencial. Ambos autores detectaron que a partir de la forma en la que se ordenan las palabras
49
En la opinin de Santa Cruz de Prunes y de Cordero, esta palabra seala en su significado original el fluir regular y
ondulante del curso del agua. Cfr. Los filsofos presocrticos, vol III, Ed. Gredos, Espaa, 1980, p. 197, nota 73. 50
Consideran que esta palabra en su significado original hace referencia al modo en que una cosa es mantenida bajo
una forma, de ah que Aristteles la haya traducido por skhema o figura. Cfr. Los filsofos presocrticos, vol III, Ed.
Gredos, Espaa, 1980, p. 197, nota 73. Estos autores estn haciendo referencia a la obra de R. Renehan, The
derivation of rhythms, CP LVIII, 1 (1963), pp. 36-38, quien afirma que la palabra skhema proviene tambin de una
raz que significa mantener. W. Jaeger, en Paideia, Mxico, 1957, pp.126-127, indica que la palabra rhythms
aparece en un verso de Arquloco, fr. 67 a 7 Diehl, con el sentido de imposicin de lmites al movimiento o momento
de una posicin u ordenacin fija de objetos. 51
Platn. Leyes, 665 a. Tambin cfr. Platn. Repblica, 399 e, donde sostiene que el ritmo marca pausas y es la
constante limitacin del movimiento. 52
Cfr. Aristteles. Potica, 47 a 22, 47 b 29 y 47 b 25. 53
El tiempo indivisible y ms pequeo es llamado punto, es decir, semeion. Cfr. Arstides Quintiliano. Sobre la
msica I, 14, (32,11). Euclides tambin utiliza la palabra semeion para designar al punto geomtrico. 54
Txis (orden) es la palabra con la que Aristteles traduce diathige (contacto). 55
Cfr. Arstides Quintiliano. Sobre la msica I, 14, nota 110. 56
Sobre el ritmo, es interesante el estudio que hace Arstides Quintiliano en Sobre la msica I, 13: La palabra ritmo se usa en tres sentidos: Se dice de los cuerpos inmviles (como cuando hablamos de una estatua eurrtmica), de
todos lo mviles (y as decimos que alguien camina eurritmicamente) y, en su sentido especfico, de la voz []. El ritmo es, en efecto, un sistema formado a partir de tiempos dispuestos con algn orden, a cuyos estados [path]
llamamos rsis y thesis, ruido y reposo. Puesto que, en general, los sonidos con un movimiento igual, hacen un
entrelazado meldico inexpresivo y confunden la mente, son las partes del ritmo las que establecen con claridad la
potencia de la meloda, moviendo la mente de lado a lado, pero con regularidad. As pues, rsis es el
desplazamiento hacia arriba de una parte del cuerpo y thsis el desplazamiento hacia debajo de esa misma parte. La
rtmica es la ciencia que trata el uso de lo que acabamos de decir. Todo ritmo se percibe por estos tres sentidos: por
la vista como en la danza; por el odo, como en la msica; o por el tacto, como en las pulsaciones de las arterias. rsis es un tiempo de tensin. En danza hace referencia, por ejemplo, a levantar un pie. Thsis equivale a un tiempo
de relajacin. En danza es volver a poner el pie en el suelo. 57
En 2002, Kahneman junto con Vernon Smith gan el "Premio Nobel" de Economa. Integr sus estudios sobre el
juicio humano y la toma de decisiones a la ciencia econmica.
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en los enunciados, se sugieren y direccionan las decisiones en aquellos que las escuchan. La
investigacin de estos psiclogos nos llevan a sugerir que, tanto los abogados como los jueces y
los legisladores, no deciden cuestiones slo en razn de sus categoras, preferencias o valores
personales, sino que construyen sus resoluciones a partir de las formas lingsticas con las que se
les plantean los asuntos, se les formulan preguntas o se les presentan opciones.58
De algn modo,
la forma en que la mente percibe el lenguaje genera una ilusin en el cognoscente o sujeto
epistmico. Uniendo estas percepciones a nuestros pre-juicios o categoras (a partir de las cuales
nos ajustamos a nuevas condiciones), tendemos a resolver creativamente los nuevos problemas.
Kahneman y Tversky, en su teora de las prospectivas (prospect theory), sealan que los
individuos toman decisiones no en razn de las probabilidades, sino en orden a ciertos atajos
heursticos.59
Es decir, para resolver nuevos problemas, no optamos por lo general a revisar las slidas pruebas estadsticas del pasado, sino que resolvemos a partir de nuevas asimilaciones
y ajustes mentales. Ahora bien, Kahneman y su socio descubrieron que preexisten en las
categoras de ajuste y asimilacin ciertas constantes como la aversin a la prdida. Esta constante es la que, al momento de tomar una decisin, inclina el juicio en direccin a evitar
prdidas en una situacin o a castigar la perdida de algo. Sin embargo, tambin es esta aversin a
la prdida la que nos aleja de la perspectiva de la toma de oportunidades. Por tal razn, en
general, se piensa siempre en orden a no perder, en lugar de pensar en ganar.
Imaginemos que un extrao virus asitico mutado est generando una grave enfermedad en
la poblacin nacional. De acuerdo a los estudios de la Organizacin Mundial de la Salud y la
Organizacin Panamericana de la Salud, se espera que este virus mate a 600 personas en nuestro
pas. Ante esta posible epidemia, el gobierno propone dos programas para combatir la
enfermedad. La opcin A presenta un programa en el que seguramente se salvarn 200 personas. La opcin B presenta un programa en el que hay 1/3 de probabilidad de salvar a los 600 habitantes pero tambin 2/3 de probabilidad de que ninguno sea salvado. Al presentarse las
dos opciones, el 72% de los encuestados prefiri la opcin A. Opt por salvar a 200 personas con toda seguridad en lugar de correr el riesgo de no salvar a ninguna.
Posteriormente, ante esta misma situacin se presentaron dos opciones ms. La opcin C contaba con un programa en el que se decida una solucin en la que moriran 400 personas. La
opcin D, presentaba una opcin en la que exista 1/3 de probabilidad de que nadie muriera, pero 2/3 de probabilidad de que las 600 personas fallecieran. Ante estas dos opciones el 78% de
los encuestados prefirieron la opcin D. Ahora bien, si nos detenemos a revisar con detalle estas cuatro opciones, podemos
percatarnos que las opciones A y C son idnticas, y que las opciones B y D son la misma. Sin embargo, presentadas las opciones con redacciones distintas inducen a la gente a
resolver las cuestiones en cierto sentido y no en otro. Las aparentemente irracionales y
caprichosas opiniones de la gente, en realidad operan con una lgica que se construye con base en
la forma en que se aprecian las opciones. De acuerdo a los estudios de Kahneman y Tversky, por
lo general, la gente presenta una gran aversin a los riesgos y, tomando en cuenta el impacto de
las posibles muertes y las prdidas, prefiere optar por salvar a un grupo pequeo, pero seguro. Es
menor el nmero de personas que razonan en orden a correr riesgos y apostar por un mayor
nmero de sobrevivientes y ganancias.60
Tal como podemos ver, la opcin cambia si se resalta el
58
Schwarz, Barry, When words decide, Scientific Amercian Mind, Vol. 18 Num. 4, august/September 2007, p.38 59
Del griego euristikein que significa hallar o inventar. De este mismo vocablo deriva la expresin eureka. 60
Kahneman, Daniel & Tversky, Amos, Choices, Values and Frames, American Psychologist, Vol. 39, N. 4, April,
1984 , pp. 341-350.
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mayor nmero de muertes de la opcin A en la opcin C, y ante ese riesgo, es preferible apostar por 1/3 de probabilidad de salvar a todos.
La manera de razonar opera a partir de cmo se estructura la imagen Gestalt en nuestra
mente y cmo es juzgada a partir de nuestras categoras previas. La forma de redaccin nos
condiciona los puntos de referencia y, por ello, tal como lo seala Kahneman, el modo en que se
perciben las opciones generan en el sujeto cognoscente, una ilusin. A partir de ella, nuestros
temores y afectos, nuestras creencias y valores, nos llevan a resolver y a tomar decisiones.
Tambin nuestras categoras de pensamiento nos pueden llevar a valorar errneamente una
formulacin sobre la cual pensamos que estamos perfectamente seguros que entendemos.
Veamos otro ejemplo. Pensemos que estamos en nuestra casa y encontramos una foto. La
observamos y decimos:
Yo no tengo ni hermanos ni hermanas. Al ver a la persona que est en una foto, puedo afirmar con toda seguridad que: El hijo del que sale en la foto es mi padre. Ahora bien, una vez dicho esto debemos resolver: quin aparece en la foto? La mayora de
la gente que responde directamente a la pregunta afirma: soy yo. Sin embargo, esto slo demuestra que la operatividad racional que se ha formado mentalmente no es precisa. Para
responder correctamente a modo de ayuda sugiero que se repita la pregunta, pero ahora cambiando de lugar un enunciado por otro, de tal modo que se diga:
Yo no tengo ni hermanos ni hermanas. Al ver a la persona que est en una foto, puedo afirmar con toda seguridad que: Mi padre es el hijo del que sale en la foto. La pregunta es la misma; sin embargo, con esta nueva forma de enunciacin parece ser ms
fcil darnos cuenta que el sujeto que aparece en la foto es mi abuelo. He aqu una muestra de cmo, si modificamos los elementos de un discurso, podemos redireccionar nuestras formas de
pensamiento y, por consiguiente, nuestras apreciaciones sobre los asuntos que abordemos.
Esta misma cuestin se detecta en muchos estudiantes y profesionales del derecho cuando
llevan a cabo una lectura jurdica e intentan interpretar la legislacin. Si realizaran el ejercicio de
pasar de voz activa a voz pasiva lo escrito en la ley, o si bien, cambiaran el orden de los trminos,
sin cambiar la posicin de las palabras, podran descubrir importantes formas de interpretacin
sobre el mismo texto.
En una ocasin recuerdo haber escuchado a un empresario afirmar que si deseaba que se
aprobaran sus propuestas en una asamblea, sin oposicin alguna, poda optar por la siguiente
frmula: Los que no piensen decir que no a la propuesta, que no levanten la mano. En lo que los oyentes, poco experimentados en el razonamiento formal, piensan si levantan la mano o no,
con el slo hecho de no subir la mano (mientras se encuentran dubitativos), ya estn aprobando la
propuesta.
Tal como se puede ver, el slo razonamiento a partir de las formulaciones enunciativas, deja
al oyente en una especie de estado de indefensin. He aqu una razn ms para llevar a cabo una
formulacin grfica o axiomatizacin de la razn por medio de la lgica. Por medio de ella ser
posible definir el sentido de lo que se enuncia. Gracias a la formulacin lgica de un enunciado,
podemos definir el sentido que tiene en congruencia.
Adems de la formulacin de inferencias lgicas, por lo general el cambio de voz activa a
voz pasiva, puede ayudarnos a precisar el sentido de lo enunciado. Sin embargo, hay que tener
cuidado pues, ciertamente, se ha dicho ms arriba que Lewis Carroll mostraba que el cambio de
voz activa a voz pasiva o viceversa puede alterar el significado de lo que se est afirmando. Generalmente para el razonamiento reversible, el cambio de voz activa a pasiva ayuda a definir el
sentido de una afirmacin, tal como se ha mostrado con el ejemplo de la foto, expuesto
anteriormente. El cambio de voz activa a pasiva, comnmente, no debe alterar el sentido propio
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de lo enunciado y, en todo caso, nos ayuda a aclarar su significado. Es importante detectar si el
cambio de voz activa a voz pasiva mantiene los elementos del texto en la misma posicin. El
orden debe cambiar, pero para conservar el mismo sentido, los trminos deben conservar su
posicin.
As, la forma mental a partir de la cual se lleva a cabo el razonamiento est fuertemente
condicionada (no determinada) por el modo en que se enuncian las ideas. A este fenmeno
debemos incluir las consideraciones del Dr. Luis Guerrero Martnez sobre la creencia de una idea
y el razonamiento a partir de ella. Entre sus investigaciones, el Dr. Guerrero destaca que cuando
la gente lleva a cabo un juicio de valor, generalmente busca argumentos y bibliografa en apoyo a
sus hiptesis personales. Al mismo tiempo, inconscientemente, cancela mentalmente toda
posibilidad de asumir opiniones contrarias a la suya que lo llevaran a revisar su propia postura.
La conviccin obsesiva sobre una idea, sin consideracin de revisin, me parece que es un
notable signo de irreversibilidad en el razonamiento de los individuos. Pienso que los estudios del
Dr. Guerrero atisban la necesaria vinculacin de la conviccin con el desarrollo psicogentico.
La mayora solamente considera uno o dos argumentos a su favor y no hace un esfuerzo por encontrar ms. En una discusin con puntos de vista encontrados, cada
uno define sus argumentos y hay pocas posibilidades de que acepten argumentos
contrarios que cambien su opinin.61
PRINCIPIO DE NO CONTRADICCIN
Es importante sealar que la observacin de estas imgenes Gestalt nos revela, a su vez, un
principio fundamental del razonamiento humano. No es posible que veamos las dos formas
distintas de la misma imagen simultneamente o al mismo tiempo. La mente percibe una imagen
en un sentido, en un tiempo. Puede percibir otro sentido sobre la misma imagen, pero eso ser en
otro tiempo. Puede, en todo caso, casi inmediatamente, ver otro sentido de la misma imagen, pero
esto ya no ser en el mismo tiempo, sino en otro momento. Definitivamente, por ahorro psquico,
no puede percibir ambos sentidos al mismo tiempo. Este principio del razonamiento humano, fue
formulado por Aristteles de un modo lgico en su metafsica: es imposible que lo mismo se d y no se d en lo mismo a la vez y en el mismo sentido.62 De un modo ms coloquial: Una cosa no puede tener dos sentidos diferentes al mismo tiempo, definido un sentido en un tiempo.
Tanto en la figura 1 (la joven vieja de Boring)63
como en la figura 2 (nfora y los rostros de
Edgar Rubin)64
es imposible ver ambas imgenes simultneamente. O se observa una joven o se
observa una anciana, pero no es posible ver las dos sincrnicamente. Lo mismo ocurre con el
nfora o los dos perfiles de la figura de Rubin. O se ve una o los otros, pero no ambas imgenes
al mismo tiempo. Nuestra mente construye una estructura en un tiempo con un sentido. El ajuste
sobre la asimilacin con ciertas categoras se hace en un tiempo. Con otras categoras, en otro
tiempo. Puede cambiar de sentido, pero slo en otro tiempo. Lo que no es posible desarrollar (por
lo menos hasta ahora) es percibir dos sentidos diferentes al mismo tiempo. De hecho, por ahorro
psquico, se define la imagen contemplada por la mente en un solo sentido. Este factor es clave
para poder resolver aparentes paradojas como la de Protgoras y su discpulo Evathlo, o bien,
61
Guerrero Martnez, Luis, Quin decide lo que est bien y lo que est mal? tica y Racionalidad, UIA, Plaza y
Valds, Mxico, 2008, pp.48-49. 62
Aristteles, Metafsica, 1005 b 19. 63
La figura original es de W.E. Hill. Se titula Mi esposa y mi suegra, tira cmica de Puck, noviembre de 1915. G.E.
Boring la public en 1930 en el American Journal Psychology. 64
Psiclogo originario de Dinamarca.
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como la paradoja del mentiroso, ejercicio interesante con el que los estudiantes de jurisprudencia
se ejercitaban en el arte de la dialctica. Este asunto ser abordado en el siguiente inciso.
Figura 5
Figura 6
La escalera (Figura 6), creada por el
matemtico alemn Ernst Schrder, y el
libro (Figura 5), del fsico austriaco Ernst
Mach, ayudan a confirmar el
planteamiento del principio de no
contradiccin, como fundamento del
principio de la racionalidad humana. La
escalera puede ser percibida en dos
sentidos diferentes pero no al mismo
tiempo. Lo mismo ocurre con el libro de
Mach. Se ve como un libro visto desde la
cubierta, o bien, como un libro visto desde
el ngulo del lector. Pero no pueden
percibirse simultneamente en diferentes
sentidos.
Tu percepcin es una objetivacin de tu sensacin. Puedes dejar algo y ver una de dos cosas. Puedo trazar una serie de lneas en el pizarrn y puedes verlas ya sea
mirando una escalera descendente o mirando una escalera ascendente; ser siempre el
mismo dibujo. Lo que estars objetivando es la escalera desde arriba o desde abajo, y
lo que veas ser algo anterior a ambas y diferente de ambas: puede ser cualquiera.65 La imagen es una representacin simblica de algo o acerca de algo. Por medio de ella es
posible agilizar el razonamiento humano. De hecho, la graficacin ayuda a las operaciones
psquicas a organizar, ordenar y posicionar todos los elementos de un problema planteado. Nos
encontramos a un par de pasos de la formulacin analtica del razonamiento operativo. Las
65
Lonergan, Bernard, Discussiones at the Lonergan Workshops, Traduccin indita de Nicholas Graham de las
discusiones de 1975, p.50. Tambin en Bravo, Armando, Una introduccin a Lonergan, Ed. UIA, Mxico, 2001,
pp.109-110.
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operaciones psquicas pueden realizar un cierto nmero de operaciones elementales; sin embargo,
por medio de la graficacin o de la formulacin lgica, la mente psquica puede descubrir otra
serie de operaciones que se derivan de su pensamiento operativo elemental.
El empirismo moderno ha sido en gran parte condicionado por dos dogmas. Uno de ellos es la creencia en cierta distincin fundamental entre verdades que son
analticas, basadas en significaciones, con independencia de consideraciones fcticas,
y verdades que son sintticas, basadas en los hechos. El otro dogma es el
reductivismo, la creencia en que todo enunciado que tenga sentido es equivalente a
alguna construccin lgica basada en trminos que refieren a la experiencia
inmediata. Una consecuencia de su abandono es, como veremos, que se desdibuja la
frontera que se supone traza entre la metafsica especulativa y la ciencia natural. Otra
consecuencia es una orientacin hacia el pragmatismo.66
RAZONAMIENTO DIALCTICO
La experiencia visual Gestalt nos introduce en el estudio del razonamiento dialctico, el
cual, con base en el principio de no contradiccin, es superable. El pensamiento humano
aparentemente puede encontrarse frente a paradojas irresolubles; no obstante, si se ha
comprendido que los sentidos y los tiempos se acompaan mutuamente, la paradoja desaparece.
Veamos los siguiente ejemplos.
Bajo la influencia de Zenn de Elea, quien fue el iniciador del razonamiento dialctico
erstico,67
un discpulo de Scrates llamado Euclides (no el gemetra) fund la escuela megrica.
Entre los miembros de esta escuela se desarroll el estudio sobre las paradojas, entre las cuales
destac la conocida paradoja del mentiroso de Eubulides.68
Yo siempre digo mentiras
El problema consiste en saber si esta afirmacin es verdadera o falsa. Si es verdad que
siempre digo mentiras, la afirmacin misma como verdad hace que sea falsa siempre digo mentiras, porque ella misma no es falsa sino verdadera.
Por el contrario, si es falsa, esta enunciacin confirma la verdad de la afirmacin yo
siempre digo mentiras y entonces no es falsa sino verdadera.
El problema mismo trata una paradoja en la que se confunden tiempos y sentidos. Para
resolverlo es necesario precisar el sentido y el tiempo en el que se enuncia. Segn el principio de
no contradiccin una cosa no puede ser y no ser al mismo tiempo en el mismo sentido. Por
consiguiente: si es verdad la afirmacin siempre digo mentiras, el sentido es verdadero en el
momento en que se enuncia. Cuando llevo a cabo la inferencia de que si aquello es verdad,
entonces es falso que siempre digo mentiras, estoy hablando ya en otro tiempo y el sentido ha mutado claramente.
Lo mismo ocurre si enuncio que es falso en un tiempo, pues si digo aquello y luego digo:
entonces, se confirma la regla. Ya nos encontramos en otro tiempo y en otro sentido. La palabra entonces muta el tiempo y los sentidos pueden cambiar.
La leccin que obtenemos de esta paradoja para el razonamiento jurdico es crucial. Es
fundamental para mantener el acuerdo de voluntades, el conservar el sentido de lo que se afirma a
66
Quine, Willard Van Orman, Desde un punto de vista lgico, Ed. Ariel, Barcelona, 1962, p.49. 67
Digenes Laercio., VIII, 57, afirma que Aristteles en el Sofista, afirma que Zenn (de Elea) fue el inventor de la
dialctica. Lo mismo en Suda (29 a 2). Epifanio afirma que Zenn de Elea era erstico (II o 33 de BCG). 68
Cfr. Mates, Benson, Lgica matemtica elemental, Ed. Tecnos, Madrid, 1974, p.258.
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travs del tiempo. Las confusiones jurdicas, as como las paradjicas, ocurren porque se
confunden los sentidos con los tiempos.
Hay un clebre caso que registran los fragmentos acerca del sofista Protgoras69
que
ilustran el problema de la confusin de tiempos y sentidos. El planteamiento es el siguiente:
Se dice que el famoso sofista de Abdera, Protgoras, fue contratado por un joven llamado
Evathlo para que le enseara a convencer y, de ese modo, poder ganar en los tribunales toda clase
de juicios. El maestro y el discpulo celebraron entonces un contrato en el que se especificaba que
Protgoras slo recibira su paga si Evathlo lograba triunfar, por lo menos una vez, en una de las
causas defendidas ante los tribunales. Es decir, ambas partes establecieron que Protgoras slo
cobrara su dinero siempre y cuando se cumpliera la condicin de que Evathlo ganase por lo
menos un juicio. Ello sera prueba suficiente para mostrar que Protgoras efectivamente le haba
enseado a Evathlo a convencer. La alternativa era muy simple y el juicio muy fcil: si Evathlo
gana por lo menos una vez, ello muestra que ha aprendido a convencer y entonces deber pagar a
Protgoras. Si Evathlo no gana al menos una vez debido a que no se presenta la condicin suspensiva, Protgoras no podr cobrar su dinero.
Ocurri entonces que Evathlo, al acudir en defensa de su primer cliente, perdi su primer
juicio. Sin embargo, confiado de que estaba bien preparado sigui peleando cada nuevo caso que
se le encomendaba. Durante los siguientes cuatro meses, perdi tambin los siguientes diecinueve
asuntos consecutivos. De veinte juicios en los que haba participado, haba perdido los veinte.
Evathlo decidi retirarse del litigio durante un tiempo para reflexionar sobre su situacin.
Despus de cinco meses de ausencia, el sofista Protgoras regres a visitar a Evathlo,
confiando que podra cobrar su dinero. Sin embargo, cuando reclam sus honorarios, el joven
discpulo aleg que no haba obtenido la menor victoria en veinte juicios llevados y, por
consiguiente, no le pagara nada de momento. El asunto entonces fue llevado ante un juez.
Protgoras acus a Evathlo de incumplimiento del pago. Evathlo se defendi a s mismo
sosteniendo que no deba hacerlo ya que no se haba cumplido la condicin de ganar por lo
menos un juicio. El juez, despus de examinar que la condicin suspensiva no se haba cumplido
en veinte juicios llevados, declar inocente a Evathlo. Al emitir su sentencia, Protgoras esboz
una placentera sonrisa y le dijo al joven discpulo: Me has ganado en este pleito y por lo tanto soy yo quien debe ganar. Te corresponde pagarme, pero al mismo tiempo, porque t me has
ganado, no te corresponde pagarme, porque me has ganado.70
Ciertamente, Evathlo con esta
respuesta se haba impuesto en un litigio contra Protgoras y haba ganado, por lo menos, en esta
ocasin. Es decir, la condicin se haba cumplido. Sin embargo, el juez ha determinado que no se
pague a Protgoras y Evathlo, protegido por la sentencia, se niega a pagarle.
El problema radica nuevamente en la confusin de tiempos y sentidos. Para saber quin
tiene razn en este asunto paradjico pensemos en el principio de no contradiccin. El juicio
entre Protgoras y Evathlo tiene por objeto analizar una serie de elementos: El cumplimiento de
una condicin suspensiva a lo largo de veinte juicios llevados por Evathlo. Ciertamente en
ninguno de ellos gan y, por consiguiente, la condicin no se haba cumplido. El juicio entre
Protgoras y Evathlo no est incluido en estos veinte juicios, por lo tanto lo que ocurra en l,
69
Este sofista cobr fama al afirmar que sobre cualquier asunto es posible defender, con la misma validez, una tesis
como su contraria cualquier asunto puede ser defendido en un sentido o en su contrario. Sneca, Cartas 88, 43. 70
Cfr. Digenes Laercio, IX, 56 y tambin en Apuleyo, Flrida XVIII, 19-20. En Diels y Kranz: 80 Al, A4. Esta
relacin conflictiva entre discpulo y maestro tambin se cuenta de los inventores de la retrica Crax y Tisias. Cfr.
Schmid, W. & Stahlin, O. Geschichte der griechischen Literatur, vol. I, Die Klassische Periode der griechischen
Literatur III, Munich, 1940. p. 28 nota 1.
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queda fuera de la litis considerada en este asunto. Este juicio contabilizado por Evathlo es, en
todo caso, el juicio veintiuno. La resolucin del juez es slo sobre los primeros veinte juicios, no
sobre el juicio veintiuno, mismo que se est llevando a cabo. Para que Protgoras pueda cobrar su
dinero, sera necesario que lleve a cabo un nuevo juicio; el vigsimo segundo, en el que slo
peleara el triunfo del juicio veintiuno y no los otros veinte anteriores.
Cuando el asunto se nos narra por primera vez, los espectadores encuentran en la paradoja
un problema prcticamente irresoluble, pero ello es debido a que confunden los sentidos de los
asuntos llevados en un mismo tiempo. La dialctica misma nos ejercita para poder distinguir en
distintos tiempos, distintos sentidos.
LGICA FORMAL Y FORMALIZACIN DE LGICAS
OPERATIVAS DEL RAZONAMIENTO EMPRICO
Tal como se ha planteado, el conocimiento racional de algo consiste, en un primer
momento, en poner las representaciones internas de la mente en equilibrio con las estructuras de
la experiencia. El conocimiento iluminador o insight que brota, una vez realizado este ejercicio, deber ser justificado argumentativamente. Las razones que puedan avalar dicha
hiptesis planteada requieren presentarse, sobre todo, de un modo formal o axiomatizado. De ah
que el siguiente paso del insight, producto de la lgica operativa, sea la formalizacin lgica-
analtica de su justificacin.
La imagen visual o la formalizacin analtica de una experiencia es una representacin
simblica. Por medio de ella es posible realizar un ahorro psquico y con ello agilizar el
razonamiento humano. Por experiencia sabemos que cuando se nos plantea un problema, para
verlo ms claramente lo graficamos de algn modo. Es un proceder natural de la mente. Es una
forma estratgica de respuesta psquica. La graficacin, de algn modo, ayuda a organizar los
elementos de un problema. Les da ritmo, orden y posicin.
Hay muchas personas que piensan con muchsima mayor facilidad cuando pueden imaginarse un argumento de manera grfica y, con frecuencia, un diagrama
les sirve para entender con claridad algo que puede ser de difcil comprensin para
ellos, cuando est expresado en forma verbal o algebraica. Por esta razn los
diagramas lgicos son artificios pedaggicos sumamente valiosos. Adems, un buen
mtodo diagramtico puede servir para resolver determinados problemas lgicos,
con la misma eficiencia con la que una grfica puede ser utilizada para encontrar la
solucin de determinadas ecuaciones.71 Anlogamente se puede graficar efectuando una formulacin analtica del razonamiento
operativo. Es decir, las afirmaciones o negaciones expresadas en lenguaje cotidiano se pueden
formular de manera abstracta y de este modo ser traducidas como constantes y variables.72 Bajo esta nueva forma se le puede dar un tratamiento de verdades analticas, basadas en
significaciones y con independencia de consideraciones fcticas.73
Recordemos que significar y nombrar no pueden identificarse. El ejemplo de Frege de el lucero de la tarde y el lucero del alba y el ejemplo russelliano de Scott y el autor de Waverley ilustran el hecho de que diversos trminos pueden nombrar o denotar la misma cosa y diferir por su significacin o sentido. No menos
71
Gardner, Martin, Mquinas Lgicas y Diagramas, Ed. Grijalbo, Mxico, 1973, p. 50. 72
Quine, Willard Van Orman, Desde un punto de vista lgico, Ed. Ariel, Barcelona, 1962, p.125. 73
Quine, Willard Van Orman, Desde un punto de vista lgico, Ed. Ariel, Barcelona, 1962, p.49.
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importante es la distincin entre significar y nombrar al nivel de los trminos
abstractos. Los trminos 9 y el nmero de los planetas nombran una sola y misma cosa, pero seguramente deben considerarse diversos en cuanto al sentido. 74 Estructurar formalmente una operacin psquica es un ejercicio que tiene un gran valor.
Hoy sabemos que las operaciones psquicas pueden realizar un cierto nmero de operaciones
elementales. No obstante, por medio de la graficacin o de la formulacin lgico-analtica, la
mente puede descubrir otra serie de operaciones que se podran derivar lgicamente de su
pensamiento operativo elemental.
Efectivamente, al parecer los esquemas lgicos proporcionan a la inteligencia operativa una
seleccin de estructuras que le ayudan a desarrollar inferencias posibles que por s sola no podra
contemplar fcilmente, o bien, tardara mucho en concebirlas. La variedad de esquemas lgicos
brinda, a su vez, una diversidad de leyes de totalidad o de forma de visin en conjunto de lo
asimilado y ajustado por la inteligencia. Asimismo, las operaciones empricas que aparentemente
eran concebidas como aisladas, se ajustan a un modelo geomtrico o bien, a un sistema de
equilibrio algebraico.75
As, podemos considerar que los razonamientos o enunciados jurdicos
empricos, de igual manera podrn ser formulados bajo una notacin formal analtica. En este
estado virtual podrn ser operados bajo estructuras formales que permitirn deducir e inferir (por
va de mecanismos geomtricos o algebraicos) la calidad de verdad de sus transformaciones
posibles.
Hoy las operaciones reales descritas por el psiclogo corresponden todas a operaciones lgicamente formulables, pero slo constituyen una fraccin nfima.
Debemos sacar la conclusin de que el catlogo lgico es intil? Todo lo contrario.
Primero porque nos proporciona con precisin el conjunto de los posibles y, luego,
porque constituye mucho ms que un catlogo... Existe entre lo posible y lo real una
relacin bien conocida por los fsicos y sobre la cual los psiclogos deben meditar,
puesto que toman de la fsica la nocin de equilibrio. Se dice en mecnica que un
sistema est en equilibrio, cuando la suma de los trabajos virtuales compatibles con
las conexiones del sistema conduce a un producto nulo. En otras palabras, un estado
real de equilibrio depende de la totalidad de sus transformaciones posibles. Traducir
esta afirmacin al lenguaje de la psicologa es lo mismo que sostener que un sistema
de operaciones est en equilibrio, es decir, que ha alcanzado un estado de estabilidad
que las nuevas situaciones y los nuevos problemas ya no modificarn (como sucede
en la lgica de un adulto normal) en la medida en que las transformaciones posibles
del sistema se anulan; ahora bien, estas transformaciones posibles son justamente las
nuevas operaciones que se podran aadir a las operaciones realmente construidas,
combinndolas entre s, y slo un clculo terico permite analizarlas. Pero hay mucho
ms, porque este clculo terico (para el cual es indispensable recurrir a la lgica) no
tendra ningn sentido si se redujera a una simple enumeracin, siendo sta indefinida
74
Quine, Willard Van Orman, Desde un punto de vista lgico, Ed. Ariel, Barcelona, 1962, p.49. La frase lucero de la tarde nombra cierto gran objeto fsico de forma esfrica que se mueve en el espacio a varios millones de millas de nosotros. La frase lucero del alba nombra la misma cosa, como probablemente estableci por primera vez cierto buen observador babilonio. Pero no se puede considerar que las dos frases tengan la misma significacin; de tenerla,
aquel babilonio habra podido ahorrarse sus observaciones y contentarse con reflexionar acerca de la significacin de
sus palabras. Las dos significaciones, puesto que difieren, deben ser algo diverso del objeto nombrado o denotado, el
cual es uno y el mismo en los dos casos. Texto explicativo en la misma obra pp.34-35. 75
Piaget, Jean, La Utilidad de la Lgica en la Psicologa, Estudios sobre Lgica y psicologa, Ed. Alianza, Madrid, 1982, pp.93-94.
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por su propia naturaleza. La gran utilidad de los esquemas lgicos para el estudio
experimental de la inteligencia es que suministran una seleccin de estructuras
propiamente dichas, lo que significan leyes de totalidad o de forma de conjunto, por
oposicin a una serie de operaciones aisladas concebidas como elementos sucesivos o
atomsticos.76 En el razonamiento jurdico, la axiomatizacin de la razn emprica puede llevarse a cabo
cuando las posiciones de los elementos equilibrados se enuncian como variables cuantificables.
En el caso del derecho, una de las formas ms exitosas y prcticas consiste en exponer las
enunciaciones legales como estructuras condicionales: Si X entonces Y. Por ello, pueden llevarse a cabo funciones veritativas y desarrollar analticamente posibilidades que la lgica operatoria emplea intuitivamente. Asimismo, la psicologa de la inteligencia jurdica se traslada a
la lgica analtica. El razonamiento emprico se formula a modo de ecuacin. Es una forma de
reinterpretar la lgica operativa (o de la accin emprica), en el marco de la teora elemental de la
lgica formal o analtica. Se trata de una cuantificacin simulada sobre una hiptesis operativa.
Es una reproduccin improductiva (no emprica) cuyas inferencias desarrolladas analticamente
pueden re-interpretarse empricamente.77
No perdamos de vista la premisa de Piaget:
La lgica es una axiomtica de la razn, de la que la psicologa de la inteligencia es una ciencia experimental correspondiente. 78 El diagrama lgico sirve para expresar lo que se llama lgica de relaciones, las cuales se
expresan mediante las frmulas condicionales: Si X entonces Y. Este modelo de representacin del razonamiento jurdico corresponde a una etapa psicogentica avanzada y es, sin duda, del tipo
de aquellos que implican relaciones simtricas. Es decir, dependiendo del valor de verdad que se
maneje en los valores del antecedente y consecuente, la hiptesis y las inferencias que se deriven
de ella pueden ser consideradas como proposiciones verdaderas o falsas. Las formas de inferencia
de las relaciones pueden desprenderse, para ser ms fcil su estudio, de los cuadrantes
presentados en la geometra cartesiana.
Tomemos en cuenta que la formalizacin de un enunciado proposicional jurdico bajo la
estructura cartesiana79
implica las siguientes consideraciones:
1) En el eje de las X, ubicaremos lo que en formulacin de proposicin condicional
llamamos el antecedente (A).
2) En el eje de las Y, ubicaremos lo consecuente (C). De este modo toda inferencia
formulada es fcilmente localizable en el plano cartesiano.
76
Piaget, Jean, La Utilidad de la Lgica en la Psicologa, Estudios sobre Lgica y psicologa, Ed. Alianza, Madrid, 1982, p.92-93. 77
Para el estudio de las simbolizacin a modo de variables cuantificables cfr. Otra cuantificacin simulada en Quine,
Willard, Van Oman, Filosofa de la Lgica, Ed. Alianza, Madrid, 1973, pp.129-130. 78
Piaget, Jean. Psicologa de la Inteligencia, Ed. Psique, Buenos Aires, Argentina,1969, p. 45. 79
Una estructura lgica cartesiana es propia de una etapa psicogentica avanzada y adems reversible.
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-A C A C
-A -C A -C
A
C
En el caso del cuadrante superior derecho, tanto el antecedente como el consecuente son
positivos o verdaderos. A la proposicin establecida con ambos valores positivos le llamaremos
diccin.80
En el cuadrante donde es negativo el antecedente y positivo el consecuente,
encontraremos lo que proposicionalmente Aristteles considerara una contradiccin.81
El
cuadrante donde el antecedente es verdadero y el consecuente es falso nos seala que estamos en
presencia de una contrariedad. Finalmente, en el ltimo cuadrante donde se niegan el
antecedente y el consecuente, encontramos lo que llamaremos el contrario sensu de la diccin.
-A C A C
-A -C A -C
A
C
DiccinContradiccin
Contrario
SensuContrariedad
Para entender cmo procede este modelo de lgica y la forma en que auxilia a la
argumentacin jurdica, pongamos primero como ejemplo el siguiente planteamiento que, aunque
no es legal, nos permite exponer de un modo sencillo cmo se llevan a cabo las inferencias
simtricas de relaciones. Cabe decir que el modo jurdico legal de inferir es exactamente igual
que el ejemplo siguiente.
Daniela toma un vaso con agua que yo le serv. Definida esta proposicin, podemos empezar a mostrar el modo de inferir el pensamiento
desde la perspectiva cartesiana. La proposicin diccin quedara enunciada del siguiente modo:
Diccin: Si yo le sirvo un vaso de agua a Daniela, entonces Daniela puede tomar el vaso de agua
que yo le serv.
80
Como sealando lo que afirmamos o estamos diciendo. 81
Aristteles, Top. I, 104 a, 20- 36.
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Contrario Sensu: Si yo no le sirvo el vaso de agua a Daniela, entonces Daniela no toma del vaso
de agua que yo le serv (porque yo no serv ningn vaso de hecho).
En ambos casos es claro que estamos en presencia de formulaciones verdaderas, donde el
consecuente procede por las condiciones del antecedente. Ahora veamos qu ocurre en el caso de
la contradiccin y la contrariedad.
Contradiccin: Yo no le sirvo ningn vaso de agua a Daniela. Entonces, Daniela se toma el vaso
de agua que yo le serv.
En este caso no podemos afirmar que sea coherente el hecho de que Daniela tome el vaso
de agua que yo le serv, si nunca le he servido tal vaso de agua a Daniela. Por esta razn, la
contradiccin siempre se presentar como falsa. Establecido que un consecuente se da a partir de
su antecedente, no tiene sentido que se afirme que un consecuente se puede presentar si no se
presenta el antecedente directo.82
Contrariedad: Yo le he servido un vaso de agua a Daniela, pero entonces Daniela no se toma el
vaso de agua.
Esta ltima figura es muy interesante porque en ella podremos encontrar la posibilidad de
que se presente el antecedente sin que ocurra el consecuente. Pueden darse las condiciones para
que algo ocurra, pero no acontecen necesariamente, porque finalmente existe el factor de la
libertad y la voluntad discrecional de llevar a cabo las consecuencias. Por tal razn, puede ocurrir
que, a pesar de servir el vaso de agua, Daniela simplemente no quiera tomarlo. Esto mismo es
posible en el caso de los eventos de orden jurdico. Pueden presentarse las condiciones previstas,
sin embargo, por ciertas condiciones adicionales, la diccin puede dar lugar a ciertas
excepciones. Por tal motivo, la contrariedad puede dar lugar a considerarse como verdadera,
aunque tambin guarda la posibilidad de ser falsa, si no rene los elementos necesarios para
presentarse como excepcin. Analizado de este modo, podemos sealar los criterios de verdad,
resultado del tipo de inferencia cartesiana. Diccin y Contrario Sensu siempre sern verdaderos,
mientras que la Contradiccin siempre ser falsa. La Contrariedad, dependiendo de las
condiciones del asunto, puede ser verdadera o falsa. En caso de ser verdadera, no violara la ratio
iuris del asunto mismo a tratar.
-A C A C
-A -C A -C
A
C
DiccinContradiccin
ContrariedadContrario
Sensu
Verdadero
Verdadero Probablemente
Verdadero
Falso
En su ltima obra escrita, Jean Piaget explica la razn de este tipo especial de tablas de
verdad, en orden a que la axiomatizacin de la lgica operativa no slo debe ser extensional, sino
intencional. El valor de verdad o falsedad de una relacin condicional, depende de la
significacin que le den los operadores de ella. 82
Esta relacin no corresponde a la figura de la bicondicionalidad, aunque podra ser confundida por varias personas.
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En este caso las significaciones englobadas en comprensin, que llamaremos inherencias, corresponden a imbricaciones en extensin, o sea a un
cierto tipo de tablas de verdad; pero parciales y determinadas por las
significaciones, con relativizacin de las negaciones con respecto a los
referenciales que constituyen esas imbricaciones. 83
Una vez comprendido este aspecto revisemos un enunciado normativo de la Constitucin de
los Estados Unidos Mexicanos. En el artculo 14 constitucional podemos leer la siguiente
afirmacin: A ninguna ley se dar efecto retroactivo en perjuicio de persona alguna.
La traduccin del enunciado constitucional a la formulacin cartesiana requiere que se
enuncie como condicional Si... entonces.... En este caso, la formulacin correcta sera: Si es en perjuicio de alguna persona a ninguna ley se dar efecto retroactivo. El enunciado formulado, ya
a modo de condicional, deber ser colocado en el rea que hemos denominado diccin. A partir de lo enunciado en la diccin llevaremos a cabo las inferencias en el plano cartesiano.
El contrario sensu de dicha afirmacin deber enunciarse negando tanto la primera como
la segunda enunciacin. Cabe sealar que mucha gente afirma de modo automtico que el
contrario sensu de esta afirmacin es Si es en beneficio de alguna persona, entonces se le dar efecto retroactivo. Esta inferencia es absolutamente errnea, si se pretende afirmar el contrario sensu. La razn lgica es la siguiente: Lo contrario a algo, no es su opuesto. Lo
contrario al valor P es P (no P). Lo contrario a un cumpleaos dira Lewis Carroll no es un velorio, sino un no cumpleaos. Lo contrario al amor, no es el odio, sino el desamor. Siguiendo
el ejemplo del filsofo Garca Bacca, lo contrario al ente es lo aus-ente, y no la nada. De ah que
digamos que lo contrario a perjudicar a persona alguna es no perjudicar a persona alguna. El hecho de que algo no perjudique no quiere decir que beneficie. Este razonamiento sera como
afirmar que si yo no amo a una persona, la odie. Eso resulta poco necesario e incoherente,
lgicamente hablando.
Explicado este punto, podemos decir que el correcto contrario sensu de la diccin: Si es en perjuicio de alguna persona entonces a ninguna ley se dar efecto retroactivo es Si no es en perjuicio de alguna persona, entonces puede darse efecto retroactivo.84 Esta es una inferencia correcta que respeta el espritu de la enunciacin constitucional. Aun en contrario sensu, no se
ampla la garanta que se limita a slo no ser retroactiva si perjudica. Por eso se mantiene
coherente su sentido. Por esta razn en el modelo cartesiano si la diccin es verdadera, el
contrario sensu, tambin ser verdadero. La contradiccin falsa: Si no es en perjuicio de alguna persona entonces se le dar efecto retroactivo. Esto es igual a decir que slo si es en perjuicio, se dar efecto retroactivo. De acuerdo a la verdad de la diccin, esta enunciacin de
contradiccin obviamente es falsa. Finalmente, consideremos que la contrariedad nos seala que estamos en presencia de una posibilidad de excepcin, siempre y cuando existan elementos
que lleven al juzgador a dar lugar a una conjetura de posible irregularidad de coherencia y
congruencia. Por esta razn, si hay condiciones que lo permitan, Si es en perjuicio de alguna persona entonces se dar efecto retroactivo a la ley.
Tal como observamos, gracias a la formalizacin geomtrica de un enunciado legal,
podemos inferir correcta