Download - 63949001 Antologia de La Filosofia
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ESCUELA NORMAL SUPERIOR
DE CD. MADERO, TAMPS. A.C.
DIVISION DE ESTUDIOS DE POSGRADO.
MAESTRÍA EN EDUCACION EN EL ÁREA DE DOCENCIA E INVESTIGACION.
MATERIA
“FILOSOFÍA DE LA EDUCACIÓN”
ANTOLOGÌA
CATEDRÁTICA
MTRA. MARIA GUADALUPE VENTURA GARCIA.
VERANO 2011
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MAESTRIA EN EDUCACION
AREA DE DOCENCIA E INVESTIGACION
Grupo: 2º A
INTEGRANTES:
ALVAREZ CORTES HILDA.
GUERRERO ROQUE ALVARO CAIN.
MOLINA PEREZ JOSE EMILIO.
RIVERA ROSALES MARIA DE JESUS.
RIVERA ROSALES NANCY VERONICA.
TAMALIZ CRUZ ALI.
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INDICE
PAG. I. INTRODUCCION A LA FILOSOFIA EDUCATIVA 6
1.1. Conceptualización 6 1.1.1. Mitología 7
1.1.1.2. Mitología Egipcia 8 1.1.1.3. Mitología Hebrea 8 1.1.1.4. Mitología Nahua 9 1.1.1.5. Mitología Griega 9 1.1.2. Filosofía 10 1.2. Ramas Fundamentales de la Filosofía 11
1.2.1. Metafísica 12 1.2.2. Ontología 12 1.2.3. Gnoseología 13 1.2.4. Lógica 14 1.2.5. Ética 14 1.2.6. Estética 15 1.3. Problematicidad 15 II. MARCO HISTORICO DE LA FILOSOFIA EDUCATIVA 20
2.1. Perspectiva General 20 2.1.1. Como disciplina sapiensal 20 2.2. Conservadurismo Educativo (Clásicos Griegos) 21
2.2.1. Los Presocráticos 21 2.2.2. Tales de Mileto 22 2.2.3. Anaximandro 22 2.2.4. Anaxímenes 23 2.2.5. Pitágoras y el pitagorismo 24 2.2.6. Heracliclo de Éfeso 24 2.2.7. Parmenides 25 2.2.8. Zenón de Elea 25 2.3. La Teoría de las Ideas 26
2.3.1. Origen de la Teoría de las Ideas 26 2.3.2. La Formulación tradicional 27 2.3.3. El dualismo sensible/inteligible 28
2.3.3.1 Lo inteligible 28 2.3.3.2. Lo sensible 29 2.3.4. La jerarquización de las ideas 29 2.3.5. La revisión crítica de la teoría de las ideas 29 2.3.6. La teoría de las ideas en el pensamiento de Platón 30 2.3.7. La Teoría del Conocimiento 30
2.3.7.1. La explicación del conocimiento en los filósofos anteriores 31 2.4. Realismo Aristotélico 36
2.4.1. Liberalismo 41 2.4.1.1. Principios Básicos 41 2.4.1.2. Liberalismo Político 43
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2.4.1.3. Liberalismo Económico 46 2.4.1.4. Resurgimiento del liberalismo en el siglo XX 49
2.5. El Naturalismo 51 2.5.1. Ideal Pedagógico de Rousseau 53 2.6. Análisis de la Filosofía de la Educación 64 III. CORRIENTES CONTEMPORANEAS DE LA FILOSOFIA
EDUCATIVA 64
3.1. Pragmatismo 65 3.1.1. Charles Sanders Pierce 70 3.1.2. John Dewey 74 3.1.3. William James 78 3.2. Marxismo 79 3.3. La visión de R.S. Peters 91 IV. PROBLEMÁTICA ACTUAL DE LA FILOSOFIA
EDUCATIVA 95
4.1. El Positivismo de Auguste Comte 96 4.1.1. Auguste Comte 96 4.1.2. El Carácter social del espíritu positivo 99 4.1.3. El Positivismo y la Filosofía 100 4.1.4. El Sentido del Positivismo 101 4.1.5. La Filosofía como modo de saber positivo 105 4.1.6. La Política Positivista 107 4.2. Pensamiento de Paulo Freire 114 4.3. Didáctica Critica 117
4.3.1. Propuesta didácticas instrumentalistas necesarias de plantear
118
4.3.1.1. Didáctica Critica (Bruner) 118 4.3.1.2. Didáctica Critica (Freinet) 120
4.4. Problemas de la Educación en México 124 V. CONCLUSIONES 130 VI. ANEXOS 135 VII BIBLIOGRAFIA 141
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INTRODUCCIÓN
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OBJETIVO GENERAL: Proporcionar al educando elementos filosóficos
que le permitan evaluar críticamente, el hecho educativo en toda su dimensión.
I.- INTRODUCCION A LA FILOSOFIA EDUCATIVA
Objetivo: Resaltar el alcance de la filosofía y de sus ramas en el
análisis educativo.
1.1. Conceptualización.
1.1.1.- Mitología
Mitología.- Mitos, leyendas, fabulas, esta explica el origen de las cosas
y la vida encontrar la causa de la que ha de ocurrir.
La mitología es la (concepción del mundo) de los hombres y las
civilizaciones, cada uno tiene su forma de entenderla; ya sea de manera
científica, filosófica, socio-política, moral, etc. La metodología es una
concepción del mundo cuyo hilo conductor es la fantasía, es una respuesta al
hombre sobre la existencia y la existente. La metodología es la narración de la
existencia de los seres.
Mitos.- La palabra mitos es un origen griego.
Mitos.- Su significado original era relatos, posteriormente los filósofos
acortaron el termino pasó a ser relato fantástico, inventado, falso. Tratado de
leyendas y fabulas. Los mitos antiguos que hoy conocemos son los que
llegaron a escribirse o fueron recogidos por fuentes religiosas, o de pinturas y
grabados de antiguos edificios.
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Los Personajes de los mitos son seres sobre humanos: Dioses,
Ángeles, héroes o demonios ya sean animales o seres que personifican los
fenómenos de la naturaleza.
Los seres del mito están ligados a lo cotidiano, la salida del sol, la
lluvia, el rayo, cosechas o reproducción de ganado.
Los mitos como las creencias religiosas, cumplían una función social, le
daban un sentido y explicación a los hechos que el hombre enfrentaba
cotidianamente.
Cuando el hombre amplia su conocimiento sobre la realidad el mito
pierde su función pero no desaparece, se integra a la religión, literatura o arte y
así llegan muchos de los mitos antiguos.
1.1.1.2.- Mitología Egipcia
Sumeria – Egipto – La Epopeya de Gilgamesh.
Narra la idea de la lucha y la unidad la armonía La femenino-Masculino
lo que no es destructivo sino fecunda.
Gilgamesh, rey de Unug o Erch desea ampliar su poder su gobierno es
de mano dura los súbditos piden a los dioses que alguien frene- enfrente a su
rey. Aruru selecciona a Enkidu estos se enfrentan pero nace una amistad así
dan muerte a un gigante después de esta proeza la diosa Inanna del Amor y
los combates declara héroe a Gilgamesh cuya fuerza y hermosura la atraen él
la rechaza y pide a su padre An Dios del cielo que lance un monstruo en contra
de ellos este los vence en el combate. Enkidú muere y Gilgamesh busca la
inmortalidad recure a Uta-napishtim Dios de la inteligencia, construyó una arca
para salvar a las especies animales y las semillas cuando ocurrió el gran diluvio
universal después el repobló la tierra Uta-Napishtim es inmortal, este entrega a
Gilga. Mesh un fruto rejuvenecedor, este es comido por una serpiente, ella se
transforma.
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1.1.1.3.- Mitología Hebrea
Los Hebreos.- (Formación de la Religión) Aquí la religión tiene un
papel muy importante h
acia el culto a Yahueh (Jehová) el reconocimiento de Yahueh se inicio
por Moisés-Judas como Dios de los Hebreos.
Yahueh tomo las virtudes y poderes se convirtió en señor del universo
y creador del hombre, los hebreos se consideraron como el pueblo escogido
por Yahueh creían que la tierra les había sido prometidos por el dios se creía
que entre dios y el pueblo se forma una alianza, esa elección le daba curso a la
vida social, en la finalidad de la historia.
Movimiento Profético.- los profetas del siglo VIII a.c. (Amós, Oseas,
Miqueas e Isaías) afianzaron el sentido social que tenia la voluntad de Dios.
Actuaron como representantes de los oprimidos y críticos del sistema social, el
pecado, la ofensa a dios eran la opresión, el despojo de los pobres, la
corrupción Yahueh los castigaría con: la destrucción, desolación para los
profetas del mundo de Yahueh era la rectitud personal.
En el año 586 a.c. Nabucodonosor II conquistó babilonia la religión
consolido su carácter de fe subjetiva la religión unió al pueblo así surge el
antiguo testamento o la Biblia es una complicación de todo lo que tenía
importancia y era digno de escribirse y conservarse. Es la historia de una
nación fundada en la religión, contiene moral, legislación, poesía y…. Mitos,
aquí se forma el mundo, Dios hace al hombre a imagen y semejanza de él le
soplo y le dio vida de una de sus costillas hace a la mujer y le dijo: Haré que
sean muchos los trabajos de tus preñeces, con dolor parirás los hijos y a tu
marido estará sujeta tu voluntad tu voluntad.
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La Biblia no tiene fechas, los estudios los ubican por medio de
referencias. Ponen en duda esto o lo otro, lo que no problematizan es la
belleza sobrecogida de los mitos.
1.1.1.4.- Mitología Nahua- El Origen del Sol
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Era de noche hacia falta el amanecer, en Teotihuacán se reunieron los
dioses para ver cuál de ellos hacia amanecer Técuciztécatl se ofreció hacia
falta otro. Nadie quería y señalaron a Nanahuatzin el acepto lo que se le ofreció
hicieron penitencia se encendió el fuego en la roca divina, se le dio a
Tecuciztécatl que se arrojan el titubeo 4 veces, se le pidió a Nanahuatzin él no
titubeo enseguida Tecgciztecatl se arrojo, esperaban con ansia la salida del sol
no sabían por donde saldría pero salieron dos soles por el oriente los dioses no
esperaban esto uno de ellos golpeó la cara del sol Tecuciztécatl con un conejo
le hirió la cara y así le quedó estampado y oscureció su rostro así se forma la
luna.
1.1.1.5.- Mitología Griega
“Zeus es el padre de los dioses y los hombres”
Toma forma y funciones ej.: Zeus Patroos protector de la familia varias
diosas fueron sus esposas entre ellas era Diosa de la vegetación y las flores,
Atenea Diosa de la sabiduría, Afrodita hija de Zeus y Dione Diosa de la Belleza
y del Amor –voluptuosa, voluble estimula la unión carnal.
La Ilíada.- Es el relato de la disputa entre Alquiles con Agamenón,
Aquiles fue ascendido ofendido por Agamenón pues lo despojo de la doncella
Briseida pues el Batio saqueo de Tebas, Zeus la había destinado a la a
Agamenón, Aquiles pide ayuda a su diosa Tetis para que interceda por el ante
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Tetis Zeus induje a Agamenón a iniciar una guerra de estos de derivan muchas
calamidades como el duelo entre Menelao y Paris, Patrosis y Héctor, los
funerales de Héctor. Y la Ilíada está compuesta por 24 Rapsodas trascurren las
acciones entre Dioses y héroes, sentimientos, paciones y actitudes.
La Odisea 23 Rapsodias Odisea Rey de Ítaca, viajo durante 20 años su
esposa Penélope y su hijo Telémaco, Odiseo llego a isla donde abordaban
cíclope peleo y gano Eolo Dios de los Vientos les regalo un cuerno de buey ahí
iban encerrados los vientos. Al regresar a su casa se encontró a los
pretendientes de Penélope quien se la pasaba tejiendo de día y los destejía de
noche.
1.1.2.- Filosofía
Filo.- Amor Sofía.- Sabiduría
1.- La Filosofía como Amor a la Sabiduría. Se expresa por medio de la
Poesía, la metáfora, la parábola y el relato, el filósofo es el amante de la
sabiduría.
2.- Como el estudio de las causas supremas del universo. De acuerdo
con Aristóteles la Filosofía es la Ciencia de todas las cosas desde el punto de
vista de las causas supremas, como la esencia y Dios.
3.- En cuanto a ciencia. La filosofía es una ciencia. Ciencia es un
paradigma fundamentado, desde el punto de vista racional no experimental.
4.- El Objetivo de la materia de Filosofía.- Es todas las cosas, estudio
del universo en conjunto se aprecia en la m metafísica que estudia el ser de los
entes.
5.- Objeto formal.- Significa estudio en un tema concreto, como las
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causas supremas, ósea la esencia de las cosas y Dios como creador del
universo.
6.- Como Cosmovisión.- Es el conjunto de conceptos, como a
principios, normas y valores que un individuo absorbe a lo largo de su vida y
que apliquen a sus juicios a ser de las cosas y las personas que lo rodean,
cada persona tiene su filosofía.
7.- Como criterio axiológico.- proporciona un peso y valor especial a las
cosas y personas que lo rodean de acuerdo a la educación que recibe, gracias
a ella una persona construye su propia cosmovisión. Filosofar Significa revisar
esas letras si es necesario cambiarlas o suprimir.
1.2.- Ramas Fundamentales de la Filosofía
Durante mucho tiempo, todo el conjunto de conocimientos acumulados
por la humanidad formaba parte de la filosofía. En tiempos de Aristóteles (384-
322 a.C.), las partes integrantes de la filosofía eran la lógica, la física y ética,
las que tenían mucha amplitud.
En la Edad Media, el conocimiento se dividía en dos partes: teología o
conocimiento acerca de Dios y filosofía, que designaba al conocimiento sobre
la naturaleza.
Con la evolución y el crecimiento de cada esfera particular de
conocimientos, distintas disciplinas fueron cobrando importancia por sí mismas,
y se convirtieron en ciencia autónoma y se desgajaron del tronco común.
Conforme se independizaban distintas ciencias, se fue formando una
problemática específicamente filosófica. Se formaron distintas disciplinas
filosóficas como:
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La Ontología (Doctrina del Ser) Estudia causas internas de todo ente.
La Gnoseología o (Teoría del conocimiento).
La Lógica o (Ciencia de las formas del pensamiento recto).
La Ética (Teoría de la moral) (Filosofía Práctica).
La Estética (Teoría de la naturaleza de lo bello) (Filosofía de la
belleza).
1.2.1.- Metafísica
Término de origen griego (meta physika), indico lo que está más allá de
la física. La metafísica debe descubrir lo que está detrás de la naturaleza, lo
que es su esencia y su principio, lo que subyace en el fondo de toso lo que es.
Metafísica era el nombre de los libros filosóficos de Aristóteles, él les
llamaba “primera filosofía”.
La evolución de las ciencias y compenetración de la filosofía con los
objetos reales, dejó a la metafísica confinada en el espacio de los “primeros
principios”. La metafísica fue identificada como teoría de los principios
inalcanzables, existentes – o sólo imaginados – en el más allá del mundo
visible. El método metafísico se convirtió en freno del desarrollo del
pensamiento científico.
1.2.2.- Ontología
Las raíces griegas de esta palabra, que en la filosofía comenzó a
usarse en el siglo XVII, son: ontos el ser y logos, tratado. El objeto de esta
teoría filosófica es el ser en general, el ser como tal. Aristóteles la definía como
la teoría del ser del existente. El existente es todo lo que existe
independientemente nuestra conciencia.
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Para Parménides de Elea (540-470 a.C.), las cosas no son movimiento
sino ser. Este Filósofo hizo una elaborada construcción de razonamientos, que
quedan reducidos así: el ser, es; el no ser, no es. Todo lo que se aparte de
este principio es erróneo. Este principio llevó al Eléata a otras conclusiones
fundamentales: el ser es único, es idéntico a sí mismo, es inmóvil e inmutable.
El ser es ilimitado y eterno, no tiene ni principio ni fin. Las propiedades
esenciales del ser son las mismas que las del pensar.
Con el desarrollo de las ciencias se hizo evidente el carácter abstracto
y dogmático de la ontología, la que fue duramente criticada por los materialistas
franceses del siglo XVII y por sus coetáneos del idealismo clásico alemán.
1.2.3.- Gnoseología
Del griego gnosis (conocimiento) y logos (tratado) – Doctrina o teoría del
conocimiento. Los asuntos principales que se plantean a la gnoseología son el
de la naturaleza del conocimiento, sus fuentes, sus fundamentos; las formas y
métodos del proceso del conocer y el problema de la verdad. En la teoría del
conocimiento también se bifurcaron las líneas del idealismo y el materialismo.
Varias escuelas del idealismo filosófico considerar que el conocimiento
es lo primario y que de él deriva el mundo objetivo. Así lo expusieron Platón,
George Berkeley, G.W.F. Hegel y otros. Hay filósofos idealistas que sostienen
que no es posible que el hombre conozca nada que este existe por sí mismo.
Esta posición agnóstica fue compartida entre otros por Emmanuel Kant y David
Hume.
En la teoría del conocimiento, la línea del materialismo la expresan
filósofos como Demócrito, Thomas Hobbes, John Locke. Se afirma que lo
primero es el ser y que el conocimiento es un reflejo del ser.
Dar más importancia a una u otra vía del conocimiento, condujo a la
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formación de varios métodos en la doctrina del conocimiento, entre ellos están:
el empirismo, cuya base es el conocimiento sensorial; el racionalismo, que se
apoya en el pensamiento abstracto, en el conocimiento teórico; el
irracionalismo, que opone la intuición al discurrir de la razón.
El materialismo moderno llama el hecho de que la actividad humana es
la base del conocimiento. El desarrollo del conocimiento no tiene límites pues la
práctica humana cognoscente se amplía constantemente, con el apoyo de las
las ciencias se fortalecen diferentes formas del conocimiento y se perfeccionan
los medios de la investigación científica.
1.2.4.- Lógica
Disciplina que investiga las leyes y formas del pensar, así como los
procedimientos para desenvolver el saber y para elaborar los sistemas del
conocimiento científico.
Las bases de la lógica fueron establecidas desde Platón, Demócrito,
Aristóteles y Zenón de Citium. El desarrollo histórico de esta ciencia tomó dos
sendas; una llevó hasta la lógica dialéctica y la otra condujo a la lógica formal y
la lógica matemática.
La lógica estudia los métodos de la investigación y del conocimiento:
análisis y síntesis; inducción y deducción; abstracto y concreto; histórico y
lógico.
La lógica investiga las formas del pensamiento en que se fijan los
resultados del conocimiento: conceptos, juicios, razonamientos,
demostraciones, etc.
1.2.5.- Ética
Teoría de la moral, fundamentación de los sistemas morales, de las maneras
distintas de comprender conceptos como el bien, el mal, la justicia, el deber, la
felicidad, etc.
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La ética como estudio filosófico de los hábitos, de la conducta del
hombre, se formó con la propia filosofía y ha sido ocupación de los más
destacados pensadores.
El idealismo concibe al progreso moral como resultado de los buenos
propósitos del individuo, de su auto perfeccionamiento y de su fidelidad a los
mandatos divinos.
La ética materialista liga el progreso moral de la humanidad a la
modificación en las condiciones de vida de los hombres.
1.2.6.- Estética
Ciencia que estudia todos los aspectos de la captación del mundo por el
hombre de acuerdo a las leyes de la belleza, por ejemplo su capacidad para
apreciar lo bello y lo feo, lo elevado y lo ruin, lo trágico y lo cómico.
En la actitud estética del hombre existe un aspecto objetivo: las
propiedades estéticas de la realidad o de los valores, y un aspecto subjetivo: la
conciencia estética (sentimientos, emociones, ideales, gusto estético, etc).
“El arte refleja tanto los valores estéticos objetivos como la actitud del
artista.”
1.3.- Problematicidad
El objetivo de este escrito consiste en abrir interrogantes. Todas estas
con la firme intención de crear un espacio de curiosidad. Y con ello propiciar el
interés sobre los temas.
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En si los problemas básicos de la filosofía como tal abarcan campos
tan mencionados y profundos que nos resultan familiares, pero con el problema
de que casi nunca nos ponemos de acuerdo con relación al significado de las
mismas. Por ello aquí agrupo a los problemas que forman la base de la filosofía
y a partir de los cuales la misma es ramificada para buscar solucionar cada uno
de ellos.
A) El Problema de la esencia y la identidad del ser humano.
Tarde o temprano, la gente se plantea una pregunta crucial en su vida:
¿Quién soy yo? ¿Cuál es mi identidad personal? ¿En qué consiste mi
característica más propia como ser humano? ¿En qué reside la dignidad propia
de la naturaleza humana? Desde hace más de 20 siglos Aristóteles respondió
diciendo que el hombre es un animal racional. En el extremo opuesto, Jean-
Paul Sarire, en este siglo ha insistido en que lo importante no es la esencia del
hombre, sino su existencia, e insiste en la libertad como su principal
característica. Entre esos dos polos, muchas respuestas se han dado a la
pregunta acerca de lo propio del ser humano.
B) El Problema de la existencia auténtica.
En el siglo XX ha tomado auge la Antropología filosófica, cuyo tema
central es un análisis de las características propias de todo ser humano. Cabe
aquí la pregunta sobre la existencia auténtica del hombre. Se trata de uno de
los problemas más urgentes que puede afectar a cada uno; de su resolución
depende la orientación general en las actitudes y en la conducta de la persona.
¿Es la libertad lo esencial en la vida humana? ¿Son, acaso, los valores
morales lo más importante? ¿En qué consiste la autenticidad? ¿Cómo se
puede realizar la intercomunicación personal? ¿Cómo se llega a degradar el
nivel propio de la existencia auténtica? ¿En qué consiste y cómo se logra la
felicidad humana? Tales son las principales cuestiones que se pretenden
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resolver dentro de esta disciplina.
C) El Problema del valor.
Con frecuencia la vida plantea interrogantes que requieren una cierta
claridad en cuanto a las prioridades, las jerarquías y los principios que se van a
aplicar en el momento de decidir. En tales circunstancias surge el
planteamiento típico de la filosofía: ¿Qué es el valor? ¿Cómo conocemos el
valor? ¿Los valores son relativos y cambian con la época y las culturas? ¿Es
posible alcanzar un cierto nivel de objetividad en nuestra apreciación de los
valores? La ética rama filosófica se plantea las siguientes cuestiones: ¿En qué
consiste la bondad y la maldad de los actos humanos? ¿Se puede justificar la
obligatoriedad de ciertas normas? ¿Por qué sucede con tanta frecuencia el
fenómeno paradójico del individuo que juzga un acto como bueno y, sin
embargo, escoge lo malo? ¿Existen leyes verdaderamente universales, que
atañen a todo individuo? Se llama Axiología el tratado filosófico que se encarga
del estudio de la esencia y el conocimiento de los valores. La Ética es la rama
filosófica encargada de estudiar la conducta humana en su aspecto de bondad
o maldad. La Estética filosófica trata de la esencia y los fundamentos del arte y
la belleza.
D) El Problema de la libertad.
La gente se queja con frecuencia por su falta de libertad. Sobreviene
entonces la oportunidad para una reflexión acerca de la esencia de la libertad.
¿Qué es propiamente la libertad? ¿Cuáles son las limitaciones normales de la
libertad humana? ¿Cómo es posible que haya libertad si aceptamos la
existencia de leyes físicas, biológicas y sociales que afectan a la conducta
humana? ¿Existen grados de libertad? Por otro lado, existe el fenómeno del
miedo a la libertad. No faltan individuos que, consciente o inconscientemente,
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huyen de las situaciones que les proporcionarían mayor grado de libertad.
E) El Problema del amor.
Este es uno de los temas más favorecidos en las conversaciones
cotidianas, en la literatura, el cine, el teatro y la televisión, A la filosofía, le
incumbe reflexionar a fondo acerca de la esencia del amor. ¿Qué es
propiamente el amor? ¿En qué consiste esa fuerza qué enlaza y armoniza a
dos seres aún en medio de penalidades y contradicciones? La palabra amor se
ha utilizado para designar una enorme gama de fenómenos humanos. Sin
embargo, es muy diferente el amor con que un niño quiere a su
madre, el amor entre dos jóvenes enamorados y el amor entre dos cónyuges
maduros. Se pueden distinguir, por lo menos, doce maneras diferentes de
entender el amor. Es necesario aprender a amar.
F) El Problema de la verdad.
Las discusiones que sostiene un individuo pretenden defender la
verdad. En ocasiones sólo quieren afirmar “la propia verdad”, aceptando que el
interlocutor también tiene derecho a defender su propia verdad. Cuando dos
personas no llegan a un acuerdo, finalmente se preguntan: ¿Qué es, pues, la
verdad? ¿Qué es lo propio de una tesis para qua pueda ser calificada como
verdadera? ¿Nuestras facultades Cognoscitivas están en condiciones para
alcanzar efectivamente la verdad? El escepticismo considera que es imposible
alcanzar la verdad, Veremos con detalle las diversas posturas que se han
levantado alrededor de esta temática. Se llama Crítica o teoría del
Conocimiento a la rama filosófica que trata el problema de la verdad. Por otro
lado, la Lógica establece las reglas del raciocinio correcto y de todo
pensamiento congruente consigo mismo.
G) El Problema de la ciencia.
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Actualmente la ciencia goza de un prestigio envidiable. Tal parece que
se trata de un conocimiento superior, el único verdaderamente confiable. La
pregunta es, pues: ¿En qué reside la esencia de un conocimiento científico?
¿Por qué ha sucedido que, a pesar de todo, las ciencias han modificado
algunas de sus tesis? ¿Cómo es posible que existan diversas corrientes dentro
de una misma disciplina científica? ¿Puede el hombre aspirar a un
conocimiento objetiva, universal y absolutamente válido? Últimamente se ha
originado la Epistemología como una disciplina que trata el problema de la
fundamentación de la ciencia.
H) El Problema de la constitución del universo.
El problema que ocupó a los primeros filósofos en la antigua Grecia era
éste: ¿Cuál es la esencia que constituye en el fondo a los seres de este
mundo? ¿Cuál es la esencia de la materia? ¿Existe algo en esencia diferente a
lo puramente material? ¿Cómo se originó el universo? ¿Cuál es la meta en la
evolución del universo? ¿Cuál es la esencia del espíritu? Es famosa la
pregunta de los marxistas: ¿Qué es primero, la materia o el espíritu?
Tendremos oportunidad de revisar algunas soluciones que se han dado a estas
cuestiones. La Filosofía de la Naturaleza se encarga de estudiar esta temática.
I) EL Problema del ser.
La pregunta acerca del ser se refiere a los estratos más profundos en
la constitución de todas las cosas. La disciplina que se encarga de esta
investigación ha recibido el nombre de Metafísica. Se reconoce a Aristóteles
como el autor del primer tratado que lleva este nombre. Sin embargo, la
temática propia de la Metafísica ha sido cultivada con anterioridad en la
filosofía oriental. En la actualidad la Metafísica es la disciplina filosófica más
incomprendida por la gente en general. En ocasiones se la ha confundido con
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una rama esotérica (Esotérico quiere decir oculto, a decir, temática que no se
expone públicamente sino que se dirige solo a unos cuantos iniciados,) La
palabra Ontología (on, ontos = ser) puede ser un sustituto muy apropiado
cuando se rechazan, las connotaciones de lejanía y esoterismo que se Suelen
asociar a palabra Metafísica.
J) El Problema del absoluto
Estamos frente a la cuestión culminante de la filosofía. Los seres del
universo ¿Son todos perecederos? ¿Existe algo absoluto que trascienda a
todas las cosas? ¿Existe un creador del universo? ¿Es posible mantener una
relación con un ser trascendente? Las religiones han dado ya su propia
respuesta. La filosofía tiene sus propias respuestas ante las preguntas acerca
de la esencia y la existencia de Dios. La rama filosófica que trata estos temas
ha recibido el nombre de Teología natural o Teodicea.
II.- MARCO HISTÓRICO DE LA FILOSOFÍA
EDUCATIVA
Objetivo.- Comprender la necesidad de tener un marco filosófico que
justifique nuestro quehacer educativo
2.1.- Perspectiva General
La Filosofía Educativa puede contemplarse desde distintas perspectivas.
2.1.1.-Como disciplina sapiencial.
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Disciplinas Filosóficas superiores: La Ética y la Antropología: son
referentes directas a la filosofía, por tener el estudio filosófico de la educación.
El punto de partida no radica en el saber sino en la reflexión sobre la
experiencia pedagógica inmediata.
Estas disciplinas no solo se encargan de la educación como estudio,
sino del sujeto y de la propia acción educativa. Con la finalidad de saber: ¿Para
qué se educa?
La Filosofía de la Educación tiene una corta historia. Su existencia llega
apenas a un siglo de existencia. Esta juventud determina su actual
consistencia, pues su nacimiento y constitución están determinados por el
relativismo dominante en el siglo XX, relativismo general del saber, pero
acuciante precisamente en la Ética y en la Antropología.
Se dice que según sea el modelo del hombre (Según sea su ética y
antropologías profesadas, así será la concepción de la educación, y así será su
filosofía.
2.2.- Conservadurismo Educativo (Clásicos Griegos).
La tradición atribuye la invención del término filosofía al griego Pitágoras,
ya que él prefería decirse filósofo y no sabio, es decir, aspirante a la sabiduría.
Una de las características fundamentales que definen al hombre es su
constante interrogación acerca de si mismo y de las cosas que lo rodean.
Resultado de ello han sido los distintos modelos concebidos por cada cultura a
lo largo de la historia a fin de procurar una explicación convincente de la
realidad para su asimilación por parte del todo social.
Los primeros modelos se expresaron en términos míticos. A finales del
siglo VII a. C. Comenzaron a surgir en el seno de la civilización griega
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explicaciones basadas en términos racionales. Nacía así la filosofía,
precisamente como crítica del mito.
El hombre construye sus representaciones míticas asimilando lo
desconocido a lo conocido. Lo sobre natural perdió todo sentido, las potencias
divinas de los dioses del Olimpo ya no servían para explicar la naturaleza, que
se convirtió en objeto de reflexión por sí misma.
2.2.1.- Los presocráticos.
Se conocen con el nombre de presocráticos a los pensadores griegos
cronológicamente anteriores a Sócrates (Tales, Heráclito, Parménides, los
pitagóricos, etc.) y a los que, siendo contemporáneos suyos (Anaxágoras y
Demócrito), se ocupan del mundo e intentan descubrir su unidad racional
esencial. Desarrollaron un vocabulario original, sobrio y severo, creando una
nueva racionalidad que les fue diferenciando de los mitólogos. Conocieron los
desarrollos de la sabiduría egipcia y babilónica en el campo de la astronomía,
la geometría y la aritmética.
Los griegos distinguían dos tipos de realidades: una natural, que se
desarrollaba por sí misma y la otra artificial, producto de la actividad humana y
que no tenía la capacidad de auto desarrollarse.
2.2.2.- Tales de Mileto (h. 624-h. 546 a. c.)
Se considera como uno de los siete sabios de Grecia. Se ganó la vida
como comerciante vendiendo aceitunas. Una anécdota narrada por Platón nos
lo presenta como un sabio distraído que, mirando los astros, cayó en un día un
pozo, lo cual provocó las burlas de sus conciudadanos.
El primer filósofo de la historia ya fue, pues, ridiculizado por sus
preocupaciones, alejadas del sentido común y de la vida cotidiana. Sin
embargo, Tales no careció de sentido práctico: dirigió en Mileto una escuela
23
náutica y construyó un canal. Predijo un eclipse total. Sostuvo que el principio
constitutivo de las cosas era el agua.
El principal mérito de Tales fue el acuñar el concepto de principio
originario del que proviene todo ser.
Tales pensaba que la Tierra era un disco plano rodeado por el océano, y
que además flotaba sobre este, tenía una visión antropomórfica del mundo.
Creyó que todo lo que se mueve tiene alma, lo cual le indujo a creer que el
hierro la tenía, puesto que era atraído por el imán. Esta doctrina se conoce con
el nombre de hilozoísmo. Según el hilozoísmo, la materia esta en sí misma
dotada de vida, sin que intervengan principios animadores extrínsecos.
2.2.3.- Anaximandro (h.611-h. 546 a. C.)
Seguidor de Tales y habitante también de Mileto, es suyo el primer
principio filosófico de Occidente que se conserva: sobre la naturaleza.
Demostró cierto saber práctico: construyó un mapa de las tierras
conocidas en su época, un globo celeste y un reloj solar.
Anaximandro creía que la respuesta de Tales era ilógica, opinando que
era absurdo suponer que las cosas de naturaleza seca (el fuego por ejemplo)
proceden del elemento húmedo, que es su contrario. Así pues, para solucionar
este problema imaginó que todas las cosas provenían de una sustancia eterna,
completamente indeterminada, esto es, sin ninguna cualidad definida, y que por
tal razón, podría llegar a adquirir cualquier determinación y convertirse en
cualquier cosa de este mundo.
La concepción de Anaximandro se conoce en filosofía con el nombre de
monismo porque imagina que todo procede de una única realidad de fondo.
Las cosas del mundo se engendran a partir del apeiron y, cuando mueren,
vuelven al apeiron. Creyó que existe justicia cósmica que tarde o temprano
restablece el equilibrio, con lo que desaparece la injusticia.
24
Esta noción de justicia cósmica prefigura la idea de que la naturaleza
esta denominada por leyes, idea de fructíferas consecuencias en el
pensamiento del filósofo.
La tradición le atribuye el primer modelo geométrico de la estructura del
universo. La Tierra es un cilindro chato que ocupa el centro común de varios
círculos, sobre los que se encuentran las estrellas, la Luna y el Sol. En la cara
con vida del cilindro aparecen los seres humanos. Anticipándose a Darwin,
Anaximandro consideró que la especie humana procede por evolución de otra
especie inferior (los peces).
2.2.4.- Anaxímenes (h 588-h 534 a. C.)
Discípulo de Anaximandro y ciudadano de Mileto, el principio de todas las
cosas es para Anaxímenes el aire, sustancia móvil, infinitamente extensa pero
bien definida cualitativamente. El aire es aquello que permite existir a todos los
seres vivos, es el fluido que da la vida. Sus variaciones y transformaciones
hallan en el origen de las condenaciones (agua, tierra) y dilataciones (aire,
fuego). Anaxímenes concibe el mundo como algo vivo: “y así como nuestra
alma, que es aire, nos mantiene unidos, de la misma manera el viento envuelve
a todo el mundo”.
2.2.5.- Pitágoras y el pitagorismo.
Pitágoras fue un jonio nacido en la isla de Samos. Según parece no escribió
nada, pero fundó una suerte de comunidad de estructura religioso-científica,
intensamente impregnada de ascetismo y misticismo. En el seno de la
hermandad, el estudio de las matemáticas fue considerado como un medio de
perfeccionamiento espiritual.
25
La sociedad pitagórica, admitía en plena igualdad de derechos a hombres y
mujeres. Sus descubrimientos científicos o matemáticos eran considerados
como hallazgos colectivos o atributos a Pitágoras. Estos descubrimientos eran
propiedad de la escuela y no podían ser revelados al vulgo (en virtud de la ley
del secreto que debían guardar sobre las doctrinas de la comunidad). Los
pitagóricos creían en la reencarnación. El fin último del hombre consistía en
evitar la reencarnación y volver a vivir entre los dioses.
Para los pitagóricos, los números son los principios de todas las cosas,
cambiando su representación, normalmente designados con letras del alfabeto,
por una con puntos, estableciendo una estrecha relación entre matemáticas y
geometría. Suponían que todos los números procedían del uno, que los pares
eran indeterminados, femeninos y rectangulares, y los impares, eran
determinados, masculinos y cuadrados. El 10 era el número sagrado por
excelencia.
2.2.6.- Heráclico de Éfeso (h. 540-h. 480 a. C.)
De carácter retraído se retiró a vivir en las montañas, donde se dedicó a la
meditación, alimentándose de hierbas.
Heráclico, consideraba la realidad como algo esencialmente móvil y fluyente.
Expresó esta idea mediante una metáfora “no podemos bañarnos dos veces en
el mismo río, porque sus aguas fluyen constantemente y el río deja de ser el
mismo que era antes”. Todo pasa constantemente de un estado a su contrario,
de la vida a la muerte, de lo seco a lo húmedo, etc. Todo cambia, pero no de
forma anárquica, sino siguiendo un orden que impone ley. Para Heráclito, el
origen de esta realidad en flujo continuo es el elemento fuego: “Este cosmos no
fue hecho por dioses o por los hombres, sino que siempre fue, es y será fuego
eterno, que se enciende conforme a medida y se extingue conforme a medida”.
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2.2.7.- Parménide (h. 540-h 450 a. c.)
Nació y vivió en Elea. Preocupado por la política, parece ser que
intervino directamente en el gobierno de su ciudad. Lo que se conserva de su
obra se halla en un extenso poema hexamétrico titulado también “Sobre la
naturaleza”.
La preocupación de Perménides no fue tan naturalista o físico como la
de sus predecesores. Con el nace una nueva disciplina filosófica: la ontología o
ciencia que estudia el ser. A partir de Perménides, la filosofía tratará del ser y
de la verdad. El ser es la única cualidad que tienen en común todos los objetos
del mundo: unos son blancos, otros son negros; unos suaves, otros rugosos;
unos circulares, otros rectos, pero todos los objetos son, todos poseen la
cualidad de ser.
2.2.8.- Zenón de Elea (s. v a C.)
Originario de Elea, la tradición afirma que fue discípulo de Parménides,
gracias a la escuela eleática recibió la forma conocida con el nombre de
erística o diabética (de eris, lucha) es el arte del diálogo y de la disputa
filosófica.
La escuela eleática dio más importancia a los resultados de la
argumentación abstracta que a los testimonios de los sentidos (racionalismo
epistemológico). Así, por ejemplo, Zenón negó la existencia del movimiento
porque es imposible imaginárselo, dado a que el espacio es divisible en un
número infinito de puntos y para moverse de un punto a otro habría que
atravesar infinitos puntos, lo cual no es posible.
27
2.3.- La Teoría de las Ideas
Datos bibliográficos:
Arístocles, apodado Platón a causa de sus grandes espaldas, nació en
Atenas en el 427 a. de C. (comienzo de la guerra del Peloponeso) y muere en
347 a. de C. Desciende de noble estirpe; recibe la más refinada educación
artística y científica de su tiempo. Sócrates ha influido decisivamente en su
vida, lo aparta de sus aficiones poéticas para llevarlo al campo de la
investigación filosófica.
2.3.1.- Origen de la teoría de las ideas
Existen dos corrientes de influencia en la elaboración de dicha teoría:
por una parte, las enseñanzas teocráticas, centradas en la búsqueda de la
definición universal, habían apuntado la necesidad de destacar el elemento
común entre todos los objetos de la misma clase. Ese objeto común o término
del conocimiento, que en Sócrates no dejaba de ser un término lingüístico, es
convertido por Platón en algo independiente del conocimiento y de lenguaje: de
la afirmación de la necesaria realidad de ese objeto común Platón concluye que
debe existir independientemente de la mente que lo concibe, y lo llama Idea.
Por otra parte, las investigaciones de los filósofos anteriores, tanto de las
escuelas jónicas como de las escuelas itálicas, habían puesto de manifiesto
también la necesidad de reconocer la unidad en la diversidad, a través de la
búsqueda de la verdad. La preocupación socrática, limitada estrictamente a los
objetos éticos, es extendida por Platón a la investigación de los objetos
naturales: del mismo modo que debe existir una definición universal de “virtud”,
ha de existir una definición universal de todos y cada uno de los componentes
de la realidad. Dado que Platón hace del término de esa definición universal
una Idea, una realidad subsistente, termina por postularla detrás de los objetos
éticos y de los objetos naturales.
28
2.3.2.- La formulación tradicional
Tradicionalmente se ha interpretado la teoría de las ideas de la siguiente
manera: Platón distingue dos modos de realidad, una, a la que llama inteligible,
y otra a la que llama sensible. La realidad inteligible, a la que denomina “Idea”,
tiene las características de ser inmaterial, eterna, (ingenerada e indestructible),
siendo, por lo tanto, ajena al cambio, y constituye el modelo o arquetipo de la
otra realidad, la sensible, constituida por lo que ordinariamente llamamos
“cosas”, y que tiene las características de ser material, corruptible, (sometida al
cambio, esto es, a la generación y a la destrucción), y que resulta no ser más
que una copia de la realidad inteligible.
La primera forma de realidad, constituida por las Ideas, representaría el
verdadero ser, mientras que de la segunda forma de realidad, la realidades
materiales o “cosas”, hallándose en un constante devenir, nunca podrá decirse
de ellas que son verdaderas. Además sólo la Idea es susceptible de un
verdadero conocimiento o “episteme”, mientras que la realidad sensible, las
cosas, solo son susceptibles de opinión o “doxa”. De la forma en que Platón se
refiere a las ideas en varias de sus obras como en el “Fedón” (el alma
contempla, antes de su unión con el cuerpo las Ideas) o en el “Timeo” (el
Demiurgo modela la materia ateniéndose al modelo de las Ideas), así como de
las afirmación aristotélica en la “Metafísica” según la cual Platón “separó” las
Ideas de las cosas, suele formar parte de esta presentación tradicional de la
teoría de las Ideas la afirmación de la separación entre lo sensible y lo
inteligible como una característica propia de ella.
2.3.3.- El dualismo sensible/inteligible
Una de las primeras consecuencias que se ha extraído de esta
presentación de la teoría de las Ideas es, pues, la “separación” entre la realidad
29
inteligible, llamada también mundo inteligible (“Kósmos noetós”) y la realidad
sensible o mundo visible (“Kósmos horatós”), que aboca a la filosofía platónica
a un dualismo que será fuente de numerosos problemas para el mantenimiento
de la teoría, y que Aristóteles señalará como uno de los obstáculos
fundamentales para su aceptación.
2.3.3.1.- Lo inteligible
En cuanto a las Ideas, en la medida en que son en término de la
definición universal, representan las “esencias” de los objetos de conocimiento,
es decir, aquello que está comprendido en el concepto; pero con la
particularidad de que no se pueden confundir con el concepto, por lo que las
ideas platónicas no son contenidos mentales, sino objetos a los que se refieren
los contenidos mentales designados por el concepto, y que expresamos a
través del lenguaje. Las Ideas son únicas, eternas e inmutables y, al igual que
el ser de Parménides, no pueden ser objeto de conocimiento sensible, sino
solamente cognoscibles por la razón. No siendo objeto de la sensibilidad, no
pueden ser materiales. Y sin embargo Platón insiste en que son entidades que
tienen una existencia real e independiente tanto del sujeto que las piensa como
del objeto que son esencia. Además, las Ideas son el modelo de las cosas, por
lo que la realidad sensible es el resultado de la copia o imitación de las Ideas.
2.3.3.2.- Lo sensible
La realidad sensible se caracteriza por estar sometida al cambio, a la
movilidad, a la generación y a la corrupción. Aunque se grado de realidad no
pueda compararse al de las Ideas ha de tener alguna consistencia, y no puede
ser asimilada simplemente la nada. La teoría de las Ideas pretende solucionar,
entre otros, el problema de la unidad en la diversidad, y explicar de qué forma
30
un elemento común a todos los elementos de la misma clase, su esencia,
puede ser real.
2.3.4.- La jerarquización de las ideas
El primer rango le corresponde a la Idea del Bien, tal como no lo
presenta Platón en la “República”, a continuación vendrían las Ideas de los
objetos éticos y estéticos, seguida de las Ideas de los objetos matemáticos y
finalmente de las Ideas de las cosas.
2.3.5.- La revisión crítica de la teoría de las ideas
En los diálogos de vejez, especialmente en los llamados diálogos críticos
y, entre ellos, en el “Parménides”, Platón revisa la teoría de las Ideas,
especialmente en lo referente a la relación de las Ideas con las cosas y a las
clases de Ideas, así como las relaciones que pueda haber entre ellas. Por lo
que respecta a la relación entre las Ideas y las cosas expone Platón dos formas
de relación: la imitación y la participación. La semejanza mutua que existe entre
los objetos es el resultado de la imitación de un modelo que permanece él
mismo inmutable; pero ¿qué ocurre si en lugar de imitación hablamos de
participación? los problemas no parecen desparecer, sino multiplicarse:
¿participan las cosas de toda la Idea o sólo de una parte de ellas? En el primer
caso tendría que haber tantas Ideas como cosas, lo que contradice la no
multiplicidad de Ideas; en el segundo caso las cosas participarían sólo de una
parte de la Idea, lo que también contradice los principios de la indivisibilidad de
las Ideas. En el transcurso de la discusión Sócrates es incapaz de solucionar
los problemas que le plantea Parménides, pero se resiste abandonar la teoría
de las Ideas.
Otra cuestión que se discute es la de que si existen Ideas de todas las
cosas o sólo de los objetos o realidades nobles; Sócrates vuelve a reconocer lo
31
absurdo que parece afirmar que existen Ideas de cosas innobles y abyectas,
como el pelo y cosas así, pero tampoco está dispuesto a renunciar a su teoría:
parece que tiene que haber Ideas de todas las cosas y que de alguna manera
esos objetos universales, las esencias, han de ser reales y han de existir.
2.3.6.- La teoría de las ideas en el pensamiento de Platón
En los primeros diálogos no hallamos nada que nos pueda sugerir que
Platón hubiera estado en posesión de la teoría de las ideas. En los diálogos de
transición sí encontramos algunos elementos que parecen orientar en
pensamiento de Platón a dicha teoría, como puede ser la formulación de la
teoría de la reminiscencia en el “Menón”. También encontramos esa
formulación en los diálogos de madurez: “Fedón”, “Fedro”, “República” y
“Banquete”, en los que, a raíz de distintos temas, Platón presenta la teoría de
las Ideas apoyándose en explicaciones figuradas que vienen recogidas en los
más conocidos mitos de Platón.
Y aunque en el período de vejez Platón adopta una actitud crítica con la
teoría de las Ideas, no parece haberla abandonado nunca.
2.3.7.- La teoría del conocimiento
A los planteamientos iníciales de la teoría de la reminiscencia, expuesta
en el Menón y en el Fedón, con ocasión de la demostración de la inmortalidad
del alma, seguirá la explicación ofrecida en la República, donde encontramos la
exposición de una nueva teoría: la Dialéctica, que será mantenida por Platón
como la definitiva del conocimiento (ciencia que estudia las Ideas). En el
Teeteto, obra posterior a la república no se encuentra ninguna ampliación de lo
dicho, respecto al conocimiento, sino una crítica a la explicación del
conocimiento dada por los sofistas, basada en la percepción sensible, con
32
objeto de definir cuáles son las condiciones que debe cumplir el verdadero
conocimiento.
2.3.7.1.- La explicación del conocimiento en los filósofos anteriores
El problema del conocimiento había sido abordado por los filósofos
presocráticos. La distinción hecha por Parménides entre la vía de la opinión y la
vía de la verdad. Existen, para Parménides, dos formas de conocimiento: una
basada en los datos de los sentidos y la otra basada en la razón. La vía de la
opinión, en la medida en que remite a los datos sensibles, procedentes de un
mundo aparentemente en devenir, no constituye un verdadero conocimiento, su
falsedad le vendría de la aceptación del no ser, fuente de todas las
contradicciones; en efecto, si el no ser no es ¿cómo confiar en el conocimiento
que derive de su aceptación?. El verdadero conocimiento nos lo ofrece la vía
de la razón, al estar basada en el ser y rechazar, toda contradicción. El ser es
inmutable, por lo que el verdadero conocimiento ha de ser también inmutable.
La verdad no puede estar sometida a la relatividad de lo sensible.
Para los sofistas, sin embargo, el conocimiento sensible es,
simplemente, el conocimiento. Si prescindimos de la sensación, prescindimos
del conocimiento, no tiene sentido hablar de un conocimiento racional como si
fuera algo distinto, y aún opuesto al conocimiento sensible.
Crítica de platón a las críticas anteriores
En el Teeteto, Platón realizará un crítica de las explicaciones del
conocimiento dadas por Protágoras negando: 1) que el conocimiento se pude
identificar con la percepción sensible, ya que la verdad se expresa en el juicio y
no en la sensación; 2) que ni siquiera se pude identificar el conocimiento con el
“juicio verdadero” ya que podría formularse un juicio que resultara verdadero y
estuviera basado en datos falsos. Platón admite, con Protágoras, que el
conocimiento sensible es relativo pero no admite que sea la única forma de
33
conocimiento cree por el contrario que hay otra forma de conocimiento propia
de la razón: las Ideas. El verdadero conocimiento ha de versar sobre el ser, no
sobre el devenir y no puede estar sometido a error, ha de ser infalible. El
conocimiento sensible, no puede ser el verdadero conocimiento ya que no
cumple ninguna de estas características.
En su teoría del conocimiento, Platón distingue distintos niveles y grados
de realidad y distintos niveles de conocimiento: la “doxa” (conocimiento
sensible) y la “episteme” (conocimiento inteligible). El verdadero conocimiento
viene representado por la episteme, dado que es el único conocimiento que
versa sobre el ser y, por lo tanto, que es infalible. El conocimiento verdadero lo
ha de ser de lo universal, de la esencia, de aquello que no está sometido a la
fluctuación de la realidad sensible; ha de ser, por lo tanto conocimiento de las
Ideas.
Ahora bien, si el mundo sensible es el mundo de la opinión ( doxa) y el
mundo inteligible el dominio de la ciencia (epistemas) estamos autorizados a
formular la proposición siguiente: la opinión es a la ciencia lo que la imagen es
al original: las imágenes de los objetos materiales dan lugar a una
representación confusa, que llamaremos imaginación (eikasía); los objetos
materiales dan lugar a una representación más precisa, que comporta la
adhesión del sujeto que las percibe, y a lo que llamaremos creencia (pístis); por
su parte en el mundo inteligible las imágenes de las Ideas (objetos
matemáticos) dan lugar a un conocimiento discursivo, mientras que las Ideas
mismas dan lugar a un conocimiento intelectivo, el conocimiento de la
inteligencia. La dialéctica es, pues, el proceso por el que se asciende
gradualmente al verdadero conocimiento, al conocimiento del ser, de lo
universal, de la Idea.
Las nociones matemáticas, que de una parte reflejan las Ideas puras,
pero por otra parte solo pueden traducirse con la ayuda de símbolos sensibles,
nos proporcionan el tipo de las nociones mixtas de la dianoia: las matemáticas
34
se fundan sobre hipótesis a las que consideran como principios a partir de los
cuales deducen sus consecuencias, representando así la actividad del
razonamiento discursivo (dianoia).
Sociedad y política
A diferencia de los sofistas, para quienes la sociedad era el resultado de
una convención o pacto entre los individuos, para Platón la sociedad es el
medio de vida “natural” del hombre. Si atendemos a las características de la
vida humana, en efecto podemos observar que el hombre no es autosuficiente,
ni en cuanto a la producción de bienes materiales necesarios para su
supervivencia, ni en cuanto a los aspecto morales y espirituales que hacen de
la vida el hombre algo propiamente humano. Las tendencia que inclinan al
hombre al amor, a la amistad, a la convivencia en general, son tendencias
naturales, por lo que no tendría sentido pensar que el medio, necesariamente
social, en el que se desarrollan, fuera algo no-natural.
¿Cómo sería pues la sociedad ideal? dado que la sociedad debe existir
para satisfacer las necesidades de los hombres, ya que estos no son
independientes unos de otros ni autosuficientes para abastecerse, el primer fin
que debe garantizar toda sociedad en un fin económico. Deberán existir por lo
tanto todo tipo de trabajadores: granjeros, carpinteros, labradores, herreros,
etc. De modo que todas las necesidades básicas queden garantizadas, en una
sociedad ideal no debe faltar nada. El hombre necesita también satisfacer
otras tendencias de su naturaleza relacionadas con el arte, la poesía, la
diversión en general, etc., tendrá que haber también especialistas en la guerra,
que sean los encargados exclusivamente de las actividades bélicas
(guardianes de la ciudad). Se tendría que determinar quiénes serán los
encargados de gobernar. A la clase de los artesanos y de los guardianes
hemos de añadir una tercera clase la de los gobernantes. La clase de los
artesanos que generalmente realiza las actividades productivas pero no obtiene
los beneficios económicos de su producción, lo que es fuente de conflictos, ha
35
de ser en la sociedad ideal la poseedora de la riqueza; del mismo modo sería
la única clase que tenga derecho a la propiedad privada y a la familia; la clase
de los verdaderos guardianes o gobernantes no tendrá acceso a la propiedad
privada ni a la familia, debiendo velar únicamente por el buen gobierno de la
ciudad; deberán centrarse en el estudio a fin de conocer lo bueno para
gobernar adecuadamente la ciudad, por lo que su vida estará alejada de todas
las comodidades innecesarias para cumplir su función.
¿Cómo se determinará quienes han de pertenecer a una u otra de estas
clases sociales? Será necesario para ello establecer un proceso educativo en
el curso del cual se podrá determinar qué tipo de naturaleza tiene cada hombre
y, por lo tanto, a que clase social a de pertenecer. La virtud de la clase de los
artesanos, es la templanza, es decir, el disfrute con moderación de los bienes
materiales; la virtud propia de la clase de los guerreros o auxiliares es la
valentía o el coraje; la virtud de los verdaderos guardianes gobernantes es la
sabiduría. Ahora bien, estas tres virtudes pertenecen, cada una de ellas, a una
parte del alma: la sabiduría al alma racional; la valentía al alma irascible y la
templanza al alma concupiscible. Habiendo determinado la virtud que
corresponde a cada clase social estaremos en condiciones de determinar en
qué puede consistir la justicia en la sociedad ideal: la justicia consistirá, no
pudiéndose identificar con la sabiduría, ni con el coraje, ni con la templanza, en
que cada clase social (y cada ciudadano) se ocupe de la tarea que le
corresponde. La injusticia consistirá en la injerencia arbitraria de una clase
social en las funciones de otras.
Si la pertenencia a una clase social viene determinada por la naturaleza
del alma, y no por herencia, una sociedad ha de dar una importancia primordial
a la educación. Será, a través de ese proceso educativo como se selecciones
los individuos que han de pertenecer a cada clase social, en función de su tipo
de alma; y qué tipo de educación ha de recibir cada individuo en función a la
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clase social que pertenece. En la república establece Platón detalladamente el
programa de estudios que debería imperar en la sociedad ideal, haciendo
hincapié en la educación de los gobernantes. Platón considera que la
educación recibida en los primeros años de vida es fundamental para el
desarrollo del individuo, por lo que nadie puede ser privado de ella, ni en razón
de su sexo ni por ninguna otra causa: le proceso educativo tiene, al mismo
tiempo que un objetivo formativo, la misión de determinar qué tipo de arma
predomina en cada individuo.
Esa educación correrá a cargo del estado, en ningún caso a cargo de las
familias, para evitar las influencias negativas que suponen las narraciones que
las madres y las nodrizas cuentan a los niños pequeños. Pasarán a formar
parte de la clase de los artesanos los que hubieran mostrado mayor inclinación
hacia el contacto con lo material; los que persistan en los estudios formaran
parte de la clase de los guardianes o guerreros. La perseverancia en el estudio
entre los que pertenecen a la clase de los guardianes, pone de manifiesto que
en el individuo predomina el alma racional, por lo que serán estos los elegidos
para formar la clase de los Gobernantes, quienes serán sometidos a un
proceso educativo que comenzara con el estudio de las matemáticas y
terminará con el estudio de la dialéctica, con el conocimiento de la Ideas.
Justicia y ética
Si la justicia en la ciudad en que cada clase social haga lo que debe
hacer, la justicia en el hombre residirá en que cada parte del alma haga lo que
debe. El conocimiento y la satisfacción de las necesidades intelectuales deben
ir acompañados de salud, moderación en el disfrute de los bienes materiales,
etc. En el Banquete, podemos observar como a través del Eros, Platón concibe
el ascenso hacia las Ideas partiendo del amor a la belleza que observamos en
las cosas sensibles, luego a la belleza en el ser humano, hasta alcanzar la
37
contemplación de la belleza en sí, que se identifica con el bien del que nos
habla en la República y que representaría el grado superior del conocimiento.
El verdadero bien del hombre, la felicidad, habrá de alcanzarse mediante
la práctica de la virtud. Platón acepta la identificación socrática entre virtud y
conocimiento. La falta de virtud no supone una perversión de la naturaleza
humana; por su propia naturaleza el hombre busca el bien para sí, pero si
desconoce el bien puede tomar como bueno, erróneamente, cualquier cosa y,
en consecuencia, actuar incorrectamente; la falta de virtud es equivalente,
pues, a la ignorancia.
En la República nos habla Platón de cuatro virtudes principales: la
sabiduría, el coraje o fortaleza de ánimo, la templanza y la justicia. La parte
más elevada el alma, la parte racional, posee como virtud propia la sabiduría;
pero la justicia, la virtud general que consiste en que cada parte del alma
cumpla su propia función, estableciendo la correspondiente armonía en el
hombre impone los límites o la proporción en cada una de las virtudes ha de
desarrollarse en el hombre. El hecho de que Platón tenga una concepción
absoluta del bien hace que la parte racional del alma siga siendo fundamental
en la organización de la vida práctica del hombre, de su vida moral.
2.4.- Realismo Aristotélico
Aristóteles, nació en Estagira, Macedonia, el año 384 a. de J.C. y murió
en 322 a. de J.C. Fue discípulo de Platón y maestro de Alejandro Magno. Creó
su "Liceo" que fue tan prestigioso como la "Academia".
Su filosofía se caracteriza por ser un movimiento filosófico y científico
basado en la experimentación. Concepción revolucionaria. En un panorama
filosófico denominado por la ciencia del mundo exterior y la cosmología, creó
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un concepto de la sociedad, de la realidad y del hombre totalmente diferente.
Enfatizó la transformación de su sociedad política porque afianzó la libertad
democrática en su obra "Las Constituciones de Atenas", contra Filipo de
Macedonia, quien reaccionó ordenando su muerte, ya que vislumbró que la
democracia terminaría por derrotar al totalitarismo.
En el campo de la metafísica - hasta entonces denominado por Platón -
en el que tenía predominio las ideas y por lo tanto el mundo ideal y dialéctico
de la lógica y el pensamiento sobre la realidad y la experiencia, él decidió crear
bases totalmente diferentes para constituir en ellas la filosofía y la ciencia.
Su gran revolución ideológica la hace precisamente en el campo de la
teoría del conocimiento. Contra todos los filósofos que presumían la validez del
conocimiento, él dice que sin experimentación no hay verdad.
Aristóteles da realidad a las ideas entendiéndolas como la esencia de las
cosas reales - "Nada hay en la mente que no haya estado antes en los
sentidos".
Frente a toda metafísica, a la filosofía cosmológica y frente al idealismo
metafísico e intelectualista de Platón, la posición de Aristóteles no puede ser
más radicalmente distinta.
Por la fuerza de su ingenio trascendió su época y se proyecto en el siglo
XVII y XVIII, época en que su tesis es sostenida por los empiristas británicos
John Locke, George Berkeley y Davis Hume, y en cierto modo también
Emmanuel Kant, filósofo alemán creador de la filosofía crítica.
Aristóteles inventa el empirismo, pues considera que todas las filosofías
y las ciencias tienen que partir de las experiencias, es decir, de todas las
sensaciones que nos ofrece el mundo de la percepción y del conocimiento
sensible.
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Redescubre la experiencia y la erige en base del conocimiento
verdadero. La percepción que había sido desechada como conocimiento
impreciso y engañoso es decir, el DOXA, para él es el punto de partida
necesario y obligatorio no sólo de toda la filosofía, sino de todas las ciencias.
El mismo inventó y construyó por primera vez en Occidente casi todas
las ciencias naturales más importantes, tales como la física, la química, la
geografía y también las ciencias sociales más significativas como la ética, la
política y el estudio de la sociedad.
En su obra "Organon", desarrolla una lógica y una epistemología que le
permiten perfeccionar y alcanzar el conocimiento científico a la vez
demostrativo y convalidadamente verdadero.
Creó su lógica para garantizarse un acceso sólido del conocimiento a la
realidad. Cambió el curso de la filosofía al pensar que las ideas y los
pensamientos no eran como lo creyó Platón. Insertó las ideas en el mundo real,
tanto las cosas materiales que se ofrecen al conocimiento sensible, como las
ideas y conceptos. Desde entonces las ideas no flotan en vacío ideal sino que
existen en las cosas mismas de la realidad. Al mismo tiempo que fue el creador
del "empirismo epistemológico", fue también gestor del "realismo metafísico".
Hay una realidad exterior que puede ser accesible al conocimiento empírico.
Aristóteles deja de depender de las ideas y desarrolla su concepción
hilemorfista, que consiste en que las esencias o sustancias de las cosas reales
tienen una realidad DUAL; ellas son: Materia y Forma y en sus relaciones de
unas cosas, causa y/o efecto.
Sobre este concepto de casualidad de: "No hay efecto sin causa" y "todo
efecto debe ser proporcionado a su causa", se construirá toda la ciencia
antigua, moderna y contemporánea.
Sobre el principio de la relación entre materia y forma, se elaboraron la
psicología, la sociología y la política, así como, por supuesto, una nueva
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antropología filosófica. Para la esencia del hombre, el cuerpo es la materia y la
forma es el alma.
Aristóteles es el inventor, en Occidente, del concepto del alma como
primer principio, primera fuerza o energía, que da origen a la vida, a la
sensación y a la intelección. La estructura integrada del plano biológico y
reflexivo intelectual del hombre de una manera unitaria y teleológica. En virtud
de lo cual, todas las partes que constituyen el organismo humano están al
servicio supremo, del que éste emplee su finalidad de supervivencia,
integridad, perfeccionamiento y desarrollo individual.
En lo primero que define a Dios como la "suprema causa" y el "motor
fundamental del Universo". Entre sus obras principales, además de la
metafísica, como teoría de las causas primeras, está su: "De Anima" o "Del
Alma", que es el primer tratado científico de la filosofía y de la psicología.
También inventó la lógica o arte y ciencia del pensamiento correcto que
distingue los falsos modos de razonar como los Sofismas y los Paralogismos y
la falacia comprendida en sus libros.
Fue Aristóteles quien introdujo la denominación de Ética para designar lo
concerniente a los principios del bien y del mal; y, de "Filosofía Práctica", para
la disciplina que dicta las reglas a que debe someterse la conducta humana .
Según Aristóteles, la virtud es el objeto de la Ética, mientras que la moralidad lo
es de la Filosofía Práctica. Hay, no obstante, confusiones posteriores debidas a
las traducción; así por ejemplo, CICERON tradujo la palabra griega "ético" a la
latina "moralis", y SENECA llamó a la ética "Philisophia Moralis". Desde
entonces aparecen con más frecuencia estos tres nombres: Ética, Filosofía
Moral y Filosofía Práctica ç, designando, con leves matices de diferencia, la
misma disciplina filosófica. Sin embargo, desde la Antigüedad hasta el
presente, la expresión Filosofía Práctica no se refiere exclusivamente a lo ético,
sino que abarca también la Política, la Economía y el Derecho.
41
Aristóteles en su obra "Ética de Nicomaco" hizo la primera exposición
sistemática de esta disciplina. Considera como cuestión fundamental la del
"supremo bien, o sea un bien que se desea por sí mismo y por el cual, a la vez,
se desea todos los demás bienes; todos coinciden en que este supremo bien
es la felicidad". Pero ¿en qué consiste? Según Aristóteles, la virtud es un modo
de pensar y de sentir que se mantiene en el justo medio entre el exceso y el
defecto; este justo medio puede ser conocido por la razón, y quien lo conoce,
como el sabio, obra en consecuencia y es feliz; pues, la felicidad no es sino la
actividad de la vida conforme a la razón.
Después de Aristóteles, los Estoicos y los Epicúreos siguen la misma
idea con muy leves innovaciones. Así, los ESTOICOS consideran que la
felicidad consiste en la "apatía", o sea el estado de una vida serena, libre de las
pasiones que subyugan a los insensatos, y que realizan la acción virtuosa
conforme al deber, que es lo mismo que conforme a la razón. Por su parte los
EPICUREOS (Seguidores de Epicuro) sostienen que el supremo bien es la
felicidad, pero entendida como placer, es decir como diversión, entretenimiento
y satisfacción sin impedimentos. Para lograr la felicidad se necesita mantener
la buena salud del cuerpo y una "inquebrantable tranquilidad del alma no
estorbada por pasiones ni apetitos"; a esto le llamaron "ataraxia", estado
parecido al de la apatía, de los estoicos. También reconocen a la razón como el
medio de conseguir la felicidad, y por eso, también el sabio representa el ideal
de la conducción moral de la vida.
El CRISTIANISMO introdujo una nueva concepción ética basada en los
siguientes principios: 1º.- El hombre tiene la culpa de sus desgracias y
sufrimientos; 2.- Todos los hombres son iguales por ser hijos de Dios, quien los
creó en un acto de puro amor y, por eso, "amar a Dios y al prójimo como a sí
mismo" es el sentimiento y el deber fundamental; 3º.- La salvación, o dicha
eterna, y la perdición, dependen de la libre voluntad del hombre, pues él puede
elegir el difícil y angosto sendero de la virtud, la misericordia, la beatitud y la
purificación; o el amplio camino del vicio, el placer, el egoísmo, etc. etc., que
42
finalmente conduce a la perdición; y 4º.- Existe un especie de casualidad ética,
pues "quien siembre vientos cosecha tempestades".
La novedad de la concepción cristiana consiste principalmente en la
importancia básica del sentimiento del amor, del que carecieron las
concepciones griegas de la antigüedad, que fueron eminentemente
racionalistas, que lucieron el brillo de la razón, pero también su frialdad.
2.4.1.- Liberalismo
El liberalismo es una corriente de pensamiento filosófico y económico y
de acción política que propugna limitar al máximo el poder coercitivo del Estado
sobre los seres humanos y la sociedad civil, derivada del racionamiento del
siglo XVIII. Preconizaba la búsqueda de la verdad por parte del individuo sin
ningún otro tipo de trabas, sino mediante el diálogo y la confrontación de
pareceres dentro de un clima de tolerancia, de libertad y de fe en el progreso.
Se asentaba en la confianza en el poder de la razón humana que todo lo
esperaba de las constituciones y de las leyes escritas. Su rasgo distintivo
consistía en el deseo de querer resolverlo todo mediante la aplicación de unos
principios abstractos y mediante la aplicación de unos derechos ciudadanos y
del pueblo. Frente a la idea de jerarquía y de autoridad, el liberalismo presenta
la idea de libertad y de igualdad, estás son aplicaciones de todos los terrenos:
al gobierno, a la religión, al trabajo y a las relaciones internacionales.
2.4.1.1.- Principios básicos
Forma parte del ideario liberal la defensa de la economía de mercado (
denominada “Sistema Capitalista” o de “Libre Empresa”); la libertad de
comercio (librecambismo) y en general , la libre circulación de personas,
43
capitales y bienes; el mantenimiento de un sistema monetario rígido que
implica su manipulación inflacionaria por parte de los gobernantes; el
establecimiento de un Estado de Derecho, en el que todos los seres humanos
–incluyendo aquellos que en cada momento forman parte del Gobierno- estén
sometidos al mismo marco mínimo de leyes entendidas en su sentido “material”
(normas jurídicas, básicamente de derecho civil y penal, abstractas y de
general e igual aplicación a todos), la limitación del poder del Gobierno al
mínimo necesario para definir y defender adecuadamente el derecho a la vida y
a la propiedad privada, a la posesión pacíficamente adquirida, y al
cumplimiento de las promesas y contratos; la limitación y control del gasto
público, el principio de presupuesto equilibrado y el mantenimiento de un nivel
reducido de impuestos, el establecimiento de un sistema estricto de separación
de poderes políticos (legislativo, ejecutivo y judicial) que evite cualquier atisbo
de tiranía; el principio de autodeterminación, en virtud de que cualquier grupo
social ha de poder elegir libremente qué organización política desea formar o a
qué estado desea o no adscribirse; la utilización de procedimientos
democráticos para elegir a los gobernantes, sin que la democracia se utilice, en
ningún caso, como coartada para justificar la violación del Estado de derecho ni
la coacción a las minorías; y el establecimiento, en suma, de un orden mundial
basado en la paz y en el libre comercio voluntario, entre todas las naciones de
la tierra.
Estos principios básicos constituyen los pilares de la civilización
occidental y su formación, articulación, desarrollo y perfeccionamiento son uno
de los logros más importantes de la historia del pensamiento del género
humano.
Tradicionalmente se ha afirmado que la doctrina liberal tiene su origen
en el pensamiento de la Escuela Escocesa del siglo XVIII, o en el ideario de la
Revolución Francesa, lo cierto es que tal origen puede remontarse incluso
hasta la tradición más clásica del pensamiento filosófico griego y de la ciencia
jurídica romana. Así sabemos gracias a Tucídides (Guerra del Peloponeso),
44
como Pericles constataba que en Atenas “la libertad que disfrutamos en
nuestro gobierno se extiende también a la vida ordinaria, donde lejos de ejercer
éste una celosa vigilancia sobre todos y cada uno, no sentimos cólera porque
nuestro vecino haga lo que desee”. En Roma se descubre que el derecho es
básicamente consuetudinario y que las instituciones jurídicas (como las
lingüísticas y económicas) surgen como resultado de un largo proceso
evolutivo e incorporan un enorme de información y conocimientos que supera,
con mucho la capacidad mental de cualquier gobernante, por sabio y bueno
que este sea. Sabemos gracias a Cicerón (De re pública, II, 1-2) como para
Catón “el movimiento por el que nuestro sistema político fue superior a los de
todos los demás países del éste: los sistemas políticos de los demás países
habían sido creados introduciendo leyes e instituciones según el parecer
personal de individuos particulares tales como Minos en Creta y Licurgo en
Esparta… En cambio nuestra república romana no se debe a la creación
personal de un hombre, sino de muchos. No ha sido fundada durante la vida de
un individuo particular, sino a través de una serie de siglos y generaciones “.
El liberalismo se refiere fundamentalmente a dos aspectos: a lo político y a lo
económico.
2.4.1.2.- Liberalismo político
El liberalismo como sistema político fue construido a partir de las
doctrinas de los viejos maestros Montesquieu, Voltaire, Rousseau o Condorcet,
que se consagran después de la caída Napoleón y se extiende desde Francia e
Inglaterra por el sur y por el este de Europa.
El liberalismo político proponía una limitación de poder mediante la
aplicación del principio de la separación entre el legislativo, el ejecutivo y el
judicial, de tal manera que el legislativo quedaba en manos de una Asamblea
elegida por sufragio censitario. Esa división debía establecerse mediante la
creación de órganos que tuviesen la misma fuerza, pues en el equilibrio de los
poderes residía la mejor garantía de su control mutuo y al mismo tiempo de la
libertad del individuo frente al absolutismo. El liberalismo se distinguía de la
45
democracia o del radicalismo porque defendía la idea de la soberanía de las
asambleas parlamentarias frente a la soberanía del pueblo; porque daba
primacía a la libertad sobre la igualdad y porque preconizaba el sufragio
limitado frente al sufragio universal.
El liberalismo comenzó a transformar a Europa a partir de la senda
década del siglo XIX y fue en España donde tuvo una de sus más tempranas
manifestaciones con la reunión de las Cortes de Cádiz y la elaboración de una
Constitución de 1812, el cual se convirtió en el símbolo para muchos liberales
europeos. El término liberal fue utilizado por primera vez por los diputados
españoles en aquellas Cortes en el sentido de abiertos, magnánimos y
condescendientes con las ideas de los demás, en su lucha por acabar con el
absolutismo tradicional de la Monarquía. El liberalismo se impuso mediante un
movimiento revolucionario, como fue el caso de Francia en 1830 y otros
recurrió a la reforma mediante una evolución progresiva del sistema político sin
violencias, como ocurrió en los Países Bajos o en los países escandinavos.
Aunque no forma parte sustancial de su doctrina política, el liberalismo
acepta la monarquía y de hecho e Europa durante el siglo XIX casi todos los
regímenes liberales eran presididos por un rey. No ocurrió lo mismo en América
por falta de tradición que el sistema monárquico tenía en los países de este
continente.
Como elemento esencial en todo régimen liberal está la Constitución,
que es una ley fundamental por la que se rige el sistema político y está dictada
siempre por una Asamblea constituyente. Comparada con la ausencia de
textos del Antiguo Régimen, el deseo de definir por escrito la organización de
poderes y el sistema de sus relaciones mutuas, es una novedad aportada por
la Revolución que tomó el ejemplo de los Estados Unidos de América. Desde el
punto de vista de la teoría política, la Constitución puede ser abierta o cerrada.
Es abierta cuando específica los derechos y los deberes de los ciudadanos y
es cerrada cuando específica solamente el funcionamiento del régimen, las
46
obligaciones y deberes que tiene el Rey, hasta dónde alcanza su potestad, si el
poder legislativo tiene que estar dividido en dos cámaras, etc. Puede
establecerse también una división entre Constitución flexible y Constitución
rígida. La primera es aquella cuyos términos pueden ser desarrollados
posteriormente en otras leyes más específicas, como ocurre cuando se dice
que las elecciones se efectúan de la forma que determinen las leyes. Se dejan
muchos de sus artículos a una interpretación posterior para que ésta pueda
cambiar sin que por ello haya que modificar el texto constitucional. La
Constitución rígida, no deja nada a la interpretación posterior, lo tiene todo
previsto. La constitución se considera como algo sagrado, intocable, en los
regímenes liberales. Cuando no hay algo que no está de acuerdo con ella, se
saca a relucir inmediatamente el término anticonstitucional, en el momento de
su aprobación siempre se piensa que va a ser definitiva, cuando lo más
frecuente es que no ocurra así. La Constitución tiene un carácter universalista,
es decir, está basada en los principios tan generales y de tanto interés por
todos que éstos podrían ser aplicados a todos los países.
Según el esquema de Montesquieu es el que se basa el régimen
político liberal, el poder legislativo elabora las leyes, el ejecutivo las hace
cumplir y el judicial determina si estas leyes han sido cumplidas o no.
El elemento esencial del liberalismo es la Asamblea, que es la reunión
de los representantes de la soberanía nacional y la que tiene la potestad de
hacer las leyes. El sistema liberal admite la existencia de una sola asamblea, o
dos. Cuando el Poder Legislativo está dividido en dos Cámaras, la Cámara
Alta, compuesta generalmente por individuos que por su mayor edad o por su
situación suelen ser más conservadores, actúan como freno de la Cámara
Baja.
La Asamblea crea el parlamento, cuyo eje son los partidos políticos, no
contemplados por la Constitución, pero que constituyen parte fundamental del a
dinámica política de los sistemas liberales. Los partidos políticos, que
47
comienzan a aparecer en los inicios del liberalismo, no son más que la
agrupación de aquellos ciudadanos que defienden unos principios comunes
expresados en unos programas en los que se exponen sus puntos de vista
sobre los asuntos de su propio país y la solución que darían a sus principales
problemas en el caso de que alcanzasen el poder. Benjamín Constant, uno de
los principales teóricos del liberalismo doctrinario francés, afirmaba que los
partidos políticos eran la esclavitud de unos pocos para la liberación de la
mayoría. Los diputados de la Asamblea son elegidos por el cuerpo electoral. El
liberalismo no considera que el derecho al voto sea un derecho natural, sino
más bien una función, un servicio público para el que la nación habilita a una
serie de ciudadanos que reúnen unas determinadas condiciones, generalmente
económicas. El liberalismo, a pesar de que consagra el principio de la igualdad
de derechos, introduce una distinción entre el país legal y el país real. A pesar
de lo contradictorio que parezca, en la sociedad liberal sólo una minoría
dispone del derecho al voto, de la plenitud de los derechos políticos. Esta
discriminación según René Remond no es definitiva o absoluta, no excluye de
por vida al individuo. Solo los que trabajaban, ahorraban y se enriquecían
podían acceder a manifestar su voluntad política en el acto electoral. La política
liberal se inscribe en la perspectiva de una moral burguesa que ignora las
dificultades y las trabas que tienen los individuos de las clases más deprimidas
para promocionarse socialmente. El liberalismo establece unas diferencias
sociales basadas, no en el nacimiento y en la sangre como ocurría en el
Antiguo Régimen, sino en la posesión de riquezas. El dinero es uno de los
pilares fundamentales del orden liberal, por cuanto se convierte en un principio
liberador. El dinero como pauta para establecer la jerarquización de la sociedad
abre posibilidades a todos para alcanzar un puesto en su escalafón. El dinero
se convierte en un factor de liberación y en un medio para la emancipación
social de los individuos, pero, también puede ser un motivo de opresión. El
triunfo de una economía liberal, en la que se impone el beneficio sobre
cualquier otra consideración, lleva aparejada la miseria de los más débiles que
se ven desprotegidos en una sociedad en la que sólo existen las relaciones
jurídicas, impersonales y materializadas por el dinero.
48
El liberalismo político alcanzaría un notable grado de desarrollo con los
doctrinados franceses, entre los que destacaron Benjamín Constant, Guizot y
Royer Collard.
2.4.1.3.- Liberalismo económico
Desde el punto de vista económico, el liberalismo defendía la libertad
plena y total, la supresión de las corporaciones y de los gremios y de todas las
trabas que pudieran suponer un obstáculo para el libre desenvolvimiento de las
empresas y de las asociaciones.
Pedro Juan de Olivo, San Bernardino de Siena y San Antonio de
Florencia, entre otros, teorizan sobre el papel protagonista que la capacidad
empresarial y creativa del ser humano tiene como impulsora de la economía de
mercado y de la civilización.
Uno de los más grandes pensadores liberales del siglo XX, el austríaco
Friedrich A: Hayek, Premio Nobel de Economía en 1974, llegó a afirmar que
“los principios teóricos de la economía de mercado y los elementos básicos del
liberalismo económico no fueron diseñados, como se creía, por los calvinistas y
protestantes escoceses, sino por los jesuitas y miembros de la Escuela de
Salamanca durante el siglo de Oro español. Así, Diego de Covarrubias y Leyva,
arzobispo de Segovia y ministro de Felipe, el 1554 expuso de forma impecable
la teoría subjetiva del valor, sobre la que gira toda economía de libre mercado,
al afirmar que “el valor de una cosa no depende de su naturaleza objetiva sino
de la estimación subjetiva de los hombres, incluso aunque tal estimación sea
alocada”. Luis Saravia de la Calle basándose en la concepción subjetiva de
Covarrubias, descubre la verdadera relación que existe entre precios y costes
en el mercado, en el sentido de que son los costes los que tienden a seguir a
los precios y no al revés, anticipándose así a refutar los errores de la teoría
objetiva del valor de Carlos Marx y de sus sucesores socialista. Así en su
Instrucción de mercaderes (Medina del Campo, 1544) “Los que miden el justo
precio de la cosa según el trabajo, costes y peligros del que trata o hace la
49
mercadería yerran mucho, porque el justo precio nace de la abundancia o falta
de mercaderías, de mercaderes y dineros, y no de las costas, trabajos y
peligros”.
Otra notable aportación de los escolásticos españoles es la introducción
del concepto dinámico de competencia (en latín concurrentium) se entiende
como el proceso empresarial de rivalidad que mueve el mercado e impulsa el
desarrollo de la sociedad.
Raymond de Roover (“Scholastic Economics”, 1955) atribuye a Luis de
Molina el concepto dinámico de competencia entendida como “el proceso de
rivalidad entre compradores que tiende a elevar el precio”.
Jerónimo Castillo de Bovadilla expone la concepción dinámica de la libre
competencia entre empresarios en su libro “Política para Corregidores”
publicado en Salamanca en 1585, indica que la más positiva esencia de la
competencia consiste en tratar de “emular” al competidor, enuncia, además, la
siguiente ley económica, base de la defensa del mercado por parte de todo
liberal: “los precios de los productos bajarán con la abundancia, emulación y
concurrencia de vendedores”.
Juan de Mariana (1536-1624) el más liberal de los escolásticos
españoles, llevó hasta sus últimas consecuencias lógicas la doctrina liberal de
la superioridad de derecho natural frente al poder del estado y que han
retomado filósofos liberales tan importantes como Murria Rothbard y Robert
Nozick. Mariana pone especial importancia al desarrollo de la doctrina sobre
la legitimidad del tiranicidio, en el cual califica de tiranos a figuras históricas
como Alejandro Magno o Julio César, y argumenta que está justificado que
cualquier ciudadano asesine al que tiranice a la sociedad civil, considerando
actos de tiranía, entre otros, el establecer impuestos sin el consentimiento del
pueblo, o impedir, que se reúna un parlamento libremente elegido, otras
muestras típicas del actuar de un tirano, la construcción de obras públicas
faranóicas que, como las pirámides de Egipto, siempre se financian
esclavizando y explotando a los súbditos, o la creación de policías secretas
para impedir que los ciudadanos se quejen y expresen libremente. Del mismo
modo considera tirano a todo gobernante que devalúe el contenido de metal de
50
la moneda, imponiendo a los ciudadanos sin su consentimiento el odioso
impuesto inflacionario o la creación de privilegios y monopolios fiscales.
También crítica el establecimiento de precios máximos para “luchar contra la
inflación” y propone la reducción del gasto público como principal medida de
política económica para equilibrar el presupuesto.
Jeremy Benthan (1748-1832) fue uno de los pensadores que más influyó
en la consolidación de las ideas del liberalismo económico en los años iníciales
del siglo XIX, para él el Estado era incapaz de regular y de ordenar la sociedad
económica y debía abstenerse y dejar al individuo que dispusiese libremente
de sus propios intereses. En este mismo sentido desarrollaron sus teorías
económicas liberales otros pensadores que se basaban a su vez en tratadistas
del siglo XVIII como Adam Smit y Robert Malthus (1766-1836), su idea
fundamental es que la población se acrecienta en progresión geométrica,
mientras que la subsistencia lo hace solo en progresión aritmética. De esa
forma la miseria en el mundo tendería a aumentar ya que la población crecería
más rápidamente que la producción para alimentarla. Los hechos demostraron
posteriormente que los cálculos de Malthus eran equivocados, sin embargo,
introdujo el concepto de crecimiento, frente al sistema económico de tipo
estático que describían Adam Smith y los fisiócratas.
Otro economista liberal de la escuela inglesa: David Ricardo (1772-
1823) para él, no era posible extraer más riquezas de la tierra ya cultivada y por
lo tanto sólo cabía esperar que aumentara la producción agrícola, mediante la
rotación de nuevas tierras que, eran de menor valor. La introducción de nuevas
técnicas en las tierras de buena calidad, no serviría para aumentar el
rendimiento. Por el contrario, a partir de un cierto nivel de inversión para
mejorar los cultivos, la producción no se incrementaría al mismo ritmo, es lo
que se llama la Ley de rendimiento decreciente.
El economista liberal Stuart Mill (1806-1873) el cual representaba el
espíritu de la burguesía del siglo XIX, defendía una cierta intervención del
Estado en la economía, para él, se había llegado al término de una evolución y
no era posible ya que se produjeran grandes cambios; es más, había que
poner todos los medios para impedir que éstos pudiesen darse.
51
En el terreno económico el liberalismo se caracteriza por un sistema
que, bajo la máscara de la libertad, se basa en el principio de la selección de
los seres vivos, mediante el que los más fuertes acaban con los más débiles.
Otros economistas, en general franceses, proponían un liberalismo más
optimista, entre ellos, Alean Baptiste Say (1767-1832), F Bastiat (1801-1850) y
Charles Dunoyer (1786-1862) todos ellos, eran contrarios a la intervención del
Estado en la economía pues existían leyes naturales que eran los que debían
regirla. No eran partidarios de establecer ningún sistema de asistencia ni de
atención a los menos favorecidos pues contribuían a extender la pobreza y la
incuria. Sin embargo eran partidarios de fomentar la industria y creían en el
aumento ilimitado de la producción.
2.4.1.4.- Resurgimiento del liberalismo en el s. XX
A pesar de que el siglo XX será tristemente recordado como el siglo del
Estatismo y de los totalitarismos de todo signo que más sufrimiento han
causado al género humano, en sus últimos 25 años se ha observado con gran
pujanza un notable resurgir del ideario liberal que debe achacarse a las
siguientes razones:
Primeramente, al rearme teórico liberal protagonizado por un puñado de
pensadores que, en su mayoría, pertenecen o están influidos por la Escuela
Austriaca que fue fundada en Viena cuando Carl Menger retomó en 1871 la
tradición liberal subjetivista de los Escolásticos Españoles.
En segundo lugar, el triunfo de la llamada revolución liberal-
conservadora protagonizada por Ronald Reagan y Margaret Thacher en
Estados Unidos e Inglaterra a lo largo de los años ochentas. Así de 1980 a
1988 Ronald Reagan llevó a cabo una importante reforma fiscal que redujo el
tipo marginal del impuesto sobre la renta al 28 por 100 y desmanteló, en gran
medida, la regulación administrativa de la economía, generando un importante
auge económico que creó en su país más de 12 millones de puestos de
trabajo. Margaret Tacher impulsó el programa de privatizaciones de empresas
públicas más ambicioso que hasta hoy se ha conocido en el mundo, redujo al
52
40 por ciento el tipo marginal del impuesto sobre la renta, acabó con los abusos
de los sindicatos e inició un programa de regeneración moral que impulsó
fuertemente la economía inglesa, lastrada durante decenios por el
intervencionismo de los laboristas y de los conservadores más “pragmáticos”.
En tercer lugar, quizás el hecho histórico más importante haya sido la
caída del Muro de Berlín y el desmoronamiento del socialismo en Rusia y en
los países del Este de Europa, que hoy se esfuerzan por construir sus
economías de mercado en un Estado de Derecho.
2.5.- EL NATURALISMO
Datos bibliográficos:
Juan Jacobo Rousseau (1712 – 1778) nació en la ciudad de Ginebra. Su
madre murió poco después de su nacimiento y Juan Jacobo fue criado por su
padre, quien se encargo de su educación temprana. A la edad de 10 años, su
educación fue puesta en manos de un tutor, un pastor de de pueblo de Bossey,
quien enseño a Rousseau durante unos dos años. Esta fue la única educación
formal que recibió y pronto se le preparó para que trabajara en la oficina de un
notario, luego fue aprendiz de grabador, sin permanecer largo tiempo ni en un
puesto ni en otro. A continuación abandono Ginebra y, según sus Confesiones,
vivió durante cierto número de años de vagabundo, viajando por Francia e
Italia.
53
Intento diversas ocupaciones como servir de criado, estudiar para el
sacerdocio, la carrera de música, fue secretario y durante breve tiempo, hasta
hizo de tutor. Solo en 1749 logró por fin algún éxito, En ese año, la Academia
de Gijón, reflejando la preocupación que empezaba a sentirse por algunas de
las consecuencias de la edad de la Ilustración, brindo un premio al mejor
ensayo sobre el tema: ¿Ha contribuido el progreso de las artes y de las
ciencias a la corrupción o a la purificación de la moral? El planteamiento de tal
cuestión interesó a Rousseau quien siguiendo el consejo de Diderot, el famoso
filosofo francés, presentó un ensayo a la academia donde sostenía que las
artes y las ciencias habían llevado a la corrupción de la moral. Se le concedió
el premio y fue así como saboreó por primera vez la fama pública, que a todas
vistas significaba mucho para él y lo estimuló a preocuparse cada vez más por
esos crecimientos sociales.
Al cabo de tres años, en 1752, presentaba otro ensayo, el “Discurso
sobre la desigualdad de los hombres”, también a la academia de Gijón y
aunque esta vez no logro ganar el premio el ensayo recibió considerable
atención pública cuando lo público en 1755, en 1762 publico su obra llamada
“Emilio”
El Emilio levanto de inmediato la hostilidad de la Iglesia Católica en
primer lugar por la sección conocida como el “El creo del cura del Saboyano”,
que ataca determinadas doctrinas católicas, en 197º trabo amistad con David
Hume , el gran filosofo empírico ingles pero este se había convertido un
paranoico e inestable lo cual le acarreo la enemistad con Hume, fue aquí donde
completo su autobiografía, las Confesiones, que empezara en Inglaterra y
algunas obras menores, como Consideraciones sobre el Gobierno de Polonia:
empobrecido y con precaria salud, se trasladó al campo en 1778, pero en julio
de ese mismo año, al cabo de poco tiempo, murió.
54
Introducción:
Tanto en el orden pedagógico, como antes en el filosófico, el pensador
ginebrino dio el empujón final para que el naturalismo adquiera plena carta de
ciudadanía universal y de que fuese aceptado en todos los ambientes
científicos y literarios de la segunda mitad del siglo XVIII.
Juan Jacobo Rousseau se opone a una idea racionalista del mundo
clamado por una concepción originaria y natural de la vida. Su lema “Volvamos
a la Naturaleza”, es un grito de angustia para rescatar al hombre del
artificialismo a que ha sucumbido;
Pero la lucha contra este artificialismo en la vida y en la manera de
comprender y valorar la existencia conforme a la naturaleza “Todo sale perfecto
de las manos del autor de la naturaleza; Todo degenera en las del hombre”.
Pero téngase en cuenta, en primer lugar, que al querer formar el hombre
de la naturaleza no se trata por hacer de el un salvaje y relegarlo en el interior
de los bosques; basta que envuelto en el torbellino social, no se deje arrastrar
por las pasiones, ni por las opiniones de los hombres; que vea con sus ojos y
sienta con su corazón; que ninguna autoridad lo gobierne, fuera de la de su
propia razón.
Recordemos que la aportación al naturalismo fue definitiva, entendido no
como retrogradación al hombre salvaje, si no de volver a la vida originaria,
ajena a los convencionalismos sociales, el retorno al respeto de la personalidad
autentica.
2.5.1.- Ideal pedagógico de Rousseau
55
“Todo sale perfecto de manos del autor de la naturaleza. En las del
hombre todo se degenera.”
Rousseau centraba su pensamiento filosófico-pedagógico en la idea de
que la civilización era el origen de la corrupción del ser humano, siendo esta la
idea que mejor encajó en el desarrollo del pensamiento educativo de toda su
obra, en la medida en que lo condujo a dedicarse a los problemas relacionados
con la educación.
Señalaba Rousseau que en la sociedad estaba el origen de todos los
males de su época, aunque algunos pensadores de su tiempo le criticaban el
hecho de su despreocupación por los procedimientos que se podrían emplear
para terminar o minimizar dichos problemas, pero admitiendo los efectos de la
sociedad en que vive, Rousseau propone como alternativa de solución, la vía
de la transformación interna del hombre por medio de la educación, de ahí que
su papel en el desarrollo de las ideas pedagógicas sea de vital importancia.
Aunque Rousseau es producto de la ilustración filosóficamente
hablando, no por ello comulgaba con la idea generalizada del racionalismo,
sino que más bien encauzó sus ideas hacia el subjetivismo y la espontaneidad
emocional del naturalismo, es decir, en la vuelta de la humanidad hacia la
naturaleza libre de la maldad humana, para encontrar una libertad exenta de
los patéticos resultados de la civilización contemporánea, pues a cambio de los
valores civilizados como el racionalismo, la reflexión constante, el dominio, la
complejidad y la objetividad, Rousseau propuso los valores subjetivos del
naturalismo, como lo son la espontaneidad intuitiva, la libertad, la sencillez y la
subjetividad.
En los principios pedagógicos de Rousseau se puede entrever una
estructura formada por tres aspectos:
56
a).- Un principio histórico antropológico según el cual la sociedad
desfigura al hombre, cambiando su natural bondad en maldad.
b).- Una psicología de los instintos y las emociones.
c).- Una pedagogía que abarca la infancia, la adolescencia y aún la
primera juventud, cuya meta supone un cambio que pasa por diversas etapas:
el niño formado en el temple espartano y las habilidades y decisiones del
hombre de pocas necesidades que se basta a sí mismo; el adolescente de
elevados sentimientos, capaz en el trabajo intelectual y manual, y el hombre de
sociedad que encuentra el secreto de la conducta justamente en las leyes
naturales de su propia conciencia.
Rousseau criticó la educación tradicionalista, proponiendo como
alternativa una educación cuya finalidad primordial fuera la conservación de la
naturaleza humana, señalando que los educadores, en lugar de modelar al
hombre según sus propias ideas, lo hicieran procurando el desarrollo físico y
espiritual del niño de forma espontánea, consignando además que cada nuevo
conocimiento adquirido sea un acto creador para que la educación provenga
del propio interior del educando.
Lo interesante de la obra pedagógica de Rousseau reside en que hasta
ahora aparece fundada en la naturaleza peculiar del niño, con un claro sentido
paidocéntrico, por lo que se considera a Rousseau como el fundador de la
educación paidocéntrica porque incita a conocer al niño, ubicándolo como eje
del proceso educativo, es decir, el niño como tal y no como hombre en
miniatura.
Rousseau indicaba ya la necesidad de educar al niño desde su
nacimiento, debiendo impedir que adquiera hábitos negativos que lo conduzcan
57
a la esclavitud, por lo que existe la necesidad de colocarlo en estado de ser
siempre dueño de sí mismo, y de hacer todas las cosas según su voluntad.
Además Rousseau ignora la importancia de la razón; claro está que la
razón puede pervertirle, puede exagerar la disciplina intelectual y enseñarle al
niño hechos inútiles, pero con todo, la razón es el bien más glorioso del
hombre.
De todas las capacidades del hombre, la razón es la que tiene más
potencial de explotación. No cabe duda que Rousseau subestimó sus
posibilidades de correlación con el naturalismo.
Según el clásico postulado de poner en constante relación los
conocimientos de la psicología con las normas educativas, Rousseau
descubre nada menos que los principios psicopedagógicos de una enseñanza
activa y funcional, tan en boga actualmente.
En particular, los principios de la didáctica de Rousseau son los
siguientes:
Enseñar por el interés natural del niño y nunca por
el esfuerzo artificial, de ahí resulta que sigan vigentes sus postulados de
abandonar todo antes de fatigar al niño y de desgastar su interés inútilmente,
siendo preferible que aprenda poco a poco, a que haga algo en contra de su
voluntad y libertad.
Educación activa o auto activa, es la ventaja de
aprender por nosotros mismos, pues no debemos de acostumbrarnos a una
servil sumisión a la autoridad de los demás, sino que, ejercitando nuestra
razón, adquiramos cada vez más ingenio para conocer las relaciones de las
58
cosas, conexionando nuestras ideas e inventando instrumentos; en cambio,
adoptando todo lo que se nos imponga, el espíritu se desenvuelve torpe e
indiferente, como un hombre siempre vestido y servido por sus criados, que a
fin de cuentas pierde la actividad y el uso de sus miembros.
En fin, Rousseau recomienda que en el aprendizaje se vayan
relacionando las diversas representaciones que activamente surgen de la
conciencia.
Sin duda alguna, una de las partes más débiles de la obra de Rousseau
es la relacionada con la educación femenina, ya que la mujer pierde
importancia y sustantividad social en su obra, restándole valor autónomo al
señalar que la educación de las mujeres debe de ser relativa a los hombres,
gustándoles ser útiles y amar y honrar al hombre, haciéndole la vida agradable
y dulce, siendo estos –según Rousseau- los deberes de la mujeres de todos los
tiempos.
Gran parte del conocimiento filosófico-Pedagógico de Rousseau en
relación a la educación, quedó manifiesto en su “EMILIO”.
Emilio
Esta es la obra cumbre que expresa el ideal pedagógico de Rousseau,
en la que expone una nueva teoría de la educación, subrayando la importancia
de la expresión, antes que la represión, para que el niño sea equilibrado y
librepensador. “Emilio” es un excelente tratado pedagógico, rico en intuiciones
y orientaciones, el cual influyó demasiado en la voluntad popular y democrática,
como de los conservadores y románticos.
Emilio: análisis general
59
En el año de 1762, cuando Jean Jacques Rousseau contaba con 50
años de edad y con ideas pedagógicas y filosóficas inamovibles, publica su
“Emilio”, siendo éste uno de los libros que mayor significación haya tenido en
su época y aún en las posteriores, en lo relacionado con la educación.
“Emilio” contenía los principios de una nueva formación pedagógica, aún
admitiendo los defectos de la sociedad de su tiempo, por lo que Rousseau
propone como liberación a dichos males, la inmejorable idea de la educación
como la mejor arma interior para combatir dichos problemas, mediante la
transformación interna del hombre, ya que la degeneración de la evolución
social, en abierto contraste con las ideas sobre el progreso que se había
desarrollado en Inglaterra y que, de una u otra forma aparecían también como
la raíz de la reflexión de los ilustrados franceses, no parecían dejar otra salida
que la vuelta a una sociedad agraria primitiva, compuesta por pequeñas
comunidades de vida sencilla, muy próxima a una naturaleza salvaje donde
aún no existieran las desvirtuaciones que causa la vida civilizada, aunque estas
ideas le causaron a Rousseau más críticas por parte de otros pensadores que
no comulgaban con sus ideas, advirtiéndole que sería imposible un retorno a la
“salvaje naturaleza”, a escala de la sociedad moderna, a lo Rousseau
respondía que el modo más viable de evitar el aumento de la corrupción que la
civilización ejercía en la sociedad, era la educación de “EMILIO”.
En esta obra pedagógica afirmaba Rousseau que como adultos en favor
del bienestar de la humanidad, deberíamos de evitar al niño que se
contaminara con la obra corruptora de la civilización, y en contraparte, cultivar
amorosamente y con gran cuidado sus impulsos naturales y espontáneos, los
cuales eran siempre buenos.
Sostiene Rousseau en “Emilio”, que debemos de evitar la
intelectualización prematura de la emoción, para evitar que se deformen las
iniciales facultades intelectuales del niño, pues señala que el sentimiento
60
debería siempre de anteceder al pensamiento, y que el niño debe de ser
controlado únicamente por las cosas y jamás por la voluntad de los adultos.
El “hombre natural” quedaría entonces sustituido por el “hombre de
cultura” que niega la naturaleza y configura un entramado de reglas
convencionales o “artificiales” constitutivas a su vez de la sociedad, tanto como
del lenguaje y los “saberes” de los distintos pueblos.
La finalidad general de Rousseau en “Emilio” es la formación del hombre
natural, justificándose en el principio de que “todo está bien al salir de las
manos del autor de la naturaleza, pero que todo degenera al contacto con el
hombre.”
Rousseau hace un esbozo de la enseñanza intuitiva cuando “Emilio”
recorre guiado por su maestro la localidad en que vive, adquiriendo por
intuición, la visión inmediata de los conocimientos geográficos y de historia
natural.
A dos siglos de distancia de publicada la obra pedagógica de Jean
Jacques Rousseau, su pensamiento en relación a la educación sigue estando
vigente en varios aspectos de la actual manera de conducir el proceso de la
educación.
Libro primero
“Todo sale perfecto de manos del autor de la naturaleza”
Con este libro se inicia la disertación sobre la educación del niño, en
este caso de Emilio, desde que ve la luz primera, pues compete a la naturaleza
y a la madre, guiar los primeros pasos de Emilio en esta vida.
61
“Todo sale perfecto de manos del autor de la naturaleza, en las del
hombre todo degenera”, son las primeras palabras de la obra pedagógica de
Juan Jacobo Rousseau, las cuales durante dos siglos han dado la vuelta al
mundo, recibiendo desde entonces los más altos honores pero también las más
fuertes críticas en torno a la obra pedagógica cumbre de este insigne
Preceptor de la humanidad.
“A las plantas las endereza el cultivo, y a los hombres la educación.” Un
sabio precepto que compara la educación del ser humano con la naturaleza,
especificando que la educación empieza con la vida, recalcando también que la
vida se empieza con dificultad y sacrificio, pues débiles nacemos, necesitando
de la fuerza que ofrecen la inteligencia y la educación, que brindan
satisfactoriamente entre la naturaleza, los hombres y las cosas.
Libro segundo
Con “el segundo escalón de la vida”, es decir, cuando se acaba la
infancia y se empieza a hablar, se da inicio también al segundo libro de la obra
de Emilio, edad en la que se toman las primeras lecciones de “ánimo forzado”
para aprender a padecer, lecciones que se toman por sí mismo, aunque la
pedante manía de los adultos mueva a instruir a los niños en aquello que
podrán y deberán captar por sí solos, si tenemos la precaución de llevarle al
campo a que corra, juegue, se divierta y se caiga tantas veces como vuelva a
levantarse, ya que de los golpes proviene el beneficio de la libertad, pues no
perdamos de vista que “la humanidad tiene su lugar en el orden de las cosas, y
el niño el suyo en el orden de la vida humana”, por lo que es necesario
considerar al hombre en el hombre y al niño en el niño.
¡Hombre! Encierra tu existencia dentro de ti y no serás desgraciado
Libro tercero
62
“La adolescencia es época de flaqueza” dice Rousseau en la parte inicial
de su tercer libro, el cual está dedicado a la adolescencia, y en la que nos
predica que la debilidad del hombre proviene de la desigualdad existente entre
nuestra fuerza y nuestros deseos. En esta etapa, como hombre sería muy
débil, en cambio, como niño, se es muy fuerte.
Nuevamente en esta etapa, el deseo innato de bienestar y la
imposibilidad de satisfacer con plenitud este deseo, puede ser causa de
infelicidad del ser humano, iniciando con esto la curiosidad o principio natural
del corazón humano, siendo los sentidos los guías del espíritu en sus primeras
operaciones, por lo que sí el alumno atiende a los fenómenos de la naturaleza
y siente curiosidad ante su magnitud, al empezar por sí solo a satisfacer su
natural curiosidad, estará capacitado para inventar la ciencia, no solamente
aprenderla, además de que según Rousseau, no se trata de enseñarle las
ciencias al niño, sino más bien de inspirarle la afición a ellas, tratando de no
utilizar jamás la violencia o algo que le incomode.
Libro cuarto
“Dos veces, por decirlo así, nacemos: una para existir y otra para vivir
nuestra conservación. “Sin duda yerran los que miran a la mujer como un
hombre imperfecto.” “La fuente de nuestras pasiones, el origen y principio de
todas las demás, la única que nace con el hombre, y mientras vive nunca le
abandona, es el amor de sí mismo.
Todos los hombres nacen pobres y desnudos, siendo la sociedad quien
los convierte en cortesanos, en reyes o en potentados, aunque también puede
ser la sociedad quien los vuelva miserables y los colme de males, pesares y
63
necesidades, hasta causarles al fin la muerte, pues ningún mortal está exento
de ella
“Hay qué estudiar la sociedad por los hombres, y los hombres por la
sociedad”, es otro de los preceptos que nos enseña Rousseau, señalando
también que si queremos aprender Política, no nos olvidemos de la Moral, o
bien, que si es la moral la que nos interesa entender, que no por eso
desconozcamos la política, aunque creo que en la vida real esto es pocas
veces llevado a la práctica. .
“Es preciso haber vivido en pueblos rudos y sencillos, para saber hasta
qué edad puede una venturosa ignorancia dilatar la inocencia de los niños
Libro quinto
“Así como Emilio es hombre, Sofía debe ser mujer”.
Este quinto y último libro de la obra de Rousseau, bajo el título de
EMILIO, trata de la educación en la última parte de la juventud, además del
noviazgo y casamiento de Emilio con Sofía.
“No es bueno que el hombre esté solo. Emilio es hombre y le hemos
prometido una compañera, menester es dársela.” Si Rousseau predicaba una
educación en armonía con la naturaleza, la mujer tiene pues un papel
preponderante en este orden natural, acompañando y supliendo las
imperfecciones del hombre, aunque algo que se le pueda criticar a Rousseau
es la poca importancia que personalmente concedió a la educación de la mujer,
supeditándola al bienestar del hombre.
.
Otro consejo de Rousseau, por cierto de gran actualidad, es el siguiente:
“Apartarnos” de un gobierno violento, de una religión perseguidora y de las
costumbres perversas.
64
2.6.- La Filosofía de la Educación vista desde el punto de vista de:
SIGLO VII A.C. SIGLO IV A. C. SIGLO XIII SIGLO XVII Y XIX
SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XVIII
Conservadurismo
Educativo (Clásico Griegos)
Buscar imagen griega Pitágoras Cultivo de las matemáticas Los primeros modelos se expresaron en términos míticos a finales del siglo VII a. c. PRESOCRATICOS Pensadores griegos cronológicamente anteriores a Sócrates (Tales, Heráclito, Parménides, los Pitagóricos, etc.), se ocupan del mundo e intentan descubrir su unidad racional esencial
Idealismo Platónico
Platón: Concibe el CONOCIMIENTO, como el punto culminante de un proceso ascendente. Creencias y razonamiento, acceder al mundo de las ideas, es decir a la auténtica realidad.
Realismo
Aristotélico
Su filosofía se caracteriza por ser un movimiento filosófico y científico, basado en la experimentación. Creo un concepto de la sociedad, de la realidad y del hombre total mente diferente. Enfatizó la transformación de su sociedad política porque afianzó la libertad democrática, para derrotar al totalitarismo.
Liberalismo Doctrina económica, política y hasta filosófica que aboga como premisa principal por el desarrollo de la libertad personal individual y, a partir de esta para el progreso de la sociedad. Hoy en día se considera que el objetivo político del neoliberalismo es la democracia. Sistema que en la antigüedad era considerado como poco saludable. Debe distinguirse pues ente el liberalismo que propugna el cambio social de forma gradual y flexible y el radicalismo que considera el cambio social como
Juan Jacobo
Rousseau y el Naturalismo
Tanto en el orden pedagógico, como antes en el filosófico el pensador ginebrino dio el empujón final para que el naturalismo adquiriera plena carta de ciudadanía universal y de que fuese aceptado en todos los ambientes científicos y literarios de la segunda mitad del siglo XVIII: Lema volvamos a la NATURALEZA. Es un grito de angustia para rescatar al hombre del artificialismo..
65
algo fundamental que debe realizarse a través de distintos principios de autoridad.
66
III.- CORRIENTES CONTEMPORANEAS DE LA
FILOSOFIA EDUCATIVA
Objetivo.- Analizará diversas corrientes filosóficas que influyen en la
educación y posibilitan su fundamento.
Tras la filosofía crítica de Kant el Idealismo alemán se convertirá en la
corriente predominante en la Europa continental, a través de Hegel. El
existencialismo de Kierkegaard, tanto como el marxismo y el vitalismo de
Nietzsche serán, en buena medida, una reacción al Idealismo hegeliano que, en
cierto modo, consagra la identificación del yo trascendental kantiano con el Dios
del cristianismo. En Gran Bretaña, el desarrollo del positivismo utilitarista con
Bentham y J.S. Mill se inspira en los principios del empirismo, distinguiéndose del
positivismo "idealista" del francés A. Comte; en ambos casos, no obstante, se da
una preocupación por los temas sociales y por el bienestar de la humanidad que,
aunque en una dirección distinta, compartirán con el marxismo. Por lo demás, el
desarrollo de las ciencias y sus continuos éxitos hacen tambalear los cimientos de
la filosofía, que se ve sometida a fuertes críticas por parte de los defensores del
pensamiento científico, que encuentran en la ciencia el paradigma del
conocimiento verdadero. Hacia finales del siglo XIX, al desarrollo del historicismo
en Alemania, con Dilthey, y del pragmatismo en los Estados Unidos, con Pierce y
W. James, hemos de sumar el desarrollo de la fenomenología con Husserl. Todas
estas corrientes tienen su continuidad en el siglo XX, en el que destacarán
además los representantes del Filosofía Analítica, como Russell y Witgenstein, del
67
Estructuralismo, como Lévi-Strauss y Foucault, del Existencialismo, como Sartre, o
los de la Escuela de Frankfurt, como Adorno, Horkheimer y Habermas.
3.1.- Pragmatismo
La palabra pragmatismo proviene del vocablo griego praxis que significa
acción. Para los pragmatistas la verdad y la bondad deben ser medidas de
acuerdo con el éxito que tengan en la práctica. En el pragmatismo no existe el
conocer por conocer. Si algo no tiene un fin o uso determinado no hay razón para
que tal cosa exista.
El pragmatismo, como corriente filosófica idealista subjetiva que
considera la verdad desde el punto de vista de la utilidad social se le atribuye al
psicólogo y filósofo idealista norteamericano W. James y a Charles Sanders Peirce
entre otros.
El concepto es conocido desde tiempos anteriores a nuestra era v.b.
Polibio (208-125 a.n.e.) quien propuso que su historia fuera pragmática, es decir,
dirigida al conocimiento preciso y técnico de los hechos políticos. Según W. James
el pragmatismo no es propiamente una teoría filosófica, sino un "modo de pensar"
en el que tienen cabida teorías distintas y que puede aplicarse a diferentes
disciplinas.
Además es una escuela filosófica originada en los Estados Unidos a
finales del s. XIX. El Pragmatismo se caracteriza por la insistencia en las
consecuencias, utilidad y practicidad como componentes esenciales de la verdad.
El pragmatismo se opone a la visión de que los conceptos humanos y el intelecto
representan la realidad, y por lo tanto se contrapone a las escuelas filosóficas del
68
formalismo y el racionalismo. En cambio, el pragmatismo sostiene que sólo en la
lucha de los organismos inteligentes con el ambiente que los rodea es donde las
teorías y datos adquieren relevancia. El pragmatismo no sostiene, sin embargo,
que todo lo que es útil o práctico deba ser considerado como verdadero, o
cualquier cosa que nos ayude a sobrevivir meramente en el corto plazo; los
pragmáticos argumentan que aquello que debe ser considerado como es lo que
más contribuye al mayor bienestar humano en el más largo plazo. En la práctica,
esto significa que para los pragmáticos, las afirmaciones teóricas deben estar
relacionadas con prácticas de verificación--p.ej., uno debe ser capaz de hacer
predicciones y probarlas--y que finalmente las necesidades de la humanidad
deberían guiar el camino de la búsqueda humana.
Más sobre los orígenes el pragmatismo
Término procedente del griego "pragma" (acción). Corriente
filosófica que surge en los EEUU, en reacción contra el positivismo, a
finales del siglo XIX, impulsada por Charles Sanders Peirce y William
James, entre otros, quienes lo desarrollarán en direcciones distintas. En
general, el pragmatismo supone que el significado de una proposición
consiste en sus consecuencias futuras, por lo que los objetos han de
ser concebidos en función de los efectos prácticos que producen, o que
se espera que produzcan en el futuro. En William James, para quien lo
verdadero es lo ventajoso, (es decir, lo que resulta práctico o
satisfactorio), el pragmatismo alcanza también un desarrollo en el
ámbito de la moral.
Doctrina filosófica propuesta por el norteamericano William James (1842-
1910). Como protesta contra la especulación intelectualista de la época, pidió a
sus contemporáneos que olvidaran el problema de la «verdad» abstracta para
69
concentrarse en la acción. El pragmatismo identifica la verdad con lo que es eficaz
en la práctica y pone de relieve la responsabilidad moral implícita en toda actividad
intelectual. Aunque sus antecesores directos se hallan en el pensamiento
empirista de David Hume y en el positivismo de Augusto Comte, el Pragmatismo
es un producto típico de la espiritualidad norteamericana. Fueron sus principales
expositores, además de James, Charles S. Peirce (quien le dió el nombre), John
Dewey y el inglés Schiller, que lo llamó «humanismo» u «hominismo».
Tal doctrina parte de la idea de que:
No existe una verdad, sino que cada ser humano la posee por sí
mismo, lo que le permite resolver sus problemas. En sí, la verdad es lo que
funciona bien o lo que mejor le conviene al hombre (principio del pragmatismo).
Generalmente no entiende por utilidad práctica la confirmación de la
verdad objetiva mediante el criterio de la praxis sino aquello que satisface los
intereses subjetivos de los individuos (criterio practicista de la burguesía
norteamericana).
La división sujeto-objeto se establece únicamente dentro de los
marcos de la experiencia, siendo el conocimiento un conjunto de verdades
subjetivas.
El ser humano se separa de otros seres activos que, además, es
capaz de orientar su actividad según fines que han sido, en cierta medida,
creados o decididos por él de manera individual o colectiva.
El conocimiento mismo, en la interpretación pragmatista, es un tipo
de actividad: lo privativo del ser humano no sería el pensamiento o el
conocimiento en contraposición a la acción, sino la capacidad de actuar
reflexiva e intelectualmente.
Lo verdadero, lo satisfactorio y lo útil confluyen en el mismo lugar,
siendo su diferencia sólo de puntos de vistas.
70
Las acciones y fines constituyen el eje en que se sustenta la actitud
interpretativa del pragmatismo. Creer, investigar, teorizar, forman parte de un
conjunto de actividades sensitivas y manipulativas (observar, recordar, medir,
experimentar...), otras conceptuales y simbólicas (inferir, comparar,
generalizar, descomponer...), que se entrelazan con la conducta total para
lograr el cumplimiento de los fines propuestos.
El proceso del conocimiento está vinculado a lo que el hombre hace,
pero al mismo tiempo influye en lo que puede o quiere hacer, ampliando el
radio de su actividad y las expectativas asociadas a ella; esto es, la actividad
cognoscitiva también crea fines, que a su vez suscitan acciones ulteriores.
Lo característico del pragmatismo no es subordinar el pensamiento a
la acción sino redefinir la expresión del pensamiento mismo en teorías que
tratan de desentrañar la realidad; por lo tanto se ve como una actividad o una
forma de acción cuyas herramientas propias son los conceptos, palabras,
ideas, o en otros términos, signos.
La ciencia está sustentada en la búsqueda incondicional de teorías
cada vez más correctas, y quienes se encuentran en esa tarea no hacen otra
cosa que tratar de satisfacerse con los resultados que les produce su
descubrimiento.
La ciencia se caracteriza por mantener una relación indirecta con
respecto a la acción; y reconoce que el impulso de las investigaciones de las
necesidades de la teoría no están determinadas por la dimensión tecnológica
de la ciencia. La relativa independencia la actividad científica respecto del
contexto inmediato de las acciones, es consecuencia de una cierta división del
trabajo intelectual operada en la evolución de la cultura.
A la fe racionalista, que expresa que no hay libertad sin
conocimiento, el pragmatismo postula, como adición que no hay verdad sin
interés.
71
La prueba de la verdad de una proposición es su utilidad práctica; el
propósito del pensamiento es guiar la acción, y el efecto de una idea es más
importante que su origen.
Afirma que la verdad está relacionada con el tiempo lugar y objeto
de la investigación y que el valor es inherente tanto por sus medios como por
sus fines.
En lo que respecta a su influencia para la pedagogía, por ejemplo, J.
Dewey desconoció la acción del maestro y la importancia del conocimiento
científico pues consideró la enseñanza como el proceso de elaboración de la
experiencia personal a partir de la interpretación de los hechos según cada cual.
La tesis de la actividad de los alumnos fue realizada en el sistema pedagógico de
los pragmáticos en forma de método de proyectos por lo que cada cual podía
elaborar su propio diseño de aprendizaje.
No obstante si bien algunas de las tesis de Dewey eran progresistas para
la época, ellas eran en esencia conservadora, utilitarista y más tarde reaccionaria
llegándosele a llamar "filosofía del negocio". Por eso rechazó cualquier regla moral
establecida de antemano puesto que el único criterio en este sentido estaba en la
solución, con éxito, de las dificultades y en el logro de los ideales personales
individuales.
Por el influjo que tuvo en la educación es válido destacar otras de las
peculiaridades que caracterizan la pedagogía pragmática:
Marcado desprecio hacia los conocimientos teóricos.
Excesivo utilitarismo de los programas de enseñaza.
Por su esencia, refleja la ideología de la intelectualidad burguesa, la
cual en un determinado momento de desarrollo trató de armonizar los intereses
de clase como única forma de mantener su status político.
72
Varias de sus ideas se aproximan al conductismo según el cual la
conducta se determina por el estímulo-reacción.
Se ve la educación como un proceso pasivo.
Se alega que la fuente del crecimiento y la humanización se
encuentra en cada persona desechándose el papel de las relaciones que
establecen ellas en producción y reproducción de su vida material, relaciones
que, en última instancia, coadyuvan a la formación de la personalidad.
Defiende la autorrealización del individuo como objeto de la
educación; ello justificó las más diversas formas de discriminación sujetas a
leyes fatalistas.
Esta tendencia tuvo un gran predominio en los estudios filosóficos
desarrollados en los Estados Unidos de Norteamérica durante el primer cuarto del
siglo XX y, por consiguiente, muchas de sus ideas penetraron directamente en
Cuba por esa vía.
Y sin negar, por la parte que le corresponde, su contribución al
pensamiento científico, el pragmatismo es irracionalista, ve las leyes y formas de
la lógica como ficciones útiles. En sociología va desde el culto a la personalidad a
la apología de la democracia burguesa y de ahí a la defensa abierta del racismo y
fascismo.
3.1.1.- CHARLES SANDERS PEIRCE
Seguramente que Charles Peirce (1839-1914) se hubiera opuesto a
ser considerado como positivista, y no es remoto que hubiera tenido razón. Porque
para un personaje tan complejo y tan cambiante a través de su larga y activa vida,
una sola categoría filosófica es demasiado poco. Peirce nació en Cambridge,
Massachusetts, hijo del profesor "Perkins" de matemáticas y astronomía de la
73
Universidad de Harvard, y el matemático norteamericano más distinguido de su
tiempo. Como era de esperarse, desde temprano el joven Peirce mostró gran
facilidad y afición por las matemáticas la física y la química, en la que se graduó
cum laude en 1863, a los 24 años de edad. Los siguientes 15 años los pasó como
astrónomo en el observatorio de Harvard y como físico en una oficina técnica del
gobierno de su país (de la que su padre era jefe); a partir de 1866 empezó a
publicar trabajos sobre lógica y filosofía de la ciencia. En 1879 fue nombrado
conferencista de lógica en la nueva universidad Johns Hopkins, en Baltimore,
Maryland. En ese ambiente académico permaneció por cinco años, al cabo de los
cuales lo abandonó; tres años más tarde recibió una cuantiosa herencia, con la
que se retiró a Milford, Pennsylvania, donde vivió más o menos aislado los últimos
27 años de su vida. Aunque se casó dos veces, no tuvo hijos. Aparentemente
Peirce tenía un carácter difícil y un estilo de vida desordenado, por lo que fue
rechazado socialmente por los puritanos de Nueva Inglaterra, aunque le
reconocieron su eminencia filosófica, al grado de que en vida se transformó en
una leyenda que ocasionalmente llegaba a Harvard y daba conferencias sobre
lógica y filosofía con gran éxito. La quiebra bancaria de 1893 lo arruinó, tuvo que
vender todas sus propiedades pero todavía quedó endeudado por el resto de su
vida, y a partir de 1905, a los 66 años de edad, vivió de la caridad pública. En
1907 William James presidió una colecta para proporcionarle un apoyo económico
mínimo, que lo ayudó a resolver las necesidades más elementales hasta su
muerte, ocurrida en la primavera de 1914.
La teoría del razonamiento correcto, de lo que el razonamiento
debería ser, no de lo que es... no es [la lógica] la ciencia de cómo pensamos,
sino de cómo deberíamos pensar... para que pensemos lo que es cierto).
74
Considerando la amplitud y variedad de sus intereses, Peirce
seguramente fue el último aspirante al título de Leonardo, de ciudadano universal
de la cultura: escribió sobre lógica, epistemología, semiótica, el método científico,
metafísica, cosmología, ontología, ética, estética, fenomenología, religión y
especialmente sobre matemáticas. En estas líneas sólo prestaremos atención a
sus comentarios sobre el método científico, no sólo por su conexión con el
positivismo tradicional sino también por sus compromisos con el mundo capitalista
actual. Conviene señalar que las ideas de Peirce sobre la estructura de la ciencia
y su metodología fueron cambiando a lo largo de los años; al principio de su
carrera fue kantiano y al final terminó siendo el fundador del pragmatismo. Su
interés central fue siempre la lógica, por medio de la que intentó desarrollar un
método científico que fuera común a todas las ciencias, o por lo menos un
procedimiento para generar hipótesis. Peirce distinguía tres formas diferentes de
razonamiento o "inferencia" usadas habitualmente en la ciencia: deducción,
inducción e hipótesis. Peirce bautizó al proceso mental por medio del que se
generan hipótesis como "retroducción" o "abducción", y postuló que su lógica no
podía separarse de la forma como se pondría a prueba y que está implícita en su
formulación, o sea la manera como sería capaz de explicar los hechos para cuya
explicación se propone. Para presentar una hipótesis es necesario que sus
consecuencias se deduzcan y se pongan a prueba. Es en estos tres pasos
sucesivos (abducción o retroducción de una hipótesis, deducción de sus
consecuencias y pruebas que se realizan) en los que se basa el método científico
de Peirce, aunque desde luego el más importante para él y para nosotros es el
primero, o retroducción. Pero respecto al procedimiento mismo para generar
hipótesis, a la lógica del descubrimiento científico, Peirce no dice nada
concluyente; cuando más, ofrece razones para que ciertas hipótesis se prefieran
sobre otras.
Peirce también insistió, de acuerdo con los positivistas, en que las
hipótesis debían poderse poner a prueba experimentalmente, y que tal cosa,
75
ahora en desacuerdo con los positivistas, debería hacerse con la mayor economía,
no sólo de ideas sino también de trabajo, de tiempo y de recursos materiales. Aquí
Peirce le concedía importancia a factores socioeconómicos en la estructura misma
del conocimiento, lo que Mach nunca hubiera aceptado. Pero además, Peirce
tenía un concepto más amplio que los positivistas de significado de las pruebas
experimentales, que para estos últimos deberían ser objetivas y directas, mientras
que para Peirce las demostraciones indirectas también eran igualmente
aceptables. Finalmente, Peirce introdujo el pragmatismo como un elemento nuevo
en el método científico, insistiendo en la importancia de las consecuencias
prácticas de todo el proceso. En sus propias palabras:
La única forma de descubrir los principios sobre los que debe basarse la
construcción de cualquier cosa es considerando qué es lo que se va a hacer con
ella una vez que esté construida.
76
Manuscrito de un artículo original de Peirce.
El pragmatismo, además de tener fuertes relaciones con el
instrumentalismo, también está emparentado de cerca con el relativismo, una
corriente filosófica antigua pero que en el campo de la ciencia es relativamente
reciente y ha tenido un impacto importante, sobre todo a partir de los trabajos de
Kuhn. Pero el pragmatismo también tiene elementos positivistas, que ya hemos
señalado y que explican su inclusión en este capítulo. Todas estas influencias e
interacciones entre las distintas "escuelas" mencionadas son convenientes en
teoría pero falsas (o mejor aún, parciales y artificiales) en la realidad.
El darwinismo prevaleció como filosofía en los últimos escritos de
Peirce.
En relación con los aspectos prácticos, la lógica es la cualidad más
útil que pueden poseer los animales y, por lo tanto, debe haberse derivado de la
acción de la selección natural.
3.1.2.- JOHN DEWEY
Nació el 20 de octubre de 1859 en Burlington, Vermont, Estados
Unidos. Graduado en Artes en la Universidad de Vermont en 1879, se doctoró en
Filosofía en la Universidad de John Hopkins en 1884. Inició su carrera en la
Universidad de Michigan, donde enseña entre los años 1884 y 1888.
Posteriormente fue profesor en las universidades de Minnesota, Chicago y
Columbia desde 1904 hasta su jubilación como profesor emérito en 1931. Estudió
los sistemas educativos de México, China, Turquía, Japón y la Unión Soviética.
Durante su residencia en Chicago, se interesó en la reforma de la teoría y de la
práctica educativa. Contrastó sus principios educativos en la famosa escuela
laboratorio de carácter experimental, denominado Escuela Dewey, instituido en la
77
Universidad de Chicago en 1896. Concibió la escuela como un espacio de
producción y reflexión de experiencias relevantes de vida social que permite el
desarrollo de una ciudadanía plena. Sostenía que lo ofrecido por el sistema
educativo de su época no proporcionaba a los ciudadanos una preparación
adecuada para la vida en una sociedad democrática. El «método experimental» de
su pedagogía se basa en la educación de la destreza individual, de la iniciativa y
del espíritu de empresa en detrimento de la adquisición de conocimientos
científicos. Sus escritos influyeron en los profundos cambios experimentados en la
pedagogía de Estados Unidos en los inicios del siglo XX. Como filósofo, subrayó
todo lo práctico, esforzándose en demostrar cómo las ideas filosóficas pueden
actuar en los asuntos de la vida diaria. Su planteamiento lógico y filosófico era de
cambio permanente, adaptándose a las necesidades y a las circunstancias. El
proceso de pensamiento en su filosofía es un medio de planificar la acción y de
superar los obstáculos entre lo que hay y lo que se proyecta. Activista político,
defendió los planteamientos progresistas, algunas veces radicales, respecto de los
asuntos internacionales y de los problemas económicos. Su abundante obra se
muestra en libros como Psicología (1887), La escuela y la sociedad (1889),
Democracia y Educación (1916), La reconstrucción en la filosofía (1920),
Naturaleza humana y conducta (1922), La búsqueda de la certeza (1929), El arte
como experiencia (1934), Lógica: la teoría de la pregunta (1938) y Problemas del
hombre (1946). Falleció el 1 de junio de 1952, a la edad de 92 años.
John Dewey es el principal representante de la escuela activa,
considerando a la escuela como institución social.
Sus ideas pedagógicas inspiraron el método activo desarrollado por
su continuador: Kilpatrick, el "Método de Proyectos".
78
A lo largo de su extensa carrera, Dewey desarrolló una filosofía que
abogaba por la unidad entre la teoría y la práctica, unidad que ejemplificaba en su
propio quehacer de intelectual y militante político. Su pensamiento se basaba en la
convicción moral de que “democracia es libertad”, por lo que dedicó toda su vida a
elaborar una argumentación filosófica para fundamentar esta convicción y a militar
para llevarla a la práctica (Dewey, 1892, Pág. 8). El compromiso de Dewey con la
democracia y con la integración de teoría y práctica fue sobre todo evidente en su
carrera de reformador de la educación.
Cuando se hizo cargo de su puesto en la universidad de Chicago en
el otoño de 1894, Dewey escribía a su esposa Alice Chipman : “A veces pienso
que dejaré de enseñar directamente filosofía, para enseñarla por medio de la
pedagogía” (Dewey, 1894).
Democracia y educación fue lo que más se parecía a un resumen de
“toda su postura filosófica” (Dewey, 1916). No es una casualidad, observaba, si
como él, muchos grandes filósofos se interesan por los problemas de la
educación, ya que existe “una estrecha y esencial relación entre la necesidad de
filosofar y la necesidad de educar”. Si filosofía es sabiduría –la visión de una
“manera mejor de vivir”–, la educación orientada conscientemente constituye la
praxis del filósofo. “Si la filosofía ha de ser algo más que una especulación ociosa
e in verificable, tiene que estar animada por el convencimiento de que su teoría de
la experiencia es una hipótesis que sólo se realiza cuando la experiencia se
configura realmente de acuerdo con ella, lo que exige que la disposición humana
sea tal que se desee y haga lo posible por realizar ese tipo de experiencia”. Esta
configuración de la disposición humana puede conseguirse mediante diversos
agentes, pero en las sociedades modernas la escuela es el más importante y
como tal constituye un lugar indispensable para que una filosofía se plasme en
“realidad viva” (Dewey, 1912-1913, Págs. 298, 306 y 307).
79
Para llegar a la finalidad formativa del conocimiento, John Dewey enuncia
tres etapas fundamentales:
Los hechos y acontecimientos científicos.
Las ideas y razonamientos.
La aplicación de los resultados a nuevos hechos específicos.
Para aplicar estos principios en la escuela, dice Dewey que “las
etapas formales indican cuáles son los puntos que deben tener en cuenta los
maestros cuando se preparan para dar una lección, no las que deban seguirse
para enseñar
La nueva intuición de la vida está en la base de la escuela activa.
Sus ideas pedagógicas están íntimamente ligadas a su pragmatismo y su
instruyentalismo. Se debe aprender haciendo, resolviendo problemas concretos y
personales, y no escuchando.
Dice Dewey: “Toda educación deriva de la participación del
individuo en la conciencia social de la especie.
De tal modo concibe Dewey la ciencia de la educación. ¿Cómo la
define, en consecuencia? Como "la suma total de procesos por los cuales una
comunidad o un grupo social, pequeño o grande, transmite sus poderes y
sus objetivos adquiridos, a fin de asegurar su propia existencia y su
crecimiento continuado". Con esta definición -en la que ratifica el poder de la
educación como instrumento de dominación- la entiende entonces como una
necesidad social, que obedece a circunstancias especiales: nacimiento y muerte,
diferencia de edades, etc. De este modo existen dos educaciones: una formal y
otra no formal; la primera dada por la escuela; la segunda, por toda la sociedad.
Para su concepto de educación social, el vehículo de la comunicación es casi
80
una definición. "No solamente la sociedad continúa existiendo por transmisión, por
comunicación, sino que ella puede ser propiamente concebida como existiendo en
transmisiones, en comunicaciones", escribe en Democracia y educación, a lo que
agrega: "Los hombres viven en una comunidad, en razón de cosas que tienen en
común, y la comunicación es el medio como poseen cosas en común.
Dewey considera a la educación como una ciencia en formación;
ciencia por "la existencia de métodos de investigación" en su proceso, que
permiten comprender mejor los hechos a los que se les aplica, aunque no
acepta la existencia de una ciencia especial de la educación, lo que para
Claparède no es más que la pedagogía general. Para su formación deberá
utilizarse la abstracción y la sistematización, ya que:
No hay ciencia sin abstracción, y la abstracción significa que ciertos
acontecimientos son transferidos del dominio de la experiencia práctica y familiar
al dominio de las investigaciones reflexivas o teóricas; 28
Y la sistematización, porque:
Ninguna ciencia real está formada de conclusiones aisladas... La ciencia
no aparece en tanto estos diversos descubrimientos no estén encadenados en
conjunto para formar un sistema relativamente coherente; es decir, en tanto que
ellos no se confirmen, no se esclarezcan recíprocamente.29
Esta ciencia así formada estará, entonces, al servicio del arte de la
educación, entre cuyos términos tan discutidos Dewey no encuentra ninguna
oposición, y si la hubiera se colocaría "del lado de los que sostienen que la
educación es un arte.
3.1.3.- WILLIAM JAMES.
81
Nace el 11 de enero de 1842 en New York y muere el 26 de agosto de
1910 en Hampshire) Filósofo estadounidense con una larga y brillante carrera en
la Universidad de Harvard donde fue profesor de Psicología. En 1907 publica
Pragmatismo, en donde expresa que el pragmatismo es un método que se
identifica con el empirismo. Tiene cuidado de definirlo como método y que por
tanto no conduce a ningún resultado concreto sino que es un modo de enfrentarse
al mundo.
Obra: su obra monumental de psicología científica “Principios de
Psicología” (1890).
11 de enero de 1842 en NEW York - 26 de agosto de 1910 en New
Hampshire) Filósofo estadounidense con una larga y brillante carrera en la
Universidad de Harvard, donde fue profesor de psicología.
Representó un influyente papel en la difusión del pragmatismo. Por otra
parte, su pensamiento se relaciona con una doctrina que él mismo llamó
empirismo radical. Produjo por un lado Principios de psicología (1890), obra
monumental de psicología científica, y por otro lado Las variedades de la
experiencia religiosa (1902), culminación de una trayectoria vital apasionante.
Entusiasta investigador de los procesos subliminales de la conciencia y de los
fenómenos paranormales, escandalizó el mundo científico de su tiempo cuando
defendió el ejercicio libre de los healers (curanderos mentales) y de terapias como
la mind-cure.
En 1904 publicó ¿Existe la conciencia? donde pretendía demostrar que el
dualismo tradicional entre sujeto y objeto era una barrera para una sólida
82
concepción de la epistemología y había que abandonar la autoconciencia como
una entidad opuesta al mundo material.
En 1907 publica Pragmatismo, en donde expresa que el pragmatismo es
un método que identifica con el empirismo. Tiene cuidado de definirlo como
método y que por tanto no conduce a ningún resultado concreto sino que es un
modo de enfrentarse al mundo.
3.2.- Marxismo
El marxismo es el conjunto de doctrinas políticas y filosóficas derivadas de
la obra de Karl Marx, filósofo, economista, periodista y revolucionario del siglo XIX
y de su amigo Friedrich Engels. Marx y Engels se basaron en la filosofía de Hegel
y de Feuerbach, ambos alemanes, la economía política de Adam Smith, la
economía ricardiana y el socialismo Francés del siglo XIX para desarrollar una
crítica de la sociedad que es tanto científica como revolucionaria. Esta crítica
alcanzó su expresión más sistemática en su obra más importante, El Capital. Es
en efecto, descubrir la ley económica que preside el movimiento de la sociedad
moderna, es decir, de la sociedad capitalista, burguesa. El estudio de las
relaciones de producción de una sociedad dada, históricamente determinadas, en
su aparición desarrollo y decadencia: tal es el contenido de la doctrina económica
de Marx.
83
Bibliografía de Carlos Marx
Carlos Marx nació el 5 de mayo de 1818 en Tréveris (ciudad de la Prusia
renana). Su padre era un abogado judío, convertido en 1824 al protestantismo. La
familia de Marx era una familia acomodada, culta, pero no revolucionaria. Después
de terminar en Tréveris sus estudios de bachillerato, Marx se inscribió en la
universidad, primero en la de Bonn y luego en la de Berlín, estudiando
jurisprudencia y, sobre todo, historia y filosofía. En 1841 terminó sus estudios
universitarios, presentando una tesis sobre la filosofía de Epicuro. Por sus
concepciones, Marx era entonces todavía un idealista hegeliano. En Berlín se
adhirió al círculo de los "hegelianos de izquierda" (Bruno Bauer y otros), que se
esforzaban por extraer de la filosofía de Hegel conclusiones ateas y
revolucionarias.
En 1843, Marx se casó en Kreuznach con Jenny von Westphalen, amiga
suya de la infancia, con la que se había comprometido cuando todavía era
estudiante. Su esposa pertenecía a una reaccionaria familia aristocrática de
Prusia. Su hermano mayor fue ministro del Interior en Prusia durante una de las
épocas más reaccionarias, desde 1850 hasta 1858. En 1843 Marx se trasladó a
París con objeto de editar en el extranjero una revista de tendencia radical en
colaboración con Arnold Ruge. De esta revista, titulada Anales franco-alemanes,
sólo llegó a ver la luz el primer fascículo. Las dificultades con que tropezaba la
difusión clandestina de la revista en Alemania y las discrepancias surgidas entre
Marx y Ruge hicieron que se suspendiera su publicación. En los artículos de Marx
en los Anales vemos ya al revolucionario que proclama la necesidad de una
"crítica implacable de todo lo existente", y, en particular, de una "crítica de las
armas", que apele a las masas y al proletariado.
84
En septiembre de 1844 llegó a París, por unos días, Federico Engels,
quien se convirtió, desde ese momento, en el amigo más íntimo de Marx. Ambos
tomaron conjuntamente parte activísima en la vida, febril por entonces, de los
grupos revolucionarios de París (especial importancia revestía la doctrina de
Proudhon, a la que Marx ajustó cuentas resueltamente en su obra Miseria de la
filosofía, publicada en 1847) y, en lucha enérgica contra las diversas doctrinas del
socialismo pequeño burgués, forjaron la teoría y la táctica del socialismo proletario
revolucionario, o comunismo (marxismo).
En 1845, a instancias del gobierno prusiano, Marx fue expulsado de París
como revolucionario peligroso, instalándose entonces en Bruselas. En 1847, Marx
y Engels se afiliaron a una sociedad secreta de propaganda, la Liga de los
Comunistas, tuvieron una participación destacada en el II Congreso de esta
organización (celebrado en Londres en noviembre de 1847) y por encargo del
Congreso redactaron el famoso Manifiesto del Partido Comunista que apareció en
febrero de 1848. En esta obra se traza, con claridad y brillantez geniales, una
nueva concepción del mundo: el materialismo consecuente, aplicado también al
campo de la vida social; la dialéctica como la doctrina más completa y profunda
del desarrollo; la teoría de la lucha de clases y de la histórica misión revolucionaria
universal del proletariado como creador de una nueva sociedad, la sociedad
comunista.
Al estallar la revolución de febrero de 1848, Marx fue expulsado de
Bélgica. Se trasladó nuevamente a París, y desde allí, después de la revolución de
marzo, marchó a Alemania, más precisamente, a Colonia. Desde el 1 de junio de
1848 hasta el 19 de mayo de 1849, se publicó en esta ciudad la Nueva Gaceta del
Renana, de la que Marx era el redactor jefe. El curso de los acontecimientos
85
revolucionarios de 1848 a 1849 vino a confirmar de manera brillante la nueva
teoría, como habrían de confirmarla en lo sucesivo los movimientos proletarios y
democráticos de todos los países del mundo. En 1849, también público
Contribución a la Critica de la Economía Política donde se encuentra la
formulación más clara del materialismo histórico.
El 28 de septiembre de 1864 se fundó en Londres la famosa Primera
Internacional, la "Asociación Internacional de los Trabajadores". Marx fue el alma
de esta organización, el autor de su primer "Llamamiento" y de gran número de
sus resoluciones, declaraciones y manifiestos. Unificando el movimiento obrero de
los diferentes países, orientando por el cauce de una actuación conjunta a las
diversas formas del socialismo no proletario, premarxista. Marx fue forjando la
táctica común de la lucha proletaria de la clase obrera en los distintos países.
Después de la caída de la Comuna de París en 1871, que Marx analizó (en La
guerra civil en Francia, 1871) de modo tan profundo, certero, brillante y eficaz,
como revolucionario y a raíz de la escisión de la Internacional provocada por los
bakuninistas , esta última ya no pudo seguir existiendo en Europa. Después del
Congreso de La Haya (1872), Marx consiguió que el Consejo General de la
Internacional se trasladase a Nueva York. La primera Internacional había cumplido
su misión histórica y dejaba paso a una época de desarrollo incomparablemente
más amplio del movimiento obrero en todos los países del mundo, época en que
este movimiento había de desplegarse en extensión, con la creación de partidos
obreros socialistas de masas dentro de cada Estado nacional.
Su intensa labor en la Internacional y sus actividades teóricas, aún más
intensas, minaron definitivamente la salud de Marx. Prosiguió su obra de
reelaboración de la economía política y se consagró a terminar El Capital, el único
86
volumen que termino en vida fue el primero y se publico en 1867 el resto fue
publicado por Engels tras su muerte.
El 2 de diciembre de 1881 murió su esposa de cáncer y a partir de aquí,
comenzó su declive definitivo.
El 14 de marzo de 1883 Marx se quedó dormido apaciblemente para
siempre en su sillón. Fue sepultado junto con su mujer, en el cementerio
londinense de Highgate. Allí, ante su tumba, Engels pronuncio un discurso
(panegírico) en el que, con la exaltación propia del amigo y discípulo, afirmaba en
su frase final: “Su nombre vivirá a través de los siglos, y con él su obra.
Filosofía Marxista
Nacimiento del marxismo.
El marxismo surge en una época de gran auge de las luchas sociales y
de un importante desarrollo del conocimiento científico.
Para fines del siglo XVIII y comienzos del XIX, habíase desplomado el
régimen feudal y el capitalismo se había establecido en Inglaterra y Francia
principalmente, Alemania y otros países de Europa estaban en vías de él.
Junto a esta nueva formación económico-social aparecían nuevas
clases sociales que protagonizaban la historia; la burguesía y el proletariado; y
nuevas relaciones entre ellas se establecían. Estas relaciones en un comienzo no
se expresaron como contradictorias ya que ambas clases sociales estaban
interesadas en dejar atrás al feudalismo y en crear un orden social nuevo. Pero no
pasó mucho tiempo para que este orden nuevo descubriera su verdadera
naturaleza y las promesas de "libertad" de los burgueses se convirtieron en
87
libertad para enriquecerse unos y los otros quedaron "libres" de toda propiedad
excepto su capacidad de crear riquezas para los dueños de los medios de
producción (los burgueses).
Las condiciones de vida del pueblo, se deterioraron progresivamente y
las contradicciones entre las clases dieron origen a un clima de luchas sociales. El
auge que significó el período en términos productivos, impulsó el desarrollo
científico y técnico, esto junto a las nuevas clases sociales, en particular el
Proletariado, que traía consigo nuevas cualidades de organización, crearon las
condiciones para que se hiciera necesario el surgimiento de una nueva
herramienta teórica capaz de interpretar el mundo de acuerdo a las nuevas
exigencias; que las antiguas no podían responder.
Marx no partió de "cero", sino que existía todo un desarrollo de los
distintos campos del conocimiento que dieron la base o el punto de apoyo para la
formulación de esta nueva teoría.
En el terreno de la filosofía Hegel, un idealista alemán, había
desarrollado la dialéctica que comenzaran los filósofos griegos; y Ludwig Feurbach
había profundizado en el materialismo que comenzara con los antiguos hindúes y
griegos como Demócrito y Epicuro y continuado por Bacón, Locke y Diderot entre
muchos otros en los siglos que precedieron a la época de Marx y Engels.
También en el campo de la economía política existía un avance.
Aunque incapaz de dar respuesta a los requerimientos del momento histórico.
Economistas como Adam Smith y David Ricardo, habían penetrado en los
secretos del sistema capitalista de producción, pero incapaces aún de revelar su
verdadera esencia, sin embargo, significaron avances en ese terreno;
principalmente la teoría del valor en relación al trabajo de Ricardo.
88
En el campo social existía la experiencia del socialismo utópico francés
con representantes como Fourier , Saint-Simón y R. Owen.
Como podemos ver existía la necesidad de una nueva teoría como
herramienta efectiva en la interpretación de los distintos fenómenos, y existían las
condiciones para ello. Marx y Engels resolvieron esta necesidad dándose a la
tarea titánica de reunir todo lo mejor del conocimiento de la época y
confrontándolo con la realidad, dar vida a esta nueva filosofía que hoy conocemos
como marxismo, y que está formada por la filosofía marxista: materialismo
dialéctico y materialismo histórico; la economía política marxista y el socialismo
científico.
El marxismo vino a proporcionar a los protagonistas del progreso, la
herramienta necesaria para entender la realidad, comprender sus íntimas
relaciones, sus fuerzas motrices, etc.; como también la herramienta teórica para la
creación de las formas necesarias para su transformación. Ésta es la importancia
histórica del marxismo.
Lo principal en la filosofía Marxista es la solución que se da al problema
filosófico fundamental sobre la relación del pensar y el ser.
El materialismo dialéctico es la base, el fundamento de toda la teoría
marxista, es el lente preciso a través del cual se descubren y desnudan los
fenómenos naturales, sociales y del pensamiento. Se sustenta en la concepción
filosófica materialista y en el método de análisis de la "dialéctica".
89
Es la aplicación de esta concepción materialista y el método dialéctico a
la sociedad lo que constituye la otra parte de la filosofía marxista el materialismo
histórico y el materialismo dialéctico y el histórico.
Para Marx. "La unidad del mundo no existe en su ser, sino en su
materialidad, que ha sido demostrada en el largo y penoso desarrollo de la
filosofía y de las ciencias naturales. El movimiento es la forma de existencia de la
materia. Jamás, ni en parte alguna, ha existido ni puede existir materia sin
movimiento, ni movimiento sin materia.
Marx y Engels, afirmaban que; "La naturaleza es la confirmación de la
dialéctica, y precisamente son las modernas ciencias naturales las que nos han
brindado un extraordinario acervo de datos y enriquecido cada día que pasa,
demostrando con ello que la naturaleza se mueve, en última instancia,
dialéctica, y no metafísicamente."
La gran idea fundamental escribe Engels de que el mundo no se
compone de un conjunto de objetos terminados y acabados, sino que
representa en sí un conjunto de procesos, en el que las cosas que parecen
inmutables, al igual que sus imágenes mentales en nuestro cerebro, es decir,
los conceptos, se hallan sujetos a un continuo cambio, a un proceso de
nacimiento y muerte; esta gran idea fundamental se encuentra ya tan arraigada
desde Hegel en la conciencia común, que apenas habrá alguien que la discuta
en su forma general. Pero una cosa es reconocerla de palabra y otra aplicarla
en cada caso particular y en cada campo de investigación." "Para la filosofía
dialéctica no existe nada establecido de una vez para siempre, nada absoluto,
consagrado; en todo ve lo que hay de perecedero, y no deja en pie más que el
proceso ininterrumpido del aparecer y desaparecer, del infinito movimiento
90
ascensional de lo inferior a lo superior. Y esta misma filosofía es un mero reflejo
de ese proceso en el cerebro pensante." Así, pues, la dialéctica es, según Marx,
"la ciencia de las leyes generales del movimiento, tanto del mundo exterior
como del pensamiento humano".
Este aspecto revolucionario de la filosofía hegeliana es el que Marx
recoge y desarrolla. El materialismo dialéctico "no necesita de ninguna filosofía
situada por encima de las demás ciencias". De la filosofía anterior queda en pie
"la teoría del pensamiento y sus leyes, es decir, la lógica formal y la dialéctica".
Y la dialéctica, tal como la concibe Marx, y también según Hegel, abarca lo que
hoy se llama teoría del conocimiento o gnoseología, ciencia que debe enfocar
también su objeto desde un punto de vista histórico, investigando y
generalizando los orígenes y el desarrollo del conocimiento, y el paso de la falta
de conocimiento al conocimiento.
En nuestro tiempo, la idea del desarrollo, de la evolución, ha penetrado
casi en su integridad en la conciencia social, pero no a través de la filosofía de
Hegel, sino por otros caminos. Sin embargo, esta idea, tal como la formularon
Marx y Engels, apoyándose en Hegel, es mucho más completa, mucho más rica
en contenido que la teoría de la evolución al uso. Es un desarrollo que, al
parecer, repite etapas ya recorridas, pero de otro modo, sobre una base más
alta ("negación de la negación"), un desarrollo, por decirlo así, en espiral y no
en línea recta; un desarrollo que se opera en forma de saltos, a través de
cataclismos y revoluciones, que significan "interrupciones de la gradualidad"; un
desarrollo que es trasformación de la cantidad en calidad, impulsos internos de
desarrollo originados por la contradicción, por el choque de las diversas fuerzas
y tendencias, que actúan sobre determinado cuerpo, o dentro de los límites de
un fenómeno dado o en el seno de una sociedad dada; interdependencia íntima
91
e indisoluble concatenación de todos los aspectos de cada fenómeno (con la
particularidad de que la historia pone constantemente al descubierto nuevos
aspectos), concatenación que ofrece un proceso de movimiento único, universal
y sujeto a leyes; tales son algunos rasgos de la dialéctica, teoría mucho más
empapada de contenido que la (habitual) doctrina de la evolución.
La Concepción Materialista de la Historia
La conciencia de que el viejo materialismo era una teoría inconsecuente,
incompleta y unilateral llevó a Marx a la convicción de que era indispensable
"poner en consonancia la ciencia de la sociedad con la base materialista y
reconstruirla sobre esta base". Si el materialismo en general explica la conciencia
por el ser, y no al contrario, aplicado a la vida social de la humanidad exige que la
conciencia social se explique por el ser social. "Para Marx la tecnología pone al
descubierto la relación activa del hombre con la naturaleza, el proceso inmediato
de producción de su vida, y, a la vez, sus condiciones sociales de vida y de las
representaciones espirituales que de ellas se derivan." Y en el "prólogo a su
Contribución a la crítica de la economía política ", Marx ofrece una formulación
integral de las tesis fundamentales del materialismo aplicadas a la sociedad
humana y a su historia. He aquí sus palabras:
"En la producción social de su vida, los hombres contraen determinadas
relaciones necesarias e independientes de su voluntad, relaciones de producción
que corresponden a una determinada fase de desarrollo de sus fuerzas
productivas materiales.
92
"El conjunto de estas relaciones de producción forma la estructura
económica de la sociedad, la base real sobre la que se erige una superestructura
política y jurídica, y a la que corresponden determinadas formas de conciencia
social. El modo de producción de la vida material condiciona el proceso de la vida
social, política y espiritual en general. No es la conciencia del hombre la que
determina su ser, sino, por el contrario, su ser social el que determina su
conciencia. Al llegar a una determinada fase de desarrollo, las fuerzas productivas
materiales de la sociedad chocan con las relaciones de producción existentes o, lo
que no es más que la expresión jurídica de esto, con las relaciones de propiedad
dentro de las cuales se han desenvuelto hasta allí. De formas de desarrollo de las
fuerzas productivas, estas relaciones se convierten en trabas de ellas. Y se abre
así una época de revolución social. Al cambiar la base económica, se revoluciona,
más o menos rápidamente, toda la inmensa superestructura erigida sobre ella.
Cuando se estudian esas revoluciones, hay que distinguir siempre entre la
revolución material producida en las condiciones económicas de producción, y que
puede verificarse con la precisión propia de las ciencias naturales, y las
revoluciones jurídicas, políticas, religiosas, artísticas o filosóficas; en una palabra,
de las formas ideológicas en que los hombres adquieren conciencia de este
conflicto y luchan por resolverlo.
Y del mismo modo que no podemos juzgar a un individuo por lo que él
piensa de si, no podemos juzgar tampoco estas épocas de revolución por su
conciencia, sino que, por el contrario, hay que explicarse esta conciencia por las
contradicciones de la vida material, por el conflicto existente entre las fuerzas
productivas sociales y las relaciones de producción. A grandes rasgos, podemos
señalar como otras tantas épocas de progreso en la formación económica de la
sociedad, el modo de producción asiático, el antiguo, el feudal y el moderno
burgués.
93
El descubrimiento de la concepción materialista de la historia, o mejor
dicho, la consecuente aplicación y extensión del materialismo al dominio de los
fenómenos sociales, superó los dos defectos fundamentales de las viejas teorías
de la historia. En primer lugar, estas teorías solamente examinaban, en el mejor
de los casos, los móviles ideológicos de la actividad histórica de los hombres, sin
investigar el origen de esos móviles, sin captar las leyes objetivas que rigen el
desarrollo del sistema de las relaciones sociales, ni ver las raíces de éstas en el
grado de desarrollo de la producción material; en segundo lugar, las viejas teorías
no abarcaban precisamente las acciones de las masas de la población, mientras
que el materialismo histórico permitió estudiar, por vez primera y con la exactitud
de las ciencias naturales, las condiciones sociales de la vida de las masas y los
cambios operados en estas condiciones. La "sociología" y la historiografía
anteriores a Marx proporcionaban, en el mejor de los casos, un cúmulo de datos
crudos, recopilados fragmentariamente, y la descripción de aspectos aislados del
proceso histórico. El marxismo señaló el camino para un estudio global y
multilateral del proceso de aparición, desarrollo y decadencia de las formaciones
económico-sociales, examinando el conjunto de todas las tendencias
contradictorias y reduciéndolas a las condiciones, perfectamente determinables,
de vida y de producción de las distintas clases de la sociedad, eliminando el
subjetivismo y la arbitrariedad en la elección de las diversas ideas "dominantes" o
en la interpretación de ellas, y poniendo al descubierto las raíces de todas las
ideas sin excepción y de las diversas tendencias que se manifiestan en el estado
de las fuerzas productivas materiales. Los hombres hacen su propia historia.
El papel de la Ideología Marxista.
94
La ideología marxista, es la ideología que proporciona a los hombres las
herramientas necesarias para descubrir los fenómenos de la realidad, de manera
más completa que cualquier otra, para escudriñar en ellos y reconocer todos sus
aspectos y relaciones, no sólo su contenido y forma, sino sus relaciones internas y
externas, sus causas y su desarrollo; en suma eleva el conocimiento de la realidad
que nos determina, a un nivel cualitativamente superior. Este conocimiento más
completo de la realidad nos hace libres para decidir en base al conocimiento y no
esclavos de las circunstancias: "La libertad de la voluntad no significa, pues, más
que la capacidad de poder decidir con conocimiento de causa. Cuanto más libre
es el juicio de un ser humano respecto de un determinado punto problemático, con
tanta mayor necesidad estará determinado el contenido de ese juicio; mientras
que la inseguridad debida a la ignorancia y que elige con aparente arbitrio entre
posibilidades de decisión diversas y contradictorias prueba con ello su propia
libertad, su situación de dominada por el objeto al que precisamente tendría que
dominar. La libertad consiste, pues, en el dominio sobre nosotros mismos y sobre
la naturaleza exterior, basado en el conocimiento de las necesidades naturales;
por eso es necesariamente un producto de la evolución histórica. Los primeros
hombres que destacaron de la animalidad eran en todo lo esencial tan poco libres
como los animales mismos; pero cada progreso en la cultura fue un paso hacia la
libertad."
El conocimiento cierto de la realidad, otorga al ser humano la posibilidad
de transformarla creadoramente a su favor respetando su propia forma de
desarrollo, permite armonizar los intereses de la humanidad con los de la
naturaleza, por ejemplo, las leyes del desarrollo económico con el desarrollo
social, etc. La ideología del marxismo ha contribuido a la humanidad con un
método de análisis certero, el cual en manos del progreso, puede aportar al
desarrollo de la humanidad proporcionando las formas y métodos de acción
correctos para la transformación positiva de la realidad. De ahí que, los partidos
marxistas, deben difundir esta teoría, no sólo entre sus militantes, sino ser
95
capaces de hacerla llegar a la clase protagonista del progreso, el proletariado en
general y la clase obrera en particular
La ideología marxista es también la ideología de la nueva sociedad, de
la nueva conciencia social que habrá de generar una formación económica y
social de un nuevo tipo; es decir es la ideología de un nuevo tipo de ser humano,
cuyo fundamento será los valores morales, éticos, estéticos, etc., del progreso del
hombre como tal la ideología marxista contribuirá a la formación de la conciencia
social de un nuevo hombre. El papel de la teoría marxista en el desarrollo, es
servir de método de análisis científico de la realidad, a la vez que de guiar la
acción de las fuerzas del progreso y contribuir el desarrollo del nuevo contenido de
la sociedad.
3.3.- La Visión de R.S. Peters
Profesor de filosofía de la educación de la Universidad de Londres y cuenta
con una impresionante cantidad de ensayos y artículos periodísticos sobre temas
de filosofía y psicología.
En español se encuentran dos de sus trabajos que llevan por título la
filosofía de la educación que fue escrito y publicado en ingles en 1973 y traducido
al español en 1977 y desarrollo moral y educación publicado por vez primera en
ingles en 1981 y traducido al español en 1984.
Los filósofos a partir de Platón han meditado en torno a la educación y la
han tratado en el contexto de los intereses y preocupaciones intelectuales más
amplias en el ámbito del conocimiento, de la realidad y de la “vida buena”.
96
La filosofía de la educación en el sentido de que podría existir
independiente de las ramas tradicionales de la filosofía, más bien saca provecho
de estas y las combina de manera que la enriquecen.
No toda la filosofía de la educación consiste en tratar de aplicar los trabajos
previos en un contexto nuevo. Hay muchas cuestiones fundamentales acerca de
las cuales no existe ningún trabajo previo.
Educación es una cuestión que nunca ha sido abordada en forma precisa.
Tal vez no sea posible sujetarla a un análisis riguroso.
Me considero alérgico a las antologías de artículos que carecen de un tema
unificador, esta colección pretende auxiliar a los estudiosos de la filosofía y no a
los de pedagogía. Considere conveniente centrar mi atención en obras que
pertenecen específicamente al campo de la filosofía de la educación con las que
muy probablemente el estudiante de filosofía esta poco familiarizado.
Es de capital importancia en el concepto de educación el desarrollo del
conocimiento y el de la comprensión. En la escuela se hacen esfuerzos patentes
y explícitos para lograr tal desarrollo mediante una secuencia organizada de
experiencias de aprendizaje a las que se denomina currículo.
Richard Peters examina los argumentos en pro de la educación desde un
punto de vista más afín a la ética. Analiza varias consideraciones en pro de que la
posesión y la búsqueda del conocimiento hacen la vida menos tediosa y
finalmente se trata de justificar razonadamente la máxima de Sócrates, de que
“una vida sobre la cual no se ha reflexionado no merece vivirse”
97
La educación, porque se pensaba que ellos podían formular directrices
sapientísimas sobre la educación.
Concepto de educación:
Es una actividad muy difusa y ardua, a la que muchas personas sinceras se
consagran seriamente, pero sin tener una idea muy clara de lo que trata de hacer.
Hace mucho tiempo se le exigía demasiado a los filósofos de los maestros
debemos inquirir sobre los objetivos para qué examinen bien qué están haciendo,
ordenen correctamente sus prioridades, concentren su atención y desechen todo
lo inútil.
La educación como la reforma, lleva implícitas normas, las cuáles generan
los objetivos que los educadores se esfuerzan en cerrar o en lograr.
Objetivos de la educación:
Para él un objetivo es: un intento de lograr que se especifique una acción o una
actividad.
¿Qué es exactamente lo que te propones?
La formulación de los objetivos cumple una importante función social que consiste
en concentrar sus esfuerzos en determinada dirección.
Señala 3 puntos importantes sobre los objetivos de la educación:
1.- habla de objetivos en contextos dónde creemos importante que las personas
especifiquen con mayor exactitud lo que tratan de hacer.
2.- los objetivos sugieren una concentración y canalización del esfuerzo hacia un
logro que no sea demasiado obvio o que no esté muy a la mano.
98
3.- el término de objetivo sugiere la posibilidad de fracaso.
La filosofía tiene mucho que aportar a la sabiduría práctica, pero no puede
sustituirla.
99
IV.- PROBLEMÁTICA ACTUAL DE LA
FILOSOFIA EDUCATIVA
Objetivo.- Valorará críticamente la situación educativa Superior en México con
una coherencia filosófica.
4.1.- El Positivismo de Auguste Comte
El término positivismo fue utilizado por primera vez por el filosofo y
matemático francés del siglo XIX Auguste Comte, pero algunos de los conceptos
positivistas se remontan al filósofo británico David Hume, al filósofo francés Saint-
Simón, y al filósofo alemán Emmanuel Kant.
Por eso, vamos a ver que la positividad se halla constituida por ser un
carácter que afecta las cosas en tanto que, en una u otra forma, se manifiestan.
El conocimiento de los hechos es relativo porque hace referencia
intrínseca al hombre que se enfrenta con los hechos y a su modo de enfrentarse
con ellos.
En general el positivismo Consiste en no admitir como validos
científicamente otros conocimientos, sino los que proceden de la experiencia,
rechazando, por tanto, toda noción a priori y todo concepto universal y absoluto. El
hecho es la única realidad científica, y la experiencia y la inducción, los métodos
exclusivos de la ciencia. Por su lado negativo, el positivismo es negación de todo
ideal, de los principios absolutos y necesarios de la razón, es decir, de la
100
metafísica. El positivismo es una mutilación de la inteligencia humana, que hace
posible, no sólo, la metafísica, sino la ciencia misma. Esta, sin los principios
ideales, queda reducida a una nomenclatura de hechos, y la ciencia es una
colección de experiencias, sino la idea general, la ley que interpreta la experiencia
y la traspasa. Considerado como sistema religioso, el positivismo es el culto de la
humanidad como ser total y simple o singular.
4.1.1.- COMTE AUGUSTE (1798-1857).
Filósofo positivista francés, y uno de los pioneros de la sociología. Nació
en Montpellier el 19 de enero de 1798. Desde muy temprana edad rechazó el
catolicismo tradicional y también las doctrinas monárquicas. Logró ingresar en la
Escuela Politécnica de París desde 1814 hasta 1816, pero fue expulsado por
haber participado en una revuelta estudiantil. Durante algunos años fue secretario
particular del teórico socialista Claude Henri de Rouvroy, conde de Saint-Simón,
cuya influencia quedaría reflejada en algunas de sus obras. Los últimos años del
pensador francés quedaron marcados por la alienación mental, las crisis de locura
en las que se sumía durante prolongados intervalos de tiempo. Murió en París el 5
de septiembre de 1857.
Para dar una respuesta a la revolución científica, política e industrial de su
tiempo, Comte ofrecía una reorganización intelectual, moral y política del orden
social. Adoptar una actitud científica era la clave, así lo pensaba, de cualquier
reconstrucción.
Afirmaba que del estudio empírico del proceso histórico, en especial de la
progresión de diversas ciencias interrelacionadas, se desprendía una ley que
denominó de los tres estadios y que rige el desarrollo de la humanidad. Analizó
estos estadios en su voluminosa obra Curso de filosofía positiva (6 vols., 1830-
1842). Dada la naturaleza de la mente humana, decía, cada una de las ciencias o
101
ramas del saber debe pasar por "tres estadios teoréticos diferentes: el teológico o
estadio ficticio; el metafísico o estadio abstracto; y por último, el científico o
positivo".
Cada uno de estos estadios, afirmaba Comte, tiene su correlato en
determinadas actitudes políticas. El estadio teológico tiene su reflejo en esas
nociones que hablan del Derecho divino de los reyes. El estadio metafísico incluye
algunos conceptos tales como el contrato social, la igualdad de las personas o la
soberanía popular. El estadio positivo se caracteriza por el análisis científico o
"sociológico" (término acuñado por Comte) de la organización política. Bastante
crítico con los procedimientos democráticos, Comte anhelaba una sociedad
estable gobernada por una minoría de doctos que empleara métodos de la ciencia
para resolver los problemas humanos y para imponer las nuevas condiciones
sociales.
Aunque rechazaba la creencia en un ser transcendente, reconocía Comte
el valor de la religión, pues contribuía a la estabilidad social. En su obra Sistema
de Política Positiva (1851-1854; 1875-1877), propone una religión de la
humanidad que estimulara una benéfica conducta social. La mayor relevancia de
Comte, sin embargo, se deriva de su influencia en el desarrollo del positivismo.
La Ley de los tres Estados.
Según Comte, los conocimientos pasan por tres estados teóricos distintos,
tanto en el individuo como en la especie humana. La ley de los tres estados,
fundamento de la filosofía positiva, es, a la vez, una teoría del conocimiento y una
filosofía de la historia. Estos tres estados se llaman:
1.-Teológico.
2.-Metafísico.
102
3.-Positivo.
Estado Teológico:
Es ficticio, provisional y preparatorio. En él, la mente busca las causas y
los principios de las cosas, lo más profundo, lejano e inasequible. Hay en él tres
fases distintas:
Fetichismo: en que se personifican las cosas y se les atribuye un poder
mágico o divino.
Politeísmo: en que la animación es retirada de las cosas materiales para
trasladarla a una serie de divinidades, cada una de las cuales presenta un grupo de
poderes: las aguas, los ríos, los bosques, etc.
Monoteísmo: la fase superior, en que todos esos poderes divinos quedan
reunidos y concentrados en uno llamado Dios.
En este estado, predomina la imaginación, y corresponde a la infancia de
la humanidad. Es también, la disposición primaria de la mente, en la que se vuelve
a caer en todas las épocas, y solo una lenta evolución puede hacer que el espíritu
humano de aparte de esta concepción para pasar a otra. El papel histórico del
estado teológico es irremplazable.
Estado Metafísico:
O estado abstracto, es esencialmente crítico, y de transición, Es una etapa
intermedia entre el estado teológico y el positivo. En él se siguen buscando los
conocimientos absolutos. La metafísica intenta explicar la naturaleza de los seres, su
esencia, sus causas. Pero para ello no recurren a agentes sobrenaturales, sino a
entidades abstractas que le confieren su nombre de ontología. Las ideas de principio,
causa, sustancia, esencia, designan algo distinto de las cosas, si bien inherente a
ellas, más próximo a ellas; la mente que se lanzaba tras lo lejano, se va acercando
paso a paso a las cosas, y así como en el estado anterior que los poderes se
103
resumían en el concepto de Dios, aquí es la naturaleza, la gran entidad general que lo
sustituye; pero esta unidad es más débil, tanto mental como socialmente, y el carácter
del estado metafísico, es sobre todo crítico y negativo, de preparación del paso al
estado positivo; una especie de crisis de pubertad en el espíritu humano, antes de
llegar a la adultez.
Estado Positivo:
Es real, es definitivo. En él la imaginación queda subordinada a la
observación. La mente humana se atiene a las cosas. El positivismo busca sólo
hechos y sus leyes. No causas ni principios de las esencias o sustancias. Todo
esto es inaccesible. El positivismo se atiene a lo positivo, a lo que está puesto o
dado: es la filosofía del dato. La mente, en un largo retroceso, se detiene a al fin
ante las cosas. Renuncia a lo que es vano intentar conocer, y busca sólo las leyes
de los fenómenos.
La obra de Comte es considerada como la expresión clásica de la actitud
positivista, es decir, la actitud de quien afirma que tan sólo las ciencias empíricas
son la adecuada fuente de conocimiento.
4.1.2.- El carácter social del espíritu positivo.
El espíritu positivo tiene que fundar un orden social. La constitución de un
saber positivo es la condición de que haya una autoridad social suficiente, y esto
refuerza el carácter histórico del positivismo.
Comte, fundador de la Sociología, intenta llevar al estado positivo el
estudio de la Humanidad colectiva, es decir, convertirlo en ciencia positiva. En la
sociedad rige también, y principalmente, la ley de los tres estados, y hay otras
tantas etapas, de las cuales, en una domina lo militar.
104
Comte valora altamente el papel de organización que corresponde a la
iglesia católica; en la época metafísica, corresponde la influencia social a los
legistas; es la época de la irrupción de las clases medias, el paso de la sociedad
militar a la sociedad económica; es un período de transición, crítico y disolvente; el
protestantismo contribuye a esta disolución. Por último, al estado positivo
corresponde la época industrial, regida por los intereses económicos, y en ella se
ha de restablecer el orden social, y este ha de fundarse en un poder mental y
social.
4.1.3.- EL Positivismo y la Filosofía.
Es aparentemente, una reflexión sobre la ciencia. Después de agotadas
éstas, no queda un objeto independiente para la filosofía, sino ellas mismas; la
filosofía se convierte en teoría de la ciencia. Así, la ciencia positiva adquiere
unidad y conciencia de sí propia. Pero la filosofía, claro es, desaparece; y esto es
lo que ocurre con el movimiento positivo del siglo XIX, que tiene muy poco que ver
con la filosofía.
Pero en Comte mismo no es así. Aparte de lo que cree hacer hay lo que
efectivamente hace. Y hemos visto que:
1. Es una filosofía de la historia (la ley de los tres estados).
2. Una teoría metafísica de la realidad, entendida con caracteres
tan originales y tan nuevos como el ser social, histórica y relativa.
3. Una disciplina filosófica entera, la ciencia de la sociedad;
hasta el punto de que la sociología, en manos de los sociólogos
posteriores, no ha llegado nunca a la profundidad de visión que alcanzó en
su fundador.
105
Este es, en definitiva, el aspecto más verdadero e interesante del
positivismo, el que hace que sea realmente, a despecho de todas las apariencias y
aun de todos los positivistas, filosofía.
4.1.4.- El sentido del Positivismo.
Esta ciencia positiva es una disciplina de modestia; y esta es su virtud. El
saber positivo se atiene humildemente a las cosas; se queda ante ellas, sin
intervenir, sin saltar por encima para lanzarse a falaces juegos de ideas; ya no
pide causas, sino sólo leyes. Y gracias a esta austeridad logra esas leyes; y las
posee con precisión y con certeza.
Una y otra vez vuelve Comte, del modo más explícito, al problema de la
historia, y la reclama como dominio propio de la filosofía positiva. En esta relación
se da el carácter histórico de esta filosofía, que puede explicar el pasado entero.
El positivismo es el romanticismo de la ciencia. La tendencia propia del
romanticismo a identificar lo finito con lo infinito, a considerar lo finito como
revelación y realización progresiva de lo infinito, es transferida y realizada por el
positivismo en el seno de la ciencia. Con el positivismo, la ciencia se exalta, se
considera como única manifestación legítima de lo infinito y, por ello, se llena de
significación religiosa, pretendiendo suplantar a las religiones tradicionales.
El positivismo es una parte integrante del movimiento romántico del siglo
XIX. Que el positivismo sea incapaz de fundar los valores morales y religiosos y
especialmente, el principio mismo del cual dependen, la libertad humana, es un
punto de vista poémico que la reacción antipositivista, espiritualista e idealista de
106
la segunda mitad del siglo XIX ha hecho prevalecer en la historiografía filosófica.
Se puede también considerar justificado, en todo o en parte, este punto de vista.
Pero existe el hecho de que, en sus fundadores y en sus seguidores, el
positivismo se presenta como la exaltación romántica de la ciencia, como
infinitización, como pretensión de servir como única religión auténtica y, por tanto,
como el único fundamento posible de la vida humana individual y social.
El positivismo acompaña y provoca el nacimiento y la afirmación de la
organización técnico industrial de la sociedad, fundada y condicionada por la
ciencia. Expresa las esperanzas, los ideales y la exaltación optimista, que han
provocado y acompañado esta fase de la sociedad moderna. El hombre ha creído
en esta época haber hallado en la ciencia la garantía infalible de su propio destino.
Por esto ha rechazado, por inútil y supersticiosa, toda alegación sobrenatural y ha
puesto lo infinito en la ciencia, encerrando en las formas de la misma la moral, la
religión, la política, la totalidad de su existencia.
El positivismo en sentido estricto corresponde al espíritu de la ciencia
moderna tal como se la celebraba en el siglo XIX. Valora las ciencias cuyo estado
de desarrollo (la metodología) habría alcanzado el estadio positivo: las
matemáticas y la física; en medida notablemente inferior, la química y la biología,
y, por último, la sociología o "filosofía social", que Comte contribuye a elaborar.
Los rasgos distintivos del espíritu positivista son las características de las ciencias
de la naturaleza más desarrolladas a comienzos del siglo:
Empirismo: la experiencia, la observación de los fenómenos
intersubjetivamente controlables, e fuente de conocimientos objetivos. El
empirismo constituye una actitud científica relativamente pasiva, moderadamente
abierta al experimentalismo, es decir, a la invención, la provocación, construcción
de experiencias que suponen, en general, técnica, mediante una vigorosa
interacción con la naturaleza;
107
Descriptivismo: el saber positivo es fundamentalmente comprobante:
una ley sólo es la fórmula general de una regularidad natural, pues la observación
permite comprobar que hasta el presente, un acontecimiento o un hecho de tipo y
sigue siempre a un acontecimiento o un hecho de tipo x. La ciencia positivista no
pretende tanto explicar los fenómenos naturales (lo que implica el recurso a la
noción discutible de "causa") como describirlos;
Abanderamiento anti metafísico: la formulación nomológica de
regularidades fenomenales no va más allá de una hipótesis prudente a propósito
de lo observable. No da intervención a nociones metafísicas relativas a la
naturaleza profunda de las cosas o a sustancias que estén "detrás" de los
fenómenos o los hechos observables y ni siquiera a la noción de causalidad. El
positivismo es nominalista, rechaza la hipóstasis de abstracción o de entidades no
observables empíricamente;
Relativismo: no se puede extrapolar (o, en todo caso, sólo con gran
prudencia y a modo de hipótesis), ni mucho menos absolutizar. Nada permite
afirmar que en el futuro se verificarán las regularidades naturales que se ha
comprobado hasta ahora, ni que las leyes astronómicas que se han enunciado a
partir de la observación del sistema solar sean válidas más allá de éste;
Pragmatismo: «Saber para poder con el fin de proveer». El valor del
saber científico, positivo, consiste en su eficacia y en su utilidad social. Las
"creencias científicas", aun cuando, en términos absolutos, no sean más
verdaderas que las otras (en el sentido de conformidad a la naturaleza profunda
de las cosas), son, por el momento, las mejores en lo que concierne a la
supervivencia y a la organización de la vida de los hombres en sociedad;
Consensualismo: la organización social y el mejoramiento de las
condiciones de existencia exigen la paz. Ahora bien, las ciencias que han llegado
al estado positivo se caracterizan por un método no violento para regular los
conflictos de opinión que, en la mentalidad religiosa y metafísica, son
interminables o se dirimen de manera dogmática y hasta con violencia física. El
108
espíritu positivo permite regular los diferendos de manera pacífica y consensuada
por todos los que aceptan someterse a la regla de la observación empírica,
objetiva, es decir, repetible y compartida. Lo que ha de poner fin a las discusiones
es la comprobación de los hechos y no la ley del más fuerte ni del más hábil. Ese
consensualismo pacífico es un modelo para regular los conflictos entre los seres
humanos, sean los que fueren;
Estatismo: es mitigado y se refiere sobre todo a las ciencias que han
llegado al estado positivo, para las cuales Comte no espera ya ninguna revolución.
Estas ciencias se contentan con acrecentar o precisar un corpus de leyes del que
ya se ha adquirido lo esencial. Por tanto, todas las transformaciones profundas
que ocurran en matemáticas, en lógica o en física quedan al margen de la
perspectiva del positivismo. Su concepción de la ciencia positiva es cerrada,
doctrinaria: sólo requiere una exposición sistemática en un tratado enciclopédico.
Únicamente algunas ciencias –como la biología o la sociología– tienen todavía
mucho que evolucionar hacia el estado positivo, que es el estado superior o adulto
final.
Fundamental al positivismo comteano es la aserción metodológica de que
el conocimiento positivo se debe derivar estrictamente de la experiencia: se
observan los fenómenos, lo dado en las sensaciones; se notan sus relaciones de
semejanza y sucesión; se identifican grupos uniformes, estables y duplicables de
fenómenos (los hechos); se analizan las circunstancias en que se producen y,
considerados como objetos de leyes invariantes, se suman al resto del
conocimiento organizado que llamamos ciencia. Estos datos de la observación,
una vez incorporados a la ciencia, ya sea como hechos, ya como principios o
leyes empíricas, se reexaminan a la búsqueda de semejanzas y sucesiones de
mayor generalidad y se reducen al menor número de leyes posibles.
109
Nuestro arte de observar se compone, en general, de tres procedimientos
diferentes: 1) observación propiamente dicha, o sea, examen directo del fenómeno
tal como se presenta naturalmente; 2) experimentación, o sea, contemplación del
fenómeno más o menos modificado por circunstancias artificiales que intercalamos
expresamente buscando una exploración más perfecta, y 3) comparación, o sea,
la consideración gradual de una serie de casos análogos en que el fenómeno se
vaya simplificando cada vez más (Comte, Curso de filosofía positiva, I, 99).
El modelo es la ciencia inductiva; el propósito, comprender la naturaleza y
los límites del conocimiento, a fin de pronosticar y proceder eficazmente: "Ver para
prever; prever para actuar".
Advierte que, al estudiar la naturaleza, el investigador no comienza a
observar con la mente en blanco, como creía Locke, sino que tiene que hacer
varias suposiciones necesarias y fundamentales. Estas suposiciones especifican
en qué consiste la experiencia, qué son los hechos, cómo se pueden concebir, y
hasta cómo se deben percibir. Son necesarias, pues sin ellas no es posible
concebir siquiera la investigación misma, y fundamentales porque indican cómo
obtener conocimientos que llegarán a ser ciencia. Son estrictamente reglas
metodológicas que impropiamente interpretadas crean mitologías y metafísicas,
pero que bien aplicadas indican cómo observar, sin dictar los resultados ni afirmar
verdades.
4.1.5.- LA Filosofía como modo de saber positivo
El nombre de filosofía designa "el sistema general de las concepciones
humanas". Pero esta filosofía ha de ser positiva, y este adjetivo designa
¿Qué es un saber positivo? El saber positivo es un saber que responde a
un principio fundamental: nada tiene sentido real e inteligible si no es la
110
enunciación de un hecho o no se reduce en última instancia al enunciado de un
hecho. El vocablo "positivo" tiene, según Comte, al menos seis acepciones:
1. Se entiende por positivo lo real por oposición a lo quimérico
2. Algo es positivo cuando es útil
3. Algo es positivo cuando es cierto y no indeciso
4. Un conocimiento es positivo cuando realmente es un conocimiento
preciso, riguroso y estricto
5. Es positivo lo que se opone a lo negativo
6. Es positivo aquello que es constatable por oposición a aquello que es
inconstatable.
Es el último carácter el que resume a los otros cinco y, por tanto, la
positividad se resume en constatabilidad. ¿Qué es la constatabilidad?, ¿Qué es,
por tanto, la positividad?
1. La positividad se halla constituida por ser un carácter que afecta a
las cosas en tanto que, en una o en otra forma, se nos manifiestan. Manifestarse
se dice fenómeno
2. Estos fenómenos son algo con que el hombre se encuentra. En
cuanto encontrados en su condición de fenómenos, las cosas son algo que está
ahí.
3. Estas cosas, así puestas como fenómenos, han de poder
encontrarse de una manera sumamente precisa: solamente en cuanto
observables. No se trata de ir por detrás de los fenómenos a aquello que se
manifiesta en ellos, sino de tomar el fenómeno puesto ahí en y por sí mismo. Algo
es positivo solamente en la medida en que es observable.
111
4. Es necesario, además, que el observable sea verificable para
cualquiera.
La unidad de estos cuatro caracteres es lo que llamamos un hecho.
1. Si estos hechos han de servir para un saber positivo, es necesario
que sean observados y verificados con máxima precisión y rigor. Sólo entonces
adquieren su cualidad decisiva: la objetividad. Hecho es hecho objetivo. Y como el
medio para lograr esta objetividad es el método científico, resulta que los hechos
son los hechos científicos.
Las leyes son fenómenos de invariabilidad de presentación; no nos dicen
por qué, sino cómo ocurren los hechos. La ley es en sí misma un fenómeno. Cada
ley no es sino un caso particular de una ley general: el fenómeno de la
invariabilidad del orden, según el cual se presentan los hechos, la ley de
invariabilidad de las leyes de la naturaleza.
El objeto de la filosofía es el hecho en cuanto tal.
La filosofía concebida positivamente tiene ciertas ventajas; entre ellas
están: 1) es la única manera de poner orden en el conjunto tan varios de los
hechos y de los pensamientos en que aquellos son entendidos; 2) es el único
medio de zanjar, de una vez para todas, las querellas inútiles en que se ha perdido
la filosofía anterior; 3) la filosofía positiva es constitutivamente progresiva; es decir,
el progreso de cada ciencia no es sólo algo que efectivamente se da, sino que es
un momento constitutivo de la ciencia en cuanto tal, gracias justamente a su
positividad; toda ciencia es por razón propia una progresiva aproximación a los
hechos cada vez más precisamente estudiados.
4.1.6.- La Política Positivista
112
Comte había estado perpetuamente preocupado por un problema que
fascinó a muchos autores del siglo XIX: la Revolución había inaugurado una nueva
era en la política, la del individuo soberano, portador de derechos y fuente última
de la legitimidad política; pero, al hacerlo, había destruido los anteriores
fundamentos del vínculo social, dejando en su lugar una sociedad amenazada por
la inconsistencia, e incluso destinada al desorden institucional y social. En gran
medida, la interrogación de Comte se sumaba a la de Benjamín Constant, a la de
Tocqueville, o a la, un poco más tardía, de John Stuart Mill: la violencia
revolucionaria, la inestabilidad crónica de las instituciones, son sólo los síntomas
de un problema recurrente, el del vínculo que une al individuo con el cuerpo social.
El objetivo de Comte es concebir de otra forma las condiciones de la
vinculación del hombre moderno, individualista, al cuerpo social; dar una base a la
legitimidad de un poder que, a la vez, respete los nuevos principios y garantice la
coherencia de la sociedad. X
Su tentativa puede resumirse en la búsqueda de una forma de asentar en
una historia científica una política reorganizadora. El fundamento de este proyecto
está sin duda en la convicción de que las ciencias llamadas exactas proporcionan
el modelo de un positivismo universal, mientras que la política se halla todavía en
una fase pre científica que exige una urgente superación. El pensamiento político
se apoya entonces sobre la ciencia por partida doble: en una teorización de la
historia, Comte demuestra a la vez los irresueltos problemas del presente y las
soluciones, y queriendo "hacer que la política entre en la edad positiva", produce
una especie de epistemología que debe fundamentar una práctica. A partir de una
homologación entre las etapas del desarrollo del individuo y las de la humanidad,
Comte distingue tres edades que llama respectivamente teológica, metafísica y
positiva.
Primera fase del desarrollo de la inteligencia, primera edad de la
humanidad, la edad teológica es aquella en la que reina lo sobrenatural y, en la
113
política, "la doctrina de los reyes", que basa en el derecho divino las relaciones
sociales y el orden político. Esta edad termina con la Revolución Francesa, que ve
el triunfo de un pensamiento político abstracto (el de los derechos individuales, del
contrato …), característico de la edad metafísica: a los principios sobrenaturales
los sustituyen entidades abstractas, el derecho y los derechos, que se convierten
en el medio para una crítica incesante de las instituciones, en nombre de una idea
general del hombre. Pero este estado es solamente "bastardo", es decir
intermedio, y ha de ser superado por la última etapa de todo desarrollo, el estado
científico. Aquí ya no hay nada sobrenatural ni tampoco hay entidades metafísicas
(el hombre, el contrato, los derechos), sino realidades, una política fundada en la
observación científica, que descubre constantes, plantea leyes y describe la
organización única y necesaria de la sociedad. Pensar la política en el presente
equivale pues, para Comte, a realizar a partir de esta historia una doble tarea:
criticar las concepciones comunes, en cuanto expresiones que son de un
pensamiento metafísico surgido de la Revolución y del siglo XVIII, y colocar las
bases del futuro describiendo las contradicciones de una política positiva.
Una vez reconocido que sólo la filosofía positiva, como física social, puede
"presidir realmente hoy la reorganización final de las sociedades modernas",
Comte define una exigencia de método en tres proposiciones. Su doctrina política
y social tiene que estar en "perfecta coherencia con el conjunto de sus
aplicaciones", tiende hacia la unidad bajo la ley de las "necesidades sociales", y
realizará por fin la unión del pasado y del presente haciendo "salir a la luz la
uniformidad fundamental de la vida colectiva de la humanidad".
Unidad, coherencia, uniformidad, estos parecen ser finalmente los
conceptos fundamentales del pensamiento político de Comte. La revolución
metafísica, dice substancialmente Comte, descansa en dos "dogmas", la igualdad
y la libertad, dogmas positivos en cuanto han servido para destruir las bases de la
doctrina de los reyes y así realizar un progreso, pero que luego se han hecho
114
negativos, ya que al servir de punto de apoyo a un pensamiento sistemático
"crítico", impiden toda reorganización.
Habiendo sido sucesivamente el orden y el progreso los factores de la
evolución de la sociedad, no lo han hecho nunca cooperando sino combatiendo
entre sí; es por lo tanto imprescindible recuperar el principio de orden de la
doctrina "orgánica" y el de progreso de la doctrina "progresista", pero depurando
ambas nociones de sus escorias, sobrenaturales en un caso y metafísica en el
otro. Frente a tal proceso radical, el pensamiento "estacionario" del liberalismo
ignora la necesidad de un "poder espiritual" que garantice la unidad de la
sociedad, mientras que, por temor a las utopías, pretende congelar la evolución
social en un estado que no puede ser sino transitorio. Pero, además, el liberalismo
se basa por entero en una concepción de la libertad como dogma, concepción que
para Comte no se puede mantener.
No existe la libertad de conciencia en astronomía, en física, en química, e
incluso en fisiología, hasta el punto de que todo el mundo encuentra absurdo no
creer en los principios que han sido establecidos para estas ciencias por hombres
competentes. El que en política no suceda lo mismo, es únicamente debido a que
los viejos principios han caído y los nuevos no se han formado aún, y por eso en
este intervalo no puede hablarse de principios establecidos.
Comte destruye así la doctrina de la libertad basada en la autonomía del
individuo, y el antiindivualismo le lleva a ciertas posiciones muy lógicas desde su
punto de vista. En primer lugar un anticonstitucionalismo radical: las operaciones
constituyentes, dice, no han hecho sino "trozar" los viejos poderes al "organizar
entre ellos a unos antagonismos ficticios y complicados", sin cambiar lo esencial,
"la naturaleza general del antiguo régimen". Cambio que desde luego no podrá
conseguirse con el principio de la soberanía del pueblo, que no es más que una
expresión vacía, como lo es la palabra derecho. Esta, dice Comte, debiera ser
"apartada del verdadero lenguaje político, como la palabra causa del auténtico
115
lenguaje filosófico". El liberalismo político está basado en un individualismo que
hace de la libertad el valor primero y que no consigue encontrar una solución al
problema del vínculo social, de la cohesión de la sociedad en un período de crisis.
Comte ve en él una doctrina "crítica", sobre la que no se podrá construir nada
estable, y, para responder al problema de la cohesión social, desplaza el análisis
del individuo a lo social y trata de pensar de nuevo lo político desde el punto de
vista de la sociedad y por la sociedad, suprimiendo el de la autonomía del hombre.
La libertad ya no es la libertad-autonomía liberal, la libertad de criticar, de pensar,
de experimentar, pues sólo tiene sentido en el "desarrollo gradual de las
facultades humanas", en la "sumisión racional a la sola preponderancia,
convenientemente comprobada, de las leyes fundamentales de la naturaleza". La
política entonces no es sino sumisión a "invariables leyes naturales", debe estar
apoyada en una educación positivista, confiada a ese poder esencial para una
sociedad moderna que es el "poder espiritual", que por medio de un "sistema
universal de educación" debe dar relieve al "ascendiente social".
El comtismo político es extremadamente ambiguo: Comte planteó con
fuerza el problema con el que se enfrenta todo pensamiento político del siglo XIX;
es decir, cómo contrarrestar la disolución del vínculo social producida por el
individualismo cuando emergen nuevas capas sociales, pero su solución pasaba
por la negación de los principios modernos del humanismo. Toda la operación
republicana consistirá en eliminar esta ambigüedad, efectuando la síntesis
paradójica del ideal científico del comtismo y del pensamiento del derecho
marginado por éste. Littré conservará de Comte una sensibilidad en los límites de
la inestabilidad, e incluso de la anarquía, de las "edades intermedias", aquellas en
las que un viejo orden ha sido abolido y el nuevo trata de nacer, que se
fundamenta en una articulación clara de una concepción del vínculo social y una
teoría de lo político. A partir de este momento, tanto para él como para Comte,
debe reintroducirse un principio de orden. Para Littré el gobierno representativo no
es algo vano y la libertad individual no es un falso principio.
116
"Los dos intereses que predominan al presente en la sociedad europea
son la libertad y el socialismo; la libertad sin la cual el hombre moderno considera
incompleta su existencia y se siente, como decía el romano, deminutus capite; el
socialismo como aspiración de las clases populares hacia la plenitud de la vida
social. Poco importa cómo pueden satisfacerse estos dos intereses con tal de que
lo sean. Pero ambos implican la libertad de discusión, y la experiencia se encarga
de comprobar diariamente que la discusión no es efectiva sino en los gobiernos
representativos. Comte pretendía sustituirlos por la dictadura, pero nadie podrá
jamás unir la dictadura con la libertad de discusión". Littré rechaza toda voluntad
de sistema, toda idea de un voluntarismo dirigido a reconstruir a toda costa una
unidad, y prefiere apostar por unas instituciones libres.
Los republicanos se convencieron pronto de que la política debía ser
experimental. Esto significa dos cosas: el rechazo de los dos dogmas
antagonistas, el de la restauración y el de la revolución, que en realidad
pretendían detener el movimiento profundo de una sociedad dividida con
soluciones tan radicales como peligrosas para dichos conflictos, pero también la
preocupación por tener en cuenta lo que es, por ejemplo para Littré, esencial: el
tiempo. Aquí el pensamiento republicano es realmente un pensamiento de
conflicto: consciente de su existencia, rechaza toda solución apriorística, pero trata
de hallar, teniendo en cuenta la duración, soluciones armoniosas, porque respetan
la complejidad de lo real. "La república, escribe Littré, es el régimen que mejor
permite que el tiempo conserve su justa preponderancia". No se trata de valorizar
la tradición por sí misma en contra de cualquier voluntarismo político; los
republicanos no conciben el futuro de las sociedades como la realización de un
plan de la Providencia, y no esperan nada de lo que Chateaubriand llama "la lenta
conspiración de las edades", sin embargo quieren que el tiempo cumpla su papel,
apostando que la verdad terminará por ganar la partida sin que haga falta
imponerla por la fuerza, y que los conflictos perderán agudeza, sin que sea
necesario extinguirles construyendo una unidad por la fuerza.
117
Es precisamente por eso por lo que la República debe ser conservadora:
no en el sentido de los "conservadores" partidarios del inmovilismo e incluso del
regreso al orden antiguo, sino para no dañar el tejido social, para eliminar la
solución violenta de los conflictos. "Dos categorías de hombres trabajan para
evitar el peligro: por un lado, los republicanos, que tratan de llevar el partido
revolucionario al campo de la discusión y de la legalidad; por el otro, los
conservadores, que aceptan el régimen republicano y son garantía del orden."
Así se abre la posibilidad de una política que será "oportunista" al menos
por tres razones. Porque es el único medio de respetar el tiempo, que es lo único
que puede reconciliar el orden necesario del lado de lo social y el progreso,
horizonte de una filosofía y una política. Pero también porque los republicanos
piensan que lo provisional es lo único que puede erradicar los fantasmas de la
violencia e instalar lo definitivo; en esta dialéctica, Littré destaca que resulta
imposible imponer por la fuera lo deseable, pues eso es algo que sólo se puede
conseguir por la discusión, por la libertad practicada. Por último, la política
republicana es oportunista porque se basa en la "transacción". En política, para
reunir las fuerzas suficientes para instalar un régimen que no puede ser más que
parlamentario para dar una forma a la publicidad. En materia social, porque esta
forma de régimen no cierra el paso a ninguna posibilidad, sin que sea necesario
imponer nada, sino sólo convencer.
El concepto de Humanidad no es un concepto biológico, sino un concepto
histórico, fundado en la identificación romántica de tradición e historicidad. La
Humanidad es la tradición ininterrumpida y continua del género humano, tradición
condicionada por la continuidad biológica de su desarrollo, pero que incluye todos
los elementos de la cultural y de la civilización del género humano. La Humanidad
no es más que la tradición divinizada; una tradición que comprende todos los
elementos objetivos y subjetivos, naturales y espirituales, que constituyen el
hombre.
118
Así entendida, implica, en primer lugar, la idea del progreso. El progreso
es "el desarrollo del orden". El concepto del mismo fue establecido en la
Revolución Francesa. Pero tal concepto no hubiese podido completarse de no
haberse antes hecho justicia a la Edad Media, por la que la Edad Antigua y la
Edad Moderna están, al mismo tiempo, separadas y unidas. La tendencia final de
toda vida animal consiste en formar un Gran Ser, más o menos análogo a la
Humanidad. Esta disposición común no podía, con todo, prevalecer más que en
una sola especie animal; por esto, toda especie animal fuera del hombre es "un
Gran Ser más o menos abortado".
Finalmente, creemos que el Positivismo consiste en la base que señala la
realidad y la tendencia constructiva para el aspecto teórico de la doctrina, el
positivismo es el culto de la humanidad como ser total y simple o singular, las
cuales tiene un objeto o componente principal, que es la filosofía y el gobierno de
una sociedad.
El espíritu positivo tiene que fundar un orden social. La constitución de un
saber positivo es la condición de que haya autoridad social suficiente, y esto
refuerza el carácter histórico del positivismo. Este es, en definitiva, el aspecto más
verdadero e interesante del positivismo, el que hace que sea realmente, a
despecho de todas las apariencias y aun de todos los positivistas, filosofía.
Es real, es definitivo. En él la imaginación queda subordinada a la
observación. La mente humana se atiene a las cosas. El positivismo busca sólo
hechos y sus leyes. No causas ni principios de las esencias o sustancias. Todo
esto es inaccesible. El positivismo se atiene a lo positivo, a lo que está puesto o
dado: es la filosofía del dato. La mente, en un largo retroceso, se detiene al fin
ante las cosas. Renuncia a lo que es vano intentar conocer, y busca sólo leyes de
los fenómenos.
119
4.2.- Pensamiento de Paulo Freire.
Paulo freire desarrolla un método de alfabetización que no se conforma
con enseñar a leer y escribir, si no que busca producir un cambio efectivo real en
el hombre y en su auto compresión personal y en la del mundo que lo rodea. Se
plantea como un método participativo que se auto gesta en la medida en que el
hombre se compromete con él.
En el periodo en que escribe, contempla los traumas y dificultades por los
que atraviesa la gran mayoría de los hombres campesinos del norte de brasil,
producto de una educación alienante que lleva al pueblo a vivir su condición de
miseria y explotación con una gran pasividad y silencio.
La cultura del pueblo nordestito ha sido considerada como una visión sin
valor, que debe ser olvidada y cambiada por una cultura, la de las clases
dominantes, valorada como buena y que es transmitida por todos los medios
disponibles. El pueblo pobre es tratado como ignorante y es convencido de ello lo
que produce y explica la pasividad con que se soporta la situación de esclavitud
en que se vive.
Freire plantea que el hombre debe ser partícipe de la transformación del
mundo por medio de una nueva educación que le ayude a ser crítico de su
realidad y lo lleve a valorar su vivencia como algo lleno de valor real.1
La pedagogía del oprimido
Es una pedagogía constructiva, la cual tiene dos momentos:
1De la Torre, Yolanda. Filosofía.
120
“los oprimidos van desvelando el mundo de la
opresión y se van comprometiendo en el mundo de la praxis,
con su transformación y,
en que una vez transformada la realidad, esta
pedagogía deja de ser el oprimido y pasa a ser la pedagogía
de los hombres en proceso de permanente liberación.”
Freire considera que, para que la educación sea cierta tiene
que tener en cuenta la premisa de respetar la vocación ontológica del
hombre: la vocación de ser sujeto. Será inhumana si se convierte en
información, en bancaria.2
El método de Freire es fundamentalmente un método de cultura popular,
que a su vez, se traduce en una política popular: no hay cultura del pueblo sin
política del pueblo. Por este motivo, su labor apunta principalmente a concientizar
y a politizar. “La conciencia es conciencia del mundo: el mundo y la conciencia,
juntos, como conciencia del mundo, se constituyen dialécticamente en un mismo
movimiento, en una misma historia. En otras palabras: objetivar al mundo es
historiarlo, humanizarlo. Entonces, el mundo de la conciencia no es creación, sino
elaboración humana. Ese mundo no se constituye en la contemplación sino en el
trabajo.”
La metodología utilizada por Freire sigue la misma línea dialéctica: teoría y
método. Las principales variables que sirven de coordenadas al proceso educativo
como acto político y como acto de conocimiento son: la capacidad creativa y
transformadora del hombre, la capacidad de asombro, la naturaleza social del acto
de conocimiento y la dimensión histórica de este. La capacidad de inclusión (por
ser una pedagogía basada en la práctica, está sometida a cambio, evolución y
2 BLANCO, Rogelio. La pedagogía de Paulo Freire. Ed. ZERO. Madrid, 1982
121
reformulación). Freire entiende el quehacer humano como acción y reflexión,
teoría y praxis.
En el campo educativo, específicamente la relación maestro-alumno que
propone Freire es superar la contradicción educador- educando. Debe basarse en
una concepción abarcadora de los dos polos en una línea integradora, de manera
que ambos se hagan a la vez “educadores y educandos”
El docente, asume el papel del investigador crítico, proporciona siempre
unido a los educandos las condiciones para que se dé la superación del
conocimiento a nivel de la doxa por el conocimiento verdadero. 3
Método
La palabra generadora.
Es aquella escogida en función de ciertos criterios, al ser descompuesta
en sus silabas permite, por la combinación de estas, la formación de otras
palabras, ejemplo:
matabala (nombre de tubérculo alimenticio muy cultivado en
Santo Tomé)
Y la descomponemos en sus silabas obtenemos:
ma, me, mi, mo, mu
ta, te, ti, to, tu
ba, be,bi,bo,bu
la, le, li, lo, lu
A cada conjunto de silabas llamamos familia. Ahora bien a partir de estas
cuatro familias se puede crear una serie de palabras como: mata, meta, mimo,
tela, tomate, etc.
3 De la Torre, Yolanda. Filosofía.
122
Las palabras generadoras están siempre asociadas a ciertos temas, que
deben ser discutidos en los Círculos de Cultura. La palabra “matabala” permite
entablar discusiones en torno a una serie de temas como la producción, la
necesidad de diversificar el cultivo o el de las cualidades nutritivas de la planta, lo
que lleva al problema de la salud.
La codificación
Es la representación grafica de un aspecto de la realidad. Por ejemplo la
palabra generadora pueblo cuya codificación es la fotografía de una
concentración popular.
La descodificación
Consiste en el acto de analizar la codificación. Al descodificar la
codificación que representa algunos aspectos de la realidad, estamos leyendo la
realidad (análisis). La descodificación es un dialogo de los alfabetizandos entre sí.
Ahora podemos entender lo que es un círculo de cultura.4
4.3.-. LA DIDACTICA CRÍTICA
Es una propuesta que no trata de cambiar una modalidad
técnica por otra sino que plantea analizar críticamente la práctica docente,
la dinámica de la institución, los roles de sus miembros y el significado
ideológico que subyace en todo ello.
4.3.1.- Propuestas didácticas instrumentalistas necesarias replantear:
4ESCOBARG Miguel. Paulo Freire y la Educación Liberadora. México, SEP. El Caballito. 1985
123
Al grupo únicamente como objeto de enseñanza y no como
sujeto de enseñanza.
4.3.1.1.- Didáctica Crítica (Bruner)
AUSBEL Y BRUNER coinciden en que es necesario el uso de
objetivos en la tarea didáctica.
BRUNER considera que es necesario establecer objetivos
para la enseñanza.
OBJETIVOS DE APRENDIZAJE
Los objetivos explican la intencionalidad del acto educativo
Características:
Que se expresen con claridad los aprendizajes que se
prenden alcanzar.
Formularlos de tal manera que el objeto de estudio acerque a
la realidad que se pretende estudiar.
CONTENIDOS DE LA DIDACTICA CRÍTICA
Dada la importancia del contenido el profesor y el alumno
deben de participar en su determinación
Los contenidos son la columna vertebral de planes y
programas de estudio.
PLANEACION DE ACTIVIDADES
124
Las situaciones de aprendizaje significan un reconocimiento
de la peculiaridad de cada grupo.
EVALUACION
La tarea de la evaluación trasciende la asignación de
calificaciones.
La evaluación puede orientar, vigilar y mejorar la practica
pedagógica.
APRENDIZAJE
El papel del maestro no debe ser el de trasmisor de
conocimientos, sino el de intermediario entre el pensamiento del niño y la
realidad.
NORMAS
Mutua reciprocidad de derechos y deberes.
El pensamiento se dirigirá fundamentalmente a la
concienciación de los propios intereses y a la búsqueda de los medios
adecuados para alcanzarlos.
Se evitara toda conducta intelectual fuera del alcance de
nuestros alumnos.
Abordar el aprendizaje de las materias a través de los
esquemas mentales necesarios para la consecución de objetivos
propuestos por los niños.
REGLA DE ORO:
125
LIBERTAD CREATIVIDAD
ORGANIZACIÓN
4.3.1.2.- Didáctica Crítica (Freinet)
Lejos de descender de algunos proyectos imaginarios o de
teorías pedagógicas nuestras técnicas ascienden exclusivamente de la
base del propio trabajo y de la vida de los niños en nuestras clases
renovadas.
SEGÚN VARIOS AUTORES EXPLICA LA EVOLUCION DE LSO NIÑOS
EN TORNO A TRES NOCIONES:
I. la de mediaciones
II. la de lugares
III. la de identificación
METODO NO DIRECTIVO
Los estudiantes (los educandos) en contacto efectivo con la
vida desean aprender, quieren madurar, esperan controlar, desean crear.
(ROGERS)
126
LA PERSONALIDAD
PLANEACION
“….Retomar los elementos metodológicos para diseñar las
estrategias de trabajo”
Desde la didáctica crítica el maestro pasa a ser un orientador.
EL SIGNIFICADO DE LAS ESTRATEGIAS DOCENTES
Las estrategias son el producto de una actividad constructiva
y creativa por parte del maestro.
QUE OBTIENE EL MAESTRO DE LA EXPERIENCIA
Los maestros aun actualmente aprenden a enseñar
enseñando.
LA INVESTIGACION COMO RECURSO DIDACTICO
La investigación como un principio didáctico básico que nos
permite dar un sentido y organizar la actividad educativa.
LA INVESTIGACION
Metodología
Formas De entenderlas
Recurso Didáctico
Normas en el aula Secuencia de actividades
127
PROBLEMATIZACION
La construcción de conocimientos no será un proceso lineal,
sino un proceso de reorganización continua donde se construyan mallas de
conocimientos cada vez más amplias y complejas.
AMPLLITUD DEL CAMPO CONCEPTUAL
Modelo relativo a la organización y secuencias de los
contenidos
SIGNIFICACION PSICOLOGICA
“…..Que los objetivos y contenidos propuestos, posibiliten que
el alumno conecte la información nueva con sus viejas concepciones”.
4 X 4 = 16
128
Regla de Oro
Propuestas
Libertada Método directo
El maestro Objetos de
aprendizaje
Planeación
Normas
Contenidos
Estrategias
Maestro/ Intermediario
Objetivos
Experiencia
Concepto Planeación
De Evaluación Actividades
Problematización
La investigación
Significación (Rec. Didáctico) Psicológica
DIDACTICA CRÍTICA
129
4.4.- Problemas de la Educación en México
La calidad parte del reconocimiento de que hay problemas.
En el caso de la educación como sistema, para que haya calidad se debe
no solo reconocer que existen problemas sino darles solución, lo que implica la
colaboración comprometida y constante de todos los elementos que intervienen en
el sistema.
Los problemas se resuelven de raíz
Cada escuela es única. La escuela típica no existe. A la escuela la definen
quienes trabajan en ella, los alumnos a los que sirve, la comunidad en la que está
inserta, las interacciones entre todos ellos.
Algunos tipos de problemas que afectan la calidad de las escuelas y
por lo tanto de la educación, son:
1) PROBLEMA DE LA NO INSCRIPCION. La escuela, por su
forma de trabajar, atrae o aleja a los estudiantes. Hay que tener en cuenta el
grado en el que se logra la cobertura de la comunidad a la que se sirve e
intentar conocer las causas de la no inscripción.
2) PROBLEMA DE LA DESERCION. En los países de América
Latina, la deserción es un problema grave. Generalmente desertan alumnos
que reprueban y la edad no coincide con el proceso de enseñanza.
130
3) PROBLEMA DE LA REPROBACION. Se considera a la
reprobación como consecuencia del rezago escolar progresivo que un
alumno va experimentando a lo largo de todo el año escolar, razón por la que
hay que vigilar el proceso de aprendizaje.
4) PROBLEMA DE NO APRENDIZAJE. Se considera la
manifestación más tangible de la falta de calidad educativa. Presente en
nuestros sistemas educativos en base a estadísticas las cuales revelan que
los alumnos no alcanzan los niveles adecuados a su edad en el que influyen
las características del contexto y también el maestro quien puede o no estar
capacitado para desempeñar su trabajo.
5) PROBLEMA DE LA EQUIDAD. Se entiende por equidad,
lograr los objetivos de aprendizaje con todos los alumnos. La realidad
demuestra que la diferencia cualitativa entre los que si logran los objetivos y
los que no lo hacen, es muy grande, lo que se atribuye a un problema de
conducción del proceso de enseñanza el cual depende en gran parte a que
se privilegia a los alumnos capaces de atender y seguir el ritmo del maestro y
en ignorar o desatender a aquellos que muestran dificultades para hacerlo.
(Desde la perspectiva de la filosofía de la calidad, son inadmisibles) por lo
que es necesario buscar estrategias para lograr la equidad.
6) EL AMBIENTE EN EL QUE OCURRE EL APRENDIAJE. Es
aconsejable que el espacio en el cual se realiza el proceso de aprendizaje,
sea agradable y acorde con lo que se pretende lograr; libre de ruido excesivo,
con iluminación suficiente, ventilaron, que haya un clima de confianza, orden
en general.
7) FALTA DE DISCIPLINA. La disciplina es la base del
aprovechamiento. En las escuelas está inmersa y se propicia cuando la
131
escuela como organización no tiene disciplina carece de ella: cuando no hay
reglamentos o cuando habiéndolos no se cumplen; cuando las sanciones se
aplican en forma subjetiva o arbitraria y cuando no está ocurriendo un
proceso de aprendizaje.
Trabajamos con materia dispuesta, los alumnos generalmente son
felices cuando aprenden y su curiosidad y capacidad de asombro es enorme.
Es de vital importancia atender este problema puesto que es un
factor determinante en el logro de la tarea educativa.
8) EL TIEMPO REAL DE ENSEÑANZA. El tiempo dedicado a la
enseñanza es el espacio destinado al aprendizaje, de ahí la importancia de
llevar a cabo una planeación y destinar tiempos de tal forma que se alcance a
cubrir los objetivos.
9) LOS RECURSOS PARA LA ENSEÑANZA. Es recomendable
utilizar diversos recursos para poder diseñar estrategias diferentes de
aprendizaje que agilicen el proceso, lo vuelvan atractivo y despierten la
participación y la creatividad de los alumnos. Los recursos pueden generarse
en la misma comunidad en la que se trabaja, aun la participación de
maestros, alumnos y padres de familia.
10) LAS RELACIONES CON LA COMUIDAD. Es común que las
relaciones con los padres de familia se limiten a lo más necesario. Es urgente
la interacción con los padres de familia y alumnos para conocer los
problemas de la comunidad para la que se labora y los problemas específicos
de las familias de los alumnos. Solicitar el apoyo de los padres de familia en
el aprendizaje de sus hijos y mantenerlos informados de su aprovechamiento
132
y comportamiento continuamente con la finalidad de que los alumnos
aprendan mucho mas y los beneficios serán más satisfactorios.
11) LAS RELACIONES ENTRE EL PERSONAL DE LA
ESCUELA. Es determinante el trabajo en equipo y el apoyo mutuo ya que la
calidad es notoriamente superior, se gana potencialidad. El director con su
equipo de trabajo debe estar relacionado de tal manera que exista armonía
entre ellos y la comunidad escolar, esto permite visualizar los problemas
desde ángulos diversos y plantear e intentar solucionarlos colectivamente. Si
no hay equipo, difícilmente se llega a la calidad.
Cada escuela es diferente y la tarea es identificar y dar solución a la
problemática para lograr atacarla de raíz.
Cada escuela debe saber cómo se encuentran los niveles de aprendizaje
entre sus alumnos y cómo evolucionan. Conocer a sus maestros, como planean e
imparten sus clases, el grado en que hacen participar a sus alumnos, de los
intentos por brindar atención especial a los alumnos que lo necesitan.
Cuando se identifica la presencia de un problema, hay que conseguir
información sobre el mismo para cuantificarlo y dimensionarlo. Cuando el equipo
de la escuela logra definir el problema y decide emprender acciones para atacarlo
de raíz, es necesario que mantenga constancia en la información sobre los
problemas de manera que sea capaz de evitar reincidir en las causas que han sido
identificadas y combatidas previamente.
Directores y maestros deben llegar a acuerdos sobre como monitorear su
desempeño y además desarrollar sus propios indicadores de la calidad de la
educación en su escuela.
133
El principio de un movimiento hacia la calidad es el reconocimiento de que
hay un problema.
La calidad implica resolver los problemas de raíz. Por esto hay que
encontrar sus causas y combatirlas.
Combatir los problemas detectados, es tarea de todos. Implica vivir
valores nuevos de trabajo en equipo, de aceptación de liderazgo, de constancia y
congruencia. Implica, en pocas palabras, una nueva cultura en la organización
escolar.
134
V.- CONCLUSION
V.- ANEXOS
OBRAS DE LOS PRINCIPALES FILOSOFOS
1. SOCRATES
LA REMINISCENSIA
2. PLATON
LA REPUBLICA
EL MITO DE LA CAVERNA
3. ARISTOTELES
METAFISICA
LA CIENCIA DEL SER
4. ERNESTO RENAN
VIDA DE JESUS
CARÁCTER ESENCIAL DE LA VIDA DE JESUS
5. GIOVANNI PAPINI
HISTORIA DE CRISTO
ORACION A CRISTO
6. SAN AGUSTIN
LAS CONFESIONES
LA MEMORIA Y SU CONTENIDO
135
7. SANTO TOMAS DE AQUINO
SUMA TEOLOGICA
EL ALMA SE UNE AL CUERPO COMO FORMA
8. DESIDERIO ERASMO DE ROTTERDAM
ELOGIO DE LA LOCURA
LOS MAESTROS DE GRAMATICA
LOS POETAS, LOS RETORICOS Y LOS AUTORES
DE LIBROS
9. SANTO TOMAS MORO
LA UTOPIA
EL SABIO Y LA POLITICA
LA EXPLOTACION DEL CAMPO
LA POLITICA DE LOS PRINCIPES
CONTRA LA PROPIEDAD
DESCRIPCION DE UTOPIA
SISTEMA DE EXPLOTACION DE LA TIERRA
URBANISMO
ECONOMIA. LA DISTRIBUCION
LOS METALES PRECIOSOS
LA RELIGION
CONCLUSION. CRITICA SOCIAL
10. JUAN LUIS VIVES
TRATADO DE LA ENSEÑANZA
11. FRANCOIS RABELAIS
GARGANTUA
136
12. JUAN AMOS COMENIO
DIDACTICA MAGNA
13. JUAN JACOBO ROUSSEAU
EMILIO
DE LA EDUCACION
SOFIA O LA MUJER
14. JUAN ENRIQUE PESTALOZZI
COMO GERTRUDIZ ENSEÑA A SUS HIJOS
TEORIA DE LA INTUICION
15. AUGUSTO COMPTE
CURSO DE FILOSOFIA POSITIVA
LA LEY DE LOS TRES ESTADOS
LA CLASIFICACION DE LAS CIENCIAS
16. CARLOS MARX
REFLEXIONES DE UN JOVEN DE
BACHILLERATO
ENTORNO A LA CRITICA DE LA FILOSOFIA DE
DERECHO GEGEL
17. LEON TOLSTOY
18. GEORGE KERSCHENSTEINER
LA PRACTICA DE LA EDUCACION
TEORIA DE LA EDUCACION
NOCION Y BASE DE LA EDUCACION
19. JOHN DEWEY
LA ESCUELA TRADICIONAL
137
LA ESCUELA DEWEY
ORIGEN DE LA TEORIA
ORIENTACION FILOSOFICO GENERAL
20. EMILE CHARTIER (ALAIN)
EL HOMBRE
META DE LA EDUCACION
EL NIÑO Y LO DIFICIL. EL METODO SEVERO
21. MARIA MONTESSORI
22. OVIDE DECROLY
BIOGRAFIA
LA OBRA PEDAGOGICA
23. EDOUARD CLAPAREDE
LA PSICOLOGIA DE LA INTELIGENCIA
24. ALEXANDER SUTHERLAND N.
LA CUESTION ESCOLAR
25. ANTON S. MAKARENKO
UNA PEDAGOGIA BOLCHEVIQUE
UNA POSICION PEDAGOGICA Y UN ESTILO
PECULIARES
EDUCAR PARA EL CONSUMO
26. CELESTINE FREINET
UNA EDUCACION PARA EL PUEBLO
27. JEAN PIAGET
LA EDUCACION PARA LA ACCION
LOS LOGROS DE LA EDUCACION
138
INTERESES, INPOSICIONES, EXAMENES
TRANSMITIR EL SABER O FACILITAR SU
DESCUBRIMIENTO
LA COOPERACION Y EL APRENDIZAJE DE LA
RECIPROCIDAD
28. LEV SENIENOVICH VYGOTSKY
29. PAULO FREIRE
CONTEXTO HISTORICO Y PRETENSIONES
REFLEXION EN TORNO AL HOMBRE
EL HOMBRE OPRIMIDO
30. IVAN ILLICH
SU PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
EDUCACIONAL
LA EDUCACION EN EL SISTEMA SOCIAL
31. GABINO BARREDA
FILOSOFIA MEXICANA
32. FRANCISCO BULNES
LIBRO. LAS GRANDES MENTIRAS DE NUESTRA
HISTORIA
33. JUSTO SIERRA
SUMA FILOSOFIA MEXICANA
ANTONIO IBARGUENGOITIA CHICO
34. MANUEL GONZALEZ PRADA
NUESTROS INDIOS
35. JOSE MARTI
139
NUESTRA AMERICA
36. JOSE ENRIQUE RODO
ARIEL
37. JOSE VASCONCELOS
RAZA COSMICA
38. ANTONIO CASO
MEXICO APUNTAMIENTOS DE CULTURA
PATRIA, 1943
LOS PROBLEMAS NACIONALES
39. PEDRO ENRIQUEZ UREÑA
LA UTOPIA DE AMERICA
40. ALFONSO REYES
NOTAS SOBRE INTELIGENCIA AMERICANA
41. SAMUEL RAMOS
EL PERFIL DEL HOMBRE Y LA CULTURA EN
MEXICO
PSICOANALISIS DEL MEXICANO
42. JOSE CARLOS MARIATEGUI
SIETE ENSAYOS DE INTERPRETACION DE LA
REALIDAD PERUANA
140
VI.- BIBLIOGRAFIA
Aristóteles: Ética Nicomaquea Política, México, Ed. Porrúa 1977
Vowen, J. Johnson, Teorías de la Educación, México, Ed. Limusa,
1980
Broudy, Harrys, Filosofía de la Educación, México, Ed. Limusa,
1980
Comte A, Discurso sobre el Espíritu Positivo, España, Ed. Alianza,
1988.
Comte A, La Filosofía Positiva, México.
Correas Oscar, Aristóteles, Propiedad y lucha de clases: en
Dialéctica, Puebla.
De Sierra, N. Ma Teresa, Cambio Estructural y Modernización
Educativa, México, Ed. UPN-UNAM-COMECSO 1991.
ALTAVISTA
WIKIPEDIA
141